No Bocio Gutúfrrez"

Obsesiones, rituales y escritura en la obra literaria deSevero Sarduy

Aguí reposa burlón,Angel de lajiribilla,

el mago de la cuartillay hasta del más puro son.

Un trago de ron peleón,un buen despojo, una misa

y un brindis secoy sin prisapara aplacar a los dioses

ausentes, sino feroces:¡Al que se murió de risa!

Severo Sarduy

Sarduy es Barroco, ser Barroco implica "amenazar", jugar, perderse, deleitar-se, saborear. Cuando un lector desprevenido se acerca a la obra de Severo Sarduy,reacciona ante el desparpajo, la burla, los giros, el tiempo que exige su lectura.Con estas u otras palabras y de manera lúcida, este autor lo ha observado enmuchas de sus obras críticas: Banveo, Nueva inestab¡l¡dad,El Cristo de la meJaeob, entre otras, "Ser barroco hoy significa amenazar, juzgar y parodiar la eco-nomía burguesa, basada en la administración tacaña de los bienes, en su centro y

* Profesional en Estudios Literarios y estudiante de Maestría en Literatura de la Pontificia Uni-versidad Javeriana.

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fundamento mismo: el espacio de los signos, el lenguaje soporte simbólico de lasociedad, garantía de su funcionamiento, de su comunicación" (100). El autornos legó una obra que es parte del ámbito cultural latinoamericano, promueve ladiscusión, la reflexión sobre el lenguaje y como hoy en este escrito, rinde home-naje a esa palabra grosera y burlona, que sobrepasa los límites del uso, plena denostalgias habaneras y de dioses simulados. Hablamos de una obra en la que se dala convergencia de temas, personajes, textos citados y una mirada contemporá-nea sobre el cuerpo, que se extiende ya a una estética similar a la de la escritura.

En sus textos críticos, vemos un Sarduy que reflexiona acerca de una nuevamirada del arte, con un lenguaje cercano a lo oral, erudito, sin negar el goce de lapalabra, pero sobre todo, obsesionado por el cuerpo y su mirada. Para él el''Neobarroco'', es esa nueva manera de crear, leer e interpretar, donde se quiebrala relación significado/ significante. Su discurso "se edifica en el cimiento de lafragmentación y la ausencia" (61). Fragmentación que se expande, ausencia quese reemplaza. A partir de allí ha elaborado una teoría, que habla de una serie denuevas obras, inquietas por lo "no dicho", o por aquello que por haber sido dema-siado visto pudo haber sido olvidado. Discutiendo acerca de ese carácter y en lareflexión acerca del uso actual de la palabra, muestra un juego que reconciliasituaciones, lugares, actos irreconciliables, como son el cuerpo, la escritura y lapintura, reflejando estas nociones en la posible convergencia de tiempo y espacio.

En su obra poética, Sarduy supo llevar a la práctica esta noción. Toda ella semuestra atravesada por la afirmación en el lenguaje que oculta, se expande, sefragmenta. Las nociones sobre la historia del arte allí aparecen, no sólo comoreferencia cultural, sino que su obra misma pareciera ser una pintura abstractaindefinible. Entonces se comprende porqué Sarduy recurre a conceptos quepertenecen tanto a la reflexión sobre la imagen como a la elaboración de laescritura, que en un momento dado pueden parecer desligados del posiblecontexto; ello hace parte de su poética. Nace de todo esto un discurso teóricosobre la obra de arte, entendida más allá de un producto estético. I A esta sub-

1 En una entrevista que le fue realizada, Sarduy es contundente con esta afirmación: "Yo creoque la palabra barroco ha sido hoy en día galllaudé, es decir, ya pasa por todas partes, ya no tienesentido porque ya todo hoyes totalmente barroco, ¡Hasta Sartre! Habría que volver a una especie dedureza, casi de sectarismo con este término. Yo me propuse lo siguiente: volver a la fuente, almodelo astronómico del cual surgió el barroco. Nunca leí el barroco como una tendencia estética, loque se hace ya en todas las universidades del mundo, o en la escuela del Louvre, de la cual soygraduado ésta pura tendencia estética no me interesa" (Klengel, 1994).

