Libro proporcionado por el equipo Descargar Libros Gratis ...descargar.lelibros.online/Stephen...

274

Transcript of Libro proporcionado por el equipo Descargar Libros Gratis ...descargar.lelibros.online/Stephen...

  • Libro proporcionado por el equipo

    Le Libros

    Visite nuestro sitio y descarga esto y otros miles de libros

    http://LeLibros.org/

    Descargar Libros Gratis, Libros PDF, Libros Online

    http://LeLibros.org/http://LeLibros.org/http://LeLibros.org/
  • Stephen King convierte un clsico cuento de hadas en una obra maestra delgnero de terror. Los ojos del dragn es un apasionante relato de aventuras,con hroes arquetpicos, dragones, prncipes y hechiceros El joven prncipePeter, hijo del difunto rey, da la talla de monarca y espera heredar el reino.Pero el mago de la corte dispone que sea ungido el prncipe Thomas, unmuchacho al que manipula de acuerdo con sus siniestros propsitos. Sinembargo, Thomas posee un secreto que nadie ha sido capaz de adivinar.

  • Stephen KingLos ojos del dragn

  • Esta historia es para mi gran amigo BEN STRAUB, y para mi hija, NAOMIKING.

  • 1

    Antiguamente, en un reino llamado Delain, hubo un rey que tena dos hijos.Delain era un reino inmemorial, en el cual haba habido cientos de Reyes, milestal vez; cuando ha pasado demasiado tiempo ni siquiera los historiadores soncapaces de recordarlo todo. Roland el Bueno no era ni el mejor ni el peor de losreyes que rigieron aquellas tierras. Se esforzaba firmemente en no ocasionar anadie gran perjuicio y casi haba conseguido su propsito. Tambin se preocupcon verdadero tesn por realizar obras importantes; sin embargo, en esto no tuvotanta suerte. Result ser un rey bastante mediocre; l mismo dudaba de laposibilidad de ser recordado mucho tiempo despus de su fallecimiento. Y, ahora,la muerte poda aparecer en cualquier instante, porque era ya anciano y sucorazn se iba debilitando. Era probable que le quedara un ao de vida, o quiztres. Cuantos le conocan, y quienes haban observado su rostro apagado y sustemblorosas manos cuando presida la corte, estaban de acuerdo en que antes decinco aos un nuevo rey sera coronado en la gran plaza que se hallaba al pie dela Aguja y slo seran cinco aos si as lo dispona la gracia de Dios. Por lotanto, en todo el reino, desde el barn ms rico y el cortesano de vestidurasholgadas hasta el ms pobre siervo y su andrajosa mujer, pensaban y hacancbalas sobre el futuro rey Peter, hijo may or de Roland.

    Slo un hombre planeaba otra cosa y cavilaba acerca de ella: cmoasegurarse de que en su lugar fuese coronado Thomas, el hijo menor de Roland.Este hombre era Flagg, el mago del rey.

    2

    A pesar de que el rey Roland era viejo (reconoca tener setenta aos pero eraseguro que contaba con muchos ms) sus hijos an eran jvenes. Se le habatolerado contraer matrimonio a una edad avanzada debido a que no habaencontrado antes ninguna mujer capaz de satisfacer sus gustos, y porque sumadre, la gran Reina Viuda de Delain, pareca ser inmortal para Roland y todoslos dems, incluso para ella misma. Gobern el reino durante casi cincuenta aoshasta que cierto da, a la hora del te, se meti en la boca una rodaja de limnrecin cortado para que le aliviase una molesta tos que padeca desde haca msde una semana. En aquella oportunidad, un malabarista representaba su acto paradiversin de la Reina Viuda y su squito. Se dedicaba hbilmente a realizar

  • juegos malabares con cinco bolas de cristal. En el mismo instante en que la Reinase introdujo la rodaja de limn en la boca, al malabarista se le escap una de lasfrgiles bolas, la cual se rompi con estrpito sobre el suelo de azulejos de la granSala Este de Audiencias. El ruido sobresalt a la Reina Viuda y la rodaja de limnse le ator en la garganta, causndole una rpida muerte por asfixia. Cuatro dasdespus, en la Plaza de la Aguja se llev a cabo la coronacin de Roland. Elmalabarista no tuvo oportunidad de verla haba sido decapitado tres das antes enel tajo de ejecuciones situado detrs de la Aguja.

    Un rey sin herederos era algo que inquietaba a todos, especialmente si elsoberano tena cincuenta aos y se estaba quedando calvo. As que era muynecesario que Roland se casara lo ms pronto posible y que produjera en breveun heredero. Flagg, su ntimo consejero, le hizo ver claramente su situacin.Tambin le recalc que a los cincuenta, las perspectivas de engendrar unacriatura en el vientre de una mujer se reducan slo a unos pocos aos. Flagg leaconsej que no pospusiese ms su casamiento y que dejara de esperar a ladama de noble linaje capaz de satisfacer sus caprichos. Si esa mujer todava nohaba aparecido en la vida de un hombre que ya rondaba la cincuentena,argument Flagg, era probable que ya nunca lo hiciese.

    Roland se dio cuenta de la cordura de estas palabras y estuvo de acuerdo, sinsaber que Flagg, con su cabello lacio y su plido rostro que casi siempre llevabacubierto por una capucha, conoca su ms profundo secreto; l nunca habahallado a la dama de sus sueos porque en realidad jams haba soado conmujer alguna. Las mujeres le causaban aprensin, y en ningn momento leatrajo el acto mediante el cual era posible producir un beb en el vientre de unafmina. Ese acto tambin le causaba aprensin.

    Pero haba comprendido la sabidura del consejo del mago, y seis mesesdespus del funeral de la Reina Viuda, en el reino se celebr un acontecimientomucho ms afortunado: el casamiento del rey Roland con Sasha, quien seconvertira en la madre de Peter y Thomas.

    En Delain, Roland no era ni amado ni odiado. En cambio, Sasha era queridapor todo el mundo. Cuando muri, luego de dar a luz a su segundo hijo, el reino sehundi en un sombro luto durante un ao y un da. Ella figuraba entre las seismujeres que Flagg le sugiri al Rey como posibles novias. Roland no conoca aninguna de estas mujeres, cuy os linajes y condiciones sociales eran similares.Todas posean sangre noble, aunque ninguna sangre real; todas eran sumisas,complacientes y calladas. Flagg no haba sugerido candidatas capaces dedesplazarle de su posicin de ntimo consejero real. Roland eligi a Sasha porquele pareci la ms callada y sumisa de las seis, y era, adems, la que menoraprensin le causaba. As que contrajeron matrimonio. En aquel entonces, Sasha,que proceda de la Barona Occidental (una barona muy pequea por cierto)contaba diecisiete aos, era, pues, treinta y tres aos ms joven que su marido.

  • Hasta la noche de bodas nunca haba visto a un hombre sin calzoncillos. Cuandollegada esa ocasin ella pudo observar su flccido pene, pregunt con graninters:

    Esposo, qu es eso?Si hubiese agregado algo ms, o lo hubiera dicho en un tono de voz

    ligeramente distinto, los eventos de aquella noche, y los de este ntegro relato,podran haber tomado otro curso; Roland se habra escapado furtivamente, noobstante el brebaje especial que Flagg le hizo tomar una vez finalizada la fiesta debodas. Pero en ese momento Roland la vio tal cual era, una muchacha muyjoven que saba incluso menos que l sobre el acto de hacer bebs, observ quesu boca era bondadosa y comenz a amarla, como lo haran con el tiempo todoslos habitantes de Delain.

    Es el Hierro del Rey dijo l.No se parece mucho a un hierro observ Sasha, dudosa.Es que todava no est forjado explic Roland.Ah! Y dnde est la fragua?Si confas en m repuso el Rey, acostndose con ella en el lecho, y o te

    la ensear, puesto que, sin saberlo siquiera, la has trado contigo desde laBarona Occidental.

    3

    Los habitantes de Delain la amaron, porque era gentil y bondadosa. Fue lareina Sasha quien cre el Gran Hospital, quien llor desconsolada ante lacrueldad del deporte que se llevaba a cabo en la Plaza, y que consista en azuzarperros contra un oso. Con sus lgrimas logr que el Rey Roland prohibiera suprctica; tambin haba sido la reina Sasha quien en el ao de la gran sequa, enel cual hasta las hojas del Viejo Gran rbol se tornaron grises, abog por unaRemisin de los Impuestos al Rey. Es probable que os preguntis si Flagg no urdialguna intriga en contra de ella. Debemos decir que al principio no lo hizo.Debido a que l era un autntico mago, y haba vivido cientos y cientos de aos,en su opinin estas cosas eran relativamente insignificantes.

    Incluso permiti que la Remisin de Impuestos fuese aceptada y a que el aoanterior la armada de Delain haba aplastado a los piratas de Andua, los cualesasolaban la costa sureste del reino haca ms de cien anos. El crneo del pirata-rey de Andua sonrea en lo alto de una pica en las afueras del palacio, mientras

  • el tesoro de Delain alcanzaba la opulencia gracias al botn obtenido. En losasuntos ms importantes asuntos de estado, Flagg segua siendo el consejero mscercano al rey Roland, y por este motivo, el mago estuvo en un principiosatisfecho.

    4

    A pesar de que Roland lleg a amar a su esposa, nunca pudo habituarse aaquella actividad que la may ora de los hombres consideran placentera, ese actoque produce desde el ms vulgar de los aprendices de cocinero hasta el herederodel trono ms encumbrado. Roland y Sasha dorman en lechos separados, y l nola visitaba muy a menudo. Sus visitas no pasaban de cinco o seis al ao, y enalgunas de esas ocasiones ningn hierro se forjaba en la fragua, a pesar de loscada vez ms potentes brebajes de Flagg y de la persistente dulzura de Sasha.

    De cualquier modo, cuatro aos despus de la boda. Peter fue engendrado enel lecho de la reina. Y en aquella nica noche, a Roland no le fue necesario elbrebaje de Flagg, ese lquido verde y espumoso que siempre le ocasionaba unaextraa sensacin en la cabeza, como si se volviera loco. Aquel da haba estadocazando en las Reservas con doce de sus hombres. La caza era la actividad quesiempre le haba gustado ms a Roland: el aroma del bosque, el tonificantegustillo del aire los sonidos del cuerno de caza y la sensacin que le produca elarco cada vez que disparaba una certera flecha. En Delain se conocan la armasde fuego pero su uso era poco frecuente, y a que se consideraba bajo ydespreciable cazar con un tubo de hierro.

    Sasha se encontraba leyendo en su lecho cuando Roland apareci conbarbado y rubicundo rostro encendido; ella apoy el libro sobre el pecho yescuch arrobada el relato, adornado por sus gesticulante manos. Poco antes deconcluir, Roland se alej unos pasos para mostrarle cmo haba estirado lacuerda del arco y dejado volar a Ensartadora de Adversarios, la gran flecha desu padre, a travs del estrecho y encerrado valle. Al hacer esto, Sasha ri yaplaudi, con lo cual logr ganarse su corazn.

    En las Reservas del Rey ya no quedaba mucho por cazar. Por aquellos dasera muy raro hallar all un ciervo de tamao regular, y nadie haba visto a undragn desde tiempos inmemoriales. La mayora de los hombres se hubiesenredo ante la sugerencia de que todava podra existir en ese bosque domstico talcriatura mitolgica. Pero entonces, una hora antes de que se pusiera el sol y

  • cuando Roland y su grupo ya se disponan a regresar, eso fue exactamente lo queencontraron o mejor dicho, lo que les encontr a ellos.

