Patrimonio cultural inmaterial del exilio español en México
-
Upload
valentina-canton-arjona-universidad-pedagogica-nacionaluniversidad-nacional-autonoma-de-mexico -
Category
Education
-
view
185 -
download
0
Transcript of Patrimonio cultural inmaterial del exilio español en México
exilio que fue antecedido por una primera expe-
dición de 456 niños en 1937, que fueron acogidos
en la Escuela Técnica España-México en More-
lia, Michoacán, para apartarlos de los horrores
de la guerra, esperando el triunfo republicano.
Ese triunfo no llegó, y a partir de 1939 cruzaron
las fronteras españolas cientos de miles de es-
pañoles buscando asilo. México, leal apoyo del
gobierno republicano, salió al paso ofreciendo
abrigo a los derrotados.2
2 Acerca de la posición de México ante la Guerra Civil espa-ñola, véase: José Antonio Matesanz, Las raíces del exilio. Méxi-co ante la guerra civil española, 1936-1939, México, Colmex / UNAM, 1999.
Patrimonio cultural inmaterial del exilio español en México
EL TRABAJO ACADÉMICO DEL EXILIO EN LA UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
Valentina Cantón Arjona*
educación
PATRIMONIAL
Qué hilo tan fino, qué delgado junco
–de acero fiel– nos une y nos separa
con España presente en el recuerdo,
con México presente en la esperanza.
PEDRO GARFIAS1
En este texto se argumenta sobre la pertinencia de reconocer y valorar
la aportación académica del exilio republicano español como un patrimonio
cultural inmaterial. Se ofrecen elementos para su conocimiento y comprensión,
así como sobre la necesidad de su preservación. Finalmente se entrega al lector
un listado de sus protagonistas, hombres y mujeres exiliados que recibieron y
transmitieron el legado del republicanismo y su importancia para la vida educa-
tiva y cultural de las sociedades libres y democráticas.
Introducción
Con la llegada del buque Sinaia al puerto de Ve-
racruz el 13 de junio de 1939, se inició el exilio
masivo de españoles republicanos a México. Un
* Profesora investigadora de tiempo completo de la Universi-dad Pedagógica Nacional y profesora de asignatura del Cole-gio de Pedagogía y el Posgrado de la UNAM. Responsable del proyecto “El derecho a la memoria: la educación patrimonial” en la UPN y del seminario sobre Educación patrimonial (Maes-tría en Pedagogía, FFyL-UNAM).
1 Fragmento de “Entre España y México”, escrito por el poeta español exiliado en México, a bordo del buque Sinaia, en junio de 1939. El texto completo está disponible en: <www.materialdelectura.unam.mx/index.php?option=com_content&task=view&id=191&Itemid=31&limit=1&limitstart=12>.
ccem
x.or
g
37CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Educación PATRIMONIAL
ideales políticos sino formas de ser, estar, pensar
y hacer en el mundo. Se transmitieron también
compromisos con el trabajo, la memoria, la soli-
daridad y la paz que, si bien tenían como punto
de partida una dolorosa guerra, mantuvieron
ideales y crearon horizontes para hacer una
nueva vida en México.
Hoy, se reconoce esta transmisión como un
legado, como un patrimonio heredado de pa-
dres a hijos y nietos y como una corriente de
pensamiento y una influencia que impactó pro-
fundamente el ambiente cultural de México y de
sus instituciones y empresas educativas. Puede
afirmarse con total legitimidad que el exilio se
transformó en un patrimonio cultural, en un
punto de referencia para la memoria colectiva.
Por esto, vale la pena acercarse al exilio es-
pañol desde el costado de su preocupación per-
manente por la transmisión para darle, como lo
tiene, un carácter de patrimonio cultural. Pa-
trimonio cultural que, por otra parte, es doble
cuando se trata de la influencia que los exiliados
ejercieron en la vida académica mexicana.
Antecedentes y contexto
El 18 de julio de 1936 estalló la Guerra Civil
española después de un levantamiento militar
del autodenominado Movimiento Nacional en
contra del gobierno republicano legítimamente
electo el 14 de abril de 1931. La guerra –una de
las más cruentas del siglo XX– se prolongó du-
rante casi tres años, en los cuales el gobierno de
la República fue paulatinamente estrangulado y
obligado a instalarse de manera provisional en
Francia, mientras sus defensores eran condena-
dos a muerte, encarcelados u obligados a partir
al exilio. Finalmente, el general Francisco Fran-
co, jefe militar de la sublevación, daría el último
parte oficial de guerra:
El exilio masivo se prolongaría hasta el año
de 1942. A través del mar y a bordo de los bu-
ques Sinaia (junio de 1939), Ipanema (julio de
1939), Mexique (julio de 1939), Flandra (noviem-
bre de 1939), Nyassa II (mayo 1942) y Serpa Pin-
to II (octubre de 1942),3 o bien por otras vías e
iniciativas individuales (algunas logradas hasta
entrada la década de los cincuenta) llegaron a
México miles de exiliados españoles que, aco-
giéndose a la política de asilo mexicana, encon-
traron en estas tierras el presente indispensable
para salvar la vida, el futuro para construir un
proyecto de vida, pero también, el espacio para
reconstruir la memoria de su pasado y legarlo a
sus descendientes.
Así, el exilio se transformó en un capital cul-
tural mediante el cual se transmitieron no sólo
3 Para conocer las circunstancias de viaje de estas expediciones de exiliados, véase la publicación facsimilar de sus diarios en: Los barcos de la libertad. Diarios de viaje del Sinaia, el Ipanema y el Mexique (mayo-julio de 1939), México, Colmex, 2006 (con prólogo de Fernando Serrano Migallón).
Desembarco del buque Sinaia en el puerto de Veracruz, 1939
bibl
iote
ca.u
cm.e
s
38 CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Patrimonio cultural inmaterial DEL EXILIO ESPAÑOL EN MÉXICO…
Toda colaboración con el periodo republicano,
especialmente sobre aquellos que hubiesen de-
sempeñado cargos y hubieran obtenido ascensos
no debidos a la antigüedad, pasa a ser severa-
mente juzgada.6
Serían perseguidos, en primer lugar, los edu-
cadores (de escuela elemental, media o supe-
rior) y todos cuantos hubieran obtenido puestos
de confianza del gobierno republicano; des-
pués de éstos, quienes “hubieran simpatizado
con ellos y orientado su enseñanza y actuación
profesional en el mismo sentido disolvente”.7 El
objetivo explícito era limpiar, depurar, purificar
a España.
