Los “árboles” son particularmente aso-ciados con el proceder de los fieles (Sal. 1:3; 52:8; 92:12,13; Is. 61:3), mientras que la vegetación seca o silvestre sim-boliza a los infieles de Israel (Is. 5:1-7; Jer. 2:21; Ez. 15:6,7; Os. 10:1; etc.)

En Ap., el “granizo” y el “fuego” se aso-cian con los juicios de Dios sobre sus enemigos y los de su pueblo (16:21; 20:10, 14, 15; 8:5; 11:5).

Los “árboles” simbolizan al pueblo de Dios que ha de ser protegido gracias al “sello” (7: 1-3; 9:4).

Por contraste, estos representan a aquellos que no son protegidos por este sello, mismos que pueden ser considerados como detractores del Pacto.

Las “terceras partes” pueden enten-derse como porciones del reino satá-nico (Ap.16:14,19 y sellos 2, 3,4).            

La 1tr. describe un juicio La 1tr. describe un juicio divino correspondiente a las divino correspondiente a las oraciones de los santos, el cual oraciones de los santos, el cual recae sobre una porción del recae sobre una porción del reino satánico que bien puede reino satánico que bien puede haber sido anterior-mente leal haber sido anterior-mente leal al reino de Dios. al reino de Dios.

Los lectores originales bien Los lectores originales bien pudie-ron haber identificado a pudie-ron haber identificado a los recep-tores de estos juicios los recep-tores de estos juicios con la nación judía, quienes con la nación judía, quienes rechaza ron al Me-sías (Mat. rechaza ron al Me-sías (Mat. 3:10-12; Luc. 12:49; 23:28-31). 3:10-12; Luc. 12:49; 23:28-31).

Los símbolos de la 2tr. también apare-cen en el AT.

El agua convertida en sangre nos re-cuerda las plagas de Egipto (Ex. 7:19-21).

La alusión más significativa es a Jer. 51 (el río Eufrates y la caída de Babi-lonia).

El contexto de esta simbología apunta a un juicio sobre naciones “gentiles”.

2a trompeta2a trompeta

Una montaña puede simbolizar una nación (Is.13:4; Jer. 51; Is. 10).

El fuego, como en la 1tr., representa destrucción violenta de la vida.

El mar casi siempre representa na-ciones en oposición a Dios (Is. 57:20; 17:12,13; Jer. 51:41,42; cf. Rev 13:1; 16:12; 17:15).

Criaturas marinas simbolizan gente (Ez. 29:5; Hab. 1:14).

La destrucción de peces La destrucción de peces representa juicio divino contra representa juicio divino contra impíos (Hag 4:3; Sof. 1:3).impíos (Hag 4:3; Sof. 1:3).

La destrucción de embarcaciones La destrucción de embarcaciones tiene que ver con caos económico tiene que ver con caos económico y humillación de la nación que lo y humillación de la nación que lo sufre (Ap.18:17-19).sufre (Ap.18:17-19).

En Ap. “una gran montaña” En Ap. “una gran montaña” represen-ta claramente a Babilonia represen-ta claramente a Babilonia como sím-bolo de los enemigos de como sím-bolo de los enemigos de Cristo y su pueblo, al fin del Cristo y su pueblo, al fin del tiempo (17:1-3,9; 18:21; 17:16; 18: tiempo (17:1-3,9; 18:21; 17:16; 18: 8,9,18). 8,9,18).

El hecho de que sólo se mencione una montaña en Ap. 8:8 y no siete, como en 17:9, indica que esta plaga no cae sobre la Babilonia del tiempo del fin, sino sobre una manifestación previa de la misma.

Comunmente, en el judaísmo del si-glo I, Babilonia era una referencia críptica a Roma.  

La 2tr. es la respuesta divina a las oraciones de los santos que cae sobre uno de sus enemigos, en ese momen-to: Roma.

La estrella que cae en la 3tr. es una evidente reminiscencia de la caída de Lucifer (Is.14:12-15).

Dicho pasaje nos habla del intento satánico por usurpar la autoridad divina; la caída es la consecuencia del mismo.

En Lucas 10:18 se menciona que Sa-tanás cae del cielo al igual que en Ap. 12: 3, 4, 9, en donde se relaciona dicha caída también con estrellas.

3a trompeta3a trompeta

Fuentes de agua contaminadas deno-tan decaimiento espiritual (Pr.25:26).

El “ajenjo” representa apostasía, así como sus consecuencias (Dt. 29: 17, 18; Jer. 9: 15: 23:15).

Toda esta simbología evidencia un estado de apostasía

La apostasía conduce a la muerte es-piritual y a la “contaminación” de la Palabra de Dios. Satanás ataca desde el interior (Hc. 20:28-31; 2 Tes. 2; 1 Tim. 4:1).