    El dragn sali de entre la maleza con estrpito y a tropezones; sus escamasrelucan con un color verde cobrizo y echaba humo por las narices sucias deholln. No se trataba de un dragn pequeo, sino de un macho justo antes demudar de piel por primera vez. La may ora de los hombres del squito sequedaron estupefactos, incapaces siquiera de disparar una flecha o de moverse.

    El dragn observ a la partida de caza y comenz a batir sus alas, mientrassus ojos, normalmente verdes, se tornaban amarillentos. Ns exista peligro algunode que el dragn se escapara volando, pues hacan falta otros cincuenta aos ydos cambios ms de piel para que sus alas estuvieran lo bastante desarrolladas yle sostuviesen en el aire; pero las membranas que las mantenan adheridas alcuerpo hasta la edad de diez o doce aos haban desaparecido, as que con unsimple aleteo derrib de su montura al cazador que guiaba la partida,arrancndole el cuerno de la mano.

    Roland fue el nico que no se vio pasmado en una total inmovilidad, y a pesarde que era demasiado modesto para decrselo a Sasha, los escasos movimientosque realiz a continuacin estuvieron impregna dos de verdadero herosmo, conel deleite de un deportista por el golpe mortal. Si no hubiera sido por la prontareaccin de Roland, el dragn habra asado vivos a casi todos los componentesdel sorprendido grupo. Hizo retroceder a su caballo unos cinco pasos y ajust unaflecha en su gran arco. Estir y dispar. La saeta fue a dar directamente en ladiana, el punto blando parecido a una branquia que se encontraba debajo de lagarganta del dragn y por donde penetraba el aire para producir fuego. Elmonstruo se desplom muerto con una ltima bocanada ardiente que dej enllamas todos los arbustos que se hallaban a su alrededor. Los escuderos seapresuraron a apagarlas, unos con agua, otros con cerveza, la may or parte de esaorina era en realidad cerveza y a que cuando Roland salia de caza la llevabaconsigo en gran cantidad y no la escatimaba en absoluto.

    El fuego estuvo apagado en cinco minutos, el dragn fue destripado enquince. Cuando sus tripas se hallaban y a sobre la tierra, an era posible hacerhervir una tetera encima de las humeantes ventanillas de su nariz. El goteantecorazn de nueve cavidades fue llevado ante Roland con gran ceremonia.Siguiendo la costumbre, se lo comi crudo y lo encontr delicioso. Lo nico quele causaba pesar era saber que probablemente jams volvera a tener otro.

    Quizs haba sido el corazn del dragn lo que le puso tan vigoroso aquellanoche. Tal vez slo se tratase del jbilo por la caza y por haber actuado rpida yserenamente mientras todos los dems permanecan sentados, paralizados en susmonturas (a excepcin, por supuesto, del cazador gua, que se qued paralizadosobre su espalda). Cualquiera que fuese la razn, cuando Sasha aplaudi yexclam, Muy bien hecho, mi bravo esposo , Roland se lanz directo a su

  • lecho. Sasha le recibi con los ojos bien abiertos y una sonrisa que reflejaba supropio triunfo. Aquella noche fue la primera y nica vez que Roland goz sobriocon el abrazo de su mujer. Nueve meses despus, uno por cada cavidad delcorazn del dragn, Peter naci en aquel mismo lecho, y en el reino huboregocijo. El trono ya tena un heredero.

    5

    Probablemente vosotros pensis, si es que por casualidad os habis detenido apensar sobre todo este asunto, que, despus del nacimiento de Peter, Roland debadejar de beber el extrao brebaje verde que le preparaba Flagg. No fue as. Anlo tomaba de cuando en cuando. Lo hacia porque amaba a Sasha y deseabacomplacerla. En ciertos lugares la gente supone que slo los hombres disfrutandel sexo, y que la mujer se sentir agradecida si la dejan en paz. Los habitantesde Delain, sin embargo, no sostenan ideas tan peculiares. Daban por sentado queuna mujer gozara normalmente con aquel acto que produca las criaturas msagradables de la tierra. Roland se daba cuenta de que, en este aspecto, no atendaa su esposa como ella se mereca, as que resolvi ser lo ms atento posible,aunque tuviera que tomar el brebaje de Flagg. nicamente el mago saba cunespordicas eran las visitas del rey al lecho de la reina.

    El da de Ao Nuevo, cuatro aos despus del nacimiento de Peter, una grantempestad de nieve cay sobre Delain. Fue la ms fuerte que se pudierarecordar, salvo una, acerca de la cual les hablar ms adelante.

    Siguiendo un impulso que ni l mismo poda explicarse, Flagg prepar para elRey una mezcla el doble de poderosa. Por lo visto haba algo en el viento que leimpela a hacerlo. Era usual que Roland mostrase una mueca debido a sudesagradable sabor y que incluso lo apartara a un lado; pero la excitacin debidaa la tempestad haba hecho que la fiesta de Ao Nuevo fuese especialmentedisoluta, y Roland estaba demasiado bebido. Las llamas del fogn le recordaronla explosiva exhalacin del dragn al morir, y brind muchas veces por lacabeza, la cual se hallaba colgada de la pared. As que se bebi toda la pocinverde de un solo trago, y una lujuria perversa se apoder de l. De inmediatoabandon el refectorio y fue a visitar a Sasha. Mientras trataba de hacerle elamor, Roland la lastim.

    Por favor, esposo exclam sollozando.Lo siento mascull Roland. Uff

  • Se qued profundamente dormido a su lado, y permaneci inconscientedurante las siguientes veinte horas. Ella nunca olvid el hedor de su aliento. Unolor parecido a carne putrefacta, un olor a muerte. Sasha se pregunt qu habraestado comiendo o bebiendo.

    Roland jams volvi a probar el brebaje de su consejero; pero de todasformas, Flagg y a estaba bien satisfecho. Al cabo de nueve meses, Sasha dio a luza Thomas, su segundo hijo. Ella muri durante el alumbramiento. Estas cosassuceden, por supuesto, y si bien todos se entristecieron, nadie pareci realmentesorprendido. Crean estar enterados de lo que haba ocurrido. Pero las nicaspersonas del reino que verdaderamente conocan las circunstancias de la muertede Sasha eran Anna Crookbrows[1], la partera, y Flagg, el mago del rey.Finalmente, la actitud entrometida de Sasha haba acabado con la paciencia deFlagg.

    6

    Cuando falleci su madre, Peter tena tan slo cinco aos; pero la recordabaprofundamente. Guardaba de ella la imagen de una persona dulce, tierna,cariosa, llena de compasin. Pero era la suya una temprana edad, y la mayorade sus recuerdos no aparecan demasiado precisos. No obstante, conservaba ensu memoria uno muy vvido, que consista en un reproche que ella le habahecho. Mucho despus la memoria de aquel reproche se convirti para l en algoesencial. Tena que ver con su servilleta.

    El da primero de cada quinto mes, se organizaba un festn en la corte paracelebrar los cultivos primaverales. Cuando cumpli los cinco aos, a Peter le fuepermitido asistir. Segn la costumbre, Roland deba sentarse a la cabecera de lamesa, el heredero del trono a su lado derecho, la reina al otro extremo de lamesa. El resultado prctico de esto sera que, durante la comida, Peter estarafuera de su alcance, por lo que Sasha le instruy meticulosamente de antemanoacerca de cmo comportarse. Deseaba que Peter causara buena impresin yque fuese corts. Adems, ella saba que durante la comida l iba a tener quearreglrselas solo, debido a que su padre careca por completo de buenosmodales.

    Algunos de vosotros quizs os preguntis por qu recaa sobre Sasha la tareade tener que ensear buenos modales a Peter. Acaso el nio no tena una

  • institutriz? (S, tena dos.) Careca el pequeo prncipe de sirvientes queestuvieran a su exclusivo servicio? (Batallones de ellos.) El truco no consista enlograr que estas personas se ocuparan de Peter, sino en mantenerlas alejadas.Sasha deseaba criarlo por su cuenta, al menos en todo lo que le fuera posible.Posea ideas muy precisas respecto a cmo deba ser educado su hijo. Le amabaprofundamente y quera estar con l por sus propias razones egostas, perotambin entenda que tena una importante responsabilidad en lo referente a laeducacin de Peter. Algn da el nio seria rey y, por encima de cualquier otracosa, Sasha deseaba que fuera bueno. Un buen nio, pensaba, ser un buensoberano.

    Los grandes banquetes celebrados en la Sala del Rey no eran acontecimientosmuy elegantes, y la may ora de las nodrizas no se preocuparan demasiado porlos modales del nio en la mesa. Para qu, si ser rey! seguro que diran, unpoco afectadas por la idea de tener que corregirle en asuntos tan triviales. Aquin te importar si derrama la salsera? A quin le importar si mancha sugorguera, o incluso si se limpia las manos con ella? Acaso en los viejos tiempos elrey Alan a veces no vomitaba en su plato y luego le ordenaba al bufn de su corteque se acercara para beber la rica sopa caliente? Acaso el rey John noarrancaba de un mordisco la cabeza de las truchas vivas y luego introduca susmovedizos cuerpos en los corpios de las criadas? Terminara este banquetecomo suceda en la mayora de ellos, con los participantes arrojndose la comidaunos a otros a travs de la mesa?

    Indudablemente esto sucedera; pero cuando las cosas degenerasen hastallegar a la fase dedicada a lanzar comida, hara rato que Peter y ella se habranretirado. Lo que le preocupaba a Sasha era esa actitud de a quin le importar.Ella pensaba que era el peor de los conceptos que se le poda inculcar a un niodestinado a ser rey.

    As que Sasha instruy meticulosamente a Peter, y le observ con sumaatencin durante la noche del banquete. Ms tarde, cuando l yaca adormiladoen su lecho fue la hablarle.

    Como Sasha era una buena madre, primero le felicit cariosamente por sucomportamiento y sus buenos modales; lo cual era cierto, y a que por lo generalstos haba sido ejemplares. Pero Sasha saba que nadie se tomara la molestia decorregirle sus errores a no ser que lo hiciese ella misma, y que no deba dejar dehacerlo ahora, en aquellos pocos aos en los cuales l la idolatraba. As quecuando termin de felicitarle, le dijo:

    Has cometido un error, Peter, y me gustara que jams volviera arepetirse.

    Peter se hallaba acostado en su lecho, mirndola seriamente con sus ojos decolor azul oscuro.

    Qu he hecho, madre?

  • No has usado tu servilleta le contest. La dejaste doblada al lado de tuplato, y eso fue algo que me apen ver. Comiste el pollo asado con los dedos, yeso estuvo bien, ya que as es como lo hacen los hombres. Pero cuandoterminaste, vi que te limpiabas los dedos en la camisa, lo cual no es correcto.

    Pero si padre y el seor Flagg y los dems noblesDespreocpate de Flagg y de todos los nobles de Delain! grit Sasha con

    tanta fuerza que Peter se encogi un poco en su cama, pues se senta atemorizadoy avergonzado por haberle hecho aparecer a su madre aquellas rojeces en lasmejillas.

    Todo lo que haga tu padre es correcto, puesto que l es el rey, y cuando tlo seas, tambin ser correcto todo cuanto hagas. Pero Flagg no es el rey, noimporta lo mucho que le gustara serlo, y los nobles no son reyes, y t todava noeres rey, sino slo un nio que se olvida de sus buenos modales.

    Sasha vio que estaba atemorizado, de modo que le sonri poniendo la manosobre su frente.

    Tranquilizate, Peter le dijo. No se trata de nada grave, sin embargo esimportante, porque, a su debido tiempo, t sers el rey. Ahora corre y trae tupizarra.

