Magri, Julio N. Nahuel Moreno, Una Biografía Reciente

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Nahuel Moreno, una biografía reciente La biografía de Nahuel Moreno, que acaba de publicar la colección Fundadores de la Izquierda Argentina, repite, en una versión resumida, lo ya publicado por el morenismo pasado sobre su propia trayectoria, con las distorsiones correspondientes. El autor ocu profuso trabajo de desmisti cación realizado en varios libros y otra clase de publicaci especial por parte del PO. Esta inconsistencia descali ca la seriedad del libro y del a evidente, éste conoce gran parte de esa literatura pues la menciona por pura forma. No una biografía sino una hagiografía (según el diccionario, discurso elogioso o historia santo). El autor, Hernán Brienza, presenta a Moreno como un trotskista consecuente, un enemigo del dogmatismo y poseedor de una gran “honestidad intelectual a la hora de reconocer errores y hacerse cargo”. No es, sin embargo, el método que sigue el libro, el cual pas largo los ‘errores’ que asegura fueron reconocidos, de modo que no se entiende de qué h cuando dice que fueron ‘reconocidos’. Moreno debutó políticamente enfrentando al peronismo, que surgía como un movimiento nacional con fuerte apoyo en la clase obrera. Si acaso desconocía lo que había escrito en México, como consecuencia de la experiencia nacionalista de Lázaro Cárdenas, no podí sin embargo, ignorar los cuatro primeros congresos de la III Internacional. Sea como fu ocupó el campo político de la izquierda argentina de esa época, el PC y el PS, que actu como furgones de cola de la Unión Democrática y el imperialismo yanqui (los llamó a vot las elecciones de 1951). En 1953-54, en un viraje de 180º, típico del ‘morenismo’, pasaría a apoyar al peronismo partir de 1956 a practicar el ‘entrismo’ en el peronismo. Para tener una idea de lo que ‘entrismo’, debajo de la rúbrica de Palabra Obrera, nombre del periódico de la corrient morenista, se informaba que estaba “a las órdenes del general Perón” (en esa línea publ tres capítulos del libro de Perón, dedicados a explicar la naturaleza anticomunista del justicialismo). En los sindicatos siguióelmente a laburocracia, en especial en los momentos más críticos de ésta por la oposición del activismo sindical, como enseguida después de huelga general de enero de 1959. En 1958 cambió la posición de voto en blanco por el vo Arturo Frondizi, paracumplir disciplinadamente (comolodijo) conlaordende Peróndesde Puerta de Hierro. Sin este seguidismo incondicional al peronismo no se puede explicar otra de las grandes ‘hazañas’ políticas de Moreno: la denuncia de la revolución cubana como gorila (durante todo 1959) y la defensa de Fulgencio Batista, al que le adjudicó una resistencia parcia yanquis, debido a una disputa sobre la cuota azucarera de Cuba en el mercado norteamericano. En el proceso histórico ulterior marcado, por un lado, por el castrismo el otro, por el enfrentamiento entre Mao y la burocracia rusa, Moreno fue indistinta y sucesivamente maoísta, guevarista y lofoquista (se adelantó a los chavistas actuales c señalamiento de que cualquier clase social, no necesariamente la clase obrera, puede se sujeto histórica de una revolución permanente). En la crisis política posterior al Cordobazo apoyó la institucionalización de Lanusse-P cual le valió, entre otras cosas, la ruptura con Roberto Santucho, al cual había ganado mediados de los ’60 para formar el PRT. Luego, bajo el gobierno de Perón, apoyó el ‘fre los 8’, con todos los partidos patronales de la época, alegando la amenaza de un golpe inminente, cuando en realidad era el gobierno de Perón el que protagonizaba golpes de Estado contra los gobiernos provinciales de la izquierda peronista y contra los activis embargo, cuando el golpe tuvo lugar, el bloque de los 8 se había convenientemente disue la mayor parte de sus integrantes apoyó el golpe militar, mientras Moreno cali caba a l criatura de Videla como la “más democrática de América Latina”, con la seguridad de que convocaría a elecciones en un plazo breve. Luego de haber promovido una propuesta de amnistía general, en 1981, que las organizaciones de derechos humanos repudiaron en

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El PO sobre la biografía de Moreno.

