Luz quebrada - Inicio
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El golpe de estado del 18 de julio de 1936 quebró los sueños de gran parte de la población y,
en concreto para las mujeres, supuso la pérdida de todos los derechos que habían logrado y
adquirido con la II República, y también de los hombres que formaban parte de su vida.
El espectáculo recupera algunas historias de estas mujeres que fueron encarceladas, no por sus
ideas políticas, si no por ser hijas, mujeres o hermanas de algún hombre relacionado con las
izquierdas. Y reivindica el papel de otras mujeres, activistas, fuertes y valientes, que se
atrevieron a enfrentarse con quienes las preferían calladas.
Recuperamos un fragmento de la historia que no parecía interesar demasiado, porque no era la
historia del protagonista, si no de los personajes secundarios que, también, fueron objeto de
una venganza y una represión tan dura como la que sufrieron sus compañeros, padres o hijos.
Luz quebrada
“¿Pero, por qué tengo que esconderme si no he hecho nada?”
Dones republicanes, Margalida Capellà
El espectáculo quiere ofrecer una visión de género del conflicto bélico, la guerra y la
postguerra des del punto de vista de las mujeres que lo han vivido y sufrido. En nuestro caso,
nos centramos en la Guerra Civil española y la represión posterior en Mallorca, pero con la
intención de abarcar todas las mujeres y todas las guerras.
La Guerra Civil fue un hecho histórico decisivo en la España de siglo XX, con un golpe de
estado que anuló los sueños de mucha gente. Supuso la ruptura total con el pensamiento más
progresista y la regresión social. Pero, sobre todo para las mujeres, quebró sus esperanzas de
igualdad y libertad, con la idea de recluirlas al espacio familiar y cotidiano.
Y esta es la idea que queremos representar: las esperanzas rotas de las mujeres −jóvenes, niñas
y adultas− que vivieron en aquel tiempo oscuro. Queremos recuperar la vida de las mujeres
que fueron encarceladas, no por sus ideas políticas, si no por ser hijas, mujeres o hermanas de
algún hombre relacionado con las izquierdas. Y reivindicar el papel de otras mujeres, activistas,
fuertes y valientes, que se atrevieron a enfrentarse con quienes las preferían calladas. Todas
ellas, mujeres que han vivido un drama espantoso, que han sufrido toda la vida, pero que a
pesar de ello consiguieron seguir adelante.
3 actrices nos cuentan las historias de estas mujeres que hasta ahora permanecían calladas, por
las presiones o por miedo a recordar. Y, sobre todo, porque «tenían interiorizado el
sentimiento de ser muy poco importantes, o incluso de ser culpables», como dice Margalida
Capellà en el recopilatorio de entrevistas “Dones republicanes. Memòria de la Guerra civil a
Mallorca” a partir de las cuales hemos realizado la dramaturgia.
«No era consciente de estar llenando un vacío, pero poco a poco me di cuenta que todas
aquellas mujeres habían sufrido un doble silencio: el de la dictadura y la represión, claro, pero
también el de la historiografía, que no las había tenido en cuenta», dice Margalida Capellà.
Recuperamos, pues, estas historias en clave de mujer para mostrar un fragmento de la historia
que, hasta no hace mucho, no parecía interesar, porque no era la historia del protagonista, si
no de los personajes secundarios que también fueron objeto de una venganza y una represión
tan dura como la que sufrieron sus compañeros, padres o hijos.
Ficha artística
Dramaturgia
Aina Salom y Carme Planells
A partir de
Dones republicanes. Memòria de la Guerra civil a Mallorca
de Margalida Capellà
Actrices
Marina Domínguez
Catalina Florit
Irene Soler
Dirección
Pere Fullana
Ficha técnica
Escenografía Jordi Banal
Iluminación Juanro Campos
Vestuario Bel Cirerol
Diseño gráfico Naiara Yerobi
Promoción y comunicación Santi Celaya
Diseño de producción Carles Molinet
Una producción de IGUANA TEATRE
D R A M A T U R G I A
Margalida Capellà
Maestra y periodista. Ha trabajado en el Diario de Mallorca y
Última Hora, en este último tuvo responsabilidad en diferentes
secciones. En 1969 ganó el premio Manuel Brunet de periodismo,
convocado por la revista Destino. El 2003 inició una serie de
entrevistas a mujeres que habían sido víctimas o conservaban la
memoria de la represión fascista en Mallorca a partir de la revuelta
militar del 18 de julio de 1936. La gran aceptación de los
lectores hizo que la sección, ahora ya con el testimonio de
hombres y mujeres, se prolongase cuatro años (2003-2007). Ha
publicado, el 2009 y 2010, los dos volúmenes de Dones
republicanes. Memòria de la Guerra Civil a Mallorca (1936-1939) por los cuales fue
galardonada con el premio Olimpia 2009 del Lobby de Dones de Mallorca y con el Jaume II
2010 del Consell de Mallorca. El 2014 publicó Veus republicanes. Memòria de la Guerra
Civil a Mallorca que concluía esta trilogía dedicada a las entrevistas.
