Ley de seguridad alimentaria y nutricional: un paso importante

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12 LA REVISTA AGRARIA / 163 Por fin el Congreso de la República aprobó la Ley de Seguri- dad Alimentaria y Nutricional. Luego de permanecer seis me- ses en salmuera, una mayoría significativa de parlamentarios (72 votos, contra 1) resolvió, el último 11 de junio, desestimar el pedido de reconsideración planteado por la congresista Martha Chávez (Fuerza Popular), que pretendía impedir su apro- bación. Recordemos que en diciembre último, y en dos votaciones seguidas, el Pleno del Congreso votó mayoritariamente por la ley. Con esta decisión, el Legislativo da un trascendental paso hacia la constitución de un cuerpo normativo clave para ase- gurar que la población peruana pueda acceder a una alimenta- ción adecuada. Con todas sus limitaciones (la más importante: el retiro de toda alusión al término soberanía, por presiones del Minagri y el MEF 2 ), la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutricional es cru- cial por varios motivos. Listamos los principales: Reconoce el derecho humano a la alimentación como parte del ordenamiento legal interno. En adelante, el Estado pe- ruano deberá disponer de los recursos necesarios para ga- rantizar que todos los peruanos y peruanas accedan a una alimentación saludable y nutritiva. Establece una serie de lineamientos que deberán seguir las políticas públicas para garantizar la disponibilidad y accesi- bilidad (física y económica) a alimentos producidos local- mente y de alto valor nutritivo. Esto implica promover tanto la oferta (pequeña agricultura familiar, sobre todo) como la demanda (alentar el consumo de alimentos inocuos, sufi- cientes y nutritivos). Dispone la creación de un Sistema Nacional de Seguridad Alimentaria de composición multiactoral. Liderado por el Minagri, este sistema contará —en cada nivel de gobierno: nacional, regional, municipal— con un consejo integrado por representantes gubernamentales, pero también de las organizaciones campesinas, de los productores agropecua- rios, comerciantes y trabajadores de la industria gastronó- mica, a fin de articular los distintos espacios de manera sos- tenible y productiva. Toca ahora al Poder Ejecutivo promulgar la norma e incorpo- rar sus lineamientos y objetivos en el diseño de las políticas públicas en materia agrícola, ambiental y social. La seguridad alimentaria es uno de los componentes del desarrollo humano, como lo señala la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), y se inscribe dentro de los compromisos asumidos por el Estado peruano en tratados Ley de seguridad alimentaria y nutricional: un paso importante Enrique Fernández-Maldonado Mujica 1

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Por fin el Congreso de la República aprobó la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutricional. Luego de permanecer seis meses en salmuera, una mayoría significativa de parlamentarios (72 votos, contra 1) resolvió, el último 11 de junio, desestimar el pedido de reconsideración planteado por la congresista Martha Chávez (Fuerza Popular), que pretendía impedir su aprobación.

Transcript of Ley de seguridad alimentaria y nutricional: un paso importante

12 LA REVISTA AGRARIA / 163

Por fin el Congreso de la República aprobó la Ley de Seguri-

dad Alimentaria y Nutricional. Luego de permanecer seis me-

ses en salmuera, una mayoría significativa de parlamentarios

(72 votos, contra 1) resolvió, el último 11 de junio, desestimar

el pedido de reconsideración planteado por la congresista

Martha Chávez (Fuerza Popular), que pretendía impedir su apro-

bación.

Recordemos que en diciembre último, y en dos votaciones

seguidas, el Pleno del Congreso votó mayoritariamente por la

ley. Con esta decisión, el Legislativo da un trascendental paso

hacia la constitución de un cuerpo normativo clave para ase-

gurar que la población peruana pueda acceder a una alimenta-

ción adecuada.

Con todas sus limitaciones (la más importante: el retiro de

toda alusión al término soberanía, por presiones del Minagri y

el MEF2), la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutricional es cru-

cial por varios motivos. Listamos los principales:

• Reconoce el derecho humano a la alimentación como parte

del ordenamiento legal interno. En adelante, el Estado pe-

ruano deberá disponer de los recursos necesarios para ga-

rantizar que todos los peruanos y peruanas accedan a una

alimentación saludable y nutritiva.

• Establece una serie de lineamientos que deberán seguir las

políticas públicas para garantizar la disponibilidad y accesi-

bilidad (física y económica) a alimentos producidos local-

mente y de alto valor nutritivo. Esto implica promover tanto

la oferta (pequeña agricultura familiar, sobre todo) como la

demanda (alentar el consumo de alimentos inocuos, sufi-

cientes y nutritivos).

• Dispone la creación de un Sistema Nacional de Seguridad

Alimentaria de composición multiactoral. Liderado por el

Minagri, este sistema contará —en cada nivel de gobierno:

nacional, regional, municipal— con un consejo integrado

por representantes gubernamentales, pero también de las

organizaciones campesinas, de los productores agropecua-

rios, comerciantes y trabajadores de la industria gastronó-

mica, a fin de articular los distintos espacios de manera sos-

tenible y productiva.

