Philip Berryman.Teología de la Liberación.Los hechos esenciales en torno

al movimiento revolucionarioen América Latina y otros lugares

Si se quiere entender a “La teología de la liberación” es necesario comprender que es teología, es una reflexión sistemática y disciplinada sobre la fe cristiana y sus implicaciones.

El Comité de Santa Fe acusa a los teólogos de la liberación de usar a la Iglesia como “una arma política contra la propiedad privada y el capitalismo productivo, infiltrando en la comunidad religiosa ideas que son menos cristianas que comunistas”.

La mayoría de los teólogos que promueven la teología de la liberación, no enseñan en universidades o en seminarios, casi todos son hombres, y la mayoría son clérigos católicos, aunque los protestantes han desempeñado papeles importantes en el movimiento. La mayoría de ellos dedican parte de su tiempo a trabajar directamente con los pobres.

Así es como los problemas a los que se enfrentan son los que surgen de su contacto con los pobres. los teólogos de la liberación han criticado las ideologías que justifican la desigualdad, Y también se han enfrentado a las dictaduras militares que han practicado a menudo la tortura defendiendo a la “civilización ‘cristiana’ occidental”.

¿Qué es la teología de la liberación?

El autor plantea más de nueve definiciones de la teología de la liberación que podemos resumir en las siguientes:

Es la manifestación de un movimiento mundial en favor de la emancipación humana.

La teología de la liberación no es exclusiva de América Latina.

La teología de la liberación es una interpretación de la fe cristiana a través de la experiencia de los pobres.

Es una crítica de la sociedad y de las ideologías que la sustentan.

Ésta teología busca que los pobres aprendan a leer las Escrituras en una forma que afirme su dignidad y su valía, así como su derecho a luchar juntos por una vida más decorosa. Yevidenciar que no sólo la gente es pobre sino que su pobreza es con mucho el resultado de la forma como está organizada la sociedad.

Crítica a la Teología de la liberación.

Padre Jordi Rivero

La Conferencia Episcopal Latino Americana (CELAM) celebrada en Medellín, Colombia, el año de 1968, dio origen a la Teología de la liberación.En ésta conferencia la iglesia hace énfasis en su compromiso con la pobreza. Sin embargo, la solidaridad con los pobres sigue siendo un aspecto de la fé rechazado u olvidado por muchos.

Es precisamente la Teología de la liberación, el movimiento teológico contemporaneo que quiere dar solición a dicho problema.

Es difícil definir la Teología de la Liberación dado a sus complejos y múltiples puntos de vista, pero se puede decir que busca analizar el significado de las clases sociales y la pobreza y la justicia.

Cabe aclarar que es una corriente bastante amplia de ésta teología la que mezcla el marxismo y otras ideologías políticas con el cristianismo.

El Papa Juan Pablo II pidió a la Congregación para la Doctrina de la Fé un extenso estudio de la Teología de la Liberación. Los resultados del estudio fueron publicados en dos documentos:

Libertatis Nuntius “Instrucciones sobre Algunos Aspectos de la Teología de Liberación”

Éste documento expresa la seria reserva de la Santa Sede a la Teología de la Liberación según ha sido expuesta por Gutiérrez y otros de la misma línea, especialmente en lo referente a la aceptación del análisis de los elementos de clase Marxista.

Libertatis Conscientia “Instrucción sobre Libertad Cristiana y Liberación”

Reconoce la importancia de una auténtica solidaridad con los pobres y ofrece las bases para una ortodoxa doctrina social. Para ello enfatiza la naturaleza de la liberación, como tema esencial de la teología y fe judeo-cristiana.

Estos documentos ofrecen una sólida explicación de los puntos positivos tanto como los graves errores de ciertas corrientes de la teología de la liberación.

Una justa crítica a la Teología de la Liberación no niega las graves injusticias que sufren los pueblos y la responsabilidad del cristiano de trabajar para aliviarlas en la línea de la auténtica doctrina social de la Iglesia, la cual se fundamenta en las Sagradas Escrituras y las enseñanzas de los Padres.