Poemas marzo

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BENDITA Amado Nervo Bendita seas, porque me hiciste amar la muerte, que antes temía. Desde que de mi lado te fuiste, amo la muerte cuando estoy triste; si estoy alegre, más todavía. En otro tiempo, su hoz glacial me dio terrores; hoy, es amiga. ¡Y la presiento tan maternal!... Tú realizaste prodigio tal. ¡Dios te bendiga! ¡Dios te bendiga! Alfa y omega Manuel Machado Cabe la vida entera en un soneto empezado con lánguido descuido, y apenas iniciado ha transcurrido la infancia, imagen del primer cuarteto. Llega la juventud con el secreto de la vida, que pasa inadvertido, y que se va también, que ya se ha ido, antes de entrar en el primer terceto. Maduros, a mirar a ayer tornamos añorantes, y, ansiosos, a mañana, y así el primer terceto malgastamos. Y cuando en el terceto último entramos es para ver con experiencia vana que se acaba el soneto... Y que nos vamos. ES TAN POCO Mario Benedetti Lo que conoces es tan poco lo que conoces de mí lo que conoces son mis nubes son mis silencios son mis gestos lo que conoces es la tristeza de mi casa vista de afuera son los postigos de mi tristeza el llamador de mi tristeza. Pero no sabes nada a lo sumo piensas a veces que es tan poco lo que conozco de ti lo que conozco o sea tus nubes o tus silencios o tus gestos lo que conozco es la tristeza de tu casa vista de afuera son los postigos de tu tristeza el llamador de tu tristeza. Pero no llamas. Pero no llamo.

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  • BENDITA

    Amado Nervo

    Bendita seas, porque me hiciste amar la muerte, que antes tema.

    Desde que de mi lado te fuiste, amo la muerte cuando estoy triste;

    si estoy alegre, ms todava.

    En otro tiempo, su hoz glacial me dio terrores; hoy, es amiga. Y la presiento tan maternal!...

    T realizaste prodigio tal. Dios te bendiga! Dios te bendiga!

    Alfa y omega Manuel Machado

    Cabe la vida entera en un soneto empezado con lnguido descuido, y apenas iniciado ha transcurrido

    la infancia, imagen del primer cuarteto.

    Llega la juventud con el secreto de la vida, que pasa inadvertido,

    y que se va tambin, que ya se ha ido, antes de entrar en el primer terceto.

    Maduros, a mirar a ayer tornamos aorantes, y, ansiosos, a maana,

    y as el primer terceto malgastamos.

    Y cuando en el terceto ltimo entramos es para ver con experiencia vana

    que se acaba el soneto... Y que nos vamos.

    ES TAN POCO

    Mario Benedetti

    Lo que conoces es tan poco

    lo que conoces de m

    lo que conoces son mis nubes

    son mis silencios son mis gestos lo que conoces

    es la tristeza de mi casa vista de afuera

    son los postigos de mi tristeza el llamador de mi tristeza.

    Pero no sabes nada

    a lo sumo piensas a veces que es tan poco lo que conozco

    de ti lo que conozco o sea tus nubes o tus silencios o tus gestos

    lo que conozco es la tristeza

    de tu casa vista de afuera son los postigos

    de tu tristeza el llamador de tu tristeza.

    Pero no llamas. Pero no llamo.

  • SE MIRAN, SE PRESIENTEN, SE DESEAN

    Oliverio Girondo

    Se miran, se presienten, se desean, Se acarician, se besan, se desnudan, Se respiran, se acuestan, se olfatean, Se penetran, se chupan, se demudan,

    Se adormecen, despiertan, se iluminan, Se codician, se palpan, se fascinan, Se mastican, se gustan, se babean,

    Se confunden, se acoplan, se disgregan, Se aletargan, fallecen, se reintegran,

    Se distienden, se enarcan, se menean, Se retuercen, se estiran, se caldean,

    Se estrangulan, se aprietan, se estremecen, Se tantean, se juntan, desfallecen,

    Se repelen, se enervan, se apetecen, Se acometen, se enlazan, se entrechocan,

    Se agazapan, se apresan, se dislocan, Se perforan, se incrustan, se acribillan, Se remachan, se injertan, se atornillan, Se desmayan, reviven, resplandecen,

    Se contemplan, se inflaman, se enloquecen, Se derriten, se sueldan, se calcinan,

    Se desgarran, se muerden, se asesinan, Resucitan, se buscan, se refriegan,

    Se rehyen, se evaden y se entregan .

