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PARADIGMA

Revista de Investigación Educativa

Año 23 N°36, Diciembre 2016, Tegucigalpa, Honduras

Instituto de Investigación y Evaluación Educativas y Sociales

Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán

3

<Paradigma>

Rector

David Orlando Marín López

Vicerrector Académico

Hermes Alduvín Díaz Luna

Vicerrector Administrativo

Jorge Alberto Álvarez Flores

Vicerrectora de Investigación y Postgrado

Yenny Aminda Eguigure

Vicerrector del CUED

José Darío Cruz

Secretaria General

Celfa Adalisis Bueso

Director del INIEES

Ricardo Morales Ulloa

Responsable del presente número de la Revista

Sonia Patricia Guity López

Comité Editorial

Coordinación de Investigación

INIEES

4

ÍNDICE

Contenido Pág.

Presentación 5

La investigación científica en Honduras desde los ámbitos económico, educativo y de

salud en el periodo 1980-2015: Una caracterización. Edwin Medina, Anayensy

Cárcamo Pérez, Arely Jackeline Vaquedano.

7

El desafío de la educación ciudadana en la formación inicial docente: Educar la razón

y las emociones. Elma Barahona Henry.

22

Epistemología de la formación docente: una mirada crítica. Pastor Umanzor. 31

Influencia del Compromiso Organizacional sobre el Aprendizaje Organizacional de

los docentes de la Universidad Pedagógica Nacional “Francisco Morazán”. Elizabeth

Santos Flores, Dani Oved Ochoa Cervantez.

49

Elementos emergentes en la nueva configuración de las funciones sustantivas de la

universidad. Claudio Roberto Perdomo Interiano.

66

Percepciones de los docentes en pre- servicio relativas a la inclusión y la atención a la

diversidad. Carla Paz, María Cristina Cardona.

86

Responsabilidad Social y Educación en Honduras. Leonardo Lenin Banegas

Barahona.

102

Estructura para la presentación de artículos y documentos en Paradigma 119

5

Presentación

Con gran satisfacción, presento a la comunidad científica el número 36 de Paradigma: Revista de

Investigación Educativa de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán. Esta edición

coincide con el 60 aniversario de Fundación de nuestra universidad, por lo tanto está dedicada a este feliz

acontecimiento. Desde sus orígenes en 1956 como Escuela Superior del Profesorado, nuestra institución

ha sido vanguardia en la formación docente y de la misma manera mediante la investigación científica se

ha dedicado a la producción de conocimiento sobre la educación nacional, haciendo aportes significativos

para su desarrollo. La Revista Paradigma ha visto crecer y evolucionar la actividad científica- académica

en la UPNFM y en consecuencia constituye es parte de su memoria histórica.

El primer número de la Revista Paradigma fue publicado en junio de 1992 por la Dirección de

Investigación Educativa, bajo la coordinación del Prof. Ramón Salgado y contenía cuatro artículos de

investigación, dos ensayos y una recensión. A partir de aquel esfuerzo inicial, la publicación científica en

la UPNFM ha sido fortalecida por el establecimiento de una institucionalidad para la investigación,

mediante la creación de la Vicerrectoría de Investigación y Postgrado y el Instituto de Investigación y

Evaluación Educativas y Sociales (INIEES) bajo cuya responsabilidad se edita en la actualidad la antes

mencionada publicación. Han pasado 24 años y en ese lapso de tiempo hemos vivido el crecimiento

exponencial de las tecnologías de la información y la comunicación y la conformación de una sociedad

del conocimiento global, por esta razón nuestra publicación ha adoptado el formato de una revista

especializada internacional que acepta artículos también en inglés y portugués, que tiene un sistema de

arbitraje ciego y que sigue consecuentemente el camino a su indexación.

Este número 36 consta de cuatro artículos de investigación en los cuáles se combinan métodos

cuantitativos y cualitativos y también de tres ensayos. En el primer artículo Medina et al. indagan en los

tipos de investigación que se realiza en el sector social en Honduras y su impacto en el desarrollo

sostenible del país, los autores profundizan en las debilidades conceptuales y metodológicas de la

investigación y en la limitada pertinencia social de la misma. En su ensayo Barahona se ocupa de la

formación ciudadana, un tema casi marginal en la formación docente y en la educación en general, pero

que en el contexto de la economía del conocimiento reclama su espacio para la conformación de un

mundo más humano que solidariamente reconozca la alteridad. Umanzor analiza desde una perspectiva

crítica los conceptos fundamentales de la formación docente, reivindicando que estos deben ser parte de

la rigurosidad de los procesos formativos para el mundo de la vida, el discurso epistémico en este ensayo

reconoce la integralidad de la ciencia y de allí la necesidad de la interdisciplinariedad y

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transdisciplinariedad en la formación docente. Santos y Ochoa por su parte, presentan en su artículo los

resultados de una investigación acerca de la influencia del compromiso organizacional sobre el

aprendizaje organizacional de los docentes de la Universidad Pedagógica Nacional, utilizando métodos

cuantitativos se dedican a comprobar en qué medida los niveles de compromiso afectan la capacidad de

aprendizaje de la población estudiada.

En su ensayo Perdomo presenta reflexiones sobre el nuevo sentido de las funciones de la

universidad: docencia, investigación y vinculación con la sociedad, en el contexto cambiante y dinámico

del siglo XXI; lo cual, obliga a concebir la actividad universitaria sobre la base de criterios como la

pluralidad, flexibilidad, integración e innovación permanente. Paz y Cardona realizan un análisis sobre

las percepciones de los docentes en pre-servicio en relación con la inclusión y la atención a la diversidad,

concluyendo en que estas percepciones son favorables entre todos los estudiantes independientemente de

su etnia o cultura.

Banegas, ante la tendencia actual de la responsabilidad social empresarial y la educación, analiza

tres maneras en las cuales ésta se presenta en Honduras, señala que pese a su actualidad este mecanismo

aún no es parte de la formación del talento humano empresarial y que las actividades de las empresas en

esta línea todavía son dispersas.

Los editores agradecemos las contribuciones aquí presentadas y todo el trabajo de revisión por

pares que garantiza la calidad de Paradigma: Revista de Investigación Educativa promoviendo de esta

manera la investigación y el debate científico sobre la educación. Para terminar reconocemos el esfuerzo

pionero de nuestros colegas: Ramón Salgado, German Moncada, Marina Chávez de Aguilar y Bessy

Dolores Hernández, quienes iniciaron ésta que es hoy la mejor Revista de su género en Honduras.

Ricardo Morales Ulloa

7

LA INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA EN HONDURAS DESDE LOS ÁMBITOS

ECONÓMICO, EDUCATIVO Y DE SALUD EN EL PERIODO 1980-2015: UNA

CARACTERIZACIÓN

Edwin Medina

Anayensy Cárcamo Pérez

Arely Jackeline Vaquedano Morales

Carrera de Lenguas Extranjeras, Facultad de Humanidades y Artes,

Universidad Nacional Autónoma de Honduras

[email protected], [email protected], [email protected]

RESUMEN

Este artículo plantea reunir las tendencias sobre la discusión actual de la investigación científica dentro

del sector económico, educativo y salud en Honduras (1980-2015), generando una visión más amplia, no

sólo como práctica académica a nivel de universidades e instituciones aisladas o como un simple enfoque

teórico o paradigmático, sino como una práctica social en la que los investigadores y las instituciones

asuman la investigación científica como un medio de contribuir al desarrollo del país mediante

planteamientos propios de gestión del desarrollo, de introducir cambios encaminados a mejorar el sistema

y a la aplicación de los conocimientos para transformar la realidad. Además de la caracterización de las

investigaciones en estas tres áreas, se cuenta con las valoraciones de varios expertos en cada área, lo que

permite un análisis del impacto que esta ha tenido, sus fortalezas y las oportunidades de mejora. Se

consideran estos tres ámbitos de investigación por su relación con el desarrollo humano. En este sentido

se vuelve imperante conocer y explorar cual es el estado de las investigaciones científicas en Honduras

dado que estos son indicadores clave para la construcción y medición de indicadores de Desarrollo

Humano.

PALABRAS CLAVE

Investigación educativa, investigación en salud, investigación económica, desarrollo humano.

ABSTRACT

This article is an attempt to gather the tendencies about the current discussion in scientific research in the

economical, educational and health sectors in Honduras (1980-2015), generating a wider view, not only

as an academic practice at universities or isolated institutions or as a simple theoretical or paradigmatical

approach but as a social practice in which researchers and institutions adopt scientific research

Recibido 19 de agosto de 2016 /Aceptado 10 de noviembre de2016

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as a means to contribute to the development of the country by means of new ideas to manage

development, to bring about change that can improve the system and to the application of knowledge to

transform reality.

Besides, the characterization of scientific research in these three areas, the points of view of

several experts are included in order to understand the impact that scientific research has had, its strengths

and also its opportunities for improvement. These three areas of research are considered given their

relation to human development. In this sense, it becomes of utmost importance to know and explore

which is the actual state of scientific research in Honduras. The economical aspect is a key element in the

development of the countries, in this sense, for the last thirty years the country has been unable to

overcome the high poverty and extreme poverty indicators. On the other hand, the low educational level,

access, coverage and education quality become obstacles to development. Therefore, educational

research becomes fundamental in order to promote and foster human development. As a last element we

have the area of health which is related to the permanent search for new knowledge that can provide with

new alternatives for decision making and for the creation of public policies in the health area.

KEY WORDS

Educational research, health research, economic research, human development.

1. INTRODUCCIÓN

Los resultados de la investigación muestran que al menos en los últimos 25 años (1980-2015) lo

que se ha hecho en Honduras es un análisis DESCRIPTIVO de la realidad del país. Se estudian los

mismos temas una y otra vez, se hacen líneas de base, se encuentran los mismos problemas, pero no se

plantean alternativas de solución más allá de las “recomendaciones” de los trabajos de investigación. Se

entiende claramente que no toda la investigación será utilizada con fines prácticos o que las decisiones de

política pública serán tomadas con base en los resultados de las mismas. De acuerdo a lo encontrado, el

fin principal de la investigación es académico o ilustrativo (Weiss, 1980) pero por lo general no tiene

impacto más allá de ciertos círculos que no son en términos generales los estratos que están sufriendo la

problemática. Por otra parte, el hecho de que se “repitan” investigaciones o líneas base está directamente

relacionado con la desconexión existente entre los diferentes organismos que realizan investigación y la

credibilidad de los datos estadísticos proporcionados por las fuentes oficiales. Esta desconexión nos lleva

a duplicar esfuerzos y a resguardar la información en lugar de compartirla. Hay muchas instituciones y

organismos tanto gubernamentales como no gubernamentales haciendo investigación, pero al final es una

especie de vigores dispersos; todos quieren cubrir todo y solo confían en “sus propios” datos.

9

El hecho que la mayoría de la investigación que se realiza en los ámbitos económico, educativo y

de salud sea de tipo descriptivo plantea otro problema pues los estudios se realizan de manera atomizada,

sin establecer sinergias entre las áreas y sin buscar la complementariedad de los resultados. Contar con

estudios descriptivos es válido en una primera fase de análisis de la problemática, sin embargo, se debe

continuar escalando en el grado de complejidad de manera que se lleguen a indagar y probar hipótesis de

tipo correlacional y explicativo.

Las capacidades instaladas en investigación son como menciona Tunnerman (2000) una

muestra del subdesarrollo de nuestros países. La interrogante fundamental que surge ante la problemática

de la investigación descriptiva es ¿Se puede con este tipo de investigación contribuir a alcanzar el

desarrollo humano? O ¿Aporta este tipo de investigación a la gestión del desarrollo humano? Aunque

algunos autores como Licha (2007) plantean que existe una relación directa entre investigación y

desarrollo (al menos en los países centrales), cabe preguntarse si la investigación que se realiza en los

países subdesarrollados en lugar de “liberarnos” y acercarnos al desarrollo, nos limita y nos mantiene en

un círculo vicioso en el que seguimos enfocados en describir los problemas, pero no en buscar

alternativas de solución.

2. MÉTODOS Y MATERIALES

Poder realizar una caracterización de los procesos de investigación implicó delimitar el área de

análisis a algunos aspectos que pudieran ser comunes –comparables- entre las diferentes investigaciones

realizadas. En este sentido las características se delimitaron a las siguientes categorías de análisis: Año de

publicación, paradigma, enfoque, alcance, temática, autor, metodología e impacto de las investigaciones

en las áreas específicas de Salud, Economía y Educación.

Para el desarrollo de la investigación, se planteó un Diseño Hermenéutico que conllevó un

análisis comparativo de contenido que se realizó mediante un trabajo bibliográfico accesando a bases de

datos especializadas sobre la temática. En el área económica, se revisaron 211 trabajos de investigación,

en el área de la salud 380 trabajos y en el área de educación 193, todos realizados y publicados entre 1980

y 2015.

El estudio de las investigaciones realizadas en el país en estas áreas requirió además la realización

de entrevistas a informantes clave en cada área; en este sentido se entrevistaron 8 expertos en cada área

para un total de 24 especialistas entrevistados.

10

El análisis de la información recabada se realizó mediante el modelo planteado por Miles y Huberman

(1996) que conlleva una fase de reduccion de datos, una fase de transformacion y una fase de extraccion

de conclusiones.

3. DISCUSIÓN TEÓRICA

Al hablar de investigación científica y desarrollo existen dos posturas muy bien diferenciadas, por

un lado, está la idea de que la investigación científica promueve el desarrollo y por otra parte la idea que

es el desarrollo el que promueve la investigación. Desde la primera línea se plantea que existe una

relación “innegable” entre investigación y desarrollo (Licha, 2007); en tanto por otra parte se plantea que

la investigación científica en los países subdesarrollados es también subdesarrollada y por ende su aporte

a la solución de los problemas de la región y al desarrollo social es demasiado limitado. (Herrera, 1995;

Tünnerman 2000)

Ahora bien, la investigación científica hace referencia a la aplicación del método científico al

estudio de fenómenos sociales como la pobreza y la desigualdad social, como a la generación, adquisición

y aplicación de nuevo conocimiento en todos los ámbitos sociales, económicos, políticos y culturales. En

términos generales, el fin último de la investigación científica es contribuir al bien común.

La investigación es vista entonces como una vía para llegar al desarrollo (científico, tecnológico,

económico, etc.) y por ende cada país genera políticas científicas en pro de la búsqueda de soluciones a

los problemas de la región.

En este sentido, Herrera (1995) plantea que el principal problema de la investigación en América latina es

precisamente que no cumple con esa misión de búsqueda de soluciones, ya que se encuentra por lo

general desconectada de la sociedad a la que pertenecen. En tanto que en los países desarrollados la

mayor parte de la investigación se realiza en función de temas relacionados con sus objetivos nacionales.

De ahí que el progreso científico se refleja en su industria, tecnología y en términos generales en

un incremento en la producción. La investigación en América Latina por su parte, guarda muy poca

relación con los problemas de la región, hay una clara falta de correspondencia entre lo que se investiga y

las necesidades de la sociedad. Un factor determinante del atraso (subdesarrollo) investigativo en la

región tiene que ver con la pobreza y la escasez de los recursos humanos disponibles. En este sentido se

retoma lo que planteaba Harbison (1963) cuando se manifestaba en relación con las capacidades de

investigación de los países subdesarrollados y afirmaba que “el problema básico en la mayoría de los

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países subdesarrollados no es la escases de sus recursos naturales, sino el subdesarrollo de sus recursos

humanos.”

En el mismo sentido incluso la CEPAL (Citado por Herrera, 1995) reconoce esta característica cuando

asegura que:

La investigación tecnológica se ha desarrollado como un apéndice de la investigación

universitaria de carácter especulativo, como una forma de complementar la enseñanza teórica

con el entrenamiento práctico, más que con la intención de atender directamente las necesidades

de los medios industriales… (Herrera, 1995, p. 5)

A pesar de las situaciones negativas que enfrenta la investigación científica en los países

subdesarrollados, esta también se ha granjeado algunos triunfos que se deben en gran medida a la

inyección de la ayuda financiera adecuada por parte del gobierno, el sector privado (mediante la industria)

y los organismos internacionales en algunos países. Los éxitos de las economías que han surgido

recientemente en el sudeste de Asia (a pesar de la actual crisis económica) también han venido a apoyar la

idea de que, en una economía impulsada por la ciencia y la tecnología, la “economía del saber” se vuelve

fundamental y está por lo general se desarrolla en las universidades. En la actualidad, es terreno común

que los gobiernos esperan que la universidad desempeñe su papel de agente importante del crecimiento

económico y el desarrollo. No obstante, ello tiene su precio. La inyección de fondos públicos en la

universidad para la investigación exige la rendición de cuentas, que podría depender directamente de un

órgano exterior sin recurrir a los procedimientos de evaluación de la universidad. Ello podría influir

negativamente en un principio al que la universidad tiene mucha estima, a saber, el respeto de la libertad

de cátedra y la libertad de elección a la hora de llevar a cabo la investigación.

Por otra parte, en otros países se plantea el problema de la investigación realizada fuera de la

universidad. El gasto público total en investigación se suele repartir entre la universidad y otros institutos

o centros de investigación nacionales especializados, mientras que las empresas multinacionales tienen

sus propios laboratorios de investigación. La investigación avanzada ha dejado de ser monopolio de la

universidad y en términos generales, los resultados obtenidos en institutos nacionales de investigación y

en la industria pueden ser confidenciales y no ser revelados al público de la investigación hasta que no

han transcurrido dos o tres décadas en algunos casos, por ejemplo, en la investigación bio-médica. Los

conocimientos han dejado de difundirse inmediatamente a todos aquéllos que podrían utilizarlos. Es

evidente que esta situación complica el principio normativo de la universalidad del conocimiento. De este

modo, la libertad de efectuar investigaciones y de difundir sus resultados y la libertad de comunicarse con

otros investigadores y de difundir la información relativa a la investigación (estos valiosos derechos)

12

están en peligro, lo que acarrea consecuencias que previsiblemente serán nefastas para la formación de la

próxima generación de investigadores. (Akyeampong, 1998)

Dado que la ineficiencia o una débil eficiencia de los procesos de investigación tienen un impacto

directo sobre los problemas humanos nos parece fundamental acentuar la eficacia de las instituciones y

las administraciones de los programas de investigación que puedan utilizar las disponibilidades científicas

nacionales y conlleven a la creación de una tradición científica y de un capital de investigación en las

sociedades subdesarrolladas. Estos programas de investigación se pueden eventualmente convertir en

instrumentos de sus estrategias de desarrollo (Lecerf, 1967) pero para ello es preciso dar centralidad a la

cuestión social, y en dicho marco (re)definir la agenda de investigación científica, a través de un proceso

democrático que asegure y explicite el compromiso de la ciencia con el desarrollo.

En el caso de nuestro país es también urgente además de pensar la investigación para el

desarrollo humano, es decir aquella cuyos resultados promuevan el desarrollo de las capacidades de la

gente, se hace necesario pensar en la investigación científica para gestionar el desarrollo humano, es decir

una investigación que nos lleve a una comprensión de los procesos de desarrollo pero que además revise

los modelos y supuestos teóricos y proponga otras formas de desarrollo.

4. RESULTADOS

Investigaciones Económicas

En cuanto a las investigaciones en el área económica se realizó la búsqueda y evaluación de trabajos y

proyectos de investigación realizados desde 1980 hasta la actualidad, con el fin de conocer principalmente

la metodología utilizada. A continuación, se presentan los resultados del análisis de estas investigaciones

en función de algunos aspectos metodológicos fundamentales y que permiten una visualización del

comportamiento de las mismas en los últimos años.

El paradigma de investigación con relación a los estudios económicos analizados, reflejan un uso

similar entre el paradigma interpretativo y el positivista, con un uso del 44.5% para el primero y de

aproximadamente un 47% para el segundo. Se puede notar una tendencia de investigación desde un

paradigma interpretativo en los 80 y la incorporación de investigaciones socio críticas a partir del año

2000.

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Tabla 1 Investigaciones económicas según paradigma y año de publicación

Año de

Publicación

Paradigma Total

Sin

Especificar

Interpretativo Positivista Socio

crítico

80´s 0 8 1 0 9

90´s 0 6 10 0 16

2000-2009 0 40 40 10 90

2010 a la

actualidad

1 40 48 7 96

Totales 1 94 99 17 211

Asimismo, se observa que existe un predominio de investigaciones económicas bajo un enfoque

cuantitativo, alrededor del 56% de estas siguen esa línea. Es importante destacar que contrario a lo que

podría pensarse existe una amplia cantidad de investigaciones bajo la óptica cualitativa con un 39%. Se

observa también que las tendencias favorecen a los estudios cuantitativos con el pasar de los años.

Tabla 2 Investigaciones económicas según enfoque y año de publicación

Durante el análisis se encontró que alrededor del 36 por ciento de los estudios realizados en el

área económica son descriptivos, seguidos por un 23 por ciento que son correlacionales y un 20% que son

Año de

Publicación

Enfoque Total

Sin

Especificar

Cualitativo Cuantitativo Mixto

80´s 0 7 2 0 9

90´s 0 5 10 1 16

2000-2009 2 38 46 4 90

2010 a la

actualidad

1 32 60 3 96

Totales 3 82 118 8 211

14

explicativas. Las investigaciones de carácter documental ocupan un 15% de las investigaciones. A partir

del año 2000 se suman las investigaciones exploratorias y los estudios de caso.

Tabla 3 Investigaciones económicas según alcance y año de publicación

Alcance Año de Publicación Total

80´s 90´s 2000-2009 2010 a la

actualidad

Sin especificar 0 0 0 1 1

Exploratoria 1 1 2 1 5

Descriptiva 2 4 31 36 73

Correlacional 0 4 25 19 48

Explicativa 1 4 20 18 43

Documental 5 3 5 19 32

Histórica 0 0 1 0 1

Estudio de Caso 0 0 6 2 8

Totales 9 16 90 96 211

El diseño no experimental es el más utilizado en las investigaciones analizadas, dado que en su

conjunto representan el 76% de los mismos, el uso de este es predominante a lo largo de los años. Esto

muestra que la mayoría de investigación está enfocada desde una visión positivista, pero no llega a

plantear modelos experimentales, es decir la investigación sigue describiendo y en algunos casos

buscando relaciones, pero no se hacen pruebas (experimentos) que permitan la comprobación de hipótesis

Investigaciones Educativas

Los Autores y organismos que promueven la investigación educativa en el país se distribuye de la

siguiente manera: Academia 95%, sector privado 2%, ONG 1% y sector público 1%; en lo cual destaca

que la academia es el sector que más investigaciones en el área educativa produce en el país. (Y en

términos generales en todas las áreas) Para detallar de una mejor manera la identificación de las

instituciones pertenecientes a cada sector, a continuación, se presenta los datos en la tabla siguiente.

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Tabla 4 Investigaciones educativas en Honduras 1980-2015 según institución

Institución Cantidad de

investigaciones

Porcentaje de

investigaciones

UNAH 43 22%

Organismos de

Cooperación

5 3%

UNESCO 1 1%

UNICAH 5 3%

UNION EUROPEA 1 1%

UNITEC 6 3%

Universidades

internacionales

4 2%

UPNFM 123 64%

No identificado 5 3%

Total 193 100%

Las investigaciones realizadas se encontraron en diferentes formatos, 63% son tesis de maestría,

30% son artículos en revistas científicas, 4% son informes técnicos y 3% son tesis doctorales. Siguiendo

la línea del análisis anterior, siendo las tesis el formato de informe que predomina, en éste tienen un fuerte

peso las tesis de maestría de la UPNFM. El rango de aplicación de las investigaciones pertenece 37% a

educación superior, 30% a educación media, 20% a educación básica, 11% una aplicación transversal, es

decir, a la vez en varios sectores y 1% a educación pre básica.

Tabla 5 Investigaciones educativas en Honduras 1980-2015 según período

Período Cantidad de

investigaciones

Porcentaje de

investigaciones

80s 1 0.5%

90s 1 0.5%

2000-2009 86 44%

2010 a la

actualidad

103 54%

No

identificado

2 1%

Total 193 100%

16

El período con más investigaciones educativas realizadas es el 2000 a la actualidad, lo que está

directamente relacionado con el aumento de las tesis de maestría de la UPNFM y también con el aumento

de la oferta de posgrados en dicha universidad.

En cuanto a la metodología empleada para la realización de las investigaciones en el ámbito

educativo, las investigaciones analizadas presentan una diversidad de diseños metodológicos, estos se

describen detalladamente a continuación. Sobre los paradigmas, el positivista fue utilizado en el 47% de

las investigaciones y el interpretativo en el 25%; el 28% de las investigaciones no explicitan el

paradigma utilizado.

En cuanto al enfoque, el más utilizado fue el cualitativo, que está presente en el 41% de las

investigaciones, seguido por el cuantitativo en el 39% y por último el mixto en el 18% de las

investigaciones; cabe mencionar que el 1% de las investigaciones no tenía explícito este dato. Para

detallar más en los aspectos metodológicos, la siguiente tabla muestra los diseños empleados en las

investigaciones educativas.

Tabla 6 Investigaciones educativas en Honduras 1980-2015 según diseño de investigación

Diseño Cantidad de

investigaciones

Porcentaje de

investigaciones

Experimental 14 7%

No experimental 107 55%

Fenomenológico 20 10%

Etnográfico 7 4%

Investigación

acción

15 8%

Teoría

fundamentada

4 2%

Narrativo 5 3%

Documental 14 7%

No identificado 7 4%

Total 193 100%

17

En los diseños, el más utilizado, al igual que en las investigaciones económicas, fue el No

experimental, con una cantidad bastante superior a los demás diseños, los cuales se mantienen en

porcentajes similares. Sobre los alcances utilizados, destaca como el primero el descriptivo con el 49% de

las investigaciones, seguido por el correlacional con 19%, después el exploratorio con 15% y por último

el explicativo con 12% porcentaje aún más bajo que el de las investigaciones en el área económica; cabe

mencionar que en el 5% de las investigaciones, no se especifica el alcance.

En cuanto al impacto o aporte que se logra a través de estas investigaciones, se encontraron dos

tipos de aportes más utilizados siguiendo la taxonomía de Carol Weiss (1980), uno es el de resolución de

problemas, que implica, a través del conocimiento generado, resolver un problema específico del tomador

de decisiones. Este modelo implica que hay acuerdo o consenso general entre los investigadores y los

hacedores de política en la solución o estado final del problema. El otro tipo de aporte es el iluminado, en

el cual la investigación gradualmente informa sobre los problemas y la identificación de opciones de

política. Sirve para “educar” al hacedor de política, es decir, con el tiempo la acumulación de

investigación influirá en la política, luego de que ha estado instruyendo al hacedor de política. (Weiss,

1980)

Tabla 71 Investigaciones educativas Honduras 1980-2015 según tipo de aporte por el modelo Weiss

Tipo de aporte Cantidad de

investigaciones

Porcentaje de

investigaciones

Iluminado 54 28%

Interactivo 38 20%

Lineal 33 17%

Político 10 5%

Resolución de

problemas

56 29%

Táctico 1 1%

No identificado 1 1%

Total 193 100%

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Investigaciones en Salud

En Honduras la investigación en salud ha dado pasos significativos. El sistema de salud hondureño está

constituido por el sector público, compuesto por la Secretaría de Salud y el IHSS, y el sector no público o

privado, con y sin fines de lucro. En términos de investigación los trabajos científicos que se realizan son

liderados por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).

En el área de salud la mayor cantidad de investigaciones se realizaban en los años 80’s desde un

paradigma positivista, lo cual es acorde a su tradición de formación como parte de las ciencias “duras”. A

partir de los años 90, sin embargo se ha venido dando un incremento de investigaciones que se realizan

desde un paradigma interpretativo; es decir investigaciones que más que explicar y predecir los

fenómenos como se hace desde el positivismo, busca profundizar en las causas de los fenómenos.

Tabla 82 Investigaciones en salud según enfoque

Acorde con los datos anteriores sobre el paradigma, el enfoque de investigación empleado a partir

de los años 90 es el cualitativo. Esto implica que se han enfatizado los estudios en el área de la salud en

conocer aspectos cualitativos de la problemática en salud, sin embargo, esto plantea el reto de que la

investigación cualitativa por lo general no busca probar hipótesis o teorías.

Otro aspecto interesante en las investigaciones realizadas en el área de salud es que estas han sido

realizadas ya sea por la academia (133) y la mayoría por la sociedad civil. Esto parece indicar que por

parte del gobierno y el sector privado, el sector salud no es una de sus prioridades en investigación.

