Obligaciones II
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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN
FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y JURÍDICAS
ESCUELA DE DERECHO
CATEDRA: OBLIGACIONES II
SECCIÓN: D521
EXTINCIÓN DE LAS OBLIGACIONES
PRESENTADO POR:
CHIRINOS, JESUS C.I 24.606.018
FARÍAS, SEBASTIAN C.I
OLARTE, VALERIA C.I 24.265.019
ASESORADO POR:
DRA. GLADYS PERÉZ
MARACAIBO, ABRIL DE 2013
ESQUEMA
INTRODUCCION
UNIDAD III. EXTINCIÓN DE LAS OBLIGACIONES.
TEMA 1. EL PAGO Y SUS DIVERSAS MODALIDADES
1. EL PAGO
1.1. ELEMENTOS DEL PAGO
1.2. SUJETOS DEL PAGO
1.3. OBJETO DEL PAGO
1.4. PRINCIPIOS QUE RIGEN EL PAGO
1.5. PAGO DE LAS OBLIGACIONES DE DAR
1.6. PAGO DE LAS OBLIGACIONES DE HACER Y NO HACER
1.7. ELEMENTOS ACCIDENTALES DEL PAGO
1.8. EFECTOS DEL PAGO
2. IMPUTACION DEL PAGO
2.1. CLASES DE IMPUTACION
2.2. EFECTOS
3. PAGO CON SUBROGACION
3.1. CARACTERES
3.2. CLASES
3.3. CASOS DE SUBROGACION
3.4. EFECTOS
4. OFERTA REAL DE PAGO Y DEPOSITO
4.1. SUPUESTOS DE PROCEDENCIA
4.2. PROCEDIMIENTO JUDICIAL
TEMA 2. OTROS MEDIOS DE EXTINCION DE LAS OBLIGACIONES
1. COMPENSACION DE LA DEUDA
1.1. VENTAJAS
1.2. NATURALEZA
1.3. CASOS EN QUE NO ES PROCEDENTE
1.4. CLASES
1.5. EFECTOS
2. NOVACION
2.1. CLASES
2.2. EFECTOS
2.3. EFECTOS DE LA NOVACION OBJETIVA
2.4. EFECTOS DE LA NOVACION SUBJETIVA POR CAMBIO DEL
DEUDOR Y DEL ACREEDOR
2.5. REQUISITOS
2.6. JURISPRUDENCIA
3. REMISION DE LA DEUDA
3.1. CLASES
3.2. PRESUNCION LEGAL
3.3. EFECTOS
4. CONFUSION
4.1. CASOS EN QUE OCURRE LA CONFUSION
4.2. ELEMENTOS
4.3. EFECTOS
4.4. JURISPRUDENCIA
5. PRESCRIPCION EXTINTIVA
5.1. CONDICIONES DE PROCEDENCIA
5.2. COMPUTO DE LAPSO DE PRESCRIPCION
5.3. JURISPRUDENCIA
CONCLUSION
BIBLIOGRAFIA
INTRODUCCION
DESARROLLO
TEMA 1. EL PAGO Y SUS DIVERSAS MODALIDADES
1. EL PAGO
Art. 1.283: “El pago puede ser hecho por toda persona que tenga
interés en ello, y aun por un tercero que no sea interesado, con tal que obre
en nombre y en descargo del deudor, y de que si obra en su propio nombre
no se subrogue en los derechos del acreedor.”
Desde el punto de vista técnico jurídico designa la ejecución de una
obligación cualquiera que sea su objeto, es el cumplimiento de una
prestación debida por el deudor al acreedor. Cuando el deudor cumple su
obligación, dicho deudor está pagando esa obligación. Se paga dando una
cosa; prestando un servicio, observando la abstención, según se trate de
obligaciones de dar, hacer o no hacer.
1.1. ELEMENTOS DEL PAGO
a) Obligación valida.
Una obligación es valida cuando es ella no es nula o anulable.
De serlo, el deudor no esta obligado a realizar el pago, y de
haberlo hecho, al decretar el Juez la nulidad, puede ejercer
repetición, con excepción de los casos no permitidos por la ley.
b) La intención de extinguir la obligación.
Es un elemento esencial del pago, el cual debe concurrir con
la ejecución de la prestación.
Es el animo o deseo de extinguir la obligación por parte del
deudor. Aparte del elemento material o ejecución de la prestación,
debe existir el elemento intencional, que consiste en el animo o
deseo de extinguir la obligación. esto no significa que la falta de
ese animo o deseo autorice al deudor o ejercer la repetición, pues
si el acreedor recibe el deudor la prestación que fuere a titulo de
pago, basta para que el deudor quede liberado de su obligación y
no pueda repetir, aun cuando la prestación que hubiere ejecutado
el deudor no la hubiese efectuado con animo de pagar. El deudor
podría repetir solo si el y el acreedor están de acuerdo en que la
prestación no sirva para extinguir la deuda sino para crear una
nueva relación jurídica (por ejemplo, un depósito o un comodato).
Este elemento explica por que cuando un tercero paga en
nombre propio una deuda ajena, creyéndola suya, no extingue la
deuda y puede ciertamente repetir, ya que no ha existido la
intención de pagar, o sea, de extinguir la deuda del verdadero
deudor.
1.2. SUJETOS DEL PAGO
El solvens y el accipiens. El solvens o quien efectúa el pago,
que en general, pero no necesariamente, es el deudor; y el accipiens
o persona que recibe el pago, que generalmente, pero no
necesariamente, es el acreedor.
¿Quiénes pueden ser solvens?
1. El deudor.
2. Un tercero interesado, que es cualquier persona distinta del
deudor que pueda ser forzada a pagar, pues tiene un interés
legítimo en extinguir la obligación. Al hacer el pago se subroga en
todos los derechos del acreedor, a quien le hubiere pagado.
3. Un tercero no interesado, existen dos clases de terceros no
interesados:
Terceros que actúan en nombre y descargo del deudor. Ello
ocurre en casos en que el tercero es mandatario o gestor del
negocio, o cuando el tercero quiere hacer una liberalidad al
deudor.
Terceros que actúan en nombre propio. Ocurre en los casos
donde los terceros no representan al deudor. Cualquiera
puede pagar de dicho modo, pero cualesquiera que fuesen los
motivos que lo impulsen al pago, no se puede pretender la
subrogación legal de los derechos del acreedor, a menos que
el acreedor lo subrogue convencionalmente.
Por lo que respecta a los efectos del pago efectuado por un tercero,
la doctrina observa:
1. El acreedor, salvo en los casos señalados por la ley, no puede
rechazar el pago del tercero.
2. El deudor no puede impedir el pago del tercero si el mismo no paga.
3. El tercero no tiene derecho a pagar si el acreedor y el deudor
concurren en rechazar su pago.
¿Quiénes pueden ser accipiens?
El pago puede ser efectuarse a la persona que puede o deba
recibirlo, so pena de tener que pagar dos veces. Esas son el
acreedor, la persona autorizada por el propio acreedor, por la
autoridad judicial o por la ley. Excepcionalmente, el pago hecho a un
tercero es válido cual el acreedor ese pago o se aprovecha de el, o
cuando el pago se efectúa de buena fe al poseedor del crédito, aun
cuando este sufra posteriormente la evicción.
1.3. OBJETO DEL PAGO.
Consiste en el cumplimiento de la prestación debida por el
deudor, y variara si se trata del pago de una obligación de dar, de
hacer o no hacer.
1.4. PRINCIPIOS QUE RIGEN EL PAGO.
Principio de identidad del pago.
El pago debe ser idéntico a la prestación debida, debe
comprender dicha prestación y nada más que ella.
Art. 1.290: “no puede obligarse al acreedor a recibir una
prestación o cosa distinta de la que se le debe, aunque el valor de la
cosa sea igual o superior al de aquella.”
Principio de integridad del pago.
El pago debe ser completo, comprender toda la prestación
debida. Como consecuencia, el deudor no puede pretender cumplir
en parte la prestación prometida; de allí que no puede constreñir al
acreedor en parte el pago de la deuda, aunque esta fuere indivisible.
Art. 1.292: “Si la deuda fuere en parte liquida y en parte
ilíquida, podrá exigirse por el acreedor y hacerse por el deudor el
pago de la parte liquida, aun antes de que pueda efectuarse el de la
parte ilíquida, si no pareciere que no puede procederse de otro
modo.”
Aunque el principio de indivisibilidad del pago admite
excepciones, las cuales son:
Cuando se opone con éxito la compensación que extingue las
acreencias hasta el monto en que concurren.
En caso de muerte del deudor de una obligación divisible, la
deuda se divide por sus respectivas partes entre sus
herederos.
Cuando el pago parcial es aceptado por el acreedor.
En los casos en que una deuda es en parte liquida y en parte
ilíquida.
1.5. PAGO DE LAS OBLIGACIONES DE DAR.
En las obligaciones de dar, aquellas que tienen por objeto la
transmisión de la propiedad u otro derecho real sobre un cuerpo
cierto y determinado, el pago se efectúa mediante el otorgamiento del
consentimiento legítimamente manifestado (art. 1.161 CC). En
consecuencia, la obligación de dar se cumple, en este caso,
simultáneamente al nacimiento de la obligación: nace y se cumple en
un mismo momento, ello en virtud del principio de la consensualidad
de la transmisión de los derechos reales establecida en el Código
Napoleón. En el derecho venezolano este principio, se aplica tanto a
las cosas muebles, como a las inmuebles.
1.6. PAGO DE LAS OBLIGACIONES DE HACER Y NO HACER
Como observación general debe señalarse que también rigen
los principios generales de integridad e identidad del pago señalados
como de aplicación en toso tipo de obligación. Además, por lo que
respecta a las obligaciones de hacer, el Código Civil dispone que si
bien pueden ser cumplidas por un tercero, ello no puede efectuarse
en contra de la voluntad del acreedor cuando éste tiene interés en
que se cumpla por el mismo deudor (art. 1284 CC)
1.7. ELEMENTOS ACCIDENTALES DEL PAGO,
Son aquellas circunstancias que reúne todo pago sin que le
sean esenciales; estos elementos son de naturaleza variable según
la manifestación de voluntad de las partes o la propia naturaleza de la
obligación. Esos elementos son:
Gastos de pago, Art. 1.297: “Los gastos del pago son de cuenta del
deudor”. Este principio tiene un alcance general que no excluye que
en determinados contratos los gastos pueden ser establecidos por el
legislador a cargo del acreedor. Las partes pueden también
convencionalmente determinar lo conducente por lo que respecta a
los gastos del pago.
Tiempo de pago, cuando no se ha estipulado plazo alguno, la
obligación deberá cumplirse de inmediato, si su naturaleza o manera
de ejecutarse o el lugar para cumplirla no determinan la necesidad de
un término que será fijado por el tribunal (art. 1212, párrafo 1º CC) o
si se ha fijado un término, la obligación deberá pagarse al
vencimiento de dicho término; si se paga antes, el deudor no puede
repetir el pago, porque se entiende que al pagar anticipadamente
renunció al beneficio del término, el cual se considera establecido en
su favor.
Lugar del pago, la determinación del lugar de pago tiene especial
interés, tanto para el cumplimiento de la obligación en sí misma como
por las consecuencias jurídicas que se puedan derivar de una diversa
interpretación del lugar donde deba efectuarse.
1.8. EFECTOS DEL PAGO.
Al hablarse de los efectos del pago se quieren señalar las
consecuencias que acarrea el hecho de que el deudor despliegue la
actividad natural a que está obligado frente al acreedor. El efecto
fundamental es la liberación de deudor, de haber cumplido conforme
a lo convenido, o de haberse cumplido conforme lo establece la ley.
Una vez cumplida la obligación, se extingue el crédito del acreedor, y
ya nada este puede reclamar. Como consecuencia de lo anterior, se
extinguen todas las garantías dado su carácter accesorio: prenda,
hipoteca, fianza, entre otros. La acción del acreedor, procesalmente
hablando y entendiéndola como la facultad de poner en movimiento
los órganos jurisdiccionales, nunca se extingue.
2. IMPUTACION DEL PAGO.
Ocurre cuando entre un mismo acreedor y un mismo deudor existen
varias obligaciones, de igual naturaleza y con idéntico objeto, debiendo
entonces determinarse a cuál de las deudas debe asignarse el pago
efectuando por el deudor.
Por imputación del pago se entiende la asignación o aplicación del
pago a una obligación entre varias, obligación que se extingue según la
asignación que se efectua.
2.1. CLASES DE IMPUTACION.
1) Imputación del pago de las partes.
La imputación de pago no es una cuestión en la cual esté
interesado el orden público. Las partes pueden regular
convencionalmente la imputación, antes, al momento o después del
pago.
2) Imputación hecha por el deudor.
En principio, la imputación del pago corresponde al deudor,
que tiene preferencia respecto del acreedor, quien la ejerce sólo
cuando el deudor deja por su parte de usar tal facultad o admite la
escogencia efectuada por aquél.
2.2. EFECTOS
Una vez efectuada válidamente, extingue la deuda y las
obligaciones accesorias que le garantizaban y no puede retractarse ni
modificarse en perjuicio de terceros.
JURISPRUDENCIA
3. PAGO CON SUBROGACIÓN
Es el pago hecho por un tercero (acreedor subrogado), naciendo para
este el derecho de exigir del deudor una prestación igual a la satisfecha. Al
nuevo acreedor se transmiten todos los derechos y garantías del primitivo
acreedor (subrogante). Lo mismo ocurre cuando el deudor paga con dinero
de un tercer, a que subroga en los derechos del primitivo acreedor.
Con la subrogación no se extingue la obligación para el deudor, que
continua debiendo, pero ya al nuevo acreedor. La obligación se extingue
para el primitivo acreedor, pues, su crédito ha sido satisfecho por el tercero.
3.1. CARACTERES.
El pago de ser hecho por un tercero, con sus propios fondos,
nunca con dinero del deudor. No se extingue la obligación para el
deudor. Se transmiten los derechos y garantías del primitivo acreedor
nuevo.
3.2. CLASES.
1. Subrogación convencional.
Es la subrogación proveniente del acuerdo de voluntades del
tercero que paga y del acreedor, o dicho tercero y el deudor; en el
primer caso estamos en presencia de la llamada “subrogación por
voluntad del acreedor”; y en la segunda “subrogación por voluntad
del deudor”. En ambas situaciones se requiere del consentimiento
del tercero que paga o subrogado.
2. Subrogación legal.
Que opera de pleno derecho en los casos expresamente
enumerados por la ley, y por el simple hecho de pago.
Art. 1.300: “La subrogación se verifica por disposición de la
Ley:
1º En provecho de quien, siendo acreedor, aun quirografario, paga a
otro acreedor que tiene derecho a ser preferido por razón de
privilegio o hipoteca.
2º En provecho del adquirente de un inmueble que emplea el precio
de su adquisición en pagar a los acreedores en cuyo favor está
hipotecado el fundo.
3º En provecho de quien, estando obligado con otros o por otros al
pago de la deuda, tenía interés en pagarla.
4º En provecho del heredero a beneficio de inventario que ha pagado
con sus propios fondos las deudas de la herencia.”
3.3. CASOS DE SUBROGACION
La subrogación convencional comprende de dos casos:
a. Subrogación por voluntad del acreedor.
Art. 1.299, Ord. 1°: “La subrogación es convencional:
1º Cuando el acreedor, al recibir el pago de un tercero, lo subroga en
los derechos, acciones, privilegios o hipotecas, que tiene contra el
deudor; esta subrogación debe ser expresa y hecha al mismo tiempo
que el pago.”
Las condiciones para que sea válido son:
1) Es necesario que el consentimiento del acreedor y del tercero
subrogado, quienes deben ser capaces. No se requiere del
consentimiento del deudor.
2) Que el pago se efectúe con el dinero del tercero que subroga.
3) La voluntad de subrogar debe ser expresa.
b. Subrogación por voluntad del deudor.
Art. 1299, Ord. 2°: “La subrogación es convencional:
2° Cuando el deudor toma prestada una cantidad a fin de pagar su
deuda y de subrogar al prestamista en los derechos del acreedor.”
Las condiciones para que sea válido son:
1) Un préstamo de dinero efectuado por el tercero al deudor.
2) El consentimiento del deudor y del tercero.
3) La declaración expresa del deudor en el acto del préstamo de
que el dinero dado en préstamo se ha destinado para hacer el
pago.
La subrogación legal comprende de dos casos:
Casos en los cuales el solvens estaba obligado al pago de la
deuda. Art. 1.300, Ord. 2°-3°: “La subrogación se verifica por
disposición de la Ley:
2º En provecho del adquirente de un inmueble que emplea el
precio de su adquisición en pagar a los acreedores en cuyo
favor está hipotecado el fundo.
3º En provecho de quien, estando obligado con otros o por
otros al pago de la deuda, tenía interés en pagarla.”
