las llaves de la felicidad -...

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las llaves de la felicidad (Por CORINDA MEYER) Practicar el optimismo, hacer de él una norma habi- tual y constante y cultivar- la como se cultiva un depor- te, es una de las llaves maestras, uno de los factores más poderosos y eficaces para el logro de la felicidad. Lo mismo que en las acti- vidades físicas, los comien- zos serán difíciles . No se na- ce r sabiéndolo todo, ni pu- diéndolo todo . Pero la pa- ciencia y el empeño esforza- do, combinándose armónica- mente, permitirán alcanzar el resultado apetecido. Del mismo, , modo que el cuerpo, la forma física, es susceptible de fortalecerse y mejorarse . mediante una a- decuada gimnasia, así tam- bién el alma puede fortale- cerse y mejorarse por una a- decuada gimnasia espiritual. Y así como, en lo corpóreo, es posible que ese fortaleci- miento se opere sobre un de- terminado conjunto de órga- nos y músculos, considerados separadamente, así igual- mente, en lo espiritual, pue- den ser determinadas facul- tades, determinadas modali- dades del alma las que reci- ban la mejora. Es por de más notoria la fuerza del hábito, y con ra- zón se ha dicho de él que constituye una segunda na- turaleza, aun en aquellos ca- sas en que la naturaleza ori- ginaria le sea opuesta . Pero todo hábito nace de un pri- mer acto de voluntad cons- ciente, que hubo que repetir sucesivas veces hasta que fuera hábito . De ahí que uno de los caminos, de los mejores caminos, para lle- gar a la felicidad, sea el re- STA. CECILIA ALVARADO' Como si un ensueño aleteara en su mente y un anhelo de horizon- tes se anidara en sus ojos, Cecilia reclina su cabeza sobre las manos plegadas en un gesto de ternura infinita. Cecilia tiene el . encanto de las rubias que viera desfilar en sus sueños Marveret ; la sencillez de las níveas princesas que en un lienzo sublime, grabara Doleclll ; y toda la belleza de la amada de Lar- dine. Cecilia es una artista en el aca- démico s entido del concepto : su voz es pebetero de armonías ine- fables ; y un solo gesto suyo en ;a escena basta para llevar al públi- co, sin transgresiones que, alteren su esencia, el sentimiento que qui- so exteriorizar el autor. Cecilia, que también se dedica a las letras, nos ofrecerá, en el próxi- mo número, un artículo sobre la mujer panameña, que nos permiti- mos recomendar a nuestros lecto- res. emplazar los hábitos del es- píritu perjudiciales y pesi- mistas, por otros sanos, opti- mistas y beneficiosos . El pe- simista, pues, que no ha per- dido totalmente su voluntad --1 y ninguno, salvo los orgá- nicamente enfermos, se en- cuentra en ese caso puede llegar al optimismo por el hábito voluntario, y crearse una nueva manera de ser di- námica y fecunda. Cuando se ven los seres, las cosas, los sucesos, con mirada triste y opaca, todo en ellos parece malo, dolien- te, pequeño y agobiador. Hay que acostumbrarse, por reflexión voluntaria al prin- cipio, a contemplarlos con más serenidad e indulgencia, a descubrir en todo el ger- men creador que en todo al- berga. Será necesario, al comien- zo, lo repito, un gran esfuer- zo . Pero nada útil puede ha- cerse sin energía y sin cons- tancia . Preguntad a aquellos que hayan realizado una obra cualquiera, en cual- quier campo de actividades — industria, comercio, cien- cias, letras, artes — cómo pudieron llevarla 'a término, y la respuesta será unifor- me : el esfuerzo tenaz, per- sistente, fué el factor más importante de su triunfo. Y bien : acaso la mejor obra que pueda realizar el ser humano sea la de su pro- pio perfeccionamiento mo - ral . Pero para eso es indis- pensable acallar todas las tendencias negativas, desi- dia, celos, envidia, odio, du- da, angustia, es preciso a- rrancar del terreno las ma- las hierbas, substituyéndolas por plantas beneficiosas y bellas. La virtud del optimista consiste en trabajar constan- temente para el logro de ese fin positivo . El lleva en sí la confianza, la fe, la esperan- za, que es como decir la ju- ventud, el impulso, el entu- siasmo, o sea cuanto incita a (Pasa a la Pág . 31) 20

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las llaves de la felicidad(Por CORINDA MEYER)

Practicar el optimismo,hacer de él una norma habi-tual y constante y cultivar-la como se cultiva un depor-te, es una de las llavesmaestras, uno de los factores máspoderosos y eficaces para ellogro de la felicidad.

Lo mismo que en las acti-vidades físicas, los comien-zos serán difíciles . No se na-ce r sabiéndolo todo, ni pu-diéndolo todo. Pero la pa-ciencia y el empeño esforza-do, combinándose armónica-mente, permitirán alcanzarel resultado apetecido.

Del mismo,, modo que elcuerpo, la forma física, essusceptible de fortalecerse ymejorarse . mediante una a-decuada gimnasia, así tam-bién el alma puede fortale-cerse y mejorarse por una a-decuada gimnasia espiritual.Y así como, en lo corpóreo,es posible que ese fortaleci-miento se opere sobre un de-terminado conjunto de órga-nos y músculos, consideradosseparadamente, así igual-mente, en lo espiritual, pue-den ser determinadas facul-tades, determinadas modali-dades del alma las que reci-ban la mejora.

Es por de más notoria lafuerza del hábito, y con ra-zón se ha dicho de él queconstituye una segunda na-turaleza, aun en aquellos ca-sas en que la naturaleza ori-ginaria le sea opuesta . Perotodo hábito nace de un pri-mer acto de voluntad cons-ciente, que hubo que repetirsucesivas veces hasta quefuera hábito. De ahí queuno de los caminos, de losmejores caminos, para lle-gar a la felicidad, sea el re-

STA. CECILIA ALVARADO'

Como si un ensueño aleteara ensu mente y un anhelo de horizon-tes se anidara en sus ojos, Ceciliareclina su cabeza sobre las manosplegadas en un gesto de ternurainfinita.

Cecilia tiene el. encanto de lasrubias que viera desfilar en sussueños Marveret ; la sencillez delas níveas princesas que en unlienzo sublime, grabara Doleclll ; ytoda la belleza de la amada de Lar-dine.

Cecilia es una artista en el aca-démico sentido del concepto: suvoz es pebetero de armonías ine-fables ; y un solo gesto suyo en ;aescena basta para llevar al públi-co, sin transgresiones que, alterensu esencia, el sentimiento que qui-so exteriorizar el autor.

Cecilia, que también se dedica alas letras, nos ofrecerá, en el próxi-mo número, un artículo sobre lamujer panameña, que nos permiti-mos recomendar a nuestros lecto-res.

emplazar los hábitos del es-píritu perjudiciales y pesi-mistas, por otros sanos, opti-mistas y beneficiosos . El pe-simista, pues, que no ha per-dido totalmente su voluntad--1 y ninguno, salvo los orgá-nicamente enfermos, se en-cuentra en ese caso puedellegar al optimismo por el

hábito voluntario, y crearseuna nueva manera de ser di-námica y fecunda.

Cuando se ven los seres,las cosas, los sucesos, conmirada triste y opaca, todoen ellos parece malo, dolien-te, pequeño y agobiador.Hay que acostumbrarse, porreflexión voluntaria al prin-cipio, a contemplarlos conmás serenidad e indulgencia,a descubrir en todo el ger-men creador que en todo al-berga.

Será necesario, al comien-zo, lo repito, un gran esfuer-zo. Pero nada útil puede ha-cerse sin energía y sin cons-tancia. Preguntad a aquellosque hayan realizado unaobra cualquiera, en cual-quier campo de actividades— industria, comercio, cien-cias, letras, artes — cómopudieron llevarla 'a término,y la respuesta será unifor-me : el esfuerzo tenaz, per-sistente, fué el factor másimportante de su triunfo.