El proceso de depuración se dirigió a todos
los segmentos del profesorado. De ahí que casi
la totalidad del personal docente haya sido ob-
jeto de un exhaustivo expediente secreto. El
nuevo Ministerio de Educación Nacional (que
sustituyó al Ministerio de Educación Pública de
la República), con ayuda de la policía secreta,
tendría a su cargo los órganos responsables de
investigación, selección, decisión y ejecución
de la depuración. Maestros nacionales,8 profeso-
res de instituto y catedráticos9 serían el primer
objetivo, eligiéndose en primer lugar a los más
reconocidos “por aquello de que el más eficaz
predicador es Fray Ejemplo”.10
El Ministerio
haría, pues, las funciones de nueva –y siempre
vieja– Inquisición apoyada en viejas –y siem-
pre renovadas– estrategias.
6 Luis Enrique Otero Carvajal (dir.), La destrucción de la ciencia en España. La depuración universitaria en el franquismo, Madrid, Editorial Complutense, 2006, p. 154.
7 Ibidem, pp. 61 y 154.8 Véase: Francisco Morente Valero, La escuela y el Estado nuevo.
La depuración del magisterio nacional (1936-1943), Valladolid, Ámbito, 1997.
9 Valentina Cantón, Educación y cultura. Revista de los maestros españoles en el exilio, México, UPN, 1994.
10 Luis Enrique Otero Carvajal, op. cit., p. 265.
En el día de hoy, cautivo y desarmado el Ejército
Rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus úl-
timos objetivos militares. LA GUERRA HA TERMINA-
DO. Burgos 1º de abril de 1939. Año de la Victoria.4
Se calcula que el enfrentamiento entre espa-
ñoles (los del bando nacionalista, apoyados por
las fuerzas militares nazis y fascistas de Hitler
y Mussolini; y los republicanos, apoyados por
brigadas internacionales y la URSS) generó cerca
de 800 mil muertes y que más de 450 mil eva-
cuados republicanos cruzaron en un primer
momento las fronteras hacia Portugal –los me-
nos–, o hacia Francia –los más–, donde una gran
parte de ellos serían internados en los campos
de concentración instalados para tal fin.5
Muchos creían que volverían de ese exilio, que
se trataba de una situación temporal. Mientras,
en España, quedaba un número nunca contabi-
lizado de víctimas del llamado “exilio interior”:
aquellos que por motivos de filiación, actuación,
simpatía, denuncia falsa o, simplemente, por
parentesco con adeptos de la República, fueron
considerados contrarios al Movimiento Nacio-
nal, por lo que sufrieron encarcelamiento, per-
secución, aislamiento, depuración, desaparición
forzada y/o muerte en su propia patria.
Existe evidencia de que desde enero de 1939,
anticipando su triunfo y buscando su consoli-
dación, el Movimiento Nacional había deter-
minado dar castigo ejemplar a los vencidos y
perseguir a izquierdistas, militantes del Frente
Popular y masones.
4 Puede escucharse la emisión radiofónica de este último parte oficial de guerra, emitido por Radio Nacional esa misma no-che, a las 22:30 horas, y leído por el actor y locutor Fernando Fernández de Córdoba, disponible en: <www.youtube.com/watch?v=1murZqbLhdU>.
5 Gabriel Jackson (trad. de Enrique de Obregón), La República Española y la Guerra Civil 1931-1939, México, Grijalbo, 1967, p. 446.
39CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Educación PATRIMONIAL
so grupo de trabajadores intelectuales españoles
republicanos se trasladó a tierras mexicanas y se
incorporó a sus instituciones educativas.
Espíritu y presencia de una generación de universitarios en el exilio
El exilio español en México destaca tanto por
su número –alrededor de 26 mil refugiados, y
algunas fuentes citan cerca de 40 mil– como por
la variedad de su composición, que es repre-
sentativa de una auténtica república ya que sus
miembros provenían de sectores muy distintos
de la vida social y económica de España. Sin
embargo, y aun cuando pertenecieran a distin-
tos sectores (22.16 por ciento al sector primario,
29.07 al secundario, y 48.77 por ciento al sector
terciario), provenían, según señala Dolores Pla,
de “la porción más educada de la sociedad es-
pañola”, pues mientras en España el índice de
analfabetismo era de 32 por ciento, entre los re-
fugiados era apenas de 1.4 por ciento.13
Más de la mitad (58.34 por ciento) de los re-
fugiados pertenecientes al sector terciario eran
trabajadores intelectuales: profesionistas, inte-
lectuales y artistas, y maestros, investigadores
y catedráticos, por lo que constituían 28.45 por
ciento del total de asilados en México. De ahí
que pueda afirmarse que si bien el exilio no es-
tuvo formado sólo por intelectuales, sí lo eran
poco más de la cuarta parte, lo que es un por-
centaje muy alto en términos absolutos y más
aún si se considera la ya mencionada variedad
13 Dolores Pla Brugat, “Un río español de sangre roja. Los re-fugiados republicanos en México”, en Dolores Pla Brugat (coord.), Pan, trabajo y hogar. El exilio republicano español en América Latina, México, INM-Segob / INAH, 2007, pp. 35-128. Véase también: Valentina Cantón Arjona, “Cada uno cuenta. Nombres y datos de ingreso de los exiliados españoles en México”, mecanoescrito, México, UPN, 2010.
Las penas más usuales por actos contrarios
al –ya para entonces– autoconsiderado Glorioso
Movimiento Nacional serían: la expulsión defi-
nitiva de su centro de trabajo o el traslado; la
prohibición para desempeñar cargos directivos
y de confianza; la inhabilitación; la incapacita-
ción para opositar y para obtener becas, funcio-
nes de estudio o cargos cercanos a la enseñanza
en un plazo hasta de seis años; la confiscación
de sus bienes, o bien, todas las anteriores. Se tra-
taba, pues, de una política explícita de erradica-
ción de una población en función de sus ideas.
