Los discursos del Poder. Dominacin y Cultura meditica.En general, cuando escuchamos la palabra poder pensamos en algo malo y lo relacionamos con el discurso marxisat socialista, sin embargo el poder no es un ente, es algo que se ejercey que se realciona con el comportamiento de las personas.Espec!icamente, el poder de la cultura meditica est presente de manera constante en nuestras aulas y es, hasta cierto punto, responsable del comportamiento de nuestros alumnos. " !in de dilusidar qu# hacer con el problema del $%irreinato&, que nos ocupa aqu, el da de hoy, me he acercado a la propuesta de 'orge (uerdo, comuniclogo argentino, sobre educacin y cultura meditica.Empe)ar# por decir qu el problema del poder de la comunicacin y por lo tanto de lacultura meditica es que es una !orma de poder que a *eces pasa inad*ertida y, sin embargo,es el recurso tecnolgico que ms puede in!luir en el juicio, pensamiento o accin de cientos y miles de personas. La comunicacin meditica representa una !orma de dominacin sutil. Especialmente cuando no existe una ecuanimidad y objeti*idad en torno al contenido discursi*o de in!ormacin y busca in!luir en una u otra direccin. +aber cmo se relaciona el poder y la cultura meditica es un !orma de resistir esa dominacin.En principio podemos asentar *arios hechos,-. Los medios de comunicacin son !ormas sociales cada *e) ms in!luyentes en la *ida cotidiana de cada ser racional, pero nos rodean de tal manera que ya no prestamos atencin al poder que cotidianamente ejercen sobre nosotros./. La mercantili)acin de la in!ormacin existe y respondea intereses espec!icos particulares o colecti*os, que denotan la existencia de alg0n tipo de poder.Pero, qui)s la !orma ms !cil de identi!icar la relacin entre la comunicacin meditica y alguna !orma de poder, es atra*#s de la consolidacin econmica de los propios medios de comunicacin. "quellos tiempos en que los medios tendan a sustentar ciertos *alores !amiliares o comunitarios ya estn bien lejanos, y cuando as lo llegan a hacer es por otro tipo de intereses, que no siempre se relaciona con el bien com0n.Podemos considerar a la comunicacin meditica como un actor social con cuerpo, contenido y sentido signi!icante, especialmente social, situacin que le hace constituirse como parte integral del ejercicio interacti*o diariamente ejercido en una sociedad. E*identemente, a medida que un medio de comunicacin incrementa su ran1ing de audiencia, su poder de in!luencia sobre la cognicin de sus receptores crece, y es posible que #ste in!luya sobre las actitudes, posturas o interpretaciones que el receptor de los mensajes re2codi!ique a tra*#s de su subjeti*idad. "parte del potencial para in!luir en el aspecto cogniti*o del receptor, ese hecho en s, es permeable a intensi!icacin de por ejemplo ideologas, estrategias polticas y slogans discursi*os que no siempre tienden a sostener *alores que *ayan ms all de lo monetario. +eamos sinceros, ser $totalmente Palacio& o seguir un $trend& en t3iter, no nos hace mejores seres humanos ni nos hace ms solidarios con nuestra comunidad, sin embargo, s nos hace parte de la cultura meditica que adems de #stas, tiene muchas otras !ormas."lgo que es importante recordar, es que tanto la comunicacin meditica y el poder, son parte de un cuerpo social. +u *inculacin o correlacin es recproca porque ambos parmetros son dependientes del discurso como 0nico medio capa) de mediar o catali)ar lasacciones de comportamiento y dominio suscitados entre ambos.El discurso tambi#n es considerado como una !orma de poder en cuanto a comunicacin de creencias y como interaccin de ndole social. Ello e*idencia de acuerdo con 4an Dij1, que el discurso implica adems del proceso de cognicin indi*idual, un proceso de cognicin sociocultural 5/66-7.8na *e) establecido que la cultura meditica es una !orma de poder que nos a!ecta atodos, podemos re*isar cmo nos a!ecta dentro del mbito de la uni*ersidad.En la actualidad, es a atra*#s de los medios masi*os de comunicacin que se transmite la mayor parte de la cultura, que, de acuerdo a Ed3ar +aid, es lo mejor y ms representati*o de una sociedad. Es decir que la cultura incluye 9:D:. Desde el (imno ;acional hasta los narcocorridos, desde la poesa de 4illaurrutia hasta los albures, desde el traje de 9ehuana hasta la bolsa Prada y las botas 8ggs que usan nuestras niE /D, >nstituto Polit#cnico ;acional.Aoucault, %ichel 5-CJ67, $+obre la Neogra!a&, en %icro!sica del poder, %adrid, La Piqueta. Areire, Paulo 5-CHI7, "ccin cultural para la libertad, Buenos "ires, 9ierra ;ue*a. 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