Normatividad y Ruido en Telecomunicaciones
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RUIDO En comunicación, se denomina ruido a toda señal no deseada que se mezcla con la señal útil que
se quiere transmitir. Es el resultado de diversos tipos de perturbaciones que tiende a enmascarar
la información cuando se presenta en la banda de frecuencias del espectro de la señal, es decir,
dentro de su ancho de banda.
Causas
El ruido se debe a múltiples causas: a los componentes electrónicos (amplificadores), al ruido
térmico de los resistores, a las interferencias de señales externas, etc. Es imposible eliminar
totalmente el ruido, ya que los componentes electrónicos no son perfectos. Sin embargo, es
posible limitar su valor de manera que la calidad de la comunicación resulte aceptable.
Sobre el ruido
Para medir la influencia del ruido sobre la señal se utiliza la relación señal/ruido, que generalmente
se maneja en decibelios (dB). Como potencia de la señal se adopta generalmente la potencia de un
tono de pruebas que se inyecta en el canal. La potencia del ruido suele medirse a la entrada
del receptor, cuando por él no se emite dicho tono. Cuando se transmiten señales digitales por un
canal, el efecto del ruido se pone de manifiesto en el número de errores que comete el receptor. Se
deduce inmediatamente que dicho número es tanto mayor cuanto más grande sea la probabilidad
de error.
La probabilidad de error depende del valor de la relación señal/ruido. Cuanto mayor sea esta
relación, más destaca la señal sobre el ruido y, por tanto, menor es la probabilidad de error.
Cuando el ruido se añade a una señal con distorsión, la probabilidad de error crece rápidamente.
La distorsión que produce el ruido en una determinada comunicación depende de su potencia, de
su distribución espectral respecto al ancho de banda de la señal, y de la propia naturaleza de la
señal y de la información que transporta. El ruido afecta de diferente manera a la información que
transportan las señales analógicas que a la codificada mediante señales digitales. Esta es la causa
por la que se ha establecido una tipificación básica de los canales: los canales analógicos no es
buena(con amplificación) y los canales digitales (con regeneración).
Ruido en los canales telefónicos
Diafonía o cruce aparente: es ocasionada por las interferencias que producen otros pares de hilos
telefónicos próximos (conocida como cruce de líneas o crosstalk). Es un fenómeno mediante el
cual una señal que transita por un circuito se induce en otro que discurre paralelo, perturbándolo.
Si las señales inducidas se pueden entender, se denomina «diafonía inteligible». Este es un
fenómeno muy perjudicial ya que afecta al secreto de las telecomunicaciones. La diafonía próxima
se denomina paradifonía y la que se observa en el extremo remoto «telediafonía».
Eco: es una señal de las mismas características que la original, pero atenuada y retardada
respecto a ella. El efecto nocivo del eco afecta tanto a las conversaciones telefónicas como a las
transmisión de datos y es mayor cuanto menos "atenuada" y más "retardada" llega la señal del
eco. El eco puede ser del que habla y del que escucha, según el modo de afectar a los
interlocutores. El eco del que escucha es el que más perjudica a las comunicaciones de datos.
Para que las señales del eco reflejadas se reciban con un retardo "apreciable" han de recorrer
grandes distancias, por ejemplo, en las comunicaciones intercontinentales o vía satélite. Una
solución que se implantó en los circuitos telefónicos para evitar el eco en estos casos consistió en
instalar un elemento denominado "supresor de eco", que era un dispositivo que impedía la
transmisión simultánea en ambos sentidos. Evidentemente, era necesario inhibir estos
dispositivos cuando se establecían por canales telefónicos circuitos de datos en modo dúplex
mediante módem. Los propios módem inhibían a los supresores de eco emitiendo un tono
especial.
Tipos de ruido
Ruido de disparo
El ruido de disparo es un ruido electromagnético no correlacionado, también llamado ruido de
transistor, producido por la llegada aleatoria de componentes portadores (electrones y huecos) en
el elemento de salida de un dispositivo, como ser un diodo, un transistor (de efecto de campo o
bipolar) o un tubo de vacío. El ruido de disparo está yuxtapuesto a cualquier ruido presente, y se
puede demostrar que es aditivo respecto al ruido térmico y a él mismo.
Ruido de Johnson-Nyquist
También conocido como ruido termal es el ruido generado por el equilibrio de las fluctuaciones de
la corriente eléctrica dentro de un conductor eléctrico, el cual tiene lugar bajo cualquier voltaje,
debido al movimiento térmico aleatorio de los electrones.