Año de

Publicación

Enfoque Total

Sin

Especificar

Cualitativo Cuantitativo Mixto

80´s 0 17 56 0 73

90´s 0 65 10 0 75

2000-2009 1 63 5 0 69

2010 a la

actualidad

1 43 58 0 102

Totales 2 188 129 0 319

19

Tabla 9 Investigaciones en salud según organismo

Organismo Año de Publicación Total

80´s 90´s 2000-2009 2010 a la

actualidad

Academia 22 88 10 13 133

Independientes 0 0 0 5 5

Sector Privado 0 0 0 0 0

Sector Publico 0 0 0 0 0

Sociedad Civil 55 73 106 102 336

Totales 77 161 116 120 474

Como punto final es importante destacar la relevancia que posee la investigación como tal, dado que

es considerada el punto de partida para generar incidencia y cambios razonados, que vayan acorde a las

políticas de país, aunque es lamentable que se vean opacadas por ideales políticos o por no proceder de

organismos internacionales, por tal motivo no todas las investigaciones o proyectos logran desembocar en

una política pública; quedando limitados los aportes de estas investigaciones que independientemente de

su calidad no logran figurar e incentivar el cambio y desarrollo de Honduras.

5. CONCLUSIONES

La mayoría de investigación está enfocada desde una visión positivista, pero no llega a plantear modelos

experimentales, es decir la investigación sigue describiendo y en algunos casos buscando relaciones, pero

no se hacen pruebas (experimentos) que permitan la comprobación de hipótesis. No se ha fortalecido la

integración metodológica, por lo general la investigación o es cuantitativa o cualitativa.

Actualmente se investiga predominantemente temas del área macroeconómica, manteniéndose la

herencia investigativa en este campo, dentro de la misma cabe destacar que en su mayoría la investigación

desde el punto de vista epistemológico es cuantitativa y siguiendo esta línea se observa que los estudios

son predominantemente sobre investigación aplicada de tipo descriptivo.

20

El mayor aporte de investigaciones educativas lo tienen las maestrías de la UPNFM, por eso es

que en los registros el tipo de documento con más frecuencia son las tesis de maestría, las cuales se

centran en educación media.

Las investigaciones en el área de la salud se han obtenido hallazgos importantes que provocan

discusiones con significativos aportes al conocimiento y a la academia, pero estos no están alcanzando

sobrepasar la barrera de la discusión, es decir no están llegando como insumo fundamental a los

tomadores de decisión o los hacedores de política en salud.

Una de las principales debilidades encontradas es a nivel metodológico, pues se detecta incoherencia

entre paradigmas, enfoques y métodos (diseños) de investigación. Se detectaron además problemas con el

manejo del muestreo, lo que puede llevar a la invalidez de los datos presentados por debilidades

metodológicas y por ende, a perder datos y recursos valiosos por debilidades metodológicas o técnicas.

6. RECOMENDACIONES

Se recomienda continuar fortaleciendo la enseñanza-aprendizaje de la investigación particularmente a

nivel de pregrado, de manera que los estudiantes puedan contar con bases sólidas de investigación y al

estudiar un posgrado puedan plantearse investigaciones metodológicamente más sólidas y relevantes.

Pasar de lo meramente descriptivo a lo correlacional y experimental es un proceso que pasa por la

formación antes mencionada, pero además implica la utilización de la información y resultados ya

obtenidos, de manera que los esfuerzos anteriores sean potenciados y utilizados de manera sistemática.

El desafío para la investigación científica en el país es fomentarla como herramienta para la toma

de decisiones, el investigador debe de comprender que la investigación es parte de su actividad cotidiana,

pero no solo el fomento de la investigación también hay que potencializarla formando alianzas

estratégicas instituciones del gobierno, academia e instituciones privadas con miras a fortalecer la

investigación desde los recursos económicos, formación del recurso humano que sean capaces de realizar

investigaciones sólidas sobre temas relevantes que esté orientada a resolver problemas.

21

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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Caracas: UCV.

Weiss, C. (1980). Social Science research and decision-making. New York: Columbia University Press.

22

El desafío de la educación ciudadana en la formación inicial docente: Educar

la razón y las emociones

Elma Barahona Henry

Vicerrectoría de Investigación y Postgrado

Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán

[email protected]

RESUMEN

En la actualidad se aspira que la universidad juegue un rol relevante en diferentes escenarios de la

sociedad en donde se inserta. Uno de ellos es la formación de profesionales que las sociedades demandan,

sin embargo, aunque la presión actual es atender las exigencias del mercado, las universidades deben

apostar a propósitos más amplios. En el caso de la formación inicial docente, se deben formar

profesionales que realicen un doble papel, en primer lugar, que se desempeñen como ciudadanos y en

segundo lugar, que formen a otros para que puedan ejercer este rol. El desafío es aportar para que los

futuros docentes, alcancen un nivel de conocimientos, habilidades, actitudes y aptitudes, que les

permitan interactuar con escenarios cada vez más cambiantes y complejos en las formas de vivir y

convivir. Lo anterior implica, una formación ciudadana integre conocimientos y un conjunto de

capacidades asociadas a la educación de la razón, las emociones y sentimientos. Esta reflexión es la que

se desarrollará en este trabajo.

PALABRAS CLAVE

Universidad, formación ciudadana, formación inicial docente, razón, emociones y sentimientos.

ABSTRACT

Today the university is expected to play an important role in different stages of the society in which it is

inserted. One is the formation of professionals that the society demands, however the current pressure is

to exceed market demands, and universities must commit to broader purposes. In the case of initial

teacher training, they must prepare with professionals who perform a dual role, first, those who work as

citizens and secondly, to train others so they can practice this role. The challenge is to provide for future

teachers, a level of knowledge, attitude, social and professional skills that allows them to surpass the

changing and complex forms of life and coexistence. This implies a civic education of integrate and a set

of skills related to the education of reason, emotions and feelings. This reflection is to be developed in

this work.

Recibido 23 de octubre de 2016 /Aceptado 6 de noviembre de2016

23

KEYWORDS

University, civic education, teacher initial training, reason, emotions and feelings

INTRODUCCIÓN

Una de las funciones sustantivas de la universidad es la formación de profesionales que las sociedades

requieren, por tanto, los cambios que viven las sociedades exige a la universidad replantearse sus

procesos de formación. Estos cambios los explicó Bauman (2000), a través del concepto de “modernidad

liquida” refiriéndose a los distintos cambios de orden social, cultural, económico, político, entre otros, en

donde a las personas no les resulta fácil identificar la evolución de los acontecimientos, ya que los

mismos tienden por ser más impredecibles que predecibles, cambian constantemente, no son situaciones

duraderas, lo que desafía la capacidad individual y colectiva para planificar, organizar y predecir el

futuro, poniendo además en cuestionamiento las formas de convivir centradas en normas y valores

compartidas e ingresar en una dinámica en donde las personas y colectivos definen sus propios estándares

de convivencia, pudiendo rechazar otros.

En este escenario, la universidad están desafiada a formar en habilidades y conocimientos

especializados, pero además, en promover el desarrollo de capacidades relacionadas con la razón, las

emociones y los sentimientos, no como un fin en sí mismos, sino con el objetivo de que éstas personas se

preparen para su vida en sociedad desde los diferentes escenarios en donde les corresponda

desempeñarse, en resumen, deben aprender a convivir consigo mismas y con otros.

En la actualidad, el discurso educativo se ha centrado en que los profesionales deben responder a

las demandas del mercado, lo cual hasta cierto punto es una demanda real, sin embargo, las sociedades

requieren de mucho más para poder alcanzar niveles de desarrollo humano sostenible que favorezcan a

toda la población; se requiere que éstos profesionales también se formen como ciudadanos que deben

vivir en sociedades con valores democráticos, en suma se requiere de formación ciudadana. Sin embargo,

Martha Nussbaum ha alertado de esta “crisis silenciosa” cuando planteó que

“Sedientos de dinero, los estados nacionales y sus sistemas educativos están descartando sin

advertirlo ciertas aptitudes que son necesarias para mantener viva la democracia. Si esta tendencia

se prologa en todo el mundo en breve se producirán generaciones enteras de máquinas utilitarias,

en lugar de ciudadanos cabales con capacidad de pensar en sí mismos, poseer una mirada crítica

sobre las tradiciones y comprender la importancia de los logros y sufrimientos ajenos” (2001,

pág.16).

Para vivir en democracia, la persona debe ser educada para ello, no una capacidad biológica

inherente al ser humanos, implica la apropiación de las herramientas de la cultura. Es producto según

Savater (1997) de un segundo nacimiento, el social. La persona debe aprender un conjunto complejo de

conocimientos y comportamientos que la habilitan para vivir en un tipo de sociedad, en donde las

24

personas deben aprender a vivir juntas, dada la diversidad que caracteriza a la misma. Lo que supone

formarse en valores como tolerancia, aceptación, justicia, respeto, entre otros.

Si bien, Pozo (2014) planteó que la persona viene dotada de una estructura biológica, a través de

dos grandes sistemas de aprendizaje: implícito y explícito; es en sociedad donde desarrollan, y es ahí

donde los contextos formales de educación juegan un rol central, ya que alcanzar estos aprendizajes

supone todo un trabajo formativo a través de procesos explícitos de enseñanza, siendo así que la

educación y los docentes juegan un rol central.

La educación ciudadana y la formación inicial docente

La formación de profesionales puede verse desde dos perspectivas, están las universidades generalistas,

que forman en los diferentes campos del saber y las universidades especializadas que forman en campos

específicos. En las universidades generalistas, la definición de la formación profesional supone establecer

un marco común capacidades y conocimientos para la educación ciudadana en este conjunto de

profesiones. En el caso de una universidad especializada, como la Universidad Pedagógica Nacional

Francisco Morazán (UPNFM), el desafío está en definir en la Formación Inicial de Docentes(FID) dentro

de su perfil de ingreso y egreso, la competencia de formación ciudadana, ya que los futuros docentes

tienen el desafío de formar a otros para vivir en una sociedad democrática. Es aquí donde la complejidad

se hace mayor ya que es una profesión dedicada a la formación de otros seres humanos, lo que lleva a

plantearnos la pregunta ¿es posible enseñar y aprender a convivir en sociedades democráticas? ¿Cómo un

docente puede alcanzar este propósito?

Lo anterior, supone conceptualizar la enseñanza y aprendizaje en un proceso que llamaremos

formación y que implica reconocer que las relaciones entre humanos están mediadas según Pozo (2014),

por procesos de aprendizaje tanto implícitos (sin la intención de aprender),como explícitos (con la

intención de aprender), es decir, las personas aprenden tanto de lo que otros dicen (discurso) como de lo

que no dicen (modelamiento), dándose niveles de conexión entre ambos sistemas de aprendizaje.

En el caso de la formación para la ciudadanía democrática, las instituciones formadoras deben

desarrollar contextos explícitos de enseñanza y de aprendizaje orientados a este propósito, los cuales

deben ser diseñados, implementados y evaluados, para valorar sus alcances y limitaciones. Esto debe ser

así, ya que una de las creencias generalizadas a nivel universitario, es que al recibir a estudiantes viviendo

diferentes etapas de su adultez, este tipo de formación no corresponde y a que ellos ya vienen aprendidos,

situación que nos es así. Según señaló Ruiz-Corbella y García Blanco (2016), al analizar la

implemetanción la formación ciudadana en los diferentes niveles del sistema educativo, encontraron que

hay mayor énfasis en la educación primaria y que en la educación secundaria se presentan fuertes

debilidades y en algunos casos está ausente. En este sentido, la formación ciudadana debe concebirse

25

como un proceso evolutivo, que atraviesa las diferentes etapas del ciclo vital, siendo uno de los

aprendizajes que requieren ser cultivados a lo largo de la vida. En el caso de los jóvenes que ingresan a la

universidad, Gomá (2007) planteó, que los mismos se encuentran en una etapa de transisiòn en donde

deben pasar de un “estadio estético” propio de la dolescencia, a un “estadio ético” caracteristico de la

adultez. Esta transisión supone la definición de su proyecto vocacional y personal, con el objetivo de que

puedan posteriormente insertarse en sociedad, para cumplir sus roles como adultos en pleno ejercicio de

sus deberes y derechos, en un contexto democrático.

Lo anterior será posible si las universidades apuestan por este propósito de manera real, es así que

al revisar los modelos educativos se puede encontrar que la formación ciudadana está presente,

generalmente como ejes transversal, sin embargo, es en la implementación del mismo donde se encuentra

que no logra la robustez a la que se aspira, quedándose en nobles aspiraciones. Es de destacar, que este

tipo de formación, la cual forma parte de lo que se denomina estudios humanísticos, está sufriendo

cambios drásticos, como señaló Nussbaum (2011, pág. 17): “En casi todas las naciones del mundo se

están erradicando las materias relacionadas con artes y humanidades tanto a nivel primario y secundario

como a nivel terciario y universitario. Concebidas como ornamentos inútiles por quienes definen políticas

estatales (…)”.

En el caso de la formación inicial de docentes, el propósito es educar al futuro profesor para vivir

en democracia y que éste a su vez pueda formar a otros, lo cual supone integrar la educación de la razón,

de las emociones y sentimientos, constituyéndose en uno de los ámbitos centrales que debe manejar, de lo

contrario se centrará en la enseñanza y aprendizaje de las normas y valores sociales como reguladores

inquebrantables de la conducta, lo cual como evidencia la experiencia humana no funciona de ésta forma,

ya que las personas tienen la capacidad de “conectarse y desconectarse de sus normas morales” lo que

puede llevarlos a cometer actos inhumanosen su convivencia cotidiana (Bandura, 1999; Bandura,

Barbaranelli, Caprara, y Pastorelli, 1996, Zimabardo, 2007).

¿Qué es la formación ciudadana?

Es un concepto que está ligado a los estados modernos, hace referencia a los deberes y derechos, responde

a un modelo político vigente en un contexto geoeconómico, social e histórico determinado, de ahí que es

un concepto que está en permanente redefinición. La formación ciudadana es de alta relevancia, ya que la

vida en democracia supone su ejercicio y aprendizaje permanente, además, no formar en competencias

cívicas y sociales empobrece las opciones de los ciudadanos en cuanto a sus posibilidades de desarrollo

(Ruiz-Corbella y García Blanco, 2016). Formar para ser ciudadano es “sencillamente aprender a vivir

juntos en sociedades democráticas. (…) convivir es ante todo compartir, tomar parte en la vida ajena y

hacer partícipe de la propia” (Ruiz-Corbella y García Blanco, 2016; pág. 183).

26

Convertirse en ciudadanos, no supone la apropiación instrumental de leyes, normas, reglas, para

que posteriormente las mismas puedan ser ejercitadas, en los diferentes ámbitos donde les toque

desempeñarse, supone sustantivamente formar el carácter de la persona y esto exige educar en la razón,

las emociones y los sentimientos. Como señalaron Reyes, Campos, Osandón, y Muñoz (2013), el énfasis

en la formación ciudadana ha estado como conceptualización cognitiva y muy poco se ha desarrollado la

reflexión como sentido de las cosas. Esto supone comprender las diferentes dimensiones que implica la

educación ciudadana, ya que a través de la misma se deben potenciar procesos de humanización que

permitan la vida en colectividad. También pueden identificarse situaciones sociales en diferentes escalas

de magnitud donde las personas pueden causar daño a otras, pasando de comportamientos humanizantes o

comportamientos inhumanos y viceversa, no se trata de personas con problemas de conducta psicopática,

sino de personas comunes que pueden mostrar en su vida cotidiana conductas ciudadanas ejemplares,

como bien lo ha demostrado los estudios sobre la “maldad” realizados por Zimbardo (2007).

¿Qué significa educar en la razón?

Educar en la razón es desarrollar capacidades de argumentación, a través de la cual las personas sustentan

ideas que son explicables y razonables. Estas ideas han pasado por un proceso de valoración personal, es

decir, análisis, evaluación, reflexión que se concreta en toma de decisiones individuales, que al ser

compartidas colectivamente aportan al fortalecimiento de estilos de vida que benefician a la convivencia

democrática.

Es posible que haya argumentaciones que no beneficien colectivamente, pero esto supone aceptar

lo que es razonable a nivel individual y colectivo, sin que ello deba representar rupturas violentas, ya que

el disenso debe ser parte del proceso de construcción de la convivencia, constituyéndose en un proceso

regulador que permitiría avanzar hacia nuevos estadios de diálogo y conceso democrático. De ahí que

educar en la razón, es la mejor forma de responder ante las situaciones en donde las conductas

irracionales pueden afectar tanto a las personas y los grupos humanos, esto supone una actitud de

vigilancia crítica constructiva ante los excesos que puedan cometerse a título personal y colectivo,

llevando a actos deshumanizantes.

Para los educadores, supone comprender que los aprendizajes no solo pasan por tener

conocimientos, ya que como planteó Camps (2011), muchas veces se tiene amplios conocimientos, pero

eso no significa que la persona anhele lo bueno, porque sabe que es bueno, y desprecie lo malo, porque

sabe que es malo. El tipo de aprendizaje que requiere la convivencia humana, supone integrar los

conocimientos y las emociones, ya que estas últimas permean la capacidad de razonar. En este sentido

Savater plantea que (2012, pág. 43):

27

“La educación ya no puede centrarse en informar, sino que tiene que hacer un trabajo de

orientación; el educador es cada vez más una especie de brújula para orientarse en un flujo de

informaciones donde está mezclado lo trivial, lo necesario, lo importante, lo falso y lo verdadero”.

Por otro lado, en la actualidad ya no se discute qué es más relevante si la razón o las emociones,

la comunidad académica, experta en estos temas, plantea que ambas son dos caras del aprendizaje

humano (Camps, 2011; Damasio, 1995, 2003; Pozo, 2014, entre otros).

¿Qué significa educar en las emociones y los sentimientos?

Las emociones ha sido objeto de estudio patrimonio de la psicología en donde surgió el concepto de

“inteligencia emocional”, originalmente descrito por Mayer y Salovely en 1997, Salovely y Mayer 1990

(citados en Salovely y Pizarro, 2003). En la actualidad, se estudian desde otras ciencias, ya que si bien, la

capacidad de razonar se considera característica propiamente humana, las emociones según de Wall

(2005), es una capacidad compartida con otras especies.

Sobre las emociones, Damasio (1999) explicó que tienen como característica su activación sin

esfuerzo consciente y su regulación requiere de un proceso consciente. Cuando las emociones se

combinan con los pensamientos se está hablando de los sentimientos y es en este nivel, donde se requiere

la educación integral de la razón, las emociones y los sentimientos, ya que supone la educar la

“sensibilidad” (Camps, 2011), considerada como una capacidad fundamental para apreciar y aceptar la

diversidad que implica convivir con otros y avanzar en el “proceso de humanización”.

Para vivir en democracia se requiere por tanto, educar en estos dos ámbitos de manera explícita,

porque los seres humanos si bien venimos dotados de una estructura biológica a nivel cognitivo y

afectivo, ésta debe potenciarse en sociedad. También debe destacarse que aun cuando se apueste de forma

explícita por una formación ciudadana, como se ha apuntado anteriormente, las irrupciones de la

naturaleza humana básica no quedan suprimidas.

Zimbardo (2008), a partir de su experimento sobre la “Cárcel de Stanford” y los trabajos que

desarrolló como especilista en la evaluación de los abusos de militares estadounidenses en la Cárcel de

Abu Graib en Irak, explicó cómo las personas consideradas buenas pueden sufrir transformaciones de su

carácter producto de las presiones que ejerce una situación y el sistema, o por el contrario, cómo personas

consideradas malas, pueden tener acciones compasivas. Y en otros casos, cómo personas que ante las

presiones de la situación y del sistema, logran mantener su humanidad, estos ultimos se consideran claves

para comprender el proceso de humanizaciòn.

Es así como, la formación ciudadana no debe entenderse como la apropiación de normas morales

y valores, como un fín en sí misma, sino que debe comprenderse como un complejo proceso de cómo

estas normas son asimiladas y ejercidas en función de la situación y el contexto, de forma individual y

28

colectiva. Estudios realizados por Bandura (1996; 1999; 2015), han explicado como las personas pueden

transgedir las normas a través de un proceso de “desconexion moral”, que las lleva a incluir y excluir a

otros de su categoria de humanidad, lo que puede generar conductas que infligen daño y dolor a terceros y

sin ningun problema seguir viviendo consigo mismas.

Reflexiones finales

La sociedad actual se caracteriza por la complejidad de sus relaciones humanas, lo cual se manifiesta en

las diferentes crisis que se experimentan: refugiados, conflictos armados, xenofobia, racismo,

criminalidad internacional organizada, polarización política, entre otros, y que provocan consecuencias e

impactos generacionales, como bien lo han mostrado estudios realizados en sociedades que viven o han

vivido daño psicosocial en diferentes niveles (Faùndez y Brackelair, 2011). Asimismo, se pueden

identificar ejemplos de sociedades que ha apostado por construir y reconstruir desde la democracia,

nuevas formar de convivir, a través del cultivo de actitudes como perdón, reconciliación y reparación.

Bandura (1991) destacó que las normas morales y valores compartidos son vitales para el funcionamiento

humano en sociedad. Muchas formas de comportamiento son ventajosas a nivel individual, pero afectan o

infringen los derechos de otros, de ahí que sin la exigencia de códigos compartidos, pueden generarse

conflictos sociales de distinto tipo y escala.

Es indiscutible, lo que sucede en un sistema social afecta sus diferentes niveles y la escuela,

entendida en el sentido amplio como institución formadora que está dentro de la sociedad, experimenta

los efectos ya sean positivos o negativos, en este contexto el rol mediador del docente es clave en la

formación ciudadana. Un ejemplo de lo anterior, se encuentra en el estudio realizado por Toledo y

Magedzo (2011), quienes analizaron el manejo de temas controversiales en el aula de clase, en escolares

de sexto básico de entre 11 y 12 años, referido al golpe de estado y dictadura chilena como momento

histórico. Estos autores encontraron que

“(…) El profesor se apropia de propósitos y recomendaciones ministeriales. Los resultados,

presentados en forma de un relato cronológico de 8 clases impartidas, evidencian la tensión entre

la intención del profesor de no manifestar su opinión y la necesidad de los estudiantes de

conocerla y el deseo de los estudiantes de explicitar sus memorias y la dificultad de integrar la

historia familiar con la historia colectiva. Se observa el conflicto de memorias y el trabajo de la

memoria familiar que posibilita la clase. Se evidencia la necesidad de estrategias pedagógicas que

incluyan la memoria colectiva y las emociones en la enseñanza de la historia” (pág. 147).

Educar para convivir en la diversidad siempre será la mejor apuesta de cualquier institución

formadora que eduque humanos en cualquier etapa evolutiva, ya que el desarrollo de las mejores

capacidades supone caminar en un proceso de humanización. Este proceso requiere la apropiación de las

29

herramientas y modelos de la cultura, que permitan a las personas vivir en sociedades humanas. Hayes

(2016) encontró que los seres humanos vienen dotados biológicamente de un conjunto de capacidades que

permiten adaptaciones a nivel psicológico haciendo posible los procesos de enseñanza, es así como estos

mecanismos de aprendizaje de dominio general, que son de orden biológico, al interactuar con el contexto

sociocultural hacen posible el aprendizaje a través de la enseñanza.

Estudios realizados desde diferentes ciencias como ser psicología cognitiva y del desarrollo,

filosofía, sociología, antropología, neurociencias cognitivas, en otras, aportan evidencia a nivel teórico y

empírico, que la formación ciudadana no sólo es posible sino que es impostergable, considerándose en la

actualidad una de las tareas relevantes para una universidad, que tiene la enorme responsabilidad, en el

caso de la UPNFM de formar a los formadores de las futuras generaciones de ciudadanos, en este caso de

hondureños, que dadas las condiciones que genera la globalización, también se constituyen en ciudadanos

del mundo. En conclusión, la formación para una ciudadanía democrática es posible si se educa de

manera integral la razón y las emociones través de un proyecto académico explicito que permita alcanzar

este gran propósito.

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31

EPISTEMOLOGÍA DE LA FORMACIÓN DOCENTE: UNA MIRADA CRÍTICA

Pastor Umanzor

Departamento de Matemáticas

Centro Regional San Pedro Sula

Universidad Pedagógica nacional Francisco Morazán

[email protected]

RESUMEN

Este ensayo sugiere una revisión de conceptos con origen universal y que se utilizan en la formación de

profesionales de la educación de manera indistinta, lo que origina confusiones a la hora de diferenciar la

formación de docentes de la formación docente. Igual sucede con los conceptos: métodos, técnicas,

estrategias, procedimientos y procesos. Por experiencia propia y en conversaciones con diferentes

profesionales en distintas universidades, profesores y estudiantes los aceptan como conceptos conocidos,

aunque con diferentes significados.

De lo que trata el ensayo es intentar diferenciar esos conceptos y dar una perspectiva académica a la

formación docente, que debe ser el resultado del intercambio de conocimientos sustantivos y sintácticos

de las ciencias particulares y, principalmente, de los conocimientos pedagógico-didácticos-psicológicos

atinentes al hecho formador: un profesor debe saber enseñar.

PALABRAS CLAVE

Epistemología de la educación, de la investigación, de la formación de docentes, de la formación docente.

ABSTRACT

This essay suggests a review of concepts with a universal origin and that are used in training education

professionals interchangeably, resulting in confusion differentiating the training of teachers with teacher

training (the preparation that a person possesses) . The same happens with the concepts: methods,

techniques, strategies, procedures and processes. By own experience and in discussions with different

professionals in different universities, teachers and students accept them as known concepts, but with

different meanings.

What this essay is about is an attempt of trying to differentiate these concepts and give an academic

perspective to teacher training, which should be the result of the exchange of substantive and syntactic

knowledge of sciences, and especially the pedagogical-didactic-psychological knowledge pertaining to

the trainer issue: a teacher must know how to teach.

Recibido 5 de abril de 2016 /Aceptado 6 de noviembre de2016

32

KEY WORDS

Epistemology of education, research, teacher education, teacher training.

INTRODUCCIÓN

Antes y ahora, la formación docente está en espera porque las actuales universidades están concentradas

en formar un profesional de la abogacía, de la medicina o de otras especialidades, incluso de la educación

con los mismos argumentos curriculares. Existen universidades pedagógicas que tienen como propósito la

formación de docentes, pero no la formación docente.

Ambos tipos de universidades siguen fundamentos y expresiones de desarrollo académico: diseño

y desarrollo de un currículo con un sistema de capacitación docente y un sistema de evaluación curricular,

pero faltan mecanismos que controlen que la concreción del currículo se haga en la línea de lo diseñado.

Incluso, estas universidades aceptan el nuevo discurso de la pedagogía crítica, pero a la hora de aplicar

sus fundamentos y componentes, asumen y desarrollan acciones académicas propias del profesor, no las

planificadas institucionalmente. Sobresale el desarrollo del currículo oculto que los profesores sustentan

en desmedro de la filosofía de la universidad.

Un aporte, para el reenfoque hacia la formación docente en las universidades pedagógicas, podría

venir de su epistemología. Epistemología puede entenderse “como fundamento” en las ciencias. Si es

fundamento, entonces es un equivalente a una relación causal donde “los sujetos se representan a sí

mismos y al mundo, del sentido de ser y de los modos de realizarlos” (Vargas Guillén, 2003, p. 6); esto se

da porque la epistemología “se ocupa de los fundamentos y procedimientos de todas las ciencias” (Bunge,

2002, p. 138) y permite una clara relación con la teoría del conocimiento, que es precisamente el ámbito

de este ensayo. Por tanto, se asume que es en las universidades pedagógicas que se dedican a la

construcción de conocimientos y la formación de conceptos, para la formación docente que es el espacio

adecuado, para promover los cambios que se requieren en la educación nacional.

Las ciencias y las universidades pedagógicas

Las ciencias solamente pueden enseñarse en las universidades donde se garantiza el desarrollo integrado

de la investigación con la docencia y con la extensión, para vincular sus resultados con la solución de los

problemas de la sociedad, incluyendo los educativos. Es en esas aulas donde el profesor sabe que debe

proponer acciones didácticas que hagan que los saberes sabios sean transformados en saberes a enseñar,

para garantizar que los estudiantes aprendan a formar conceptos y a construir conocimientos que sirvan a

33

las exigencias de la sociedad. Acciones que muestren a los profesores asumiendo una actitud científica en

su vida como profesionales liberales o de la educación.

Las ciencias están asociadas con “algo que tenemos que descubrir y no algo que podamos

establecer de antemano mediante un argumento filosófico” (Chalmers, 1988, p. 229). Quiere decir que el

descubrir es el camino a las ciencias y los argumentos filosóficos pueden ayudar a determinar su esencia.

Se acepta que la ciencia se caracteriza como un “conocimiento racional, sistemático, exacto, verificable y

por consiguiente falible” (Bunge, 2001, p. 11),por tanto, se posibilitan las miradas paradigmáticas en su

desarrollo. Khun (1978, p. 13) define a los paradigmas “como realizaciones científicas universalmente

reconocidas que, durante cierto tiempo, proporcionan modelos de problemas y soluciones a una

comunidad científica”. Miradas que posicionan a los científicos en la búsqueda de nuevos conocimientos

que pueden ayudar a mejorar las condiciones de vida de la humanidad. Esto es, búsqueda de la esencia: la

formación docente.

