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La persona como ser moral1 Presentación de la unidad

En esta unidad se dota a los alumnos y a las alumnas de los ejes conceptuales generales para profundizar en el conocimiento del carácter moral de la persona. Asimismo, se centra en la reflexión sobre la persona y en valorar su dignidad moral como una caracte-rística inalienable e indiscutible.

El concepto de persona se aborda desde dos perspectivas: la ca-racterización de las implicaciones morales de la idea de persona y un recorrido histórico por los hitos fundamentales de su origen y transformación hasta la actualidad.

En cuanto a la idea de persona, se destaca que es un sujeto racional y libre dotado de derechos, pero que tiene que cumplir también unos deberes, y que tiene dignidad.

Para situar históricamente la explicación de la evolución del concep-to, se señala su origen en Grecia y en Roma, y se hace un recorrido histórico por su adaptación al cristianismo y su reinterpretación en la Ilustración.

A través de las diferentes actividades propuestas en la unidad, se pretende que los alumnos y las alumnas adquieran los conocimien-tos y los valores que definen a la persona, para apreciar sus carac-terísticas morales, adoptando, al mismo tiempo, una actitud de respeto a la dignidad de la persona.

Fomento de la lectura

Para ilustrar el valor de la persona, su dignidad, y la necesidad de respetarla, pueden leerse diferentes pasajes de textos literarios clásicos. Por ejemplo: Antígona, de Sófocles, o El mercader de Venecia, de William Shakespeare.

También resulta muy recomendable leer El vendedor de cuentos, de Jostein Gaarder. Su protagonista, Petter el Araña, crea un ne-gocio de venta de ideas a aquellos que no las tienen, quizá para de ese modo controlar a las personas.

Trabajo científico

Esta unidad conecta con la historia y con el estudio de la cultura clásica, como momento de origen del concepto de persona. Se podría explicar al alumnado la utilidad de las máscaras en el teatro griego y romano. En cuanto al cristianismo, se puede incidir en su carácter universal, que afecta al concepto de persona. Sobre la Ilustración, se puede destacar el papel que otorga a la razón.

Anticipación de tareas

Puede resultar útil para el seguimiento de esta unidad, la consulta previa del libro de texto de Ciencias Sociales, para detectar con qué información previa cuenta el alumnado y cuál es su nivel.

Esquema de la unidad

La persona

Concepto Historia

Grecia y Roma CristianismoEs: un sujeto racional y libre dotado de

derechos y deberes Grecia: máscara de teatro, personaje

Roma: libertad, dignidad

y derechos ciudadanos

Por eso se distingue del resto:

cosas y animalesSer moral: dignidad

y fin en sí mismo

Dignidad universal: don de Dios

IlustraciónTiene: una base moral que la convierte en un ser con dignidad Individuo racional,

libre y responsable

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Un «heterónimo» es el nombre utilizado por un autor, al que le atribuye parte de su obra como si se tratara de otra persona. En cierto modo, es una personalidad construida o fingida.

Sus más importantes personalidades alternativas fueron: Álvaro de Campos, Alberto Caeiro, Ricardo Reis, Bernardo Soares y Antonio Mora, aunque inventó muchas más, algunas de ellas femeninas. Y no solo creó personajes portugueses, sino también ingleses y franceses. Eran ensayis-tas y poetas, y cada uno escribía sus propias obras, con preocupaciones y estilos diferentes. Incluso escribió críticas sobre obras de sus heterónimos.

La lectura del texto propuesto permite una reflexión acerca de la dificultad de definir el concepto de persona y señalar la «diferencia específica» de los seres humanos respecto a los animales, pues hasta en un mismo individuo humano parecen reunirse varias personas a la vez.

Soluciones de las actividades1 Solo podemos ser una persona; sin embargo, esta se forma desempe-

ñando distintos papeles sociales y bajo múltiples rasgos del carácter. Por otra parte, la persona reúne una serie de derechos y de deberes, tanto individuales como sociales.

2 El hecho de ser personas nos dota de dignidad, de una importancia ma-yor a la de las simples cosas o a la de los animales; por eso, las personas no pueden ser tratadas como ellos. Solo nosotros disponemos de las ca-pacidades de pensar y de sentir, tenemos conciencia de nosotros mismos y del mundo, y somos capaces de crear ideas.

Actividades de ampliaciónLeed el siguiente texto de Séneca y expresad la idea central que se expone:

Al iniciar la unidadPuede resultar conveniente realizar una evaluación inicial que nos permita detectar conocimientos previos sobre el concepto de persona. Esto puede hacerse por escrito o mediante preguntas en alto y en común.

Un posible punto de partida consiste en pedir al alumnado que explique qué entiende por persona y si, en su opinión, este concepto tiene que ver con la dignidad, la libertad y la racionalidad humanas.

Esta actividad nos servirá, a la vez, para introducir a los alumnos y alumnas en el significado y en la importancia de la materia, al mismo tiempo que orientará la reflexión hacia los contenidos de la presente unidad.

Cuestiones para la detección de ideas previasTodas aquellas preguntas que sirvan para centrar la reflexión sobre los asuntos morales pueden contribuir a orientar las explicaciones que se van a dar posteriormente.

En cualquier caso, sugerimos que se aborde este tema con preguntas como las siguientes:

•¿Qué nos diferencia a los seres humanos de los animales y nos convierte en personas?

•¿En qué consiste la dignidad humana?

•¿Se podría hablar de personas si los seres humanos viviéramos aislados?

•¿Cómo nos convertimos en personas?

Trabajo con el textoLa lectura del texto puede hacerse encargando a algunos alumnos o alum-nas que vayan realizándola en voz alta, o bien cada cual para sí mismo.

En este punto, podemos aprovechar para dar alguna explicación acerca del autor del texto de apertura de la unidad:

Fernando Pessoa fue un poeta portugués que pretendía ser varias personas a la vez. Para ello empleaba «heterónimos».