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versión va a agregar la idea de ver lo estético corno consecuencia directa deunos acontecimientos científicos y culturales vitales para la humanidad, quetransformaron las bases del pensamiento y que, como consecuencia de ello,influyeron en una nueva manera de conocer y mirar del hombre su momento ysu relación con el mundo.

De allí, en parte, se deriva el entender el arte actual como un Neobarroco. Sunombre deriva del periodo que ha sido estudiado y denominado barroco, y queconsidera controversial en el espacio de la creación científica, lugar que, paraSarduy, se reflejará en las elaboraciones artísticas. La corrupción del círculo porla elipse, recibe su reflejo poético en la elipsis. Todo ello promueve una trans-formación, un cambio, una "inestablidad". Este término nos interesa porque el''Neobarroco'' para Sarduy, será el escenario de una "nueva inestabilidad".

Esta manera de interpretar se sostiene en una nueva actitud frente a lo quecomunica. La noción cosmológica del Big-bang, teoría de la expansión del uni-verso sirve como sustento a su poética. No es casual que un esteta se interese porla física; los movimientos "neo" recurren en la actualidad a teorías que desbor-dan su campo de acción obedeciendo a un cuestionamiento de la historia y lasinstituciones. Nuestro autor toma un modelo científico, donde se habla de unorigen inexistente de una masa de energía que se expande y se contrae. Para élasí ocurre con el lenguaje, se expande o se contrae, es pura energía en la queexiste un origen velado. En la expansión, dicha búsqueda se convierte en puroreemplazo; es decir, ante la imposibilidad de encontrar su origen, como ha ocu-rrido en la literatura latinoamericana actual, se inventa un sinnúmero de posibi-lidades que intentan dar nombre a ese inexistente. Es en este espacio donde se dalo que puede ser denominado como repetición, a partir de la cual se puede ver,en la obra de Severo Sarduy, un entramado de obsesiones, rituales y escritura. Esesa repetición del espejo roto, del laberinto, de la pérdida.

Desde esta concepción desarrolla sus estudios sobre el arte actual. Es claroque para Sarduy el neobarroco no es el reflejo e influencia del barroco, existenentre ellos diferencias en el manejo e interpretación del signo; la primera po-demos encontrarla entre los términos astronomía y cosmología', el primero

2 "La astronomía en su propia definición marca diferencias grandiosas con la cosmología: Laprimera se constituyó como ciencia y se vale también de la técnica para el estudio detallado deluniverso. La cosmología es parte de la astronomía, estudia las leyes que gobiernan el universo y por

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marca y distingue al barroco, donde interesaba más el sentido matemático ytécnico para hablar de lo inexplicable, en el actual se reconcilia lo impreciso,se supone, se recurre a otras formas de pensamiento para dar razón de eseimposible que es definir el origen del universo. La correspondencia que puedeexistir entre un término y otro está dada por la influencia de lo científico comomedio de interpretación de los orígenes, donde todo descubrimiento promue-ve en el hombre un sentimiento de inestabilidad.

Este modelo científico aproxima al fasto y elaboración de estos trabajos. Seexplica el origen del universo a partir de la concentración de la materia en unátomo, que de soportarse sufre su transformación por una gran explosión; losfragmentos de ese estallido se expanden, dando origen a lo que se entiendehoy por universo, hecho que de manera ficticia se repite en un reflejo. ParaSarduy el texto "Neobarroco" posee esa imagen de la expansión y la repeti-ción; por ser reflejo es aparente y da como consecuencia la repetición y laexpansión de la imagen. Hay un origen que se busca, transforma y repite endistintas versiones de esa realidad inicial. Esto da cuenta de la fragmentacióny el entrecruzamiento de tiempos y espacios dados en un mismo nivel hasta"agotar el sentido".

