MATERIA INVESTIGACIÓN: MARCOS, CONCEPTOS Y HERRAMIENTAS

NATALIA PASQUALE | DG | FADU | UBA

El graffiti de la CABA en la mirada de la sociedad urbana: Expresión artística y/o vandalismo.

TEMA:

RESUMEN:

HIPÓTESIS:

Graffiti / Sociedad urbana / Crítica / Valoración / Arte / Vandalismo Brecha generacional / Clase social / Nivel educativo

PALABRASCLAVE:

El tema a investigar aborda las diferencias que pueden surgir a la hora de valorar el término “graf�ti” en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El trabajo comienza con una breve introducción en el origen etimológico de la palabra y algunas de�niciones particulares para acotar el objeto a investigar. Se re�exionará sobre la bibliografía leída y se de�nirá para evitar confusiones las terminologías utilizadas. El objeto de estudio es la valoración social del graf�ti; para ello, se hará un breve análisis social con encuestas: clasi�cando las opiniones y valoraciones a partir de un factor etario sujeto a de�niciones generacionales y en segundo plano, factores como clase social y nivel educativo. A partir de esta metodo-logía nos introduciremos en la problemática valorativa entre el graf�ti como manifestación artística y/o como un mero hecho vandálico. Mediante este plan de investigación se evaluará de que manera puede convivir el graf�ti en la sociedad contemporánea de una manera legal, abierta, libre sin perjudicar a aquellos que sostienen otros puntos de vista.

Las personas de la Generación X tienen una valoración diferente del graf�ti a aque-llos pertenecientes a los Millennials y Centennials ya que la brecha generacional es la variable principal que incide sobre la valoración, los factores de “nivel educativo” y “clase social” son consideradas variables secundarias.

OBJETIVO GENERAL:

Investigar la mirada social ante el Graf�ti y su valoración como acto vandálico y/o expresión artística.

ESTADO DE LA CUESTIÓN:

OBJETIVOS PARTICULARES:

Identi�car y clasi�car, a partir de bibliografías y encuestas los tipos de valoraciones que tiene la sociedad de la CABA ante el Graf�ti en la contemporaneidad. Relevar si hay un patrón etario para estos criterios. Si es posible que las brechas generacionales intervienen en la crítica valorativa.

Investigar si el factor “clase social” es una variable relevante en su valoración. Investigar si el nivel educativo incide en la crítica.

No existe mucha bibliografía relacionada con el graf�ti que necesitamos en nuestro objeto de estudio. Es cierto que si buscamos libros que tengan la palabra graf�ti en su título encontramos unos cuantos, pero la decepción llega pronto cuando hojeamos sus páginas y en la mayoría de los casos nos encontra-mos con que hablan de pintada política y discursos relacionados con el mundo del arte. Por lo tanto, tenemos que pensar que si encontramos textos escritos por periodistas, teóricos del graf�ti ocasionales, historiadores del arte y piezas televisivas en las que utilizan la palabra graf�ti como reclamos para hablar sobre las pintadas o cualquier otro tema que no viene al caso en nuestro tema de estudio.

¿Arte o Vandalismo? Andreas Grigo / Evan Romero-Castillo

Escribir y dibujar en los muros del espacio público son prácticas muy antiguas, pero es muy probable que los gra�tis que hoy adornan las grandes ciudades del mundo, sus trenes y sus metros, estén estética-mente emparentados con los que �orecieron en el Bronx de Nueva York en los años setenta del siglo pasado como una vertiente expresiva de la subcultura urbana del hip hop.

Como gesto de irreverencia, el acto de tomar un aerosol y cubrir paredes enteras con textos e ilustracio-nes es muy democrático; el graf�ti nunca fue una aventura exclusiva de adolescentes. Por otro lado, aunque Jean-Michel Basquiat y algunos de sus contemporáneos explotaron con éxito las posibilidades plásticas de ese medio, no todo el que pinta garabatos en la fachada de un edi�cio es un artista.En eso hacen énfasis las autoridades de algunas urbes cuando tipi�can los gra�tis como daños a la propiedad pública o privada, decretan leyes para tratar a sus autores como delincuentes y aplican medidas para evitar que la arquitectura de la ciudad se convierta en un lienzo libre de todo control.