    TE QUIERO A LAS 10 DE LA MAANA

    Jaime Sabines

    Te quiero a las diez de la maana, y a las once, y a las doce del da. Te quiero con toda mi alma y con todo mi cuerpo, a veces, en las

    tardes de lluvia. Pero a las dos de la tarde, o a las tres, cuando me pongo a pensar en

    nosotros dos, y t piensas en la comida o en el trabajo diario, o en las diversiones que no

    tienes, me pongo a odiarte sordamente, con la mitad del odio que guardo para m.

    Luego vuelvo a quererte, cuando nos

    acostamos y siento que ests hecha para m, que de algn modo me lo dicen tu rodilla y tu vientre, que mis manos me convencen de ello,

    y que no hay otro lugar en donde yo me venga, a donde yo vaya, mejor que tu cuerpo. T vienes toda entera a mi encuentro, y los

    dos desaparecemos un instante, nos metemos en la boca de Dios, hasta que yo te digo que

    tengo hambre o sueo.

    Todos los das te quiero y te odio irremediablemente. Y hay das tambin, hay horas, en que no te conozco, en que me eres ajena como la mujer de otro. Me preocupan

    los hombres, me preocupo yo, me distraen mis penas. Es probable que no piense en ti durante

    mucho tiempo. Ya ves. Quin podra quererte menos que yo, amor mo?

  • TU DULZURA

    Alfonsina Storni

    Camino lentamente por la senda de acacias, me perfuman las manos sus ptalos de nieve,

    mis cabellos se inquietan bajo cfiro leve y el alma es como espuma de las aristocracias.

    Genio bueno: este da conmigo te congracias, apenas un suspiro me torna eterna y breve...

    Voy a volar acaso ya que el alma se mueve? En mis pies cobran alas y danzan las tres

    Gracias.

    Es que anoche tus manos, en mis manos de fuego,

    dieron tantas dulzuras a mi sangre, que luego, llenseme la boca de mieles perfumadas.

    Tan frescas que en la limpia madrugada de

    Esto mucho temo volverme corriendo al casero

    prendidas en mis labios mariposas doradas.

    AMOR

    Pablo Neruda

    Mujer, yo hubiera sido tu hijo, por beberte la leche de los senos como de un manantial,

    por mirarte y sentirte a mi lado y tenerte en la risa de oro y la voz de cristal.

    Por sentirte en mis venas como Dios en los ros

    y adorarte en los tristes huesos de polvo y cal, porque tu ser pasara sin pena al lado mo

    y saliera en la estrofa -limpio de todo mal-.

    Cmo sabra amarte, mujer, cmo sabra amarte, amarte como nadie supo jams!

    Morir y todava amarte ms.

    Y todava amarte ms

    y ms.

  • POEMA 20

    Pablo Neruda

    Puedo escribir los versos ms tristes esta noche.

    Escribir, por ejemplo: La noche est

    estrellada, y tiritan, azules, los astros, a lo lejos.

    El viento de la noche gira en el cielo y canta.

    Puedo escribir los versos ms tristes esta

    noche. Yo la quise, y a veces ella tambin me quiso.

    En las noches como sta la tuve entre mis

    brazos. La bes tantas veces bajo el cielo infinito.

    Ella me quiso, a veces yo tambin la quera.

    Cmo no haber amado sus grandes ojos fijos.

    Puedo escribir los versos ms tristes esta noche.

    Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

    Or la noche inmensa, ms inmensa sin ella. Y el verso cae al alma como al pasto el roco.

    Qu importa que mi amor no pudiera

    guardarla. La noche est estrellada y ella no est

    conmigo.

    Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.

    Mi alma no se contenta con haberla perdido.

    Como para acercarla mi mirada la busca.

    Mi corazn la busca, y ella no est conmigo.

    La misma noche que hace blanquear los mismos rboles.

    Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

    Ya no la quiero, es cierto, pero cunto la

    quise. Mi voz buscaba el viento para tocar su

    odo.

    De otro. Ser de otro. Como antes de mis besos.

    Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

    Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.

    Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

    Porque en noches como sta la tuve entre mis

    brazos, Mi alma no se contenta con haberla perdido.

    Aunque ste sea el ltimo dolor que ella me

    causa, y stos sean los ltimos versos que yo le

    escribo.

  • CASIDA DE LA TENTADORA

    Jaime Sabines

    Todos te desean pero ninguno te ama. Nadie puede quererte, serpiente,

    porque no tienes amor, porque ests seca como la paja seca

    y no das fruto. Tienes el alma como la piel de los viejos.