En la novela P4jaros de la playa encontramos dicho fenómeno, por ellovamos a escuchar la mención de realidades múltiples que poseen característi-cas propias. Es significativo no pretender decir nada nuevo, la obra como loafirmó Jesús López, está "plagada de lugares comunes".' Estos son llevados aun punto máximo en las posibilidades de expresión y verbalización. Con lareiterada mención de los mismos, Sarduy no pretendía actualizar o ser nove-doso en la literatura cubana; esto lo hicieron con anterioridad Cabrera Infante,Lezama Lima y Carpentier a quienes reconoce y rinde homenaje, y al tiempo

ello hace participe a la filosofia, reconstruye el pasado y busca orígenes, prevé la evolución y cam-bios en el universo, es esta una teoría sobre la ciencia". Diccionario de las Ciencias Larousse.

3 Esta afirmación es dada por Pedro de Jesús López, cubano, quien sin temor se atrevió a hablarde ella, para darle su puesto en la literatura cubana y mundial. (Este artículo en una versión fotoco-piada, pasó de mano en mano, hasta perder los datos bibliográficos). Basta observar afirmacionescomo la siguiente: "Severo lo sacrifica todo, argumento, personajes, cronotopo, por crear imágenesaparatosamente gráficas, visibles, hiperreales. Hacia esa meta se dirige su esfuerzo estético, su orfe-brería verbal. No es la imago de Lezama, sino la imagen de Andy Warhol, el cine, la pintura, lapublicidad. No es la cultura origenista sino la cultura pop y campo La imagen estereotipada hasta lasaciedad y la pérdida; la imagen estilizada hasta la pose y la esterilidad".

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poner a prueba al lector en el juego y conocimiento de sus obras, de nuestroespañol en su poética que cuestiona por la capacidad de relacionar distintasobras de arte que dan origen a un texto novedoso y provocador.

Si para Sarduy la mejor manera de cuestionar la mirada se encuentra en lareflexión sobre el lenguaje como fundamento de la cultura, se comprende en-tonces el gesto que muestra o esconde el ser: amamos u odiamos, se sueña yvive en el lenguaje. La más alta de sus expresiones se dará en la proliferación,lugar donde relacionó la pintura y la escritura, dos espacios en los que nuestroautor supo encontrar los temas y elementos suficientes para hablar del cuerpo,noción que sustenta toda su poética. Es interesante ver cómo se vale de ele-mentos que son puramente sensuales. En su obra resulta de vital importanciala exaltación del sonido, el identificarse con lo fonético, posibilidad con lacual las palabras se hacen ligeras, volátiles, escurridizas, y a la vez el significantecobra peso y valor, ya que Sarduy conecta esta instancia de lo sonoro con laescritura y la pintura.

Este carácter puede hacer prescindibles los significados, puesto que la lec-tura es de piel, una experiencia erótica que se fija ea la memoria de los senti-dos, se es cuerpo y por ello se genera en su lectura una constante tensión, unvértigo que tiene su origen en las sensaciones, de allí que todo lo que en lanovela se presenta es inesperado. Una lectura de los sentidos incorpora la ideade velocidad, da el carácter fragmentado y en expansión de las imágenes quese explican como experiencia del cuerpo.

Se hace de la obra un objeto en apariencia "ilegible", por ello la imagen sefija. Para un lector que se acerque a cualquier obra de Severo Sarduy con laintención de encontrar historias lineales, precisas, con el mínimo de adjetiva-ción y el máximo de "suspenso", nunca encontrará satisfacción, porque el juegoplanteado por la obra consiste precisamente en explotar al máximo la risa y laparodia de estas búsquedas. Aquí prima la palabra y las posibilidades del len-guaje que ella puede satisfacer: olor, dolor sabor, sonido como realidades quedan vida a la obra, por esto la lectura invita a posar la mirada en un objeto que deser mirado, tocado, agotado, es pervertido. El trabajo sobre el cuerpo es un rito,uno que no necesariamente ha de estar cargado de sentido, por el contrario, aquíse vacía. Se le explora una y otra vez, se le somete al martirio, al dolor, hastadesaparecer, por un deseo de alcanzar lo que se ha negado.