    Pero ya es la hora de dormirDespreocpate tambin de la hora de dormir. Eso puede esperar. Trae tu

    pizarra.Peter corri en busca de lo que su madre le peda.Sasha cogi la tiza sujeta a un lado y escribi con cuidado tres letras.Peter, puedes leer esta palabra?Peter asinti. No slo saba leer unas cuantas palabras, si bien conoca casi

    todas las Letras Mayores. sta result ser una de esas palabras.Ah dice DIOS.S, en efecto. Ahora escrbela al revs y mira a ver lo que descubres.Al revs? dijo Peter dudando.S, por supuesto.Peter escribi en la pizarra con letras vacilantes, debajo de la exquisita

    caligrafa de su madre. Se sorprendi al descubrir otra de las pocas palabras queera capaz de leer.

    PERRO! Mam, dice perro![2]As es. Dice perro.La tristeza con que pronunci estas palabras hizo que Peter dominara en

    seguida su excitacin. Su madre seal las palabras DIOS y PERRO.stas son las dos naturalezas del hombre dijo. No las olvides jams,

    porque algn da t sers rey y los reyes crecen y se hacen altos e imponentes;tan altos e imponentes como los dragones tras su noveno cambio de piel.

    Padre no es alto e imponente objet Peter.

  • A decir verdad, Roland era bajo y algo patizambo. Tambin le colgaba unabarriga debido a las grandes cantidades de cerveza y de aguamiel que habaconsumido.

    Sasha sonri.Sin embargo, lo es. Los rey es crecen de forma invisible Peter, y ello

    sucede de una sola vez, tan pronto como empuan el cetro y reciben sobre sucabeza la corona en la Plaza de la Aguja!

    De verdad? Los ojos de Peter se abrieron por completo.l pensaba que se haban desviado del tema referente a su equivocacin de

    no utilizar la servilleta durante el banquete pero no le afliga ver que aquel asuntoembarazoso era dejado an lado y lo sustitua uno tan interesante. Por otra parte,haba decidido que jams se olvidara de usar su servilleta; si eso era importantepara su madre, tambin lo era para l.

    Claro que si. Los reyes llegan a hacerse terriblemente grandes, y por esarazn deben ser especialmente cuidadosos, ya que una persona grande puedeaplastar con su pie a otra ms pequea con slo salir a dar un paseo, o al girarse,o al sentarse apresuradamente en el lugar inadecuado. Los reyes malvadoshacen estas cosas a menudo. Creo que incluso los buenos no pueden evitarhacerlas de vez en vez.

    Me parece que no lo entiendoEntonces escucha lo que te voy a decir. Sasha dio unas palmaditas en la

    pizarra. Nuestros predicadores dicen que la naturaleza humana es parte deDios y parte del Viejo Splitfoot. Sabes quin es el Viejo Splitfoot[3], Peter?

    Es el diablo.S. Pero existen pocos diablos fuera de las historias inventadas, Peter; la

    mayora de las personas malas se parecen ms a los perros que a los diablos. Losperros, son amistosos pero estpidos, y se es el comportamiento de muchoshombres y mujeres si estn borrachos. Cuando los perros se hallan excitados ydesconcertados, pueden morder; cuando los hombres se encuentran excitados ydesconcertados, pueden pelear. Los perros son excelentes mascotas porque sonfieles, pero si un hombre se comporta como una mascota, para mi es un hombremalo. Los perros pueden ser valientes, mas tambin son capaces de ser cobardes,de aullar en la oscuridad o de huir del peligro con el rabo entre las piernas. Unperro tiene tantos deseos de lamer la mano de un amo cruel como la de un amobondadoso, debido a que no saben diferenciar el bien del mal. Un perro puedecomer desperdicios, vomitar aquello que su estmago rechaza, y luego ir abuscar ms.

    Sasha permaneci en silencio durante unos instantes, quizs imaginando loque suceda en ese mismo momento en la sala de banquetes: hombres y mujeresborrachos rindose estrepitosamente, arrojndose comida unos a otros, y de tantoen tanto girndose para vomitar en el suelo junto a sus sillas. Roland era igual que

  • ellos, y en ciertas ocasiones esto la pona muy triste, pero no lo juzgaba ni locensuraba por ello. Era su manera de ser. No podra prometerle reformarse paracomplacerla, y seguro que lo hara, pero despus de eso no seria el mismohombre.

    Peter, eres capaz de comprender estas cosas?Peter asinti con la cabeza.Magnifico! Ahora dime Sasha se inclin sobre l: Acaso los perros

    usan servilleta?Humillado y avergonzado, Peter baj la mirada hacia el cubrecamas y

    mene la cabeza. La conversacin no se haba desviado tanto como l crey enun principio. Quiz debido a que la velada haba sido muy intensa y ahora sesenta muy cansado, las lgrimas aparecieron en sus ojos y se derramaron sobresus mejillas. Luch contra los sollozos que pugnaban por salir. Los encerr en supecho. Sasha se dio cuenta de esto y se qued admirada.

    Precioso mo, no llores por una servilleta no empleada dijo, ya quesa no era mi intencin. Sasha se levant, dejando ver su abultado vientre deembarazada. Por otra parte, tu comportamiento ha sido ejemplar. Cualquiermadre del reino se sentira orgullosa de un hijo que se hubiese conducido slo lamitad de bien, y mi corazn est lleno de admiracin por ti. Slo te digo estascosas porque soy la madre de un prncipe. En ciertas ocasiones esto se tornadifcil, pero no puede ser modificado, y a decir verdad, si yo pudiera no locambiara. Recuerda que algn da la vida de otros depender de cada uno de tusactos; incluso puede que de los sueos que hayas tenido mientras dormas. Quizla vida ajena no dependa de que hayas usado o no la servilleta despus de comerpollo asado, pero podra ocurrir. Podra ocurrir. A veces, la vida depende demucho menos. Lo nico que te pido es que, en todo lo que hagas, trates de utilizarel lado civilizado de tu naturaleza. El lado bueno, el lado de Dios. Me prometesque lo hars, Peter?

    Lo prometo.Entonces no hay por qu preocuparse. Sasha le bes suavemente. Por

    fortuna, y o soy joven y t tambin lo eres. Seguiremos hablando sobre estascosas cuando adquieras mayor comprensin.

    Jamas volvieron a hacerlo, pero Peter nunca se olvid de la leccin ysiempre us la servilleta, aunque no lo hicieran quienes le rodeaban.

  • 7

    Entonces Sasha muri.Si bien poco queda de su participacin en esta historia, an hay una ltima

    cosa que vosotros deberais saber de ella: Sasha tena una casa de muecas muyamplia y muy bonita, casi un castillo en miniatura. Cuando se acerc elmomento de su casamiento, junt todo el nimo que pudo, pero estaba triste portener que dejar todo y a todos en la gran casa de la Barona Occidental en la quese haba criado; tambin se hallaba un poco nerviosa. Y le dijo a su madre:

    Nunca antes estuve casada y no s si me va a gustar.Pero de todas las cosas infantiles que tuvo que dejar, la que ms aoraba era

    la casa de muecas que haba tenido desde su niez.Roland, que era un hombre bondadoso, descubri esto por casualidad, y a

    pesar de que l tambin se encontraba nervioso con respecto a su vida futura(despus de todo, l tampoco jams se haba casado), encontr el tiemponecesario para encargarle a Quentin Ellender, el mejor artesano de toda lacomarca, que construy ese para su nueva esposa una nueva casa de muecas.

    Quiero que sea la ms bonita que una joven dama haya tenido le dijo aEllender. Deseo que, al mirarla por primera vez, ella se olvide de su vieja casade muecas.

    Como todos vosotros sin duda ya habris imaginado, si Roland hablaba enserio, aquello no era ms que un disparate. Jams se olvida un juguete que denios nos ha hecho sumamente felices, incluso si ese juguete es remplazado porotro mucho ms bonito. Sasha no olvid su vieja casa de muecas, pero se quedmuy impresionada con la nueva. A nadie que no fuese un completo idiota podadejar de sucederle. Todos cuantos la vieron opinaron que era el mejor trabajo deQuentin Ellender; y posiblemente lo fuera.

    Se trataba de una casa de campo en miniatura, muy parecida a la de laondulada Barona Occidental en la cual haba vivido con sus padres. Todo en ellaera pequeo, pero construido de una forma tan diestra que uno podra jurar quetodo funcionaba y en realidad lo hacan muchos de los objetos!

    La hornilla, por ejemplo, era capaz de calentar, e incluso se podan cocinaren ella pequeas cantidades de comida. Si se le pona un trozo de carbn no msgrande que una caj ita de cerillas, ardera durante el da entero y si unointroduca su torpe dedo de persona adulta en la cocina y por casualidad la tocabacuando se hallaba encendida, reciba una quemadura de cuidado. All no haba nigrifos ni retretes con agua corriente, ya que en el reino de Delain no conocantales cosas (y siguen sin conocerlas); pero si se era muy hbil, se poda extraeragua de una bomba manual no ms alta que nuestro dedo meique. Haba uncuarto de costura con una rueca que hilaba y un telar que real mente tej a. Si sepulsaban las teclas con un palillo, la espineta de la sala emita los mismos sonidos

  • que una verdadera. Las personas que vieron todo esto dijeron que era un milagro,y que seguramente Flagg deba de estar relacionado con ella de algn modo.Cuando esos comentarios llegaron a odos del mago, l se limit a sonrer ypermaneci callado. No tena nada que ver con la casa de muecas; a decirverdad, lo consideraba una idea tonta, pero tambin saba que no siempre eranecesario ir por ah proclamando lo maravilloso que uno era para alcanzar lagrandeza. A veces todo lo que haba que hacer era mostrarse prudente ymantener la boca cerrada.

    La casa de muecas de Sasha tena verdaderas alfombras de Kashamin,cortinas de genuino terciopelo, vaj illa de autntica porcelana china; el gabineterefrigerado realmente mantena las cosas fras. El revestimiento del recibidor yde la sala principal era de clida madera de tamarindo. Todas las ventanas tenancristales y un montante de varios colores lucia sobre las amplias puertas deentrada.

    En conjunto era la casa de muecas ms deliciosa con la que un nio podallegar a soar. Cuando fue presentada durante la fiesta de bodas, Sasha aplaudicon verdadero deleite y dio las gracias a su esposo por el regalo. Ms tarde sedirigi al taller de Ellender y no slo le expres su gratitud, sino que le hizo unaprofunda reverencia, un hecho casi sin precedentes, pues en aquellos tiempos lasreinas no reverenciaban a un simple artesano. Roland se sinti complacido yEllender, cuya vista se haba debilitado notablemente en la consecucin delproyecto, se conmovi en sumo grado.

    Pero aquella maravilla no hizo que se olvidase de la vieja y querida casa demuecas que haba quedado en su hogar, en cierto modo ordinaria si se lacomparaba con la nueva, pero ante la cual no se pas jugando tantas tardeslluviosas, reacomodando los muebles, encendiendo la hornilla y observando elhumo que sala de la chimenea, mientras imaginaba que se estaba sirviendo unimportante t social o que se iba a celebrar un gran banquete en honor de lareina, como lo haba hecho antao, incluso siendo una mujercita de quince ydiecisis aos. Una de las razones era muy simple. No resultaba divertidoorganizar una supuesta fiesta a la cual asistira la reina cuando la reina era ellamisma. Y quizs esa sola razn explicaba todas las dems. Ahora y a era adulta yhaba descubierto que serlo no tena nada que ver con la idea que se habaforjado siendo una nia pequea. En aquel entonces ella pensaba que cierto dasimplemente tomara la decisin de dejar para siempre sus juguetes, suspasatiempos y sus invenciones. Pero se dio cuenta que nada de eso habasucedido. En su lugar, descubri que el inters simplemente se iba debilitando.Fue desapareciendo poco a poco, hasta que el polvo de los aos cubri el brillo delos placeres de la infancia, y stos fueron olvidados.

