tor, no se ande por las ramas, díga-me lo que tenga que decirme quea mí esto no me asusta. Ni aunqueme vaya a morir. Eso será solo ungolpecito. El palo gordo ya me lodio la vida hace años». Antonia deGregorio, su señora, cabecea a sulado. En la tele suena bajito ‘Sabery ganar’. La vida intenta seguir surutina, con sus tesoros mundanosdel día a día, como si nada pasara.«Pero, leche, ahora que empezába-mos a remontar...», lamenta Anto-nia.

Dicen que el dolor, si note tumba, te hace más fuer-

EL ALCOHOLMÁS LETAL A Jacinto Espinosa

le acaban de diag-nosticar un cán-cer de pulmón. «Ysin muchas espe-ranzas... Mañana

me van a tener cinco horas ‘enchu-faito’ a la quimioterapia». El veci-no de Torrefiel lo cuenta con unasonrisa burlona, con una ronqueraque le sale de lo más profundo desu cuerpo. También de lo más den-tro de su alma de padre. Horas an-tes, su médico trataba de endulzar-le la verdad. Jacinto Espinosa se lopuso muy fácil. «Le he dicho: ‘Doc- >

46 valencianos mueren al año enchoques con conductores ebriosy sólo el 1% acaban en prisión

Flores en recuerdo a Ana Isabel y Francisco, fallecidos al ser arrollados por un conductor ebrio frente al Hospital Clínico de Valencia. :: JESÚS SIGNES

VALENCIALOS VECINOSPIDEN UNJARDÍN ENEL SOLARQUE DEBESERVIR PARAAMPLIAREL IVAMP20

IMPAGOSCENTROS DEEDUCACIÓNESPECIALADEUDANFACTURASDE COMEDORDESDE 2011P6V

VALENCIA

ARTUROCHECA

� acheca@lasprovincias.es

TEULADADETIENEN ALPROFESOR DEUN COLEGIOACUSADODE ABUSARDE VARIOSMENORESP10

3Domingo 03.02.13LAS PROVINCIAS

En prisión por delitoscontra la seguridad vialTotal España, año 2011

Fuente:FiscalíaSeguridadVial :: GRÁFICO LAS PROVINCIAS

TOTAL

771

Conducir bajolos efectosdel alcohol

202

Otros311

Conducirsin carné

258

del total26,2%

del total33,4%

Los familiares de las víctimascoinciden en sus peticiones: más

pena y cumplimiento íntegrote. Y a Jacinto Espinosa,electricista jubilado, el 17

de marzo de 2001 lo convirtió enun superhombre. Ese día, «un mal-nacido» (Jacinto rechina los dien-tes con la palabra) se llevó por de-lante a su Francisco, su hijo, en laavenida Peset Aleixandre de Valen-cia. Francisco Espinosa volvía de to-mar un chocolate con unos amigos.Valencia ardía en Fallas. Franciscoconducía su Renault 19 y pisó el ace-lerador con su semáforo en verde.Un joven de 35 años al volante deun Opel Vectra se pasó el suyo enrojo. Era el cuarto que se saltaba. Yvolaba a más de 120 kilómetros porhora. Francisco murió casi en elacto.

El responsable del accidente mor-tal cayó redondo al salir de su co-che. 1,8 miligramos de alcohol porlitro de aire. Casi al borde del comaetílico. La vida se acabó para el es-tudiante de Ingeniería Técnica enInformática. Solo tenía 20 años. Ycon él moría una parte de sus pa-dres y su hermana pequeña.

Las otras víctimasEl caso de Francisco es uno de tan-tos. Por desgracia. Como el de Re-beca, la ciclista que hace 15 días fuearrollada en el centro de Valenciapor un conductor ebrio. Como AnaIsabel y Francisco, los dos jóvenescuyo turismo arrolló José Roig enBlasco Ibáñez en 2010 tras bebertoda la tarde y toda la noche. Estasemana fue juzgado. No ingresaráen prisión.

Cada año, casi medio centenarde valencianos muere en acciden-tes de tráfico con el alcohol comomaldito protagonista. El 40% es elporcentaje que los expertos mane-jan como constante en este tipo desiniestros. El año pasado, 115 per-sonas perdieron la vida en las carre-teras de la Comunitat. De todos es-tos siniestros, muchos de ellos aúnbajo investigación judicial, en 46estaba presente el alcohol, segúnfuentes de Tráfico.

Y esas son únicamente las cifrasmás negras, las relativas a los acci-dentes con el final más fatal posi-ble. Pero la tragedia se extiende másallá. A los supervivientes que que-dan con secuelas psicológicas o fí-sicas. Según la Dirección Generalde Tráfico, hoy en día hay más de78.000 personas en toda Españaque sufren discapacidad a causa deun accidente de tráfico.