En esta última novela, nos encontramos frente a una obra y unos personajes(si así pueden ser llamados los seres y tachonazos que allí aparecen como

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tales), que buscan todo el tiempo lo imposible: el "no ser". Para el Cosmólogo,su búsqueda será la juventud, el sexo y la belleza perdidas de Siempreviva,quien se somete y expone a situaciones extremas, contrasta la vida y la muer-te, como medio de afirmarse en el ser e iniciar un largo recorrido por la expe-riencia hasta perderse en su propia historia, intento de recuperar lo perdido ytocar la nada, el "no ser". Es éste un estado pleno, trata del vértigo de vivir enlo repleto, acumular experiencia, para luego liberarse de ella. El deseo y obse-sión de Soma (la misma Siempreviva), es alcanzar por medios médicos, mági-cos, sexuales, oníricos, la belleza y juventud. Es tanto su deseo y tan grande suobsesión y empeño, que termina siendo reemplazada por su propio recuerdo osu reflejo imaginario.

Allí nacen las diferencias entre los seres que se presentan: mientras el dis-curso desarrollado en tomo al cosmólogo es fragmentado, atemporal y suponeel afianzamiento de un yo enfermo, alrededor de Siempreviva existe un mane-jo esplendente de la palabra; las frases que le darán vida son elaboradas ycentradas en la idea del abandono y transformación del cuerpo. Dentro de supropia fragmentación, las imágenes son lisérgicas, obligan a detener la miradaen otro espacio y otro tiempo:

Era nada menos que una doncella alta y de rasgos muy fmos, los ojos claros, lanariz aguileña. El pelo negro y suelto le caía hasta los hombros. La cubría unmanto rojo resaltante, tejido con flores de flanboyán, una tiara de oro, perlas ypesados rubíes la coronaba. Los collares eran tantos y tan sonoros que la envolvíauna frágil música de maracas minúsculas o de arena corriendo por el tallo vaciadode un bambú: eran cuentas alternadas de blanco mate y rojo bordó. Pero lo mássorprendente eran los atributos que blandía: un cáliz de plata, esplendente cince-lado, en la mano izquierda y una espada en la derecha. Una aureola de luz, comode pequeñas llamas temblorosas, irradiaba su cuerpo.

Alrededor de los pies ligeros aparecieron manzanas rojas. El aroma exquisitode las frutas irradió el cuarto y el hospital entero, a tal punto que los carentes deenergía que se encontraban bajo la cúpula pentagonal disfrutando de la luz meri-diana, creyeron que les preparaban una exquisita compota acaramelada con azú-car prieta, un relámpago violento quebró el cielo (189).

Aquí, los lugares comunes pertenecen a lo denominado como "cubanidad"y nombran aspectos culturales tales como lo religioso, la música y el hablapopular. En este fragmento hay referencias sincréticas: visual izamos a Changó,Santa Bárbara o a alguna de las magníficas vírgenes que pertenecen al artebarroco expuestas en nuestras iglesias coloniales; imágenes frívolas, resplan-decientes y adornadas, más próximas en su decorado a lo mundano que a locelestial. Desde otro plano podemos hacer una lectura que relacione esta ima-

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gen con una .suerte de enajenación por los olores, los sonidos, y las ofrendasmencionadas. Si seguimos observando la expansión de la imagen podemosencontrar una forma de travestismo o mimetismo: hay un cuerpo que deseaencubrir, esconder el sexo, su defecto, también lo que hace falta para alcanzarlo deseado. Por ello elabora mundos mágicos y paralelos.

Todo esto no sería posible sin el manejo que se hace en la novela de la pala-bra, en su sonorización y por la adjetivación, actitud que toca colmo y provocala risa, característica muy cubana, del Caribe y brillantez de nuestro españolheredado. En estas imágenes se hace memoria del cuerpo, sensualidad pura. Endicho espacio todo es exceso, se adorna y decora de tal manera la palabra que sucosmética exagerada sólo confirma la imposibilidad, lo ficticio, lo no real, por-que todo allí habla de lo imposible, conduce a la pérdida dentro del derroche, ensí, sólo habla del deseo de desaparecer. Es ésta la verdad del vacío, entendiéndo-lo como lo entendió Sarduy, en el sentido budista que posee la palabra: lugar delo repleto, generador de la verdad y la pureza. En la novela, haber sido mucho ymuchos, la velocidad que se alcanza en las transformaciones, el ser muchasidentidades a la vez hasta anularse, sin negar nunca los estados anteriores, ha-blan de esta noción. La nada que es el estado máximo del "nirvana" se alcanza apartir del todo, de la vivencia en el dolor y la enfermedad.