Así las cosas, quedó condenado al exilio una
gran parte del profesorado universitario (prác-
ticamente la mitad del personal)11
y, principal-
mente, quienes además de dictar cátedra habían
desempeñado cargos de responsabilidad en las
universidades de Madrid, Barcelona, Valencia
y la recién creada Universidad Internacional de
Verano de Santander (todas instituciones afines
a la República). Vale la pena subrayar que aun
cuando el grupo de profesores e investigadores
universitarios exiliados pertenecía tanto a las
humanidades como a las ciencias, el proceso de
depuración fue particularmente incisivo con los
médicos de la Universidad de Madrid.
Muchos de los profesores exiliados se incor-
poraron en universidades de Inglaterra, Fran-
cia, Estados Unidos, Argentina, Uruguay, Brasil,
Colombia, Cuba y República Dominicana. Gra-
cias a la política de apertura y al apoyo amplio y
decidido del gobierno del general Lázaro Cárde-
nas (a pesar, incluso, de la crítica y el rechazo del
sector conservador mexicano, la alta jerarquía
católica, la emigración española en México pro-
franquista, y de algunos intelectuales y organi-
zaciones gremiales),12
un importante y numero-
11 Ibidem, p. 223.12 Véanse, como ejemplo de este rechazo, las notas periodís-
ticas de Salvador Novo y José Vasconcelos en la Revista Hoy publicadas durante 1938 y 1939; así como editoriales de la época de periódicos como El Universal.
40 CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Patrimonio cultural inmaterial DEL EXILIO ESPAÑOL EN MÉXICO…
de su composición. México fue tierra fértil para
todos ellos, y en el caso de los profesores y cate-
dráticos, les dio la oportunidad para continuar
y profundizar su trabajo docente y de investiga-
ción. Oportunidad de la que estaban deseosos
quienes habían visto interrumpida su vida aca-
démica, primero por la actividad política y/o
los cargos en carteras del gobierno y, después,
por su participación en la guerra (en muchos ca-
sos en el frente).
Estos intelectuales, y entre ellos los profeso-
res y catedráticos e investigadores republicanos,
pertenecieron, en sentido sociológico, a una “ge-
neración”. Es decir, formaron parte de:
Un conjunto de individuos que –independien-
temente de su cercanía de edad– han vivido en
el mismo momento una experiencia histórica de-
terminante e irrepetible, extrayendo de ella su
propia orientación moral y el sentimiento de
compartir un destino común.14
Se trata, pues, de una generación que, aun
sometida a una dolorosa experiencia histórica,
es capaz de sostener su compromiso ético-polí-
tico y su lealtad hacia un ideal, no obstante que
el precio a pagar sea la muerte o su sucedáneo
simbólico: el exilio. Esta es, justamente, su he-
rencia, su patrimonio cultural y su mayor apor-
tación a México: su orientación moral y el claro
sentimiento de compartir un destino común, no
sólo como grupo sino como humanidad. De ahí
su importancia y el hecho de que, con indepen-
dencia de las visiones y filiaciones políticas, las
nuevas generaciones puedan reflejarse en ella.
El patrimonio que nos ocupa, pues, si bien se
origina en el pensamiento clásico republicano,
en el republicanismo como modelo de vida y en
14 Valentina Cantón, “Rectores republicanos españoles exiliados. Patrimonio cultural del exilio español en México”, mecanoes-crito, Asicom / Universidad de Oviedo / Spectrum / UPN, 2009.
las posiciones de izquierda que lo enriquecen,
surge de la épica de una generación de docen-
tes e investigadores universitarios que mostró,
en su quehacer académico y en su personali-
dad, facetas distintas de un tronco común: la res
publica, la cosa pública, y lo que ésta significa
como proyecto de vida, como ideal ético y polí-
tico, y como compromiso con la educación y el
impulso a la investigación científica y humanis-
ta por ser ambas palancas indispensables para
el mejoramiento social. Ideal, proyecto y com-
promiso que heredaron a las aulas de nuestras
principales instituciones de educación superior,
enriqueciéndolas con ese legado.
Es demostrativo de la calidad de los acadé-
micos republicanos depurados y exiliados, el
hecho de que entre ellos se contaran siete recto-
res universitarios. Se trata en todos los casos de
personajes que por su alta preparación científica
y humanista y por su fuerte compromiso políti-
co, ocuparon cargos de primer nivel tanto en el
medio académico como ante el gobierno de la
República. De los siete, seis refundaron su vida
en México y uno más, el fisiólogo y rector Jaume
Pi i Sunyer, en Venezuela.
Blas Cabrera Felipe (1878-1945), fisicoquími-
co y rector de la Universidad de Madrid y de
la Universidad Internacional de Verano; Jaume
Serra i Hunter (1878-1943), filósofo y rector de la
Universidad de Barcelona; José Giral y Pereira
(1879-1962), químico farmacéutico y rector de
la Universidad de Madrid, ministro del gobier-
no de la República, y presidente de la Repúbli-
ca Española en el exilio; Pere Bosch i Gimpera
(1891-1974), antropólogo y rector de la Univer-
sidad de Barcelona; José Puche Álvarez (1895-
1979), médico y rector de la Universidad de Va-
lencia, y José Gaos y González Pola (1900-1969),
filósofo y rector de la Universidad de Madrid,
encabezan la lista de otras muchas biografías
intelectuales compartidas y marcadas por el
41CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Educación PATRIMONIAL
espíritu liberal, regeneracionista, creador y trans-
formador de instituciones universitarias como
la Institución Libre de Enseñanza, la Junta de
Ampliación de Estudios y sus institutos cien-
tíficos, así como la Residencia de Estudiantes
de Madrid.15
Ese espíritu laico e igualitario que
tantos frutos daría al pensamiento pedagógico,
humanista y científico16
español y que caía, por
15 Idem.16 Francisco Giral, Ciencia española en el exilio (1939-1989). El
exilio de los científicos españoles, Barcelona / Madrid, Anthro-pos / Centro de Investigación y Estudios Republicanos, 1994.
Blas Cabrera Felipe
José Giral y Pereira
José Puche Álvarez
Jaume Serra i Hunter
Pere Bosch i Gimpera
José Gaos y González Pola
cierto, como agua de mayo en el espacio univer-
sitario mexicano de la época.