Y bien : acaso la mejorobra que pueda realizar elser humano sea la de su pro-pio perfeccionamiento mo -ral. Pero para eso es indis-pensable acallar todas lastendencias negativas, desi-dia, celos, envidia, odio, du-da, angustia, es preciso a-rrancar del terreno las ma-las hierbas, substituyéndolaspor plantas beneficiosas ybellas.

La virtud del optimistaconsiste en trabajar constan-temente para el logro de esefin positivo. El lleva en sí laconfianza, la fe, la esperan-za, que es como decir la ju-ventud, el impulso, el entu-siasmo, o sea cuanto incita a

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JOSE M. FAUNDEZ,

Sr. Etanislao SERRATO-. r .,

joven recientemente egresado de las aulas del Institutoracional, que comienza aofrecer sus primicias

literaias en el estadio de la prens-a nacional.

Faundez, que cultivavarios géneros literarios consingular maestría,comenzará a publicar en nuestrop róximo número, una seriee artículos y cuentos que, ano dudarlo, serán del agrad¬o de nuestros lectores.

quien durante la trayectoriade su carrera estudiantil, sedistinguió siempre por su se-riedad y acendrado amor alestudio.

Serrato también será cola-borador de esta revista.

O®O

otra vez la niñaOtra vez la niña

de blondos cabellossurge del pasadoen un verso viejo . : ..

La niñita aquellaque murió de tedio,me mira serena,me mira sonriendo.

Sus, ojos azules,llenos de misterio,los llevo en mi almay turban mi sueño.

Oh! pero la niñano murió hace tiempo?Es que resucitanacaso los muertos?

O tal vez su alma—alma de ángel bueno—vaga eternamente

por el vasto cielo?Y se me aparece

cuando no recuerdosu carita blanca,sus blondos cabellos.

Otra vez la niñade aquel verso viejo,me mira tan triste

que turba, mi sueño.Y una gran congoja

que yo no comprendo,se infiltra en mi espíritu,arropa mi cuerpo.

Y pregunto siempre:por quéyo recuerdoa la niña rubiacon tal sentimiento?

Pedro CALONGE .

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poema de angustia

Casi que ya no escucho el dolor de estar lejos,

su fijeza de hipnosis la estrangula la ausenciay como un faro insomne picoteando en la noche,

solo queda el r̀ecuerdo.

Oír el canto arrumbo del galopar del viento,.

ver de nuevo en sus ojos azular las estrellascrepitando en silencio como troncos helados,sentir como se alarga la ternura infinitaen la noche profunda.

de las mismas palabras,

Talvez haya otro al lado de tu tibieza blonda,

quizás vibre en sus manos el calor de otrasmanosque no fueron las mías,

y en mirar oscuro de sus ojos abismos

escuchen otros ojos los rumores ignotosde los cascos del viento.

Casi que ya no escucho el dolor de estar lejos,

solo que a veces pienso que no pueda ser mía,

y como un faro insomne picoteando en la noche,

solo quede el recuerdo

JOSE ADOLFO CAMPOS.

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ilusiones destrozadas(Dedicado al amigo Galileo Patiño

sinceramente)

Rosario Cuevas hacia días, que, buscaba empleo ; de

todos los almacenes, todas las oficinas habla recibidola misma respuesta : No hay trabajo. Intentó servir enuna casa de familia como cocinera, pero su inexperien-cia se interpuso ante el anhelo de hacer algo : no sabíacocinar. Y era porque Rosario no había

tenido tiempo para eso; demasiado la había entretenido el estu-dio . Ahora estaba graduada de Comercio, pero de na-da valía el grado.

Desesperada, aburrida de que el vecindario con susdádivas la mantuviera a ella, a su hermana, y a su ma-dre; se levantó aquel día, con más entusiasmo que nun-ca, y se hizo la promesa formal de no regresar a casasin la aentadora noticia de haber conseguido algúntrabajo. Caminó, como anteriormente, por todas partes : Ya no pedía trabajo, ahora suplicaba ; presentabael cuadro de su madre y su hermanita sin recursos ; delos meses de casa que debían ; y para mayor - tristezasuya, encontró en las caras de muchos jefes ignoran-tes, una mueca de burla e incredulidad . Eran las do-ce ; sentía hambre, quería volver a casa a devorar elbocado que seguramente le había guardado su madre;los vecinos eran tan buenos! Pero firme en su resolu-ción ; no quería llegar de nuevo, con la cabeza baja yel pecho oprimido, a escuchar la pregunta angustiosade su madre:

—Conseguiste algo,, . ; . .?. . . .y tenerle que contestar entre dientes y con los

ojos casi húmedos:—Nada madre.

En ese instante se detuvo, contempló una puerta dehierro ancha que precedía a una fastuosa escalera bienencerada ; miró un cartel que había entre las rejas Yleyó : "SE NECESITAN MUCHACHAS" ; - levantó en-tonces los ojos y miró un rótulo muy bien decorado quedecía : "CABARET EL TROPICO". Como un relámpa-go pasó por su mente la Idea de trabajar allí ; sintióalegría, ganas de llorar . Luego pensó: "Qué diría sumadre! ella, que nunca quiso dejarla Ir 'a cualquier cla-se de bailes ; ella, que se habla esforzado tanto pormantenerla en una posición respetable ; ella que casisiempre epilógaba sus consejos diciendo : "A la mujerle es muy difícil levantarse después que se ha dame-rifado ante la sociedad". Era mejor no entrar ; iría abuscar empleo en otra parte ; pero dónde . : ?"

Y el cuadro de siempre, la, pregunta de la , madre',la desconsoladora respuesta de la hija, se levantó lla-meante en el cerebro de Rosario devorando todo pre-juicio de honor y posición.

"No soy fea se dijo, y se bailar bien ; estoy segurade que me aceptarán " y entró.

Un sirviente de chaquetín blanco le Indicó la ofic-ina de la "señora", quien al ver a Rosario preguntó sin

esperar siquiera un saludo:—Viene Ud. a Trabajar?—Si : señora ..—Bueno, bueno, repuso la patrona entusiasmada,

esto si es una buena adquisición. Mire, lo único que lepido es complacer a los clientes, oyó? Ya sabe Ud . a

qué me refiero, Inquirió con una mirada maliciosa . Ro-

sario se ruborizó.—Vamos niña, que no es para tanto ; ya se acos-

tumbrará ; Ud . me parece una buena muchacha. Mire,

le voy a dar el cuarenta por ciento de lo que haga . Es

ta concesión no se la hago a nadie . Pero por ser Ud . se

entiende . . . . Así pues, venga esta noche a las ocho con

su mejor traje de baile. Hoy es primera y va a venir

mucha gente.. . :.Y la despidió cariñosamente dándole unas pal-

maditas en la espalda.

Esta mujer alta, gorda y deforme, con la cara a-

churrada, ,portadora de unos ojillos que miran malicio-samente, parecía una vieja y, cansada cabaretista que,experta en el negocio, explotaba ahora a las muchachas,como la habían explotado a ella tal vez, en sus buenostiempos.

Cuando Rosario Cuevas estuvo en la calle, unsin fin de pensamientos poblaron su mente : veía a su

madre llorando, se miraba ella dando . vueltas en el ca-baret, mientras los vecinos la criticaban y el público la

Insultaba,

indicándola

como

una mala mujer ; y por 01-

timo, su hermanita,

echándole la

culpa

de que las a-miguitas no quisieran' andar con ella porque era her-mana de una cabaretista.

Quiso regresar, decirle' a la "señora", que no iría,pero de , nuevo la frase terrible, la letanía del hogar

resonaba en sus oídos:—Conseguisto algo? . . ..