La 4tr. alude claramente a la 9a

plaga egipcia (Ex. 10:21-23). El sol es un símbolo de la Palabra

de Dios en el AT (Sal. 19; 119:105). La luna representa belleza y

fertilidad (Cant. 6:10; Dt. 33:14). Las estrellas representan ángeles y

al pueblo de Dios (Dan. 8:10; 12:3).  

Todo esto apunta a una obliteration parcial de la Palabra de Dios y a sus respectivas consecuencias.          

4a trompeta4a trompeta

Juan parece resaltar un ataque Juan parece resaltar un ataque so-bre la Palabra de Dios y su so-bre la Palabra de Dios y su pueblo de naturaleza diferente al pueblo de naturaleza diferente al de la 3tr. de la 3tr.

Mientras que el “ajenjo” Mientras que el “ajenjo” distorsio-nadistorsio-na la Palabra de Dios, la Palabra de Dios, en la 4tr. dicha Palabra es en la 4tr. dicha Palabra es obliterada (obliterada (obs-truidaobs-truida); no es ); no es “visible”. “visible”.

Todo apunta hacia una nueva Todo apunta hacia una nueva enti-dad o poder, el cual se opone enti-dad o poder, el cual se opone a la verdad y al pueblo de Dios de a la verdad y al pueblo de Dios de una forma más abierta.una forma más abierta.

¿Podría ser ésta una alusión al poder incrédulo personificado por Faraón, en Éxodo? (Ex. 5:2).

Rom. 1 aclara que los juicios, a me-nudo, son enviados indirectamente (permitidos) por Dios (causa-efecto; cf. Os. 4:17).

Aunque 2 enemigos han desapare-cido en las primeras 2 trompetas, Dios permite que la apostasía redun-de en el surgimiento de 2 nuevos enemigos: uno interno y uno externo.

5a trompeta5a trompeta La estrella alude, primariamente, a

Sa-tanás (cf. v. 11 e Is. 14), y a su intro-ducción de la apostasía en la iglesia (3a trompeta).

En este caso, dicha apostasía es co-nectada con la apertura del “abismo”.

Dios “tiene que ver” con tal apertura (v.1, 3, 5; cf. Ex. 19:18; las langostas en el AT son un símbolo de los juicios divinos.

El abismo simboliza la tierra en su es-tado “no creado” (Gen. 1:2).

Esto representaría a lo(s) que se opo-ne(n) a la re-creación humana, “en Cristo”.

También tiene que ver con la morada de los demonios (Lu.8:28-31), y con la bestia de Ap. 11:7; 17:8.

El “humo” que “eclipsa” al sol puede vincularse al surgimiento del poder que pretende raer el conocimiento de Dios (4tr.; véase Gen 19).

Las langostas con poder de escor-pión pueden representar cantidad y daño, respectivamente.

En el ACO, escorpiones y langostas con semejanza humana representa-ban a los soberanos del infra-mundo (cf. v. 11).

Las langostas, como plaga, eran un castigo a la apostasía (Jl. 1:4-18; 2:1-11; Jer. 4), cuya remisión debía hacerse en el templo (1Re. 8:35-40; Jl. 2:12-17).

Las langostas pretenden tornar la tie-rra como su propia morada: ¡sin ve-getación! Pero Dios no lo permite (9:4).

Pueden simbolizar agentes humanos inspirados por Satanás (9:7,8,11).

Los nombres Apolión y Abadón son personificaciones de la muerte (el destino de los impíos: Job 26:6; 31: 12; Sal. 88:11).

Por medio de ellos, Satanás esparce sus engaños (“colas de escorpiones” simbolizan falsificación profética: Is. 9:15).

Tal como su confinamiento al abis-mo (Ap 20:1-3) restringe sus en-gaños, abrir el abismo propicia lo contrario.

Dios permite que el enemigo extin-ga la “luz” en aquellos que recha-zan a Cristo (2 Tes. 2:9-12).

Dios “sella” a sus protegidos (Ez. 9:4).

Quienes no reciben dicho sello su-fren terribles tormentos (espiritua-les, no físicos).           

En suma, la 5tr. predice un tiempo cuando la oscuridad de la 4tr. llegaría a ser total, de alcance mundial y limi-tada a 5 meses.

Cuando Dios y su verdad son así eclipsados, los impíos (apóstatas) son abandonados a las pasiones de-moníacas (“suicidio”).

No obstante, el pueblo de Dios (“se-llados”) sería protegido. Tal es el po-deroso llamado de fidelidad al evan-gelio que allí se hace, sin importar las conscuencias negativas momentáneas.

6a 6a trompetatrompeta

Los eventos de la 6tr. se ligan nue-vamente a la actividad del altar (intercesión y juicio: v. 13).

El verso 14 es un claro contraste a la escena de Ap. 7:1-3.

Siendo que los vientos allí aludidos parecen ser los mismos, la 6tr. pre-senta un desarrollo posterior (fi- nal) de la situación del capítulo 7.