Pérez Celis Catálogo Salas

7/23/2019 Pérez Celis Catálogo Salas

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PÉREZ CELISTESTIMONIO AMERICANO



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PRESIDENTA DE LA NACIÓN

Cristina Fernández de Kirchner

VICEPRESIDENTE DE LA NACIÓN

Amado Boudou

MINISTRA DE CULTURA DE LA NACIÓN

Teresa Parodi

JEFA DE GABINETE

Verónica Fiorito

DIRECTORA EJECUTIVA DEL

MUSEO NACIONAL DE BELLAS ARTES

Marcela CardilloPÉREZ CELISTESTIMONIO AMERICANO



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INDICEDIRECTORA EJECUTIVA

Marcela Cardillo

DIRECTORA ARTÍSTICA

María Inés Stefanolo

DELEGACIÓN ADMINISTRATIVA Y JURÍDICA

Carlos Valenzuela

Teresa ParodiMinistra de Cultura 7

Cristina Rossi 10Pérez Celis, testimonio americano

José Emilio Burucúa 46Pérez Celis, un anarquismo espiritualista

Sandra Szir 64Pérez Celis y los libros ilustrados.Reproduccion de imágenes y multiplicación de efectos

Milena Yolis 88Pérez Celis, un recorrido a través de sesenta añosCronología documentada

CURADORA

Cristina Rossi

ASISTENCIA DE INVESTIGACIÓN

Milena Yolis

MUSEOGRAFÍA

Silvina Echave, Gala Kumec, FranciscoAmatriain, Carlos Cortéz, Fabián Belmonte,Leonardo Teruggi, Alberto Álvarez, LucioO‘Donnell

DISEÑO GRÁFICO

Susana Prieto

FOTOGRAFÍA

Matías Iesari, Gustavo Cantoni

PRENSA Y COMUNICACIÓN

Martín Reydó, Eleonora Waldmann,Trinidad Massone, Esteban Benhabib, LucasReydó

DOCUMENTACIÓN Y REGISTRO

Paula Casajús, María Rosa Espinoza, VictoriaGaeta, Cecilia García, Silvia Rivara, FlorenciaVallarino, Martín Méndez

ÁREA EDUCATIVA

Mabel Mayol, Silvana Varela, Gisela Witten,Inés Alvarado, Cecilia Arthagnan, MarcosKrämer, Ana Lobeto, Jeanette Gomez Jolis

ASISTENTE DE DIRECCIÓN ARTÍSTICA

Alejandra Hunter



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Pérez Celis, testimonio americano es la muestra dedicada a este notableartista contemporáneo argentino que se presenta en el Museo Nacionalde Bellas Artes. Inscripta en las múltiples actividades del Ministerio, estaexposición -emplazada en el pabellón central del Museo- propone un recorridopor diferentes períodos de su creación pero haciendo foco en su raigambreamericana. Pérez Celis fue un artista multifacético, un gran representante denuestra cultura dentro y fuera del país que con su modo peculiar y audaz dever y sentir el arte supo llegar a una gran número de personas.

A lo largo de su carrera Perez Celis formó parte de numerosos movimientosartísticos de vanguardia. Siempre comprometido y ligado a la identidadamericana, cada lugar que habitó dejó su impronta en los colores, en lamateria y en las formas que traslucen los pasos de algún rincón transitado. Suscreaciones de grandes dimensiones, a gran escala y con mucho desplieguede materiales así como sus expresiones muralistas lo convirtieron en uno delos artistas más populares de nuestro país.

Desde el Ministerio de Cultura trabajamos para incentivar, promover y generarespacios para desarrollar nuestra cultura nacional como construcción colectivade la que todos formemos parte. Tanto la participación de los artistas como elacceso gratuito del público a las distintas expresiones artísticas son premisasde las políticas de inclusión impulsados por Néstor Kirchner y continuados pornuestra Presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Celebramos esta nueva propuesta del Museo y subrayamos el esfuerzo detodo su equipo en el logro de esta exitosa muestra.

Teresa Parodi Ministra de Cultura de la Nación



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El Museo Nacional de Bellas Artes presenta la muestra individual del artistaPérez Celis al cumplirse 7 años de su muerte.Las trazas de su vida y de su obra llevan la impronta de su estética multifacética.Pérez Celis se expresó a través de la pintura, la escultura, el muralismo, y elgrabado, construyendo con su lenguaje plástico su particular huella identitaria.La exposición curada por Cristina Rossi, centrada en el lenguaje abstractodesarrollado por Pérez Celis y organizada en seis núcleos intenta, con la

selección de más de 60 obras realizadas en diferentes épocas y soportes,abrir un espacio para reflexionar la singular matriz americana que imprimió asu obra, la simbología indoamericana, el horizonte pampeano y los metalesde nuestra América.El guión museológico puso en foco la primacía de la materia y el color, asícomo su vocación de apertura al público mediante el trabajo sobre el artemural y la obra múltiple.El catálogo que acompaña la muestra, ilustrado con diferentes vistas dela exposición, contiene el texto curatorial de Cristina Rossi, dos ensayosespecíficos a cargo de José Emilio Burucúa y Sandra Szir y una cronologíarelatada por Milena Yolis.Nuestro especial agradecimiento a los familiares de Pérez Celis; a losprofesionales que intervinieron en la muestra y en esta publicación que laacompaña; a todos los coleccionistas e instituciones que han brindadodesinteresado apoyo; al Ministerio de Cultura de la Presidencia de la Nación, yal destacado personal del MNBA que ha llevado a cabo la producción integralde la muestra.



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Cuando uno se siente atraído por la libertad y la pasión

debe manifestarla para trascender.Pérez Celis

Pérez Celis fue un viajero incansable. Un mapeo de sus viajes muestra que,haciendo centro en Buenos Aires –donde había nacido en el verano de 1939–,fue dibujando un itinerario que, a fines de los 50, lo llevó cerca de un año aMontevideo; en 1963 se instaló casi dos años en Lima –desde allí llegó alCuzco y Machu Picchu– y después fue un asiduo visitante de los campos deQuemú Quemú, en la provincia argentina de La Pampa. Más tarde, se dejóseducir por el relieve escarpado de Caracas, por la ribera del Sena en París, elajetreo de Nueva York y, finalmente, recaló en Miami.

Con un particular acento americano, su sensibilidad interpretó cada uno deestos escenarios, y de todos supo llevarse algún signo emblemático. Los so-les otorgaron su nota peculiar al regresar de la costa uruguaya –donde veía elespectáculo de la puesta sobre el río de la Plata–, la simbología incaica le dioel tono a la pintura de los primeros años 60 y, pronto, sumó la fuerte horizon-tal que no abandona al viajero dispuesto a recorrer la pampa argentina. PérezCelis expresó esos espacios y su gente a través de una obra plástica libre,desmarcada de los programas estéticos que imperaban en la época, pero conuna impronta que, en todos los casos, manifestó su particular traza identitaria.

Elaboró así un lenguaje plástico que interpretaba en clave americana unasuma de lecturas, afinidades y experiencias intercambiadas en esos tránsitos.No habían transcurrido en vano las horas compartidas con Rafael Squirru yFernando Demaría, quienes encendieron la llama del “hombre nuevo”.1 Conesos ideales había cruzado la frontera y se había insertado en el ambientemontevideano, donde un grupo de jóvenes enfrentaba a la tradición torres-garciana. Sin embargo, esos jóvenes mantenían la visión utópica del viejomaestro, que se había propuesto reinstalar el arte en las prácticas cotidianas

a partir del estudio y revalorización de la metafísica indoamericana.Inmerso en esas discusiones, Pérez Celis se interesó por fortalecer la in-

serción de los valores sensibles en la vida diaria y practicó a lo largo de sutrayectoria el arte mural, la obra multiejemplar, la ilustración y todas las posi-bilidades que, por esos años, abría el diseño gráfico y de productos. Atento alimpacto de su entorno, también manifestó con libertad los valores plásticosde la recta, la curva, las texturas y el color en una gran cantidad de obras abs-tractas, aunque nunca desdeñó la vertiente figurativa.

Pérez Celis.Testimonio americano

CRISTINA ROSSI



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Las composiciones organizadas a partir del horizonte pampeano de finales delos 60 fueron sucedidas por espacios gobernados por la dirección ascendentede las formas pintadas mientras vivía en Caracas, rodeado por sus rascacielos,torres de petróleo y montañas. Más tarde, el período parisino imprimió tonosdorados y plateados en sus telas y, con un gesto libre, en los Estados Unidoshizo explotar el color. No obstante, la simbología, el tratamiento plástico y lasalusiones a través de los títulos mantuvieron la impronta de las ideas que tem-pranamente había sostenido en el contexto del Movimiento del Hombre Nuevo.

Pérez Celis, testimonio americano es una muestra que pone en foco lafuerza que adquirió ese particular vínculo identitario expresado a través delgesto, la materia y el color. El guión curatorial prioriza su trabajo sobre elvocabulario plástico, así como sobre su vocación por instalar su producciónen la vida cotidiana mediante la importancia que le otorgó al arte público y ala obra múltiple (tapices, grabados, ilustraciones de libros, diseños, etc.). Ensuma, a través de una selección de trabajos realizados en diferentes épocasy soportes, esta exposición intenta abrir un espacio para releer la singularmatriz americana que Pérez Celis imprimió en su poética.

Círculos de afinidades

…un auténtico creador traducirá elementos intransferibles

del medio en que trabaja …2

Rafael Squirru

El tiempo de formación sistemática de Pérez Celis fue breve. Tras las primeraslecciones que tomó con el historietista Carlos Clemen a través de un cursopor correspondencia, ingresó en la Escuela Nacional de Bellas Artes “ManuelBelgrano”. En ese período los alumnos estaban disconformes, y en octubre de1955 organizaron un movimiento estudiantil que tomó las tres escuelas de artespara exigir reformas en la enseñanza y la inclusión en el sistema universitario.

Desestimulado por la falta de clases regulares, Pérez Celis se fue alejando delas aulas. De todos modos, en repetidas ocasiones ha recordado entre los artis-tas que le sirvieron de guía a Leopoldo Presas, Libero Badii, Santiago Cogornoy Juan Batlle Planas. Precisamente, el primer mural que pintó en el zaguán deuna casa del barrio de Liniers –donde vivía con su familia– testimonia la filiacióncon la imagen de este último maestro,3 caracterizada por los volúmenes cons-truidos a partir de facetamientos sucesivos y por los enigmáticos personajesque habitaron sus solitarios paisajes.

Tempranamente Pérez Celis realizó una exposición individual en la galeríaLa Fantasma –que probablemente incluía sus primeros trabajos figurativos– y,pronto, sus retratos y naturalezas muertas desembocaron en formas abstrac-tas. Por un lado, los jóvenes estudiantes de la época habían recibido un fuerteimpulso hacia el grabado, especialmente a partir de la práctica de la monoco-pia, técnica con la que podían lograr resultados más rápidos. Por otro, en 1958llegó al Museo Nacional de Bellas Artes una exhibición de Victor Vasarely,auspiciada por la parisina galería Denise René, donde se presentaron unascuarenta obras con juegos formales en blanco y negro.

Tanto su presencia en varios salones de grabado –entre los cuales en 1958logró una mención en el IV Salón Estímulo de Arte en La Plata– como elcambio que comenzó a observarse en su imagen testimonian el impacto deambos hechos. Entre los grabados que se conservan de ese año, Antes de latierra presenta una composición abstracta inscrita en un entramado irregular,en la línea de los trabajos de Stanley Hayter que circulaban en las clases de laépoca; aguatinta temprana firmada como Celis Pérez, antes de anteponer suapellido al nombre.



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Esas tramas irregulares también estaban presentes en la serie de estudiosal óleo pintados en la primera parte de ese año, tal como Estudio II , fechado el10 de abril de 1958. No obstante, en el marco del entusiasmo que en agosto deese año despertó la muestra de Vasarely, el entramado se fue regularizando ypasó a contener formas geométricas. De hecho, la pintura al óleo Bebé , firmadaen noviembre, es una obra compuesta a partir de formas trazadas con precisión.

Si bien en Poema cinético , de 1959, Pérez Celis ajustó la paleta al rigurosoblanco, negro y gris, la mayor parte del corpus de este período que hemos podidorelevar muestra que interpretó los postulados vasarelyanos de modo peculiar:

Bebé ya incluía color, y, rápidamente, la trama perdió su regularidad, porque lasformas geométricas se fueron fragmentando y deformando. Las composicionesadquirieron un carácter más libre y ajeno a la serialidad que continuaron practican-do los jóvenes que decidieron seguir investigando los problemas ópticos.

En esa época, algunos estudiantes de la Escuela de Bellas Artes –entreellos, Julio Le Parc, Francisco Sobrino, Sergio Moyano y Horacio García Rossi,que más tarde formarían el Groupe de Recherche d’Art Visuel – trabajaban enun taller de la avenida La Plata y Rosario. Dado que Pérez Celis y Alfredo Plank

–su amigo de infancia y estudiante de artes– recibían encargos para hacerdecoraciones, este grupo de compañeros les cedió un espacio del taller paraque pudieran concretarlos.4 En otro pequeño taller que Le Parc compartía consus amigos –pero ubicado en la avenida Leandro N. Alem– fue donde RafaelSquirru conoció a Celis.5 Squirru ya era el director del Museo de Arte Moder-no de Buenos Aires, fundado en 1956, sin edificio para su funcionamiento.Mientras trataba de lograr una sede, organizaba muestras en otros museos,galerías y espacios no convencionales bajo el auspicio del Museo de ArteModerno, como la “exposición flotante” realizada a bordo del barco “Yapeyú”.

Pronto, el crítico convocó a Pérez Celis para alguna de sus iniciativas.Por otra parte, desde 1953 Squirru frecuentaba a Leopoldo Marechal, a

quien había llegado a través del compositor Alberto Ginastera, y con el cualcompartía el interés por las artes plásticas. Más tarde, Rafael le presentó asu amigo Fernando Demaría, cuyo perfil humanista coincidía con las inclina-ciones de ambos.6 Squirru y Demaría mantuvieron una rutina de visitas se-manales cuando el escritor se había recluido en una suerte de “autoexilioposperonista”. Tras relatar los momentos compartidos en su casa de la calle



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Pasteur y su admiración por sus conocimientos sobre todas las religiones,Demaría recordó que Marechal les dedicó un canto del poema autobiográficoHeptamerón: la Poética , a Squirru, y Alegropeya , a él.7

Al estudiar la trayectoria de Marechal, su discípula Graciela Maturo señalaque toda su obra está traspasada por un sentido metafísico basado en su con-cepción antropológica, estética y ético-política. Observa que sus novelas sefundan en una condición heroica que adquiere el carácter de paideia , dondelos tiempos oscuros hacen surgir al Hombre Nuevo como realización cristiana.8 Precisamente, tras la caída del segundo gobierno peronista, Rafael fue un entu-siasta de estas ideas que sugerían la posibilidad de volver a comenzar, renovar-se a partir de la invitación a quitarse los ropajes del hombre viejo para vestir alhombre nuevo, según la tradición cristiana de San Pablo. Estos ideales procura-ban una depuración de las estructuras no exenta de contenidos políticos, 9 aun-

que se diferenciaban de la noción del “hombre nuevo socialista”; en este caso,pensado como un hombre político engendrado por la revolución y encarnado,principalmente, en la figura de Ernesto “Che” Guevara. Tras la Revolución Cuba-na, esta última perspectiva impregnó los intereses y debates latinoamericanos.Si bien ambas tenían una misma raíz cristiana,10 Squirru sostenía los ideales delhombre nuevo, pero nunca adhirió a la experiencia revolucionaria.

En el marco de las relaciones interamericanas de la época, tanto el procesocubano como la amenaza del avance de las ideas de izquierda activaron las políti-cas estadounidenses de la Alianza para el Progreso que, a su vez, reactualizaronel interés por el imaginario americano en una línea de afirmación continental. Eneste sentido, ya en 1959 José Gómez Sicre –al frente del Departamento de ArtesVisuales de la OEA– había puesto en pie de igualdad a la Coatlicue, diosa de la fal-da de serpientes en la mitología mesoamericana, y a la helenística Victoria de Sa-motracia. Pero, además de establecer un paralelo entre los símbolos, señaló: “Elmomento del arte de América no es de indigenismo, campesinismo, obrerismoni demagogia. Es de afirmación de valores continentales de esencia universal”.11

Entre marzo y abril de 1959, Squirru organizó la exposición Pintura moderna

rioplatense , con la participación de algunos artistas consagrados, varios gruposlocales (como Espartaco, Madí, Del Litoral) y la invitación especial al Grupo 8de Montevideo, formado por Lincoln Presno, Alfredo Testoni, Raúl Pavlotzky,Américo Spósito, Oscar García Reino, Julio Verdié, Miguel Ángel Pareja y CarlosPáez Vilaró. En el marco de los preparativos, Rafael declaró que el Museo eraun sitio de reunión y apoyo al Hombre Nuevo, y agregó:

Con este concepto de Hombre Nuevo pretendo involucrar la fuerza delespíritu americano que es una realidad, manifestada a través de sus pro-fetas primitivos: José Hernández y Zorrilla de San Martín. No significaesto negar la realidad europea, sino afincarse en la propia realidad. Esuna dimensión espiritual abierta a todos los hombres del mundo y quea nosotros nos toca testimoniar.12

Antes de finalizar 1959, el Museo de Arte Moderno publicó El hombre nuevo , de Manolo Belloni. Este “ensayo-río” –según lo llama su autor– es una largareflexión sobre el surgimiento del Hombre Nuevo que comienza por la conquis-ta (“De Pedro de Mendoza al Hombre Nuevo”). Alude a las culturas americanasen el presente de un relato dividido en treinta y tres partes, algunas con vo-ces indígenas en sus títulos (kuntur, hunahpú, soychú, Viracocha o Atahualpa) yotras con referencias a sus leyendas, como Allú mapú: país de la lejanía.13 Bajoel título Macchu Picchu , por ejemplo, se lee:

Buscad en la huella los caminos futuros; en los principios, los fines. Yampliad la mirada para adecuarla al país […] Rehágase la juventud conuna dureza de inca. Láncese a la conquista de una labor colosal: la repú-blica futura, la que se inicia hoy.14

Sin duda la gestión del joven Squirru estaba volcada al impulso de gruposartísticos interesados en modificar el statu quo –tal como ocurrió casi simul-táneamente con el Grupo Informalista , de Buenos Aires; el Grupo S í, de LaPlata; el Grupo del Sur , de Barracas, y el Grupo 8 , de Montevideo–, interés deaglutinamiento que también involucraba sus ideas sobre el Hombre Nuevo.En este caso, liderado por Rafael, el Movimiento del Hombre Nuevo estabaintegrado por Hugo Rodríguez, Federico Martino, Pérez Celis, Eduardo Squirru(su hermano) y Demaría. A su vez, él y Demaría habían fundado Ediciones delHombre Nuevo, identificada con una rosa –símbolo místico de la perfección–diseñada por Eduardo Bergara Leumann. Se trataba de un emprendimiento

en el que, a partir del esfuerzo mancomunado, publicaron sus propias obras ytambién las de algunos otros autores amigos.15

En la muestra Pintura moderna rioplatense , Demaría y Pérez Celis estrecha-ron vínculos con los integrantes del Grupo 8: Carlos Páez Vilaró invitó al jovenartista argentino a visitar Uruguay, y Demaría compró una primera obra de Lin-coln Presno, con la que comenzó una amistad que los unió por el resto de suvida. Ese mismo año, en medio de las dificultades económicas que afrontaba,Pérez Celis decidió probar suerte en Montevideo; viajó y se instaló con la ayuda



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de algunos de los integrantes del Grupo 8. Más tarde llegó su esposa Sara,embarazada, y en septiembre nació Enrique Sergio, el primer hijo de ambos.

En el campo artístico montevideano aun se escuchaban los ecos de la pré-dica de Joaquín Torres García con relación a la reivindicación del arte indoameri-cano como parte de la gran tradición universal que permitía fundar una vanguar-dia constructiva desde nuestras latitudes, sintetizado en la expresión “NuestroNorte es el Sur”. Sin embargo, a fines de los años 50 varios integrantes delTaller Torres García estaban dando una dirección propia a su poética que, enalgunos casos, se apartaba de los lineamientos del arte constructivo torres-garciano; mientras que quienes se mantenían dentro de esa tradición debíanafrontar las críticas del medio, que les reprochaba “falta de originalidad”.16 Eneste marco, había surgido el Grupo 8, cuyos miembros no practicaban una líneaestética común; por el contrario, se habían agrupado a partir de la tolerancia

a las diferentes expresiones y, al mismo tiempo, a diez años de la muerte delmaestro, habían asumido con irreverencia la posibilidad de crear una alternativaa la ortodoxia del Taller Torres García (aun cuando tres de sus integrantes –Pres-no, Spósito y García Reino– habían tomado clases con ese maestro).

Cuando, en junio de 1959, el Grupo 8 logró editar su primer boletín, saludó laauspiciosa visita de Gómez Sicre, que los había seleccionado para participar en lamuestra South America Art Today ,17 y transcribió un texto sobre la síntesis de lasartes, la importancia del arte mural y las relaciones entre arquitectos y pintores.Además, el grupo escribió una extensa reflexión acerca de la necesidad de vin-cular el arte y la industria, donde expresó que en cada fábrica o comercio habíaun lugar para un artista que “viene poseído de experiencia, de concepto sobre

estética y con fina sensibilidad. Un artista –decían– que pondrá un toque humanodentro del engranaje del mecanismo fabril, pero que hará que cada producto re-cién nacido logre una inmediata vinculación al medio”.18 Más adelante expresaronque era necesario imponer como norma que todo producto pasara por las manosde un artista que le daría la orientación estética común y universal de su época.

Pérez Celis se insertó en esta escena montevideana y conoció las ideasque sostenían los participantes del Grupo 8. Continuó allí desarrollando su pin-tura, realizó un mural de hierro y chapa forjada y, en abril de 1960, integró unagran exposición bajo el título Movimiento Arte no-figurativo que se presentóen la sala Subte Municipal. No se trataba de la primera exhibición de arte nofigurativo realizada en Montevideo, ya que desde comienzos de los años 50se habían sucedido varias, inclusive en ese mismo espacio; sin embargo, éstatenía el carácter aglutinador de un “movimiento”, tal como escribieron en el

catálogo casi a modo de manifiesto:

Los expositores reunidos en esta muestra, cultores de las diversas ex-presiones plásticas No Figurativas han decidido organizar un Movimien-to Nacional que unifique, agrupe y acerque a todos aquellos artistas queresponden a estas corrientes estéticas, con el fin primordial de propen-der a su más amplia difusión.19

Mientras conocía e intercambiaba vivencias e ideas con los artistas uru-guayos, Pérez Celis presentó en esa muestra obras que partían de formasgeométricas trazadas con libertad, dentro de su período reconocido como

Manolo Belloni, El HombreNuevo , Museo de ArteModerno de Buenos Aires,1959

Exposicion de Arte NoFigurativo, Humberto I 1717,Buenos Aires, 1960.

Exposicion MovimientoArte no Figurativo, SubteMunicipal, Montevideo,1960.



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vasarelyano. De hecho, también compartía con ellos las ideas sobre el Hom-bre Nuevo. Él y su amigo Hugo Rodríguez fueron los dos argentinos del en-torno de Squirru presentes en esa muestra20 y, según señala en la prensamontevideana el crítico Garrido Vidal –también argentino–, Celis habría sidoel encargado de reunir en dos oportunidades a los artistas de las tendenciasextremas con el fin de formar el Movimiento del Hombre Nuevo. En efecto,un repaso por los cincuenta y nueve nombres demuestra que participarondesde los artistas del Taller Torres García (algunos de los cuales en esos díasse cuestionaban sus propias posiciones), los interesados por las propuestasmás racionalistas del arte concreto, algunos de tendencia francamente infor-malista y muchos otros provenientes de una abstracción lírica y libre.

De hecho, en enero de 1960 los miembros del Grupo 8 admitieron que Squi-rru los había definido como “hombres nuevos” y coincidieron en que ese hom-

bre nuevo correspondía a un hombre universal que, con fe y decisión, tantopodía “construir Brasi lia como el avión a chorro”, al que Dios, el diablo o Freud“lo acicateaba para que eleve la dignidad del hombre por sus ideas”, y concluían:

El “hombre nuevo” del arte no tiene vergüenza de dibujar una línea si-nuosa en lugar de la tradicional recta; en crear una botella para un nuevoenvase de bebida gaseosa o crema de belleza; en diseñar una tela queservirá de vestimenta de la gran masa del pueblo; en realizar un dibujopublicitario […] o un cuadro para un Salón Nacional.21

Éste fue, posiblemente, el momento de mayor difusión de ese movimiento,dado que al editar su segundo Boletín de Artes Visuales , debajo de su direcciónpostal, el Grupo 8 también grabó la inscripción: “Movimiento Hombre Nuevo”,y, una vez en Buenos Aires, Pérez Celis respondió como integrante del GrupoHombre Nuevo a la convocatoria que se organizó en el taller de Raúl Lozza ycon el auspicio del MAMbA, bajo el título Exposición de Arte No Figurativo .22

En noviembre Pérez Celis presentó una muestra individual en la Galería Hdonde la crítica destacó dos relieves en yeso como los trabajos más expre-sivos, en detrimento de la sistematización geométrica que venía cultivando.Uno de ellos era la maqueta para un mural ejecutado en yeso policromado, enel cual las formas de bordes precisos se habían ido fragmentando mediante larepetición lineal de alguno de sus límites, y, en esta vía de cambios, antes determinar ese año pintó una de sus primeras obras matérico-gestuales con eltítulo Indoamérica . Desarrolló, entonces, una importante producción en estesentido que fue presentada en la galería Rubbers en mayo de 1961; no obs-tante, los planteos geométricos permanecieron en sus diseños, tal como seobserva en la publicidad “SIAM, fertilidad del espíritu creador”, realizada esemismo año para Agens, la agencia encargada de implementar el desarrollo delos productos de la empresa de la familia Di Tella.

Al analizar la producción de formas libres y de pincelada espontánea exhi-bida en Rubbers, la crítica encontró una filiación con Giuseppe Capogrossi23 que, desde ese comentario, se transformó en una referencia obligada parafuturas interpretaciones. Sin embargo, más que “quebrados eslabones”, lasobras de esa época presentaban formas dentadas y círculos de los que par-tían líneas, anticipo de los soles y los símbolos que fueron cobrando mayorpresencia dentro de este período y que, con variantes, tuvieron centralidad ensus visiones del paisaje pampeano.

Para estudiar las ideas que configuran el tiempo de desarrollo de una ge-neración, Raymond Williams ha empleado el concepto de “estructuras de sen-timiento” con el fin de designar los pensamientos y sentimientos que dan eltono a una época y, de ese modo, otorgan sentido a un período.24 Sin duda, laclave americana orientaba los intereses y conversaciones en los círculos deafinidades que compartía Pérez Celis mientras desarrollaba su obra tempranay, pronto, esos intercambios encontraron un matiz particular en su poética.



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El gesto, la materia y la imagen de raigambre prehispánica fueron la base dela serie de trabajos que exhibió en Buenos Aires entre 1962 y 1963, mientras queel interés por el arte mural encontró espacio en algunas empresas vinculadas algrupo SIAM, como Brousson y Alámbrica, donde realizó relieves de cemento. Enpoco tiempo, las pinceladas entrecortadas y densas sumaron trozos de maderaspolicromadas. El ensamble de esas maderas, muchas veces irregulares, quebróla ortogonalidad del soporte y, por su espesor, la obra adquirió tridimensionalidady el carácter espontáneo presente en la imaginería popular.

Antes de finalizar 1962 esta cualidad matérica pasó al muro cuando le en-cargaron un mural para la concesionaria Calvo y Cía., Siam Di Tella Automoto-res, ubicada en la avenida Rivadavia 6140 (hoy destruido). El diseño de FuerzaAmérica , hecho con cemento armado, con la colaboración de su hermanoJorge Pérez y el escultor César Sondereguer, ocupó quince metros de largo

en el plano de la pared por cinco de altura, con un relieve que presentaba sa-lientes de más de un metro.25 El resultado alcanzó la monumentalidad de lasgrandes construcciones indoamericanas, a pesar de que Pérez Celis aún nohabía tomado contacto con las ruinas prehispánicas.

Rutas de aventuraSoy incapaz de distinguir

entre lo que siento por la vida y mi forma de expresarlo…26

Henri Matisse

Si, al calor de la sensibilidad de la época, sus obras apelaban a las raíces ame-ricanas, los posteriores recorridos y residencia en las zonas que conservanlas huellas de las culturas incaicas fortalecieron esa elección por el imaginarioamericano. El viaje al altiplano de 1963 lo llevó primero a Bolivia, cruzó luegoel lago Titicaca y, por tierra, accedió a Lima. Este viaje no solo fue un acerca-

miento a las culturas ancestrales, fue también el tiempo de reconocimientode que su expresión artística no podía estar disociada del modo de experi-mentar el mundo que la animaba.

Tras el nacimiento de su hija María José, la familia se instaló en la QuintaHeeren de Lima y Pérez Celis se fue insertando en el ambiente artístico. Porun lado, comenzó a relacionarse con el círculo de pintores, entre ellos MiguelÁngel Cuadros, Millner Cajahuaringa, Venancio Sinki, Alberto Dávila, ManuelUgarte Elespuru y Fernando de Szyszlo, y, por otro, a través de Enrique ZileriGibson, accedió a la redacción de la revista Caretas , donde circularon sus

obras y también fue director de arte. Rodeado por vasijas, piezas de artepopular, máscaras de las diabladas bolivianas y textiles peruanos, sus obrascontinuaron reinterpretando ese mundo como una manifestación de su modode ver y de concebir la vida colectiva.

La visita a las ruinas de Machu Picchu con su particular arquitectura, lasrepresentaciones del culto solar de las tradiciones indígenas y la reiteradapresencia del Sol (inti), la serpiente y el felino en la iconografía andina, juntocon las construcciones coloniales, las decoraciones de las iglesias limeñas,el mundo de creencias y los hábitos populares de colorida presencia, fortale-cieron el imaginario americano que impactó en los valores sensitivos de supintura. La trama de formas dentadas o entrecortadas, pintadas con acentosde color, y el trazo matérico reforzaron el trabajo dentro de una línea de abs-tracción informal que, sin embargo, aludía a cierto simbolismo de inspiraciónamericana. En el ambiente limeño, Pérez Cel is presentó con frecuencia estasobras, en especial en el Instituto de Arte Contemporáneo, una de las institu-

ciones ubicadas en el centro histórico de la ciudad y que, en la época, articu-laba la escena de vanguardia.

Mientras que la proximidad con los hábitos culturales andinos le permitíaahondar su interpretación, fue instalando sus creaciones en el entorno, comoen el caso de las decoraciones que plasmó en una puerta de la residenciaHeeren, o los murales que realizó en Lima. También profundizó las experien-cias con maderas y telas superpuestas comenzadas en Buenos Aires y yaexhibidas en la escena artística porteña interesada por el arte objetual, es-



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pecialmente después de la memorable exposición Qué cosa es el coso , de1956.27 Sus obras compartieron el espacio con las cajas y objetos de EmilioRenart, Rubén Santantonín o Jorge de la Vega, entre muchos, en muestrascomo El hombre antes del hombre. Exposición de cosas , Relieves 64 , la exhi-bición conjunta con Luis Alberto Wells en Bonino, el Premio Nacional del Ins-tituto Torcuato Di Tella o la exposición colectiva enviada por la galería Bonino alInstituto de Arte Contemporáneo de Lima. No obstante, mientras que el arteobjetual tendía a emplear materiales pobres o de desecho, las cajas de PérezCelis no se ubicaban fácilmente dentro de ese criterio. Santantonín designabaa sus objetos como “cosas” y Renart creaba sus biocosmos con alusiones ala vida animal, vegetal y mineral. En cambio, Celis asociaba sus cajas a los re-tablos populares. Aunque no abandonaban totalmente su condición pictórica,eran objetos tridimensionales en los que él percibía “un sentimiento más ínti-

mo, lo que equivale a la religiosidad que sugiere el espacio en los retablos”.28

Este imaginario también habitó en las interpretaciones que surgieron en elmarco de la amistad con Carlos María Carón y Fernando Demaría. Por un lado,la serie de trabajos dedicada a “Anatonia”, un lugar inventado cuyo perfil visualse fue trazando en el trabajo conjunto entre el escritor y el pintor. Por otro, la

larga serie vinculada a la pregnancia de la línea del horizonte en la pampa argen-tina, cuyas visiones Demaría ya había publicado en 1959 en el libro Pampa roja .29 Esta línea de trabajo se fortaleció en las temporadas compartidas en la localidadpampeana de Quemú Quemú, y a través de los míticos relatos sobre caciques ycacerías, las historias sobre Ceferino Namuncurá y la devoción popular. Aquellosencuentros también profundizaban los ideales del Hombre Nuevo y el rescate delas tradiciones culturales, al punto de que Marechal pintó ese escenario en tonode broma en una carta dirigida a Squirru en 1964, donde le decía:

Gran jefe Squirruhuincó: no dejar de mandar chasque a gran mago. Granmago no ver a gran jefe Demariaboucó: no saber si Demariaboucó bo-leando ñanduces en Quemú Quemú, o predicando filosofía Indio Nuevo.Leopolfucurá y Elbillauquén solos, tomando mate día y noche. Mandachasque sin esperar la otra luna.

Tu hermano: Leopolfucurá (brujo ranquel).30

También estuvo presente en ese ambiente uno de los “hombres nuevos”del Grupo 8 que, tras el asesinato de John Fitzgerald Kennedy, concibió unmemorial en Quemú Quemú. Junto a Héctor Tardiani, Demaría formó unacomisión para concretar la iniciativa de homenaje surgida entre amigos, leencargó a Presno el diseño de un monolito y lideró la colosal empresa, yaque, según manifestó, “el artista nos presentó un verdadero monumento,pero igualmente nos embarcamos”.31 La obra, emplazada en la intersecciónde las rutas provinciales 1 y 12, es una construcción de cuarenta metros de

La rosa elegida para simbolizar alHombre Nuevo estampada en lapared del monumento.

Cubierta de Pampa roja, 1959. Monumento a John F. Kennedyen Quemú Quemú.



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altura con un corte en forma de prisma triangular que –colocado en formahorizontal– simboliza el paso de Kennedy hacia la muerte y, al mismo tiempo,se transforma en una aguja que señala el norte geográfico y todos los 22 denoviembre, a las 15, arroja sombra sobre un punto rojo marcado en la base delmonumento, para rememorar el trágico suceso.32

La serie de obras que Pérez Celis desarrolló en este período se organi-zó –como el horizonte pampeano– a partir de una línea media que marca lainmensidad y, en el caso de las pinturas, se interna en la profundidad de lacomposición. Se trata de una serie prolongada en el tiempo que presentavariantes dentro de un imaginario poblado por alusiones a paisajes, relatos,leyendas y deseos. El carácter general se encaminó hacia un orden simétricopautado por el eje horizontal o vertical, en el que la textura y el gesto espon-táneo fueron cediendo al color plano y a ciertos pasajes de claroscuro, trata-

miento favorecido por la incorporación de las pinturas acrílicas. Sin embargo,es interesante observar que en ese momento, al llevar esas interpretacionesal muro, tampoco desdeñó las texturas y relieves, según quedó reflejado enel uso de la madera y el acero inoxidable en las obras emplazadas en el Aero-puerto Internacional “Ministro Pistarini”, en Ezeiza, ni el cemento policroma-do, las venecitas e, inclusive, aplicaciones de algunos otros materiales comofragmentos de espejos.

La centralidad conferida al espacio mediante el empleo de la perspectiva yel tratamiento del color –gestual, extendido o con vibraciones– le permitieronsumar una simbología prehispánica que admitió distintos grados de repre-sentación e inscribió a esta serie tanto en la vertiente abstracta como en lafigurativa. Algunos autores han señalado pasajes desde un período telúrico auno extemporal, y desde el silencio de pampa blanca al carácter que tomó, en1975, la etapa mexicana,33 poblada por una misteriosa figuración. El mismoPérez Celis ha diferenciado tres momentos en la interpretación de su paisajeargentino: la telúrica, la cósmica y la de la luz.