Llegó a la casa fingiendo estar muy contenta. Dijo a su madre que había Conseguido trabajo, que lepagarían buen sueldo, la única dificultad, que el tra-bajo era de noche.

— Dónde es ese trabajo? Preguntó recelosa la ma-dre .

— Es de cajera en el Hotel América . Ud. sabe queal!! trabajan día y noche.

—Bueno, entonces' tendré que lrte a buscar nó? aqué hora sales?

—No, no, repuso Rosario asustada, no vale la pe-na; no es bueno que Ud. pierda sueño. Además eldueño del café me ha dicho que tiene Un carro en dón-de acostumbra llevar a los empleados.

La madre no contestó ; tenía 'un vago presenti-miento . Un empleo de ., noche para su hija . Pero era ne-cesario, ya debían dos meses de casa . . ..

Llegó la noche Rosario Cuevas, nerviosa, searreglaba. Tomó el traje con que fuera al último bailey Be lo puso. Se miró "en el espejo, se arregló las man-gas, se pasó la centésima vez el cepillo por la cabeza,tomó un poco de agua colonia que tenía en un frasco ymojó un pañuelo, -se lo pasó por la nariz, y tomando lacartera se dispuso a salir.

-Rosario, dijo la madre en ese momento, con ese

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amor sin féPero; ya las lágrimas no ablan-

dan los corazones y por eso gimotoda ella en su existencia demu-jer . Con su bello vestido rosa, consus vivos ojos cerrados en largaspestañas y una pequeña nariz per-filada sobre el rictus pasional desus labios, se dibuja Macbeth enel salón ancho y difuso. Escomouna estatua dolorosa olvidada en

el fondo de aquel salón enorme . ..Macbeth, cabizbaja y mirando

sus manos enlazadas por los de-dos largos y finos, pinta toda suangustia. La hora del calor va su-biendo en el calorímetro de sucuerpo escultural y sus lágrimasse mezclan al sudor que suavizasu Piel.

Por qué sufre Macbeth? SóloMacbeth, en la soledad del salón,conoce sus penas. . . Y ya sus lá-grimas no pueden consolarla y elsueño la va amodorrando.

Y sueña con un hombre a . quienjamás ha visto, 'en quien nuncaha pensado y siente que lo ama,que es panameño, es su tipo more-no .

Pero: Macbeth, "en su sueño,ve . cómo los mira a todos en larealidad : El mira insistentementeal mar y ni siquiera se preocupade ella que se ha acercado a sulado . Macbeth adivina en él esa indiferencia idiosincrática del tipocomún panameño para las damasde la élite social . Adivina que amaa ese hombro incorpóreo que ellapresiente a la orilla del mar, quemira siempre a lo lejos y que, sinembargo, no sabe cuál es su per-fil, cómo son sus ojos, que simple-mente es moreno, es panameño.

Macbeth llora soñando, repasan-do las angustias de su existencia.

Sueña que lo abraza y lo besa;per o que él no le mira, , que nosabe cómo son sus ojos que si-guen fijos en el mar . . . Macbeth

sufre y quiere hablarle, pero algole ata al silencio y detiene sus im-pulsos pasionales.

Macbeth sueña que se aleja deél despechada .,Y llora en sucamino porque ella es rica, ella es blan-ca ; porque Macbeth es, la más chica de una familia aristócrata dola capital . Por eso sufre Macbeth,víctima de su. timidez y de suideal : su tipo es el moreno . de lospanameños.

Y, a pesar de su roce cultural ysus viajes . .- Ah!, si Macbeth hu-biera pensado que vendría de Eu-ropa ambiciosa do tener un pana-meño y nadie se iba a fijar en ellaporque . era demasiado linda, teníaun aire de orgullo y pertenecía ala élite social . .

-En su sueño ve a su madre que

despierta en su bóveda y la acari-cia hablándole : "Macbeth, pobreMacbeth!, la que dejé más peque-ña. Nadie podrá consolarte . No es .pecules con tu alma sobre tu ma- .trimonio . Nadie hará caso de Mac-beth. Ella se casará cuando su pa-pá necesite jugarla en la política-o en la lucha social . Nadie sabe,Macbeth, que eras la más preten-ciosa, a pesar de que te aconseja-ban que no fueras tan apegada atu amor propio. Ah!, Macbeth, laque no quería casarse con negro,

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hoy sufre arrepentida y llora por-que ninguno de ellos le ha mirado; hastiada está mi pobreMacbeth de los hombres que la galan-tearon en la sana Europa yhoyno so atreve a salir de su patriapor el terror a la moral exagera-da de sus compatriotas . Macbeth,recuerda, pues, al hombre queconfesaste tu dolor, él si te ama. Bús-calo antes de que, seas necesariacomo trueque político para salvarla vejez de papá."

Y Macbeth, al oir la voz ,de sumadre muerta, recuerda al jovendesconocido y pobre, amago delhermano, a quien ella confesó suspenas : "Aunque no me importaqué digan de mí . . ." SI, él podríaser . Seguro su madre sabía queella se había hecho amar de esehombre que le confesó a su vezque jamás se había atrevido a lla-gar a amar . ..

Y su sueño la lleva de nuevo aese pedazo de arenosa playadon-de aquel su tipo moreno miraba elmar. Sí, era él . Era aquel joven aquien. confidenció sus penas sinconocerle, sin oirle sunombre siquiera.

Y Macbeth vuelve a entregarsea su pasión. Pero, ahora el jovenla misa, con el temor en los ojos,con el amor en las mejillas . Mac-beth no sabe cómo hacer para es-cuchar de él esa frase sencilla:"Macbeth, de ojos lindos, la . . ."

No, Macbeth no oye eso porqueese hombre, enamorado ya, le miraInsistentemente y es a él a quiencorresponde hablar el 'primero . ..

Y Macbeth, al despertar, va sin-tiendo el esfumarse de su sueño,su intensa ilusión . ..

Guillermo E . Beleño C.

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nido adentro

Días bellos de mayo ; reanú-

danse las clases ; es de mañanay ya se sienten en las aulas gra-

duadas la agitación y el desase-siego precursores constantes de

las grandes empresas.Diríaseque el mismo ambiente está

impregnado de un vapor tenue , queconvida a la aventura, a la gloriao a la muerte.

La silueta de agentes dinámi-

cos y alegres van de aula en aula,en son de propaganda social.

Hay en sus rostros el optimis-mo y la despreocupación por losobstáculos que se les avecinan.Caminan apresurados tarareando

una canción de regocijo, por versus planes concluidos.

Al verlos, pareciere que fue-

ran impulsados por un senti-miento mayor que el de la obe-diencia. Es la encarnación del

espíritu del batallador que renaceen ellos.

Amor acendrado, afán impo-

luto es el que empuja el almade aquellos muchachos más alláde la realidad . ; es Minerva aque-

lla diosa simbólica de la inteli-gencia ; aquella diosa griega que

los fascina e impulsa a sus deseosfactibles.

En su seno, el rumor es cadavez mayor . La presencia de ladirectiva, de las comisiones ylas diferentes proposiciones

discutidas para llevar a cabo su fin,despierta intensamente el

entusiasmo de majestuosasatisfacción.

Los socios, absortos, observan

los preparativos delareapertura de la sociedad; los miembroseminentes presurosos, se en

minan a darle comienzo al or-

SR. RICHARD NEWMAN,

actual Vice-Rector del Insti-tuto Nacional, a cuyos es-

fuerzos se debe en gran par-te las mejoras obtenidas pornuestro plantel durante el

presente año escolar.

El Sr. Newman es de losviejos educadores que conmayor tesón y entusiasmohan laborado en pro de laeducación nacional.

den del día y cuando todo parece acabado resumba el eco delentusiasmo por la ostensibilidad

de su fin.