Figuras paradigmáticas y representativas tan-
to del ideal republicano como de la entrega al
desarrollo y la promoción de los distintos cam-
pos del saber, estos refugiados fueron, además,
presencias generosas preocupadas tanto por la
formación de nuevos y mejores universitarios
como por poner sus conocimientos al servicio
del país y de las instituciones que les acogieron,
como: el Colegio de México (antes Casa de Espa-
ña), el Instituto Politécnico Nacional, la Escuela
Nacional de Antropología e Historia, la Escue-
la Normal de Maestros y la Escuela Normal Su-
perior, la Normal de Pachuca, la Universidad
Michoacana, el Colegio de San Nicolás de Hidal-
go, la Universidad de Primavera “Vasco de Qui-
roga” (inspirada en la Universidad Internacional
de Verano de Santander) y la también michoa-
cana Escuela Normal Urbana, la Universidad
de Nuevo León, el Centro de Investigaciones y
Estudios Superiores en Antropología Social, y la
Escuela Nacional de Agricultura de Chapingo,
Más recientemente, la Universidad Pedagógica
Nacional, el City College, la Universidad de Las
Américas, la Universidad Anáhuac, la Universi-
dad Iberoamericana, la Universidad La Salle, la
Universidad Femenina de México y el Instituto
Tecnológico Autónomo de México. Cita aparte
merecen –por el alto número de académicos exi-
liados españoles que acogieron y por constituir
el tema que nos ocupa– las facultades e institutos
de la Universidad Nacional Autónoma de Méxi-
co, así como su Escuela Nacional Preparatoria.
Durante sus primeros años en México, los
profesores exiliados trabajaron incansablemente
alternando su presencia en varias de estas insti-
tuciones: dictaron cátedra, dieron conferencias o
apoyaron el desarrollo de seminarios, tertulias y
programas de formación y de investigación,
y promovieron la realización de encuentros y
congresos. Se ocuparon, también, de actualizar
ww
w.re
side
ncia
.csi
c.es
ww
w.m
ecd.
gob.
esw
ww
.cer
vant
esvi
rtua
l.com
ww
w.b
logo
teca
.com
com
mon
s.w
ikim
edia
.org
ww
w.e
scri
tore
s.or
g
42 CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Patrimonio cultural inmaterial DEL EXILIO ESPAÑOL EN MÉXICO…
países de Latinoamérica) se unieron, incluso a
pesar de sus diferencias, para reencontrar en la
educación el punto de acuerdo fundamental de
su proyecto de vida republicana.
La extensión limitada de este escrito hace
imposible hablar de todas y cada una de sus or-
ganizaciones y, más aún, de las características,
sentimientos, trayectorias y aportaciones per-
sonales de quienes las conformaban. Quede al
menos constancia de su voluntad de crear co-
lectivos organizados y comprometidos con sus
ideales y el cultivo de su memoria histórica.
Como homenaje obligado, vale la pena recor-
dar al menos los nombres de estos hombres y
mujeres que dejaron vida y obra en la Universi-
dad Nacional Autónoma de México, casa de tra-
bajo que les acogió y les dio nuevas esperanzas,
pues en ella, cada exiliado pudo reconocer que,
como señala Adolfo Sánchez Vázquez:
…la contabilidad dramática que [el exiliado] se ve
obligado a llevar no tiene que operar forzosamen-
te sólo con unos números: podrá llevarla como
suma de pérdidas, de desilusiones y desesperan-
zas, pero también –¿por qué no?– como suma de
dos raíces, de dos tierras, de dos esperanzas. Lo
decisivo es ser fiel –aquí o allí– a aquello por lo
que un día se fue arrojado al exilio. Lo decisivo no
es estar –acá o allá– sino cómo se está.17
Los protagonistas
Fueron y son estos exiliados y exiliadas, los
hombres y mujeres responsables de dar a cono-
cer, interpretar, preservar, conservar, valorar y
17 Adolfo Sánchez Vázquez, “Fin del exilio y exilio sin fin”. Este texto se publicó por primera vez con el título de “Cuando el exilio permanece y dura (a manera de epílogo)” en el libro colectivo Exilio (México, Tinta Libre, 1997), prologado por Gabriel García Márquez. Disponible en: <biblioteca-samuel.blogspot.com/2009/05/fin-del-exilio-y-exilio-sin-fin.html>.
la producción editorial científica, literaria y hu-
manista mexicana aportando no sólo sus pro-
pias obras sino también traducciones de autores
clásicos indispensables y hasta entonces inacce-
sibles para el lector en México.
Merece mención especial su participación
en la creación de una gran cantidad de revistas
culturales, literarias y científicas, y de exitosas
empresas y proyectos editoriales –entre los que
destaca el Fondo de Cultura Económica–, mu-
chos de ellos ideados desde su llegada a México
y apoyados incluso como fuentes de trabajo por
el Comité Técnico de Ayuda a los Republicanos
Españoles (CTARE), como la editorial Séneca.
Todas estas actividades enriquecieron y for-
talecieron la vida académica e intelectual mexi-
cana, y ofrecieron nuevos horizontes y mejores
destinos a los jóvenes estudiosos. Sería imposi-
ble nombrar todas sus aportaciones; baste de-
cir que la colaboración y la producción de estos
refugiados cambiaron el panorama educativo y
cultural nacional en unos cuantos años.
Las actividades mencionadas las realizaron
sin menoscabo de sus compromisos con el exilio
y sus organizaciones. El Servicio de Evacuación
de Refugiados Españoles (SERE) y la Junta de
Auxilio a los Refugiados Españoles (JARE) con-
taron, ambos y a pesar de sus diferencias, con
el apoyo de los intelectuales refugiados, quie-
nes además crearon importantes organizaciones
gremiales como la Unión de Profesores Univer-
sitarios Españoles en el Exilio (UPUEE) o la reu-
nión de médicos del Ateneo Ramón y Cajal que
daría origen al Ateneo Español de México. La
UPUEE fue espacio para la construcción de un
proyecto educativo que era necesario tener en
punto para cuando, una vez caído el dictador,
pudieran retornar a España. Este proyecto y esta
esperanza fueron compartidos y discutidos en
1942 en la Reunión de La Habana, en la que los
profesores e investigadores españoles exiliados
(provenientes tanto de México como de otros
43CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Educación PATRIMONIAL
difundir el patrimonio cultural del exilio espa-
ñol en las aulas universitarias. Se trata, pues, de
un patrimonio cultural inmaterial que basa su
definición en:
…el concepto de trabajo académico con sentido
social y pacífico como la actividad docente, hu-
manística, cultural, artística e investigación cien-
tífica en todos los campos del conocimiento, mo-
tivada por el bien común y dirigida al beneficio
de las comunidades humanas, la paz y los entor-
nos naturales donde habita nuestra especie.18
18 Gilberto López y Rivas, “El trabajo académico: patrimonio cultural de la humanidad”, en La Jornada, México, 23 de marzo de 2012, secc. Opinión. Disponible en: <www.jornada.unam.mx/2012/03/23/opinion/025a2pol>.