Ello forma parte de sus excesos y con estos, se hace efectiva la idea decuerpo fragmentado y de la interpretación que hace la medicina del cuerpo. Laparte afectada es bombardeada con medicamentos inverosímiles. Cada enfer-medad se identifica con un lugar específico, y a su vez cada espacio de estosintenta sobrevivir al tratamiento. La cura es una extensión y prolongación deldolor, en una situación irremediable como es la corrupción del cuerpo. Esto loexpresa de manera directa el Cosmólogo, quien es presentado como una suertede conciencia lúcida de la novela: analiza y espera la llegada de la muerte,pero también vive el dolor del cuerpo, reconciliando los dos opuestos, opciónque le resulta un placer por entender la vida como parte de la muerte y mediopor el cual encuentra la anulación. En su vivencia se muestra el placer de tocarlos extremos, juntando dolor y goce, vida y muerte, tristeza y risa. Hay en éstetoda una carga de celebración y afirmación en la experiencia del cuerpo, mar-cado por el dolor que implica toda creación.

El mundo inventado en la novela es exagerado, y de la misma forma lapalabra que lo bautiza, aun más tratándose de nombrar lo imposible, como esalcanzar la nada. Por ello se recurre a la repetición en las sonoridades, dejando

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OBSESIONES, RITUALES Y ESCRITURA EN LA OBRA LITERARIA DE SEVERO SARDUY

una sensación y ~entido de lo mágico y lo ritual en la percepción de la obra. Elvolver una y otra vez al mismo espacio, pareciera evocar esas realidades queresultan inalcanzables, se les da un nombre, se crea allí un rito que permitegrabar y dejar una marca en forma de experiencia mística, una permanencia ysímbolo del cuerpo. Todo ritual implica repetir, volver una y otra vez. Esteacto va a tener una característica propia inscrita en la repetición constante yuso del sonido "S" predorsal, que puede ser relacionado con las prácticas reli-giosas: repetición de canciones, oraciones y rezos propios de algunas culturas.

En Sarduy será el reflejo del ritual santero o quizás, el juego sonoro propiodel español que se habla en la mayor parte del continente. Se festeja el lengua-je y la lengua. Con este juego se comunica una experiencia que la narraciónlineal no permite, porque allí se tocan puntos de la memoria y la experienciaque pertenecen solamente a lo sentidos. A partir de dicho manejo del lenguajese va creando un tejido que hace simultáneos tiempo y espacio en un presenteque refleja seres a la vez que los aleja del tiempo y el espacio, porque suintención es superar estos lugares de fatalidad.

Vemos entonces que la escritura de Severo Sarduy nos precipita en un labe-rinto que se debate entre la imagen y el texto conceptual izado desde un mode-lo científico. Cabe preguntarse entonces, ¿Qué implicaciones tiene una obraen la que se desacomoda la estructura de espacio y tiempo por medio de esteartificio? Esta pregunta tiene que ver con la relación que se establece entretexto y cuerpo, en la obsesión delirante, en el exceso, el goce de la palabra y lavigencia del texto Neobarroco.

Bibliogrqfia

Aguilar, Jorge Enrique (1976). Severo Sarduy. Selección y montaje de JuliánRÍos. Madrid: Editorial Fundamentos.

Diccionario de las ciencia Larousse, Tomos 1 y II. Madrid: Círculo editores,1996.

Klengel, Susanne. "Entrevista a Severo Sarduy". Vuelta 206 (enero de 1994).Sarduy, Severo (1974). Barroco. Buenos Aires: Sudamericana.__ (1982). El Cristo de la me Jacob. Caracas: Monte Ávila.__ (1994) . Pájaros de laplaya. Barcelona: Tusquets.__ (1994). Epitqfios. Miarni: Ediciones Universal.

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