Y el presidente de recio portey de ademanes sencillos parece

ser el verdadero jefe de esta ex-pedición ; los socios lo miran conrespeto y cariño y en voz co -rriente en la gente social quenunca antes hombre alguno hu -

biese logrado amalgamar de ma-nera tan asombrosa a la firmezade carácter en nobleza y la rec-

titud de sus procederes ante estaentidad .

Guillermo A. Paez .

apreciaciones

La pluma del estudiante

debe estar animada por eldeseo de hacer obra nueva.

No se puede concebir un es-

tudiante que 'intente escri-

bir y que se ponga al servi-

cio de, las viejas normas y

que comulgue con las viejas

doctrinas. El estudiante de-

be tener un pensamiento jo-

ven. Y la juventud debe serrevolucionaria y transforma-

dora.Análisis y crítica deben

ser los senderos de! perio-

dista estudiante . Análisis

para someter al estudio con-cienzudo y minucioso las

nuevas doctrinas . Análisis

para combatir con el arma

del pensamiento sereno y lis

bre a las ideas oportunistas

que pretenden cobijarse ba-

jo el ala de las transforma-

ciones . Crítica para investi-

gar y combatir a las viejas

prácticas que quieran sobre-vivir a las viejas prácticas

que quieran sobrevivir ante

la inevitable evolución de

los conceptos e ideas. Críti-

ca para justipreciar la des-

trucción de los viejos mol-

des y su suplantación porlas prácticas nuevas, que o-

bedecen a una necesidad im-

periosa.

Análisis y crítica para po-

der indicar, autorizadamen-te, cual es el camino que se

debe escoger entre la amal-

gama de sendas que cruzanal mundo.

Análisis y crítica para po-

der demostrar claramente

que en él palpita la verda-

dera juventud que siente la

necesidad de transformación

y de lucha .

Mario Augusto .

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ecos de la vida ajenaSalía "Yaco" Yanis de un

"Beauty Parlor" cuando elbello "Helenito" Herrera,en traje de playa, se le acer-có y le dijo:

--Qué tal me sienta estevestido? Me parezco toda-vía a Glark Gable o hecam-biado en algo?

—A__ mi__ no__ no__me__ pre__ pre__ gunteseso__ que__ que.._ yo soymuy hombre! —gagueóYaco.

Helenito vió q' Yanis ce-rraba los puños y se dirigíaa él con ímpetus salvajes;entonces, con ademán de cir-co, profirió:

--Eres el vivo retrato deCalígula.

—Y qui__ quién__ era__e__ ese tipo?

—No sabes Pues, yotampoco sé!En eso acertó a pasar 'Bo-

ni' Beleño. Traía una guita-rra sin cuerdas y una bote-lla de "whisky" vacía.

Helenito lo llamó:—Oye, Boni, quién era

Calígula?—Calígula, desde el pun

to de vista de la ontogenesiabicéfala, no es la resultantede la hidrólisis permutadapor el biácido meteoróligi-co ; entiendes?

—Qué voy a entender!Eso es un seviche con picante, vinagre y alfajor.

"Yiní" Domínguez, quepor ahí andaba, al oír la pa-labra, " alfajor", creyó quehablaban de su famosa pa-rranda con Camacho y pro-testó:

—Yo no me "jumé" conalfajor! Eso es una calum-nia vil! Tienen que probar-me lo contrario!

"Villalobos también se

había aproximado al grupoen compañía de "Mack" Araúz).

—Naa decontrario—gruñó el Lobo.

—Tú que sabes de eso,homúnculo !

—Sale! Tú eres un perfec-to junglar.—Y qué significa junglar'

—Lo que significa___ yno me provoques porqueporque yo tengo la sangreardiente. ..

—Y qué es sangre ardiente?

—Sale!" Mack" Araúz hizo uso

de la palabra:—Yo no me meto en líos,

sae, pero es que el Lobo esmi amigo, sae, y el que semete con él, se mete conmi-go, sae!

Y gritó :—Mardoqueo! Mardo-

que!Entonces hizo su apari-

ción en el grupo una figuralarga, flaca y fea como unalfiler (El lector habrá adi-vinado: era el Fat Flaco

Alonso).—Quién dijo miedo aquí?YO y sólo YO —dijo con

voz de bajo YINI. y como no sé salir de

este bejucal en que me hemetido, termino aquí.

"Pollo " Garrido, conoci-do popularmente por "El mimado de Piñango", apenassupo que cierta jovencita,muy bonita por cierto, erasobrina de un Teniente, seacercó al Cabo Anguizola yle dijo:

—Oye, cabo, por vacilara una hembra, puede uno a-guantarse treinta días?

Y Anguizola, el "esplén-

dido", el "botarate, elhom-bre a quien le pesa el dine-ro, le respondió;

—Yo, con la ronda noquiero juegos!

Wilson una tarde le diópon desempolvar el rope-

ro de su "viejo" y nos trajoun gris que en sus moceda-des posiblemente fue negroy un sombrero que el Subte-niente X tuvo a bienpres-tarle.

Se formó el escándalo!"Chichito" Thomas creyó re-conocer en el sombrero, unoque perdió en el Relleno elaño pasado . "Morrongo" Cano se quedó viendo malicio-samente la corbata . "Phil-lips" Perdomo, el detective,quiso arrebatarle la camisa.Pero todo quedó en nada,porque Wilson se pagó laspaletas!!

¡Soberbio match de boxeo!Speedy Soto y Beny Mar-

doqueo. Siete pies de alturael primero, seis y medio elsegundo. 78 libras los dos.Referee : Ernest Bynoe.

Primer Round : Mardo-queo sale de su esquinay dispara un `jab' a la rodi-lla de Soto . Soto se va a lassogas y arremete furioso,pero Mardoqueo pasa dosgolpes, cayendo Soto a la lo-na. Mardoqueo le entra apuntapies en el suelo y Sotoreclama `foul', pero laComi-sión no hace caso . Suena lacampana con ligera ventajade Soto.

Segundo Round : Soto seagacha para pegarle en lacara a Mardoqueo, pero és-te esquiva una serie de gol-

(Pasa a la pág . 30)

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el instituto relajea" en versoNuevamente en las aulas resonaron los

gritosde Pollo Garrido, el Lobo y el Cabrito,conocido también por el Fat `Flaco' Alonsoquien por andar con faldas se está ponien-

do sonso,También han brinqueteado en la cuerda

mayor,el Subteniente X y el que ahora es directorde cierto REFLEJO que nada ha reflejadoy en el cual una rumba de ideas han bai-

lado.El hecho descollante del primer mes de

clase,fue una elección, señores, que en su prime-

ra fase,puso a un flaco muy "gordo" a pasar cien

trabajos,ya que el "presidencial" discurso, no es he-

cho para gagos.Orlandito Tejeira, que allá en Penonomé,aprendió a cantar tangos y a tratar de `ché'se sacó la GALLUZA con un tirabuzón,un frasco de manteca, también un tenedor,tres palillos de dientes, alguna gasolinaporque está con amores con una machi-

güilla.

El Marqués Adalberto y el Mack Araúz,

por poco se suicidan de un tiro de arcabuz,pues, se dieron al lujo de decirle requiebrosa una belleza helénica que los mandó al

infierno.

Campbell, manejadora de carros de uncuarto de Liceo,

hizo pasar un rato que no fue de recreoa su íntima amiga, Navarrito Margot,cuando en una subida, el carro Ford berreó.

Cuentan las malas lenguas que el cabo An-guizola,

en tres largos suspiros . a Barrelier, a solas,

le hizo una triste historia de un susto quepasó,

cuando una idea horrorosa al público o-freció.

"Suerte que tuve"—dice, pues, si aquelloszoquetes,

me aceptan mi dinero me veo en unperiquete .