Y la necesidad de salvaguardarlo, pues el tra-
bajo académico con sentido social pacífico es:
…un bien útil al desarrollo humano. Éste es pro-
ducto de distintas e históricas tradiciones, tanto
teóricas como metodológicas y prácticas, transfe-
ridas en el contexto de la formación escolar y uni-
versitaria de los distintos colectivos intelectuales.
Contiene en sí mismo una inagotable riqueza
cultural, creativa y de conocimiento, en virtud de
que refleja el nivel de desarrollo de los pueblos
y sociedades en general. Por ello, posee un enor-
me valor su preservación, y fortalecimiento en las
mejores condiciones materiales y sociales.19
Para conocerlos o bien para recordarlos, pre-
sentamos un listado (seguramente incompleto
e injusto como lo son todos los listados de esta
naturaleza20
) en el que aparecen en orden de-
creciente de edad los refugiados republicanos
españoles que han laborado en las distintas fa-
cultades, institutos de investigación, e instan-
cias de difusión de la Universidad Nacional
Autónoma de México y de su Escuela Nacio-
nal Preparatoria.
No se incluyen, por concentrarnos en quie-
nes trabajaron y trabajan principalmente en las
aulas, los nombres de los muchos editores, tra-
ductores, actores, cineastas, artistas plásticos,
ingenieros, arquitectos, médicos, críticos, escri-
tores, periodistas, museógrafos y restauradores,
colaboradores de revistas literarias, culturales,
científicas y de actualidades, y conferencistas
cuyas presencias y colaboraciones esporádicas
ayudaron también a fortalecer el espíritu uni-
versitario.
19 Idem.20 Quede al lector la generosidad de apoyar a esta autora con
aquellos nombres cuya ausencia note, enviando su aportación a: <[email protected]>.
Angelina Muñiz Huberman
Aurora Arnaiz Amigo
Pilar Rius de Pola
Atlántida Coll de Hurtado
ww
w.z
ocal
o.co
m.m
xw
ww
.faaa
.iap.
org.
mx
depa
.fqui
m.u
nam
.mx
ww
w.d
gcs.
unam
.mx
44 CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Patrimonio cultural inmaterial DEL EXILIO ESPAÑOL EN MÉXICO…
Profesores refugiados españoles que se incorporaron a la Universidad
Nacional Autónoma de México como docentes, investigadores y/o creadores
y difusores de la cultura
Rafael Sánchez de Ocaña, escritor, periodista y di-plomático. Nacido en Madrid en 1888. Colegio de Historia, Facultad de Filosofía y Letras.
Gabriel Bonilla Marín, abogado. Nacido en Jaén, An-dalucía, en 1888. Facultad de Economía.
Mariano Ruiz-Funes García, abogado, político y es-critor. Nacido en Murcia en 1889. Facultad de Derecho.
Fernando Valera Aparicio, político, escritor, traduc-tor. Nacido en Madroñera, Extremadura, en 1899. Facultad de Filosofía y Letras.
Ricardo Calderón Serrano, militar, abogado. Nacido en Sevilla, Andalucía, ca. 1890. Facultad de Derecho.
Juan de la Encina, seudónimo de Ricardo Gutiérrez Abascal, crítico de arte. Nacido en Bilbao, País Vasco, en 1883. Facultad de Filosofía y Letras.
Antonio Madinaveitia Tabuyo, químico. Nacido en Madrid en 1890. Instituto de Química.
Pedro Bosch Gimpera, historiador y antropólogo. Na-cido en Barcelona, Cataluña, en 1891. Instituto de Investi-gaciones Antropológicas.
Agustín Millares Carló, historiador, paleógrafo, filó-logo, bibliógrafo y traductor. Nacido en Las Palmas, Islas Canarias, en 1893. Facultad de Filosofía y Letras.
Felipe Sánchez-Román y Gallifa, abogado, político y maestro. Nacido en Madrid en 1893. Facultad de Derecho.
Leonardo Martín Echeverría, geógrafo y político. Nacido en Salamanca, Castilla y León, 1894. Instituto de Geografía.
José Puche Álvarez, médico fisiólogo. Nacido en Lor-ca, Murcia, en 1895. Facultad de Medicina.
Enrique Rioja Lo-Bianco, biólogo. Nacido en Santan-der, Cantabria, en 1895. Instituto de Biología y Facultad de Ciencias.
Joaquín Xirau, filósofo. Nacido en Gerona, Cataluña, en 1895. Facultad de Filosofía y Letras.
Ignacio Bolívar y Urrutia, naturalista, zoólogo, abo-gado. Nacido en Madrid en 1850. Doctor honoris causa por la UNAM.
Odón de Buen y del Cos, zoólogo, oceanógrafo. Na-cido en Zuera, Zaragoza, en 1863. Facultad de Ciencias.
Constancio Bernaldo de Quirós, abogado crimina-lista. Nacido en Madrid en 1873. Facultad de Derecho.
Rafael Altamira y Crevea, abogado e historiador. Na-cido en Alicante, Valencia, en 1866. Facultad de Filosofía y Letras.
Blas Cabrera Felipe, físico. Nacido en Arrecife, Cana-rias, en 1878. Facultad de Ciencias, Instituto de Física.
Enrique Díez-Canedo, poeta, ensayista y crítico. Naci-do en Badajoz, Extremadura, en 1879. Facultad de Filosofía y Letras.
Pedro Urbano González de la Calle, filósofo. Naci-do en Madrid en 1879. Facultad de Filosofía y Letras.
José Giral Pereira, químico y político. Nacido en San-tiago de Cuba en 1879. Facultad de Ciencias.
Ceferino Palencia Álvarez-Tubau, pintor, historia-dor y crítico. Nacido en Madrid en 1882. Escuela Nacional de Artes Pláticas.
