Arturo Uslar Pietri

Arturo Uslar Pietri

Las lanzas coloradas (fragmento)

" La sangre chorrea de las lanzas, corre por las astas, se coagula en el labrado de las manos, trepa por los brazos tensos, alcanza los cuerpos y baa la mitad del caballo. (...)Pero a la plaza no llegan sino potros desmontados, con la sangre fresca en la silla: la del amo y la del enemigo, mezcladas. Si Boves vence, la Repblica se pierde. La tierra es para que los hombres guerreen sobre ella. !Boves est herido! !Boves est herido! El caballo rueda en la cada, y el jinete queda tendido, en medio de la calle, inmvil, con la lanza apretada en el puo. El aire est lleno del grito de una corneta. "La Carvajala" lloraba. Las mujeres no saben sino llorar. Deba estar cargando delante de La Victoria. (...)La avalancha irrumpe por todos lados y cierra sobre el cuadrngulo de la plaza. Y en medio de la plaza, bajo las chispas amarillas de la bandera, el general Ribas disparaba sus rdenes, y vea la acometida que llegaba acelerando. Los nios, asombrados, obedecan, moviendo las armas con la torpeza de los brazos dbiles. (...)con trajes de seminaristas, reciban de un hombre maldiciente una sumaria explicacin del manejo de las armas. Suavemente dej resbalar la mano de la reja, y fue a desplomarse sobre la tierra hmeda, la carne pesada de muerte, y teidas de sangre en el ocaso, las lanzas coloradas triunfantes en La Victoria, salvaron ese da la Repblica. "