Aina Salom
Actriz, dramaturga y gestora teatral. Titulada por l’Ècole
International de Thêatre Jacques Lecoq, de Paris. Es autora de los
guiones, a partir de improvisaciones de la Compañía Teatre de la
Sargantana, como El viatge de n' Andreu Santandreu a la recerca
del perfum que fa tornar guapo (1997) (Andreu Santandreu a la
búsqueda del perfume mágico, en su versión castellana). Autora del
espectáculo Una nit al Racó de Plaça (1998) de Iguana Teatre,
compañía con la cual ha colaborado en numerosas producciones en
la vertiente de adaptación dramatúrgica desde 1990. Ha
colaborado en distintas publicaciones. Forma parte del Consell
Editorial de la Colección Teatre del Mar.
Carme Planells
Escritora y dramaturga. Licenciada en Filología Catalana,
Epecialista Universitaria en Planificación y Servicios Lingüísticos. Es
coautora de No te’n riguis de Rimbaud (2010), con Pere Fullana;
de Phantasticus. Ramon Llull (2016), con Jonay Roda, Y autora
de las dramaturgias de Els mots que m’han abocat al poble
(2017) y Jo som perquè foren (2018). Ha colaborado con Pere
Fullana en numerosas adaptaciones para Iguana Teatre desde
1991, y en Sopar de noces para el Teatre Principal de Palma.
También ha realizado el asesoramiento lingüístico de numerosas
producciones de Iguana Teatre, Teatre de la Sargantana, Teatre
Principal de Palma y para la producción Mort de Dama del Teatre Nacional de Catalunya. Ha
obtenido diversos premios de narrativa corta, entre otros: Narrativa para mujeres, Terrassa;
Literatura Breu de Sant Gervasi, Barcelona; Premi 8 de març de CCOO, Girona; Premi Mercè
Rodoreda, Molins de Rei; Ploma de Sant Bartomeu, Capdepera; XII Premi Conte Curt Antoni
Gomila, Montuïri.
R E P A R T O
Irene Soler Cubí
Licenciada en Arte Dramático por la Escuela Superior de Arte Dramático
de les Illes Balears en la especialidad textual. Con la compañia 10
Cèntims participa en Allò que els nostres néts haurien de saber de
nosaltres, premio Art Jove. Con Produccions del Mar ha participado en
El sopar, La visita y El llegat invisible. Con Ferreret Teatre en El viatge a
la font de xocolata. También ha participado en el montaje Hedda, la
reina de la Bellesa que José Martret dirigió en el Teatre Principal de
Palma. Es miembro fundadora de Centimets Teatre, para público familiar
con numerosos espectáculos. Actualmente, participa en el proyecto «Migracions, teatre social»
de la Fundació Teatre del Mar y trabaja como docente en este campo. Además, forma parte
de un proyecto de sensibilización de Vecinos sin Fronteras como actriz. En el mundo
audiovisual, ha participado en el documental Valldemossa, el lloc més hermós del món, de
Cinètica Producciones, y en la primera temporada de la serie de IB3 Treu Foc.
Marina Domínguez
Formada en la escuela de música y danza y en el Club Esportiu de
Vilafranca, en la Factoria de So de Santa Maria del Camí, en el
Musiquarium, de Manacor y en el Teatre Municipal de Manacor. Ha
estudiado el bachiller de Artes Escénicas en el IES Mossèn Alcover, de
Manacor, y actualmente finaliza el Grado en Arte Dramático, modalidad
textual, en la ESADIB. Con experiencia laboral en la muestra de Teatre
d’Estiu en el Teatre Municipal de Manacor. Ha actuado en la última
edición del Teatre de Barra de Palma en la pieza Cabaret Sauvage. Es
Antígona en la pieza Antígona, en el taller final de carrera con función en
el Teatre Principal de Palma. Y ha sido seleccionada para participar en la serie de IB3 Amor de
cans.