En la discusión sobre la epistemología de la formación docente, en adelante se abordarán otras

intenciones epistemológicas que le den fuerza al ensayo, tales como: epistemología de la educación, de la

investigación y de la formación de docentes.

Epistemología de la Educación

Las ciencias de la educación se desarrollan inmersas en discursos que obedecen a las ciencias que las

conforman como: pedagogía, didáctica, andragogía, psicología, sociología, antropología, etc. Cada ciencia

condiciona una forma de expresar los conceptos asociados a la enseñanza y al aprendizaje. Estos

discursos son los que hacen ver al profesor como un repetidor inconsciente de conceptos, pero convencido

de una práctica pedagógica especial.

Una posibilidad de un discurso propio de las ciencias de la educación está relacionada con la

acción comunicativa presente en el acto de enseñar y de aprender en las aulas. Este hecho, por sí mismo,

es el que debe posicionar al docente en la perspectiva de enseñar desde el aprender. ¿Qué significa

enseñar desde el aprender? En principio, que el docente se ubique en la posición del que aprende siempre,

para que en el camino al aprender sienta que está en capacidad de enseñar, por eso el discurso de las

ciencias de la educación debería ser el de la pedagogía. Sobre todo, porque la comunicación “entre

34

maestro y alumno es [una comunicación activa], de relaciones recíprocas, por lo que todo maestro sigue

siendo alumno y todo alumno es maestro” (Gramsci, 2001, p. 47).

Ello supone que la formación humana es la condición que prepara a las personas para actuar en

una sociedad con determinadas perspectivas: afectivas, prácticas, teóricas, que es lo que define que un

profesional dedicado a la enseñanza deba enseñar con la convicción del conocimiento que adquiere en su

aprendibilidad, enseñabilidad y educabilidad que se refleja en un aprender a enseñar, para enseñar a

aprender de manera comprometida.

Siguiendo a Gallego Badillo y Pérez Miranda (1999, p. 95) la aprendibilidad es “una cualidad que

le confiere cada estudiante a ese saber para hacerlo objeto de aprendizaje”. Esto requiere “que el profesor

admita de entrada que las mentes de los alumnos no están vacías y que, por tanto, poseen explicaciones

acerca de los fenómenos de los que da cuenta la ciencia que él enseña” .El aprendiente está consciente que

su aprendizaje depende de él mismo en relación con los aportes de sus profesores. Quienes “realizan su

trabajo en el interior de su compromiso con un proyecto epistemológico, pedagógico y didáctico, de

carácter investigativo, teóricamente fundamentado” (Gallego Badillo y Pérez Miranda, 1999, p. 100)

propio, que es a lo que se llama enseñabilidad. Lo que exige que los enseñantes sean profesores que

expliciten el acto de enseñar a aprender en cada momento de sus realizaciones como docente.

Las relaciones entre aprendibilidad y enseñabilidad garantizan que “las lógicas de las

intencionalidades curriculares, en la dirección incuestionable de que todo educando ha de, finalmente,

incorporarse críticamente al proyecto cultural, social, político y económico y a sus procesos de

producción de bienes y servicios, con miras a sostener financieramente su proyecto ético de vida”

(Gallego Badillo y Pérez Miranda, 1999, p. 111),que es lo que le da cuerpo a la educabilidad. Es el

momento en que se concreta el enseñar desde el aprender y lo vuelve competente, para enseñar a aprender

toda su vida. Esta conexión de formación es la posibilidad que da la pedagogía, para orientar el discurso

de las ciencias de la educación.

35

Epistemología de la investigación

La construcción de conocimientos es el saber hacer de la epistemología de la investigación por eso se

puede “afirmar que la epistemología del ser, bajo sus diversas articulaciones, no es el método de conocer

el ser; sino de hacerse episteme el ser” (Vargas Guillén, 2005, p. 82).

Esto implica la producción de conocimientos en una perspectiva objetiva/subjetiva porque como

dice Habermas (2002, p. 233): “El conocimiento no se produce ya en la correspondencia de las oraciones

con los hechos”, pues “la objetividad queda asegurada cuando el sujeto representador se refiere de manera

correcta a su objeto”, para hacer el cambio que se logra “mediante una coincidencia pública, alcanzada en

la comunidad de comunicación…”, que es lo que implica llegar al consenso entre los humanos y de esa

manera establecer verdades plausibles. Se trata de ajustar las teorías a las prácticas en el descubrimiento

de la verdad.

Epistemología de la formación de docentes

Las universidades que se dedican a la formación de docentes lo hacen según expectativas y

potencialidades de sus políticas, objetivos, modelo, enfoque, currículo y mecanismos académico-

administrativos, propios de la formación perfilada. Estos elementos son los determinantes en la precisión

del tipo de formación docente. A continuación, se discuten los conceptos que ayudan a interpretar mejor

el sentido de la epistemología de la formación de docentes.

Modelo Educativo: El modelo educativo en una universidad es la teoría a probar en la formación

de un profesional con características propias del acto formador preestablecido desde lo pedagógico-

académico, dirigido con una perspectiva teórico-metodológica atinente a un currículo particular, lo que lo

liga a un modelo científico. Un modelo científico es “una representación provisoria, perfectible e

idealizada de una entidad o fenómeno físico” (Bunge, 1985) citado en Raviolo, Ramírez y López(2010, p.

591) que se expresa en una “representación simplificada de un hecho, objeto, fenómeno, proceso,

realizada con la finalidad de describir, explicar y predecir”. Se trata, entonces, de una construcción

humana en la que se busca “conocer, investigar y comunicar” pensamientos, acciones y emociones.

36

Con propósitos de ejemplo se hace una revisión de los modelos educativos de la UNAH y de la

UPNFM. Ambas universidades definen sus expectativas de formación de profesionales de diferentes áreas

(la primera) y de docentes (la segunda) que suponen una teoría en el modelo educativo declarado. La

UNAH (2008, pp. 23-30) considera que “el modelo educativo es la forma totalizadora en que una

comunidad educativa histórica y culturalmente situada, siente, piensa, organiza su quehacer haciendo

realidad el hecho educativo como tal”. Esto permite a sus autoridades y docentes visualizar un tipo de

formación profesional como abogado, médico, pedagogo.

En cambio, la UPNFM (2014, pp. 30-33) asume que: “Un modelo educativo consiste en una

recopilación o síntesis de distintas teorías y enfoques pedagógicos que orientan a los docentes en la

elaboración de los planes de estudios y en la sistematización del proceso educativo…”, esto indica que el

modelo de la UPNFM es un patrón conceptual, para el tipo de docente requerido en el país.

En ambas universidades se defiende una postura que le es propia del modelo educativo que estima

un tipo de formación de un profesional con un discurso que viene de la pedagogía crítica. En la UNAH

“se construyó tomando como base la teoría constructivista, la teoría crítica y la teoría humanista” (p. 34).

En la UPNFM se construyó como un “un proceso crítico-constructivo” (p. 22). Perspectiva que argumenta

a favor de mecanismos académicos y administrativos estrictos en la formación de un profesional crítico y

reflexivo. En la UNAH está por verse la influencia de este enfoque hasta en la formación de pedagogos y

en la UPNFM que asumió la formación basada en competencias en el 2008, distinto de la idea de la

pedagogía crítica, aún no se conocen resultados específicos del modelo.

Por el condicionamiento que provocan ambos enfoques, en la literatura existe una sistematización

de los modelos teóricos en la formación de docentes: “práctico artesanal, academicista, tecnicista-

eficientista y hermenéutico-reflexivo” (De Lella, 1999). En el modelo práctico artesanal debe formarse

una persona que toma la docencia como un oficio, independientemente de sus concepciones sobre la

enseñanza y las prácticas pedagógicas. El segundo considera a la docencia con alto sentido de

responsabilidad teórica y un dominio de los conceptos y elementos que le dan vida a una forma de

expresar la formación docente. El tercero se asocia a un profesional que busca garantizar la eficiencia en

función de la técnica con la incorporación de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación

como la panacea. Y el cuarto, supone que la profesión docente está inscrita en la complejidad de los actos

37

de enseñanza por lo complejo de las acciones pedagógico-didáctico-psicológicas propias del acto de

enseñar.

El docente formado, según el modelo hermenéutico-reflexivo, debería observar un conocimiento

experto, como el mejor en su campo, con concepciones sobre la enseñanza y las prácticas pedagógicas

atinentes y propias del saber enseñar. Concepciones y prácticas pedagógicas que determinan un estilo de

enseñanza o como práctica o como conocimiento o como pensamiento (Martínez, 2003). La búsqueda es

la enseñanza como pensamiento y una práctica pedagógica que integre la teoría con la práctica.

La idea es que la formación docente rompa con las tradiciones tradicionalistas y vaya en pos de

una tradición crítica, reflexiva y proactiva, donde los formadores sean los provocadores o desafiadores de

un nuevo tipo de docente. Conviene ir más allá de lo negro o blanco en las posiciones en la enseñanza y el

aprendizaje. Eso es buscar los grises que están en las combinaciones de la formación de conceptos y la

construcción de conocimientos en la formación docente. El reto es desarrollar incertidumbres, dudas,

dilemas, no verdades absolutas, para la formación docente de los nuevos profesores, independientemente

de los enfoques.

Enfoque: Cuando se habla de enfoque se condicionan las enseñanzas o los aprendizajes a una

forma de ver el mundo, a una perspectiva particular de hacer observable las conductas de las personas en

situaciones particulares o específicas de la vida. El conductismo es un enfoque que desarrolla el concepto

estímulos-respuesta. El constructivismo apuesta por la consideración de los conocimientos previos de los

aprendientes para dar el salto a otro estadio de conocimiento. Y la formación basada en competencias que

implica el logro de eficiencia y eficacia (venida de la industria y el comercio), para la formación de un

profesional exitoso.

Es el momento de aceptar que, desde la psicología, la educación se ha movido del conductismo, al

constructivismo y ahora a la formación basada en competencias. Cada una de ellas con características

propias y que fortalecen un tipo de formación de docentes, no necesariamente una sólida formación

docente. La psicología conductista supone el empleo de procedimientos, para experimentar el estudio del

comportamiento humano observable, que no es más que hacer visible el concepto estímulo-respuesta.

38

Con el constructivismo las condiciones se amplían en el sentido de facilitar espacios de

construcción del conocimiento. Por eso es entendible que: “El sujeto construye el conocimiento de la

realidad, ya que ésta no puede ser conocida en sí misma, sino a través de los mecanismos cognitivos de

que se dispone, mecanismos que, a su vez, permiten transformaciones de esa misma realidad” (Araya,

Alfaro y Andonegui, 2007, p. 77).

Una nueva circunstancia se presenta cuando se habla del enfoque basado en competencias. Lo

visible es que hay acuerdos y desacuerdos entre los investigadores sobre su uso. Los primeros asumen las

directrices sin discusión y los segundos piensan que deben ir más allá de las competencias como es el

caso de Barnett (2001, p. 249) que las llama ideologías y propone argumentos que trascienden al mundo

de la vida. Epistemológicamente hablando, el saber cómo responde a una lógica operatoria, el saber qué al

dominio del contenido, y más allá de las competencias está el mundo de la vida del profesor desarrollando

propuestas de construcción de conocimientos de manera reflexiva, crítica y proactiva. Significa que, para

la formación docente en el enfoque basado en competencias, habría que ir más allá de las competencias.

El currículum: El currículo es un proyecto de construcción cultural (Grundy, 1998) que define los

alcances de la formación profesional de las personas que estudian en una universidad. Se considera que el

currículo es un concepto reciente en las universidades, por eso la práctica del currículum está centrada en

“comportamientos didácticos, políticos, administrativos, económicos, etc., detrás de los que se encubren

muchos supuestos, teorías parciales, esquemas de racionalidad, creencias, valores, etc.” (Sacristán, 1998,

p. 13).

Esto sugiere que enseñar para la vida supone la presencia de un profesor concentrado en la

investigación (Stenhouse, 1998), para cambiar la imagen profesional de un profesor. Significa que el

currículo debe garantizar el tipo de docente a formar, para acercar ese profesional a las exigencias de la

sociedad, para mejorar la calidad de la enseñanza, del aprendizaje, de la formación docente, de la

educación.

Epistemología de la formación docente

La formación docente es la esperanza en el devenir de la educación de los pueblos. ¿Qué implica la

formación docente? Una aventura epistemológica que está relacionada con la formación de un profesional

39

competente por la capacidad de interpretar la realidad de los educandos y ponerla en perspectiva de

formación hasta garantizar una acción profesional con conocimiento y práctica orientada a la solución de

problemas de la vida diaria.

“Se trata de ver la formación como un aprendizaje constante, acercando ésta al desarrollo de

actividades profesionales y a la práctica profesional y desde ella” (Imbernón, 2007, p. 11). Esto es lo que

se aprende de la visión de Gorodokin (2000, p. 2) citando a Achilli (2000) cuando afirma que “la

formación docente puede comprenderse como un proceso en el que se articulan prácticas de enseñanza y

de aprendizaje orientadas a la configuración de sujetos docentes/enseñantes. La práctica docente se

concibe en un doble sentido: como práctica de enseñanza, propia de cualquier proceso formativo y como

apropiación del oficio de docente, cómo iniciarse, perfeccionarse y/o actualizarse en la práctica de

enseñar”.

La formación docente, en consecuencia, se concentra en la conformación de un profesional que se

dedicará a ejercer la docencia toda la vida. La expectativa es que cuando una persona ha sido formada

para enseñar y se mantiene en el medio, es porque está convencido que la docencia será su ámbito laboral

y por el cual luchará hasta lograr que otras personas aprendan y se comprometan consigo mismo. Ello,

implica reconocer que se ha logrado el objetivo: saber enseñar desde el aprender. Dar este paso es

reconocer que la formación docente implica un trabajo metódico y sistemático en función de

concepciones sobre la enseñanza y prácticas pedagógicas atinentes con el pensamiento contemporáneo.

Concepciones sobre la enseñanza: A lo largo del tiempo ha habido diferentes concepciones

sobre la enseñanza y eso ha determinado cómo enseñar en las aulas, considerando que, “dentro del aula y

fuera de ella, subyacen concepciones pedagógicas, [que] describen y explican los fenómenos educativos

que se dan tanto en su estructura como en su funcionamiento...” (Beltrán y otros, 2008, p. 42). Esto

implica considerar a “la enseñanza como posibilidad de pensamiento” (Martínez, 2003) estricto. Cada

reflexión o acción en la enseñanza obliga estar en el acontecimiento (lo que trasciende) y no sólo en lo

que acontece (lo evidente en las aulas), pues “el acontecimiento no se queda allí, pasa por allí, pero no se

agota” (Martínez, 200, p. 207).

40

En estas circunstancias, “la enseñanza pasa por el lenguaje, pasa por unos sujetos, [y por tanto es]

una categoría que permitiría caracterizar conocimientos, sujetos y prácticas” (Martínez, 2003, p. 208). Por

tanto, debe entenderse que “los profesores son producto de un largo proceso de formación y socialización,

durante el cual fueron integrando supuestos, creencias, teorías implícitas y explícitas” (Sanjurjo, 2002, p.

25) que le dan sentido y significado propio a sus enseñanzas, lo que condiciona una enseñanza como

pensamiento. Esto implica el desarrollo de prácticas pedagógicas contextualizadas.

Prácticas Pedagógicas Contextualizadas: La práctica es entendida como un campo de

aplicación de la teoría. Se podría pensar que sin teoría no hay práctica. En la enseñanza y sobre todo en la

formación docente tiene validez esa misma visión, pues se encarna en “el conocimiento y la acción, la

acción es tan sólo una implementación y una comprobación de la decisión técnica” (Schön, 1992, p. 82).

Si las prácticas pedagógicas son un conjunto de estrategias e instrumentos (herramientas) que

debería utilizar el profesor para ayudarles a sus estudiantes en el proceso de aprender a enseñar (Marcelo,

2001) para enseñar a aprender (Bixio, 2002), estarían mostrando que su responsabilidad sería establecer

con precisión su propia filosofía de enseñanza en el marco de la filosofía y políticas institucionales, que es

lo que determinaría la formación docente. Entonces, el saber enseñar pasa por aprender a enseñar para

enseñar a aprender toda una vida. Lo que exige el desarrollo sistemático de métodos, técnicas, estrategias

y procesos en el acto de enseñar, independientemente del tipo de profesional a formar.

Métodos, técnicas, estrategias y procesos de enseñanza: Todos, profesores y estudiantes, en o

afuera de las aulas, hablan de métodos, técnicas, estrategias y procesos como lo sabido. Pero cuando se les

confronta, sobre ellos, lo hacen con distinto sentido y significado; lo apropiado sería comunicarse con los

mismos códigos lingüísticos para no romper con la comunicación verdadera que debe haber entre los

profesionales de la educación.

Métodos: Los métodos son orientadores de procesos que ayudan a perfilar la formación de

conceptos y la construcción de conocimientos por parte de los profesores y estudiantes. Son el sentido de

una práctica pedagógica contextualizada. Siguiendo a Nérici (1985, pp. 35-40) “método quiere decir

camino para alcanzar los objetivos estipulados en un plan de enseñanza”. Es la realización de una

41

actividad que sigue un camino en espiral, para generar aprendizajes. Se incorpora el método diálogo

reflexivo (Umanzor, 2011) para fortalecer la idea de camino y proceso a la vez.

El diálogo reflexivo “permite el aprendizaje críticamente reflexivo, [porque] compromete a la

persona hasta el extremo de sus conocimientos, su sentido del yo y del mundo, tal como lo

experimentamos. Por tanto, se cuestionan nuestras premisas vigentes sobre el saber, sobre nosotros

mismos y nuestro mundo” (Brockbank y McGill, 2002, p. 73).Esta dimensión se asocia con el método

diálogo reflexivo, así:

Reflexión desde la práctica.La idea es que yo como profesor o profesora me mantenga

“reflexionando sobre mis enfoques respecto a mi forma de enseñar y de los fines que persigo con mi

enseñanza” (Brockbank y McGill, 2002, p. 89)”.Implica la realización de un diagnóstico en dos niveles:

los aportes del docente y las experiencias de los estudiantes, para favorecer la continuidad del proceso

enseñanza-aprendizaje. Se trata de establecer las condiciones básicas de entrada, para replantear la nueva

situación didáctica. En la UPNFM existe una buena cantidad de estudiantes que trabajan en la docencia y

han acumulado experiencias ricas que deberían ser la base de su formación docente, lo que invita a

acciones didácticas e investigativas propias, para aprender a enseñar y luego enseñar a aprender.

Reflexión teórica. Es la posibilidad de fundamentar teóricamente una acción didáctica con

conocimiento, para establecer que el “saber qué” está por sobre el “saber cómo”. Esto es, aprender

conceptos, principios, normas, leyes y sus aplicaciones en el marco de la ciencia particular y la didáctica,

que es lo que garantizará el plus académico. Se trata de poner en discusión las teorías que sostienen las

concepciones sobre la enseñanza y las prácticas pedagógicas contextualizadas.

Acción reflexiva.La acción reflexiva se da cuando “se cuestionan las premisas vigentes sobre las

ideas, el yo y el mundo. Ese aprendizaje se transforma en reflexivamente crítico cuando las ideas

emergentes se relacionan con los sentidos que se le dan al saber, al yo y al mundo, y surge una nueva

comprensión” (Brockbank y McGill, 2002, p. 73). Es el momento de la relación de los conocimientos

previos de los estudiantes con los aportes de las teorías actuales respecto del enseñar a aprender, para

fortalecer una práctica reflexiva propia del saber enseñar y del ser docente.

42

Reflexión en la acción.La reflexión en la acción se da cuando el docente “piensa sobre la

marcha”. Es decir, que la reflexión en la acción “se produce cuando nos encontramos en medio de una

acción y, al hacerla mostrarnos reflexivos en la acción” (Brockbank y McGill, 2002, p. 90)lo que provoca

sorpresa, que es lo que determina la nueva acción. Esto significa que la reflexión en la acción tiene un

referente inmediato que es la acción y parte de un pensamiento que influye en lo que se hace como la

condición sabida: ser profesor que enseñará a aprender toda una vida.Estos pasos en espiral están

mediados por preguntas-problematizadoras que desafían la consciencia de las personas, para estar en la

acción.

Técnicas: En cuanto a las técnicas, es conocido que existe una variedad de ellas y que tienen un soporte

psico-pedagógico-didáctico propio. Muchas de ellas fijan una posición del coordinador de las mismas (el

profesor) y de los actores (los estudiantes). El uso de estas técnicas está relacionado con la necesidad de

profundizar acciones que fundamenten la formación de conceptos y la construcción de conocimientos de

manera expresa.

Siguiendo a Nérici (1985) “técnica significa cómo hacer algo”. Esto es, la técnica precisa de

eventos secuenciales, pero en su desarrollo íntimo responden a una situación particular. Existen técnicas

para presentación, para análisis, para reflexión; y cada una es distinta y se aplica en una parte del

desarrollo del método. La técnica no sustituye al método, pero juntos deben llevar al educando a observar,

criticar, juzgar, sacar conclusiones, correlacionar, diferenciar, sintetizar, conceptualizar y reflexionar, que

es a lo que se aspira con la teoría enseñar desde el aprender.

Estrategias: Siguiendo a Zapata (2003, p. 8) “las estrategias de enseñanza se conciben como los

procedimientos utilizados por el docente para promover aprendizajes significativos, implican actividades

conscientes y orientadas a un fin”. Según esta definición, las estrategias son sinónimos de procedimientos,

entendiendo que procedimiento es una acción no secuente que puede ayudar a lograr un fin, entonces, la

estrategia tiende a ser un evento, también, sobresaliente, único y de desarrollo continuo para avivar y

activar el aprendizaje de los estudiantes. La presentación de una lámina es una estrategia plausible para

iniciar la enseñanza de un concepto, tema. La forma que se utilice es la que garantizará el aprendizaje de

los estudiantes.

43

Procesos: Los profesores también hablan de procesos, pero existen diferencias sustantivas en la

teoría y práctica de los mismos. Aunque en la enseñanza se habla más de método, aquí se le llama

proceso: inducción, deducción y también, analogía, con la idea de apostar por el desarrollo del

razonamiento lógico o pensamiento lógico de las personas. Siguiendo a Alfonso Sánchez (2003,s.p.): “El

proceso de enseñanza, con todos sus componentes asociados, debe considerarse como un sistema

estrechamente vinculado con la actividad práctica del hombre, que, en definitiva, condiciona sus

posibilidades de conocer, comprender y transformar la realidad que lo circunda…”.

Por eso, se asume que el proceso inductivo es una secuencia de eventos que se suceden uno a uno

y que dejan en el camino un aprendizaje significativo, así: 1. Presentación de un problema. Referido a una

oportunidad de empezar desde la práctica. 2. Comprensión del problema. Se trata de mostrar la

interpretación que una persona le da al problema. 3. Identificación de estrategias o procedimientos que

resuelvan el problema, implica pensar en una oportunidad de actuación. 4. Resolución del problema. Es la

confirmación de que la estrategia elegida es la correcta y posibilita avanzar. 5. Verificación de la solución

del problema. Se trata de confirmar que los resultados son los correctos y adecuados. 6. Definición del

concepto expresado en el problema. Se trata de que el estudiante llegue a expresar el desarrollo de su

pensamiento lógico.

El proceso deductivo, en cambio, es visto como una relación inversa pero no necesariamente; se

trata de partir de una visión genérica y establecer los mecanismos que le permitan al estudiante llegar a un

resultado final común y especial para todos, así: 1. Presentación del tema y su objetivo. 2. Definición del

tema, para su análisis. 3. Comprensión de la definición, para saber qué hacer. 4. Presentación de un

problema-ejemplo para establecer sus aplicaciones. 5. Resolución del problema y su revisión. 6.

Reconstrucción de la definición, para reafirmar la definición inicial.

En el proceso por analogía, en cambio, lo que se busca es la comparación constante de eventos

similares entre teorías o prácticas relacionadas con la resolución de problemas de una manera diferente,

como una simbiosis necesaria para que se convierta en una nueva opción metodológica en la solución de

un problema, así: 1. Presentación de un problema o tema, para aprender a leer comprensivamente. 2.

44

Análisis de los conceptos específicos del problema. 3. Revisión de las opciones de resolución del

problema, para establecer su comprensión y razonamiento. 4. Resolución del problema y revisión de sus

resultados. 5. Comparación de los conceptos de manera que resalten las semejanzas o las diferencias, para

asumir el concepto como la verdad.

Los tres procesos: inductivo, deductivo y analógico son tres diferentes formas de acercarse a la

solución de un problema como la esencia del desarrollo del pensamiento lógico de las personas. En

resumen, las concepciones sobre la enseñanza y las prácticas pedagógicas, los métodos, técnicas,

estrategias y procesos son la esencia del desarrollo de las prácticas pedagógicas contextualizadas. Lo

anterior supone que la epistemología de la formación docente está asociada a la carga teórico-

metodológica desarrollada en los procesos de formación de docentes en las universidades dedicadas a este

propósito.

Si en la formación de distintos profesionales hay confusión en los conceptos formadores, quedan

en el ambiente una serie de preguntas: ¿Cómo el abogado, que es profesor, transfiere su saber al nuevo

abogado que forma? ¿Cómo el médico, que es profesor, transfiere de su saber al nuevo médico? Y ¿cómo

el profesor, formador de profesores, forma a los nuevos profesores? En todos los casos, la formación de

ese profesional o docente no se hace por ósmosis. ¿Qué lo garantizaría, realmente?

A MANERA DE CONCLUSIONES

El desarrollo de las ciencias es la aspiración de los científicos y los espacios para ser enseñadas son las

aulas de las universidades que apuestan por la formación de un profesor-investigador. Esto sugiere la

presencia de profesores formadores investidos de conceptos, procesos y teorías, para nutrir a las ciencias,

pero más para la formación docente de los profesores del futuro. La epistemología de la educación supone

el manejo de discursos y realizaciones que deben conducir la formación humana y, sobre todo, la de los

docentes que saben enseñar desde el aprender. Esta circunstancia, por sí mismo, consustancia los procesos

de enseñanza-aprendizaje, para la formación de conceptos y la construcción de conocimientos que da

lugar a la producción científica y a la formación de profesores críticos, reflexivos y proactivos.

La formación docente en las universidades pedagógicas debe pasar por la precisión de

mecanismos académicos propios del enseñar desde el aprender, para el mundo de la vida. Así, el docente,

45

formado como tal, estaría en condiciones de un manejo estricto de los conocimientos producidos en una

ciencia determinada con los enlaces específicos a las otras ciencias y sobre todo aquellos centrados en lo

pedagógico-didáctico-psicológico, para saber enseñar. El saber enseñar es la clave en todo el proceso

formador, por tanto, desde las ciencias de la educación se deben garantizar el modelo, el enfoque, el

currículum, los planes de estudio propios de la circunstancia en la formación docente.

Se trata de asegurar que la formación docente sea el objetivo, la clave en los procesos formativos,

con universidades pedagógicas que establezcan los mecanismos académico-administrativos propios de la

formación pretendida y no divagar en discursos cargados de eufemismos ortodoxos que no contribuyen al

logro de los objetivos formadores de los docentes que requiere un país como Honduras: docentes que

saben enseñar desde el aprender.

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49

Influencia del Compromiso Organizacional sobre el Aprendizaje

Organizacional de los docentes de la Universidad Pedagógica Nacional

“Francisco Morazán”

Elizabeth Santos Flores

Dirección de Postgrado Universidad Pedagógica Nacional “Francisco Morazán”

[email protected]

Dani Oved Ochoa Cervantez

Ciencias Administrativas, UNICAH

[email protected]

RESUMEN

Este documento muestra los resultados de la investigación realizada en la Universidad Pedagógica

Nacional “Francisco Morazán” para determinar la influencia del Compromiso Organizacional sobre el

Aprendizaje Organizacional. La muestra fue de 118 docentes de la sede de Tegucigalpa. Para medir las

variables se utilizaron el cuestionario diseñado por Watkins y Marsick y la escala propuesta por Allen y

Meyer. La confiabilidad del instrumento se determinó con el coeficiente Alfa de Cronbach, obteniendo

0.912 para la variable Aprendizaje Organizacional y 0.832 para Compromiso Organizacional. Se

estableció el coeficiente de determinación de Pearson para medir el efecto de la variable independiente

sobre la dependiente, encontrando: r= 0.718y R2 de 0.516 a un valor p =000<α: 0.05. Los hallazgos

sugieren que los docentes comprometidos con la institución contribuyen con los procesos de

transformación de la misma y les conduce a aprender y mejorar su capacidad para hacer cosas nuevas.

