Lic. Gabino Cué MonteagudoGobernador Constitucional del Estado de Oaxaca

Mtro. Francisco Martínez NeriSecretario de las Culturas y Artes de Oaxaca

Lic. Guillermo García ManzanoDirector General de la Casa de la Cultura Oaxaqueña

Lic. María Concepción Villalobos LópezJefa del departamento de Promoción y Difusión

Lic. Rodrigo Bazán AcevedoJefe del departamento de Fomento Artístico

Ing. Cindy Korina Arnaud JiménezJefa del departamento Administrativo

C.P. Rogelio Aguilar AguilarInvestigación y Recopilación

Un personajeindeleble

Mariela Morales es una de esas personas que han dejado huella indeleble en Oaxaca; y es que a lo largo de su existencia, siempre estu-

vo presente en su ánimo y en su actividad combatir 2

todo aquello que representara un retraso, una impo-sibilidad de desarrollo y una injusticia, de esas que se dan en la cotidianeidad en la vida de los humildes. Mariela, que fuera educada por su padre para que tu-viera herramientas de preparación y desarrollo poco comunes en las mujeres de su época, la mandó a los Estados Unidos con la finalidad de que aprendiera el inglés, cosa que desde luego marcó su vida futura.

Comprendiendo que no todo mundo tiene las opciones que ella disfrutó, pero sobre todo, estan-do muy clara en su mente la necesidad de servir a sus congéneres, se decidió porque todo su esfuerzo futuro sería encaminado a brindar oportunidades a las mujeres de las comunidades rurales, para que pu-dieran realizar labores más allá de aquellas que la so-ciedad de su tiempo les imponía, como la costura, el lavado y otras actividades domésticas que eran me-nester brindar como un servicio a la familia. Mariela quiso preparar a muchas personas para que supieran aprovechar los medios y los recursos de su región y para que fueran creativas en la artesanía; que supie-ran las bases de la construcción de casas habitación, que tuvieran un conocimiento más próximo a mante-ner niveles sanitarios y de salud en general, siempre en beneficio de su comunidad.

Vaya pues este pequeño homenaje “Indeleble” a una mujer también “Indeleble”, que fuera fundadora de la Escuela de Mejoradoras del Hogar Rural y que, como una auténtica mecenas, dejó su vida en bien de sus semejantes.

Guillermo García Manzano

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Carta devida

Mariela Morales “La Teacher” fue una verda-dera matrona oaxaqueña de generoso co-razón y alma noble. Los que la conocimos y

tratamos, aunque fuera de manera superficial y es-porádica, recordamos con nostalgia su figura more-na y arrogante, su palabra amable y contundente y su amplitud de miras en el servicio a sus semejantes. Sus ágiles dedos recorrían las teclas del piano, re-creando igual melodías vernáculas que complicadas obras clásicas y su fértil imaginación componía his-torias que servían a la enseñanza de mentes juveni-les, ávidas de escuchar su palabra.

Nació en el mes de las flores, el mes dedicado a la Virgen María, el 19 de mayo de 1914, en el seno de una familia formada por sus padres: José G. Morales y Elisa Páez y sus hermanos, María Teresa, Emilia, Jo-sefina, Alicia y un varón llamado Jorge. Así eran las familias oaxaqueñas de esa época, numerosas y muy solidarias en todas las circunstancias. Habitaban en la casa esquinera de las calles de Vicente Guerrero y Melchor Ocampo, en lo que hoy es el centro histórico de nuestra ciudad de verde jade.

La familia gozaba de una desahogada posición económica, pues el padre era propietario de una ne-gociación denominada “El Paje”, situada en uno de los portales del “centro” donde comerciaba con artí-culos de importación como telas, perfumes, adornos y ornamentos caseros y ropa para damas y caballe-ros.

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María Elisa o Mariela, como ya la empezaban a lla-mar familiarmente, tuvo sus primeros estudios con profesoras privadas, o que atendían a muy pocos alumnos, como Anita Verdín y Natalia Martínez, con quienes completó sus estudios primarios y se inició en el dominio del piano. Sus padres consideraron que en la ciudad no existía una institución educativa que pudiera desarrollar los talentos que ya apunta-ban en la niña María Elisa, por lo que decidieron en-viarla a los Estados Unidos, a un colegio de monjas, donde terminó sus estudios de piano y los equiva-lentes a los preparatorios. Desde luego que también aprendió a hablar y enseñar el idioma inglés y sobre todo, a utilizar sus conocimientos y capacidades en fomentar el desarrollo integral de sus semejantes.