Ruido de parpadeo
Es una señal o proceso con una frecuencia de espectro que cae constantemente a
altas frecuencias con un espectro rosa.
Ruido a ráfagas
Este ruido consiste en una sucesiones de escalones en transiciones entre dos o más niveles (no
gaussianos), tan altos como varios cientos de milivoltios, en tiempos aleatorios e impredecibles.
Ruido de tránsito
Está producido por la agitación a la que se encuentra sometida la corriente de electrones desde
que entra hasta que sale del dispositivo, lo que produce una variación aleatoria irregular de la
energía con respuesta plana.
Ruido de intermodulación
Es la energía generada por las sumas y las diferencias creadas por la amplificación de dos o más
frecuencias en un amplificador no lineal.
Medida
Es medido en vatios de potencia. Como el ruido es un proceso aleatorio, puede ser caracterizado
por variables como varianza, distribución y destino espectral.
La distribución espectral del ruido puede variar por la frecuencia, y su densidad de potencial es
medida en vatios por herzio . Como la potencia de un elemento resistivo es proporcional a la
raíz cuadrada del voltaje alrededor del elemento, la densidad de voltaje del ruido podría escribirse
como .
Factor del ruido
La magnitud del ruido generado por un dispositivo electrónico, por ejemplo un amplificador, se
puede expresar mediante el denominado factor del ruido (F), que es el resultado de dividir la
relación señal/ruido en la entrada (S/R)ent por la relación señal/ruido en la salida (S/R)sal, cuando
los valores del señal y el ruido se expresan en número simples:
Por otro lado, con los valores de relación señal/ruido suelen expresarse en forma logarítmica,
normalmente en decibelios, el factor del ruido en decibelios será, por lo tanto, la diferencia entre
las relaciones S/R en la entrada i en la salida del elemento bajo esta prueba:
El factor del ruido se expresa en decibelios i se llama figura del ruido.
El factor del ruido es un parámetro importante en los sistemas de transmisión, ya que mientras el
ruido externo nunca se podrá eliminar totalmente, la reducción del ruido generado por los equipos
dependen de su diseño.
La relación entre la señal y el ruido
Una de las formas más usuales de medir los niveles de ruido, es comparándolos con los niveles de
la señal. De este modo, nos independizamos de sus valores absolutos para ponerlo en
comparación con la señal.
NORMATIVIDAD
En forma amplia, la normalización tiene un papel primordial en los diferentes aspectos del desarrollo
económico, social y cultural de toda población usuaria de productos y servicios que resultan de la
aplicación de las tecnologías.
En un mundo global como el que actualmente nos rige, la normalización es también un importante factor
de orden, concierto y equidad entre las naciones productoras y las usuarias de diversos productos y
servicios.
Podemos afirmar que, publicar e implantar una norma, equivale a establecer y operar un pacto plasmado
en un documento técnico, mediante el cual los fabricantes, los distribuidores, los usuarios o consumidores
y la Administración Pública, acuerdan las características que deberán reunir los productos o servicios
involucrados. Luego entonces, el grado de facilidad para lograr dicho pacto, esto es, para normalizar,
dependerá de qué tan rápido se puedan armonizar los intereses de los que producen con los de los que
consumen y, a final de cuentas, con los intereses de la sociedad en la que están inmersos.
En el sector de las telecomunicaciones de nuestro país fue relativamente sencillo lograr ese pacto durante
mucho tiempo, toda vez que, en el marco de una política comercial de "fronteras cerradas", las
negociaciones correspondientes se realizaban entre unos cuantos productores de bienes y servicios, los
consumidores y la autoridad; no obstante, en los años recientes - y particularmente en la última década,
en la que nuestro país ha realizado una total renovación en sus políticas comerciales internas y externas
para adaptarse a un mundo que cambia vertiginosamente y mantener, con ello, una perspectiva de
mercado global - el pacto que conlleva la normalización se ha ido complicando.
En el contexto de la relación internacional cotidiana en la que estamos evolucionando, armonizar los
intereses de fabricantes de muy diversas latitudes, que poseen tecnologías variadas y muchas veces
diferentes, con los intereses de los productores, distribuidores y consumidores nacionales, no ha resultado
una tarea sencilla. Pese a ello, México ha venido desarrollando acciones firmes para sentar las bases de
una cultura propia y un proceso de normalización continuo, con el necesario orden y oportunidad que
estos asuntos demandan.