PALABRAS CLAVE

Compromiso Organizacional, Aprendizaje Organizacional, Educación Superior, Universidad Pedagógica

Nacional “Francisco Morazán”

ABSTRACT

This document shows the results of the research conducted at the National Pedagogical University

"Francisco Morazán" to determine the influence of Organizational Commitment on Organizational

Learning. The sample consisted of 118 teachers from the Tegucigalpa campus. To measure variables, the

questionnaire designed by Watkins and Marsick and the scale proposed by Allen and Meyer were used.

The reliability of the instrument was determined by Cronbach's Alpha coefficient, obtaining 0.912 for the

Organizational Learning variable, and 0.832 for Organizational Commitment one.

Recibido 1 de septiembre de 2016 /Aceptado 10 de noviembre de 2016

50

The Pearson coefficient of determination was established to measure the effect of the independent

variable on the dependent one, finding r = 0.718 and R2 of 0.516 to p =000<α: 0.05 values. The findings

suggest that teachers committed to the institution contribute to the transformation processes and guide

themselves to learn and improve their ability to do new things.

KEYWORDS

Organizational Commitment, Organizational Learning, Higher Education, National

Pedagogical University "Francisco Morazán.

51

INTRODUCCIÓN

En la actualidad las instituciones de educación superior se enfrentan a ciertos desafíos que las obligan a

crear estrategias necesarias para lograr que los docentes se comprometan y se integren con los objetivos y

proyectos de la institución.

Para Meyer y Allen (1987) el compromiso organizacional consiste en la “Orientación afectiva

hacia la organización, el reconocimiento de los costos asociados al dejar de laborar en la organización y la

obligación moral de permanecer en ella” (p. 11). Durante los últimos años, investigadores como Joo y

Park (2010) y Atak (2011) han dedicado sus trabajos a la comprensión de la naturaleza, antecedentes y

consecuencias del compromiso organizacional.

Se ha identificado que altos niveles de compromiso en los colaboradores son importantes porque

conducen a resultados favorables para la organización (Kamis y Noermijati, 2013). Asimismo, se ha

identificado que el compromiso de los colaboradores afecta positivamente otras áreas de la organización,

tales como la capacidad que tiene para “aprender continuamente y de transformarse, y la capacidad de

organización para hacer algo nuevo todo el tiempo” (Watkins y Marsick, 1993).

Se sugiere que en la medida que los colaboradores muestran altos niveles de compromiso se

incrementa la capacidad de la institución para lograr esa capacidad de aprendizaje. No obstante, existen

en mayor número las investigaciones sobre el compromiso en el sector comercial, muy poca investigación

se ha llevado a cabo en entornos educativos del nivel superior.

La investigación en este contexto cobra relevancia siendo que los maestros que no están

comprometidos con su lugar de trabajo podrían realizar un menor esfuerzo en el aula en comparación con

los profesores con altos niveles de compromiso, esto afectaría adversamente el aprendizaje de los

estudiantes.

El examinar y confirmar la relación entre el compromiso organizacional y aprendizaje

organizacional proporcionará apoyo a los directivos para tener una mejor comprensión del

comportamiento y las actitudes de los docentes; además, los resultados del estudio proporcionarán las

bases para mejorar el compromiso, la creatividad, la innovación y el rendimiento general de la institución.

Finalmente, la identificación de factores que ayudan a fomentar el compromiso y el aprendizaje

ayudará a generar políticas que permitan a la UPNFM atraer y retener al personal más calificado.

52

DISCUSIÓN TEÓRICA

Compromiso organizacional

Aun no existe consenso sobre la definición y la forma en que se mide el compromiso organizacional

(Rashid, Sambasivan y Johari, 2003), no obstante, la revisión de la literatura permite identificar una serie

de conceptos utilizados para definirlo, la Tabla 1 recoge algunos de ellos.

Tabla 3 Conceptos de compromiso organizacional

Autor Concepto

Mowday, Steers y Porter

(1979, p. 226)

“Fuerte creencia y aceptación de los objetivos y valores de la organización,

voluntad de ejercer un considerable esfuerzo en la organización y un fuerte deseo

de permanecer en ella”

Newstrom y Davies, (2002,p.

211)

“Grado en que un colaborador se identifica con la organización y desea seguir

participando activamente en ella”

Greenberg y Baron, 2003, p.

160)

“Actitudes laborales de los colaboradores hacia la organizaciones en donde no sólo

Grado en que un colaborador se identifica con su organización, sino también si el

colaborador está o no dispuesto a salir de su organización”

Meyer y Allen (1987, p. 11)

“Orientación afectiva hacia la organización, el reconocimiento de los costos

asociados al dejar de laborar en la organización y la obligación moral de

permanecer en ella”

Fuente: Elaboración propia

Entre los autores más reconocidos que abordan el compromiso de los colaboradores hacia la

organización se encuentran Meyer y Allen (1984), para ellos, el compromiso organizacional se divide en

tres tipos, descritos a continuación:

a) Compromiso afectivo

Se refiere al deseo de un colaborador en continuar trabajando para una organización debido al apego

emocional y la participación e identificación que éste mantiene con los objetivos y valores de la

organización (Allen y Meyer, 1990; Lee, Allen, Meyer y Rhee, 2001; Meyer, Allen, y Gellatly, 1990).

Así, el apego del colaborador genera el deseo de seguir trabajando para una organización, genera un

alineamiento del colaborador con las metas y los valores, implica que si un colaborador tiene un fuerte

compromiso afectivo va a permanecer en la organización porque él así lo desea. (Meyer y Allen, 1993;

Meyer, Allen y Smith, 1993).

b) Compromiso de continuidad

Se basa en los costos que están asociados con el abandono de una organización específica: entre menor es

el número de alternativas de trabajo para el colaborador, más fuerte es su compromiso de continuidad a su

actual organización, es decir, hay un costo grande al dejar la organización. Si un colaborador exhibe un

fuerte compromiso de continuidad se va a quedar con su organización porque siente que dejarla tendría un

53

costo demasiado elevado (Meyer, Allen, y Gellatly, 1990; Meyer y Allen, 1993; Meyer y Parfyonova,

2010).

c) Compromiso normativo

Se refiere a la obligación percibida de los colaboradores a permanecer con su organización, aquí los

valores sociales pueden ejercer presiones sobre el colaborador, por lo tanto, se quedará con una

organización porque sienten que debería ser congruente con sus valores adquiridos (Meyer y Allen,

1993). Los colaboradores que tienen un alto grado de compromiso normativo no se atreven a decepcionar

a sus empleadores y se preocupan por lo que sus compañeros pensarían de ellos si dejan la organización.

Aprendizaje organizacional

Existe una discusión sobre quien fue el primer autor en hablar del término aprendizaje organizacional.

Fernández de Morgado (2008) considera que fueron March y Simon en 1958 quienes acuñaron el término.

En las últimas décadas son varios los autores que han definido el aprendizaje organizacional, tal como se

muestra en la Tabla 2.

Tabla 2 Conceptos de Aprendizaje Organizacional

Autor Concepto

(Watkins y Marsick, 1993, p.

152).

Una organización de aprendizaje “es aquella que aprende continuamente y se

transforma, se refiere a los cambios de la capacidad de organización para hacer algo

nuevo todo el tiempo”

(Argyris y Schön, 1978).

“Proceso dinámico de creación, adquisición, e integración del conocimiento dirigido

al desarrollo de los recursos y capacidades que contribuye a mejorar la eficacia de la

organización”

Senge, 1993, p. 3)

Es una organización donde “las personas expanden continuamente su capacidad de

crear los resultados que realmente desean, donde expanden y se nutren los patrones

de pensamiento nuevos, donde la aspiración colectiva queda en libertad, y donde la

gente está continuamente aprendiendo a aprender juntos”.

(Garvin, Edmondson, y Gino,

2008, p 110)

Es “un lugar donde los colaboradores tienen éxito en crear, adquirir, y la

transferencia de conocimiento”

Marquardt (2002, p. 247 )

“Una empresa que aprende con eficacia y de manera colectiva y continuamente se

transforma para una mejor gestión y uso del conocimiento”

Fuente: Elaboración Propia

Existen diversas corrientes teóricas que abordan el aprendizaje en las organizaciones, autores como

Argyris y Schön (1978) sostienen que el aprendizaje se presenta en las organizaciones por medio de las

personas que laboran para ella, y que se constituyen en agentes. Según los autores existe un sistema

organizacional de aprendizaje.

Para Senge (1993) el aprendizaje organizacional se compone de cinco disciplinas: el dominio

personal, los modelos mentales, una visión compartida, el aprendizaje en equipo y el pensamiento

sistémico.

54

Por su parte, Marquardt (1996) sostiene que el aprendizaje organizacional se compone

principalmente de cinco elementos; el aprendizaje, la organización, las personas, el conocimiento y la

tecnología. Además, se encuentran en la literatura autores como Garvin, Edmondson y Gino (2008)

quienes enfocan su atención en únicamente tres componentes; el apoyo abierto al aprendizaje, las

prácticas y procesos concretos de aprendizaje y el liderazgo que fortalezca el aprendizaje.

La revisión de literatura permite identificar a Watkins y Marsick (1993), como las exponentes

principales. Ellas señalan que el aprendizaje organizacional se compone de siete tipos, distintos pero

relacionados entre sí, las cuales definen a una organización que aprende, tanto a nivel individual, a nivel

de equipo y a nivel de organización. Estos son los siguientes:

a) Creación de oportunidades para un aprendizaje continuo

Las oportunidades que brinda la organización sirven para establecer las oportunidades de aprendizaje

constante para todos sus colaboradores; es por esto, que para cada puesto de trabajo se diseñan las

actividades a realizar de tal forma que permitan al colaborador un aprendizaje permanente (Watkins y

Marsick, 1993), aquí el aprendizaje está incorporado al trabajo para que las personas puedan aprender en

el contexto de trabajo, lo que genera oportunidades de aprendizaje continuo para todos sus miembros.

b) Diálogo y la indagación

Refleja el esfuerzo de una organización por crear una cultura de debate, de investigación, de

realimentación e intercambio, produce que las personas aumenten sus habilidades para expresar sus

puntos de vista así como también su capacidad para escuchar y cuestionar el punto de vista de los demás

(Watkins y Marsick, 1993).

c) Colaboración y el aprendizaje en equipo

Este indicador constituye el esfuerzo que se hace para la conformación y preparación de los equipos

de trabajo, haciendo énfasis en el aspecto colaborativo, es por esto que las actividades se diseñan de tal

forma que los miembros de los equipos puedan aprender de ellos mismos y a trabajar en conjunto

(Watkins y Marsick, 1993), aquí el trabajo está diseñado para orientar a los grupos y acceder a los

diferentes modos de pensar; se espera que los grupos trabajen y aprendan juntos; la colaboración es

valorada por la cultura y recompensada.

d) Captar y compartir el aprendizaje

Indica los esfuerzos para establecer sistemas para capturar y compartir el aprendizaje. Procesos que

poseen las organizaciones para crear y compartir una visión colectiva, se cuenta con sistemas para

compartir los aprendizajes (Watkins y Marsick, 1993).

e) Capacitar a las personas hacia una visión colectiva

55

Esta dimensión refleja el proceso que sigue una organización para compartir una visión colectiva y

conseguir tanto el compromiso como el feedback de sus miembros sobre la diferencia entre lo que se es y

la nueva visión, es decir, lo que se desea ser (Watkins y Marsick, 1993) aquí las personas están

involucradas en establecer, tener e implementar una visión de conjunto.

f) Conectar a la organización con su entorno

Las personas comprenden el efecto de su trabajo en toda la empresa, exploran el entorno y utilizan la

información para ajustar las prácticas de trabajo, la organización está vinculada a sus comunidades

(Watkins y Marsick, 1993).

g) Estimular un liderazgo estratégico para el aprendizaje

Esta dimensión indica el grado en el cual los líderes utilizan de manera estratégica el aprendizaje para el

logro de los objetivos propuestos y se constituyen en modelos a seguir (Watkins y Marsick, 1993).

Compromiso y aprendizaje organizacional

En la literatura se encuentran estudios que evidencian la relación de estas variables (Che, Kumar y Gua,

2009). Las actitudes de los colaboradores hacia la formación, así como el acceso percibido a la

formación, el apoyo social para la formación, la motivación para aprender y los beneficios percibidos de

la formación, están positivamente relacionados al compromiso de la organización (Atak, 2011).

Los colaboradores con altos niveles de compromiso con la organización tienden a identificarse más

fácilmente con su cultura, sus objetivos y los valores de la misma, además, están dispuestos a aprender

cualquier habilidad y captar el conocimiento necesario para alcanzar la meta de la organización (Chang,

Tsai y Tsai, 2011).

Cuando existen actividades de aprendizaje que están incorporadas al trabajo para que las personas

puedan aprender en el contexto de trabajo y además se le brindan oportunidades de aprendizaje continuo

para todos sus miembros, los miembros de la organización afirman su apego a la Organización, generando

el deseo de seguir trabajando y además se produce un alineamiento del colaborador con las metas y los

valores de la institución (Mehrabi, Jadidi, Allameh y Alemzadeh, 2013)

Por otra parte, cuando en el personal se promueve una cultura de aprendizaje y se les proporciona

las oportunidades para llevar a cabo tareas difíciles que permiten el desarrollo de sus competencias, el

personal tiene más motivación para realizar un trabajo cooperativo, lo que promueve y desarrolla el

compromiso hacia la organización (Usefi, Nazari y Zargar, 2013).

Finalmente, existe evidencia empírica que muestra que ambas variables han sido objeto de estudio

en instituciones educativas del nivel superior (Hussain, Ali, Khalid, Shafique y Ahmad, 2016).

56

MÉTODOS Y MATERIALES

El estudio se realizó bajo un enfoque cuantitativo, de tipo correlacional, con diseño no experimental

transeccional. Para medir el compromiso organizacional de utilizó la Escala de Compromiso

Organizacional (Commitment Scale) de Allen y Meyer (1990). Para medir el aprendizaje organizacional

se utilizó el Cuestionario de las Dimensiones del Aprendizaje Organizacional (Dimensions of the

Learning Organization Questionnaire) de Watkins y Marsick (1999).

La unidad muestral la constituyó el personal docente de la Universidad Pedagógica Nacional,

asignado a los departamentos académicos. El estudio incluyó los diez departamentos académicos de la

UPNFM, cinco de la Facultad de Ciencia y Tecnología e igual número de la Facultad de Humanidades.

La tabla 3 recoge la distribución de la muestra de docentes de cada facultad y por departamento

académico, calculada a partir del total de docentes que actualmente están adscritos a sus departamentos.

Para el análisis de los datos se utilizó SPSS 22.0. Al analizar la confiabilidad del instrumento se

observó un Alpha de Cronbach de .912 en la escala de Aprendizaje Organizacional y .832 en la escala del

Compromiso Organizacional.

Tabla 3 Población y Muestra

Facultad Deptos. N n

Cie

nci

a y

Tec

no

log

ía

Matemáticas 21 16

Educación

Comercial 16 12

Ciencias

Naturales 16 9

Técnicas

Industrial 9 8

Tecnología de

Alimentos y

Textiles

9 8

71 53

Deptos. N n

Hu

man

idad

es

Ciencias de la

Educación 37 25

Ciencias

Sociales 21 12

Letras y

Lenguas 26 14

Educación

Física 11 9

Artes 8 5

103 65

Fuente: Elaboración propia

57

Para medir la relación de las variables se utilizó el coeficiente de correlación Pearson y para confirmar

la relación se observó el valor de significancia (p), para las pruebas de hipótesis se utilizó una α de 0.05.

La hipótesis contrastada en el estudio se describe a continuación.

H1: rxy=r≠0 (Existe relación entre el Compromiso Organizacional y el Aprendizaje Organizacional).

RESULTADOS

Datos descriptivos

En el estudio participaron 53 docentes de la Facultad de Ciencia y Tecnología (44.9%) y 65 docentes de

la facultad de Humanidades (55.1%). Del total de participantes, 34 son hombres (28.8%) y 84 son mujeres

(71.2%).

La tabla 4 recoge los datos descriptivos obtenidos del análisis de información recolectada, para las dos

variables que conforman este estudio.

Tabla 4 Datos descriptivos de las variables

Medida Aprendizaje

Organizacional

Compromiso

Organizacional

n 118 118

Media 3.84 3.90

Mediana 3.83 4

Moda 3.83 4.28

Desviación

Estándar 0.468 0.487

Fuente: Análisis de datos recolectados

La tabla 5 recoge los datos descriptivos del análisis efectuado sobre la variable compromiso

organizacional, de acuerdo a los tres tipos mencionados en este estudio.

Tabla 5 Resultados por tipo de compromiso

Medida Afectivo Continuidad Normativo

N 118 118 118

Media 4.16 3.74 3.82

Mediana 4.25 3.88 3.89

Moda 4.75 4.25 4.11

Desviación

Estándar 0.591

0.774 0.579

Fuente: Análisis de datos recolectados

La tabla 6 recoge los datos descriptivos del análisis efectuado sobre la variable aprendizaje

organizacional, de acuerdo a los siete tipos que han sido señalados en este estudio.

58

Tabla 6 Resultados por tipo de aprendizaje organizacional

Medida

Creación de

oportunidades para el

aprendizaje

continuo

Dialogo e

Indagación

Colaboración y

el aprendizaje en Equipo

Captar y

compartir el aprendizaje

Capacitar a

las personas

hacia una

visión colectiva

Conectar a la

organización con su

entorno

Estimular el

Liderazgo Estratégico

para el

aprendizaje

n 118 118 118 118 118 118 118

Media 4.09 4.20 3.90 3.72 3.47 3.69 3.82

Mediana 4.17 4.33 4.00 3.83 3.50 3.83 3.92

Moda 4.17 4.00 4.00 4.33 3.33 3.67 4.17

Desviación

Estándar

0.503 0.512 0.638 0.731 0.743 0.682 0.634

Fuente: Análisis de datos recolectados

La tabla 7 ofrece los datos descriptivos obtenidos para las variables del estudio con la muestra de la

Facultad de Ciencia y Tecnología.

Tabla 7 Datos descriptivos de las variables para la Facultad de Ciencia y Tecnología

Medida Aprendizaje

Organizacional

Compromiso

Organizacional

n 53 53

Media 3.82 3.93

Mediana 3.90 4.12

Moda 4.10 4.28

Desviación

Estándar 0.504 0.507

Fuente: Análisis de datos recolectados

La tabla 8 ofrece los datos descriptivos obtenidos para la Facultad de Humanidades.

Tabla 8 Datos descriptivos de las variables para la Facultad de Humanidades

Medida Aprendizaje

Organizacional

Compromiso

Organizacional

N 65 65

Media 3.86 3.88

Mediana 3.83 3.92

Moda 3.83 3.88

Desviación

Estándar 0.439 0.472

Fuente: Análisis de datos recolectados

Efecto del Compromiso en el Aprendizaje Organizacional

A continuación se describen los coeficientes de determinación de Pearson para medir el efecto de la

variable independiente sobre la dependiente. Los datos de la tabla 9 y 10 muestran la influencia del

59

Compromiso sobre el Aprendizaje Organizacional, se observa un r: 0.718 y un R2 de 0.516 a un valor p:

0.000<α: 0.05. Esto indica que el cambio en los niveles de compromiso que muestran los docentes de la

UPNFM afecta su capacidad de aprendizaje.

La tabla 11 y 12 muestran la influencia que tiene el Compromiso sobre el Aprendizaje

Organizacional en la Facultad de Ciencia y Tecnología, se observa un r: 0.762 y un R2 de 0.581 a un

valor p: 0.000<α: 0.05. De aquí se infiere que el cambio en los niveles de compromiso que muestran los

docentes de la Facultad de Ciencia y Tecnología afecta su capacidad de aprendizaje.

Asimismo, la tabla 13 y 14 muestran la influencia que tiene el Compromiso sobre el Aprendizaje

Organizacional en la Facultad de Humanidades, se observa un r: 0.684 y un R2 de 0.468 a un valor p:

0.000<α: 0.05. Estos datos señalan que el cambio en los niveles de compromiso que muestran los

docentes de la Facultad de Humanidades afecta su capacidad de aprendizaje, esta relación es menor en

comparación con la de la Facultad de Ciencia y Tecnología.

Tabla 9 Influencia de Compromiso en el Aprendizaje Organizacional

Modelo R R cuadrado R cuadrado

ajustado

Error estándar de

la estimación

1 .718 .516 .512 .32683

Fuente: Análisis de datos Recolectados

Tabla 10 ANOVA de la Influencia de Compromiso en el Aprendizaje Organizacional

Modelo Suma de

cuadrados

Gl Media

cuadrática

F Sig.

1 Regresión 13.200 1 13.200 123.576 .000

Residuo 12.391 116 .107

Total 25.591 117

Fuente: Análisis de datos Recolectados

Tabla 11 Influencia de Compromiso en el Aprendizaje Organizacional en la Facultad de Ciencia y Tecnología

Modelo R R cuadrado R cuadrado

ajustado

Error estándar de

la estimación

1 .762 .581 .573 .32931

Fuente: Análisis de datos Recolectados

Tabla 12 ANOVA de la Influencia de Compromiso en el Aprendizaje Organizacional en la Facultad de Ciencia y

Tecnología

Modelo Suma de

cuadrados

Gl Media

cuadrática

F Sig.

1

Regresión 7.682 1 7.682 70.835 .000

Residuo 5.531 51 .108

Total 13.212 52

Fuente: Análisis de datos Recolectados

60

Tabla 13 Influencia de Compromiso en el Aprendizaje Organizacional en la Facultad de Humanidades

Modelo R R cuadrado R cuadrado

ajustado

Error estándar de

la estimación

1 .684 .468 .460 .32237

Fuente: Análisis de datos Recolectados

Tabla 14 ANOVA de la Influencia de Compromiso en el Aprendizaje Organizacional

Modelo Suma de

cuadrados

Gl Media

cuadrática

F Sig.

1 Regresión 5.767 1 5.767 55.490 .000

Residuo 6.547 63 .104

Total 12.314 64

Fuente: Análisis de datos Recolectados

DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES

Análisis descriptivo

Los hallazgos del estudio mostraron una mediana y moda de 4 y 4.28 respectivamente (ver tabla 4) en el

Compromiso Organizacional, lo que explica que el 50% de los datos observados se ubican por encima y

la diferencia por debajo de ese valor. Estos resultados difieren a los hallazgos de Ochoa (2014) quien

estudio esta variable en el contexto de una universidad pública de Honduras, el autor encontró una

mediana de 3.77, al comparar ambos resultados se observa que los valores mostrados en la UPNFM son

más favorables respecto a los encontrados por el autor, los hallazgos de este estudio sugieren que las

respuesta más común según la escala propuesta es el “De acuerdo”, es decir, aunque no como se espera,

los docentes continúan laborando para la Universidad y están dispuestos a dedicar un mayor esfuerzo para

lograr los objetivos lo que ayuda a mejorar el rendimiento y la eficiencia tanto a nivel individual, de

grupo, así como a nivel de la Organización (Allen y Meyer, 1997).

Para Adekola (2012) los docentes de las universidades públicas deben mostrar un alto

compromiso con su institución, lo cual es coherente si se considera el hecho que la estabilidad laboral

en las universidades públicas en superior a las del sector privado. Los docentes de las universidades

públicas se sienten seguros sobre su continuidad en el trabajo lo que evita que estén continuamente

buscando otra oportunidad laboral, por tanto el no tener la presión de generar ganancia y la demanda

constante de cumplir con los objetivos, permite una mayor libertad a los docentes de las universidades

públicas, sin el temor que vayan a ser despedidos por no lograr las metas de la organización (Meyer, et

al., 2002).

Durante el análisis de los tres tipos que comprenden el Compromiso Organizacional, en el compromiso

afectivo se observó una mediana y moda de 4.25 y 4.75 respectivamente, ambos valores cercanos al “de

acuerdo” según la escala, estos resultados son coherente con los de Ochoa (2014), en ambas universidades

61

se observa que existe un deseo de los docentes en continuar trabajando muestra un fuerte apego

emocional, abierto a participar y a identificarse con los objetivos y valores de la Universidad (Allen y

Meyer, 1997; Meyer y Allen, 1991).

En el compromiso continuidad, se observó una mediana y moda de 3.88 y 4.25 respectivamente,

ambos valores cercanos al “de acuerdo” según la escala, con estos resultados existe una aceptación de los

docentes que los costos son elevados al dejar de laborar para Universidad y que existen pocas alternativas

u oportunidades de trabajo (Allen y Mayer, 1997; Meyer y Allen, 1991).

Ahora bien, en el compromiso normativo se observó una mediana y una moda de 3.89 y 4.11

respectivamente, ambos valores cercanos al “de acuerdo” según la escala, resultados se traducen en una

fuerte obligación de los docentes de permanecer en la Universidad, no se atreverían a dejar su trabajo

porque sienten que es algo "moralmente incorrecto dejar de laborar en la institución" (Meyer y

Parfyonova, 2010), así también muestran valores arraigados en su conducta y sentirían miedo de lo que

dirán sus compañeros si abandonan su trabajo (Meyer y Allen, 1991).

Según la teoría propuesta por Meyer y Allen, 1991), los docentes de la UPNF, muestran un

compromiso de permanecer más tiempo, una mayor participación en los quehaceres de la Universidad,

están propensos a faltar menos días de trabajo, además es probable que se dediquen más en su trabajo, lo

que repercute positivamente en la calidad del trabajo que realiza en el aula de clases.

Respecto al aprendizaje organizacional, el estudio mostró una mediana de 3.83 y una moda de igual

valor (ver tabla 4), estos resultados son similares a los obtenidos por Ochoa (2014) en donde observó una

mediana de 3.86, los resultados muestran que ambas Universidades no muestra valores deseados de

aprendizaje

Al analizar cada uno de los tipos de aprendizaje se encontraron valores bajos, por ejemplo,

“Capacitar a las personas hacia una visión colectiva” muestra una mediana y moda de 3.5 y 3.33

respectivamente, cabe mencionar que Ochoa (2014) encontró valores similares en la misma dimensión

con una mediana y moda de 3.67 y 3.50 respectivamente, estos resultados reflejan que la Universidad

muestra debilidades en el proceso que sigue para poder lograr una visión colectiva (Watkins y

Marsick,1999), al parecer no se reconoce cuando los docentes toman la iniciativa, ofrece

limitadas opciones para ellos decidan las forma de hacer su trabajo, no los hace partícipe cuando

se formula la visión de la Universidad, los docentes tienen limitado control sobre los recursos

que necesitan para realizar llevar a cabo sus labores plenamente, ellos consideran que no se les

apoya cuando asumen riesgos calculados y que les parece que la visión de la Universidad no se

elabora tomando en cuenta los diferentes niveles y grupos de trabajo.

62

Prueba de hipótesis

A partir de los datos de la tabla 9 y 10 se infiere, por un lado, que los cambios que se presentan en el

aprendizaje organizacional son explicados en un 51.6% por los cambios que se generan en el compromiso

Organizacional, en segundo lugar, dado que p: 0.000<α: 0.05 existe evidencia estadísticamente

significativa para aceptar la hipótesis y concluir que sí existe influencia del Compromiso Organizacional

sobre el Aprendizaje Organizacional.

Los datos de la 11 y 12 muestra la influencia del Compromiso Organizacional sobre el Aprendizaje

en la Facultad de Ciencia y Tecnología, que los cambios que se presentan en el aprendizaje

organizacional son explicados en un 58.1% por los cambios que se generan en el compromiso

Organizacional, en segundo lugar, dado que p: 0.000<α: 0.05 existe evidencia estadísticamente

significativa para aceptar la hipótesis y concluir que si existe influencia.

Asimismo, la tabla 13 y 14 presenta los efectos del Compromiso sobre el Aprendizaje en la

Facultad de Humanidades, se observó que el Aprendizaje es explicado en un 46.8% por los cambios que

se generan en el Compromiso, dado que p: 0.000<α: 0.05 existe evidencia estadísticamente significativa

para aceptar la hipótesis y que en efecto, el compromiso organizacional afecta al aprendizaje

organizacional.

Los resultados tanto a nivel general como nivel particular en cada facultad, apoyan la teoría

propuesta por Bhatnagar (2007) quien considera que el mantener empleados comprometidos

mejora la capacidad de la organización para aprender, otros autores también apoyan esta teoría

(Harel y Tzafrir,1999). Para Cho y Kwon (2005), la organización que tiene empleados

comprometidos están motivados y presentan mayores deseos de aprender en su lugar de trabajo.

El Compromiso de los docentes se relaciona positivamente con el Aprendizaje cuando a los

docentes se les deja expresar sus puntos de vista y adquieren la capacidad de escuchar e indagar las

opiniones de los otros y el trabajo se diseña para acceder a los diferentes modos de pensar, (Nazari, 2013;

Mehrabi, 2013; Kamis y Noermijati, 2013).