Después de tres años de permanencia en el cole-gio situado en New Rochelle, New York, Mariela re-torna al suelo oaxaqueño y en el Instituto de Ciencias y Artes del Estado cursa la carrera de taquimecanó-grafa y también ingresa a la Escuela Normal Mixta del Estado para formarse como profesora, carrera que interrumpe al cursar el tercer grado, por el cierre del negocio familiar. Desde este año, 1934, comien-za a impartir clases del inglés que también domina-ba, aunque a pocos alumnos que la adoptan como maestra particular.

Por esos años comienza a fomentarse el turismo, considerado como una actividad recreativa visitando países diferentes al del origen del viajero. La Ley Fe-deral de Turismo de 15 de diciembre de 1954 estable-ció la Dirección General de Turismo como dependen-cia de la Secretaría de Gobernación, para atender al estudio y resolución de los problemas relativos a la materia y a su fomento. También se creó el Conse-jo Nacional de Turismo para actuar como consultor de la Dirección General, formado por los titulares de diversas secretarías de Estado y representantes de instituciones públicas y privadas. En la ciudad de Oa-xaca la Dirección Federal y la Oficina estatal quedan

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a cargo del señor Alfonso Zorrilla Barrundia que ejer-ce esos cargos durante 22 años.

Don Federico Holm establece en nuestra ciudad la primera agencia turística y en ella trabaja Marie-la, aprovechando su dominio del idioma inglés, que también le permite obtener de la Dirección de Turis-mo en la ciudad de México, la acreditación de guía de turistas. Igualmente ayudó a formar a otros guías turísticos como José Moreno Innes y Carlos Felgue-rez.

Mujer incansable y con amplias perspectivas, una vez terminada su carrera de taquígrafa se emplea en la Cámara de Diputados y, al mismo tiempo, termina su carrera de profesora normalista. Pasa a la recién creada Universidad Benito Juárez de Oaxaca donde funciona como secretaría del Rector Federico Ortiz Armengol y comienza a impartir clases de inglés en la secundaria y preparatoria de esa institución.

Con la visión que la caracteriza, propone a las au-toridades universitarias la creación de la carrera cor-ta de secretaria bilingüe, haciendo especial énfasis en que las egresadas de esta carrera, tuvieran el do-minio taquigráfico del idioma inglés. Esto lo logra en el año de 1960, y durante los siguientes cuatro años, la “Teacher” Mariela es el alma del grupo de jóvenes entusiastas que se preparan en esta nueva carrera universitaria.

Continuando su labor docente, imparte clases de inglés, economía doméstica y español en la escue-la que la había egresado: la Normal Mixta del Esta-do, donde permaneció como docente, igual que en la universidad, por más de 35 años. Sus alumnos de ambas instituciones, la recuerdan con gratitud por su manera franca, abierta, cálida y sencilla, no sólo de impartir sus cátedras, también de atender dentro de sus posibilidades, las necesidades sociales, materia-les y anímicas de sus numerosos alumnos.

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Su espíritu altruista y docente se fortalece por la cercanía con la señorita Ethel R. Doctor, quien dentro de su labor de proselitismo como pastor del culto protestante, apoya a jóvenes indígenas oaxaqueñas para que se preparen escolarmente, hasta permitir-les cursar la carrera de enfermería, que luego podían practicar en el Hospital Inglés de la ciudad de Méxi-co, lo que les permitía, cambiar su enfoque y nivel de vida.

Este ejemplo de solidaridad con los semejantes, impulsa a la “Teacher” a convocar a jóvenes mujeres de diversas regiones oaxaqueñas, a convivir con ella, aunque con bastantes incomodidades, en su casa, donde les proporcionaba alimentación, vestuario y educación escolar, contrariando la costumbre de muchos de nuestros pueblos que implica que las mu-jeres no tengan acceso a la escuela.

Esta nueva actividad en la agitada vida de Mariela, le causó innumerables problemas económicos, pues a pesar de sus múltiples ocupaciones, sus ingresos no cubrían las necesidades de sus jóvenes protegi-das y el pago de la carrera de su hijo Sergio Alta-mirano Morales que cursaba siquiatría en la Ciudad de México. Los apoyos solicitados por Mariela para sostener a sus “Morales” como llamaba a las niñas y jóvenes a su cuidado, fluían con lentitud de algunas amistades, principalmente las que había hecho en Estados Unidos durante su estancia escolar. Pocos paisanos abrían su escarcela para apoyar la labor al-truista de Mariela, que pasaba angustias y desvelos para sostener su labor educativa. Solamente su ami-ga Gloria Larumbe la apoyó prestándole una casa, para que la habitara con sus “Morales”.