Así, entre las acciones más relevantes en este sentido, podemos destacar:
• La promulgación y actualización de la Ley Federal sobre Metrología y Normalización (LFMN);
• La integración y el funcionamiento de la Comisión Nacional de Normalización (CNN) y de los Comités
Consultivos Nacionales de Normalización (CCNN), los cuales cuentan con la participación entusiasta y la
representación de todos los sectores de interés, tanto públicos como privados.
En el sector de las telecomunicaciones, se creó el Comité Consultivo Nacional de Normalización de
Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CCNN-CTI), el cual dejó de funcionar a partir del 5
de marzo de 1998, para dar paso a la creación de dos nuevos comités: el Comité
Consultivo Nacional de Normalización de Telecomunicaciones (CCNN-T), presidido por la Comisión
Federal de Telecomunicaciones (COFETEL) y el Comité Consultivo Nacional de Normalización de
Radiodifusión, Telegrafía y Servicio Postal (CCNN-RTSP), presidido por la Subsecretaría de
Comunicaciones de la SCT.
• El fomento de la participación de las diversas instancias del Sector Privado en las tareas de
normalización y evaluación de la conformidad. Como ejemplo de esto podemos mencionar en lugar
relevante al organismo denominado "Normalización y Certificación Electrónica, A.C." (NYCE).
• La negociación y puesta en marcha de convenios y tratados bilaterales y multilaterales para
desarrollar el libre comercio internacional con México, así como la participación de nuestro país en
organizaciones internacionales (TLCAN, OMC, OCDE, APEC).
• El impulso a la participación, tanto del Sector Privado como del Gobierno Mexicano, en los foros
internacionales para el desarrollo y la cooperación en materia de telecomunicaciones (UIT, CITEL, ISO,
IEC), y
• Los trabajos relativos a los programas nacionales de Normalización 1998 y 1999 en materia de
telecomunicaciones, en el marco del CCNN-T.
• Los trabajos conjuntos entre la autoridad federal de las telecomunicaciones y la industria, en torno a la
elaboración de un nuevo Procedimiento de Homologación de Equipo de Telecomunicaciones, el cual se
encuentra en proceso.
• La continuación de las negociaciones para instrumentar y poner en operación en sus debidos plazos,
diversos acuerdos de reconocimiento mutuo de resultados de la evaluación de la conformidad (MRA) con
nuestros
socios comerciales internacionales.
• El estudio permanente de las recomendaciones internacionales para obtener referencias válidas para
retroalimentar el esfuerzo nacional de normalización.
En el esquema de elaboración de normas oficiales mexicanas de telecomunicaciones que se muestra en
este artículo, se indican los pasos del procedimiento correspondiente y los roles que juegan los actores
involucrados en el proceso. También se enmarcan los tiempos legales previstos para cada una de las
acciones.
El Comité Consultivo Nacional de Normalización de Telecomunicaciones (CCNN-T)
Con fecha 9 de julio de 1998, la Comisión Federal de Telecomunicaciones a través de su Presidente,
Javier Lozano Alarcón, convocó a entidades y organizaciones relacionadas con las telecomunicaciones
para que designaran a personal técnico que las represente en los trabajos del CCNN-T, solicitando
asimismo la presencia de las personas designadas para constituir e integrar formalmente dicho Comité el
día 22 de julio de 1998.
Dicho Comité quedó integrado de la siguiente manera:
Presidente: El Comisionado de Ingeniería y Tecnología de la COFETEL;
Coordinador: El Director General de Estudios Técnicos, Investigación y Desarrollo de la COFETEL;
Coordinador Adjunto: El Presidente de la Sección 3 de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de
Telecomunicaciones e Informática.
Secretario Técnico: El Director de Normas y Regulaciones Técnicas de la COFETEL;
Vocales: Representantes de dependencias y organismos de la Administración Pública Federal, de
cámaras industriales y asociaciones de operadores o prestadores de servicios de telecomunicaciones, de
institutos
de investigación y de educación superior así como de colegios de ingenieros, asociaciones de
profesionistas y otras asociaciones gremiales, todos ellos en la materia de telecomunicaciones y
tecnologías de la información.