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1La persona como ser moral

1 La definición de la persona como concepto que in-cluye a todos los seres humanos.

2 Las características de la persona.

3 La formación moral de la persona.

4 El valor moral de la persona.

En esta unidad vas a estudiar

Qué significa ser persona

En Grecia, «persona» era la máscara de los ac-tores y su personaje. En Roma, su uso se ex-tendió al derecho y cobró significado jurídico y político: era aquel individuo libre, con una serie de derechos ciudadanos, que es superior y más digno al resto de cosas y a los esclavos.

El cristianismo extendió la dignidad moral de la persona a toda la humanidad, considerán-dola un don procedente de Dios.

Para Kant, filósofo de la Ilustración, la persona es el individuo racional, libre y por eso respon-sable, que, como ser moral, posee dignidad y es fin en sí mismo.

La persona se construye en sociedad porque el ser humano es social por naturaleza y nece-sita relacionarse con los demás para formarse.

En la construcción moral de la persona inter-vienen normas, valores, creencias y virtudes que se expresan en derechos y deberes.

Ser persona es también demostrarlo o hacerse merecedor de ello. Por eso, las personas han de ser ejemplares en sus comportamientos.

ReflexionamosMe dices: tú eres algo más…Me dices: tú eres algo másque una piedra o una planta.Me dices: sientes, piensas y sabesque piensas y sientes.Entonces, ¿las piedras escriben versos?Entonces, ¿las plantas tienen ideas sobre el mundo?

Sí: hay diferencia.Pero no es la diferencia que encuentras;porque el tener conciencia no me obliga a tener teorías sobre las cosas:solo me obliga a ser consciente.¿Si soy más que una piedra o una planta? No lo sé.Soy diferente. No sé lo que es más o menos. […]

Sé que la piedra es real y que la planta existe.Sé esto porque ellas existen.Lo sé porque mis sentidos me lo muestran.Sé que soy real también.Lo sé porque mis sentidos me lo muestran,aunque con menos claridad con que me muestran la piedra y la planta.No sé nada más.

Sí, escribo versos y la piedra no escribe versos.Sí, hago ideas sobre el mundo y la planta no.Pero es que las piedras no son poetas, son piedras;y las plantas son solo plantas, y no pensadores.

Tanto puedo decir que soy por esto superior a ellascomo que soy inferior.Pero no digo eso, digo de una piedra: «es una piedra»;digo de la planta: «es una planta»;digo de mí: «soy yo».Y no digo nada más. ¿Qué más hay que decir?

Fernando Pessoa, Un corazón de nadie. Antología poética (1913-1935), Círculo de Lectores.

Dialogamos1 En la sociedad, cada individuo desempeña a la vez varios papeles.

¿Eso lo convierte en más de una persona? Argumenta la respuesta.

2 Debatid sobre si ser personas nos hace mejores, peores o simple-mente diferentes a otros animales, a las plantas o a las cosas.

«No olvides que ese ser que llamas tu esclavo ha nacido de la misma semilla que tú, goza del mismo celo, respira del mismo aire y vive y muere como tú. Puedes verlo libre como él puede verte esclavo. Aunque sea esclavo, es libre de espíritu».

Séneca, Cartas a Lucilio.

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1 ¿Qué hace al ser humano superior al resto de animales y a las cosas? ¿Qué lo convierte en una «cosa portentosa»?

2 Algunas de las capacidades humanas que alaba Sófocles son técnicas; otras tienen que ver con los valores. ¿Cuáles son cada una de ellas?

3 ¿Qué lado negativo tienen esas extraordinarias capacidades humanas?

SugerenciasEn este epígrafe se trata de obtener la definición de persona haciendo, en primer lugar, un recorrido histórico desde la génesis del concepto, ligado al teatro en la Grecia clásica, hasta su interpretación jurídica por los romanos, como sujeto de derechos, mucho más próxima a su significado actual.

Esta primera aproximación al concepto de persona puede servir de intro-ducción para tratar la segunda parte de este epígrafe, en la que se aborda la dificultad de establecer cuál es el «plus» que otorga a los seres huma-nos la categoría de personas, por encima de los animales: las personas tienen dignidad.

Soluciones de las actividades1 «Persona»: individuo de naturaleza racional. Boecio (480-524 d.C.) fue

un filósofo y cónsul romano. Fue injustamente encarcelado y decapita-do, acusado de conspirar a favor del imperio bizantino.

2 Ese «plus» que hace diferentes a las personas sobre el resto de animales, las plantas y las cosas es que tienen dignidad. Como decía Julián Marías, persona es «poder ser más».

3 La palabra «persona» proviene del griego prósopon, palabra que hacía referencia al rostro o máscara que el actor de teatro utilizaba para inter-pretar su papel.

La civilización romana extendió el uso y el significado de este término más allá de la esfera artística, relacionándolo con el derecho: «persona» era el sujeto de derechos; es decir, un ser que no era simplemente una cosa, un animal o un esclavo.

Actividades de ampliaciónLee el siguiente texto de la obra teatral Antígona, de Sófocles, para res-ponder después a unas breves preguntas sobre él.

Las respuestas que se obtengan, servirán a los alumnos y alumnas para clarificar las acciones y cualidades que, según el texto, hacen del ser hu-mano una «cosa portentosa».

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El «plus» de la persona

1.1 Definiendo «persona»

Boecio (480-524), considerado el último filósofo romano y el primero de la Edad Media, mientras estaba prisionero en la cárcel de Pavía, escribió un libro titulado De la consolación de la filosofía, en el que entablaba un diálogo con la filosofía, a la que puso voz y figura de mujer, preguntándose por el sentido y el destino de la vida, la natu-raleza del bien y del mal, y otros temas morales. Boecio, acusado de conspirar contra el emperador, fue ejecutado.

Como pensador, una de sus aportaciones fundamentales es el con-cepto de persona. Para él, «persona es el individuo de naturaleza ra-cional». Nos recuerda, además, que el término «persona» procede del mundo del teatro griego.

Los romanos habían tomado el término «persona» del griego próso-pon, que se refería a la máscara que el actor de teatro utilizaba para interpretar su papel.