  • 8

    Peter, un nio pequeo que algn da sera rey, posea docenas de juguetes;no, a decir verdad, eran miles. Tena cientos de soldados de plomo con los cualesorganizaba grandes batallas, y docenas de caballos de juego. Dispona depasatiempos, pelotas, bochas y canicas. Era dueo de unos zancos que le hacanmedir ms de un metro y medio. Tambin posea un palo con resorte que lepermita brincar, y todo el papel para dibujar que quisiera, en una poca en queel papel era muy difcil de hacer y slo la gente adinerada poda permitirse ellujo de usarlo.

    Pero de todos los juguetes que haba en el castillo, el que ms le gustaba erala casa de muecas de su madre. Nunca conoci la que haba en la BaronaOccidental, as que para l sta era la mejor de las casas de muecas. Se pasabalas horas muertas sentado delante de ella mientras afuera llova a cntaros, o elviento invernal aullaba en un glido pasaje cubierto de nieve. Cuando cayenfermo con tatuaje de nios (una enfermedad que nosotros llamamosvaricela), uno de los criados se la llevaba en una mesa especial que colocabasobre su cama. Jug con ella sin cesar hasta que se puso bien.

    Le gustaba imaginarse a las diminutas personas que podran ocupar aquellavivienda; a veces eran tan reales que casi poda verlas. Hablaba por ellas condiferentes voces e inventaba todo el resto. Ellos eran la familia del rey. Estaba elrey Roger, que era valiente y poderoso (si bien no muy alto y un pocopatizambo), y que en cierta ocasin haba matado a un dragn. Estaba lahermosa reina Sarah, su esposa, y tambin haba un nio pequeo, llamado Petie,que los amaba y era amado por ellos. Sin contar, por supuesto, con todos loscriados que inventaba para que hicieran las camas, alimentaran el fuego,trajeran el agua, hicieran las comidas y cosieran la ropa.

    Quiz por ser varn, algunas de las historias que ideaba para la casa fueron unpoco ms sanguinarias que las que inventaba Sasha cuando era pequea. En unade ellas, los piratas de Andua rodeaban a la casa, esperando entrar para matar atoda la familia. Hubo una pelea famosa. Docenas de piratas fueron aniquilados,pero al final eran demasiados. Cuando se preparaban para el ataque decisivo,lleg la Guardia Personal del Rey (aqu intervenan los soldados de plomo dePeter) y acab con todos esos brutales filibusteros de Andua. En otra historia, unanidada de dragones prorrumpi procedente de un bosque cercano (por lo generalel bosque cercano estaba debajo del sof de Sasha situado cerca de la ventana),con la intencin de quemar la casa con su furibundo hlito. Pero Roger y Petie seapresuraron en empuar sus arcos y mataron a todos. Hasta que la tierra quednegra debido a su repulsiva sangre corrompida. Aquella noche durante la cena,Peter le dijo esto a su padre el rey, cosa que Roland aprob con estrpito.

    Tras la muerte de Sasha, Flagg le dijo a Roland que a l no le pareca bien

  • que un nio jugara con una casa de muecas. No por ello se convertira en unafeminado, insinu Flagg, pero podra ocurrir. Ciertamente, no seria positivo queel cuento llegara a odos del populacho. Y las historias de esa clase siemprellegaban. El castillo estaba repleto de criados. Los criados lo vean todo, y luegose iban de la lengua.

    Slo tiene seis aos replic Roland molesto.Flagg, con sus conjuros y su plido y severo rostro escondido bajo la

    capucha, siempre le hacia inquietarse.Majestad, tiene la edad suficiente para comenzar a disciplinar a un nio de

    acuerdo con sus funciones futuras dijo Flagg. Pensad bien en ello. Vuestradecisin ser, como siempre, la ms adecuada.

    Pensad bien en ello, haba dicho Flagg, y eso fue exactamente lo que hizo elrey Roland. Creo que es justo decir que, durante los veintitantos aos que rein enDelain, nunca tuvo que pensar con tanta intensidad.

    Probablemente, esto a vosotros os parecer extrao, si es que habismeditado acerca de todas las obligaciones que tiene un rey : asuntos deimportancia como poner impuestos sobre unas cosas y quitarlos de otras;declarar o no la guerra; perdonar o condenar. Vosotros os preguntaris, qu tenaque ver con todas estas decisiones permitir o no a un nio pequeo jugar con unacasa de muecas?

    Quiz nada, quiz mucho. Dejar que vosotros mismos saquis unaconclusin. Yo os contar que Roland no era el ms inteligente de los reyes quehaban gobernado en Delain. Pensar correctamente siempre significaba para lun duro esfuerzo. Le daba la impresin de que por su cabeza rodaban grandespiedras. Sus ojos lagrimeaban y sus sienes palpitaban. Cuando pensabaprofundamente, la nariz se le obstrua.

    De nio, sus estudios de composicin, matemticas e historia, le daban taldolor de cabeza que se le permita finalizar a las doce para que se dedicara a loque quisiera que era cazar. Se esforz muy duramente por ser un buen rey, perotena la sensacin de que nunca sera lo bastante bueno, o lo bastante inteligente,como para resolver los problemas del reino o para tomar las decisionescorrectas, y saba que si se equivocaba, el pueblo iba a sufrir por su culpa. Si lhubiese escuchado lo que Sasha le dijo a Peter, despus del banquete, acerca delos reyes, sin duda estara completamente de acuerdo. Los monarcas realmenteeran ms grandes que las dems personas y, en muchsimas ocasiones, Rolanddeseaba ser ms pequeo. Si alguna vez en vuestra vida os habis preguntadoseriamente si serais lo bastante buenos como para lograr cierto objetivo,entonces podis saber cmo se senta, o que tal vez no sepis es que despus deun tiempo, tales temores comienzan a alimentarse a si mismos. Incluso si esesentimiento de que no sois buenos para realizar determinado trabajo no esverdadero desde un principio, con el tiempo se har realidad. Esto le sucedi a

  • Roland, y con el paso de los aos cada vez fue dependiendo ms y ms de Flagg.En ocasiones se senta preocupado por la idea de que, salvo por el nombre, Flaggera rey en todo, pero estos temores slo aparecan bien entrada la noche.Durante el da agradeca contar con el apoy o de Flagg.

    Si no fuera por Sasha, Roland podra haber sido mucho peor rey de lo queera, y eso se deba a que durante las noches en las que le costaba dormirse aveces escuchaba esa tenue voz que se acercaba mucho ms a la verdad que susagradecimientos diurnos. Flagg era el que realmente gobernaba en el reino, yFlagg era un hombre muy malvado. Por desgracia, ms adelante tendremos quehablar de l, pero por ahora dejaremos que se vaya, y en buena hora noslibremos.

    Sasha haba logrado disminuir un poco el poder que Flagg ejerca sobreRoland. Sus consejos eran prcticos y acertados, y se comportaba con muchamay or bondad y justicia que el mago, el cual nunca le cay bien. Pocos enDelain lo apreciaban, y la mayora temblaba slo al or su nombre; pero suantipata era muy leve. Sus sentimientos hubiesen sido completamente diferentessi hubiera sabido con qu cuidado Flagg la vigilaba, y con qu crecienteresentimiento la odiaba.

    9

    Una vez Flagg realmente intent envenenar a Sasha. Esto sucedi despus deque ella le haba pedido a Roland que perdonara a un par de soldados desertores alos cuales Flagg quera que se de apitara en la Plaza de la Aguja. No habaargumentado que los desertores eran un mal ejemplo. Si se permita que uno odos de ellos se quedaran sin el mximo castigo, lo ms probable sera que otrostrataran de imitarles. El nico modo de disuadirlos, deca Flagg, era mostrndoleslas cabezas de quienes lo haban intentado. Los posibles desertores observaranesas cabezas cubiertas con manchas de moscas y con la mirada fija y pensarandos veces sobre la seriedad de su servicio al rey.

    Sin embargo, Sasha se enter de los hechos a travs de una de sus doncellasque Roland no conoca. La madre del muchacho mayor haba cado gravementeenferma. La familia estaba compuesta por tres hermanos y dos hermanas, todosde corta edad. Si el chico no hubiese abandonado el campamento, con el fin dellegar a su hogar y cortar lea para su madre, todos ellos se habran muerto acausa del intenso frio del invierno de Delain. El mozo ms joven haba ido porque

  • era el mejor amigo del may or, y hermano por juramento. Sin su ayuda, habratardado dos semanas en cortar lea suficiente para que su familia pudiese pasarel invierno. Entre ambos y a toda marcha, el trabajo slo dur seis das.

    Visto as el caso se presentaba de una manera diferente. Roland haba amadomucho a su madre, y gustosamente hubiese dado su vida por ella. As que hizociertas averiguaciones y descubri que la versin de Sasha era correcta. Tambindescubri que los desertores slo se haban escapado luego de que un cruelsargento may or se negara repetidas veces a transmitir a sus superiores supeticin de licencia, y que tan pronto cortaron cuatro grandes haces de lea,regresaron al campamento, a pesar de que ambos saban que les esperaba unjuicio marcial y el hacha del verdugo.

    Roland los perdon. Flagg inclin la cabeza, sonri, y dijo tan slo:Majestad, vuestra voluntad es la voluntad de Delain.Ni por todo el oro de los Cuatro Reinos hubiera permitido que Roland viese la

    terrible furia que sinti crecer en su corazn cuando sus propsitos fueronfrustrados. El perdn concedido por Roland a los muchachos fue gratamenteacogido en Delain, y a que muchos de sus sbditos conocan la verdad de loshechos y quienes la ignoraban se enteraron rpidamente a travs de los dems.El sabio y compasivo perdn de Roland a los dos muchachos fue recordadocuando se impusieron otros decretos menos humanos (los cuales, por reglageneral, eran ideas del mago). Pero todo esto a Flagg no le importaba. No querahaberlos visto muertos, y Sasha se haba interferido. Por qu Roland no se podrahaber casado con otra? Jams haba conocido a ninguna de ellas, y no seinteresaba para nada por las mujeres. Por qu no otra? Bien, ya no tenaimportancia. Flagg se sonri ante el perdn, pero jur firmemente en su coraznque l asistira a los funerales de Sasha.

    Esa misma noche, despus de que Roland hubiera firmado el perdn, Flagg sedirigi a su tenebroso laboratorio situado en el stano. All se puso un pesadoguante y cogi de una jaula una tarntula a la que conservaba desde hacia veinteanos alimentndola con ratones recin nacidos. Cada uno de estos ratones erapreviamente envenenado y se los daba a la araa moribunda; Flagg recurra aeste mtodo para incrementar la potencia del veneno de la propia araa, el cualya de por si era terriblemente potente. La araa era tan grande como una rata yde color rojo sangre. Su abultado cuerpo se retorca con maldad; el venenogoteaba de su aguijn y hacia humeantes agujeros en la mesa de trabajo deFlagg.

    Ahora muere, mi preciosa, y acaba con la reina susurr Flagg,estrujando mortalmente a la araa en su guante, hecho de una malla de aceromgico que resista el veneno. A pesar de ello, al irse a dormir aquella noche, lamano le palpitaba y la tena roja e hinchada.

    El veneno del estrujado y deshecho cuerpo de la araa fue echado en una

  • copa. Flagg verti coac sobre el mortfero liquido y luego lo revolvi. Cuandosac la cuchara de la copa, su pala se hallaba torcida y deformada. Con slobeber un sorbo, la reina caera agonizante en el suelo. Su muerte iba a ser rpidapero muy dolorosa, pens Flagg con satisfaccin.

