Vázquez Ruiz, Theo AdolfoBulecevich, Candela

6to C 2016

ComunidadPoblaciónEspecieAdaptaciones: Anatómicas FisiológicasDe comportamiento

Relaciones IntraespecíficasCooperaciónCooperación ColonialRelaciones SocialesCompetenciaRelaciones Interespecíficas:CompetenciaMutualismoPredaciónParasitismo

Para los biólogos la comunidad es el conjunto de seres vivos de un ecosistema; de forma más precisa podría decirse que es el conjunto de poblaciones biológicas que comparten un área determinada y coinciden en el tiempo.

¿Por qué hay competencia entre los individuos de una especie?

En los ambientes que habitan los seres vivos, los individuos nunca están solos sino que conforman una población. De esta manera, cada uno se relaciona con otros de su misma especie, y lo hace de diferentes modos.

¿En que consisten las relaciones cooperativas?

En muchas poblaciones, los individuos de una misma especie tienden a vivir agrupados. Esta característica les ofrece gran ayuda para vivir en un ambiente.

Las adaptaciones de un ser vivo son características ventajosas que le sirven para vivir en un determinado ambiente.

Son aquellas que presentan los seres vivos que les permiten llevar a cabo determinada función. Un ejemplo lo encontramos en las orejas de los elefantes africanos, muchos más grandes que las de la especie asiáticas. A través de estas estructuras ellos realizan el intercambio de calor con el ambiente. Esta característica les hace posible sobrevivir en el ambiente cálido

Este tipo de adaptaciones se refieren a como el ambiente condiciona el funcionamiento de una especie. Por ejemplo, la rata del desierto se alimenta de plantas con un alto contenido de sal. Esto representaría un gran problema, porque casi no bebe agua y habita un ambiente de altas temperaturas. Sin embargo, a diferencia de otros mamíferos , puede producir heces muy secas.

En este caso, hablamos de aquellas características ventajosas que involucran las actividades que realizan los seres vivos según los estímulos del ambiente. Un ejemplo lo encontramos en el desplazamiento masivo de animales, como algunas especies de aves, desde y hacia sus áreas de reproducción. Esta migración se produce, por lo general, antes y después de la época de cría.

La relación intraespecífica es la interacción biológica en la que los organismos que intervienen pertenecen a la misma especie. En este tipo de relaciones se considera que se presentan en una población. También se encuentra la relación interespecifica (entre individuos de diferente especie), entre estas dos relaciones se encuentran: depredación, mutualismo, parasitismo, competencia, comensalismo y simbiosis.Las relaciones intraespecíficas se dividen en: • Territorialidad • Competencia entre individuos. • Asociación de individuos.La competencia intraespecífica se produce cuando dos individuos compiten por:• Los recursos del medio (una zona del territorio, los nutrientes del suelo).• La reproducción (luchando por el sexo opuesto).• Por dominancia territorial (un individuo se impone a los demás).La asociación en grupos de individuos se produce para obtener determinados beneficios como:• Mayor facilidad para la caza y la obtención de alimento.• La defensa frente a los depredadores de la especie.• La reproducción por proximidad de los sexos en el grupo.• El cuidado y protección de las crías.

Interacción en la cual dos organismos o poblaciones se benefician mutuamente, la relación no es esencial para la vida de ambos, ya que pueden vivir de forma separada. Se puede dar incluso entre organismos de diferentes reinos, como en el caso de flores y polinizadores.

Un organismo colonial está constituido por una serie de células individuales e independientes; pero, a diferencia de lo que sucede en una simple población de células sueltas, existe cierta cooperación entre ellas, y la colonia entera se comporta como una sola entidad. Pocos procariotas forman verdaderas colonias; algunas especies de algas cianofíceas forman, sin embargo, filamentos algunas de cuyas células ejercen funciones específicas; la anabaena, por ejemplo, tiene células fotosintetizadoras (que fijan el dióxido de carbono) y heterocistes, células que fijan el nitrógeno de la atmósfera. Las células del filamento en cuestión están conectadas unas a otras por tiras del viscoso líquido interior de la célula (citoplasma), lo que les permite compartir los productos de la fijación de carbono y de nitrógeno. Hay que decir, sin embargo, que la cooperación intercelular es cosa más general en los eucariotas que en los procariotas. Uno de los niveles más simples de organización colonial entre los eucariotas es la del grupo de algas.

Un tipo especial de cooperación son las relaciones sociales. En ellas, los individuos de una población se encuentran íntimamente vinculados y cumplen funciones especificas en beneficio de la sociedad. Encontramos numerosos ejemplos en los insectos sociales. En el caso de las abejas, por ejemplo, las reinas cumplen la función reproductiva. Ellas ponen dos tipos de huevos: De algunos nacerán las obreras y de otros, los zánganos. La reina solo se alimenta de jalea real. El resto de la colonia lo hace de polen y de la miel que fabrican con el néctar de las flores.

Se dice que los individuos de una misma especie compiten entre sí por estos requerimientos y algunos quedan privados de ellos. La competencia no siempre se lleva a cabo por el alimento. En muchas poblaciones animales los individuos marcan un territorio e impiden que otros de la misma especie puedan ingresar en el. En la época de reproducción, a veces los machos compiten entre sí por una o varias hembras. En el caso e los elefantes marinos, ellos tiene enfrentamientos muy agresivos donde se empujan y golpean con su probóscide. Aquel macho que retrocede varias veces es el perdedor y se retira de la pelea. Loa animales también pueden competir por el espacio. La presencia de muchos mejillones sobre las rocas, por ejemplo, impiden que otros puedan fijarse a ellas.

Todos los seres vivos, desde una ameba hasta las enormes ballenas, tienen que asegurarse la incorporación de materiales y energía, indispensables para crecer y reproducirse. Dejando de lado las plantas, las algas y algunos microorganismos (que fabrica su propio alimento con materiales que toman directamente del ambiente), los demás organismos se alimentan de otros seres vivos.

En un determinado ambiente, algunos animales de diferentes especies pueden alimentarse con el mismo tipo de presas y, por ello, se establece una competencia entre ellos.

Entre los individuos de dos poblaciones diferentes no siempre la relaciones son de competencia. Por ejemplo, las abejas van de flor en flor en busca del néctar que ellas producen. Al hacerlo, se llevan el polen adherido en su cuerpo, favoreciendo la polinización de las plantas este tipo de relación se llama mutualismo.

Todos los seres vivos, desde una ameba hasta las enormes ballenas, tienen que asegurarse la incorporación de materiales y energía, indispensables para crecer y reproducirse. Dejando de lado las plantas, las algas y algunos microorganismos (que fabrican su propio alimento con materiales que toman directamente del ambiente), los demás organismos se alimentan de otros seres vivos. Así, entre ellos se establecen relaciones de alimentación.Por ejemplo, se denomina predación a la relación que ocurre cuando un predador “ataca” a su presa para comerla.

Una forma especial de predación es el parasitismo. En este caso, los individuos de una especie se alimentan de los organismos de otra especie, denominados hospedadores. Aquí, el predador (parásito) no mata a su presa al alimentarse sino que la mantiene viva, al menos durante un tiempo. Por ejemplo, muchos gusanos viven en el cuerpo de otros animales, como los anfibios.