P FIDEL OÑORO - LECTIO DIVINA MARCOS 10, 46 - 52 JESÚS Y BARTIMEO

7/27/2019 P FIDEL OORO - LECTIO DIVINA MARCOS 10, 46 - 52 JESS Y BARTIMEO

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Un apoyo para hacer la Lectio Divina del Evangelio del Domingo

Trigsimo del Tiempo Ordinario (B) 25 de Octubre de 2009

EL CAMINO DE JESS HACIA JERUSALNY LA FORMACIN DE LOS DISCPULOS (VII):

Una catequesis sobre la fe como esencia del discipulado

Lectio de Marcos 10,46-52Esforcmonos por seguir con las obras

a aquel Jess que conocemos con la inteligencia.

Observemos hacia donde el Seor se dirige

e, imitndolo, sigamos sus pasos(San Gregorio Magno)

Vete, tu fe te ha salvado

Oremos...Ya que me traspasate,

verte en m tu Luz....Que mi luz y tu Luz

broten de un mismo Amor....Que en el Amor

alcancemos nuestra identidad.(Eulogio Das del Corral)


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Introduccin

Con la historia positiva y estimulante de Bartimeo el itinerario formativo de Marcos sobreel seguimiento de Jess por el camino de la Cruz llega a su punto alto (ver toda la seccinde Marcos 8,27 a 10,52, que hemos venido comentando en los seis domingos anteriores),enfatizando la Buena Noticia de que es posible decirle s al llamado de Jess paraseguirlo con radicalidad.

El relato conclusivo de la seccin sobre la formacin del discpulo en la subida a Jerusalnes un historia de fe. A partir de la observacin de todos los movimiento de Bartimeo, elevangelista elabora una preciosa catequesis que educa en el itinerario interno de la fe. Ya

desde el primer momento, en este mismo evangelio, Jess haba dicho que el Reino de Diosse acoge en la conversin y la fe (ver 1,15).

La dinmica de la fe es la esencia del discipulado, porque slo la adhesin total lacomunin estrecha con el Maestro- hace posible el seguimiento de l en todos los aspectosde la vida. Para vergenza de todos los anteriores, este hombre ciego y pobre es el modelodel que sabe responder al llamado de Jess: nimo, levntate, te l lama! (10,49),pasando del estar sentado a la ori ll a del camino (10,46) al seguirl o por el camino(10,52).

Vale la pena explorar algunas riquezas de este maravilloso relato.

1. El texto, su contexto y estructura1.1.Leamos atentamente Marcos 10,46-52:

46L legan a Jeri c. Y cuando sala de Jeri c, acompaado de sus discpulos y de unagran muchedumbre, el hi jo de Timeo (Bartimeo), un mendigo ciego, estaba sentado juntoal camino.

47Al enterarse de que era Jess de Nazaret, se puso a gritar :Hijo de David, Jess, ten compasin de m!

48Muchos le increpaban para que se call ara. Pero l gritaba mucho ms:Hijo de David, ten compasin de m!

49

Jess se detuvo y di jo:Llamadle.

L laman al ciego, dicindole:Animo, levntate! Te llama.

50Y l, arrojando su manto, dio un brinco y vino donde Jess.

51Jess, dir igindose a l, l e di jo:Qu quieres que te haga?


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El ciego le dijo:Rabbun, que vea!

52Jess le dij o:Vete, tu fe te ha salvado.

Y al instante, recobr la vista y le segua por el camino.

1.2.Contexto

El Evangelio de Marcos nos va dando poco a poco pistas concretas sobre su organizacininterna. La seccin sobre el discipulado en la subida a Jerusaln (8,27-10,52), por ejemplo,est enmarcada por dos curaciones de ciego:- La curacin del ciego de Betsaida (8,22-26), la cual concluye la primera parte delministerio de Jess en Galilea y ensea que el ver se logra procesualmente y gracias la

ayuda de Jess. Inmediatamente despus ocurre la confesin de fe de Pedro, quienmanifiesta con pocas palabras lo que ha visto y comprendido de la persona de Jess.- La curacin del ciego de Jeric (10,42-46), llamado Bartimeo, con la cual se concluye lasubida a Jerusaln. Inmediatamente despus tenemos la entrada triunfal de Jess aJerusaln. Tambin Bartimeo hace una confesin de fe en el mesianismo de Jess y sigue aJess por el camino.

Por cierto, la de Bartimeo y la del joven poseido por el demonio (ver 9,14-28) son lasnicas curaciones que Jess realiza en esta seccin del Evangelio. Ambas estnrelacionadas con el camino de la fe.

