Memorias Primeras Jornadas Regionales de Estudios de Género

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    MemoriasPrimeras Jornadas de Estudios deGnero

    H. Congreso del Estado de ChihuahuaLXII Legislatura

    Crculo de Investigaciones Filosficas y Jurdicas A.C.

    Chihuahua, 2010

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    Memorias de las Primeras Jornadas de Estudios de Gneroefectuadas en el H. Congreso del Estado de Chihuahua del 2al 4 de septiembre de 2010.

    Las ponencias y trabajos aqu presentados sonresponsabilidad del autor, as como la pertenencia de susderechos.

    Primeras Jornadas de Estudios de Gnero. Del 2 al 4 deseptiembre de 2010.

    Secretara de Servicios Jurdico Legislativos, LXIILegislatura, H. Congreso del Estado de Chihuahua.Crculo de Investigaciones Filosficas y Jurdicas A.C.Instituto Chihuahuense de la CulturaInstituto Chihuahuense de la MujerClaustro Universitario de Chihuahua.

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    Contenido

    La Diosa Pecadora: Construccin simblica del genero...................................................... 7

    Prevencin a la Violencia de gnero ...................................................................................... 15

    Rowera: espacio de intercambio entre las mujeres rarmuri. ...................................... 22

    Violencias masculinas cuando no basta nacer hombre .......................................... 32Resistencia y opresin de las mujeres medievales ........................................................... 41

    Experiencias con hombres violentos ..................................................................................... 53

    Gnero: construccin de los unos y las otras .................................................................... 63

    Material de Exposiciones........................................................................................................... 68

    El Concepto de Masculinidad ........................................................................................................ 69

    Nellie Campobello: La memoria histrica a travs de la voz y la mirada femenina. 75

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    La Diosa Pecadora: Construccin simblica del

    genero a partir de figuras matrifocales y suinvisivilizacin en la teologa del patriarcado

    Christian E. Ortiz Velarde

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    Sociedades patriarcales-el miedo y el sentimiento de inferioridadmasculina.

    LO SAGRADO FEMENINO

    Lo SagradoEn griego estn hiers y hagios, pero mientras la primera significa sagradoen lo que tiene de referencia a lo divino como fuerza y luz, la segunda,hagios, implica tambin la acepcin de malditoEn latn sucede algo parecido, pues si bien sanctus corresponde alconcepto de sagrado y santo, as como al de respetable y virtuoso, lapalabra sacer , de la que provienen sacro, sacerdote o sacrificio, tambinconlleva el significado de maldito, execrable o consagrado a los diosesinfernales.

    LO SAGRADO Y LO MALDITO

    Entre lo santo y lo maldito, la mujer siempre ha sidorelegada a esta ltima instancia. Incluso ha sidoidentificada con el Mal en s, tal como afirmaban losinquisidores Kramer y Sprenger, autores de Elmartillo de las brujas : Toda maldad es nadacomparada con la maldad de las mujeres.Ya desde los orgenes Eva y Pandora representan lacausa de todos los males que luego nos hansobrevenido a los humanos. La mujer es un serimpuro por su sangre menstrual, que tena la

    capacidad virtual de contaminar a toda lacomunidad, por lo que era incluso apartada de ella. Pero tambin eraimpura por el hecho de gestar y alumbrar a una criatura.

    MUJERES PRIMGENIAS Y MITOS MISOGINOS: EVA Y PANDORATEOLOGIAS Y TEALOGIAS EMERGENTES

    En este siglo han despertado las potencialidades que guardaba la mujer.El movimiento feminista, como aconteci con los sindicatos para lostrabajadores en general, ha servido para rescatar los valores femeninos.La mujer no tiene que imitar al hombre, tiene que ser ella misma y puede

    encontrar modelos a seguir en las diosas de lasmitologas, sobre todo en la Gran Diosa.La antroploga Manuela Dunn Mascetti: "Para lasmujeres contemporneas, las Diosas ya noforman parte de una estructura religiosa y social,sino que existen como arquetipos psicolgicos. LaDiosa reside en el corazn de toda mujer. Losmitos de lo femenino son un vehculo para la

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    comprensin de los arquetipos que actan en nuestra psicologa ypersonalidad, pues ellos delinean los modelos psicolgicos que nosinfluyen. Toda mujer siente afinidad hacia una o ms Diosas, teniendo encuenta o combinndose elementos tales como la familia, lascircunstancias, las condiciones y la predisposicin al cambio. Las

    experiencias del crecimiento fsico y psicolgico se registran en elinconsciente colectivo en forma de arquetipos".La psicloga junguiana japonesa Jean Shinoda Bolen: "La mayora de lasmujeres solo hacen suya una estrecha gama de las potencialidadesfemeninas. El resultado es que las "diosas" que ellas se niegan a reconocerdentro de s se toman venganzas en los sueos y otros fenmenosinconscientes, desencadenando instintos dormidos que parecen quedarfuera del control de la mujer... Las potencialidades representadas por losdistintos arquetipos femeninos deben ser exploradas por cada mujer hastaentablar entre ellas una relacin equilibrada. De lo contrario, susconflictos mentales elevarn un coro de voces ruidosas e inarmnicas,

    como si cada diosa vociferara en defensa de su arquetipo, dispuesta aahogar y acallar las demandas de las dems".Marija Gimbutas , originaria de los Pases Blticos , antroploga y una delas primeras estudiosas de las culturas matrifocales. Tena cierta visinfeminista de la Historia; discutible, por otra parte, en algunos aspectos, yrechazaba el concepto patriarcal de la Historia.M. Gimbutas se centr en el estudio de las sociedades pre-indoeuropeas denuestro continente, al que denomin La Vieja Europa. Sostena queestaban regidas por un sistema social equilibrado, ni patriarcal nimatriarcal que denominaba gylana (gy- de mujer; an- de andros,hombre). Esta sociedad, pacfica y sustentada en la agricultura, rendira

    culto, especialmente, a DIOSAS de la fertilidad-nacimiento y la muerte(sentido cclico de la existencia).Consideraba que el culto a las Diosas de la Vieja Europa pervivi en lasreligiones mistricas europeas de poca histrica, como el dionisismo o loscultos eleusinos en Grecia, y en el culto a las Matres celtas y a las Diosasde la fertilidad germanas, eslavas , blticas etc, o incluso, de formaalterada ,en el culto a la Virgen Mara, tras la cristianizacin, y en labrujera medieval europea.En su libro Los mitos griegos, Robert Graves plantea una visinhistoricista del asunto.Las Gorgonas, dice, eran las representantes de laTriple Diosa que llevaban

    mscaras con un gesto aterrador para alejar a los profanos de los Misteriosde la diosa.Sus nombres eran ttulos de la diosa Luna; Esteno (fuerte), Eurales(amplio vagabundeo) y Medusa (la astuta). Los rficos llamaban a la carade la luna la cabeza de Gorgona.La conquista de Perseo sobre Medusa,supone Graves, se refiere a la conquista argiva de Libia. Con ella sesuspendi el sistema matriarcal y se violaron los misterios de la diosaNeith.

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    La mujer, como Medusa, fue devaluada sistemticamente tanto en unsentido simblico como cosmolgico, personal y psicolgico. Su papel fuecada vez ms reducido o incluso suprimido en los mitos del origen deluniverso.Aquellas que mostraban alguna iniciativa propia -Lilith es un ejemplo-

    fueron representadas como demonios. Los otros personajes femeninos quellegaban a actuar eran simples aliadas de los deseos masculinos -como eneste caso Atenea-.Ya lo dijo Margaret Murray El dios de la antigua religin es el demonio dela nueva. Pero quiz todava, atrs de los terribles ojos de Medusa, sigabrillando la vieja luna llena, esperando a aquellos que la sepan encontrar.Las mujeres como colectivo han sido excluidas de la sacralidad, pero estiempo de reclamar que Todas las mujeres son Sagradas, es tiempo dereclamar los cuerpos femeninos, las mentes, ideas, creaciones,aportaciones pero sobre todo la espiritualidad femenina como motor de lafortaleza de las mujeres, Es tiempo de reclamar el Alma Femenina

    .Patologia de lo femenino desde la perspectiva patrialcal.Historia (y algunos conos) en la construccin de la brujera y la locurafemenina como formas de discriminacin, control y castigo de lasconductas desviadas de las mujeres. (Basado en los estudios de genero ybrujeria de: Leticia A. Kabusacki)

    La religin del patriarcado: religadas o relegadas?La discriminacin y exclusin delos epicentros de poder de la

    mujeres y su tratamiento comono-sujetos o sujetos no-plenos(desacralizacin), essignificativo ya que el resultado deestas prctica la invisibilizacion deun smbolo o varios, querepresentan lo sagrado femenino .En este sentido, como sugiereValery WALKERDINE, ... lafemineidad y la masculinidad sonficciones vinculadas con el

    imaginario religioso, estaprofundamente arraigado en elmundo social, que puedentornarse en hechosal ser internalizadas por lasfuertes prcticas que nos regulan

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    Simbologa de la trinidad y la invisibilizacin de lo sagrado femenino

    Aproximaciones a los smbolos sacros de las tradiciones espirituales precristianas y cristianas

    Trinidad del matrialcadoDiosa madre (doncella, madre, anciana) partenognesisDios consorte (hijo, amante, hermano)

    Los h ijos e hijas de la vida

    Trinidad del patriarcado

    PadreHijo

    Espritu santo (simbolizado conpaloma)

    -En muchas culturas y tradicionesla paloma es un smbolo usadopara representar la energafemenina, en la construccinpatrialcal se desfeminiza estesmbolo.Desde un sentido comn, los

    smbolos de esta trinidad adquieres una significacin mas obvia cuando

    son, padre, medre e hijo.