    Resgnate. No puedes hacer ms sino encender las manos de los hombres

    y seducirlos con las promesas de tu cuerpo. Algrate. En esa profesin del deseo

    nadie como t para simular inocencia

    y para hechizar con tus ojos inmensos.

    BOLERO

    Julio Cortzar

    Qu vanidad imaginar

    Que puedo darte todo, el amor y la dicha,

    Itinerarios, msica, juguetes.

    Es cierto que es as:

    Todo lo mo te lo doy, es cierto,

    Pero todo lo mo no te basta

    Como a m no me basta que me des

    Todo lo tuyo.

    Por eso no seremos nunca

    La pareja perfecta, la tarjeta postal,

    Si no somos capaces de aceptar

    Que slo en la aritmtica

    El dos nace del uno ms el uno.

    Por ah un papelito

    Que solamente dice:

    Siempre fuiste mi espejo,

    Quiero decir que para verme tena que mirarte.

  • DESPUS DE LAS FIESTAS

    Julio Cortzar

    Y cuando todo el mundo se iba

    Y nos quedbamos los dos

    Entre vasos vacos y ceniceros sucios,

    Qu hermoso era saber que estabas

    Ah como un remanso,

    Sola conmigo al borde de la noche,

    Y que durabas, eras ms que el tiempo,

    Eras la que no se iba

    Porque una misma almohada

    Y una misma tibieza

    Iba a llamarnos otra vez

    A despertar al nuevo da,

    Juntos, riendo, despeinados.

    SIGNOS

    Alejandra Pizarnik

    Todo hace el amor con el silencio.

    Me haban prometido un silencio como un fuego, una casa de silencio.

    De pronto el templo es un circo y la luz un tambor.

    PJARO DE MAR

    Martn Caballero

    Abrazarte con fuerza quiero, ms no puedo

    se te llev el viento

    amiga de la sal

    amiga de la mar.

    T, que siempre quisiste volar

    hoy te alejas como pjaro que un da

    anid en mi corazn.

    Adelante paloma, adelante, sin rencor.

  • DE MARZO DEL 79 (1983)

    Tomas Transtrmer

    Cansado de todos los que llegan con palabras, palabras, pero no lenguaje

    Parto hacia la isla cubierta de nieve.

    Lo salvaje no tiene palabras.

    Las pginas no escritas se ensanchan en todas direcciones!

    Me encuentro con huellas de pezuas de corzo en la nieve.

    Lenguaje, pero no palabras.

    LA NOCHE

    Eduardo Galeano

    No consigo dormir. Tengo una mujer atravesada entre los prpados. Si pudiera, le

    dira que se vaya; pero tengo una mujer atravesada en la garganta

    SONETO CASI INSISTENTE EN UNA NOCHE DE SERENATAS

    Gabriel Garca Mrquez

    Quisiera una mujer de sangre y plata.

    Cualquier mujer. Una mujer cualquiera,

    cuando en las noches de la primavera

    se oye a lo lejos una serenata.

    Esa msica es alma. Y aunque no fuera

    verdad tanta mentira sera grato

    el saber que su voz siempre retrata

    el corazn de una mujer cualquiera.

    Quiero querer con msica. Y quiero

    que me quieran con tono verdadero

    Casi en azul y casi eternamente.

    Ser porque ese ritmo me arrebata,

    o tal vez porque oyendo serenatas

    me duele el Corazn musicalmente.

  • ESPERO CURARME DE TI

    Jaime Sabines

    Espero curarme de ti en unos das. Debo dejar de fumarte, de beberte, de

    pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto

    tiempo, abstinencia, soledad.

    Te parece bien que te quiera nada ms una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante.

    En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado

    sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor

    quemado. Y tambin el silencio. Porque las mejores palabras del amor estn entre dos

    gentes que no se dicen nada.

    Hay que quemar tambin ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (T sabes

    cmo te digo que te quiero cuando digo: qu calor hace, dame agua, sabes manejar?, se hizo de noche Entre las gentes, a un

    lado de tus gentes y las mas, te he dicho ya es tarde, y t sabas que deca te quiero).

    Una semana ms para reunir todo el amor del tiempo. Para drtelo. Para que hagas con l lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Slo quiero una

    semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un

    manicomio para entrar a un panten.

    AUSENCIA

    Pablo Neruda

    Habr de levantar la vasta vida

    que an ahora es tu espejo:

    cada maana habr de reconstruirla.