Pero la civilización romana extendió el uso y el significado del tér-mino «persona» más allá de la esfera artística, relacionándolo con el derecho: «persona» era el sujeto de derechos, es decir, algo que no era simplemente una cosa, un animal o un esclavo. Se trataba del ciudadano romano, quien disponía de atributos que lo convertían en persona: libertad y dignidad.

1 1.2 Cuestión de niveles

Los seres humanos somos animales, pero solo existen personas hu-manas (aunque desde un punto de vista jurídico se admite el concep-to de «persona jurídica» y, en el ámbito de la religión, el cristianismo habla de las personas que forman la Trinidad). En general, resulta redundante decir «persona humana».

Ahora bien, ¿qué convierte a un ser humano en persona? En principio, nada que no provenga de su misma naturaleza humana. Por el mero hecho de nacer humano, un individuo es considerado persona. Pero a lo largo de la historia no siempre ha sido así ni lo es todavía en todas las sociedades.

Pero, si la persona es un ser humano y el ser humano es un animal, ¿por qué no existe el «animal persona»? Sencillamente, porque habla-mos de niveles. No es lo mismo jugar en segunda división del cam-peonato de fútbol que en primera, ni hacerlo en un equipo de la mitad de la tabla clasificatoria que en uno de los aspirantes al título cada temporada.

No obstante, no se trata de niveles excluyentes. Imagínate un edifi-cio de tres plantas: para acceder a la tercera, hay que pasar necesa-riamente por las dos anteriores y no por ello estas desaparecen del edificio. Del mismo modo, un ser humano es siempre un animal, pero al mismo tiempo está en un nivel superior al resto de los animales: es persona.

En la Antigüedad, los romanos no reconocían como personas a los esclavos y, sin embargo, estos no dejaban de ser seres humanos, aun-que en muchos casos fueran tratados como animales. La persona te-nía algo más que el esclavo, poseía un «plus»: las personas eran seres con dignidad.

De este modo, el hecho de ser considerado persona otorga al ser hu-mano un «plus», un añadido que mejora su estatus. El filósofo español Julián Marías lo expresaba de la siguiente forma: «Persona es poder ser más».

En la actualidad, en la Declaración Universal de los Derechos Huma-nos (DUDH) aprobada en el año 1948 en la ONU, se reconoce como personas a todos los seres humanos. Pero esta conquista tiene detrás una larga historia.

Escena de teatro (bajorrelieve romano).«Persona» era el nombre que recibía en Roma la máscara de teatro.

1   ¿Cómo definía Boecio a la persona? Infórmate sobre su vida y averigua si su condena fue justa.

2 ¿En qué consiste ese «plus» que hace diferentes, y acaso su-periores, a las personas sobre el resto de animales y sobre las plantas y las cosas?

3   ¿De dónde procede la palabra «persona» y qué signifi-caba originariamente?

Comprende, piensa, investiga…

Escultura griega de mujer (Museo de Pérga-mo, Berlín).Los seres humanos somos más que anima-les; somos personas.

«Coro—Muchas cosas hay portentosas, pero ninguna tan portentosa como el hombre.

Él, que ayudado por el noto tempestuoso llega hasta el otro extremo de la espumosa mar, atravesándola a pesar de las olas que rugen, descomu-nales; él que fatiga la sublimísima divina tierra, inconsumible, inagotable, con el ir y venir del arado, año tras año, recorriéndola con sus mulas.

Con sus trampas captura a la tribu de los pájaros incapaces de pensar y al pueblo de los animales salvajes y a los peces que viven en el mar, en las mallas de sus trenzadas redes, el ingenioso hombre que con su ingenio domina al salvaje animal montaraz; capaz de uncir al caballo de poblada crin con un yugo que su cuello por ambos lados sujete y también al toro infatigable de la sierra; y la palabra por sí mismo ha aprendido y el pensamiento, rápido como el viento, y el carácter que regula la vida en sociedad, y a huir de la intemperie desapacible bajo los dardos de la nieve y de la lluvia: recursos tiene para todo, y, sin recursos, en nada se aventura hacia el futuro; solo la muerte no ha conseguido evitar, pero sí se ha agenciado formas de eludir las enfer-medades inevitables.

Referente a la sabia inventiva, ha logrado conocimientos técnicos más allá de lo esperable y a veces los encamina hacia el mal, otras veces hacia el bien.

Si cumple los usos locales y la justicia por divinos juramentos confirma-da, a la cima llega de la ciudadanía; si, atrevido, del crimen hace su compañía, sin ciudad queda: ni se siente en mi mesa ni tenga pensa-mientos iguales a los míos, quien tal haga».

Sófocles, Antígona.

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2 Sí, ha evolucionado, porque se le han ido añadiendo características y derechos y se ha extendido a toda la humanidad.

3 Significa que la persona no solo disfruta de libertad, sino que esta lleva también aparejada la responsabilidad.

Actividades de refuerzo1 Elabora un esquema en el que se recojan las características básicas de

la persona.

2 Argumentad si «persona» y «ser humano» son términos equivalentes.

3 Construye una sopa de letras en la que aparezcan todas las características del concepto de persona y, después, entrégasela a tus compañeros y compañeras para que la resuelvan.

4 Explica la diferencia entre ser autónomo y heterónomo en el campo de la identidad moral de la persona.

Actividades de ampliación1 De forma individual, dibuja un breve cómic en el que aparezcan los perso-

najes de esta unidad (por ejemplo, Boecio, Kant, etc.) y dialoguen sobre el concepto de persona. Puedes diseñar ese cómic utilizando aplicaciones de dibujo o de tratamiento de imágenes en el ordenador.

Posteriormente, los alumnos y alumnas pueden hacer una puesta en común y realizar una exposición de los cómics en el aula.

2 Leed este breve texto de Kant sobre la humanidad y la moralidad, y señalad por qué Kant solo atribuye dignidad al ser humano:

SugerenciasLa definición que se propone de la persona como ser moral libre y racional en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, coloca a los seres humanos por encima de los animales y les otorga unos derechos inviolables y universales.