El Licenciado Rodolfo Brena Torres fue electo para gobernar nuestro Estado durante el periodo 1962-1968. Hombre culto y de acendrado espíritu hu-manista, se rodeó de asesores que formularon el Plan Oaxaca”, con propuestas de acciones para cambiar

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a nuestro Estado en aspectos económicos, sociales y materiales. Por mediación de amistades mutuas, el Lic. Brena conoció la labor altruista que venía cum-pliendo con muchos esfuerzos y sacrificios la maes-tra Mariela. Después de entrevistarse con ella y ella con varios de los asesores del Gobernador, surgió el proyecto de establecer una institución educativa que ayudara a las mujeres de nuestras comunidades a prepararse para hacer frente a las ingentes nece-sidades de su vida personal, familiar y comunitaria.

El Gobernador Brena Torres conocía muy bien la marginación en que viven las mujeres oaxaqueñas, muchas de ellas sin acceso a los niveles educativos, porque así es la costumbre, y sin la preparación ne-cesaria para superar su estatus social y económico. Por tanto, el Gobernador acogió con beneplácito y brindó todo el apoyo oficial para la fundación de la escuela de mejoradoras del hogar rural.

La idea básica del proyecto era traer a un inter-nado, cuarenta jóvenes de nuestras diversas regio-nes, y en el transcurso de un año, enseñarles técnicas elementales de construcción, cocina, elaboración de vestuario, convivencia familiar y otros conocimientos que las ayudaran a mejorar su nivel de vida. Las estu-diantes, a su vez, se comprometían a regresar a sus comunidades, no solo para aplicar en su familia las habilidades adquiridas, también a enseñarlas a otras jóvenes de sus poblaciones, buscando el progreso de su grupo social.

Con apoyo del Comité Administrador del Pro-grama Federal de Construcción de Escuelas (CAP-FCE), se edificaron las aulas y anexos de la escuela en terrenos del parque Revolución en la parte Sur de nuestra ciudad. La maestra Mariela Morales fue nom-brada Directora de la Escuela Mejoradoras del Hogar Rural, institución inaugurada por el Presidente de la República Lic. Adolfo López Mateos el 2 de abril de 1964. El plan de estudios y sus programas fueron for-mulados con apoyo de la Srta. María Elena Jiménez,

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asesora de la Secretaría de Agricultura y Ganadería y las ideas y sugerencias de la maestra Mariela, basa-das en la experiencia adquirida en la convivencia con sus jóvenes “Morales”, a las que había apoyado en su casa y con sus escasos recursos.

Como ya apuntamos, la escuela inició con cin-cuenta jóvenes provenientes de comunidades como Etla, Zaachila, San Pablo Huixtepec, Mitla, Ocotlán, Ejutla, Guelatao, Tlaxiaco, Teposcolula, Loxicha, Te-huantepec, Juchitán, Betaza y algunas más, a las cuales no fue tan fácil de convencer para que per-manecieran en la escuela, pues como comentaba la maestra Mariela, los familiares de las alumnas no es-taban acostumbrados a que sus hijas abandonaran el hogar durante un periodo de tiempo relativamente prolongado.

La escuela contaba con campos deportivos y un amplio terreno donde las alumnas sembraron hortali-zas, secaban adobes fabricados por ellas y cuidaban sus colmenas, porquerizas y gallineros. La Directora habitaba en una casa construida dentro de los terre-nos de la escuela, lo que le permitía convivir con las alumnas, transmitiéndoles con la palabra y el ejem-plo, sólidos principios morales y valores familiares que les ampliaran su visión y desempeño comunita-rio, modificando sus costumbres.

El 3 de abril de 1965 concluyó el primer ciclo de la escuela y su Directora presentó a las autoridades estatales y federales, un informe de lo alcanzado. Egresaron 49 “Mejoradoras”, que habían obtenido nociones de horticultura, avicultura, apicultura, por-cicultura, corte y confección, tejido y bordado, cons-trucción de mobiliario, primeros auxilios, higiene fa-miliar y comunitaria, conservación de frutas y carnes, cocina rural, construcción de viviendas y letrinas, ho-jalatería y nutriología.