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Nahuel Moreno, una biografa reciente La biografa de Nahuel Moreno, que acaba de publicar la coleccin Fundadores de la Izquierda Argentina, repite, en una versin resumida, lo ya publicado por el morenismo en el pasado sobre su propia trayectoria, con las distorsiones correspondientes. El autor oculta el profuso trabajo de desmistificacin realizado en varios libros y otra clase de publicaciones, en especial por parte del PO. Esta inconsistencia descalifica la seriedad del libro y del autor; es evidente, ste conoce gran parte de esa literatura pues la menciona por pura forma. No es una biografa sino una hagiografa (segn el diccionario, discurso elogioso o historia de un santo). El autor, Hernn Brienza, presenta a Moreno como un trotskista consecuente, un enemigo del dogmatismo y poseedor de una gran honestidad intelectual a la hora de reconocer errores y hacerse cargo. No es, sin embargo, el mtodo que sigue el libro, el cual pasa de largo los errores que asegura fueron reconocidos, de modo que no se entiende de qu habla cuando dice que fueron reconocidos. Moreno debut polticamente enfrentando al peronismo, que surga como un movimiento nacional con fuerte apoyo en la clase obrera. Si acaso desconoca lo que haba escrito Trotsky, en Mxico, como consecuencia de la experiencia nacionalista de Lzaro Crdenas, no poda, sin embargo, ignorar los cuatro primeros congresos de la III Internacional. Sea como fuere, ocup el campo poltico de la izquierda argentina de esa poca, el PC y el PS, que actuaban como furgones de cola de la Unin Democrtica y el imperialismo yanqui (los llam a votar en las elecciones de 1951). En 1953-54, en un viraje de 180, tpico del morenismo, pasara a apoyar al peronismo, y a partir de 1956 a practicar el entrismo en el peronismo. Para tener una idea de lo que fue ese entrismo, debajo de la rbrica de Palabra Obrera, nombre del peridico de la corriente morenista, se informaba que estaba a las rdenes del general Pern (en esa lnea public los tres captulos del libro de Pern, dedicados a explicar la naturaleza anticomunista del justicialismo). En los sindicatos sigui fielmente a la burocracia, en especial en los momentos ms crticos de sta por la oposicin del activismo sindical, como enseguida despus de la huelga general de enero de 1959. En 1958 cambi la posicin de voto en blanco por el voto a Arturo Frondizi, para cumplir disciplinadamente (como lo dijo) con la orden de Pern desde Puerta de Hierro. Sin este seguidismo incondicional al peronismo no se puede explicar otra de las grandes hazaas polticas de Moreno: la denuncia de la revolucin cubana como gorila (durante casi todo 1959) y la defensa de Fulgencio Batista, al que le adjudic una resistencia parcial a los yanquis, debido a una disputa sobre la cuota azucarera de Cuba en el mercado norteamericano. En el proceso histrico ulterior marcado, por un lado, por el castrismo y, por el otro, por el enfrentamiento entre Mao y la burocracia rusa, Moreno fue indistinta y sucesivamente maosta, guevarista y filofoquista (se adelant a los chavistas actuales con el sealamiento de que cualquier clase social, no necesariamente la clase obrera, puede ser el sujeto histrica de una revolucin permanente). En la crisis poltica posterior al Cordobazo apoy la institucionalizacin de Lanusse-Pern, lo cual le vali, entre otras cosas, la ruptura con Roberto Santucho, al cual haba ganado a mediados de los 60 para formar el PRT. Luego, bajo el gobierno de Pern, apoy el frente de los 8, con todos los partidos patronales de la poca, alegando la amenaza de un golpe inminente, cuando en realidad era el gobierno de Pern el que protagonizaba golpes de Estado contra los gobiernos provinciales de la izquierda peronista y contra los activistas. Sin embargo, cuando el golpe tuvo lugar, el bloque de los 8 se haba convenientemente disuelto y la mayor parte de sus integrantes apoy el golpe militar, mientras Moreno calificaba a la criatura de Videla como la ms democrtica de Amrica Latina, con la seguridad de que convocara a elecciones en un plazo breve. Luego de haber promovido una propuesta de amnista general, en 1981, que las organizaciones de derechos humanos repudiaron en bloque, Moreno salud la cada de Galtieri como el inicio de una revolucin democrtica. Poco antes de su muerte, a la temprana edad de 62 aos, Moreno tuvo tiempo de formar el Frente del Pueblo con el partido comunista y dirigentes burocrticos del peronismo, cuyo motto estratgico era la democracia con justicia social. Lo dicho hasta aqu es una enunciacin (y de ningn modo exhaustiva!). Esta