José Urbano Guerrero, economista. Nacido en Gra-nada, Andalucía, en 1882. Facultad de Economía.
Pedro Carrasco Garrorena, físico y astrónomo. Naci-do en Badajoz, Extremadura, en 1883. Facultad de Ciencias.
Manuel Martínez Aguilar y de Pedroso, abogado internacionalista. Nacido en La Habana, Cuba, en 1883. Fa-cultad de Derecho.
Joaquín Álvarez Pastor, filósofo, pedagogo. Nacido en Málaga, Andalucía, en 1885. Escuela Nacional Prepara-toria y Facultad de Filosofía y Letras.
Rafael de Pina Milán, abogado. Nacido en Yecla, Murcia, en 1888. Facultad de Derecho.
45CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Educación PATRIMONIAL
Francisco Carmona Nenclares, escritor, periodista, maestro. Nacido en Burgos, Castilla y León, 1901. Facultad de Filosofía y Letras.
Juan David García Bacca, filósofo. Nacido en Pamplo-na, Navarra, en 1901. Facultad de Filosofía y Letras.
Santiago Hernández Ruiz, pedagogo. Nacido en Atea, Zaragoza, en 1901. Facultad de Filosofía y Letras.
Antonio María Sbert Massanet, ingeniero agróno-mo y político. Nacido en Palma de Mallorca, Islas Baleares, en 1901. Facultad de Ciencias Políticas y Sociales y Facultad de Economía.
Max Aub, escritor y crítico. Nacido en París en 1903, residente en Valencia. Radio Universidad.
José Ignacio Mantecón Navasal, abogado, histo-riador, político, maestro. Nacido en Zaragoza, Aragón, en 1902. Instituto de Investigaciones Estéticas e Instituto de Investigaciones Bibliográficas.
Antonio Sacristán Colás, economista y abogado. Na-cido en Madrid en 1902. Facultad de Economía.
Isaac Costero Tudanca, médico histólogo. Nacido en Burgos, Castilla y León, en 1903. Facultad de Medicina.
José Medina Echavarría, sociólogo. Nacido en Caste-llón de la Plana, Valencia, en 1903. Instituto de Investiga-ciones Históricas.
José Miranda González, abogado e historiador. Naci-do en Gijón, Asturias, en 1903. Instituto de Investigaciones Históricas.
Bibiano Fernández Osorio y Tafall, biólogo. Nacido en Pontevedra, Galicia, en 1903. Facultad de Ciencias.
Federico Pascual del Roncal, médico psiquiatra. Naci-do en Zaragoza, Aragón, en 1903. Facultad de Medicina.
Jaime Pi Suñer Bayo, médico fisiólogo. Nacido en Bar-celona, Cataluña, en 1903. Facultad de Ciencias.
Luis Recaséns Siches, abogado, filósofo e historiador. Nacido en Guatemala en 1903. Instituto de Investigaciones Filosóficas.
María Solà de Sellarès, pedagoga. Nacida en Barcelo-na, Cataluña, en 1903. Facultad de Filosofía y Letras.
Luis Castillo Iglesias, historiador y geógrafo. Nacido en Valencia en 1904. Escuela Nacional Preparatoria.
Joaquín d’Harcourt Got, médico cirujano. Nacido en Puerto Príncipe, Cuba, en 1896. Facultad de Medicina.
Alfredo Lagunilla Iñárritu, economista. Nacido en San Pedro de Galdanes, País Vasco, en 1896. Facultad de Economía.
Gabriel López Franco, economista. Nacido en León, Castilla y León, en 1897. Facultad de Economía.
Wenceslao Roces, historiador, político y maestro. Naci-do en Sobrescobio, Asturias, en 1897. Facultad de Filosofía y Letras.
Juan Roura Parella, filósofo y pedagogo. Nacido en Fortillá, Cataluña, en 1897. Facultad de Filosofía y Letras.
Manuel Sánchez Sarto, economista y abogado. Naci-do en Zaragoza en 1897. Facultad de Economía.
Domingo Tirado Benedí, pedagogo. Nacido en Cam-pillo de Aragón, Aragón, en 1898. Facultad de Filosofía y Letras.
José María Gallegos Rocafull, sacerdote, teólogo, fi-lósofo e historiador. Nacido en Cádiz, Andalucía, en 1899. Facultad de Filosofía y Letras.
Regina Lago García, pedagoga. Nacida en Palencia, Castilla y León, en 1897. Escuela Nacional Preparatoria.
Juan Comas Camps, antropólogo y maestro. Nacido en Alayor, Menoría, en 1900. Facultad de Filosofía y Letras e Instituto de Investigaciones Históricas.
Isidoro Enríquez Calleja, pedagogo. Nacido en To-rre de Juan Abad, Castilla, en 1900. Escuela Nacional Pre-paratoria.
José Gaos y González-Pola, filósofo. Nacido en Gijón, Asturias, en 1900. Facultad de Filosofía y Letras.
Eugenio Ímaz Echeverría, filósofo y periodista. Na-cido en San Sebastián, País Vasco, en 1900. Facultad de Filosofía y Letras.
Víctor Rico González, maestro, historiador, crítico de arte. Nacido en El Ferrol, Galicia, en 1900. Colegio de Bi-bliotecología, Facultad de Filosofía y Letras, Consejo Edito-rial de la UNAM.
José de Benito y Mampel, abogado y escritor. Nacido en Barcelona, Cataluña, en 1901. UNAM.
46 CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Patrimonio cultural inmaterial DEL EXILIO ESPAÑOL EN MÉXICO…
Eligio de Mateo Souza, químico y economista. Naci-do en Madrid en 1908. Facultad de Contaduría, Comercio y Administración.
Agustín Mateos Muñoz, maestro, editor. Nacido en Cá-ceres, Extremadura, en 1908. Escuela Nacional Preparatoria.
Luis Fumagallo Pérez, médico. Nacido en Madrid en 1909. Facultad de Medicina.
Luis Marín Bosqued, pintor. Nacido en Aguarón, Zara-goza, en 1909. Escuela Nacional Preparatoria.
Faustino Ballvé, economista y abogado. Nacido en Barcelona, Cataluña, ca. 1910. Facultad de Derecho.
Félix Candela, ingeniero y arquitecto. Nacido en Ma-drid en 1910. Facultad de Arquitectura.