De esta forma, proponemos trabajar con los alumnos y alumnas, para que enlacen este enfoque de persona con el de la persona como sujeto de derechos. Además, convendría incidir en que, actualmente, esos derechos abarcan a toda la humanidad, sin excepciones, y superando cualquier tipo de discriminación.

A partir de aquí, ya podemos profundizar en el concepto de persona ana-lizando sus características. Además, estas también se pueden ligar al mo-mento histórico en el que surgieron: en el cristianismo, la universalidad de la persona; en la Ilustración, con Kant, su consideración, en tanto que ser moral y radicalmente libre, como fin en sí mismo, de donde deriva su ca-pacidad de obrar responsablemente, etc.

Soluciones de las actividades

1 Puede presentarse así:

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Las características de la personaLa Declaración Universal de los Derechos Humanos define a la perso-na como un ser moral libre y racional. Como tal, todos los seres huma-nos tenemos una serie de derechos inviolables y universales que su-ponen dignidad. Esto nos sitúa por encima de cualquier pertenencia a grupos sociales, raciales y nacionales, con independencia del sexo, de la edad y de las capacidades de cada uno.

2.1 Ser social

Desde su primer significado —máscara del actor que interpreta un papel en una obra: el personaje—, la noción de persona indica su ca-rácter social: es el individuo que desempeña una determinada fun-ción en la sociedad, del mismo modo que el actor representa un pa-pel en la obra de teatro.

En la sociedad, la persona no está sola; al contrario, existe en rela-ción con los otros y su desarrollo depende de esas relaciones inter-personales.

2.2 Ser racional, libre y digno

Para realizar su tarea social, la persona no puede ser un simple instru-mento, una herramienta, sino que necesita ser un agente racional y libre: actuar por sí misma, autónoma y reflexivamente, asumiendo las consecuencias de sus acciones.

En tanto que agente social, la persona tiene derechos, aunque tam-bién tiene deberes. Se trata de un sujeto racional y libre, por lo que es estimado como algo más «elevado» que los otros seres (los animales y las cosas).

Así, a partir de la civilización romana, a la persona se le atribuyen las características de racionalidad, libertad y dignidad. Sin embargo, la cultura de aquella época no reconocía esa dignidad a todos los seres humanos.

En cambio, la moral cristiana extendió universalmente esa dignidad, aunque dicha extensión no era considerada fruto de alguna ley huma-na, sino de la ley de Dios.

El cristianismo defiende una visión teológica de la persona, derivan-do sus características de la voluntad creadora de Dios. Para el cris-tianismo, ser persona es un don de Dios entregado a todos los seres humanos.

2.3 Moralidad y responsabilidad

Durante el período de la Ilustración, en el siglo xviii, el filósofo alemán Immanuel Kant aplicaba a la persona estos atributos: racionalidad, libertad y dignidad.

Además, insistía en que la persona pertenece al llamado «reino de los fines», que es el reino de la moral, aquel en el que cada ser racional es siempre un fin en sí mismo. Una persona es un ser moral cuya libertad lo convierte en un ser digno.

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El actor de comedia. Fragmento de un mosai-co romano en Hadrumetum (Sousse, Túnez).Como la máscara de teatro («persona»), la persona tiene un carácter social.

Esta dignidad no es un regalo (ni de Dios ni de nadie), no es un aña-dido procedente del exterior, sino que es un principio intrínseco al ser humano que pone de manifiesto su radical libertad, la cual es el fundamento de su moralidad.

Kant insiste en que esa libertad conlleva simultáneamente respon-sabilidad: puesto que la persona es un ser racional y libre, entonces estará dotada de conciencia y de la capacidad de obrar responsable-mente, por lo que la «persona es el sujeto cuyas acciones son impu-tables».

A partir de la filosofía de Kant, el concepto de persona quedaba de-finitivamente fundamentado en la moral, en vez de en la ley jurídico-política (Roma) o en la teología (cristianismo).

1   Construye una tabla de dos columnas: en una coloca las distintas etapas histórico-culturales importantes en la configu-ración del concepto de persona; en la otra, anota las caracte-rísticas o significados que cada una de esas etapas otorgó al término persona.

2 ¿Consideras que el significado del concepto de persona ha ido evolucionando a medida que cambiaba el modelo de socie-dad? Argumenta la respuesta.

3 ¿Qué significa la frase de Kant: «Persona es el sujeto cuyas ac-ciones son imputables»?

Comprende, piensa, investiga…

Alexandre Fragonard, Mirabeau respondiendo a Dreux-Brézé en una reunión de la Asamblea Nacional francesa en 1789 (Museo del Louvre, París).En la Ilustración, se consideró que los atributos de la persona eran la racionalidad, la libertad y la dignidad.

Etapa histórico-cultural

Características o significados

Grecia Actor que salía a escena con una máscara.

Roma El ciudadano libre o sujeto de derechos, supe-rior al resto de cosas y a los esclavos.

Cristianismo La persona es el ser más digno, fruto de la Creación, y hace iguales a todos los seres huma-nos a los ojos de Dios.

Ilustración y Kant La persona es sujeto de derechos inalienables y universales, como la igualdad ante la ley, la vida, la libertad, etc., pero también de deberes, como la responsabilidad de sus actos.

«La moralidad es la condición bajo la cual un ser racional puede ser fin en sí mismo; porque solo por ella es posible ser miembro legislador en el reino de los fines. Así pues, la moralidad y la humanidad, en cuanto que esta es capaz de moralidad, es lo único que posee dignidad».

Immanuel Kant, Fundamentación de la metafísica de las costumbres.

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Sugerencias

Acabamos de ver que somos personas por el mero hecho de haber nacido seres humanos y que, como tales, tenemos una dignidad inviolable e ina-lienable. Esta entidad personal nos otorga unos derechos universales e imprescriptibles, que no admiten ni limitaciones ni exclusiones.

Pero esta es solo una de las vertientes de ser persona. Además de nacer personas, tenemos que hacernos personas, que construir nuestra perso-nalidad a lo largo de toda nuestra vida, en relación con las personas con las que vivimos.