enunciacin no equivale a una explicacin de las posiciones adoptadas, que el lector deber buscar en la literatura del Partido Obrero y de otros partidos de otros pases. Explicar esas posiciones requiere vincularlas a las condiciones de cada momento poltico y de la lucha de tendencias en cada perodo, incluso en el plano internacional, donde el entrismo (entendido como disolucin poltica) ya estaba avanzado como poltica en numerosos pases de Europa y Amrica Latina. Para dar solamente un ejemplo de la necesidad de vincular las posiciones en presencia con el conjunto de las condiciones histricas de cada momento, tenemos la paradoja (que es distinto a una contradiccin) de que una de las posiciones estratgicas ms oportunistas del morenismo, y ms perjudiciales para la clase obrera, en lugar de servir como enseanza y de escarmiento, hicieron escuela: cuando Moreno abandona el peronismo, con apenas unas decenas de militantes, comienza, en Argentina, la gran ola de entrismo en el peronismo. Desde el socialismo (que se escinde por segunda vez a partir de 1962) y grupos maostas y escisiones del partido comunista, una suerte de entrismo ser practicado cada vez con mayor alcance, hasta rematar en las FAP, Montoneros y FAR. Como se ve por este relato, Moreno fue un infatigable protagonista poltico. Curiosamente, a Brienza se le escapa esta fuerte caracterstica de su personaje. La biografa casi no enuncia nada de lo sealado, ni mucho menos el hilo conductor de esas posiciones Por ejemplo, le dedica unos obligados pocos renglones al debut del morenismo frente al peronismo, pretendiendo ignorar que la posicin filo gorila fue practicada consecuentemente durante nueve aos; sin embargo, abunda en ancdotas superficiales sobre ese perodo. Al principio, Moreno identific al peronismo con el fascismo, como lo hizo toda la izquierda pro-yanqui. Vase lo que escribi del 17 de octubre, todava en 1949: una movilizacin fabricada y dirigida por la polica y los militares, y nada ms; otra: la vanguardia de la ofensiva burguesa contra las grandes conquistas obreras; otra: a los sindicatos regimentados por Estado, como sindicatos fascistas o semifascistas. La biografa luego incursiona en el debut internacionalista de Moreno en 1948. Reconoce que Moreno fue un pablista de la primera hora, lo cual no es poca cosa, porque el pablismo (Michel Pablo) revisaba la tesis de Trotsky de que el Estado obrero burocratizado era un accidente histrico y lo transformaba en una nueva etapa de varios siglos, o sea que la revolucin socialista no era viable en ningn lado y que debera esperar a la victoria final del ejrcito rojo. En este sentido, es significativo que Brienza no adjudique la ruptura de Moreno con el pablismo a esta tesis contrarrevolucionaria (que, por otra parte, fue la razn real de la ruptura de la mayora de la seccin francesa). Dice que el principal motivo de la discordia fue el proceso poltico boliviano, ya que la consigna de todo el poder de la COB, el equivalente a la posicin bolchevique en 1917, en el marco de la revolucin boliviana de 1952, se presentaba en oposicin a la lnea menchevique del pablismo, que consista en el apoyo crtico al gobierno de Paz Estenssoro. Aqu Brienza ni siquiera ley lo publicado por el N 2 de Moreno, durante muchos aos, Ernesto Gonzlez, el cual reconoce que Moreno llam a integrar el gobierno de Paz Estenssoro, con ministros obreros (por supuesto). Recin en enero de 1953, cuando la revolucin se encontraba en reflujo y no exista ms una dualidad de poderes, Moreno plante todo el poder a la COB, es decir, cuando la COB se haba burocratizado (la escisin internacional, en 1953, obedeci, en realidad, a disputas faccionales en las secciones norteamericana e inglesa). En 1954, ante la evidencia abrumadora de los desastres ocasionados por sus desaciertos polticos, Moreno peg un giro de 180 grados y decidi hacer un pre-entrismo en el peronismo, ingresando a un Partido Socialista de la Revolucin Nacional, integrado por el socialista Dickman y Abelardo Ramos, entre otros, el cual era un agente encubierto de la secretara de prensa y difusin del gobierno. En esta fase, Moreno garabatea la tesis de construir un partido centrista legal precursor de muchas otras tentativas posteriores del mismo cuo y del movimientismo del que hacen gala los morenistas en el momento presente. 