Tras su primer viaje a Caracas y a la Ciudad de México, el contacto con

los restos de las culturas mesoamericanas provocó el ingreso en un nuevouniverso simbólico que combinaba figuras de los códices nahuas con reptiles,pájaros de colorido plumaje y raras especies. Asomando entre las formas abs-tractas de esas composiciones equilibradas mediante simetrías axiales, esaparticular mitología anunciaba los destinos que esperaban al Hombre Nuevoen la experiencia americana, tal como escribió Guillermo Nazar a partir de lapintura de 1975 América: la elección del despertar :

La manifestación activa de esa egoencia es el pájaro que asciende hacialas estrellas. Representa el nuevo destino del Hombre Nuevo, proyec-tado al futuro, al cosmos y, por el cual, de pronto, nos sentimos íntima-mente ligados. Nos hace comprender que el Hombre es el centro dela revolución más trascendental de nuestra época. Es el destino de los

Hombres Libres.34

Antes de finalizar la década, la luz caribeña volvió a atraerlo cuando deci-dió instalarse en las Colinas de Bello Monte, desde donde divisaba el vallecaraqueño y el monte Ávila. La historia del arte ha reconocido a los paisajes

blancos de Armando Reverón como una de las más auténticas y universalesmanifestaciones de la pintura venezolana. La claridad de ese ambiente y elparticular tratamiento que, en los años 20 y 30, le dio a la forma y la materia,lo convirtió en un emblema de la pintura moderna latinoamericana. Esa mis-ma luminosidad también impactó en Pérez Celis, quien expresó:

En este período mi pintura sufre un cambio que se derivó principalmen-

te del color, la luz del Caribe y las texturas.35



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La explosión demográfica provocada por el ritmo de las explotaciones delpetróleo en el territorio venezolano no solo había transformado la densidadpoblacional de algunas de sus ciudades, sino que también había provocadoun desarrollo urbano caótico. Caracas, cuya proximidad a la cadena cordillera-na obligaba a concentrar las edificaciones en la franja costera, había crecidoininterrumpidamente desde los años 40. En el marco del desarrollo econó-mico, surgieron proyectos arquitectónicos de vanguardia que, como en elcaso de las torres diseñadas por Raúl Villanueva para el complejo El Silencio,contribuyeron a dibujar el perfil moderno de la metrópolis caribeña.

En 1977, Pérez Celis encontró en este entorno una fuerte presencia de lavertical y, tal como manifestó en reiteradas ocasiones, no solo se sintió in-merso en una geografía en la que el horizonte tendía a desdibujarse, sino quepercibió el movimiento ascensional de esas construcciones. Además, consi-

deraba que en América Latina coexistían tres ramas con cierta concentraciónregional: los euroamericanos (en Uruguay, Argentina y Chile), los indoameri-canos (en la mayor parte de América del Sur) y los afroamericanos (en Brasil yel Caribe). Observaba que en el ambiente caraqueño se repartía la poblaciónentre blancos, negros e indios; hecho que, por un lado, abría las variantes ensus tradiciones, religiosidad, vínculos ancestrales y, por otro, le permitía com-prender que era preciso evitar que su testimonio continental se convirtiera enun pintoresquismo tropicalista.36

En la presentación que Roberto Montero Castro escribió para la gran expo-sición que se realizó en 1978 en el Museo de Bellas Artes de Caracas, señalóque había conversado mucho sobre estas ideas con Pérez Celis. En rigor,Roberto consideraba que el mestizo –producto de esas tres líneas– había exi-gido la independencia pero había terminado avergonzándose de la negritud ydel indigenismo e imitando al europeo; sin embargo, como entendía que esemestizaje era un proceso, completó su pensamiento afirmando:

Numerosos pueblos europeos, españoles, italianos, portugueses, alema-

nes, eslavos, siguen viniendo a América. Aquí se quedan y aquí nacensus hijos. Es el caso de Pérez Celis. Estoy seguro de que al principio sesintió europeo. Es fácil tener esa convicción en Buenos Aires. ¿Cómoocurrió ese proceso por el cual Pérez Celis descubrió que ser americanoes otra cosa, que implica otros contenidos? La identidad es un proyecto:seremos lo que queramos ser. En un momento de su vida, muy precoz,Pérez Celis eligió ser americano. Su obra de pintor es una búsqueda de

Al dios desconocido, 1978, Colección Museo de Arte Contemporáneo Latinoamericano de La Plata



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sí mismo. A fin de cuentas, en una tierra de invenciones como América,una invención ella misma, aún hay muchas cosas ocultas por descubrir.Y en esta aventura, nuestra identidad la estamos inventando nosotrosmismos.37

Montero Castro encontró que tanto en el trabajo de Pérez Celis comoen el de Oswaldo Vigas chocaban la razón y la intuición, debido a que la ex-periencia americana permanentemente contradice las verdades aprendidasmediante la educación europea. Pero también apuntó que “los mapas borransus fronteras todas las mañanas”, con lo cual América se transforma en “unmodelo para armar que siempre está cambiando sus planos”.38 En efecto, afinales de los 70, Pérez Celis era uno de los artistas latinoamericanos quepodía expresar su linaje americano desde el lugar donde se encontrara y,

en consecuencia, cuando sintió que el peregrinaje no terminaría en Caracas,emprendió una nueva etapa de su aventura instalándose en París, donde en-contró otras formas de interpretar sus rasgos culturales.

Las recorridas por los museos franceses de los primeros tiempos le des-

pertaron el atractivo de los dorados a la hoja de las obras bizantinas y le sir-vieron para avanzar con sus planteos anteriores, aunque mediante quiebressucesivos. Como en las antiguas culturas europeas, el uso de metales tam-bién había tenido una función expresiva para los incas, mayas y aztecas; porlo tanto, Pérez Celis comprendió que, lejos de apelar al folklorismo, en suintento por descifrar las raíces americanas podía aludir a la plata del Perú y eloro de Colombia en el marco de una pintura de alcances universales.39 Si lostrabajos realizados en Venezuela habían retomado la textura y la gestualidad



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del informalismo en el tratamiento de la superficie, en el nivel compositivosus obras habían tendido hacia una estructuración de base constructiva. En laescena parisina trató de eludir todo elemento decorativo, mientras continuó lalínea de una geometría blanda en la que fueron surgiendo formas escalonadasy zigzagueantes, que dinamizaron la composición.

El campo artístico parisino, ciudad faro en la que los artistas latinoameri-canos habían logrado un espacio destacado en los años sesenta, no ofreciódificultades para la obra de Pérez Celis. Pronto accedió al Grand Prix Interna- tonal d’Art Contemporain de Monte-Carlo y participó en diferentes actividadesgrupales, como Regard sur la peinture sud-américaine contemporaine , quereunió su obra con la de Ernesto Deira, Luis Felipe Noé, Jaime Azocar y Nel-son Blanco. Además de tomar a su cargo la interpretación visual del cuentode Luisa Mercedes Levinson El pesador del tiempo –publicado con prólogode Jean Cassou–, para finales de 1981 presentó dos muestras: pinturas en la galería Bellechasse y obra gráfica en la galería Caractères. La crítica localtendió a leer las piezas realizadas en los dos talleres que alquiló frente al Senacomo reflexiones intimistas.

A partir de una invitación para realizar una exposición, en 1983 viajó a losEstados Unidos y, pronto, tomó la decisión de trasladarse de París a Nueva York.Sin duda el pasaje de una a otra capital del arte abrió interrogantes sobre los cua-les Pérez Celis siempre respondió que había tomado esa resolución guiado porsus necesidades de creación, antes que debido a un plan previamente trazado.Además, siempre manifestó que cuando comenzó a sentir que en París estabaviviendo en un gran anticuario, prefirió asumir el riesgo de instalarse en NuevaYork, donde, según sus palabras, “palpitaba con particular incidencia cierta fuerzaenergética del continente americano, que se irradia desde la Patagonia hasta Ca-nadá”.40 Instalado en un taller de generosas dimensiones, realizó una producciónplástica que retomó el empaste, aunque también permitió la aparición de chorrea-duras, mientras optó por imprimir una nueva vitalidad al gesto.

El itinerario trazado hasta aquí, antes que exhaustivo, ha optado por seguir

algunas de las rutas en las que Pérez Celis priorizó la huella americana. Rutas que,por otra parte, acompañaron el devenir del concepto de “lo americano”, así comolos debates acerca de la identidad que ocuparon a escritores, artistas y pensado-res en los últimos cincuenta años. Fueron tiempos en los que, desde la exigenciade estereotipos hasta la construcción de un lenguaje universal, la noción de iden-tidad fue transformando las posturas sustancialistas para ser pensada como unaconstrucción. En rigor, esa “identidad-constructo” no era otra que aquella sobre



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la que Pérez Celis había conversado con Montero Castro, cuando el venezolanoadvertía que la identidad era un proyecto y América un “modelo para armar”.41 Lamundialización del capital y las comunicaciones globales de finales del siglo XX–cuyos mapeos tienden a desdibujar las fronteras– continuaron (y aun continúan)poniendo en jaque los modelos para pensar “lo americano”, la identidad y, endefinitiva, para pensarnos como latinoamericanos. Sin embargo, al comenzar elnuevo siglo el “testimonio” plástico de este artista aún no había perdido la trazadel ideario transformador de un Hombre Nuevo que, en los años 60, había sidopensado mirando hacia las culturas indoamericanas.

El testimonio plástico

Pérez Celis, testimonio americano es una exposición que rastrea la impronta

americana que este artista imprimió en su vocabulario plástico. Aunque esosrasgos comenzaron a percibirse en los primeros años 60, nuestro guión cu-ratorial se apoya en el momento geométrico porque inscribe su trabajo enla producción de la oleada de jóvenes que intentó renovar la abstracción definales de los años 50, cuando, atraídos por las teorías de la percepción y lapsicología de la forma que circulaban en la época, sintieron el impacto provo-cado por la exposición de Victor Vasarely, presentada en 1958 por el MuseoNacional de Bellas Artes.

El interés de este período de su obra –breve pero fecundo– reside preci-samente en el tratamiento peculiar que recibió la serie, porque Pérez Celisexploró la geometría y rápidamente fue mutando hacia composiciones conformas de bordes precisos pintadas con colores planos que, sin embargo,tendieron a abandonar las figuras geométricas puras. El resultado fue unconjunto de obras abstractas que tomó distancia no solo de la tradición delarte concreto de los años 40, sino también de la vía cinética que se abriría enlos 60. El carácter libre y lúdico que rige las conformaciones de esta primeraépoca esconde la traza del sujeto tras el tratamiento plano del color.

Algunas obras de la serie se apoyan en la reiteración de un módulo dentrode una trama libre, como Movimiento en varias dimensiones y Pez mágico .Esta idea de serialización –que fue la base de las experiencias ópticas– pron-to quedó confinada a la repetición de líneas, algunos motivos o fragmentosde formas. Como marca epocal, los títulos se refieren a la geometría, la di-námica, el movimiento y la presencia de la tecnología (Máquina ). Nuestroconjunto incluye una obra que llamó Montevideo 59 , testimonio de esta serie

comenzada en Buenos Aires que continuó en su estancia uruguaya y que –aunque no fue la última pintura de este período– cierra simbólicamente estenúcleo de la exposición, porque al regresar a su ciudad natal se produjo elprimer cambio significativo de su poética.

Según analizamos, el momento inaugural y de renovación que toda gene-ración ansía para sí, en el círculo de afinidades de Pérez Celis estaba orien-tado hacia los ideales del Hombre Nuevo, que implicaban un acercamien-to a las raíces americanas. El conjunto de obras formado por Rey América ,Sara , El rey , Composición, Pez América , Sin título y Exaltación correspondeal momento en el cual la simbología prehispánica se manifiesta mediantesignos inventados y empastes. Tempranamente, Squirru empleó el término“intranauta” para aludir al trabajo de introspección con el que logró revisi-tar la herencia arcaica desde la intuición y lo sensible. No se trataba, por lo

tanto, de representaciones extrapictóricas o imitaciones de los vestigios deaquellas culturas, sino de una interpretación de su carácter complementadapor los títulos que la evocaban. Las cajas Signo I y Signo II –también tituladasIndoamérica y De la serie Indoamérica III , respectivamente– muestran lostrabajos en los que introdujo el quiebre de la bidimensionalidad del cuadrotradicional, mediante el ensamblado de maderas de diferentes espesores.

Desde mediados de los 60 la obra de Pérez Celis tuvo un vínculo impor-tante con la literatura, tal como reflejan las series de obras grabadas queacompañaron Anatonia , de Carón, y Pampa roja , de Demaría. Sus incursionesen el paisaje de la pampa húmeda dieron lugar a las visiones del horizonte,las puestas de sol, los amaneceres y la perspectiva de los caminos con cier-tas alusiones a las raíces culturales, como Pampa roja , visión de los camposcubiertos por la morenita –o “alfalfa de los pobres” como la ha llamado De-maría– que enrojece en el otoño.

Sin duda, la serie de la pampa blanca logró una interpretación singular. Enla veintena de trabajos exhibidos en 1970 en la galería Integra, entre los quepresentó Misión: la propia construcción-transformación, puso en el centro

el sol americano y su luminosidad, que, tal como escribió Squirru en la pre-sentación, no solo partía del círculo, sino que admitía la belleza del acentooceánico y la expansión de sus rayos.42 La crítica reconoció que en 1969Consagración a la luz y a la vida –tela premiada en el LVIII Salón Nacional deArtes Plásticas Argentino– fue un cuadro clave que “puso en evidencia unnuevo proceso en el tratamiento de la luz”, así como la adopción de una paletaatemperada por el uso de los blancos.43



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Entre las grandes obras del período caraqueño en el que prima la vertical,nuestro recorrido incluye el políptico De las antiguas leyes (también llamadoLos testigos). Además de la decidida vuelta a la gestualidad y al valor pictóricode la superficie, muchos de los trabajos de esta época aluden a las formas dedevoción presentes en esa cultura, como se percibe en las referencias a deida-des ancestrales en los títulos de algunas pinturas, como Al dios desconocido

o de las cincografías: La llamada de los dioses o Recuerdo de antepasados,series grabadas a partir de los motivos desarrollados en otras tantas telas.

El nuevo giro parisino transformó el tratamiento de la superficie y la for-ma, sea por la vuelta al trabajo con el óleo y la incorporación de materialesaptos para generar texturas de diferente grano y calidad, sea por el trabajosobre planos entrecruzados y formas intrincadas que progresivamente hicie-ron vibrar la relación entre la figura y el fondo, otorgando un nuevo carácter asu producción. Tanto en la forma dinámica de Vuelo al sol como en la secuen-

cia de Memoria de la Tierra , A cada cual su tiniebla , y Cultivar entre muros ,las texturas, los tonos bajos y los contrastes luminosos dan cierto carácterespectral, mientras que las líneas de fuga y los planos interpuestos entre síparecen esconder misterios ancestrales. Los trabajos sobre papel: Recorrerel tiempo , Concentración del espacio y Sin título , así como las serigrafíasrealizadas a partir de las obras de la época, ofrecen otros acercamientos a la

misma sensibilidad expresada en diferentes soportes y técnicas.Desde mediados de los 80, el color, la materia, la pincelada suelta y los

chorreados guiaron la producción neoyorquina. Su amplio loft de Manhattanle permitió trabajar sobre grandes formatos, así como la posibilidad de in-corporar soportes no tradicionales. En las obras que integran este núcleose destaca el tratamiento de la materia: espontáneo, en Dar movimiento , Atravesando formas y Los inmortales ; en El encuentro , con sutiles vetas quetraen a la superficie las capas inferiores de pintura; con empastes, en Enten-



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dimiento ; en Zona registrada y Nuestra sangre , con una densa pigmentación;y con chorreados, en el caso de En el país de los hombres sencillos . Muchasde estas obras, así como la escultura Ídolos rechazados , fueron concebidas apartir del ensamblado de maderas y materiales de desecho que, por un lado,le permitieron quebrar la ortogonalidad del bastidor y, por otro, eludieron losformatos tradicionales. Estas piezas, entonces, toman el lugar de objetos in-quietantes que remiten al tiempo de la historia, porque su propia materialidad

tiene grabada la memoria de otros usos.Con un lenguaje plástico afirmado en sus convicciones, la producción

de Pérez Celis se extendió hasta 2007, con diferentes series temáticas ytécnicas realizadas no solo en Buenos Aires, sino también en su residenciaen Miami. Tempranamente había sumado el grabado, la ilustración y el artemural a sus trabajos en pintura y escultura. Estas prácticas, que le permitíanexpandir la circulación de su obra, no solo no cesaron a través del tiempo,sino que se fueron diversificando. En este sentido, en las últimas décadas

también reforzó su huella en el entorno urbano mediante la instalación deesculturas y murales, como Presencia transformadora , instalada en 1989 enel Patio de la Madera de Rosario, y Ángel protector , en 1998, en el edificioFortabat de Buenos Aires, para mencionar solo algunas de las emplazadas enla Argentina. Entre los murales encarados tanto en el exterior –Continentesen movimiento , realizado en Japón– como en la Argentina, se destacan es-pecialmente los concebidos para las universidades de Morón y de Belgrano,

así como los trabajos efectuados en la fachada del Estadio de Boca Juniors;El gran libro , hoy en la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de laUniversidad de Buenos Aires, o la pintura exterior del Central Park.

En consecuencia, además de rastrear la traza de raigambre americana enun conjunto de obras significativas, nuestro guión curatorial ha decidido nodescuidar la importancia de sus trabajos ligados a la ilustración, el diseño deproductos o la publicidad, la realización de murales y las obras emplazadasen el espacio urbano y, aprovechando las posibilidad de la imagen digital,



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presentar algunas de estas formas de intervención sobre la realidad, en lasque el público podrá identificar la presencia de las creaciones de Pérez Celisen el imaginario cotidiano.

Aun cuando se lo puede reconocer como un artista abstracto, el discursoplástico de Pérez Celis no optó exclusivamente por la abstracción: la meraforma de un círculo pudo simbolizar a la deidad solar del panteón incaico,representar al Sol de los cielos pampeanos o transformarse en una esferaperfecta para centrar la mirada del ojo de América. Un estudio diacrónico desus proyectos permite observar que muchos motivos iconográficos fueroninterpretados en distintos soportes, mientras que en las diferentes etapasse destaca la presencia de imágenes primordiales que se fueron nutriendodel paisaje y la iconografía indoamericana. El último núcleo de la exposiciónreúne obras que desde las mitologías remotas hasta el trasfondo espiritual

de hoy, intentan redibujar el rastro de la experiencia americana. Tanto en Pre- sencia Maya - Mariposa y De fuentes sagradas. Mensaje como en La presen-

Escuela del Sur , n.1, Montevideo, octubre de 1958. Leopoldo Presas, 1954,El Hombre Nuevo , óleo s/tela, 83 x 58 cmFoto: Gentileza Galería Zurbarán

cia , La oración, Místico , Cono Sur y Ave fénix vibra el espíritu mágico de losrituales de todos los tiempos.

A partir de esta selección de obras, entonces, hemos optado por subrayarese carácter americano, y elegimos titular Pérez Celis. Testimonio americano ,porque también nos permite homenajear a su mentor, quien había titulado asíuno de los libros que escribió en los años 70.44 En este sentido, nuestro guiónno solo aspira a testimoniar el interés por lo americano y las variantes que fueencontrando para expresarlo, sino también la convicción que mantuvo a travésdel tiempo, tal como se observa en la pintura Sur-Norte , que seleccionamospara finalizar el recorrido, obra que funde las coordenadas de la Cruz del Sur–atributo del Hombre Nuevo predicado por Squirru– y la proclama torresgarcia-na Nuestro Norte es el Sur , gesto de afirmación identitaria que, retomado porPérez Celis en el siglo XXI, pone de manifiesto la vitalidad de aquellas ideas.



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Notas

1 Agradezco las entrevistas concedidas por Alfredo Plank, César Sondereguer, Fernando Demaría,Hugo Rodríguez y Guillermo Nazar para la escritura de este texto, así como los materiales delarchivo de Pérez Celis proporcionados por su familia, la consulta a l os archivos de los integrantesdel Grupo 8 de Montevideo y a los repositorios públicos de la Fundación Espigas, el Museo Nacio-nal de Bellas Artes y el Centro de Documentación del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires.Un reconocimiento especial para la atenta lectura de este texto y los interesantes comentariosde los amigos de Pérez Celis: Fernando Demaría y Rubén Tizziani, así como los aportes de miscolegas Sandra Szir y José Emilio Burucúa.2 Squirru, Rafael, Pérez Celis, testimonio americano , Buenos Aires, Taller Libre, 1978.3 Según el testimonio de Graciela Cuello -quien junto a su hermano Rosendo fuera amiga dejuventud de Celis- el mural se l lamó Los soñadores y fue pintado al aceite sobre un muro de lacasa ubicada en la calle Timoteo Gordillo que ellos habitaban, donde aún se encuentra. Agradezcoa Daniela Canop Mazar el contacto con Graciela, su madre.4 Estos encargos se prolongaron alrededor de dos años, según ha referido Plank en la entrevistarealizada por la autora del 6 de mayo de 2015.5 Squirru, Rafael, Pérez Celis , Buenos Aires, Ediciones del Hombre Nuevo, 1973, p. 9.6 Demaría es el autor de Tratado del sentimiento , Buenos Aires, Ediciones del Hombre Nuevo, 1970.7 Declaración de Fernando Demaría en la entrevista realizada por la autora 6 de junio de 2015.8 Maturo, Graciela, Leopoldo Marechal, el camino de la belleza , Buenos Aires, Biblos, 1999, pp. 13y 126. Sobre la relación de Pérez Celis con la obra de Marechal, véase Burucúa, José E., “PérezCelis, un anarquismo espiritualista.9 Aquella noción tampoco estaba exenta de cierto contenido esotérico según se desprende de

las visiones del hombre nuevo cantadas en un poema de Demaría dedicado a la sacerdotisa Rosade la Torre (Pampa Roja , Buenos Aires, Ediciones del Hombre Nuevo, 1973, p.145-6), quien pro-fetizaba el despertar de América y la unión de sus países, el renacimiento de los hijos del Sol yel canto del quetzal –ave venerada por las culturas indoamericanas– en la mano de Rosa de Lima(Rosita de la Torre, Netsa’ir , Buenos Aires, Kier, 1963, pp. 249-258).10 Hugo Vezzetti ha trazado una genealogía del hombre nuevo, desde sus orígenes cristianoshasta las variantes en las tradiciones políticas modernas, en Vezzetti, Hugo, Sobre la violenciarevolucionaria. Memorias y olvidos , Buenos Aires, Siglo XXI, 20 09, p. 139.11 Gómez Sicre, José, “Nota editorial”, Boletín de Artes Visuales , nº 5, Departamento de AsuntosCulturales, Unión Panamericana, Washington, p. 3, citado en Giunta, Andrea (consultado en mayode 2015 en: www.esteticas.unam.mx/edartedal/PDF/Oaxaca/.../giunta_oaxaca96.pdf). Giunta seña-

Cristina Rossi es Doctora en Historia y Teoría del Arte (UBA). Profesora e Investigadorade Arte Latinoamericano de la UBA y UNTREF. Coordina el equipo de investigación delproyecto Modernity, Avant-Garde and Neo-Avant-Gardes in the Americas: Journals andarchives at Espigas Foundation (1920s- 1950s), de Universidad Nacional de San Martín-Fundación Espigas apoyado por la Getty Foundation.

Es autora de Jóvenes y modernos de los años 50 (2012) y de Raúl Mazzoni, Experienciasbi-espaciales (2015), co-autora de Luis Gowland Moreno. Una constante búsqueda delo expresivo (2014) y de La abstracción en la argentina siglos XX y XXI (2011), autoray compiladora de Víctor Magariños D. Presencias reales (2011) y de Antonio Berni.Lecturas en tiempo presente (2010) entre sus últimas publicaciones. Participa en librosy revistas nacionales e internacionales. Es miembro del CAIA y de la AACA-AICA. Sedesempeña como curadora independiente.

la que esta política valoraba “el lenguaje internacional como carta de legitimación que, correlativa-mente, debía eliminar todos los regionalismos, localismos y, por supuesto, todo justificativo quepasara por la necesidad de una narratividad vinculada a lo ideológico o a lo pol ítico”.12 Cf. “Un hombre nuevo y un Museo nuevo”, El País , Montevideo, 28 de enero de 1959. Estasostenida defensa de los valores criollos a través del poema gauchesco Martín Fierro fue corona-da por la publicación de la versión bilingüe traducida por Catherine Ward e ilustrada por AntonioBerni, durante su gestión en la OEA.13 Se trata de la obra de Fernán Félix de Amador publicada en 1941 bajo ese título.14 Belloni era un primo de Squirru, casado con Lili Massaferro. En 1971 Manolín, hijo de ambos ymilitante de las Fuerzas Armadas Peronistas, fue asesinado por la poli cía de Tigre. Tras su muer-te, su madre –inclinada hacia los ideales del Hombre Nuevo guevarista– llegó a ser la secretariageneral de la rama femenina del Movimiento Peronista Montonero.15 Ediciones El Hombre Nuevo publicó textos de Demaría, Adela Leloir, Leopoldo Marechal yAlberto Hidalgo, entre otros, y se incluyeron ilustraciones del mismo entorno de amistades: Ken-neth Kemble, Mabel Rubli, Carlos Páez Vilaró, Sergio Moyano, Víctor Marquese, Pérez Celis yotros. También publicaron una colección monográfica dirigida por la galería Rubbers, bajo el título

Artistas rioplatenses de nuestro tiempo .16 Así lo expresaron en “La originalidad en la pintura. Respuesta del TTG a los críticos”, Escuela delSur , nº 2, Montevideo, junio de 1959.17 La exposición se presentó en el marco de las actividades culturales que acompañaron los IIIJuegos Panamericanos.18 Véase “Relaciones de los artistas entre ellos: síntesis de las artes plásticas” y “Arte vinculado ala industri a”, Grupo 8. Boletín de Artes Visuales , Montevideo, julio de 1960, pp. 4-6.19 Catálogo de Movimiento Arte no-figurativo , Subte Municipal, Montevideo, abril de 1960.20 Hugo Rodríguez presentó relieves abstractos, según ha referido en la entrevista concedida a laautora el 5 de septiembre de 2015.21 Cf. Borges, “El hombre nuevo”, s/d, Montevideo, 30-1-60 (Consul tado en el Archivo Raúl Pa -vlotsky).22 En el catálogo de junio de 1960, este grupo aparece representado por Pérez Celis y AliciaOrlando Plá [Orlandi].23 Véase Mujica Lainez, Manuel, “Pérez Cel is”, La Nación, Buenos Aires, 11 de junio de 1961, yHugo Parpagnoli, “Pérez Celis”, La Prensa , Buenos Aires, 1961.24 Williams, Raymond, Marxismo y literatura , Barcelona, Ediciones Península, 1980, pp. 150-158.25 Las dimensiones varían, según las fuentes, entre 5 x 15; 5 x 14 y 5 x 9 metros. También recibióencargos para realizar otros murales en residencias particulares y en el Banco de la Nación Argenti-na, Sucursal Formosa, que concretó en 1967 con la colaboración de Jorge Pérez y Eduardo Valencia.26 Je ne puis pas distinguer entre le sentiment que j’ai de la vie et la façon dont je le traduis .27 Nos referimos a la exposición presentada en la Asociación Estímulo de Bellas Artes por Jorge

López Anaya, Nicolás Rubió, Jorge Martín, Mario Valencia y Vera Zilzer.28 Cf. “Objetos. La búsqueda de una realidad di ferente”, s/d, Centro de Documentación del Museode Arte Moderno de Buenos Aires.29 Sobre la intervención plástica de Pérez Celis en éstas y otras publicaciones, véase: Szir, Sandra,“Pérez Celis y los libros ilustrados. Reproducción de imágenes y multiplicación de efectos”.30 Leopoldo Marechal a Rafael Squirru, Buenos Aires, 18 de marzo de 1964, citado en Al maestrocon cariño. Homenaje a Rafael Squirru , Buenos Aires, Galería Zurbarán, 23-3 al 6-4/05, p. 28. En1975 Pérez Celis pintó Ascenso y descenso indoamericano. Homenaje a Leopoldo Marechal .31 Entrevista a Demaría, cit.32 Ver Lincoln Presno . Aventura épica , Montevideo, Galería de las Misiones/Sammer Gallery,2006, p. 20.



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33 Gené, Enrique Horacio, Meditación en torno de Pérez Celis. Un protagonista , Buenos Aires,Ediciones de Arte Gaglianone, 1988.34 Nazar, Guillermo, [“América: la elección del despertar”], en A través de la pintura. Pérez Celis ,Buenos Aires, Ediciones Taller Libre, 1976, p. 38.35 Cf. Yasmin Monsalve Reaño, “El arte no necesi ta estil o”, El Diario , Caracas, 9-9-88.36 Ver “Pérez Celis y su arte de raigambre americana”, La Nación, Buenos Aires, 15 de abril de 1978.37 Montero Castro, Roberto, “América: la invención del p intor”, en Pérez Celis, Pinturas (cat. exp.),Museo de Bellas Artes, Caracas, 1978.38 Ibidem.39 Al respecto Celis señaló: “Lo importante es que no descuido la esencia de América y ello sereproduce aún más al emplear sus elementos primitivos, como son el oro y la plata, metales queprovienen de la época precolombina y que admiré en el Louvre, a través del arte bizant ino”, Cf.:“Pérez Celis : conjunción de América con arte bizantino”, Los Andes , Mendoza, 1-4-80.40 Bandin Ron, César, “Pérez Celis. Pinta r para vender o vender lo que se pint a”, Página/12 , Bue-nos Aires, agosto de 1985.41 Sobre el tema: Amigo, Roberto y Alberto Petrina (Cur.), La Hora Americana 1910-1950 , (cat. exp.),

Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires, 2014; Traba, Marta, Dos décadas vulnerables en lasartes plásticas latinoamericanas, 50/70 , México, Siglo XXI, 1973; Bayón, Damián (Org.), El artistalatinoamericano y su identidad , Caracas, Monte Ávila, Editores, 1977; Castro-Gómez, Santiago yEduardo Mendieta (Coord.), Teorías sin disciplina. Latinoamericanismo, poscolonialidad y globali- zación en debate , México, University of San Francisco, 1998; Mosquera, Gerardo (Coord.), Adiósidentidad: arte y cultura desde América Latina , Badajoz, Museo Extremeño e Iberoamericano deArte Contemporáneo, 2001; Escobar, Ticio, “La identidad en los tiempos globales”, en El arte fuerade sí , Asunción del Paraguay, CAV/Museo del Barro, Fondec, 2004, pp. 61-87, y Ramírez, Mari Car-men et al (Ed.), Resistir a las categorías: ¿Latinoamericano y/o latino? , Yale University Press, NewHaven, 2012, entre muchos otros.42 Squirru, Rafael, “Sol pa ra un paisaje americano”, en Paisajes de Luz a la luz eterna , BuenosAires, Centro de Arte Integra, 9-30/04.43 Ver “Notas de arte: Pérez Cel is”, La Razón, Buenos Aires, 18 de abril de 1970.44 Rafael Squirru, Pérez Celis, testimonio americano , Buenos Aires, Taller Libre, 1978.



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Pérez Celis,un anarquismo espiritualistaJOSÉ EMILIO BURUCÚA(ANBA, UNSAM)

Toda creación es un total olvido de sí mismo, una completa atención, sinpensamientos. Sólo la fuerza que no está en el tiempo resiste al tiempo. Las

ideas, los conceptos, las teorías son fácilmente aniquiladas por el tiempo. Ypartir sólo de una idea es una fragmentación de nosotros mismos. Sólo conla totalidad de nuestro ser podemos recibir y transmitir y, en ese estado de

libertad, comunicarnos de un modo nuevo.Pérez Celis. París, agosto de 1982.

Dos suelen ser las actividades de un historiador del arte en el momentode aproximarse a la comprensión de un artista: 1) buscar un puñado de hilosconductores (cuantos menos sean, mejor para exponerlos), que permitantrazar el itinerario estético e histórico de su obra; 2) situar al autor de esecorpus y de las prácticas que lo produjeron en una red de otros artistas,

de comitentes, intelectuales, seres humanos comunes que conocierony apreciaron su trabajo. No quisiera presumir pero en términos de WalterBenjamin, se trata de encontrar y construir redes de personas con el objeto deextraer de ellas constelaciones de significados.1 Tanto para el primero cuantopara el segundo empeño, la fortuna crítica del pintor-escultor (en nuestro caso)nos proporciona pistas muy valiosas y el marco al cual debemos referirnos. Siacaso existen además textos, escritos u orales, publicados como testimoniosdirectos o declaraciones del artista en entrevistas, nuestra investigaciónpuede explorar rumbos mejor definidos. Por otra parte, el paso de la red sociala la constelación semántica tiene un precedente clásico, una larga historiaque se remonta a Horacio y se resume en el famoso principio Ut pictura,poesis . De modo que, si indagamos en ese vínculo o parangón, hemos detoparnos, de seguro, con hallazgos clave para nuestras intenciones. Y, luego,llegamos bien pertrechados a la cita del análisis de las opera omnia o de laparcela de ellas que elegimos.

Si bien de manera breve, expusimos el recorrido a seguir en nuestraaproximación a la obra de Pérez Celis, un artista argentino que, a pesar

de la gran popularidad de la que gozó en vida (como muy bien subrayó yexplicó Mercedes Casanegra)2 y de la fecha nada lejana de su muerte, es hoy,hasta cierto punto, un olvidado para las nuevas generaciones de plásticose historiadores de nuestro país. Pero digamos desde ahora que no sóloreconocemos los esfuerzos críticos de quienes nos precedieron en la empresaresumida en la frase inicial de este texto, sino que aceptamos como válidosla mayor parte de sus juicios, los asumimos en nuestra propia interpretación ydecidimos centrarnos, sobre todo, en la pintura tardía de Pérez Celis. Porqueel período ha sido poco frecuentado y creemos que en él se hizo evidente una



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buena cifra para comprender los propósitos y los ideales del artista a lo largode su vida. Refirámonos entonces a algunas notas esenciales que tomamosde la tradición crítica, cuyas citas, muy breves, transcribiremos en la vecindaddel parágrafo correspondiente de nuestro texto.

I

Rafael Squirru fue el teórico que más y antes que nadie, durante los años’60, fijó su atención en lo que Celis hacía. Subrayaba que era el suyo un artenuevo, paradójicamente salido de un pantano primitivo y apuntado hacia lamanifestación de un ser colectivo americano. En 1964, Squirru se entusiasmófrente al gesto de autenticidad de Pérez que consistía en desdeñar el viajeacostumbrado a París y elegir una excursión larga al Perú profundo. Manuel

Mujica Lainez se plegaba a la opinión del entusiasta Rafael y, a propósitode una exposición, organizada por la galería Rubbers en junio de 1961,escribía en el diario La Nación: “El joven pintor nos parece el dueño de unapersonalidad inquieta que ha armonizado dos influencias distintas: por un ladola de Vasarely y la de los quebrados eslabones de Capogrossi, y por el otroel telúrico mensaje que viene del fondo de la vieja América y que se trasuntaen sus tejidos y en sus cerámicas. Estos elementos diversos (aunque nocontradictorios, por opuesto que sea su origen) se conjugan en los óleosviolentos, vibrantes de Pérez Celis.”3 En 1965, en ocasión de la muestra dela galería Bonino donde fueron reunidas piezas de Luis Wells y de Celis, nada menos que Jorge Romero Brest resaltaba en el catálogo la aceptacióndel pasado por parte de ambos jóvenes, subsumida al mismo tiempo en unasintaxis radicalmente moderna que enderezaba “sus ojos al futuro”. De talsuerte, el uno y el otro cultivaban una modernidad que rehusaba realizar “elholocausto de la ‘obra’ en el altar del ‘tiempo’”.4 He aquí un hilo fundamental:el del rescate del paisaje, de la semiótica y del espíritu americanos, de lotelúrico, según nos complacíamos en resumir el llamado cultural de la tierra

en los ’60. Ese factor no hizo sino agrandarse a posteriori , convertirse, conrazón, en un topos obligatorio cada vez que se discurrió acerca de Celis, desdeel comentario redactado por Roger Bonillot en 1980, Pérez Celis à Paris ,5 o el bello libro que Gaston Diehl escribió un año después sobre el artista, 6 hasta la síntesis estupenda que María José Herrera compuso, en 2001, parael catálogo de la retrospectiva Tributos , expuesta en el Palais de Glace enBuenos Aires, donde echó mano de expresiones como “precolombino criollo”y pa isajismo “criollo”.7

Bonillot, Roger, Pérez Celis en París , 1980 :

Sin representar lo visible, la pintura de Pérez Celis simboliza y resume,fundamental, esencialmente, la realidad más profunda de AméricaLatina, la inmensidad de la Pampa como las desmesura de los cielos, elbrotar de las culturas y el esbozo del mundo de mañana, que no podráser creado sino en esas tierras nuevas donde tantas raíces inmemoriales

viven o renacen armoniosamente.8

Diehl, Gaston, Pérez Celis , 1981:

Aquí le tenemos, de pronto liberado de lo que tanto tiempo le sujetó:aquel geometrismo del que, constantemente, se inspiraron otros muchosantes que él, desde Demarco hasta Le Parc, heredado, por lo que dice,

de la honda impresión que le causó en Buenos Aires en 1958, la primeraexposición de Vasarely. Durante ese largo período de experimentaciónno dejó, por su parte, de aplicarlo óptimamente, de dominar el conceptopara ajustarlo a sus propias finalidades, de modelarlo con perspectivasconvergentes, con círculos concéntricos, espirales típicas, sin renunciara las graduaciones en el color, a la disciplina formal. Pero hoy día todoesto salta en pedazos, estalla, se quebranta en láminas o en ángulosacerados, en dientes afilados que muerden las vertiginosas cumbresperdidas entre nubes, como la famosa ‘ciudad perdida’ cuyo nombreretoma para título de uno de sus cuadros. […] Sin embargo, siguemanifestando un ansia de espacio tan fuerte como la de aquella épocaespléndida en que evocaba una pampa que parecía incitarle a uno afijar la mirada en la copa inagotable del cielo estrellado, a plantearse elsentido de lo universal.