El matón de los matones, que se llamaMardoqueo,

se metió en días pasados en un lío de loafeos,

cuando los dos Sotones le roncaron aCanyac

y el hermano de la yerba, el audaz e insig-ne mack,

la melena alborotada, balbuceando pala-brillas,

marchó al VI de Liceo a buscar a supandilla

diciéndole a Eliseo : Me pegan, moo, ay, mepegan,

sálvame, Mardoqueito, no tengo quién medefienda?

Caballito, Caballito, de Normal el favorito,dime por qué y cuándo, faroleando de

bonito,obtuviste como legado,de la Casa de Ladrillos,las camisas de seda, pantalones, cigarri-

llos?Dime, Caballito, hermoso, por quién guar-

das luto ahora,por qué se extinguió en tus ojos la mirada

soñadora?

Los vates de Panamá están que alistan susbates

para estropear a un aeda que es cantordel aguacate.

El bardo calidoniense—gloria de nuestroparnaso

hace unos versos que son unos rebencazos.Minerva, con Vega al frente,hizo hace poco una veladaque resultó sorprendentepor las rarezas allí efectuadas.Un poeta de vanguardia,ronco, afónico y despeinado,nos espetó seis poesíasque el público aplaudió por cortesía.

El diminuto y activo Vegase gastó un discurso rimbombantecomo esos que se pegancomo propaganda de las parlantes.El diccionario entero volcó

(Pasa la 30)

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de la escuela justo arosemenaLa Escuela Justo Arosemena es-

tá de plácemes . Ha comenzado suaño escolar con la práctica demuchas Iniciativas que, de lle-varlas a la realidad como se es-pera, darán al final el triunfo con-siguiente, para satisfacción delpersonal docente y del alumnadotodo. En efecto, varias ideas hansido lanzadas por los entusiastasmaestros y por contagio repercu-ten en el personal educando, quesabe de todo lo que beneficiarácon aquellas.

El calor con que todos los gra-dos de la Anexa han acogido elconcurso para elegir la Reina deSimpatías del plantel es de notar-se a simple vista : Los muchachosno hablan de otra cosa en los pa-sillos y durante los recreos . Cadagrado tiene o apoya a su candida-ta y cada grupo habla de la se-gura victoria . Los votos están alalcance de todos los bolsillos : 3votos por 1 centavos ; 10 por 2 ymedio c . ; 25 por un real. Hay gra-dos que ya han organizado sucam-paña y que discuten acerca de lamanera más práctica de allegarfondos para sacar avante a su candidata, mientras otros arreglan suplataforma política para los díasdel reinado a fin de adquirir másadeptos . Los maestros por su par-te vigilan el proceso electoral ylas reacciones que en los alumnosel debate ha provocado : tienen u-na oportunidad para corregir a losenvidiosos y para despertar entodos el espíritu de cooperación.

El fondo común lo guarda upamaestra, la Srta. Carmen Sotillo.Los escrutinios son públicos yquincenales, los votos se obtienenen la tesorería y deben ser deposi-tados en las urnas que para el e-fecto se han instalado : una en laplanta baja y otra en la alta. Elproducto monetario de este torneose dedicará a proporciona durantela venidera Navidad, un rato dego-ce espiritual a todos los niños deeste plantel educacional. - Durantelos días de pascua tendrá lugar a-demás la coronación de la Reinacon un programa especial en unode los teatros de la ciudad.

La sociedad de los sextos gra-dos„ formada por 30 alumnos es-cogidos de los 3 sextos grados quehay en la Escuela Justo Arosemena-

, tiene este año en mientes unpaseo al simpático pueblo de An-tón. Allá será atendido el grupopor los niños que componen elsexto grado de la EscuelaRepú-blica Dominicana. Visitará lasobras sanitarias que se efectúanen la actualidad en esa población(alcantarillado, desaguas, crema-torio, etc.) y obsequiará con unavelada a la sociedad de los sextosgrados llevará su team de basketpara jugar con los antoneros en elmagnifico Gimnasio Moderno queellos acaban de construir.

Las clases de trabajos manua-les tienen muy interesados a losalumnos de sexto grado este año.Se ha comenzado con trabajos de

José Martí, el apóstol, el héroede la independencia cubana, nacióen la Habana. Era de una inteli-gencia poco común, literato y poe-ta. Como ya sabemos, Carlos Ma-nuel de Céspedes había muerto, pero no su idea de liberaración. Jo-sé Martí, aún joven de 16 años, yaera uno de los hombres más temi-dos por los españoles . Por eso, losespañoles siguieronpersiguiéndole como habían hecho con Céspe-des, y entonces tuvo que salir deCuba.

Primero se dirigió a Méjico, pa-ra pasar luego a Guatemala, dondeiba exhortando a todos loa cuba-nos allí residentes, a la liberaciónde su patria. Luego regresó a Cu-ba, bajo un pacto de alianza.

Pero allí, Martí siguió su obra ylos españoles lo tomaron prisio-nero . Pero no contentos con te-nerlo en la prisión de Cuba, ,lomandaron a España.

Con todo, Martí logró fugarse yhuyó a Estados Unidos, Aquí, lomismo que en Guatemala, fué ex-hortando a todos los cubanos resi-dentes en los pueblos, ciudades ypaises donde pudiera ir . Fundó u-na sociedad en Nueva York, a lacual se unieron muchos cubanos,pagando una cuota mensual. Así,Martí logró reunir un gran capitaly dispuso una expedición.

Pero el Gobierno' Americano, encombinación con el Gobierno Es-

cerámica, Ya se ha terminado unacolección hermosísima de vasos yjarros pintados, que -dan la impre-sión de que son realmente indíge-nas . Se practica actualmente la a-plicación de' motivos indigensa (panameños) a platos, potes,, tapetes,etc. Algunos - otros grados del plantel también desarrollan trabajossimilares . El V9 por ejemplo ejecu-ta trabajos de esta misma clase,aplicando motivos griegos. Se tie-ne en mientes realizar una expo-sición a fin de año, con trabajosejecutados por los niños de la e

scuela y sin la ayuda extraña : sólohabrá intervenido en ellos la di-rección del maestro.

OBSERVADOR.

pañol, no dejó prosperar esta ex-pedición. Como ya se habían he-cho todos los gastos, la sociedadquedó en la bancarrota. Pero en-tonces Martí - se dirigió a Cuba,con el General Máximo Gómez, ypoco después lo nombraronGeneral en Jefe de las fuerzas revolu-cionarias.

Cuando el General Martí, pensa-ba en su regreso a Estados Unidosen 1895, se supo que los españo-les iban a atacarlos. Entonces, Jo-sé Martí( por su honor y por sureciente nombramiento, se puso ala cabeza del ejército y presentóbatalla a los españoles, cerca delpueblo de Dos Ríos.

Pero una bala traidora, hizo blan-co en el cuerpo de Martí y le de-jó sin vida, en el campo_ de bata-lla, donde murió por salvar a supatria . Los españoles, conociendolas grandes virtudes de tan gran-de hombre, le hicieren respetuososfunerales . Esta, fué una buena ac-ción de los españoles . Como ya hedicho, Martí no sólo era muy inte-ligente, si no un gran poeta y lite-rato. Sus poesías son hermosísi-mas. Sus cartas están admirable-mente escritas y sus discursos dangusto oírlos . La vida de José Mar-tí, ha sido escrita en la historiacubana, con páginas de oro ."

CLARENCE O. BOYD.

Josémartí

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ILUSIONES

(Viene de la Página 23)traje parece que fueras a un baile.

—Es que, madre, ese es un lugar muy frecuentado,y como yo estoy allí a la vista del público, tengo queestar presentable.

—Hija, siguió la madre un poco asustada, no se-rá que

Rosario se estremeció, y apresurándose a terminarcon los presentimientos de la madre interrumpió:

—Madre! cómo se imagina Ud. eso!. . . .y besándola, partió rápidamente para ocultar

los ojos que llevaza velados por el llanto.