Pero hay más víctimas. A JavierTorres (62 años) se le ilumina la cara

>

Ana Isabel y FranciscoEl siniestro: José Roig, que con-ducía ebrío, embistió el taxi en elque viajaba la pareja en diciembrede 2010 en Blasco Ibáñez.La condena: El joven reconociólos hechos en el juicio de esta se-mana. Dos años de prisión

OTROS DATOS

cuando recuerda a su Carolina, esaestudiante en el último año de Ima-gen y Sonido en el CEU San Pabloque ya soñaba con dedicarse al tea-tro, el cine o la televisión. La jovende 23 años, de pelo moreno y on-dulado, la muchacha que repartíasu tiempo entre los suyos, sufuturo y varias ongs. El ros-tro de Javier Torres se tor-na oscuro cuando recuer-da el 19 de octubre de2002. Sus ojos se hu-medecen. Este año secumple el décimoaniversario. Y cadarecuerdo pesa.

«Un criminal sellevó por delante ami hija en el Paseo dela Castellana». Caroli-na había ido con todasu familia a visitar a suabuela en Madrid. Esa no-che salió con unos amigosde Cullera. Un conductor bo-rracho arrolló el coche de la jo-ven. También murió Mar, su mejoramiga y hermana del novio de Ca-rolina. «De un instante para otro,la has perdido».

Treinta meses de prisión fue laexigua condena que recayó sobreel criminal. El Código Penal aún nose había endurecido. Ahora, un ac-cidente mortal con alcoholemiapuede suponer hasta cuatro años

de cárcel. Al menos cumplió ínte-gramente la pena. Porque no

siempre es así. De hecho, lagran mayoría no pisan ni

la cárcel.Solo el 1% de los con-

denados por delitoscontra la seguridadvial acaban entre re-jas (711 en 2011 entoda España, el últi-mo año con cifrasdisponibles). Entre2010 y el año pasado,

282.709 condenados.De ellos, apenas 2.000

en prisión. La política dela Fiscalía General pasa

por fomentar los trabajossociales y los cursos de reedu-

cación como manera de ‘reciclar’y reinsertar a los procesados. A lasvíctimas, nada les basta para com-pensar su pérdida. «Se usa la pala-bra ‘accidente’ con demasiada faci-

lidad. Al final, en estos delitos searrebata una vida como ocurre enlos casos de violencia doméstica ode terrorismo. La Justicia deberíaser tan severa como con este tipode delitos», sostiene Javier Torres,miembro de Stop Accidentes.

Todos ‘criminales’Jacinto Espinosa comparte asocia-ción y discurso. «Más pena y cum-plimiento íntegro». Lamenta quela Justicia no siempre sea igual paratodos. «Luego indultan a crimina-les como el kamikaze. Y si tienesun buen abogado, más fácil eludirla pena...». La realidad da cierta ra-zón a Jacinto. En dos de los últimosaccidentes más graves en Valencia,sendos choques con alcoholemiapositiva y dos muertos en cada si-niestro en Blasco Ibáñez con Gó-mez Ferrer, los acusados estabandefendidos por dos de los penalis-tas más reputados de Valencia: Ja-vier Boix (el que fuera abogado deFrancisco Camps) y Vicente Grima.Este último logró rebajar su conde-na de cuatro a dos años de prisióntras reconocer los hechos.

Jacinto no cede ni un ápice al do-

«Y LUEGOINDULTAN ACRIMINALES...»

David y EsperanzaEl siniestro: Otro accidente condos muertos en el cruce de BlascoIbáñez y Gómez Ferrer en no-viembre de 2010. Blanca G. con-ducía ebria y causó el choque.La condena: La Fiscalía pedíacuatro años de cárcel.

ESPINOSAGREGORIOPadres deFranciscoEl siniestro: Suhijo murióarrollado porun conductorebrio en 2001en Valencia.La condena: 3años de cárcel.

«No son accidentes;aquí se quita una vidacomo en terrorismo oen violencia doméstica»

Jacinto Espinosay Antonia deGregorio, con lafoto de su hijo.:: DAMIÁN TORRES

4 VALENCIA Domingo 03.02.13LAS PROVINCIAS

lor. Antonia intenta recordar a suFrancisco. «Buen estudiante, bue-no con su hermana...». Jacinto in-terrumpe a su mujer. Cambia detema. Elude el recuerdo, igual queevita pasar por la esquina en la quepereció su hijo, a tiro de piedra desu casa de Torrefiel. Y prefiere se-guir protegido por su ‘armadura’.«No quiero dar pena. No soy unavíctima. Lucho por evitar que estoocurra de nuevo».