Este logro fue muy aplaudido por las autoridades y más aún por las comunidades de donde eran ori-

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ginarias las mejoradoras, a tal grado, que para el si-guiente ciclo educativo, la escuela tenía más de cien solicitudes de jóvenes deseosas de inscribirse y be-neficiarse ellas y sus familias. La Escuela de Mejora-doras del Hogar Rural funcionó hasta el año 1968 en que el Gobernador Ing. Víctor Bravo Ahuja la trans-formó en el Instituto de Investigaciones e Integración Social del Estado de Oaxaca, en el cual se conservó el plan de estudios de la escuela y se agregaron pro-gramas de castellanización de niños monolingües y opciones educativas de educación básica y licencia-tura en integración social.

De este instituto, la maestra Mariela fue nombrada Directora Administrativa, cargo que ejerció hasta el año 1976. Tuvo oportunidad, con apoyo de la Doctora Gloria Ruiz de Bravo, de realizar un viaje de estudios por China, Japón, Tailandia y los Estados Unidos, de donde trajo conocimientos sobre uso de fertilizantes, producción de vegetales en tierras áridas, pastoreo de especias adaptadas al medio u otros relacionados con productividad agrícola que impartió y aplicó en el Instituto.

Un poco más de siete años estuvo la maestra Ma-riela aportando sus conocimientos y experiencias a las nuevas generaciones que llegaban al IILISEO, has-ta que en 1976 el instituto cerró sus puertas agobia-do por las demandas de cambios en su interior y al cada vez más exiguo presupuesto oficial. Los frutos obtenidos de esta modalidad educativa, aún pueden comprobarse en diversas poblaciones de nuestro Es-tado, aunque el reconocimiento de sus logros no sea muy aceptado por gobiernos subsiguientes.

La Maestra Mariela Morales fue llamada a laborar en el Instituto de Educación Pública del Estado de Oaxaca, durante la administración gubernamental del Lic. Heladio Ramírez. Tuvo a su cargo la orga-nización y administración del programa “Albergues indígenas”, sitios que favorecían la permanencia de alumnos de nivel primaria, originarios de poblacio-

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nes pequeñas, que se concentraban en el albergue de lunes a viernes y allí recibían la instrucción, ali-mentación y dormitorio. La “Teacher” propugnó y lo-gró que los educandos tuvieran jornadas vespertinas en las que les enseñaban cultivo de huerto familiar, crianza y aprovechamiento de animales domésticos y otras actividades que ya habían sido exitosas, tan-to en la Escuela de Mejoradoras como en el Instituto de Integración, para cambiar, mejorando, el nivel de vida de los alumnos.

A partir de 1995, la salud de la maestra Mariela se vio seriamente afectada. Aún en estas circunstan-cias, no decayó su ánimo generoso ni su buen humor y así la sorprendió la muerte el 26 de agosto de 1996. Su funeral se ofició en el templo de Jalatlaco, muy cercano a su domicilio, y su sepelio se efectuó en el antiguo panteón de San Miguel, a donde la acom-pañaron familiares, alumnos, amigos, compañeros de trabajo y muchas más personas que tuvieron el pri-vilegio de su trato.

Aun en vida, la Teacher Mariela tuvo el reconoci-miento a su valor humanitario y docente por parte del diario “Noticias” en el año 1989. En 1995, el Go-bierno del Estado, mediante su Instituto Oaxaqueño de las Culturas, le organizó un muy merecido home-naje, donde se recordó su amplia trayectoria como educadora y su inigualable generosidad, no solo para sus “Morales”, también para muchas personas a quienes abrió su corazón y su bolsillo con genero-sidad inaudita. La maestra, emocionada, agradeció este evento que ella consideraba inmerecido, acorde con la sencillez y la humildad que la caracterizaron. Y así la recordamos ahora en este folleto.

R.A.

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Una muestra del talento de Mariela Morales

ESCUELA DE MEJORADORAS DEL HOGAR RURALProfa. Mariela Morales Vda. de Altamirano

Es para mí una presea de valor incalculable ha-ber llegado a este día en que la obra de un gobierno progresista culmina con la entrega de diplomas a la primera generación de Mejoradoras del Hogar.

Sin su ayuda, Sr. Gobernador y el apoyo firme y decidido que nos ha prestado así como la colabora-ción inapreciable de los señores Lic. Cutberto Cha-goya, Srio. Gral. del Despacho; Carlos Corres, Teso-rero General de la Entidad y Lic. Guillermo Martínez León, Subsecretario de Gobierno, jamás hubiéramos podido entregar a las comunidades rurales a cin-cuenta muchachas, las que en su mayoría se encuen-tran capacitadas para enseñar a los suyos una vida mejor. Estas mujercitas, en los albores de la juventud, están llenas de ilusión para trabajar por sus herma-nos y demostrar al pueblo de Oaxaca que cuando la mujer pone su corazón en una obra puede hacer lo imposible para que se cristalice en realidad todo aquello que signifique un porvenir lleno de ventura y mejoramiento para sus congéneres.