    Sasha haba tomado la costumbre de beber todas las noches un vaso de coac,debido a que frecuentemente tena problemas para dormirse. Flagg llam a unsirviente para que viniera y le llevase la bebida.

    Sasha nunca supo lo cerca que estuvo de la muerte en aquella ocasin.Momentos despus de haber elaborado el mortal brebaje, antes de que el

    sirviente hubiese llamado a la puerta, Flagg lo derram en el sumidero que habaen el centro de la habitacin y se qued escuchando el siseo y borbolleo mientrasdesapareca por la tubera. Su rostro estaba contrado por el odio. Cuando acabel murmullo, Flagg arroj la copa de cristal con todas sus fuerzas en el rincnms lejano. Estall como si fuera una bomba.

    El sirviente llam a la puerta y fue recibido.Flagg seal hacia donde brillaban los fragmentos.He roto una copa dijo. Lmpialo. Usa una escoba, idiota. Si llegas a

    tocar los pedazos, lo lamentars.

    10

    Flagg haba derramado el veneno en el sumidero en el ltimo momentoporque pens que poda ser descubierto. Si Roland hubiese amado un poco menosa la joven reina, habra corrido el riesgo. Pero Flagg tema que Roland, heridopor la muerte de su esposa, buscara vengarse, y no descansara hasta encontraral asesino y ver su cabeza empalada en la punta de la Aguja. Sera el nicocrimen que querra ver vengado, y no le importara quin lo hubiera cometido.Pero acaso sera capaz de encontrar al asesino?

    Flagg pens que si.Despus de todo, la caza era lo que mejor se le daba a Roland.As que Sasha se salv, en esa oportunidad, gracias al temor de Flagg y al

    amor de su esposo. Y entretanto, el mago continuaba asesorando al rey en casitodos los asuntos.

    De cualquier modo, en lo referente a la casa de muecas, podemos decir queSasha sali vencedora, aun cuando para entonces Flagg ya haba conseguidoquitrsela de encima.

  • 11

    No mucho despus de que Flagg hiciera sus despectivos comentarios sobre lascasas de muecas y los afeminados reales, Roland se desliz sin ser visto en elcuarto maanero de la reina muerta y observ jugar a su hijo. Se qued muyquieto al otro lado de la puerta, con la frente muy arrugada. Estaba pensando conmucha mayor intensidad de lo acostumbrado, y eso significaba que las piedras lerodaban por la cabeza y que tena la nariz congestionada.

    Pudo ver que Peter utilizaba la casa de muecas para contarse historias, parahacerlas veraces, y no haba en ellas nada que pudiera llamarse afeminado. Eranhistorias sangrientas y amenazantes, con ejrcitos y dragones. En otras palabras,eran historias al gusto del rey. Roland descubri en l un nostlgico deseo deunirse a su hijo, ayudarle a idear aventuras an mejores, en las cualesaparecieran la casa de muecas, su fascinante contenido y su familia inventada.Sobre todo, se dio cuenta de que Peter utilizaba la casa de muecas de Sasha paramantener a su madre viva en su corazn. Roland no dud en dar su aprobacin aesto, ya que l mismo aoraba a su esposa con dolor. A veces se senta tan soloque casi lloraba. Los reyes, desde luego, no lloran, y si, en una o dos ocasionesdespus de la muerte de Sasha, l se despertaba con la funda de su almohadaempapada, qu haba con eso?

    El rey abandon la habitacin con tanto sigilo como haba llegado. Peter no lovio en ningn momento. Roland pas en vela casi toda la noche, meditandoseriamente sobre lo que haba visto, y pese a que para l era difcil soportar ladesaprobacin de Flagg, lo vio a la maana siguiente en el transcurso de unaaudiencia privada, antes de que su decisin se debilitara, y le comunic que luegode haber pensado mucho sobre el asunto haba decidido que a Peter debapermitrsele jugar con la casa de muecas todo lo que quisiera. Dijo que a l lepareca que aquello no le hacia ningn mal al nio.

    Una vez expresado esto, se acomod inquieto esperando la refutacin deFlagg. Pero nada de eso ocurri. El consejero se limit a alzar las cejas, lo queapenas pudo ver Roland dentro de las sombras de la capucha que siempre tenapuesta.

    Majestad dijo, vuestra voluntad es la voluntad del reino.Por el tono de su voz, Roland poda darse cuenta de que a Flagg su decisin le

    pareca incorrecta; pero tambin le deca que el mago no iba a discutirla. Sesinti profundamente aliviado por haberse impuesto con tanta facilidad. Cuandounas horas ms tarde, Flagg le sugiri que los campesinos de la Barona Orientalpodan pagar impuestos ms elevados a pesar de que la sequa del ao anteriorles haba destruido casi toda la cosecha, Roland asinti con vehemencia.

    En verdad, que el viejo tonto (Flagg pensaba que as Roland estara absorto ensus pensamientos) fuera en contra de sus deseos en el asunto de la casa de

  • muecas era secundario para el mago. Lo importante era el alza de los impuestosen la Barona Oriental. Adems, Flagg posea un profundo secreto, el cual leocasionaba gran placer. Despus de todo, finalmente haba conseguido asesinar aSasha.

    12

    En aquellos das, cuando la reina o una mujer de estirpe real se hallaban apunto de dar a luz, se hacia llamar a una comadrona. Los doctores eran todoshombres, y no se permita que ningn hombre estuviera presente durante elparto. La comadrona que haba ayudado a nacer a Peter se llamaba AnnaCrookbrows, del Tercer Callejn Sur. Cuando le toc nacer a Thomas, fuellamada de nuevo. Para el tiempo del segundo parto de Sasha, Anna ya habapasado los cincuenta y era viuda. Tena un hijo que a los veinte aos contrajo el mal del temblor , una enfermedad que siempre acababa con sus victimas enmedio de terribles dolores y luego de varios aos de sufrimiento.

    Ella amaba mucho a aquel hijo, y cuando ya no qued ninguna esperanzapara curarle, se dirigi a Flagg. Esto haba sucedido diez aos antes, ninguno delos dos prncipes viva an y Roland era un soltero real. El mago la recibi en sushmedas habitaciones del stano, cercanas a las mazmorras. Durante suentrevista, la intranquila mujer poda or de tanto en tanto los gritos aislados deaquellos que no vean la luz del sol desde hacia anos y aos. Y con unestremecimiento pens que si las mazmorras se encontraban cerca, tambin lodeban de estar las cmaras de tortura. La estancia de Flagg no la tranquilizaba loms mnimo. En el suelo haba extraos dibujos hechos con tizas de todos colores.Al parpadear, le pareci que los diseos se modificaban. De un largo y negrogrillete colgaba una jaula con un loro bicfalo que graznaba y a veces se hablabaa si mismo, una cabeza deca algo y la otra le responda. Un montn de librosgastados la miraban ceudamente desde las estanteras. Las araas hilaban sustelas por los oscuros rincones. Del laboratorio provena un extrao olor demezclas qumicas. Con todo, la mujer cont su historia entre tartamudeos y luegoesper en un angustioso silencio.

    Yo puedo curar a tu hijo afirm Flagg finalmente.El feo rostro de Anna Crookbrows se transform en algo casi bello debido a su

    alegra.Mi seor! exclam sin aliento, y como no se le ocurri otra cosa, volvi

  • a decir: Oh, mi seor!Pero entre las sombras de su capucha, el plido rostro de Flagg permaneci

    distante y meditativo, por lo cual ella volvi a sentir temor.Qu eres capaz de dar a cambio por este milagro? le pregunt.Cualquier cosa repuso ella, y hablaba en serio. Oh mi seor Flagg,

    cualquier cosa!Te pedir a cambio un solo favor dijo Flagg. Estars dispuesta a

    drmelo?Gustosamente! An no s de qu se trata, pero cuando llegue el momento,

    lo har.Ella se haba arrodillado delante del mago, y l se inclin sobre ella. La

    capucha se le cay hacia atrs, descubriendo un rostro en efecto terrible. Era elrostro descolorido de un cadver, con agujeros negros en lugar de ojos.

    Mujer, y si te niegas a mi peticinNo me negar! Oh mi seor, no me negar! No me negar! Lo juro

    por el nombre de mi querido esposo!Entonces no te preocupes. Trae a tu hijo maana por la noche, despus de

    que hay a oscurecido.A la noche siguiente, la mujer llev al pobre muchacho, que temblaba y se

    estremeca; su cabeza giraba sin sentido, al igual que sus ojos. Sobre su mentntena una capa de baba. Flagg le acerc un frasco con una pocin oscura, decolor morado.

    Dale a beber esto le dijo. Le producir ampollas en la boca, perocuida de que tome hasta la ltima gota. Luego, llvate al tonto de mi vista.

    La mujer le murmur algo al muchacho. Cuando trat de inclinar la cabeza,sus convulsiones se recrudecieron durante unos instantes. Al acabar de bebersetodo el brebaje, se dobl en dos, chillando.

    Llvatelo de aqu orden Flagg.S, llvatelo de aqu! grit una de las cabezas del loro.Llvatelo, aqu no est permitido chillar! vocifer la otra cabeza.La mujer se lo llev a casa, segura de que Flagg lo haba envenenado. Pero al

    otro da, el mal del temblor y a no habitaba en el cuerpo de su hijo y ste sehallaba curado.

    Pasaron los aos. Cuando Sasha comenz a tener los primeros dolores delparto de Thomas, Flagg llam a la mujer y le susurr al odo. Estaban en lasprofundas habitaciones del mago, pero as y todo era preferible que aquellaespantosa orden fuese muy queda.

    El rostro de Anna Crookbrows se torn cadavrico, pero record las palabrasde Flagg: si te niegas

    Acaso el rey no iba a tener dos hijos? Ella tena slo uno. Y si el monarcaquera volver a casarse y tener an ms, que lo hiciera. Delain contaba con

  • numerosas mujeres.As que se dirigi a ver a Sasha, le dio nimos y, en el momento decisivo, un

    pequeo cuchillo reluci en su mano. Nadie se dio cuenta del diminuto corte queella le hizo. Unos instantes despus, Anna gritaba:

    Empuje, mi reina! Empuje, que el beb y a sale!Sasha empuj. Thomas sali de ella tan suavemente como un nio

    deslizndose por un tobogn. Pero la sangre de Sasha man a chorros sobre lasbana. Diez minutos despus de que hubiera nacido Thomas, su madre estabamuerta.

    Y as Flagg ya no se interes ms por el trivial asunto de la casa de muecas.Lo que ahora importaba era que Roland estaba envejeciendo, que ninguna reinaentrometida se iba a interponer en su camino, y que haba dos hijos entre loscuales optar. Peter era, por supuesto, el may or, lo cual en realidad no tenamucha importancia. Si con el tiempo Peter resultaba inadecuado para los planesde Flagg, siempre se le poda quitar de en medio. Peter era slo un nio, incapazde defenderse a si mismo.

    Ya os he contado que durante todo su reinado, Roland nunca tuvo que pensartan intensamente sobre algo como lo hizo acerca de aquella cuestin: si deba ono permitirle a Peter jugar con la casa de muecas de Sasha, magnficamenteacabada por el gran Ellender. Os dije que el resultado de todo aquel cavilar fueuna decisin que contradijo los deseos de Flagg. Tambin os dije que Flagg leotorg a eso muy poca importancia.

    Fue as? Esto es algo que vosotros deberis resolver por vuestra cuenta, unavez que me hay is escuchado hasta el final.

