La rebelión de las palabras

LA rebelión de las palabras cuenta la historia de la familia Clum, cuyos miembros se ven afectados por un mal relacionado con el lenguaje. Éste adquiere muchas formas distintas: en algunos casos, los personajes son incapaces de pronunciar alguna le-tra, o dos letras juntas; en otros, afecta el estilo de su conver-sación alterando su vida cotidiana y dando pie a situaciones disparatadas.

Por medio del humor, la ironía y el ingenio, esta novela per-mite a los lectores disfrutar del lenguaje, de las palabras, de su significado y sonoridad, al tiempo que invita al lector a re-flexionar sobre la importancia de la comunicación. ¿Te animas a encontrarte con este misterioso juego?

AUTORA Andrea Ferrari

ILUSTRADOR Carlus Rodríguez

GÉNERO Poesía y juegos de palabras

PÁGINAS 80

TEMAS Artes, deportes y actividades recreativas, creatividad, ingenio e iniciativa, familia.

TEMAS TRANSVERSALES Conciencia social e histórica, desarrollo de la lengua materna.

Andrea Ferrari Nació en Buenos Aires. Es escritora y periodista. Se graduó como traductora literaria en el Instituto Superior en Lenguas Vivas J. R. Fernández. Como periodista, trabajó en la revista El Porteño y fue miembro del diario Página/12 durante más de quince años. Entre sus libros están Las ideas de Lía (2001), El complot de Las Flores (2003), Café solo (2004), La rebelión de las palabras (2004), El hombre que quería recordar (2005), Aunque diga fresas (2006) y También las estatuas tienen mie-do (2006). Fue finalista del concurso Norma Fundalectura en 2002 con Café solo y en 2003 recibió, en España, el Premio In-ternacional Barco de Vapor por El complot de Las Flores, que fue traducido al portugués y al coreano. En 2006 su novela El hombre que quería recordar fue incluida en la selección Whi-te Ravens de la Internationale Jugendbibliothek de Munich. El camino de Sherlock ganó la XXIII edición del Premio Jaén de Narrativa Infantil y Juvenil.

© loqueleo, Editorial Santillana S.A. de C.V.

EN su prólogo, Andrea Ferrari escribe:

Durante mucho tiempo se creyó que las personas

hacían juegos con las palabras. Sin embargo, recientes

investigaciones han demostrado que es exactamente

al revés: son las palabras las que hacen juegos con las

personas.

Proponga a los alumnos inventar un juego con las pa-labras. Para hacerlo, pida que escriban en media car-tulina su nombre. Indique a los alumnos que recorten cada letra que lo conforma de manera individual y, una vez que las letras estén libres, las pondrán sobre el piso para poder jugar con ellas como si fuera una sopa de letras.

Motívelos a descubrir cuántas palabras secretas se esconden en su nombre. Como hay nombres propios muy cortos, anímelos a escribir su palabra favorita, compartiendo con sus compañeros si la consideran la mejor de todas las que conocen porque les gusta su sonido, por su extensión o porque representa algo muy importante en sus vidas, como el nombre de un amigo, lo que sienten por alguien especial o el sabor de su he-lado favorito.

Una vez que hayan seleccionado su palabra predilec-ta, escríbanla en la otra mitad de la cartulina y recór-tenla. Mezclen las letras con las de su nombre y sigan sacando a la luz palabras nuevas, diferentes e incluso disparatadas.

Cuando hayan explorado lo suficiente, junten las letras de todos para descubrir no sólo una palabra, sino un nuevo poema escondido entre sus letras, con la única condición de no integrar ninguna palabra nueva. Una vez que todo el grupo esté de acuerdo con la creación y haya quedado sobre el piso su poema, tome registro fo-tográfico para compartirlo en las redes de la escuela.

Lectura individual

•Dimensiones

afectiva, cognitiva y

estética•

Comprensión global,

elaboración de una

interpretación y reflexión

sobre la forma

Lectura en pequeños

grupos •

Dimensiones sociocultural,

cognitiva y estética

•Elaboración

de una interpretación,

obtención de información

y reflexión sobre el

contenido

CUANDO Claudio saca a la luz su historia, deja en claro que las palabras importan, nos conforman y ayudan a nombrar al mundo y a nosotros mismos.