    Desafos desde una perspectiva incluyenteEl esencialismo que perpetua la asimetra de los roles sociales

    Juan Luis Segundo tambin ofrece un modelo economicista y esencialistade la opresin de las mujeres. Para l, la prioridad es la liberacin de lasociedad global, es decir, los problemas econmicos que se deben resolver(Tamez 1989: 14). La lucha por la liberacin de las mujeres en los pasesricos, que luchan por los derechos y la igualdad de salarios para loshombres, estara causando la esclavitud de la mujer en los pases pobres

    (Tamez 1989: 15).Entre finales de los 80 y principios de los 90, hemos notado que la mayorade las telogas brasileas y muchas de Amrica Latina reprodujeron eldiscurso esencialista de los varones en sus escritos, afirmando unaesencia en los seres humanos, separando las caractersticas masculinasde un lado y las femeninas de otro. Estas telogas tambin trataron debuscar el femenino en Dios. Libros como El Rostro Femenino de la Teologanos muestran artculos con estas visiones "esencialistas". Mara Clara

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    Es necesario desconstruir los smbolos androcntricos, sexistas, racistas,en relacin con el sagrado, para que los socialmente marginados puedanser consagrados, deconstruyendo la idea de que slo los varones blancostienen acceso a lo sagrado; tambin conectar espiritualidad concorporalidad, pues cuerpo no es antagnico al espritu, ni su opuesto. El

    cuerpo es lugar de manifestacin de lo divino y por lo tanto debe serrespetado.Para Amrica Latina, la elaboracin de una teologa corporificada nosdesafa a examinar los diversos aspectos de la realidad de las mujeres y surelacin con el cuerpo. Debemos considerar y desconstruir los smbolos delo sagrado patriarcal, no solo para liberarnos de la represin ysubordinacin, sino tambin las formas histricas de violencia sexual ytodas las ideologas que han servido para controlar, encarcelar ydesapropiar los cuerpos de las mujeres y de los hombres que estn fueradel modelo hegemnico.La equidad empieza en la realidades mas sutiles, si las construcciones

    simbolicas de lo sagrado femenino son restablecida, esto podra coadyuvaren la construccin de una sociedad mas sana y pacifica.Como no me es posible extenderme ms, concluyo con un nuevo enigma,el mismo que Goethe nos propone en la estrofa con la que termina suFausto:

    Todo lo transitorioes solamente un smbolo;

    lo inalcanzableaqu se encuentra realizado;

    lo Eterno-Femenino

    nos atrae adelante

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    Prevencin a la Violencia de gnero

    M.P.C. R. Vernica Terrazas Aragonez.

    Introduccin

    La violencia se vive da a da, muchas veces sin percatarnos de ello somosvctimas silenciosas. La violencia de gnero y/o familiar es alimentada porcreencias culturales, por mensajes que se pasan de generacin engeneracin y que, lamentablemente ocasiona problemas como depresin,baja autoestima, violencia familiar...

    Cul es la diferencia entre sexo y gnero?

    Qu es sexo?

    SEXO se refiere a las caractersticas anatmicas y fisiolgicas quediferencian al hombre de la mujer y estn relacionadas con la procreacin.El sexo son las caractersticas visibles y fciles determinables para hacerla diferencia entre ambos seres.Los seres humanos somos sexuados desde que nacemos, lascaractersticas externas e internas que nos hacen diferentes y son propiosde nuestra naturaleza.

    Qu es gnero?

    Son las diferencias sociales relacionadas con la divisin del trabajo. Estasdiferencias de gnero se pueden cambiar porque son aprendidassocialmente. Nacemos hombres o mujeres, la sociedad hace a loshombres masculinos y hace a las mujeres femeninas.Esta construccin de gnero da supremaca a lo masculino por encima delo femenino.

    Definicin de gnero

    Conjunto de rasgos y roles asignados a hombres y mujeres de cadasociedad. Es el modo de ser hombres o de ser mujer segn una culturadeterminada.Son las responsabilidades, deberes y obligaciones, comportamientos,valores, gustos y expectativas que la cultura les asigna en formadiferenciada.

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    As los hombres y las mujeres realizan diferente trabajo y enfrentandiferentes dificultades.Desde pequeos, a los nios y a las nias se les ha inculcado lasdiferencias en los gneros los hombres no lloran corres como nia, elltimo es vieja a travs de expresiones discriminatorias como stas que

    nos van enseando como comportarnos. Ahora se sabe que estosestereotipos son injustos para todos, pero especialmente para las mujeres.

    ROLES DE GNERO

    Estereotipos de las caractersticas

    FEMENINAS MASCULINAS

    Suave,dulceSentimental

    AfectivaIntuitivaImpulsivaSuperficialFrgilSumisaDependienteProtegidaTmidaRecatada

    MaternalCoquetaVoluble,

    InconstanteSeductoraBonitaPuede llorarInseguraPasivaSacrificadaAbnegadaPrudente

    Duro, rudoFroIntelectual

    RacionalPlanificadoProfundoFuerteDominante,AutoritarioIndependienteValienteProtector

    AudazPaternalSobrio

    EstableConquistadorFeoNo lloraSeguroActivoCmodoAgresivo

    QU ES VIOLENCIA?

    Es cualquier accin o conducta que cause la muerte, dao, sufrimientofsico, sexual o moral, tanto en el mbito pblico como en el privado.

    Micro-violencia

    Son pequeos, casi imperceptibles controles y abusos de podercuasinormalizados que los varones ejecutan permanentemente.Son hbiles artes de dominio, maniobras que sin ser muy notables,restringen y violentan insidiosa y reiteradamente el poder personal, laautonoma y el equilibrio psquico de las mujeres, atentando ademscontra la familia.

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    Cules son los tipos de violencia?Violencia Fsica

    Se ejerce mediante la fuerza fsica en forma de golpes, empujones, patadasy lesiones provocadas con diversos objetos o armas.

    Violencia Psicolgica

    En este caso la violencia se ejerce mediante insultos, vejaciones, crueldadmental, gritos, desprecio, intolerancia, humillacin en pblico, castigos oamenazas de abandono.

    Violencia Sexual

    Se produce cuando la pareja fuerza a la mujer a mantener relacionessexuales o le obliga a realizar conductas sexuales en contra de su

    voluntad. Tambin se encuentran otras formas como el acoso sexual.

    Violencia Econmica

    Es aquella que est dirigida contra nuestros bienes y pertenencias, porejemplo: que dispongan de nuestros bienes sin nuestro consentimiento oque se ejerza el control a travs del factor monetario.

    QU ES VIOLENCIA DE GNERO?Violencia contra la mujer

    Se presenta por cuestiones de gnero. Se ejerce del hombre hacia lamujer. Est relacionada al gnero. Grave problema de salud pblica, de justicia social y un delito. Puede darse en el espacio domstico o en el espacio social. No es un fenmeno nuevo Siempre ha habido violencia contra lasmujeres. Violencia de gnero se refiere a las conductas agresivas que cometenlos hombres hacia las mujeres por el solo hecho de ser mujeres. La mayora de las vctimas de violencia son las mujeres y las nias. La mujer golpeada se encuentra en TODOS los niveles sociales.

    Las estadsticas nos muestran que en nueve de cada diez casosregistrados, las vctimas son mujeres. El registro de casos de violencia familiar no es real ya que esconsiderado un asunto privado y son tratados como accidentes oenfermedades de otro tipo; dolores de cabeza, insomnio, gastritis odepresin y no como casos de violencia.

    Por qu la violencia contra las mujeres se mantiene?

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    La sociedad la oculta Se aprende en la sociedad Se trasmite de una generacin a otra No se castiga, previene ni se atiende

    Es un asunto privado

    GENERO Y PODER

    Concepcin asimtrica del hombre y la mujer, donde lo masculino valemas que lo femenino.La culturizacin, socializacin y educacin hacen que se construyanidentidades fuertes para los hombres y ms dbiles para las mujeres.Donde se perpetan los roles diferenciados: para los hombres agresin ypara las mujeres sumisin.As, los hombres no se consideran hombres sin cierta dosis de agresin y

    las mujeres no son lo suficientemente femeninas sin cierta dosis deproteccin, subordinacin y apoyo a los hombres. El acceso al poder en loshombres significa ganancias y prdidas.Las ganancias relacionadas con experiencias sociales, los momentos massignificativos y de gloria en los hombres estn asociados al espaciopblico.Las prdidas estn asociadas al dolor y la soledad. El hombre habla pocode sentimientos, muestra incapacidad para expresar los afectos positivos yen consecuencia sus prdidas se dan en el espacio familiar y de pareja.

    QUE ES VIOLENCIA FAMILIAR?

    Se ha dicho que la familia es el centro de reproduccin de la especie,socializacin, educacin y especialmente un lugar de calor y seguridadpara sus miembros. Sin embargo, se ha demostrado que la violencia hasido parte de las familias desde el principio de la historia sin importar sucomposicin, estructura, clase social, contexto histrico o situacinpoltica.

    Decimos que existe violencia familiar cuando:En un grupo social domstico, que mantiene una situacin de amor y otraes vctima de un abuso fsico o psquico ejercido por esa otra, encondiciones tales que resulte difcil la implementacin de recursos decontrol social que regulen e impidan escenas violentas por lo que tiende arepetirse.

    La mujer violentada

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    Y de que las mujeres se encuentran en una posicin subordinadarespecto a los hombres Busca hacer evidente esta situacin y posicionar a la mujer en unlugar de mayor poder y justicia social

    Ya que la igualdad no basta

    La igualdad es la semejanza de estatus social, derechos, responsabilidadesy oportunidades, de las mujeres y de los hombres respecto de la ley, y ensu interaccin en la sociedad.La igualdad entre mujeres y hombres est establecida en la constitucinMexicana en el artculo 4to. Pero en realidad mujeres y hombres sontratados en condiciones de igualdad? Por si misma la igualdad jurdica nogenera igualdad social.Dar trato igualitario a las personas socialmente desiguales genera mayordesigualdad.

    Aun cuando las leyes dictan normas de igualdad entre mujeres y hombres,las sociedades estratificadas en estereotipos de gnero provocan ladesigualdad.

    Cuales son los beneficios de vivir con equidad de gnero?

    Aceptar nuestra propia vulnerabilidad Aprender a expresar emociones y sentimientos (miedo, tristeza,...)Aprender a pedir ayuda y apoyo Aprender mtodos no violentos para resolver los conflictos Aprender y aceptar actitudes y comportamientos tradicionalmente

    etiquetados como femeninos, como elementos necesarios para undesarrollo humano integral. No tener que ocultar nuestras emociones y sentimientos bajo la falsapremisa de ser un hombre de verdad. Participar activamente de la crianza de nuestros/as hijos/as. No tener que demostrar constantemente que eres el mejor, inclusoponiendo en peligro tu integridad fsica y psicolgica. Construir un modelo de relacin familiar y social no basado en elejercicio del poder, sino que en compartir dicho poder. Aceptacin por parte del mundo masculino de lo diferente.

    Somos fsicamente diferentes pero tenemos similarespotencialidades

    El mismo valor. La misma capacidad de aprender. La misma inteligencia. La mujer puede ser tambin exitosa.

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    El hombre puede ser sensible y cuidadoso con sus hijos. La mujer es capaz de estudiar, trabajar o dirigir una empresa.

    Que pretende la equidad de gnero?