Para muchos cultores del gra�ti, la sola idea de escribir o pintar sobre una pared con el Estado mirando sobre sus hombros y aprobando sus motivos es un contrasentido. No obstante, algunas alcaldías y municipios han recurrido a la estrategia de "encargar obras de graf�ti" para que su aproximación al problema del "graf�ti como acto vandálico" no sea meramente punitiva.

Pero los gra�tis por encargo parecen cumplir una función preventiva. El artista plástico Benjamin Sobala argumenta que una ilustración elaborada en la pared de un edi�cio inhibe a muchos "gra�teros" de rayar

Estas investigaciones y articulos seleccionados resultaron pertinentes para la investigación ya que develan las valoraciones del graf�ti y resuelven algunas formas de convivencia del mismo en una sociedad urbana.

¿Arte o Vandalismo? Andreas Grigo / Evan Romero-Castillo

Escribir y dibujar en los muros del espacio público son prácticas muy antiguas, pero es muy probable que los gra�tis que hoy adornan las grandes ciudades del mundo, sus trenes y sus metros, estén estética-mente emparentados con los que �orecieron en el Bronx de Nueva York en los años setenta del siglo pasado como una vertiente expresiva de la subcultura urbana del hip hop.

Como gesto de irreverencia, el acto de tomar un aerosol y cubrir paredes enteras con textos e ilustracio-nes es muy democrático; el graf�ti nunca fue una aventura exclusiva de adolescentes. Por otro lado, aunque Jean-Michel Basquiat y algunos de sus contemporáneos explotaron con éxito las posibilidades plásticas de ese medio, no todo el que pinta garabatos en la fachada de un edi�cio es un artista.En eso hacen énfasis las autoridades de algunas urbes cuando tipi�can los gra�tis como daños a la propiedad pública o privada, decretan leyes para tratar a sus autores como delincuentes y aplican medidas para evitar que la arquitectura de la ciudad se convierta en un lienzo libre de todo control.

Para muchos cultores del gra�ti, la sola idea de escribir o pintar sobre una pared con el Estado mirando sobre sus hombros y aprobando sus motivos es un contrasentido. No obstante, algunas alcaldías y municipios han recurrido a la estrategia de "encargar obras de graf�ti" para que su aproximación al problema del "graf�ti como acto vandálico" no sea meramente punitiva.

Pero los gra�tis por encargo parecen cumplir una función preventiva. El artista plástico Benjamin Sobala argumenta que una ilustración elaborada en la pared de un edi�cio inhibe a muchos "gra�teros" de rayar

el muro en cuestión. "Hace tres años pintamos gra�tis en los muros de una estación de buses y, hasta ahora, nadie la ha rayado", cuenta Sobala.

La ciudad le ha pedido a Sobala, un apasionado del gra�ti, que fomente la comprensión entre los "graf�-teros" y las autoridades municipales. Él ha organizado talleres para informar a los interesados sobre las posibilidades que existen de cultivar el arte del gra�ti de manera legal. Sin embargo, Sobala cree que la ciudad no hace lo su�ciente para alcanzar la meta trazada: reducir el número de pintadas ilegales nuevas. Sobala no tarda en responder: "Lo que hay que hacer cuando se descubran gra�tis no deseados es borrarlos lo antes posible. Si no se hace, los ‘graf�teros’ se sentirán dueños de la situación. A estas alturas se puede conseguir fácilmente pintura a prueba de graf�tis, susceptible de ser lavada fácilmente hasta cincuenta veces", recomienda el artista.

Pese a todas las críticas, Sobala sigue viendo una intención artística y hasta política en casi todos los graf�tis. Dignos de mención: las bananas del alemán Thomas Baumgärtel, que se pueden ver en más de cuatro mil fachadas y galerías, y la Madonna con niño de Blek le Rat en Leipzig, que ha sido restaurado y reconocido como patrimonio cultural.

También están las burkas azules de Shamisa Hassani, mediante las cuales protesta contra la represión de las mujeres en Afganistán; las pintadas con forma de buitre en Nairobi, Kenia, en las fachadas de las casas de políticos presuntamente corruptos; y, desde luego, la obra del británico Banksy, de cuya identi-dad verdadera se sabe poco. Algunos de sus trabajos han terminado cotizándose a altos precios en el mercado del arte.

