Me gustaría contarte una historia, ¿quieres?....solo necesitas una cosa: una pizca de imaginación...

“Imaginemos que, de repente, un día los políticos dirigentes españoles y los franceses deciden que van a juntar los dos países y establecer la capital en Toulouse. Geográficamente les viene bien, y vaya! si por España anduvo Pepe Botella... ...¡tenemos una historia común!, pues los unimos y ya está….

Imaginemos que entonces CASI TODA España sale a la calle, para oponerse a la unión con Francia. NO QUIEREN esta unión, pero los políticos, EN CONTRA DE LA VOLUNTAD DEL PUEBLO, hacen oídos sordos al deseo de España.

La unión se lleva a cabo y nace un nuevo país, al que llaman “Francia y España”en principio con dos identidades distintas, dos gentilicios: franceses y españoles.

Imaginemos que pasa el tiempo y los que unieron a estos dos países en uno, ven que la cosa no funciona, que no existe un sentimiento único, que estos países no son tan parecidos y que ni siquiera su historia tiene mucho que ver. ”...¡Qué narices! ¡¡pues nos la inventamos!!...”

Inventan una fundación, que llaman “Fundación

de la Bastilla” para inculcar el sentimiento

“francoespañol” y manipulan la historia

incluso desde los libros de texto para inventarse

que los franceses y españoles llevan unidos desde la Prehistoria. Se

inventan una “Historia de Francia y España” a

“su” medida.

Poco a poco las gentes de Europa se van olvidando de España. Al hablar, “Francia y España” es demasiado larga y todo el mundo conoce al país por Francia. A su vez el término “francoespañol” es largo y engorroso y todos acaban llamando franceses a los habitantes de “Francia y España”.

Francia recibe más ayudas, más industria, y España se desertiza, sus gentes no tienen trabajo y emigran. Pasa de ser uno de los cinco países más desarrollados de Europa a ser uno de los menos desarrollados.

En Europa se conoce a España como las “provincias del sur de Francia”. Se celebran ferias de la “tortilla de patata francesa” y se ensalzan los “vinos del sur de Francia como el Rioja“.

En los medios de comunicación, ya sea la TV o periódicos o en Internet, se dicen frases como el monumento francés de La Puerta de Alcalá... la semana santa francesa de Sevilla, la catedral francesa de Burgos…..

Entonces al españolito de a pie se le hinchan las narices y sale a la calle para protestar. Porque él es Europeo, sí, pero antes de nada es Español.Y no entiende por qué narices le tienen que llamar francés si él es ESPAÑOL “

Piensa por un momento como te sentirías si pasase esto. Ésta es la realidad del pueblo leonés, todo lo anterior ha pasado o está

pasando.

Castilla y León son dos regiones (El Reino de León y Castilla la Vieja) que los políticos decidieron unir, EN CONTRA DE LA VOLUNTAD DEL PUEBLO LEONÉS, hace 23 años porque (entre otras lindezas) geográficamente les venía bien, para que Valladolid fuese el centro de la Comunidad”.

Por favor, respeta nuestra identidad, somos españoles, pero no somos castellanos, no nos llames castellanos: nuestras gentes, nuestra

cultura, nuestros productos y monumentos son LEONESES.

SOMOS LEONESES.

Gracias por leerlo.

Para que todo el mundo se entere te pido un último favor:

PÁSALODar a reenviar no te cuesta nada y los leoneses te lo

agradeceremos. Gracias.