    Los hombres y sus derechos y nada ms Las mujeres y sus derechos y nada menos

    Y como dice B. Boutros Ghali, La Humanidad posee dos alas: una es lamujer, la otra el hombre. Hasta que las dos alas, no estn igualmentedesarrolladas, LA HUMANIDAD NO PODR VOLAR.

    Y ya para terminar los exhorto a construir un clima familiar de respeto alas deferencias. Donde cada uno de los miembros de la familia acepta que

    somos distintos y que si aprendemos a aceptarnos como somos, lacomunicacin, aun y cuando sea acerca de los conflictos, ser ms fcil.Fomentar una sana autoestima y confianza en cada uno de los miembrosde la familia tiene que ver con ayudar a los dems a sentirse protegidos yseguros y con la garanta de que es posible expresarse y comportarse comose desea.

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    Rowera: espacio de intercambio econmico,formacin de prestigio y liderazgo poltico entre las

    mujeres rarmuri residentes en la ciudad deChihuahua.

    Marco Vinicio Molares Muoz

    I. Rowera: la carrera entre mujeres.

    Las calles de la ciudad de Chihuahua han sido ocupadas por las mujeres,rarmuri para organizar las tradicionales carreras de rowerao ariweta.

    Las competencias de rowerarepresentan una actividad trascendental paralas rarmuri del Oasis y en ellas participan nias, jvenes y adultas. Esosdesafos se realizan tanto en el asentamiento, en un circuito que recorrealgunas calles de la colonia, como en otras colonias y puntos de la ciudad.Por ejemplo, la colonia Dale, el asentamiento Sierra Azul, el asentamientoCarlos Daz Infante, la Presa Chihuahua o la colonia Labor de Terrazas.En estos lugares las asistentes se renen, interactan y se relacionan conlas rarmuri de diferentes colonias. Son espacios que permiten laconvivencia, la recreacin y el intercambio sociocultural. Los nios juegan,los adultos llevan comida, compran bebidas refrescantes en las tiendascercanas y organizan toda una tarde de esparcimiento. De esta manera, se

    refuerza la identidad rarmuri al participar en una actividad de racespropias, pero efectuado en un contexto urbano, en donde los camiones, lostaxis, los alimentos, las bebidas y las calles han sido apropiados por ellas.Esta realidad pone de relieve la dimensin sociocultural del espaciopblico, ya que la calle, como escenario de las carreras de rowera, es unlugar de relacin y de identificacin, de contacto entre las personas, deanimacin urbana y de expresin comunitaria (Borja, 2003: 66). En estesentido, es importante destacar que en estos eventos la participacin y larelacin de las mujeres de los asentamientos son mayores que las de loshombres. Son las rarmuri quienes corren, las que apoyan y las queapuestan, pues slo algunos hombres asisten a dichos encuentros.

    Tomando en cuenta estos antecedentes, el objetivo de la ponencia esmostrar el carcter econmico y poltico de las carreras de rowerapracticadas por las mujeres rarmuri en la ciudad de Chihuahua. Paraello, metodolgicamente retomar los planteamientos de BronislawMalinoski (1995 [1922]) y Marcel Mauss (1991 [1923-1924]) sobre elcomercio Kula y el potlach respectivamente. La idea es articular ambosconceptos con la finalidad de sealar caractersticas similares en lascompetencias de rowera y analizarlas como un espacio no slo de

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    esparcimiento ldico, sino como una institucin que implica la circulacin y el intercambio econmico, as como un referente fundamental para laconformacin de liderazgos y la adquisicin de prestigios femeninos. Lainformacin etnogrfica contenida en el documento fue recabadaprincipalmente entre mujeres rarmuri que residen en el asentamiento El

    Oasis, localizado al suroeste de la ciudad de Chihuahua, as comodurante el acompaamiento de una serie de carreras.

    II. La organizacin de las carreras.

    Las mujeres del Oasis organizan carreras entre competidoras del mismoasentamiento, de manera local, pero tambin carreras contra mujeres deotros asentamientos, y ambas pueden realizarse cualquier da de lasemana. Las competencias entre las mujeres del Oasis se realizan en elcircuito callejero de la colonia. Las carreras contra mujeres de otrosasentamientos pueden realizarse ah mismo o cuando las rarmuri del

    Oasis se dirigen a otros puntos de la ciudad. Podra decirse que existe unacancha neutral, en la colonia Dale, donde los grupos de corredoras yapostadoras de diferentes puntos se renen todos los domingos para lascompetencias de rowera.1 Esta ltima modalidad se organiza das antes dela competencia, cuando las residentes del Oasis acuerdan con lasrarmuri de los otros asentamientos la hora y fecha de la carrera, por logeneral sta se efecta en da domingo.

    Mapa 6. Puntos donde se efectan carreras de roweraen la ciudad deChihuahua

    1 En Chihuahua han existido diferentes lugares para la realizacin de estas competencias, los cuales fueron

    utilizados como campos neutrales. Es decir, a ellos se dirigan los rarmuri de cualquier punto de la ciudad

    para participar en las carreras, sin generar una localidad con la que se identificaran los competidores y sus

    equipos, como ocurre en las reas de competencia aledaas a los asentamientos; sin embargo, algunas de ests

    reas han dejado de utilizarse por el avance de la urbanizacin. Entre estos lugares estaban la colonia

    Campesina y la presa El Rejn.

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    Fuente: www.municipiochihuahua.gob.mx; Diseo: Marco Vinicio Moralesy Antonio Yez.

    En cualquiera de los sitios sealados, se forman dos equipos,representados cada uno por una corredora. Como parte del equipo hay

    otras mujeres, nias y adultas, aunque tambin algunos hombres, queapuestan a favor de su competidora. Pero no slo apuestan, sino que todasellas, como equipo, animan a su corredora, acompandola en surecorrido, gritando weriga! (corre!) wesap! (rpido!), para que obtengael triunfo. El equipo de apoyo es importante y dentro de l tambin seencuentra una o varias mujeres encargadas de dar masaje en las piernas ala corredora, ponindole agua con sal o chile molido para sacarle elchamuco, es decir, pare evitar que surta efecto algn maleficio enviadopor el equipo rival. Asimismo, el equipo de apoyo ofrece agua o pinolebatido con agua para refrescar y alimentar a su competidora.Cada equipo tiene a su chokame, que es la mujer encargada de concertar

    la carrera y las apuestas con la chokame del equipo rivalo sayo, comodicen ellas. Las mujeres pasan toda la tarde amarrando las apuestas, lascuales normalmente son faldas (sipchas) o vestidos completos (faldas yblusas, sipchas y mapachas respectivamente), aunque tambin seapuestan fajas de estambre, cortes de tela y, por supuesto, dinero. Enalgunas ocasiones he observado que el amarre de apuestas ha durado 4o 5 horas. Se dice amarrar, porque, efectivamente, cada par de faldas,vestidos, fajas o telas apostados se amarra, haciendo un nudo entre ellos.2Dependiendo de la concurrencia a la carrera, pueden apostarse hasta 50 o60 faldas y vestidos, y el dinero puede alcanzar la cifra de $1,000 pesos.La cantidad total de dinero suele completarse con las apuestas de varias

    personas del equipo; normalmente los hombres que apuestan lo hacen condinero.Las corredoras (rowame) utilizan una rowera o ariweta (aro deaproximadamente 20 centmetros de dimetro) hecha con una rama muydelgada o con alambre metlico, la cual est forrada con un pedazo de tela,

    2El amarre, emparejamiento o casamiento de apuesta comienza cuando una mujer lleva su falda con la

    chokame, ella la revisa y posteriormente la conduce a un rea designada y la deposita en el suelo para que

    la chokamesayo la recoja. La chokame sayo recoge la falda, la lleva con las mujeres de su equipo para que

    la casen o la amarren con una falda de similares caractersticas, bsicamente se busca una talla similar,

    buena calidad de la tela, color y costura. La calidad similar tambin se busca en las fajas y en las telas que

    entran en las apuestas. Cuando la mujer amarra la falda, nuevamente se la regresa a su chokame para quela lleve con la primer chokame. sta ltima regresa las faldas casadas con la apostadora inicial para que

    revise la falda apostada y decida si acepta. En caso de que acepte, su chokame la toma y la coloca sobre el

    montn de faldas que ya han sido amarradas para entrar definitivamente en las apuestas (wika sipchaka).

    En caso de que no acepte se desamarra para buscar otra falda que le agrade para la apuesta, o puede que

    ya no se interese en apostarla y la retira. Por ejemplo, una rarmuri que no estuvo de acuerdo con la falda

    que le amarr la apostadora contraria me dijo la voy a dejar descansar, es decir, ya no la quiso apostar

    otra vez.

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    cuyo color pueda resaltar durante la carrera, sobre todo en la noche.Durante la competencia, la rowera es tomada con una vara delgada ochuajpara, que puede ser fabricada con la rama de un sauce u otro rbol.Uno de los extremos, el ms grueso, es tomado con la mano de lascorredoras, y el otro, que tiene una pequea curva puntiaguda, es

    utilizado para recoger el aro y lanzarlo posteriormente hacia el frente,buscando la mayor longitud posible en lnea recta. Durante la carrera lascompetidoras tienen que ir lanzando el aro hasta completar una distanciaacordada previamente.Las corredoras se preparan a lo largo de su vida, ya que desde muypequeas (a los 4 5 aos) comienza su adiestramiento, primero jugandocon sus vecinas y familiares, para posteriormente participar encompetencias en las que estn de por medio las apuestas. Al obteneralgunas victorias frente a rarmuri locales, las nias y jvenes inician suincursin en competencias contra corredoras de otros asentamientos. Deesta manera, con la constante participacin y los triunfos obtenidos las

    corredoras empiezan a destacar y a ser reconocidas, tanto en elasentamiento en el que viven como en otros asentamientos. As, estasmujeres son buscadas para ser desafiadas en competencias cada vez msimportantes en diferentes puntos de la ciudad.3Generalmente las carreras inician al atardecer, cuando el sol ya se ocult,para tener menor desgaste fsico, y suelen acabar en la noche, aunquealgunas terminan en la madrugada o hasta la maana siguiente. Lascorredoras prefieren los das con viento, ya que pueden refrescarse cuandosopla el aire. Las chokame y las corredoras pactan un nmerodeterminado de vueltas o circuitos por recorrer, y queda comotriunfadora la primera que los complete.4 Cada equipo forma un montn

    de piedras con una cantidad igual al nmero de vueltas convenidas y, alser completado cada uno de los circuitos, van retirando una piedra. Lalnea de salida se marca con el montn de faldas apostadas, wikasipchaka. Cuando la carrera termina, el equipo ganador toma lasapuestas, las lleva al punto en el que se coloc para observar la carrera yse reparten las ganancias. No hay expresiones exaltadas de triunfo o

    3 Debido a esta fama, las corredoras reconocidas tambin suelen participar y ser invitadas a carreras pedestres

    organizadas por el gobierno de Chihuahua o empresas privadas, como la cadena de tiendas OXXO.4

    En el Oasis, el circuito es de poco ms de medio kilmetro, por lo que, dependiendo del nmero de vueltas

    concertadas, se podrn correr varios kilmetros en la carrera. Por ejemplo, en una competencia, entre dos

    nias, la distancia total recorrida por ellas fue de aproximadamente 8 kilmetros en 2 horas. En otra

    ocasin, una competencia pactada a 10 vueltas se realiz en un circuito de alrededor de 2.2 kilmetros, en la

    colonia Labor de Terrazas, en donde las competidoras completaron 22 kilmetros en un tiempo de tres

    horas, aproximadamente. Es importante sealar que durante la carrera, las competidoras suelen detenerse

    para tomar agua, recibir consejos o masajes en las piernas, por lo que no todo el tiempo est corriendo. En

    la competencia de rowera no importan las marcas o el registro del tiempo, sino la finalidad es terminar

    primero.

