Manu Fact Ura

18
229 Revista de la Sociedad Geológica de España, 20(3-4), 2007 COEXISTENCIA DE ZONAS DE CIZALLA DÚCTIL DE EXTENSIÓN Y DE ACORTAMIENTO EN EL DOMO DE SIERRA NEVADA, BÉTICAS (SE DE ESPAÑA) J.M. Martínez-Martínez Departamento de Geodinámica e Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra (Universidad de Granada-CSIC), Avda. Fuentenueva s/n, 18002 Granada. [email protected] Resumen: El origen de las zonas de cizalla dúctil del domo de Sierra Nevada ha sido muy debatido. Una controversia que surgió desde el principio fue si las fábricas miloníticas de las zonas de cizalla eran el resultado de extensión, acortamiento cortical o de ambos. También ha habido discrepancias acerca del sentido de cizalla, sobre la relación genética entre las fábricas miloníticas y los despegues extensionales Miocenos y si las milonitas se localizan en una única o en varias bandas de deformación distribuidas a lo largo de la columna Nevado-Filábride. El objetivo de este trabajo ha sido la interpretación del significado tectónico de las milonitas a partir del análisis de la distribución tridimensional de las zonas de cizalla en toda la vasta región que forma parte del domo. Se ha efectuado un control sistemático sobre su cinemática, particularmente en lo referente al sentido de cizalla y se ha intentado obtener inferencias sobre las condiciones de deformación a partir de las diferentes texturas que presentan las distintas bandas miloníticas. Las milonitas se han generado en cuatro zonas de cizalla dúctil; dos de ellas, de carácter contractivo, la de Dos Picos y la de Marchal, en condiciones metamórficas de la facies de las anfibolitas; las otras dos, que representan los segmentos exhumados de los despegues extensionales de Mecina y de Filabres, respectivamente, en las condiciones de la facies de esquistos verdes. El funcionamiento conjunto de zonas de cizalla dúctil contractivas en niveles de la corteza media y de despegues extensionales dúctil-frágiles en la corteza suprayacente explica muchos de los rasgos estructurales que caracterizan el domo de Sierra Nevada, una estructura mayor en el dominio interno Bético. Palabras clave: Milonitas, despegues extensionales, zonas de cizalla dúctil, canales de flujo, domo de Sierra Nevada, Béticas. Abstract: The origin of ductile shear zones in the Sierra Nevada dome has been a matter of debate. Especially, if these shear zones resulted from crustal extension, crustal shortening or from a combination of both processes. The sense of shear, the genetic relationships between the mylonitic fabrics and the Miocene extensional detachments and the three-dimensional distribution of the mylonites in one or in several deformation bands within the Nevado-Filabride complex has also been a matter of discrepancy. The objective of this work has been to interpret the tectonic significance of the mylonites from an analysis of the three-dimensional distribution of the shear zones in the vast region that forms the dome. Both the sense of shear and the conditions undergone during deformation have been analysed systematically from the different textures present in the shear zones. The mylonites formed in four ductile shear zones, two of them, Dos Picos and Marchal, developed under amphibolite facies conditions in a contractive regime; whilst the other two, represent the exhumed segments of the Mecina and Filabres extensional detachments deformed under greenschist facies conditions. The close association of contractive ductile shear zones in the middle crust and extensional brittle-ductile extensional detachments in the crust above, explains many of the structural features that characterise the Sierra Nevada dome, a major structure in the Betic hinterland. Key words: Mylonites, extensional detachments, ductile shear zones, flow channels, Sierra Nevada dome, Betics. Martínez-Martínez, J.M. (2007). Coexistencia de zonas de cizalla dúctil de extensión y de acortamiento en el domo de Sierra Nevada, Béticas (SE de España). Revista de la Sociedad Geológica de España, 20 (3-4): 229-245. El orógeno Bético-Rifeño es un ejemplo de orógeno arqueado, fuertemente extendido, que por sus peculiaridades ha suscitado considerable interés entre los geólogos y geofísicos de todo el mundo. El conocimiento del orógeno ha experimentado así una mejora espectacular en los últimos 20 años a lo largo de un proceso que se podría denominar de «revolución extensional», proceso que ocurre casi paralelo al que tuvo lugar en la región de los «Basin and Range» americanos ( e.g. , Brun y Choukroune, 1983; Davis, 1983; Miller et al. , 1983; Lister y Davis, 1989) y que cambió los paradigmas de la tectónica regional. Muchos de los contactos que limitan las diferentes unidades tectónicas en el dominio interno del orógeno,

description

arte

Transcript of Manu Fact Ura

  • 229

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    COEXISTENCIA DE ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DEACORTAMIENTO EN EL DOMO DE SIERRA NEVADA, BTICAS (SE DE

    ESPAA)

    J.M. Martnez-Martnez

    Departamento de Geodinmica e Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra (Universidad de Granada-CSIC), Avda. Fuentenuevas/n, 18002 Granada. [email protected]

    Resumen: El origen de las zonas de cizalla dctil del domo de Sierra Nevada ha sido muy debatido.Una controversia que surgi desde el principio fue si las fbricas milonticas de las zonas de cizallaeran el resultado de extensin, acortamiento cortical o de ambos. Tambin ha habido discrepanciasacerca del sentido de cizalla, sobre la relacin gentica entre las fbricas milonticas y los despeguesextensionales Miocenos y si las milonitas se localizan en una nica o en varias bandas de deformacindistribuidas a lo largo de la columna Nevado-Filbride. El objetivo de este trabajo ha sido lainterpretacin del significado tectnico de las milonitas a partir del anlisis de la distribucintridimensional de las zonas de cizalla en toda la vasta regin que forma parte del domo. Se ha efectuadoun control sistemtico sobre su cinemtica, particularmente en lo referente al sentido de cizalla y seha intentado obtener inferencias sobre las condiciones de deformacin a partir de las diferentes texturasque presentan las distintas bandas milonticas. Las milonitas se han generado en cuatro zonas decizalla dctil; dos de ellas, de carcter contractivo, la de Dos Picos y la de Marchal, en condicionesmetamrficas de la facies de las anfibolitas; las otras dos, que representan los segmentos exhumadosde los despegues extensionales de Mecina y de Filabres, respectivamente, en las condiciones de lafacies de esquistos verdes. El funcionamiento conjunto de zonas de cizalla dctil contractivas enniveles de la corteza media y de despegues extensionales dctil-frgiles en la corteza suprayacenteexplica muchos de los rasgos estructurales que caracterizan el domo de Sierra Nevada, una estructuramayor en el dominio interno Btico.

    Palabras clave: Milonitas, despegues extensionales, zonas de cizalla dctil, canales de flujo, domode Sierra Nevada, Bticas.

    Abstract: The origin of ductile shear zones in the Sierra Nevada dome has been a matter of debate.Especially, if these shear zones resulted from crustal extension, crustal shortening or from a combinationof both processes. The sense of shear, the genetic relationships between the mylonitic fabrics and theMiocene extensional detachments and the three-dimensional distribution of the mylonites in one or inseveral deformation bands within the Nevado-Filabride complex has also been a matter of discrepancy.The objective of this work has been to interpret the tectonic significance of the mylonites from ananalysis of the three-dimensional distribution of the shear zones in the vast region that forms thedome. Both the sense of shear and the conditions undergone during deformation have been analysedsystematically from the different textures present in the shear zones. The mylonites formed in fourductile shear zones, two of them, Dos Picos and Marchal, developed under amphibolite facies conditionsin a contractive regime; whilst the other two, represent the exhumed segments of the Mecina andFilabres extensional detachments deformed under greenschist facies conditions. The close associationof contractive ductile shear zones in the middle crust and extensional brittle-ductile extensionaldetachments in the crust above, explains many of the structural features that characterise the SierraNevada dome, a major structure in the Betic hinterland.

    Key words: Mylonites, extensional detachments, ductile shear zones, flow channels, Sierra Nevadadome, Betics.

    Martnez-Martnez, J.M. (2007). Coexistencia de zonas de cizalla dctil de extensin y de acortamientoen el domo de Sierra Nevada, Bticas (SE de Espaa). Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa,20 (3-4): 229-245.

    El orgeno Btico-Rifeo es un ejemplo de orgenoarqueado, fuer temente extendido, que por suspeculiaridades ha suscitado considerable inters entrelos gelogos y geofsicos de todo el mundo. Elconocimiento del orgeno ha experimentado as unamejora espectacular en los ltimos 20 aos a lo largo deun proceso que se podra denominar de revolucin

    extensional, proceso que ocurre casi paralelo al quetuvo lugar en la regin de los Basin and Rangeamericanos (e.g., Brun y Choukroune, 1983; Davis,1983; Miller et al., 1983; Lister y Davis, 1989) y quecambi los paradigmas de la tectnica regional.Muchos de los contactos que limitan las diferentesunidades tectnicas en el dominio interno del orgeno,

  • 230

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    J.M. Martnez-Martnez

    que tradicionalmente haban sido consideradossuperficies de cabalgamiento, resultaron ser fallasnormales de bajo ngulo y despegues extensionales. Elanlisis de la geometra y cinemtica de dichoscontactos, con este nuevo punto de vista, ha permitidoconocer mejor los procesos de extensin sin- y post-orognica, que tanta influencia han tenido en lafisonoma general del orgeno. Uno de los principalesimpulsores de este proceso de conocimiento fue elprofesor Vctor Garca-Dueas, cuyas ideasimpregnaron a muchos investigadores, bien a travs desu magisterio, bien de la lectura de sus numerosaspublicaciones (Azan et al., 1994, 1997; Balany yGarca-Dueas, 1987; Balany et al., 1997; Banda etal., 1993; Comas et al., 1992; Crespo-Blanc et al.,1994; Garca-Dueas y Martnez-Martnez, 1988;Garca-Dueas et al., 1986, 1987, 1988a, 1988b, 1992,1993, 1994; Gonzlez-Casado et al., 1995; entre otras).El artculo sobre los sistemas extensionales queadelgazaron el dominio de Alborn, el dominio internodel orgeno, durante el Mioceno (Garca-Dueas et al.,1992) es uno de los trabajos sobre tectnica de lasBticas ms citado, junto a los de Platt y Vissers (1989),Andrieux et al. (1971) y Royden (1993).