Herrera, María José, Encontrar los orígenes , 2001:

[…] la obra de Pérez Celis amalgama una visión muy personal cuyorepertorio no son sólo los símbolos del arte precolombino, sino lasmutaciones que éstos han sufrido al traspasarse a las artes popularescontemporáneas. En obras como El sol nuestro o El templo, ambasde 1963, la paleta se aleja de los tonos terrosos que caracterizan laalfarería para vibrar con los exaltados contrastes de los textiles norteñosactuales. También se sirve de un repertorio que excede el celo delantropólogo para citar libremente el arte de América, antiguo y actual,desde México hasta la Patagonia. En este aggiornamento de signos ysímbolos ancestrales […], los códigos de las últimas tendencias tampocoestán ausentes. Sus coloridos paisajes posteriores y los tapices […]

evidencian el espíritu de los tiempos en sus resonancias pop .



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Por otra parte, los mismos Bonillot, Diehl, Jean Cassou en el prólogoredactado para la edición de un cuento de Luisa Mercedes Levinson conilustraciones de Celis9 y, sobre todo, Enrique Horacio Gené, en la biografíaescrita en 1988 y publicada como una “meditación en torno de” nuestropersonaje,10 insistieron en que la familiaridad con la abstracción europea,con la geometría de Vasarely y el informalismo internacional introdujo en elmundo de Celis las variables de las modernidades plásticas. Así se sucedieronlas oscilaciones y las inseminaciones mutuas entre los signos desarrolladosa partir de la tradición prehispánica y los patrones compositivos, el uso deformas puras o el esplendor de los materiales, propuestos por las vanguardiassucesivas del arte global. De lo que se desprende el segundo hilo conductor:la búsqueda de cierta universalidad peculiar, encarnada en las matricesperceptivas y estéticas de la América antigua. Precisamente sobre tal

convergencia, manifiesta en los murales de los ’60, en la pintura de caballetey las permanentes intervenciones disruptivas de Pérez Celis en el campo deldiseño gráfico, ha situado Casanegra las razones del éxito popular del artista,al mismo tiempo que acuñó la noción de “pop autóctono” para marcar unrasgo nuclear de su estilo y sus metamorfosis.11

Cassou, Jean, Prólogo a Levinson y Pérez Celis , 1980:

Con ese sentimiento de nacer, de re-nacimiento es con lo que hemosde identificarnos si queremos entender el lenguaje abstracto de PérezCelis, que no es el lenguaje de nuestros abstractos europeos modernos,vieja guardia surgida después de tantas viejas vanguardias, sino unaexuberante creación primitiva, con su ardor de ímpetus y perfumes.Algunos de sus procedimientos emanan de fuentes más hondas y comomás ingenuas, es decir, más naturales. Aquellos con los que Pérez Celisincorpora elementos de oro y plata a su pasta pictórica se atienen aarcaicas relaciones entre el hombre y l os metales.12

Gené, Enrique Horacio, Meditación en torno de Pérez Celis, un protagonista ,1988:

Americana en su origen y americana hoy, enriquecida por influencias queen otros casos habrían hecho perder la brújula y lanzarse hacia el abismo.Ordenada en su aparente desorden, aquietada por un temperamentoque nunca se abandona del todo a los sentimientos. Rica en esencias,en presencias, en lenguajes comunicativos, en hallazgos y en logrosfinales, la obra de Pérez Celis delata siempre al buen dibujante, sobretodo en sus cuadros más abstractos, aparentemente más alejados

de toda resonancia realista. Ritmos, colores, masas, vectores, gritos,silencios, saturaciones, hiatos, acrílico, óleo, grafito, virutas, maderas,cartones, papeles, metales, polvo de metales, todos han sido en susmanos componentes de la ecuación con que resuelve, en cada caso, elproblema que le plantea cada obra.13

Casanegra, Mercedes, Pérez Celis y la popularidad como fenómeno , 2001:

[…] se trataría de versiones autóctonas de Pop Art . El trasfondo socio-económico-cultural de la Argentina de los años ‘60 no tenía que ver conel de las cunas del pop inglés o norteamericano. Nuestra sociedad deconsumo era aún incipiente. Pero sí estaba dado el clima para generarun lenguaje que se enlazara con el pop a través de la característica deser ‘idiomas directos’ y de tener la posibilidad de compartir los temasde la comunidad. La fachada de su casa formaba parte del barrio, y él se

había inspirado a su vez en el vecindario.

Una observación, casi inadvertida, de Osvaldo Giesso, deslizada enla presentación del catálogo de la muestra Pérez Celis, Antes y ahora , quetuvo lugar en 1985 en el Centro Cultural Ciudad de Buenos Aires (actualRecoleta),14 puso de relieve el peligro de que la obra de nuestro artista pudiera“rozar […] el dudoso terreno de lo kitsch”, debido a su apego a lo sensorial,a ese “ingrediente ineludible” que alimenta “la exigencia de ilusión que elser humano necesita imprescindiblemente para sobrevivir, desde el comienzomismo de su historia.” Muy sagaz. Pues, en los términos de Casanegra,también podríamos considerar kitsch un adjetivo naturalmente asociado a laidea de la popularidad de Pérez Celis “como fenómeno”. Por otra parte, muchotiene que ver el concepto con el instinto de supervivencia que sobreactúa, amenudo, e impone el escamoteo, el enmascaramiento del acecho perpetuo dela muerte. No rehuyamos el asunto, ya que nuestra intención es comprendery resituar objetivamente la plástica de Celis en el marco de la cultura argentinaentre los siglos XX y XXI. Rescatemos a su arte de tales sospechas mediantela compulsa con las definiciones corrientes de aquella categoría estética.Adorno se explayó sobre el Kitsch en los Minima Moralia : sistema artísticopequeño-burgués, que esconde el conflicto, estimula la huida de la realidad almismo tiempo que la falsifica, se ata a un pretérito estereotipado, adormecea las masas, les proporciona un consuelo fácil y tonto. El Kitsch implica el“desconocimiento de los contextos estéticos” y, a la vez, la pérdida desentido de todo ornamento, es el síntoma del fracaso y del colapso culturales



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en el intento fallido de construir una civilización liberadora para las masas. 15 Umberto Eco, por su lado, entiende que el Kitsch diluye los mejores impulsosdel arte, i.e., los que nos incitan a pensar, interrogarnos y transitar a travésde emociones nuevas.16 Probaremos que la pintura hecha por Pérez Celisse ubica en un horizonte de formas, colores y espacios inéditos, apunta aconmovernos e involucrarnos con libertad en una operación de autoexamen,siempre provocadora y llena de desasosiego. Es probable que, al quererextender a los más el logro de esos fines, al promover la vuelta a la vidade símbolos arcaicos, al no renunciar a la seducción de la sensibilidad ni aljuego de la esperanza, el riesgo de una caída en el mundo kitsch haya existidoalgunas veces. Lo interesante es que en el haber desafiado conscientementeese peligro y en el haber sabido sortearlo se encuentran, tal vez, los motivosdel prolongado y proteico trabajo artístico de Celis.

II

Pérez nunca esquivó la expresión sincera de cuanto pensaba de símismo, de su oficio y vocación. Declaró sin ambages, por ejemplo, que lalectura del Hombre mediocre de José Ingenieros lo había convencido de quesu camino no podría ser otro sino el del genio.17 Recordó con cariño su pasofugaz a través de las academias a la par que criticó las restricciones impuestaspor los magisterios, los manifiestos y las instituciones. “[…] nunca fui unanalista y nunca me puse a pensar todo el proceso [de la realización de milenguaje como pintor]. No hubo conflicto, me mantuve un poco al margen delas escuelas como un francotirador. Es decir, nunca pertenecí claramente auna tendencia, a un grupo, a una escuela que son, en general, tan proclivesa gustar y determinan el encasillamiento [sic] de un artista. Creo que, endefinitiva, los pocos creadores que existen en Latinoamérica son tambiénfrancotiradores.”18

Reivindicó siempre la libertad del descubrimiento y el ejercicio de la

pasión, aunque ésta pudiese conducirlo a callejones sin salida y a caminosque fuese necesario abandonar, debido al cansancio de las formas o a unaconciencia de amaneramiento involuntario. “Liberación de los miedos, detantos miedos que nos embargan, miedo al fracaso, al ridículo, a la crítica o ano ser comprendidos y que impiden que nos aventuremos a dar ese salto porel cual entramos en el territorio inexplorado. Cada obra representa un riesgo,de no ser así, dejaría de interesarme”.19

Permaneció fiel a su programa de investigación de la antigüedadamericana, de los espacios abiertos del Nuevo Mundo y de la necesidadsentida de construir, a partir de tales elementos, imágenes universales querevelaran a las multitudes las miserias y las posibilidades prometeicas de lavida tecnológica moderna. “[…] sin dejar de lado la expresión de las raícesmismas de lo americano, descubro en ellas las fuerzas encontradas de lanaturaleza; los recuerdos olvidados de los cataclismos que conformaron loque vemos hoy; el paso velado de otras inteligencias; se confunden en uncrisol de razas las civilizaciones que florecieron en el continente; la particulargeografía de las pampas; la exuberancia de los colores y la luz caribeños; losmisterios ciclópeos de Tiahuanaco y todo ello confluye en una explosión devida, de emociones y energía que se traducen en texturas, colores, ritmos, convigor cósmico y humano. […] Argentina es América y es pasado; Nueva York

es América y presente y futuro… Me siento incorporado al mundo moderno,al de las energías liberadas, de acción arrolladora, las grandes proezas queparecían imposibles… Aunque parezca antagónico todo eso forma parte demi vida y así lo vivo. Por un lado mi bagaje cultural, mis raíces, y por otro elfuturo hacia donde me conducen el arte y mi espíritu.”20

Se conservan además dos manuscritos de Pérez Celis. El primero,fechado en Buenos Aires en mayo de 1988 y llamado Mi credo , conecta lostemas de la libertad y la pasión estéticas con el de la lucha riesgosa contra lasrepeticiones, “la comodidad y la dulce costumbre”:

Cuando uno se siente atraído por la libertad y la pasión, debe manifestarla paratrascender. La libertad nos lleva a lo desconocido, donde los mejores esquemasno tienen cabida, la creación estalla y se expande, donde nada nos sostiene,sino la fuerza de la pasión. La libertad nos exige el desapego de las teorías yde las técnicas, el olvido del logro y la renuncia a la especulación del resultado,exige una absoluta entrega y la recompensa de acompañarnos en un viaje hacialo inesperado, hacia la zona de la conciencia, donde el germen de la creaciónmora. El artista que vive esta inusitada aventura interna, modifica la realidad

externa, introduciendo cambios en la visión consciente y subconsciente, y nosería lógico que pasara por este mundo sin ser cuestionado. Es evidente quelos cambios profundos extirpan la comodidad y la dulce costumbre que rigennuestros hábitos, que son, en definitiva, los que rigen nuestra vida y por losque, en general, se sacrifican los ideales. Esta no puede ser la vida de unartista, porque caerá en la repetición de ‘sí mismo? Y el desgaste de la obra serála inevitable consecuencia. ¿Qué pasión puede haber en la copia de algo quefue? La pasión es siempre nueva, aunque corresponda a un viejo amor comolo es el amor por la pintura y solamente la pasión vivifica una obra, la impregnade su fuerza y nos atrae. Aunque solamente quedaría la cuestión que, como



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todos sabemos, ‘los muertos siguen a los muertos y los vivos siguen a la vida’.

¿Quién es quién en este juego? La ley de atracción tiene la respuesta.

Buenos Aires, mayo 1988. Pérez Celis21

El segundo manuscrito, sin fecha, parece haber sido escrito una décadadespués que el anterior. En él, se plantea la cuestión de la paradoja de launidad y la multiplicidad del mundo simbólico que, t al cual veremos al final deeste ensayo, impregnó la obra tardía de nuestro artista:

De la fuente de la Creación fluye la energía que originó los Universos y secanalizó a través de la forma.La forma condiciona la energía pero no la l imita.La energía puede contenerse, pero no limitarse.El límite lo crea la Mente.Estamos llegando no sólo al fin del siglo, estamos llegando al fin de un milenio,hay una eclosión de la conciencia, un nuevo despertar.La tecnología nos conecta en un instante, la separación es una ilusión.Nace la tendencia a la Unidad, la fe del hombre reconoce fuerzas superiores.“Un símbolo es todos los símbo los de Amor, de Salvación, de Unidad”.Pérez Celis22

III

Ut pictura, poesis

A partir de testimonios propios y ajenos, Pérez Celis parece habersido un gran lector, de filosofía, de prosa literaria, de poesía. Don SegundoSombra debió de estar entre los textos familiares poco antes de 1970, añodel cuadro Homenaje a Ricardo Güiraldes ,23 uno de sus paisajes amplios de lapampa en los que Herrera señaló acertadamente un regreso de la perspectivaclásica como recurso de representación de la inmensidad americana. MaríaJosé nos ha recordado las palabras del propio Pérez y su mensaje, dignode Jano, acerca de la espacialidad, ambivalente en términos históricos, quecaracteriza a la llanura argentina. “La Pampa es el mejor punto de partida paraenunciar lo americano […] De algún modo la Argentina ya está -a través dela infinitud pampeana- en el espacio del que hablan los cosmonautas”.24 Genénos informa sobre la admiración de Celis hacia la obra de Leopoldo Marechal,por lo que cabe incluir dos libros de este autor, publicados antes de 1970,entre los textos que pueden fundamentar nuestro paragone pintura-poesía.25 Me refiero a Adán Buenosayres , editado por primera vez en 1948, luego

en 1965, y a El Banquete de Severo Arcángelo , impreso por Sudamericanatambién en 1965. La primera novela hubo de refrendar quizá la idea plásticadel espacio inabarcable de la pampa y del cielo; la segunda contenía unaclasificación emocional de los símbolos que, probablemente, debió marcar lasindagaciones del campo por parte de Pérez hasta sus últimos años de vida.Interrumpo la argumentación y transcribo las fichas probatorias, con el fin decumplir los pasos del método que Aby Warburg enseñó a los historiadores delarte.

Güiraldes, Ricardo, Don Segundo Sombra .

En el cielo, las primeras claridades empezaban a alejar la noche y las estrellas secaían para el lado de otros mundos. Orillamos un bajo salitroso y unas lagunas

encadenadas, en que los pájaros, medio dormidos, se espantaron de nuestrapresencia. Clareó más y comenzaron a vivir los animales de la pampa.26

Marechal, Leopoldo, Adán Buenosayres :

Paralelamente, la noción de Espacio también se me aclaraba como una pena,favorecida por la llanura cuya extensión se mide con sudores de caballo, y enla cual naciente o poniente, norte o sur eran fáciles caminos de ausencia ypuntos a que volaban los ojos en atención de acariciados regresos. Mas aquellasensación del Espacio adquiría en mí los volúmenes del terror cuando, en lasnoches de luna nueva, tendido yo en la gramilla, levantaba mis ojos al cielo,donde las constelaciones australes parecían colgar sobre mí como los apiñadosracimos de una parra celeste. […] recuerdo que, al mirar aquellas polvaredasestelares, mi alma caía en el vértigo del abismo, anonadada toda ella por labrutalidad que gravitaba desde lo alto y que la reducía brutalmente a polvo,como en un mortero. Y lagrimeaba yo, tal un niño extraviado en un bosque,sin saber aún que todo aquel enjambre de mundos cabía en la pequeñez deun entendimiento humano, por ser el intelecto una esencia no espacial yhallarse libre de las tres dimensiones del Espacio. Al recordar aquellas lágrimasinfantiles, pienso ahora que muchos niños deberán llorar aún en la llanura,

bajo el agobio de las noches australes, para que se inauguren dichosas vías deascensión en el cielo desnudo de la patria.27

Marechal, Leopoldo, El Banquete de Severo Arcángel :

Más adelante, y en la Cuesta del Agua, me hicieron entender la energía vivientede los símbolos. Porque hay símbolos que ríen y símbolos que lloran. Haysímbolos que muerden como perros furiosos o patean como redomones, ysímbolos que se abren como frutas y destilan leche y miel. Y hay símbolos que



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aguardan, como bombas de tiempo junto a las cuales pasa uno sin desconfiar,y que revientan de súbito, pero a su hora exacta. Y hay símbolos que se nosofrecen como trampolines flexibles, para el salto del alma voladora. Y símbolosque nos atraen con cebos de trampa, y que se cierran de pronto si uno los toca,y mutilan entonces o encarcelan al incauto vi andante. Y hay símbolos que nosrechazan con sus barreras de espinas, y que nos rinden al fin su higo maduro si

uno se resuelve a lastimarse la mano.28

Me atrevería a lanzar la hipótesis de que Celis ya había leído el AdánBuenosayres en su primera edición,29 en los tiempos de la bohemia surrealistaque enriqueció su educación estética durante la primera juventud en el barriode Liniers. Carlos María Caron convirtió en personajes de su novela-reportajeEl caballero y su sombra al grupo de amigos inseparables, formado pornuestro pintor, Juan José Zárate y Fernando de Elizalde y Ocampo.30 Caron losha presentado como un trío de muchachos bullangueros, lectores ávidos defilósofos y poetas, habitués de los teatros y de las galerías del centro porteño.Alberto Greco, quien pocos años después practicaría una existencia ya nosurrealista, sino directamente dadá , solía acompañarlos en sus recorridos. Enmayo de 1966, Caron trazó un pequeño relato de ciencia ficción, Año 6.924 ,para incluir en el catálogo de la muestra de Pérez Celis en la galería Vignesde Buenos Aires.31 El protagonista de la historia es Xaximonem Elquis, unmuchacho descendiente de Celis; tiene intenciones de seguir los pasos desu antepasado, pero necesita estar seguro de que este había sido un granartista, ya que la ciencia de su tiempo ha demostrado que el genio se heredahasta la 74ª generación. Xaximonem consigue observar el pasado, descubreque su antecesor ha sido célebre al punto de exponer en la galería Vignes yentonces se siente, confiado, capaz de seguir una carrera artística.

Liniers fue también el punto de encuentro de Pérez con el poeta y autorde ensayos Elías Castelnuovo, militante anarquista, miembro conspicuodel grupo literario de Boedo.32 Castelnuovo se afilió al partido comunista enlos años ’30 y, más tarde, integró el ala de la izquierda nacional en el seno

del movimiento peronista. Es probable que, amén del anarquismo difusoque caracterizó a Celis en el plano estético y que don Elías seguramente leinculcó, nuestro artista se haya impresionado por el papel clave y enaltecedorque semejante intelectual de izquierdas asignaba a Jesús de Nazareth en elproceso secular de la liberación humana. En 1927, Castelnuovo había escrito alrespecto el drama alegórico En nombre de Cristo 33 y volvería al tópico, en 1971,con su Jesucristo, montonero de Judea .34 A decir verdad, Elías se insertabaen una tradición ácrata cristiana que se remontaba a Tolstoi o Dostoievsky y

había tenido sus reverberaciones en el mismísimo Gustav Landauer.35 PeroCelis tuvo otro contacto importante con el anarquismo por medio de unalectura: la del libro Los grandes caciques de la pampa , escrito por Luis Francoy publicado en 1967.36 Nuestro pintor llevó ese volumen bajo el brazo a la horade recorrer la planicie a caballo, junto al escritor Fernando Demaría,37 quiencompuso a propósito del viaje la segunda parte de su poemario Pampa Roja ,editada con grabados y láminas de Pérez Celis en 1968.38 Sabemos asimismoque Caron y Pérez Celis frecuentaban la tertulia organizada por Demaría en sudepartamento de la calle Arroyo, adonde también asistían Leopoldo Marechaly su esposa.39 Los círculos se completan. ¿Será Celis el huésped-amigo enesta bella pieza de Pampa Roja ?:

Al Huésped

Por qué feos caminos te traigo, amigo,Con qué confianza juvenil me sigues,Qué pronto olvidas, no conoces la palabra perdón,Nunca la empleas para tranquilizarme.Eres el muchacho sonriente que, al darme vuelta,Siempre encuentro evitando los obstáculos con un esguince.Mientras sigas detrás de mí,Sé que tendré un amigo cuando llegue el momento.Sé que no me faltará quien me sonría,Cuando diga mi culpa.40

Otro poeta, Alberto Girri, se entusiasmó con los paisajes pampeanos,pintados entre 1969 y 1971, al punto de llamar al artista “El señor del Sol”.41 De todas maneras, el símil de Horacio tuvo una de sus mejores versiones, encuanto atañe a Celis, en el trabajo que lo unió a Luisa Mercedes Levinson,donde, de tanto preguntarse si el disparador que inspiró las ambiguasescaleras al cielo, aludidas en las construcciones escalonadas del color

del oro o de la plata, fue la torre del pesador de tiempo o bien, viceversa,el nombre de Armuth es la denominación de la ciudad que la cuentistadescubrió en los diedros multiplicados de Elevar el pensamiento y Desde elhorizonte, los metales , de tanto saltar del texto a las imágenes y de estasa aquel, resolvemos que la llave hermenéutica ha de ser fabricada con lasideas estéticas y los materiales emocionales provistos por una experienciahumana común. Esta es el sentimiento del paso del tiempo, que resquebrajanuestro suelo, erosiona nuestras miras más altas y, sólo en el momento de



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la aceptación de la finitud, interrumpe la marcha. Entonces, a nuestro pesar,cuando nos habíamos resignado a morir, percibimos las luces que incendianel horizonte, sin moverse, por toda la eternidad.

Quien captó con la mayor agudeza la zambullida de Pérez Celis en lacomprensión de la poesía pudo haber sido Rafael Squirru. Los comentariosdel crítico acerca de las pinturas con las que nuestro artista “interpretóvisualmente” Hojas de hierba de Walt Whitman, publicadas en la traducciónde Borges por Guillermo Nolasco Juárez en 1999, son muy explícitos y sirvende prueba para nuestra hipótesis, no solo sobre el acercamiento entre Celis yel mundo de la lectura, sino sobre su fecundación recíproca:

[…] El artista, en cierto sentido, tiene ventaja sobre el traductor, yaque queda librado a su propio impulso y recrea plásticamente al poeta.

Recordemos, al respecto, que Borges ya había advertido que unatraducción, más que sujetarse a lo dicho, debe interpretar lo que elpoeta quiso decir.Pérez Celis ha sabido interpretar el alma cósmica de Walt Whitman, suespíritu abarcador de lo que usualmente se entiende por el bien y elmal, la virtud y el vicio. […]El poeta nos advierte que su espíritu penetra las grandes superficies ytambién las grandes profundidades. Y esto es lo que se rescata de lasinterpretaciones visuales de Pérez Celis, sus dimensiones sostenidas,en todos los casos, por incursiones en las grandes profundidades quedan marco a todo el andamiaje de las visiones cotidianas del poeta.[…] A las Hojas de hierba , Pérez Celis añade el pasto puna de sus propiosrecorridos pampeanos, plegaria a la hermandad de todo lo creado. Aldarnos la imagen de Whitman, nos da la imagen de un hemisferio quepidió un canto nuevo, un canto inédito, válido para el aquí y el ahora dela eternidad.42

IV

Una buena brújula para orientarse en el corpus de Pérez Celis sería,por lo tanto, la que tuviera su norte en un anarquismo espiritualista. ManuelGálvez colocó bajo esa categoría estético-política (con perdón de Benjamin) lapersonalidad y la obra de Almafuerte. No suena disparatado sumar la figura deMarechal a t al red de hombres y objetos artísticos. Pero ensayemos la aplicaciónde la fórmula al análisis de las pinturas de gran formato, hechas por PérezCelis entre 2004 y 2006. A primera vista, nos enfrentamos a un desplieguede símbolos propios y ajenos. Los primeros, inventados o construidos por elartista a partir de la observación del espacio y de la especulación geométrica;

los segundos, tomados de las tradiciones religiosas del mundo entero, enconsonancia con el inventario que levantó Fabián Lebenglik en 1994 al reseñarla exposición de Celis Viaje al interior de la materia : “Chorreaduras que remitena antiguas escrituras, símbolos religiosos y del I Ching , figuras geométricasque organizan el espacio de la tela, cortes transversales o longitudinales paraestablecer dicotomías en el plano, títulos que evocan meandros del tiempo yde la memoria, así como ritos iniciáticos, trazos de tipo gestual, máscaras.”43 Establezcamos las formas y los procedimientos de su producción. Busquemosenseguida sus hipotéticas derivaciones simbólicas.

Dos patrones prevalecen en las composiciones. El primero es un haz decurvas que podrían representar los arcos máximos de una bóveda vista desdeabajo (ActoUnicor , 2004). A partir de los bordes del haz, las líneas pierdencurvatura hacia el centro donde confluyen, de un lado y del otro, en una sola

línea recta (que correspondería el arco de la bóveda hipotética en la verticalexacta de nuestras cabezas) (Testigo , 2004). Algunas veces, un segundo haz,de rectas paralelas, corta perpendicularmente el haz original, variación queacentúa el efecto de mirar una bóveda en lo alto desde el suelo (Liturgia ,2004). En los espacios entre curvas o en los casilleros delimitados por lasparalelas, se distribuyen manchas de luz blanca o de colores contra un fondogeneralmente monocromático, pero muy texturado mediante modulacionesde tonos (Diez mil años de historia , 2004). Ocurre también que, en lugar demantenerse paralelas, las líneas del segundo haz tiendan a cerrarse hastaconvertirse en círculos y, entonces, lo que parecía una bóveda pase a serconsiderado una cúpula (De antiguas historias , 2004). La referencia sensible yconceptual al cielo no necesita ser explicada.

El segundo patrón podría ser entendido como una derivación del primero.Bastaría cortar una sección del cilindro aparente que representa la bóveda ysometerla a una torsión que haga de ella una superficie alabeada, desenvueltaen el espacio tridimensional como un gran lienzo (Camino verde , 2004). Perotambién es posible pensar en la curva que es gráfica de la función y = tg x, una

línea que pasa por el origen de las coordenadas y, tanto hacia arriba cuantohacia abajo, se convierte en asíntota de las rectas verticales que atraviesan lasabscisas en Si del plano pasamos a la tercera dimensión y hacemos rotar lacurva en torno al eje de las ordenadas, construimos un sólido de revolución,equivalente a la sección de bóveda sometida a torsión pero más controlabledesde el punto de vista de la simetría y de la regularidad geométrica. Sobreesa superficie alabeada, suspendida en un espacio coloreado sin dimensioneso bien bajo las bóvedas o cúpulas representadas mediante el primer patrón,



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solemos ver líneas de fuerza y pequeños globos de luz blanca, rodeadospor auras de colores, distribuidos sin más orden que la ley de los equilibriosplásticos, no rigurosamente matemáticos (El espejo circular , 2004; El viaje ,2004). También ocurre que aquella superficie obtenida de la revolución de lagráfica de tg x se muestre sólo recorrida por líneas, suspendida en un espaciopolicromático e informalista (Espacio verde , 2004; Levedad , 2004). Osaríapensar que, tal como el primer patrón resulta asimilable al cielo, este segundopatrón quizás se refiera al espacio anti-entrópico donde tiene lugar el fenómenode la vida, que flota y migra de un lugar a otro del vasto universo, entre lasestrellas (Génesis , 2005). En esos lugares, acotados pero cuyo desplieguees potencialmente ilimitado, se manifiestan, mediante yuxtaposiciones devarias unidades dispares de superficies tridimensionales de revolución, loscontornos y las estructuras íntimas de los dioses y los hombres ( La pareja,

2004; Danza en la catedral , 2004; Memoria de Odín, 2004, Esfinge , 2004). Sise afina la mirada, el Dios hecho hombre, el Cristo, es también el resultadode una de aquellas operaciones (Crucifixión Now Still , 2004). Mientras tanto,los símbolos que enumeró Lebenglik se vislumbran como partes de lasconstelaciones y de los cúmulos de puntos luminosos que remedan estrellas(Crucifixión Now , 2004). En varios lienzos, distinguimos el dibujo nítido deuno o dos conos ensamblados, transparentes (Cono sur , 2005; La forma deltiempo , 2004; Encuentro al sur , 2005). Celis nos dio precisiones sobre susignificado: son emblemas del tiempo, que irrumpe en el espacio para marcarun rumbo, un destino (simbolizado en el vértice del cono), la finalidad de untiempo lineal o bien, cuando dos conos están encastrados e invertidos el unorespecto del otro, es un tiempo cíclico y oscilante de rumbos opuestos.

La visión espiritualista del mundo, de la vida, de la aventura humanaestá clara en la pintura de Pérez Celis. Su anarquismo merece algunaaclaración. No es el reino de la arbitrariedad sino el de la máxima libertadposible para los entes finitos que somos, la libertad de la exploración yde la recreación mediante el ejercicio de un razonamiento compartido,

comunicable, con pretensiones de universalidad. Porque, al modo de losanarquistas políticos, el ácrata estético que fue Celis anhelaba contribuir enel proceso de construcción de un mundo social de seres libres y soberanos,dueños plenos de las facultades que nos hermanan en procura de la verdad,de la belleza y de la unión amorosa. Me gustaría terminar estas páginas conun soneto de Marechal, que conocí gracias a la cultura generosa de RicardoIbarlucía. Creo que esos catorce versos comparten el temple de ánimo queguió a Pérez Celis, de un cabo al otro de su existencia.

Del amor navegante

Porque no está el Amado en el Amante / Ni el Amante reposa enel Amado, / Tiende Amor su velamen castigado / Y afronta el ceñode la mar tonante.

Llora el Amor en su navío errante / Y a la tormenta libra su cuidado, / Porque son dos: Amante desterrado / Y Amado con perfil denavegante.

Si fuesen uno, Amor, no existiría / Ni llanto ni bajel ni lejanía, /Sino la beatitud de la azucena.

¡Oh amor sin remo, en la Unidad gozosa! / ¡Oh círculo apretadode la rosa! / Con el número Dos nace la pena. 44

Adiós.

José Emilio Burucúa (ANBA, UNSAM)

Nota bene

La ronda habitual, a la que suelo someter mis textos antes de publicarlos, hadado lugar a objeciones importantes por parte de amigos del pintor, quienessubrayan la intuición proteica y siempre movediza de Pérez Celis como fuentecasi exclusiva de su estilo y de sus metamorfosis. Ellos ponen en duda,seriamente, las aproximaciones que procuré investigar entre algunas formas

de la li teratura y las aventuras plásticas de nuestro artista. Regresé entoncesa las fuentes escritas de varias procedencias, a los testimonios dejados porCelis y crucé los datos. Confieso no tener nuevas razones para cambiar lostérminos de mi abordaje. De todos modos, creo que sería muy oportuno undebate acerca del peso de la vida intelectual, que siempre implica algún tipo defamiliaridad (directa o producto de irradiaciones orales) con textos e ideas, enla obra de un pintor tan inclasificable como Pérez Celis. Ojalá la retrospectivade su obra fuese la ocasión de llevar a cabo un intercambio de tal naturaleza.



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1 Benjamin, Walter, El origen del drama barroco alemán , Madrid, Taurus, 1990, pp. 9-41.2 Casanegra, Mercedes, “Pérez Celis y la popularidad como fenómeno”, Tributos (cat.

exp.), Buenos Aires, Palais de Glace, 2001.3 La Nación, 11 de junio de 1961.4 Romero Brest, Jorge, “Pérez Celis. Luis Alberto Wells” (cat. exp.), Buenos Aires,

Bonino, 1965.5 Archivo del artista (Fundación Pérez Celis).6 Diehl, Gaston, Pérez Celis , Buenos Aires, Ediciones de Arte Gaglianone, 1981.7 Herrera, María José, “Pérez Celis: encontrar en los orígenes”, Tributos (cat. exp.),

Buenos Aires, Palais de Glace, 2001.8 La traducción me pertenece.9 Levinson, Luisa Mercedes (Cuento/ Nouvelle ) y Pérez Celis (Pinturas, Tableaux ), El

pesador de tiempo / Le peseur de temps , prólogo de Jean Cassou, Buenos Aires,

Ediciones de Gaglianone, 1980.10 Gené, Enrique Horacio, Meditación en torno de Pérez Celis, un protagonista. BuenosAires, Ediciones de Arte Gaglianone, 1988.11 Casanegra, op.cit . Un abordaje crítico muy parecido, a caballo del acogimiento del

pasado americano y del vuelco hacia el futuro moderno, se encuentra en el obituario

de Pérez Celis, firmado por Adam Bernstein y publicado en el Washington Post el 5

de agosto de 2008.12 Levinson, op.cit , p. 15.13 Gené, op.cit ., p. 198.14 Pau Llosa, Ricardo, Pérez Celis, Antes y ahora , Buenos Aires, Centro Cultural de la

Ciudad de Buenos Aires, 1985.15 Adorno, Theodor W., Minima Moralia. Reflexionen aus dem beschädigten Leben,

Frankfurt am Main, Suhrkamp, 2001, parte II [1945], nº 96.16 Eco, Humberto, Apocalípticos e integrados , Barcelona, Lumen, 1995, pp. 83-140.17 Gené, op.cit ., pp. 30-31. Entrevista en Siete Días , año XV, nº 801, 20 de octubre de

1982.18 HUAC, “Pérez Celis: ‘Todo estilo es una cárcel ’”, en El Comercio , Lima, 22 de julio

de 1989.19 Véase la entrevista publicada en 1991 en San Juan de Puerto Rico, en ocasión de la

Conferencia Internacional convocada por IBM, donde Pérez Celis fue invitado junto aCarlos Fuentes y Jorge Amado, en el Archivo del artista (Fundación Pérez Celis) bajo

la denominación “La disciplina, la creación, l a libertad”. Asimismo, “El arte de la razón

y la pasión”, en Las Últimas Noticias , Santiago de Chile, 20 de septiembre de 1989.20 Alsina, Bettina, “Pérez Cel is. Relámpagos de Energía”, en Revista Educativa Cultural

Uomini e Fatti (Consulado de Italia), Buenos Aires, nº 12, pp. 20-22.21 Archivo del artista (Fundación Pérez Celis).22 Archivo del artista (Fundación Pérez Celis).

José Emilio Burucúa es Doctor en Filosofía y Letras por la Universidad de Buenos Aires. Profesor

titular de Problemas de Historia Cultural, en la Escuela de Humanidades de l a Universidad Nacio-

nal de San Martín. Ha publicado li bros y artículos sobre la historia de l a perspectiva, las relaciones

históricas entre imágenes e ideas y las técnicas y los materiales de la pintura colonial sudameri-

cana. Trabajó sobre la historia de la risa en la Europa del Renacimiento. Sus libros principales son:

Corderos y elefantes. Nuevos aportes acerca del problema de la modernidad clásica (2001), Histo-

ria, arte, cultura: de Aby Warburg a Carlo Ginzburg (2003), El mito de Ulises en el mundo moderno

(2013) y, en colaboración con Nicolás Kwiatkowski, Cómo sucedieron estas cosas. Representar

masacres y genocidios (2014).