Casos en los cuales el solvens no está obligado al pago de la
deuda. Art. 1.300, Ord. 1° y 4° C.C.: “La subrogación se
verifica por disposición de la Ley:
1° En provecho de quien, siendo acreedor, aun quirografario,
paga a otro acreedor que tiene derecho a ser preferido por
razón de privilegio o hipoteca.
4º En provecho del heredero a beneficio de inventario que ha
pagado con sus propios fondos las deudas de la herencia.”
3.4. EFECTOS
Sea convencional o legal la subrogación, produce los siguientes
efectos:
1) El subrogado adquiere todos los derechos y acciones de
aquel cuyo lugar toma y asume sus derechos, tanto los
principales como los accesorios, no solo contra el obligado,
sino también contra los coobligados y terceros poseedores.
2) El subrogado por haber efectuado un pago conserva su
acción propia contra el deudor por la causa del pago.
3) El subrogado solo puede recobrar su crédito hasta el
momento del desembolso por él efectuado.
JURISPRUDENCIA
4. OFERTA REAL DE PAGO Y DEPÓSITO.
La oferta de pago, mejor conocida por la oferta real de pago, y el
subsiguiente deposito, no son necesarias en rigor para hacer incurrir en
mora accipiendi al acreedor, ni tampoco para evitar los efectos de la mora
solvendi, pero sí son indispensables en aquellas situaciones en las cuales el
deudor pretenda liberarse.
4.1. PROCEDIMIENTO JUDICIAL.
Si el acreedor rechaza injustificadamente el pago, el deudor,
para liberarse, debe someterse al procedimiento conocido con el
nombre de la Oferta de Pago y del Depósito.
Artículo 1.306 C.C.: “Cuando el acreedor rehúsa recibir el
pago, puede el deudor obtener su liberación por medio del
ofrecimiento real y del depósito subsiguiente de la cosa debida.
Los intereses dejan de correr desde el día del depósito legalmente
efectuado, y la cosa depositada queda a riesgo y peligro del
acreedor.”
Art. 819 C.P.C: “La oferta real se hará por intermedio de
cualquier Juez territorial del lugar convenido para el pago y cuando
no haya convención especial respecto del lugar del pago, en el
domicilio o residencia del acreedor o en el lugar escogido para la
ejecución del contrato. El escrito de la oferta deberá contener:
1º El nombre, apellido y domicilio del acreedor.
2º La descripción de la obligación que origina la oferta y la causa o
razón del ofrecimiento.
3º La especificación de las cosas que se ofrezcan.”
Art. 820 C.P.C: “El deudor u oferente pondrá a la disposición
del Tribunal para que las ofrezca al acreedor las cosas que le ofrece.
En el caso de tratarse de cantidades de dinero la entrega podrá
suplirse con la certificación del depósito hecho a favor del Tribunal en
un banco de la localidad.”
Art. 821 C.P.C: “El Tribunal se trasladará al lugar donde deba
hacerse la oferta y entregará las cosas al acreedor que sea capaz de
exigir o aquel que tenga facultad de recibir por él.
Del ofrecimiento se levantará un acta que contendrá:
1º La indicación de la hora, día, mes, año y lugar en que se ha hecho
la oferta.
2º El nombre, apellido y domicilio del deudor u oferente y del
acreedor a quienes ha hecho la oferta o de la persona con facultad
para recibir por el que haya recibido las cosas o se hubiera negado a
recibirlas.
3º Una descripción exacta de las cosas, valores o dinero ofrecido.
4º La respuesta del acreedor, su aceptación o negativa a recibir la
oferta y las razones por las cuales se niega a recibirla, si tal fuere el
caso.
5º En caso de aceptación de la oferta, la mención del pago o de la
entrega de la cosa y en ambos casos, el otorgamiento del recibo.
6º El acta será suscrita por el Juez, el Secretario y quienes hayan
intervenido.”
Art. 822 C.P.C: “Cuando el acreedor no esté presente en el
acto, ni la persona que tenga facultad para recibir por él, o si ésta se
negare a recibir las cosas, el Secretario dejará copia del acta
levantada conforme al artículo anterior, en manos de la persona
notificada de la misión del Tribunal, haciendo saber al acreedor que si
dentro del plazo de tres días no hubiere aceptado la oferta, se
procederá al depósito de la cosa ofrecida. De esa entrega se dejará
constancia en el expediente. Si el acreedor hubiese estado presente
en el acto de la oferta, se tendrá a derecho para la secuela del
procedimiento.”
Art. 823 C.P.C: “El tercer día siguiente a aquél en que se haya
efectuado la oferta, si el acreedor hubiere estado presente en el acto,
o aquél en que se hubiere entregado la copia del acta a la persona
por cuyo intermedio se le hizo, el Tribunal ordenará el depósito de la
cosa, valores o dinero ofrecido. Si se tratare de dinero, el depósito se
efectuará en un Banco, quien tendrá la obligación de recibirlo sin
cobrar emolumentos por su custodia; pero si el deudor u oferente
presentare al Tribunal constancia de un Banco que esté dispuesto a
recibirlo mediante el pago de intereses, el Tribunal verificará el
depósito en éste. Los intereses devengados por el dinero depositado
pertenecerán a la parte a quien en definitiva el Tribunal lo reintegre.”
Art. 824 C.P.C: “Inmediatamente después de haber ordenado
el Tribunal el depósito de la cosa, valores o dinero ofrecidos,
ordenará la citación del acreedor para que comparezca dentro de los
tres días siguientes a su citación y a cualquier hora de las fijadas en
la tablilla a que se refiere el artículo 192, a exponer las razones y
alegatos que considere conveniente hacer contra la validez de la
oferta y del depósito efectuados. Vencido este lapso, haya expuesto
o no el acreedor las razones y alegatos conducentes, la causa
quedará abierta a pruebas por diez días para que las partes
interesadas promuevan y evacúen las que consideren pertinentes.”
Art. 825 C.P.C: “Expirado el término de pruebas, el Juez
decidirá sobre la procedencia o improcedencia de la oferta y del
depósito, dentro del plazo de diez días.
Si el Juez declarare válidos la oferta y el depósito quedará libertado
el deudor desde el día del depósito. En la condena en costas se
incluirán los gastos ocasionados por el procedimiento de oferta y
depósito. En la sentencia el Tribunal hará determinación expresa
asignando los intereses devengados por las cantidades de dinero que
hayan sido depositadas, a quien corresponda.”
Art. 826 C.P.C: “Hasta el día en que se dicte la sentencia
sobre validez o nulidad de la oferta y del depósito, el deudor podrá
retirar la cosa ofrecida, y el acreedor podrá aceptarla.
En este último caso el acreedor, deberá hacer constar su aceptación
en el expediente, con lo cual quedará terminado el procedimiento, y
el Juez ordenará al depositario la entrega de la cosa ofrecida, del
recibo de la cual quedará constancia en autos.”
Art. 827 C.P.C: “Si durante el procedimiento sobre validez o
nulidad de la oferta se embargare la cosa ofrecida por acciones
dirigidas contra el deudor o el acreedor, el efecto de la medida
quedará en suspenso hasta que se declare la validez o nulidad del
ofrecimiento.”
Art. 828 C.P.C: “En el caso del artículo 1.313 del Código Civil,
se observarán las reglas establecidas en dicho artículo y en los
artículos anteriores en cuanto sean aplicables.”
Art. 1.313 C.C: “Si la cosa debida es un objeto determinado
que debe entregarse en el lugar donde se encuentra, el deudor
requerirá al acreedor para que la tome. Hecho este requerimiento, si
el acreedor no toma la cosa, el deudor puede hacerla depositar por
medio del Tribunal en otro lugar.”
JURISPRUDENCIA
TEMA 2. OTROS MEDIOS DE EXTINCION DE LAS OBLIGACIONES
1. COMPENSACION DE LA DEUDA
La compensación es la extinción que se opera en las deudas de dos
personas recíprocamente deudores cuando dichas deudas son homogéneas,
liquidas y exigibles. Zacharias la define como “la extinción de dos
obligaciones reciprocas que se pagan la una por la otra, hasta la
concurrencia de sus cantidades respectivas, entre personas que son
deudoras la una hacia la otra.”
1.1. VENTAJAS
Generalmente se señalan dos ventajas fundamentales:
1) La compensación constituye un doble pago abreviado, cada
acreedor es pagado al verse liberado de la obligación que
tenía para con el otro, evitando los desplazamientos de
dinero, riesgos y gastos.
2) La compensación constituye una garantía del pago, pues
cada deudor evita el riesgo de pagar sin verse a su vez
pagado, eludiendo de paso el concurso con otros acreedores.
1.2. NATURALEZA
La compensación es uno de los medios legales de extinción
de las obligaciones y opera aun sin el concurso de la voluntad de las
partes (compensación legal), aun cuando puede existir también la
compensación convencional, como veremos más adelante.
La compensación es un modo de extinción común a todas las
obligaciones, independientemente de sus fuentes o de su clase,
siempre que reúnan las cualidades de homogeneidad, liquidez y
exigibilidad.
1.3. CLASES DE COMPENSACIÓN
Compensación legal.
Art. 1.332 C.C: “La compensación se efectúa de derecho en
virtud de la Ley, y aun sin conocimiento de los deudores, en el
momento mismo de la existencia simultánea de las dos deudas, que
se extinguen recíprocamente por las cantidades concurrentes.”
La compensación opera de derecho en el sentido de que una vez
decidida por el Juez, las obligaciones se extinguen desde su
existencia simultánea, aun sin conocimiento de los deudores, y no
desde que se dicte la decisión.
Los requisitos para la misma son:
1) Simultaneidad. Las obligaciones deben exitir al mismo tiempo
2) Homogeneidad. Existe homogeneidad cuando las deudas
tienen por objeto una suma de dinero; cuando no se trate de
dinero, si deben comprender cantidades determinadas de
cosas de una misma especie.
3) Liquidez. Requiere que el crédito sea liquido.
4) Exigibilidad. Las deudas deben ser exigibles; ello excluye las
obligaciones somen¿tidas a termino y a condición
suspensiva.
5) Reciprocidad. Se verifica cuando las dos personas sean
acreedoras o deudoras una de otra por cuenta propia.
Compensación convencional.
Es la que se deriva de un pacto o convención de las partes,
requiere de la voluntad de ambas partes. Su mayor ap´licacion se
encuentra en el contrato de cuenta corriente y en las cámaras de
compensación.
Compensación facultativa.
Es aquella que se realiza a requerimiento de la parte en cuyo
faor hubiera cualquier obstáculo para la compensación legal, parte
que en vez de alegar dicho obstáculo, renuncia a oponerlo y acepta
la compensación.
Compensación judicial.
Nace de los poderes del Juez originados en razones de
equidad. La sentencia que la declara es constitutiva, en
contraposición con la que pronuncie la compensación legal o
voluntaria, que es declarativa.
1.4. EFECTOS
Efectos generales de la compensación.
La compensación extingue las deudas reciprocas, y siendo
legal, opera ipso jure, aun desconociéndola las partes. Cuando es
controvertida requiere la declaración de Juez en decisión de carácter
declarativo, salvo en la compensación judicial, en que la decisión es
de carácter constitutivo. En cuanto a la extincon de las deudas, dicha
extinción es total si las deudas son iguales; si son desiguales se
extingue en su totalidad la deuda menor y mayor hasta el limite en
que concurra la menor.
Efectos respecto de terceros.
Art. 1.340 C.C: “La compensación no se verifica con perjuicio
de derechos adquiridos por un tercero.
Sin embargo, el que, siendo deudor, llega a ser acreedor después
del embargo hecho en bienes suyos a favor de un tercero, no puede
oponer la compensación en perjuicio de quien ha obtenido el
embargo.”
JURISPRUDENCIA
2. NOVACION.
Es un modo voluntario de extinción de la obligación mediante el cual
se extingue una obligación preexistente, por la creación de una nueva
obligación que hace que la anterior quede extinguida y en su lugar la nueva
que la sustituye, es la que produce efectos legales entre ambas partes.
En el Derecho Romano se utilizaba la novación frecuentemente, para
neutralizar el rigor del vínculo obligatorio, el cual una vez formado, no podía
ser modificado, ni respecto a los sujetos, ni respecto al objeto, modalidades
o causas; En consecuencia, cuando era necesario modificar uno de estos
elementos, se debía extinguir la obligación anterior y sustituirla por una
nueva.
La Novación en el Derecho Moderno es utilizada cuando se requiere
un cambio en los sujetos o sobre el objeto de la obligación, aunque en la
actualidad las instituciones de la dación en pago (cuando el acreedor recibe
de su deudor una prestación diversa de la debida, para extinguir la
obligación existente entre ambos) y cesión de créditos y derechos (se
entiende por cesión de créditos el acto entre vivos en virtud del cual un
nuevo acreedor sustituye al anterior en la misma relación obligatoria),
permite alcanzar tales fines aunque sus efectos sean diferentes al de la
novación.
En síntesis, la novación es un convenio mediante el cual las partes
deciden extinguir una obligación preexiste, para crear una nueva obligación
que la sustituya, que difiere de la anterior en algún concepto esencial.
Si nos guiamos por el artículo 1.314 del C. Civil Venezolano, éste
expresa “la novación se verifica”:
1° Cuando el deudor contrae para con su acreedor una nueva obligación en
sustitución de la anterior, la cual queda extinguida
2° Cuando un nuevo deudor sustituye al anterior, dejando al acreedor, a éste
de su obligación
3° Cuando en fuerza de una obligación, un nuevo acreedor se sustituye al
anterior, quedando libre el deudor para con éste.
2.1. CLASES
Novación Objetiva
Cuando el deudor contrae para su acreedor nueva obligación,
en sustitución de la anterior, la cual queda extinguida, tal como lo
expresa el ordinal 1° del artículo 1314 anteriormente citado.
Ejemplo: Aldo le compra a Beto un inmueble, le cancela parte del
precio y le queda debiendo la cantidad de Bs. 50.000, Aldo conviene
con su acreedor Beto, extinguir la obligación derivada de la venta y
asumir una nueva obligación, mediante la cual debe por otro
concepto la cantidad de Bs. 50.000. Surge por cambio de objeto o
causa
Novación Subjetiva
Según los ordinales 2° y 3° del Art. 1314, puede ser:
1° Por cambio de deudor: se extingue una obligación con un
determinado deudor, por la creación de una nueva con un deudor
diferente.
Ejemplo: Aldo es el acreedor de una obligación preexistente;
Beto es el deudor quien adeuda Bs. 50.000 de capital y Bs. 50.000
de interés, Beto le propone a Aldo extinguir la obligación y crear una
nueva en la cual el deudor va a ser la empresa LACTEOS
PACOMELA, C.A. – LACTEOS PACOMELA está conforme: de esta
manera, el acreedor Aldo deja libre su obligación al deudor ordinario
Beto.
Esta novación subjetiva por cambio de deudor, puede suceder
de las siguientes maneras:
Mediante la subrogación por parte del acreedor denominada LA
EXPROMISIÓN, cuando la novación por cambio de deudor se
efectúa sin la intervención del deudor original que se produce
cuando un tercero conviene con el acreedor asumir la deuda, en
sustituir al deudor original quien queda librado definitivamente, ya
que no puede ser privado de este beneficio. En este caso no es
necesario el consentimiento del deudor según lo expresa el artículo
1316 del código civil. La sustitución del deudor original por el tercero
puede obedecer a una liberalidad, a un contrato de mandato o bien
de una gestión de negocios; pero de todas maneras, es
imprescindible que el tercero y el acreedor convengan en liberar al
deudor.
Mediante delegación, por la cual un nuevo deudor sustituye al
antiguo, en otras palabras, en el encargo dado por el deudor a un
tercero de pagar al acreedor y que éste manifieste expresamente
que libera al deudor original del cumplimiento de su obligación.
Ejemplo: Deudor – Delegante – Acreedor – Delegatario –
Tercero – Delegado.
Aldo “Delegante” encarga a Carlos “Delegado” de pagar esta
deuda de Bs 50.000 a su acreedor Beto “Delegatario” quien
consiente en liberar a su deudor Aldo “Delegante”.
Esta delegación requiere del consentimiento del delegante, del
delegado y del delegatario; debiendo éste último, manifestar su
voluntad de liberar al deudor original y delegante.
2° Novación Subjetiva por cambio de acreedor
Cuando se extingue una obligación anterior, en la cual el acreedor
era una persona determinada, sustituyéndola por otra obligación con
diferente acreedor, según lo expresa el ordinal 2° del artículo 1314
del código civil.
Ejemplo: en la obligación preexistente Beto es acreedor de Aldo y a
su vez deudor de Carlos y entre los tres convienen que Aldo cancele
la obligación a Carlos y se extinga el crédito de Beto contra Aldo.