Toca ahora al Poder Ejecutivo promulgar la norma e incorpo-

rar sus lineamientos y objetivos en el diseño de las políticas

públicas en materia agrícola, ambiental y social. La seguridad

alimentaria es uno de los componentes del desarrollo humano,

como lo señala la Organización de las Naciones Unidas para la

Alimentación y la Agricultura (FAO), y se inscribe dentro de

los compromisos asumidos por el Estado peruano en tratados

Ley de seguridadalimentaria y nutricional:

un paso importanteEnrique Fernández-Maldonado Mujica1

JUNIO de 2014 13

internacionales, como el Pacto Inter-

nacional de Derechos Económicos,

Sociales y Culturales (Pidesc, 1976)3.

Su ejecución debe acompañarse con

la implementación de la Estrategia Na-

cional de Seguridad Alimentaria y Nu-

tricional (DS N.º 021-2013-MINA-

GRI)4, recién aprobada en diciembre del

año pasado. Con ese objeto, el Gobier-

no deberá asignar los recursos nece-

sarios —en el Presupuesto General de

la República previsto para el próximo

año— para que ambos instrumentos

de política no terminen siendo letra

muerta.

La ley sola no basta

Queda claro, sin embargo, que para

universalizar el derecho a la alimenta-

ción y garantizar la seguridad alimen-

taria hará falta mucho más que un mar-

co normativo adecuado. Un diseño

institucional óptimo supone, además,

el fortalecimiento de las instancias gu-

bernamentales vinculadas con los ob-

jetivos asumidos en la ley, comenzan-

do por el Minagri, convertido en un

ministerio «cenicienta» en el marco del

Estado neoliberal que tenemos desde

Fujimori.

La capacidad de una sociedad para

avanzar hacia niveles de desarrollo so-

cial básicos (como proveer a sus ciu-

dadanos de las condiciones necesa-

rias para el disfrute de una alimenta-

ción sana) depende —en gran medi-

da, aunque no solo— de la fortaleza

de sus capacidades productivas.

Dichas capacidades, en este caso

particular, no deben ser entendidas ex-

clusivamente en términos tecnológi-

cos —que son importantes— sino,

sobre todo, en términos sociales: el

Estado deberá atender con prioridad

a los sectores campesinos que hacen

posible el consumo de productos agrí-

colas (y, de paso, el boom gastronó-

mico). El objetivo de la seguridad ali-

mentaria supone necesariamente el

desarrollo social y económico de los

productores agrícolas, especialmente

de la pequeña agricultura familiar, la

cual, paradójicamente, pese a su rele-

vancia social y económica, represen-

ta la base pobre de nuestra estructura

social (ver artículo sobre agricultura

familiar en esta edición).

Un dato importante

Esta ley es importante, también, por-

que nace como resultado de un (in-

usual) proceso de diálogo y cabildeo

entre los parlamentarios y los secto-

res directamente involucrados.

Ya fuera en la Comisión Agraria

como en la de Inclusión Social, del

Congreso de la República, un conjun-

to de organizaciones sociales vincu-

ladas con el sector agrario —como la

Alianza de Organizaciones Agrarias

(CNA, CPP, Femucarinap, ANPE), con

el apoyo del Colectivo Perú por una

Seguridad Alimentaria con Soberanía

(que agrupa a diversas ONG y agen-

cias de cooperación)— acompañó las

discusiones e incidió en la decisión

de los parlamentarios, quienes final-

mente aprobaron, por unanimidad, el

dictamen presentado ante el Pleno.

Aliadas importantes en este proceso

fueron las congresistas Claudia Coari

y Rosa Mavila, quienes destacaron el

impacto de género de la ley y su im-

portancia para sectores clave en el

objetivo de asegurar la seguridad ali-

mentaria en el país, como son los pe-

queños productores agrícolas.

El reto hacia adelante es consolidar

lo avanzado, que no es poco, y planifi-

car futuras iniciativas dirigidas a con-

cretar el objetivo complementario: la

soberanía alimentaria. Sin obviar la im-

portancia (y necesidad) de profundi-

zar nuestra vinculación comercial con

el mundo, la meta de la seguridad ali-

mentaria dependerá, en gran medida,

de los grados de autonomía que asu-

mamos como Estado para el diseño e

implementación de políticas públicas

que prioricen el derecho a la alimenta-

ción adecuada, por encima de cualquier

consideración comercial o económica.

Se trata, sin embargo, de una idea

que suscita resistencia en los secto-

res defensores del libre comercio y de

los acuerdos bilaterales firmados con

países que, paradójicamente, cuentan

con políticas agresivas de promoción

y protección de su producción agrí-

cola local (EE.UU., Unión Europea,

etc.); acuerdos contractuales contra-

dictorios que afectan, sobre todo, a

países como el nuestro, que tienen una

posición política débil en las negocia-

ciones comerciales y carente de pers-

pectiva estratégica hacia el futuro.

El próximo proceso electoral presi-

dencial de 2016 será, sin duda, una co-

yuntura propicia para debatir pro-

puestas de desarrollo agrícola que in-

corporen estos elementos y, eventual-

mente, nos permitan enrumbar hacia

una estrategia integral de seguridad y

soberanía alimentaria. Veremos.

Notas1 Sociólogo.2 Ministerio de Agricultura y Riego, y Mi-

nisterio de Economía y Finanzas.3 Pidesc. <http://bit.ly/1bDPWCi>.4 <http://bit.ly/MqyYj3>.

La aprobación de la ley también obedece al denodado trabajo de diversas organizaciones

campesinas, agrarias y de la sociedad civil, que incidieron en la decisión de los parlamentarios.

Foto

Oxfa

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