Por tanto, el alumnado tiene que comprender que el hecho de ser persona implica también una serie de obligaciones: si somos libres, tenemos que ser responsables de nuestros actos; si queremos que nos traten dignamente, tenemos que respetar la dignidad de los demás; si somos iguales ante la ley, tenemos que respetar esa ley.

Fruto de esta responsabilidad, surge una moral individual, que orienta nuestra conducta de acuerdo con unos valores que dignifiquen la existen-cia humana y faciliten la convivencia. Los alumnos y las alumnas tienen que ser conscientes de esta estrecha relación entre la moral individual y los valores sociales.

Soluciones de las actividades

1 «Virtud»: es un hábito bueno por el que somos capaces de equilibrar nuestra conducta para lograr nuestra felicidad o bien propio y poder convivir pacíficamente con los demás. La virtud es esa forma de com-portarse que nos hace mejores para nosotros mismos y para los demás.

«Modelo»: es un arquetipo, una forma que sirve de ejemplo a seguir y que es típica y explicativa de una acción, situación, hecho, cosa o pro-piedad.

«Derecho»: es un bien jurídico que se atribuye a las personas.

«Deber»: es una obligación, una responsabilidad que lleva consigo el hecho de ser libre.

2 Ser «ejemplar» es ser virtuoso y actuar de acuerdo con la dignidad de la persona. Los comportamientos ejemplares se observan en la solidari-dad, en el ejercicio responsable de la libertad, en el esfuerzo individual por mejorar, en la cooperación para lograr un bien común…

3 Respuesta abierta. Lo importante es que se perciba que ser persona es un logro que se hace en sociedad y con la colaboración de todos.

Actividades de refuerzo

1 Escribe una redacción sobre actitudes virtuosas y ejemplares.

2 Define qué es la virtud.

3 Argumenta qué resulta más definitorio en el hecho de ser persona: su libertad o su responsabilidad. Debes tener en cuenta que, con indepen-dencia de la cuota de libertad de la que se pueda disfrutar, siempre irá acompañada de una cuota de responsabilidad.

Actividades de ampliaciónBusca algún ejemplo que clarifique la definición de Aristóteles de la virtud como el cálculo del «justo medio»:

Aprendizaje cooperativo

Dialogad sobre el siguiente tema: ¿si un estudiante está obligado a serlo, porque está en la etapa de enseñanza obligatoria, en qué medida le afecta el deber de no copiar? O bien, ¿sería aceptable que no devolviéramos dinero prestado por un amigo, si consideramos que no lo necesita?

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La formación moral de la persona

3.1 Las personas nacen y se hacen

Si somos personas, no es únicamente por haber nacido humanos ni por participar de una cultura que dignifica a los seres humanos sobre el resto de seres, sino porque construimos nuestro proyecto de vida haciéndonos responsables de nuestros actos libres.

La conciencia, que implica ser libre, tiene un envés: la responsabili-dad. Aunque resulte evidente que una persona lo es por nacimiento (se nace humano, en vez de ser una piedra, una planta o un oso), es cierto también que las personas se hacen, esto es, construyen su identidad personal a lo largo de su vida.

Además, en esa labor de autoconstrucción no están solos, ya que se hallan en relación estrecha y fundamental con el resto de personas, con la sociedad.

En este nuevo escenario de formación de la persona intervienen las normas, las creencias y los valores, que se constituyen en derechos y deberes:

a) El derecho de ser libre, pero al mismo tiempo el deber de respon-sabilizarse de esa libertad.

b) El derecho a ser tratado dignamente, pero a la vez el deber de respetar la dignidad de los demás.

c) El derecho de ser igual ante la ley, pero simultáneamente el deber de obedecer esa ley.

3 3.2 Ejemplaridad de la persona

Esos derechos y deberes a los que hemos aludido sirven para esta-blecer un modelo de persona, es decir, un arquetipo en el que el indi-viduo se fija a la hora de actuar.

Ahora bien, ese modelo no viene simplemente dado, no es algo ajeno y exterior que pertenezca a otro y nos lo imponga, sino que exige de cada uno de nosotros el compromiso de hacerlo nuestro. Cada indivi-duo ha de esforzarse por ser ejemplar.

«Ejemplaridad» quiere decir aquí adoptar una actitud virtuosa: no se trata de ser mejor que todos; más bien consiste en luchar por estar a la altura; esto es, hacerse merecedor de ser tratado como persona. Para ello, hemos de realizar, de manera libre, solidaria y coherente, nuestro proyecto de vida de acuerdo con una jerarquía de valores que dignifiquen la existencia humana y faciliten la convivencia social.

Un mundo de personas es un mundo compartido, un mundo de se-res libres e iguales (ante la ley), que se sostiene gracias a la virtud de cada uno, es decir, a la prudencia lograda con buenos hábitos; este es un mundo de buenas costumbres donde reina el cultivo de la justicia y de la amistad. No en vano, Aristóteles comparaba la virtud con el cálculo del «justo medio», que tenía que ver con el esfuerzo inteligente y prudente para evitar posturas extremistas y, así, lograr un equilibrio tanto en la vida individual como social.

En resumen, el proceso de construcción de la persona está repleto de normas, de valores y de modelos que permiten el entendimiento mutuo y la convivencia, y estos pertenecen al ámbito de la sociedad. Pero, al mismo tiempo, está presente la propia conciencia del indivi-duo y su virtud, que corresponden a un plano moral individual.

Por ejemplo, cuando un estudiante tiene que realizar un examen, se encuentra obligado por unas normas impuestas desde fuera que le prohíben copiar y que le exigen expresarse en un idioma determina-do, utilizando una gramática y una ortografía adecuadas, etc. Pero, además, ese estudiante ha de observar también un código interno, que brota de su conciencia moral y que de nuevo le obliga. Así, el estudiante no solo tiene prohibido copiar, sino que sobre todo «no debe» copiar.

1 Define los siguientes términos: «virtud», «modelo», «derecho», «deber».

2 ¿Qué significa ser «ejemplar»? Pon ejemplos donde se mues-tren comportamientos ejemplares de las personas.