En la actualidad se debate si el gra�ti es una forma artística callejera o un entorpecimiento de la estética urbana. Muchas son las ciudades que empiezan a hacer campañas 'antigra�ti'. Por ejemplo, el Ayunta-miento de Cartagena (Murcia, España) ha iniciado una campaña contra los que hacen dibujos en edi�cios públicos, privados o en lugares emblemáticos de la ciudad.

Los ciudadanos se preocupan principalmente por encontrar pintadas en museos y zonas arqueológicas donde evidentemente afean los lugares más representativos de la ciudad, que por ende son muy transita-dos por los turistas.

El objetivo es mejorar la imagen de la ciudad para los turistas. Existen dos tipos: los que han sido reali-zados con permiso de la Administración local (que están hechos con gracia) y los de mal gusto que 'deshonran' a los gra�teros profesionales.

"El Ayuntamiento (de Cartagena) ya ha advertido a los gra�teros y los perseguirá, aunque sea difícil pillarlos", con�esa el concejal de Vía Pública, Francisco Espejo. Según la ordenanza municipal, a quien sea sorprendido en uno de estos actos vandálicos se le sancionará con el coste que suponga limpiar lo que haya ensuciado.

Los habitantes de Zaragoza también alzaron la voz para que se tomen medidas ante estos dibujos que "dan mala imagen de la ciudad".

Solo en 2008, el Ayuntamiento de Zaragoza gastó alrededor de 1,2 millones de euros en limpiar cerca de 75.000 gra�tis. Por este motivo, según la Ordenanza sobre Protección del Espacio Urbano, la multa para

Diario “Actualidad” / España

quienes pinten gra�tis en zonas urbanas es de 1.500 euros.

El municipio ibérico de León cuenta con un programa antigra�ti establecido desde hace dos años y medio. En todo este tiempo se han limpiado cerca de 47.773 metros cuadrados de espacios públicos, lo que equivale a cinco canchas de fútbol.

Aunque las autoridades a�rman que sería imposible limpiar toda la imagen urbana, han trabajado muy duro para mejorarla. Para erradicar este 'arte vandálico' se implementaron dos estrategias: una de ellas está dedicada a guiar a los jóvenes orientándolos a pintar murales con ciertos toques artísticos, y la otra está dedicada a limpiar las áreas que fueron atacadas con gra�tis.

A principios de este mes el alcalde de Toronto, Rob Ford, lanzó una campaña de limpieza de la ciudad para dejarla "tan limpia como un billete de cinco dólares", poniendo un especial énfasis en la tarea de acabar con los gra�tis, declarándose él mismo como una persona que odia este medio de expresión callejera.

En Moscú, el llamado 'gra�ti legal' es organizado por los servicios de vivienda de los diferentes barrios de la capital. Estos dibujos son encargados a gra�teros profesionales a los que se les da un tema especí�-co, luego ellos los pintan en garitas o cabinas. Además se realizan concursos y festivales en lugares especiales.

El Graf�ti tiene dos caras, por un lado es creación. Por otro, vandalismo. No se entendería lo uno sin lo otro. Una “ moda que dura ya varias décadas necesariamente conlleva un componente cultural. Ahora bien, ¿Dónde establecemos un límite a esas creaciones? Desde mi propia perspectiva hay mucha diferencia entre quién pinta graf�ti, ya sea legal o ilegal, y lo hace con conciencia de su valor artístico, y quien trata únicamente de alcanzar una fama efímera a través de pintadas de dudoso gusto. El graf�ti siempre va acompañado de su condición transgresora, extralimitada, destructiva, combativa... en realidad es éste el carácter que constituye su esencia: La ilegalidad. Bien podemos llamarlo vandalismo, pero tampoco hay que ver más allá de donde es. No es un problema tan grande y no es excusa para las cantidades tan gran-des de dinero que se emplean, a veces, para su erradicación. (El graf�ti es el grado cero en violencia, el más pequeño vandalismo posible). Nos encontramos pues ante un fenómeno simultáneo de creación y destruc-ción. Por otro lado nos encontramos con el inevitable carácter artístico de este fenómeno plásticamente hablando, el hecho de la destreza, la técnica o el estilo de un gra�tero es algo que puede tratarse desde un punto de vista meramente pictórico, al margen de ideologías o del lugar simbólico donde esté realizado.Visualizándolo en un enfoque cualitativo, el graf�ti es mas que unas letras o dibujos en una super�cie de algún escritor . . . es mas que eso . . . el graf�ti legal es el arte en su expresión . . . pero el graf�ti ilegal es el alma de esa expresión es la ciencia . . .