Vicente Herrero, abogado y economista. Nacido en Madrid en 1910. Facultad de Economía.
Javier Márquez, economista. Nacido en Madrid en 1910. Facultad de Economía.
Joaquín Rodríguez y Rodríguez, abogado. Nacido en Alhama de Almería, Andalucía, en 1910. Facultad de Derecho.
Enrique Díez-Canedo Manteca, abogado. Nacido en Madrid en 1911. Cursos de Verano de la UNAM.
Ramón Ertze Garamendi, sacerdote, sociólogo y es-critor. Nacido en Lequeito, País Vasco, en 1910. Facultad de Derecho.
Josefina Oliva Teixell de Coll, geógrafa. Nacida en Reus, Cataluña, en 1912. Escuela Nacional Preparatoria, Colegio de Geografía de la Facultad de Filosofía y Letras, Instituto de Geografía.
Adolfo Sánchez Vázquez, poeta, filósofo y traductor. Nacido en Algeciras, Andalucía, 1912. Facultad de Filosofía y Letras.
Aurora Arnaiz Amigo, abogada. Nacida en Sestao, País Vasco, en 1913. Facultad de Derecho.
Juan Antonio Ortega y Medina, maestro e historia-dor. Nacido en Málaga, Andalucía, en 1913. Instituto de Investigaciones Históricas.
Juan Oyarzábal Orueta, físico. Nacido en Málaga, Andalucía, en 1913. Escuela Nacional Preparatoria, Facul-tad de Ciencias.
Luis Cernuda, poeta. Nacido en Sevilla, Andalucía, en 1904. Facultad de Filosofía y Letras.
Jesús de Miguel y Lancho, médico pediatra. Nacido en Badajoz, Extremadura, en 1904. Facultad de Medicina.
Jesús Bal y Gay, musicólogo y crítico de arte. Nacido en Lugo, Galicia, en 1905. Radio Universidad.
Ramón Iglesia Parga, historiador y traductor. Nacido en Santiago de Compostela, Galicia, en 1905. Escuela de Verano de la UNAM.
Mariano Jiménez Huerta, abogado. Nacido en Ma-drid en 1905. Facultad de Derecho.
Faustino Miranda, botánico. Nacido en Gijón, Astu-rias, en 1905. Instituto de Biología.
Dionisio Nieto Gómez, médico neurólogo. Nacido en Madrid en 1905. Instituto de Investigaciones Biomédicas, Facultad de Medicina.
Marcelo Santaló Sors, matemático, astrónomo y maestro. Nacido en Caballera, Cataluña, en 1905. Escuela Nacional Preparatoria y Dirección de Revalidación e Incor-poración de Estudios.
Niceto Alcalá-Zamora y Castillo, abogado y político. Nacido en Madrid en 1906. Facultad de Derecho e Instituto de Investigaciones Jurídicas.
Alfonso Ayensa y Sánchez, abogado y bibliógrafo. Nacido en Madrid en 1906. Colegio de Biblioteconomía, Facultad de Filosofía y Letras.
Federico Bonet Marco, entomólogo. Nacido en Ma-drid en 1906. Facultad de Ciencias.
Rafael Méndez Martínez, médico cardiólogo. Nacido en Lorca, Murcia, en 1906. Facultad de Medicina.
Eduardo Nicol, filósofo. Nacido en Barcelona, Cata-luña, en 1907. Facultad de Filosofía y Letras, Instituto de Investigaciones Filosóficas.
Miguel Prieto Anguita, pintor, tipógrafo, ilustrador, escenógrafo. Nacido en Almodóvar del Campo, Castilla La Mancha, en 1907. Revista Universidad de México.
Juan Pablo García Álvarez, abogado y sociólogo. Na-cido en Mieres, Asturias, 1908. Escuela Nacional Preparato-ria y Dirección General de Incorporación y Revalidación de Estudios.
47CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Educación PATRIMONIAL
Eugenio Sisto Velasco, contador, administrador y pin-tor. Nacido en Madrid en 1924. Facultad de Contaduría y Administración.
Ramón Xirau, poeta. Nacido en Barcelona, Cataluña, en 1924. Facultad de Filosofía y Letras.
Salvador Armendares Sagrera, médico. Nacido en Villafranca del Penedés, Cataluña, en 1925. Facultad de Medicina.
Néstor de Buen Lozano, abogado. Nacido en Sevilla, Andalucía, en 1925. Facultad de Derecho.
Gloria Caballero, abogada y literata. Nacida en Cata-luña, ca. 1925. Facultad de Filosofía y Letras, Facultad de Derecho.
María Isabel Méndez Domínguez, bibliotecaria. Nacida en Madrid en 1925. Colegio de Biblioteconomía, Facultad de Filosofía y Letras.
José Antonio Vila Mauner, médico. Nacido en Barce-lona, Cataluña, en 1925. Facultad de Medicina.
Antonio Encinas Martínez, arquitecto. Nacido en Madrid en 1926. Facultad de Arquitectura.
Horacio López Suárez, maestro y literato. Nacido en Bilbao, País Vasco, en 1926. Facultad de Filosofía y Letras, Sistema de Universidad a Distancia.
Carlos Méndez Domínguez, médico fisiólogo. Naci-do en Madrid en 1926. Facultad de Medicina.
Francisco Moreno Capdevilla, pintor, grabador y mu-ralista. Nacido en Barcelona, Cataluña, en 1926. Imprenta Universitaria.
Rafael de Pina Vara, abogado. Nacido en Madrid en 1926. Facultad de Derecho.
Federico Álvarez Arregui, literato y maestro. Nacido en San Sebastián, País Vasco, en 1927. Facultad de Filosofía y Letras.
Ángel Azorín Poch, arquitecto. Nacido en Córdoba, Andalucía, en 1927. Facultad de Arquitectura.
Jorge de Buen Lozano, ingeniero. Nacido en Sevilla, Andalucía, 1927. Facultad de Ingeniería.
Félix Colinas Villoslada, ingeniero civil. Nacido en Ma-drid en 1927. Facultad de Ingeniería.
Ramón Ramírez Gómez, economista y maestro. Naci-do en Madrid en 1913. Facultad de Economía.
Vicente Carbonell Chauro, matemático. Nacido en Madrid en 1914. Escuela Nacional Preparatoria.