    13

    Ahora dejad que, en un abrir y cerrar de ojos, pasen de largo muchos aos,pues una de las mejores cosas que tienen los cuentos es lo rpido que puedetranscurrir el tiempo sin que nada notable est sucediendo. En la vida real nuncaes de ese modo, y probablemente sea un buen sntoma. El tiempo slo pasa velozen las historias, y qu es una historia sino una especie de gran cuento en el quelos siglos fugaces son sustituidos por aos fugaces?

    Durante esos aos, Flagg vigil con atencin a ambos nios; les observ

  • crecer sin que el envejecido rey lo notara, calculando cul sera rey una vez queRoland dejara de serlo. No tard demasiado en decidir que deba ser Thomas, elms pequeo. Cuando Peter cumpli los siete aos, Flagg y a saba que el nio nole gustaba. Al llegar a los nueve, el mago hizo un extrao y desagradabledescubrimiento: tambin le tema al nio.

    Peter haba crecido vigoroso, bien parecido y honesto. Su cabello era negro yel color de sus ojos azul oscuro, tono corriente entre los nativos de la BaronaOccidental. En algunas ocasiones, cuando Peter alzaba la vista de improviso, sucabeza se ergua de una manera que hacia recordar a Roland. Por otra parte, suaspecto y su manera de ser revelaban casi por completo que era hijo de Sasha. Adiferencia de la baja estatura de su padre, quien tena un caminar patizambo y semova torpemente, pues slo resultaba agraciado cuando montaba a caballo,Peter era alto y gil. Le agradaba cazar y lo haca muy bien, pero eso no eratodo en su vida. Tambin le agradaban sus lecciones; geografa e historia eran lasmaterias preferidas.

    Por lo general, a su padre los chistes lo desconcertaban y le hacan perder lapaciencia; haba que explicarle todos los detalles, lo cual les quitaba toda lagracia.

    A Roland lo que le gustaba era cuando los bufones fingan resbalar al pisaruna monda de pltano, cuando se daban cabezadas, o cuando armaban unabatalla de pasteles en la Gran Sala. La idea que tena Roland de la diversin selimitaba a estas cosas. El ingenio de Peter era mucho ms agudo y sutil, como lohaba sido el de Sasha, y con frecuencia su risa alegre y juvenil resonaba por elpalacio, haciendo que los criados se sonrieran unos a otros con aprobacin.

    Mientras muchos nios en la misma posicin hubieran tenido demasiadopresente su jerarqua en la escala de valores y no accederan a jugar con otrosque no fueran de su linaje, Peter se hizo ntimo amigo de uno llamado Ben Staadcuando ambos contaban ocho aos.

    La familia de Ben no perteneca a la realeza, y a pesar de que Andrew Staad,el padre de Ben, sostena tener por parte materna un lejano vnculo con laalcurnia del reino, tampoco poda decirse que pertenecieran a la nobleza. Hacendado era probablemente el trmino ms gentil que se le poda aplicar aAndy Staad, e hijo de hacendado a Ben. Aun as, la antiguamente prsperafamilia Staad estaba pasando por tiempos difciles, y si bien un prncipe podrahaber elegido amistades ms peculiares, lo cierto es que tampoco tendrademasiadas oportunidades.

    Se conocieron en la anual Fiesta del Prado de los Granjeros, festejo ritual decada ao que los rey es y las reinas, en el mejor de los casos, considerabantedioso: su presencia slo era simblica, limitndose al tradicional brindis, paraluego marcharse no sin antes invitar a los granjeros a divertirse y darles lasgracias por otro fructfero ao, lo cual tambin formaba parte del ritual, a pesar

  • de que las cosechas fuesen pobres. Si Roland hubiese sido de esa clase de rey,Peter y Ben nunca habran tenido la oportunidad de conocerse. Pero, como quizy a habris imaginado, a Roland le encantaba la Fiesta del Prado de losGranjeros, asista a ella cada ao y por lo general se quedaba hasta el final; msde una vez se lo llevaron borracho y roncando ruidosamente.

    Dio la casualidad de que Peter y Ben formaron pareja en la carrera de sacosde tres pies, y la ganaron, si bien concluy de un modo mucho ms reido delo que pareca al principio. Llevaban una ventaja de casi seis cuerpos, cuandodieron un tumbo y Peter se hiri en el brazo.

    Lo siento, mi prncipe! exclam Ben, que haba palidecido, y quiz y ase imaginaba en las mazmorras (yo puedo decirles que sus padres, queobservaban ansiosamente desde las lneas laterales, lo pensaban; si no fuera porla mala suerte, Andy Staad era aficionado a las quejas, los Staad careceran detoda suerte; aunque es probable que slo estuviera apenado por la herida que lsupona haber causado, o sorprendido al ver que la sangre del futuro rey era tanroja como la suy a.

    No digas tonteras respondi Peter con impaciencia. Ha sido culpama, no tuy a. He sido torpe. Vamos, date prisa y levntate. Nos estn alcanzando.

    Los dos muchachos, convertidos en una singular y desmaada bestia de trespies debido al saco dentro del cual la pierna derecha de Peter y la izquierda deBen haban sido firmemente atadas, lograron incorporarse y continuaron lacarrera. Sin embargo, con la cada, ambos quedaron torcidos de maneraincmoda y la larga correa qued totalmente cortada. Al aproximarse a la meta,donde una multitud de granjeros vociferaban delirantes (por no decir nada deRoland, parado entre ellos sin la menor sensacin de incomodidad, o de hallarseen un sitio en el cual desentonaba), dos grandes y sudorosos muchachoscampesinos comenzaron a ir acortando distancia.

    Pareca casi inevitable que en los ltimos veinte metros sobrepasaran a Petery Ben.

    Ms rpido, Peter! grit Roland, alzando una enorme jarra de aguamielcon tanto entusiasmo que derram sobre su propia cabeza casi todo el contenido.Ni se dio cuenta debido a lo excitado que estaba. Hijo, una liebre! S unaliebre! Esos simplones estn casi encima de tus posaderas!

    La madre de Ben comenz a lamentarse, maldiciendo la suerte que habahecho que su hijo tuviera que formar pareja con el prncipe.

    Si pierden, arrojar a nuestro Ben a la mazmorra ms profunda del castillose lament entre gemidos.

    Clmate, mujer la anim Andy. No lo har. Es un buen rey.Aunque no tena ninguna duda acerca de ello, continuaba atemorizado.

    Despus de todo, su suerte era la suerte de los Staad.Mientras tanto, Ben comenz a rerse tontamente. No poda creer que lo

  • estuviese haciendo, pero as era.Acaso dijo, s una liebre?Peter tambin empez a rer. Las piernas le dolan terriblemente, la sangre le

    corra por el brazo derecho y el sudor le empapaba el rostro, que estabaadquiriendo un intenso color ciruela, pero se senta incapaz de detenerse.

    S, eso es lo que dijo.Pues entonces brinquemos!Cuando cruzaron la meta no tenan precisamente el aspecto de liebres;

    parecan un par de cuervos tullidos y desorientados En realidad fue un milagroque no se hubieran cado, pero de algn modo lo consiguieron. Se las arreglaronpara dar tres saltos desgarbados. El tercero les hizo ganar la carrera, y sedesplomaron entre risotadas.

    Liebre! gritaba Ben, sealando con el dedo a Peter.T eres una liebre! le replicaba Peter, devolvindole el gesto.Todava risueo, se abrazaron el uno al otro con los brazos en cabestrillo y

    fueron llevados sobre los hombros de unos cuantos granjeros fornidos (AndrewStaad era uno de ellos, y nunca olvid el hecho de que haba soportado el peso desu hijo y del prncipe) hasta el sitio donde Roland colg en sus cuellos unas cintasazules. Luego, los bes rudamente en las mejillas y verti sobre sus cabezas elresto del contenido de su jarra, haciendo que los granjeros estallaran en unbullicioso vitoreo. Nunca, incluso en la memoria de los ancianos all presentes, sehaba visto una carrera tan extraordinaria.

    Los dos muchachos permanecieron juntos lo que quedaba de da y, comopronto se pudo comprobar, les hubiese encantado pasar el resto de sus vidas sinsepararse. Debido a que tambin un chico de ocho aos tena ciertas obligaciones(y ms an si algn da sera rey ), no siempre les era posible estar juntos todo eltiempo que hubieran querido, pero cuando la oportunidad se les presentaba, no ladejaban escapar.

    Algunos descubrieron esta amistad y dijeron que no les pareca correcto queel futuro monarca tuviera como amigo a un muchacho que apenas sediferenciaba de un vulgar campesino de la barona. Sin embargo, la may ora lovea con buenos ojos; ms de una vez se dijo en las posadas de Delain, luego devarias rondas de aguamiel, que Peter posea lo mejor de dos mundos: lainteligencia de su madre y el amor por el pueblo de su padre.

    Al parecer, en Peter no exista maldad. Nunca pas por un periodo en el cualle arrancara las alas a las moscas o le chamuscara los rabos a los perros paraverlos correr. De hecho, intervino en el asunto de un caballo que deba sersacrificado por Yosef, el responsable de las caballerizas del rey, y sucedicuando en este relato Flagg comenzaba a temerle al primognito del rey, y apensar que quiz no le quedaba tanto tiempo para deshacerse del muchachocomo le haba parecido en un primer momento. En el asunto del caballo con la

  • pata rota, Peter revel un coraje y una capacidad de resolucin que al mago nole gust lo ms mnimo.

    14

    Peter pasaba por delante de las caballerizas cuando vio a un caballo atado a lavalla que protega al establo principal. El animal sostena en el aire una de suspatas traseras. Mientras Peter observaba, Yosef escupi en la palma de susmanos y alz un pesado mazo. Estaba claro qu era lo que se propona hacer.Peter se sinti asustado y consternado. Se acerc al sitio a toda prisa.

    Quin os ha dicho que matis a ese caballo? le pregunt.Yosef, un atrevido y robusto hombre de sesenta aos, era una persona estable

    del palacio. No iba a ser fcil que tolerara la interferencia de un mocoso, fueraste el prncipe o no. Yosef le lanz a Peter una mirada amenazante, con laintencin de intimidar al muchacho. Peter, que en aquel entonces tena nueveaos, se puso colorado, pero no se intimid. Crea ver en la expresin de aquelcaballo de ojos castao claro este ruego:

    Quienquiera que seas, t representas mi nica esperanza. Por favor, hazalgo por m.

    Mi padre, mi abuelo, mi bisabuelo dijo Yosef, dndose cuenta de que, legustara o no, tendra que decir algo. se es quien me ha dicho que lo mate. Uncaballo con una pata rota y a no es de ninguna utilidad, ni siquiera para l mismo.Yosef alz levemente el mazo. Ahora consideris este martillo un armacruel, pero cuando seis may or lo veris como lo que realmente es en casosas, un arma piadosa. Ahora dad unos pasos hacia atrs, as no os salpicar.

    El hombre levant el mazo con ambas manos.Dejadlo en el suelo orden Peter.Yosef se qued estupefacto. Jams haba sido obstaculizado de esta manera.Buena es sa! Qu es lo que acabis de decir?Ya me habis odo. He dicho que dejis ese martillo en el suelo.Al decir estas palabras, la voz de Peter se hizo ms grave. De repente, Yosef

    se dio cuenta, de un modo muy real, de que quien estaba frente a l en esepolvoriento establo dndole instrucciones era el futuro rey. Si Peter se hubierapuesto a chillar en medio del polvo, Dejadlo en el suelo, dejadlo en el suelo, oslo ordeno, algn da yo ser el rey, el rey, me os, as que poned eso en el suelo! ,

  • Yosef se habra echado a rer desdeosamente, lanzando un escupitajo yacabando con la vida de aquel caballo cojo de un solo golpe asestado con suspotentes brazos. Pero Peter no haba dicho ninguna de aquellas cosas; la ordenfue dada claramente con su voz y con sus ojos.