Las 49 alumnas que hoy egresan, fueron cuidado-samente seleccionadas en sus respectivas comuni-dades por la señorita Gloria Larumbe, Subdirectora del plantel, y en general puede decirse que fue su-mamente acertada. Para el próximo periodo quizás

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no sea necesario practicar nuevamente esta selec-ción pues tenemos pendientes de resolución cerca de 75 peticiones asignadas por muchachas de varias regiones del Estado, en particular de la Mixteca y de los Mijes.

Son 12 los maestros con que cuenta esta escuela, mismos que impartieron las siguientes clases: Nutrio-logía, Avicultura y Apicultura, Horticultura, Primeros Auxilios, Bordado y Tejido, Corte y Confección, Pre-paración de Carnes, Educación Física, Carpintería, Rudimentos de Construcción, Hojalatería, Relaciones Familiares, Puericultura, Acercamiento a la Comuni-dad, Economía del Hogar y Cocina Rural, Higiene Fa-miliar, del hogar y de la comunidad.

Nuestros estudios estuvieron divididos en dos periodos de cinco meses cada uno y éstos a su vez subdivididos en grupos de once semanas; se hicieron cuatro reconocimientos durante el lapso a que me refiero, las clases, en su mayoría, fueron impartidas cinco o diez horas a la semana, según el caso lo re-quería.

Dentro de las materias impartidas quiero destacar algunas: en la clase de Primeros Auxilios, se le impar-tieron conocimientos para prevenir enfermedades y evitar su contagio; cuidados del niño y de la madre, aplicación de inyecciones intramusculares e intrave-nosas, vendajes y atención de partos en caso de ur-gencia y con especialidad la impartición de primeros auxilios a enfermos, heridos o accidentados; higiene familiar y de la comunidad así como del hogar.

A Relaciones Familiares se le ha dado especial atención; la señorita Larumbe, titular de la clase se dedicó a hacer comprender a nuestras educandas la importancia que tiene la unión de la familia, el respe-to mutuo que deben guardarse entre sí y entre los habitantes de una comunidad. Sobre éste tema la se-ñorita profesora María Elena Guzmán Silva dictó una conferencia muy interesante a las alumnas.

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En Cocina Rural se procuró emplear en sopas y guisos todas las verduras cosechadas, procurando que los platillos hechos fueran de bajo costo y sin grasa. Se les enseñaron algunos de nuestros dulces regionales tales como tortitas de coco, rosquetes, huevo real, huevos nevados y nicuatole, productos que ya están desapareciendo de nuestras mesas.

En la clase de Acercamiento a la Comunidad se les explicó cómo deberán llegar a los suyos para con-vencerlos y enseñarlos a llevar una vida más higié-nica, a vivir mejor empleando los recursos de cada comunidad, cuidar a sus niños, prepararles sus ali-mentos y en fin, todo aquello que por años le ha he-cho falta saber a nuestros campesinos.

En la clase de Economía se le ha hecho ver que el hogar no es solo la casa que los protege del frío, del calor, del aire, del agua, el lugar donde se les propor-ciona comida y descanso, sino que es precisamente donde se encuentran los amores más profundos y sinceros de nuestras vidas, donde siempre debe rei-nar paz y alegría y, que para conseguir esto, cada una debe ayudar a sus padres de buen modo en los tra-bajos diarios, que el trabajo por equipo y bien distri-buido resulta más fácil; han aprendido a lavar trastos, a planchar, a lavar, al arreglo de la casa, distribución de gastos y disposición de las comidas. Fabricaron un horno de carbón sumamente sencillo, para que en lo posible, ellas los hagan en su comunidad y puedan tener pan para sus familias.

A partir del 6 de noviembre del año pasado se iniciaron las prácticas de las alumnas en el cercano pueblo de San Felipe del Agua, a donde se trasla-daban todos los viernes en camión especial, propor-cionado por el superior gobierno del Estado. Estas prácticas, por la importancia que tienen, constan de un capítulo especial que será dado a conocer a uste-des por la señorita Gloria Larumbe, subdirectora del plantel y catedrática de la materia “acercamiento a la comunidad”.

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Durante el lapso que comprende el presente in-forme, la escuela se vio constantemente visitada por el turismo extranjero y es hondamente satisfactorio para la suscrita manifestar que todos los visitantes han quedado gratamente impresionados por la for-ma en que viene funcionando este plantel, pues han expresado que es la primera institución que cono-cen, donde se educa a la mujer campesina y se le encausa por senderos de mejoramiento.