2.2. EFECTOS
Produce un doble efecto:
a. Extingue la obligación anterior que origina los efectos liberatorios
siguientes:
a.1. Desaparecen todas las acciones de que disponía el acreedor y
las excepciones que con relación a ella tenía el deudor
a.2. La desaparición de la obligación anterior hace que
desaparezcan también las obligaciones accesorias, lo accesorio
sigue la suerte de lo principal
a.3. Hace que desaparezcan también sus limitaciones, modalidades
y vicios particulares, cuando la novación se realiza después que se
han reunido los elementos de existencia y de validez del acto
jurídico. Si la obligación primitiva estaba sujeta a condición o
término, dejará de estarlo si al ser novada no se somete a las
mismas modalidades.
a.4. Se extinguen las garantías, lotes, fianzas, hipotecas o privilegios
que aseguraban la obligación extinguida, a menos que el acreedor
haya hecho Reserva Expresa de ellas. Art 1320 del código civil (Los
privilegios e hipotecas del crédito anterior no pasan al que lo
sustituye, si el acreedor no ha hecho de ellos reserva expresa.)
a.5. La novación puede estar acompañada de la reserva explícita de
algún derecho, salvo que dañe a terceros o exista prohibición legal,
como es el caso de la Novación Subjetiva por cambio del deudor en
la cual los privilegios e hipotecas primitivos del crédito, no se
transfieren a los bienes del nuevo deudor. Artículo 1321 del código
civil (Cuando la novación se efectúa por la sustitución de un nuevo
deudor los privilegios e hipotecas primitivos del crédito no se
transfieren a los bienes del nuevo deudor.)
a.6. La obligación natural novada, sustenta la creación de una
obligación civil, por tanto susceptible la ejecución forzosa, por
extinción de la anterior, esta nueva obligación nace con su régimen
propio y características distintas e independientes de la obligación
natural
b. Simultáneamente con la extinción de la anterior, nace una nueva
obligación con su régimen y características e independientes de la
obligación extinguida.
2.3. EFECTOS DE LA NOVACION OBJETIVA
a. Surge por un acuerdo entre el acreedor y un tercero que viene en
asumir la deuda (expromisión); O por el encargo dado por el deudor
a un tercero, de pagar al acreedor (Delegación Novatoria Pasiva)
b. Se extingue la obligación con el deudor primitivo con los efectos
descritos en la novación general
c. Nace una obligación con un deudor diferente, con su régimen y
características propias
d. Cuando surge por acuerdo entre el acreedor y un tercero
(subrogación convencional por parte del acreedor), no requiere del
consentimiento del deudor, pero cuando surge la delegación
novatoria pasiva requiere del consentimiento del delegante, delegado
y delegatario. Artículo 1336 del código civil (- La novación que
consiste en sustituir un nuevo deudor, en lugar del primitivo, puede
hacerse sin el consentimiento de éste.)
e. Las fianzas, garantías, hipotecas y privilegios no pasan a gravar los
bienes del nuevo deudor. Artículo 1321 del código civil (- Cuando la
novación se efectúa por la sustitución de un nuevo deudor, los
privilegios e hipotecas primitivos del crédito no se transfieren a los
bienes del nuevo deudor.
f. El acreedor delegatario que libera al deudor primitivo delegante, no
tiene ningún recurso ante él, si el nuevo deudor delegado se hace
insolvente, a menos que hubiere hecho reserva expresa en el acto
de la delegación, o que el delegado ya estuviera en estado de
insolvencia. Artículo 1325 del código civil (El que ha aceptado la
delegación queda válidamente obligado para con el delegatario, aun
cuando su obligación para con el delegante o del delegante para con
el delegatario, sea nula o esté sujeta a excepción.)
2.4. EFECTOS DE LA NOVACION SUBJETIVA POR CAMBIO DE
DEUDOR Y DE ACREEDOR.
Efectos de la Novación Subjetiva por cambio del deudor
a. Surge por un acuerdo entre el acreedor y un tercero que
viene en asumir la deuda (expromisión); O por el encargo
dado por el deudor a un tercero, de pagar al acreedor
(Delegación Novatoria Pasiva)
b. Se extingue la obligación con el deudor primitivo con los
efectos descritos en la novación general
c. Nace una obligación con un deudor diferente, con su régimen
y características propias
d. Cuando surge por acuerdo entre el acreedor y un tercero
(subrogación convencional por parte del acreedor), no
requiere del consentimiento del deudor, pero cuando surge la
delegación novatoria pasiva requiere del consentimiento del
delegante, delegado y delegatario. Artículo 1336 del código
civil (- La novación que consiste en sustituir un nuevo deudor,
en lugar del primitivo, puede hacerse sin el consentimiento de
éste.)
e. Las fianzas, garantías, hipotecas y privilegios no pasan a
gravar los bienes del nuevo deudor. Artículo 1321 del código
civil (- Cuando la novación se efectúa por la sustitución de un
nuevo deudor, los privilegios e hipotecas primitivos del crédito
no se transfieren a los bienes del nuevo deudor.)
f. El acreedor delegatario que libera al deudor primitivo
delegante, no tiene ningún recurso ante él, si el nuevo deudor
delegado se hace insolvente, a menos que hubiere hecho
reserva expresa en el acto de la delegación, o que el
delegado ya estuviera en estado de insolvencia. Artículo 1325
del código civil (El que ha aceptado la delegación queda
válidamente obligado para con el delegatario, aun cuando su
obligación para con el delegante o del delegante para con el
delegatario, sea nula o esté sujeta a excepción.)
Efectos de la Novación Subjetiva por cambio del acreedor
a. Se extingue una obligación con determinado deudor, con los
efectos descritos en la novación en general. La obligación
extinguida es la que tiene el delegante con el delegatario.
b. Nace una obligación con otro acreedor con régimen y
características propias. Es la obligación del deudor delegado
con su nuevo acreedor el legatario.
c. En esta novación denominada Delegación Novatoria Activa,
el deudor (delegado) que acepte la delegación, no puede
oponer al segundo acreedor (delegatario), las excepciones
que hubiesen podido oponer al acreedor primitivo
(delegante), salvo su acción contra este último; a menos que
se trate de excepciones que dependan puede oponerlas, si
tal cualidad subsistía al tiempo en que consistió la
delegación, según lo expresa el artículo 1323 del código civil:
El deudor que ha aceptado la delegación no puede oponer al
segundo acreedor las excepciones que había podido oponer
al acreedor primitivo, salvo su acción contra este último.
d. Sin embargo, tratándose de excepciones que dependen de la
cualidad de la persona, el deudor puede oponerlas, si tal
cualidad subsistía al tiempo en que consintió en la
delegación.
2.5. REQUISITOS
Como primer requisito, se requiere la preexistencia de una obligación
Es necesaria la existencia de una obligación anterior, de un vínculo
jurídico previo entre las partes, en virtud del cual una de ellas es ya
deudora de la otra. La novación propiamente dicha consiste en un
renovar, una obligación va ser extinguida y sustituida por otra; luego,
la existencia de una obligación que va ser extinguida es un
presupuesto lógico y necesario.
Si la obligación primitiva está viciada de nulidad absoluta, la
obligación que se hiciere será igualmente nula, esta obligación no es
renovable ´porque el vicio que la afecta no es sanable en forma
alguna, el acto no puede convalidarse ni por confirmación ni por la
prescripción.
Si la nulidad que afecta la obligación primitiva fuere relativa, es
necesario distinguir si ha cesado el vicio y se hace la novación o si
no ha cesado el vicio y se hace la novación , pues en este último
caso, la novación nueva quedará afectada del mismo vicio, pero si
ha cesado el vicio y se hace la novación, se debe interpretar este
nuevo compromiso del deudor como una renuncia tácita a las acción
de nulidad y esta nueva obligación será válida, basado en la idea de
la confirmación tácita de los actos anulables.
Tal como lo señala el artículo 1324 del código civil: La
novación carece de efecto si la antigua obligación era nula; a menos
que la nueva haya sido contraída en mira al mismo tiempo de
confirmar la antigua, conforme a las reglas legales, y de
reemplazarla
Como segundo requisito, la creación de una nueva obligación
Esta nueva obligación es la finalidad esencial del acto novatorio y
debe ser también una obligación válida, pues de no serlo sería
insuficiente para privar de efectos y extinguir la procedente; en este
caso, no habrá novación y subsistirá la obligación primitiva.
Debe haber una diferencia Esencial entre la obligación original y la
nueva que va a sustituirla.
Entre la obligación preexistente y la novación debe existir un
cambio sustancial, ya que una divergencia accidental, no es
suficiente para constituir una novación, como serán: la variación en
el plazo pactado, en el monto de la deuda o en la especie de
moneda convenida para realizar el pago. La diferencia esencial
puede presentarse:
a. En los sujetos: Novación Subjetiva (por cambio de deudor o
de acreedor)
b. En el objeto: Novación Objetiva (por cambio de objeto o
causa)
Es decir, la novación subjetiva puede ser por cambio de deudor
mediante la expromisión o la delegación novatoria pasiva y por
cambio del acreedor mediante la delegación novatoria perfecta
activa. La novación objetiva se produce por cambio de objeto, de
causa o de la fuente de la obligación.
La voluntad o intención de Novar: Animus Novandi
El animus novandi se refiere al propósito de ambas partes de
extinguir la obligación primitiva y sustituirla por una nueva.
No es suficiente que decidan constituir una deuda, sino que ésta
venga a sustituir a la anterior, en razón de que no siempre las
obligaciones supervivientes extinguen los compromisos anteriores de
las partes; Para que la obligación siguiente subrogue a la original, las
partes, deben declarar expresamente tal intención: de acuerdo a lo
señalado en el artículo 1315 del código civil que expresa: “la
novación no se presume: es necesario que la voluntad de efectuarla
aparezca claramente del acto”.
La posibilidad de constituir la novación, mediante la exteriorización
de una voluntad tácita queda descartada: es por ello que en caso de
duda, la obligación superviviente coexistirá con la primera sin
novarla.
Por voluntad expresa se debe entender aquella que se
manifiesta de palabra, por escrito, o por signos inequívocos.
Por voluntad o consentimiento tácito, se deduce de hechos o
supuestos que lo presupongan o que autoricen a presumirlo.
Es preciso recalcar que la expresión de la voluntad en la
novación no está sujeta al cumplimiento de la formalidad alguna, ni
siquiera escrita, pues basta que la intención de las partes quede
inequívocamente manifestada por palabras o signos.
Los casos que a continuación se enumerar son una aplicación de
este requisito:
a. No existe novación por falta de animus novandi, cuando una
deuda es pagada con títulos de crédito; en tales casos, el
propósito de las partes o al menos el del acreedor, no es
sustituir el crédito por otro diverso. Ejemplo: Aldo es acreedor
de Beto por la cantidad de Bs 100.000 con garantía
hipotecaria sobre un inmueble, Beto paga la deuda con un
pagaré a la vista de 30 días. En este caso la expedición del
título de crédito si significara novación, haría que la deuda
original de Beto con Aldo provista de garantía real quedara
extinguida; luego, en el caso de no pagar el título, Aldo
solamente podrá ejercer las acciones mercantiles que
configure el pagaré. Pero como en verdad aquí no existe
novación y el pagaré solo fue recibido bajo la condición de
pago, Aldo conserva intacto su crédito y con plena eficacia
para promover la ejecución hipotecaria.
b. En los casos de Delegación Novatoria: cuando un deudor
designa a otro deudor a su acreedor para el pago de la
deuda, no se produce la novación, si el acreedor no
manifiesta expresamente su voluntad de libertar al deudor
que ha hecho la delegación. Siguiendo el artículo 1317 del
código civil: La delegación por la cual un deudor designa al
acreedor otro deudor, el cual se obliga hacia el acreedor, no
produce novación, si el acreedor no ha declarado
expresamente su voluntad de libertar al deudor que ha hecho
la delegación.
c. En los casos señalados en el artículo 1319 del código civil:
c.1. La simple indicación hecha por el deudor de una persona
que debe pagar en su lugar no produce novación
c.2. Como tampoco la produce la simple indicación hecha por
el acreedor de una persona que debe recibir por él.
JURISPRUDENCIA
PODER JUDICIAL
Juzgado Superior en lo Civil, Mercantil, del Tránsito, y de Protección
del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado
Anzoátegui
Barcelona, diecinueve de julio de dos mil cuatro
194º y 145º
ASUNTO : BP02-R-2004-000701
Por auto de fecha 14 de junio de 2004, este Tribunal Superior
admitió Recurso de Regulación de Competencia, propuesto por la
abogada NORVEMILES FIGUERA BARRERA, inscrita en el
Inpreabogado bajo el Nº. 94. 758, actuando con el carácter de
apoderada de la parte accionante, contra la decisión de fecha 20 de
mayo de 2004, mediante la cual el Juzgado Segundo de Primera
Instancia en lo Civil, Mercantil, Agrario y Tránsito de esta
Circunscripción Judicial, se declaró incompetente por la materia ,
para conocer de la acción por ENRIQUECIMIENTO SIN CAUSA,
seguido por la ciudadana TERESA RAMONA GIL, venezolana,
mayor de edad, titular de la cédula de Identidad Nº. 3. 971. 137,
contra la empresa APARTOTEL LA LLOVIZNA, S.A., inscrita por
ante el Registro Mercantil Primero de la circunscripción Judicial del
Estado Anzoátegui, en fecha 02 de julio de 1985, bajo el Nº. 35,
Tomo A-8; y declinó el conocimiento de la misma en el Juzgado de
Primera Instancia de Sustanciación, Mediación y ejecución del
Trabajo de la Circunscripción Judicial del Estado Anzoátegui; a fin de
decidir, este Tribunal lo hace de la manera siguiente:
UNICO
Alega la parte accionante en su libelo que la parte accionada celebró
una Asamblea General Extraordinaria de Accionistas, la cual fue
autenticada por ante la Notaría Pública de Lechería, Estado
Anzoátegui, en fecha 03 de diciembre de 2001, bajo el Nº. 21, Tomo
187 , e inscrita posteriormente por ante el Registro Mercantil Primero
de esta misma Circunscripción Judicial en fecha 29 de enero de
2001, bajo el Nº. 59, Tomo A-02; que en el punto Cuarto se acordó
“el pago de las prestaciones sociales que se adeudaban a los
trabajadores …en el cual reconocen deberle a mi representada por
tal concepto, la cantidad BOLÍVARES CINCO MILLONES SESENTA
Y OCHO MIL OCHOCIENTOS DOCE CON CINCUENTA
CENTIMOS (Bs. 5. 068. 812, 50) menos BOLÍVARES CIENTO
CUARENTA MIL CIENTO TREINTA CON SESENTIOCHO
CENTIMOS (Bs. 140. 130, 68), por concepto de adelanto de
prestaciones para un saldo total de BOLÍVARES CUATRO
MILLONES NOVECIENTOS VEINTIOCHO MIL SETECIENTOS
OCHO CON OCHENTA Y DOS CENTIMOS (Bs. 4. 928. 708,82),
cantidad ésta que hasta la fecha la citada empresa se ha negado a
cancelar a mi representada…”
A la demanda , la parte accionante acompañó copia certificada del
Acta de Asamblea General Extraordinaria de Accionistas, a que se
ha hecho referencia. En el Segundo Punto , de la referida Acta, se
acordó lo siguiente:
“CUARTO PUNTO: Solventar los pasivos..laborales de los únicos
trabajadores de la empresa que mas adelante se señalan…La
asamblea al reconocer la deuda laboral que asciende a la suma de
DIECISIETE MILLONES NOVECIENTOS VEINTICINCO MIL
QUINIENTOS SESENT Y SEIS CON TRES CENTIMOS (Bs. 17.925.
566, 3),y que se describen en el anexo que forma parte integrante de
la presente asamblea, que ocasión a las prestaciones sociales u otra
obligación laboral de los únicos trabajadores de la empresa, los
ciudadanos Ramón Gómez, Teresa Gil, Joel Maguana, Carlos
Núñez, Alicia Abreu, Henry Serra, titulares de las cédulas de
identidad Nros. 592. 221, 3. 971. 137, 11.424. 975, 8. 331. 844, 14.
910. 135 y 13. 936. 644, respectivamente, que laboran en esta
empresa acuerda pagar en un plazo no mayor de 90 días y dar en
prenda para garantizar dicho pago, bienes muebles del Apartotel La
Llovizna C.A., y finiquitar las deudas laborales en un lapso de 90
días”.
Formando parte de la copia certificada del Acta de Asamblea
General Extraordinaria, se encuentra el ANEXO PRESTACIONES
SOCIALES, y entre otras personas se menciona en el mismo a la
ciudadana TERESA GIL, titular de la Cédula de Identidad Nº. 3.