Tengamos presente, adems, la conexin con el pasaje inmediatamente anterior: la curacinde Bartimeo ocurre despus que Jess ha dicho que ha venido a servir (10,45). Jess aqupresta un servicio concreto, controponindose al grupo de discpulo que por el contrario-niegan el servicio intentando deshacerse del ciego que se les ha vuelto incmodo.

1.3.Esquema del pasaje

La narracin est construida como un itinerario de fe, en el que, si atendemos a losmovimientos, podemos distinguir tres partes:(1) Descripcin de la situacin: el ciego sentado la vera del camino (10,46)(2) El camino de Bartimeo hasta Jess (10,47-50)(3) el camino de Bartimeo junto con Jess (10,51-52)

As, Bartimeo se convierte en un nuevo discpulo, precisamente el ltimo que Jess llamaantes de entrar en la fase final de su ministerio.

Analicemos algunos detalles.


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2. La descripcin de la situacin: el ciego sentado la vera del camino (10,46)Llegan a Jeric. Y cuando sala de Jeric, acompaado de sus discpulos y de una gran

muchedumbre, el hi jo de Timeo (Bartimeo), un mendigo ciego, estaba sentado junto alcamino

L legan a Jeric. En vsperas de su entrada a Jerusaln, y teniendo en vista la pascuadolorosa que se aproxima, Jess pas la noche como peregrino en la ciudad de Jeric, laciudad de las palmeras, muy prxima al ro Jordn y al Mar Muerto. Ahora Jess estsaliendo de la ciudad para tomar la empinada cuesta de 30 kilmetros que, atravesando eldesierto de Jud, lleva hasta la Ciudad Santa: Y cuando sala de Jeri c....

Jess no va solo, lo acompaan sus discpulos y una gran muchedumbre. Todos ellosestn a punto de coronar la meta de su peregrinacin a Jerusaln para celebrar la Pascuahebrea.

De repente, a la orilla del camino, aparece Bartimeo, ciego y mendigo, quien ha ido aacomodarse en el lugar preciso por el que deben pasar los peregrinos. En esta poca delao, en el que la gente es ms generosa, el ciego espera captar ms limosnas. l ya sabe laestrategia para lograrlas, por eso est all en su lugar de trabajo .

Es curioso que se nos de el nombre del ciego: Bartimeo. Significa hijo de Timeo (sobreel nombre de Timeo no sabemos que pueda significar). Esto slo ocurre en los primeros

relatos de vocacin: los llamados por Jess al discpulado tienen nombre propio; en cambio,cuando de milagros se trata, al menos en el Evangelio de Marcos, nunca se da el nombre,excepto en este caso.

Ninguna otra persona curada en el Evangelio ha sido descrita con tanto detalle como sta.Una vez ms notamos: esto ocurre habitualmente con las personas que van a ser llamadas aldiscipulado (ver 1,16-20; 2,14).

3. El camino de Bartimeo hasta Jess (10,47-50)47Al enterarse de que era Jess de Nazaret, se puso a gritar :

Hijo de David, Jess, ten compasin de m!48Muchos le increpaban para que se call ara. Pero l gritaba mucho ms:

Hijo de David, ten compasin de m!49Jess se detuvo y di jo:

Llamadle.L laman al ciego, dicindole:

Animo, levntate! Te llama.50Y l, arrojando su manto, dio un brinco y vino donde Jess.

La rutina del mendigo se rompe, y para siempre, cuando toma informacin y se entera quemuy cerca de l pasa Jess (10,47).


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(1) La escucha

El paso del camino de fe de Bartimeo es el or (se usa el verbo griego akou). l se tomaen serio el anuncio. Es todo lo contrario de los otros discpulos a quienes Jess reprendidicindoles: An no comprendis ni entendis?... Teniendo ojos no vis y teniendo

odos no os? (8,17).Esto tiene otro antecedente en el Evangelio: cuando en una ocasin la predicacinapostlica lleg al palacio del rey, Herodes despus de or, no consigui captar la verdaderaidentidad de Jess y no dio el paso de la conversin y la fe (ver Marcos 6,14-16).

Pues bien, y retomando la parbola del sembrador, vemos cmo con el ciego sucede todo locontrario: aunque la semilla cae al borde del camino l se hace buena tierra que sabe or(ver 4,15 y 20). La escucha lo desacomoda, Bartimeno no permanece como el discpuloinmvil que sabe de todo sobre Dios pero no da pasos significativos en la vida.