    Bastante de este esfuerzo investigador se hacentrado principalmente en el anlisis descriptivo ycinemtico de los despegues extensionales ,particularmente del contacto mayor entre los complejosAlpujrride y Nevado-Filbride, los ms profundosdentro de la pila del dominio de Alborn, y slo unospocos artculos han profundizado en el estudio de ladeformacin interna del bloque de muro (complejoNevado-Filbride), sobre todo en lo que respecta a surelacin con los despegues. La his tor ia de ladeformacin en el complejo Nevado-Filbride espolifsica; consecuentemente, en las rocas Nevado-Filbrides se reconocen varias generaciones deestructuras dctiles entre las que destaca la foliacinregional que, en general, es una esquistosidad con lascaractersticas de un clivaje de crenulacin penetrativo.Sin embargo, localmente predominan las bandas detectonitas con fbricas milonticas caracterizadas porfoliacin milontica, lineacin de estiramiento yorientacin cristalogrfica preferente del cuarzo y lacalcita, tectonitas cuyo origen ha sido muy discutido.

    Desde que fueron reconocidas y descritas porprimera vez en la regin (Vissers, 1981; Berhmann yPlatt, 1982; Platt, 1982; Platt et al., 1984), ha habidoconsiderable controversia acerca de la edad, cinemticay significado tectnico de las fbricas milonticas queaparecen en las rocas del bloque de muro de losdespegues extensionales. Una controversia que surgidesde el principio fue si las fbricas milonticas eran elresultado de acortamiento cortical (Platt, 1982; Platt etal., 1983; Platt y Berhmann, 1986; Martnez- Martnez,1986; Garca-Dueas et al., 1988b), extensin cortical(Galindo-Zaldvar et al., 1989; Jabaloy et al., 1993) ode ambos (Gonzlez-Casado et al., 1995; Martnez-Mart nez et al . , 2002) . Tambin ha habido

    discrepancias acerca del sentido de cizalla de ladeformacin que origin las fbricas milonticas.Mientras que ciertos autores proponen un sentido detransporte de los bloques de techo hacia el N(Berhmann y Platt, 1982; Platt y Behrmann, 1986;lvarez, 1987), otros sugieren movimientos hacia elENE (Campos et al., 1986; Orozco, 1986) o hacia el W(Garca-Dueas et al., 1987; Jabaloy et al., 1993). Otracuestin controvertida ha sido la existencia o no de unarelacin gentica entre las fbricas milonticas delcomplejo Nevado-Fi lbr ide y los despeguesextensionales que separan ste del suprayacentecomplejo Alpujrr ide; y s iendo as , s i es tnrelacionadas con un nico despegue (Galindo-Zaldvaret al., 1989; Galindo-Zaldvar, 1993; Jabaloy et al.,1993) o bien resultan de la actuacin progresiva devarios sistemas de despegues (Martnez-Martnez et al.,2002, 2004).

    El objetivo de este trabajo ha sido la interpretacindel significado tectnico de las milonitas del complejoNevado-Fi lbr ide que, como bandas de rocasfuertemente deformadas, aparecen en el bloque de murode despegues extensionales y constituyen elementosestructurales del denominado domo alargado de SierraNevada. El avance sobre el conocimiento de laestructura y origen de este domo (Martnez-Martnez etal., 1997, 2002) nos proporciona un marco tectnicoms preciso para entender mejor el significado de estasmilonitas. Para ello, se ha realizado un anlisisexhaustivo de la distribucin tridimensional de lasbandas de milonitas en toda la vasta regin que formaparte del domo (Fig. 1); se ha efectuado un controlsistemtico sobre su cinemtica, particularmente en loreferente al sentido de cizalla y se ha intentado obtenerinferencias sobre las condiciones de deformacin apartir de las diferentes texturas que presentan lasdistintas bandas milonticas.

    Encuadre regional

    Los relieves montaosos de Sierra Nevada, Sierrade los Filabres y Sierra Alhamilla forman parte de unaestructura de gran escala, en el dominio interno de lasBticas, que ha sido descrita bajo la denominacin dedomo alargado de Sierra Nevada (Martnez-Martnez etal., 2002). Este domo (ver figura 1) ha sido interpretadocomo un core complex metamrfico en cuyosmrgenes afloran despegues extensionales, de edadMioceno Medio-Superior, con tasas de extensinelevadas, del orden de 109-116 km en la direccinENE-WSW. El funcionamiento de los despeguesextensionales y la formacin de domos es uno de losmodos de extensin que caracterizaron el dominiointerno Btico en ese periodo, mientras que en las zonasexternas del orgeno se formaba un cinturn depliegues y cabalgamientos (Balany, 1991; Platt et al.,1995; Crespo-Blanc y Campos, 2001; Balany et al.,2007). Casi simultneamente y tras el avance de laextensin hacia el W, el domo fue constreido

  • 231

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DE ACORTAMIENTO

    Figu

    ra 1

    .- Es

    quem

    a te

    ctn

    ico

    del d

    omo

    de S

    ierr

    a N

    evad

    a qu

    e m

    uest

    ra la

    dis

    tribu

    cin

    de

    la li

    neac

    in

    de e

    stira

    mie

    nto

    en e

    l com

    plej

    o N

    evad

    o-Fi

    lbr

    ide.

    En

    la e

    squi

    na s

    uper

    ior

    izqu

    ierd

    a se

    mue

    stra

    n lo

    s pr

    inci

    pale

    sdo

    min

    ios

    tect

    nic

    os d

    e la

    reg

    in

    alre

    dedo

    r de

    l sec

    tor

    ms

    occ

    iden

    tal d

    el M

    edite

    rrn

    eo. L

    eyen

    da: C

    ompl

    ejo

    Nev

    ado-

    Fil

    brid

    e (1

    , uni

    dad

    de R

    agua

    ; 2, u

    nida

    d de

    Cal

    ar A

    lto; 3

    , uni

    dad

    de B

    dar

    -Mac

    ael).

    Com

    plej

    oA

    lpuj

    rrid

    e (4

    , ind

    ifere

    ncia

    do).

    Sedi

    men

    tos

    Ne

    geno

    -Cua

    tern

    ario

    s (5

    , ind

    ifere

    ncia

    dos)

    . Sm

    bolo

    s: a

    ) dis

    cord

    anci

    a ba

    sal d

    e la

    suc

    esi

    n N

    ege

    no-C

    uate

    rnar

    ia, b

    ) fal

    la in

    dife

    renc

    iada

    , c) c

    onta

    cto

    litol

    gic

    o de

    ntro

    de

    zona

    de

    ciza

    lla d

    ctil

    en

    cont

    racc

    in,

    d) f

    alla

    de

    salto

    en

    dire

    cci

    n, e

    ) fal

    la n

    orm

    al, f

    ) des

    pegu

    e ex

    tens

    iona

    l, g)

    traz

    a ax

    ial d

    e an

    tifor

    me,

    h) b

    uzam

    ient

    o de

    la fo

    liaci

    n p

    rinci

    pal.

    Las

    flech

    as n

    egra

    s gr

    uesa

    s in

    dica

    n el

    sent

    ido

    de tr

    ansp

    orte

    del

    blo

    que

    de te

    cho

    de lo

    s de

    speg

    ues

    exte

    nsio

    nale

    s. L

    as fl

    echa

    s bl

    anca

    s y

    negr

    as d

    e m

    enor

    tam

    ao

    indi

    can

    la o

    rient

    aci

    n de

    l vec

    tor d

    espl

    azam

    ient

    o en

    las

    milo

    nita

    s de

    tem

    pera

    tura

    s m

    oder

    ada

    (fle

    chas

    bla

    ncas

    ) y b

    aja

    (fle

    chas

    neg

    ras)

    . Mod

    ifica

    do d

    e M

    artn

    ez-M

    artn

    ez e

    t al.

    (200

    2).

  • 232

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    ortogonalmente a la direccin de extensin (Martnez-Martnez et al., 2002). Gracias a la accin conjunta deextensin, acortamiento perpendicular a la extensin yerosin, en el domo han sido exhumados materiales delcomplejo Nevado-Filbride, correspondientes al bloquede muro de despegues extensionales, desde unaprofundidad entorno a los 20 km (Martnez-Martnez etal., 2004).

    La estructura en domo alargado se origin por lainterferencia de dos juegos de pliegues abiertos de granescala, de edad Mioceno Medio-Plioceno, cuyascharnelas, ortogonales, muestran una direccin en tornoa E-W y N-S, respectivamente (Fig. 1). La estructuradel domo se ve dibujada por el contacto entre loscomplejos Alpujrride y Nevado-Filbride, que tienelas caractersticas de una falla normal de bajo ngulo entodo su trazado; s i bien, dicho contacto no secorresponde con un nico despegue extensional(Martnez-Martnez et al., 2002). El segmento decontacto aflorante en Sierra Nevada occidental, eldespegue extensional de Mecina (Aldaya et al., 1984)es un elemento estructural perteneciente al bloque detecho del despegue extensional de Filabres (Garca-Dueas y Martnez-Martnez, 1988). Este ltimo tienesu mxima expresin en Sierra de los Filabres(Martnez-Martnez et al., 2002), donde coincide con elcontacto entre los complejos Alpujrride y Nevado-Filbride, pero a partir de Fiana hacia el W (ver figura1), el despegue de Filabres se instala en el contactoentre la unidad de Calar Alto y la unidad de Ragua, lasunidades ms bajas de las tres que constituyen la pilaNevado-Filbride y cuyas caractersticas fueronsucintamente descritas por Garca-Dueas et al.(1988a, 1988b).