3   Debatid en clase sobre las siguientes cuestiones: ¿la persona nace o se hace? ¿Qué es más importante en la forma-ción de la persona: unos buenos valores y normas recibidos de la sociedad o la virtud de cada persona que surge de su con-ciencia individual?

Comprende, piensa, investiga…

Peregrinos realizando abluciones en el río Ganges, en Benarés.Los seres humanos nacemos en una cultura, pero tenemos la libertad de construirnos a nosotros mismos.

En un examen, el estudiante obedece unas normas académicas, pero también unos va-lores morales personales que le prohíben copiar.

«Es, por tanto, la virtud un modo de ser selectivo, siendo un término medio relativo a nosotros, determinado por la razón y por aquello por lo que decidiría el hombre prudente. Es un medio entre dos vicios, uno por exceso y otro por defecto, y también por no alcanzar, en un caso, y sobrepasar, en otro, lo necesario en las pasiones y acciones, mientras que la virtud encuentra y elige el término medio».

Aristóteles, Ética a Nicómaco, II, 6.

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Actividades de refuerzo1 Establece tu propia jerarquía de valores, destacando aquellos que

tienen más importancia en tu vida.

2 Define el concepto de personalismo.

Actividades de ampliación1 Leed Antígona, la tragedia de Sófocles, y debatid en grupo sobre la

actitud de esta mujer ante Creonte. Creéis que los valores morales indi-viduales pueden estar por encima de las leyes? Pensad en algún otro personaje que haya ido a la cárcel por defender sus convicciones mora-les frente a la leyes injustas de su país.

2 ¿Qué valores destaca Nelson Mandela en este discurso? ¿Contra qué leyes injustas tuvo que luchar?

Aprendizaje cooperativoEn equipos, investigad cómo vivían las mujeres en el mundo antiguo, en la Grecia clásica y en Roma: qué tipo de trabajos realizaban, qué papel polí-tico desempeñaban en la sociedad de su época, si tenían más o menos derechos que los varones...

A continuación, comparad esa situación en las antiguas civilizaciones con la que tienen las mujeres en sociedades de distintos países y culturas en la actualidad.

SugerenciasTal como acabamos de ver, nacemos personas y nos hacemos personas. Por un lado, como seres humanos, somos personas, y, por otro, nos hacemos personas al realizar nuestro proyecto personal de vida en una sociedad.

Pero en ese proyecto personal de vida ocupan un lugar esencial los valores éticos que la persona elige como fuente de su comportamiento individual y en sociedad.

Es preciso destacar ante los alumnos y las alumnas la especificidad de los valores éticos y su superioridad con respecto a cualesquiera otros valores; por ejemplo, a los económicos. De ahí deriva la importancia de elegir acertadamente los valores éticos que orienten nuestra vida y nos ayuden a convivir felizmente con los demás.

Soluciones de las actividades1 Respuesta abierta. El alumnado debe esforzarse en reflexionar crítica-

mente sobre su conducta y sobre los valores que persigue y, además, ensayar la construcción de argumentos para justificarlos.

2 Respuestas abiertas. Es importante que el alumnado comprenda que la lucha por el respeto a la propia dignidad, como pretende Shylock, no se puede conseguir mediante la imposición de castigos inhumanos que, a su vez, atentan contra la dignidad de la persona. En este caso, se sobre-pasan los límites de la justicia en la persecución de la venganza que, por supuesto, nunca puede ser un valor moral.

3 Para la realización de esta actividad, sería muy conveniente recurrir a los conocimientos que los alumnos y las alumnas han adquirido en la asig-natura de Ciencias Sociales, para obtener información sobre los casos de discriminación y de explotación que se proponen en este ejercicio: la esclavitud, los niños soldados, la discriminación racial o la discrimina-ción de las mujeres.

4 No obstante, estos ejemplos son solo una propuesta y los estudiantes pueden escoger otros casos que a ellos les parezcan más convenientes, o que resulten más cercanos a sus intereses.

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4 Persona y valores

4.1 Valorando a la persona

Como ya hemos explicado al principio de la unidad, el concepto de persona nació en el contexto del teatro clásico y, dado que la litera-tura trabaja con personajes, podemos encontrar en ella elocuentes ejemplos del valor de la persona y del tipo de tratamiento que esta ha de recibir.

En ese sentido, podemos citar a Antígona, el personaje teatral de la obra homónima de Sófocles (siglo v a. C.), o a Shylock, el personaje de El mercader de Venecia de Shakespeare (siglo xvii), como ejem-plos en los que la dignidad de la persona entra en escena como tema central de la obra.

Antígona pretende enterrar a su hermano, Polinices, a sabiendas de que ella misma será condenada a muerte por incumplir la ley de la ciudad dictada por su tío y gobernante, Creonte, que prohibe dar sepultura a los rebeldes.

Shylock, judío en Venecia, humillado, injuriado y tratado injustamente por las leyes de esa ciudad bajo dominio cristiano, pretende vengarse exigiendo a Antonio, su deudor, una libra de carne que arrancará de su cuerpo, concretamente del corazón.

Antígona y Shylock, como personajes, pero también cualquier per-sona real, viven en un mundo de valores, construido culturalmente sobre opiniones, creencias, costumbres e ideas, que sirven de bare-mo para medir si las conductas son o no adecuadas, si son buenas o malas.

A su vez, como los valores indican el grado de perfección de una cosa, de una acción o de una persona, cabe erigirlos en modelos, a los que otorgamos un nivel superior y ejemplar.

Así, Antígona considera que la persona está por encima de la ley convencional de la ciudad y, entonces, decide enterrar a su hermano, aunque le cueste la vida. Creonte, por su parte, opina que la ley de la ciudad es la que tiene valor supremo y que las personas deben someterse a ella.

Shylock, en cambio, reclama ser tratado dignamente, como una per-sona, como un ser en sí mismo valioso, pero si no recibe tal trato, adoptará medidas crueles que también atentan contra la dignidad de los otros.

4.2 La persona como cénit de los valores

En el mundo de las personas, los valores son los que están en juego. Pero existen muchos tipos de valores y hay que jerarquizarlos, por-que no a todos ellos les otorgamos la misma importancia.