1954 era ya un perodo de gran crisis poltica y estaba en marcha la preparacin del golpe contra Pern. Aqu el autor sostiene que el morenismo no se plante las dudas (sic!!!) que haba tenido en 1945, y llam a luchar contra ese golpe. Pero no es as: porque cuando luego del golpe de junio del 55 y el fracaso del llamado a la conciliacin nacional, Pern presenta, a fines de agosto, su renuncia al Congreso, Moreno plantea que hay que aceptar la renuncia de Pern y designar en su reemplazo a un senador de la CGT (por aadidura, recontra-ultra-burocratizada). O sea, ca-pi-tu-la-cin ante el golpe gorila al acecho. El entrismo en el peronismo dur casi siete aos, hasta 1963. Sobre ese perodo tambin los renglones dedicados por Brienza son escasos y no se dice nada de un seguidismo que no tuvo lmites. Por ejemplo, lo repetimos, no se dice que el peridico morenista, Palabra Obrera, deca que estaba bajo las rdenes del General Pern y del Comando Superior Peronista. Ernesto Gonzlez reconoce que cuando lleg la orden de Pern de votar por Fondizi cay como un balde agua fra sobre el activismo obrero y que pese ello Palabra Obrera lanz la consigna de Acatemos la orden de votar a Frondizi, pero crticamente.... Ya vimos que asimil a Batista con Pern y a Fidel con la Libertadora, y que repudi la revolucin cubana. El entrismo desmoraliz a centenares de activistas obreros que haban ingresado a Palabra Obrera, como ms tarde el democratismo del MAS lograra lo mismo con una generacin ms reciente. Reducido a un pequeo grupo, Moreno busc otro atajo e hizo un acuerdo sin principios con el Frip de Roberto Santucho, dando nacimiento al PRT. El Frip era una organizacin declaradamente nacionalista, indoamericana, no internacionalista. Meses antes, preparando este giro, haba reivindicado al maosmo y al foquismo. En 1967, un congreso del PRT declara perimida la tarea de construir un partido obrero y llama a formar organizaciones armadas de la Olas, la central guerrillera que impulsaba La Habana. Tras la escisin con Santucho, y el estallido del Cordobazo, Moreno pasa a apoyar la institucionalizacin que ofrecen los militares. Sobre la base de una maniobra que apuntaba a lo electoral, en 1971 constituy el PST con el ala del PS que encabezaba Juan Carlos Coral. En esos aos, integr los frentes multipartidarios que se gestaron para apoyar al gobierno peronista e incluso, frente a los atentados de los Montoneros o el ERP contra altos jefes militares, el PST lleg a solidarizarse con el dolor de sus familiares y colegas y se neg a plantear la libertad de los presos polticos guerrilleros. Tras el golpe de Videla y hasta mayo de 1978, Moreno sostuvo que el gobierno militar era la dictadura ms democrtica del Cono Sur o dictablanda); que su objetivo era aplastar slo a la guerrilla y restaurar la democracia. Despus de exaltar durante dos aos al ala aperturista de Videla, el PST se opuso al boicot al Mundial de Ftbol que impulsaban organizaciones en el exterior ya que exageraban la magnitud de la represin. En Opcin, julio 1978, destacaron que la esposa del presidente Videla tambin particip de este hecho positivo y gran avance de la mujer. Ella tambin fue a la cancha. En 1978 Moreno emprendi un nuevo viraje: pas a definir la etapa como contrarrevolucionaria y a colocar a la burocracia sindical en una lnea de resistencia a la dictadura. Sin progresos, en 1980 volvi a virar de posicin y retom la vieja tesis menchevique sobre la progresividad de los frentes populares en los pases atrasados y la colaboracin con la burguesa cuando se trata de poner en pie regmenes democrticos (pretenda justificar el apoyo de su corriente al gobierno de Salvador Allende). Con esa postura, Moreno fund en 1982 el MAS, al cual present como la versin rioplatense del PSOE (en Brasil intentara algo similar con Convergencia Socialista). Public una solicitada, en Clarn, con esta posicin, firmada por un dirigente del PSA. Despus de su muerte, el MAS estall en varias escisiones, que se ramificaron a su vez en otras tantas. Julio N. MagriBibliografa Julio N. Magri, El Revisionismo en el Trotskismo (1972). Julio N. Magri, Sobre la historia del trotskismo argentino, revista Poltica Obrera N 336, marzo-abril 1985. Julio N. Magri, Apuntes a la historia del trotskismo argentino (serie), en En Defensa del Marxismo N 2 (diciembre 1991), N 3 (abril 1992), N 4 (septiembre 1992), N 5 (diciembre 1992). Julio N. Magri, Otra historia morenista del morenismo, en En Defensa del Marxismo N 10 (diciembre 1995). Ernesto Gonzlez, El trotskismo obrero e internacionalista en la Argentina. Osvaldo Coggiola, Historia del trotskismo argentino. Nahuel Moreno, Movilizacin antiimperialista o movilizacin de clase?, Revolucin Permanente N 1, 21/7/1949. Revistas Cambio, La Yesca, Opcin, editadas entre 1976 y 1978. Anbal Romero, La dictadura revolucionaria del proletariado segn Moreno, en En Defensa del Marxismo N 13 (julio 1996).