El día 3 de octubre del año 1964, tuvimos el honor de ser visitados por el Sr. Lic. Julio Santoscoy, sub-secretario del Trabajo, quien vino como representan-te del señor Presidente de la República al informe del señor Gobernador del Estado, acompañado de los señores licenciados Mario Melgar, Jorge Octavio Acevedo, Dr. Octavio Cal y Mayor Sauz, Pablo Macha-do, Federico Patiño. Lic. Jorge Candiani y otras per-sonalidades, quedaron tan admirados del elemento humano que recibe instrucción en esta escuela que nos enviaron seis flamantes máquinas de coser, una cámara Kodak de cine con su proyector, tres radios, películas con temas sobre la educación audio visual y un proyector para éstas, pues expresaron que obras como la escuela, indican que el gobierno se interesa por el pueblo de Oaxaca y que todo mexicano tiene el ineludible deber de ayudar. A estas personas les hemos expresado nuestros profundos agradecimien-tos y los aparatos donados han pasado a formar par-te del inventario de la escuela.

El 5 de octubre anterior, a iniciativa del señor Ro-berto Figueroa, visitaron éste plantel las esposas de los miembros de las Cámaras de Comercio de los Estados unidos y de la Ciudad de México, acompa-ñadas por la esposa del señor Gobernador del Es-tado. Las alumnas prepararon un programa de can-tos y bailes de sus respectivas regiones, las damas quedaron sumamente complacidas y entregaron a la señora de Brena Torres, quien a su vez lo puso en manos de la suscrita, la cantidad de mil quinientos pesos para material de prácticas y diversiones. Este

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dinero fue gastado en jeringas para prácticas de pri-meros auxilios, cánulas, extracto de hígado Lilly, una colmena con núcleo de cuatro bastidores, dos velos, un ahumador, dos botes de miel, dos funciones de cine, una de circo y varias exhibiciones de cine que tuvimos en la escuela.

La señora FrancesSiacky, que ha demostrado un cariño e interés especial por nuestras niñas, les ofre-ció en su domicilio particular una fiesta; las mucha-chas americanas que se encontraban en su casa aga-sajaron a nuestras educandas, quienes a su vez co-rrespondieron a las atenciones recibidas invitándolas a este plantel, donde cantaron y jugaron al estilo de sus respectivos países.

El señor C. H. Muhbage, de Orlando Florida en la visita que hizo a esta escuela acompañado del señor Roberto Figueroa, quedó profundamente impresio-nado por la educación que se está impartiendo a la mujer campesina, por el esfuerzo del gobierno del Estado para conseguir este objeto, que donó a nom-bre del club de esa localidad, una biblioteca por va-lor de cinco mil pesos, libros que aún se encuentran en poder del Club Rotario de Oaxaca, pues están es-perando las calcomanías para poder hacer la entrega de referencia.

El señor profesor Benjamín Gurrola Carrera, Direc-tor de Educación en el Estado, gentilmente nos obse-quió dos bibliotecas: la colección “Técnica y Ciencia”, con 25 libros y la “Pedagógica de Perfeccionamiento Profesional” que contiene 27. Oportunamente agra-decí este donativo que nos ha sido muy útil.

Tuvimos oportunidad de llevar a las muchachas a varios festivales folklóricos para que apreciaran los bailables de las diferentes regiones del Estado; hici-mos una visita a Zaachila y a la cercana población de Xoxo. Todos Santos tratamos de celebrarlo con todo apego a nuestras tradiciones y en una de las aulas las muchachas erigieron un altar de acuerdo con las

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costumbres del Istmo, el cual fue visitado y fotogra-fiado. Asimismo, en las fiestas navideñas, la estancia fue decorada por las alumnas que se prestaron para esto, con motivos propios de la estación, tuvimos una cena a media noche después de haber admirado nuestras típicas calendas, que la mayoría de nuestras alumnas jamás habían visto.

El 28 del actual, como un homenaje a su obra, se-ñor Gobernador, un grupo de estudiantes preparato-rianos, encabezados por la señorita Rosalía Flores y José Castillo Viloria, estuvieron en este plantel a des-pedir a nuestras educandas, expresando que ellos admiran la misión tan noble que llevan a sus respec-tivas comunidades, que cada ser humano tiene un deber ineludible de cumplir y que a ellas les ha toca-do el más noble, un tanto difícil por tener que romper con viejos moldes, pero por difícil más admirado por los que, como ellos, los preparatorianos, tienen una vida relativamente regalada. Los grupos “Folklórico Universitario” y “Flores Magón”, presentaron mag-níficos bailables, así como declamaciones y piezas de guitarra y acordeón. Una de nuestras educandas agradeció ésta inolvidable convivialidad.