Existen valores basados en la utilidad práctica: cualquier herramienta, por ejemplo. Otros son valores de tipo económico: todas las mercan-cías valen algo, tienen un precio. También hay valores estéticos, como la belleza.

Pero, por encima del resto, se sitúan los valores éticos: la justicia, la igualdad, la libertad, la paz… Son valores que deseamos que puedan realizarse universalmente, porque nos ayudan a sostener la conviven-cia y a vivir felizmente. Son los ideales que tomamos en cuenta para la realización de nuestra vida personal en sociedad.

Los valores, como nuestro proyecto de vida personal, son elegidos, de igual manera que Antígona elegía su destino al desobedecer las órdenes de la ciudad poniendo por encima el deber de dar sepultura a su hermano, o Shylock elegía la igualdad y la venganza. La persona es quien libremente realiza esa elección.

Quienes opinan que la persona es el máximo valor se sitúan en la línea del llamado «personalismo», que es una corriente ética que da primacía al valor de la persona por encima de cualquier otra entidad, concibiéndola como el principio desde el que debe ser explicada la realidad.

Comprende, piensa, investiga…1 ¿Qué consideras más valioso en tu vida? Ar-

gumenta la respuesta.

2   Después de leer la obra teatral de Shakespeare, El mercader de Venecia, o de ver la película homónima de Michael Radford, en-tablad un debate sobre alguno de estos temas: ¿las leyes ayudan o dificultan el desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad? Ante la in-justicia, ¿la venganza puede ser un valor moral?

3   En grupos, buscad información sobre ca-sos históricos de discriminación y explotación. Por ejemplo: esclavos en la Antigüedad, niños soldados en África, discriminación racial en Sudáfrica y en Estados Unidos, discriminación de la mujer en el mundo laboral y social, etc.

Cada grupo deberá elaborar una presentación digital sobre uno de esos temas para exponerla en clase.

Michael Radford, El mercader de Venecia.Shylock (Al Pacino) trata de vengarse de Antonio, un rico mercader veneciano, exigiéndole una libra de carne de su cuerpo en pago de una deuda.

Giorgio de Chirico, Edipo y Antígona.Antígona es el arquetipo de ser humano que pone el valor de la persona por encima del cumplimiento de la ley.

«Nos comprometemos a construir una paz completa, justa y perdura-ble. Hemos triunfado en nuestro intento de implantar esperanza en el seno de millones de los nuestros. Contraemos el compromiso de cons-truir una sociedad en la que todos los sudafricanos, tanto negros como blancos, puedan caminar con la cabeza alta, sin ningún miedo en el corazón, seguros de contar con el derecho inalienable a la dignidad humana: una nación irisada, en paz consigo misma y con el mundo».

Nelson Mandela, Discurso de la toma de posesión como presidente de Sudáfrica.

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2 Lo determinante aquí es que el alumnado valore positivamente la digni-dad intrínseca de la persona y aprenda a no adoptar actitudes de violencia ni de intolerancia.

3 La imposición de valores morales no puede hacerse bajo bandera política o ideológica alguna. En cambio, determinadas acciones morales sí pue-den ser consideradas mejores en la medida en que aumentan la libertad, la justicia y la igualdad ante la ley de las personas y son respetuosas con su dignidad.

Reflexiona y responde

4 Respuesta abierta, pero siempre mostrando respeto y ofreciendo argumentos bien fundados.

Investigad y buscad información

5 Respuesta abierta. El objetivo es que los alumnos y alumnas identifi-quen bien los casos de violación de los derechos de las personas para denunciarlos.

Aprender a emprender

1 Los estudiantes decidirán cómo realizarán el documental, aunque sería aconsejable acordar una duración homogénea.

2 Se pretende que los epitafios muestren la forma de ser de esas personas, que definan cómo eran. Por eso, en cierta medida, se deberían ver refle-jados en la información que se aporta sobre cada personaje.

3 Es muy importante constituir un jurado imparcial. Una posible manera sería elegir a un representante de cada grupo, que no podría votar al documental en el que él ha participado.

4 Además de la realización de los carteles, podría ser oportuno redactar una breve presentación del ciclo de documentales en la que se explica-se su objetivo.

Aplica tus competencias

Expresa tu opinión y debatid

1 Respuesta abierta. Pueden valorarse las siguientes informaciones:

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Expresa tu opinión y debatid1 ¿Si fueras miembro de ese tribunal, habrías conce-

dido a Seselj el permiso por razones humanitarias o se lo habrías denegado debido a la gravedad de sus crímenes y a su falta de arrepentimiento?

2 ¿Y qué harías si fueras una de sus víctimas, trata-rías de vengarte o respetarías sus derechos como persona aun sabiendo que él no los respetó?

3   Debatid en clase este asunto argumentan-do las opciones morales a que pueda dar lugar.

Reflexiona y responde4   Juzgar. ¿Consideras correcto que una civili-

zación imponga su criterio moral a otra atendiendo a

cuestiones de orden político, religioso, cultural, etc.? ¿Y si esa civilización colonizadora es mucho más desarrollada e impone sus modos de vida y sus creencias a la otra civilización, más atrasada, para aumentar el bienestar de esta última?

Investigad y buscad información5 Elaborad un reportaje periodístico sobre

la guerra de los Balcanes haciendo hincapié en los casos en que las personas vieron vulnerados sus derechos fundamentales.

Resaltad las causas del conflicto bélico (lucha de religiones y culturas diferentes, intereses econó-micos ocultos, etc.) y evaluad la situación actual en la zona para averiguar si aún persisten las mis-mas diferencias que alimentaron esa guerra.

El concepto de persona fundamenta el valor de los seres humanos en su liber-tad y en su dignidad. Por ambas características son diferentes de todos los demás seres vivos. Sin embargo, no siempre se han respetado esos derechos universales e inviolables asociados a la persona.