El CCNN-T determinó la formación de tres sub comités: el de Redes de Telecomunicaciones, el de
Radiocomunicaciones y Servicios Satelitales y el de Tecnologías de la Información, los cuales, una vez
instalados, se dieron a la tarea de ejecutar el Programa Nacional de Normalización 1998 (PNN-98) en los
temas correspondientes. Para ello se formaron 15 Grupos de Trabajo, mismos que se abocaron a
elaborar cada uno los anteproyectos de la misma cantidad de Normas Oficiales Mexicanas (NOM).
Actualmente, cuatro de esos anteproyectos se han concluido, están aprobados por el CCNN-T como
proyectos de NOM y han sido publicados en el Diario Oficial de la Federación para el conocimiento y
opinión de todos los interesados.
Los demás temas que formarán parte del PNN-99 para que sean concluidos y publicados durante el
presente año, siguen desarrollándose hasta la fecha, presentando diferentes grados de avance.
El Proceso de Homologación de Productos De Telecomunicaciones.
Tomando en cuenta que el fomento al comercio de aparatos y demás productos utilizados en el sector de
las telecomunicaciones es una de las aplicaciones más importantes de la normalización, a fin de que
quienes fabriquen, importen, comercialicen y utilicen estos productos cumplan con ciertas características y
especificaciones establecidas en las normas técnicas, es preciso asegurar su cumplimiento mediante los
procedimientos de autorización de equipo, que
en México reciben el nombre de homologación. La Homologación es, de acuerdo con el Artículo 7 fracción
V de la Ley Federal de Telecomunicaciones, el acto por el cual la Secretaría de Comunicaciones y
Transportes reconoce oficialmente que las especificaciones de un producto destinado a
telecomunicaciones satisfacen las normas y requisitos establecidos, por lo que puede ser conectado a
una red pública de telecomunicaciones o hacer uso del espectro radioeléctrico. De acuerdo con el Decreto
de creación de la COFETEL (DOF: agosto 9 de 1996), con su Reglamento Interno (DOF: diciembre 9 de
1996) y con el Reglamento Interior de la SCT (DOF: octubre 29 de 1996), corresponde a la COFETEL
establecer los procedimientos para la adecuada homologación de equipos.
Actualmente la COFETEL está llevando a cabo la reformulación de los procedimientos de homologación a
fin de incorporar los elementos pertinentes de las reformas a la Ley Federal sobre Metrología y
Normalización, del Reglamento de dicha Ley y de los acuerdos y tratados que el país ha estado
celebrando en diferentes instancias de relaciones internacionales.
En el desarrollo de estos trabajos de revisión y replanteamiento de los procedimientos de homologación,
la autoridad ha trabajado de manera conjunta con la industria de las telecomunicaciones, agrupada en la
Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones e Informática (CANIETI), en la
Cámara Nacional de la Industria de Televisión por Cable y en las asociaciones industriales
especializadas, tomando en cuenta la opinión, análisis y discusión de otros sectores de interés de las
telecomunicaciones del país.
México requiere
actualmente de un intenso trabajo en todos los sectores para desarrollar la normalización, tanto obligatoria
como voluntaria, que le permita tener una adecuada participación en la Economía Global. Pese a que en
los últimos tiempos se ha logrado crear una infraestructura básica de normas, el número de normas
oficiales mexicanas es todavía reducido para hacer frente a los requerimientos nacionales y a los
compromisos internacionales. En materia de telecomunicaciones, la Secretaría de Comunicaciones y
Transportes, y en particular la COFETEL, están impulsando junto con la industria y las diferentes
instancias académicas, profesionales y gremiales, la generación de una normalización acorde con las
condiciones nacionales e internacionales en esta importante rama de la economía.
La modernización del país, que en buena medida pasa por la evolución de su infraestructura de
telecomunicaciones, requiere de la existencia de normas nacionales tanto para la selección de las
mejores opciones tecnológicas como para realizar las adquisiciones correspondientes en las mejores
condiciones. Es por eso que el Área General de Ingeniería y Tecnología de la COFETEL ha dispuesto en
su estructura funcional una Dirección de Normas y Regulaciones Técnicas, adscrita a la Dirección General
de Estudios Técnicos, Investigación y Desarrollo (DGETID), para que de manera regular y programática
realicen actividades de fomento y regulación de las normalización de las telecomunicaciones en nuestro
país, incluyendo sus necesarios procedimientos de evaluación de la conformidad y los correspondientes a
la homologación o autorización de productos empleados en el sector.