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23 MS, “Pérez Celis y el sol americano”, en Raíces , Buenos Aires, junio de 1970.24 Revista Panorama , mayo de 1969, cit. en Herrera, op.cit .25 Gené, op.cit ., p. 41.26 Güiraldes, Ricardo, Don Segundo Sombra , Buenos Aires, Eudeba, 2012, p. 144.27 Marechal, Leopoldo, Adán Buenosayres , Buenos Aires, Sudamericana, 1948, pp.

432-433.28 Marechal, Leopoldo, El Banquete de Severo Arcángel . Buenos Aires, Sudamericana,

1965, p. 258.29 Un descubrimiento recentísimo de Tamara Toma, realizado en el archivo del arti sta,

ha confirmado la veracidad de una relación fuerte entre Pérez Celis y Marechal. Un

recorte de diario, fechado en 1974 pero sin indicaciones del título de la publicación, dice

textualmente: “Pérez Celis. Metafísica de América . Parece que Leopoldo Marechal

porque no era de esos ojos que se miran a sí mismos, le hubiera dado la pauta al

pintor Pérez Celis. ‘Un buen día la pampa se abrirá de piernas y parirá una metafísica’

escribió Adán Buenosayres como quien nombra otra vez la Creación”. El pasaje deMarechal pertenece al Cuaderno de Tapas Azules , “escrito” por el personaje principal

de la novela.30 Caron, Carlos Maria, El Caballero y su Sombra , Buenos Aires, Metafrasta, 2006, pp.

62-66.31 Carlos Mar ía Caron, “Año 6.924”, en Pérez Celis , Galería Vignes, Buenos Aires,

Imagen, mayo de 1966.32 Gené, op.cit ., pp. 40-45.33 Castelnuovo, Elías, Teatro: Animas benditas, En nombre de Cristo, Los señalados ,

Buenos Aires, El Inca, 1929. Las tres piezas fueron representadas con escenografías

de Abraham R. Vigo.34 Buenos Aires, Talleres Gráficos La Técnica Impresora.35 Landauer, Gustav, La Revolución. Buenos Aires, Proyección, 1960, pp. 54-67.

Friedman, Maurice, Encuentro en el desfiladero. La vida de Martin Buber , Buenos

Aires, AMIA, 1997, tomo I, pp. 163-187.36 Buenos Aires, Schapire.37 Gené, op.cit ., p. 136.38 Buenos Aires, Hombre Nuevo.39

Caron, Gilberta Antonia, “Carlos María Caron (1935/2015). Escritor, crítico de arte,periodista, profesor...”, en http://metafrastaediciones.blogspot.com.ar/ , consultado el

20 de mayo de 2015.40 Demaría, Fernando,Pampa Roja . Buenos Aires, Ediciones del Hombre Nuevo, 1973,

p. 101.41 “Atrape el sabor de Pérez Cel is”, en Boletín Publicitario , año XIII, nº 93, 1971

42 Squirru, Rafael, “Las pinturas de Pérez Celis para las Hojas de hierba de Walt

Whitman”, en Whitman, Walt, Hojas de hierba , Buenos Aires, Juárez, 1999, pp. 17-18.43 Véase el obituario del artista, escrito por el mismo Lebenglik y publicado en Página

12 , el 3 de agosto de 2008.44 Marechal, Leopoldo, Sonetos a Sophia , 1940

http://metafrastaediciones.blogspot.com.ar/

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I

En los últimos años, la historia del arte desplegó un conjunto de herramientasreflexivas, que, sumadas a otras más tradicionales, resultan apropiadas pararecorrer la obra de Pérez Celis. Se trata de las nociones que proponen mirarlas imágenes como representaciones de algo, medios para evocar ideas osituaciones del mundo y, a la vez, pensarlas como artefactos, es decir, objetosque expresan simbólicamente diversidad de sentidos en su materialidady aspectos visuales. La presencia física de la obra de Pérez Celis, su color ygestualidad conquistan el espacio de la pared o el de la página impresa, y suvitalidad produce una experiencia en el espectador que activa la mirada demaneras diversas. Algunos autores recientemente han considerado estasdos dimensiones, la representativa y la presentativa –o la de su exhibición–, 2

focalizando la atención en la “presencia” de la obra, olvidada en el pasado enfavor de la búsqueda de “sentido” a través del tema. Las obras de arte sonvistas, entonces, también como objetos con los que nos encontramos, ademásde como objetos que hay que interpretar.3 Se reconoce, así, el estatuto de laimagen como dispositivo y se admite que hay algo que los artefactos visualesexpresan por sí mismos a través de los atributos de sus medios. 4

Atender, pues, a estas cualidades de artefacto en la producción de PérezCelis nos demanda además el empleo de otro esquema interpretativo,vinculado a los estudios visuales –la disciplina que estudia la cultura visual–,5 ya que su trabajo se despliega más allá de los límites del campo del arte,aunque éstos sean débiles y porosos. Al igual que en sus murales, en suintervención gráfica como ilustrador o diseñador de libros, en la publicidad,pero también a través de imágenes en alfombras, textiles o vajilla, PérezCelis deja su huella en objetos reproducidos y multiplicados, su obra franqueamedios y fronteras y responde a variadas funciones sociales. Este desafíoa los límites y a la estabilidad de las categorías estéticas resulta uno de losrasgos característicos de la cultura urbana local a partir de la cultura urbana

local de los años 60.6

Los estudios visuales ofrecen un marco adecuado para el análisis de estasproducciones, pues evitan el privilegio tradicional otorgado a las imágenescolocadas bajo la categoría de arte. Consideran que aquéllas constituyensolo una pequeña porción de la imaginería que circula socialmente, másamplia y variada, y cuyo sentido reside en la capacidad de producir diversasexperiencias culturales y visuales en los espectadores. James Elkins afirmaque las imágenes no artísticas son tan elocuentes, expresivas e históricamente

Pérez Celis y los libros ilustrados.

Reproducción de imágenes ymultiplicación de efectos1

SANDRA M. SZIR



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interesantes que no hay razón para que la historia del arte las excluya. 7 Estetexto se propone, pues, recorrer algunos aspectos de la producción de PérezCelis en los campos de la gráfica, el mundo editorial y el diseño, a partir de lasperspectivas enunciadas.

II

Los poemas y grabados que presentamos en este libro correspondena una experiencia de viaje, realizada a través de distintas edades ydiferentes paisajes. Juntos hicimos el trayecto final, leyendo primeroen Quemú-Quemú la vida de los caciques pampeanos y recorriendodespués el desierto, hasta llegar a Fortín Mercedes, donde se encuentranlos restos de Ceferino Namuncurá. […] En este libro confluyen dos

interpretaciones de viaje, la una lírica y la otra plástica, conforme a laidiosincrasia de cada viajero. Trabajando juntos hemos podido apreciarla fuerza de la amistad, pues solo entre dos hemos podido completarla tarea. La pampa y el desierto fueron el lugar del encuentro donderesolvimos emprender la obra y donde recibimos el empuje necesariopara terminarla. Pese a errores y desvíos, pese a que muchas bellezas yenseñanzas del camino escaparon a nuestra experiencia. Confiamos enel rumbo que nos llevó a internarnos en l a Patria, y contemplar sobre sutierra y cielo la imagen de una cruz.8

La cita alude al trabajo colaborativo plasmado en un proyecto artísticoconjunto en el cual el escritor Fernando Demaría y Pérez Celis emprendieronun viaje por la pampa argentina. La dupla, conformada por amistad y afinidadmutua, cumplía el propósito de absorber aspectos de la historia local, perotambién del paisaje y la naturaleza del desierto. El resultado perseguido erauna tarea de equipo a materializarse en un libro, Pampa roja ,9 con poemasde Fernando Demaría y nueve xilografías a dos colores y ciento cincuentalinograbados10 a un color de Pérez Celis. El volumen, de “magníficacontextura”,11 publicado en 1968 en Ediciones del Hombre Nuevo,12 ofrecíael espacio en el cual escritura e imagen intervenían conjuntamente en laproducción de sentido. Lectura y percepción potenciaban sus efectos a travésde la mutua proximidad.

Demaría, seguidor de la concepción del “hombre nuevo”,13 desarrolla su

poesía (compuesta en varias etapas desde 1948) entre registros intimistasy cósmicos, con referencias a la tierra, a Dios o a personajes concretos,combates, sombras, divinidades helénicas. Alude a un tiempo y espacioplurales y diversos, entre la pampa y otros lejanos o universales; entre elpresente, el pasado y otro atemporal.

En tamaño folio, la edición de 1968 ofreció 522 ejemplares (500numerados y 22 fuera de serie), de 262 páginas, en papel Witcel Ledger14 de 150 gramos. Las nueve xilografías realizadas sobre la base de tacos demadera de guatambú fueron impresas a dos colores en papel Canson blanco,y están coladas sobre la hoja del libro. “Celis había llevado algunas tablas de



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guatambú para realizar sus grabados directamente en escena. Sin embargo,la necesidad de un viaje al desierto a veces son otras: terminaron como leñaa un necesario asado […]”.15 La serie de poemas se divide en nueve partes, ylas xilografías –que no presentan título ni firma– se encuentran emplazadasal comienzo de cada una de ellas, y mantienen un equilibrio estético con lostipos Bodoni de las páginas de texto. El conjunto de poemas está organizadoen nueve secciones, que tienen los títulos: I. “Pausas”; II. “El solitario laurel”;III. “Himnos helénicos”; IV. “Las hélices”; V. “Pampa roja. Primera parte”;VI. “Pampa roja. Segunda parte”; VII. “Nahuel Huapi”; VIII. “Homenajes”;IX. “Ofrendas”. De carácter mayormente abstracto con algunos elementosfigurativos, sugestivos del paisaje pampeano, los grabados se destacan, sobretodo, por la gestualidad que deja ver la impronta de la madera. La exploraciónen los propios medios expresivos, resaltando a menudo las cualidades de la

materia del soporte –la matriz del grabado–, junto con el relativo abandonodel carácter ilustrativo, conformaba uno de los aspectos renovadores mássignificativos que experimentó el grabado argentino en los años 60.16

Los grabados –de alta calidad– que se complementan con los linograbadosconfieren a Pampa roja un carácter casi lujoso, “conjugando en un libroexcepcional para lector y para bibliófilo”.17 Los linóleos se exhiben por todo elvolumen a modo de pequeñas viñetas impresas en un verde pálido; compartenla página con el texto, despliegan el imaginario de Pérez Celis de esos años:soles, figuras geométricas, figuras humanas estilizadas, animales o plantas amodo de motivos americanistas, y recuerdan algunas iconografías y formasvisuales de las telas o las cerámicas prehispánicas.

Sin embargo, Pampa roja no constituyó la primera obra de ese carácteren la que Pérez Celis participó. Su intervención en libros, como ilustradoro como diagramador, fue amplia y prolongada. La enumeración de algunosde los títulos y la mención de sus autores dan cuenta de los espacios desociabilidad y del mundo intelectual y estético con el que interactuó en sudesarrollo artístico. La hija de Carlos María Carón recuerda acerca de su padre:

Asistía por esos años, después de las inauguraciones de las muestrasde Arte […] a las míticas reuniones en la casa de Antonio Berni o lasdel piso de la calle Arroyo del poeta Fernando Demaría, donde asistíanregularmente Leopoldo Marechal con su esposa, Alejandro Vignatti,Jorge Pérez Camacho, Pérez Celis, César Fernández Moreno (h.), entremuchos otros escritores y pintores, y donde agotaba a la audiencia consus primeras canciones el entonces Indio Gasparino –luego Facundo

Cabral–…18

Al respecto de sociabilidades que resultan en proyectos creativos, elescritor y amigo de Pérez Celis, Mario Diament relata que, en 1985, SergioRenán visitaba el estudio del artista y surgió del encuentro entre los tres elproyecto de un trabajo que consistiría en un libro cuyo título sería Tango , en elcual el artista ilustraría con grabados un poema de Diament, complementadocon un disco con la voz de Renán leyendo el poema. El proyecto no se concretó,aunque Pérez Celis llegó a realizar parte de los grabados. Posteriormenteilustró las cubiertas de los libros Cita a ciegas y El libro de Ruth. Esquirlas ,ambos de Mario Diament, que se publicaron en inglés y en español. 19

Además de Pampa roja , brindó su obra para ilustraciones de tapa paraTristán Solarte, Rafael Squirru, Enriqueta Crespo, Guillermo Vilas, WillieMerlino, Ezequiel Saad, Juan Eduardo Carballo, Gustavo Coletti, Juan CarlosGrassi, Jorge Castex, Lucrecia Vega Gramunt y Armando Álvarez Bravo, entre

otros. Este conjunto implica un significativo corpus de editores y autores querecurrieron a las creaciones de Pérez Celis para ilustrar las portadas de susobras. De muy reciente publicación, cabe destacar la cubierta de Destinos ,novela de Ursita Gavril, cuya cubierta deja percibir un retrato femenino detrásde las diluidas pinceladas del artista.20

Ilustró, por otra parte, Los signos , de Adela Leloir; Los afanes , de AdolfoBioy Casares; Anatonia , de Carlos María Carón; Corps Automnal , de Claude



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Couffon; Hojas de hierba , de Walt Whitman (traducción de Jorge Luis Borges);Pasajero de la vida , de Alicia Parisier. Ejecutó, además, el diseño de Losfragmentos de Heráclito (introducción, traducción y comentarios de FernandoDemaría), y produjo la idea gráfica de El pesador del tiempo , de Luisa MercedesLevinson, demás de proporcionar pinturas para el mismo.21 En 1973 se publicóuna tercera edición de Pampa roja que presenta características muy diversascon respecto a la de 1968. De pequeño formato, se trata de los poemasacompañados por 12 ilustraciones de carácter abstracto reproducidas a travésde un procedimiento industrial.

Considerar los libros ilustrados demanda una atención múltiple. Enprimer lugar, se trata de comprender que estamos ante un artefacto quedebe estudiarse como signo complejo en el cual imagen y discurso verbal

operan conjuntamente, que existen semejanzas expresivas o comunicativasentre modalidades discursivas y visuales, pero que también hay tensiones ydiscontinuidades. Por consiguiente, hay quienes manifiestan que lo visible ylo legible no pueden reducirse a un único modo de comprensión.

Al respecto de estas diversidades,Tom Mitchell señala: “Los dominios dela palabra y de la imagen son como dos países que hablan diferentes lenguajespero que tienen una larga historia de migración mutua, intercambio cultural yotras formas de interacc ión”.22 Afirma, pues, que la relación texto/imagen noresulta un método para disolver los bordes ni para mantenerlos como fronteraspermanentes, sino que representa básicamente una problemática, “ladescripción de fronteras irregulares, heterogéneas y a menudo improvisadasentre ‘instituciones de lo visible’ (artes visuales, medios visuales, prácticasexhibitivas y recepción visual) e ‘instituciones de lo verbal” (literatura, lenguaje,prácticas del discurso ora l y la escritura, audic ión y lectura)”.23

¿Cómo abordar entonces la convivencia de texto literario e imagen en elsoporte de la página de una edición ilustrada? El ejemplo de Anatonia , en suparticularidad, puede ofrecer una pista de un modo de articulación de losaspectos teóricos con algunas circunstancias históricas concretas. Allí, el tipode vinculación entre texto e imagen rompe con una cierta tradición ilustrativa delgrabado.24 La imagen, en gran medida, se independiza entonces del texto, peroencuentra, a la vez, relaciones más complejas y conceptuales que la ligan a él.

Anatonia fue publicado en octubre de 1965, en una edición de 300ejemplares, y, al igual que Pampa roja , surgió a partir de la relación entre elescritor –en este caso, Carlos María Carón– y el artista. Al respecto de supadre y la publicación, la hija de Carón afirma:



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Su mejor amigo había realizado especialmente unas serigrafías quelo ilustraban, y ese mismo año lo publicaron en una novedosa ediciónpara la época: los poemas se encontraban prolijamente impresos enunas cartulinas dentro de una carpeta-estuche de un tamaño mayor queun libro común y en donde venían intercaladas las cinco serigrafías dePérez Celis.25

En efecto, el libro-carpeta consta de una caja de cartón entelado(“confeccionada a mano”) con una carpeta que contiene diez hojas de papelde grueso gramaje en las que se reproduce el poema con amplios márgenes ados columnas, en tipografía Baskerville, y las cinco serigrafías de Pérez Celis,firmadas y numeradas, impresas en un papel de grosor similar pero mástexturado.26 Las serigrafías, de formas abstractas con fuertes rojos, verdes,violetas y amarillos, remiten, a un imaginario americanista, en el que los soleso los patrones de la expresión de las culturas indígenas se enlazan con lagestualidad propia del artista. Frente a las páginas aireadas donde el canto sedespliega en tipos de letra l ivianos, las imágenes se presentan contundentes,con una intensidad que parece desconocer el resultado visual de las páginasde texto, aunque no sus mensajes. Unos meses antes de la aparición del libro,Pérez Celis había expuesto en la galería El Sol siete tapices y cinco dibujos,27 obras que guardan relación visual con las serigrafías del libro y cuyos títulossostienen la referencia al sintagma Anatonia. Al respecto, aclaraba: “Anatoniaes una ciudad […] que inventó Carón, y con la que yo me siento identificado:el país de la poesía y el arte”, y también: “Anatonia escapa a las definic iones.Pero es el lugar donde me gustaría vivir […] El lugar donde, de alguna manera,yo sé que estoy viviendo”.28 En el canto de Carón, el lugar utópico –o distópico–está asociado con nociones como felicidad, miedo, muerte, verdad, Universo.

Anatoniaes un nombrecomo puede haber otro

Anatonia es un nombreque nos provoca el canto.Cantamos y cantamossin cesarsin morirsin temercon esta voz de siempre

con esta voz de humanoscon respuestas humanasa preguntas humanasque no tienen respuesta.[…]Pero Anatonia dijoque la muerte no canta,que solo canta el Hombre,y que solo cantandoentramos con el cuerpoadentro de Anatonia,y Anatonia es lugardonde la muerte muere,

y que solo cantandole ganamos el cuerpoal gusano del miedo, y el que canta en silenciotiene el cuerpo enterradoen un tiempo de muerte,tiene el canto enterradoen el fondo del cuerpo.

Anatonia es, entonces, una invención, al igual que las abstraccionesamericanistas de Pérez Celis, cuyas serigrafías, si bien ligadas discursivamenteal canto de Carón, mantienen una independencia visual y material, ya que lafalta de encuadernación de la carpeta y el hecho de que las hojas se presentensueltas habilitaba una potencial circulación autónoma de las estampas. Uncrítico apunta:

…en su forma de presentación, una diagramación de hojas sueltas ycompaginadas en forma de carpeta, con envoltorio y caja además, está

acompañada de cinco serigrafías de Pérez Celis. Acompañado decimosdeliberadamente, porque no se trata de que con esas estampas secumpla una función de ilustrador –el eterno problema de la supeditaciónde las artes– sino que el pintor, como el poeta, ofrece una interpretaciónde ese mundo sugerente que ha creado el poeta.29

Como se ha mencionado, el grabado en la Argentina, por esos añosinnovadores, buscaba una independencia de las tradiciones canónicas, yel abandono del carácter ilustrativo de un texto fue uno de los recursos de



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visibilización de la producción y de su autonomía.30 Pérez Celis, efectivamente,había participado de ese movimiento innovador compartiendo exposicionescon muchos de los artistas del momento. Desde los inicios de su carrera,la obra gráfica formó parte de su despliegue expresivo y produjo un númeroconsiderable de trabajos desarrollados en las variadas técnicas disponibles.Participó en exposiciones de grabado tanto colectivas como individuales,31 compartió el espacio de salones (como los del Centro Argentino de GrabadoresModernos) y exposiciones, entre muchos otros, con nombres tales comoAída Carballo, Albino Fernández, Julio Le Parc, Fernando López Anaya, RogelioPolesello, Víctor Rebuffo, Luis Alberto Wells, Francisco Sobrino. La formaciónde Pérez Celis en grabado la había obtenido en forma independiente y ensu pasaje por la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes Ernesto de laCárcova. Allí, el plan de estudios había sido modificado a fines de la década

del 50 y se había otorgado un lugar al grabado como asignatura al mismo nivelque la pintura y la escultura. Esto daba cuenta de un nuevo interés hacia ladisciplina de la gráfica que se despegaba de las tradiciones y se articulaba conel lenguaje moderno.

Incluso, obtuvo diversas distinciones, como el Tercer Premio Adquisiciónpara su obra serigráfica Reuquecura en el Salón Swift, en 1968. Exploródistintas técnicas: tempranamente la monocopia y aguatinta, la xilografía(Pampa roja ), la litografía (Saracompañera , carpeta producida en 1970) yla cincografía. También produjo varias series de serigrafías, además de lasmencionadas correspondientes al trabajo de Anatonia , obras tales comoRecuerdos de Matisse , Vegetabilia , Yellow o Ventana de Matisse , dondeexpresa las posibilidades técnicas del procedimiento a partir de la densidaddel color y la cualidad táctil de la materia. El grabado procura autonomizarsede su función de ilustración o de la reproducción de la pintura absorbiendodiversas herencias expresivas, abstractas o figurativas, transformadas por loslenguajes modernos; explorando las incisiones, las texturas.

III

Retornando a los libros, otras propuestas involucraron a Pérez Celis con ellos.Anatonia y Pampa roja difundían grabados sobre la base de técnicas queconservaban el aspecto artesanal y manual en los procesos de producción.Las tiradas resultaban limitadas (300 y 522 copias, respectivamente), demodo que ambos alentaron una ampliación del público, pero no un consumomasivo. Estos impresos, junto con los murales y otros desplazamientos de

sus imágenes en medios y soportes diversos, expandieron las posibilidadesde difusión de su trabajo. Estos libros, a diferencia de los ilustrados conxilografías o serigrafías, recurrieron a procesos industriales de reproducciónde imágenes para ilustrar la obra poética o narrativa de distintos autores.

En Hojas de hierba , reedición de 1999 de los poemas de Walt Whitmantraducidos en los años 60 por Jorge Luis Borges, Pérez Celis recurre a lafiguración para ilustrar los textos, o, como señalaba: “… no las podría llamarsolo ilust raciones, las veo más bien como ‘interpretac iones visuales’”.32 Guillermo Nolasco Juárez, el editor, ya había publicado una versión anterior

con 30 xilografías de Antonio Berni, y Pérez Celis afirma que, cuando recibióel encargo, le llevó un año entero terminarlo. Quienes referenciaron el libroadvirtieron su valor como objeto, “por la belleza de su factura,”33 mientrasque otros destacan la tarea de interpretación del artista, la recreaciónde los sentidos discursivos en procesos visuales. Rafael Squirru señala,precisamente, que el artista posee esa ventaja con respecto al traductor, yaque el primero “queda librado a su propio impulso y recrea plásticamente alpoeta”.34 En esta producción, de acuerdo con Squirru, “Pérez Celis ha sabido



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interpretar el alma cósmica de Walt Whitman” pero, a la vez, sostiene una“amigabilidad con lo cotidiano, con el mundo fenomenizado que abarca sereshumanos, vegetales y minerales”.35 María José Gabin, hija del artista, relata enun libro sobre su padre que a éste “…le gusta mucho la lectura. Es admiradorde Borges, Henry Miller y Walt Whitman y le apasionaban las biografías degrandes hombres: Turner, Neruda, Van Gogh o el Chacho Peñaloza”.36

La historiadora del arte Ségolène Le Men afirma que, en la literaturailustrada, a menudo el ilustrador es el primer lector de un texto,37 pero queesa lectura puede asumir diversas estrategias y modalidades de encuentro; laimagen puede ilustrar o acompañar al texto asumiendo un rol de referencia,puede tener una función de contrapunto, añadir o contradecir al plano verbal,o puede producir una visualización imaginaria. Las imágenes de Pérez Celisen Hojas de hierba llevan inscripciones, un verso, dos, en algunos casos más,

que sirven de clave de lectura. El espectador puede percibir parte del procesode producción, puede figurarse qué verso, qué palabra, cual idea activó enla cabeza y en el gesto del artista el proceso creativo. Pero la presencia dellenguaje en las figuras puede sugerir un control discursivo; sin embargo, lasimágenes se presentan con sus chorreaduras o transparencias para transmitiralgo que el lenguaje tal vez no alcanza a decir.

Otra cuestión señalada por los críticos es la maleabilidad de la producciónde Pérez Celis y la capacidad de adaptación tanto a las grandes dimensionescomo a las proporciones de la página impresa; de hecho, el libro fuepresentado juntamente con la inauguración de Pérez Celis. Hojas de Hierba.Walt Whitman, en el Centro Cultural Recoleta, exposición en la cual podíanverse las obras ilustrativas del poema en dos series, una de diez pinturassobre tela, de gran formato, y otra de trabajos sobre papel hecho a mano.Observa nuevamente Squirru:

…las pinturas de proporciones reducidas mantienen, y no cabe quefuera de otra manera, igual hálito de grandeza que la que encontramos

en las de gran formato. No conozco otro artista que, sabiendo dela reducción necesaria de sus obras, haya incursionado en telas detanto aliento, realizaciones que sostienen la calidad de ese espacioamericano que traducen…38

Ímpetu gestual combinado con sutileza colorística se observa asimismo enlas ilustraciones de Pasajero de la vida , de Alicia Parisier, del cual Pérez Celisseleccionó algunos poemas que la autora le proporcionó para producir sus“interpretaciones visuales”. En Sentir , trazos de colores sutiles con calidad

de acuarela acompañan sensualmente un rostro y una figura femeninainsinuada junto con la transcripción manuscrita del poema,39 mientras que enPasajero de la vida las transparencias se diluyen y las pinceladas más densasse destacan por debajo de dos formas triangulares que, a modo de collage ,ocupan el centro de la página junto con una cabeza de lobo en el centro, ligadoa los “lobos de la Vida” que el poema refiere. En definitiva, la proximidad de

la imagen y el color de Pérez Celis brinda a la lectura de textos poéticos unaexperiencia sensorial multiplicada.

IV

Por último, si en su plasmación como objeto a menudo un libro se produce apartir de una tarea conjunta, y de una colaboración intelectual y material, Elpesador del tiempo lo confirma en el texto introductorio:



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Este libro nació de un encuentro casi fortuito y de un entusiasmocolectivo. La novelista Luisa Mercedes Levinson y el editor HoracioGaglianone, ambos de paseo por París, se encuentran una noche en casadel pintor Pérez Celis… éste está mostrando al traductor francés ClaudeCouffon sus últimas obras, en las cuales formas, colores y metales seunen en una asombrosa metamorfosis, como entre los dedos mágicos.Todos hablan con mucho calor de trasmutaciones, de formas nuevas,de literatura fantástica y… de un libro en colaboración. Consultan a JeanCassou: éste conoce muy bien a Luisa Mercedes Levinson, descubre elarte de Pérez Celis y une su pluma prodigiosa a la experiencia original

que hoy presentamos.

En efecto, el libro reúne un relato junto con la reproducción de trecepinturas del artista, y puede inferirse que aquí el procedimiento fue inverso;

no se trata de interpretaciones visuales, sino que el propio texto fue producidoal calor de la imagen de Pérez Celis. El personaje del relato, un “pesadordel tiempo” de la ciudad de Armuth, trabaja con metales alquímicos y conotros materiales inasibles que descansan en los anaqueles de su torre, perotambién arroja piedras de ónix, cuarzo, lapislázuli. En ese mundo ficcionalque enfrenta al hombre y la muerte y en el que se encuentran un tiempomedido y un tiempo libre, los metales espejaban la muerte y el pesador seentregaba a una búsqueda de equilibrio en el peso del tiempo. Al respectode los materiales que utiliza Pérez Celis en sus pinturas y el sentido de esapráctica, Cassou afirma:

Algunos de sus procedimientos pueden parecerse a los de nuestroseuropeos, así como algunos de sus hallazgos técnicos, algunos empleosde materia les. En realidad tienen poco que ver con los “bricolages”,audaces desde luego y geniales, de nuestros mejores creadores. A pesarde tales parentescos, dichos procedimientos emanan de fuentes máshondas y como más ingenuas, es decir, más naturales. Aquellos con losque Pérez Celis incorpora elementos de oro y plata a su pasta pictórica

se atienen a arcaicas relaciones entre el hombre y los metales.

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Estas relaciones que aluden a la utilización de planos dorados y plateadosmanifestados también en el contexto discursivo que completa la tramacon algunos de los títulos de las obras reproducidas en el libro: Memoriade metales , Espejar las transformaciones , Metales alquímicos , a las que sesuman otras tales como: Poderes protectores , Planos de eternidad , Lenguajesagrado , Desde el horizonte, los metales , El plan de la naturaleza , Elevar

el pensamiento , y en las que especies de paisajes abstractos se llenan denubosos planos metálicos con figuras geométricas romboidales doradas oplateadas que se pliegan y sugieren desplazamientos en distintas direcciones.Las diagonales de los lados del romboide se replican visualmente en la puestaen página gráfica, conciliando el libro en su conjunto en un diálogo de formas.En efecto, el colofón informa que las fotografías y la idea gráfica correspondena Pérez Celis, lo cual enlaza la obra del artista con otra dimensión del hacervisual, el diseño.

Si bien el camino principal recorrido por Pérez Celis fue el de la pintura, sutrabajo tuvo eventuales vinculaciones con el diseño. Su caso describe tal vez,en los años formativos del diseño en la Argentina, las zonas de interacciónque unieron a esta disciplina con el arte, con el consiguiente flujo de ideas,estrategias o modos de visualidad. Pero esta permeable vinculación de redes

de intercambio de espacios y actores sociales describe, a su vez, tensionesen su diversidad de prácticas y representaciones. Aunque el artista mencionóen una entrevista que consideraba la existencia social del diseño como un“hecho fundamental en la estética cotidiana”, también declaró que su “pasiónsiempre fue la pintura”.41 Sin embargo, en los años 60 realizó diseño publicitarioy editorial, fue creador gráfico en la revista Ticket’s , trabajó para la agenciaAgens y, en 1962, fue director de arte de la editorial Abril. Él mismo lo relata:



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Más adelante, cuando ya pintaba, y también por razones económicas,comencé haciendo lo que en los 60 se llamaba dibujo publicita rio, ahorasería diseño gráfico. En ese sentido tuve la oportunidad de trabajar conDistéfano, Macció, Fontana, Polesello, de hacer una renovación de loque se llamaba la publicidad. Trabajaba en la agencia de Agens, que fuela primera agencia de Di Tella. Ahí hubo todo un cambio.42

Se sorprende, además, por el hecho de que la revista Print , que consagra unnúmero al diseño en la Argentina, coloque su nombre junto al de otros pioneros;también le dedica espacio a su hijo, el diseñador Sergio Pérez Fernández.Lo cierto es que tal vez Pérez Celis haya sido testigo, y protagonista, comolo expresa en la cita anterior, de lo que los diseñadores gráficos consideranun momento fundante para la disciplina y la práctica profesional, desdeemprendimientos como Agens, o la instalación del Departamento de DiseñoGráfico del Instituto Torcuato Di Tella, dirigido por Juan Carlos Distéfano, en elcual participaron, entre otros, Rubén Fontana y Juan Andralis.

A comienzos de los 60, en un contexto particular de crecimiento de laindustria nacional, Guido Di Tella, de la empresa Siam Di Tella –que conformabaen ese momento un imperio de quince fábricas y 16.000 obreros–, convocaa Ernesto del Castillo para establecer una estrategia que acompañara conpublicidad e imagen ese gran emprendimiento industrial. Surge allí, entonces,juntamente con el área de diseño industrial, el espacio de diseño gráfico.Además de Pérez Celis, formaron parte de la agencia Guillermo González Ruiz,Ronald Shakespear, Rómulo Macció, Rogelio Polesello, Alberto Potenza, JuanCarlos (“América”) Sánchez, Alfredo Rey, Alberto Di Mauro, Pablo Mesejean,Saúl Oscar Rojas, Roberto Alvarado, Martín Mazzei, Alberto Di Sciacio, MartínLobos, Carmelo Camerano y Pino Migliazzo. Más tarde se incorporó CarlosMéndez Mosquera, quien dirigía también la agencia Cícero. Agens produjoinnovaciones en las pautas publicitarias e intervino en la vida cultural del paíscreando programas de televisión, entre otras actividades.

Parte de las novedades introducidas en el campo del diseño tenían que

ver con el armado de la pieza gráfica en términos de composición, formas,tipografía, tratamiento del color y de la imagen fotográfica, la incorporaciónde recursos novedosos en la impresión, así como experimentación conmateriales.43 En definitiva, las nuevas herramientas técnicas e intelectualesse vinculaban con la atención a la tipografía más que a la ilustración, conla reflexión en la cualidad comunicativa de las formas y “la conciencia dela gráfica como un área autónoma, una práctica cultural identificable, conprocedimientos específicos”.44



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A pesar de que Pérez Celis retornó siempre al campo del arte, algunas desus imágenes intervinieron en la trama cultural y social de la visualidad aplicadaa través de la producción de cortinas, vestimenta, pañuelos estampados,vajilla. Estos objetos se suman a los avisos gráficos de Siam –testimonio desu pasaje por la publicidad– en los cuales los planos de color o las iconografíasamericanas se expanden por los caminos de la funcionalidad.

Finalmente, el itinerario recorrido articuló algunos aspectos de la obrade Pérez Celis, que conforma una parte de su producción proveniente delcampo editorial, escasamente conocida o menos visibili zada que sus pinturaso murales. En primer lugar, se trata de los libros gráficos en los cuales seriesde grabados (xilografías, serigrafías o linograbados) desplegaron recursos

visuales, experimentaron con técnicas y formas y favorecieron una difusiónampliada de la obra. En segundo lugar, se nos ofrecen las interpretacionesvisuales que conformaron una vía alternativa para la recepción de unacreación poética o de relatos literarios. Por otro lado, las cubiertas de libros y,finalmente, el ejercicio del diseño. Se ha mostrado cómo estas produccionesdevienen de procesos colaborativos de distinto carácter y cómo los modosde producción material y textual pueden modificarse e interactuar entre sícuando la autoría es conjunta.

Sandra M. Szir es doctora en Teoría e Historia del Arte por la Universidad de Buenos Aires, profesora

adjunta en Historia de la Comunicación Visual (UBA) y profesora de Historiografía del Arte (UBA,

UNTREF, UNSAM). Obtuvo becas de investigación en distintas instituciones. Autora del libro Infancia y

cultura visual. Los periódicos ilustrados para niños (1880-1910) y de artículos en libros, publicaciones y

congresos de la especialidad. Actualmente, es presidenta del Centro Argentino de Investigadores de

Arte y editora responsable de caiana , Revista de Historia del Arte y Cultura Visual del CAIA.

Notas

1 Agradezco la valiosa lectura de este texto a José Emilio Burucúa. Asimismo, mi reconocimientoa Cristina Rossi y Tamara Toma por el material aportado.2 Véase Marin, Louis, Opacité de la peinture. Essais sur la représentation au Quattrocento , Paris,

Éditions Usher, 1989, pp. 73-98.3 Véase, entre estos autores, a Didi-Huberman, Georges, Ante el tiempo. Historia del arte y

anacronismo de las imágenes , Buenos Aires, Adriana Hidalgo, 2008 [2000], y Moxey, Keith, Visual

Time. The Image in History , Durham-London, Duke University Press, 2013.4 Mitchell , W.J.T., Teoría de la imagen. Ensayos sobre representación verbal y visual , Madrid, Akal,

2009 [1994].5 Para algunas obras de referencia sobre los estudios, visuales pueden verse Bryson, Norman;

Con respecto al análisis de estos trabajos colaborativos, Mitchell sostieneque la tarea parece ser contradictoria; si se toma la imagen en un mensajeverbal, o un “discurso”, ésta desaparece en su visualidad. Si, por otro lado, serechaza el lenguaje, o se lo reduce a un mero sirviente de la imagen visual,la imagen permanece muda e inarticulada. “Palabra e imagen es una relaciónque abre un espacio de batalla intelectual, investigación histórica y prácticaartística”.45 Los dos términos designan múltiples regiones de prácticas socialesy modalidades visuales que se mueven y negocian en cada encuentro.Íntimamente ligadas, palabras e imágenes son órdenes de conocimientoque no pueden ser equivalentes. En el caso de Pérez Celis, en sus diversosformatos y soportes, en sus modalidades visuales sutiles o apasionadas, suimagen trasciende el control discursivo y se impone con su presencia enbusca de un espectador que sostenga la mirada.