971.137, en el renglón referido a Prestaciones Sociales, se señala la
cantidad de Bs. 5.068.812,50; en el renglón correspondiente a
Adelanto de Prestaciones, se indica la cantidad de Bs. 140. 103, 68,
y en el total a pagar, se establece Bs. 4. 928. 708,82.
De lo que se infiere que ha habido una transformación de una
obligación en otra, lo cual es conocido como novación de la
obligación.
En este sentido el artículo 1. 314 del Código Civil, establece que la
novación se verifica:
1º. Cuando el deudor contrae para con su acreedor nueva obligación
en sustitución de la anterior, la cual queda extinguida.
2º Cuando un nuevo deudor se sustituye al anterior dejando el
acreedor a éste libre de su obligación.
3º Cuando en fuerza de nueva obligación, un nuevo acreedor se
sustituye al anterior, quedando libre el deudor para con éste.
La doctrina distingue dos clases de novación:
A) La llamada novación subjetiva, que consiste en un cambio de los
sujetos de la obligación y puede ser cambio de acreedor o de
deudor.
B)La novación objetiva, mediante la cual entre los mismos sujetos de
la relación obligatoria se cambia el objeto o prestación por uno nuevo
que lo reemplaza.
Por otra parte el artículo 1.315 ejusdem, señala, que la novación no
se presume: es necesario que la voluntad de efectuarse aparezca
claramente del acto. En efecto, si bien la acción por prestaciones
sociales corresponde al Trabajador; en este caso el Patrono ha
reconocido expresamente ese derecho y dádole un valor económico
y un plazo para cancelarlo, en Acta de Asamblea General
Extraordinaria de Accionistas, la cual al inscribirse por el Registro
Mercantil Primero de esta circunscripción Judicial, en fecha 29 de
enero de 2001, bajo el Nº. 59, tomo A-02;adquirió la condición de
documento público, donde consta expresamente la voluntad de la
empresa al respecto; dicha acta de Asamblea no fue impugnada por
la trabajadora en su oportunidad legal, lo que demuestra su
conformidad, si bien esperaba el cumplimiento voluntario de la
empresa, aun después del plazo establecido por ésta , del valor
estimado de sus derechos laborales, el cual se convertía así en
cantidad líquida y exigible y quedaba extinguida la obligación
primitiva.
De manera que, a criterio de este Tribunal, en el caso bajo examen
se ha producido, con lo aprobado en el Cuarto Punto de la Asamblea
General Extraordinaria de Accionista, ya señalada, una novación de
la obligación principal, la cual derivaba de una relación laboral, por
cuanto, el deudor ha contraído con su acreedor nueva obligación en
sustitución de la anterior.
Según la Doctrina, la Novación constituye una de las formas de
extinción de las obligaciones, consistentes en la transformación de
una en otra. La novación supone una obligación anterior que le sirve
de causa y que es, precisamente, la que con sus accesorios queda
extinguida.
La característica resaltante de la novación, es la circunstancia de
extinguir la obligación anterior.
De manera que a criterio de esta Alzada, con vista a lo expuesto en
el libelo de la demanda y de los recaudos acompañados a ella, en el
caso bajo examen se ha producido una novación de la obligación
principal, por lo que es procedente la acción ejercida y así se decide.
Por las consideraciones que anteceden, este Tribunal Superior
administrando justicia en nombre de la República y por autoridad de
la Ley, declara, CON LUGAR el recurso de regulación de
competencia propuesto por la abogada NORVEMILES FIGUERA
BARRERA, inscrita en el Inpreabogado bajo el Nº. 94. 758, actuando
con el carácter de apoderada de la parte accionante, contra la
decisión de fecha 20 de mayo de 2004, mediante la cual el Juzgado
Segundo de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, Agrario y
Tránsito de esta Circunscripción Judicial, se declaró incompetente
por la materia, para conocer de la acción por ENRIQUECIMIENTO
SIN CAUSA, seguido por la ciudadana TERESA RAMONA GIL,
venezolana, mayor de edad, titular de la cédula de Identidad Nº. 3.
971. 137, contra la empresa APARTOTEL LA LLOVIZNA, S.A.,
inscrita por ante el Registro Mercantil Primero de la circunscripción
Judicial del Estado Anzoátegui, en fecha 02 de julio de 1985, bajo el
Nº. 35, Tomo A-8.
Publíquese, regísttese, agréguese a los autos y bájese el expediente
al Tribunal de origen, a los fines legales consiguientes.
Dada, firmada y sellada en la Sala de Despacho del Juzgado
Superior en lo Civil, Mercantil, Tránsito y de Protección del Niño y del
Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado Anzoástegui,
en Barcelona, a los DIECINUEVE (19) días del mes de JULIO de dos
mil cuatro (2004).Años: 193º de la Independencia y l44º de la
Federación.
El Juez Superior Prov.,
Abg.JAIME LEOPOLDO ROLINGSON HERRERA
La Secretaria,
Abg.MARIA EUGENIA PEREZ
En la misma fecha, siendo la 1 y 10 minutos de la tarde se dictó y
publicó sentencia.Conste.
La secretaria,
Abg.María Eugenia Pérez.
ASUNTO : BP02-R-2004-000701
Sentencia Interlocutoria
Regulación de Competencia
3. REMISION DE LA DEUDA
Es la renuncia gratuita hecha por el acreedor a favor de su deudor.
En doctrina se le denomina también condonación, perdón o quita, en razón
de que la obligación se extingue por el perdón que el acreedor concede a su
deudor, liberándolo de la deuda
Es preciso que la renuncia sea gratuita, ya que si al renunciar a su
derecho, el acreedor recibe un equivalente bajo otra forma, no existirá la
remisión propiamente dicha, si no novación, daciòn en pago de transacción;
sin embargo, puede existir remisión parcial de la deuda, cuando el acreedor
con ánimo de gratificar a su deudor, acepte en pago una cosa de valor
inferior al crédito.
3.1. CLASES
Total
Aquella que comprende la remisión total de la deuda,
mediante ella el deudor, se libera totalmente
Parcial
Aquella que comprende solo una parte de la deuda, no en
toda su totalidad; el deudor se libera solo de la parte que le es
remetida por el acreedor.
Expresa
Cuando el acreedor manifiesta su voluntad de renunciar al
derecho de crédito que tiene contra su deudor. No requiere el
cumplimiento de solemnidades sacramentales, solo basta la
manifestación directa de volunta de liberar al acreedor de dicha
deuda
Tacita
Se da cuando el acreedor realiza un acto de voluntad o
conducta, del cual se puede deducir su voluntad de condonar la
deuda. La remisión tacita puede ser establecida o presumida por el
legislador, por determinados actos cometidos por el acreedor
realizados de manera taxativa, y puede también, ser presumida por
el Juez ante determinadas conducta o actos del acreedor, siempre
que existan circunstancias graves o precisas concordantes que
fundamenten racionalmente la presunción, la cual en todo caso
serán de carácter relativo por permitirse el acreedor realizar la
prueba en contrario.
3.2. PRESUNCION LEGAL
Art. 1.326 C.C: “La entrega voluntaria del título original bajo
documento privado, hecha por el acreedor al deudor, es una prueba
de liberación.”
3.3. EFECTOS
La extinción de la obligación es el efecto fundamental, pues al fin y al
cabo la remisión no es más que un modo voluntario de la exticion de
las obligaciones.
Artículo 1.327 C.C: “La entrega de la prenda no basta para hacer
presumir la remisión de la deuda.”
Artículo 1.328 C.C: “La remisión o quita concedida al deudor principal
aprovecha a sus fiadores; pero la otorgada a éstos no aprovecha a
aquél.”
Artículo 1.329 C.C: “La remisión hecha por el acreedor a uno de los
fiadores sin consentimiento de los demás, aprovecha a éstos por la
parte de deuda de aquél a quien se hizo la remisión.”
JURISPRUDENCIA
4. CONFUSION
La obligación se extingue por confusión o consolidación, cuando por
causa posterior al nacimiento del a obligación, se reúnen en una misma
persona la cualidad de acreedor y deudor.
La reunión del crédito y la deuda de una misma persona elimina la
obligación pues, no es concebible que alguien sea deudor de si mismo;
cuando el derecho a cobrar y deber de pagar se encuentran en una misma
persona, en un mismo patrimonio el vinculo jurídico desaparece, ya que
carece de sentido el derecho de exigirse a si mismo el pago
Cabe destacar que la deuda se extingue cuando la cualidad de
acreedor y deudor se reúnen, no en una misma persona, sino en mismo
patrimonio
La confusión se ve fundamentada legalmente en nuestro código civil,
en su articulo 1342 que expresa “Cuando, las cualidades de acreedor y
deudor se reúnen en una misma persona, la obligación se extingue por
confusión”
4.1. CASOS EN QUE OCURRE LA CONFUSION
En las sucesiones universales. Es la hipótesis mas frecuente, el
deudor hereda a su acreedor, o viceversa, o cuando una persona
hereda tanto al acreedor como al deudor. Se exepyua el heredero a
beneficio de inventario.}
En las sucesiones particulares. Ejemplo: en caso de una cesion de
credto en la cual el deudor adquiere un crédito contra sí mismo, o
cuando tal circunstancia ocurre a consecuencia de una subrogación.
4.2. ELEMENTOS
Que exista una relación de carácter obligatorio, una obligación
jurídica en sus dos aspectos característicos: Deuda y acreencia
Que las cualidades de acreedor y de deudor se reúnan en un mismo
patrimonio, que pueda ser en el patrimonio de uno de los mismos
sujetos, de la relación primitiva o en el patrimonio de un tercero que
los sucede a ambos
Que la consolidación ocurra entre el acreedor y el deudor principal,
para ser posible que no se extinga la obligación principal, la
confusión que se efectúa entre acreedores y fiadores
4.3. EFECTOS
La extinción de la obligación respecto de la cual se hubiese
producido la confusión.
La extinción puede ser total o parcial
Extingue no sólo la obligación principal, sino también las accesorias
JURISPRUDENCIA
Magistrado Ponente: HADEL MOSTAFA PAOLINI
Exp. No. 15666
El 19 de febrero de 1999, la abogada ROSALINDA VAN EPS
CASTILLO, inscrita en el Inpreabogado bajo el No. 22.319,
actuando en su carácter de representante del Fisco Nacional,
interpuso recurso de apelación, contra la sentencia dictada por
el Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario, en
fecha 21 de diciembre de 1998, número 570, por medio de la
cual se declaró CON LUGAR el recurso contencioso tributario
ejercido por los abogados RODOLFO PLAZ ABREU y
ALEJANDRO RAMIREZ van der VELDE, inscritos en el
Inpreabogado bajo los Nos. 12.870 y 48.453 respectivamente,
actuando con el carácter de apoderados judiciales de la
contribuyente C.A. EDITORA EL NACIONAL, sociedad
mercantil inscrita ante el Registro Mercantil de la
Circunscripción Judicial del Distrito Federal y Estado Miranda
en fecha 23 de febrero de 1948, bajo el N° 105, Tomo 1-B,
contra el acto administrativo contenido en la Providencia
Administrativa N° MH-SENIAT-GCE-97-1012, de fecha 6 de
junio de 1997, emanada de la Gerencia de Tributos Internos de
Contribuyentes Especiales de la Región Capital del Servicio
Nacional Integrado de Administración Tributaria (SENIAT),
mediante la cual se declaró improcedente la compensación
parcial opuesta por la contribuyente de los créditos fiscales
líquidos y exigibles, por concepto de retenciones de impuesto
sobre la renta pagadas en exceso durante el ejercicio fiscal
comprendido entre el 01-12-1995 y el 30-11-1996, por la
cantidad de doscientos cuarenta y tres millones trescientos
quince mil doscientos cuarenta y cuatro bolívares sin céntimos
(Bs. 243.315.244,oo), con deudas líquidas y exigibles del
impuesto al consumo suntuario y a las ventas al mayor,
correspondientes al período de imposición del mes de febrero
de 1997, por la cantidad de ciento treinta y cinco millones
quinientos cincuenta y siete mil doscientos veinticuatro
bolívares sin céntimos (Bs. 135.557.224,oo).
En fecha 3 de marzo de 1999, se dio cuenta en Sala y, por
auto de igual fecha, se designó ponente a la Magistrada
HILDEGARD RONDON de SANSÓ, y se fijó el décimo día de
despacho para comenzar la relación.
En fecha 6 de abril de 1999, comenzó la relación en el
presente juicio. Asimismo, mediante escrito presentado en esta
misma fecha, el abogado Gerardo J. Angulo Anselmi, inscrito
en el Inpreabogado bajo el No. 43.767, actuando como
sustituto del ciudadano Procurador General de la República, en
representación de Fisco Nacional, formalizó la apelación
planteada.
Mediante escrito de fecha 20 de abril de 1999, los abogados
Rodolfo Plaz Abreu, Lionel Rodríguez Alvarez y Alejandro
Ramírez van der Velde, inscritos en el Inpreabogado bajos los
Nos. 12.870, 12.481 y 48.453, respectivamente, actuando en
su carácter de apoderados judiciales de C.A. Editora El
Nacional, presentaron escrito de contestación a la
formalización de la apelación presentada por los apoderados
de la República.
Por auto de fecha 4 de mayo de 1999, se dio cuenta en Sala,
y se fijó el décimo día de despacho para que tenga lugar el
acto de informes en el presente juicio de conformidad con lo
establecido en el artículo 166 de la Ley Orgánica de la Corte
Suprema de Justicia.
En fecha 26 de mayo de 1999, comparecieron las partes y
consignaron sus respectivos escritos de informes. La Sala,
previa su lectura por Secretaria, ordenó agregarlos a los autos.
Se dijo “Vistos”.
Vista la entrada en vigencia de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela, la cual estableció un cambio de
estructura y denominación de este máximo Tribunal, se
reconstituyó la Sala designándose ponente al Magistrado José
Rafael Tinoco.
Por diligencia de fecha 8 de agosto de 2000, el abogado Lionel
Rodríguez Álvarez, actuando en su carácter de apoderado
judicial de la contribuyente C.A. Editora El Nacional, solicitó
que se decida la presente causa.
En virtud de la designación de los Magistrados Hadel Mostafá
Paolini y Yolanda Jaimes Guerrero, y la ratificación del
Magistrado Levis Ignacio Zerpa, por la Asamblea Nacional en
sesión de fecha 20 de diciembre de 2000, publicada en la
Gaceta Oficial Nº 37.105, del día 22 del mismo mes y año, se
reconstituyó la Sala Político-Administrativa el 27 de diciembre
de dicho año, y se designó ponente al Magistrado Hadel
Mostafá Paolini, quien con tal carácter suscribe la presente
decisión.
Realizado el estudio del expediente, pasa esta Sala a
decidir, previa las siguientes consideraciones:
I
LA SENTENCIA APELADA
El Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario en la
sentencia dictada en fecha 21 de diciembre de 1998, por medio
de la cual declaró con lugar el recurso contencioso tributario
interpuesto por los apoderados de la contribuyente C.A.
EDITORA EL NACIONAL, fundamentó su motivación en base
a las consideraciones que de seguidas se transcriben:
“(...) la controversia se limita a determinar la procedencia de la
compensación como forma de extinción de las obligaciones
tributarias del impuesto al consumo suntuario y a las ventas al
mayor con retenciones en materia de impuesto sobre la
renta(...)
La interpretación del parágrafo primero del artículo 46 del
Código Orgánico Tributario hecha por la administración
tributaria conduce a sostener que la obligación tributaria
surgida en materia de impuesto a las ventas puede extinguirse
mediante el pago de forma que el Fisco Nacional consiga la
prestación debida, así como mediante modos que no van
acompañados de la consecución de la prestación pues serían
procedentes los medios no satisfactivos de la obligación, como
son la prescripción, la remisión y la declaratoria de
incobrabilidad, sólo no procedería la compensación. La
compensación es un modo satisfactivo para el acreedor del
tributo que nace de un comportamiento de inactividad de los
sujetos de las obligaciones respectivas; por ello la
interpretación literal de dicho parágrafo conduce en criterio de
este Tribunal a un absurdo, que como tal debe desestimarse.
Para interpretar debidamente el parágrafo en referencia debe
considerarse lo dispuesto en el encabezamiento del artículo 46
del Código Orgánico Tributario en el cual se encuentra la
finalidad de la compensación: extinguir ‘de pleno derecho y
hasta su concurrencia, los créditos no prescritos, líquidos y
exigibles del contribuyente por concepto de tributos,..., con las
deudas tributarias por los mismos conceptos igualmente
líquidas, exigibles y no prescritas,..., aunque provengan de
distintos tributos y accesorios, siempre que se trate del mismo
sujeto activo’, por ello se puede oponer ‘en cualquier momento
en que deban cumplir con la obligación de pagar tributos,... o
frente a cualquier reclamación administrativa o judicial de los
mismos’, y cuando la misma es opuesta ‘la administración
tributaria deberá proceder a verificar la existencia, liquidez y
exigibilidad de dicho crédito y a pronunciarse sobre la
procedencia o no de la compensación opuesta’.