Graffiti “Arte moderno” - Teresa Pitarch

El graf�ti puede ser legal o ilegal. A veces se considera el graf�ti como grandes obras de arte y otras veces es considerado vandalismo. Las pintadas ilegales abarcan todas las imágenes o las frases realiza-das sin el permiso correspondiente y la mayoría del graf�ti popular y del graf�ti basado en la comuni-dad es ilegal. El graf�ti legal es cuando, por ejemplo, las empresas gubernamentales o privadas pagan a los graf�teros para hacer un trabajo. En general se trata de obras de murales grandes y el propósito es más a menudo hacer publicidad o un intento de deshacerse de las pintadas populares o los de laspandillas, que no son considerados tan hermosos como los murales y son asociados con

MARCO TEÓRICO:

En esta sección pondré de mani�esto los fundamentos de los aspectos (gra�tti, arte, vandalismo, brecha generacional, clase social y nivel educativo) sobre los cuales estan basadas las encuestas y la investiga-ción en general.

Graffiti:

A través del análisis pude llegar a de�nir dos valoraciones sociales de gra�tis

El graf�ti como expresión en sí: es la clásica «pintada» que expresa algún sentimiento sea político o pasional. Se encuentra normalmente en paredes, en los baños públicos etc. Tiene un aspecto infantil, escrito a mano, sin mucha estética y a veces de poca legibilidad.

El graf�ti como expresión artística: estos son expresiones con algún sentido artístico, presentan un estilo y no hacen referencia a ningún mensaje. Algunas veces inclusive hacen intervención y uso del espacio público como parte de este. Lo único que comparten con el primero es, en ocasiones, el soporte y las herramientas. Éste será el objeto de valoración social en esta investigación.

Arte:Actividad en la que el hombre recrea, con una �nalidad estética, un aspecto de la realidad o un sentimiento en formas bellas valiéndose de la materia, la imagen o el sonido.El proceso de valoración de una obra de arte, involucra el poder de consagración de los críticos mediante la atribución de valores artísticos y la institución de la creencia cultural en los mismos. Mediante su arbitraje, participación en certámenes artísticos, publicaciones, reseñas, opiniones, el poder de consagración de los críticos se moviliza a favor de los intereses del mercado del arte.

Vandalismo:

Actitud o inclinación a cometer acciones destructi-vas contra la propiedad pública sin consideración alguna hacia los demás.

Brecha generacional:El concepto se utiliza para nombrar al conjunto de los seres vivientes coetáneos (que tienen la misma edad). Atendiendo este último signi�cado, la brecha generacional se identi�ca como la distancia que separa las diferentes generaciones, unas de otras.

la violencia y la delincuencia. Cabe preguntarse por qué el graf�ti tiene tan mala reputación. ¿Por qué un edi�cio o área lleno de pintadas evoca en los ciudadanos la decadencia y la violencia en lugar de la vida y la protesta activa? La gente a menudo conecta la pintada con la violencia porque las pandillas usan la pintada para expresarse y para marcar su territorio.Por lo tanto, se conecta el graf�ti al empeora-miento social de la ciudad en la que viven.Los ciudadanos lo ven no como una declaración contra el gobierno o la sociedad, sino como una manifestación de una mala estructura social que se traduce en pandillas y violencia. No quieren aceptar la violencia de pandillas como parte de su realidad yrechazan la delincuencia junto con la pintada