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Holly, Michael Ann, y Moxey, Keith (eds.), Visual Culture: Images and Interpretation, Hanover-

London, 1994; Mirzoeff, Nicholas, The Visual Culture Reader , London-New York, 1998; Holly,

Michael Ann y Moxey, Keith (eds.), Art History, Aesthetics, Visual Studies , Williamstown, 2002;

Dikovitskaya, Margaret, Visual Culture. The Study of the Visual after the Cultural Turn, Cambridge,

Mass.-London, 2006, y Brea, José Luis (ed.), Estudios visuales. La epistemología de la visualidad

en la era de la globalización , Madrid, Akal, 2005, entre otros.6 Dolinko, Silvia y Plante, Isabel, “Registros de los sesenta. Experiencias visuales en la cultura

latinoamericana”, caiana. Revista de Historia del Arte y Cultura Visual del Centro Argentino de

Investigadores de Arte (CAIA) , nº 4, primer semestre de 2014.7 Elkins, James, The Domain of Images , Ithaca, Cornell University Press, 1999, p. ix.8 “Prólogo de la primera ed ición (1968)”. Texto de solapa, Demaría, Fernando, Pampa roja , tercera

edición, Buenos Aires, Ediciones del Hombre Nuevo, 1973.9 Una versión más breve, pero con el mismo título, había sido publicada por Demaría con la misma

editorial en 1959, aunque sin ilustraciones.10 Grabado en linóleo.

11 Alberto Blasi Brambilla, “Canto al hombre argentino y ecuménico. Pampa roja . Poema deFernando Demaría. Xilografí as de Pérez Celis”, Clarín, Buenos Aires, jueves 12 de diciembre de

1968.12 Editora fundada, entre otros, por Rafael Squirru.13 Véase Rossi, Cristina, “Pérez Celis. Testimoni o americano”, en este mismo volumen.14 La fábrica de papel Witcel, en Zárate, se había fundado en 1961.15 Blasi Brambilla, Alberto, op. cit.16 En relación con el grabado de los años 60 y 70 en la Argentina, sus tradiciones e innovaciones,

véase Dolinko, Silvia, Arte plural. El grabado entre la tradición y la experimentación, 1955-1973 ,

Buenos Aires, Edhasa, 2012, pp. 113-125.17 Blasi Brambilla, Alberto, op. cit.18 Carón, Gilberta Anatonia, Carlos María Carón (1935-2015). Escritor, crítico de arte, periodista,

profesor…, http:// www.metafrastaediciones.blogspot.com.ar (consultado el 1º de agosto de

2015).19 Entrevista personal a Mario Diament, agosto de 2015. Agradezco al escritor haber compartido

esta información.20 Gavril, Ursita, Destinos. El jardín de los deseos , Buenos Aires, Letra Viva, 2015.21 Solarte, Tristán, El ahogado , Buenos Aires, Compañía General Fabril Editora, 1962; Saad,

Ezequiel, Estado de alerta , Buenos Aires, Lengua de Dragón, 1965; Vilas, Guillermo, Cosecha

de cuatro , Buenos Aires, Galerna, 1981; Crespo, Enriqueta, El juego de la mirada , Buenos Aires,

Corregidor, 1994; Squirru, Rafael, Libros y libros. Cuadros y cuadros , Morón, Universidad deMorón, 1995; Vega Gramunt, Lucrecia, Máscaras y espejos , Buenos Aires, Ediciones Corregidor,

1996; Diament, Mario, Teatro , El libro de Ruth. Esquirlas , Cranston, The Writers’ Collective, 2003;

Carballo, Juan Eduardo y Coletti, Gustavo, Un tal Gardel , Buenos Aires, Ediciones Pasco, 2005;

Grassi, Juan Carlos y Castex, Jorge E., Puntos de encuentro. La industria de las convenciones ,

Buenos Aires, Ferias y Congresos, 2005; Merlino, Willie, Gotas de amor , Tenerife, Editorial Ob

Stare, 2007; Álvarez Bravo, Armando, Cabos sueltos , Miami, Ediciones Universal, 2007; Leloir,

Adela, Los signos , Ediciones del Hombre Nuevo, 1958; Carón, Carlos María, Anatonia , Buenos

Aires, Colección La Sillita de Oro, 1965; Carón, Carlos María, Poemas endovenosos , Buenos

Aires, Editorial Cuarto Mundo, 1975; Couffon, Claude, Corps Automnal , Paris, Caractères, 1981;

Bioy Casares, Adolfo, Los afanes , prólogo de Jorge Luis Borges, Buenos Aires, Ediciones de

Arte Gaglianone, 1983; Parisier, Alicia, Pasajero de la vida , Buenos Aires, Nuevo Hacer, 2001,

entre otros. Los fragmentos de Heráclito , introducción, traducción y comentarios de Fernando

Demaría, Buenos Aires, Ediciones del Hombre Nuevo, 1972; Levinson, Luisa Mercedes, El

pesador del tiempo , Buenos Aires, Ediciones de Arte Gaglianone, 1980.22 Mitchel, W.J.T., “Word and Image”, en Nelson, Robert S. y Shiff, Richard (eds.), Critical Terms for

Art History , Chicago-London, The University of Chicago Press, 1996, p. 49.23 Idem.24 Dolinko, Silvia, Arte plural , op cit.25 Carón, Gilberta Anatonia, op. cit.26 El papel utilizado es Witcel Ledger para el texto y Witcel Témpera para las serigrafías.27 La muestra Tapices y dibujos (1965) incluía las siguientes obras. Tapices: Magia en la Aurora en

Anatonia , Magia en rojo en Anatonia , Magia nocturna en Anatonia , Sol incansable en Anatonia ,

Ojo de sol en Anatonia , Inti Raymi en Anatonia , Anatonia: caminos al sol . Dibujos: Anatonia:

¿dónde estás? , Anatonia perdona a la muerte , Primer encuentro con Anatonia , Entrega de sol deAnatonia , El sol negro de Anatonia.28 “…Y llega ron a una ciudad”, Primera Plana , Buenos Aires, 20 de abril de 1965.29 “Indagación y hallazgo en la poesía y el color. ‘Anatonia’, canto de Carlos María Carón. Serigrafías

de Pérez Cel is”, Clarín, Buenos Aires, s/d, 1965.30 Dolinko, Silvia, op. cit., pp. 113-125.31 Véase “Cronología” en este mismo volumen.32 Entrevista a Pérez Celi s en Börzlin, Karl , “Pérez Celis Interpre ts Walt Whitman”, Buenos Aires

Herald , Buenos Aires, 15 de agosto de 1999 [Traducción de la autora].33 Diament Mario, citado en “Whitman, Borges y Pérez Celis confluyen en un libro. Se trata de

Hojas de hierba , del gran escritor americano”, en El Argentino. Mercosur , diciembre de 1999.34 Squirru, Rafael, Las pinturas de Pérez Celis para las Hojas de hierba de Walt Whitman, en

Whitman, Walt, Hojas de hierba , Buenos Aires, Juárez Editor, 1999, p. 17.35 Ibid. p. 18.36 Gabin, María José, Pérez Celis: mi padre , Buenos Aires, Galerna, 2007, p. 23.37 Le Men, Ségolène, “La question de l’il lustrati on”, en Chartier, Roger (dir.), Histoires de la lecture.

Un bilan des recherches , Paris, IMEC Éditions, 1995, p. 229.38 Squirru, Rafael, op. cit., p. 17.39 Parisier, Alic ia, “Senti r”, en El pasajero de la vida , pp. 16-17.40 Cassou, Jean, “Prólogo”, en Luisa Mercedes Levinson , El pesador de tiempo , Buenos Aires,

Ediciones de Arte Gaglianone, 1980, p. 15.41 “Reportaje. Pérez Cel is”, D-Signos , a. 1, nº 4, Tucumán, noviembre de 1999.42 Idem.43 Devalle, Verónica,La travesía de la forma. Emergencia y consolidación del diseño gráfico (1948-

1984) , Buenos Aires, Paidos, 2009, p. 303.44 Ibid., p. 311.45 Mitchel, W.J.T., “Word and Image”, en Nelson, Robert S. y Shiff, Richard (eds.), Critical Terms for

Art History , Chicago-London, The University of Chicago Press, 1996, p. 49.

http://www.metafrastaediciones.blogspot.com.ar/

http://www.metafrastaediciones.blogspot.com.ar/



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Nuestra sangre, 1989Colección Presidencia de la Nación – Secretaría General

Nuestra sangre, 1989Colección Presidencia de la Nación – Secretaría General



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La presente revisión documental de los trabajos de Pérez Celis (Buenos Aires 1939-2008) permite observar la magnitud de una carrera artística que, al día de hoy, sumacasi sesenta años de actividades expositivas (1956-2015). El recorrido cronológicoque se desarrolla a continuación da cuenta de su vasta producción en dibujo, pintura,escultura y grabado –exhibida en diferentes instituciones, galerías, salones y bienales–,sus principales realizaciones en arte mural y esculturas emplazadas en espacios públicos y privados, así como su participación en diseño e ilustración de proyectoseditoriales.El trabajo de revisión de las exposiciones individuales y colectivas se ha documentadomediante la consulta de catálogos, invitaciones y notas. En todos los casos en que elregistro lo permitió, se han consignado las fechas de comienzo y final de las exhibicionesy sus prólogos, así como las principales críticas o reseñas publicados en los mediosgráficos argentinos y del exterior. Los datos que no se han podido confirmar, perohemos atribuido, se presentan entre corchetes. Para evitar repeticiones, se omitió laciudad de publicación del medio gráfico todas las veces que coincidía con la ubicación

del espacio donde se desarrolló la actividad reseñada.Las fuentes primarias consultadas en el Archivo Pérez Celis fueron complementadascon los materiales documentales obtenidos en la Fundación Espigas, la Biblioteca delMuseo Nacional de Bellas Artes, el Centro de Documentación del Museo de ArteModerno de Buenos Aires y el Archivo de Arte Argentino del Museo de Artes PlásticasEduardo Sívori, repositorios a los que agradecemos especialmente.Finalmente, es importante tener en cuenta que, si bien se han profundizado los trabajosde reconstrucción de su trayectoria, la dinámica tarea de este artista –extendida nosolo a través del tiempo, sino t ambién en diferentes localizaciones– nos exige deponercualquier pretensión de exhaustividad. No obstante, esperamos que nuestro esfuerzode búsqueda contribuya a la realización de futuras investigaciones.

1955• Realizó el mural Los soñadores , en una vivienda ubicada en la calle Timoteo Gordillo

en Liniers.

1956• [Pérez Celis ], galería La Fantasma, Buenos Aires.Mencionada en J.A. García Martínez , “Luz, sombras, asombro”, en Histonium, 1961.• “Salón MEEBA”, Buenos A ires.

• “Salón de Pintores de Liniers”, Buenos Aires. Obtuvo el segundo premio.

1957• “Salón Anual de la Sociedad Hebra ica Argentina”, Buenos Aires.

1958• “XI Concurso de Croquis, Manchas y Bocetos Escultóri cos”, Buenos Aires, julio.

Obtuvo el Premio Editorial Kapelusz en la sección Pintura.• Pinturas , Asociación Belgrano, Buenos Aires, 28/7-8/8, junto a Moyano, Duarte y

Coppola.

PÉREZ CELIS

Un recorrido a través de sesenta añosCRONOLOGÍA DOCUMENTADA

MILENA YOLIS



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• “VIII Concurso Anual de Estímulo”, Sociedad Hebra ica Argentina,Buenos Aires, 8-23/8.

• Siete pintores abstractos , Salón Primavera, Teatro El Gorro Escarlata,Buenos Aires, 22/9, juntamente con Duarte, Mellino, Orlandi, Polesello,Santander y Wells.

• La calle en manchas , Los Independientes, Buenos Aires, 13-26/10.Obtuvo el segundo premio.

• “Primer Salón del Centro Argentino de Grabadores Modernos”, galeríaPeuser, Buenos Aires.

• Reseñada por Elena F. Poggi, “Salón de Grabadores”, en El Nacional ,1958.

• “Primer Salón del Centro Argentino de Grabadores Modernos”,Museo Provinc ial de Bellas Artes “Emilio A. Caraffa”, Córdoba, 6/11.En la inauguración disertó el profesor Fernando López Anaya sobre “Elgrabado y su técnica”.

• “Salón Blanco sobre Negro”, Centro Argentino de GrabadoresModernos, Asociación Estímulo de Bellas Artes, Buenos Aires, 17-29/11.

• “IV Salón Estímulo de Arte en La Plata”, La Plata , Buenos Aires. Obtuvoun premio estímulo en la sección Grabado, Dibujo y Monocopia por suobra Vivismo en gris y negro .

• Seleccionado para la adquisición del Museo de Arte Moderno de Ríode Janeiro.

• Panorama de la pintura argentina , Ungaro & Barbará, Buenos Aires,acompañada por texto “160 años de pintura argentina”, de CórdovaIturburu.

• Ilustró el libro de Adela Leloir Los signos , de Ediciones del HombreNuevo, Buenos Aires.

1959• Exposición de arte moderno rioplatense , Museo de Artes Plásticas

“Eduardo Sívor i”, auspiciada por el Museo de Arte Moderno, BuenosAires, marzo/abril, juntamente con el Grupo de los 8, Uruguay; el GrupoEspartaco y el Grupo Geométrico, entre otros.

• “XVIII Salón de Arte de Mar del Plat a”, Mar del Plata, Hotel Provincial,Mar del Plata, 7-31/3. Participó en la sección Grabado.

• “IX Concurso Anual de Estímulo”, Sociedad Hebra ica Argentina , Buenos

Aires, 7-19/11. Obtuvo mención en pintura para su óleo Movimientoglobal .• Realizó un mural de 2,80 x 2,50 m en chapa e hierro forjado, emplazado

en Montevideo.• Creó un mural en bajorrelieve de 3 x 6 m en Buenos Aires. La obra fue

hecha en yeso policromado.

1960• Movimiento de Arte No Figurativo , Subte Municipal, Montevideo (abril).• Reseñada por Garrido Vidal, “Muestra de Arte No Figurativo”, en Acción,

1960.

• Exposición de Arte No Figurativo , Taller de Raúl Lozza, Humberto I1717, auspiciada por el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires,1-22/6. Se dictaron las conferencias “El arte como problema socia l”,de Bernardo Graiver ; “Consideraciones sobre el arte abstracto”, dePaulina Berlatzki, y “La pintura moderna y su ubicación en la cultura”,de Abraham Haber.

• “Premio Ver y Estimar”, galería Van Riel, Buenos Aires, hasta 4/6.Ver: H.A.J., “La generación joven de Ver y Estimar”, s/d.• Pérez Celis , Galería “H”, Buenos Aires, auspiciada por el Museo

de Arte Moderno de Buenos Aires, 3-15/11, con prólogo de JorgeFeinsilber y acompañada por texto de Fernando Elizalde.

Reseñada en “Noticias del acontecer ar tístico”, en SuplementoLiterario , Clarín, s/f, y “Cuadros y relieves de Pérez Celis”, s/d.

• Primera exposición internacional de arte moderno argentino , Museode Arte Moderno de Buenos Aires, noviembre, prologada por RafaelSquirru. Participó con su obra Máquina orgánica .

• Seis pintores argentinos , Rotary Club de Vicente López, Buenos Aires.

1961 • Pérez Celis , galería Rubbers, Buenos Aires, auspiciada por el Museo

de Arte Moderno de Buenos Aires, 31/5-14/6, prologada por RafaelSquirru.

Reseñada por [Manuel Mujica Lainez], “Pérez Cel is”, en La Nación,11/6; Hugo A. Parpagnol i, “Pérez Ce lis”, en La Prensa , s/f; J.A. GarcíaMartínez, “Luz, sombras, asombro”, en Histonium, s/f, y “La bolsa delas artes plásticas”, s/d.

• Cuarenta años de pintura argentina , Museo de Arte Moderno de Ríode Janeiro, Brasil, acompañada por texto de Romero Brest.

• Realizó un mural de cemento y cobre en alto y bajorrelieve de 2 x 5m en la fábrica Alámbrica, afiliada a la empresa SIAM y ubicada enMorón, provincia de Buenos Aires.

• Mencionado en J.A. García Martínez, “Otras dimensiones delmura lismo”, en Histonium, j ulio/1962.

1962• “Premio Ver y Estimar”, Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos

Aires.

• Reseñado por Hernández Rosselot, “El premio Ver y Estimar a MitreAguir re”, en La Razón, abril.• Pérez Celis , galería Rubbers, Buenos Aires, 19/7-1º/8, en el catálogo

se reproducen fragmentos de textos de Manuel Mujica Láinez, HugoParpagnoli, Catherine Ward, Sigwart Blum, Germaine Derbecq,García Martínez, Jorge Feinsilber.

Reseñada por Catherine Ward, “Stripped for action… Round theGaller ies”, en Buenos Aires Herald , 23/7; [Manuel Mujica Lainez],“Pérez Celis”, s/d, 7/8; Alicia Casais, “Pérez Celis, pin tor de lonuestro”, en Bancarios , s/f; “Muestra pictór ica”, en El Mundo , 25/7;

Salón Blan co sobre Negro”, Centrogentino de Grabadores Modernos

Exposición de Arte No Figurativo ,Taller de Raúl Lozza, Humberto I 1717,auspiciada por el MAMbA.

Pérez Celis , galería Rubbers, BuenosAires, auspiciada por el MAMbA.



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R.G.T., “Pérez Celis”, en Clarín, 8/8, y Hugo A. Parpagnoli , “Pérez Celis”,en La Prensa , s/f.

• El hombre antes del hombre. Exposición de cosa s, galería Florida,Buenos Aires, auspiciada por el Museo de Arte Moderno de BuenosAires, 7-30/9, juntamente con Santantonín, Barilari, Ciordia, De losReyes y Díaz Hermelo, entre otros. Con prólogo de Rafael Squirru ypoesías de Federico González Frías y Raquel Sylva.

• “LI Salón Nacional de Artes Plásticas Argentino”, Salas Nacionales deExposición, Buenos Aires, 21/9 -21/10. Participó en la sección Grabadocon la xilografía Después del sol .

• Realizó un mural de cemento en alto relieve de aproximadamente 2,5x 9 m en la fábrica Brousson en Coghlan, afiliada a la empresa SIAM.

• Mencionado en [Jorge Glusberg] , “Un mural americano de Pérez Celis”,en Análisis , nº 307, 30/1/67, y J.A. García Martínez, “Otras dimensionesdel muralismo”, en Histonium, julio.

• Realizó el mural Fuerza América en Calvo y Cía. Automotores,Rivadavia 6140, Buenos Aires, con la colaboración del escultor César

Sondereguer y Jorge Pérez. Se trata de un altorrelieve de cementoarmado con salientes de hasta 1,50 m y una extensión de 5 m de altopor 15 m de largo.

Reseñado por Carlos María Carón , “El milagro de América”, s/f; RafaelSquirru, “Murales y arquitectura, una posibilidad para la creacióncomún”, en Primera Plana , s/f; [Juan Carlos Morell], “A 4.000 km sintióel Perú”, en Caretas , Lima, [1963]; Catherine Ward, “Mural dwarfs manin truck showroom”, en Buenos Aires Herald , 10/12. y “Cinco toneladasde arte”, en Panorama , s/f.

Mencionado en [Jorge Glusberg], “Un mural amer icano de Pérez Celis”,en Análisis , nº 307, 30/1/67.

Nicolás Rubio filmó el cortometraje sobre la realización del mural FuerzaAmérica , en película de 16 mm.

• Realizó un mural en relieve de cemento de 3 x 1,5 m en Avellaneda,

provincia de Buenos Aires.• La Compañía General Fabril Editora, Buenos Aires. publicó El ahogado ,

de Tristán Solarte, con cubierta ilustrada por Pérez Celis.

1963• “I Salón de Arte”, Sociedad Israelita Juvenil de Avellaneda, Buenos

Aires, 11/1 al 1º /2.• Marta Acal, Esculturas; Pérez Celis, Pinturas , galería Witcomb, Buenos

Aires, auspiciada por el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires,17-29/6.

Reseñada por E .R., “Marta Acal y Pérez Cel is”, en La Prensa , 26/6; JuanCarlos Pell anda, “Artes Pl ásticas”, en La Calle , Río Cuarto, 4/7, y [Elpintor, grabador y muralista…], en Claudia , 1963.

• Arte de América y España , Palacio de Velázquez, Parque del Retiro,Madrid, mayo-junio, junto con Pucciarelli, Seguí, Testa, Sakai y Alonso,entre otros.

Ver: “Artist as argentinos que partic ipan en la muestra de Madrid”, enLa Prensa , 10/5.

• “Premio Ver y Estimar”, Museo Nacional de Bellas Artes, BuenosAires.

1964• Galdos Rivas, Monti, Nieri, Pérez Celis, Shinki, Milner C., galería

Goya, Lima, 21/2-7/3.• Pérez Celis , Instituto de Arte Contemporáneo, Lima, 12-23/5,

prologada por Rafael Squirru, director del Departamento de AsuntosCulturales de la Unión Panamericana.

Reseñada en “Un pintor con alma ameri canist a”, en El Comercio , 2/5;“Dos muestras en el I.A.C.”, en El Comercio , 11/5; “Un cielo para unpintor”, s/d, 11/5; [“Muy concurrida...”], en El Comercio , 12/5; “Dosexposiciones inauguran esta noche en el I.A.C”, en La Prensa , 14/5, yCarlos Rodríguez Saavedra, “Exposiciones”, s/d, 17/5.

• Artistas sudamericanos , Museo Nacional de Arte, Lima.•

Relieves ’64 , Relieve Galería de Arte, Buenos Aires, desde 9/11,prologada por Jorge Romero Brest [“Relieves en esta nueva galería”]y Marta Traba [“Los jóvenes pintores argentinos. Los escultoresjóvenes argentinos”], juntamente con Deira, De la Vega, Polesello yWells, entre otros.

• Realizó un mural en relieve de hierro de 1,50 x 2,50 cm en la ciudadde Lima, Perú, y otro relieve de madera para la oficina de la sedelimeña de la compañía de aviación Iberia.

1965• “Primer Salón de Artistas Jóvenes de América Latina ESSO”,

Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, 8-15/1, convocado porla Organización de los Estados Americanos, juntamente con Aciar,Alzugaray, Badaracco y Benedit, entre otros. Pérez Celis presentóDe la tierra con sol y “Vivir en América .

Reseñado por Hernández Rosselot, “Artistas jóvenes de Lat inoamérica”,en La Razón, 2/5, y “Primer Salón de Artistas Jóvenes de AméricaLatina”, s/d.

• “Vigésimo Cuarto Salón de Arte de Mar del Plata”, Hotel Provincial,Mar del Plata, 22/2-21/3.

• Tapices y dibujos , galería El Sol, Buenos Aires, 26/4-15/5, con prólogode Carlos María Carón.Reseñada en “¿Quién es Anatonia? Véala en tapices”, s/d; María

Magdalena, “Un talentoso pintor joven”, s/d; “…y llegaron a unaciudad”, en Primera Plana , 20/4; “Pérez Cel is”, en La Prensa , s/f, yJ.P.C., “El sol de Anatonia bri lla sobre América”, s/d.

• Pérez Celis, Luis Alberto Wells, galería Bonino, Buenos Aires, 14-30/06, con prólogo de Jorge Romero Brest.

Reseñada en Córdova Iturburu, “Pérez Celis y Luis Wells”, en ElMundo , 19/6; Hernández Rosselot, Cielotierra: Wells, González yPérez Celis , en La Razón, 19/6; [Germaine Derbecq], “Pérez Celis

érez Celis , galería Rubbers, Buenosres, auspiciada por el MAMbA.

arta Acal, Esculturas; Pérez Celis,nturas , Galería Witcomb, Buenosres, auspiciada por el MAMbA.

Pérez Celis , Instituto de ArteContemporáneo, Lima.

Tapices y dibujos, galería El Sol,Buenos Aires.



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et Wells à la Gale rie Bonino”, en Le Quotidien, 28/6, y Manuel MujicaLainez, “Pérez Celis y Wells”, en La Nación, 30/6.

• Tapices , Dirección de Cultura, La Plata, 7-18/7, juntamente con BatllePlanas, Boucher-Pardal, Butler y Cutuli, entre otros.

• Jóvenes artistas argentinos , Instituto de Arte Contemporáneo, Lima,3-14/8, juntamente con Brizzi, Deira, De la Vega, Macció, entre otros,grupo seleccionado por Alfredo Bonino, con prólogo de GuillermoWhitelow.

• “Premio Nacional del Instituto Torcuato Di Tella”, ITDT, Buenos Aires,1°-23/9. Participó con los siguientes óleos: El pájaro vuela sobreAnatonia en vías de prosperidad, Grito fantasmal de la tierra, Místicaal sol y Devenir del sol en Anatonia.

Ver: “El inesperado equi librio”, en Confirmado , 16/9.• Ediciones La Lengua del Dragón, de Buenos Aires, publicó Estado de

alerta , de Ezequiel Saad, con una obra de Pérez Celis reproducida enla tapa.

• Realizó un mural en relieve de cemento de 2 x 10 m, ubicado en la

calle Melo de la ciudad de Buenos Aires.

1966• “Quinta Bienal Internacional del Grabado”, Tokio, enero.• Pérez Celis , galería Vignes, Buenos Aires, 6-26/5, prologada por Carlos

María Carón.Reseñada en “Pérez Celis”, en La Nación, 28/5; “Pérez Celis, el regreso

a la pintura”, en Confirmado , 19/5; [Jorge G lusberg], “Pérez Celis”, en Análisis , nº 271, 23/5, y Hernández Rosselot, [“En la flamante galeríaVignes…”], en La Razón, s/f.

• “Premio Fundación Mar ía Calderón de la Barca”, galería Witcomb,Buenos Aires, 19/9-1º /10.

• Pérez Celis , galería Rubbers, Buenos Aires, 4-18/11, prologada porCarlos María Carón.

“Pérez Cel is”, en La Nación, 27/11• Máximo 40 x 50 cm, galería Bonino, Buenos Aires, 6/12-6/1º/67,

juntamente con Basaldúa, Borla, Brizzi y Butler, entre otros.• Geografía argentina, paisajes y costumbres , galería Van Riel, Buenos

Aires, desde 12/12, juntamente con Barragán, Castagnino, Daneri yLozza, entre otros.

1967• “Primer Salón Hisisa de Arte Aplicado a la Industria Textil”, galería

Witcomb, 4-15/4.• Misa criolla , galería Rubbers, Buenos Aires, 23/6-8/7, con prólogo de

Ariel Ramírez y Fernando Demaría.Reseñada por Hernández Rosselot, [“Otras exposiciones...”], en La

Razón, s/f, y Basili o Uribe, “Pérez Cel is”, s/d; “Ramírez y Celis: dosversiones de la Misa Criolla”, en Imagen del País , s/f, y “Pérez Celis”,en La Nación, 8/7.

• Serigrafías , galería Carrillo, Rosario, 4-15/7.

Reseñada en “Nuevas exposiciones en Carril lo”, en La Capital , 4-7, yM.M., “Pérez Cel is-Carr illo”, s/d.

• Pérez Celis of Argentina , Unión Panamericana, Washington D.C.,30/10-19/11, con prólogo de José Gómez-Sicre.

Reseñada por Fernando Demaría, “Pérez Celis: Una imagen deAmérica”, en Américas , s/f; Héc tor Raúl Tardiani, “Un ‘melenudo’”,en La Nación, s/f; [Invitado por la División…], en Boletín delDepartamento de Adherentes I.T.D.T., enero 1968.

• Pintores y escultores en el grabado , Sociedad Hebraica Argentina,Buenos Aires, juntamente con Alonso, Badii y Batlle Planas, entreotros.

• “X Exhibición Inte rnacional de Arte”, Beirut.• Realizó un mural en relieve de hierro de 1 x 2 m, ubicado en la calle

Salguero de la ciudad de Buenos Aires.• Realizó un mural en la sucursal Formosa del Banco Nación, con la

colaboración de Jorge Pérez y Eduardo Valencia; se trata de una obraen relieve de cemento de 3 x 19 metros.

Reseñado por [Jorge Glusberg], “Un mural americano de Pérez Celis”,en Análisis , nº 307, 30/1/67; Sebastián Díaz Roig, “El mural del BancoNación”, en Formosa , 27/1; “Un conocido artista en Formosa: Realizaun mural en Banco Nación”, s/f, y [“Pérez Ce lis, el grabador, pintor ydibujante…”], s/f.

1968• “LVII Salón Nacional de Artes Plást icas Argentino”, Salas Nacionales

de Exposición, Buenos Aires, 21/9-19/10, obtuvo el Premio “CoronelCesáreo Díaz” de la sección Grabado por su obra Pampa roja .

• “Festival de las Artes de Tandil. Premio de Grabado”, MuseoMunicipal de Bellas Artes de Tandil, Tandil, 19/10-9/11. Participó conlas siguientes obras serigráficas: Alternativa , Sayheque , Gran padreapastador del río , Vita ventru y Hongo para la paz . Recibió el PremioMunicipal de Tandil en la sección Grabado.

Reseñado por Kenneth Kemble, “Las ideas: los críticos frente a loscríticos”, en Artiempo: revista mensual de arte y espectáculos , a. 1,nº 2, Buenos Aires, noviembre, y “Entrega de premios del Festivalde las Artes de Tandil”, s/d .

• “Primer Sa lón Swift de Grabado”, Museo de Arte Moderno deBuenos Aires, 4-20/10. Obtuvo el tercer premio adquisición para suobra serigráfica Reuquecura .

Reseñado en “El Sa lón Swift”, en La Prensa , 25/10.• Pérez Celis, Serigrafías . Adhesión al mes del grabado, Biblioteca

Lincoln, Buenos Aires, 4-21/10 con prólogo de Philip J. Conley.• Artistas argentinos, obras de París y Buenos Aires , Instituto Torcuato

Di Tella, 29/11.Ver: “Arte a lqui lado”, en La Razón, 7/12.• Pérez Celis, Serigrafías , galería Mar del Plat a, Mar del Plata, 14-28/12.

Premio Nacional del Institutorcuato Di Tella”, ITDT.

Misa criolla , galería Rubbers,uenos Aires.érez Celis y Ariel Ramírez en elstudio de la Boca.

Pérez Celis of Argentina , UniónPanamericana, Washington D.C.

“LVII Salón Nacional de ArtesPlást icas Argentin o”,Salas Nacionales de Exposición,Buenos Aires.



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“Premio Experiencias Visuales”, Casa Argentina en Israel - Tierra Santa,Buenos Aires.

Mencionado en “Fue inaugurada ayer la exposición de Pérez Celis”, enNueva Era , 4-11.

• Art Museum East Tennessee State University, Estados Unidos.• Ediciones del Hombre Nuevo, de Buenos Aires, publicó Pampa

roja , con poemas de Fernando Demaría, nueve xilografías y cientocincuenta linograbados de Pérez Celis. Obtuvo el premio al libro mejoreditado de 1968 en la Categoría “B” 2º, Libros de literatura generalcon intención artística, con ilustraciones en negro o color, otorgadopor la Fundación Interamericana de Bibliotecología Franklin.

Reseñado por Alberto Brasi Brambilla, “Canto al hombre argentinoy ecuménico”, en Clarín, 12/12; “Otorgan premios a los libros mejoreditados del año último”, en La Razón, 24/8, y “Pampa Roja, deFernando Demaría, en varios grabados de Pérez Celis”, en GeneralPico , General Pico, 15/4.

1969• “VI Gira, Obras del LVII Salón Nacional”, Teatro Auditor ium, Casino

Central, Mar del Plata.• “LVII Salón Nacional de Artes Plást icas. Obras premiadas”, La Rioja.• Pérez Celis , Art Gallery International, Buenos Aires, 12-30/5,

acompañada por texto de Carlos María Carón, “Arte Extemporal”.Reseñada en “Pérez Cel is”, en La Nación, 17-5; “Pérez Celis: Espacio

y Pampa Roja”, en La Razón, s/d; “Pérez Celis”, en Clarín 22-5; “PérezCelis y el paisaje de La Pampa”, en Primera Hora , La Pampa, 28/5;“La Pampa y el espacio unido por un pincel. Una pintura que todoscomprenden”, en Crónica , 1º-6; Germaine Debecq, “Art Gallery, PérezCelis-Dávila”, en Le Quotidien, 7-7; “Plástica”, en Confirmado , s/f;“Un folklore metafísico”, en Análisis , s/f, y “Espacialidad y cr ítica”, enConfirmado , s/d.

• Arte y deporte en los 50 años de El Gráfico , galería Rubbers, 30/5-14/6, juntamente con Alonso, Borla y Castagnino, entre otros.

Ver: “Pérez Celis”, en La Reforma , 23/5.• “Festival de las Artes de Tandil. Premio de Pintura”, Museo Munic ipal

de Bellas Artes de Tandil, Tandil, 13/9-12/10. Participó con un acrílicosobre tela titulado Paisaje extemporal .

• “LVIII Salón Nacional de Artes Plásticas Argentino”, Salas Nacionalesde Exposición, Buenos Aires, 1º-19/10, obtuvo el Premio “AsociaciónAmigos de la Escuela Superior de Bellas Artes de la Nación Ernestode la Cárcova”, de la sección Pintura, por su acríli co Consagración a laluz y a la vida .

Ver: “Los premios: Palanza y 58 Salón Nacional”, en La Razón, 11/10.• Pérez Celis , galería del Centro Argentino por la Libertad de la Cultura,

Buenos Aires, 1º-17/10.• Pérez Celis , galería Pardo, Buenos Aires, 15-30/10.•Aizenberg, Borda, Borla, Brizzi, Butler, Gerstein, Luna Ercilla, Pérez Celis,

Rubli, Seoane y Sinclair , galería Maxiart, Buenos Aires, 30/10-21/11.

• Pérez Celis, bodas de oro diario Nueva Era , Sala José A. Cabra,Tandil, 3-16/11.

Ver: “Fue inaugurada ayer la exposición de Pérez Celis”, en Nueva Era ,4-11.

• El arte y el niño , con motivo de las bodas de oro de la revista Billiken,galería Fogel, Furst y Asoc., 5-22/12, juntamente con Alonso, Berni,Castagnino, Centurión, Ideal Sánchez, Leff, López Claro, Macció,Marchese, Mónaco, Soldi, Urruchúa, Venier y Verdié.

Ver: [“Abraham Fogel…”], en Gente , 11/12.

1970• [Pérez Celi s], Instituto de Promoción de las Artes, Baradero, en el

marco de las “Jornada de Artes de Baradero ’70”, Municipalidad deBaradero, 7-21/1.

Reseñada en [“Se encuentra realizando en…”], en Antorcha , 10/1;“Pérez Celis , su muestra pictórica en Baradero ’70”, en Impacto ,10/1, y “Baradero, muestra pictórica”, en Clarín, 12/1.

• Seis pintores argentinos, galería Lady Madonna, Bariloche, 15-31/1.• Autorretratos , galería Fogel, Furst y Asoc., 3-17/4, con la participación

de Alonso, Balduzzi, Berni y Verdié, entre otros.• Paisajes de Luz a la luz eterna , Centro de Arte Integra, Buenos

Aires, 9-30/4, con prólogo de Rafael Squirru, “Sol para un paisajeamer icano”.

Reseñada por E.R., “Las nuevas obras de Pérez Celis”, en La Prensa ,15/4; Betty Huberman, “Visual Arts”, en Buenos Aires Herald , s/f;“Notas de arte: Pérez Celis”, en La Razón, 18/4; M.S. “Pérez Celisy el sol amer icano”, en Raíces , junio; “Pérez Ce lis”, en Clarín, 23/4, y“Pérez Celis” en La Nación, 11/4.

• Muestra del grabado , galería Langdon, Buenos Aires, 16-31/7,juntamente con Armagni, E. Audivert, P. Audivert, Balán y Berni,entre otros.

• Domingo Gatto, Pérez Celis, Leopoldo Presas , galería Langdon,Buenos Aires, 3-16/8, prologada por Carlos María Carón.

• [Pérez Celis ], Sala de Arte Walter Thompson Argentina, BuenosAires, 2-30/9.