Homogeneidad de los objetos de las obligaciones y carácter
líquido y exigible de las mismas es lo que exige el legislador
para que las obligaciones se extingan de pleno derecho; así,
ante la coexistencia de dos deudas en sentido opuesto, el
legislador en materia tributaria al igual que en derecho común
pretende evitar actos inútiles, quiere evitar que un sujeto
cumpla su obligación para luego recibir el cumplimiento de la
otra, el legislador reconoce la igualdad de las partes respecto
de los montos debidos, los sujetos en todo caso están
sometidos a las disposiciones de la Ley.(...)
Algunos impuestos son exigidos a sujetos que, conforme la
voluntad del legislador no son aquellos cuya capacidad
contributiva se pretende gravar, son impuestos anticipados
creados con un mecanismo de aplicación en el que quien debe
pagarlos está dotado sólo de una capacidad técnica de
contribuir, y por ello adelanta un abono de un impuesto que no
debe soportar pues la propia Ley arbitra el procedimiento para
que sea trasladado a quien debe soportarlo, al sujeto
destinatario titular de la capacidad económica que se pretende
gravar; pero advierte el Tribunal que lo que se traslada son los
efectos económicos de una persona sobre otra, y por ello la
incompensabilidad que no procede según el Código Orgánico
Tributario es la del propio impuesto a las ventas pues el
‘crédito fiscal’ no tiene la naturaleza jurídica de los créditos
contra el Fisco Nacional y es por ello que se prevé la
devolución (‘excepción de la excepción’) del impuesto por la
exportación de bienes muebles o prestación de servicios, a ello
debe agregarse que de conformidad con lo dispuesto en la Ley
de Impuesto sobre la Renta conforme al cual los
contribuyentes pueden imputar como elemento de costo del
bien o del servicio, el impuesto que no pueden trasladar y que
no le es reembolsable; todo ello con la finalidad de mantener la
neutralidad del impuesto a las ventas. El hecho de que el
impuesto al consumo suntuario y a las ventas al mayor
anticipado por los contribuyentes ordinarios del tributo en
referencia sea soportado por los consumidores finales de
bienes o servicios respectivos, no significa que la extinción de
la obligación tributaria a cargo del contribuyente no pueda
hacerse con anticipos de otro tributo, del impuesto sobre la
renta que conforme a las disposiciones legales y luego de
producido el hecho imponible respectivo, el Fisco Nacional
debe devolver al contribuyente.(...)
Este Órgano Jurisdiccional interpreta que el parágrafo primero
del artículo 46 del Código Orgánico Tributario debe ser objeto
de una interpretación restrictiva, habida cuenta que el
legislador dijo más de lo que quería, la compensación que no
es oponible es la que surje(sic) del propio impuesto al consumo
suntuario y a las ventas al mayor que prevé en su estructura y
traslación la figura del denominado ‘crédito fiscal’. De todo lo
expuesto se concluye que la interpretación hecha por el Fisco
Nacional en el sentido de que es improcedente la
compensación entre impuestos directos (los que por su propia
naturaleza no pueden trasladarse) e indirectos (susceptibles de
traslación por su propia naturaleza), es como afirman los
apoderados de la recurrente errónea, y por tal motivo existe
vicio en el objeto del acto recurrido.
Respecto a las afirmaciones hechas por los representantes del
Fisco Nacional relacionadas con las modificaciones en la
redacción de la norma relativa a la compensación, en el Código
Orgánico Tributario sancionado en 1982, reformado en 1992 y
1994, el Tribunal estima oportuno señalar que en ningún caso
se requiere de un pronunciamiento previo por parte de la
Administración Tributaria que reconozca el derecho al sujeto
pasivo de valerse de ella, ya que por mandato expreso del
legislador y conforme a los principios que rigen la materia la
compensación extingue las obligaciones de pleno derecho,
pero la Administración Tributaria deberá verificar la
procedencia de los extremos legales, pues de comprobar que
no se daban los requisitos de homogeneidad, liquidez y
exigibilidad exigidos por el Código Orgánico Tributario debe
formular los reparos pertinentes, efectuando las
determinaciones a que hubiere lugar. Por tal motivo se
desestiman los argumentos expuestos al respecto por los
representantes del Fisco Nacional”.
II
ARGUMENTOS DE LA REPRESENTACIÓN DEL FISCO
NACIONAL
La representación del Fisco Nacional fundamentó su apelación
en la forma siguiente:
1.- Error en la interpretación de la Ley.
En primer lugar, indicó el representante de los intereses de la
República que la sentencia apelada incurrió en error en la
interpretación de la Ley, debido a que la norma prevista en el
artículo 46 Parágrafo Primero del Código Orgánico Tributario,
establece que dicho medio de extinción de la obligación
tributaria no es oponible en el caso de los impuestos indirectos,
cuya estructura y traslación prevea la figura del denominado
crédito fiscal.
“De allí que, mal podía el sentenciador desconocer los claros
límites que para tal fin estableció el legislador, quien de
manera clara y precisa consagró una prohibición expresa de
compensar este tipo de tributos, derivado del hecho de que el
contribuyente de iure, en tal supuesto no tiene contra el Fisco
Nacional un crédito a su favor, ni una deuda propia, esto deriva
de que el aludido crédito, sólo constituye un elemento técnico
necesario para la determinación del impuesto a pagar, su
función es servir de mecanismo para deducir los referidos
créditos de los débitos fiscales, a objeto de obtener la
respectiva cuota tributaria, en cada caso en concreto; cuota
esta como se ha expresado con anterioridad, que no es más
que el resultado de sustraer de los débitos fiscales (impuesto
cobrado) el monto de los créditos fiscales (impuesto pagado),
por lo que la obligación de pago que surge en caso de que el
débito sea mayor al crédito, es una obligación por deuda ajena;
por lo cobrado a un tercero y que debe ser enterado al erario
público”.
Con base en lo anterior, afirmó que existen dos límites
específicos para oponer la compensación, uno de carácter
material, referido al supuesto de hecho que da origen a la
relación jurídico-tributaria, el cual se traduce en la necesidad
de estar en presencia de impuestos directos, y otro de carácter
formal, representado en la verificación y declaración expresa
que debe efectuar la administración tributaria acerca de la
existencia, simultaneidad, homogeneidad, liquidez, exigibilidad,
reciprocidad del crédito y procedencia de la compensación
opuesta por el contribuyente.
En este orden de ideas, indicó que, “el sentenciador al dictar el
fallo que por ésta vía se recurre, pretende a causa de un error
en la interpretación de la Ley, en contravención a lo
establecido en el Parágrafo Primero del artículo 46 del Código
Orgánico Tributario, artículos 29 y 30 de la Ley de Impuesto al
Consumo Suntuario y a las Ventas al Mayor, admite la
posibilidad de extinguir la obligación de pagar la cuota de
impuesto resultante de un período impositivo por concepto de
impuesto indirecto, con un supuesto crédito que deriva del
impuesto sobre la renta, como consecuencia de un pago en
exceso”.
Por otra parte, afirmó que de ser procedente la compensación
de los créditos que el contribuyente tiene contra el Fisco por
concepto de otros tributos, con la cuota tributaria generada por
el valor agregado que se incorpora en cualesquiera de las
etapas del circuito económico, se estaría incumpliendo,
supuestamente, con el objetivo previamente señalado “según
el cual el ICSVM grava el consumo de bienes y servicios, toda
vez que el monto total de impuesto pagado al sujeto activo
(vale decir, la sumatoria de las cuotas tributarias que se
determinan en cada una de las precitadas etapas) no se
corresponderá con la carga fiscal que en definitiva soportará el
consumidor final.”
2.- Vicio de contradicción en la sentencia recurrida.
En segundo lugar, afirmó la representante del Fisco Nacional
que la sentencia recurrida incurrió en el vicio de contradicción,
contenido en la norma prevista en el artículo 224 del Código de
Procedimiento Civil, toda vez que, “en primer término, el
sentenciador concluye que la incompensabilidad que no
procede es la del propio impuesto a las ventas, pues el crédito
fiscal no tiene la naturaleza jurídica de los créditos contra el
Fisco Nacional (ver pág. 10 sentencia) y por otra parte se
adhiere al postulado presentado por los apoderados de la
empresa recurrente en el entendido de que la imposibilidad de
compensar como lo ha sostenido ésta representación fiscal es
como afirman los apoderados de la recurrente errónea, y por
tal motivo existe vicio en el objeto del acto recurrido (ver pág.
12 sentencia). De una simple confrontación con las
afirmaciones presentadas, se denota con total claridad una
contradicción con la decisoria del fallo recurrido por medio del
cual se declara la posibilidad de compensar un impuesto
indirecto con un impuesto directo”.
Posteriormente, la representación del Fisco Nacional procedió
a desvirtuar nuevamente los alegatos de la contribuyente que
sirvieron de fundamento al recurso contencioso tributario
interpuesto.
En tal sentido, destacó la improcedencia del alegato referente
al error en la base legal debido a que de la norma dispuesta en
el artículo 46 del Código Orgánico Tributario, se infiere que, si
bien la compensación de los créditos tributarios puede ser
opuesta en cualquier momento, la misma se encuentra
condicionada, supuestamente, a un pronunciamiento de la
administración tributaria.
En este orden de ideas, indicó que la mera aceptación o
recepción por parte de la administración tributaria de la
solicitud o planilla de autoliquidación presentada por el
contribuyente, no equivale al pronunciamiento previo exigido
por el artículo 46 antes señalado, relativo a la procedencia de
la compensación opuesta, ni mucho menos puede ser
considerada la declaración de compensación presentada por el
contribuyente como una manifestación de voluntad de
necesaria y automática aceptación por parte de la
administración tributaria.
Con base en lo anterior, indicó que los efectos extintivos de la
compensación opuesta se encuentran suspendidos
supuestamente hasta la emisión del acto administrativo
contentivo de la procedencia o no de la compensación,
“obviando con ello la declaratoria de pleno derecho expresada
en el encabezamiento del artículo”.
Asimismo, indicó que el único caso en que pueden
compensarse créditos fiscales derivados de la aplicación de la
Ley de Impuesto al Consumo Suntuario y a las Ventas al
Mayor, es la devolución del impuesto como consecuencia de la
exportación de bienes muebles o prestación de servicios
(artículo 37 de la Ley), para lo cual es necesaria la autorización
previa de la administración tributaria, distinta a la declaratoria
de procedencia de la compensación dispuesta en el segundo
párrafo del artículo 46 del Código Orgánico Tributario.
Por otra parte, en cuanto a las retenciones de impuesto sobre
la renta que constituyen el crédito objeto de la compensación
opuesta por la contribuyente, afirmó que “resulta peregrino
considerar al anticipo como una cantidad líquida y exigible
independiente de una obligación principal, y mucho menos
sostener que el anticipo fue mayor que el monto del impuesto
sobre la renta a pagar, está condicionado al acto de
determinación definitiva que, de manera concluyente, arrojará
la constatación de un débito o de un crédito a favor o en contra
del contribuyente, pero que debe quedar muy claro su
inseparabilidad de la obligación principal, y que en este caso la
constituyó las retenciones practicadas por efectos de la
aplicación de la Ley de Impuesto sobre la Renta”.
En otro orden de ideas, señaló la improcedencia del alegato
relativo al vicio en el objeto del acto recurrido debido a que, de
conformidad con lo dispuesto en el tantas veces mencionado
artículo 46 del Código Orgánico Tributario, si bien no le es
dado a la administración tributaria el rechazo de la
compensación opuesta por el interesado, tomando en cuenta
criterios de conveniencia, mérito, oportunidad u otra
circunstancia no prevista por el Código Orgánico Tributario, no
es menos cierto que los efectos extintivos de dicha
compensación, en todos los casos y por imperio del referido
Código, se encuentran suspendidos hasta la emisión del acto
administrativo mediante el cual el órgano competente declare
su procedencia, luego de constatar la satisfacción de los
requisitos antes aludidos referentes a la existencia, liquidez,
exigibilidad y no prescripción de las deudas y créditos
tributarios de que se trate.
Con base en lo anterior, afirmó que la sentencia recurrida,
igualmente, incurrió en el vicio de omisión de pronunciamiento
o incongruencia negativa, toda vez que no se pronunció “sobre
estos alegatos de la administración tributaria anteriormente
señalados”.
III
ARGUMENTOS DE LOS APODERADOS DE LA
CONTRIBUYENTE
Los apoderados de la contribuyente C.A. EDITORA EL
NACIONAL, fundamentaron su contestación al escrito de
formalización a la apelación presentada por los representantes
del Fisco Nacional en base a las siguientes consideraciones:
En cuanto al error en la interpretación de la Ley, alegado por la
representación de los intereses de la República, señalaron los
apoderados de la contribuyente que no debe entenderse de la
norma contenida en el artículo 46 del Código Orgánico
Tributario que el impuesto al consumo suntuario y a las ventas
al mayor como impuesto indirecto, no pueda ser objeto de
compensación con otros impuestos como aquel que grava el
enriquecimiento, como sucede en el presente caso con el
impuesto sobre la renta, ya que distinto es la figura del crédito
fiscal utilizada en el esquema de débitos y créditos que sirven
de base para el cálculo del impuesto al consumo suntuario y a
las ventas al mayor que los contribuyentes de tal exacción
deben pagar al Fisco Nacional, y otro es el crédito fiscal o
crédito tributario entendido como aquella deuda del fisco frente
al contribuyente.
En tal sentido, indicaron que la compensación que no procede
es la de aquellos créditos utilizados en el sistema de débitos y
créditos, mediante los cuales se calcula el impuesto al
consumo suntuario y a las ventas al mayor, distintos a los
créditos de origen tributario de un contribuyente verificados por
el pago de un impuesto indebido o en exceso. Dicha
consecuencia se deriva “debido a que los créditos fiscales del
sistema de créditos y débitos fiscales del mencionado impuesto
a las ventas no pueden ser objeto de compensación porque no
está determinada la obligación tributaria y entonces no se
cumpliría con uno de los requisitos básicos de la
compensación, cual es la existencia de obligaciones
recíprocas, sino son simplemente uno de los parámetros
establecidos por el legislador para determinar un tributo”.
Por otra parte, afirmaron que en el escrito de formalización a
la apelación presentado por los apoderados del Fisco Nacional,
se incurre en “una errada interpretación y confusión entre los
conceptos de anticipo en materia de retenciones (de impuesto
sobre la renta en esta oportunidad), deuda tributaria y crédito
tributario, pues la compensación si procede en caso de haber
pagado un anticipo de impuesto, por ejemplo mediante las
retenciones que se efectúen a un determinado contribuyente,
tal y como le sucedió a nuestra representada, por el pago de
servicios de publicidad prestados, y que dicho anticipo fuese
mayor que el monto del impuesto sobre la renta definitivo a
pagar al final del ejercicio fiscal, o en caso de que, por ejemplo,
dicho anticipo fuese mayor en virtud de la no sujeción al
impuesto sobre la renta por parte de dicho contribuyente, caso
en el cual las retenciones quedan a favor del mismo, tal y como
le sucedió a nuestra representada”.
En cuanto al vicio de contradicción a que hace referencia la
representación del Fisco Nacional, expresaron que la
administración tributaria equivoca su apreciación sobre la
lectura de la sentencia recurrida, “pues de la lectura de las
páginas 10 y 11 de la mencionada decisión judicial se
desprende una clara explicación que desarrolla la
sentenciadora en cuanto a los significados de los vocablos
‘crédito fiscal’ y ‘anticipo’, explicando que el crédito fiscal del
impuesto a las Ventas al Mayor (en lo adelante IVM) cumple
una función neutralizante de efecto cascada propio de
impuestos indirectos como el IVM, permitiendo que el efecto
económico que dicho impuesto genera a lo largo de toda la
cadena de comercialización no afecte al consumidor final
(sujeto incidido, de ipso) en este tipo de estructuras
impositivas, y para ello bien trae la recurrida a colación el
ejemplo de los exportadores, quienes al verse imposibilitados
en sus operaciones para cargar el IVM que genera su
operación comercial, se encuentra con una ‘excepción a la
excepción’ que la misma ley del IVM y el Código Orgánico
Tributario traen frente a los casos del ‘crédito fiscal IVM’
(distinto al ‘crédito tributario’ contra el Fisco), permitiéndole a
los exportadores recuperar e incluso compensar directamente
tales créditos IVM con otras deudas tributarias, simplemente
por el hecho de que sus operaciones no se encuentran
afectadas, dada su naturaleza, por ‘débitos fiscales IVM’ contra
los cuales enfrentar los ‘créditos fiscales IVM’ originados, por
ejemplo, por la adquisición de bienes y servicios en que el
exportador incurre por sus actividades productoras”.