Es mi más ferviente deseo que todos los oaxa-queños conozcan este programa que en concepto de todos los extranjeros y paisanos (radicados en México) que nos visitan, es una gran obra de usted, señor Gobernador. Las muchachas aquí presentes y las que vengan en lo sucesivo, tienen en sus manos la llave mágica para enseñar a nuestros hermanos campesinos a sacar el mejor provecho de sus recur-sos naturales, a educar a las futuras generaciones, a formar hombres y mujeres útiles a la Patria.

Creo que a pesar de mis esfuerzos no he satisfe-cho en todo las aspiraciones de usted, señor Gober-nador, pero es la práctica la que hace ver los errores y si la vida me lo permite, con todo el bagaje de co-nocimientos que he logrado adquirir en estos diez meses de convivir noche y día con las muchachas,

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podré llegar a la meta que usted ha soñado para la mujer oaxaqueña; esto podré lograrlo con la ayuda inapreciable de la señorita subdirectora y de los se-ñores catedráticos del plantel.

Antes de terminar quiero agradecer al H. Cuerpo de catedráticos su devoción, dedicación en su cla-se, el cariño a esta escuela, pues no habiendo reloj marcador ni libro para controlar su asistencia, con toda puntualidad, salvo en raras ocasiones, por cau-sa de fuerza mayor, han concurrido a su cátedra. Los programas fueron terminados y es motivo de orgu-llo para la suscrita ver prácticamente los resultados obtenidos. A ustedes, señores maestros, que han sido mis más valiosos colaboradores, quiero rogar-les acepten mi infinita y sincera gratitud y el cariño imperecedero que las educandas guardan para us-tedes, a la señorita subdirectora, que ha compartido conmigo los momentos de desaliento, cuando cree-mos que no hemos adelantado nada y los de ver-dadera satisfacción cuando sentimos que la semilla fructifica, mi inmensa gratitud y a ustedes, queridas niñas, que hoy abren sus alas para lanzarse a remo-tos horizontes, llevando como escudo para la lucha, la Fe que un gran oaxaqueño ha puesto en ustedes, el cariño para los suyos, la enseñanza de sus maes-tros y sólidos principios morales sobre los que debe-rán fincar sus enseñanzas futuras, recuerden cuan-do el desaliento llame a su puerta que cuentan con corazones amigos, que un oaxaqueño espera mucho de ustedes, sus muchachas piloto, para vencer la ig-norancia, para derramar luz, para llevar optimismo y ambiciones de vivir mejor a sus comunidades.

Cuando han estado enfermas, tristes, preocupa-das por asuntos familiares, en este lugar han encon-trado una mano que seque sus lágrimas, que cure sus dolores e infunda optimismo en su corazón, esto ha sido un ejemplo que deben imitar y cuando el ne-cesitado, el enfermo, el ignorante llame a sus puer-tas, nunca las cierren, es un alma que necesita de us-tedes, e imitando el ejemplo recibido deben enjugar

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su llanto, consolar su pena y llevar un poco de alegría a su corazón, recuerden que causa más satisfacción dar que recibir.

Deben guardar gratitud eterna hacia el gobernan-te probo, hacia el magnánimo amigo que ha pensado en mejorar sus comunidades, en tratar de conservar a la familia unida y proporcionar más comodidad a los suyos. Creo que el paso de ustedes por esta es-cuela ha quedado estereotipado en sus corazones y al recordar el remanso de paz que han vivido, forzo-samente tendrán que pensar en la persona amiga, en el gobernante lleno de ambiciones para ustedes que pudo hacerlas vivir un hermoso cuento de hadas.

NOTA. Sinopsis del informe de la Directora de la Escuela para Mejoradoras del Hogar Rural, maestra Mariela Morales Vda. de Altamirano, presentado el sábado 3 de abril de 1965, en las instalaciones de la misma escuela. R.A.

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PALABRAS del Lic. Julio Santoscoy, subsecretario del Trabajo y Previsión social, pronunciadas en el acto conmemorativo de la conclusión del primer año lectivo de la Escuela para mejoradoras del Ho-gar Rural, el 3 de abril de 1965.

