MARCO HISTÓRICO

• La Edad Media abarca desde el siglo V hasta el siglo XIV. Este periodo tan amplio puede dividirse en Alta Edad Media (hasta el siglo XII) y Baja Edad Media (a partir del siglo XII).

• Es una sociedad teocéntrica, todo gira en torno a Dios. La religión es importantísima pero suele confundirse con la magia y la superstición. La vida se considera un ‘valle de lágrimas’ en el que hay que sufrir con abnegación para lograr la vida eterna.

• La población es analfabeta casi en su totalidad (sólo saben leer y escribir algunos clérigos) por lo que la literatura se transmite oralmente. Tienen mucha importancia los juglares que van de pueblo en pueblo cantando, tocando instrumentos y contando historias.

La sociedad medieval se organiza en tres estamentos: NOBLEZA.- Se encargan de las armas y van a influir en el desarrollo de los cantares de gesta.

CLERO.- Se encarga de lo espiritual y de las letras. Desarrollan la literatura religiosa y didáctica.

PUEBLO LLANO/PLEBE.- Se encarga del trabajo y fomentan la literatura religiosa.

En esta organización se establecen relaciones de vasallaje en los que la plebe obedece y paga tributos a la nobleza a cambio de protección. Esta relación feudal también se establece entre los nobles y el rey.

A mediados del siglo XII, la sociedad medieval muestra cambios notables con la aparición de las ciudades, las cortes y las universidades.

Con las primeras ciudades (llamadas burgos), surge la burguesía, un nuevo grupo social que vive con comodidad y refinamiento. Se convierten en un nuevo público para la cultura en general y para la literatura en particular.

La aristocracia abandona los castillos y se instalan en los núcleos urbanos, formando a su alrededor una corte jerárquica en torno al noble de mayor rango. Se trata de una clase, ahora ociosa, que se entretiene con todo tipo de espectáculos. Tendrán en gran estima la poesía por lo que muchos nobles protegían a trovadores en sus cortes.

Surgen las primeras universidades y se convierten en focos culturales. La cultura ya no es exclusiva de los clérigos y, junto a los ideales caballerescos y religiosos, aparece el gusto por la belleza.

Esta época se caracteriza por la convivencia de tres culturas: judía, musulmana y cristiana, lo cual benefició culturalmente aunque en ocasiones la convivencia no fuera pacífica.

En la Edad Media adquieren mucha importancia las rutas de peregrinos, como el Camino de Santiago, con el intercambio cultural que conllevan,

Durante gran parte de la Edad Media se considera el latín como lengua de cultura pero con la Reconquista evoluciona y da lugar a las lenguas romances como el gallego, el catalán o el castellano.

La primera manifestación de castellano que se conserva son las glosas de San

Millán de la Cogolla.

Los primeros textos literarios escritos

en romance son las jarchas

mozárabes, pequeños estribillos

que aparecen en composiciones

árabes llamadas moaxajas.