En cuanto al vicio de fondo alegado por los apoderados del
Fisco Nacional, por medio del cual concluyen nuevamente en
la improcedencia del vicio en el objeto del acto recurrido en
primera oportunidad por la contribuyente, indicaron los
apoderados judiciales de C.A. EDITORA EL NACIONAL, que
una de las características importantes de la compensación es
que dicho medio de extinción de las obligaciones tributarias
opera de pleno derecho, sin que exista un pronunciamiento
previo de la administración tributaria en cuanto a su
procedencia, salvo en los casos de las exportaciones de
bienes muebles o prestaciones de servicios.
En tal sentido, afirmaron que después de opuesta la
compensación, la administración tributaria puede verificar si es
procedente o no, pero después de haber sido opuesta, en
virtud de la facultad de verificación que tiene la administración
tributaria en todo momento a los fines de verificar la existencia
de la liquidez y exigibilidad, “más no de someter al
contribuyente a una fiscalización general, oponiéndose de esta
manera a la compensación”.
Por último, en cuanto al vicio en el objeto planteado por la
representación del Fisco Nacional, con el vicio de omisión de
pronunciamiento o incongruencia negativa en la sentencia
recurrida, los apoderados de la contribuyente dieron por
reproducidos los fundamentos desarrollados en los puntos
anteriores. No obstante, indicaron que el denunciado vicio de
incongruencia negativa, en cuanto al punto sobre la necesidad
de autorización expresa de la administración tributaria para la
procedencia de la compensación de obligaciones recíprocas en
materia tributaria, sí es analizado en la decisión apelada “sólo
que lo hace en contraria posición a las pretensiones del Fisco
Nacional frente a los derechos de nuestra representada en
este caso, por lo que tal vicio no se verifica en esta oportunidad
en contra de la decisión apelada”.
IV
MOTIVACIÓN PARA DECIDIR
Corresponde a esta Sala pronunciarse acerca de la apelación
interpuesta por la representante del Fisco Nacional contra la
sentencia dictada por el Tribunal Superior Cuarto de lo
Contencioso Tributario, por medio de la cual se declaró con
lugar el recurso contencioso tributario interpuesto por la
contribuyente C.A. EDITORA EL NACIONAL contra la
Providencia Administrativa N° MH-SENIAT-GCE-97-1902,
dictada en fecha 6 de junio de 1997, que declaró improcedente
la compensación parcial de los créditos fiscales líquidos y
exigibles por concepto de retenciones de impuesto sobre la
renta pagadas en exceso durante el ejercicio fiscal
comprendido entre el 01-12-1995 y el 30-11-1996, con deudas
líquidas y exigibles del impuesto al consumo suntuario y a las
ventas al mayor correspondiente al período de imposición del
mes de febrero de 1997.
En tal sentido, observa esta Sala que la cuestión planteada se
circunscribe a determinar si es posible oponer la compensación
como medio de extinción de la obligación tributaria, entre
créditos provenientes de retenciones pagadas en exceso de
impuesto sobre la renta, con deudas líquidas y exigibles del
impuesto al consumo suntuario y a las ventas al mayor.
Igualmente, corresponde determinar si la compensación
tributaria opera de pleno derecho, es decir, sin la aprobación
previa de la administración tributaria, o si por el contrario es
necesario el pronunciamiento previo del órgano administrativo.
En cuanto al primer planteamiento, la representación del Fisco
Nacional indicó que la recurrida incurrió en error en la
interpretación de la Ley debido a que la norma prevista en el
artículo 46 Parágrafo Primero del Código Orgánico Tributario,
establece que la compensación no es oponible en el caso de
los impuestos indirectos, cuya estructura y traslación prevea la
figura del denominado crédito fiscal.
En contraposición a lo anterior, los apoderados de la
contribuyente indicaron que no debe entenderse de la norma
contenida en el artículo 46 del citado Código, que el impuesto
al consumo suntuario y a las ventas al mayor no pueda ser
objeto de compensación con otros impuestos como aquel que
grava el enriquecimiento. En tal sentido, afirmaron que la
compensación que no procede, es la de aquellos créditos
utilizados en el sistema de débitos y créditos mediante los
cuales se calcula el impuesto al consumo suntuario y a las
ventas al mayor, distintos a los créditos de origen tributario de
un contribuyente, verificados por el pago de un impuesto
indebido o en exceso.
En cuanto al segundo planteamiento, el representante de la
República indicó que si bien la compensación puede ser
opuesta en cualquier momento, la misma se encuentra
condicionada a un pronunciamiento previo de la administración
tributaria, razón por la cual no puede ser considerada la
declaración de compensación presentada por el contribuyente
como una manifestación de voluntad de necesaria y
automática aceptación por parte de la administración tributaria.
En relación con dicho planteamiento, los representantes de la
contribuyente indicaron que una de las características
importantes de la compensación es que opera de pleno
derecho, sin que exista un pronunciamiento previo de la
administración tributaria en cuanto a su procedencia, salvo en
los casos de las exportaciones de bienes muebles o
prestaciones de servicios.
Vistas las posiciones anteriormente descritas, esta Sala
observa:
La compensación es un modo de extinción común a todas las
obligaciones que se presenta cuando dos personas
recíprocamente deudoras poseen entre sí deudas
homogéneas, líquidas y exigibles. A tales efectos, el Código
Civil en la norma prevista en el artículo 1.331, dispone lo que a
continuación se transcribe:
“Artículo 1.331.- Cuando dos personas son recíprocamente
deudoras, se verifica entre ellas una compensación que
extingue las dos deudas, del modo y en los casos siguientes.”
Por medio de la compensación, ambas personas se liberan
total o parcialmente de la obligación que tenían, evitando de
esta manera el traslado inútil de dinero, riesgos y gastos.
Asimismo, los requisitos de la compensación legal reconocidos
por la doctrina, son los que a continuación se describen:
1.- Simultaneidad: las obligaciones deben existir al mismo
tiempo, aunque hayan nacido en momentos diferentes.
2.- Homogeneidad: la deuda que se da en pago debe tener el
mismo objeto u objeto similar a la deuda que se desea
extinguir. En definitiva, existe homogeneidad cuando las
deudas tienen igualmente por objeto una suma de dinero, pero
cuando no se trata de dinero, las deudas deben comprender
cantidades determinadas de cosas de una misma especie.
3.- Liquidez: El crédito a compensar debe ser líquido, es decir,
se debe saber sin duda lo que se debe y la cantidad debida.
4.- Exigibilidad: se excluyen las obligaciones sometidas a
término y a condición suspensiva, salvo las excepciones
previstas en la Ley.
5.- Reciprocidad: las personas entre las cuales se da la
compensación, deben ser recíprocamente acreedoras o
deudoras una de otra.
Asimismo, en la norma prevista en el artículo 1335 del Código
Civil, se encuentran dispuestas las restricciones a la
compensación en general. Dicha norma dispone lo siguiente:
“Artículo 1335.- La compensación se efectúa cualesquiera que
sean las causas de una u otra deuda, excepto en los siguientes
casos:
1º Cuando se trata de la demanda de restitución de la cosa de
que ha sido injustamente despojado al propietario.
2º Cuando se trata de la demanda de la restitución de un
depósito o de un comodato.
3º Cuando se trata de un crédito inembargable.
4º Cuando el deudor ha renunciado previamente a la
compensación.
Tampoco se admite la compensación respecto de los que se
deba a la Nación, a los Estados o a sus Secciones por
impuestos o contribuciones”.
Vistas las consideraciones generales anteriormente expuestas
sobre la figura de la compensación como modo de extinción
común de las obligaciones, pasa de seguidas esta Sala a
revisar dicha institución, circunscribiéndose al ámbito de la
obligación tributaria.
En tal sentido, la compensación es aquel medio de extinción de
la obligación tributaria en que el contribuyente y el Fisco son
recíprocamente deudores y titulares de deudas líquidas,
homogéneas, exigibles y no prescritas.
En el mismo orden de ideas, el Modelo de Código Tributario
para América Latina, definió la compensación en la norma
prevista en el artículo 48, afirmando que puede operar de oficio
o a petición de parte, entre los créditos del fisco por tributos
con los créditos que el sujeto pasivo tenga por el mismo
concepto. En términos similares, se encuentra consagrado
dicho modo de extinción de la obligación tributaria en la
legislación venezolana, tal como se verificará infra.
Por último, se observa que el efecto de la compensación es la
extinción de ambas deudas como resultado de una
determinación tributaria, hasta el importe de la menor,
quedando subsistente la mayor por el saldo restante.
Planteado lo anterior, procede esta Sala a resolver el caso de
autos, tomando en consideración que la representación del
Fisco Nacional alega que la compensación opuesta por la
contribuyente es improcedente, según lo dispuesto en la norma
prevista en el artículo 46 Parágrafo Primero del Código
Orgánico Tributario, por haber sido opuesta entre retenciones
pagadas en exceso por concepto de impuesto sobre la renta,
con deudas provenientes del impuesto al consumo suntuario y
a las ventas al mayor. A tal efecto, esta Sala observa lo
siguiente:
Dicho medio de extinción de la obligación tributaria se
encuentra consagrado en la norma prevista en el artículo 46
del Código Orgánico Tributario, en los términos siguientes:
“Artículo 46.- La compensación extingue de pleno derecho y
hasta su concurrencia, los créditos no prescritos, líquidos y
exigibles del contribuyente por concepto de tributos, así como
de intereses, multas, costas procesales y cualesquiera otros
accesorios, con las deudas tributarias por los mismos
conceptos, igualmente líquidas, exigibles y no prescritas,
comenzando por los más antiguos, aunque provengan de
distintos tributos y accesorios, siempre que se trate del mismo
sujeto activo.
El contribuyente o su cesionario podrán oponer la
compensación en cualquier momento en que deban cumplir
con la obligación de pagar tributos, intereses, multas, costas y
otros accesorios o frente a cualquier reclamación
administrativa o judicial de los mismos. En tales casos, la
Administración Tributaria deberá proceder a verificar la
existencia, liquidez y exigibilidad de dicho crédito y a
pronunciarse sobre la procedencia o no de la compensación
opuesta. Por su parte, la Administración podrá oponer la
compensación, frente al contribuyente, responsable o
cesionario, a fin de extinguir, bajo las mismas condiciones,
cualesquiera créditos invocados por ellos. En ambos casos,
contra la decisión administrativa, procederán los recursos
consagrados en este Código.
Parágrafo Primero.- La compensación no será oponible salvo
disposición en contrario, en los impuestos indirectos, cuya
estructura y traslación prevea la figura del denominado crédito
fiscal.
Parágrafo Segundo.- En los casos de impuestos indirectos,
cuyas normas prevean la devolución del impuesto, por la
exportación de bienes muebles o prestación de servicios, la
compensación sólo será oponible previa autorización de la
Administración Tributaria”. (Resaltado de esta Sala).
De la norma antes transcrita, se evidencia que la
compensación de la obligación tributaria constituye una
compensación legal entre el sujeto activo y el sujeto pasivo
recíprocamente deudores. Asimismo, según la norma in
commento, las deudas además deben ser líquidas, exigibles y
no prescritas.
En este sentido, la Sala Político-Administrativa Especial
Tributaria de la entonces Corte Suprema de Justicia, en
decisión de fecha 17 de enero de 1996 (Caso: Banco
Hipotecario Unido, S.A.), se pronunció sobre este particular, en
los términos siguientes:
“La compensación de créditos fiscales procede, bien a petición
de parte o de oficio, cuando se dan las circunstancias
siguientes:
1.- La existencia de créditos líquidos y exigibles a favor del
contribuyente, por concepto de tributos o sus accesorios.
2.- La existencia de deudas tributarias, igualmente líquidas y
exigibles.
3.- Que tanto los créditos fiscales como las deudas, de igual
naturaleza, provengan de períodos no prescritos.
4.- Que el sujeto activo, de la relación Jurídico Tributaria, sea
el mismo, aún cuando las cantidades a compensarse
correspondan a distintos tributos.
Igualmente dispone la norma in commento que son
compensables los créditos por tributos con los créditos
provenientes de multas firmes”.
Así, observa esta Sala que no es de reciente data la
problemática existente relativa a la naturaleza de la
compensación y a sus modos de procedencia. Es por ello, que
se deben puntualizar las soluciones a ser adoptadas a la
controversia planteada, a los efectos de delimitar el alcance y
contenido de la norma prevista en el artículo 46 del Código
Orgánico Tributario.
De esta manera, corresponde a esta Sala pronunciarse sobre
la procedencia de la compensación en el impuesto al consumo
suntuario y a las ventas al mayor.
En tal sentido, es de acotar que el referido tributo constituye un
impuesto de tipo valor agregado y, a su vez, un impuesto
indirecto.
Ahora bien, tal como señala el tratadista Fernando Sainz de
Bujanda (Lecciones de Derecho Financiero. Décima Edición,
sección de publicaciones de la Facultad de Derecho, Madrid,
1980, pág. 177), se está en presencia de impuestos directos,
“cuando la norma jurídica tributaria establece la obligación del
pago del impuesto a cargo de una determinada persona, sin
conceder a ésta un derecho legal a resarcirse, a cargo de otra
persona que no forme parte del círculo de obligados en la
relación jurídica tributaria, de la suma pagada por la primera al
ente público acreedor”, a su vez, el impuesto es indirecto,
“cuando la norma jurídica tributaria concede facultades al
sujeto pasivo del impuesto para obtener de otra persona, que
no forme parte del círculo de obligados en la relación jurídica
tributaria, el reembolso del impuesto pagado al ente público
acreedor”.
Así las cosas, la Sala Constitucional de este Tribunal Supremo
de Justicia, en decisión de fecha 21 de noviembre de 2000,
caso: Heberto Contreras Cuenca, ha delimitado la naturaleza
del impuesto de tipo valor agregado, por lo cual, esta Sala cita
in extenso la doctrina judicial contenida en dicho fallo:
“(...)el referido tributo es un impuesto “indirecto”, “real”,
“objetivo” e “instantáneo”, creado para gravar la enajenación de
bienes muebles, la prestación de servicios y la importación de
bienes y servicios, aplicable en todas las etapas del circuito
económico y que opera bajo el sistema de crédito y débito
fiscal.
En lo que se refiere al sistema de crédito y débito fiscal, estima
esta Sala Constitucional que los mismos constituyen el
fundamento para la determinación de la cuota tributaria del
impuesto al valor agregado. En efecto, dicha cuota está
conformada por la cantidad resultante de la compensación
entre los créditos y débitos fiscales de un determinado agente
económico dentro de un período fiscal.
Así las cosas, el crédito fiscal constituye el importe soportado
por el sujeto pasivo previsto en la ley al adquirir bienes o
servicios gravados; por su parte, el débito fiscal se configura
por el impuesto retenido por dicho contribuyente al efectuar la
venta de bienes o prestación de servicios gravados, evitando
de esta manera la acumulación de pagos de impuestos sobre
impuestos (impuesto en cascada), dado que se grava
unitariamente un mismo bien o servicio, a pesar de que la
liquidación y recaudación del impuesto indirecto de tipo valor
agregado, se verifica a través de diversas etapas del proceso
de producción y comercialización.
En el mismo orden de ideas, esta Sala Constitucional observa
que el impuesto al valor agregado, además de ser clasificado
como impuesto indirecto, real, objetivo e instantáneo, posee la
característica de ser un tributo de naturaleza plurifásica no
acumulativa, esto es, que grava todas las ventas y
prestaciones de servicios efectuadas en todas y cada una de
las etapas del proceso de producción y distribución, sin que el
monto del tributo pagado por los sujetos pasivos del impuesto
incida sobre el costo del producto.
En tal sentido, el impuesto soportado en cada estadio o fase
del proceso, admite una deducción financiera o real del
impuesto pagado en estadios o fases anteriores del proceso de
producción y comercialización resultando en consecuencia la
cuota tributaria, entendida ésta como la diferencia existente
para el mismo período, entre crédito y débito fiscal, es decir,
entre el monto soportado y el monto retenido, tal y como se
señalara anteriormente.
Dicha cuota tributaria, comporta el efectivo importe dinerario
otorgado al Fisco Nacional, por el cumplimiento de los hechos
imponibles previstos en la Ley, la cual está derivada de una
simple operación aritmética que puede dar como resultado una
cantidad positiva o negativa, es decir, cuando el sujeto pasivo
tenga en su haber más créditos fiscales que débitos fiscales
dicho resultado será negativo, en consecuencia, el sujeto
pasivo podrá trasladar a los períodos fiscales inmediatos el
importe no compensado. Por el contrario, en el segundo
supuesto, cuando dicho sujeto pasivo tenga más débitos
fiscales que créditos fiscales, el producto de esa compensación
constituirá el pago efectivo y definitivo por el período fiscal
transcurrido al Fisco Nacional”.