Las ocho en punto, Rosario Cuevas asciendecon lentitud, majestuosamente, con su tragedia Inte-rior que la acuchilla, por la escalera del cabaret "ElTrópico" . Va triste, meditabunda, al sacrificio de suhonor ; a la destrucción de su recatado ayer, de las ilu-siones que hasta entonces formaron su futuros .— Y ensu mente va agigantándose montruosamente la últimaescena familiar : Mira a su hermanita dormida ; en elsuelo ; a su madre presintiendo su desgracia . Luegopiensa en el mañana que antes vivificara su mente : unhogar confortable, sin privaciones, ni miserias, ni an-gustias.

Ha llegado al salón ; la señora sale a recibirla:—Ud. será atracción esta noche ; la presentaré co-

mo una artista extranjera, diré que es mejicana . . . . yla contempla de arriba abajo . Pero si que está elegan-te, es la mejor adquisición que he hecho desde que mededico a esto .

Pero Rosario no oye Mira el salón semioscuro.dentro de una-penumbra voluptuosa . En el fondo unasmujeres pintarrajeadas, que parecen payaso, la miran a-tentamente. Sobre un entarimado, cinco músicos, todosmorenos, atinan sus instrumentos.

. . . .Y Rosario contempla el patíbulo y al verdugo

que zalamero continúa hablándole . Ya le parece que laorquesta va a iniciar una marcha fúnebre anunciandosu entierro.

En eso la "señora" la toma de la mano, la llevadonde las otras mujeres y les dice:

—Aquí les presento una nueva compañera, trabaja-rá con nosotras desde hoy.

Rosario les sonríe, mientras, en su -cerebro quedavibrando la frase de la patrona : "Una nueva com-pañera". Quién lo hubiera creído, Rosario Cuevas caba-retista . . ..

Ahora la patrona le dice al oído que pida wisky ochampán, porque allí ganará más. En ese momentoini-cia la orquesta uno de los últimos sones, un oficial dela armada Norteamericana le pide una pieza, ella ac-cede ; pero este hombre no sabe bailar ; cree que todoes fox-trot . Rosario suda, sufre callada la "señora"lo ha dicho, hay que complacer al cliente.

Tocan luego un fox-trot y la pareja se luce ; losdemás dejan de bailar para admirarlos y los aplauden.El oficial ha pedido champán . Comienzan a tomar . .-.

Y allá en el fondo la "señora" sonríe : no hay du-da, es la mejor adquisición.

Ya 'han tomado bastante . . . . ambos están borra-

i1Escuela Panamá

" El valor cultural y comercial de cualquierapersona de habla castellana se duplica con

el conocimiento de la lengua inglesa "

Panama School29

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ILUSIONES(Viene de la 23)

ochos. El oficial más, porque ha tomado casi el doble. Lehabla en un castellano inteligible, o en inglés, sosa queella tampoco entiende. El comienza a besarla, y ella sesiente sin fuerzas para rechazarlo.

Termina la noche, y mientras Rosario zigzaguenteva a cobrar su comisión que asciende a tres balboascincuenta, el oficial borracho se ha quedado dormidosobre la mesa. Rosario se va a la casa en donde su madre vela.

Al llegar, ésta le pregunta:—Cómo te ha ido Rosario, estás muy cansada?—Muy bien madre, me iba ganado tres balboas de

propina, y un peso que me pagan por la noche que hetrabajado . Y se agarra al borde de la mesa para nocaer

La madre ha sorprendido el movimiento ; 'siente el.olor a aguardiente que su hija 'despide, y lo adivina to-

do. Se sienta al borde de la cama, mientras la hija congran dificultad comienza a desvestirse . Unsinnúmerode ideas se agolpan en su mente . Se levanta como so-námbula, con intención de pegarle a Rosario, pero laesquelética figura de la hijita menor que pregona ham-bre, y cl edicto que yace sobre la mesa, la hacen vol-ver en sí . Pone alto un momento a sus intenciones,mientras modula entre diente:

—Hay que pagar la casa.Y como tratando de encontrar en su hija una nueva

mentira que le de consuelo, le grita en un tono ronco,velado por la emoción y por el llanto:

—ROSARIO!' dónde trabajas?'Pero Rosario calla, no tiene aliento suficiente pa-

ra responder y se desploma en la cama : Se ha quedadodormida.

José Agustín Cajar ESCALA.Panamá, Mazo de 19936.

EL INSTITUTO RELAJEA EN VERSO(Viene de la 27)

en sus pequeñas cuartillas,y si alguna palabra se le escapóen un discurso próximo la engrillaHabló de la luna y las estrellas,de la paz y de la guerra,del chicheme, Minerva y la querellay hasta del perro y la perra.Un poeta del Artes recitóuna poesía vanguardista.donde sólo se oyó"casita blanca" y "bongó",porque el genialfuturistaal subir a la tribuna enronqueció . . ..

Elguaro BARATO.

LA PLEGARIA DEL CABALLO(Viene de la 10)

panto y nerviosidad.

Por favor, sálvame de asolearme exce -

sivamente, y' cuando haga frío y yo estécansado, por favor, cúbreme con unamanta.

Y al fin, mi buen amo, cuando la vejezme vuelva inútil, por favor, no me dejes:morir de miseria y dolor bajo un látigocruel. En vez de eso, toma mi vida sin queyo sufra, y tú serás recompensado.

(Viene de la Página 26)

pes y le da la espalda al contendor, mientras grita : Por

la espalda no!Suena la campana . Round

empatado.Tercer Round : Soto está

cansado. Mardoqueo estásangrando por el codo, locual le impide ver bien . Pi-de agua. Van al centro delring y tiene lugar un cambiode golpes, en el cual Sotosaca ventaja.

La barra se impacienta ; yse oye la voz de "Mack"Araúz: acábalo, chencho;componlo ya . Pero Manto-

LA LAGUNA DE MI PUEBLO(Viene de la Página 16)

como silbido de una ninfa enamo-rada.

Las luces de sus pupilas son ro .sadas y de su color encarnado, sedesprenden palomas de plumas do-

queto ha caído por la cuen-ta fatal.

La Comisión le da la pe-lea a Mardoqueo.

radas que se pierden en el firma.mento.

La naturaleza parece extasiada,los árboles gigantescos que en lafalda viven inclinan sus ramas ysus hojas.

Todos los animales se congregara venerar al astro rey,ofreciéndo-le como tributo la luz de sus pu-pilas y cuando la luna empieza rascender, cansadas de cantar caercomo perlas en lo profundo las alsirenas.

La luna se alza y en elespaciocomprendido entre la laguna y esatélite se levanta una sirena diescama dorada, que enciende un.antorcha, perdiéndose entre laaguas luminosas hasta quecansadada de nadar la deja caer.

Esa luz que se mantiene en la,profundidad es como la estrella pilar que le indica al visitantequees una laguna sagrada.

Enrique Vega M.

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LAS LLAVES DE LA(Viene de la Página 20)

apasionarse por lo bello, loalma no vacile entre la du-justo, lo grande.

Hay que procurar que elda, la tristeza y el temor,que son los enemigos del re-poso y el aplomo espiritual.El temor paraliza los esfuer-zos . La tristeza es deprimen-te y estéril. Son sentimientosque hay que eliminar. La lu-cha es cotidiana y constante.Al alborear de cada nuevodía hay que levantarse conuna renovada reserva de va-lentía, júbilo y buen humor.Debe reanudarse con entu-siasmo el incesante combate,porque el solo esfuerzo esde por sí un estímulo, y nosaguarda la esperanza deltriunfo . Al "morir babemos"de los amargados, debe opo-nerse el "vivir debemos" delos fuertes. A los que pien-san que lo mejor es "dejarsevivir", que es como dejarsemorir, debe oponerse el con-cepto de los que consideranque lo mejor es vivir esfor-zándose, porque es el esfuer-zo lo que dignifica y eleva lavida.