    La foliacin regional en el bloque de muro de losdespegues extensionales, que tiene el carcter generalde clivaje de crenulacin y localmente de foliacinmilontica, dibuja tambin la forma de los domos. Porel contrario, la orientacin de la foliacin en el bloquede techo (principalmente complejo Alpujrride) sigueun patrn ms complejo, resultado de la deformacinprevia a la extensin y de la geometra de bloquesbasculados, que es el modo fundamental de extensindel bloque de techo de estos despegues (Martnez-Martnez y Azan, 1997).

    El domo de Sierra Nevada est limitado al Sur porfallas de salto en direccin dextrorsas que, con unadireccin paralela a la de extensin (ENE-WSW),yuxtaponen lateralmente dominios fuertementeextendidos y dominios de bloques basculados, conmenores tasas de extensin. Tales fallas configuran unaccidente mayor, la zona de fallas de las Alpujarras, queha sido recientemente interpretado como una zona defallas de transferencia que relaciona dos centros deextensin, con una separacin lateral sinistrorsa dealrededor de 90 km, situados en las partes occidentalesde Sierra Nevada y Sierra Alhamilla, respectivamente(Martnez-Martnez, 2006).

    Dominios estructurales mayores en el domo deSierra Nevada

    Tres dominios estructurales bien diferenciados sepueden observar en el domo de Sierra Nevada enfuncin de la orientacin de la foliacin principal y delas relaciones de sta con los despegues extensionalesde Mecina y de Filabres. La figura 2, una seccin deldomo paralela a la direccin de extensin, resume eilustra las caractersticas de estos dominios.

    En el dominio oriental, que tiene unas dimensionesde 45 km segn la direccin de extensin y estparticularmente bien expuesto en Sierra de los Filabres,la foliacin buza con una componente E y el despeguede Filabres tiene una geometra de rampa de muro,descendente hacia el W (rampa de Ljar-Fiana, Garca-Dueas y Martnez-Martnez, 1988; Martnez-Martnezy Azan, 1997). El despegue corta cerca de 8 km de lapila Nevado-Filbride, seccionando hacia abajo launidad de Bdar-Macael (600 m de espesor) y la unidadde Calar Alto (7 km de espesor). La transicin de rampaa rellano se produce cuando el despegue alcanza laparte alta de la unidad de Ragua. En el bloque de techose observan bloques basculados, de alta extensin(Gibbs, 1984) que constan esencialmente de materialesAlpujrrides. Este es un dominio donde el despegueextensional ha sido reajustado isostticamente hacia lahorizontal; consecuentemente, el bloque de muro esbasculado hacia el E y as son exhumados materialesNevado-Filbrides desde una profundidad de 20 km,correspondiente a la mxima profundidad inicial de la

    Figura 2.- Corte estructural del domo de Sierra Nevada paralelo a la direccin de extensin. Se muestran los principales despegues extensionales ylos dominios mayores del domo. Las bandas con tramas sigmoidales representan zonas de cizalla contractivas entre unidades Nevado-Filbridessuperpuestas. Leyenda litolgica y localizacin en la figura 1. Misma escala horizontal que vertical. Modificado de Martnez-Martnez et al. (2002).

    J.M. Martnez-Martnez

  • 233

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    transicin rampa-relleno del despegue (Martnez-Martnez et al., 1997, 2004).

    En el dominio central, que coincide con la mitadoriental de Sierra Nevada y tiene una longitud de 60 kmsegn la direccin de extensin, el despegue de Filabresmuestra una geometra de rel lano de muro. Sideshacemos los pliegues E-W, paralelos a la direccinde extensin, el despegue quedara sub-horizontal. Laestructura del bloque de techo consiste en bloquesbasculados, de alta extensin, en los que la foliacinbuza con componente E. La columna de rocas Nevado-Filbrides s i tuadas inmediatamente debajo deldespegue se encuentra en este dominioconsiderablemente adelgazada; de tal modo, que launidad de Bdar-Macael est prcticamente ausente yla unidad de Calar-Alto pasa de los 7 km de espesor enel dominio oriental a menos de 200 m en ste central.

    El dominio occidental se localiza en la parteoccidental de Sierra Nevada y tiene una longitud de 20km segn la direccin de extensin. En este dominio, eldespegue de Filabres sigue el contacto entre la unidadde Calar Alto y la infrayacente unidad de Ragua ymuestra una geometra de rellano de muro. Buza haciael W junto con la foliacin, que presenta menorbuzamiento en el bloque de techo que en el de muro, lo

    que conlleva unas relaciones de rampa de techo con estesegmento del despegue, segmento que hemosdenominado rampa del Alto Genil (Figs. 2 y 3). En elbloque de techo podemos observar una cua demateriales constituida fundamentalmente por la unidadde Calar Alto que tiene aqu de nuevo espesoresconsiderables con una potencia mxima de losmater ia les af lorante de 4,5 km y sobre e l la einmediatamente debajo del complejo Alpujrrideencontramos jirones de la unidad de Bdar-Macael, de100 a 200 m de espesor. El contacto Alpujrride/Nevado-Filbride en Sierra Nevada occidental (eldespegue extensional de Mecina) tiene una geometrade rellano de muro y rampa de techo y puede llegar asituarse por encima del despegue de Filabres a unadistancia estructural de casi 5 km. Constituye, portanto, un elemento estructural pasivo dentro de la cuadel bloque de techo de este ltimo despegue.

    En sntesis, la seccin (Fig. 2) muestra unaestructura en domo con un dominio central fuertementeextendido, que aparece relativamente elevado respectode dos dominios marginales (oriental y occidental),menos extendidos. Estos dominios marginalescorresponden a los bloques proximal y distal deldespegue de Filabres, y constituyen dos cuas de

    Figura 3.- Vista panormica de la rampa del Alto Genil, un segmento del despegue extensional de Filabres que aflora en Sierra Nevada occidental.Obsrvese el mayor buzamiento de la foliacin (trazas en amarillo) en el bloque de muro, donde es paralela al despegue, que en el bloque de techo,casi paralela a la superficie topogrfica. Fotografa hecha mirando hacia el Norte.

    ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DE ACORTAMIENTO

  • 234

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    corteza media y superior cuyo espesor aumenta hacia elE y hacia el W, respectivamente, desde el dominiocentral, en el que las unidades Nevado-Filbrides hansufrido una considerable reduccin de su espesor.

    Principales zonas de cizalla dctil

    Uno de los principales problemas a la hora deinterpretar el patrn de distribucin de las milonitasexhumadas en el domo de Sierra Nevada es su carcterdiscontinuo debido a la segmentacin que ocurre por ladeformacin frgil subsiguiente. Por otra parte, lasrocas milonticas no constituyen una nica banda dedeformacin sino que aparecen distribuidas a diferentesalturas en la pila Nevado-Filbride y en ocasionesseparadas por una columna de rocas no cizalladas devarios kilmetros de espesor estructural. Otra dificultadaadida es que aparecen plegadas junto con la foliacinregional y los despegues extensionales . Elconocimiento detal lado de la geometra de losdespegues y de los pliegues que los afectan (Garca-Dueas et al., 1986; Garca-Dueas y Martnez-Martnez, 1988; Martnez-Martnez y Azan, 1997;Martnez-Martnez et al., 2002, 2004), es pues unacuest in pr imordial para a lcanzar resul tadossatisfactorios sobre el significado de las tectonitas queaparecen en los bloques de muro de los despegues. Enla descripcin de cada una de las diferentes zonas demilonitas que se hace a continuacin, se ha tenido encuenta tanto su posicin en relacin con los diferentesdominios estructurales del domo de Sierra Nevadacomo su relacin con los despegues extensionales.

    Las zonas de cizalla dctil de Dos Picos y de Marchal

    En el dominio oriental del domo de Sierra Nevadaaparecen dos zonas de cizalla dctil, de 500-600 m deespesor, que constituyen los lmites dctiles entre lastres unidades tectnicas mayores del complejo Nevado-Filbride. La ms profunda, la zona de cizalla de DosPicos, incluye el contacto entre la unidad de Ragua y lasuprayacente unidad de Calar Alto. La zona de cizallade Marchal se sita por encima de la zona de cizalla deDos Picos a una distancia de algo menos de 7 km deespesor estructural, medido perpendicularmente a lafoliacin regional e incluye el contacto entre la unidadde Calar Alto y la suprayacente unidad de Bdar-Macael (Figs. 1 y 2).

