Nuestra reputación

Nuestra reputaciónRev. David Gifford

Igl. Jesús el Salvador 24 de noviembre de 2013

¿Es importante qué piensan los demás acerca de nosotros?

La opinión popular

¿Qué dicen en el Internet?

“Sé la persona que quieres hacer, y no te afanes por lo que otros pensarán de ti.”

“No puedes avanzar en el camino de la vida si a cada rato te das la vuelta para ver lo que otros piensan de tí.”

“No dejes que nadie te impida. Haz lo que quieres, y sigue tus propios sueños.”

“No seas esclavo de las opiniones de los demás.”

¿Estas opiniones son correctas o incorrectas?

Parece que estos dichos tienen algo de verdad, pero también tienen algo de malo.

Vamos a considerar cuatro posturas acerca de nuestra reputación con los demás.

Primera postura:

“Sí me importa lo que otros piensan de mí. Quiero que todos me quieran.”

¿Cómo se expresa esta postura?

El conformismo,

seguir a los

malos ejemplosEvitar conflictos

Buscar la admiración de los demásMentir para

esconder

nuestras fallas

Sacrificarse por otros para que nos quieran

Los problemas prácticos cuando tratamos de agradar a todos

Se aprovechan de nosotros

Por cobardía

no somos libres de

expresar nuestras

opiniones

Por cobardía no enfrentamos cuando debemos

Es imposible satisfacer a todos

El problema bíblico cuando tratamos de agradar a todos

Juan 12.43

Porque amaban más la gloria de los hombres que la gloria de Dios.

Gálatas 1.10

Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.

Mateo 6.1-2

Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos. Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.

Segunda postura:

“No me importa lo que otros piensan de mí. Quiero pecar con gusto, y no me importa que otros me juzguen.”

¿Cómo se expresa?

Orgullo del pecadoFalta de vergüenza

“No me juzgues, debes ser más tolerante”“Es mi derecho, si

no te gusta, lárgate”

…teniendo cauterizada la conciencia… (1 Timoteo 4.2)

Tercera postura:

“No me importa lo que otros piensan de mí. Quiero obedecer a Dios y no me importa si el mundo me critica.”

1 Pedro 4.3-5

Baste ya el tiempo pasado para haber hecho lo que agrada a los gentiles, andando en lascivias, concupiscencias, embriagueces, orgías, disipación y abominables idolatrías. A éstos les parece cosa extraña que vosotros no corráis con ellos en el mismo desenfreno de disolución, y os ultrajan; pero ellos darán cuenta al que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos.

1 Corintios 4.3-5

Yo en muy poco tengo el ser juzgado por vosotros, o por tribunal humano; y ni aun yo me juzgo a mí mismo. Porque aunque de nada tengo mala conciencia, no por eso soy justificado; pero el que me juzga es el Señor. Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.

Mateo 5.16

Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.

Aplicaciones

No avergonzarnos

del evangelio

Ser una influencia

para bien en lugar

de ser influenciado

por el mal

Aceptar la persecución con gracia

Vivir de manera distinta y santa

Cuarta postura:

“Sí me importa lo que otros piensan de mí. Quiero ser sensible a las necesidades de los demás.”

1 Corintios 8.9-13

Pero mirad que esta libertad vuestra no venga a ser tropezadero para los débiles. Porque si alguno te ve a ti, que tienes conocimiento, sentado a la mesa en un lugar de ídolos, la conciencia de aquel que es débil, ¿no será estimulada a comer de lo sacrificado a los ídolos?

Y por el conocimiento tuyo, se perderá el hermano débil por quien Cristo murió. De esta manera, pues, pecando contra los hermanos e hiriendo su débil conciencia, contra Cristo pecáis. Por lo cual, si la comida le es a mi hermano ocasión de caer, no comeré carne jamás, para no poner tropiezo a mi hermano.

Aplicaciones

No caer en el individualismoDar buen ejemplo a otros

No dar tropiezo a los demásPoner los intereses

del pueblo de Dios

antes de los intereses

de uno

No caer en el individualismo

Tener sensibilidad y

comprensión de

otros con sus

diferencias

No dar tropiezo a los demásPoner los intereses

del pueblo de Dios

antes de los intereses

de uno

Resumen

No es lo que la gente piensa de nosotros, sino lo que Dios piensa de nosotros. Sin embargo, Dios quiere que seamos sensibles y que no pongamos tropiezo para otros.

Nuestra reputación

Spiritual

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