De la sentencia anteriormente transcrita y del contenido del
artículo 29 de la Ley de Impuesto al Consumo Suntuario y a las
Ventas al Mayor, se evidencia que el crédito fiscal actúa como
un elemento técnico necesario para la determinación de la
cuota tributaria, la cual constituye el efectivo importe adeudado
por el contribuyente al Fisco Nacional.
En tal virtud, el crédito fiscal dentro de la estructura del
impuesto indirecto, plurifásico no acumulativo, actúa como
deducción o sustracción de los débitos fiscales a los que la
propia Ley se refiere.
Establecido lo anterior, el Parágrafo Primero del artículo 46 del
Código Orgánico Tributario, en ningún momento distingue
sobre la naturaleza jurídica del crédito fiscal al cual hace
referencia, sino que alude al crédito fiscal contenido en la
estructura del impuesto indirecto.
En este sentido, cuando la sentencia recurrida argumenta, “que
el parágrafo primero del artículo 46 del Código Orgánico
Tributario debe ser objeto de una interpretación restrictiva,
habida cuenta que el legislador dijo más de lo que quería, la
compensación que no es oponible es la que surge del propio
impuesto al consumo suntuario y a las ventas al mayor que
prevé en su estructura y traslación la figura del denominado
‘crédito fiscal’” (subrayado de esta Sala), incurre en una
errónea interpretación del dispositivo normativo en estudio, ya
que tal como se estableció anteriormente, la compensación
que se produce dentro de la estructura del impuesto al
consumo suntuario y a las ventas al mayor, es una
determinación de la cuota tributaria, por lo que mal podría
compensarse el excedente -sea este crédito o débito fiscal-
con cualquier otro tributo, dada la imposibilidad material y
jurídica de la misma.
Asimismo, observa esta Sala que no debe presumirse con
ligereza que el legislador no utilizó la mejor técnica legislativa
al momento de redactar el controvertido dispositivo normativo.
Es por ello que la interpretación realizada por el a quo,
desvirtúa el contenido de la norma, pretendiendo restringir el
ámbito de aplicación de la misma so pretexto de “que el
legislador dijo más de lo que quería”.
En este orden de ideas, cuando de la determinación de la
cuota tributaria resulte un crédito fiscal, el contribuyente estará
habilitado para trasladar dicho excedente al período de
imposición siguiente; por el contrario, cuando de la
determinación surja un débito fiscal, el contribuyente tendrá la
obligación de enterar dicho importe dinerario al Fisco Nacional,
sin la posibilidad de resarcirse ni de oponer la compensación
del excedente resultante, sea débito o sea crédito, con tributo
alguno, todo de conformidad con el Parágrafo Primero del
artículo 46 del Código Orgánico Tributario y con las normas
previstas en los artículos 30 y 36 de la Ley de Impuesto al
Consumo Suntuario y a las Ventas al Mayor aplicable rationae
temporis.
Lo anterior es así, debido a que la norma prevista en el artículo
46 del Código Orgánico Tributario, no distingue entre un crédito
fiscal como elemento técnico necesario para la determinación
del impuesto o como un crédito tributario a favor del
contribuyente, sino por el contrario sujeta la imposibilidad de la
compensación, en tanto y en cuanto, el impuesto indirecto
prevea en su estructura y traslación la figura del denominado
crédito fiscal, como es el caso de autos.
Con base en lo anterior, esta Sala observa que la
compensación parcial de los créditos fiscales líquidos y
exigibles opuesta por la contribuyente C.A. EDITORA EL
NACIONAL por concepto de retenciones de impuesto sobre la
renta pagadas en exceso por la cantidad de doscientos
cuarenta y tres millones trescientos quince mil doscientos
cuarenta y cuatro bolívares sin céntimos (Bs. 243.315.244,oo)
durante el ejercicio fiscal comprendido entre el 01-12-1995 y el
30-11-1996 con deudas líquidas y exigibles del impuesto al
consumo suntuario y a las ventas al mayor por la cantidad de
ciento treinta y cinco millones quinientos cincuenta y siete mil
doscientos veinticuatro bolívares sin céntimos (Bs.
135.557.224,oo), correspondiente al período de imposición del
mes de febrero de 1997, resulta a todas luces improcedente.
Con fundamento en el pronunciamiento anterior, resulta
forzoso para esta Sala revocar la sentencia dictada por el
Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario en fecha
21 de diciembre de 1998, en la cual declaró con lugar el
recurso contencioso tributario interpuesto por la contribuyente
C.A. DISTRIBUIDORA EL NACIONAL, contra la Providencia
Administrativa N° MH-SENIAT-GCE-97-1902, de fecha 6 de
junio de 1997, emanada de la Gerencia de Tributos Internos de
Contribuyentes Especiales de la Región Capital del Servicio
Nacional Integrado de Administración Tributaria (SENIAT), por
haber incurrido en una errónea interpretación de la Ley. Así se
decide.
Resuelto lo anterior, esta Sala considera inoficioso
pronunciarse sobre el segundo planteamiento explanado en el
inicio de la motivación del presente fallo, referente a la forma
como opera la compensación como modo de extinción de la
obligación tributaria. Así se declara.
V
DECISIÓN
En virtud de lo anteriormente expuesto, este Tribunal Supremo
de Justicia en Sala Político-Administrativa, administrando
justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y
por autoridad de la Ley, decide en los siguientes términos:
1.- CON LUGAR la apelación interpuesta por la ciudadana
ROSALINDA VAN EPS CASTILLO, actuando en su carácter de
representante del Fisco Nacional, contra la sentencia dictada
por el Tribunal Superior Cuarto de lo Contencioso Tributario, en
fecha 21 de diciembre de 1998, número 570, por medio de la
cual se declaró con lugar el recurso contencioso tributario,
ejercido por los abogados RODOLFO PLAZ ABREU y
ALEJANDRO RAMIREZ van der VELDE, actuando en su
carácter de apoderados judiciales de la C.A. EDITORA EL
NACIONAL, contra el acto administrativo contenido en la
Providencia Administrativa N° MH-SENIAT-GCE-97-1902, de
fecha 6 de junio de 1997, emanada de la Gerencia de Tributos
Internos de Contribuyentes Especiales de la Región Capital del
Servicio Nacional Integrado de Administración Tributaria
(SENIAT), mediante la cual se declara improcedente la
compensación parcial de los créditos fiscales líquidos y
exigibles, por concepto de retenciones de impuesto sobre la
renta pagadas en exceso por la cantidad de doscientos
cuarenta y tres millones trescientos quince mil doscientos
cuarenta y cuatro bolívares sin céntimos (Bs. 243.315.244,oo),
durante el ejercicio fiscal comprendido entre el 01-12-1995 y el
30-11-1996 con deudas líquidas y exigibles del impuesto al
consumo suntuario y a las ventas al mayor por la cantidad de
ciento treinta y cinco millones quinientos cincuenta y siete mil
doscientos veinticuatro bolívares sin céntimos (Bs.
135.557.224,oo), correspondiente al período de imposición del
mes de febrero de 1997.
2.- REVOCA la sentencia dictada por el Tribunal Superior
Cuarto de lo Contencioso Tributario en fecha 21 de diciembre
de 1998, signada con el número 570.
3.- IMPROCEDENTE la compensación parcial opuesta por la
contribuyente de los créditos fiscales líquidos y exigibles, por
concepto de retenciones de impuesto sobre la renta pagadas
en exceso por la cantidad de doscientos cuarenta y tres
millones trescientos quince mil doscientos cuarenta y cuatro
bolívares sin céntimos (Bs. 243.315.244,oo), durante el
ejercicio fiscal comprendido entre el 01-12-1995 y el 30-11-96,
con deudas líquidas y exigibles del impuesto al consumo
suntuario y a las ventas al mayor por la cantidad de ciento
treinta y cinco millones quinientos cincuenta y siete mil
doscientos veinticuatro bolívares sin céntimos (Bs.
135.557.224,oo), correspondiente al período de imposición del
mes de febrero de 1997, en consecuencia;
4.- ORDENA a la administración tributaria, efectuar la
determinación y liquidación del pago de impuesto a que
hubiere lugar a cargo de la contribuyente C.A. EDITORA EL
NACIONAL, como consecuencia de la presente decisión.
Publíquese, regístrese y comuníquese. Cúmplase lo ordenado.
Dada, firmada y sellada en el Salón de Despacho de la Sala
Político-Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia, en
Caracas, a los veintinueve (29) días del mes de marzo de dos
mil uno(2001). Años: 190º de la Independencia y 142º de la
Federación.
El Presidente,
LEVIS IGNACIO ZERPA
El Vicepresidente-Ponente,
HADEL MOSTAFÁ PAOLINI
Magistrada,
YOLANDA JAIMES GUERRERO
La Secretaria,
ANAÍS MEJÍA CALZADILLA
Exp. Nro. 15.666
Sent. Nº 00559
En tres (03) de abril del año dos mil uno, se publicó y registró
la anterior sentencia bajo el Nº 00559.
5. PRESCRIPCION EXTINTIVA
Siendo la obligación una relacion jurídico temporal, el drecho del
acreedor para exigir al deudor su cumplimiento no es indefinido, eterno; llega
un momento en que se pierde ese derecho, que de otro modo mantedria en
permanente incertidumbre al obligado. Este es el fundamento de la
prescripción, como modo extintivo de las obligaciones.
5.1. CONDICIONES DE PROCEDENCIA
En general, la doctrina admite tres condiciones fundamentales:
Inercia del acreedor.
Es la situación en la cual el acreedor, teniendo la necesidad
de exigir el cumplimiento al deudor y la posibilidad efectiva de ejercer
la acción para obtener ese cumplimiento, no ejecuta dicha acción.
La doctrina señala tres requisitos integrantes de la inercia del
acreedor:
a. La necesidad de exigir el cumplimiento o de ejercer la acción.
b. Posibilidad de ejercer la acción
c. No ejercicio de la acción
Transcurso del tiempo fijado por la ley
El tiempo necesario para la prescripción deber ser siempre
fijado por la ley, pues si lo fuese por el Juez o por las partes no
estaríamos en presencia de una prescripción sino de un lapso de
tiempo.
La doctrina y la legislación acostumbran clasificar a la
prescripción en las llamadas prescripciones ordinaria, también
denominadas prescripciones largas u ordinarias se clasifican a su
vez según el carácter real o personal de la acción.
Invocación por parte del interesado.
En otras palabras, la prescripción no opera de pleno derecho,
sino que tiene que ser alegada por el interesado, el legislador deja a
conciencia del interesado la decisión de esgrimir la prescripción.
5.2. COMPUTO DEL LAPSO DE PRESCRIPCION
Se computan desde cuando la obligación es exigible. Las
obligaciones puras desde que se contraen; si son a plazo desde el
vencimiento de éste; en las condicionales desde que se cumple el
evento. Las de no hacer desde cuando se realiza el hecho contrario
abstención.
Los plazos de prescripción son los siguientes: las acciones
personales a los 10 años; las reales a los 20.
Las prescripciones extraordinarias o prescripciones breves
Corresponden a otras acciones, especialmente mencionadas y son:
a los 3 años:
a. Las obligaciones de pagar los atrasos del precio de los
arrendamientos, de las intereses de cantidades que los
produzcan y en general de todo lo que deba pagarse por
años o por plazos periódicos mas cortos.
b. La obligación de los abogados, procuradores patrocinantes y
demás defensores, de dar cuenta de los papeles o asuntos
en que hubiesen intervenido.
Prescripciones breves
Se denominan asi a los lapsos de prescripción menores a los
10 años que el legislador establece para algunas acciones
personales. Estas son de 3 años y otras de 2 años.
Artículo 1.980.- Se prescribe por tres años la obligación de
pagar los atrasos del precio de los arrendamientos, de los intereses
de las cantidades que los devenguen, y en general, de todo cuanto
deba pagarse por años o por plazos periódicos más cortos.
Prescriben por 3 años: Artículo 1.981.- Los abogados,
procuradores, patrocinantes y demás defensores quedan libres de la
obligación de dar cuenta de los papeles o asuntos en que hubiesen
intervenido, tres años después de terminados éstos, o de que
aquéllos hayan dejado de intervenir en dichos asuntos; pero puede
deferirse juramento a las personas comprendidas en este artículo,
para que digan si retienen los papeles o saben dónde se encuentran.
Prescriben por 2 años: Artículo 1.982.- Se prescribe por dos
años la obligación de pagar:
1º.- Las pensiones alimenticias atrasadas.
2º.- A los abogados, a los procuradores, y a toda clase de curiales,
sus honorarios, derechos, salarios y gastos.
El tiempo para estas prescripciones corre desde que haya concluido
el proceso por sentencia o conciliación de las partes, o desde la
cesación de los poderes del Procurador, o desde que el abogado
haya cesado en su ministerio.
En cuanto a los pleitos no terminados, el tiempo será de cinco años
desde que se hayan devengado los derechos, honorarios, salarios y
gastos.
3º.- A los registradores, los derechos de los instrumentos que
autorizaren, corriendo el tiempo para la prescripción desde el día del
otorgamiento.
4º.- A los agentes de negocios, sus salarios; y corre el tiempo desde
que los hayan devengado.
5º.- A los médicos, cirujanos, boticarios y demás que ejercen la
profesión de curar, sus visitas, operaciones y medicamentos;
corriendo el tiempo desde el suministro de éstos o desde que se
hayan hecho aquéllas.
6º.- A los profesores, maestros y repetidores de ciencias, letras y
artes, sus asignaciones.
7º.- A los ingenieros, arquitectos, agrimensores y liquidadores, sus
honorarios; contándose los dos años desde la conclusión de sus
trabajos.
8º.- A los dueños de casas de pensión, o de educación e instrucción
de toda especie, el precio de la pensión de sus pensionistas,
alumnos o aprendices.
9º.- A los comerciantes, el precio de las mercancías que vendan a
personas que no sean comerciantes.
10º.- A los Jueces, secretarios, escribientes y alguaciles de los
Tribunales, los derechos arancelarios que devenguen en el ejercicio
de sus funciones; contándose los dos años desde la ejecución del
acto que haya causado el derecho.
11º.- A los sirvientes, domésticos, jornaleros y oficiales mecánicos, el
precio de sus salarios, jornales o trabajo.
12º.- A los posaderos y hoteleros, por la comida y habitación que
hayan dado.
JURISPRUDENCIA
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
PODER JUDICIAL
Juzgado Décimo Segundo de Municipio de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas Caracas, veinticinco (25) de enero de dos mil once (2.011) 200º y 151º
ASUNTO: AP31-V-2009-003225
PARTE DEMANDANTE: ALFONSO RAMOS PARRA, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad N° 10.114.805.
APODERADOS JUDICIALES DE LA PARTE DEMANDANTE: PURA MARITZA MANZO, abogada en ejercicio, inscrita en el IPSA bajo el N° 23.224.-
PARTE DEMANDADA: INVERSIONEA ACAPULCO CA., inscrita ante el Registro Mercantil I, de la Circunscripción Judicial del Distrito Federal y Estado Miranda, en fecha 04 de marzo de 1982, bajo el N° 40, Tomo 23-A Pro, representadas por sus Directores Hernán Polania Vega y/o Mario Corraro Bucci.
DEFENSOR JUDICIAL DE LA PARTE DEMANDADA: Ciudadano MARCOS COLAN, abogado en ejercicio e inscrito en el Inpreabogado bajo el N° 36.039.-
MOTIVO: PRESCRIPCIÓN EXTINTIVA SENTENCIA: DEFEINITIVA
IBREVE RESEÑA DE LOS ACONTECIMIENTOS-
Se inició la presente controversia mediante libelo de demanda presentado por ante la Unidad de Recepción y Distribución de Documentos de este Circuito Judicial (U.R.D.D), en fecha 28 de septiembre de 2009, por la abogada PURA MARITZA MANZO, inscrita en el IPSA bajo el N° 23.224, en su carácter de apoderada judicial del ciudadano ALFONSO RAMOS PARRA, antes identifica, contra la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA., por PRESCRIPCIÓN EXTINTIVA.