Como este día pertenece a estas muchachas que hoy concluyen sus estudios de Mejoradoras del Ho-gar rural, sólo quiero, después de felicitar cordial-mente a la Directora, a la Subdirectora y al personal docente de la escuela, por la labor que han realiza-do en este ciclo escolar que hoy termina, dirigirme a ellas y pedir disculpas a usted, señor Gobernador y a las demás personas que nos honran con su presen-cia, porque sólo a estas muchachas dirija mi mensaje.

Ustedes, muchachas oaxaqueñas, habrán oído ha-blar alguna vez, de que a lo largo de la historia de la humanidad, en todos los pueblos y en todas las naciones y también en México, nuestra Patria, han existido grandes mujeres, heroínas sin miedo y sin tacha, luchadoras por la libertad, científicas dedica-das al bien humano, estudiosas investigadoras, gran-des enfermeras, notables abogadas e ilustres repre-sentantes en general del bello sexo, que elevándose por encima de sus semejantes alcanzaron puestos excepcionales en el devenir de la historia.

Es verdad, amigas mías, es cierto que ha habido grandes mujeres en todos los tiempos y en todos los países. Pero puedo aseguraros, con el corazón en la mano; y creo que conmigo la mayoría de los hombres coincidirán, que esos casos de excepción, no son lo característico, lo normal en la tarea que la mujer tie-ne encomendada en la sociedad humana.

Si la humanidad no hubiera tenido otras mujeres que Juana de Arco, o Josefa Ortiz de Domínguez, o Madame Curie o Florence Nigthingale, no se hubiera desarrollado, no habría podido llegar hasta el mo-mento actual de la historia, por más digna y noble y

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meritoria que la acción de tales seres extraordinarios hubiera sido.

La mujer que ha hecho posible soportar los desas-tres, las calamidades colectivas, las guerras y las ca-tástrofes, la mujer que ha hecho posible las grandes gestas humanas, como las rebeliones campesinas de la Edad Media, la Revolución Francesa, la Revolución Mexicana y otras, ha sido la compañera abnegada del hombre, la que lo anima cada día a seguir en la lucha por la vida, la que le impulsa cuando su ánimo decae, la que le señala la luz a lo lejos, cuando, la os-curidad le rodea. Y esa mujer que, según decía Martí, está con su sonrisa detrás de toda gloria masculina, esa mujer es la compañera del hogar, la esposa, la madre, la hija y la hermana.

México ha tenido heroínas y volverá a tenerlas, cuando la historia lo reclame pero lo que ahora nece-sita son muchachas como ustedes, mujeres sencillas del pueblo, capaces de amar o de comprender, capa-ces de ayudar y de luchar no en la lucha excepcional de tiempos heroicos sino en la lucha heroica de to-dos los días.

Necesitamos mujeres abnegadas, inteligentes y sufridas, y las necesitamos en el pueblo en lo más hu-milde y recóndito del pueblo, porque de ese pueblo venimos todos, porque todos nosotros, queramos o no, somos el producto de muchas generaciones de mujeres humildes y abnegadas, que supieron ser buenas hijas, fieles esposas y amantes madres en la intimidad del hogar.

Por esas razones el Gobernador del Estado, mi muy estimado amigo el licenciado Rodolfo Brena Torres, ha organizado y auspiciado estos cursos de mejoradoras del hogar que ustedes terminan hoy, porque la célula primaria de la sociedad es la familia, porque el seno de la familia es el hogar y sin familia no hay patria.

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Ustedes, muchachas, tienen ahora una gran res-ponsabilidad; a ustedes se les ha enseñado muchas cosas, no para que las olviden o las escondan en un rincón de su mente, sino para que las divulguen por todas partes, porque cada una de ustedes debe ser una maestra de todo lo que aquí aprendió, para ayu-dar a sus amigas, a sus madres y un día a sus hijos a mejorar los hogares de Oaxaca, es decir, a mejorar los hogares de México.

Tengan siempre presente que ustedes son muy importantes para México, que México les enseñó todo lo que ahora saben para que la patria sea mejor. Y vayan a sus pueblos, a las rancherías y a los hoga-res, a llevar el mensaje de higiene, de conocimientos y de buena organización hogareña que aquí han re-cibido.

Y recuerden también que estas enseñanzas, este bien que ustedes han recibido, es debido al gobier-no de la Revolución Mexicana que fue una revolu-ción que se hizo para que todo el pueblo, hasta los más humildes, en los lugares más lejanos, alcancen sus beneficios. Así pues, partid ahora, muchachas de Oaxaca, a llevar por todas partes donde vivan, el mensaje del gobierno de Oaxaca que es el mensaje de México: ¡queremos que nuestros hijos y nuestras familias vivan cada vez mejor!