Finalmente, el estudio demuestra que en la medida que se aumenta el sentimiento de apego del

docente hacia la Universidad, sus objetivos personales e institucionales se alinean y se le incluye en la

tomas de decisiones importantes, en medida se fomentan espacios que generan acuerdos para el

aprendizaje individual y colectivo, lo que conduce a mejorar la forma de aprender a nivel de Universidad.

RECOMENDACIONES

A continuación se describen las acciones que podría emprender la UPNFM para mantener y mejorar el

Compromiso y el Aprendizaje Organizacional. Respecto al Compromiso Organizacional se sugiere que la

63

Universidad muestre interés a los problemas que se le presentan a sus docentes en el desarrollo de sus

actividades.

En cuanto al Aprendizaje Organizacional, la Universidad debe premiar el aprendizaje y debe

conceder cierta autonomía, con parámetros definidos, en la toma de decisiones, y en el acceso a los

recursos necesarios para fortalecer el aprendizaje, debe fomentar la planificación colaborativa y flexible,

en donde se involucre al personal docente, debe valorar y recompensar la colaboración en equipo, debe

contar con sistemas que les permita identificar, registrar, actualizar y usar de forma eficiente las

capacidades de sus docentes, debe alentar a sus docentes a compartir sus experiencias y capacidades con

sus colegas, comprender la importancia que tienen los líderes (Jefes de Departamento, Decanos,

Vicerrectoría, Rectoría) para modelar y apoyar el aprendizaje, debe generar procesos de entrenamiento

producto de las necesidades y limitaciones que presenta el personal, debe promover la participación de

sus docentes en los procesos de toma de decisiones, debe promover una cultura de adquisición, creación,

transferencia e intercambio de conocimientos como valores fundamentales de la Universidad, debe

generar espacios de equilibrio laboral y familiar en sus docentes y debe mostrar interés por conocer la

opinión de la comunidad, tomándola en cuenta al planificar y al tomar decisiones.

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66

ELEMENTOS EMERGENTES EN LA NUEVA CONFIGURACIÓN DE LAS

FUNCIONES SUSTANTIVAS DE LA UNIVERSIDAD

Claudio Roberto Perdomo Interiano

Centro Regional San Pedro Sula

Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán [email protected]

RESUMEN

En este artículo se presentan una serie de reflexiones sobre la resignificación de las

funciones sustanciales de la universidad: docencia, investigación y vinculación con la

sociedad, tomando en cuenta algunas de las tendencias y características de la sociedad

en el siglo XXI; lo cual, lleva a concebir la actividad universitaria como un quehacer

multicontextualizado y cambiante. En tal sentido, se plantea que las distintas formas de

trabajo que se desarrollan en los escenarios de su competencia, deben establecerse sobre

la base de criterios tales como la pluralidad, flexibilidad, integración e innovación

permanente.

Asimismo, se sostiene que los enmarcamientos aúlicos y la autodeterminación de los

recintos académicos que en el pasado constituyeron fuentes y mecanismos para la

difusión de normas de autoridad a través de las cuales se ejercía el monopolio del

conocimiento, han entrado en la inevitable decadencia, conformándose como esa nueva

banalidad que sucumbe ante la fuerza transformadora de la cognición postmoderna y de

la irreverente actividad de la investigación científica.

En las líneas finales del artículo, se presentan tres propuestas para la nueva

configuración de las funciones sustanciales de la universidad: el fomento del trabajo

interdisciplinario en las distintas dimensiones del desarrollo y transformación de la

cultura académica, la bioética como espacio de trabajo transdisciplinario y el

fortalecimiento de la relación heurística entre la docencia, la investigación y la

vinculación con la sociedad.

PALABRAS CLAVE

Docencia, investigación, vinculación social, interdisciplinariedad, transdisciplinariedad,

integración, heurística, cultura académica, globalización, innovación permanente.

67

Recibido 27 de junio de 2016 /Aceptado 1 de noviembre de 2016

ABSTRACT

This article presents a series of reflections about the resignification of the substantial

functions of the university: teaching, research, and engagement with society, taking into

account some of the tendencies and characteristics of the society on the 21st century,

which leads us to conceive the university activity as a multi-contextualized and

changing task. In this sense, it is said that the different work forms that are developed in

the scenarios of its competence, must be established on the basis of criteria such as

plurality, flexibility, integration and permanent innovation.

In addition, it submits that the classroom frameworks and the self determination of the

academic enclosures that in the past constituted sources and mechanisms for the

diffusion of authority rules, through which they exercised the knowledge monopoly,

they have entered into the inevitable decadence, conforming the new banality that

succumbs before the transforming power of post-modern cognition and the irreverent

activity of scientific research.

On the final lines of the article, three proposals are presented for the new configuration

of the university substantial functions: the promotion of interdisciplinary work on the

different dimensions of the academic culture development and transformation, the

bioethics as transdisciplinary workspace, and the strengthening of the heuristic

relationship between teaching, research, and the engagement with society.

KEY WORDS

Teaching, research, social engagement, transdisciplinarity, integration, heuristics,

academic culture, globalization, and permanent innovation.

CONTEXTO

La vida universitaria de nuestro tiempo, puede ser comprendida desde una visión

ontológica que se construye a través de interpretaciones a los cambios acelerados y al

aparecimiento inusitado de formas convencionales y no convencionales, o de la

68

combinación entre ellas, para llevar a cabo las funciones sustantivas que histórica y

culturalmente han constituido su identidad institucional.

De esta manera, al intentar llevar su comprensión al nivel teórico, encontramos que

el marco ontológico al que acudimos para construir su fundamentación, permite desplegar

la actividad universitaria como un quehacer multicontextualizado y descentrado; por tanto,

con incidencias inacabadas que condicionan a la docencia, la investigación y la vinculación

con la sociedad, requiriendo que las mismas se funden entre la plasticidad determinada de

un mundo en constante transformación y el rigor que la didáctica y la investigación

científica deben poseer como condición esencial para desarrollar los procesos de enseñanza

y la producción de conocimientos; así como, para analizar y ofrecer soluciones a los

problemas presentes en la realidad socio – natural en la cual se halla situada.

En un mundo anclado en las interdependencias y fluctuaciones, las funciones

sustantivas de la universidad se presentan como formas de trabajo que deben establecerse

sobre la base de criterios tales como la pluralidad, integración, flexibilidad e innovación

permanente; en tal sentido, su configuración no sólo debe comprenderse como el simple

reflejo de las condiciones de los entornos y de las manifestaciones internacionales en los

que aparecen una y otra vez, elementos emergentes que atraen, motivan, angustian, desafían

y provocan la necesidad del cambio; sino, como identidades que se instauran a través de la

construcción crítica, la indagación e invención en las concepciones y procesos que tienen

lugar de manera intrínseca y extrínseca en su actividad permanente.

Como afirma Gimeno Sacristán (2001:76):

La globalización significa el establecimiento de interconexiones entre países o partes

del mundo, intercambiándose las formas de vivir de sus gentes, lo que estas piensan o

hacen, generándose interdependencias en la economía, la defensa, la política, la

cultura, la ciencia, la tecnología, las comunicaciones, etc.

Esto ha llevado a la adopción de un pensamiento autocrítico en la comunidad

académica, pues se ha comprendido que en la actual circunstancia histórica, la

autosuficiencia carece de sentido y de contexto, fundando en su lugar, relaciones dialógicas

para compartir experiencias, tejer redes y establecer relaciones de colaboración que

permitan cumplir y anticiparse a las demandas de la sociedad.

Una de las justificaciones que posee esta nueva forma de ver la cuestión universitaria, está

en que:

69

La ciencia viene sufriendo los cambios de la época y no está exenta de los ritmos

sociales ni del uso extendido del conocimiento, lo que se refleja en la idea

generalizada de formar una amplia masa de investigadores que incidan en el

desarrollo social y en los entornos locales. Como consecuencia, se produce una idea

generalizada sobre la importancia de hablar de ciencia en la escuela, en la comunidad

y en la interacción social (Rojas, 2011).

Desde esta perspectiva, se han instaurado procesos como el que da lugar al tratado

de Bolonia en el año 1999, cuyos objetivos han llegado a tener impacto en las instituciones

de educación superior de América Latina y El Caribe. En el caso de la región

centroamericana, se puede reconocer que paulatinamente se ha venido transitado desde

universidades cuyo énfasis ha estado en la enseñanza, difusión del conocimiento y el

trabajo parcelado de facultades y departamentos a formas de trabajo basadas en la

integración, que aunque todavía siguen siendo incipientes, marcan pasos importantes para

la recomposición teórica y práctica de la docencia, la investigación y la vinculación con la

sociedad.

CONCEPTUALIZACIÓN

Las distintas perspectivas mediante las que se construyen los significados que ostenta la

educación superior, permiten afirmar además, que se trata de un escenario esencialmente

dinámico, en el que si bien, predomina la idea acerca de su papel fundamental en la

producción, distribución, aprendizaje y aplicación del conocimiento; también se hace

presente la necesidad de contextualizar el cumplimiento de sus funciones sustantivas en la

vida comunitaria y en la promoción de relaciones responsables con el medio ambiente.

Como lo expresa Villagra:

Más allá de la centralidad propia de la acción transmisiva que tiene lugar en las aulas,

las prácticas de enseñanza, al estar encuadradas dentro de los marcos políticos-

académicos reguladores del nivel superior universitario, lejos de circunscribirse a la

visión tradicional de una docencia encapsulada en el aula, deben resignificarse en

torno a la aspirada articulación con las funciones de investigación y extensión, lo que

les confiere una cierta particularidad como objeto de análisis didáctico (2011:31).

La integración de la docencia, investigación y vinculación con la sociedad, debe

fundarse en elementos transversales que posibiliten las transiciones e intercambios

continuos de los marcos conceptuales, metodologías, actividades y hallazgos propios de

cada una de ellas, con la finalidad de lograr su reestructuración en los tiempos y espacios

70

socio – universitarios; esto requiere, el paso de las estrategias analíticas a la aplicación de

otro tipo de estrategias más abiertas e interdependientes en el desarrollo del trabajo

científico, pedagógico y comunitario; procurando que los modos de actuación e

interpretación de los actores y comunidades académicas coexistan entre la identidad y la

diferencia de los saberes y propiedades particulares de la realidad.

Los enmarcamientos aúlicos y la autodeterminación de los recintos académicos que

en el pasado constituyeron fuentes y mecanismos para la difusión de normas de autoridad a

través de las cuales se ejercía el monopolio del conocimiento, o que en otros casos, se

presentaron como formas de intimidación a la curiosidad y a la pregunta, han entrado en la

inevitable decadencia, conformándose como esa nueva banalidad que sucumbe ante la

fuerza transformadora de la cognición postmoderna y de la irreverente actividad de la

investigación científica.

En la Conferencia Mundial sobre Educación Superior celebrada con el nombre de la

nueva dinámica de la educación superior y la investigación para el cambio social y el

desarrollo (2009), se planteó que:

Ésta debería asumir el liderazgo social en materia de creación de conocimientos de

alcance mundial para abordar retos mundiales, entre los que figuran la seguridad

alimentaria, el cambio climático, la gestión del agua, el diálogo intercultural, las

energías renovables y la salud pública.

De esto se puede inferir, que dadas las actuales circunstancias, las exigencias que se le

presentan a la educación universitaria, desproporcionan sus ámbitos de gestión y los

esquemas utilizados por los actores académicos para llevar a cabo su trabajo; de esta

manera, el movimiento del mundo y de la cultura han modificado el sentido de la vida

universitaria, multiplicando sus significados, o en otros casos, desvaneciéndolos mediante

el impacto de los cambios; lo que además, ocasiona desplazamientos y genera rutas

diferentes para realizar la inestable misión institucional.

Como Sancho, Creus y Padilla (2010:32) lo han expresado:

Hace unos años el profesorado universitario dedicaba su tiempo aparentemente

tranquilo a enseñar un conocimiento relativamente estable y legitimado a unos

estudiantes aparentemente predispuestos a aprender. Complementaba su trabajo, en

algunos casos, con el desarrollo de alguna investigación y la publicación de algún

artículo o monografía. En este momento, ha de dedicar una considerable cantidad de

71

tiempo a enseñar un conocimiento emergente y cambiante a un alumnado

diversificado y con necesidades muy diferentes.

Entre tanto, el control sobre el tiempo de trabajo docente y la distribución de

asignaciones o tareas académicas, también ha pasado a formar parte de estilos de

fiscalización administrativa, como es el caso del empleo de sistemas biométricos al estilo

fabril, una versión refinada del taylorismo, traída de los confines de la producción material

de finales del siglo XIX y ajustada a nuestra época para el control del trabajo intelectual del

profesorado. Desde otro ángulo de análisis, estas prácticas también pueden indicar una

forma de prolongar el sentido del tiempo que caracterizó al hombre medieval; siendo el sol

el referente físico y el sonido de las campanas, su significado espiritual.

De acuerdo con Rama:

En el complejo mundo de la educación superior, el profesorado universitario también

experimenta la sacudida de una nueva realidad dada por un nuevo ciclo de estudios

posteriores a los tradicionales estudios de grado, ha nacido como resultado de la

complejidad de los procesos tecnológicos y de la notable expansión de los

conocimientos derivados de las inversiones económicas. Se constituye como un

nuevo ciclo de organización de los saberes derivado de la enormidad de

conocimientos y de su mayor nivel de complejidad, profundidad, integración y

especialización disciplinaria e interdisciplinaria (2009:45).

Una de las consecuencias de este proceso de transformación en el conjunto de

saberes y conocimientos, lo constituye el aparecimiento de nuevas exigencias para el

ingreso y permanencia en la profesión docente del nivel de educación superior, entre las

cuales se pueden mencionar, la aprobación de estudios de postgrado, la formación continua,

la participación en redes académicas de investigación, la práctica de nuevos enfoques

didácticos, las relaciones de colaboración entre profesores, la recreación curricular, entre

otras.

En el análisis crítico del trabajo docente, Gómez, Escofet y Freixa (2015: 209) afirman que:

Los profesores deben ser personas sensibles y cuidadosas ya que la enseñanza es una

tarea humana compleja que no puede reducirse a una técnica. Los profesores no

deben considerarse a sí mismos como una élite de expertos, sino que deben

involucrarse de forma responsable con las comunidades en las que ejercen su labor.

La popularización del conocimiento científico, el acceso a sus beneficios por parte

de sectores de la población que han sufrido de la exclusión e inequidad social, constituyen

finalidades éticas cuya concreción puede ser alcanzada a través de la inserción de la

72

actividad universitaria en la vida cotidiana, transfiriendo los aprendizajes a situaciones y

contextos socio – naturales; así como utilizando la investigación científica en la

averiguación y solución de los problemas que enfrenta la población urbana y rural. Se

trata entonces, de rebasar el simple instrumentalismo mediante el que algunas veces se

comprende al conocimiento, para llenar las funciones sustantivas de la universidad de

contenidos y finalidades sociales.

La dimensión docente, que por largo tiempo se constituyó como el principal asidero

del trabajo universitario, ha necesitado salir de sus límites conceptuales y procedimentales,

para imbricarse con la investigación científica con el propósito de renovarse o de apropiarse

de sus herramientas en el desarrollo del proceso pedagógico que facilita el aprendizaje de

los educandos; pero demás, requiere de la determinación de su pertinencia social a través de

sus imbricaciones con la vida comunitaria; donde existen problemas, experiencias para su

validación y datos para la reconstrucción de la enseñanza.

Como Vergara, Gamboa y Montes lo señalan:

El ejercicio investigativo concede al profesor mayor profundidad de conocimientos,

permite valorar el papel que desempeña la investigación en el desarrollo de su vida, lo

ayuda a mejorar sus métodos y resolver problemas educacionales. La investigación

abre un nuevo e interesante mundo en el cual se puede experimentar un continuo

mejoramiento personal y profesional y esto es una garantía de calidad para la

institución (2014: 163).

Desde tal perspectiva, se puede distinguir entre la investigación científica

fundamental y aplicada, como campo de trabajo individual, grupal o de redes de

investigadores; cuyos descubrimientos permiten la creación de modelos, teorías, conceptos,

fórmulas, métodos u otros elementos epistemológicos del corpus científico y que sirven

para la constitución de la identidad de la academia universitaria; y la investigación

formativa, que al ser utilizada en los procesos docentes, permite según Rojas:

Plantear problemas, ensayar miradas diversas sobre las cuestiones duras y blandas de la

ciencia e invitar a otros a la recapitulación del conocimiento disponible. Esta investigación

requiere hacerse responsable del discurso académico, sin que esto esté vinculado

necesariamente con una formación programada de investigadores. (2011:127).

El replanteamiento de la función docente también debe incorporar el uso del método

de la crítica pedagógica, a fin de reformular el significado de los aprendizajes, aún de

aquellos cuya comprensión haya gozado de alta reputación didáctica y psicopedagógica, ya

73

que los problemas sociales y los derivados del cambio climático, el progreso de la ciencia y

la tecnología, y las mutaciones constantes del mundo del trabajo, provocan la continua

emergencia de necesidades, fenómenos, hallazgos, instrumentos, paradigmas y soluciones;

donde la provisionalidad y la incertidumbre se erigen como criterios de validación de lo que

se aprende; sobre todo, cuando el mismo requiere ser transferido a situaciones novedosas e

inesperadas, en las que el interés intrínseco en el conocimiento se torna insuficiente para

satisfacer las visiones anticipadas en que se funda la teleología del proceso didáctico en el

contexto del mundo globalizado.

TENDENCIAS

Las múltiples manifestaciones del mundo globalizado, la revolución científica y

tecnológica, la integración cultural y económica, el cambio climático, la caída de las

antiguas certezas, el poder desafiante de las incertidumbres, la exuberantes fuentes de

aprendizaje, el paso a la metáfora de la red para darle sentido a la vida institucional y

social; constituyen, entre otros, los elementos emergentes que modelan el diseño y

desarrollo de las funciones sustantivas de la universidad.

Es a partir de ellos, como se marcan las tendencias sobre las cuales las instituciones

de educación superior, establecen sus inquisiciones, su encuentro con las oportunidades y

los desafíos, así como con las razones para atender la necesidad apremiante de aprender

más sobre sí mismas y su entorno, valorar la pertinencia de lo que se enseña e investiga y

establecer vínculos coherentes con la realidad social y natural. Esto implica la revisión y

reconstrucción continua de los contenidos curriculares, los cuales se convierten en objeto

de cuestionamiento y en fuente mediadora de la innovación; pero además, en un referente

para que la gestión pedagógica universitaria proceda a diseñar e implementar programas de

formación permanente en el profesorado.

Como expresa Rama:

Actualmente se ha pasado a un escenario donde se impone la necesidad de un proceso de

actualización de los currículos y al tiempo la permanente actualización de las personas ya

formadas y cuyos saberes básicos o especializados requieren de la actualización de las

competencias para mantener sus propios ámbitos de trabajo (2009:44).

Otros de los elementos emergentes en el contexto de la educación superior del siglo

XXI, se derivan del carácter cambiante del mundo laboral, el cual presenta nuevas

74

exigencias sobre las cualificaciones profesionales; en tal sentido, los programas de

formación profesional desarrollados por las carreras universitarias, deben buscar que los

resultados de aprendizaje o las capacidades profesionales alcanzadas, posibiliten la

incorporación adecuada en la vida laboral o en la adaptación a ella, puesto que de manera

acelerada, los espacios de trabajo se han convertido en territorios donde los nuevos y viejos

trabajadores se sienten amenazados, o en el más extremo de los casos, se ven desplazados

por nuevos trabajadores, máquinas o procesos científico – tecnológicos. Al respecto,

Jeremy Rifkin (1997) advierte que “una gran mayoría de trabajadores se sienten

completamente faltos de preparación para asumir la transición a la que deben enfrentarse.

La eclosión de los avances tecnológicos y de las iniciativas de reestructuración económica

parece habernos invadido sin previo aviso.”

Por otro lado, se da la expansión acelerada de los sistemas de educación superior, la

incorporación y uso de recursos tecnológicos en la docencia y la investigación, la

participación activa en programas derivados de la internacionalización de la educación, el

surgimiento y consolidación de la educación terciaria para el desarrollo de la formación

técnica en personas jóvenes y adultas, las nuevas formas de relación entre las instituciones

universitarias y las empresas, la investigación científica aplicada al fortalecimiento de la

seguridad alimentaria, la provisión de servicios de salud y agua de calidad para la

población; así como, el establecimiento de relaciones de respeto y solidaridad con los

demás seres vivos.

DESAFÍOS

Considerando que las tendencias que se manifiestan a nivel local, regional y mundial

determinan las rutas de trabajo que las universidades deben plantearse para desarrollar las

funciones de docencia, investigación y vinculación con la sociedad, es atinente que la

educación superior atienda la realización de indagaciones permanentes sobre las

condiciones y exigencias que presenta el mundo laboral, la constitución de redes

académicas para el mejoramiento de la docencia y el desarrollo de la investigación

científica, valorando en cada caso, las diferencias particulares y la conveniencia de

homogenizar procesos y resultados; la formación permanente del profesorado, que incluya

el dominio científico de la disciplina y el uso de enfoques didácticos que posibiliten la

transferencia de lo aprendido a otros contextos y situaciones; el desarrollo de actividades

75

curriculares y de vinculación social en las que se visibilice la interdependencia y respeto

entre los seres vivos, así como el fomento de valores democráticos, de transparencia y

vocación de servicio.

Otro de los desafíos concurrentes en el desarrollo de la educación superior, lo

constituye la necesidad de implementar programas de realfabetización digital del

profesorado; entre otras razones, se puede decir que su necesidad se justifica en la idea

expresada por Tomas et al (2010:20) cuando dice:

En la sociedad de la información y el conocimiento las universidades están destinadas

a crear, criticar y difundir conocimientos haciendo uso de los medios y recursos

tecnológicos que complementarán los métodos y recursos pedagógicos para poder

llegar a la diversidad de estudiantes.

PROPUESTA

Las funciones sustantivas de las instituciones de educación superior deben establecerse

sobre la base de un modelo holista que posibilite:

a.- El fomento del trabajo interdisciplinario en las distintas dimensiones del desarrollo

y transformación de la cultura académica universitaria

La forma en que se organiza el conocimiento en la composición de las prescripciones

curriculares, es uno de los elementos centrales para la planificación y desarrollo del trabajo

académico que se lleva a cabo en los distintos espacios de la actividad universitaria; en tal

sentido, sirve como referente en las continuas lecturas que los docentes y autoridades de

departamentos y facultades realizan al interpretar el sentido de la enseñanza.

Usualmente, esta organización ha estado basada en las estructuras particulares de las

disciplinas, las cuales se han comprendido como “categorías organizacionales en el seno

del conocimiento científico, de la que parte la división y especialización del trabajo”

(Arango: 1999). En la práctica, esta definición se ha llevado al exceso y ha provocado la

generación de experiencias en las que la relación con los objetos de estudio y su

contextualización, se caracterizan por mantenerse en una situación parcelada y atomizada;

lo cual, permite explicar los casos en que se da la ausencia del trabajo interdisciplinario en

las instituciones de educación superior y a delatar la escasa formación epistemológica de

algunos actores académicos para comprender el carácter esencialmente unitario del saber

humano.

76

El estilo de trabajo balcanizado que se desarrolla en varios escenarios que conforman

la educación superior, tiene sus raíces en la influencia de corrientes de pensamiento tales

como el positivismo de Comte y sus seguidores; así como en prácticas pertenecientes a la

actividad empresarial, desde las que se erigen modelos como el taylorismo y el fordismo,

los cuales han impregnado de su instrumentación a la cultura universitaria centroamericana

y de otras regiones del mundo.

Comte (1984: 57) indicó que:

Hay que distinguir, en relación a todos los órdenes de fenómenos, dos clases de

ciencias naturales: unas abstractas, generales, que tienen por objeto el descubrimiento

de las leyes que rigen las diversas clases de fenómenos, considerando todos los casos

que se puedan imaginar; las otras, concretas, particulares, descriptivas…. que

consisten en la aplicación de estas leyes.

De esta manera, logró establecer una clasificación de la ciencia en las que incluye a

la biología, matemática, física, astronomía y física social (nombre con el que originalmente

se le llamó a la sociología), delimitando las fronteras de cada campo de estudio, pero a la

vez, incorporando una visión jerárquica en la comprensión de las mismas; lo que sirve

incluso, para explicar la vigencia que actualmente tienen algunos criterios utilizados en la

temporalización de los espacios académicos y en la definición de los créditos o unidades

valorativas prescritas en el pensum académico de las carreras universitarias.

Asimismo, sostuvo que los conocimientos sobre la naturaleza y los procedimientos

que de ellos se deducen para modificarla en nuestro beneficio, deben concebirse como dos

sistemas esencialmente distintos en sí mismos y abordados por separado. En tal sentido,

afirmó que “todos los trabajos humanos son o de especulación o de acción. Así pues, la

división más general de nuestros conocimientos reales consiste en distinguirlos en teóricos

y en prácticos” (1984: 53).

La generalización argumentativa establecida por Comte ha servido como base para

alimentar la escisión entre teoría – práctica en la vida universitaria, lo cual ha generado

algunas implicaciones tanto en las maneras de lograr los aprendizajes promovidos desde

las asignaturas, módulos y seminarios que ocupan el mayor tiempo y espacio en la

actividad docente, como en los enfoques utilizados para diseñar y desarrollar la

investigación científica y las formas de vinculación con la sociedad; provocando que las

funciones sustantivas de la universidad aniden en compartimientos estancos y desprovistas

77

de contexto. Esto permite que en el pensamiento académico universitario, se puedan

identificar esquemas unilaterales en las formas de comprender la relación teoría – práctica;

así como el surgimiento de conductas académicas alienadas, empotradas en la

autosuficiencia de una de las partes de dicha vinculación.

Hay que reconocer que Comte advirtió sobre la necesidad de “evitar los perniciosos

efectos de la excesiva especialización sobre el porvenir intelectual” (1994:37), no obstante,

su propuesta de perfeccionar el trabajo intelectual en sí mismo y la constitución del estudio

de las generalidades científicas en una gran especialidad nueva, no le alcanzó para

contrarrestar la diseminación de abundantes concepciones arborescentes en el mundo

científico.

Por su parte, del modelo fordista – taylorista se han adoptado pautas para la

organización del trabajo en las instituciones de educación superior, la cual se caracteriza

por la fragmentación en el desarrollo de las tareas, el control de los tiempos y la separación

entre concepción y ejecución. Estas expresiones pueden ser identificadas con algún grado

de facilidad, en la estructura organizativa de las facultades y departamentos, en los diseños

curriculares y en las concepciones científicas predominantes en los docentes.

Es oportuno añadir, que la fuerza de estas tradiciones también constituye uno de los

principales obstáculos que se dan en algunas universidades, para alcanzar la concreción de

los planes de estudio con enfoque basado en competencias; puesto que los profesores

interpretan el proceso educativo desde la particularidad de su asignatura, sin alcanzar a

comprender el sentido de la integración de los contenidos conceptuales, procedimentales y

actitudinales, ni a establecer relaciones de interdependencia con otros saberes y áreas de

conocimiento; cuestión que resulta crucial para el desarrollo de las competencias en el

plano del desarrollo curricular y para la nueva configuración de las funciones sustantivas de

la universidad en el plano de la cultura institucional.

Eisner (1998: 275) sostiene que:

Una disciplina es un instrumento, un producto de la imaginación diseñado para servir

a alguna función útil…Los niveles de abstracción y el tema de la disciplina son

arbitrarios. Podemos dividir el mundo de cualquier manera que le dé sentido.

Menciono esto porque algunas personas creen que las disciplinas son entidades

naturales en lugar de instrumentos culturales.

78

El carácter cultural que Eisner le atribuye a las disciplinas, ayuda a entender que la

constitución de su cuerpo conceptual y metodológico está sometida a los cambios que se

dan en la historia de la ciencia y del mundo, que sus objetos de estudio y fronteras pueden

sufrir modificaciones; en consecuencia, la acostumbrada invocación a lo absoluto, utilizada

para alcanzar los niveles de seguridad en la explicación y verdad científica, es cada vez más

invadida por la relatividad que genera el cambio; y, entre tanto, en la sociedad de nuestro

tiempo también se da el advenimiento de elementos emergentes que desafían a la autoridad

científica.

Algo similar, ocurre con los contenidos desde lo que estructuran las funciones

sustantivas de la universidad y con las formas de actuación profesional de los miembros de

la comunidad académica que la conforma; por esto, resulta muy atinada la cita que Villagra

(2011:39) hace sobre algunos de los planteamientos de Brecher, en los que expresa que:

La declarada y declamada interdisciplinariedad lejos de su unívoca e indiscutible

aceptación, constituye una de las batallas entre tribus académicas más difíciles de

superar en el ámbito universitario. El trabajo entre distintos profesionales suele

transformarse simbólicamente en un campo de perpetuo enfrentamiento, muy a

distancia de los aspirados espacios de debate y construcción cooperativa.