Y esto que digo en gene-ral, es particularmente apli-cable a la mujer que llevadentro de su misma natura-leza un fondo de optimismoinvaluable . La mujer se dis-trae más fácilmente que elhombre ; ve motivos de ale-gría donde éste no los sospe-cha; se resigna con mayor

la guerra europeaEs valentía la declaración de

guerra de un país? ¡No!, porquela guerra no es un desafío en queel honor de los hombres está enpeligro . La guerra es una carnice-ría humana, en que los hombresse vuelven fieras, bestias enfure-cidas, que sólo advierten el peligrocuando éste es inminente. La sedde venganza convierte los paísesen felinos hambrientos de miseriaque se valen de la debilidad de launión y la paz para atacar a sudesprevenida víctima.

La muerte de un solo hombre,motivó el descalabro del mundo,en aquella imborrable fecha quecon letras de sangre debe encon-trarse grabada en nuestra men-te . . . ¡28 de Julio de 1914! día delasesinato del príncipe FranciscoFernando de Austria, y fecha quedió comienzo a una cruenta y vil

Este no es "el hombre que volviópor su cabeza", sino el popularísimo"Chichí" Grosso.

Grosso no se atrevió a bañarse enun paseo a Chilibre porque dizque te-nía un "nacío" en la espalda.

(Foto de a medio .)

rapidez a la adversidad ytiene una fuerza de voluntadsuperior al hombre.

guerra en la que perecieron millo-nes de víctimas bajo el fuego des-tructor de los cañones, de las dia-bólicas granadas y de las asolado-ras metrallas, que, ora de un mo-do, or ade otro, vomitaban terri-bles proyectiles sobre las poblacio-nes indefensas, acabando con ino-centes niños, mujeres y ancianos.Qué mala inteligencia llevará a lospaíses a este trágico fin? Por qué

el espír itu bélico vive aún en loscorazones de las viejas potencias?Pensará alguna de ellas en los mi-les de soldados que murieron enlas batallas del Marne, Charleroi,

en Alzada, en Lorena y en tantasotras, que, como estas dejaron se-pultadas inmensidad de víctimas?

Por qué pagar con nuestras vi-das, los furores de los jefes de es-tado? Y sin embargo, los hombresse matan sin saber que están aca-bando con sus propias madres, consus esposas, con sus hijos,quemueren perdidos en medio de latristeza, la desolación y la misa-Ha.

;Pensar que revivirá la vida delas trincheras, llena de lúgubresescenas ; pensar que de nuevo vo-larán sobre las ciudades y los Pue-.blos escuadrones de aviones descargando sus enormes bombas, enmedio del pánico de sus morado-res ; pensar que otros jefes y ge-nerales desarrollan macabros pla-nes que llevarán a la tumba milla-res de víctimas, tal como lo hicie-ron Joffre, Foch, Hindemburg, Pe-tain, Ludendgrtf, Haig y tantosotros!

;Luchemos por la paz!Evitemos las satánicas iras de la gue-rra ; para que en vez de balas quecruzan el espacio, dejando oiraquel silbido horripilante, semejan-te al de una alimaña, que lleva ensus garras el veneno terrible dela muerte, se oiga un cántico dul-ce de paz, bienestar y prosperidad.

Arcesio Guardia.

CUPONVoto por la Srta .

de la Escuela

para que su retrato sirva de portada en el próximonúmero de "PRELUDIOS" .

al

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LA LITERATURA Y LACULTURA:

(Viene de la Página 17)

brea, títulos de obras, fechas, bio-grafías, comentarios parciales ; ellono es historia . Para que esta pa-labra tenga sentido concreto, re-quiere ciertas coordenadas, ciertasrelaciones, ciertas líneas paralelasy concéntricas ; una geometría In-telectual, vital . Marcos nuestros,acaso, no ; pero, sí, realidad nues-tra. El gran error ha sido fre-cuentemente, Ingenua manera dedar paso a un contrabando absur-do. Los saxoamericanos nos danya, a pesar de haberse incorpora-do después que nosotros a la lite-ratura, nos dan ya un ejemplo desistematización y ciencia. La dis-ciplina con que enfocan el fenó-meno cultural, relacionándolo contodos los otros, ea clara . Sin ex-clusivamente el método mesológicode Taine, ni exclusivamente el ma-terialista de ['lejano), y Marx, niel meramente intelectual de Bru-netiére, ni el personalista deCarlyle y Emerson ; los críticossaxoamericanos realizan obra decooperación—primer dato nuevo—y enfocan el problema desde todoslos ángulos. Como ejemplo podríacitar la "History of AmericanLiteratura" (4 volúmenes), edi-tada por Putnam's Sons, y de laque son autores, entre otros, Wil-liam Trent, John Erakine, MissPutnam, etc.

Con la América Hispana ocurrealgo distinto . Y hasta críticos ex-tranjeros, como Marx Daireaux,francés, en su "Panorama de laLiteratura Hispanoamericana" y elamericano Coester en su "Histo-ria de la Literatura Hispanoame-ricana", revelan ausencia de sen-tido globalista, ayunos de integra-lismo. Hacen desfilar, muchas,muchísimas individualidades, den-tro de un tabla de valores que tienepor común denominador la amis-tad personal o la información in-completa ; y, claro, el "panorama"huye despavorido.

Por primera vez, dentro de unsentido amplio—y conste que recuerdo a Vicente G . Quesada, eru-ditesco también—han tratado deinterpretar nuestra cultura dosautores de hoy : •Ricardo Rojas yJosé Vasconcelos . "Eurindia" e"Indología" constituyen, sin duda

alguna, un Intento de explicaciónsintética del fenómeno americano.Los dos pretenden rastrear losfundamentos de nuestra persona-lidad continental . Según Rojas,América es la coalición de dos ele-mentos : europeo indígena . Seexplica la prescindencia del negroen un argentino, a pesar de queel tango evoca al Africa, pero elloimplica condenar al olvido a todaslas Antillas' y aun más . Luegoeste concepto étnico no comprendeel fenómeno africano que entrañaen parte la influencia andaluza.Tampoco da beligerancia a otrasmodificaciones menos sustantivas,pero evidentes. Sin llegar a lasbárbaras denominaciones

predilectas de Francisco García Calderón—como llamar, "Indoafrosinoibero"al Perú—la de Rojas es demasiadosimple . Vasconcelos mira el pro-blema desde un ángulo distinto.El mestizo de Rojas se convierteen el autóctono de Vasconcelos.Pero, "India" no tiene para ésteun puro significado racial . Asícomo para la gente nueva de Amé-rica quiere decir "explotado", paraVasconcelos, indio es el criolloauténtico, por ejemplo, el IncaGarcilaso . Se trata de un concep-to histórico, no migratorio, perosi, social . Y bien : Rojas y Vas-cancelas intentan ya una metafí-sica y una estética de lo ameri .cano ; el segundo, coincidiendo conapreciaciones del primero, afirma,por ejemplo, que una de las ca-racterísticas del Indígena azteca—y hay que prolongarlo al mayay al quechua—es el decorativismo.Entramos con esa aseveración enel terreno de las explicaciones va-lederas.

Los indígenas, como todo puebloprimitivo de cierto refinamiento,fueron eminentemente decorativos.Los colonos americanos, también.Pero, el indígena tuvo un decora-tivismo "plástico", en tanto que elcolono lo tuvo "conceptual" . Elindígena juega con los colores, lasformas, los matices, en su inmen .sa alfarería y cerámica ; el colonojuega con los vocablos, los cancela .tos, retorciéndolos, haciendo deellos jeroglíficos, charadas, acrós-ticos, logogrifos . La decoraciónindígena engendra un arte ; la co-lonial un sofisma. Porque es de-coración de verdad, o rebozo deella, la supuesta veraz premisa, yla escolástica significa lujo revo-ques manteles . Considerar la for--

ma de los objetos—morfología, color --o sólo la forma del pensa-miento, son dos maneras de serformalista, amanerado ; mas en laprimera se produce un arte autén-tico, mientras que, en la segunda,una verdad adulterada.