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    derrota en los equipos que compitieron, nicamente recogen suspertenencias y se retiran del lugar de la carrera.

    III. El carcter econmico y poltico de las carreras de rowera.

    A las caractersticas particulares de la organizacin de las carreras derowera debo sumar otras dimensiones de similar importancia que lasrodean: su carcter econmico y poltico. En relacin al aspectoeconmico, por cuenta propia, las carreras de rowera representan unsistema de circulacin de bienes que tienen un valor importante para lasmujeres rarmuri, principalmente faldas y vestidos.5 De esta manera, meremito a las ideas planteadas por Bronislaw Malinowski (1995 [1922]) enrelacin a la institucin del Kulaentre los indgenas trobriandde la NuevaGuinea Melansica, a travs de las que se puede apreciar que las carrerasy las apuestas realizadas en ellas funcionan como sistema de intercambiode mercancas. Sin embargo debo aclarar que no estoy proponiendo que el

    Kula y las competencias de rowera sean dos instituciones exactamenteiguales, pues el mismo Malinowski seal que en los estudios etnogrficospodran encontrarse fenmenos parecidos o similares al Kula (Malinowski,1995:502).El mecanismo que pone en movimiento la dimensin econmica delintercambio y la circulacin de objetos en las carreras de roweraes similaral Kula en dos aspectos. En primer lugar, las visitas que realizan lasrarmuri a los distintos asentamientos y espacios para organizar lascompetencias recuerda el circuito intertribal que conecta a las islas yaldeas dentro del anillo Kula. En segundo lugar, a pesar de que lascarreras no tienen fechas precisas para realizarse, son eventos que se

    organizan continuamente, de manera sistemtica, durante todo el ao, y,al igual que el intercambio Kula, estn reguladas: existe un orden moral yuna normatividad establecida en los encuentros, tienen un carcterritualizado, estn sustentadas en la visin del mundo rarmuri, se asociana las creencias en la hechicera, y generan una serie de emociones yexpectativas entre las participantes.6 Al respecto, Malinowski escribi losiguiente en relacin al Kula:

    El Kula no es un tipo de intercambio precario y clandestino. Muypor el contrario, est enraizado en el mito, respaldado por la ley

    5 En este sentido, un antroplogo muy reconocido por su trabajo y experiencia con los rarmuri, se atreve adecir que en las comunidades de la Sierra Tarahumara las carreras de bola y rowera operan como cuasi

    mercados (Urteaga, indito: 11).6 Malinowski entiende estas emociones y expectativas como una actitud mental de los indgenas. En este

    sentido, por ejemplo, de la misma manera que las rarmuri fijan un tiempo e inters considerable para exponer

    y seleccionar las prendas que van a ser apostadas, los trobriandeses pasan largas horas admirando y hablando

    del nombre y la historia de los collares y los brazaletes: En todo esto hay una clara expresin de la actitud

    mental de los indgenas, que consideran a los vaygua como un bien supremo. Poseer un vaygua es

    estimulante, reconfortante y apaciguante en s mismo. Miran los vaygua y los manipulan durante horas; en

    determinadas circunstancias, el simple contacto transmite su virtud (op. cit.:500).

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    tradicional y rodeado de ritos mgicos. Todas las transaccionesimportantes son pblicas y ceremoniales, y se llevan a cabo segnnormas precisas [] Una comunidad kula consiste en un pobladoo conjunto de poblados que van juntos en las grandes expedicionesultramarinas y que actan como un bloque en las transacciones

    Kula, realizan sus prcticas mgicas en comn, tienen dirigentescomunes y pertenecen a la misma esfera interior y exterior dentrode la cual intercambian sus objetos preciosos (op. cit.: 98, 114).

    Entendidas en este sentido, las carreras de rowera presentanelementos econmicos, religiosos, cosmognicos, morales, organizativos, jurdicos y polticos de la cultura rarmuri. Concebir las competenciasrarmuri como un sistema total, nos conduce a las ideas de MarcelMauss (1991 [1923-1924]) sobre la prestacin, el intercambio y laredistribucin de los dones en las sociedades primitivas, especficamenteal potlach, institucin fundamental entre algunos grupos indgenas del

    noroeste del continente americano como los kwakiutl. De lascaractersticas del potlach analizadas por Mauss, me interesa destacaraquellos aspectos referentes a la lucha poltica entre los jefes de clan paraconseguir y mantener un honor, una posicin o jerarqua. Tales elementosse presentan durante los enfrentamientos entre rarmuri en las carrerasde rowera: las competencias permiten el surgimiento de liderazgos y deprestigio, adems del aspecto de intercambio econmico.

    Un primer nivel de la analoga con el modelo de Mauss puedeevidenciarse al interior de los equipos rarmuri, cuando las participantesofrecen su apoyo a una corredora, y apuestan las faldas o los artculos asu favor. Lo que se observa es la prestacin que hace el grupo de mujeres

    a una corredora particular. Depositan en ella su confianza para lacompetencia y entregan, a su nombre, las prendas puestas en juego. Sinembargo, esperan que esta corredora corresponda de la misma maneracon sus prendas, cuando alguna de ellas, o sus familiares, sean lascompetidoras en otra carrera. As lo explicaron tanto Malinowski comoMauss: bajo un acto aparentemente voluntario y/o desinteresado, subyaceun acto prescrito, obligatorio e interesado de prestaciones y devoluciones.No obstante, aqu no se trata de aplanar a la corredora, prestndole ms y mejores faldas, sino lo que se pone en movimiento en este nivel es lageneracin de compromisos intergrupales durante las competencias, de lamisma manera en que lo hacen los kwakiutlo los trobriandeses.

    El segundo nivel tiene que ver con la generacin de prestigio y elsurgimiento de liderazgos en los grupos de competidoras rarmuri,particularmente, entre las corredoras (rowame) y las chokame. Al igualque los enfrentamientos o lucha de riquezas de tipo agonstico queentablan los jefes de clanes, ligada al gasto (usuario y suntuario) y a ladevolucin de los dones aceptados, en las carreras, las mujeres rarmuriarriesgan una serie de artculos valiosos y su prestigio, ya sea personal y/ocomunitario. En concreto, Mauss argument que la norma de rivalidad y

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    propiedad entre los kwakiutl domina todas sus prcticas culturales(Mauss, 1991:161). De esta manera, en la competencia de los intercambios

    potlachel estatus poltico, el prestigio, la posicin social y el honor de losjefes, clanes, cofradas y familias son puestos en juego. Al respecto Maussseal lo siguiente:

    El principio de antagonismo y de propiedad es el fundamento detodo. El status poltico de los individuos dentro de las cofradas yclanes, as como los diversos rangos se obtienen por medio de laguerra de propiedad, por la guerra o la suerte, por herencia, poralianza y por matrimonio, pero todo se considera como una luchade riquezas. Tanto el matrimonio de los hijos, como la posicindentro de las cofradas se obtiene por los potlach que se entregan ylos que se devuelven. Se pierde en el potlach como se pierde en laguerra, en el juego, en las carreras o en la lucha. En algunos casos[] con el fin de aniquilar, de aplanar al rival. De este modo, no

    slo se prospera personalmente, sino que se consigue para lafamilia un nivel mayor dentro de la escala social. Es pues unsistema de derecho y de economa en el que se gastan y transfierenconstantemente riquezas considerables (Mauss, op. cit.:200-201).

    En el caso de las carreras de rowera, ocurre algo similar: losenfrentamientos y las apuestas entre grupos, ya sean familiares, vecinaleso de asentamientos, representan un elemento que permiten la emergenciade prestigio, liderazgo y autoridad entre las mujeres que participanconstantemente. Aqu la competencia puede apreciarse en dos esferas: enprimer lugar, entre las corredoras y, en segundo, entre los grupos

    enfrentados. El objetivo tambin es doble: demostrar quin es la mejorcorredora y qu capacidad y cantidad de artculos pueden apostar. Aspectocon el cual manifiestan la confianza y seguridad que le tienen a sucorredora. Con el transcurso del tiempo y las competencias, las mejorescorredoras, as como sus equipos de apoyo, comienzan a ser identificadosy reconocidos por las rarmuri de la ciudad.

    Ahora bien, las carreras no slo sirven de aparador para mostrar alas ms capaces fsicamente. Las competencias tambin adquieren uncarcter agonstico, pues al igual que en el potlach, el desafo y rivalidadentre los equipos y corredoras se objetivan a travs de la prdida yganancia de los artculos exhibidos y apostados.7 Las faldas y los

    vestidos completos (blusa y falda) son muy apreciados por las rarmuri ysu valor es afirmado en el momento de entrar en el circuito decompetencias. Debido a esta valoracin, las mujeres participan en lasapuestas, primero, por la finalidad de conseguir algunas prendas que

    7 En este punto es importante el sealamiento que hace Mauss al afirmar que la apuesta supondra un

    elemento o supervivencia del derecho y la moral entre los indgenas, pues aunque compromete el honor y el

    prestigio, hace circular la riqueza entre los grupos (Mauss, op. cit.:200).