Dialogue con los alumnos sobre el mal de la familia Clum y sobre cómo, por difundir su experiencia, Clau-dio generó un contagio con importantes consecuen-cias. Retomen los casos de Mercedes, Marcio, Claudio y Clara e intenten recrear cómo se rebelaron sus pala-bras. Formen equipos para que cada uno practique la forma de hablar de acuerdo con el mal de uno de estos personajes.

Una vez que dominen su forma de hablar arrastrando la S, comiéndose la O, comunicándose con dos letras peleadas, pida a cada equipo que escriba un breve tex-to de media cuartilla sobre cualquier tema. El objetivo es que puedan leerlo en voz alta al resto del grupo, ha-blando como el personaje del libro que les haya tocado.

Conversen sobre las implicaciones que tiene el no po-der transmitir a los demás adecuadamente los pen-samientos y sentimientos, y de las consecuencias que esto puede generar en lo cotidiano.

Cierre la actividad organizando el montaje de una bre-ve y sencilla representación por parte de cada equipo, basada en cómo se imaginan que enfrentaría cada personaje una situación específica.

Yo y el libro

El libroy el otro

© loqueleo, Editorial Santillana S.A. de C.V.

El libro y el mundo

LEA al grupo en voz alta la siguiente frase:

¿Habrá algún motivo para que se me hayan rebelado

a mí las palabras? De pronto se me ocurrió que tal vez

estuvieran enojadas. Es posible que se hayan molestado

por el poco uso que yo les doy: a fin de cuentas, siempre

elijo las mismas. Habrán notado que tuve que recurrir

al diccionario para encontrar reemplazos a las que se

negaron a ser pronunciadas.

Conversen sobre qué pasaría si un día despertaran y las palabras se quedaran dormidas, o si de pronto sus palabras descubrieran que están enamoradas y quisie-ran irse lejos.

Reflexionen sobre cómo la mayor parte del tiempo ha-cemos uso de las mismas palabras sin buscar opciones que enriquezcan nuestra forma de expresarnos.

Establezca una situación hipotética en la exista una máquina del tiempo. Antes de viajar, divida al grupo en tres equipos. Cada uno hará una maleta en la que llevará exclusivamente palabras que consideren ade-cuadas para poder expresarse en cada tiempo y lugar. Para hacerlo, pida a los alumnos que lleven revistas y periódicos para recortar palabras que empacarán en cajas de zapatos, previamente forradas. Para garan-tizar que contarán con diversas opciones para expre-sarse, deberán buscar palabras en el diccionario con el objetivo de enriquecer su equipaje.

En distintos espacios de la escuela, cada equipo repre-sentará su viaje y establecerá un diálogo imaginario con cavernícolas, conquistadores o humanos del futu-ro, usando únicamente las palabras de su maleta. Cierre la actividad animándolos a que compartan si conside-ran que hicieron una buena selección y por qué.

Lectura grupal

•Dimensiones sociocultural

y cognitiva •

Comprensión global,

elaboración de una

interpretación y obtención de

información

Proyecto

NOTAS

PIDA a los alumnos que conformen equipos con el obje-tivo de escribir una tarjeta ilustrada con un propósito muy específico: declarar su amor, adoptar una mascota, conseguir que les regalen el video juego de moda, discul-parse con sus papás por romper un recuerdo de viaje. Es importante que registre qué mensaje desarrollará cada equipo y que les pida que se numeren para que el jue-go resulte divertido. Una vez que todos finalicen, siente a los alumnos en círculo. Usted será el presentador de cada equipo que pasará al centro del círculo al escuchar su número, y lo más importante: ninguno podrá expre-sar nada, solamente leerá al resto del grupo su carta. Por ejemplo, elija al equipo que escribió la declaración de amor y cometa un error intencional al presentarlo frente a todos como el equipo que escribió la solicitud de adopción de una mascota. ¿Qué efecto surte escu-char mensajes que no corresponden con su objetivo?

© loqueleo, Editorial Santillana S.A. de C.V.