Hace muchos siglos una familia fue a pasar unos

días a una mansión muy lejana. En la familia

estaban el Sr. Manuel, la Sra. Lola, Carla, Iciar y

Bart. Pero resulta que en esa mansión también

había un fantasma que quería gastar bromas a

aquella familia.

El fantasma

Carla

IciarBart

Lola

Manuel

La primera broma con la que empezó el fantasma

fue a Manuel, al que le cambió el champú por

pegamento y entonces al echárselo en las manos

se le quedaron pegadas.

A continuación el fantasma puso tomate en la

bañera y Lola se asustó tanto que cayó al suelo y

se rompió su pantalón preferido al pensar que era

sangre.

El fantasma fue a asustar a los tres hijos. Cogió un

bote de agua y lo lanzó en la cama. Carla chilló

que se estaba ensuciando. Bart empezó a saltar e

Iciar al ver eso le chilló, por lo que Bart se puso a

llorar.

AAAAA

No

saltes!!

MUAAA

El fantasma al ver eso no podía parar de reír,

entonces Manuel al escucharlo le descubrió y

entre toda la familia idearon un plan.

Un

fantasma

Al día siguiente el fantasma iba a asustar a los

pequeños cuando le tiraron un bote de pintura por

encima y empezaron a reír todos.

Jajaja

Noooo

El fantasma al ver eso también empezó a reír y les

enseñó todos su trucos. A final se hicieron amigos y

al poco tiempo la familia tuvo que irse, pero le

prometieron al fantasma que irían a visitarlo.

Adiós