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    puedan ser utilizadas cotidianamente, y, segundo, porque su deseo esobtener estos artculos para seguir apostando. De esta manera, la mayorade las faldas y vestidos slo se poseen temporalmente, como en el caso delos objetos preciosos del Kula, ya que despus, a semejanza del potlach,son consumidos o derrochados en las apuestas. En concreto, un gran

    porcentaje de las prendas conseguidas en las apuestas se adquieren paraser gastadas. Al respecto, una corredora y chokameprestigiada del Oasisme coment que el nmero de vestidos adquiridos y perdidos por ella enlas carreras ha sido muy variable, en pocas de bonanza ha llegado atener alrededor de 40 y en tiempos aciagos se ha quedado con 2 3,nicamente.8

    Por otro lado, al igual que en el Kulao en elpotlach, las carreras sonconcertadas, organizadas y dirigidas por un conjunto de autoridades: laschokame. Las chokame son las representantes o delegadas de losgrupos durante los eventos y entran en funcin de manera temporal. Enprincipio, cualquier mujer puede ser chokame, pero quienes asumen esta

    responsabilidad comienzan a destacar y a ser solicitadas debido a suconstante participacin y experiencia adquirida en las carreras. Aunque noes una regla absoluta, muchas de las chokameson o han sido corredorasdestacadas y por ello el resto de las mujeres les tienen confianza.A primera vista el papel de las chokameresulta sencillo, sin embargo, enel momento de entrar en accin tienen la tareas de entablar un constantedilogo e intercambio con su equipo y con el contrario, en especfico con lachokamerival. As, como requisito, deben saber defender las apuestas, esdecir, sostener el valor de las faldas de su equipo; deben tener buenamemoria y recordar lo que apost cada participante, pues no llevan unregistro escrito de los artculos en juego; y, como punto importante, deben

    dar un buen consejo a las corredoras. Sobre este consejo, unacorredora seal que las chokame deben orientar la conducta de lascorredoras y mujeres de su equipo, insistindoles en el afn de ser unasganadoras respetuosas y no burlarse del otro equipo; asimismo, en caso deperder, reiteran a su equipo aceptar la derrota sin enojarse ni provocar unconflicto por las apuestas. En este sentido, puede decirse que laschokameson autoridades morales, pues ofrecen un consejo, en el mismosentido en que los gobernadores indgenas (sirame) lo hacen al darnawsari.

    Aunque he mencionado que las chokameadquieren una autoridadtemporal durante las carreras, su posicin, reconocimiento y prestigio, al

    igual que el de las corredoras, puede traspasar esta intermitencia parareflejarse en la organizacin y vida de los asentamientos. No es unageneralidad, pero en el Oasis encontramos corredoras y/o chokame queparticipan y se interesan en los asuntos comunitarios, por lo que suopinin y apoyo son tomados en cuenta, pues saben que su prestigio serefleja en la convocatoria que tiene con un determinado nmero de

    8 Como esta mujer hay varios casos en el Oasis.

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    mujeres. De esta manera, colaboran en las fiestas tradicionales celebradasen el Oasis, en los asuntos de la escuela, en el templo, los proyectos deaccin institucional, etctera.Como ejemplo, expondr brevemente el caso de una de las mujeres conmayor prestigio en el Oasis: Roco Holgun, de 42 aos. Su familia est

    integrada por ella, su esposo y cinco hijos (dos mujeres y tres varones).Roco es una de las dos mejores corredoras que se han consolidado en esteasentamiento. Ella es una entusiasta participante en las carreras y en lasapuestas que se realizan en el Oasis y en otros sitios de la ciudad, adems,debido a su experiencia, funge como chokame. El prestigio y liderazgoalcanzado por Roco la han posicionado en diferentes espacios de laorganizacin del asentamiento: laborales, escolares y rituales,principalmente. En este sentido sus compaeras la eligieron jefa del tallerde costura; asimismo, el apoyo de Roco constantemente es requerido porlos profesores o la asociacin de padres de familia de la escuela del Oasispara diferentes propsitos. Lo mismo sucede en la organizacin ritual y

    festiva comunitaria, ya que participa en las celebraciones invernales y deSemana Santa de diferentes maneras: prepara alimentos, tesgino, esdanzante, forma parte de un comit para solicitar recursos a la Comisinnacional para el Desarrollo de los Pueblos Indgenas (CDI) destinados a lasfiestas, etctera. Su participacin y entusiasmo en las actividades delOasis no se limita a la convocatoria que le hacen los profesores o elsirame, por ejemplo, sino que ella, por voluntad, conviccin e interspropios, contribuye en cada una de estas actividades.Desde luego que el prestigio adquirido en las carreras y en las apuestas noes determinante para que una corredora o chokamepueda participar enla vida pblica del Oasis. Existen otros canales y elementos que posibilitan

    el vnculo de las mujeres con la organizacin sociopoltica de esteasentamiento. No obstante, considero que una de las vas que permiten elsurgimiento de autoridades y jerarquas, reflejadas al interior delasentamiento, son las competencias de rowera, as como las posiciones yestatus alcanzados por las rarmuri que juegan en ellas.

    IV. Reflexin Final.

    Con los elementos sealados anteriormente, considero que lascompetencias de roweraconstituyen actividades que estimulan y refuerzanla identidad rarmuri. En ellas figuran mecanismos de expresin e

    integracin culturales y de gnero, pues son mujeres rarmuri quienes serenen para participar en las carreras, hablan su lengua materna yapuestan objetos tradicionales (vestidos y fajas). Asimismo, tales eventos,adems del esparcimiento y la recreacin, son fundamentales paramantener y crear vnculos con rarmuri de otras colonias.Adems de lo anterior, considero a las carreras de roweracomo un sistemaeconmico de intercambio de mercancas, sujeto a una normatividad yrespaldado por la tradicin, el cual abarca otros aspectos de la vida

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    rarmuri como la ritualidad, la moral o la poltica. En este ltimo rubro,las carreras de rowera permiten el posicionamiento de un grupo demujeres que, por el prestigio y la jerarqua adquiridos, llegan adesempear un papel importante en la organizacin social y poltica de losasentamientos urbanos.

    De esta manera, las carreras de roweradeben entenderse como un sistematotal que incluye aspectos econmicos, religiosos, cosmognicos,morales, organizativos, jurdicos y polticos de la cultura rarmuri. Ensuma, los enfrentamientos y las apuestas en las carreras de rowera, ya seaentre grupos familiares, vecinales o asentamientos, representan unelemento sociocultural rarmuri que en la ciudad de Chihuahua estatravesada por la variable de gnero ya que permite la emergencia deprestigio, liderazgo y autoridad entre las mujeres que participanconstantemente.

    VI. Bibliografa.

    Borja, Jordi, 2003, La ciudad es el espacio pblico, en Patricia RamrezKuri (Coord.), Espacio pblico y reconstruccin de ciudadana, Porra,Mxico, pp. 59-87.

    Malinowski, Bronislaw (1995 [1922]), Los Argonautas del pacficooccidental. Comercio y aventura entre los indgenas de la Nueva GuineaMelansica, Ed. Pennsula, Barcelona.

    Mauss, Marcel, 1991, Sociologa y antropologa, Ed. Tecnos, Espaa.

    Urteaga, Augusto, 2008, Una propuesta regional para el inventario delpatrimonio cultural inmaterial de Mxico: la carrera de pelota y de ariwuetatarahumar, su permanencia, prctica y significado cultural en el contextohistrico social actual del estado de Chihuahua, Mxico, documento indito.

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    Violencias masculinas cuando no basta nacerhombre

    Alderete Montes Dania Brizeida

    Te quiero en tu indefensin, en tu silencio tranquilo, en la inseguridad del da, en tuangustiante vivir.

    Te quiero porque sos, no porque debes, sos padre, hijo, sos hermano.Sos alguien como yo, vos hombre, yo mujer.

    Te propongo vivir sin rejas, sin muros, sin golpes, as.Libre te quiero, tu crcel me mata, me ahoga.

    Siendo soy, sos,

    Puedo sentir el amanecer y acariciar el sabor de estar vivos.No luches conmigo, Te quiero vivo.

    Vera Patricia Yagupsky

    Hoy celebramos el inicio de un evento que sin duda enriquecer nuestroquehacer profesional y nuestras vidas personales. En este trabajo seencuentra un anlisis y una invitacin a mirar desde los lentes de gneroel campo de la masculinidad y la violencia familiar.Mi inters en los estudios sobre la Condicin Masculina viene comoconsecuencia de un arduo trabajo con mujeres, adolecentes y menores

    victimas de violencia domestica, la cual implica un desequilibrio de poderpermanente o momentneo. Tal como las estadsticas lo indican son loshombres quienes con ms frecuencia ejercen las distintas formas de abuso(fsico, psicolgico, sexual y econmico).Quienes nos dedicamos a la atencin y prevencin de la violencia familiar,sabemos que es necesario implementar estrategias de trabajo conhombres que ejercen la violencia pues de lo contrario la sociedad estaraignorando parte de la raz del fenmeno, ya que los hombres pasanseguramente de una relacin violenta a otra, propagando como unaepidemia dolor y sufrimiento.En este sentido, analizar y comprender la violencia masculina implica

    conocer las representaciones sociales e individuales que hacen loshombres en torno a ella, el significado y la forma como la interiorizan,toleran y por lo tanto generan. Es as que procurare destacar algunascaractersticas del aprendizaje genrico masculino que favorece a laconducta violenta con el fin de invitarlos a la reflexin acerca de lanecesidad de comenzar a vivirnos de forma mas humana para poder tenerla capacidad de generar relaciones basadas en el respeto y la equidad.