    Las rocas dentro de estas zonas de cizal la ,pr inc ipa lmente metape l i tas y rocas cuarzo-feldespticas, fueron deformadas por flujo dctil condesarrollo de tectonitas S-L, que muestran lineacinde estiramiento de direccin N290-260E, marcada porgranos estirados y por la rotacin y estiramiento deminerales previos (Fig. 4A-B). La lineacin aparecesobre una foliacin milontica penetrativa, asociadacon microestructuras de crecimiento de grano,segregacin de venas de cuarzo y circulacin def lu idos (Gonz lez-Casado e t a l . , 1995) . Son

    frecuentes los pliegues en vaina (Fig. 4C) y lospliegues con charnelas paralelas a la lineacin dees t i ramiento (F ig . 4D) . La in tens idad de ladeformacin decrece gradualmente hacia el exteriorde las zonas de cizalla donde se observa un clivaje decrenulacin, que es la estructura predominante en elcuerpo de roca, con ms de 6 km de espesor,comprendido entre las zonas de cizalla. En ambaszonas de cizalla existen pliegues recumbentes, de granescala, cuyas charnelas son subparalelas a la lineacinde estiramiento (Garca-Dueas et al. 1988a, 1988b;Zevenhuizen, 1989; Soto, 1991). Las condiciones dela deformacin son de temperatura moderada (faciesanf ibol i tas ) , como se deduce de l c rec imientosincinemtico de estaurolita y que se traduce en lastexturas de deformacin del cuarzo y del feldespato.El cuarzo ha exper imentado recr i s ta l izac insimultnea a la deformacin (Fig. 4E) con crecimientode los cristales, probablemente por migracin dellmite de grano (Bouchez y Pecher, 1981; MacCready,1996) y s is temt icamente muestra or ientacincristalogrfica preferente (Soto, 1991; Gonzlez-Casado et al., 1995), lo que junto a la deformacinmacroscpica (foliacin milontica y lineacin deestiramiento), permite interpretar esta textura comodeformacional y no debida a recristalizacin esttica.El feldespato muestra signos de deformacin plsticaintracristalina como son los frecuentes porfiroclastosde forma sigmoidal, con colas asimtricas, en las quese produce reduccin de tamao de grano porrecristalizacin dinmica (Fig. 4F) y la ausencia degranos fracturados. La mica incolora, otro importanteconstituyente de la matriz de las rocas, aparecetambin recristalizada. Segn la clasificacin deSibson (1977) sobre las rocas de falla y zonas decizalla, estas rocas renen todas las caractersticaspara poderlas denominar blastomilonitas.

    Tras una cierta controversia previa (Campos etal., 1986; Martnez-Martnez, 1986; Orozco, 1986),el sentido de cizalla es bien conocido a partir deltrabajo de Garca-Dueas et al. (1987). Diversosindicadores cinemticos que incluyen bandas dedeformacin, porfiroclastos con colas asimtricas yfbricas de ejes c del cuarzo, entre otros, muestranun sentido de cizalla hacia el W para los bloques detecho (Garca-Dueas et al., 1987; Soto et al., 1990,Gonzlez-Casado et al., 1995). Sin embargo, dada sugeometra de rellano, el rgimen contractivo oextensional de estas zonas de cizalla ha sido muydiscutido (Garca-Dueas et al., 1988a, 1988b, 1992;Soto, 1991; Gonzlez-Casado et al . , 1995). Entrabajos recientes se ha argumentado que estas zonasde cizalla son estructuras dctiles contractivas, yaque junto al hecho previamente conocido de queimplican repeticiones estratigrficas (Garca-Duease t a l . , 1988a , 1988b) , s e ha demos t rado quesuperponen unidades de mayor grado metamrficosobre unidades de menor grado (Augier et al . ,2005a).

    J.M. Martnez-Martnez

  • 235

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    Figura 4.- Ejemplos de estructuras caractersticas de las zonas de cizalla de Dos Picos y de Marchal: A) Cristales de andalucita rotados y estiradoshacia la lineacin de estiramiento en tectonitas S-L de la zona de cizalla de Dos Picos. B) Detalle de la anterior, en la que destaca un chiastolitoestirado. C) Seccin transversal de un pliegue en vaina en la zona de cizalla de Dos Picos. Fotografa mirando hacia el E. D) Pliegues con charnelaparalela a la lineacin de estiramiento de direccin N100E en ortogneises milonticos de la zona de cizalla de Marchal. E) Nivel rico en cuarzo enortogneises de dicha zona de cizalla, visto en seccin paralela a la lineacin de estiramiento y perpendicular a la foliacin milontica. El cuarzomuestra texturas de crecimiento de grano. Los cristales obscuros son turmalinas rotadas hacia la lineacin de estiramiento. F) Porfiroclastos defeldespato con colas asimtricas en la zona de cizalla de Marchal, que indican un sentido de cizalla dextrorso (hacia el W).

    Zona de cizalla dctil de Sierra Nevada Occidental

    Las rocas milonticas de Sierra Nevada Occidentalse distribuyen en una banda de 100-200 m de espesor,situada inmediatamente debajo del contacto frgil entrelos complejos Alpujrride y Nevado-Filbride (el

    despegue extensional de Mecina). Esta banda dedeformacin afecta principalmente a las rocas de launidad Nevado-Filbride ms alta, la unidad de Bdar-Macael , mientras que las rocas infrayacentes ,pertenecientes a la unidad de Calar Alto, no han sidoafectadas sustancialmente por la milonitizacin. La

    ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DE ACORTAMIENTO

  • 236

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    deformacin milontica, mayoritariamente plstica,produce en las rocas una fuerte reduccin de tamao degrano que contrasta con el de los esquis tosinfrayacentes, si bien, el gradiente de deformacin esgradual. Predominan las protomilonitas y milonitas conocasionales niveles anastomosados de ultramilonitas,all donde la intensidad de la deformacin fue mayor.Las rocas milonticas muestran una foliacin plana,muy penetrat iva y sobre el la una l ineacin deestiramiento de direccin NE-SW. En las rocascuarcticas, la foliacin est definida por cintas decuarzo con lmites de grano suturados y presencia denuevos granos de recristalizacin dinmica, queevidencian mecanismos de deformacin plsticaintracristalina del cuarzo. Los cristales de feldespato,por el contrario, han sufrido deformacin frgil confrecuentes granos fracturados (Fig. 5A). Estasmicroestructuras son tpicas de milonitas generadas enel dominio de baja temperatura del campo dedeformacin plstica del cuarzo (Bouchez, 1977;White, 1977). Los indicadores cinemticos marcan unsentido de cizalla con transporte del bloque de techohacia el SW, similar al que se deduce de las estructurasmenores asociadas con el despegue extensional deMecina (Galindo-Zaldvar et al., 1989).

    Zona de cizalla dctil de Ferreira-Laroles

    Con esta denominacin se incluyen bandas demilonitas que aparecen plegadas en ambos flancos deldomo de Sierra Nevada (Fig. 1) y forman parte deldominio central del domo (Fig. 2). La deformacinmilontica afecta a una banda relativamente estrecha demateriales Nevado-Filbrides (menos de 200 m deespesor) situados justo por debajo del contacto con elcomplejo Alpujrride, cuya naturaleza es la de undespegue extensional frgil. En esta zona de cizalla, lacolumna Nevado-Filbride se ve considerablementereducida de espesor de manera esencialmente dctil.As , la unidad de Bdar-Macael es omit idacompletamente; la unidad de Calar Alto, que endominio oriental, menos extendido, tiene un espesor de7 km, se ve reducida aqu a menos de 200 m y la unidadde Ragua se ve afectada por la deformacin milonticaen su parte ms alta. A pesar de la reduccin de espesor,todas las formaciones que constituyen la unidad deCalar Alto se ven representadas en este sector (Figs. 6 y7) y los contactos entre las mismas son esencialmentedctiles, aunque la deformacin frgil se produceasociada a contactos entre l i to logas con uncomportamiento mecnico diferente, como es el caso demrmoles dolomticos y esquistos o bien mrmolesdolomticos y mrmoles calcticos.

    Las rocas milonticas se caracterizan por unafol iacin muy penetrat iva, plana en las rocasmonominerlicas como cuarcitas y mrmoles calcticosy anastomosada en rocas cuarzo-feldespticas o enmrmoles calctico-dolomticos. Sobre la foliacinaparece sistemticamente una lineacin de estiramiento

    muy pronunciada, cuya direccin vara entre E-W y NE-SW. Diversos indicadores c inemticos , comoporfiroclastos asimtricos, estructuras S-C, peces demica, foliacin microscpica oblicua y fbricas de ejesc de cuarzo, entre otros, concuerdan al indicar unsentido de cizalla de bloque de techo hacia el W y SW.Como consecuencia del cizallamiento, los protolitos(rocas metasedimentarias en facies de esquistos verdesy anfibolitas) sufren una fuerte reduccin de tamao degrano, que en el caso del cuarzo y la calcita resulta demecanismos de deformacin plstica intracristalina y enel caso del feldespato y la dolomita de mecanismosfrgiles como fracturacin y cataclasis. En rocascuarcticas es comn una distribucin bimodal detamao de grano, con viejos granos deformados, enforma de cintas (Fig. 5B), que definen la foliacinmilont ica y nuevos granos de recris tal izacindinmica, con tamaos de pocas micras, que definenuna foliacin oblicua con una relacin angular con laanterior que tiene valor cinemtico. Estas texturas sonpropias de rocas que han sido deformadas en el dominiode baja temperatura del campo de deformacin dctildel cuarzo (

  • 237

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    Una posible explicacin de esta anomala en laorientacin del vector desplazamiento sera que sehabran producido rotaciones horarias de eje vertical enrelacin con el funcionamiento de la zona de fallas delas Alpujarras, una zona de fallas de transferencia desalto en direccin dextrorso (Martnez-Martnez, 2006;

    Martnez-Martnez et al., 2006). El sector de Alboloduycoincide con la terminacin oriental de la zona defallas, donde parte del movimiento de salto en direccindextrorso se transfiere a extensin de direccin ENE-WSW y parte se invierte en rotaciones horarias, quedesvan la lineacin de estiramiento hacia el N.