Catalina Inès Florit
Actriz formada en el Institut del Teatre de Barcelona, ha completado su
formación en Berlín (Theatre Fragile, No Fourth Wall, English Theatre
Berlin). Entre Barcelona y Mallorca, ha trabajado como actriz con Andrés
Lima, Paco Azorín, Carlota Subirós, Nies Jaume, Pep Tosar, Rafel Duran,
Jordi Oriol, Pau Carrió, Jaime Pujol o Toni Gomila. Con este último,
tiene en gira Peccatum y I de Filippo. Ha trabajado en TV3 (Barcelona
Ciutat neutral i Sudoku). Es dramaturga y ha escrito diversas piezas como
Bar Nebraska o Homenatge (premi Píndoles), y el proyecto de arte urbano
Herois anònims. Directora de Dones de palla y Homenatge. Coordina Al
cel mos vegem tots plegats, ciclo basado en la reformulación de las rondalles (cuentos
tradicionales) mallorquinas, en el Teatre Maldà de Barcelona.
D I R E C T O R
Pere Fullana
Autor y director de escena, se forma académicamente en el Institut del
Teatre de Barcelona, en la Universitat Autònoma de Barcelona y en
l’École International de Théatre Jacques Lecoq, en París. En 1985 inicia
su carrera en la dirección escénica. Ha estrenado más de 50 obras
teatrales, Memòria d’en Julià, Feroe, La mort de Vassili Karkov,
Seqüències 4 ficcions d’avui, Ubú Rei, Melodies de Brouvell, Macbeth,
Mesura per Mesura, Woyzeck y Ricard 3 entre otras. Compagina la
dirección teatral con la traducción, adaptación y la dramaturgia. Es
miembro fundador de las compañías Iguana Teatre (1985), L’Ombra
del Cranc (1998) y Teatre de la Sargantana (1995). Actualmente, ocupa el cargo de
Director Académico y profesor de Interpretación y Escenificación en la Escola Superior d’Art
Dramàtic de les Illes Balears (ESADIB).
C R Í T I C A
Rafa Gallego
Diario de Mallorca
1 de agosto de 2018
Palabras que tapan el miedo
El fascismo convirtió lo cotidiano en algo épico. El sencillo ejercicio de escribir una carta
devino una suerte de acto heroico, una explosión incontrolada; leer con ojos de mujer era un
acceso de rebeldía, pensar resultaba una proeza y hablar en público – en ocasiones también en
privado – poco menos que una aventura suicida. Existir, en definitiva, o ser (del bando
equivocado) era imposible en un sentido humanista de la palabra durante los tiempos bárbaros
de la Guerra civil y las décadas que vinieron después. Miles de republicanos - unas veces lo
eran por ideología y otras por azar - fueron asesinados o condenados a la humillación en esa
España salvaje de la que aún quedan (muchos) vestigios, gestos y actitudes. Sobre ellos se has
escrito y se ha hablado, aunque quizá nunca sea suficiente. Miles de republicanas – mujeres
cultas, pioneras, resistentes, maestras, presas políticas… y también esposas, compañeras, hijas o
hermanas – padecieron o perecieron bajo el yugo ‘nacional’. De ellas, de su resiliencia, se ha
escrito más bien poco. Lo hizo la periodista Margalida Capellà en un libro esencial, sobra cuya
base Carme Planells y Aina Salom han alumbrado un texto exquisito; una dramaturgia precisa,
con una dirección que la hace aún más atractiva, para representar la memoria de las
‘vencidas’. Historias, contadas y cantadas de manera impecable por tres actrices excepcionales,
que se filtran entre los muros que durante años guardaron silencio. Relatos construidos sobre la
base de la crueldad, de la incomprensión y de la vergüenza. Una oralidad que con el paso de
los años logró tapar el miedo y que ahora coge forma de buen teatro. Mientras nuestros políticos mantienen en pie tributos fascistas como el de Sa Feixina, bienvenida sea la catarsis a través del arte.
Javier Matesanz
Última Hora
02/08/2018
Rojas
Memoria femenina de tiempos oscuros, recogida inicialmente en el libro Dones republicanas de
Margalida Capellà, i convertida en teatro por Iguana, para hacer justicia social con el nombre
de Llum trencada, según dramaturgia de otras dos mujeres: Aina Salom y Carme Planells, y en
manos de tres formidables actrices que prestan voz y gesto a las verdaderas protagonistas de
este testimonio histórico desgarrador, que no son otras que las víctimas del absurdo cruel de
una guerra fratricida. Historias de mujeres mallorquinas que murieron por sus ideas, o incluso
por las de los demás. Por ser hijas o mujeres de, por callar o por hablar, por leer o escribir,
por vivir… Y esa es la principal virtud de este montaje, que siendo casi documental en su
premisa formal y sus contenidos, utiliza de forma impecable el lenguaje teatral, los recursos
lumínicos y narrativos de la puesta en escena, para insuflar vida y recuperar, casi actualizar,
esos recuerdos que nos sobrecogen, nos emocionan, nos indignan. Y para ello, Pere Fullana
aprovecha la versatilidad de sus intérpretes, que en sus continuos cambios de rol van mucho
más allá de la exposición textual, para jugar con la imaginación de los efectos sonoros, del
movimiento, con las evocadoras canciones y los enriquecedores silencios, e ir construyendo un
universo que pese al dramatismo transmite esperanza, y sobretodo dignidad.