Eduardo Lozano Vistuer, ingeniero petrolero y pin-tor. Nacido en Granada, Andalucía, 1917. Facultad de In-geniería.
Carlos Sáenz de la Calzada, geógrafo y maestro. Na-cido en León, Castilla y León, en 1917. Colegio de Geogra-fía, Facultad de Filosofía y Letras.
Carlos Bosch García, historiador. Nacido en Barcelona, Cataluña, en 1919. Facultad de Filosofía y Letras.
Avelino González, médico, psicoanalista. Nacido en Gijón, Asturias, en 1920. Facultad de Medicina.
Sadí de Buen López Heredia, médico. Nacido en San Sebastián, País Vasco, en 1921. Facultad de Medicina.
Augusto Fernández Guardiola, médico neurólogo. Nacido en Madrid en 1921. Facultad de Medicina.
Jacinto Viqueira Landa, ingeniero mecánico electri-cista. Nacido en Badajoz, Extremadura, en 1921. Facultad de Ingeniería.
Odón de Buen Lozano, ingeniero. Nacido en Sevilla, Andalucía, 1922. Facultad de Ingeniería.
Francisco Noreña, ingeniero. Nacido en Santander, Cantabria, en 1922. Facultad de Ingeniería.
José María Torre Bermúdez, fotógrafo, antropólogo y cineasta. Nacido en Madrid en 1922. Centro Universitario de Estudios Cinematográficos.
Santiago Genovés Tarazada, antropólogo. Nacido en Orense, Galicia, en 1923. Instituto de Investigaciones Antropológicas.
José Ignacio Bolívar, químico. Nacido en Madrid en 1924. Facultad de Química.
Rafael López Miarnau, director teatral, maestro. Na-cido en Bilbao, País Vasco, en 1924. Teatro, Facultad de Filosofía y Letras.
Antonio Peyri, arquitecto y pintor. Nacido en Barcelo-na, Cataluña, en 1924. Facultad de Arquitectura.
48 CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014
Patrimonio cultural inmaterial DEL EXILIO ESPAÑOL EN MÉXICO…
Francisco Tomás Pons, matemático. Nacido en Barce-lona, Cataluña, en 1931. Facultad de Ciencias.
Juan Antonio Tonda Magallón, arquitecto. Nacido en Madrid en 1931. Facultad de Arquitectura.
Enrique Guarner, médico psiquiatra. Nacido en Barce-lona, Cataluña, 1932. Facultad de Psicología.
Vicente Rojo, pintor, tipógrafo, editor. Nacido en Bar-celona, Cataluña, en 1932. Revista Universidad de México.
Germinal Cocho Gil, físico. Nacido en Madrid en 1933. Facultad de Filosofía, Instituto de Física.
Francisca Perujo, escritora, investigadora, traducto-ra. Nacida en Santander, Cantabria, en 1934. Dirección General de Publicaciones e Instituto de Investigaciones Filológicas.
Juan Benito Artigas, arquitecto. Nacido en Madrid en 1934. Facultad de Arquitectura.
Álvaro de Albornoz de la Escosura, economista. Na-cido en Madrid en 1936. UNAM.
Angelina Muñiz Huberman, escritora y profesora de Letras. Nacida en Hyères, Francia, en 1936. Facultad de Fi-losofía y Letras.
Federico Patán, poeta, profesor de letras. Nacido en Gijón, Asturias, en 1937. Facultad de Filosofía y Letras.
Magdalena Rius de la Pola de Riepen, química. Na-cida en Cherburgo, Francia, en 1937. Facultad de Química.
Juan Somolinos Palencia, médico, dibujante y escri-tor. Nacido en Estocolmo, Suecia, en 1938. UNAM.
Margarita Carbó Daranaculleta. Nacida en el tra-yecto del exilio a México en 1940. Facultad de Filosofía y Letras.
Atlántida Coll de Hurtado. Nacida en Dakar, Sene-gal, en 1941. Facultad de Filosofía y Letras, Instituto de Geografía.
Dalmau Costa Alonso, físico. Nacido en Barcelona, Cataluña, en 1942. Facultad de Ciencias.
María Luisa Martín, pintora. Nacida en Salamanca, Castilla y León, en 1927. Facultad de Arquitectura.
Daniel Ruiz Fernández, ingeniero civil. Nacido en Ma-drid en 1927. Facultad de Ingeniería.
Juan Urrusti Sanz, médico pediatra. Nacido en Cádiz, Andalucía, en 1927. Facultad de Medicina.
José Luis Benlliure, arquitecto y pintor. Nacido en Ma-drid en 1928. UNAM.
Víctor Rico Galán, escritor y periodista. Nacido en El Ferrol, Galicia en 1928. Facultad de Filosofía y Letras.
Pilar Rius de Pola, química. Nacida en Tarancón, Cuenca en 1928. Facultad de Química.
Rafael Segovia Canosa, politólogo, historiador. Na-cido en Madrid en 1928. Facultad de Ciencias Políticas y Sociales y Facultad de Filosofía y Letras.
Mercedes Díaz Roig, maestra y literata. Nacida en Madrid en 1929. Facultad de Filosofía y Letras.
Emilio García Riera, historiador y cineasta. Nacido en Ibiza, Islas Baleares, en 1929. Facultad de Ciencias Políticas y Sociales y Centro Universitario de Estudios Cinematográ-ficos.
Enrique Loubet Goitisolo, periodista. Nacido en Bil-bao, País Vasco, en 1929. Facultad de Ciencias Políticas.
Fernando Rico Galán, escritor y profesor de literatura. Nacido en El Ferrol, Galicia, en 1929. Facultad de Filosofía y Letras y Centro de Nuevos Métodos de Enseñanza; editor de Perfiles Educativos.
Luis Rius Azcoitia, poeta, ensayista y maestro. Nacido en Tarancón, Cuenca, en 1930. Facultad de Filosofía y Letras.
César Rodríguez Chicharro, escritor y profesor. Naci-do en Madrid en 1930. Facultad de Filosofía y Letras.
Arturo Souto Alabarce, escritor y profesor de litera-tura. Nacido en Madrid en 1930. Facultad de Filosofía y Letras.
José Pascual Buxó, poeta, ensayista. Nacido en San Feliú de Guixols, Cataluña, en 1931, Facultad de Filosofía y Letras.
49CORREO del MAESTRO núm. 220 septiembre 2014