    Vuestro padre se enterar de esto, mi principillo replic Yosef.Cuando mi padre se entere por vos, lo escuchar por segunda vez

    contest Peter. Dejar que continuis con vuestro trabajo sin poner objeciones,seor jefe de caballerizas si sois capaz de contestar afirmativamente a unapregunta que deseo haceros.

    Adelante con la pregunta le inst Yosef.En contra de su voluntad, se senta impresionado por el muchacho. Cuando

    Peter le hizo saber que l sera el primero en informar a su padre acerca delincidente, Yosef supo que lo deca en serio, pues era posible percibir la verdad enlos ojos del chico. Adems, nunca antes le haban llamado seor jefe decaballerizas, y eso le agrad bastante.

    Ha visto el veterinario a este caballo? pregunt Peter.Yosef se qued pasmado.Es sa vuestra pregunta? sa?S.Por todos los dioses inmemoriales, claro que no! exclam Yosef, pero

    viendo que Peter se echaba hacia atrs baj el volumen de su voz, se puso encuclillas frente al muchacho y trat de explicarse.

    Alteza, un caballo con una pata quebrada es un enfermo desahuciado.Siempre lo ser. Las patas nunca llegan a curarse. Puede suceder que hay a unenvenenamiento de la sangre. El caballo sufrir terribles dolores. Terribles. Porltimo, su pobre corazn reventar, o padecer una fiebre cerebral que le harenloquecer. Comprendis ahora a lo que me refera cuando dije que estemartillo era ms bien un arma piadosa que una herramienta cruel?

    Peter se qued serio y pensativo, con la cabeza gacha. Yosef permaneca ensilencio, inclinado frente a l casi sin darse cuenta de su postura respetuosa,permitindole cortsmente que se tomara todo el tiempo que deseara.

    Peter alz la cabeza y le pregunt:Habis dicho que todos son de la misma opinin?Todos, Alteza. Ciertamente, mi padreEntonces comprobemos si el veterinario tambin dice lo mismo.Oh PAH! vocifer el caballerizo, arrojando el martillo hasta el otro

    lado de los establos.El pesado objeto hizo una entrada majestuosa en la porqueriza y se clav de

    cabeza en el barro. Los cerdos grueron, chillaron y le maldijeron en su latnporcino. Yosef, al igual que Flagg, no estaba acostumbrado a ser obstaculizado,por lo que hizo caso omiso de ellos.

  • Yosef se incorpor y ech a andar. Peter le observaba preocupado, seguro deque se haba equivocado y que tendra que enfrentarse a una severa paliza porsemejante osada. Entonces, el caballerizo se detuvo a mitad del camino quecruzaba por los establos, se gir, y una breve y desganada sonrisa ilumin surostro al igual que un ray o de sol en una maana nublada.

    Id y traed a ese veterinario dijo. Buscadlo por vuestra cuenta. Supongoque lo encontraris en su gabinete de cirujano, al final del Tercer Callejn Este.Os doy veinte minutos. Si para entonces no estis de vuelta, por ms prncipe queseis, descargar mi mazo sobre los sesos de ese caballo.

    De acuerdo, seor jefe de caballerizas! Gracias! dijo a gritos Peter yluego se alej a la carrera.

    Cuando retorn con el joven veterinario, jadeante y sin aliento, tena lacerteza de que el caballo deba estar y a muerto; segn el sol, haban transcurridotres veces los veinte minutos. Pero curiosamente, Yosef le esper.

    Por esa poca, en Delain la veterinaria representaba algo muy novedoso, yaquel joven era el tercero o el cuarto en practicar la profesin, por lo que nohaba que asombrarse de la desconfiada mirada de Yosef. Tampoco alveterinario le hizo gracia haber sido arrancado de su gabinete por el sudoroso yaturdido prncipe, pero ahora que ya tena un paciente su irritacin fuedisminuy endo. Se arrodill delante de la y egua y le inspeccion suavemente,palpando la pata quebrada, mientras murmuraba por lo bajo. La yegua realiz unmovimiento brusco, como si le hubiese dolido alguna de las maniobras del jovenfacultativo.

    Tranquila dijo, apacigundola; oh, tranquilzate.La yegua se soseg. Peter miraba todo esto en medio de una angustia

    creciente. Yosef tambin observaba con los brazos cruzados sobre su pecho y elmazo apoy ado cerca de l. La opinin que le mereca aquel veterinario habamejorado un poco.

    El sujeto era joven, pero sus manos se movan con la seguridad de unconocedor.

    Finalmente, el veterinario asinti con la cabeza y se incorpor, limpindosede las manos la mugre del establo.

    Qu? pregunt con ansiedad Peter.Matadla le dijo enrgicamente el veterinario a Yosef, ignorando por

    completo a Peter.Yosef cogi su mazo de inmediato, ya que supona que aquel asunta no poda

    terminar de otro modo. Pero descubri que no senta ninguna satisfaccin enconfirmar que estaba en lo cierto; el apenado rostro del muchacho le lleg a loms recndito de su corazn.

    Un momento! grit Peter, y a pesar de que su pequeo rostrodemostraba afliccin, su voz volvi a tener esa gravedad que le hacia parecer

  • mucho mayor de lo que era.El veterinario lo mir asombrado.Queris decir que se morir por envenenamiento de la sangre? pregunt

    Peter.Qu? dijo el veterinario, observando a Peter con detenimiento.Se morir por envenenamiento de la sangre si la dejamos vivir? O

    reventar su corazn? O se volver loca?El veterinario se hallaba visiblemente confundido.De qu estis hablando? Envenenamiento de la sangre? Aqu no hay

    ningn envenenamiento de la sangre. De hecho, la fractura est sanando muylimpiamente observ a Yosef con cierto desdn. Ya he escuchado esa clasede historias con anterioridad. No hay en ellas ninguna exactitud.

    Mi joven amigo, si usted cree que no la hay, todava os queda mucho poraprender repuso Yosef.

    Peter no le hizo caso. Ahora le tocaba a l quedarse perplejo.Por qu le habis dicho al caballerizo que mate a un caballo que tiene

    posibilidades de sanar? le pregunt al joven veterinario.Alteza dijo el veterinario con viveza, este caballo necesitara que se le

    aplicaran emplastos dos veces al da, durante un mes o ms, para prevenircualquier clase de infeccin. No es algo imposible de hacer, pero con qu fin? Elcaballo siempre cojear. Un caballo que cojea es intil para trabajar. Nadieapostar nada por un caballo inactivo. Un caballo que cojea slo podr comer ycomer y jams se pagar su forraje. Por lo tanto, debe ser sacrificado.

    El veterinario sonri satisfecho. Haba explicado su caso clnico.Cuando Yosef comenz nuevamente a levantar su martillo, Peter dijo:Yo le aplicar los emplastos. Si llegara a ocurrir que algn da no pudiere

    hacerlo, entonces Ben Staad lo hara por mi. Ella se curar porque ser miy egua, y montar sobre ella a pesar de que su cojera me deje mareado.

    Yosef se ech a rer, palmeando la espalda del muchacho con tanta fuerzaque sus dientes castaetearon.

    Vuestro corazn es tan generoso como valiente; pero los jvenes se olvidanpronto de las promesas durante sus ratos libres. Supongo que no hablaris enserio.

    Peter mir al hombre con serenidad.Por supuesto que hablo en serio.Yosef dej de rerse en el acto. Observ a Peter con detenimiento y

    comprendi que el muchacho hablaba en serio o al menos crea en lo quedeca. Ninguna duda se reflejaba en su rostro.

    Bien! No puedo quedarme aqu todo el da dijo el veterinario, volviendoa su manera de ser tajante y vanidosa. Ya os he dado mi diagnstico.Presentar mi factura en la Tesorera a su debido tiempo O tal vez haris el

  • desembolso de vuestra asignacin, Alteza. De todas maneras, lo que decidishacer no es asunto mio. Buenos das.

    Peter y el caballerizo le observaron alejarse del establo, arrastrando de lostacones una larga sombra de atardecer.

    Est lleno de estircol dijo Yosef cuando el veterinario hubo atravesadoel portn, y a fuera del alcance de sus palabras, y por lo tanto incapaz decontradecirle. Hacedme caso, Alteza, y os ahorraris bastantes disgustos.Hasta ahora no ha habido caballo con la pata quebrada al que no se le hay aenvenenado la sangre. Es voluntad de Dios.

    Quiero hablar con mi padre acerca de todo esto dijo Peter.A mi tambin me parece que es necesario repuso Yosef con

    pesadumbre aunque cuando Peter se marchaba cansadamente, se sonri. Supadre se vera obligado moralmente a encargarse de que el muchacho fueracastigado por haber obstaculizado a sus mayores; pero el caballerizo saba queRoland a sus aos apreciaba mucho a sus dos hijos, quizs a Peter un poco msque a Thomas, y estaba seguro de que el muchacho conseguira esa y egua. Porsupuesto, tambin se le partira el corazn cuando el caballo muriera; pero, comobien haba dicho el veterinario, aquel asunto no era de su incumbencia. Noentenda de adiestrar caballos; la preparacin de prncipes era mejor dejarla enotras manos.

    Peter fue azotado por haberse inmiscuido en los asuntos del responsable de lascaballerizas, y si bien para su escocido trasero no era ningn consuelo, Petercomprenda que su padre le haba conferido un gran honor al azotarlo l mismo,en lugar de entregarlo a un subordinado quien podra haber buscado congraciarsecon el prncipe, alivindole el castigo.

    Peter no pudo dormir sobre sus espaldas en tres das y durante casi unasemana le fue imposible comer sentado, pero el caballerizo tambin habaacertado en lo relativo a la y egua: Roland le permiti a Peter quedarse con ella.

    No creo que le quede mucho tiempo, Peter le advirti Roland. Si Yosefdice que va a morirse, se morir.

    El rostro de Roland se vea un poco agotado y sus avejentadas manostemblaban. La paliza le haba dolido ms a l que a Peter, quien en realidad erasu favorito, si bien Roland supona tontamente que l era el nico que estabaenterado.

    No lo s respondi Peter. Me pareci que ese veterinario saba lo quedeca.

    Result ser que el joven veterinario estaba en lo cierto. La yegua no tuvo unenvenenamiento de la sangre, y tampoco muri, y finalmente su cojera fue tantenue que incluso Yosef se vio forzado a admitir que apenas se notaba.

    Al menos, cuando est descansada se corrigi.Peter era un poco ms que constante en el asunto de los emplastos; se los

  • aplicaba religiosamente. Los cambiaba tres veces al da, y antes de ir a acostarselo haca por cuarta vez. Ben Staad sustitua a su amigo de tanto en tanto, pero fueen muy pocas ocasiones. Peter le puso a la yegua el nombre de Peona, y con eltiempo se convirtieron en grandes amigos.

    Flagg sin duda haba tenido razn en una sola cosa cuando un da le aconseja Roland que no permitiese a Peter jugar con la casa de muecas: los criadosestaban en todas partes, lo observaban todo y se iban fcilmente de la lengua.Varios sirvientes presenciaron la escena del establo, pero si todos los que mstarde afirmaron haber estado all lo hubiesen estado realmente, aquel calurosoda de verano una multitud de ellos se tendra que haber congregado en lasinmediaciones del establo. Por supuesto, ste no fue el caso, pero el hecho deque, para la may ora de los criados, aquel suceso bien vala una mentira, eraseal de que a Peter se le consideraba un personaje interesante. Hablaron tantosobre el tema, que durante nueve das se convirti en el prodigio de Delain. Yoseftambin habl; por consiguiente, el joven veterinario tampoco se call. Todo loque decan hablaba bien del principito; la palabra de Yosef, en particular, tenagran peso, y a que se le respetaba mucho. Comenz a llamar a Peter el jovenrey , algo que jams haba hecho hasta entonces.