Reseñada en “Reuniones culturales en J. Walter Thompson”, en ElCronista Comercial , 16/9; “Artist as en Walter Thompson”, Mundo

Israelita , 19/9; “Vínculo: empresa y ar te”, en Síntesis de la Industria ,17/9, y “Ciclo de reuniones culturales”, en El Economista , 18/9.• “LIX Salón Nacional de Artes Plásticas”, Salas Nacionales de

Exposición, Buenos Aires, 21/9-18/10, obtuvo tercer premio por suacrílico Al encuentro del camino .

Reseñado en “Fueron otorgados los premios del LIX Salón Nacional”,en Clarín, 16/9, e “Inauguróse el 21 el LIX Salón Nacional de Pinturay Escultura”, en La Prensa , 18/9.

• Homenaje 25 º Aniversario Naciones Unidas , galería Perla Marino,Buenos Aires, 20/10-19/11, juntamente con Aizenberg, Barragán yBrizzy, entre otros.

érez Celis , Art Gallery International,uenos Aires.

“LIX Salón Nacional de ArtesPlásticas Argentino”, SalasNacionales de Exposición,Buenos Aires



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• 30 pintores argentinos , Circe Arte, organizada por la Escuela Superiorde Comercio “Car los Pellegrini”, Buenos Aires, 14-24/10.

• Víctor Chab, Pérez Celis , exposición enviada por el Ministerio deRelaciones Exteriores y Culto a diversos museos de América, laprimera en el Museo de Bellas Artes de México, prologada por RafaelSquirru y Aldo Pellegrini.

• Se publicó A Sara compañera , de Pérez Celis, edición de veinticincocajas de madera con seis l itografías tiradas, firmadas y numeradas porel artista, acompañadas por el poema “El bambú de la ventana”, de LiHochu, impreso por Rotype, Buenos Aires, julio/agosto.

• Realizó dos murales en residencias particulares. Uno, con aplicacionesde fragmentos de espejos añejados y oro a la hoja titulado Oro yespejos y, otro, con la colaboración de Sergio Pérez Fernández, bajo eltítulo Mosaico veneciano , realizado con venecitas.

1971• Grabado, Arte para todos , Art Gallery International, Buenos Aires, 12-

30/04, junto con Audivert, Balan, Beccaria y Berni, entre otros.• Tapices y alfombras contemporáneas , Museo de Artes Pláticas

“Eduardo Sívor i”, Buenos Aires, 20/4-19/5, juntamente con C. Alonso,Berni, Bettinelli, Blitz y Butler, entre otros.

• Manuel Oliveira, pinturas; Mariano Pages, esculturas; Pérez Celis,pinturas , Gran Hotel Dorá-Galería de Arte, Buenos Aires, 16-30/9.

• “LX Salón Nacional de Artes Plásticas Argentino”, Salas Nacionales deExposición, Buenos Aires, 21/9-18/10. Participó en la sección Pinturacon el acrílico sobre tela Nuestra morada.

• “Bienal Mundia l de París”, septiembre, envío único en representaciónde la Argentina, seleccionado por la Dirección de Cultura del Ministeriode Relaciones Exteriores (jurados: Rafael Squirru, Fermín Fè vre ySamuel Paz).

Ver: Bernardo Acuña, “Pérez Celis: de l a Boca a París”, en Semana , s/f.• Grandes maestros y jóvenes talentos , Gas del Estado, Buenos Aires,

9-23/3, organizada por Circe Arte, juntamente con C. Alonso, Anadón,Aparicio y Barragán, entre otros. Presentó su obra Viento del Sur .

• Realizó un mural en relieve en el edificio de la calle Jorge L. Borges2417 de Buenos Aires. La obra, de 2,60 x 5,60 m fue ejecutada con lacolaboración de P. Cárcamo.

1972• Pérez Celis. Pinturas , galería Wildenstein, Buenos Aires, mayo, con

el prólogo “El territor io mágico de Pérez Celis”, de Federico Martino.• Pérez Celis , Taller de Artes Visuales de la Universidad Nacional del

Nordeste, Resistencia, desde 7/7.• Pérez Celis, óleos; Adolfo Pérez Esquivel, escultura; Carlos Alberto

Salatino, escultura , Gran Hotel Dorá-Galería de Arte, Buenos Aires,16-30/9.

• “LXI Salón Nacional de Artes Plásticas Argentino”, Salas Nacionales deExposición, Buenos Aires, 21/9-18/10. Obtuvo el Premio “Alba S.A.”

de la sección Pintura por su obra El sol nuestro en la tierra colorada, acrílico sobre tela.

• Pérez Celis , grabados y tapices diseñados por el artist a y realizadosa mano por Sara Fernández, galería Dorival, Buenos Aires, 1-20/12.

• Tres pintores argentinos , Centro de Educación Médica eInvestigaciones Clínicas (CEMIC), Buenos Aires, juntamente conSalatino y Machado.

• Pequeño formato , exposición itinerante auspiciada por el Ministeriode Relaciones Exteriores, Buenos Aires, prologada por Jorge Vehils.

• Instalación Santiago del Estero , todos juntos la multiplicación, en lasucursal del Banco Nación en Santiago del Estero. Se trata de unaobra realizada en madera y metal de 7 m de altura, que actualmenteno se encuentra en el sitio de emplazamiento.

• Ediciones Susana Sagazola, de Buenos Aires, publicó Pintoresargentinos a través de la serigrafía , con serigrafías de Pérez Celis(Pampa nuestra ), Castagnino, García Uriburu, Garry, Russo y Soldi.

• Ediciones del Hombre Nuevo, de Buenos Aires, publicó Los

fragmentos de Heráclito , de Fernando Demaría (introducción,traducción y comentarios), diagramado por Pérez Celis.

1973• Distintos valores de la pintura argentina , galería Wildenstein, Buenos

Aires, abril, juntamente con J. Barragán, Basaldúa y Butler, entreotros.

• 13 artistas argentinos , Serra Galería de Arte, Caracas, desde 26/4,prologada por Rafael Squirru, juntamente con Alonso, Butler,Bendersky y Gerstein, entre otros.

• Pérez Celis. Pinturas , galería Wildenstein, Buenos Aires, desde 10/7,prologada por León Benarós, “Magia y metafísica de lo americano”;simultáneamente se presentaron en la galería obras de MarieNivouliès y Sergio Telles.

Reseñada por César Magrini, “Terceto de jerarquía”, en El CronistaComercial , 16/7, y [Hernández Rosselot], [“El nombre de PérezCelis…”], en La Razón, 21/7.

• “LXII Salón Nacional de Artes Plásticas Argentino”, Salas Nacionalesde Exposición, Buenos Aires, 21/9-11/10. Participó en la secciónPintura con el acrílico sobre tela Este es mi tiempo y esta es mi

nacionalidad.• Se editó el disco Muerte en la catedral , de Litto Nebbia, a través de

Melopea Discos, con la portada ilustrada por una pintura de Pérez Celis.• Ediciones del Hombre Nuevo, de Buenos Aires, publicó Pampa roja,

Tercera Edición, con poemas de Fernando Demaría y dibujos dePérez Celis.

1974• Pérez Celis , galería Serra, Caracas, desde 17/1, presentada por Rafael

Squirru. En el catálogo se reproducen textos de Rafael Squirru, León

abado, Arte para todos ,Gallery International.

Pérez Celis. Pinturas , galeríaWildenstein, Buenos Aires.



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Benarós, César Magrini, Hernández Rosselot y Alejandro Vignati, entreotros.

Reseñada por Juan Calzadil la, “La figura en el espacio”, en El Nacional ,enero; “Con exposición de Pérez Celis la galería Serrra”, en El Universal ,5/1; “Acrílicos de Pérez Cel is inaugura hoy la ‘Serra’”, en El Nacional ,17/1; “Rasgos de gran orig inalidad en la pintura de Pérez Celis”, enEl Universal , 19/1; “Los signos cristalinos de la pintura de PérezCelis”, en El Universal , 20/1; Rosa Jiménez, “Pérez Cel is o la magia”,en El Universal , 20/1; “Salamanqués, Entyre y Pérez Celis despiertanespecial atención”, en El Nacional , 20/1; José Hernán Briceño, “Obrapictórica de Fruto Vivas. Dos artistas de Aragua y las exposiciones dePérez Celis y Mirna Sal amanqués”, en El Nacional , 21/1; Jaime Tello,“Pérez Celi s en la Serra”, en Bohemia , 28/1, y Roberto Guevara, “PérezCelis y lo Americano”, en El Nacional , 29/1.

• Colectiva pintores latinoamericanos , galería Hausmann, Caracas, desde27/1, juntamente con Blas Mazza, Solari, Pacheco y Figari, entre otros.

• La pintura argentina dialoga con el mar , Rodrigo Carmona Galería de

Arte, Buenos Aires, abril, juntamente con Badi, Barragán, Lacámera yVictorica, entre otros.• Pérez Celis , galería Arvil, Ciudad de México, 6-26/5, acompañada por

texto de Rafael Squirru “Sol para un paisa je americano”.Reseñada por Macario Matus, “Pintura ‘Americanista’ de Pérez Celis”, en

El Día , 15/5; “Para mí la tierra es chica… Pérez Ce lis”, en El Universal ,2/5; “Exposición del pintor argentino Pérez Celis”, en Excélsior , 8/5;“Pérez Cel is en México”, en Novedades para el Hogar , 8/5, y “La obrade Pérez Celis irradia múlt iples geometr ías coloridas”, en El Sol , 9/5;José Luis Colin , “De exposiciones presentes y futuras”, en El Nacional ,10/5; José Miguel, “Pérez Celis en busca de la pureza y sus zonassecretas”, en Novedades , 19/5; Marcos Antonio Acosta, “El pintorargentino Pérez Ce lis”, en Revista Mexicana de Cultura , 9/6, y JuanAcha, “Pérez Celis: transgredir el gusto establecido, en Diorama de laCultura , s/f.

• Pintura argentina , galería 9 de Julio, Buenos Aires, 30/8-3/9, exposicióncon subasta.

• Club de las Américas , Banco Popular Argentino, 2-30/9, juntamentecon Martorell, Centeno, Grippo y Espinosa, entre otros.

• “LXIII Salón Nacional de Artes Plásticas Argentino”, Salas Nacionales

de Exposición, Buenos Aires, 21/9-11/10. Participó en la sección Pinturacon el acrílico sobre tela Autorretrato para observar al jurado .• Pérez Celis. Pinturas y tejidos pre-colombinos , galería Wildenstein,

Buenos Aires, desde 4/11, acompañado por un texto de RobertoGuevara “Pérez Celis y lo amer icano”.

Ver: “La ot ra Amér ica”, en El Cronista Comercial , 14/11.• Realizó dos murales titulados Vuelo Pampa en el Aeropuerto

Internacional “Ministro Pistarini”, Ezeiza. Se trata de una obra demadera enchapada de 3 x 5 metros y otra en acero inoxidable, tambiénde 3 x 5 metros. Los trabajos contaron con la colaboración de RicardoTotah y Ángel M. Arce.

• Realizó un vitraux en el Aeroparque “Jorge Newbery”, Buenos Aires,con la colaboración de Ricardo Totah, Grau e hijo.

1975• Pérez Celis , ex local del Banco de Río Negro, organizada por la

Secretaría de Plástica de l a Casa de la Cultura, Río Negro, 23-30/4.Reseñada en “Expone Pérez Ce lis en Roca”, en General Roca , 23/4;

Fernando Demar ía, “Otros soles de Pérez Celis”, en General Roca , 27/4; “Clausúrase la muestra de Pérez Celis”, en General Roca , 30/4, y “Pérez Cel is en General Roca”, en Río Negro , s/f.

• Exposición de grabados, dibujos y pinturas , Hotel Mayorazgo,Paraná, 8-31/8.

• Gráfica internacional , galería GDA, México D.F., 16/7-2/8, juntamentecon Baj, Bodini, Castagnino, De Chirico y Forte, entre otros.

• “LXIV Salón Nacional de Artes Plásticas Argentino”, Salas Nacionalesde Exposición, Buenos Aires, 21/9-10/10. Participó en la secciónPintura con el acrílico sobre tela Ascenso y descenso .

• Dibujos argentinos contemporáneos , galería Corcoran, WashingtonD.C., octubre, juntamente con Forner, Vidal, Chab y Seguí, entreotros.

Ver: “El dibujo argentino llegó a Washington”, en Opinión, BuenosAires, 8/10.

• The University of Texas at Austin.• The New Orleans Museum of Art.• The Cleveland Institute of Art.• La Editorial Cuarto Mundo, de Buenos Aires, publicó Poemas

endovenosos , de Carlos María Carón, con dibujos de Pérez Celis entapa, portadilla y central.

1976• Arte argentino contemporáneo , Museo Español de Arte

Contemporáneo, Madrid, mayo-junio, juntamente con Agüero, Arata,Badii y Bayón, entre otros.

“• LXV Salón Nacional de Artes Plásticas Argentino”, Salas Nacionalesde Exposición, Buenos Aires, 21/9-10/10. Participó en la secciónPintura con el acrílico sobre tela La lucha está en nosotros .

• Dibujos , galería Hilda Solano, Buenos Aires.

• Ediciones Taller Libre de Buenos Aires publicó A través de la pintura.Pérez Celis , primer libro de su propio sello editorial, al que denominódel mismo modo que su centro de enseñanza.

1977• Hartford Arte , Galería de Arte Centoira, Buenos Aires, desde 13/09,

juntamente con Castagnino, Giménez, Robirosa y Soldi (colecciónde vajilla de porcelana y l oza).

• Caracas, presencia vertical , La Galería, Buenos Aires, 9/11-3/12, conprólogo de Martín Bessega.

Reseñada por A ldo Gall i, “Pérez Cel is”, en La Prensa , 26/11; [“Pérez

érez Celis , galería Arvil, Ciudad deéxico.

Caracas, presencia vertical , LaGalería, Buenos Aires



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Celis desde hace…”], en La Razón, 19/11; “Pérez Celis con una nuevaexpresión”, en La Capital , Rosario, 20/11; “Indicios de renovación”, enEl Cronista Comercial , 22/11; E.A. Moreno Uribe, “Triunfa en BuenosAires el pintor Pérez Ce lis”, en El Mundo , Caracas, 15/12, y TheliaConrad de Behar, “The new life of Pérez Celis” en Buenos AiresHerald , 8/12.

1978• Pérez Celis , Museo de la Universidad de Puerto Rico, San Juan, 14/2-

10/3.Reseñada en “Pérez Celis en el Museo de la U.P.R.”, en El Nuevo

Día , 13/2; Antonio J. Molina, “Obras de Pérez Celis en Museo de laUniversidad”, El Mundo , 19/2; Eneid Routte, “ An artist with visions likeBorges; a photographer who captures the contrasts of South America”,The San Juan Star , 19/2; Félix Bonilla Norat, “Pérez Celis at the UPRMuseum”, en San Juan Star Magazine , 5/3, y Roberto Montero Castro,“Vértigo d iagonal de Pérez Celis”, en El Universal , Caracas 5/3..

• Pérez Celis, óleos-témperas , Raquel Real Galería de Arte, Rosario,17/5-8/6.• Pérez Celis. Pinturas , Museo de Bellas Artes, Caracas, 21/7-13/8, con

prólogo de Roberto Montero Castro “América: l a invención del pintor”.Reseñada por Roberto Montero Castro, “Pérez Celis. Explorador de

lo americano”, en Jueves Cultural 2001, 20/7; M.C., “Pérez Celis: elinflujo de Venezuela”, en El Nacional , 21/7; “Desde ayer Pérez Celis enel Museo de Bellas Artes”, en Últimas Noticias , 22/7; Roberto Guevara,“Pérez Cel is: El cambio”, en El Nacional , 1º/8; Jaime Tello, “PérezCelis en Bellas Artes”, en Z , agosto; Alfredo Schael, “Pérez Celis y lainvención americana”, en El Universal , 5/8; Lidia Terrero, “Pérez Celis:El invierno entre nosotros”, en El Universal , 6/8; “Cincograf ías…”, en ElUniversal , 20/5, y Alberto Giar rocco, “Las formas de la identidad”, s/d.

• Pérez Celis. Serigrafías , galería Arte-Contacto, Caracas, desde 22/7.• Gráfica contemporánea: el ambiente artístico , Instituto de Bellas Artes,

México D.F., juntamente con Matta, Gerszo, Mérida y Guayasamín,entre otros.

• [Pérez Celis. Serigrafías ], La Galería Jacques Martínez, [noviembre]. Ver: [“En una esporádica vuelta…”], en El Cronista Comercial , 14/11.• Ediciones Taller Libre, de Buenos Aires, publicó Cincografías , 300

carpetas que contienen cinco cincografías firmadas y numeradas porPérez Celis, impresas en los Talleres Gráficos Gaglianone.

1979• “XIV Grand Prix In ternational d’Art Contemporain de Monte-Car lo”,

Centre de Congrès Auditorium de Monte-Carlo, 14/12-1º/1. Con susobras Poderes sometidos y Nuevo retorno obtuvo la primera menciónespecial del jurado.

Reseñado por Alfredo Andrés, “El pintor Pérez Celis fue premiado enMónaco”, en La Opinión, 21/1; María Scuderi y Pepe Fernández, “Los

premios no s irven para nada”, en Siete Días , 2/4, y “Pérez Celi s”, enLa Nación, 30/12.

• “IV Bienal del Grabado Latinoamericano”, Instituto de CulturaPuertorriqueña, San Juan de Puerto Rico, mayo. Pérez Celis sepresentó con las obras serigráficas Metales de piedras , Nuestramemoria y Memoria de la luz .

• [Pérez Celis ], La Galería Jacques Martínez, Buenos Aires, 7-14/8.Reseñado en Hugo Monzón, “Con obras realizadas en Europa”, en La

Opinión, 7-8, y “Antes de colgar”, en Clarín, 12/8.• Retratos (1900-1979) , Museo de Arte Moderno de Buenos Aires,

Buenos Aires, septiembre, juntamente con Forner, Roux y GarcíaUriburu, entre otros.

Ver: “Retratos (1900-1979) y retratados en la exposición inaugurada l asemana pasada en el Museo de Arte Moderno”, en La Nación, 21/9.

• Pérez Celis , Municipalidad de Avellaneda - Dirección de Cultura,Avellaneda, 18/9-23/9, presentada por Rafael Squirru.

Reseñada en “Se inaugura una muestra de Pérez Celi s en Avellaneda”,

en El Sol , Quilmes, 18-9, y Osiris Chiérico, “Influencia del paisaje enla pintura de Pérez Celis”, en Convicción, Buenos Aires, 19/9.• “Pérez Celis”, galería Feldman, Córdoba, desde 28/9.Ver: “El viernes abre una muestra del argentino. Óleos de Pérez Celis”,

en Tiempo , 23/9.

1980• Metales , Jacques Martínez-La Galería/Arte Contemporáneo,

Buenos Aires, 22/4-10/5, acompañada por textos de Raúl Santana,“Movimiento y fuga”; Roger Bouill ot, “Realidad de América Latina”, yRatimir Pavlovic, “Pèlerin d’une autre pierre philosophale”.

Reseñada por Antonio Requeni, “El arte y la incorporación deelementos pr imitivos de América”, en La Prensa , 20/4 ; Aldo Galdi, “...Pérez Celis, Liliana Porter, Lucía Fendrik y A. Rearte”, en La Prensa , s/f;Hernández Rosselot, “Los diversos procesos de la creación”, en LaRazón, 26/4; Luis Pazos, “Pérez Celis en oro y pl ata”, en Somos , 25/4;Thelia Conrad de Behar, “New LA painting”, en Buenos Aires Herald ,30/4; Osiris Chiérico, “Obras de Pérez Celis desde París, experienciasnuevas guardan su t radición”, en Convicción 3/5, e “Incorporaciones,búsqueda y aventura”, en El Cronista Comercial , 8/5.

• Exposición de grabados latinoamericanos , galería Forma, BuenosAires, 8-22/5, juntamente con Abularach, C. Alonso, Berni y MacEntyre, entre otros.

• “Salon Comparaisons”, Grand Palais des Champs-Élysées, París,mayo.

Mencionado en Antonio Requeni, “El arte y la incorporación deelementos pr imitivos de América”, en La Prensa , 20/4, y AntonioRequeni, “Un argent ino que triunfa en París”, en Los Andes , Mendoza,25/1/1981.

• Museo Saint Paul de Vence, Cannes.Mencionado en “Antes de colgar”, en Clarín, 12/8.

érez Celis , Museo de laniversidad de Puerto Rico, Sanan

“XIV Gran Prix Internatonal d’ArtContemporain de Monte-Carlo” ,Centre de Congrès Auditorium deMonte-Carlo.

“IV Bienal del GrabadoLatinoamericano”, Instituto deCultura Puertorriqueña,San Juan de Puerto Rico.

Pérez Celis , galería Feldman,Córdoba.



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• Metales , Galería de Arte Selene, Córdoba, desde 10/9.Reseñada en “Un mundo donde conviven la ar tesanía y la tecnología”,

en Tiempo de Córdoba , 4/9, y “Pérez Ce lis expone su ‘Meta les’”, enLos Principios , 25/8.

• “36e Salon de Mai”, Centre d’Art, París, 18/10-23/11.• Galería Sepia, Asunción.• Ediciones de Arte Gaglianone, de Buenos Aires, publicó El pesador

de tiempo , cuentos de Luisa Mercedes Levinson con prólogo de JeanCassou e idea gráfica y reproducciones de pinturas de Pérez Celis.

Reseñado en “La contadora de historias y el contador de imágenes”,en La Nación, 2/3; “Pérez Celis: desde la raíz americana”, en Pregón,Jujuy, 31/3; “Literatura y plástica”, en La Nación, 7/4; Joaquín Neyra,“El pesador de tiempo”, en La Razón, 10/5; Ángel Mazzei, “Imágenesde ficción”, en La Nación, 1º/6; Ulyses Petit de Murat, “Una granrealización para Luisa Mercedes Levinson”, en La Opinión, 16/5;“Transitar por territor ios de sueños”, en Factor , Córdoba, 22/8; AlfredoAndrés, “Renace el arte gráfico”, en La Opinión, 23/8; “De la literaturamágica”, en Clarín, 26/12; E. Azcona-Cranwell, [“El simbolismoalquímico...”], en Vigencia , 1980, y C.M., “Tres motivos de legí timoorgullo”, s/d.

• Para el Aeropuerto Internacional “Ministro Pistari ni”, Ezeiza, realizóvitraux de formato circular de 1,3 m de diámetro.

1981• Acquisitions d’ œuvres d’artistes Argentins résidant à Paris , Galerie

Bernheim-Jeune, 14-30/1, juntamente con De Castro, Deira, Macció,Presas, Russo, Seguí y Torres Agüero, con prólogo de JacquesLassaigne.

• Regard sur la peinture sud-américaine contemporaine , MaladrerieSaint-Lazare, Beauvais, 5-14/6, juntamente con Azocar, Blanco, Deiray Noé, prologada por Guy d’Hardivillers y Roberto Guevara.

Ver: “Peinture sud-américaine à la Maladrerie”, en Le Courrier de l’Oise ,30/5.

• Pérez Celis , Galería de Arte Nelly Tomás, La Plata, desde 9/8.Reseñada en “Pérez Celis en la Galería Nel ly Tomas”, en El Día , 3/8, y

“Se inaugura hoy una muestra de Pérez Celis”, en El Día , 9/8. • Pérez Celis , galería Jacques Martínez, Buenos Aires, 15/9-10/10, con

prólogo de Enrique Horacio Gené.Reseñada por Aldo Gall i, “Panorama de las artes plásticas”, en LaPrensa , 21/9; “De vez en cuando la farsa”, en El Economista , 25/9;“Pérez Celis”, en La Nación, 3/10; Thelia Conrad de Behar, “Pérez Celis:Constant metamorphosis”, en Buenos Aires Herald , 11/10; “Desde elespacio”, en El Cronista Comercial , 8/10, y Carlos Espartaco, “PérezCelis: La mirada cambiada”, en Artinf , octubre-diciembre.

• [Pérez Celis ], Arte Contemporáneo, Buenos Aires, hasta 10/10.Ver: “Pérez Ce lis: exposición”, en Crónica , 3/10.• “Primer Salón Plástico Fil atélico”, Empresa Nacional de Correos y

Telégrafos, Buenos Aires, desde 25/11, juntamente con Agatiello,

Amengual, Borla y Burton, entre otros.• Signes et empreintes. Vingt peintures récentes de Pérez Celis , galería

Bellechasse, París, 9/12-16/1/82, presentada por Rafael Squirru.Reseñada por Josette Meleze, “Pérez Celis: Les cr istaux du temps”,

en Pariscope , 16/12; “Rive Gauche”, en La Gazette de l’H ôtel Drout ,18/12; Roger Bouillot, “ Fascinations”, en Arts , 24/12; Jeanine Warnod,“Paysages intérieurs”, en Vie Culturelle , 30/12; Alicia Dujovne Ortiz,“La aventura espacial de Pérez Celis. El arte latinoamericano quizáno descarte nada, y al recibir aportes los transforme”, en Excelsior ,México, 5/2/82 y “Pérez Celis (Gal. Bellechasse)” en Batik , España,enero-febrero de 1982.

• Pérez Celis, Œuvres graphiques , galería Caractères, París, 17/12-15/1/82.

Reseñada en “Un caso raro, Pérez Celis tiene dos exposicionesen París”, s/d, 18 / 12, y Antonio Requeni, “Dos exposiciones queconsagran a Pérez Cel is a nive l europeo”, en Los Andes , Mendoza,3/1.

• Arte para el pueblo de Nicaragua , donaciones de artistaslatinoamericanos, Francia y España, diciembre, juntamente conBarboza, Carpani, Colombres y Martínez Bonati, entre otros.

• Society of International Artists, Tokio.Museo Kamakura, Kamakura.• La editorial Caractères , de París, publicó Corps automnal , de Claude

Couffon, con xilografías de Pérez Celis.Mencionado en Jean-Marie Dunoyer, “Musique pour les yeux”, en Le

Monde , 28/12.• La editorial Galerna, de Buenos Aires, publicó Cosecha de cuatro , de

Guillermo Vilas, con ilustración de Pérez Celis en tapa y prólogo deLuis Alberto Spinetta.

Ver: “En el candelero“, en Somos , octubre.

1982• Arteder’82 , Salón Internacional de Artes Gráficas, Bilbao, 19/3-4/4.• 31 Peintres d’Amérique latine, gravures, dessins, aquarelles , galería

Le Mur, Saint-Malo, 10/7-20/9.• Arte para el pueblo de Nicaragua , donaciones de artistas

latinoamericanos, Museo de Arte Latinoamericano Contemporáneo

de Managua, Managua, desde 18/7.• Pérez Celis , Château de la Gesse, Boulogne-sur-Gesse, Toulouse,

25/7-25/8, prologada por Antonio Urrut ia, “Voix secrètes”.Reseñada por Antonio Urrutia, “Pérez Celis. Fondation Gesse, Château

de la Gesse”, en Art Press63 , octubre, y “À Boulogne-sur-Gesse: Lestoiles de l’Argentin Pérez Celis”, en La Dépêche , 29/7.

• Pérez Celis. Sobre papel , galería Jacques Martínez, Buenos Aires,noviembre, acompañada por texto del artista.

Ver: Aldo Galli, “Pérez Celis: la materia al servicio de un formalamericanismo…”, en La Prensa , 14/11.

érez Celis , galería Jacquesartínez, Buenos Aires.

Pérez Celis , Château de la Gesse,Boulogne-sur-Gesse, Toulouse.



108 109

Pérez Celis. Antes y ahora ,Centro Cultural Ciudad deBuenos Aires, Buenos Aires

• Ediciones de Arte Gaglianone, de Buenos Aires, publicó Los afanes ,de Adolfo Bioy Casares, con ilustraciones de Pérez Celis y prólogo deJorge Luis Borges.

• Exposición de Pintura Americana , Municipalidad de La Rochelle.Espacio Latinoamericano, París.

• “Salon de Mai”, Espacio Pierre Cardin , París.• Les fruits de l’exil , Grand Palais, París, 8-15/12, acompañada por los

textos “ L’exil, entre la nosta lgie et la création”, de Eduardo Galeano;“L’art et les droits de l’homme en Amérique latine”, de Miguel Rojas-Mix, y “Les frui ts de l’exi l”, de Rubén Bareiro-Saguier.

1983•Pérez Celis , Schweyer-Galdo Galleries, Birmingham, mayo, acompañada

por textos de Jean Cassou y Gastón Diehl.Reseñada por Marsha Miro, “A furious battl e rages on his canvas”, en

Detroit Free Press , 8/5; Dan Acosta, “Paintings reflect the humanstruggle”, en Healt Care News , 11/5; “Califican de acontecimientoartíst ico la muestra de Pérez Celis, en Detroit”, en La razón, 12/5;“Pérez Cel is: éx ito en EE.UU.”, en La Nueva Provincia , Bahía Blanca,13/5; Corinne Abatt, “Portraying universa l themes”, en The Eccentric ,19/5; “Pérez Celis”, en Buenos Aires Herald , 31/7 y Rafael Squirru,“Pérez Celis. Schweyer-Galdo”, s/d.

• París 1979-1983. Pérez Celis , galería Jacques Martínez, Buenos Aires.20/9-8/10, con prólogo de Raúl Vera Ocampo.

Reseñada por Osir is Chiérico, “Pérez Celis: América desde París”, enSalimos , 6/10; “Pérez Celis”, en La Nación, 2/10; Fermín Fèvre, “Laexpresión telúrica”, en Clarín, 1º/10; “I hear America singing”, en BuenosAires Herald , 2/10; “Pérez Celis”, en La Nación, 2/10; Aldo Gal li, “...Unamericanista : Pérez Celis”, en La Prensa , 2/10; Hernández Rosselot,“Imágenes americanas, desde Buenos Aires”, en La Razón, 4/10; OlgaR.Z. de Pareja Núñez, “La naturaleza de lo abstracto” en La Capital ,17/10, y “Un arte maduro”, en Democracia , 31/10.

• Pérez Celis , galería Camino Brent, Lima, 19-30/10, prologada por RafaelSquirru.

Reseñado por Fietta Jarque, “Pérez Celis, un pintor sin el complejode Europa”, en El Observador , 19/10; José Torres Bohl, “Obras dePérez Celis . Feliz mezcla de pasión y razón”, en El Comercio , 24/10;

Stam, “Pérez Cel is y la energía de la tierra”, en Diario La República ,24/10; Daniel Caballero, “Pérez Celis” en Expreso , 26/10; “La energíaabstracta de Pérez Celis”, en Oiga , 24/10; “Diálogo con el arte. PérezCelis”, s/d, 30/10; “Un argentino en Machu Pichu”, en La Razón, BuenosAires, 6/11, y “El triunfo de Pérez Celis“, Crónica , 6/11.

• Línea Hartford de Arte , Centoira Galería de Arte, 26/10-15/11,juntamente con Castagnino, Giménez, Moy y Mac Entyre, entre otros(colección de vajilla de porcelana y loza).

• 100 Artistes de l’Amérique latine , Maison de la Culture d’Amiens, 20-30/10.

1984• Pérez Celis. Gráfica 1978-1983, Centro Lincoln, Buenos Aires,

24/7-16/8, acompañada por texto de Peter Frank, “Pérez Celis: susprimeras pinturas desde Nueva York” (mayo).

• Pérez Celis, El círculo , auspiciada por el Museo Municipal de BellasArtes “Juan B. Castagnino”, Rosario; en el catálogo se reproducenfragmentos de textos de Jean Cassou, Gastón Diehl, CarlosEspartaco y Rafael Squirru.

• Creadores de América , galería Estudio de Arte, Buenos Aires,septiembre, con el patrocinio cultural de la OEA, juntamente conCuevas, Presas, Soldi y Tamayo, entre otros.

Ver: “Todas las vis iones de América”, en La Nación, 16/9.• Young Collectors of Latin American Art , Metropolitan Museum,

Miami.

1985

• Pérez Celis. Recent Paintings , Virginia Miller Galleries, Coral Gables,18/1-23/2.Reseñada por “Acontecimiento artístico será la presentación en

Miami del pin tor argentino ‘Pérez Celis’”, en La Voz de la Calle , 25/12,y David Boitano, “Pintor argentino expondrá en Miami”, en Mundo ,Nueva York, 3/1.

• Peintures récentes , galería Bellechasse, París, 13/2-16/3, con prólogode André Parinaud.

Ver: Osvaldo Ciezar AFP, “Pérez Celis, o las formas del universo’’, s/d,16/2.

• Pérez Celis , galería Jacques Martínez, Buenos Aires, 30/7-17/8,prologada por Raúl Santana.

Reseñada por Aldo Galli, “Virtuosismo y no figuración”, en La Nación,3/8; “De la época de Weimar a Pérez Ce lis, vi rtuosismo y no figuración”,en La Nación, 3/8; Albino Dieguez Videla, “Pintura latinoamericanadesde París. Doble presentación de Pérez Celis”, en La Prensa , 4/8;“New Celis”, en Argentine News , 7/8; “Una trayectoria con a ltibajos”,en Ámbito Financiero , 18/8; “Pérez Celis”, en El Economista , 16/8;E.P., “Ayer, hoy y mañana en la pintura de Pérez Celis. Dos muestrassimultáneas perfilan la trayectoria de treinta años de labor…”, en

Tiempo Argentino , 19/8, y “Pérez Cel is”, en Sr., agosto.• Pérez Celis. Antes y ahora , Centro Cultural Ciudad de Buenos

Aires, Buenos Aires, 1º-25/8, con presentación de Osvaldo Giessoy prólogo de Ricardo Pau-Llosa, “Pérez Celis y la simultaneidad delas esencias”.

Reseñada por Marina Christophersen, “Pérez Celis . Antes y ahora”, enLa Razón, 3/8; B.O., “Vernissage en el Centro Cultural Buenos Aires.Pérez Celis, antes, ahora y a menudo”, en La Razón, 6/8; Raúl VeraOcampo, “Pérez Celis o la energía de Nueva York”, en El Periodistade Buenos Aires , 9/8, y Héctor Giu ffré, “Pérez Celis : Antes y ahora”,en ARTINF nº 52/53, mayo/agosto.

arís 1979-1983. Pérez Celis , galeríaacques Martínez, Buenos Aires.

Pérez Celis. Recent Paintings ,Virginia Miller Galleries, CoralGables.



110 111

• Museo Munic ipal de Bellas Artes “Fernán Félix de Amador”, Luján,hasta el 18/9.

Reseñado en “Pérez Celis y su pintura. Hoy en el Museo de BellasArtes”, s/d, y “El camino del éx ito”, en El Civismo , 32/8.

• Pérez Celis , galería Camino Brent, Lima, auspiciada por el Museo deArte Moderno de Buenos Aires y la Embajada Argentina del Perú, 18/9-5/10, acompañada por un texto de Peter Frank.

Reseñado por E.A.F., “El exorcista. De cómo Pérez Celis aprendió apintar lo invisible”, en Caretas , 23/9, y “Un pintor argentino con alma deperuano”, en El Comercio , 17/9.

• Pérez Celis , Zerolf Galleries, Morristown, octubre, acompañada portexto de Peter Frank.

• [Pérez Celis ], Galleria Dinners, Bogotá, 15/11-4/12, acompañada portexto de Osvaldo Giesso.

• Pérez Celis. Obra gráfica y pictórica , Museo Rayo, Roldanillo,noviembre/enero, acompañada por un texto del artista.

• Experimental Art , Budapest.

• Museo de Arte Hispánico Contemporáneo, Nueva York.• Ediciones de Arte Gaglianone, Buenos Aires, publicó Cuentistas

y pintores argentinos , selección y prólogo de Jorge Luis Borges. Elcuento Los afanes , de Adolfo Bioy Casares, fue ilustrado por PérezCelis.

Ver: Ángel Mazzei, “La riqueza del cuento”, en La Nación, 12/5.

1986• Abstract Visions , Museo de Arte Hispano Contemporáneo, Nueva York,

10/2-23/5, curada por Susana Torruella Leval.• Four Contemporary Painters from Argentina , College of Fine Arts.

University of Florida, Gainsville, 20/4-18/5, con prólogo “ArgentinianPainters”, de Rafael Squirru.