    Figura 5.- Ejemplos de estructuras caractersticas de las milonitas de baja temperatura: A) Bandas de ultramilonitas en gneises milonticos de SierraNevada occidental. Se observan clastos de feldespato con fracturas antitticas y porfiroclastos sigma, que indican un sentido de cizalla sinistrorso(hacia el SW). B) Budinage de la foliacin milontica definida por monocristales de cuarzo acintados en milonitas de Alboloduy. C) Nivel dolomticoque presenta budinage asimtrico, inserto en mrmoles calcticos milonitizados de la zona de milonitas de Ferreira-Laroles. El sentido de cizalla essinistrorso (hacia el WSW). D) En la misma zona de milonitas que la anterior, niveles dolomticos budinados y brechificados, intercalados entremrmoles calcticos milonitizados. E) Cataclasitas carbonatadas foliadas con clastos asimtricos de milonitas cuarcticas en la zona de milonitas deFerreira-Laroles. Obsrvese la foliacin milontica en el interior de los clastos y las colas asimtricas de los porfiroclastos sigma que indican unsentido de cizalla dextrorso (hacia el WSW). F) Porfiroclasto de cuarzo delta en mrmoles milonticos de Sierra Alhamilla, que indica un sentido decizalla sinistrorso (hacia el SW).

    ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DE ACORTAMIENTO

  • 238

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    Figura 6.- Mapa estructural del sector de Ferreira que muestra la zona de cizalla dctil situada por debajo del complejoAlpujrride. Las flechas pequeas ilustran la orientacin de la lineacin de estiramiento, las grandes representan la direccin ysentido del vector de desplazamiento del despegue extensional frgil. Se muestra tambin la orientacin de la foliacinmilontica. Leyenda: 1, unidad de Ragua; 2, unidad de Calar Alto (2a, formacin de esquistos grafitosos de Montenegro; 2b,formacin de esquistos claros de Tahal; 2c, formacin de mrmoles calcticos y dolomticos de Huertecica); 3, unidadAlpujrride inferior (3a, filitas; 3b, calizas y dolomas); 4, unidad Alpujrride superior (4a, filitas; 4b, calizas y dolomas); 5,sedimentos Cuaternarios. Contactos: a, discordancia; b, contacto litolgico concordante; c, lmite basal de klippe gravitacional;d, falla indiferenciada; e, falla normal; f, despegue extensional; g, contacto de superposicin entre las unidades de Ragua y deCalar Alto modificado en la zona de milonitas. Los puntos sealan las estaciones de medida. Ver localizacin en la figura 1.

    J.M. Martnez-Martnez

  • 239

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    Zona de cizalla dctil de Sierra Alhamilla

    La existencia en Sierra Alhamilla de bandas dedeformacin dctil, caracterizadas por la presencia derocas milonticas, paralelas al contacto entre loscomplejos Alpujrride y Nevado-Filbride, fueutilizada por Behrmann y Platt (1982) para deducir elsentido de transporte de los mantos de corrimiento en eldominio interno Btico. Dado que en niveles profundosde la corteza continental los contactos de manto decorrimiento aparecen generalmente como ampliaszonas de deformacin dctil, paralelas a la superficiede cabalgamiento, el sentido de movimiento de unmanto en relacin con las rocas subyacentes podraencontrarse determinando el sentido de cizalla dentrode esas bandas de deformacin dctil. Estos autores(ver tambin Behrmann, 1984; Platt y Behrmann, 1986)describen dos bandas de ultramilonitas, la de Fuentes,situada a la base del complejo Alpujrride y la deCuillas, situada a la base de la unidad de Castro,equivalente a la unidad de Bdar-Macael definida enSierra de los Filabres (Fig. 1). El cuerpo de roca situadoentre ambas zonas de intensa deformacin muestradiferentes grados de deformacin milontica desdeprotomilonitas hasta milonitas, caracterizadas porfol iacin plana muy penetrat iva, l ineacin deestiramiento de direccin NNE-SSW, particularmenteintensa en la rocas cuarcticas y desarrollo de clivaje decrenulacin extensional en las metapelitas (Platt yVissers, 1980); estructura tambin referida comobandas de cizalla (White, 1979) o estructuras S-C(Lister y Snoke, 1984) . Las microestructurasevidencian mecanismos de deformacin plsticaintracr is ta l ina del cuarzo, que muestra granosdeformados alargados, de varios cientos de micras delongitud, con estructura de subgranos poligonales en suinterior, bordes suturados y nuevos granos marginalesde recristalizacin dinmica de un tamao de 10-25micras. La microestructura de granos alargados resultade la deformacin de una textura granoblstica previa,asociada con el metamorfismo en facies de anfibolitas,

    anterior a la deformacin milontica, que tiene lugar auna menor temperatura (~ 300 C; Behrmann, 1983).

    Los resultados que sobre el sentido de cizallaobtienen los citados autores son contradictorios y as,mientras que las fbricas de ejes c del cuarzo indicanun sentido de movimiento del bloque de techo hacia elN, el sentido de movimiento que se deduce de lasfbricas de ejes a es hacia el S (Behrmann y Platt,1982). Adems, Behrmann (1987) sugiere que hay queser cauteloso en el uso de las bandas de cizalla comoindicador cinemtico, ya que aunque en numerososcasos indican un sentido de transporte hacia el S, sonfrecuentes tambin las bandas de cizalla conjugadascon un sentido de transporte hacia el N. Finalmenteestos autores se decantan por un sentido de cizalla haciael N, primando, sobre los dems criterios cinemticos,la interpretacin de los esqueletos de las fbricas deejes c del cuarzo y dado que este resultado encajabamejor en su interpretacin de la estructura del bloquede techo (complejo Alpujrride) como un plieguerecumbente de gran escala, de vergencia N, eldenominado manto del Aguiln (Platt et al., 1983).

    Sin entrar aqu en una discusin sobre la estructuradel complejo Alpujrride en la Sierra Alhamilla, queya fue objeto de un trabajo anterior (Martnez-Martnez y Azan, 1997), si conviene destacaralgunas observaciones que, sobre la estructura deSierra Alhamilla y particularmente de las bandas demilonitas, complementan o revisan las descripciones einterpretaciones de autores previos. El primer dato atener en cuenta es el carcter del contacto Alpujrride/Nevado-Filbride, que, considerado una sutura entredos placas continentales (Platt, 1982; Platt y Vissers,1989), es en nuestra opinin, como tambin lo es enotras regiones donde aflora, un despegue extensionalfrgil con un sentido de transporte de bloque de techohacia el WSW (Garca-Dueas et al., 1986; Martnez-Martnez y Azan, 1997). Por otra parte, las bandasde ultramilonitas no estn limitadas a los contactosinferior y superior de la unidad de Bdar-Macael, sinoque aparecen tambin distribuidas con mayor o menor

    Figura 7.- Cortes estructurales del sector de Ferreira que muestran la extremada reduccin de espesor de la unidad de Calar Alto en relacin con elespesor observable en el dominio oriental del domo de Sierra Nevada (ej. en la Sierra de los Filabres). Leyenda litolgica y localizacin en la figura 6.

    ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DE ACORTAMIENTO

  • 240

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    Figura 8.- A. Mapa de las fbricas de cuarzo de milonitas cuarcticas estudiadas en Sierra Alhamilla. En cada una de ellas se indica ladireccin de la lineacin de estiramiento. Nmero de medidas en cada estereograma: N = 150. B. Estereograma que muestra la variacin enla orientacin de la lineacin de estiramiento. C. Idem de estras sobre el despegue extensional y fallas asociadas. Todos los contornos aintervalos crecientes de 1 en 1% de rea. Proyeccin equiareal.

    J.M. Martnez-Martnez

  • 241

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    desarrollo en el interior de la misma y no son paralelasal contacto Alpujrride/Nevado-Filbride, sino que loson a la foliacin principal de la unidad Nevado-Filbride implicada. Como el contacto Alpujrride/Nevado-Filbride tiene una geometra de rampas yrellanos, hay segmentos donde es paralelo a lafoliacin del bloque de muro y segmentos donde esoblicuo y corta al muro en rampa descendente hacia elSW.

    En cuanto al sentido de cizalla, la mayora de losindicadores cinemticos utilizados en este trabajomuestran un sentido de transporte del bloque de techohacia el cuadrante SW. As, las bandas de cizalla yestructuras SC, aunque en ocasiones indican un sentidode transporte hacia el NE, mayoritariamente muestransentido de transporte hacia el SW. Existen tambinnumerosos porfiroclastos asimtricos con sentido derotacin hacia el SW (Fig. 5F). Las fbricas de ejes c decuarzo tienen una simetra monoclnica y apoyan unsentido de cizalla del bloque de techo hacia el cuadranteSW (Fig. 8A). La orientacin de la lineacin deestiramiento presenta cierta dispersin en los sectoresde baja inclinacin de los cuadrantes SW y NE, con unmximo en torno a 0/050 (Fig. 8B) y es, por otra parte,muy parecida a la orientacin de las estras medidas enlas fallas asociadas con el despegue extensional querepresenta el contacto Alpujrride/Nevado-Filbride(Fig. 8C).