Aplica tus competencias

Taller de valores

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El caso de Vojislav SeseljLa Haya. Año 2003

Tribunal Penal Internacional

Vojislav Seselj, líder del Partido Radical Serbio,

ha sido juzgado y encarcelado acusado de co-

meter crímenes contra la humanidad durante

la guerra de los Balcanes, en los años 90 del

siglo xx.

Seselj fue acusado de reclutar y financiar a vo-

luntarios e incitarlos a cometer torturas, asesi-

natos, limpieza étnica y otros crímenes contra

la humanidad.

En febrero de este año 2003 se ha entregado

voluntariamente para ser juzgado por el Tribu-

nal Penal Internacional para la ex Yugoslavia

(TPIY) porque se consideraba inocente. Desde

entonces permanece encarcelado en prisión

provisional a la espera de juicio.

Libertad humanitariaAño 2014

Seselj tiene 60 años y un cán-

cer de colón, por lo que se le

ha concedido un permiso de

libertad condicional por razones humanitarias

que le autoriza a salir de la cárcel y ser trasla-

dado a su país.

Sigue gozando de un amplio respaldo entre

los sectores ultranacionalistas, que le aguar-

daban en el aeropuerto de Belgrado al grito

de «¡Victoria!, ¡victoria!».

El propio Seselj se dirigió a sus seguidores

desde la sede de su partido, prometiendo ven-

ganza y tildando al presidente y al primer mi-

nistro serbios de «renegados y traidores que

han vendido su honor, han renunciado al na-

cionalismo serbio y se han convertido en va-

sallos de Occidente».

Concurso «Documenta»Siguendo el ejemplo de la tumba de Kant, vamos a buscar los mejo-res epitafios de personajes célebres para elaborar con ellos un docu-mental que refleje los valores que caracterizan a las personas.

Podemos seleccionar a cualquier persona que haya escogido como epitafio valores como la libertad, la dignidad, la responsabilidad, la soli-daridad…

La obra se puede presentar en cual-quier formato digital y el premio principal consistirá en su proyec-ción durante la semana cultural del centro.

¡Animaos y presentad vuestras pro-puestas! ¡Muy pronto podremos ver vuestras creaciones!

aprenderemprender

Trabajando en grupos, idead un documental sobre el tema «Epitafios mo-rales». Seguid estas pautas:

1) Entre toda la clase, acordad con qué criterios se va a realizar el docu-mental y con qué medios se va a producir: vídeo, fotografía, presenta-ción digital, qué tipo de personajes, duración….

2) Organizaos para buscar información sobre epitafios grabados en ho-nor a pensadores, científicos, escritores, políticos, deportistas, etc., que reflejen valores de la persona, tales como la libertad, la solidaridad, el esfuerzo personal dirigido a la realización del bien común, la actitud emprendedora… Cada epitafio irá acompañado de un comentario sobre su significado y de información relativa al personaje.

3) Estableced una fecha de entrega de los documentales, que serán ela-borados por distintos grupos, y después constituid un jurado que los evalúe y otorgue el premio al grupo vencedor.

4) Finalmente, organizaos para solicitar al director de vuestro centro esco-lar la emisión de los mejores documentales durante la celebración de la semana cultural.

Otro grupo de estudiantes se dedicará a dibujar carteles que anuncien el evento en el centro escolar.

ELABORAMOS UN DOCUMENTAL

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10UNIDAD 1UNIDAD

Los valores en la historiaAristóteles y la virtudAristóteles, el sabio macedonio que tuteló la educación de Alejandro Magno en el siglo iv a. C., se preocupó por la virtud de los ciudadanos, convencido de que no solo los acerca a la felicidad, sino también a la justicia.

El ser humano, dotado de razón y de palabra, puede ele-gir voluntariamente cómo actuar, y cuando lo hace de modo correcto, desarrolla hábitos virtuosos. Procurando mantener el equilibrio en el justo medio y evitando los extremos, ejercitamos la prudencia. Igual que el arquero necesita entrenar para acertar en el centro de la diana, también nosotros nos hacemos virtuosos con la práctica.

No nacemos, por tanto, siendo buenos o malos, sino que las personas que se esfuerzan por actuar correctamente fortalecen un carácter moral valioso: «Realizando accio-nes justas se hace uno justo y moderado».

Una sociedad más justa contribuirá a que quienes la for-man sean más virtuosos, y los ciudadanos virtuosos cons-truirán una comunidad mejor.

«El Gobierno de Belgrado, en manos del Partido Progresista de Serbia (PPS, centroderecha), ha prometido que el líder nacionalista “no ten-drá contacto alguno con testigos o víctimas y regresará al Tribunal cuando se le ordene”, según las condiciones impuestas por el TPIY para concederle la condicional. Seselj, que se entregó en 2003, está acusado de reclutar y financiar a voluntarios e incitarlos a cometer tor-turas, asesinatos, limpieza étnica y otros crímenes contra la humanidad durante las guerras de independencia de las antiguas repúblicas de la Federación Yugoslava, en los años noventa. La duración del proceso judicial en su contra ha sido blanco de las críticas de víctimas y organi-zaciones civiles por la obstrucción del propio Seselj y la sustitución de uno de los jueces que componen el tribunal. La sentencia estaba pre-vista para octubre de 2013, pero el cambio de magistrado ha demora-do sine die el fallo».

«La Fiscalía del TPIY pidió hoy que sea revocada la libertad provisional concedida al ultranacionalista serbio Vojislav Seselj para que este vuel-va a la cárcel en La Haya. Fuentes de la oficina del fiscal jefe del TPIY, Serge Brammertz, declararon que la Fiscalía considera que el compor-tamiento de Seselj en Serbia «ha socavado» el espíritu de la decisión sobre su libertad provisional, concedida por motivos de salud. [...].

El TPIY decidió el pasado 7 de noviembre poner en libertad provisional a Seselj por razones humanitarias, ante el deterioro de su salud, para que pudiera recibir tratamiento «en el entorno más adecuado».

Seselj regresó a Serbia el día 12 y en varias actuaciones en público ase-guró que no retornaría a La Haya de forma voluntaria».

Agencia EFE.

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Anotaciones