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    Hablar de hombres necesariamente nos hace retomar el modelo masculinotradicional que ha sido transmitido de generacin en generacin en losltimos 50 aos. Alguna vez escuche una frase que me conmoviprofundamente y es que no basta nacer hombre, desde la infanciatemprana se aprende que un verdadero hombre tiene que hacerse, en

    las culturas latinas por ejemplo se visualiza con claridad el prototipomasculino a travs de una caricatura con la imagen del macho. Lointeresante de esta figura es que este modelo de hombre esta constituidopor rasgos exteriores y todos los mandatos se refieren al hacer, mostrar,ocultar, lograr, entre otros. Parece no importar la interioridad del hombre,esta esfera que tiene que ver con sus emociones, sentimientos ynecesidades (como si estos aspectos fueran exclusivos del generofemenino).Es as que podemos entender la masculinidad como un conjunto deatributos, valores, funciones y conductas que se suponen esenciales alvarn en una cultura determinada. Por lo que es necesario hablar de

    masculinidad en plural y dar cuenta de las diversidades a partir deaspectos como nacionalidad, clase, edad, etnia, orientacin sexual, entreotros.Cmo construye un hombre su identidad?Serias investigaciones sealan que la identidad masculina se construyepor oposicin al contrario de lo que ocurre con la identidad femenina,donde las mujeres no tenemos dificultad en imitar a nuestra madre, yaque esto con suerte nos garantiza la adquisicin de una identidadfemenina. Recordemos que a lo largo de la historia de la psicologaevolutiva se ha destacado la importancia del vnculo materno-filial, peroignoran casi por completo la importancia de la figura de padre, a quien

    solo le adjudican un papel regulador en momentos posteriores de la vidadel nio o la nia.Sin duda la tarea de convertirse en hombre, se vuelve dura y cruel paraun nio que para llegar a ser varn deber reprimir hasta el final toda suparte femenina y tendr la enorme tarea de demostrarle al mundoandrocentrico y homofbico que lo rodea que no se parece a una mujer nia un homosexual. Por cierto, que uno de los principales rasgos de lamasculinidad es la homofobia, el cual desempea segn algunosestudiosos en el tema un papel muy importante en la relacin padre-hijo.Tal parece que en muchos padres permanece latente en miedo a parecerhomosexual o a tener contactos afectivos con otros hombres,

    especialmente con un hijo varn. Entonces como pueden los hombresaprender a ser as afectivos con sus hijos? Cuando la sociedad patriarcalaun vigente impone la figura paterna con parmetros de autoridad, ley y distancia. El resultado es lastimoso, porque entonces los hombres seconvierten en padres faltantes o ausentes, podrn tener presencia fsicapero tendrn una gran dificultad para el intercambio corporal y afectivocon sus hijos.

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    Otra propuesta fundamental es que el modelo de masculinidad tradicionalse ha construido en base a cuatro pilares o premisas tradicionales segnBonino: La primer regla o pilar: Nada de mariconadas, supone que lamasculinidad es una produccin de la des identificacin con lo femenino,los hombres no pueden hacer nada que remotamente sugiera la feminidad.

    Segunda regla o pilar: Se importante, esta idea plantea que lamasculinidad se trasmite y se valoriza por la identificacin con el padre; elidealconstruido sobre la base es ser una persona importante. La sociedadmide la masculinidad por el tamao de la chequera de un hombre, por supoder y estatus. Es as que un hombre al no sentir el dominio en estosaspectos puede con facilidad generar sentimientos de fracaso y laimperiosa necesidad del xito. Bajo esta premisa ser varn se basa en elpoder y la potencia, y se valora por el grado de superioridad sobre losdems, la competitividad, el nivel socioeconmico, la capacidad de ser elproveedor, predominar en la razn y admiracin que los dems tengan del. La Tercer regla o pilar, Se duro como un roble, supone que la

    masculinidad se confirma en los rasgos de dureza y poca sensibilidad alsufrimiento, concretamente, se construye sobre la base de la violencia;segn esta regla un hombre tendr que ser confiable en momentos decrisis y parecer una roca o algo tan estable que no pueda demostrar sussentimientos. Se les entrena paradistanciarse afectivamente de los demso lo que es lo mismo mandar a todos al diablo. Bajo esta premisa elhombre necesitara la agresividad y la audacia, se tendr que manifestar atravs de la fuerza, el coraje, el enfrentamiento a riesgos, y la realizacinde todo lo que se desee, adems de emplear la violencia como estrategiapara la resolucin de conflictos. Se ven orillados a ser los fuertes o loscobardes, los dbiles o agresivos.

    Y por ultimo la cuarta regla o pilar, es Frigatelos afirma que lamasculinidad se construye sobre la base de lucha y rivalidad con el padre.Por lo que tendrn que demostrar que son atrevidos viven al borde delabismo y que saben tomar riesgos.Despus de lo anterior no es de extraarse que sean tantas las mujeresque se sienten insatisfechas en la relacin de pareja, pues adems deestas expectativas sociales tambin se espera como en los cuentos dehadas que llegue el prncipe azul a rescatarle, que sea amoroso, emptico yamable. Como podrn darse cuenta, los anteriores pilares sonincongruentes con esta ltima demanda.A resumidas cuentas el modelo tradicional masculino, atae a que el

    hombre deber ser y mostrarse omnipotente, desde la infancia los niosaprenden que el hombre debe mostrar ciertas caractersticas de fortaleza,seguridad en s mismo, hipersexualidad, competitividad; mientras que seles prohben otras como manifestar llanto, sentir miedo , debilidad, temor,inseguridad. Esta restriccin emocional les hace no expresarsaludablemente sus sentimientos, ni sus necesidades, evitan la intimidady se resisten a solicitar ayuda.

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    De igual forma podemos corroborar como este modelo de masculinidadlleva consigo grandes riesgos para la salud de los hombres; Al respectocabe mencionar que las tazas de mortandad indican que la expectativa devida de los hombres es menor en relacin a las mujeres, y es el gneromasculino el que encabeza los porcentajes de muerte por accidentes,

    trastornos cardiovasculares, cncer y ulcera gastroduodenal, y en nuestrocontexto muertes violentas por participar en actos ilcitos. Adems, es unhecho comprobado que la represin de ciertas emociones se encuentranasociadas a cuadros psicosomticos. As mismo rol masculino promueveen nuestra cultura determinadas conductas nocivas para la salud, mismasque son alentadas por el grupo de pares (ejemplo, beber, fumar, sexoirresponsable). A la mayora de los hombres les cuesta trabajo cuidar de susalud y solicitar atencin medica, llegando a consulta con cuadrosavanzados y en ocasiones irreversibles, es como una profunda vergenza amostrar debilidad ante los dems.Cmo se da esta construccin social de la masculinidad?

    El modelo ecolgico, es un modelo explicativo que facilita el entendimiento y la comprensin acerca del tema de las violencias masculinas. Estesistema puede ser descrito de manera sencilla en tres niveles principales:Macrosistema: Comprende valores culturales, No es suficiente habernacido con pene para ser un verdadero hombre, aqu entran lasconcepciones acerca de cmo debe ser un hombre y una mujer, as comolos mitos, aprendizajes sociales de los roles genricos a menudoinjustamente adjudicados y las actitudes permisivas y naturalizadas haciala violencia.Exosistema: Abarca las instituciones intermedias, trasmisoras de losvalores tales como la escuela, trabajo, los grupos y redes sociales.

    Entran en accin los medios de comunicacin que promueven la figura delsper hombre.Microsistema:Incluye a la familia como espacio simblico, el anlisis de losmodelos y de la comunicacin familiar, la interaccin didica (madre-padre/madre-hijo/padre-hijo), las patologas del grupo familiar y losestereotipos de genero en la familia. El padre lejano, ausente, distante,implica para el hijo el nico modelo posible para diferenciarse de lofemenino y materno.Qu lleva a los hombres a cumplir estos mandatos culturales, aun enriesgo de su propia vida y en veces la de los otros?Alice Millar hace un profundo anlisis, en el cual plantea: Que cuando se

    frustran las necesidades vitales del nio, cuando el adulto abusa de l pormotivos egostas, le pega, lo castiga, lo maltrata o manipula, desatiende oengaa sin la inferencia de un testigo, la integridad del nio sufrir unprofundo dao. Si el nio se ve obligado a ocultar sus sentimientos, si leprohben enojarse, mostrar su rabia o dolor, mas delante esossentimientos pueden generar acciones destructivas contra otros, contra simismos o bien puede provocar desordenes psquicos e incluso provocar elsuicidio. El nio solo puede superar las graves consecuencias si le

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    permiten defenderse o articular su rabia y dolor. Y si no fue posible reviviry reelaborar ese maltrato, este se transmitir en la adultez.Cules son los principales mitos y creencias acerca de la masculinidad? Ser hombre es mejor que ser mujer. Un verdadero hombre domina, compite y tiene poder.

    Solo las mujeres pueden ser dbiles sensibles, sensuales y tiernas. El autocontrol, el control sobre los otros y sobre su entorno sonesenciales para su seguridad. Un hombre que pide ayuda, es dbil, incompetente y vulnerable. El pensamiento racional del hombre es la forma superior deinteligencia. El xito en las relaciones se asocia a la subordinacin de la mujer atravs del poder y control de la relacin. La sexualidad es el principal medio para probar la masculinidad. La intimidad con otros hombres debe ser evitada por temor alafeminamiento y a la homosexualidad. La autoestima se basa en los logros obtenidos en el mbitoeconmico y laboral.De ser entendidas y aplicadas estas premisas por un hombre, estarejerciendo violencia contra la mujer. Ya que estar buscandoconstantemente ajustarse a las prescripciones sociales de acuerdo a sugnero para conseguir la satisfaccin de sus necesidades particulares, estoa menudo atraves de la violencia.Para J. Corsi algunos factores implicados en la manifestacin deconductas violentas, por parte de los hombres hacia las mujeres dentro delmbito familiar, son:

    Falta de seguridad personal, ante el conflicto con la pareja elhombre puede percibir amenazada su autoestima y poder, sospecha conperder el control de la relacin, para retomarlo emplea la fuerza. Creencias basadas en concepciones sexistas, bajo un sistema decreencias concretas, racionalizaciones y argumentos los hombresconsideran a la mujer como inferior a ellos, estableciendo una relacin decontrol y dominacin sobre esta. Dificultades para comunicar sentimientos, de la prohibicin paraexpresar abierta y directamente sentimientos, afectos, emociones ynecesidades, los hombres emplean la violencia hacia su pareja, antesituaciones conflictivas, como medio para solucionarlas.

    Dficits en la resolucin de conflictos, dadas sus dificultadescomunicacionales, el hombre emplea la violencia como mtodo efectivo erpido para acabar con el conflicto. Ante la percepcin de amenaza, o faltade poder o control sobre una situacin, la violencia favorece laexperimentacin de poder.