Las ideas y prácticas separatistas que por largo tiempo han acaparado la forma de

hacer y rehacer la vida académica de las universidades, no alcanzan a comprender que el

encierro en el propio ámbito de especialización disciplinar se llega a convertir en un marco

de simplificaciones o en un terreno desgastado que requiere ser enriquecido a través de las

transferencias reciprocas que tienen lugar en el trabajo interdisciplinario; entre tanto,

tampoco se ahonda en la reflexión, ni se da paso a las intersecciones necesarias para que la

docencia, la investigación científica y la vinculación con la sociedad sean laboratorios

naturales para el propio perfeccionamiento profesional de los docentes universitarios.

Al respecto, Souza (2008) expresa que:

La postura y el movimiento en la dimensión interdisciplinaria permite tomar la

perspectiva del proyecto, al proyectar la docencia universitaria se encuentra la

posibilidad de construir nuevos sentidos para la formación de profesores que tienen

en la enseñanza superior su terreno de trabajo y producción científica. En estos

nuevos sentidos se destaca la búsqueda por configurar espacios de aprendizaje que

estén relacionados íntimamente con las necesidades y demandas sociales,

respondiendo a los desafíos contemporáneos de la ética, de la crítica y de la

ciudadanía.

79

b.- La bioética como espacio de trabajo transdisciplinario y su significado en la

integración de las funciones sustantivas de la universidad

La identificación y comprensión de la bioética como uno de los espacios para el trabajo

científico transdisciplinario, es un intento por aprovechar las infinitas posibilidades que

ofrece para integrar valores, conocimientos, paradigmas y métodos provenientes de

distintas fuentes de la cultura, entre las que se pueden mencionar: las disciplinas que

conforman el corpus académico de las carreras, las disciplinas que existen fuera de la vida

universitaria y las disciplinas que están en proceso de construcción en el mundo académico,

empresarial y cotidiano; las que, por su condición, aún no son explícitas en los contextos de

argumentación y práctica correspondiente; pero, más allá de su investidura y

situacionalidad, al formar parte del análisis y recreación transdisciplinar, las disciplinas

viven su integración en el rebasamiento de sus propios fronteras, lo cual constituye una de

las condiciones ontológicas para transformarse en algo distinto.

En este orden de ideas, se puede decir que este es uno de los puntos de partida para

considerar que en la dinámica que de esta manera se despliega, se pueden encontrar rutas

de pensamiento y actuación que se tornan necesarias para la reconfiguración continua de las

funciones sustantivas de la universidad; para lo cual, se requiere que las instituciones de

educación superior, además de mirar hacia sí mismas (normativas, programas y procesos)

deben mirar hacia el mundo, para favorecer el encuentro con lo cotidiano, en el que

prolifera lo diverso y múltiple, y sobre lo cual, la academia universitaria debe efectuar

constantes actos recursivos de autoconcepción, para pensarse y sentirse legítima.

Si bien, la cultura universitaria está dotada de contenidos científicos, tecnológicos,

filosóficos, literarios y artísticos; hay que reconocer que en el mundo hay otros contenidos

necesarios para la vida de los seres que habitan la tierra, por básicos y muy de sentido

común que parezcan, también son elementos en los que se fundan relaciones de

interdependencia y fructificación. En este sentido, hay que admitir con Kosik (1967: 25)

que:

La actitud que el hombre adopta primaria e inmediatamente hacia la realidad no es la

de un sujeto cognoscente, o la de una mente pensante que enfoca la realidad de modo

especulativo, sino la de un ser que actúa objetiva y prácticamente, la de un individuo

histórico que despliega su actividad práctica con respecto a la naturaleza y a los

hombres.

80

Y es quizá, en este marco de representaciones y prácticas donde empiezan los procesos

históricos de la ciencia y la creación inacabada de conocimientos que a través de la

sistematización, alcanzan a estructurarse como dimensiones de la actividad disciplinaria.

Los distintos significados que desde su surgimiento se le han atribuido a la bioética, pueden

generar posiciones dispares o divergentes respecto a la fuerza heurística que se manifiesta

en los procesos de integración del conocimiento y la creación de nuevas identidades

epistemológicas.

Y es, precisamente, en la afluencia de definiciones sobre su quehacer fundamental,

donde se pueden identificar distintas dimensiones semánticas e instrumentales, mediante las

que se le concibe como rama de la ética encargada del estudio de cuestiones médicas y

sanitarias; asimismo, desde su sentido teleológico, se declara que su finalidad consiste en

establecer criterios, normas y principios que guíen el obrar del hombre respecto a la vida;

como interpretación de las tendencias del siglo XXI, se le define como la conciencia crítica

de la civilización tecnológica; pero, además, desde visiones más amplias con implicaciones

holistas, se sostiene que es el estudio de todos los problemas de la vida en general, el medio

ambiente y el debido trato a los animales; así mismo, se expresa, que la bioética abarca las

cuestiones éticas acerca de la vida que surgen en las relaciones entre biología, nutrición,

medicina, química, política, derecho, filosofía, sociología, antropología, teología y otros

campos del conocimiento; a la bioética también se le concibe como el uso creativo del

diálogo inter y transdisciplinar entre ciencias de la vida y valores humanos para formular,

articular y, en la medida de lo posible, resolver algunos de los problemas planteados por la

investigación y la intervención sobre la vida, el medio ambiente y el planeta Tierra.

Como puede apreciarse, en este conjunto de definiciones concurren diversas

concepciones sobre el significado y lugar que ocupa la bioética en el cuerpo unitario que

constituye el pensamiento humano, y en las que se marcan sesgos monodisciplinarios,

interdisciplinarios y transdisciplinarios; cuya validez debe aceptarse como parte necesaria

de la composición lógica y ética del debate universitario. No obstante, es su estructuración

como campo transdisciplinario, el objeto pensado desde esta propuesta, pues como expresa

Edgar Morín:

La transdisciplinariedad representa la aspiración a un conocimiento lo más completo

posible, que sea capaz de dialogar con la diversidad de los saberes humanos. Por eso

81

el diálogo de saberes y la complejidad son inherentes a la actitud transdisciplinaria,

que se plantea el mundo como pregunta y como aspiración.

A través de las reflexiones teóricas expresadas, se pretende fundamentar la manera en

que la multiplicidad de contextos, perspectivas, metodologías, relaciones, hallazgos y tareas

en que se establece la bioética; pueden contribuir en la integración de las funciones

sustantivas de las instituciones de educación superior, en las cuales, las nuevas

configuraciones se podrán construir ejerciendo un control cognitivo sobre los elementos

emergentes en el entorno global y local, e instaurando relaciones con la realidad social y

natural, comprendida ésta, como fuente generadora de las grandes interrogantes de la

investigación científica y de la renovación de los aprendizajes, sin perder la ruta de

humanizar el mundo y sin atropellar los derechos de los demás seres vivos.

Desde otra perspectiva y conviniendo con las palabras de Bellver (2014:3):

Actualmente existe una diferencia de casi 25 años en la esperanza de vida entre los países

más desarrollados y los más pobres del mundo. Para reducir ese abismo bastaría con que se

garantizara a los ciudadanos de esos países la satisfacción de algunas de sus necesidades

básicas, como el saneamiento, el acceso al agua potable, la seguridad alimentaria, la

asistencia sanitaria básica o la protección frente a los desastres naturales y las catástrofes.

Pero, en el mismo cuerpo del texto, este autor continúa con su inquisición, advirtiendo que “el

desafío es lograr que el incremento de la esperanza de vida traiga consigo un incremento de

la esperanza de vida saludable y no la mera prolongación de la decrepitud de las personas”.

Los caminos para la integración de las funciones sustantivas de la universidad son

variados e inacabados, por tal razón, se requiere asumir actitudes de respeto y tolerancia

entre los miembros de la comunidad universitaria; así como, en las relaciones de ésta con la

sociedad, para dar paso a la indagación constructiva y a la posibilidad de ejercer una

autocrítica consciente sobre el propio trabajo; sea este individual, de equipos o de redes.

El progreso de la ciencia y la tecnología, así como los nuevos problemas y discusiones

que atienden la ética y la epistemología, o en su conjunto, los distintos campos del

conocimiento existentes dentro y fuera del ámbito universitario; son una especie de caños

que sirven para que la creatividad y práctica académica genere nuevos espacios de trabajo

en los que se transita de la anormalidad o excepcionalidad a la normalidad de la

explicaciones y soluciones encontrados en los procesos de descubrimiento y renovación;

por esto, no faltarán ocasiones en que en las comunidades académicas se requiera

82

fundamentar “esa otra cosa que no existía”, que genera asombro o interés defensivo por

conservar lo ya validado.

Esta reflexión sobre lo novedoso, lleva para el caso, a la interpretación de Adela Cortina, en

la plantea que:

La ética de la neurociencia intenta desarrollar un marco ético para regular la conducta

en la investigación neurocientífica y en la aplicación del conocimiento

neurocientífico a los seres humanos. En este sentido, podría considerarse

simplemente como una rama especializada de la bioética (Marcos, 2015:406).

Es importante resaltar, que la opción de integración interdisciplinaria propuesta, puede

ayudar en la convocatoria para iniciar acercamientos entre iniciados, expertos y ciudadanos

que permitan la construcción científica y social de la vida académica y por supuesto, el

mejoramiento cualitativo de la enseñanza.

c.- El fortalecimiento de la relación heurística entre docencia, investigación y

vinculación social

La comprensión de las funciones sustantivas de la universidad como espacios de trabajo en

los que se establecen relaciones de interdependencia, hace posible la aplicación o práctica

de estrategias heurísticas para la generación de descubrimientos a través de los que se

enriquecen los aprendizajes, se fomentan la producción de conocimientos y se impulsa la

solución de problemas a nivel institucional y comunitario.

En los dos apartados anteriores, se ha resaltado la importancia que tienen las formas

de integración del conocimiento por las vías inter y transdisciplinaria, con el propósito

interpretar el carácter que presentan los elementos emergentes que condicionan la actividad

universitaria en el presente siglo, para luego, buscar la estructuración de alternativas para

la nueva configuración de su identidad y esencia transformadora.

Por otra parte, es importante reconocer, que el acto mediante el cual la comunidad

universitaria establece vínculos con la sociedad; implica, en cierta medida, una manera de

renunciar a sí misma, para lograr que se dé el efecto de impregnación recíproca, la

flexibilización en los procesos de vinculación y la recreación del sistema de ideas en el que

se fundamenta el significado de su lugar y su no lugar en los distintos contextos de

pensamiento e intervención social en que se da la objetivación de sus funciones sustantivas.

En consecuencia, precisa que a la linealidad con que se concibe y diseña la

investigación científica y las relaciones con la sociedad, se agregue una visión permeable a

83

las divergencias y en la cual, haya lugar para que la creatividad se manifieste entre el

conjunto de los saberes elaborados por el pensamiento humano, sean estos sistemáticos o

no; es así como, la aplicación de estrategias heurísticas pueden llegar a favorecer la

activación de las continuas salidas, retornos y recomposiciones en los dominios teóricos,

metodológicos y prácticos de la docencia, la investigación científica y la vinculación que

las universidades establecen con la sociedad.

Los caminos para inquirir, sistematizar y dotar de sentido a tal propuesta pueden

asumirse desde distintas perspectivas científicas y filosóficas; una de las que se puede

mencionar a manera de referencia, y sin tratar de impulsar forma de adhesión alguna, más

que aquella que surja de la crítica y de la libertad para pensar; es la concepción heurística

desarrollada por Imri Lakatos (1989), en la cual, la concibe como medio para el

descubrimiento y la innovación en los programas de investigación científica.

De igual forma, distingue entre la heurística negativa y la heurística positiva; en la

primera, destaca que las tareas más convencionales que se realizan en el seno de la

comunidad científica que abrazan los programas de investigación científica (PIC),

corresponderían al afán de los investigadores en proteger la esencia del núcleo del

programa de investigación; mientras que la heurística positiva, consiste en un conjunto

parcialmente articulado de sugerencias o indicaciones sobre cómo cambiar y desarrollar las

‘variantes refutables’ del programa de investigación; cómo modificar y refinar el cinturón

protector refutable.

Más allá de la discusión filosófica que a partir de estos planteamientos se pueda

desarrollar, la idea de comentarlos, responde al propósito que tiene esta ponencia, en el

sentido de provocar reflexiones o llamar la atención sobre algunos aspectos de la vida

académica universitaria que pueden servir como puntos de partida para transformar la

visión tradicional de la docencia y la investigación científica, así como la conducta

extensionista que las instituciones han manifestado durante largo tiempo hacia la

comunidad; para situar en su lugar, las estrategias que permitan la transformación

constructiva de las funciones sustantivas de las instituciones de educación superior, como

apunta Bolívar y Caballero (2015), “el trabajo debe hacerse público y no permanecer en lo

privado; hablaríamos pues de una enseñanza visible que abra las puertas del aula al

exterior”.

84

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86

PERCEPCIONES DE LOS DOCENTES EN PRE- SERVICIO RELATIVAS A LA

INCLUSIÓN Y LA ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD

Carla Leticia Paz

Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán

[email protected]

María Cristina Cardona Moltó

Universidad de Alicante

[email protected]

RESUMEN

El reconocimiento de la diversidad humana como valor educativo, ha implicado que los

docentes de las aulas regulares, reciban preparación para crear espacios de aprendizaje

inclusivos. Siguiendo estas tendencias, la Universidad Pedagógica Nacional Francisco

Morazán, incluyó en su reciente reforma a los planes de estudio, competencias docentes

vinculadas con la atención a la diversidad y la inclusión. En esta investigación se analizaron

las percepciones de los docentes en pre servicio de la UPNFM, relacionadas con los

principios teóricos y metodológicos de la atención a la diversidad, la formación recibida en

la Universidad en estos ámbitos y finalmente las competencias que valoran como

importantes para desarrollar la educación inclusiva. Además de ello se realizó una

comparación de estas percepciones por ámbito de estudio y pertenencia a grupo étnico. El

estudio es de naturaleza cuantitativa, no experimental y de corte transversal, participaron

470 estudiantes en práctica profesional II.

PALABRAS CLAVE

Inclusión, Atención a la Diversidad, Percepciones, Formación Inicial, Docentes en Pre-Servicio

ABSTRACT

Recognition of human diversity and educational value, has meant that teachers in regular

classrooms will receive preparation for creating inclusive learning spaces. Following these

trends, the National Pedagogical University Francisco Morazán included in its recent

reform to the study programs, teaching skills linked to attention to diversity and inclusion.

87

Recibido 21 de septiembre de 2016 /Aceptado 9 de noviembre de2016

In this research, the perceptions of UPNFM pre service teachers related to the theoretical

and methodological principles of the Attention to Diversity were analyzed, the training

received at the University in these areas, and finally, the competences that are considered

important to develop an inclusive education. In addition, a comparison of these perceptions

by field of study and membership of an ethnic group was held. The study is quantitative,

not experimental and cross-sectional, 470 students from the Professional Practicum II

participated.

KEYWORKS

Inclusion, Attention to Diversity, Perceptions, Initial Training Pre-Service Teachers

INTRODUCCIÓN

Uno de los grandes desafíos hoy en día para las instituciones de formación docente, radica

en la preparación inicial del profesorado para la atención a la diversidad del alumnado. El

reconocimiento de los docentes como factor clave en el desarrollo de la inclusión educativa,

es uno de los importantes avances en los últimos años. Después de una época en que las

prioridades de las reformas educativas en América Latina y el Caribe estuvieron centradas

en infraestructura, textos, equipos, laboratorios, y otros insumos (Campos, 2003), la región

se encuentra en una etapa en la que se realizan esfuerzos por mejorar la equidad, calidad y

eficacia de los aprendizajes en un marco de justicia social.

Este esfuerzo se pone de manifiesto en las Declaraciones de Jomtiem (1990) y

Dakar (2000); en el caso de América; en el Proyecto Regional de Educación para América

Latina y el Caribe, PRELAC (La Habana, 2002), así como en los múltiples foros

internacionales en los que se ha analizado y reflexionado el protagonismo de los docentes

en las transformaciones educativas que las sociedades y las comunidades demandan

(UNESCO, 2012). Entre ellas hay que destacar la acogida y la atención educativa de

calidad que requiere un alumnado caracterizado por su diversidad individual y colectiva.

88

Desde la mirada de la educación inclusiva, la diversidad del alumnado se considera

un elemento enriquecedor del proceso enseñanza. Será entonces indispensable que el

profesorado de educación regular, perciba como provechosa la atención a las diferencias

humanas, lo contrario significaría la reproducción de prácticas educativas que en el pasado

han generado discriminación y exclusión.

Reorientar la formación del profesorado, hacia el desarrollo de creencias y

percepciones favorables con la inclusión educativa, el reconocimiento y aprecio por la

diversidad, es fundamental ya que estas, están vinculadas con las expectativas que se tienen

de los estudiantes, (Mason, 1997; Wiggins y Follo, 1999). Por otro lado, si la diversidad

está en las escuelas, la formación para responder a ella no debe dirigirse sólo a los

especialistas, sino que es esencial también para el profesorado del aula regular ( León,

1998). En última instancia los profesores no pueden enseñar lo que desconocen. Si las

universidades e instituciones de formación cambian su currículum de forma y manera que

se haga eco de la diversidad del alumnado al que sirven, estarán cumpliendo con su misión

(Nieto y Santos, 1997).

En correspondencia con estas tendencias internacionales, desde el año 2002, la

Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), a través de la Carrera de

Educación Especial crea el Proyecto Atención a la Diversidad, cuyo propósito fundamental

es la atención a los ámbitos de diversidad humana presente en la población estudiantil de la

institución, y a su vez se espera contribuir con la formación inicial en materia de inclusión

y atención a la diversidad (Documento Base Proyecto Atención a la Diversidad, 2002).

Sumado a ello, de manera reciente la UPNFM desarrolló un proceso de rediseño de los

planes de estudio, incorporando una competencia genérica, relacionada con el respeto y

valoración de la diversidad, la cual se conceptualiza como la capacidad de comprender y

aceptar la diversidad física, psicológica, social y cultural como un componente

enriquecedor personal y colectivo con el fin de promover la convivencia en paz entre las

personas sin incurrir en distinciones de género, edad, religión, etnia, condición social y

política (Aguilar, 2008). Sin embargo, hasta la fecha no se ha valorado sí estos esfuerzos

han contribuido a desarrollar percepciones y conocimientos favorables y necesarios para la

89

atención a la diversidad en contextos inclusivos. Este precisamente es el motivo que ha

impulsado el desarrollo de esta investigación que se ha guiado por los siguientes objetivos:

Identificar las percepciones de los docentes en pre-servicio de la

UPNFM, relativas a los principios teóricos y metodológicos de la atención a

la diversidad y la inclusión.

Determinar las percepciones de los docentes en pre-servicio sobre los

conocimientos adquiridos durante la formación en la UPNFM en materia de

inclusión y atención a la diversidad.

Identificar las percepciones de los docentes en pre-servicio sobre las

competencias específicas necesarias para atender la diversidad en ambientes

inclusivos.

Comparar por ámbito estudio y pertenencia a un grupo étnico, las

percepciones de los docentes en pre-servicio, sobre la atención a la

diversidad y la inclusión.

MÉTODOS Y MATERIALES

2.1 Diseño

Se optó por un diseño no experimental descriptivo- comparativo mediante encuesta. Los

diseños no experimentales describen alguna circunstancia que ha ocurrido o bien examina

las relaciones entre aspectos sin ninguna manipulación directa de las condiciones que son

experimentadas (Cardona, 2002). El diseño de encuesta fue de corte transversal pues la

medición se efectuó en un único momento, sin aplicaciones posteriores. La comparación de

las percepciones de los estudiantes acerca de los principios de la atención a la diversidad y

la inclusión se realizó en función de dos variables independientes; (1) el área de

conocimientos (Ciencias Sociales y Educación, Educación Física, Arte e idiomas, y Ciencia

y Tecnología), (2) el grupo étnico (mayoritario y minoritario). Este diseño permite

establecer comparaciones entre los grupos en estudio.

90

2.2 Población

Como sujetos participantes, se seleccionó la población total de estudiantes de último año de

carrera de la Sede Central de la UPNFM. Debido a que este grupo de estudiantes había

cursado el total de las asignaturas que componen el plan de estudios, se convirtieron en los

informantes claves para esta investigación. En el año 2012, el centro contaba con una

población de N = 545 estudiantes de último año.

De esta población participaron 470 estudiantes de cuarto año de las diferentes

carreras de la UPNFM, lo que representa el 86% de la población. Hay que mencionar que

en el momento de realizar el estudio algunos participantes se encontraban realizando unos

seminarios prácticos en diversos centros educativos, por lo que no todos pudieron acudir al

llamamiento.

3.3 Entorno

Esta investigación se realizó en la sede central, modalidad presencial de la Universidad

Pedagógica Nacional Francisco Morazán de Honduras (UPNFM), institución que

constituye el único centro de educación universitaria centroamericano dedicado

exclusivamente a la formación de docentes para todos los niveles de la enseñanza

3.4 Experimentos

Para realizar el estudio de las percepciones de los docentes en pre servicio sobre la

educación inclusiva y atención a la diversidad, se identificó, el cuestionario como

instrumento más apropiado ya que permite llegar a un mayor número de sujetos y ofrece

información detallada sobre los participantes en un tiempo relativamente corto. En tal

sentido, se realizó una revisión previa de la literatura con la intención de identificar un

instrumento que nos permitiera medir la variable en cuestión. Aunque se identificaron

algunos instrumentos, ninguno de ellos cuenta con aspectos relacionados a la formación

recibida sobre la inclusión y la atención a la diversidad, A ello hay que agregar que el

presente estudio se realiza con la finalidad de evaluar el proceso formativo que se brinda,

en particular, a los estudiantes de la UPNFM. De ahí, que se estimará conveniente la

91

elaboración de una escala diseñada ad hoc para medir las variables de interés contenidas en

los objetivos de investigación.

La Escala de Percepciones acerca de la Inclusión y la Atención a la Diversidad

(PIAD, Paz y Cardona, 2014)) consta 23 ítems y está estructurada en 3 sub-escalas,

utilizando una escala tipo Likert de 4 puntos (1 = totalmente en desacuerdo; 2 = en

desacuerdo; 3 = de acuerdo; 4 = muy de acuerdo). La administración de la escala era

sencilla y el tiempo para completarla era aproximadamente de 20 minutos. P ara estudiar la

Validez de Contenido de la escala se sometió la misma a una evaluación por jueces

expertos. El índice de validez de contenido por las tres partes de la prueba fue de, 0.88,

0.77, 0.80, respectivamente y el índice general fue de 0.81, lo que hace que la escala PIAD

se considere aceptable y valida a nivel de contenido. Se desarrolló una prueba piloto para

determinarla confiabilidad, obteniendo un alpha de Cronbach de 0.85, índice que se

considera aceptable cuando la variable que se mide son percepciones y el número de ítems

en el instrumento es reducido (Kerlinger y Lee, 2002).

3.5 Análisis estadístico

Se realizó un análisis cuantitativo a través del paquete estadístico IBM, SPSSStatistics 21

(StatisticalPackagefor Social Science). El procedimiento de análisis incluyó, descriptivos

como: cálculo de frecuencias y porcentajes, cálculo de medidas de tendencia central, en

este caso se hizo uso de la media aritmética y en el cálculo de medidas de dispersión de la

desviación típica y para comparar las percepciones de los estudiantes por área de

conocimientos y grupo étnico, se emplearon pruebas estadísticas paramétricas,

específicamente, el análisis de la varianza de dos factores.

DISCUSIÓN TEÓRICA

El reconocimiento del valor de la diversidad humana en educación y la creación de escuelas

inclusivas genera nuevas necesidades de formación docente. Para Sales (2006), estas

necesidades consisten en: (1) el desarrollo de programas de formación y actualización que

hagan posible la redefinición del papel del profesorado y permitan afrontar sus nuevas

92

funciones para la atención a la diversidad; (2) la promoción de actitudes positivas ante la

diversidad y la comprensión profunda de los cambios organizativos y curriculares que exige

una educación inclusiva; (3) el desarrollo de una formación básica para todos los

profesionales de la educación que evite las perspectivas categoriales centradas en el déficit,

el aislamiento y la descoordinación entre profesionales (generalistas y especialistas).

Actualmente se considera que todo profesor debe tener una formación básica para

trabajar en contextos de diversidad. De esta manera, frente a visiones categoriales y

homogeneizantes, las más recientes tendencias formativas plantean una visión integral más

cercana a la formación centrada en la escuela, la investigación-acción, y el análisis

institucional o desarrollo organizativo (Sales, 2006; Torres, 2009). Esta formación inicial

debe ser polivalente, no categórica y, por tanto, centrada en las necesidades de los

estudiantes y no en su condición deficitaria (Arranz, 2003).

En este sentido, la educación inclusiva conlleva un nuevo rol docente. Se considera

que el profesor del aula regular es el elemento clave del proceso de atención a la diversidad.

Tal como sugiere Parrilla (2003), es necesario forjar una nueva identidad docente:

competente pedagógicamente, capaz de investigar y reflexionar sobre la práctica con otros

profesores y consciente de las facetas sociales y morales de su profesión. De este

planteamiento, se derivan algunos elementos esenciales para la formación inicial del

profesorado, propuestos por Durán y Giné (2011):

- Aceptación de todo el alumnado como propio. Los alumnos y alumnas del grupo

clase son responsabilidad del profesor, independientemente de las características

personales que tengan. En algunos casos, la atención educativa puede ser compartida

con otros profesores de apoyo, pero ello no debe significar la derivación ni el

desentendimiento del profesor de aula ordinaria.

- Aula y centro ordinario como espacio preferente de atención. Los alumnos deben

hallar la atención a sus necesidades educativas en entornos lo más normalizados

posibles, con los apoyos necesarios. La escolarización en centros de educación especial

93

debe reservarse exclusivamente para aquellos alumnos para los cuales los centros

ordinarios hayan agotado toda su capacidad de atención.

- Conocimiento sobre las diferencias de los alumnos. El profesorado debe conocer

a sus estudiantes en términos de potencialidades y necesidades.

- Estrategias para la inclusión. Para facilitar la atención a la diversidad es

necesario el dominio de decisiones curriculares y metodologías que faciliten el mayor

grado de participación y aprendizaje de todos.

RESULTADOS

El primer objetivo de esta investigación, pretendía identificar la percepción de los

estudiantes acerca de los planteamientos teóricos y metodológicos propios de la educación

inclusiva y de la atención a la diversidad del alumnado. Como se observa en la Tabla 1, los

docentes en pre-servicio tienen una percepción global claramente favorable de los

principios que orientan la atención a la diversidad en contextos inclusivos (M = 32.00; DT

= 4.26), siendo la puntuación mínima de 9 y la máxima de 36.

Tabla 1. Percepciones sobre los planteamientos teórico metodológicos de la inclusión y atención a la

diversidad

TD ED DA MD

M DT f % f % f % f %

Total 32.0 4.26

1. A favor de la diversidad en las

aulas.

3.50

.80

24

5

21

5

120

26

305

65

2. Presencia de profesores de

apoyo. 3.39 .79 20 4 33 7 161 34 256 55

3. Todos los estudiantes pueden

aprender. 3.69 .67 16 3 9 2 80 17 365 78

4. La inclusión mejora la calidad

de la enseñanza.

3.58 .69 16 3 9 2 132 28 313 67

5. Atención a la diversidad en

todos los niveles. 3.74

.62

13 3 06 1 71 15 380 81

6. Todos los profesores en

formación deben recibir

contenidos sobre educación

especial.

3.73

.63

12 3 12 3 67 14 379 81

94

7. Planes de estudio de profesorado

que contengan temas

relacionados con la atención a la

diversidad.

3.53

.74

19 4 14 3 138 29 299 64

8. Aceptaría compartir la docencia

con un profesor de apoyo. 3.16

.87

28 6 63 13 187 40 192 41

9. La inclusión y la atención a la

diversidad deberían ser ejes

transversales en los planes de

estudio.

3.47 .66 8 5 21 5 185 26 256 65

TD = Totalmente en desacuerdo; ED = En desacuerdo; DA = De acuerdo; MA = Muy de acuerdo

Todos los ítems que medían este factor fueron valorados con puntajes por encima del

punto medio de la escala. Sin embargo, aunque las percepciones acerca de los principios de

la inclusión parecen positivas, sólo un 41% de los respondientes estaban muy de acuerdo en

compartir la docencia con un profesor de apoyo.