El relato se va por esta lnea: el encuentro con Jess cambia radicalmente la vida deBartimeo, de la ceguera pasa la visin y de la marginalidad en el camino pasa a ser suactivo peregrino (confrontemos los vv.46 y 52). Pocas palabras, apenas las precisas, ymucha decisin de ambas partes, constituyen el relato. Cada detalle del proceso deaproximacin est cargado de significado y se va armando como una sntesis de laslecciones fundamentales del discipulado en el evangelio.

(2) El grito de fe

Brota entonces el grito de ayuda que todava los discpulos no se haban atrevido apronunciar (ver 4,38-40, 8,14-21; 9,19). Los discpulos han pasado por serias dificultades,no comprenden la cruz, pero no piden ayuda sino que regaan o ignoran al Seor. Encontraposicin Jess haba propuesto el modelo del padre de familia que hace la oracinde la fe (ver 9,24.28).

El evangelista hace notar que el clamor del ciego va aumentando gradualmente, no slo enla intensidad de la voz (10,48: pero l gr itaba mucho ms) sino en la invocacin deJess.

Bartimeo clama misericordia. Su oracin tiene como trasfondo la oracin penitencial delSalmo 51 (miserere), en su primera lnea, pero tambin la promesa mesinica de Isaas35,2-5:

Se ver la gloria de Yahveh, el esplendor de nuestro Dios.Fortaleced las manos dbiles, afianzad las rodi l las vaci lantes.Decid a los de corazn i ntranqui lo:Animo, no temis! Mirad que vuestro Dios viene vengador;

esla recompensa de Dios, l vendr y os salvarEntonces se despegarn los ojos de los ciegos,y las orejas de los sordos se abrirn....


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Es de notar que a la invocacin de Jess de Nazareth, el ciego le agrega dos ttulos: (1)H ij o de David, es decir que lo reconoce como el Mesas, y (2) Rabbunni (mi Maestro),que tiene una nota de aprecio, de relacin estrecha de comunin y de confianza. Alcontrario del hombre rico, que tambin lo llam Maestro (con el complemento adulador

Bueno), este pobre s deja que Jess sea efectivamente su Maestro, porque le obedece.Si Pedro haba reconocido a Jess como Cristo (=Mesas; ver 8,29), el ciego Bartimeo loconfiesa como H ij o de David, un ttulo con valor mesinico (ver tambin 12,35).

(3) La superacin de obstculos

Bartimeo enfrenta obstculos. Adems de sus dos primeras limitaciones, su ceguera y supobreza, es reprimido para que se calle (10,48). Es visto como uno que no tiene valor paralos dems, como el nio que perturba la dignidad del Maestro (ver 10,13). l es imagen delque entra el Reino despojado, abandonado con absoluta confianza en la presencia y lapalabra de Jess. Y a diferencia del hombre rico que exhibe su santidad (ver 10,20), elmendigo se presenta como pecador contrito, como alguien lejano de la comunin con Diospero que suspira por tenerla.

El despojo es todava ms radical cuando hace dos gestos:

- Arroja el manto (10,50): el manto es el mayor bien de un pobre, lo nico que le queda(ver xodo 22,25-26), es su cobija para no noche, su abrigo para el fro, su recipiente parala limosna. Es la anttesis del hombre rico renuente al seguimiento, precisamente por esteobstculo (10,22), y la imagen viva del que lo deja todo para seguir a Jess (10,28).- Da un salto y viene donde Jess (10,50b): su salto (inaudito para un ciego!) es ungesto de confianza total, expresin de apoyo en la palabra de Jess.

El hombre rico no le crey a Jess que en su palabra de llamado para el seguimiento habaun nuevo apoyo que sostendra y con mayor calidad su vida (ver 10,29-30). La respuestade Bartimeo no puede ser ms completa.

El ciego logra su objetivo: Jess, se detiene ante l (10,49) y lo ha llama (v.49b). Jesspasa indiferente ante el medigo del camino sino que se interesa por l.

4. El camino de Bartimeo junto con Jess (10,51-52)51Jess, dirigindose a l, l e di jo:

Qu quieres que te haga?

El ciego le dijo:Rabbun, que vea!

52Jess le dij o:Vete, tu fe te ha salvado.

Y al i nstante, recobr la vista y le segua por el camino.


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Comienza ahora el dilogo directo entre Jess y Bartimeo. El encuentro personal comienzacon una pregunta.

La pregunta Ququieres que te haga? (10,51) nos recuerda otra similar dirigida aSantiago y Juan en el relato anterior: Qiu quieren que haga por vosotros? (10,36).