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    Aislamiento emocional, la falta de intimidad social impide que loshombres expresar sus sentimientos, lo que favorece la acumulacin detensin aspecto asociado con los hombres golpeadores. Autoimagen desvalorizada, empleo de violencia dentro del mbitofamiliar a diferencia de otros espacios, el mbito domstico le proporciona

    un sentimiento de seguridad, los hombres emplean racionalizaciones parajustificar su conducta violenta en este mbito, pero resultan invlidas antelos espacios y personas en los que no se muestran violentos. Capacidad de conquista y dominacin sexual de las mujeres,aspectos relacionados con la autoestima (dominante/sometido;activo/pasivo). El control que el hombre logra sobre la sexualidad de la mujer, es unmedio para demostrar poder, afirmar la competitividad, fuerza y potencia. Para lograr o mantener este control pueden recurrir a la violenciafsica; cada experiencia sexual representa una posibilidad de reafirmarse ybeneficiarse de la mujer, lo que lo estimula sexualmente es el deseo de

    sentirse dominante y ganador sobre la mujer, de ah que el placer sexualslo sea experimentado a travs de la eyaculacin, y no de la intimidadefectiva, la cual evitan.Las investigaciones sealan que no existe una tipologa especfica y nicapara describir a un hombre violento, sin embargo coinciden en ciertascaractersticas que son comunes en la mayora de ellos. Se ha planteadoque estas actitudes son resultado del aprendizaje social que stosindividuos han experimentado durante las primeras etapas de desarrollo,la infancia y la adolescencia, siendo la observacin de modelossignificativos empleadores de conductas violentas dentro del mbitofamiliar, los que genera el aprendizaje de la violencia como un

    comportamiento vlido tanto para la proteccin de derechos, y paraemplearla hacia la mujer cuando sta se comporta de forma desafiante oindebidamente. As mismo se ha observado que los hombres que generanviolencia, pudieron haberse desarrollo dentro de un hogar en dondeprevalece la sobreproteccin y permisividad, y si bien, como tal noobservaron modelos que emplean la violencia durante sus primeros aos,se identifica una figura materna sumisa ante su pareja, as como hacia elhijo varn. Lo cual suele relacionarse con dificultades para afrontaradecuadamente situaciones conflictivas, y la baja tolerancia a lafrustracin.Rokeach, al referirse como piensan las personas intolerantes, queprejuzgan o manejan prejuicios dentro de su sistema cognitivo, mentecerrada, seala que stas muestran: Un comportamiento rgido en la resolucin de problemas Pensamiento inflexivo Baja capacidad de comprensin sobre asuntos de gran vitalidad oimportancia Tendencia a establecer juicios rpidamente

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    Desagrado ante situaciones ambiguas o inciertas Distorsin de recuerdos relativos a situaciones relevantes osignificantes Alta resistencia para considerar cualquier cambio sobre suscreencias

    Estas caractersticas, dejan en claro la esencia de la impermeabilidad depensamiento; algunas de las causas que pueden explicar la mentecerrada son, sentimientos de incapacidad y abatimiento, vivir apartado delos dems, temor al futuro, y delegar en otro(s) la solucin de problemas.Otro rasgo de las personas agresivas es que suelen desarrollar una imagenpobre de s mismos, por lo que la intimidacin es una herramientacompensatoria.Corsi (1987) seala dentro de las caractersticas de los hombres queejercen algn tipo de abuso fsico, emocional, o sexual en contra de sucompaera, las siguientes: Manejo de creencias basadas en mitos culturales, respecto a la

    masculinidad y a una posicin inferior de la mujer. Dificultades para expresar sentimientos, por considerarlo como unindicio de debilidad, de ah que emple la violencia para resolver conflictos Aislamiento emocional, toda vez que no cuentan con ningn apoyosocial para poder hablar de sus sentimientos o dificultades. Establecen racionalizaciones para explicar su conducta, adjudicandola responsabilidad sobre la compaera, as como aducir falta de su propiocontrol. Perciben constantemente su autoestima y poder amenazados,actuando con violencia ante cualquier indicio de prdida de control. Muestra actitudes altamente autoritarias, como estrategia paraocultar sus sentimientos de debilidad. No reconoce su comportamiento como violento, por lo tanto no seresponsabiliza de sus acciones y ni solicita ayuda.Cual es el contexto social de la violencia masculina?Michael Kaufman, habla de cmo cada acto de violencia aparentementeindividual se enmarca en un contexto social y habla de la triada de laviolencia masculina que abarca la violencia contra las mujeres, contraotros hombres y contra si mismos. Segn sus investigaciones el hombre sesita en una sociedad basada en estructuras patriarcales de autoridad,dominacin y control, diseminadas en todas las actividades sociales,

    econmicas, polticas, ideolgicas y en relacin con el medio natural. Lamasculinidad exige la represin de necesidades y sentimientos que sonformas de expresin humana y no solo caractersticas de las mujeres comose cree. Es as como la represin de la pasividad favorece el desarrollo deuna personalidad agresiva excedente.Vampirismo Emocional: La violencia es la expresin de la fragilidadmasculina y tiene la funcin de perpetuar la masculinidad y la dominacintornndose en una forma de poder masculino. El temor de parecer dbil y

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    pasivo en relacin con otros hombres les crea una dependencia hacia lasmujeres para descargar tensiones y satisfacer sus necesidades personales.Cuando un hombre tiene grandes dudas personales e imgenes negativasde si mismos, no toleran sentimientos cotidianos de impotencia y empleanla violencia contra las mujeres como un medio de afirmar su poder

    personal. La negacin y restriccin de emociones y aptitudes humanas seagravan con el bloque de las vas de descarga. De tal forma que loshombres se convierten en ollas de presin, convirtiendo a las emocionesen ira y hostilidad.Es importante entender que para poner fin a la violencia masculina serequieren de grandes cambios econmicos, sociales y polticos queconduzcan a una sociedad sin represin excedente, que elimine elpatriarcado, permita mayor manifestacin de necesidades humanas. Estono es suficiente, es necesario tomar otra serie de medidas de carcterpreventivo y asistencial.En resumidas cuentas los hombres que ejercen violencia contra sus

    esposas no poseen las habilidades necesarias para afrontar y solucionarlos problemas de pareja dentro de la convivencia cotidiana, de formaadecuada. Por lo cual estos hombres, as como las nuevas generacionesde varones tienen ante si cinco retos trascendentales:1. Detener el comportamiento violento psicolgico, fsico y sexual hacialas mujeres dentro del mbito familiar.2. Identificar los elementos culturales, sociales e individualesintervinientes en su conducta violenta, como proceso educativo, deaprendizaje, y los efectos negativos en s mismo, para favorecer el cambioen la percepcin y funcionalidad de su conducta.3. Reconocer la conducta violenta como un problema individual, paraasumir un comportamiento activo para el cambio, a travs el desarrollo decomportamientos y actitudes orientados a la modificacin de su conductaviolenta.4. Desarrollar habilidades de autocontrol sobre sus emociones,pensamientos y comportamientos para incrementar el sentido de autoeficacia personal, que favorezca el desarrollo de una mejor auto percepcinpara el enfrentamiento adecuado de situaciones conocidas o nuevas, sinemplear la violencia.5. Aprendizaje y desarrollo de habilidades para una comunicacin yconducta asertiva, para la expresin adecuada se sentimientos,necesidades y opiniones de forma respetuosa y emptica, que facilite el

    enfrentamiento adecuado de situaciones percibidas como problemticas, ygenerar alternativas para su solucin, incompatibles con cualquier tipo deviolencia, estableciendo de interacciones igualitarias con la pareja.Mucho hablamos de los derechos que tenemos las mujeres y sin embargopocos conocen los derechos fundamentales de los varones, a continuacinen las palabras de Walter Riso; Los hombres tenemos derecho a: A sentir miedo. A ser dbiles y pedir ayuda cuando as lo consideremos.

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    A ser intiles, a cometer errores y a no saber que hacer. A fracasar econmicamente, a ser pobres y experimentar el ocio. A vivir en paz, a negarnos a la agresin, a la guerra y a todo tipo deviolencia interna y externa. A emocionarnos y a expresar nuestros sentimientos positivos, ya

    sea fsica o verbalmente. A estar mas tiempo en familia y a participar en la crianza denuestros hijos. A comunicarnos afectivamente con los dems hombres, y a fomentarla amistad masculina sin rivalizar ni competir. A disfrutar del sexo sin ser adictos sexuales A fallar como reproductores y a no transmitir el apellido. A una sexualidad ms afectiva y amorosa. A intentar ser fieles. A no humillarnos en la conquista

    En conclusin, hablar de violencia no solo nos remonta al dolor queexperimentan las mujeres y sus hijos, el hombre que genera violencia esprofundamente desdichado porque no ha podido encontrar los recursosidneos que le permitan ser feliz, y el escaso valor que le toma a la vida y asi mismo, lo convierten en un ser solitario y peligroso.Los hombres tienen ante s sus propias tareas relacionadas con aprendera ser sensibles, hablar de sus sentimientos, aprender a relacionarse con elafecto y seres queridos de formas menos limitantes. As como a contribuira formar nuevas generaciones de hombres no violentos y mujeres noabusadas.

    Es necesario resignificar y entender la masculinidad desde una formadiferente a lo cotidiano: se hace necesario que esta nueva masculinidadsea vivida y entendida como una fuente de energa para la liberacin y elaprendizaje de emociones vitales.

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    Resistencia y opresin de las mujeres medievalesvisto a travs de la literatura dirigida a prncipes

    ngel Acosta

    Pensar en la actualidad en lo que pueda implicar el concepto mujer esinimaginable, porque, pese estereotipos, generalidades dominantes, etc.,

    que hay e influyen en la vida de las comunidades, de los roles de lasmujeres en las diferentes sociedades, son tan amplios como complejos y,en mucho de los casos, en un sentido negativo y en un sentido de noreconocimiento, todava, son ocultos, escondidos y negados; y, hasta otrosmuchos, reprimidos de manera cabal por la mujer misma, como por lamayora de los varones; esto en conjunto no es otra cosa que laconsecuencia de una cultura tradicional cuyo poder casi siempre ha sidodisputado por personas de sexo masculino, asimismo, por la falta de unaideologa de equidad, de respeto y de responsabilidad, que funcione y mirecon plena conciencia cmo humanidad y no cmo gneros, clases, estirpeso razas. Es cierto que desde todos los mbitos no se pretende en este sigloXXI, aunque existe aun, la bsqueda de una mujer ideal, sino se trata defomentar la concertacin de un ente capaz de ser, y, de realizar de todo loposible y realizable humanamente con base en el estmulo de todo lo quela conforma, como a los varones, para agudizar sus inteligencias posibles.Incluso a manera de aadidura y desde el campo ficcionado comparto loque en otro espacio dice Vicente Reynal: Hoy, al respecto, se persigue,dentro del campo de las letras, ms su derecho que su belleza: se intentasituarla en el peldao que le corresponde y no en un mundo idealizado deesferas irreales9.Sin embargo y quiz sea menos difcil decodificar la idea, o hacer un

    acertado comentario, de nuestras contemporneas, que el de hablar de lamujer medieval, porque de esta ltima no solamente sus roles no estn anuestro alcance en una forma viva y directa, ni ellas son ya tangibles. Sloy apenas los que hablan de ellas son los vestigios hechos por ellas mismas, y los son tambin los de los que dijeron o comentaron a cerca de lasmismas. Es claro que con esto puedo vislumbrar que una visin de la

    9Las mujeres del Arcipreste de Hita, p. 7.