En tal virtud la parte actora alega en su escrito de demanda, que consta de documento protocolizado por ante la Oficina Subalterna del Primer Circuito del Municipio Sucre del Estado Miranda, de fecha 07 de junio de 1984, anotado bajo el N° 30, Tomo 23, Protocolo 1° que su representado ALFONSO RAMOS PARRA, casado para la época con la ciudadana MARIELA MARQUEZ, actualmente divorciados adquirieron de la compañía INVERSIONES ACAPULCO, CA., un apartamento destinado a vivienda ubicado en RESIDENCIAS ACAPULCO, piso 1° apartamento 1-A, ubicado en la Calle dos (02) parcela A14-10 de la Urbanización La Urbina Norte, jurisdicción del Municipio Petare del Distrito Sucre del Estado Miranda, que el precio de venta del referido inmueble fue por la cantidad de SEISCIENTOS DIECIOCHO MIL BOLÍVARES (Bs. 618.000.00) lo que actualmente serían SEISCIENTOS DIECIOCHO BOLÍVARES FUERTES (BsF. 618.00), que en dicho documento de venta se estipuló que su representado debía pagar la cantidad de VEINTINUEVE MIL BOLÍAVRES (Bs. 29.000.00) actualmente VEINTINUEVE BOLÍVARES (Bs. 29.00), mediante el pago de cuotas anuales y sucesivas a la fecha de protocolización del documento de venta cada una de DIECISIETE MIL CIENTO CINCUENTA Y NUEVE BOLÍVARES FUERTES CON 25/100 (Bs. 17.159.25), actualmente DIECISIETE BOLÍVARES FUERTES CON 16/100, (17.16), y a los fines de garantizar la deuda que se asumió a la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO, CA., se constituyo hipoteca especial de segundo grado hasta por la cantidad de TREINTA Y NUEVE MIL CIENTO CINCUENTA BOLIVARES (BS.39.150,00)hoy por efecto de la reconversión monetaria TREINTA Y NUEVE CON QUINCE CENTIMOS(BsF. 39.15) sobre el apartamento señalado.
Señala el actor que los ciudadanos ALFONSO RAMOS PARRA y MARIELA MARQUEZ DE RAMOS, se divorciaron y que el apartamento antes mencionado le fue adjudicado al ciudadano ALFONSO RAMOS PARRA, según consta de la sentencia de divorcio que anexo a la demanda. Que en el documento registrado por ante la Oficina Subalterna del Primer Circuito del Municipio Sucre del Estado Miranda, de fecha 07 de junio de 1984, anotado bajo el N° 30, Tomo 23, Protocolo 1° ante la Oficina, se asumieron dos obligaciones contractuales, la primera de las obligaciones corresponde al préstamo otorgado por CENTRAL ENTIDAD DE AHORRO y PRESTAMO, y la Segunda de las Obligaciones corresponde a la acreencia por concepto de diferencial de la venta del inmueble identificado y que a su vez fue garantizada con Hipoteca Especial de Segundo grado a favor de la sociedad mercantil INVERSIONES CAPULCO CA., dejando establecido que la primera de las obligaciones asumidas se encuentra debidamente cancelada.
Asimismo señala la actora, que actualmente pesa sobre el inmueble supra identificado ampliamente Hipoteca Especial de Segundo Grado, constituida a favor de la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA., inscrita por ante el Registro Mercantil I, de la Circunscripción Judicial del Distrito Federal y Estado Miranda, el 04 de marzo de 1982 bajo el N° 40, Tomo 23-A Pro.
En este sentido, señala el actor de que la obligación principal se encuentra debidamente prescrita por haber transcurrido el plazo concedido en la Ley y estando llenos los requisitos para la procedencia de la presente de acción mero declarativa contra la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA., para que convenga en la presente demandada solicitando se declare extinguido el gravamen hipotecaria de segundo grado constituido a favor de la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA.
En fecha 01/10/2009, este Juzgado dicto auto mediante el cual admitió la presente demanda por Prescripción Extintiva, ordenándose emplazar a la empresa INVERSIONES ACAPULCO, CA, así como a sus directores ciudadanos HERNAN POLANIA VEGA y/o MARIO CORRAO BUCCI, a los fines de que comparezcan al segundo (02) día de despacho siguiente a que conste su citación para dar contestación a la demandada.
Compareció en fecha 02/11/2009, el ciudadano EDGAR ZAPATA, alguacil adscrito a este Circuito Judicial y estampó diligencia mediante la cual consignó compulsas de citación sin firmar por sus destinatarios, toda vez que fue imposible la relación de la citación personal.
Previo requerimiento efectuado por la parte actora, en fecha 18/11/2009, se ordenó y libró cartel de citación a la parte demandada de conformidad con lo establecido en el artículo 223 del Código de Procedimiento Civil.
Una vez publicados y consignados los respectivos carteles de citación en la prensa en fecha 19/01/2010, la secretaria dejó constancia que el día 09/06/2010 de haberse traslado y fijado un ejemplar del cartel librado en la puerta del inmueble.
En fecha 11/06/2010, la apoderada de la parte actora solicitó a este Juzgado la designación de un defensor judicial a la parte demandada, siendo designado en fecha 16/06/2010, el abogado MARCOS COLAN, inscrito en el IPSA bajo el N° 36.039, como Defensor Ad-Litem de la parte demandada, librándose la respectiva notificación.
Compareció en fecha 12/07/2010, el alguacil WILFREDO MOSCAN, quien consignó la notificación dirigida al Defensor Judicial, consignado la parte actora en fecha 14/07/2010, las copias simples del libelo de demanda y del auto de admisión a los fines de que se libre la comulga al defensor judicial.
Posteriormente en fecha 14/07/2010, el defensor judicial designado consignó diligencia mediante el cual aceptó el cargo para el cual fue designado y juro cumplir bien y fielmente con los deberes inherentes al mismo.
En fecha 19/07/2010, este Juzgado libró compulsa al Defensor Judicial designado, por lo que en fecha 02/08/2010, el alguacil WILFREDO MOSCAN, consignó el recibido de la compulsa librada al Defensor Ad-Litem.
Citado como fue el Defensor Judicial éste consignó escrito de contestación de demandada mediante negó rechazó y contradijo la presente demanda, tanto el derecho como los hechos alegados 04-08-2010.-
En fecha 11/08/2010, la parte actora consignó escrito de promoción de pruebas, los cuales se tiene como admitidos conforme al artículo.
II DE LAS PRUEBAS Y SU VALORACIÓN
1. Copia certificada del documento de propiedad del bien inmueble, protocolizado ante la Oficina Subalterna del Primer Circuito del Municipio Sucre del Estado
Miranda, de fecha 07 de junio de 1984, anotado bajo el N° 30 Tomo 23, Protocolo 1°. 2.-Copia Certificada de la sentencia de Divorcio de la Homologación de la partición y adjudicación de la Comunidad Conyugal existente entre ALFONSO RAMOS PARRA Y MARIELA MARQUEZ DE RAMOS.-
III MOTIVACION PARA DECIDIR
En el presente caso la parte actora, señaló que consta de documento protocolizado por ante la Oficina Subalterna del Primer Circuito del Municipio Sucre del Estado Miranda, de fecha 07 de junio de 1984, anotado bajo el N° 30, Tomo 23, Protocolo 1° que su representado ALFONSO RAMOS PARRA, casado para la época con la ciudadana MARIELA MARQUEZ, actualmente divorciados adquirieron de la compañía INVERSIONES ACAPULCO, CA., un apartamento destinado a vivienda ubicado en RESIDENCIAS ACAPULCO, piso 1° apartamento 1-A, ubicado en la Calle dos (02) parcela A14-10 de la Urbanización La Urbina Norte, jurisdicción del Municipio Petare del Distrito Sucre del Estado Miranda, que el precio de venta del referido inmueble fue por la cantidad de SEISCIENTOS DIECIOCHO MIL BOLÍVARES (Bs. 618.000.00) lo que actualmente serían SEISCIENTOS DIECIOCHO BOLÍVARES FUERTES (BsF. 618.00), que en dicho documento de venta se estipuló que su representado debía pagar la cantidad de TREINTA Y NUEVE MIL BOLÍVARES (Bs. 29.000.00) actualmente VEINTINUEVE BOLÍVARES (Bs. 29.00), mediante el pago de cuotas anuales y sucesivas a la fecha de protocolización del documento de venta cada una de DIECISIETE MIL CIENTO CINCUENTA Y NUEVE BOLÍVARES FUERTES CON 25/100 (Bs. 17.159.25), actualmente DIECISIETE BOLÍVARES FUERTES CON 16/100, (17.16), y a los fines de garantizar la deuda que se asumió a la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO, CA., se constituyó hipoteca especial de segundo grado hasta por la cantidad de TREINTA Y NUEVE BOLIVARES FUERTES (BsF. 39.15) sobre el apartamento señalado. Señala el actor que los ciudadanos ALFONSO RAMOS PARRA y MARIELA MARQUEZ DE RAMOS, se divorciaron y que el apartamento antes mencionado le fue adjudicado al ciudadano ALFONSO RAMOS PARRA, según consta de la sentencia de divorcio que anexo a la demanda. Que en el documento registrado por ante la Oficina Subalterna del Primer Circuito del Municipio Sucre del Estado Miranda, de fecha 07 de junio de 1984, anotado bajo el N° 30, Tomo 23, Protocolo 1° ante la Oficina, se asumieron dos obligaciones contractuales, la primera de las obligaciones corresponde al préstamo otorgado por CENTRAL ENTIDAD DE AHORRO y PRESTAMO, y la Segunda de las Obligaciones corresponde a la acreencia por concepto de diferencial de la venta del inmueble
identificado y que a su vez fue garantizada con Hipoteca Especial de Segundo grado a favor de la sociedad mercantil INVERSIONES CAPULCO CA., dejando establecido que la primera de las obligaciones asumidas se encuentra debidamente cancelada.
Asimismo señala la actora, que actualmente pesa sobre el inmueble supra identificado ampliamente Hipoteca Especial de Segundo Grado, constituida a favor de la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA., inscrita por ante el Registro Mercantil I, de la Circunscripción Judicial del Distrito Federal y Estado Miranda, el 04 de marzo de 1982 bajo el N° 40, Tomo 23-A Pro.
En este sentido, señala el actor de que la obligación principal se encuentra debidamente prescrita por haber transcurrido el plazo concedido en la Ley y estando llenos los requisitos para la procedencia de la presente de acción mero declarativa contra la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA., para que convenga en la presente demandada solicitando se declare extinguido el gravamen hipotecaria de segundo grado constituido a favor de la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA.
En la oportunidad de dar contestación a la litis el defensor judicial designado rechazó la demanda en forma pura y simple; negando en todas y cada una de sus partes tanto los hechos como el derecho invocado en el escrito libelar, configurándose así la denominada “contestación genérica” en la cual la carga de la prueba continúa en cabeza del actor por lo que corresponde a esta sentenciadora proceder a examinar los instrumentos y demás pruebas objeto de la presente acción de Prescripción Extintiva, de conformidad con el artículo 509 del texto adjetivo civil. De esta forma se aprecia que el actor acompañó a la demanda Copia certificada del documento de propiedad del bien inmueble Copia certificada del documento de propiedad del bien inmueble, protocolizado ante la Oficina Subalterna del Primer Circuito del Municipio Sucre del Estado Miranda, de fecha 07 de junio de 1984, anotado bajo el N° 30 Tomo 23, Protocolo 1°, dicha documental es valorada como plena prueba de conformidad con el artículo 429 del Código de Procedimiento Civil, ya que no fueron impugnadas por la parte demandante. Asimismo consignó copia certificada de la sentencia que declaró con lugar la demanda de divorcio conforme al artículo 185-A y que declaró disuelto el vinculo conyugal entre los ciudadanos ALFONSO RAMOS PARRA y MARIELA MARQUEZ DE RAMOS, y la homologación de la partición y adjudicación de bienes de la comunidad conyugal, evidenciándose que el referido apartamento quedó adjudicado al ciudadano ALFONSO RAMOS PARRA, documental que es valorada como plena prueba de conformidad con el artículo 429 del Código de Procedimiento Civil, apreciándose de las mismas la cualidad para intentar la presente demanda. Y así se decide.-
Esta juzgadora a los fines de resolver la presente acción merodeclarativa de extinción de hipoteca, trae a colación el artículo 1.977 Código Civil, el cual reza: “...Todas las acciones reales prescriben por veinte años y las personales por diez, sin que pueda oponerse a la prescripción la falta de título ni de buena fe, y salvo disposición contraria de la ley. La acción que nace de una ejecutoria se prescribe a los veinte años, y el derecho de hacer uso de la vía ejecutiva se prescribe por diez años…” Asimismo el dispositivo de los artículos 1907 y 1908 del Código Civil.: 1.907: Las hipotecas se extinguen 1º por la extinción de la obligación. (…) 4º por el pago del precio de la cosa hipotecada y 5º por la expiración del término a que se les haya limitado.”.
1.908: “La hipoteca se extingue igualmente por la prescripción, la cual se verificará por la prescripción del crédito respecto de los bienes poseídos por el deudor, pero si el inmueble hipotecado, en poder de tercero, la hipoteca prescribirá por veinte años”
Tal como lo señala la norma arriba transcrita la hipoteca como derecho real prescriben a los veinte (20) años, y siendo que en el presente caso ha transcurrido veinticinco (25) años desde su constitución, es decir desde 07 de junio de 1984, quedo demostrado la extinción de la hipoteca legal de segundo grado, en virtud de que la misma se encuentra prescrita por el transcurso del tiempo, tal y como lo indica el dispositivo de los artículos 1907 y 1908 del Código Civil. De lo anteriormente señalado se concluye que la hipoteca convencional de segunda grado constituida sobre el inmueble propiedad de la parte actora a favor de la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA., se encuentra prescrita, en consecuencia de lo anteriormente señalado resulta forzoso para esta sentenciadora declarar procedente en derecho la demanda incoada en el presente caso. y así se decide.-
III DISPOSITIVO De conformidad con los fundamentos de hecho y de derecho anteriormente expuestos, este Juzgado Duodécimo de Municipio de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, actuando en nombre de la república Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la Ley, declara CON LUGAR la pretensión de Prescripción de Hipoteca de Segundo Grado incoada por el ciudadano ALFONSO RAMOS PARRA en contra de la Sociedad Mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA., plenamente identificados; y en consecuencia, de ello se condena a la parte demandada:
PRIMERO: Ha declarar extinguida la hipoteca de segundo grado que constituyera los ciudadanos ALFONSO RAMOS PARRA y MARIELA MARQUEZ, a favor de sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO CA., por la cantidad de TREINTA Y NUEVE BOLÍVARES FUERTES CON QUINCE CENTIMOS (Bs. 39.15), en fecha 07 de junio de 1984, bajo el Nro. 30, Protocolo Primero, Tomo 23, debidamente protocolizado ante la Oficina de Registro Público del Primer Circuito del Municipio Sucre del Estado Miranda.-
SEGUNDO: La presente Sentencia surtirá los efectos de cancelación de la hipoteca de Segundo grado constituida a favor de la sociedad mercantil INVERSIONES ACAPULCO C.A, mediante documento debidamente protocolizado ante la Oficina de Registro Público del Primer Circuito del Municipio Sucre del Estado Miranda en fecha 07 de junio de 1984, bajo el Nro. 30, Protocolo Primero, Tomo 23; sobre un inmueble constituido por un apartamento destinado a vivienda ubicado en RESIDENCIAS ACAPULCO, piso 1° apartamento 1-A, ubicado en la Calle dos (02) parcela A14-10 de la Urbanización La Urbina Norte, jurisdicción del Municipio Petare del Distrito Sucre del Estado Miranda, que es propiedad de ALFONSO RAMOS PARRA Y MARIELA MARQUEZ DE RAMOS, según consta de documento debidamente protocolizado en la oficina Subalterna de Primer Circuito de Registro del Municipio Sucre del Estado Miranda, en fecha 07 de junio de 1984.- bajo el Nro. 30, Protocolo Primero, Tomo 23.-
TERCERO: Por la naturaleza del fallo no hay condenatoria en costas, por ser esta una sentencia mero-declarativa y no de condena. CUARTO: Por cuanto el presente fallo fue dictado, fuera del lapso procesal, se ordena su Notificación.-
Déjese copia de la presente sentencia en el copiador, de conformidad con el artículo 248 ejusdem.
PUBLÍQUESE, REGÍSTRESE Y NOTIFÍQUESE. Dada, firmada y sellada en la sede del Despacho del Juzgado Duodécimo de Municipio de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas, en Caracas a los Veintiséis (26) días del mes de enero de dos mil once (2011). Años 200º de la Independencia y 151º de la Federación. LA JUEZ,
DRA. ANABEL GONZÁLEZ GONZÁLEZ LA SECRETARIA.,
ABG. ARLENE PADILLA REYES
En la misma fecha se publicó el presente fallo. LA SECRETARIA.,
ABG. ARLENE PADILLA REYES
AGG/AP/C.R.O.C
CONCLUSION
BIBLIOGRAFIA
CALVO BACA, EMILIO. DERECHO DE LAS OBLIGACIONES. EDITORIAL
EDICIONES LIBRA C.A, AV. SUR TRES – MISERIA A ZAMURO, EDIF.
TORRE EL LIMONERO – PISO 2, OF. 25. SANTA ROSALIA – VENEZUELA.