    Discusin

    Patrn de distribucin de la lineacin de estiramientoen el domo de Sierra Nevada

    Platt et al. (1984) presentaron el primer artculo enel que se muestra la extensin regional de una zona demilonitas bajo el contacto entre los complejosAlpujrr ide y Nevado-Filbride. Estos autoresconcluyeron que las rocas milonticas se formaron enuna banda de deformacin dctil, la denominadaBetic movement zone en publicaciones previas(Platt y Vissers, 1980), en un contexto contractivorelacionado con el proceso de superposicin de losmantos Alpujrrides sobre los Nevado-Filbrides.Pos te r iormente , pocos t raba jos han in ten tadointerpretar el patrn de distribucin de la lineacin deestiramiento en las rocas del complejo Nevado-Filbride expuestas en la regin del domo de SierraNevada , con resu l tados l lamat ivamente muydiferentes. Jabaloy et al. (1993) representaron lavariacin en la direccin del vector desplazamiento enla regin comprendida entre Sierra Alhamilla-Sierrade las Filabres oriental y Sierra Nevada occidental apartir de la orientacin de la lineacin de estiramientoy del sentido de cizalla (Fig. 2, op.cit.). Estos autoresobtienen un patrn curvado con sensibles variacionesdel vector desplazamiento desde NE, en la parteoriental del domo, hasta SW, en la parte occidental.Por el contrario, Augier et al. (2005b) obtienen una

    distribucin de la direccin del vector desplazamientocon un patrn divergente hacia el W (Figs. 3 y 4,op.cit.). Ambos autores analizan los patrones dedistribucin obtenidos sobre el supuesto de que ladeformacin que produjo la fbrica plano-lineal seloca l iz en una banda ms o menos es t rechacomparativamente con su extensin regional. Siendoas, un tratamiento bidimensional de los datos estarajustificado. Sin embargo, de los resultados delpresente t raba jo se deduce que un an l i s i sbidimensional de la distribucin de la lineacin deestiramiento en la regin es poco adecuado ya queapareceran proyectados en el mismo plano datosobtenidos en bandas de deformacin diferentes,separadas, segn que caso, por columnas de roca nocizalladas de varios kilmetros de espesor estructural;por tanto, al interpretar el mapa de lineaciones de lafigura 1 es fundamental tener en cuenta la posicinestructural de cada una de las estaciones de medida.Por o t ra par te , se han podido di ferenciar dosgeneraciones de lineaciones de estiramiento, unasproducidas sobre el plano de foliacin de milonitas debaja temperatura y otras generadas en condiciones detemperatura moderada.

    En la f igura 1 se puede observar como laslineaciones correspondientes a las milonitas de bajatemperatura (flechas negras) aparecen en las rocasNevado-Filbrides situadas inmediatamente debajodel complejo Alpujrride, aunque las rocas milonticasrepresentan una columna de rocas que escasamenteexcede los 200 metros. El sentido de transporte,indicado por las flechas, vara en general poco en elrea, entre W y SW. Tan slo un sector (el deAlboloduy), en el que el sentido de cizalla es hacia elNW y N, se desva de este patrn y las posibles causasde es ta desv iac in han s ido an te r iormentecomentadas . Por e l cont rar io , l as l ineac ionesgeneradas en milonitas de temperatura moderada(flechas blancas) se encuentran asociadas a bandas dedeformacin de 500-600 met ros de espesorrelacionadas con los contactos entre unidadestectnicas dentro del complejo Nevado-Filbride, quemuestran su mayor desarrollo en la Sierra de losFilabres. Hacia el W estas lineaciones desaparecen, yaque han sido modificadas por las milonitas de bajatemperatura, ms tardas y, aunque segmentadas,vuelven a presentarse en Sierra Nevada occidental, enlas partes ms profundas de la cua que constituye elbloque de techo del despegue de Filabres en estesector (ver figura 3).

    En sntesis, las milonitas que aparecen exhumadasen el domo de Sierra Nevada se han generado en cuatrozonas de cizalla dctil; dos de ellas, la de Dos Picos y lade Marchal, en condiciones metamrficas de la faciesde las anfibolitas y las otras dos, que se encuentraninmediatamente debajo de los despegues extensionalesde Mecina y de Filabres, respectivamente, en lascondiciones de ms baja temperatura de la facies deesquistos verdes.

    ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DE ACORTAMIENTO

  • 242

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    Origen extensional versus contractivo

    Las primeras hiptesis sobre el origen de lasmilonitas del complejo Nevado-Filbride se deben aPlatt y colaboradores, hiptesis ideadas a partir dedatos de anlisis estructural de Sierra Alhamilla, donderelacionan el sentido de cizalla de las milonitas, quededucen es hacia el N (Behrmann y Platt, 1982), con lavergencia de pliegues recumbentes en el complejoAlpujrride (Platt, 1982; Platt y Behrmann, 1986).Ellos interpretan la zona de milonitas como una zonade cizalla dctil de escala cortical que sera el lmiteentre dos dominios tectnicos en colisin N-S, elNevado-Filbride que constituira la placa inferior y elAlpujrride que sera la placa cabalgante. La colisinestara acompaada de extensin localizada en la placacabalgante que dara lugar a fallas normales lstricas ypliegues-manto asociados, emplazados por extensingravitatoria. Sin embargo, en trabajos posteriorespudimos demostrar que el contacto Alpujrride/Nevado-Filbride en Sierra Alhamilla es un despegueextensional frgil, con un sentido de transporte debloque de techo hacia el WSW (Garca-Dueas et al.,1986; Martnez-Martnez, 1995; Martnez-Martnez yAzan, 1997). En los citados trabajos concluimos quedada la diferencia entre el sentido de transportededucido para el contacto Alpujrride/Nevado-Filbride y el sentido de cizalla de las milonitasinfrayacentes, no debera de haber relacin genticaentre ambas estructuras. No obstante el escenariocambia bastante con los datos aportados en el presentetrabajo, que indican un sentido de cizalla de bloque detecho hacia el SW para las milonitas de SierraAlhamilla, bastante coincidente con el deducido para eldespegue extensional, por tanto es fcil interpretar quelas bandas de milonitas y el despegue extensional estngenticamente relacionados, tal como ocurre, porejemplo, en Sierra Nevada occidental.

    La concentracin de la deformacin dctil en elbloque de muro del despegue de Mecina, lacoincidencia entre el sentido de transporte deducidopara el despegue y el deducido para la banda demilonitas infrayacente, as como la evolucin de ladeformacin de dctil a frgil en las rocas milonticas,llev a Galindo-Zaldvar et al. (1989) a interpretarlascomo el segmento dctil exhumado del despegueextensional de Mecina. Como quiera que estos autores(ver tambin Jabaloy et al., 1993) consideran que estedespegue coincide con el contacto Alpujrride/Nevado-Filbride en todo el domo de Sierra Nevada, interpretanque las milonitas infrayacentes se formaron en relacincon un nico accidente extensional. Sin embargo, en elpresente trabajo y en otros recientes (Martnez-Martnez et al., 2002, 2004) se presentan argumentosque demuestran que durante el proceso de tectnicaextensional Miocena, de direccin ENE-WSW,experimentado por los complejos Alpujrride yNevado-Filbride, han funcionado al menos dossistemas de despegues extensionales de gran escala, el

    de Mecina y el de Filabres, siendo el primero unelemento pasivo del bloque de techo durante elfuncionamiento del segundo y situado casi 5 km porencima de este ltimo despegue.

    Las milonitas de Ferreira-Laroles se encuentran enel bloque de muro del despegue de Filabres y tambinhay similitud entre el sentido de transporte deducidopara el despegue y el sentido de cizalla mostrado pordiversos indicadores c inemticos en las rocasmilonticas. Igualmente la deformacin dctil seconcentra en las rocas del bloque de muro y staevoluciona de dctil a frgil. Se puede por tantoconcluir que se han generado en el proceso de extensinrelacionado con el funcionamiento del despegue. Estabanda de milonitas se form por estiramiento dctil dela corteza media del dominio de Alborn (Nevado-Filbride), estiramiento que resulta en dos grandesbloques marginales, basculados y un cuello central, eldominio milontico, donde el espesor de la columnaNevado-Filbride es reducido de varios kilmetros aescasos cientos de metros. Simultneamente, elcomplejo Alpujrride en el bloque de techo deldespegue extensional se comportara como un elementode corteza superior que es extendido de manera frgilpor medio de fallas lstricas coalescentes con eldespegue.

    Mientras que existe bastante acuerdo en el origenextensional de las milonitas de baja temperatura, elorigen de las milonitas de temperatura moderada, quese generan en las zonas de cizalla de Dos Picos y deMarchal, es bastante controvertido (Garca-Dueas etal., 1988a, 1988b, 1992; Soto, 1991; Gonzlez-Casadoet al., 1995; Augier et al., 2005a, 2005b). La geometrade estas zonas de cizalla no es discriminatoria puestoque es de rellano en todo su trazado. La argumentacinpara un origen contractivo se fundamenta en lassiguientes premisas: a) las zonas de cizalla separanunidades tectnicas que son cabalgantes porque existenrecurrencias estratigrficas entre ellas (materialesPaleozoicos sobre Trisicos); b) el grado metamrficoen el bloque de techo es mayor que en el de muro; c) ladeformacin milontica afecta particularmente albloque de techo. De entre los argumentos que favorecenun origen extensional podemos destacar: a) lacoincidencia entre el sentido de cizalla deducido paralas zonas de cizalla caracterizadas por milonitas detemperatura moderada y el que muestran por su partetanto las zonas de milonitas de baja temperatura comolos despegues extensionales; b) la trayectoria PT endescompresin, casi isoterma, de las rocas de la zona decizalla de Dos Picos y Marchal (Soto, 1991; Gonzlez-Casado et al., 1995). Desde mi punto de vista, un origencontractivo satisfara ambos tipos de argumentossiempre que las zonas de cizalla en contraccinfuncionasen s imultneamente a la extensinsupracortical como canales de flujo (McKenzie et al.,2000; McKenzie y Jackson, 2002) situados a ciertaprofundidad por debajo de despegues extensionalesdctil-frgiles, de manera que la extensin de la

    J.M. Martnez-Martnez

  • 243

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    columna suprayacente pudiera provocar la exhumacinde las citadas zonas de cizalla.

    Conclusiones

    1. Las rocas con fbrica plano-lineal (tecto-nitas S-L), que aparecen exhumadas en eldomo de Sierra Nevada, no se concentran enuna nica banda de deformacin por debajodel contacto Alpujrride/Nevado-Filbride,sino que se distribuyen en varias zonas dedeformacin situadas a diferentes alturas enuna columna Nevado-Filbride de cerca de8 km de espesor.

