LA TRANSMISIÓN DE LA REVELACIÓN

• LA TRADICIÓN SE HACE TEMÁTICA Y UN TEMA CENTRAL EN LAS DISCUSIONES TEOLÓGICAS, CUANDO LUTERO, CANSADO DE UNA IGLESIA QUE APOYABA TODA UNA SERIE DE COSTUMBRES, QUE ELLA MISMA UTILIZABA EN PROPIO BENEFICIO. LAS COSTUMBRES NO NECESARIAMENTE SON ALGO NEGATIVO. UNA COSTUMBRE PIADOSA PUEDE AYUDAR AL CRISTIANO A PROFUNDIZAR Y A ESTRUCTURAR SU FE MEDIANTE ALGUNAS PRÁCTICAS.

• «EL PROBLEMA TEOLÓGICO DE LA TRADICIÓN ABARCA TANTO EL PROCESO (ACTUS TRADENDI, TRADITIO ACTIVA) COMO EL CONTENIDO (OBIECTUM TRADITUM, TRADITIO OBIECTIVA) Y EL SUJETO TRANSMISOR (SUBIECTUM TRADENS, TRADITIO SUBIECTIVA) DE LA TRADICIÓN»

• «EL PUNTO CENTRAL DE TODAS LAS REFLEXIONES ACERCA DEL PROBLEMA DE LA TRADICIÓN SUELE SER EL CONTENIDO TRANSMITIDO. DE LA CLASE DE CONTENIDO SE DESPRENDE YA UNA PRIMERA DISTINCIÓN ENTRE TRADICIONES QUE AFECTAN A LA FE (TRADITIO DOGMÁTICA) O A LA CONDUCTA CRISTIANA (TRADITIO MORALIS) Y TRADICIONES QUE SÓLO TRANSMITEN OPINIONES TEOLÓGICAS (TRADITIO THEOLOGICA) O COSTUMBRES DE TIPO MERAMENTE PRÁCTICO, RITOS Y USOS (TRADITIO CONSUETUDINALIS)».. EN LO QUE SE REFIERE AL ORIGEN, LA TRADICIÓN SE PUEDE DIVIDIR ENTRE TRADITIO DIVINO APOSTÓLICA Y TRADITIO HUMANA.

• LA PREDICACIÓN DOCTRINAL DE LOS APÓSTOLES, LA PALABRA TRANSMITIDA DESDE EL PRINCIPIO (POLICARPO, 7,2), CONSTITUYE EL FUNDAMENTO DE LA PREDICACIÓN Y DE LA FE. HAY QUE PERMANECER SIEMPRE ACORDES CON

LOS APÓSTOLES

• JESUCRISTO SE MANIFIESTA COMO EL DICIENDO DEL DICIENTE, O EL PRONUNCIANDO DEL PRONUNCIANTE. JESÚS NO PROPONE NINGUNA DOCTRINA, ÉL TAN SÓLO ES LO ENUNCIADO ENUNCIÁNDOSE, EL ACONTECIMIENTO EN ACCIÓN, ES DECIR, EL ACONTECIENDO. SI JESÚS ES LA PALABRA DEFINITIVA DEL PADRE, LO QUE EL MUESTRA ES AL PADRE HABLANTE Y COMUNICANTE COMUNICÁNDOSE EN EL LOGOS, QUE OTRA COSA NO ES QUE UN DIALOGANDO CONTINUO.

• LA TRADICIÓN ES EL HOY DE DIOS EN LA VIDA DEL CREYENTE. EL HOY DE DIOS NO ES UNA EXPRESIÓN TEMPORAL, SINO UNA EXPRESIÓN LITÚRGICA. HABLAR, POR LO TANTO, DEL HOY DE DIOS, ES HABLAR DEL ACONTECIMIENTO QUE NO SE HACE RECUERDO PASADO, SINO QUE ES EL DIALOGANDO Y EL PRONUNCIANDO CONTINUO. LA VIDA DEL CREYENTE ES POR LO TANTO EL ESPEJO DEL PRONUNCIANDO DE DIOS EN EL LOGOS. EN ESTA ACCIÓN LLEVA EN SÍ TODA LA HISTORIA DE LA IGLESIA, NADA LE ES AJENO O PASADO. LOS PADRES DE LA IGLESIA SON TRADICIÓN EN ESTE SENTIDO.

• LA TRADICIÓN ES EL HOY DE DIOS, ES LA VIDA DE LA IGLESIA, QUE TESTIMONIA CON SU VIDA EL ACONTECIMIENTO DEL AMOR DEL PADRE EN EL HOY DE NUESTRA EXISTENCIA. DE ALLÍ QUE S. IRENEO, S. JUSTINO, S. POLICARPO, ORÍGENES, S. AGUSTÍN… NOS SEAN CONTEMPORÁNEOS Y NO SÓLO UNAS FIGURAS DEL PASADO. DE ALLÍ QUE EL ESTUDIO DE LOS PADRES, NO REPRESENTE PARA NOSOTROS EL ESTUDIO DE UN ACONTECIMIENTO AJENO SITUADO EN EL PASADO, SINO LA PERMANENTE ADVERTENCIA DE AQUELLO QUE DEBEMOS EVITAR PARA NO ARRESTAR LA PALABRA, O DE AQUELLO QUE DEBEMOS CELEBRAR, PARA QUE LA PALABRA SIGA SIENDO VIVA Y EFICAZ EN MEDIO DE NOSOTROS. MÁS ALLÁ DE LA FORMA O DEL CONTENIDO DE LO ESCRITO, ME PARECE IMPORTANTE EN LA TRIPLE CONCLUSIÓN QUE PRESENTA LEGENSFELD, ES LA CENTRALIDAD DEL HOY DE YAHVÉ, CUYA LLAMADA SE CONFRONTA CON EL PUEBLO: «LA TRADICIÓN PERMITE QUE LA REVELACIÓN Y LA PROMESA PERMANEZCAN PRESENTES EN ISRAEL» IBID. 311.