Otro de los propósitos de este estudio fue analizar en qué medida los estudiantes

habían recibido contenidos formativos relacionados con la puesta en práctica de la

educación inclusiva y la atención a la diversidad. La puntuación total obtenida de la suma

de todos los ítems de esta subescala (M = 14.50; DT. = 3.73) resultó ser levemente inferior

al punto medio situado en 15 (mín. 6 - máx. 24). Esto indica que los estudiantes tenían un

conocimiento bajo del uso de estrategias para implementar la educación inclusiva y atender

la diversidad. Como puede visualizarse en la Tabla 2, en ninguna de las estrategias

consideradas básicas para implementar la inclusión se había recibido formación suficiente,

a juicio de los respondientes

Tabla 2. Contenidos formativos recibidos sobre inclusión y atención a la diversidad

NA AL BA MU

M DT f % f % f % f %

Total

14.5

3.73

1.Diseño de adaptaciones curriculares

2.15

.88

113

24

213

45

104

22

40

09

2.Implementación de adaptaciones

instructivas

2.50 .88 58 12 185 39 161 34 66 14

3.Estrategias organizativas

(agrupamiento) 2.59 .89 50 11 171 36 170 36 79 17

95

4.Estrategias de enseñanza

colaborativa

2.55 .85 50 11 173 37 185 39 62 13

5. Estrategias y recursos de evaluación

auténtica.

2.69 .88 43 09 149 32 188 40 90 19

6. Procesos de reflexión crítica sobre

estereotipos y creencias acerca de la

diversidad.

2.11 .90 127 27 204 43 98 21 41 09

1 = Nada; 2 = Algo; 3 = Bastante; 4 = Mucho

El tercer objetivo pretendía identificar aquellas competencias que los estudiantes

consideran necesarias para atender la diversidad en contextos inclusivos. Todas las

competencias fueron consideradas importantes, sin embargo, las mejor valoradas para el

desempeño docente fueron, en primer lugar, ítem 8 la ‘Capacidad para reflexionar

críticamente sobre las actitudes y valores relacionados con la diversidad’ (M = 8.57; DT =

1.51); en segundo lugar, ítem 2 la ‘Capacidad para diseñar y aplicar estrategias de atención

en contextos culturales y sociales diversos’ (M = 8.48; DT= 1.62) y; en tercer lugar, ítem 4

la ‘Capacidad para realizar adaptaciones instructivas en el aula de clase’ (M = 8.47; DT =

1.56). Los resultados se presentan en la Tabla 3.

Tabla 3. Competencias necesarias para la atención a la diversidad

M DT Min Max

Total 66.9 10.2

1. Capacidad para valorar la diversidad del alumnado.

8.27

1.56

2

10

2. Capacidad para diseñar y aplicar estrategias de atención en contextos

culturales y sociales diversos.

8.48

1.62

1

10

3. Capacidad para diseñar e implementar adaptaciones curriculares. 8.23 1.79 1 10

4. Capacidad para realizar adaptaciones instructivas en el aula de clase. 8.47 1.66 1 10

5. Capacidad para implementar estrategias organizativas. 8.26 1.70 1 10

6. Capacidad para desarrollar procesos colaborativos con otros profesores. 8.17 1.76 1 10

7. Capacidad para implementar estrategias y recursos de evaluación auténtica. 8.32 1.84 2 10

8. Capacidad para reflexionar críticamente sobre las actitudes, valores y

acciones relacionadas con la atención a la diversidad.

8.57

1.51

2

10

96

En cuanto al cuarto objetivo que pretendía la comparación de las percepciones por

ámbito de estudio y pertenencia a un grupo étnico, se determinó que ni el efecto principal

de la variable ámbito de estudio [F (2, 469) = .56, p = .570], ni el efecto principal de la

variable grupo étnico [F (1,469) = .01, p = .924] resultaron estadísticamente significativos.

Estos resultados sugieren que las percepciones acerca de los principios de la inclusión que

tienen los estudiantes, no diferían significativamente. Igualmente, el efecto de la interacción

A x G no alcanzó la significación estadística [F (2, 469) = .61, p = .544] ni sobre el factor

en su conjunto ni atendiendo a sus ítems por separado, exceptuado el ítem 8 ‘Aceptaría

compartir la docencia con un profesor de apoyo’. El análisis post hoc de las medias de este

ítem empleando el test de Scheffé indicaron que la del grupo de participantes que estudiaba

Educación Física, Arte e Idiomas del grupo mayoritario (M = 3.22; DT = .87) fue

significativamente diferente de la del grupo minoritario (M = 2.95; DT = .81), mientras que

en los otros dos grupos CC. SS. y Educación y Ciencia y Tecnología no se apreciaron

diferencias con significación estadística entre los grupos mayoritario y minoritario. Estos

resultados vienen a indicar que la enseñanza colaborativa es una práctica mejor percibida

por los estudiantes del grupo mayoritario de EF, Arte e Idiomas que del minoritario del

mismo ámbito de estudio.

Se analizaron las diferencias en los contenidos formativos abordados en la carrera

sobre atención a la diversidad e inclusión en función del ámbito de estudio y grupo étnico.

La Tabla 4 contiene los resultados de este factor. Puede observarse que ni el efecto

principal de la variable ámbito de estudio [F (2, 469) = .2.58, p = 0.77], ni el efecto

principal del grupo étnico [F (1,469) = .236, p = .627] resultaron estadísticamente

significativos. Sin embargo, en el ítem 2 ‘Implementación de adaptaciones instructivas’ y

en el 6 ‘Procesos de reflexión crítica sobre estereotipos y creencias acerca de la diversidad’

se apreciaron diferencias estadísticamente significativas atribuibles al ámbito de estudio.

Las pruebas post hoc mostraron que, en el primer caso, los estudiantes de Ciencias Sociales

y Educación (M = 2.55; DT = .85) y los de Ciencia y Tecnología (M = 2.53; DT = .92)

indicaban haber abordado contenidos acerca de la implementación de adaptaciones

instructivas como medida de respuesta a las diferencias por capacidad en grado

significativamente mayor que los de Educación Física, Arte e Idiomas (M = 2.46; DT =

97

.88). En el segundo caso, los resultados mostraban que los estudiantes de Ciencias Sociales

y Educación (M = 2.31; DT = .92) habían analizado y debatido las creencias y estereotipos

sobre la diversidad humana en grado significativamente mayor que los de Educación Física,

Arte e Idiomas (M = 1.96; DT = .84) y los de Ciencia y Tecnología (M = 1.91; DT = .83).

Tabla 4. Contenidos formativos abordados en la carrera en función del ámbito de estudio y grupo étnico

(Contraste de medias)

CC.SS. y

Educ

EF, Arte,

Idiomas

CC TE

M DT M DT M DT Efect F Gl p

Total factor

Grupo mayoritario 15.0 3.79 14.4 3.75 14.2 3.50 A

G

AxG

2.58

.24

1.96

2

1

2

.077

.627

.142 Grupo minoritario 14.6 3.73 12.8 3.70 15.5 4.34

1. Diseño de

adaptaciones

curriculares

- Mayoritario 2.27 .91 2.10 .86 2.02 .82 A

G

AxG

1.68

.881

2.96

2

1

2

.187

.347

.052

- Minoritario 2.16 .84 1.95 .94 2.64 1.12

2. Implementación de

adaptaciones

instructivas

- Mayoritario 2.55 .85 2.46 .88 2.53 .92 A

G

AxG

3.21

.248

2.42

2

1

2

.041*

.619

.090

- Minoritario 2.34 .86 2.10 .95 2.91 .94

3. Estrategias

organizativas

(agrupamiento)

- Mayoritario 2.61 .89 2.63 .88 2.59 .87 A 2.68 2 0.70

- Minoritario 2.56 .91 2.10 .88 2.91 .83 G

AxG

.474

3.19

1

2

.492

.042*

4. Estrategias de

enseñanza

colaborativa

- Mayoritario 2.59 .83 2.56 .95 2.55 .77 A .942 2 .391

- Minoritario 2.56 .84 2.38 .92 2.18 .87 G

AxG

2.32

.641

1

2

.128

.466

5. Estrategias y

recursos de

evaluación auténtica

- Mayoritario 2.72 .87 2.74 .90 2.68 .86 A .453 2 .355

- Minoritario 2.63 .97 2.38 .86 2.73 .78 G

AxG

1.08

.791

1

2

.849

.620

6. Procesos de

reflexión crítica

sobre estereotipos y

creencias acerca de

la diversidad

- Mayoritario 2.31 .92 1.96 .84 1.91 .83 A 4.90 2 .008*

98

- Minoritario 2.38 .94 1.90 .94 2.18 .98 G

AxG

.516

.428

1

2

.473

.652 * Significativa al 5% (p < .05)

1 = Nada; 2 = Algo; 3 = Bastante; 4 = Mucho

El efecto de la interacción A x G tampoco resultó significativo [F (2, 469) = 1.96, p

= .142] ni sobre el factor en su conjunto ni sobre los ítems por separado, exceptuado el ítem

3 ‘Estrategias instructivas (agrupamiento)’. Mientras la capacitación recibida en el uso de

estas estrategias por el grupo mayoritario de los tres ámbitos de estudio fue similar, no

ocurrió así dentro del grupo minoritario en el que los participantes de Ciencia y Tecnología

(M = 2.91; DT = .83) valoraron la formación recibida significativamente mejor que los de

Ciencias Sociales y de la Educación (M = 2.56; DT = .91) y de Educación Física, Arte e

idiomas (M = 2.10; DT = .88). Estos resultados indican que el abordaje de estos contenidos

no fue percibido por igual dentro del grupo mayoritario que minoritario en el seno del cual

los estudiantes de Ciencia y Tecnología eran los más satisfechos.

CONCLUSIONES

Los estudiantes de la UPNFM tienen percepciones favorables hacia los principios y

planteamientos de la atención a la diversidad y la inclusión. Sin embargo, durante la

formación en la carrera el grado de abordaje de contenidos como las adaptaciones

instructivas, la adaptación curricular, las estrategias organizativas y el estudio de

estereotipos sobre la diversidad ha sido bajo. Por otro lado, los estudiantes perciben que las

competencias necesarias para el desempeño docente en atención a la diversidad consisten

en la capacidad de reflexionar sobre la diversidad, la capacidad para proponer y desarrollar

estrategias de atención en diferentes contextos y, finalmente, la capacidad para implementar

adaptaciones instructivas en el aula.

La comparación de las percepciones de los estudiantes según ámbito de estudio y

grupo étnico demostró que no existen diferencias estadísticamente significativas. Es decir,

que los participantes, independientemente del ámbito de sus estudios o de su pertenencia a

99

un grupo étnico mayoritario o minoritario, tenían percepciones básicamente similares de la

atención a la diversidad y la inclusión, salvo alguna excepción previamente comentada.

RECOMENDACIONES

Consideramos que futuras investigaciones deberían estar orientadas a estudiar con mayor

grado de profundidad la formación inicial de los estudiantes que pertenecen a grupos

étnicos u otros colectivos minoritarios que tienen presencia en las instituciones

universitarias. Pues éstos maestros pueden jugar un papel fundamental en la atención a la

diversidad y la inclusión por el simple hecho de constituir minorías.

Otro aspecto importante sería incluir en esta clase de estudios, al profesorado

universitario. Indagar sobre sus creencias, actitudes y percepciones acerca de la diversidad

humana y la inclusión es un objeto de estudio que guarda especial interés para la formación

inicial.

100

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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Francisco Morazán. Tegucigalpa: Sello Editorial UPNFM.

Arranz, P. (2003). La formación inicial del profesorado: Modelos, demandas y

prescripciones. Anuario De Pedagogía, 5(1), 75-101.

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Editorial EOS

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Torres, J. A. (2009). Dilemas y necesidades de formación del profesorado en el marco de

una escuela comprensiva que atiende a la diversidad. Salamanca: Ediciones

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UNESCO. (1990)Declaración mundial sobre educación para todos: satisfacción de las

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UNESCO. (2000). Educación para todos: cumplir nuestros compromisos comunes,

aprobado por el foro mundial sobre la educación. Dakar, Senegal: Autor

UNESCO. (2012). Antecedentes y criterios para la elaboración de políticas docentes en América

latina y el Caribe. Santiago de Chile: UNESCO

UPNFM (2002) Documento base del Proyecto Atención a la Diversidad. Tegucigalpa: UPNFM

101

En relación con tales supuestos, el contacto intercultural exige, tanto por parte de nativos

como de no nativos, la puesta en práctica de estrategias culturales de tolerancia y adaptación, entre

otras, con miras a evitar el hecho de que determinada cultura se tome como referente universal y

que la relación entre culturas diversas siga criterios jerarquizantes y homogeneizantes.

102

Responsabilidad Social y Educación en Honduras

Lenin Leonardo Banegas Barahona

[email protected]

RESUMEN

Las relaciones entre la educación y la responsabilidad social son cada día evidentes derivando en al

menos tres vínculos; La responsabilidad social ejecutada por las empresas por su participación en el

desarrollo comunitario específicamente en el sector educación, es decir las inversiones socialmente

responsables que la empresa privada puede realizar a favor de la educación. La educación y

formación de Directores de Responsabilidad Social Empresarial, lo cual es incluyente del desarrollo

de propuestas en donde el tema de responsabilidad social empresarial se tome de forma transversal

o se generen espacios educativos propios, así como el desarrollo de carreras específicos asociada al

tema. La responsabilidad social de los centros educativos en participar en procesos de potenciación

del progreso social, económico, ambiental e institucional, como un ciudadano organizativo más,

bajo un esquema de territorios socialmente responsables en donde participen todos por el bien

común.

En este trabajo se resumen las experiencias de Honduras, en los tres vínculos estableciendo el grado

de avance existente hasta el momento sobre esta temática reflexionando sobre todo sobre las

perspectivas que existen de que la vinculación entre educación y responsabilidad social se consolide

en el Sistema Educativo Nacional, con ello se aporta en especial al dialogo que desde la academia y

especialmente desde la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán debe de impulsarse,

congruente con sus prioridades y líneas de investigación institucionales, en donde la

Responsabilidad Social y Educación ha quedado establecida desde el año 2010.

ABSTRACT

The relationship between education and social responsibility is evident every day, resulting in at

least three links. The social responsibility implemented by the companies because of for their

participation in community development specifically in the education sector, that is to say the

socially responsible investments that private enterprise can make in favor of education. The

education and training of Directors of Corporate Social Responsibility, which is inclusive of the

development of proposals in which the issue of corporate social responsibility is taken transversally

or generate their own educational spaces, as well as the development of specific careers associated

with the topic. The social responsibility of educational centers to participate in processes to promote

social, economic, environmental and institutional progress, as a more organizational citizen, under a

scheme of socially responsible territories where all participate for the common good.

103

Recibido 31 de agosto de 2016 /Aceptado 11 de noviembre de 2016

This paper summarizes the experiences of Honduras in the three links, establishing the degree of

progress to date on this issue, reflecting above all on the perspectives that exist that the link between

education and social responsibility is consolidated in the National Education System ,With that it is

contributed in special to the dialogue that from the academy and especially from the National

Pedagogic University Francisco Morazán must be promoted, congruent with its priorities and lines

of institutional research, where Social Responsibility and Education has

PALABRAS CLAVE

Competencias; Educación; Responsabilidad Social; Desarrollo Comunitario; Coordinación

Interinstitucional; Inversiones Sociales; Fondos Éticos; Participación.

KEY WORDS

Skills; education; Social Responsibility; Community Development; Interagency coordination;

Social investments; Ethical funds; participation.

INTRODUCCIÓN

La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es un enfoque de hacer negocios que se ha venido

impulsando desde los años 70´s , sin embargo la relación con la educación se ha comenzado a

desarrollar recientemente, en el momento en que se reconoce que una de las Responsabilidad

Sociales de las Empresas es apoyar al desarrollo comunitario y dentro de este a la educación sobre

todo público, de tal forma que se han venido impulsando un conjunto de inversiones socialmente

responsables orientadas a fortalecer y mejorar la calidad de la educación.

Para que el enfoque sea pleno se ha planteado desarrollar procesos de formación en

responsabilidad social empresarial, enfocados a la formación de capacidades y competencias de los

directores de responsabilidad social empresarial, esta es una tarea que pocos centros educativos han

comprendido a plenitud de tal forma que se desarrolla la temática de manera optativa y transversal,

solamente existiendo una experiencia donde una Universidad hondureña forma en responsabilidad

social empresarial con un espacio único, en Honduras aun no existen carreras en este tema en

pregrado, postgrado (especialidades, maestrías), por lo que se considera que es una tarea tendiente.

Finalmente, los centros educativos como organizaciones dentro de la sociedad también tienen

responsabilidades con sus empleados, con la comunidad y con el ambiente, por lo que examina

también el rol que tienen los centros educativos en promover su propia responsabilidad social.

104

En este trabajo consideramos a manera de hipótesis:

Que no existe un registro de las inversiones socialmente responsables, por lo que es difícil

magnificar la contribución del sector privado al fortalecimiento de la educación pública, ya que el

Estado no dispone de registros sobre donaciones y apoyos del sector privado.

La responsabilidad social de los centros educativos se realiza de forma tradicional, no

sistematizada ni organizada a través de una unidad como una jefatura, departamento de

Responsabilidad Social del Centro Educativo hacia la comunidad.

1. Antecedentes de la Responsabilidad Social Empresarial

La Responsabilidad Social Empresarial puede considerarse como un enfoque recientemente

aceptado en el pensamiento empresarial moderno, aunque sus orígenes puedan ser rastreados hasta

los años 50´s del siglo XX, según (Bonilla, Castillo, & Morales, 2007, pp.38-42), esto puede

situarse en los trabajos y pensamiento propio de (Bowen, 1953, pp. 10-30) como de (Levitt, 1958,

pp. 29).

Sin embargo de forma más intensa el enfoque de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE),

comenzó a profundizarse según (Banegas, 2010, pp. 21-26) en tres referentes importantes:

El primero de ellos son los principios del reverendo León Sullivan (1922-2001), que fueron

elaborados como un “Código de Conducta para las empresas que operaban en el Sur de

África”, su legado ha sido inmortalizado y adoptados como principios del pacto global,

adoptados por el Sistema de las Naciones Unidas.

Un segundo referente importante es el desarrollado por el Profesor James Austin, quien

escribió el inspirador libro traducido de la versión inglesa (2000) en 2003 titulado “El

desafío de la colaboración. Como las organizaciones sin fines de lucro y las empresas

comerciales alcanzan el éxito mediante alianzas estratégicas” este libro es ilustrativo ya

que plantea que es innecesaria la creación de los brazos sociales de las empresas en forma

de fundaciones, en virtud que estas se especializan en sectores importantes de la producción

o de los servicios, pero no en prestación de servicios sociales, para los que existen ya

instituciones sociales nacionales e internacionales especializadas y con una amplia

experiencia institucional (Austin, 2003, pp. 141-157),.

Finalmente un tercer referente en la temática de RSE, es la teoría de los Stakeholders o

partes interesadas desarrolladas por R. Edward Freeman, desarrollada en 1984 como un

concepto más amplio que el de los actores sociales (Freeman, 1984, pp. 76), esto ha

105

ilustrado formas de actuación para el relacionamiento y el manejo de quejas como de las

reclamaciones.

Actualmente se reconoce que las empresas socialmente responsables, desarrollan un conjunto de

acciones afirmativas con diferentes partes interesadas, las que se encuentran definidas en cinco

áreas, estas son:

1. Empleados o colaboradores en lo relacionado a la inclusión social, como al cumplimiento

de las normas de seguridad y salud en ambientes de trabajo, como de los derechos humanos

laborales, que están vinculados con los Derechos Económicos, Sociales y Culturales

(DESC).

2. Vecinos, contribuyendo al desarrollo comunitario en las dimensiones sociales (educación,

salud), bajo el esquema de inversiones sociales, mediante el establecimiento de fondos

éticos.

3. Consumidores, vinculado al mercadeo responsable, como la educación del consumidor para

fomentar el consumo responsable.

4. Con el Estado, las empresas tienen una responsabilidad fiscal, que permite al Estado

cumplir sus propias responsabilidades de inversión social (RSEstatal), pero también

apoyando a la gobernabilidad en distintos sectores de interés social.

5. Con el Ambiente, las empresas deben comprometerse a la mitigación de riesgos e impactos,

mediante la implementación de Mecanismos de Desarrollo Limpio (MDL) y apoyo a las

acciones de conservación y restauración ecológica, como la gestión integral de los recursos

(agua, energía).

2. MÉTODOS Y MATERIALES

Al tratarse de un informe cualitativo, en el que rescata los siguientes elementos sustantivos de las

relaciones entre educación y responsabilidad social:

Evidenciar los mecanismos de coordinación entre la empresa privada y el sector educación, la

forma en que se priorizan las inversiones sociales que las empresas realizan en apoyo al

fortalecimiento del sector educación

106

Determinar los espacios de formación y capacitación en el sector educación visto desde la

perspectiva de las instituciones educativas y las competencias demandadas por el sector privado

en sus perfiles de puesto como Coordinadores de RSE.

En el marco de conocer las iniciativas innovadoras dentro de las instituciones educativas con

respecto a la responsabilidad asumida de contribuir al desarrollo comunitario, la protección

ambiental y el bienestar humano, se consultó sobre las formas de trabajo que sean indicativas de

la Responsabilidad Social de las Universidades (RSU), expresadas en estructuras organizativas,

políticas universitarias, memorias de sostenibilidad.

Para obtener esta información, se ha procedido a la realización de un conjunto de consultas tanto a

las organizaciones mercantiles (empresas) como a las organizaciones educativas (centros educativos

de distintos niveles-básico, medio y superior-), entes federados (Cámaras de comercio,

Federaciones sectoriales) y órganos de dirección en el sector educación a nivel descentralizado y

centralizado (Dirección Departamental de Educación de Cortés y Francisco Morazán, dos de los

principales departamentos donde se concentra la población hondureña; Direcciones Municipales y

Distritales de Educación en el departamento de Cortés, donde se concentra la actividad económica

de producción y servicios en Honduras).

Se utilizaron para ello entrevistas estructuradas con preguntas abiertas, las cuales se han

tabulado en un conjunto de matrices, que permiten determinar convergencias y divergencias

conceptuales como metodológicas, que se presentan en forma de resultados (Mecanismos de

coordinación entre empresa privada y sector educación; criterios para priorizar y realizar

inversiones sociales sostenibles a través de fondos éticos; espacios de formación y capacitación en

responsabilidad social en instituciones educativas según niveles, competencias profesionales

demandadas por las empresas y corporaciones para sus perfiles de puesto de Coordinación de la

Responsabilidad Social Empresaria; Iniciativas innovadoras de RSU, Políticas de RSU, Memorias

de Sostenibilidad de RSU).

3. Responsabilidad Social y Educación

De todo la amplitud de los espacios de investigación en Responsabilidad Social, queremos presentar

los resultados de la reflexión sobre los vínculos entre el enfoque de RSE con el Sector Educación.

Por Responsabilidad Social y Educación, se pueden entender al menos tres procesos:

107

La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) o Corporativa (RSC) en apoyo al sector

educación, en cumplimiento a su aporte al desarrollo local o de la comunidad.

La Educación en Responsabilidad Social Empresarial, como parte de la formación y

capacitación del nuevo empresariado en este enfoque novedoso. Según (CAPACITARSE, 2009,

pp. 32) “El campo educativo cuenta con una atención promedio del 60% de las acciones de

RSE” esto considerando un estudio entre 500 personas de 9 países. Esto debido a que “La

educación es, a su tiempo, el medio más utilizado para trabajar en el ámbito comunitario y

generar impacto como cambio a través de los programas de RSE”.

La Responsabilidad Social de las Instituciones Educativas, RSU (en el caso de las

Universidades) RESESNU (en el caso de las instituciones de educación superior no

universitaria), esto como evolución de los roles de extensión universitaria y vinculación

Universidad-Sociedad.

4. Educación en Responsabilidad Social Empresarial

Si se parte de la tesis, que todo proceso que conduzcan a cambios en la sociedad, necesitan por una

parte, el desarrollo de un conjunto de metodologías de abordaje que inicialmente partan de la

experimentación empírica en los sectores sociales y económicos incluyendo dentro de esto a la

industria y los servicios, un segundo momento no menos importante para afianzar el cambio social,

es el derivado de su inclusión en los procesos formativos.

En el caso particular de la temática de Responsabilidad Social Empresarial, empíricamente se

puede advertir que se ha desarrollado una práctica derivada de los consensos internacionales y

nacionales sobre las formas de actuación social y ambientalmente responsable de las empresas

sobre todo las mercantiles, ya que esto no se advierte todavía con robustez en la empresa pública y

en las empresas sociales, se ha impulsado intensamente en la empresa privada.

Sin embargo la segunda condición aún es incipiente y no existen según los resultados que

arroja la investigación, que existan consensos, con respecto a las formas de organizar la formación,

delineando las lógicas de procesos de enseñanza en espacios educativos antecedentes y

consecuentes, y sobre todo en la identificación del perfil de competencias de formación que

naturalmente deben de correlacionarse con los perfiles de puesto de coordinación o gerencia de la

responsabilidad social empresaria.

108

4.1 Espacios de Formación y Capacitación en Responsabilidad Social

Educar en responsabilidad social, forman parte de las demandas de la industria y los sistemas de

producción sobre las instituciones formadoras de talento humano, sin embargo las experiencias

sobre este proceso escasean en el contexto hondureño y centroamericano.

En el contexto internacional existen ofertas formativas de postgrado como de educación continua,

ofertadas de forma diversa tanto por las instituciones promotoras (Universidades, Centros de

Formación, Fundaciones y Asociaciones Empresariales), como también en estructuras de los

espacios educativos (cátedras, seminarios, talleres, cursos de actualización, diplomados),

exhibiéndose una diversidad temática, que no siempre sigue lógicas de secuencias de contenidos.

En el caso particular de Honduras, el estado de la educación en responsabilidad social

empresarial es el siguiente: La Responsabilidad Social Empresarial en la formación de

Administradores de Empresas, Trabajadores Sociales e Ingeniería Industrial, es considerada como

remedial, siendo un subtema dentro de los cursos de administración, servicio social, derivándose

sobre todo acciones de autoformación y presentación de información sintética derivada de la

investigación documental.

Caso excepcional se produce en la Universidad de San Pedro Sula (USAP) que inicialmente

ha incluido dentro de la formación de Administradores de Empresas en el grado de Licenciatura ha

incluido un espacio educativo propio de RSE a partir del 2012 y ha hecho extensivo su curso de

Ética y Responsabilidad Social en todas sus carreras que imparte en el nivel de Licenciatura.

Este evidente descuido por parte de las instituciones formadoras sobre todo en el subsistema

educativo superior, en el nivel de pregrado, se repite en el nivel de postgrado a nivel de

especialidades, maestrías y doctorados en el área de las ciencias administrativas y educación

superior. El Doctorado en Dirección Empresarial de la Universidad Nacional Autónoma de

Honduras (UNAH), aprobado en 2012 e implementado a partir del 2014, incluye un Seminario de

Responsabilidad Social Empresarial.

Recién en el 2015, la Universidad Tecnológica Centroamericana (UNITEC), ha evidenciado

su interés, dentro de los procesos de formación continua y educación permanente de formular un

plan de formación de Especialistas en Gestión de la Responsabilidad Social Empresarial, para

promover la profesionalización y actualización de todos aquellos profesionales vinculados con

procesos de Responsabilidad Social, sin embargo, esto aún es un proyecto en formulación, aún no

ejecutado.

109

La educación corporativa en Responsabilidad Social, es promovida en Honduras casi de

forma exclusiva y monopólica por la Fundación Hondureña de Responsabilidad Social Empresarial

(FUNDAHRSE), quien desarrolla cursos de actualización, seminarios, talleres y una Conferencia

Nacional de carácter anual, los primeros son exclusivos para las organizaciones socias de la

Fundación y en el caso de la Conferencia de RSE, es ampliado, sustentado en conferencias

magistrales y exposiciones en stand por parte de las empresas socialmente responsable que son

socias de FUNDARHRSE.

Por lo anterior se puede concluir que los espacios de formación en esta nueva área de

conocimiento, son incipientes en el caso particular de Honduras. Para orientar de forma correcta el

diseño curricular, el primer paso es definir las competencias a ser desarrolladas en los procesos

formativos y de capacitación, una aproximación conceptual a las competencias la provee (Argudín,

2005, pp. 142) citando a (UNESCO,1999, pp. 130), que definen, las competencias como “ El

conjunto de comportamientos socio afectivos y habilidades cognoscitivas, psicológicas, sensoriales

y motoras que permiten llevar a cabo adecuadamente un desempeño, una función, una actividad o

una tarea”.

Las competencias pueden ser genéricas y específicas, en tanto, se aporta a la construcción de la

ciudadanía, con las competencias genéricas y se aporta al desempeño del perfil profesional como

especialista con las competencias específicas.

b. Competencias de Gestión en Responsabilidad Social Empresarial

En base a la consulta realizada con empresas socialmente responsables sobre las competencias

genéricas y básicas de un gerente de la Responsabilidad Social Empresarial, se pudo determinar el

siguiente perfil de competencias, en los dominios tanto cognoscitivo, procedimental como

actitudinales.