• Pérez Celis , Centro Parakultural, Buenos Aires.• Exposición de pintura argentina 1930-1980 , Museo Municipal de Bellas

Artes “Juan B. Castagnino”, Rosario, 2/11-31/12. • Summer Group Show , Art Consult International Gallery, Boston.The E.F. Hutton Collection, Metropolitan Museum, Miami.

1987

• Contrastes visuales , homenaje de la Fundación Bodega J. EdmundoNavarro Correas a doce maestros argentinos, Salas Nacionales deExposición, 20/4-10/5, juntamente con Benedit, Bonevardi y Del Prete,entre otros, con prólogo de J. Edmundo Navarro Correas.

• Five Contemporary Latin American Artists , Ilana Vardy InternationalArt, Chicago, 1º-31/5, juntamente con Minujín, Giusiano, Giangrandiy Mazuera, prologada por Hugo Achugar “Arte Latinoamericano: Lossueños de la imaginación”.

• Pérez Celis , Donald Wren Gallery, New York, 12/5-13/6, curada porEugenia Cucalón y prologada por Frederick Ted Castle, “Pérez Celis,

the epic autob iography”.Reseñada por Armando J. Florez, “Expondrán Tamayo, Celis y Grau”,

en El Universal , México, 11/5 y Stephen Di Lauro, “The Passions andReasons of Pérez Cel is”, en Downtown, 7/7, y Armando J. Florez,“Nueva York. Nuevo récord de venta de obras latinoamericanas”, enEl Universal , México, 10/12.

• Works on paper: by gallery artists and guests , Anita ShapolskyGallery, Nueva York, 21/5-4/8, juntamente con Boardman, Calcagno,Cherry y Cruz, entre otros.

• “50º Salón Aniversario”, Museo Munic ipal de Bellas Artes “Juan B.Castagnino”, Rosario, 15/8-13/9, participó como artista invitado.

• Pérez Celis , Centro Nacional de las Artes de Ottawa, Ottawa, 20/10-9/11, organizada por la Embajada de la Argentina en Canadá, enel catálogo se reproducen fragmentos de textos de Peter Frank,Frederick T. Castle, Rafael Squirru, Jean Cassou y André Parinaud.

Ver: Miguel Warnes, “L’exposition de Pérez Cel is”, s/d, 17/11.• Americanos , Cork Gallery, Lincoln Center, Nueva York.

• Mira , Tercera Gira de Arte Hispánico, organizada por el ClubCanadiense, itineró a través de las principales ciudades de EstadosUnidos.

• New Gallery Artists , Aleman Galleries, Boston.• Second coming , Dramatis Personæ Gallery, Nueva York.

1988• Pérez Celis , Jacques Martínez-Arte Contemporáneo, Buenos Aires,

24/5-11/6, acompañada por texto del artist a.Reseñada por Rafael Squirru, “Pérez Celis, un artista que sigue

creciendo”, en La Nación, 28/5; “El mito de Pérez Ce lis”, en La Razón,29/5; “Pérez Cel is”, en El Economista , 3/6; “Celis anda, Pérez pinta”,en Página/12 , 7/6, y César Magrini, “Un creador con fuerza y que serenueva con gran talento”, en El Cronista del Espectáculo , 25/6.

• Pérez Celi s, Kramer Arte, Buenos Aires, 13/6-2/7.Reseñada por Olga R.Z. de Pareja Núñez, “Pérez Celis y la maravillosa

realidad de lo abstracto en sus nuevas muestras”, s/d, Rosario, 30/6,y Raúl Santana, “Apuntes sobre Pérez Celis”, en Artinf 70/71, invierno1988.

• Pintura del Río de la Plata , galería Praxis, Buenos Aires, 9-22/8,

juntamente con Kemble, Lavallén, Santander, Iturria y Lara, entreotros. • Pérez Celis , Centro de Arte Euroamericano, Caracas, 11-25/9,

prologada por Roberto Guevara, “Ser en los mundos nuevos”.Reseñada por Yasmín Monsalve Reaño, “Pérez Celis inaugura una

muestra el próximo domingo. ‘El arte no necesit a estilo’”, en El Diariode Caracas , 9/9; “Ser en los mundos nuevos”, s/d, 11/9, y EfrainCorona, “Tres artes distintos buscan la luz dominical”, en El Diariode Caracas.

• Pérez Celis. Pinturas recientes , Anita Shapolsky Gallery, Nueva York,20/10-26/11.

érez Celis. Obra gráfica y pictórica ,useo Rayo, Roldanillo

érez Celis , Donald Wrenallery, Nueva York.

Pérez Celis, Centro Nacional de lasArtes de Ottawa.

Pérez Celis , Kramer Arte, Bue-nos Aires



112 113

Ver: Anselmo Conde, “Pérez Celis : Latin Abstract Neo-ExpressionistExhibits in New York”, en The New York City Tribune , 20/10.

• Pérez Celis , Galería Nacional de Arte Contemporáneo, auspiciada porel Museo de Arte Costarricense, Costa Rica, 1º/12-22/1/89, prologadapor Roberto Guevara, “Ser en los mundo nuevos”.

Reseñada por Orlando García Valverde, “Pérez Celis : artista”, en EstaSemana , 23-29/12; Rocío Fernández de Ulibarri, “El itinerario de PérezCelis”, en La Nación 8/1; Álvaro Zamora, “Pérez Celis: Paradojas delibertad”, en La Nación, 11/1, y Daniel Boitano, “Galería Nacional deArte de Costa Rica recibe a Pérez Celis”, s/d, 13/2.

• Quedó emplazada la escultura Presencia transformadora en el Patiode Madera, Rosario. Se trata de una obra de hierro policromado de 15metros de altura.

Reseñado por “Escu ltura de Pérez Celis colocarán en un parque”, enLa Capital , 10/7, y “Pérez Celis y su presencia trasformadora”, en LaRevista , Buenos Aires, 2/1/1989.

1989• Pérez Celis. Obras recientes, Centro Cultural Casa del Ángel, Buenos

Aires, 22/6-22/7.Ver: Florencia Bacci, “Pérez Celis en Belgrano”, en Belgrano Hoy , agosto.Reseñada por Rafael Squirru, “Un trabajador infatigable e inspirado:

Pérez Celis”, en La Nación, 1º/7 y Raúl Vera Ocampo, “D’Arienzo,Benjuya y… Pérez Celis”, en Humor , junio.

• [Pérez Celis ], galería 2V’S, Lima, 24/7.Reseñada por Luis E. Lama, “Por amor al ar te”, en Caretas , 24/7; Ismael

Pinto, “El maestro Pérez Celis”, en Expreso , 24/7, y HUAC, “PérezCelis: ‘Todo estil o es una cárcel’”, en El Comercio , 22/7.

• Pérez Celis. Pinturas , Honorable Senado de la Nación, Buenos Aires,20-30/7, acompañada por texto de Roberto Guevara (Caracas, 1988).

• Pérez Celis , galería Jacques Martínez, Buenos Aires, julio.Reseñada por César Magr ini, “Cómo habrá de ser el ar te”, en El Cronista

Comercial , 27/7; Rosa Faccaro, “Intercesión”, en Clarín, 1º/7, y AlfredoCernadas Quesada, “Monumenta l Pérez Celis”, en Buenos AiresHerald , 20/08.

•Pérez Celis , Museo de Bellas Artes, La Plata, agosto, curada por SusanaScorians de Calderón; en el catálogo se reproducen fragmentos de

textos de Peter Frank, Frederick T. Castle, Rafael Squirru, Jean Cassouy Leonore Malen.Ver: Albino Dieguez Videla , “Cuatro buenas muestras”, en La Prensa , 9/7.• Pérez Celis. Obras recientes , galería Praxis, Santiago de Chile, 20/9-

7/10.Reseñada por Samuel Valenzuela Y., “El arte de la razón y la pasión”, en

Las Últimas Noticias, 20/9; “Un pintor que es también un caminanteincansable: desde Canadá a la Patagonia”, en La Época , 20/9, y SoniaQuintana, “Una obra que apela a los sentidos”, s/d, 1º/10.

• Recent painting. Pérez Celis , Edith Baker Gallery, Dallas, 3-28/11, en

el catálogo se reproducen fragmentos de textos de Peter Frank,Frederick T. Castle, Rafael Squirru, Jean Cassou, Gastón Diehl yLeonore Malen.

• Pinturas Pérez Celis, Luis Noé, Santiago Espinosa, Alejandro Dron,Diego Melero , Hall Central del Hotel de Comahue, Neuquén, 15-23/12.

1990• Pérez-Celis. Recent Paintings , Kimberly Gallery, Washington D.C.,

1º/2-17/3.Reseñada por Alice Thorson, “Latin art mixes real l ife with tradi tions”,

en The Washington Times , 15/2, y “Pérez Celis en Kimber ly Galle ry”,en Gaceta Iberoamericana , febrero.

• Pérez Celis. Works on Paper , T’ Marra Galler y, Ann Arbor, 2/3-26/5.Reseñada por Constance Crump, “Art that Works. T’Marra Gallery

draws art into the corporate world”, en Crain’s Detroit Business , 26/3,y John Carlos Cantu, “Distinctive paintings of Pérez Celis on display

at T’ Marra Galler y”, en The Ann Arbor News , 1º/4.• Pérez Celis. New Paintings , G.R. N’Nandy Gallery, Birmingham,

9/3-28/4; en el catálogo se reproducen fragmentos de textos deFrederick T. Castle, Gaston Diehl, Peter Frank, Jean Cassou, RafaelSquirru y Leonore Malen.

Ver: Marsha Miro, “Celis is back”, en Detroit Free Press , 1º/4.• Pérez Celis. Recent Paintings , Elite Fine Art, Coral Gables, 4-26/5,

acompañada por texto de Armando Álvarez Bravo, “Pérez Celis, viajea la pintura de un viajero sol itario”.

Reseñada por E lisa Turner, “Works link l andscape to abstrac tion”,en The Miami Herald , 16/5; “Pérez Cel is en El ite Fine Ar t”, en ElNuevo Herald , 2/5, y Guillermo Cabrera Leiva, “Presenta su obra elargentino Pérez Ce lis“, en Diario de las Américas , s/f.

• Pérez Celis/Adam Strauss , Ann Jaffe Gallery, Bay Harbor Islands,desde 5/10.

Ver: “Pérez Celis, exi tosa muestra en Miami”, en El Argentino ,noviembre.

• El despertar , The Discovery Museum, Bridgeport, 27/10-6/1/1991.• Pérez Celis , Voluntariado de las Casas Reales, Casa de Bastidas,

República Dominicana, desde 12/11, prologada por Marianne de

Tolentino, “Más allá de la abstracción, Pérez Celis o una renovaciónpermanente”.Reseñada por Gaston Diehl, “Un gran artista latinoamericano: Pérez

Celis”; Rafael Squirru, “Entre Caracas, Nueva York y París”; ClaudeCouffon, “Pérez Celis: configuraciones metafísicas”, en Listín Diario ,4/11; Agustín Martín C., “Pérez Celis. Pintor argentino expone hoysu estructuralismo cromático”, en Hoy , 12/11; Luis Pérez Casanova,“Pintor ha expuesto en AL, EU y Europa”, en El Nacional , 12/11; “Enel Voluntariado de las Casas Reales muestra de Pérez Celis”, en Hoy ,Suplemento Isla Abierta , 17/11; Beatriz Bienzobas, “Pintor Pérez

érez Celis , Galería Nacional de Arteontemporáneo, Costa Rica.

Recent Painting. Pérez Celis , EdithBaker Gallery, Dallas.



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Celis: El arte por el arte”, en Listín Diario , 20/11; Domingo González,“Pérez Celis the abstract express ion”, en Touring , 22/11; Laura Gil,“En casa de Bast idas Pérez Celis”, en El Caribe , 8/12, y Mariannede Tolentino, “Una imponente exposición de Pérez Celis en Casa deBastidas”, en Listín Diario , s/f.

• Latin Art ’90 , Anita Shapolsky Gallery, Nueva York, hasta 1º/12,juntamente con Antonio H. Amaral, Simón Franco, Wilfredo Chiesa yAlejandro Corujeira, entre otros.

Reseñada en “Latinar ’90 en Anita Shapolsky Gallery”, en Noticias deArte NY , noviembre, y Rodolfo A. Windhausen, “Pérez Celis: The artof freedom”, en Hispanic , noviembre.

• Wood-The Eternal Medium, Anita Shapolsky Galler y, Nueva York.

1991• Pérez Celis , galería Valanti, San José de Costa Rica, prologada por

Berta Sichel , “Persistencia de la pas ión”.Ver: Álvaro Zamora, “Pérez Celi s: Paradojas de libertad”, en La Nación,

11/1.• Two Worlds. Pérez Celis. Paintings and Sculpture , Anita Shapolsky

Gallery, Nueva York, 2/2-2/3, acompañada por texto de RaquelJodorosky.

Ver: Dora Rubiano, “‘Dos mundos’, pintura y escul tura de Pérez Ce lis”,en La Prensa , 5/2.

• Pérez Celis. Paintings , galería Sanyo, Tokio, 8-23/3.Reseñada por Mario Diament, “Entre la pizza, el sushi y la Mercedes-

Benz”, en El Cronista , 14/5, y “Mitsui Affiliate TEC Sponsors ArtExhibit ion”, en Mitsui Trade News , mayo-junio.

• [Pérez Celis ], Joseph I. Lubin House Gallery, Nueva York, patrocinadopor la Universidad de Syracuse, 6-20/5.

Ver: Darryl J. Geddes, “Works by Pérez Celis on display at Lubin House”,s/d.

• Realizó el mural Continentes en movimiento en la fábrica Mercedes-Benz, Japón. Se trata de un díptico de 1,93 x 3,20 m.

Reseñado en “Triunfo de la pintura latinoamericana en Japón”, en ElCronista , Buenos Aires, 12/9, y Rodolfo A. Windhausen, “Pérez Celis:un encargo de honor”, en La Gaceta , San Miguel de Tucumán, 26/5.

• Renovación permanente , galería Arteconsult, Panamá, 4-27/7,

prologada por Marianne de Tolentino.Reseñado por Juan Luis Bat ista, “Pérez Cel is en Arteconsult”, en LaPrensa , 4/7; Ramón Oviero, “Pérez Celis: de los viajes externos alos via jes internos”, en El Panamá América , 6/7, y H. Reyes, “El arteamericano florece en cada cuadro de Pérez Celis”, La Prensa , s/f.

• Dissimilar Identity. Latin American New York , Scott Alan Gallery,Nueva York, 12/9-5/10, juntamente con Alvarado, Benaim, Cardillo yDavidovich, entre otros, curada por Berta Sichel y Antonio Álvarez yprologada por Antonio Álvarez.

• Pérez Celis , galería Plástica Contemporánea, Guatemala, septiembre,

reseñada por Víctor Hugo Fernández, “La pintura sísmica de PérezCel is”.

• Forms of Abstractions , George N’Nandy Galleries, Birmingham,acompañada por textos de He len M. Shannon, “Int roduction”, y BillHutson, “Forms of Abstractions”.

• Art Gallery, Nagoya.• Quedó emplazada la escultura ¿Victoria de quién? en Nueva York.

Se trata de una obra de madera policromada de 112 x 102 x 130 cm.

1992• [Art latino-américain], Galerie Art et Arte, Montreal.Ver: Marie-Michelle Cron, “Dépoussierer les mythes”, en Le Devoir ,

25/2.• Forms of abstractions , George N’Nandy Galleries, Washington/

Columbus Ohio, 28/3-30/5, acompañada por textos de Helen M.Shannon, “Introduction”, y Bill Hutson, “Forms of Abstractions”.

• Pérez Celis , Centro de Arte Euroamericano, Caracas, 26/4-17/5,

prologada por Carlos Espart aco, “El tiempo y su diferencia”, yacompañada por texto del artista.Reseñada por Rubén Wisotzki, “Hay quien pinta para vender y quien

vende lo que pint a”, en El Diario de Caracas , 28/4, y “Exposicionesde fin de semana”, s/d, 25/4.

• [Pérez Celis ], La Galería, Quito, desde 6/5.Reseñada en Francisco Febres Cordero, “El nos l leva en su viaje”,

en Hoy , 6/5; “La renovación es la clave”, en El Comercio , 6/5; “Conhondura de túneles... Pérez Celis y su transcendencia en el tiempo”,en 15 días , 14/5; “Una esperada visi ta”, s/d, y Manuel Esteban Mejía,“Pérez Celis”, en Art Nexus Internacional , agosto.

• Latin Power , Anita Shapolsky Galler y, Nueva York, junto a los artistascubanos Mario Bencomo y Agustín Fernández.

Ver: Armando Álvarez Bravo, “El poder de los pintores” en El NuevoHerald , 31/5.

• Pérez Celis 1992 , galería Expresiones, Guayaquil, 11-30/6.Reseñada en “Pérez Cel is en Galerí a Expresiones”, en El Comercio ,

Quito, 14/6, y “Temporada Guayaquileña: Pérez Celis en Expres iones”,en El Telégrafo , 20/6.

• Pérez Celis , Museo de Arte Moderno, Cuenca, desde 18/6,

prologada por Abil Peralta Agüero, “Pérez Celis y su aporte a lacontemporaneidad plástica latinoamericana”.Reseñada por Manuel Esteban Mejía, “Pérez Celis”, en Art Nexus ,

agosto; “La huella de un pintor se marca en Museo Arte, en ElMercurio , 18/6; “Pintor argentino expondrá en Cuenca”, en ElMercurio , 2/6; “Pérez Celis abre muestra arti stica”, en El Tiempo ,18/6, y Susana Klinkicht, “Como un equilibrista sin red”, s/d, junio.

• [Artistas latinoamericanos ], Javier Lumbreras Fine Art, Miami, julio.Ver: Carol Damian, “Artistas l atinoamericanos” , en Art Nexus , agosto.• Galería Voh Albrcron, Alemania, septiembre.

érez Celis , Voluntariado de lasasas Reales, Casa de Bastidas,epública Dominicana.

érez Celis. Paintings , galería Sanyo,okio.

Pérez Celis, galería PlásticaContemporánea, Guatemala,septiembre.

Pérez Celis 1992 , galeríaExpresiones, Guayaquil.



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Mencionada en “Pérez Celis en gira internacional”, en Correo del ArteHispano , nº 5, Madrid.

• Pérez Celis. Obras de Nueva York, Museo Municipal de Arte Modernode Mendoza, Mendoza, noviembre/diciembre, prologada por RafaelSquirru, “Pérez Ce lis en el Museo de Arte Moderno de Mendoza”.

Reseñada por Rodolfo Windhausen, “Pérez Celis y su estela de éxitosen Argentina”, en El Nuevo Herald , s/f; Alberto H. Collazo, “Pérez Celis,en Mendoza”, en Clarín, 5/12; Andrés H. Gabrielli, “La pasión segúnCelis”, en Primera Fila , enero 1993; “Obras inéditas de Pérez Celispodrán apreciarse en Mendoza”, en Los Andes , 15/11, y “No es igualpintar para vender que tratar de vender lo que se pinta”, en Los Andes ,29/12.

• Cuatro maestros latinoamericanos , Galería de Arte Consult, Panamá.Ver: Herasto Reyes, “El arte americano florece en cada cuadro de Pérez

Celis”, en La Prensa , s/f.• 100 años de pintura argentina , Hammer Gallery, Nueva York.• Paper Visions 4 , Housatonic Museum of Art, Bridgeport, Connecticut.

• Hong Kong International Art Five , Ambrossino Galleries, Hong Kong.• The Archives of American Art , Smithsonian Institution, Washington

D.C.• Museo Transoceánico, Bremen.• Emplazó la escultura Mail Guard , obra de acero de 190,5 x 99 x 89 cm,

en la Smithsonian Institution, Washington.

1993• Pérez Celis , The Americas Collection Gallery, Coral Gables, Florida, 8/1-

5/2.Reseñada en “Extraordinario volumen con el sello de la maestría”, en El

Nuevo Herald , 20/1.• Arte contemporáneo , galería Vanidades, Miami, 15/1-19/2, prologada

por Eduardo Marceles, “Pérez Cel is: La pasión de pintar”.Ver: Eduardo Márceles Daconte, “Pérez Celis la geografía del colo r”, s/d.• Pérez Celis, Víctor Chab, José Luis Cuevas, Agustín Fernández, Omar

Rayo, Fernando de Szyszlo, Mario Toral , Anita Shapolsky Gallery, NuevaYork, 7/5-5/6.

• “Salon de Mai”, Grand Pala is, París.• Memoria Latinoamericana , galería Klemm, Buenos Aires, 9/8-15/9,

prologada por Raúl Santana, “Pérez Celis: entender el arte comoenergía”.Reseñada por “Pérez Celi s con vigor”, en Ámbito Financiero, 12/8;

Orlando Barone, “La fiesta de Pérez Celis”, en Ámbito Financiero, 12/8;Guillermo Whitelow, “Un cierto aire americanista”, en La Razón, 13/8;Elena Oliveras, “Energía y luz” en Clarín, 14/8; Albino Dieguez Videla,“Opuestos”, en La Prensa , 15/8; María Gilardoni, “Pérez Celis: ‘Muchosargentinos no tienen coraje para el arte latinoamer icano’”, en El Cronista 16/8; Rafael Squirru , “Memoria americana”, en La Nación, 21/8; LauraFeinsilber, “A walk on the wild side”, en Buenos Aires Herald , 29/8;

Laura Feinsil ber, “Pérez Celis con vigor”, en Ámbito Financiero, 12/8;Victoria Verlichak, “Vuelta de Celis”, en Revista Noticias , 29/8; CarlosK. Dibar, “Memoria americana en Galería Klemm”, en El Cronista ,30/8; Hernán Ameijeiras, “Pérez Celis: ‘Me gustaría saber a qué serefieren aquel los que opinan que soy un pintor comerc ial’”, en LaMaga , 1º/9, y Carlos María Carón, “El poder de un artista para crearvida que estimule nuestra imaginación”, en Óleo y Mármol, s/ f.

• Pinturas de Nueva York , Asociación Rosarina de Intercambio CulturalArgentino Norteamericano (Aricana), Rosario, desde 23/9.

Ver: Fernando Farina, “Memor ia americana de Pérez Celis”, en LaCapital , 12/9.

• Contemporary Latin American Art , Anita Shapolsky Gallery, NuevaYork, desde 4/11, juntamente con Chab, Cuevas y Szyszlo, entreotros.

Ver: Rodolfo A. Windhausen, “Contemporary artists from LatinAmerica”, en Latin American Art , vol. 5, nº 2, octubre.

• Rodolfo Abularach, Pérez Celis , Agustín Fernández , Anita Shapolsky

Galler y, Nueva York, 13/11-11/12. • Exposición homenaje a Luisa Mercedes Levinson (1914-1988) ,Centoira Galería de Arte, Buenos Aires, 2-11/12, juntamente conAlonso, Soldi y Batlle Planas, entre otros.

Ver: Victoria Verlichak, “Para Luisa M. Levinson”, en Revista Noticias ,12/12.

• Wiso International, Bal Harbour.

1994• Pérez Celis. Exposición de pinturas , Instituto Científico y Cultural “El

Diario” (ICCED), San Luis, 1º -20/3.Reseñada en “Con Pérez Cel is hoy será inaugurada la nueva casa”,

en El Diario de la República , 1º/3, e “Imágenes y diálogos del pintorPérez Celis”, en El Diario de la República , 3/3.

• Papel arte , Museo Nacional de Arte Decorativo, 17/3-17/4, juntamentecon Barker, Crivelli, Geiler y Mafra, entre otros.

• Pérez Celis , Museo de Bellas Artes de Luján, Luján, en el marco dela Expo Luján ’94, 1-17/4, junto al artista italiano Turi Sottile y seispintores lujanenses, prologada por María D’Adamo.

Ver: “Artistas de fama internacional exponen en Luján”, en Expo Luján

’94 , 7/4, y Martha Ana Maggi (directora del museo), “Una visita parael recuerdo : el talle r de Pérez Celis”, s/d.• Pérez Celis , Sala de Conferencias de Prensa, radio y televisión

presidencial, Casa Rosada, Buenos Aires, junio-julio.• “Ver y Estimar, previo a l Di Tella”, Museo Nacional de Bellas Artes,

Buenos Aires, 2-20/6, prologada por Luis Durán, curada por EduardoDíaz Hermelo.

• Viaje al interior de la materia , Biblioteca Nacional, Buenos Aires, 7/6-21/8, prologada por María D’Adamo.

Reseñada por Orlando Barone, “Pérez Celis se hace ver con 96

érez Celis. Obras de Nueva York,useo Municipal de Arte Moderno

e Mendoza.

Pérez Celis. Exposición de pinturas ,Instituto Científico y Cultural “ElDiario” (ICCED), San Luis.



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polémicas calaveras”, en Página/12 , 29/4; Marina Denoy, “‘Soycómplice de mi des tino’”, en Revista Noticias , 15/5; Hugo Beccacece,“El francotirador y sus r iesgos”, en La Nación, 5/6; Orlando Barone,“La noche de un pintor convocó a un gentío”, en Ámbito Financiero ,9/6; “Un vernissage espectacular”, en La Razón, 9/6; Rosa Faccaro,“Memoria de artista”, en Clarín, 11/6; Eduardo Nalé, “Megamuestraen la Biblioteca Nacional. Pérez Celis para todos” , en La Prensa , 17/6;“Pérez Celis multiplicado”, en Página/12 , 21/6; Luis Aubele, “Espaciopara v ivir el arte”, en La Nación, 15/7; Julia Raggi, “Pérez Celis: unapasión intacta”, en Panorama , mayo; Rafael Squirru, “Pérez Celisimpone su energ ía”, en La Nación, s/f; “Pérez Cel is: La vida en colores”,s/d, y Armando Álvarez Bravo, “Viaje al inter ior de la materi a”, en DeRonda , s/f.

• Encuentro con el arte , Fundación Zaraspe, Salón Fundación BancoEmpresario, San Miguel de Tucumán, 1º-16/8, junto a Carlos Alonso,Ricardo Carpani y Ezequiel Linares.

Reseñada en “Grandes artistas en Tucumán”, en 2 ª Siglo XXI , 3/8; Estela

Cuneo Quiroga, “Nos estamos atrasando en el ar te”, en Noa Tucumán,2/8; “Grandes artistas en Tucumán, en La Gaceta , 3/8, e “Inéditoacontecimiento art ístico”, s/d.

• Pérez Celis. Viaje al interior de la materia , Museo Municipal de ArtesVisuales, Santa Fe, 25/8-20/9.

Ver: Enrique M. Butti, “La obsesión de la línea y el color”, en El Litoral ,3/9.

• Pérez Celis , Museo Provincial de Bellas Artes, Resistencia, desde 6/10.• Pequeño formato latinoamericano 94: artistas contemporáneos en

Latinoamérica , galería Luiggi Marrozzinni, San Juan de Puerto Rico,juntamente con Biblos, Kuitca, Machado y Minujín, entre otros.

• Luz Mass Media , galería MUN, Buenos Aires, 10/11-10/12, prologadapor Julio Sánchez, juntamente con Anahí Cáceres, Cristina Ghetti yHéctor Medici, entre otros.

• “IV Bienal Internacional de Pintura”, Cuenca, invitado de honor.• Ediciones Corregidor, de Buenos Aires, publicó El juego de la mirada ,

de Enriqueta Crespo, con ilustración de tapa de Pérez Celis .

1995• AMIA, Muestra de arte y subasta por la reconstrucción, Alvear Palace

Hotel, Buenos Aires, 9-11/5.Reseñada por Eva Grinstein, “La muerte conjurada a través del arte:convocatoria creativa de Carlos Herzberg, a un año del atentado de laAMIA”, en El Cronista Comercial , 27/7, y Alicia de Arteaga, “Donacionesartísticas por la reconstrucción: a beneficio de la AMIA”, en La Nación, 8/5.

• Pérez Celis , Museo Municipal de Bellas Artes, La Plata, agosto,acompañada por texto del artista.

• Ciento un artistas plásticos con la ciencia , Consejo Nacional de EnergíaAtómica, Centro Atómico Constituyentes, San Martín, 3/11, juntamentecon Agatiello, Agüero, Alves y Alzugaray, entre otros.

• Pérez Celis. Viaje al interior de la materia , galería 2V’S, Lima, 7-18/11.• Pérez Celis , Sala Emilio Saraco, Neuquén, 17/11-3/12, prologada por

María D’Adamo.Ver: “Llega a Neuquén Pérez Celis, un artista con la mirada del

futuro”, s /d, 15/11.• De María Kodama a Borges , Centro Cultural Recoleta, Buenos Aires,

30/11-24/12, juntamente con Álvaro, Badii, Demirjián, Diciervo yDoffo, entre otros, prologada por Rolando Costa Picazo.

• Arte al Sur , I Encuentro de Arte Contemporáneo, Pintores yEscultores Contemporáneos, Centro Cultural Recoleta, 31/10-19/11, Buenos Aires, juntamente con Abot, Marcos y Mazzoni,entre otros.

• Museo de Arte Contemporáneo, Municipalidad de Santa Fe.• Realizó tres murales en la Universidad de Morón: Fuente de la

sabiduría , obra de metal policromado de 3,50 x 10 metros; Librode Morón, pieza de bronce y fibra poliéster de 7 x 22 metros, yUniversitas , obra de cemento, bronce y hierro policromado de 4,50

x 14 metros. La Universidad publicó Los murales de Pérez Celisen la Universidad de Morón, con textos de Omar Lima Quintana,Rafael Squirru, Lucrecia Vega Gramunt, Riccardo Campa, MaríaD’Adamo y Gustavo Navone.

Reseñado por “El ar te en el espacio cotid iano”, en La Prensa ,30/12; Osvaldo Qui roga, “Pérez Celis y sus nuevos murales”, enEl Cronista Comercial , 4/1; Rafael Squirru, “Los murales, con todauna tradición”, en La Nación, 13/1; Hernán Ameijeiras, “Pérez Celis”,en La Maga , 15/3, y Martín Bidegaray, “La esquina de Pérez Celis”,en Clarín, 1º/4.

• Realizó el mural XII Juegos Deportivos Panamericanos , sobre unatela 2 x 6 metros.

• Presentó un proyecto para realizar la escultura pública Energíatransformadora , para ser emplazada en la avenida 9 de Julio yCarlos Calvo, Buenos Aires, obra de 15 metros de altura proyectadaen hierro policromado.

Reseñado por Mariano De Vedia, “Multiplicarán las obras en elpaisaje porteño”, en La Nación, 11/3, y Sandra Comiso, “En la 9 deJulio: dos grandes esculturas”, en Clarín, s/f.

• La Universidad de Morón publicó Libros y libros - Cuadros y cuadros ,

de Rafael Squirru, con reproducción en tapa de la obra mural Librode Morón, de Pérez Celis.

1996• Pérez Celis. Obras de New York y Buenos Aires , Museo Municipal

de Artes “Juan Carlos Castagn ino”, Mar del Plata, febrero/abril ,prologada por José Solla.

Museo Municipal de Artes Juan Carlos Castagnino”, Mar del Plata.• Abstract Paintings and Sculpture , Anita Shapolsky Gallery, Nueva

York, 2/3-13/4.

aje al interior de la materia ,blioteca Nacional, Buenos Aires.

Pérez Celis. Viaje al interior de lamateria , galería 2V’S, Lima.

Pérez Celis , Sala Emilio Saraco,Neuquén

Pérez Celis. Obras de New York yBuenos Aires ,



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• The Beatles exhibition, Palais de Glace, Buenos Aires, 22/4-26/5,juntamente con Benguria, Bottero, Feratto, Burton y Campanella, entreotros.

Reseñada por Ana María Battistozzi, “Recordar es negocio: objetosrelacionados con Los Beatles, reunidos en una muestra en el Palais deGlace”, en Clarín, 20/5, y Victoria Verlichak, “Algo más que rock: RonnieWood en Praxis y The Beatles Exhibition en el Palais de Glace ”, enNoticias , 18/5.

• Primera exposición de artes visuales con subasta , Fundación Amigosde DAIA, Casa de la Cultura de Buenos Aires, Buenos Aires, desde18/6, juntamente con Agüero, Aizenberg, Alonso, Spilimbergo ySupisiche, entre otros.

Reseñada por Diego R. Villanueva, “La DAIA expone y subasta”, en Ocio ,7/6, y Victoria Verlichak, “Por la vida: 1 ª Exposición de Artes VisualesDAIA, con subasta”, en Revista Noticias , 8/6.

• [Pérez Celis ], Centro Cultural Municipal, General Rodríguez, 25/10-15/11.

Ver: “Trascendente visi ta de Pérez Celis”, en La Hoja , 1º/11.• Semana de Piazzolla , Centro Cultural Recoleta, Buenos Aires.• La escultura Presencia protectora quedó emplazada en Miami. Se trata de

una obra de metal y madera policromada de 152 x 23 x 23 cm.• Ediciones Corregidor, de Buenos Aires, publicó Máscaras y espejos , de

Lucrecia Vega Gramunt, con obra de tapa de Pérez Celis.

1997• Pérez Celis , Museo de Arte Americano de Maldonado, Maldonado,

enero, prologada por María D’Adamo.Reseñada por Abel López Iturbe, “A falta de teatro hay buena agenda de

pinturas en el Este”, en Ámbito Financiero, 24 /1, y Yanina Kravchinski,“La pintura de Pérez Celis”, s/d, 29 /1.

• Un símbolo, todos los símbolos , galería Rubbers, Buenos Aires, 6-29/5,con el prólogo “Pérez Cel is: Resultado de una trayector ia”, de RafaelSquirru.

Reseñada por Alicia Casais, “Un símbolo , todos los símbolos”, en Noti.Era , 4/7; Albino Dieguez Videla, “[Desde su última, y memorable…”],en La Prensa , 11/5, y “Los símbo los de Pérez Celis”, en El Cronista , 7/5.

• Realizó dos murales –Ídolos y Mito y destino – en la fachada del Estadio

de Boca Juniors, en Buenos Aires. Se trata de obras de cemento sobreestructura de hierro revestido de mosaico veneciano con aplicacionesde bronce, de 4 x 18 metros cada uno.

Se publicó Murales en el Estadio de Boca Juniors de Pérez Celis yRómulo Macció ; incluye ficha técnica y reproducciones de las obras.

Reseñado por : J.S., “Por amor al Arte, por amor a Boca”, en Opinión, 21/1;“Los murales de la Bombonera”, en La Maga , 22/1; Norma Lugo, “LaBombonera combina fútbol con arte por los murales de Pérez Celis”,26/3; Víctor Sosa, “El ar te y el fú tbol”, Origina , mayo/1998; “Macció yPérez Celis pintan a Boca en los muros del estadio”, en Clarín, 28/6; “Eloro y el azu l”, El Diario de Carlos Paz ,10/7; Facundo Martínez, “Boca se

pint a solo”, en Página/12 , 13/7; “Dos pintores en la Boca” Revista LaNación, 20/7; “Pérez Celis: ar te y fútbol con el co razón en la Boca”,La Prensa 21/8; Ángeles Castro, “Dieciséis murales para Boca”, enLa Nación, 22/8; O.G, “Arte en azul y oro”, en La Revista Quincenalde Actualidad y Cultura , nº 75, octubre; Luis Casabal y ChristianLeblebidj ian, “Los murales del fútbol”, en La Nación, 28/12.

• Realizó el mural Camino del conocimiento en la Universidad deBelgrano, Buenos Aires. Se trata de una obra de madera policromada,de 5 x 3 metros.

Ver: Catalina Pantuso, “Pérez Celis : todo estilo es una cárcel”, enSoles, la agenda cultural de Buenos Aires , diciembre.

.1998 • [Pérez Celis ], Teatro El Círculo, Rosario, auspiciada por la Asociación

Rosarina de Intercambio Cultural Argentino-Norteamericano, julio.Reseñada por Fernanda González Cortiñas, “Un artista que necesita

mucho lugar para exponer”, en Página/12 , 19/7, y “Pérez Celis

expondrá en El Cí rculo”, s/d, 21/7.• Mundial Francia ’98 , galería Rubbers, Buenos Aires, auspiciada por

la Embajada de Francia en la Argentina, juntamente con Borla, Brizziy Dávila, entre otros.

• 20 años de Navarro Correas con el arte , Centro Cultural Recoleta,Buenos Aires, hasta 13/9, juntamente con Alonso, Badii, Benedit yBerni, entre otros.

Reseñada por Verónica Voulié, “Cuadros que dan sed”, en Cuisine&Vins ,s/f.