Las Fuerzas de Seguridad tampo-co aflojan el pulso contra estos cri-minales. Cualquiera podemos lle-gar a serlo. La letal y asentada cos-tumbre de salir, cenar, tomar unascopitas, conducir... El 42% de los es-pañoles ha conducido (o lo hace)bebidos en alguna ocasión, segúnuna encuesta de la Dirección Ge-neral de Tráfico. Cada día, 16 perso-nas dan positivo por controles dealcoholemia en la provincia de Va-lencia. El año pasado, casi 7.000 con-ductores fueron multados por irebrios (o drogados) al volante, se-gún Tráfico. Un centenar más queen 2011.

Javier Torres y su esposa, LydiaPalero (62 años), han convertido su

dolor en la gasolina con la que se-guir viviendo. La Sala Carolina y laFundación Carolina Torres (sin áni-mo de lucro) promueven el teatro,la literatura, los monólogos y el arteen general en la calle Rugat de Va-lencia. Vendieron la empresa de co-bres que tenían y pusieron en mar-cha el proyecto. Dieron vida al sue-ño de su hija. Aprovecharon la caí-da para coger impulso. «Recordarel espíritu de Carolina nos ha he-cho vivir».

Drama en El SalerEl siniestro: Dos jóvenes fueronarrollados por un conductor ebrioal salir de una discoteca de El Sa-ler en 2006.La condena: La Audiencia doblóen diciembre la pena a Álvaro B.:dos años y medio de cárcel.

El adios a Rebeca BorrásEl siniestro: La joven de 20 añospereció el 13 de enero al ser atro-pellada cuando circulaba en bicipor la calle San Vicente.El proceso: El juez encarceló aDiovani Alexis por su «manifies-to desprecio a la vida».

Adiós a dos niñosEl siniestro: Dos niños de Crevi-llent de 10 y 12 años murieron alatropellarlos un conductor borra-cho en diciembre en Granada.El proceso: El acusado cuadrupli-caba la tasa de alcoholemia y estáen prisión provisional.

Peligro para los peatonesEl siniestro: Juana Iris murió el15 de noviembre al ser atropella-da por un coche cuando cruzabala avenida Ausias March.La investigación: El atestado re-beló que cruzó por sitio indebidoy había estado tomando cervezas.

«VIVES CONEL DOLOR, NOLO SUPERAS»

TORRESPALEROPadres deCarolinaEl siniestro: Suhija y una ami-ga murieronarrolladas porun conductorebrio en 2002.La condena:30 meses deprisión.

:: A. CHECAVALENCIA. «Nunca. Jamás, sal-vo en casos con atenuantes muycualificados o que haya arrepen-timiento por parte del acusado, re-paración del daño...». Desde la Fis-calía de Valencia dejan muy clarala postura del ministerio públicoante accidentes mortales con al-coholemia positiva: en caso de quela pena pueda estar por debajo delos dos años y medio de prisión,listón a partir del cual es inviable

suspender la condena, la acusaciónpública «en ningún caso respalda-rá» la suspensión de la misma.

La ‘excepción’, la rebaja de cua-tro a dos años de cárcel esta sema-na para el joven que confesó su cul-pabilidad en el doble atropellomortal de Blasco Ibáñez. Como se-ñalan desde la Fiscalía, en este casohubo arrepentimiento del conde-nado, consignó el dinero de la in-demnización y retiró la acusaciónque inicialmente ejercía contra losocupantes del vehículo siniestra-do, por lo que todo indica que aca-bará no ingresando en prisión.

Aunque los procesados en estossupuestos seguirán teniendo ‘con-dena’. En libertad, pero con la ame-naza de no delinquir «ni lo más mí-nimo» en cuatro años –o el encar-celamiento será inmediato–, te-

niendo que realizar trabajos socia-les y acudiendo a cursos de reedu-cación. En ellos, a los infractoresles proyectan imágenes «muy de-sagradables» de víctimas de acci-dentes de tráfico con mutilacio-nes o graves lesiones. O visitancentros de parapléjicos para em-pujar la silla de ruedas de la vícti-ma de un accidente de tráfico. Pal-par de cerca el infierno que causana otros conductas imprudentescomo la suya.

Dos lugares de Valencia han dis-parado todas las alarmas de la sec-ción de seguridad vial de la Fisca-lía de Valencia. La confluencia deBlasco Ibáñez con Gómez Ferrer yla de la calle Quevedo con Guillemde Castro. En el primero, cuatrofallecidos (el Ayuntamiento ya ins-taló unas luces en la calzada paratratar de mejorar la visibilidad yalertar del peligro). En el segun-do, tres víctimas mortales. Comoseñalan desde la Fiscalía, la pre-vención es la mejor arma. «Las le-yes son muy duras, pero si te qui-tan a un hijo, no hay nada que locompense».

La Fiscalía de Valenciaimpone ‘mano dura’

Cada día, 16 personasdan positivo poralcoholemia en laprovincia de Valencia

Javier Torres y LydiaPalero, en la Sala Caro-

lina de Valencia.:: D. TORRES

El ministerio públicoopta por oponersea la suspensión decondena en unachoque mortal conalcoholemia positiva

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