Posteriormente, el romanticismoamericano no avanzó ni varió mu-cho sobre el decorativismo indí-gena y colonial . A la fórmula"plástica" del aborigen—única bienadecuada, . puesto que plástica yforma se convalidan—sucedió lafórmula "retórica" del coloniaje,fórmula "heróica" o heroizante delos románticos. Engolaron la voz,combaron el pecho, trazaron ma-jestuoso gesto con el brazo en alto,y, dentro de esta mímica de actor,el romántico fingió avideces ina-cabables . Bolívar impreca a lasfuerzas ocultas, con mesiánico ges-to teatral, en su "Delirio delChimborazo", y Olmedo se encres-pa o hincha para cantar "A laVictoria de Junín", de donde seinicia el romanticismo.

Con todo, antes de proseguir, esindispensable fijar ciertos alcan-ces. El "charadismo" colonial sue-le ser motejado, irreverentemente,de "gongorismo" . Nunca hubo ma-yor traición a don Luis que lacometida por sus pretensos discí-pulos hispanoamericanos. Del Gón-gora alquitarado y sutilísimo que-dó, para tales imitadores, sólo lomás externo de su indumento.Tomaron excrecencia por esencia,y adjetivo por sustantivo : hipér-

baton mental, carente de la ele-gancia y la intención del hipérba-ton idiomático . En- todo caso, unvolantín, fórmula de la cabriola.Cabriola, o sea retozo natural ; vo-latín, retozo circense adiestrado.América practicó el decorativismo.La fórmula se irguió, señora : ba-tuta de una sinfonía tropical.

VICTIMAS DEL HASTIO

(Viene de la Página 11)

que una voz temblorosa porla emoción, le llamaba:

—¡Ernesto! ¡Ernesto!Era Aida.

La casualidad los p nulafrente a frente.

—Cuándo llegaste, Ernes-to7 ¡No sabes egántó te he

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equivale a cargar de inmediatouna nueva cantidad de energíaen la sangre. Las poderosasglándulas suprarrenales envíanun estímulo a las venas con susecresión de adrenalina.

El azúcar, combustible de lamáquina humana, se encuentraen la sangre en gran cantidaddespués de un ataque de risa.Un bálsamo .

La risa es síntoma más evi-dente de juventud . La edadmás alegre es aquella en que seposee más coraje y más inven-tiva, la mayor felicidad y bene-volencia.

Mientras los hombres ríen seconservan jóvenes.

Luego, es uno de los mejorestónicos, un elixir de la vida.'los hombres que ríen nunca to-'arán en serio los males imagi-idos sabiendo que al reír halla-ra pronto un restablecimientops±nico.

Vo hay nada más alentadoren lastro siglo, no obstante to-da latinidad y todas las preten-sionei El " humour" es nues-tra ca :terística peculiar . Nin-guna o época se ha deleitadotanto &l a comicidad inofensivacomo la ,estra.

LOS OJr)S AZULES QUESE QUI RON SIN LUZ

(Viene la Página 8)

vista, abue . Pero no sepreocupe : . operación essencillísima e r maneceréen el Hospit muy pocosdías y regres de nuevo asu lado. No 11 . . . volverépronto . . . .

X:

Le cubrieron ojos convendas y en lanilla delHospital la lleva a su ca-

ma.Y allí estuvo m .,s días,

resignada a la aícia deluz y recorriendo paisa-jes internos.

Mas una noche el vientole trajo a sus oídos el ecode una conversación:

—Quedará ciega : todoslos esfuerzos por evitarlohan sido vanos.

Era la fría voz del ciruja-no que, rota toda posibilidadde éxito, profería el nunciofatal.

Pero los dolores que se a-gudizan, tienen el raro po-

der de hacer estoicas las al-mas.

Y Carmencita no dijo na-da. Guardó silencio y se pu-so a evocar su casita lejanay su abuelita enferma . ..

Dejó en suspenso un gri-to y llamó a la efermera:

—Señorita, ¿quiere hacer-me un favor? . . . Bien, déleun consuelo a mi abuelitacuando pregunte por mí yprocure que no sepa nuncaque quedé ciega. Cuandosalga de aquí, envíeme alAsilo . Se lo agredeceré infi-nitamente, señorita.

XX

El crepúsculo en marchava plasmando imprecisas cla-ridades . Comienzan a rasgarel silencio los arpegios noc-turnales.

La abuelita ha dejado sulecho de enferma y se hasentado a la puerta de sucasa. Una vecina pasa a sulado y le pregunta:

—¿Cómo sigue Carmenci-ta?

Y la anciana respondesonriente:

—Me han dicho que siguemejor . . .

Eduardo Ritter Aislán.

Mayo de 1936 .

ANARQUISMO

(Viene de la Página 8)

pesimistas y se adhieren a un sis-

tema en que su pesimismo puedeser saciado . Reclaman la dictadura

del proletariado, la violencia en su

forma más extrema, porque nocreen en que el hombre sea capaz

de amor, de generosidad, de bon-dad, sino que consideran que sólo

por la fuerza ha de concurrir en

la armonía de la convivencia.Lenín escribía:

"El desarrollo hacia el comunis-

mo se efectúa a través de la dic-

tadura del proletariado y no puedeefectuarse de otro modo, pues no

hay otro medio de quebrantar laresistencia de los explotadores."

(El Estado y la Revolución),

No es una opinión aislado deLenín . Ya Engels, desde antes, la

había acuñado:

el proletariado tiene necesi-

dad del Estado no en interés de la

libertad, sino en el del aplasta-miento de sus enemigos .' (Citado

por Lenín en El Estado y la Re-volución).

Stalin, último y más grande

abanderado de la ortodoxia, segúnlos comunistas, se suma a Engels

y a Lenín.

"El Estado es una máquina en

las manos de la clase dominante

para reprimir la resistencia de sus

adversarios de clase ." (Los Fun-

aamentos del Leninismo).

La oposición entre anarquismoy comunismo se resuelve, en el

fondo, en una oposición entre op-

timismo y pesimismo.

Anarquismo y comunismo están

destinados al fracaso . Pueden, enun ámbito de desesperación y de

angustia, lograr triunfos pasajeros,

efímeros ; mas como nacen del pre-

juicio, de la mentira, y prejuicio

y mentira son su cárcel ; como ig-

noran al hombre verdadero y fun-

dan sus afirmaciones en una ima-gen artificial que no es el hombre,

han de tropezar tarde o tempranocon las paredes de la cárcel en que

ellos mismos se han encerrado.

Ese es su sino, como el signo

del hombre es la bondad y la mal-

dad, la múltiple y diferente abun-

danpia de la vida,

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preludios(Revista mensual publicada por los alumnos

del Instituto Nacional)

DIRECTORES

Eduardo Ritter A. y Ezequiel Valderrama F.

REDACTORES - . .-

Arcenio Guardia y Redro Calonge

ADMINISTRADORES

Ana L . Alverola

José B. Herrera

Carlos A. Rodríguez R. José I . Iglesias F.

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1. En este Concurso podrán tomar parte todas las alumnas de

las Escuelas Secundarias de la República.

2. El primer premio será adjudicado a le Señorita que tenga ma

yor cantidad de votos y el segundo a la que le siga en orden.

3. El retrato de la vencedora, será publicado en nuestra próxima

edición.

4. Este concurso se cerrará el 3 de Agosto.

NO OLVIDE QUE PARA BUENA FOTOGRAFIA,NO HAY COMO

FOTO WOLF4'Avenida Central No. 81-A

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