Lo Que La Masonería Ha Producido en Mí

3
Lo que la Masonería ha producido en mí Hermanos, queridísimos hermanos, hoy toca hablar de la parte del cerebro que confundimos con el corazón, que no hace sino que alterar sus ritmos ante emociones impactantes o fútiles, según su relevancia. No os descubro nada nuevo diciéndoos qué magia interna es la que implosiona de manera incontrolada, el tobogán rizado de sensaciones que nos atraca el organismo con balas de muerte y renacimiento, es una espiral contínua de reencarnación de uno mismo al ser iniciado. Sólo unos cuantos la experimentan y jamás la olvidan. Y cómo describir la paz que se nos injerta con las manos dentro de unos guantes que nos acompañarán toda una vida, escuchando la bienvenida del Orador. Unos guantes que jamás nos quitaremos en la inmensa tarea que supone ser masón. Me siento orgulloso, me siento satisfecho. Por fin encontramos las preguntas. De vez en cuando algunas respuestas que conducen a preguntas nuevas. La curiosidad delaprendiz siempre insatisfecha, aún profundizando en los Augustos Misterios de la Orden, avanzando en grados que no hacen sino retornarte al origen de la iniciación. Todo conduce a ese momento, a la muerte. En masonería la muerte es pasado, y el futuro deceso sólo será un trámite a un Oriente algo más conocido por los que sabemos que al evolucionar, al saber la reducida dimensión de nuestros conocimientos adquiridos en la masonería, nos acerca de nuevo a aquella habitación reflexiva. La evolución intelectual y espiritual paradójicamente nos lleva siempre al principio, a la “insabiduría”. La masonería tiene la habilidad de proporcionarte las herramientas necesarias para hacerte recordar lo pequeño que eres y el poco lugar que ocupas en el Orbe fraterno del maravilloso mundo fraternal que te arropa una vez en él.

Transcript of Lo Que La Masonería Ha Producido en Mí

Page 1: Lo Que La Masonería Ha Producido en Mí

Lo que la Masonería ha producido en mí 

 

Hermanos, queridísimos hermanos, hoy toca hablar de la parte del cerebro que confundimos con el corazón, que no hace sino que alterar sus ritmos ante emociones impactantes o fútiles, según su relevancia.

No os descubro nada nuevo diciéndoos qué magia interna es la que implosiona de

manera incontrolada, el tobogán rizado de sensaciones que nos atraca el organismo

con balas de muerte y renacimiento, es una espiral contínua de reencarnación de

uno mismo al ser iniciado.

Sólo unos cuantos la experimentan y jamás la olvidan. Y cómo describir la

paz que se nos injerta con las manos dentro de unos guantes que nos acompañarán

toda una vida, escuchando la bienvenida del Orador. Unos guantes que jamás nos

quitaremos en la inmensa tarea que supone ser masón.

Me siento orgulloso, me siento satisfecho.

Por fin encontramos las preguntas. De vez en cuando algunas respuestas que

conducen a preguntas nuevas. La curiosidad delaprendiz siempre insatisfecha, aún

profundizando en los Augustos Misterios de la Orden, avanzando en grados que no

hacen sino retornarte al origen de la iniciación. Todo conduce a ese momento, a la

muerte. En masonería la muerte es pasado, y el futuro deceso sólo será un trámite

a un Oriente algo más conocido por los que sabemos que al evolucionar, al saber la

reducida dimensión de nuestros conocimientos adquiridos en la masonería, nos

acerca de nuevo a aquella habitación reflexiva.

La evolución intelectual y espiritual paradójicamente nos lleva siempre al principio,

a la “insabiduría”. La masonería tiene la habilidad de proporcionarte las

herramientas necesarias para hacerte recordar lo pequeño que eres y el poco lugar

que ocupas en el Orbe fraterno del maravilloso mundo fraternal que te arropa una

vez en él.

Sólo puedo hablar de mi Logia. Pues no conozco mucho más. Siquiera sé si me

interesa. Hablo de ella y posiblemente algunos hermanos se sientan identificados,

aunque evidentemente no será revelada su identidad.

El pasado año, hemos tenido problemas de perspectiva y concepción de cómo

debían dirigirse los designios del Taller. Hubo dos facciones bastante diferenciadas

Page 2: Lo Que La Masonería Ha Producido en Mí

y cada uno, como en cualquier grupo humano, utilizó los recursos necesarios para

que su visión fuese la dominante.

Ciertamente no voy a entrar en los detalles por los que postulaba cada facción, pero

sí voy a entrar en los que me interesan y pienso que al lector también pueden

resultarles más importantes.

He de confesar que un servidor estaba en el sector que perdió, dado que se

presentaron dos candidaturas a la veneratura del siguiente curso masónico. Al

encontrarme en la tesitura de dejar todo (es el primer impulso lógico), decidí no

hablar, solo escuchar. Darme el tiempo que el período vacacional me

proporcionaba, repensar las cosas, examinar mis sensaciones.

Ciertamente, al principio del siguiente curso, no fueron buenas. Más bien me sentía

un poco fuera de lugar. Como es evidente, las tensiones generadas no habían

terminado de cicatrizar entre uno y otro bando. Aunque todos hicimos un esfuerzo

conciliador a base de silencio.

Bien, vamos a lo que interesa. Cuando he dicho anteriormente que me sentía

orgulloso, no es por haber superado casi totalmente la decisión de irme, ni por

haber acudido casi forzándome a las tenidas.

Me siento orgulloso porque no siento absolutamente ningún rencor ni odio o rencilla

alguna hacia ningún Hermano. Aún a día de hoy los hay que no están de acuerdo

con mis planteamientos masónicos, y se encargan de recordármelo siempre que

pueden, a veces de manera vehemente. Pero ¿saben?, entiendo que defienden

su idea como yo lo hice en su momento, pero no pienso repetir el

enfrentamiento que nos condujo a esa situación tan desagradable.

Cuando interiorizas la ausencia de rencor, cuando eres consciente de que tus

postulados sólo te sirven a ti, y a veces ni siquiera eso, cuando el ego se reduce a la

mínima expresión, y empatizas con cualquier Hermano sólo por el hecho de serlo,

piensas en cómo la masonería ha actuado en ti, en como tu piedra se ha ido

puliendo hasta el punto de querer a un Hermano radicalmente distinto a

ti, y piensas que has logrado un pequeño objetivo: ser mejor persona.

Por eso, cuando me preguntan por qué estoy en ella siempre respondo lo

mismo: por mis Hermanos.

Salud, Fuerza y Unión. Libertad, Igualdad y Fraternidad

Pero de verdad, sin eslóganes.

He dicho QQ.·. HH.·