• “Feria Internac ional de la Industria Gráfica”, San Justo, curada porRenato Rita, juntamente con Cambre, Esteves, Klemm, Minujín,Polesello, y Wells.

• [Pérez Celis ], Golden Palace, San Luis, 28/12-28/2, acompañada portexto de Rafae l Squirru, “Porteño universal”.

Ver: “San Luis se honra con la presencia de Pérez Celis”, en El Diariode la República , 29/12, y “Pérez Celis”, en La Opinión, 28/12.

• Anita Shapolsky Gallery, Nueva York.• Maestros latinoamericanos , galería Arteconsult, Panamá.• Realizó el mural El libro de la sabiduría , en la imprenta Anselmo

Morvillo, Avellaneda. Se trata de una obra de metal, madera

policromada y bronce a la cera perdida, de 8 x 10 metros.Ver: “Pérez Celis, Whitman y más murales”, en El Nuevo Herald , 8/11.• Se colocó la escultura Ángel protector en el edificio Fortabat, Buenos

Aires. Se trata de una obra de acero y cemento armado de 7 metrosde altura.

Reseñado por Daniel Flores, “La city tendrá su ángel protec tor”, enLa Nación, s/f; “A hoist for the angel”, en Buenos Aires Herald , 19/3,y Rafael Squir ru, “Vive el ángel protector de Pérez Celis”, 14/2, s/d.

• Fue convocado por Bernardo Fernández, a través de la arquitectaEmilce Argüello, para diseñar la decoración de la fachada del edificioCentral Park, en Barracas, Buenos Aires. En 2001 se realizó la



122 123

ampliación del complejo.Ver: María de Vedia, “Una propuesta en Barracas”, en La Nació n,

7/8/2000, y “Ampliación del Central Park. Una color ida linterna edilici a”,en El Cronista , 15/8/2001.

• Ediciones del Valle, Buenos Aires, publicó El Manantial , de CarlosPenelas, con obras de Pérez Celis en la tapa y en el interior del libro.

1999• Four Latin American Masters: Agustín Fernández , Pérez Celis , Antonio

Seguí and Oswaldo Vigas , en Anita Shapolsky Gallery, Nueva York,1º /5-5/4. [Verificar]

Ver: “The abstract trend in four Latin American masters”, en Arte al Día ,mayo.

• Pérez Celis. Una década. Buenos Aires, New York, Miami , CentroCultural “Ing. Eugenio Flavio Virla”, Universidad Nacional de Tucumán,Tucumán, desde 15/6, acompañada por texto del artista “Lo real y lomág ico”.

Reseñada en “Exposición de Pérez Celis en el Centro Virla”, en SigloXXI , 6/6; “Un espacio donde no entran los miedos”, en La Gaceta , 6/6;Ernesto Klass, “El largo itinerario de un pintor”, en Siglo XXI , 16/6; “Lalibertad expresiva del artista verdadero”, en La Gaceta de Tucumán,16/6, y “Pérez Celis”, en D-Signos , nº 4, noviembre.

Murales 1995-1998 , Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo,Buenos Aires, 22/6-23/7, prologada por Cecilia E. Lueza.

Ver: “La FADU, un l ibro abierto”, en La Nación, 23/06.• Pérez Celis. Hojas de hierba. Walt Whitman, Centro Cultural Recoleta,

Salas 4 y 5, Buenos Aires, 29/7-22/8, auspiciada por la Embajadade Estados Unidos de América, prologada por Rafael Squirru, “Laspinturas de Pérez Celis para las Hojas de hierba , de Walt Whitman”.

Reseñada por Rosa Faccaro, “Canto a un poeta americano”, en Clarín,14/8; Karl Börz lin, “Pérez Celi s interprets Walt Whitman”, en BuenosAires Herald , 15/8; Bonnie Tucker, “The art of unexpected”, en BuenosAires Herald , 4/7; Rafael Squirru, “El pinto r como intérprete”, en LaNación, 15/8, y Juan Carlos Diez, “Homenaje a Walt Whitman”, enRevista Luna , s/f..

• Juárez Editor, de Buenos Aires, publicó Hojas de hierba , de WaltWhitman, traducido por Jorge Luis Borges, con interpretaciones

visuales de Pérez Celis. Presentado en Miami Book Fair por ArmandoÁlvarez Bravo y Pérez Celis, 14-21/11.Reseñado en “Interpretaciones visuales de Pérez Celis sobre

Whitman”, en La Razón, 29/7; Orlando Barone, “Los libros de l pintor”,y Susan Larsen, “Pérez Celis”, en Suplemento Especial de Página/12para el CCR , agosto; Adrian Ghiacchetti, “Yo pinto a lo Pérez Ce lis”,en Semanario Huella , suplemento Tu Cultura , 28/8; “Pérez Celis,Whitman y más mura les”, en El Nuevo Herald , 8/11, y “Whitman,Borges y Pérez Celis confluyen en un l ibro”, en El Argentino-Mercosur ,Estados Unidos, diciembre.

• Entre dos cielos , galería Arteconsult, Panamá, 25/11-15/12.• Entre dos cielos , Museo de Arte Contemporáneo, Panamá, 30/11-

30/12.• Manzana de las Luces - Tributo de Artistas Plásticos Argentinos ,

Colegio Nacional de Buenos Aires, Buenos Aires, desde 6/12,juntamente con Benedit, Brizzi, Cañás y Demirjián, entre otros,prologada por Jorge López Anaya.

• En el marco de la muestra Murales 1995-1998 , realizada en laFacultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de Buenos Aires,la obra de 1994 El gran libro , políptico de ocho paneles de 5 x 8metros en técnica mixta, quedó emplazada definitivamente en elPabellón III.

2000• Pérez Celis , Painting the Millenium. Tribute to Iris , Elaine Baker

Gallery, Boca Ratón, 10/2-10/3, acompañada por texto de CarolDamian.

• Pérez Celis. Visual Interpretations of Walt Whitman (Tribute to Iris) ,Kendall Campus Art Gallery, Miami-Dade Community College, 18/2-

24/3.Reseñada por Armando Álvarez Bravo, “Pérez Celis plural”, en ElNuevo Herald , s/f; “Pérez Cel is”, en La Opinión de Miami , febrero;“A room with an artistic v iew”, en Catalyst , 6/3, y Armando ÁlvarezBravo, “Borges y Pérez Celis, una confluencia”, en El Nuevo Herald ,27/5.

• Plástica por plástico s, Predio Ferial de Palermo, Buenos Aires, 3-8/4,organizada por la Cámara Argentina de la Industria Plástica, curadapor Osvaldo Mastromauro, juntamente con Badii, Brizzi, Delmontey Distéfano, entre otros.

• Mil años de arte , Auditorium “Carlos Ortiz” de La Voz del Interior ,Córdoba, desde 14/7.

Reseñada en “El espí ritu de un milenio, según Pérez Cel is”, en La Vozdel Interior , 14/7; “Pérez Celis dejó inaugurada la muestra ‘Mil añosde ar te’”, en La Voz del Interior , 15/7, y “Pérez Celis pint a el milenio“,en Revista Nueva , nº 439, 12/12/99.

• Ciclo de diálogos abiertos , serigrafías, Jockey Club Rafaela, Rafaela,desde 1º/9.

Ver: “Mempo Giardinelli y Pérez Cel is en Rafaela”, en Castellanos , 2/9.• El milenio según Pérez Celis, una sinopsis de los últimos diez siglos ,

Fundación Cultural Patagonia, organizada por la revista Nueva yauspiciada por el diario Río Negro , Río Negro, desde 2/9.Reseñada en “El gran ar tista Pérez Celis y sus obras de Roca”, en

Río Negro , 2/9, y C. Vouillat, C. Torrengo y colaboración de J. Ojeda,“Pérez Celis y su manera de ser popular sin pintar florcitas”, en RioNegro , 10/9.

• “VIII Bienal de Arte Sacro-Pintura 2000”, Salas Naciona les deCultura, Morón, 9/11-3/12.

• Pérez Celis , The Miracle Mile Theatre, Coral Gables, 15/11-31/12.• Homenaje a Los Pumas , Hotel Emperador y Unicenter Shopping,

Morón, juntamente con Compagnucci, Tessarolo y Robirosa, entreotros”.

érez Celis. Una década Buenosres, New York, Miami , Centroultural “Ing. Eugenio Flavio Virla”,niversidad Nacional de Tucumán,cumán.

Pérez Celis. Hojas de hierba. WaltWhitman, Centro Cultural Recoleta,Buenos Aires

Pérez Celis , Painting the Millenium.Tribute to Iris , Elaine Baker Gallery,Boca Ratón.



124 125

Ver: “Muestra de pinturas homenaje a Los Pumas”, en Caras , 15/11

2001Visual Harmonies , Anita Shapolsky Gallery, Nueva York, 10/2-28/4,

juntamente con William Manning, Thomas Nonn y Erick van der Grijn.• Pérez Celis , Offitbank, Miami, 18/4-18/5; Carol Damian dictó una

conferencia.• A Tribute to Borges and Whitman: The Art of Pérez Celis , Miami-Dade

Public Library System, Miami, 19/4-16/6.Ver: Armando Álvarez Bravo , “Borges y Pérez Celis, una confluencia”, en

El Nuevo Herald , 27/05.• Tributo , Salas Nacionales de Exposición, Palais de Glace, Buenos Aires,

14/6-26/7, con curaduría de Jacques Martínez, acompañada por textosde María José Gabín “Homenaje a Venus o a la gracia de Venus”;Mercedes Casanegra, “Pérez Ce lis y la popularidad como fenómeno”, yMaría José Herrera, “Pérez Celis: encontrar en los orígenes”.

Reseñada por Sebastián Feijoo, “Las mujeres de un artista, presentadas

en una obra”, en La Razón, 29/5; Guillermo Quinteiro, “Los gozos y lassombras”, en Revista Puntos , Ámbito Financiero, mayo; Pablo Wahon,“Pérez Celis”, en Builders , mayo; “Pérez Celis homenajea sus mujeres”,en El Diario de Bolsillo , 1º/6; “Pérez Celis se pone autob iográfico”, enLa Capital , Rosario, 3/6; Ariel Dilon, “Todo estilo es una cárcel, PérezCelis”, en 3 Puntos , 7/6; “Pérez Celis se solidariza con su arte”, enLa Gaceta , Tucumán, 13/6; “Un tri buto de Pérez Cel is”, en La NuevaProvincia , 13/6; Alicia Vergili, “Pérez Celis inaugura la muestra Tributo ”,en Metro , 13/6; “Un tributo de Pérez Celis”, en Diario R í o Negro ,13/6; “La gran muestra de Pérez Cel is”, en La Razón, 14/6; “Cuatromil personas con Pérez Celis”, en La Razón, 15/6; “Un gran recorridopor la obra de Pérez Celis”, en Clarín, 16/6; “Muestra de Pérez Celis”,en BAE , 19/6; A.D.V, “La vida de Pérez Celis”, en La Prensa , 22/06;“Pérez Celis, sus mujeres y el público”, en Clarín, 23/6; Christine CastroGache, “Pérez Celis: ardent leaves of g ratitude”, en Buenos AiresHerald , 24/6; Orlando Barone, “El artista insolente Pérez Celis”, enRevista La Nación, 24/6; “Furor por e l arte en Recoleta”, La Razón 25/6;Carla Rodr íguez, “Pérez Celis”, en Clarín Mujer , 26/6; Rafael Squirru,“La buena est rella de Pérez Celis”, en La Nación, 1º/7; “Marke PérezCelis”, en Argentinisches Tageblat , 7/7; Ariel Authier, “Pérez Celis para

conocer la obra”, en Revista 23 , 13/7; Natalia Fernández Matienzo, “PorPérez Celis”, en Página/12 , 22/7; “Pérez Celis o de la buena estrella”, enEl Planeta Urbano , julio; Carlos Romano, “Pérez Celis y su tributo sustres mujeres”, en Celina Vive!, julio; Daniel C. de Souza Tomé, “PérezCelis”, en Acción y Provincia , jul io; Fabio Rosso, “Pérez Celis. Tributo”,en Papel y Estampa , julio; Catalina Pantuso, “De Liniers al mundo y otravez en Buenos Aires”, en Sole , julio; Gabriel Imparato, “Para mí pintares un hecho natural’”, s/d, 4/8; Armando Álvarez Bravo, “Un tributo aPérez Celis”, en El Nuevo Herald , 9/9; “Pérez Celis buena estrella yperseverancia”, en Arte al Día , nº 86, s/f; Carlos María Carón, “Pérez

Celis y sus muje res”, en Cosas del Barrio , s/f.• Pérez hoy , Hotel Llao Llao, Bariloche, desde 3/8.Reseñada en “Pérez Celis, los pueblos, el arte y la histo ria”, en Río

Negro , 4/8; “Pérez Celis i nauguró muestra en Bariloche”, en LaMañana del Sur , 4/8, y “Muestra gratis”, en El Cordillerano , 4/8.

• Morón-Pilar , Hotel Sheraton, Pilar, organizada por la Universidad deMorón, 14/8-2/9.

Reseñada en “Pérez Cel is y María Kodama en el Sheraton”, en LaNación, 18/8; “Todo un milenio según los ojos y el genio de PérezCelis”, en El Diario , 18/8; “La cultura nos acerca, conjugando artes yciencias”, en Soles , septiembre, y “Pérez Cel is en Pilar“, en El Diariode Pilar , 18/8.

• Renascita , Damien B. Contemporary Art Center, Miami, 12/10-3/11.Ver: “Renacer de Pérez Celis”, en El Nuevo Herald , 4/11.• Nuevo Hacer, de Buenos Aires, publicó Pasajero de la vida , de Alicia

Parisier, con interpretaciones visuales de Pérez Celis.

2002• Paintings-Prints-Miami-Buenos Aires , Praxis International Art, Coral

Gables, hasta 29/4.Reseñada por Armando Álvarez Bravo, “La energía del paisa je”, en El

Nuevo Herald , 28/4.• Contrasts in Latin American Art , Anita Shapolsky Gallery, desde 9/5,

juntamente con Fernández y Puppo (obras de 1960-1980).• Arte & fútbol , Filo Espacio de Arte, Buenos Aires, desde 21/5,

juntamente con Gorriarena, Seguí, Noé y Polesello.Ver: Diego Rosemberg, “Pinta tu mundial”, en Tres Puntos , 23/5.• On the Cross Roads Art of Mercosur , Arts Magna, Miami, curada por

Milagros Bello.• Argentina 2002 , Broward County Libraries, Fort Lauderdale.• Valores , galería Zurbarán, Buenos Aires.

2003• Pérez Celis. Beyond Borders , Coral Springs Museum of Art, Florida,

8/3-18/5, prologada por Bruce Helander, “Pérez Celis. Dance of life”.Reseñada por Armando Álvarez Bravo, “Pérez Celis más allá de todo

límite”, en El Nuevo Herald , 20/4, Buenos Aires; “Artistas argentinos

en el exterior”, en Estímulo Arte y Comunicación, año VI, nº 50,Buenos Aires, marzo; Albino Dieguez Videla, “Las fronteras casi noexisten”, en La Prensa , Buenos Aires, 6/4; Fabián Kovacic, “El mundodesde la abstracción latinoamericana, en Tiempos del Mundo ,Buenos Aires , 17-23/4, y Fabio Rosso, “Beyond Borders”, en RevistaG7 , Buenos Aires.

• Homenaje a Van Gogh, galería Zurbarán, Buenos Aires, 14/4-1º/6,juntamente con Alonso, Rikelme, Russo, Burone Risso y Bertani,entre otros.

• • La cosa freudiana. 20 años de conjetura , Centro Cultural Recoleta,

ibuto , Salas Nacionales dexposición, Palais de Glace, Buenosres.

Pérez Celis. Beyond Borders , CoralSprings Museum of Art, Florida.



126 127

Buenos Aires, 14-30/11, acompañada por texto de Raúl Santana,juntamente con Daniel Santoro y Víctor Chab, entre otros.

• Maestros latinoamericanos de hoy y mañana , Artspace/Virginia MillerGalleries, Miami.

• The Writers’ Collective de Cranston editó Teatro. El libro de Ruth. Esquirlas , de Mario Diament, con ilustración de tapa por Pérez Celis. Está publicación también está disponible por la misma editorial eninglés, The Book of Ruth & Smithereens.

2004• Homenaje a Salvador Dalí de los artist as argentinos , galería Zurbarán,

Buenos Aires, hasta 12/6, juntamente con Bertani, Lascano, Liberti yNigro, entre otros.

Ver: “Queríamos tanto a Dalí”, en Revista Viva , 2/5.• Fútbol en el Palais, arte y literatura , Palais de Glace, Buenos Aires,

mayo, juntamente con De la Vega, Noé, Minujín y Castagnino, entreotros.

Ver: Alfredo Cernadas, “Football and art: what a goal!”, en Buenos AiresHerald , 2/5.• El placer de la pintura , Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos

Aires, Buenos Aires, mayo.Genesis Artists for Aids , American Airlines Arena, Miami, mayo,

juntamente con Romero Britto y Xavier Cortada, entre otros.Ver: “Los artistas se unen contra el s ida”, en El Nuevo Herald , 11/5.• Espíritu, materia y color , Museo de la Catedral de La Plata, La Plata,

1º/7-29/8.Reseñada por F.D., “Lo bueno, si grande, dos veces bueno”, en Tiempos ,

27/6; Rafael Squir ru, “Variaciones sensibles y poéticas”, en La Nación,Buenos Aires, 4/7, y Ximena Linares Calvo, “El arte de Pérez Celisllega a la Catedral de La Plata”, s/d.

2005• Homenaje a Rafael Squirru , galería Zurbarán, Buenos Aires, 23/3-6/4,

juntamente con Berni, Alonso, Roux, Benedit y Presas, entre otros.Ver: Loreley Gaffoglio, “El arte rindió homenaje al críti co Rafael Squirru”,

en La Nación, 24/3.• Pérez Celis. Xentenario , Museo de Bellas Artes de la Boca “Benito

Quinquela Martín”, Buenos Aires, 31/3-1º/5, prologada por “Boca, laBoca y sus maestros”, de Orlando Barone, y “La raíz y l a copa”, deJulio Sánchez.

Ver: Paula Morel lo, “La Boca según el pincel de Pérez Celis”, en Infobae ,14/2.

• Pérez Celis. Retratos , Espacio de Arte AMIA, Buenos Aires, abril/ mayo, prologada por Mario Diament y acompañada por texto de JulioSapollni k, “Los retratos de Pérez Celis”.

Ver: Diana Fernández Irust a, “Miradas sin fronteras”, en La Nación, 17/4.• De la sartén a la tela. Sabores al óleo , Galería de Arte Matthei, Santiago

de Chile, 8-24/7, juntamente con Duclos, Domínguez, Lefever y Lynch,

entre otros.• 16 miradas sobre Don Quijote de la Mancha , Biblioteca Nacional,

Buenos Aires, septiembre, juntamente con C. Alonso, Ferrari,Gorriarena y Prior, entre otros.

• Homenaje a Leopoldo Presas , galería Zurbarán, Buenos Aires.• Pérez Celis. Recent Paintings , The Point of Contact Gallery, Syracuse,

16/11-7/12.• La escultura Ángel de las Américas quedó instalada en el Museum

of Latin American Art, Long Beach, California. Se trata de una obrade aluminio esmaltado de 3,05 x 1,98 x 1,98 metros.

• Day to Day Enterprises, de Maryland, publicó Blind Dat e, de MarioDiament, con ilustración de Pérez Celis en la cubierta.

• Ediciones Pasco, de Buenos Aires, publicó Un tal Gardel , de JuanEduardo Carballo y Gustavo Coletti, con tapa i lustrada de Pérez Celis.

• Ferias y Congresos, de Buenos Aires, publicó Puntos de encuentro.La industria de las convenciones , de Juan Carlos Grassi y Jorge E.Castex, con ilustración de tapa de Pérez Celis.

2006• From Private Walls , Lighthouse Center for the Arts, Tequesta, 1º/1-

1º/4.• Florida Atlantic University, University Center Art Gallery, abril.• Paper Works by Abstract Masters , Anita Shapolsky Gallery, 11/3-

22/4, juntamente con Consuegra (Cuba) y Sánchez (Cuba).• Pan American Art , Anita Shapolsky Gallery , 2/5-1º/7, juntamente con

Appel, Blackburn, Boardman y Bolotowsky, entre otros.• Sur-El Sur , Museo de Arte Moderno, Santo Domingo, 25/5-25/7,

prologada por Marianne De Tolentino, “Pérez Celis. Insaciable,impredecible y esperado”.

• Borges, evocar los sueños , Pabellón de las Bellas Artes de laUniversidad Católica Argentina, hasta 30/7, juntamente con Alonso,Badii, Benítez y Porter, entre otros.

Ver: “Borges, por los g randes pintores”, en Revista Nueva , 16/7.• Papeles para Brancusi , Embajada de Rumania, Buenos Aires,

septiembre, prologada por Remo Bianchedi, “Papeles de Celis paraBrancusi”.

Ver: Albino Dieguez Videla, “Los modernos: de ayer a hoy”, en La

Prensa , 3/9.• Viaje al color , Museo Municipal de Bellas Artes de Bahía Blanca y

Museo de Arte Contemporáneo, Bahía Blanca, septiembre.• Viaje al color , Museo Provinci al de Bellas Artes “Emil io Caraffa”,

Córdoba, 12/10-12/11.Ver: Verónica Molas, “Los próximos pasos del Museo Caraffa”, en La

Voz del Interior , 27/3.• [Pérez Celis ], galería Espaciocentro, Córdoba, desde 17/10.Ver: “Pérez Celis”, en La Mañana de Córdoba , 17/10.• Memoria, treinta años del golpe de Estado , Palais de Glace, Buenos

érez Celis. Xentenario , Museoe Bellas Artes de la Boca Benitouinquela Martín, Buenos Aires.

Pérez Celis. Retratos , Espacio deArte AMIA, Buenos Aires, abril/ mayo.

Sur-El Sur , Museo de ArteModerno, Santo Domingo.

Viaje al color , Museo Municipalde Bellas Artes, Museo de ArteContemporáneo, Bahía Blanca,y Museo Provincial, Córdoba.



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Aires.• Se emplazó la escultura Stone for Peace en el jardín de esculturas

“Peace Garden” del Museo de Arte Coral Spring en Miami. Se tratade una obra de alumnio esmaltado y terminada con una piedra derodocrosita de Brasil.

2007• Grandes maestros de la pintura argentina , galería Cerrito, Córdoba,

8-24/5, juntamente con Berni, Bruzzone, Cogorno y De Quiroz, entreotros.

• Tendencias abstractas y geométrica s, MUMA, Museo Municipal deArte Ángel María de Rosa, Junín, desde 13/6, juntamente con Mazzoni,López Osornio, Kortsarz, Jonquieres y Wells, entre otros.

• Pérez Celis. Grandes relatos , Pabellón de Bellas Artes de la UniversidadCatólica Argentina, Buenos Aires, 26/7-26/8, curada por CeciliaCavanagh.

Ver: Raquel San Martín, “La obra de Pérez Celis, entre el color y la

poesía”, en La Nación, 27/7.• Pérez Celis , Museo Municipal de Bellas Artes, Rí o Cuarto, septiembre,

acompañada por texto de Jorge Busnelli.• La Editorial Ob Stare, de Tenerife, publicó Gotas de amor , de Willie

Merlino, con la reproducción de una pintura de Pérez Celis en lacubierta.

• Ediciones Universal, de Miami, publicó Cabos sueltos , de ArmandoÁlvarez Bravo, con una pintura de Pérez Celis en la cubierta.

• Se emplazó la escultura pública El ojo del tiempo , un reloj solar, enMerlo, San Luis. Los trabajos estuvieron a cargo del Estudio Valzacchiy Asoc., bajo la dirección de obra delarquitecto Cueva y el cálculoastronómico por Jaime García. Se trata de una obra de hormigónarmado de 23 x 16 metros de diámetro.

• Diseñó la decoración de la fachada del edificio Hialeah en Miami.

2008• Pérez Celis. Pasión por el arte , Salón de Pasos Perdidos de la Honorable

Cámara de Diputados de la Nación, Buenos Aires, 8-25/4, curada porPablo Brahamian.

• Masters of Abstraction, Anita Shapolsky Gallery, 6/5-20/9.

• Camino al Bicentenario , Salón Belgrano de la Casa Rosada, BuenosAires, 2-14/10, curada por Lucrecia Vega Gramunt, juntamente conTesta, Minujín y Vita, entre otros.

2009• Homenaje al papel , Museo Maguncia, Buenos Aires, juntamente con

Laurence Barker, Leonardo Gotleyb, Alejandro Volij y Ana Brüllo.

2010

• Pérez Celis. Homenaje , galería Jacques Martínez, Buenos Aires,2/8-10/9.

Ver: A.D.V. “Recuerdo de Pérez Celis”, en La Prensa , 6/8.• Homenaje al Bicentenario , galería Boca Arte, La pinacoteca del Club

Boca Juniors, 29/5.

2011• Pérez Celis. Pinturas , Cariló Arte Contemporáneo, Cariló, 9/12-29/2.

2014• Pérez Celis. Libertad y pasión, Museo Lucy Mattos, Beccar, con

curaduría y prólogo de Julio Sapolnik. 2/8-28/9.Ver: “Pérez Celis revive en una muestra con sus p inturas”, en El

Federal , septiembre.• Pérez Celis. Medio siglo de pintura, 1957-2007 , Museo Nacional de

Bellas Artes de Neuquén, Neuquén, 5/12-24/3.Reseñada en “50 años de Pérez Celis en el MNBA Neuquén”, en

Diario Río Negro , 10/12; “Pérez Cel is: 50 años”, en La Mañanade Neuquén, 11/12; Oscar Smoljan, “El MNBA rinde homenajea Pérez Celis”, en Mejor Informado , 10/12; “Pérez Celis muestraretrospectiva en el MNBA Neuquén”, en Argentina Noticias , 12/12;“El MNBA rinde homenaje a Pérez Celis”, en La Voz de Cipolletti ,13/12; “Obras de Pérez Celis en Neuquén”, en Revista Machete ,13/12; “Pérez Ce lis en MNBA Neuquén”, en Neuquén Post , 14/12;“Pérez Celis, 50 años de energ ía creadora”, en Arte Informado ,diciembre; Diego González, “Expo de Pérez Cel is en Neuquén”, enCero , 21/1/2015, y “Pérez Celis : medio siglo de pintura 1957-2007”,en Arte al Límite , s/f.

2015• Pérez Celis. 50 años de pintura , Espacio Cultural de la Fundación

Cultural Patagonia, General Roca, 15/4-23-5.Reseñada en “Supermuestra de la obra de Pérez Celis en Roca

desde hoy”, en Río Negro, 15/4; “Muestra de Pérez Celis, en LaMañana de Neuquén, 15/4, y “Últimos días de la muestra de PérezCelis”, en Roca Digital , 19/5.

• Letra Viva, de Buenos Aires, publicó Destinos. El jardín de los

deseos , de Ursita Gavril, con una obra de Pérez Celis en la t apa.

érez Celis. Homenaje , galeríacques Martínez, Buenos Aires.



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Obras Expuestas

Montevideo 59, 1959Óleo sobre tela, 70 x 100 cmColección Particular

Movimiento en varias dimensiones , 1959Óleo sobre tela, 69 x 100 cmColección Particular

Máquina , 1960Óleo sobre tela 140 x 140 cmColección particular, Edgardo Zamora

El pez mágico , 1960Óleo sobre tela, 115 x 123 cmColección Museo de Arte Moderno de BuenosAires

Rey América, 1961Óleo sobre tela, 146 x 89 cmColección MNBA

Sara, 1961Óleo sobre tela, 100 x 60 cmColección Particular

El rey , 1961Óleo sobre tela, 146 x 88 cmColección Particular

Composición, 1961Óleo sobre hardboard, 65 x 50 cmColección Zurbarán

Pez América , 1961Óleo sobre tela, 146 x 97 cmColección Museo de Arte Moderno de BuenosAires

Pintura 1962Óleo y madera sobre tela, 100 x 60 cmColección Particular

Caja Signo I , 1962

Técnica mixta, 65 x 27 cmColección Particular

Caja Signo II, 1962Técnica mixta, 110 x 91 cmColección Particular

Exaltación, 1963Óleo sobre tela, 166 x 135 cmColección Particular

Sin título, de la serie Saracompañera, 1970Seis litografías sobre papel, 18 x 15 cmColección Particular

Sin título, de la serie Anatonia , 1965Cinco serigrafías sobre papel, 38 x 28 cmColección Particular

Pampa roja, 1968Colecciones del Hombre NuevoPoemas: Fernando Demaría. Xilografías: PérezCelis.Colección Particular

Saracompañera , 1970Caja de madera de 19 x 19 cm conteniendoseis litografías sobre papel y poema.Litografías: Pérez CelisPoema: El bambú de la ventana de Li HochuColección Particular

Poemas endovenosos , 1975Ediciones Cuarto MundoPoema: Carlos María Carón. Dibujo: PérezCelis.Colección Particular

Pampa roja, 1967/8Acrílico sobre tela, 150 x 150 cmColección Particular

Consagración a la luz y a la vida, 1969Acrílico sobre tela, 203 x 183 cmColección Particular

Misión: la propia construcción-transformación,1970Óleo sobre tela, 130 x 97 cmColección Particular

De las antiguas leyes - Los testigos , 1978Acrílico sobre tela, 250 x 400 cm (políptico de

4 partes)Colección Fundación Rozenblum

Al dios desconocido, 1978Técnica mixta sobre tela, 199 x 163 cmColección Museo de Arte ContemporáneoLatinoamericano de La Plata

Recuerdo de antepasados , 1977Cincografía sobre papel, 54 X 43 cmColección Particular



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La llamada de los dioses , 1977Cincografía sobre papel, 54 X 43 cmColección Particular

Vuelo al sol, 1980Acrílico sobre tela, 205 x 250 cmColección Aerolíneas Argentinas

Memoria de la Tierra, 1980Técnica mixta sobre tela 204 x 168 cmColección Fundación Rozenblum

A cada cual su tiniebla, 1981Óleo sobre tela, 146 x 114 cmColección Particular

Cultivar entre muros, 1982Óleo sobre tela 165 x 133 cmColección Particular

Recorrer el tiempo, 1982Técnica mixta sobre papel, 110 x 73 cmColección Particular

Concentración de Espacio, 1982Técnica mixta sobre papel, 73 x 110 cmColección Particular

Sin Título, 1983Técnica mixta sobre papel 66 x 51 cm.Colección Particular

Sin título, 1983Serigrafía sobre papel, 70 x 50 cmColección Particular




Atravesando formas , 1984Acrílico sobre tela, 152 x 168 cmColección Particular

Dar movimiento, 1983Óleo y grafito sobre tela, 213 x 178 cmColección Particular

Los inmortales, 1985Óleo sobre tela, 203 x 178 cm,Colección Particular, Edificio Central Park –Barracas

Entendimiento , 1986Óleo sobre madera y tela, 218 x 201 x 10 cmColección Particular

Zona registrada , 1988Óleo sobre tela, 198 x 188 cmColección Particular

Nuestra sangre, 1989Óleo y madera sobre tela 340 x 150Colección Presidencia de la Nación –

Secretaría General

En el país de los hombres sencillos , 1991Madera policromada, 178x125x20 cmColección Particular, Edificio Central Park –Barracas

El encuentro, 1991Óleo sobre tela, 152 x 173Colección Particular, Edificio Central Park –Barracas

Fuente de la sabiduría , 1995Maqueta, 140 x 125 x 39 cmColección Particular, Edificio Central Park –Barracas

Camino del Conocimiento , 1997Maqueta de madera policromada, 100 x 60 x35 cmColección Particular

Ídolos, murales del estadio del club Boca Jrs.,

1997Maqueta, 151 x 102 x 33 cmColección Particular, Edificio Central Park –Barracas

Libro de la Sabiduría , 1998Maqueta de madera y metal, 115 x 160 x 75 cm.Colección Particular

El ojo del tiempo , 2007Maqueta de cartón. Escultura emplazada enMerlo, Provincia de San LuisColección Particular

Ídolo rechazado, 1991Madera y metal, 254 x 28 x 18 cmColección Particular

De fuentes sagradas-Mensajes , 1991Acrílico sobre tela, 198 x 346 cmColección Particular, Edificio Central Park –Barracas

La presencia , 1991Madera policromada, 282 x 30 x 15 cmColección Particular

Presencia Maya – Mariposa , 1992

Óleo sobre tela, 121 x 274 cmColección Fundación Federico Jorge Klemm

La oración, 1997Técnica mixta sobre tela, 153 x 120 cmColección De Arte Amalia Lacroze de Fortabat

Místico, 1997Técnica mixta sobre tela, 200 x 200 cmColección Particular

Ave fénix , 1997Técnica mixta sobre tela, 200 x 200 cmColección Fundación Rozenblum

Cono Sur, 2005Técnica mixta, 203 x 178 cmColección Particular

Sur Norte, 2005Técnica mixta, 117 x 142 cmColección Particular



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RECCIÓN EJECUTIVA

Marcela Cardillo

RECCIÓN ARTÍSTICA

María Inés Stefanolo

ELEGACIÓN ADMINISTRATIVA Y JURÍDICA

arlos Valenzuela

URADOR EN JEFE

oberto Amigo

URADOR ARTE EUROPEO

ngel M. Navarro

URADORA DE FOTOGRAFÍA

erónica Tell

VESTIGACIÓN

María Florencia Galesioatricia V. Corsani, Paola Melgarejo, Anaiese, Pablo De Monte

OCUMENTACIÓN Y REGISTRO

aula CasajúsMaría Rosa Espinoza, Victoria

aeta,Cecilia García, Silvia Rivara,orencia Vallarino, Martín Vergara, Martín

osé Mendez, Constanza Di Leootografía: Matías Iesari, Gustavo Cantoni

ESTIÓN DE COLECCIONES

Mercedes de las Carrerasaúl Alesón, Antonio Facchini, Jimenaelasco, Natalia Novaro, Fernando Franco,ibiana D’Osvaldo, Carolina Bordón, Doraabel Brucas

USEOGRAFÍA

olección Permanentealeria Keller

Mariana Rodríguezedro Osorio, Gastón Arismendi, Ramónlvarezxposiciones Temporariaslvina Echaveala Kumec, Francisco Amatriain, Leonardoeruggi, Fabián Belmonte, Alberto Álvarez,arlos Cortés, Lucio O‘Donnell

RENSA Y COMUNICACIÓN

Martín Reydóeonora Waldmann, Trinidad Massone,steban Benhabib, Lucas Reydó, Aliciaabrielli

DISEÑO GRÁFICO

Susana Prieto

ÁREA DE EDUCACIÓN

Mabel MayolSilvana Varela, Gisela Witten, Pablo Hofman,Alejandro Benard, Roxana Pruzan, MarcelaReich, Susana García, Cecilia Arthagnan,María Inés Alvarado, Marcos Krämer, AnaLobeto, Jeanette Gómez Jolis, Lucía Ivorra,Germán Warszatska

BIBLIOTECA

Alejandra GrinbergAgustina Grinberg, Marcelino Medina,Carolina Moreno, Cristina Maza, MónicaAlem, Víctor Paez

SISTEMAS Y TECNOLOGÍA DOCUMENTAL

Walter D. Pirola, Jorge Nocera, AlejandroBuzzi

ASISTENCIA DE DIRECCIÓN EJECUTIVA

Samira Raed, Rosario Martin,Mariana Folchi, Mónica Gali

ASISTENTE DE DIRECCIÓN ARTÍSTICA

Alejandra Hunter

ASISTENTE DE CURADURÍA

Santiago Villanueva, Lucía Acosta

DELEGACIÓN ADMINISTRATIVA Y JURÍDICA

María BiaiñNatalia Chagra, María Eugenia Bignone,Gabriela Raña

ASUNTOS LEGALES

Mariano D’Andrea

DEPARTAMENTO ADMINISTRATIVO. RECURSOS HUMANOS

Silvana SaraMaría Florencia Martínez, Elena Sanchez,David García, Amalia Nigro, Horacio EizayagaAugusto Macchi

ÁREA DE SUPERVISIÓN Y SEGURIDAD

Omar Guateck, Karina MansillaRita DíazGuardianes de salaInformesGuardarropas

Pérez Celis Catálogo Salas

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