    Creo que Dios tuvo piedad de la jaca porque el joven rey la defendi deuna manera muy valiente deca Yosef. Y se dedic a aplicarle aquellosemplastos como un esclavo. Valiente, eso es lo que es; tiene el corazn de undragn. Algn da ser un rey digno de confianza. Ay ! Deberais haberescuchado su voz cuando me dijo que dejara el mazo en el suelo!

    Era una gran ancdota, excelente, y Yosef bebi a su memoria durante lossiguientes siete aos. Hasta el da en que Peter fue arrestado a causa de unespantoso crimen, declarado culpable y sentenciado a pasar el resto de su vidaencerrado en la celda que se encontraba en lo ms alto de la Aguja.

    15

    Quizs os estis preguntando cmo era Thomas, y es probable que muchos devosotros ya le hay is dado el papel de villano, dispuesto colaborar con Flagg ensu maquinacin para arrebatarle la corona a autntico heredero.

    En realidad, se no era en absoluto el caso, a pesar de que siempre haparecido lo contrario, y por supuesto Thomas tena su implicacin. Debo admitirque l, en efecto, no era lo que se dice un nio bueno; a menos, a primera vista.

  • No era, sin duda, un nio bueno como poda serlo Peter, pero al lado de Peterningn hermano hubiera parecido verdaderamente bueno, y Thomas lo sabadesde el momento en que cumpli los cuatro aos; por el tiempo en que tuvolugar la famosa carrera de sacos, a la que sigui el sonado incidente del establo.Por lo general, Peter rara vez menta y jams engaaba. Era inteligente afable,alto y bien parecido. Se pareca a la madre, a quien tanto haba amado el rey y ala que adoraba el pueblo de Delain.

    Cmo poda Thomas compararse al poseedor de todas aquella virtudes? Unapregunta simple con una respuesta tambin simple. No poda.

    A diferencia de Peter, Thomas era la imagen viva de su padre. En ciertomodo esto le agradaba al viejo Roland, pero no le deparaba e placer que sientenla may ora de los hombres cuando tienen un hijo que ha heredado su mismaestampa. Contemplar a Thomas era como mirarse en un espejo. Roland sabaque el bonito cabello rubio de Thomas encanecera muy pronto y despuscomenzara a carsele; se quedara calvo al llegar a los cuarenta. Comprendaque Thomas nunca iba ser alto, y que si tena el mismo apetito que su padre porla cerveza y el aguamiel, para cuando cumpliera los veinticinco aos llevara pordelante el bulto de una gran barriga. Las puntas de sus pies y a haba comenzado adesviarse, y Roland adivin que Thomas caminara con su mismo contoneopatizambo.

    Thomas no era exactamente lo que se dice un nio bueno, pero no pensisque por esta razn se trataba de un nio malo. A menudo era un chico triste; otrasveces, un chaval confundido (tambin se pareca a su padre en otro aspecto:pensar mucho le congestionaba la nariz y dentro de su cabeza comenzaba a sentircomo si rodaran piedras, en ciertas ocasiones, era celoso; pero no poda decirseque fuera malo.

    De quin estaba celoso? Pues de su hermano, por supuesto, se hallaba celosode Peter. No bastaba con que Peter fuera a ser rey. Oh no! No era suficiente quesu padre prefiriera a Peter, que lo prefiriese tambin los criados y los maestros,porque siempre saba las lecciones y no necesitaba ser persuadido con halagos.No bastaba con que todos prefirieran a Peter, o que Peter tuviese un mejoramigo. Haba una cosa ms.

    Cuando nadie miraba a Thomas, sobre todo su padre el rey, el segundn creasaber lo que ellos estaban pensando: Nosotros ambamos a tu madre, y t lamataste al nacer. Y qu es lo que obtuvimos del dolor y de la muerte que leocasionaste? Un nio torpe de cara redonda que casi no tiene mentn, un niotorpe que no logr aprender las quince Letras Mayores hasta que tuvo ocho aos.Tu hermano Peter las saba a los seis. Qu es lo que obtuvimos? No mucho. Porqu has venido, Thomas? Para qu sirves? Una garanta para la sucesin deltrono? Nada ms que para eso? Una garanta para que el trono no quede vacoen caso de que Peter el Precioso se caiga de su renqueante jaca y se rompa la

  • cabeza? Eso es todo? Bien, entonces no te queremos. Ninguno de nosotros tequiere. Ninguno de nosotros te quiere

    El papel que jug Thomas en el encarcelamiento de su hermano fuedeshonroso, pero aun as no era realmente un nio malo. Yo estoy convencido deesto, y espero que a su debido tiempo tambin lo estis vosotros.

    16

    Una vez, cuando tena siete anos, Thomas se pas trabajando un da entero ensu habitacin, tallando para su padre un modelo de velero. Lo hizo sin saber queese da Peter se haba cubierto de gloria en el campo de tiro de arco, al cualasisti tambin el rey. Por lo general, Peter no se destacaba como arquero. Asque, al menos en este terreno, Thomas iba a demostrar que era superior a suhermano may or. Pero aquel da, en la pista juvenil, Peter tir al blanco de unmodo inspirado. Thomas era un nio triste, un nio confundido, y a menudo eraun nio sin suerte.

    Thomas pens en un velero, porque de cuando en cuando, los domingos por latarde, a su padre le gustaba salir al foso que rodeaba al palacio para hacer flotarvariados modelos de barcos. Estos placeres sencillos hacan a Rolandextremadamente feliz, y Thomas nunca olvid cuando cierto da su padre lo lleva l, solamente a l. En aquel tiempo, su padre tena un asesor cuyo nico trabajoconsista en ensearle cmo hacer barcos de papel, y el rey desarroll un granentusiasmo por ellos. Ese mismo da, un ancestral pez emergi del agua turbia,tragndose entero uno de los barcos de papel de Roland, el cual se ri como unnio y dijo que aquello era mejor que un relato sobre un monstruo marino.Mientras deca esto estrechaba fuertemente entre sus brazos a Thomas. El niojams se olvid de aquel da: el brillante sol, la humedad, el tenue olor a mohodel agua del foso, la calidez de los brazos de su padre, su barba rasposa.

    Por lo tanto, sintindose un da particularmente solitario, le asalt la idea dehacerle a su padre un velero. En verdad no iba a ser un gran trabajo, y Thomaslo saba; era casi tan torpe con sus manos como lo era para memorizar laslecciones. Pero tambin saba que su padre podra tener a su disposicin acualquiera de los artesanos de Delain, incluso al gran Ellender, quien no estabadel todo ciego, para que le construyeran un barco si as lo deseaba. La diferenciacrucial, pensaba Thomas, sera que el propio hijo de Roland se hubiera dedicadodurante un da entero a tallarle un barco para su entretenimiento de los domingos.

  • Thomas pas la jornada sentado junto a su ventana, diseando pacientementeel velero en un pedazo de madera. Para ello us un cuchillo afilado, con el cualse hizo numerosos cortes sin importancia y una herida bastante fea. A pesar detodo sigui adelante, aunque le doliesen las manos. Mientras trabajaba, soabadespierto con el momento en que su padre y l haran navegar el velero undomingo por la tarde, solamente ellos dos, porque Peter estara montando aPeona por los bosques o jugando fuera con Ben. Y ni siquiera le molestara queemergiese la misma carpa y se tragase su barco de madera, ya que entonces supadre se reira y le abrazara dicindole que aquello era mejor que un relatosobre monstruos marinos devorando los rpidos navos de los piratas de Andua.

    Pero cuando lleg a la cmara del rey se encontr all con Peter y tuvo queesperar alrededor de media hora con el barco escondido detrs, mientras supadre exaltaba el arte de Peter con el arco. Thomas observ que su hermano sehallaba~ incmodo bajo la incesante avalancha de elogios, que se daba cuenta deque l deseaba hablar con su padre, y que se esforzaba por comunicrselo aRoland. No importaba, nada de aquello tena verdadera importancia. Thomas leodiaba de cualquier modo.

    Finalmente, Peter pudo escaparse. Thomas se acerc a su padre, quien lemir con cario ahora que el primognito se haba marchado.

    Pap, te he hecho una cosa le dijo, sintindose repentinamenteavergonzado. Con las manos atrs, sostena el bote, y de pronto sus palmasestuvieron hmedas y pegajosas de sudor.

    La has hecho ahora, Tommy? se interes el rey . Vay a, eso si que esser gentil, no te parece?

    Muy gentil, Majestad dijo Flagg, que por casualidad se hallaba cerca.Lo haba dicho de un modo indiferente pero observando a Thomas con

    verdadero inters.Qu es, muchacho? Anda, mustramelo!Me acord de lo mucho que te gusta hacer flotar barcos en el foso los

    domingos por la tarde, y Thomas ansiaba desesperadamente poder decirle y como quera que t me

    llevaras alguna otra vez contigo , pero se dio cuenta de que era incapaz deexpresar tal cosa.

    as que te hice un barco, me llev un da entero, me cort, y y

    Mientras haba estado tallando el barco junto a su ventana, Thomas compusoun largo y elocuente discurso que pensaba pronunciar antes de sacar a relucir elbarco, el cual ofrecera a su padre con un gesto ceremonioso; pero ahora a duraspenas lograba recordar algunas palabras, que no parecan tener ningn sentido.

    Con la lengua terriblemente trabada, Thomas sac el velero que tena ocultoen la espalda, del cual colgaba una vela desproporcionada, y se lo dio a Roland.

  • El rey lo examin con sus manazas de cortos dedos. Thomas se quedobservndole, sin advertir que se haba olvidado de respirar.

    Finalmente Roland alz la vista.Muy bonito. Muy bonito, Tommy. Es una canoa, no es as?Es un velero.Acaso no ves la vela? tena ganas de gritarle. Slo atar los nudos me ha

    llevado una hora, y no tengo la culpa de que uno de ellos se haya soltado y ahoracuelgue!

    El rey manose la vela suelta, que Thomas haba recortado de una funda dealmohada.

    As que es, por supuesto que si. Al principio me pareci una canoa y estola ropa lavada de alguna chica de Orania.

    Roland le gui el ojo a Flagg, el cual sonri vagamente al aire sin decir nada.De repente, Thomas sinti que poda vomitar en cualquier momento.

    El rey observ a su hijo un poco ms serio y le hizo seas para que seacercara. Thomas, abrigando las mejores esperanzas, se desliz tmidamente.

    Es un buen bote, Tommy. Firme, como t, un poquitn tosco, tambin comot, pero en el fondo bueno, al igual que t eres. Y si realmente deseas hacermeun bonito regalo, trabaja duro en tus clases de arquera para conquistar unamedalla de primera categora, como Peter ha hecho hoy.

    Thomas haba obtenido el primer lugar en los cursos inferiores del aoanterior, pero su padre pareca haberlo olvidado debido a su alegra por el logrode Peter. Thomas no se lo hizo recordar; simplemente se qued all parado,contemplando el bote en las grandes manos paternas. Sus mejillas y su frente setornaron del color del ladrillo viejo.

    Cuando por ltimo slo quedaron dos muchachos Peter y el hijo de LordTowson, el instructor mand que retrocedieran otros cuarenta koners. El hijo deTowson se vea desalentado, pero Peter se dirigi al lugar sealado y coloc unaflecha. Observ cmo apuntaba y me dije a mi mismo: Ha ganado! Portodos los d