La respuesta de Bartimeo es bien distinta a los de los discpulos que queran poder, stepide ver. Esta es la peticin ms apropiada para un discpulo (ver 4,11-12; 8,14-21).

Se subraya que en ltima instancia la fe es dejar actuar a Jess, es la apertura total a lasalvacin por la va que l como Maestro e Hijo de Dios viene sealando y a la que losdiscpulos le han puesto resistencia. Adems un aspecto importante de la relacin dediscipulado es el tener claras nuestras expectativas frente al Seor, por esa va la fe sepurifica y se va lejos.

A diferencia de otros relatos de milagro, en esta ocasin no hay ningn contacto fsico, essuficiente la palabra de Jess para el ciego vea.

Curiosamente, entre todos los que Jess ha curado a lo largo de su ministerio, este es elnico que inicia un camino de seguimiento: le segua por el camino (10,52). Ahora Jesstiene un nuevo discpulo, quien ha recibido el don de la vista y se caracteriza por su fe.

Observemos adems que las ltimas palabras de Jess contienen:

(1) un envo,(2) una declaracin de salvacin,(3) una exaltacin de su fe (v.42).

En la recuperacin de la vista de Bartimeo se explica la fuerza salvfica de la fe. La fe quelo ha salvado tiene siete caractersticas: es una fe que

(1) parte delreconocimiento radical de la necesidad de Jess,(2) clamahumildemente ayuda,(3) va creciendoprogresivamente en la relacin con Jess,(4) superalos obstculos,(5) impulsaal abandono absoluto en las manos de Jess,(6) clarificalos propios motivos y(7) llevaa decisiones radicales y valientes (arrojar la capa, dar un salto, decidir ver)y que se convierteen seguimiento real (dejarse conducir por el Maestro).

Es as como la fe se hace seguimiento. Bartimeo escoge finalmente el camino de la Cruz.As se concluye la escuela de discipulado en el camino a Jerusaln: la confesin de fe dePedro al inicio del camino (ver 8,27-30), se concreta al final con un gesto orientado a laaceptacin de la Cruz, la de un Hijo de David exaltado por el camino de la humillacin.


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5. Las lecciones del ltimo de los discpulos llamados por Jess: BartimeoLa historia del ciego Bartimeo (Mc 10,46-52) relata un caso exitoso de discipulado. Lo fueprecisamente porque:

Parti del reconocimiento de sus lmites ms profundos, particularmente de supecado: Se puso a gritar: Hijo de David, Jess, ten compasin de m! (10,47 y48).

Jess lo llama (10,49). Deja lo nico que tiene en medio de su pobreza: el manto en el que recoge la

limosna (10,50). Acoge el hacer de Jess (10,51) como un acto concreto de fe: Tu fe te ha

salvado (10,52). Entra en la ruta del camino de la cruz sin ms peros: al instante... le sigui por el

camino (10,52b).

El ciego Bartimeo, el hombre que lo necesitaba todo, nos deja una profunda leccin: muchohay que hacer en esta vida, pero la comunin con Jess es la nica cosa necesaria.

Permtanme recalcarlo: nuestro relato trata de algo ms que de la simple curacin de unciego. Si observamos bien, veremos que muchos de los temas tratados en los pasajesanteriores aqu son retomados:

(1) La identidad de Jess.

Al principio vimos a Pedro confesando la fe en Jess como el Cristo (8,29), ahoraBartimeo es el primero en llamar a Jess Hijo de David, ttulo que tiene un sentidomesinico (10,47-48). En el pasaje siguiente, la entrada triunfal en Jerusaln, este

mesianismo ser proclamado con fuerza (11,1-10).

(2) El camino de la salvacin.

Al principio Jess ense el camino hacia la vida, hacia la salvacin (8,34-9,1; ver 10,17-31). Ahora Bartimeo afirma que la fe lo salv y lo condujo hacia la salvacin (10,52).

(3) La necesidad de la fe.

En el exorcismo del joven posedo (9,14-29), Jess afirm que era necesaria la fe para estaren comunin con el poder salvador de Dios (9,19.23.24.29). Ahora le dice a Bartimeo: Tu

fe te ha salvado (10,52).

(4) El servicio al pequeo y marginado.Los discpulos le impedan a los nios acercarse a Jess (10,13). Ahora es el ciegoBartimeo quien experimenta la misma dificultad (10,48). En ambos casos Jess no aceptaesta actitud, su misin es el servicio (10,45); pues bien, esto mismo deben hacer losdiscpulos: acoger y servir a todos sin excepcin (9,35; 10,43-44).


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(5) Los encuentros con Jess en el camino.