    2. Estas tectonitas se distribuyen en cuatrozonas de cizalla dctil. Dos de ellas, la deDos Picos y la de Marchal constituyen loslmites dctiles entre las tres unidades tec-tnicas mayores del complejo Nevado-Fil-bride y se formaron en condiciones meta-mrficas de la facies de las anfibolitas, enlas que se generan blastomilonitas. Lasotras dos representan, respectivamente, lossegmentos dctiles exhumados de los des-pegues extensionales de Mecina y de Fila-bres y se formaron en las condiciones dems baja temperatura de la facies de esquis-tos verdes, en las que se generan milonitas yultramilonitas.

    3. La banda de milonitas del despegue deMecina fue un elemento pasivo dentro delbloque de techo del despegue de Filabresdurante el funcionamiento de este ltimo.Las milonitas del despegue de Filabres seformaron en un cuello de estiramiento dc-til en la zona central, de alta extensin, deldomo de Sierra Nevada.

    4. Incluida Sierra Alhamilla, el sentido decizalla de las rocas milonticas es, en gene-ral, hacia el W o el SW, coincidente con elsentido de transporte de los despegues ex-tensionales, salvo en el sector de Alboloduy,donde posiblemente se han producido rota-ciones dextrorsas de eje vertical, relaciona-das con la terminacin oriental de la zonade fallas de transferencia de las Alpujarras.

    5. El funcionamiento conjunto de zonas decizalla dctil contractivas, en niveles de lacorteza media y de despegues extensionalesdctil-frgiles en la corteza suprayacenteexplica muchos de los rasgos estructuralesque caracterizan el domo de Sierra Nevada.

    Agradecimientos

    Este trabajo ha sido financiado por la ComisinInterministerial de Ciencia y Tecnologa, Espaa (CICYT),proyectos de investigacin CTM2005-08071-C03-01/MAR yCGL2004-03333/BTE.

    Las estructuras que se discuten en este trabajo fueron deespecial inters para el profesor Vctor Garca-Dueas con elque mantuve una estrecha colaboracin durante aos, desdeque en 1985 empezamos a analizar juntos el significado de lossistemas extensionales en las Bticas. Con l compartnumerosas jornadas de campo en las que la discusinconstructiva y estimulante fue incesante. Gran parte delcontenido de este trabajo procede de la reflexin sobre esasdiscusiones, que lamentablemente han quedadoprematuramente interrumpidas. El manuscrito ha sidorevisado por el Dr. G. Gutirrez-Alonso y un revisor annimo.A ambos agradezco su labor que sin duda ha contribuido amejorar la presentacin final de este trabajo.

    Referencias

    Aldaya, F., Campos, J., Garca-Dueas, V., Gonzlez-Lodeiro,F. y Orozco, M. (1984): El contacto Alpujrrides/Nevado-Filbrides en la vertiente meridional de Sierra Nevada.Implicaciones tectnicas. En: El borde mediterrneo espa-ol: evolucin del orgeno btico y geodinmica de las de-presiones negenas. Departamento de InvestigacionesGeolgicas, C.S.I.C. y Universidad de Granada, Granada,18-20.

    lvarez, F. (1987): Subhorizontal shear zones and theirrelation to nappe movements in the Cantal and Miarrosunits. Eastern Betic Zone (Spain). Geologie en Mijnbouw,66: 101-110.

    Andrieux, J., Fontbot, J.M. y Mattauer, M. (1971): Sur unmodle explicatif de lArc de Gibraltar. Earth and PlanetaryScience Letters, 12: 191-198.

    Augier, R., Booth-Rea, G., Agard, Ph., Martnez-Martnez,J.M., Jolivet, L. y Azan, J.M. (2005a): Exhumationconstraints for the lower Nevado-Filabride Complex (BeticCordillera, SE Spain): a Raman thermometry and TWEEQUmultiequilibrium thermobarometry approach. Bulletin de laSociet gologique de France, 176: 419-432.

    Augier, R., Jolivet, L., y Robin, C. (2005b): Late Orogenicdoming in the eastern Betic Cordilleras: Final exhumation ofthe Nevado-Filabride complex and its relation to basingenesis. Tectonics, 24: doi: 1029/2004TC001687.

    Azan, J.M., Garca-Dueas, V., Martnez-Martnez, J.M. yCrespo-Blanc, A. (1994): Alpujarride tectonic sheets in thecentral Betics and similar eastern allochthonous units (SESpain). Comptes Rendus de lAcademie des Sciences, Paris,srie II, 318: 667-674.

    Azan, J.M., Crespo-Blanc, A. y Garca-Dueas, V. (1997):Continental collision, crustal thinning and nappe formingduring the pre-Miocene evolution of the AlpujarrideComplex (Alborn Domain, Betics). Journal of StructuralGeology, 19: 1055-1071.

    Balany, J.C. (1991): Estructura del Dominio de Alborn en laparte Norte del Arco de Gibraltar. Tesis doctoral, Univ. deGranada, 210 p.

    Balany, J.C. y Garca-Dueas, V. (1987): Les directionsstructurales dans le domaine dAlborn de part et dautre dudtroit de Gibraltar. Comptes Rendus de lAcademie desSciences, Paris, srie II, 304: 929-933.

    Balany, J.C., Garca-Dueas, V. y Azan, J.M. (1997):Alternating contractional and extensional events in theAlpujarride nappes of the Alborn Domain (Betics, Gibral-tar Arc). Tectonics, 16: 226-238.

    Balany, J. C., Crespo-Blanc, A., Daz-Azpiroz, M., Expsito,I. y Lujn, M. (2007): Structural trend line pattern and strain

    ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DE ACORTAMIENTO

  • 244

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    partitioning around the Gibraltar Arc accretionary wedge:Insights as to the mode of orogenic arc building. Tectonics,25: doi: 10.1029/2005TC001932.

    Banda, E., Gallart, J., Garca-Dueas, V. Daobeitia, J.J. yMakris, J. (1993): Lateral variation of the crust in the Iberianpeninsula: new evidence from the Betic Cordillera.Tectonophysics, 221: 53-66.

    Behrmann, J.H. (1983): Microstructure and fabric transitionsin calcite tectonites from the Sierra Alhamilla (Spain).Geologische Rundschau, 72: 605-618.

    Behrmann, J.H. (1984): Structures and deformationalprocesses in a zone of contact strain beneath a nappe, SierraAlhamilla, Spain. Tesis doctoral, Univ. de Oxford, 290 p.

    Behrmann, J.H. (1987): A precautionary note on shear bandsas kinematic indicator. Journal of Structural Geology, 9:659-666.

    Behrmann, J.H. y Platt, J.P. (1982): Sense of nappeemplacement from quartz c-axis fabrics; an example fromthe Betic Cordilleras (Spain). Earth and Planetary ScienceLetters, 59: 208-215.

    Bouchez, J.L. (1977): Plastic deformation of quartzites at lowtemperature in an area of natural strain gradient.Tectonophysics, 39: 25-50.

    Bouchez, J.L. y Pecher, A. (1981): The Himalayan main cen-tral thrust pile and its quartz-rich tectonites in central Nepal.Tectonophysics, 78: 23-50.

    Brun, J.P. y Choukroune, P. (1983): Normal faulting, blocktilting and dcollement in a stretched crust. Tectonics, 2:345-346.

    Campos, J., Garca-Dueas, V., Gonzlez-Lodeiro, F., Orozco,M. (1986): La zona de cizalla del contacto entre el grupo demantos del Mulhacn y la unidad del Veleta (Sierra Nevaday Sierra de los Filabres, Andaluca). Geogaceta 1: 15-17.

    Comas, M.C., Garca-Dueas, V. y Jurado, M.J. (1992):Neogene Tectonic Evolution of the Alboran Sea from MSCdata. Geo-Marine Letters, 12: 157-164.

    Crespo-Blanc, A. y Campos, J. (2001): Structure andkinematics of the South Iberian paleomargin and itsrelationship with the Flysch Trough units: extensionaltectonics within the Gibraltar Arc fold-and-thrust belt(western Betics). Journal of Structural Geology, 23: 1615-1630.

    Crespo-Blanc, A., Orozco, M. y Garca-Dueas, V. (1994):Extension versus compression during the Miocene tectonicevolution of the Betic chain. Late folding of normal faultsystems. Tectonics, 13: 78-88.

    Davis, G.H. (1983): Shear-zone model for the origin ofmetamorphic core complexes. Geology, 11: 342-347.

    Galindo-Zaldvar, J. (1993): Geometra de las deformacionesnegenas en Sierra Nevada (Cordilleras Bticas). ColeccinMonogrfica Tierras del Sur, Universidad de Granada, 249p.

    Galindo-Zaldvar, J., Gonzlez-Lodeiro, F. y Jabaloy, A.(1989): Progressive extensional shear structures in adetachment contact in the Western Sierra Nevada (Betic Cor-dilleras, Spain). Geodinamica Acta, 3: 73-85.

    Garca-Dueas, V. y Martnez-Martnez, J.M. (1988): Sobre eladelgazamiento Mioceno del dominio cortical de Alborn.El despegue extensional de Filabres. Geogaceta, 5: 53-55.

    Garca-Dueas, V., Martnez-Martnez, J.M. y Navarro-Vila,F. (1986): La zona de falla de Torres Cartas, conjunto de fa-llas normales de bajo-ngulo entre Nevado-Filbres yAlpujrrides (Sierra de Alhamilla, Bticas Orientales).Geogaceta, 1: 17-19.

    Garca-Dueas, V., Martnez-Martnez, J.M., Orozco, M. yMartn-Ramos, D. (1987): El sentido de desplazamiento delos Mantos Nevado-Filbrides. Geogaceta, 3: 11-13.