Llum trencada es un documento necesario, para que no caigan en el olvido aquellos infames
episodios, que aún hoy muchos pretenden negar o ignorar, y para que las nuevas generaciones
los conozcan, pues es una realidad, una verdad que no está tan lejos como para descuidarla.
De los rescoldos puede reaparecer el fuego, y también el odio. Aunque con prudencia y buen
gusto, no es el odio lo que reivindica la obra, y eso es de agradecer.
J.A. Mendiola
Ara Balears
04/08/2018
Con nombres y apellidos
Teatre del Mar.- De repente me llega el correo de que el Teatro del Mar a finales de julio hay
un estreno. ¿Espejismo o milagro?Puede ser que las dos cosas, porque hace años que el verano
teatral pasó a mejor vida. Pero sea como sea y en una sola función el arte de Talia hizo acto de
presencia. La sala del Molinar llena como pocas veces. Un gozo. Hasta los topes para ver la
adaptación que Aina Salom y Carme Planells habían hecho del documento original de
Margalida Capellà Dones republicanes. Memòria de la Guerrra Civil a Mallorca, una
recopilación de entrevistas publicadas en “Ultima hora”, editado por Lleonard Muntaner.
Irene Soler, Catalina Inés Florit y Marina Domínguez, dirigidas por Pere Fullana, son las
encargadas de dar vida a todos los personajes de los seis relatos que conforman este muestrario
de la historia silenciada por la bota de los vencedores encima la boca de los vencidos y que los
primeros quieren hacer olvidar, como si de esta manera nunca hubiese existido, con el
argumento de que “la memoria histórica sirve solamente para dividir, para abrir de nuevo
heridas que ya estaban curadas” que son palabras, entre muchas otras que estremecen, de hace
un par de días del Cardenal Cañizares en su homilía del mes de julio. Está claro que ellos son
los que han dado el alta a los heridos, muertos y familiares que tuvieron que sufrir en silencio
la pérdida irreparable e injusta de sus seres queridos sin ni tan siquiera poder enterrarlos
dignamente. Ellos son los herederos del dictador, dispuestos a no perder ni tan siquiera la
“legítima”, en versión de disfraz reconciliador, porque cuando ellos ven escrito “memoria”,
leen venganza, porque así es como ellos actuarían, así es como ellos actuaron.
De lo que se trataba entonces era de dar consistencia dramática a unas entrevistas donde las
muchas protagonistas contaban la cotidianidad impuesta con que habían tenido que vivir su
tragedia. No era un trabajo sencillo dar fluidez, ritmo y color a las seis historias que tenían que
subir al escenario, como también estoy seguro que no fue pan comido escoger cuales serían las
narraciones entre tantas, que seguro hubiesen podido ser muchas más y durar tanto como el
Mahabharata de Peter Brook, doce horas, más o menos, con la misma intensidad. Fullana a
escogido la mejor opción, aparentemente la más sencilla, pero que requiere un plus
interpretativo, con la palabra como gran protagonista y con las tres actrices multiplicándose
con energía, franqueza y eficacia. Seis historias, seis, para esta carrera de mujeres bravas, que
un día dieron su testimonio a Margalida Capellà del que tantos años habían tenido que callar.
Cada una de ellas con una pequeña introducción, para después dramatizar los hechos, sin
reiteración y sobretodo con la austeridad dramática que precisa la corta duración de cada una
de ellas. Todo funciona a las mil maravillas, el espectáculo rezuma verdad sin caer en el
discurso y ni mucho menos en el sermón. Salom, Planells y Fullana lo han hecho todo con
naturalidad, Soler, Florit y Domínguez lo han bordado. Pero con todo lo que más me
impresiono es la utilización de los nombres y apellidos, no el de las víctimas, el de los
verdugos. Bravo!Aún hoy hay que ser valiente.
P.S.-Seguro que le ha gustado mucho a Mingo Revulgo.