El rico fue al encuentro de Jess en el camino (10,17). Ahora es Bartimeo quien va a alencuentro con Jess en el camino (10,46). El rico es llamado por Jess al seguimiento, perodice que no. El ciego no es llamado explcitamente y sin embargo sigue a Jess.

(6) Jess escucha las peticiones pero no responde de la misma manera.

Dos discpulos le hicieron una solicitud a Jess, pero su peticin fue rechazada (10,35-41).Ahora es Bartimeo quien le hace una solicitud a Jess y l le responde positivamente(10,46-50). Ahora sabemos qu es lo que un discpulo debe pedir y qu no. Con todo, Jesssiempre escucha; notemos que en ambos casos la pregunta de Jess es la misma: Ququieres que haga por ti? (10,36.51).

En fi n...

Una y otra vez, en el camino hacia Jerusaln, los discpulos han mostrado su dificultad paracomprender a Jess y su camino. Al llegar al final del camino un personaje que no habaaparecido antes en el Evangelio, pero que tiene nombre propio, as como los primerosdiscpulos, se convierte en modelo de un discpulo de Jess: es modelo de una persona defe; l pide lo que todo discpulo debe pedir; l, ya viendo, emprende la ruta del seguimientohasta Jerusaln, el lugar donde ocurrir el evento de la Cruz, una Cruz que conduce a laplenitud de vida.

El verdadero discpulo es aquel que ve con los ojos de Jess y, de esta manera, compartedecididamente su camino misionero hasta el final.

6. Releamos el Evangelio con un Padre de la Iglesia

Quien ignora el esplendor de la eterna luz, es ciego. Con todo, si ya cree en el Redentor, entonces ya est sentado a la vera del camino. Esto, sin embargo, no es suficiente. Si deja

de orar para recibir la fe y abandona las imploraciones, es un ciego sentado a la vera del

camino pero sin pedir limosna. Solamente si cree y, convencido de la tiniebla que leoscurece el corazn, pide ser iluminado, entonces ser como el ciego que estaba sentado

en la vera del camino pidiendo limosna.

Quienquiera que reconozca las tinieblas de su ceguera, quienquiera que comprenda lo quees esta luz de la eternidad que le falta, invoque desde lo ms ntimo de su corazn, grite

con todas las energas desu alma, diciendo: Jess, Hijo de David, ten piedad de m.

[...] Es tiempo de escuchar lo que fue hecho al ciego que peda la vista o, tambin, lo que l

mismo hizo. Dice todava el Evangelio: Luego l recuper la vista y se puso a seguir a

Jess. Vey sigue quien realiza el bien que conoci; ve pero no sigue aquel que igualmenteconoce el bien, pero no se dedica a realizarlo.


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Si, pues, hermanos carsimos, ya conocemos la ceguera de nuestro peregrinar; si, con la fe

en el misterio de nuestro Redentor, ya estamos sentados en la vera del camino; si, con una

oracin contnua, ya pedimos la luz a nuestro creador; si, adems de eso, despus de laceguera, por el don de la fe que penetra la inteligencia, fuimos iluminados, esforcmonos

por seguir con las obras a aquel Jess que conocemos con la inteligencia. Observemos

hacia donde el Seor se dirige e, imitndolo, sigamos sus pasos. En efecto, slo sigue aJess quien lo imita(San Gregorio Magno, Homil. in Ev. 2, 2.8)

7. Para cultivar la semilla de la Palabra en lo profundo del corazn:7.1. Este es un relato cargado de detalles sobre el ciego. Qu quiere decir esto

en el evangelio de Marcos? Qu indica cada detalle?

7.2. El ciego hizo un proceso que lo llevo de la marginalidad a la vera del caminoal seguimiento de Jess en su mismo camino y junto con el resto de losdiscpulos. Qu pasos dio para lograrlo?

7.3. Cmo se entiende la fe que salva en este relato?

7.4. Comparando el relato con el hoy de mi comunidad: Se ha repetido algunavez el gesto de los discpulos que intentan apartar al mendigo por serincomodo para el grupo?

7.5. Qu nuevas lecciones saco para mi vida de discipulado, a partir de la lecturaorante del relato de Bartimeo?

P. Fidel Ooro, cjmCentro Bblico del CELAM


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Anexo 3Una invitacin a la meditacin y la oracin

Ten Confianza! (Mc 10,46-52)

Ustedes los amigos,los discpulos de Jess,

mis hermanos,

susurrenal odo de mi alma:

Ten confianza!,

Abretea su amor

sin poner resistencia!

Para que entre en comunincon el corazn

de mi Padre.

(Frank Widro)

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