A continuación se presentan un conjunto de competencias o capacidades a desarrollarse en el

proceso formativo, agrupadas en competencias genéricas, como específicas.

i. Competencias Genéricas

a. Propone acciones de mejora, basado y fundamentado en procesos diagnósticos de la realidad

empresarial.

b. Lidera procesos de negociación con partes interesadas y con directivos empresariales para

fomentar acuerdos de colaboración y de trabajo en equipo.

110

c. Analiza la realidad y los contextos desde perspectivas variadas para disponer de un mapa

mental de afectaciones, riesgos, potencialidades en las que la empresa debe tomar

consideraciones cuando gestiona su responsabilidad social empresarial.

ii. Competencias Específicas

a. Identifica y concretiza líneas del pensamiento estratégico empresarial en temas de

responsabilidad social, en áreas de relacionamiento con las partes interesadas, voluntariado

corporativo y acciones afirmativas.

b. Diseña Sistemas de Gestión de la Responsabilidad Social Empresarial con orientación a la

inclusividad social, el desarrollo comunitario, la conservación y restauración del ambiente.

c. Desarrolla procesos de gestión integrada que permitan la reportabilidad social como la

comunicación a través de la concretización de acciones del plan de marketing social.

d. Promueve el pensamiento de la responsabilidad social a otros sectores de la sociedad como las

universidades, las organizaciones sociales o del tercer sector (ONG´s, Cooperativas, Empresas

Asociativas, Fundaciones) como también del Estado para integrar acciones de colaboración que

promuevan el bienestar humano y la sostenibilidad en los territorios.

c. Estructura curricular del área de conocimiento de la Gestión de la Responsabilidad Social

Empresarial

Basado en la estructura de competencias básicas y genéricas, se puede considerar que la estructura

curricular básica de un programa de RSE que considere elementos contemporáneos en esta temática

debe de contener al menos las siguientes áreas temáticas o familias curriculares.

Área temática de Pensamiento Estratégico y Planificación de la Responsabilidad Social, en el que se

incluyan los fundamentos de la gestión de la RSE, incluyéndose lo relativo a la gestión del

voluntariado corporativo y lo contentivo al diseño de políticas y estrategias empresariales de

responsabilidad social.

Área temática de Conducción de Programas de Responsabilidad Social Empresarial,

incluyendo la gestión ambiental y social de la empresa, caso particular, lo relativo a, participación

111

empresarial en el desarrollo comunitario, lo cual es incluyente del manejo de los Stakeholders a

través del relacionamiento estratégico.

Área temática de Comunicación de la Responsabilidad Social Empresarial, incluyendo dentro

de ello el estudio de los métodos de contabilidad social y elaboración de memorias de

sostenibilidad, el mercadeo social o marketing con causa y lo entendido de temas contemporáneos

de Responsabilidad Social como por ejemplo los Territorios Socialmente Responsables (TSR),

Responsabilidad Social Estatal (RSEstatal), la Responsabilidad Social Universitaria (RSU), la

Responsabilidad Social Organizacional (RSO), que particularizan la Responsabilidad Social a otros

sectores distintos que la empresa privada o mercantil.

d. Opciones de Gestión Curricular en procesos de Educación en Responsabilidad Social

Empresarial

Agregar nuevos conocimientos, actitudes y habilidades en la formación de los nuevos profesionales,

a los tradicionales y clásicos cursos, siempre representa un reto, por la complejidad que esto supone.

Según (Banegas, 2014, pág. 42-45), para ello existen al menos dos caminos para la gestión de la

inserción curricular de las nuevas temáticas.

1. Diseño curricular particular, es decir partiendo de una diferenciación hacia nuevas

especializaciones como una profesión nueva, es decir considerando que la Gestión

Responsabilidad Social, es un nuevo campo profesional, que debe desprenderse por

escisión o por fusión de varias áreas de conocimiento, basándose en la interdisciplina,

transdisciplina y la multidisciplina.

2. Transversalización curricular, que supone que la Responsabilidad Social Empresarial es un

área de conocimiento afín pero no diferente, por lo que se deben de insertar temáticas y

áreas temáticas en los espacios educativos como la administración, la mercadotecnia, la

contabilidad, la gestión de la calidad, la gestión del talento humano, desarrollo

comunitario, gestión ambiental, entre otras.

La opción que se prefiera, naturalmente derivará en un modelo de actuación particular que

impactara en las prácticas profesionales de los egresados, si se considera a la Responsabilidad

Social Empresarial como una nueva especialidad de las ciencias sociales y administrativas o si por

el contrario se considera como un enfoque integrado en cada una de las disciplinas sociales y

económicas, como administrativas.

4. Responsabilidad Social en Educación

112

La Responsabilidad Social en Educación (RSEducación), es uno de los campos preferidos por los

empresarios, en principio debido a que este sector es sensible a la opinión pública, aumentando la

visibilidad de la empresa socialmente responsable, como segundo criterio por el cual según

(CAPACITARSE, 2009,pp.13) considera que esta es una opción preferida por el 60% de las

acciones de RSE, es que existe una concepción de los apoyos que este sector necesita

(Infraestructura escolar, capacitación docente, utilería estudiantil-vestimenta, cuadernos, libros,

computadoras-, becas), lo cual sin desconocer la importancia y relevancia que esto tiene, no exhibe

la complejidad emergente, que aflora de tareas como la conservación de un área protegida, el

control de la contaminación ambiental, la mitigación de impactos.

Dentro de la arquitectura legislativa Hondureña, se identifica que en instrumentos de política como

el Reglamento General de la Ley Fundamental de Educación (Presidente en Consejo de Ministros,

2014), se deja plasmado de forma normativa el rol de las empresas privadas y su participación en el

desarrollo del sector educativo, esto queda plasmado en el siguiente articulado.

Artículo 14. Las empresas, como parte de la sociedad, contribuyen al desarrollo de

la educación nacional, mediante:

a. La identificación de las demandas del mercado laboral y la relación de la

educación con el desarrollo económico productivo del país;

b. La promoción de alianzas estratégicas con centros educativos, para el fomento

de la investigación, el desarrollo tecnológico profesional de los trabajadores y

educandos del sistema educativo nacional, que permitan acceder a empleos de

mejor calidad;

c. La participación en el desarrollo de servicios y programas educativos y

culturales, prioritariamente en el ámbito territorial de su asentamiento, en armonía

con su entorno social y natural; y,

d. El otorgamiento de facilidades a su personal para realizar o completar su

educación y mejorar su entrenamiento laboral dentro del local de trabajo o en

centros educativos.

Como se puede advertir de la lectura detallada, el espíritu del legislador sobre el tema de la

participación de la empresa privada en el desarrollo del sector educativo, se orienta a coordinar los

sistemas de información de gestión del recursos humano, demandas (empresas) y ofertas (sistema

113

educativo), el desarrollo de nuevas formas de relación entre las empresas y las universidades como

gestoras del conocimiento, la participación en el desarrollo educativo de instituciones en su

contexto y ámbito y finalmente una mayor inclusión social de los excluidos de oportunidades de

formación, incluidos los empleados de las empresas.

El análisis de la información resultante de las consultas con las unidades descentralizadas en el

sector educación (Dirección Departamental, Municipal y Distrital de Educación) y empresas

privadas, evidencia al menos que existen prácticas de ejecución coordinadas que son ejemplo de

buenas como de malas prácticas.

Una de las buenas prácticas que se identifica es la inserción de varios actores donantes

(Cooperación Internacional, ONG´s, Empresa Privada) en instancias de coordinación

interinstitucional para definir criterios mínimos para favorecer inversiones sociales efectivas en el

sector educación, estos espacios aunque carecen de legalidad tienen una legitimidad ampliamente

ganada, se autodenominan como Mesa temáticas de educación, Mesa de cooperantes en educación,

Grupo de coordinación interinstitucional. La formulación de este tipo de estructuras organizativas,

ha evitado yerros, como la duplicidad de funciones, y el potenciamiento o robustecimiento de

programas pensados desde la autoridad y la institucionalidad nacional.

Una mala práctica identificada tanto en las consultas a empresas como a las autoridades

locales de educación, es la que se provoca cuando la empresa gasta los recursos que ha programado

para su RSEducación, y realiza las coordinaciones directas con centros educativos, identificados

con escasos criterios de racionalización del gasto, en la mayoría de los casos, ignorando la autoridad

local competente en el sector educación (Dirección Departamental, Municipal y Distrital de

Educación).

Este yerro trae aparejado que los fondos económicos de la RSEducación se invierten en

centros educativos del área urbana, ya que son gastos más visibles y publicitados, favoreciendo la

promoción de la inequidad territorial, ya que mientras algunos niños y jóvenes se educan con

computadoras, en salones climatizados, y con materiales de estudio, becas y otros beneficios, otros,

muchos más, se educan con aulas con techos y mobiliario dañados, en escuelas unidocentes y sin

más acceso a la educación que el pizarrón y los lápices marcadores.

Además de estas buenas y malas prácticas, producto de la consulta con empresas privadas y

autoridades educativas, se puede advertir que los fondos económicos, ya sea que se consideren

114

desde la perspectiva de gasto (identificación con escasos criterios de inversión y más de visibilidad)

o de inversión (a través de la coordinación interinstitucional) ¡No se manejan con criterios de

sostenibilidad! Por lo que se advierte que existe un desconocimiento generalizado tanto en la

empresa privada como en las autoridades locales de los beneficios que podría lograrse con el

establecimiento de fondos fiduciarios éticos, de los cuales el contexto internacional ha provisto de

importantes lecciones tal como lo identifica (Zicari, 2008, pág. 32), en este contexto se hace

necesario que estos procesos puedan promoverse para provecho de la niñez y la juventud que se

forma para la profesión y la ciudadanía en el sistema educativo nacional.

5. Responsabilidad Social de las Instituciones Educativas

Esta arista de las relaciones entre Responsabilidad Social & Educación, es la menos desarrollada de

todas, y parte de la siguiente premisa, ¡Todos y todas! personas e instituciones dentro de un

territorio o comunidad humana, tienen responsabilidades sociales compartidas en promover las

mejores condiciones para el bienestar social y ambiental. De esta forma la empresa privada tiene

una responsabilidad (RSE o RSC), el Estado también tiene una responsabilidad social (RSEstatal) y

las organizaciones sociales también tienen una Responsabilidad Social Organizacional (RSO).

La coordinación y esfuerzo conjunto derivado de las corresponsabilidades de estas

instituciones en relaciones Estado-sociedad-mercado en pro del bien común son garantes del

mejoramiento de las condiciones de la sociedad y el ambiente natural.

En esta compleja red o tejido social, las instituciones educativas también tienen su rol y

responsabilidades sociales a ser asumidas, de hecho en la Ley Fundamental de Educación

(Congreso Nacional, 2011), reconoce en su artículo No. 13 al hablar de los principios y valores, que

el Sistema Educativo Nacional se adhiere a principios como la equidad e inclusión, la participación,

la multiculturalidad e interculturalidad, la responsabilidad ambiental, la transparencia, educación y

trabajo. Lo que aquí se advierte es que la responsabilidad social de las instituciones educativas no

solo es ya limitada a las acciones de formación de niños y jóvenes, sino la contribución mediante la

participación informada y la opinión calificada en la construcción de una mejor sociedad.

El espacio tradicional en el que los centros educativos, sobre todo del nivel medio y superior

han volcado estos esfuerzos, es mediante el Trabajo Educativo Social (TES), mediante el cual los

jóvenes realizan acciones de promoción del bienestar social enfocándose en labores de conservación

y restauración ambiental, como en acciones afirmativas que potencien una mayor inclusión, esta

115

última faceta se ha manejado a través de los programas de alfabetización de adultos, que en el caso

de Honduras se deriva operativamente del Plan Nacional de Alfabetización Obligatoria, Atención

de Rezago Escolar 2014-2017.

Evolutivamente la RSO de los Centros Educativos, se complejiza y se espera que sea más

visible y efectiva a medida que se avanza en los niveles educativos, de tal forma que en el nivel

superior, se ha identificado la Responsabilidad Social Universitaria (RSU). En tal sentido y

retomando los planteamientos de (Vallaeys, 2008, pp. 10) citado por (Aldeanueva, 2011, pág. 116)

las universidades al igual que cualquier otro tipo de organización, generan impactos en su entorno al

realizar sus actividades. Tales impactos pueden resultar positivos o negativos, las universidades

socialmente responsables serán aquellas que amplíen los impactos positivos de sus acciones y

mitiguen los impactos negativos derivada de sus actuaciones.

De tal forma que este enfoque se considera evolutivo, sobre aquellos que plantean que junto a

las funciones de docencia, se encuentran las de investigación, pero también las de extensión

universitaria, que se han convertirse en procesos de vinculación universidad-sociedad y

contemporáneamente en RSU.

El estado actual en Honduras con respecto al tema de RSU, en los 21 centros educativos

superiores existentes, es que en 10 de ellos no se evidencian estructuras organizativas relacionadas

con la extensión universitaria, la vinculación universidad-sociedad, del resto (11), 7 de ellas tienen

programas y estructuras organizacionales de extensión universitaria, 3 de ellas tienen acciones

denominadas y basadas en el enfoque de Vinculación Universidad-Sociedad, una de ellas destaca

por disponer desde el 2007 un programa de Responsabilidad Social Universitaria (RSU), se trata de

la Universidad Tecnológica de Honduras (UTH).

La UTH ha desarrollado una experiencia importante basado en el voluntariado corporativo, la

prestación de servicios a la comunidad (becas, consultoría jurídica gratuita para la comunidad,

capacitaciones a docentes, estudiantes y autoridades del nivel de educación medio), así como un

mercadeo responsable (UTH, 2007). Esta experiencia se ha sistematizado presentándolo como un

reporte social, sin que estos, cumplan en sí mismos los criterios y normas del Global Reporting

Iniciative (GRI), representando un caminar en la temática en el subsistema de educación superior.

116

CONCLUSIONES

Después de haber desarrollado el proceso investigativo, expuesto en síntesis en este artículo, se

puede concluir lo siguiente:

1. La educación en responsabilidad social empresarial, navega por una nebulosa, ya que esta se

encuentra presente en la formación de profesionales como un subtema tratado como un

apéndice y no de forma integral, reconociendo ello como un enfoque contemporáneo y moderno

del pensamiento empresarial, que se ha traducido en una diversidad de prácticas realizadas por

las empresas.

2. La nebulosa en los mecanismos de educación en RSE, impide que se profesionalice esta

ocupación, lo que se traduce en una diversidad de criterios en la implementación de las acciones

que las empresas realizan específicamente en su responsabilidad social con el desarrollo

comunitario en el sector educación.

3. La Responsabilidad Social en Educación en Honduras, se ha desarrollado con esquemas

correctos de racionalización de la utilización de fondos económicos, al formularse e

implementarse mecanismos de coordinación interinstitucional como la Mesa de educación, sin

embargo aún son muchas las empresas que desarrollan su responsabilidad social con la

educación, sin estar incluidos y participar en estos mecanismos de coordinación

interinstitucional.

4. La Responsabilidad Social que tienen los centros educativos en su participación en la gestión

del desarrollo comunitario, si bien forma parte de la práctica continuada por los centros de

educación media y superior a través del Trabajo Educativo Social, que realizan y cumplimentan

como requisito aquellos que aspiran a graduarse de estos niveles, sin embargo no se advierte la

intencionalidad de crear un programa de desarrollo social, repitiéndose acciones año con año,

no contándose con una evaluación de impactos de tales inversiones (en tiempo, recursos

económicos y voluntades) invertidas por los estudiantes y sus profesores tutores.

5. En el nivel universitario, de las 20 universidades aprobadas en Honduras, solamente una

implementa acciones, con el nombre de Responsabilidad Social Universitaria, la UTH, el

117

análisis de sus prácticas evidencia que su reporte social, no se organiza en base a los criterios

del GRI, aunque se tiene el mérito de innovar en estos proceso en el país, donde aún la

participación de los centros educativos del nivel superior, no se vive como una función, donde

quienes lo implementan viven esquemas evolutivos anteriores como la extensión universitaria y

la vinculación universidad-sociedad, que carecen de la integralidad que provee la gestión de la

RSU.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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y propuesta de despliegue. Malaga, España: Universidad de Malaga. Facultad de Ciencias

Económicas y Empresariales.

Argudín, Y. (2005). Educación basada en competencias. Nociones y antecedentes. México, D.F.:

Editorial Trillas.

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empresas comerciales alcanzan el éxito mediante alianzas estratégicas. Buenos Aires,

Argentina: Granica. Management.

Banegas, L. (2014). Sistematización de experiencias de inserción temática de la Gestión

Ambientalmente Racional de Productos Químicos en los niveles de educación formal y no

formal en Honduras. Tegucigalpa, Honduras: Proyecto COPs 2 PNUD GEF SERNA

CESCCO.

Bonilla, C., Castillo, C. d., & Morales, M. (2007). Gestión responsable del negocio. Una

perspectiva operacional de la Responsabilidad Social Empresarial. Obtenido de

Universidad de Chile: http://www.nexorsu.cl/gestion.pdf

Bowen, H. (1953). Social Responsabilities of the Businessman. New York, EUA: Harper.

CAPACITARSE. (2009). La empresa responsable y el impulso educativo. Webinars de RSE 2009.

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Congreso Nacional. (2011). Ley Fundamental de Educación. Decreto No. 262-2011. Tegucigalpa,

Honduras: La Gaceta. 22 de febrero del 2012. No. 32,754.

Freeman, E. (1984). Strategic Management: A Stakeholder Approach. New York.

Levitt, T. (1958). The dangers of social responsability. Harvard Business Review, 36(05), 41-50.

Presidente en Consejo de Ministros. (2014). Reglamento General de la Ley Fundamental de

Educación. Tegucigalpa, Honduras: La Gaceta No. 33,533 Septiembre del 2014.

UTH. (2007). Responsabilidad Social Universitaria de la UTH. Obtenido de http://www.uth.hn/rse/

118

Zicari, A. (2008). Fondos éticos. Factores sociales y ambientales en carteras de inversión. Buenos

Aires, Argentina: EDICON.

119

ESTRUCTURA PARA LA PRESENTACIÓN DE ARTÍCULOS Y

DOCUMENTOS EN LA REVISTA DE INVESTIGACIÓN EDUCATIVA PARADIGMA

NOMBRE COMPLETO DEL TRABAJO

Nombres de los autores, separados por comas

Afiliaciones de los autores (institución de origen), separadas por comas

Direcciones de correo electrónico de los autores, separadas por comas

Nombre del asesor o tutor (si aplica)

Afiliación del asesor o tutor

TITULO DEL ARTÍCULO: El título deberá estar escrito en español y en inglés. Se aceptan también trabajos en

portugués. Se recomienda que no sobrepase las 20 palabras.

RESUMEN: El resumen debe contener entre 150 a 250 palabras y el idioma oficial de

presentación de los trabajos es el español.

ABSTRACT: Debe incluirse el resumen del artículo en inglés

PALABRAS CLAVE: Use un mínimo de 4 y un máximo de 8 palabras o frases (palabras claves o descriptores),

debe incluirse las palabras claves en inglés.

A. Desarrollo del contenido:

El Instituto de Investigación y Evaluación Educativas y Sociales promueve el uso adecuado

de la normativa APA y el respeto a los Derechos de Autor para publicar investigaciones,

por lo que no se aceptarán trabajos sin fuentes consultadas, ya que es una práctica anti-ética

que no debe tolerarse ante ninguna circunstancia.

INTRODUCCIÓN

Describa el interés que el artículo tiene en el contexto científico del momento, los trabajos

previos que se han hecho sobre el tema y qué aspectos son controversiales. Incluya la

hipótesis o las preguntas de investigación, sea breve, concisa y escrita con verbos en tiempo

presente.

MÉTODOS Y MATERIALES

Si el artículo es producto de una investigación Cuantitativa debe considerarse los

siguientes elementos:

a) Diseño: se describe el tipo del experimento (aleatorio, controlado, casos y controles)

120

b) Población: sobre la que se ha hecho el estudio. Describe el marco de la muestra y

cómo se ha hecho su selección. Debe emplearse la palabra Muestra si el Enfoque es

Cuantitativo.

c) Entorno: indica dónde se ha hecho el estudio

d) Experimentos: se describen las técnicas, mediciones y unidades, pruebas piloto y

tecnologías aplicadas, etc.

e) Análisis estadístico: señala los métodos estadísticos utilizados y cómo se han

analizados los datos.

Si por el contrario es Cualitativa, enfatizar en los puntos siguientes:

a) Diseño empleado

b) Categorías de Análisis

c) Participantes

d) Instrumentos de recolección de datos

e) Técnicas de análisis de los datos

DISCUSIÓN TEÓRICA

En este apartado analice los autores fundamentales que sustentan su marco teórico o

referencial, de tal forma, que brinde un panorama general pero conciso sobre su tema, debe

citar conforme APA, sexta versión.

RESULTADOS

En esta sección reporte los nuevos conocimientos, es decir, lo que se encontró y debe ser la

sección más concreta y puntual, ya que incluye las tablas y figuras (deben enumerarse) que,

por sí solas, deben poder expresar claramente los resultados del estudio. Debe emplearse la

normativa APA, sexta edición. Debe redactarse en tiempo pasado

CONCLUSIONES

Escriba conclusiones que propicien en el lector una autodiscusión, donde compare

conclusiones propias con las de otros autores. Emplee los verbos en tiempo presente.

.

RECOMENDACIONES

Si el trabajo lo exige pueden incluirse recomendaciones para los distintos aspectos

abordados en el trabajo de investigación

Formato del texto

La presentación del trabajo de investigación o documento se hará en papel tamaño carta,

con una extensión de un máximo de 12 a 15 páginas máximo (cuartillas), incluyendo texto,

cuadros, gráficos, fotografías, mapas, esquemas u otros ya explicado en los apartados

anteriores.

1. Formato de la fuente

121

El trabajo de investigación o documento se enviará en formato de Word, empleando la

Time New Roman tamaño 11, siendo la única excepción el área de título. Utilice este

formato también en el etiquetado de sus gráficos y tablas. El espaciamiento entre líneas

debe ser de 1.5, el texto debe estructurarse en párrafos de similar extensión

El primer párrafo de cada sección deberá estar libre de indentación (sangría), pero

todos los demás párrafos dentro de la misma sección, sí deberán ser indentados.

2. Títulos de sección

El título de cada sección, como por ejemplo INTRODUCCIÓN, deberá aparecer en

mayúsculas y negrita, centrado en la columna y dejando una línea antes y después. Use un

punto y espacio para separar el número de la sección de su correspondiente título. No

enumere los títulos.

3. Paginación

El trabajo de investigación o documento deberá ir con su paginación enumerada de acuerdo

a las Normas APA.

4. Ilustraciones, gráficos y tablas

Deberá enumerar y titular cada una de las ilustraciones conforme APA, sexta edición. El

uso de color en sus gráficos está permitido y recomendado. Además, debe citarse la fuente

de los gráficos y tablas incluidos; las fotografías que figuren deben apoyar la información

proporcionada y tener cada una, pie de foto. Las fotografías deben incluirse en el formato

original jpg.

5. Notas de pie de página

El uso de notas de pie de página deberá colocarlas en la parte inferior de la columna y en la

misma página del texto en el que se hace referencia a ellas. Utilizando un tamaño de fuente

de 9 puntos con espaciamiento sencillo. Se recomienda su uso moderado para aclarar

términos importantes o aclaraciones pertinentes.

6. Conclusiones y Recomendaciones

Deberán incluirse conclusiones y recomendaciones que se deriven del trabajo de

investigación. En este apartado debe responderse a las hipótesis propuestas en el caso de las

investigaciones Cuantitativas y a las preguntas de investigación para el Cualitativo.

7. Fuentes bibliográficas

122

En esta sección enumere todas las fuentes bibliográficas que han sido empleadas al final de

su documento. Las fuentes de información pueden ser impresas, digitales y multimedias y

deberán ordenarse alfabéticamente de acuerdo a las Normas APA, sexta edición Incluir

solo las fuentes citadas en el artículo.

Ejemplos:

Libro con autor

Goleman, D. (2000). La inteligencia emocional: Por qué es más importante que el cociente

intelectual. México: Ediciones B.

Libro en versión electrónica

Montero, M. & Sonn, C. C. (Eds.). (2009). Psychology of Liberation: Theory and

applications. [Versión de Springer]. doi: 10.1007/ 978-0-387-85784-8

Entrada con autor en una obra de referencia electrónica

Graham, G. (2008). Behaviorism. En Zalta, E. N. (Ed.), The Stanford Encyclopedia of

Philosophy (Otoño 2008 Ed.). Recuperado de http://plato.stanford.edu/

archives/fall2008/entries/behaviorism

Entrada sin autor en una obra de referencia electrónica

Agricultura sustentable. (s. f.). En Glosario de términos ambientales de EcoPortal.net.

Recuperado de http://www.ecoportal.net/content/view/ full/ 169/offset/0

Tesis inédita

Muñoz Castillo, L. (2004). Determinación del conocimiento sobre inteligencia emocional

que poseen los maestros y la importancia que le adscriben al concepto en el

aprovechamiento de los estudiantes. (Tesis inédita de maestría). Universidad

Metropolitana, San Juan, PR.

Leyes

Nombre de la ley, Volumen Fuente § sección (Año)

8. Reconocimientos

Si la investigación ha sido desarrollada con apoyo financiero o en Convenio *asesoría

técnica, etc. Deberá escribir “Nombre de la investigación” y el ente de financiamiento.

B. Observaciones Generales

1. Metodología de evaluación y arbitraje de artículos

En el proceso de selección de artículos para publicar, se realiza una evaluación

inicial del Comité Editor para determinar si el trabajo cumple con los términos y

observaciones presentadas en este documento, en cuanto a pertinencia del área de

enfoque de la revista, estilo y extensión.

123

Los artículos que no llenen los requisitos de la convocatoria en cuanto a formato, no

serán tomados en cuenta para su publicación y serán devueltos al autor para realizar

las modificaciones sugeridas.

En la segunda revisión se realiza un dictamen de su contenido científico y aporte por parte

de Pares Revisores calificados de acuerdo al área correspondiente.

Este proceso de dictamen es de modalidad "doble ciego" y lo que pretende es ocultar la

identidad de los autores y Pares Revisores en el proceso de arbitraje. De este modo se

protege el anonimato y se contribuye a la evaluación objetiva. El concepto final del

artículo puede ser aceptado, condicionado o rechazado.

El Comité Editor enviará una nota al autor, aceptando o rechazando el trabajo de

investigación o documento, con las observaciones de mejora del comité editorial, según el

caso.

2. Políticas Generales

Los comentarios y juicios escritos por los autores de los artículos son de entera

responsabilidad y en ningún momento comprometen a la UPNFM, ni a los entes editores de

la Institución.

3. Cesión de Derechos de Autor:

El autor o autora al enviar el trabajo manifiesta que es su voluntad de ceder a la

Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán los derechos patrimoniales que le

corresponden como autor de este trabajo.

Los derechos aquí cedidos comprenden todos los derechos patrimoniales (Reproducción,

transformación, comunicación pública y distribución) y se dan sin limitación alguna en

cuanto a territorio se refiere; esta Cesión se da por todo el término de duración establecido

en la legislación vigente en Honduras.

La cesión de los derechos antes mencionada no implica la cesión de los derechos morales

sobre la misma porque de conformidad con lo establecido en la Ley de Derechos de Autor y

Derechos Conexos. Capítulo II, de los Derechos Morales, Articulo 34 Artículo 25, estos

derechos son irrenunciables, imprescriptibles, inembargables e inalienables.

El trabajo de investigación o documento debe ser original y haber sido realizado sin violar

o usurpar derechos de terceros, por lo tanto, la obra es de autoría exclusiva y posee la

titularidad de la misma.

En caso de presentarse cualquier reclamación o acción por parte de un tercero, en cuanto a

los derechos de autor sobre la obra en cuestión, deberá asumir toda la responsabilidad sobre

los derechos cedidos.

Manifiesta que el trabajo no ha sido publicado en otro medio y que los derechos sobre el

trabajo no han sido cedidos y sobre ellos no pesa ningún gravamen ni limitación en su uso o

utilización.

124

Presentación y envío de los trabajos:

Los artículos deben venir acompañados por los datos completos del autor y filiación (si

aplica).

Estos datos deben entregarse en formato electrónico (Word) y deben ser enviados por

correo electrónico a [email protected].

Los datos allí consignados serán incorporados en las Bases Bibliográficas que indexan las

revistas.

Cualquier duda sobre la normativa de publicación puede consultarse en:

Instituto de Investigación y Evaluación Educativas y Sociales

Edificio 14º

Biblioteca Central

4º Piso

Tel. (504)2239-8037 2239-8809 Extensión, 1260

Apartado Postal: 3394

Calle El Dorado

Tegucigalpa Honduras, C.A

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