Generación Y o Millenials:(Nacidos entre 1982 y 1994)- Muy adaptados a la tecnología. La vida virtual es una extensión de la vida real. Aunque conservan algunos códigos de privacidad en relación a lo que exponen o no en Internet (a diferencia de los Centennials, que comparten todo).-Son multitasking.- No dejan la vida en el trabajo, no son "workaho-lic" (quizá observaron que sus padres sí lo fueron, y lo hacen distinto).-Son emprendedores y creativos, intentan vivir de lo que aman hacer. Son idealistas.-A�cionados a la tecnología del entretenimiento: usuarios de las salas de chat en los ’90 y ahora de redes de citas. Pasaron por todo: SMS, Reproduc-tor de CD, MP3, MP4, DVD.- Aman viajar, conocer el mundo.- Según estudios, duran en sus trabajos un prome-dio de dos años, a diferencia de la generación X. Es por eso que las empresas enloquecen armando políticas de "�delización".

Generación Z o Centennials:(Nacidos a partir de 1995 y hasta el presente)- Son verdaderamente “nativos digitales” (desde su niñez usan Internet).- Autodidactas (aprenden por tutoriales), creativos (incorporan rápido nuevos conocimientos y relacionan bien) y sobreinformados (alta propen-sión al consumo de información y entretenimien-to).- Visitan redes que sus padres no: un ejemplo es Snapchat. Comparten contenido de su vida privada, aspiran a ser YouTubers. Su vida social pasa en un alto porcentaje por las redes. - Nada de la tecnología les es ajeno.- Pasan mucho de su tiempo “frente a pantallas”. Estudios recientes aseguran que están expuestos un promedio de cuatro veces más tiempo del recomendado a dispositivos.- Su éxito se mide en “compartidos” y “likes”.- Según un estudio realizado por The Futures Company, son más pragmáticos que los Millen-nials, buscan innovar con “lo que hay”.

Clase social:En las clases sociales, las personas se vinculan dependiendo de su función productiva o su poder adquisitivo o económico. Esta denominación es típica de países modernos que aparecieron luego de la revolución industrial.

Nivel educativo:La licenciatura, la especialidad, la maestría, el doctorado, las opciones terminales previas a la conclusión de la licenciatura y la normal en todos sus niveles y especialidades(tipo superior).

Generación X

(Nacidos entre 1965 y 1981)Según un estudio de la Universidad de Michigan, los hombres y mujeres X trabajan mucho pero logran un equilibrio, son felices con sus propias vidas.-Son los que vieron el nacimiento de Internet y los avances tecnológicos. Están marcados por grandes cambios sociales.-Como son una generación en transición - se les llamó Generación Perdida e incluso Generación Peter Pan- pueden hacer convivir equilibradamente la relación entre tecnología y vida social activa “presen-cial”: tienen participación dentro de los eventos de su comunidad.-Son más propensos a estar empleados (aceptan los órdenes de jerarquía institucional) y equilibran la energía entre el trabajo, los hijos y el tiempo de ocio.-Son los padres de los Millennials, hacen esfuerzos adaptativos a la vertiginosidad de la generación que le sigue.

METODOLOGÍA:

La metodología de esta investigación procederá por la presentación de piezas de Graf�ti como expresión artística (explicado previamente en el marco teórico) a grupos de personas con diferentes identidades, clases sociales, edades y niveles educativos, para introducir luego una encuesta.

VARIABLE 2 Clasi�caremos en tres niveles educativos siendo este el máximo alcanzado:Primario - Secundario - Universitario

VARIABLE 1 En esta investigación buscaremos individuos que pertenezcan a las siguientes edades:- Generación X (nacidos entre 1965 y 1981) Entre 53 y 37 años. - Generación Y o Millenials (nacidos entre 1982 y 1994) Entre 36 y 24 años.- Generación Z o Boomlets (nacidos desde 1995) 23 años o menos.

VARIABLE 3 Clasi�caremos por nivel adquisitivo tres clases sociales:Baja / Media / Alta

En base a los resultados obtenidos a la variable 1 antes detallada, sumaremos las variables 2 (nivel educativo) y 3 (clase social) para observar si se generan tendencias a partir de la inclusión de éstas.