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    mujer medieval existe desde el Medioevo mismo. Se puede acceder a ella atravs de aspectos generales y particulares. Pero stos, por contradictorioque parezca, uno de otro estn alejados y, al mismo tiempo, uno a otroest en s mismo. Gran parte de mi interpretacin de los diferentescontextos proporcionados por los textos mismos de la Edad Media est

    basada en el intrincado mencionado. En otras palabras, esto es que en lostextos medievales existen generalidades y particularidades posibles delmundo o cosmovisin de la vida de esos momentos o tiempos sucedidos. Yambas formas pueden estar mezcladas una con otra; e incluso, donde unavariante como excepcin no dejar de tener adherido a su mismaexcepcin cosas de las generalidades, y as de forma viceversa, hasta elinfinito humano.No bien, me parece que en lugar de mantener la indiferencia es importantetener o reconstruir aunque sea una pequea idea de este aspecto social-histrico, y dicha idea no slo indica que es un implcito compromiso a lahora de verter una opinin en torno a aquellas mujeres qu, como es

    evidente, estn en desventaja por el simple hecho de que no tienen antenuestros juicios y categorizaciones la oportunidad de rplica o de defensaalguna, sino tambin denota que es situar desde la crtica ms objetiva yhumana que masculina o sexista a la posible configuracin de la mujermedieval como ente literario por un lado y por otro como ente literato, realy autntico, cuya presencia cultural delata su existencia casi plena.As, el presente trabajo tratar del papel que tuvo la mujer en la EdadMedia. El ensayo se inclina al mundo hispnico castellano. Y dicho periodohistrico europeo, como de manera convencional la mayora de losinvestigadores han determinado su concepcin para fines prcticos10, esaqul ocurrido entre los siglos V dc. y XV dc. Esto es que la Edad Media

    comenz a partir, simblicamente, de la cada del Imperio Romano deOccidente en el ao 476 dc. y finaliz con el descubrimiento de Amrica en1492 dc. Y al mismo tiempo estos diez siglos arbitrariamente se dividen entres pocas; una es la Alta Edad Media, siglos V-X; otra es la Plena EdadMedia, siglos XI-XIII y una tercera es la tarda en los siglos XIV y XV. An,por lo impreciso que es clasificar periodos, aqu adems de la Tarda EdadMedia, extiendo esta ltima en el caso hispanoamericano a los siglos XVI,XVII e, incluso, hasta el XVIII, por la nica razn de que hay produccinde textos de dichos aos que cuyos tpicos, estructuras, modelos,ideologas, corresponden marcadamente a la Edad Media. Los rasgos delos textos literarios modernizados son sin duda significativos; pero en el

    caso de muchos de los castellanos, como en su momento lo sealar,anoto que por el matiz moral, pedaggico y por el condicionamiento de lastemticas tratadas, en especfico, corresponden a las lecciones ejemplarassobre conductas femeninas y que todo aquel que vaya a incurrir al podertendra que conocer supuestamente dichas naturalezas.

    10 Vid. Jacques Le Goff en su Historia de Occidente y en E. Mitre en su Historia de la Edad Media en

    Occidente, y desde la visin social a Robert Fossier en su libro titulado La sociedad medieval.

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    Comento rpido que existen bastantes ttulos de compendios donde losejemplos o relatos o cuentos o fbulas ejemplifican tipificando a distintasmujeres de forma ms negativa que positiva, los extremosos son los de losclrigos con una notoria carga misgina, escudada en morales einterpretaciones supuestamente bblicas. Cito algunos ttulos: Disciplina

    clericalis (s. XII); Sendebar, Barlam y Josafat, Libro del Caballero Zifar(siglo XIII); Libro del conde Lucanory Libro de los exemplos por A. B. C. (s.XIV); Exemplario contra los engaos y peligros del mundo (s. XV), de Juande Capua.Comencemos: Una obra como el Libro de los Gatosque expone de manerafabulada los males sociales e individuales de eclesisticos o seculares, devarones y mujeres cuya gama de situaciones y personajes sondeterminantes para la felicidad del hombre y el salvamento del alma, nopodra no presentar por obviedad una imagen negativa del mundo. Endicho texto de los siglos XIV y XV, amigos, enemigos, parientes, noparientes, socios o no, sirvientes, gobernantes, vecinos, extranjeros,

    labradores, cazadores, clrigos, priores, obispos, reyes, seores, etc., todosy cada uno de ellos son varones, o constituyen imgenes de hombres; y nopor estas cualidades negativas u oscuras el mensaje sea hacia unaaversin al varn; en todo caso es preventiva. S, as como sucede conrespecto a los comportamientos humanos varones, tambin los hay hacialas mujeres; sin embargo no deja de tener una inclinacin ms hacia eldesagrado pleno de stas.En torno a los ejemplos que presentan al personaje femeninoexplcitamente, siete son los cuentos encontrados en dicha obra medieval,los cuales enseguida analizaremos hermenuticamente. Carme ElenaArmijo, unas las especialistas en el estudio de esta obra, nos comenta:

    Tanto el autor-traductor del Libro de los Gatoscomo el monje de Chriton,utilizaron, como era de esperarse, la idea que los Padres de la Iglesiatenan de la mujer, por lo tanto encontraremos a la mujer tentadora, lalujuriosa, la pecadora o la mujer como cortina del diablo. ()

    En la mayora de los exempla del Libro de los Gatosla mujer es smbolo deprovocacin y concupiscencia, actitudes que hacen que el hombre caiga enel mal. El significado es evidente; aquellos que, sin la fuerza suficientepara resistir las pasiones, se han visto obligados a recurrir a la mujer, seencaminan a la perdicin.11As pues, dicho lo anterior, en sntesis lo constato.

    El mensaje del Enxiemplo del mancebo que amava la vieja es ms omenos claro y elemental. En resumen, puede significar todo aquello queviene como cosa del Seor, -y en efecto es el Seor mismo-, es hermosoy bueno, pero en esto puede haber pantallas que engaan al individuo. Esdecir, encuentro lo dicho mediante la siguiente fbula:

    11 La imagen de la mujer en elLibro de los Gatos, p.311.

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    Un mancebo amava una vieja e deca algunas vezes commo se podriapartir de aquella vieja que tanto amava.E dixole un mesquino: -Commo eres loco que amas tanto a esta vieja emujer tan fea?E el respondi: -Mui fermosa me paresce. (Libro de los Gatos, p. 44)

    De acuerdo y siguiendo a Carmen E. Armijo, la mujer es smbolo del diabloy de sus obras. La imagen es prototpica; incluso, de manera aventurada,digo que es como en nuestros tiempos un slogan; cuya conjugacin entregnero (mujer), edad (vieja) y atributos o cualidades fsicas (fea)emblematizan la negatividad que las mujeres representan para loshombres. La relacin mujer-vieja o mujer-madura es significativa, ya quepreviene al varn de caer en tretas del diablo, que mujeres-maduras comola de la citada fbula son vnculos con el mal que llevan al varn a cometerpecados; -en este ejemplo-, relacionados con la lujuria. Adems cuando sees joven se es propenso a la confusin de lo feo por lo hermoso, de lo malopor lo bueno, se es propenso en escoger lo superficial por lo

    verdaderamente profundo de las personas, y por consiguiente equivale aamar a los pecados, cosa que va en sentido contrario a la ley divina.Con respecto al Exiemplo de lo que acaeci a Galter con una mujer, elobjetivo es ensear que hay tres grandes males que el varn est tentado acaer: la mujer, el dinero y los reconocimientos o fama. Veamos: Galter alcodiciar el placer y gozo de la vida sale en busca de ellos: () pusso de yrbuscar un logar do siempre oviesse gozo e nunca pudiese su coraconentristecer (bid., 71) En seguida encuentra en una tierra una mujer muyfermosa; e era linda e avia poco que muriera su marido (dem). Galter encuanto encuentra a dicha mujer, le declara sus pretensiones. sta, queadems de ser hermosa y viuda, seduce a Galter. A ste, ella responde a

    sus deseos ofrecindole su persona, sexo y riqueza: -Si tu quisieras ser mimarido, e folgaras aqu e avras todo quanto avieres menester; ca darte e yocasa, tierras, vinas, e otros muchos bienes (dem). Al instante, la hermosaviuda le ensea a Galter sus palacios. El mancebo qued admirado y, a lavez, pregunta a la mujer por el lugar ms privado. Ella reacciona y loconduce al dormitorio y mostrole una cama e en ella un leon. E en aquellecho stava de la parte un oso, e de la otra un lobo, e de la otra muchosgujanos, e de la otra muchas serpientes (bid., 71-72.)En el Libro de los Gatos, la mujer como un objeto del mal queda al mismonivel de otros deseos masculinos: lo material y la honrra. De estos tresdeseos o tentaciones, el varn debe saberse cuidar, pues ninguno es para

    siempre. De esta prevencin tambin se toma en cuenta la limitada vidahumana e, incluso, al cometer el pecado el alma es vctima y es lastimaday condenada para toda la eternidad, pues el alma al ser esposa de Diosno acepta faltas y por consiguiente debe mantenerse siempre virtuosa. Elexemplum de Galter junto con el mensaje refiere directamente a la palabrade Dios cristiano; pues, como en todos los enxiemplos del Libro de losGatos, en el de Galter hay citas de pasajes, o de otros libros de enseanzamoral, o de pasajes de textos de san Agustn, o del Libro Eclegiastico, etc.,

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    los cuales no slo aclaran las fabulillas, sino les dan categora de verdadesnicas.En el Enxiemplu del avispa con la araa, hay una fbula muy corta y enapariencia sencilla. Trata de una avispa que por su confianza y suscualidades de ser gil al volar reta y subestima a una araa, dicindole

    que ella, la araa, lo que volara en diez das, sta, la avispa, lo hara enuno. La araa acepta el reto; pero es para aprovecharse de la atrevidaavispa, pues mediante otra treta, la araa convence a la avispa a que sesiente en una tela blanca y fina a departir un poco del vino apostado. Elmanto result ser la trampa de la araa, cuyas redes envolvieron a laavispa, la cual no pudo nunca librarse.Este enxiemplo est asociado, segn la explicacin que viene al final, comoparte de la misma fbula, con aquellas tretas del diablo que al varn lepueden pasar cuando el mismo satn se hace pasar por mujer y queadems el pecado de la lujuria es mal del que el humano no