    Garca-Dueas, V., Martnez-Martnez, J.M. y Soto, J.I.(1988a): Los Nevado-Filbrides, una pila de pliegues-man-tos separados por zonas de cizalla. En: II CongresoGeolgico de Espaa. Simposio cinturones orognicos, 17-26.

    Garca-Dueas, V., Martnez-Martnez, J.M., Orozco, M., ySoto, J.I. (1988b): Plis-nappes, cisaillements syn- post-metamorphiques et cisaillements ductiles-fragiles endistension dans les Nevado-Filabrides (Cordillres Btiques,Espagne). Comptes Rendus Acadmie Sciences, Paris, 307:1389-1395.

    Garca-Dueas, V., Balany, J.C., y Martnez-Martnez, J.M.(1992): Miocene extensional detachments in the outcroppingbasement of the northern Alboran basin (Betics) and theirtectonic implications. Geo-Marine Letters, 12: 88-95.

    Garca-Dueas, V., Balany, J.C., Matnez-Martnez, J.M.,Muoz, M., Azan, J.M., Crespo, A., Orozco, M., Soto, J.I.,Alonso F.M. y Snchez-Gmez, M. (1993): Kinematics ofthe Miocene extension detachment faults and shear zones inthe Betics and Rif chains. En: Late orogenic extension inmountain belts (Sranne, M., et al., Eds.). Document duBRGM, 219: 76-77.

    Garca-Dueas, V., Banda, E., Torn, M., Crdoba, D., y ESCI-Bticas Working Group (1994): A deep seismic reflectionsurvey across the Betic Chain (southern Spain): first results.Tectonophysics, 232: 77-89.

    Gibbs, A.D. (1984): Structural evolution of extensional basinmargins. Journal of the Geological Society of London, 141:609-620.

    Gonzlez-Casado, J.M., Casquet, C., Martnez-Martnez, J.M.y Garca-Dueas, V. (1995): Retrograde evolution of quartzsegregations from the Dos Picos shear zone in the Nevado-Filabride Complex (Betic chains, Spain). Evidence fromfluid inclusions and quartz c-axis fabrics. GeologischeRundschau, 84: 175-186.

    Jabaloy, A., Galindo-Zaldvar, J. y Gonzlez-Lodeiro, F.(1993): The Alpujarride-Nevado-Filabride extensional shearzone, Betic Cordilleras, SE Spain. Journal of StructuralGeology, 15: 555-569.

    Lister, G.S. y Snoke, A.W. (1984): S-C mylonites. Journal ofStructural Geology, 6: 617-638.

    Lister, G.S. y Davis, G.A. (1989): The origin of metamorphiccore complexes and detachment faults formed duringTertiary continental extension in the northern ColoradoRiver region, U.S.A. Journal of Structural Geology, 11: 65-94.

    MacCready, T. (1996): Misalignment of quartz c-axis fabricsand lineations due to oblique final strain increments in theRuby Mountains core complex, Nevada. Journal ofStructural Geology, 18: 765-776.

    McKenzie, D., y Jackson, J.A. (2002): Conditions for flow inthe continental crust. Tectonics , 21: doi:10.1029/2002TC001394.

    McKenzie, D., Nimmo, F., Jackson, J.A., Gans, P.B., y Miller,E.L. (2000): Characteristics and consequences of flow in thelower crust: Journal of Geophysical Research, 105: 11.029-11.046.

    Martnez-Martnez, J.M. (1986): Fbricas y texturasmilonticas. Cinemtica de las traslaciones en el ComplejoNevado-Filbride (Cordilleras Bticas, Espaa). EstudiosGeolgicos, 42: 291-300.

    J.M. Martnez-Martnez

  • 245

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007

    ZONAS DE CIZALLA DCTIL DE EXTENSIN Y DE ACORTAMIENTO

    Manuscrito recibido el 26 de octubre de 2007Aceptado el manuscrito revisado el 12 de febrero de 2008

    Martnez-Martnez, J. M. (1995): La Sierra Alhamilla (Bticasorientales), una ventana extensional abierta en el basamentode la cuenca Miocena de Alborn. Geogaceta, 17: 128-130.

    Martnez-Martnez, J.M. (2006): Lateral interaction betweenmetamorphic core complexes and less-extended, tilt-blockdomains: the Alpujarras strike-slip transfer fault zone(Betics, SE Spain). Journal of Structural Geology, 28: 602-620.

    Martnez-Martnez, J.M. y Azan, J.M. (1997): Mode ofextensional tectonics in the southeastern Betics (SE Spain).Implications for the tectonic evolution of the peri-Albornorogenic system. Tectonics, 16: 205-225.

    Martnez-Martnez, J.M., Soto, J.I. y Balany, J.C. (1997):Crustal decoupling and intracrustal flow beneath domalexhumed core complexes, Betic (SE Spain). Terra Nova, 9:223-227.

    Martnez-Martnez, J.M., Soto, J.I. y Balany, J.C. (2002):Orthogonal folding of extensional detachments: structureand origin of the Sierra Nevada elongated dome (Betics, SESpain). Tectonics, 21: doi: 10.1029/2001TC001283.

    Martnez-Martnez, J.M., Soto, J.I. y Balany, J.C. (2004):Elongated domes in extended orogens: A mode of mountainuplift in the Betics (southeast Spain). En: Gneiss domes inorogeny (Whitney, D.L., Teyssier, C. y Siddoway, C.S.,Eds.). Geological Society of America, Special Paper, 380:243-266.

    Martnez-Martnez, J.M., Booth-Rea, G., Azan, J.M. yTorcal, F. (2006): Active transfer fault zone linking asegmented extensional system (Betics, southern Spain):Insight into heterogeneous extension driven by edgedelamination. Tectonophysics, 422: 159-173.

    Miller, E.L., Gans, P.B. y Garing, J. (1983): The Snake rengedcollement: an exhumed mid-Tertiary brittle-ductiletransition. Tectonics, 2: 239-263.

    Orozco, M. (1986): Fbrica de cuarzo y cabalgamientos haciael ENE en Sierra Nevada y Sierra de los Filabres (Cordille-ras Bticas). Geogaceta, 1: 40-41.

    Platt, J.P. (1982): Emplacement of a fold-nappe, Betic orogen,southern Spain. Geology, 10: 97-102.

    Platt, J.P. y Vissers, R.L.M. (1980): Extensional structures inanisotropic rocks. Journal of Structural Geology, 2: 379-410.

    Platt, J.P. y Behrmann, J.H. (1986): Structures and fabrics in acrustal-scale shear zone, Betic Cordillera, SE Spain. Journalof Structural Geology, 8: 15-33.

    Platt, J.P. y Vissers, R.L.M. (1989): Extensional collapse ofthickened continental lithosphere: a working hypothesis forthe Alboran Sea and Gibraltar Arc. Geology, 17: 540-543.

    Platt, J.P., Van der Eeckhout, B., Janzen, E., Konert, G., Simon,O.J. y Weijermars, R. (1983): The structure and tectonicevolution of the Aguiln fold-nappe, Sierra Alhamilla, BeticCordilleras, SE Spain. Journal of Structural Geology, 5:519-535.

    Platt, J.P., Behrmann, J.H., Martnez-Martnez, J.M. y Vissers,R.L.M. (1984): A zone of mylonite and related ductiledeformation beneath the Alpujarride nappe complex, BeticCordilleras, S Spain. Geologische Rundschau, 73: 773-785.

    Platt, J., Allerton, S., Kirker, A. y Platzman, E. (1995): Originof the western Subbetic arc (south Spain) - paleomagneticand structural evidence. Journal of Structural Geology, 17:

    765-775.Puga, E., Nieto, J. M., Daz de Federico, A., Portugal, M. y

    Reyes, E. (1996): The intraorogenic Soportjar Formationof the Mulhacn Complex: evidence for the polycycliccharacter of the Alpine orogeny in the Betic Cordilleras.Eclogae Geologicae Helvetiae, 89: 129-162.

    Puga, E., Daz de Federico, A., y Nieto, J. M. (2002):Tectonostratigraphic subdivision and petrologicalcharacterisation of the deepest complexes of the Betic zone:a review. Geodinamica Acta, 15: 23-43.

    Royden, L.H. (1993): Evolution of retreating subductionboundaries formed during continental collision. Tectonics,12: 629-638.

    Sibson, R.H. (1977): Fault rocks and fault mechanisms.Journal of the Geological Society, 133: 191-213.

    Soto, J.I. (1991): Estructura y evolucin metamrfica del com-plejo Nevado-Filbride en la terminacin oriental de la Sie-rra de los Filabres (Cordilleras Bticas). Tesis doctoral,Univ. de Granada, 274 p.

    Soto, J.I., Garca-Dueas, V. y Martnez-Martnez, J.M.(1990): El valor de la deformacin dctil asimtrica en elortogneis de Lubrn, Almera (Manto de Bdar-Macael,Complejo Nevado-Filbride). Geogaceta, 7: 92-94.

    Vissers, R.L.M. (1981): A structural study of the central Sierrade los Filabres (Betic Zone, SE Spain) with emphasis ondeformational processes and their relation to the Alpinemetamorphism. Tesis doctoral, Univ. de Amsterdam, 154 p.

    White, S. (1977): Geological significance of recovery andrecrystallization processes in quartz. Tectonophysics, 39:143-170.

    White, S. (1979): Large strain deformations: report on aTectonic Studies Group discussion meeting held at ImperialCollege. London. Journal of Structural Geology, 1: 333-339.

    Zevenhuizen, W.A. (1989): Quartz fabrics and recumbent foldsin the Sierra de los Filabres (SE-Spain). Geodinamica Acta,3: 95-105.

  • 246

    Revista de la Sociedad Geolgica de Espaa, 20(3-4), 2007