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C entrales d e C Pomed ores op ulares Autogestionar ios y

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Presentación

Desde fines de la década del 70’, los comedores surgen en el Perú con el fin de enfrentar la crisis económica que se había iniciado en 1976, con las primeras políticas de ajuste a través de los “paquetazos”. En 1983 había 100 comedores en Lima Metropolitana, en 1984 crecen a 220 y a 880 en 1986, llegando a 1,500 en 1988. Luego del ajuste de 1989 y el “fujishock” del 90, los comedores crecen aceleradamente, porque el mismo gobierno impulsa la creación de otros, para ejecutar sus “políticas sociales” llegando a 5,000.

A pesar del tiempo transcurrido, la organización de comedores, tiene un rol importante, porque ha permitido el desarrollo de las mujeres organizadas, y se trabajan diversos temas que contribuyen a mejorar las condiciones de vida de sus comunidades.

Algunos datos relevantesEn el Perú, la desnutrición crónica afecta a la

tercera parte de los menores de las zonas rurales, donde la tasa es de 32,8 %, mientras que la anemia afecta al 50,4% de los menores de tres años de todo el país.

El 45% de niños y adolescentes viven en situación de pobreza, y el 19% de ellos lo hacen en la extrema pobreza.

El comedor es la única organización de mujeres que atiende con una “menú económico” a los miembros de familias, que gracias a ello han educado y brindado atención en salud a sus hijos.

Para la FEMOCCPAALM la seguridad alimentaría proviene del derecho a la alimentación, como uno de los derechos fundamentales económicos, sociales y culturales, está relacionada con el acceso a los alimentos.

Esta seguridad alimentaria debe entenderse en el sentido de prevenir la desnutrición a través del: Desarrollar las capacidades de las organizaciones sociales de las

organizaciones de productores de alimentos, respetando su autonomía.

Desarrollar una cultura alimentaria nacional. Emprender acciones de seguridad alimentaria en relación con los

sectores sociales de salud, educación y trabajando por el empleo digno

Dar asistencia a quienes no estén en condiciones de satisfacer este derecho (casos sociales)

Trabajar en el marco de los compromisos nacionales e internacionales .

La FEMOCCPAALM busca mejorar las condiciones de acceso a la alimentación de personas de bajos recursos que habitan en sectores urbano marginales de Lima Metropolitana, por ello el principal problema es el acceso a los alimentos por: los bajos niveles de ingreso de la población, las políticas ineficientes, la falta de equidad, el uso inadecuado de alimentos, entre otros.

Aportamos nuestro trabajo, dotando de una ración diaria de almuerzo, para las familias, posibilitando con ello: disponer de un menú económico, que permite que las familias acceda a otros derechos como son la salud y la educación. Con ello seguimos afirmando la importancia de la Seguridad Alimentaria, y consideramos que se debe avanzar en ello.

Los Comedores Populares Autogestionarios en Lima Metropolitana, funcionan como unidades de servicios que se basan en pequeñas economías de escala, tanto para adquirir los alimentos como para prepararlos. Las socias financian la parte más significativa del costo de la ración: la preparación y las condiciones que ello requiere.

Las socias contribuyen con su trabajo a la preparación y pagan por la ración un precio acordado entre todas.

Incorporan la lógica de la solidaridad al brindar raciones donadas para atender casos sociales (pobres extremos, enfermos, abandonados, etc.), subsidiando estas raciones.

Uno de los principales aportes de las mujeres organizadas es la Ley 25307 (15/02/1991) que declara de prioritario interés nacional la labor que realizan los Club de Madres, Comités del Vaso de Leche, Comedores Populares Autogestionarios, Cocinas Familiares, Centros Familiares, Centros Materno Infantiles y demás organizaciones sociales de base, en lo referido al servicio de apoyo alimentario que brindan a las familias de menores recursos.

A partir de la Ley 25307 y su reglamento, el Estado se ha comprometido a contribuir con el 65% de la ración diaria per cápita, es decir del plato de comida elaborado por nuestras organizaciones. A este porcentaje se debía llegar progresivamente, pero hasta la fecha no se ha logrado y lo que el Estado aporta sólo alcanza el 19 %.

Con esta norma también el Estado peruano se han comprometido a que los alimentos de los programas sociales sean de producción nacional.

Hemos logrado que la participación de las organizaciones para la gestión y fiscalización de los Programas de Apoyo Alimentario, planteando para ello la instalación de los Comités de Gestión donde participan tres representantes de las OSB.

Hemos trabajado en el Desarrollo las Capacidades de las Mujeres, en convenios con ONG y con el Estado (MIMDES), y con esta norma se debe avanzar en reconocer las capacidades y aporte de las mujeres organizadas, en términos económicos, como promotoras sociales.

Sobre el proceso de inscripción de los comedores y centrales zonales y distritales, que aún no están inscritos en el Registro Municipal y Registros Públicos, o no cuentan con mandato vigente, seguimos trabajando, para garantizar con ello la participación de nuestras dirigentas en los espacios de concertación y en los procesos de presupuesto participativo de los gobiernos locales a los cuales pertenecen.

En los procesos electorales municipales estamos aportando a las agendas que se han hecho por los conos (zonas) de Lima Metropolitana.

En el proceso de transferencia de los programas, que forma parte de la reforma y descentralización del Estado, se está haciendo propuestas de Ordenanzas para los distritos, donde se está transfiriendo los Programas de Complementación Alimentaria - PCA, con el fin que los Comités de cuenten con las herramientas necesarias para trabajar mejor.

Desarrollo de capacidades y empoderamiento de las mujeres: para potenciar la participación en igualdad de condiciones con los hombres, en la vida económica y política y en la toma de decisiones a todos los niveles. Entendemos que la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres son importantes para la lucha contra la pobreza, y la gobernabilidad.

Impulsamos el fortalecimiento institucional con: El registro municipal y jurídico de todos los

comedores. Seguimiento y propuesta a políticas públicas, como

en el tema de registro de los beneficiarios y el Sistema de Focalización de Hogares (SISFHO).

Vigilancia ciudadana. Elaboración de propuestas de normas que permitan

una mejor gestión de los PCA. Consideramos que es importante para luchar contra la

pobreza la generación de empleo productivo, y por ello creemos que la organización avanza a desarrollar propuestas relacionados. En este sentido, para lograr un crecimiento con empleo digno y promover políticas sectoriales que ejecuten inversión en iniciativas económicas desarrolladas por la gran red social de mujeres.