����� ������������

������������

���������������

� ���������

�� ��� �

������ �

�� ���� ��� �

� ������ ��

�����������

�������������������� 

�������­���������­������������­������������������������������������������ ������������������ ������­������

������������� ���������������������������������������� ������������� ��������������������������������������

������������������������������

�� �� � ��������������������

������������������������������������

��������������������������������������������������

Teniendo en cuenta esto el individuo responderá una serie de preguntasen modo de encuesta interpretándose su respuesta con un valor positivo o negativoque luego determinará la valoración final:

����� ������������

������������

���������������

� ���������

�� ��� �

������ �

�� ���� ��� �

� ������ ��

�����������

�������������������� 

�������­���������­������������­������������������������������������������ ������������������ ������­������

������������� ���������������������������������������� ������������� ��������������������������������������

������������������������������

�� �� � ��������������������

������������������������������������

��������������������������������������������������

Ejemplo de analisis de encuesta:

Juan

Juan de 31 años perteneciente a la clase baja, considera al graf�ti una expresión social artística, y ve positivo el vandalismo del mismo por ideologías arraigadas a la oposición al estado.

Éste sería un claro ejemplo de un graf�ti visto como arte y vandalismo.

expresión social, está bien

de hecho si, pero estoy a favordel vandalismo, en contradel estado

si, tranquilamente

TAREAS Y CRONOGRAMA:1) Selección de ámbitos adecuandos para el encuentro de individuos pertinentes para las encuestas.

2) Realización de encuestas en diferentes zonas para lograr la variable de nivel educativo - clase social.

3) Interpretación de encuestas.

4) Comparación de encuestas por clase social.

5) Comparación de encuestas por nivel educativo.

6) Investigación de factor común en valoraciones del graf�ti en cuanto edad y clase social.

7) Investigación de factor común en valoraciones del graf�ti en cuanto edad y nivel educativo.

tenidas en cuenta por los docentes de las escuelas seleccionadas.

8) Interpretación de primer encuesta a sociologos. Analisis de los resultados y reforma de la encuesta.

9) Reforma de la encuesta original incluyendo los factores analizados.

10) Encuestas y entrevistas a nuevos individuos.

11) Desgloce de los resultados emitidos por las encuestas anteriores. Clasi�cación por individuo.

12) Analisis profundo e investigación del factor común en las valoraciones.

13) Conclusiones. Descripción de los datos arrojados en la

investigación, y resolución de la misma.

�����������

���� ��� ���� � � ���� ���� ���� ���� ���� ��� ��� ����

12345678910

�����������

���� ��� ���� � � ���� ���� ���� ���� ���� ��� ��� ����

111213

AÑO 1

AÑO 2

BIBLIOGRAFÍA:

GARÍ JUAN (1995). La conversación mural. Ensayo para una lectura del graffiti. Fundesco. Madrid.CAMILA PERALTA RAMOS Graffiti, arte callejero.TERESA PITARCH: Graffiti “arte moderno”REYES, F. (2006): Graffiti, breakdance y rap. El hip hop en España, capítulo del libro 25 Grenz Gange, pp. 67-84, Frankfurt, Leipziger Universitätsverlag.CASTLEMAN, C. (1987): Los graffiti, Madrid, Herman Blume (Orig. 1982).BELVER, M. (2002): El escriba sentado del retrete, Campus, El Mundo, 18 febrero, p. 6. REYES, F. Y VIGARA, A. (2002): «Graffiti, pintadas y Hip Hop en España», capítulo del libro Comunicación y culturaJuvenil, pp. 169-226, Alicante, Ariel. PEREDO POZO, J. (1 DE ABRIL DE 2009). “El graffiti: su evolución y percepción social a favor o detrimento de unaciudad”. En Topofilia. Revista de Arquitectura, Urbanismo y Ciencias Sociales, vol.I, núm.3.

ANDREAS GRIGO / EVAN ROMERO-CASTILLO “Arte o Vandalismo”https://www.dw.com/es/grafitis-arte-o-vandalismo/a-16950413 - [2018, 21 junio]DIARIO “ACTUALIDAD” https://actualidad.rt.com/cultura/view/42107-Grafiti%2C-arte-o-vandalismo [2018, 27 junio]

S.A. REYES, F. (2003): Una actividad juvenil: graffitis y pintadas, capítulo del libro Públicos.