    Desde que te alejaste,

    cuntos lugares se han tornado vanos

    y sin sentido, iguales

    a luces en el da.

    Tardes que fueron nicho de tu imagen,

    msicas en que siempre me aguardabas,

    palabras de aquel tiempo,

    yo tendr que quebrarlas con mis manos.

    En qu hondonada esconder mi alma

    para que no vea tu ausencia

    que como un Sol terrible, sin ocaso,

    brilla definitiva y despiadada?

    Tu ausencia me rodea

    como la cuerda a la garganta,

    el mar al que se hunde.

  • HAPPY NEW YEAR

    Julio Cortzar

    Mira, no pido mucho,

    solamente tu mano, tenerla

    como un sapito que duerme as contento.

    Necesito esa puerta que me dabas

    para entrar a tu mundo, ese trocito

    de azcar verde, de redondo alegre.

    No me prests tu mano en esta noche

    de fn de ao de lechuzas roncas?

    No puedes, por razones tcnicas.

    Entonces la tramo en el aire, urdiendo cada dedo,

    el durazno sedoso de la palma

    y el dorso, ese pas de azules rboles.

    As la tomo y la sostengo,

    como si de ello dependiera

    muchsimo del mundo,

    la sucesin de las cuatro estaciones,

    el canto de los gallos, el amor de los hombres.

    TOCO TU BOCA (RAYUELA CAPTULO 7)

    Julio Cortzar

    Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujndola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para

    deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te

    dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por m para dibujarla con

    mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonre por debajo de la que mi mano te

    dibuja.

    Me miras, de cerca me miras, cada vez ms de cerca y entonces jugamos al cclope, nos miramos cada vez ms de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre s, se superponen y los cclopes se

    miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordindose con

    los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un

    silencio.

    Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo

    mientras nos besamos como si tuviramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos,

    de fragancia oscura.

    Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber

    simultneo del aliento, esa instantnea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta

    madura, y yo te siento temblar contra mi como una luna en el agua.

  • TE QUIERO

    Jaime Sabines

    Te quiero como para invitarte

    a pisar hojas secas una de estas tardes

    Te quiero como para salir a caminar

    hablar del amor,mientras pateamos

    piedritas.

    Te quiero como para volvernos chinos de risa

    ebrios de nada y pasear sin prisa las calles

    Te quiero como para ir contigo a los lugares

    que ms frecuento y contarte que es ah

    donde me siento a pensar en t.

    Te quiero como para escuchar tu risa toda la

    noche.

    Te quiero como para no dejarte ir jams.

    Te quiero como se quiere a ciertos amores

    a la antigua, con el alma y sin mirar

    atrs.

    CARTA DE AMOR

    Gabriela Mistral

    "Me dices ingenuamente: 'Dame la dicha, dmela; t puedes drmela.' Y conmovida hasta la tortura, yo mir en m y veo con una claridad perfecta, que

    yo no podr drtela...T no sers capaz (interrgate a t mismo) de querer a una mujer fea...Soy seca, soy dura, soy cortante. El amor

    me har otra contigo, pero no podr rehacerme del todo. Adems, tardo mucho en cobrar

    familiaridad con las personas. Este dato te dir mucho: no tuteo absolutamente a nadie. Ni a los

    nios... T me querrs fea? T me querrs antiptica? T me querrs como soy? Te lo

    pregunto y veo luego que no puedes contestarmeNio mo! Yo no s si mis manos han olvidado o no han sabido nunca acariciar; yo

    no s si todo lo que tengo aqu dentro se har signo material cuando est contigo, si te besar

    hasta fatigarme la boca, como deseo, si te mirar hasta morirme de amor, como te miro en la

    imaginacin. No s si ese miedo al ridculo que mata en m muchas acciones bellas y que me apaga muchas palabras de cario que tu no ves escritas, me dejar quietas las manos y la boca y la mirada gris ese daSoy la ms desconcertante y triste

    (lamentable) mezcla de dulzura y dureza, de ternura y grosera."

  • QUIERO HACER CONTIGO LO QUE LA PRIMAVERA HACE CON LOS CEREZOS

    Pablo Neruda

    Juegas todos los das con la luz del universo.

    Sutil visitadora, llegas en la flor y en el agua.

    Eres ms que esta blanca cabecita que aprieto

    como un racimo entre mis manos cada da.

    A nadie te pareces desde que yo te amo.

    Djame tenderte entre guirnaldas amarillas.

    Quin escribe tu nombre con letras de humo entre las estrellas del sur?

    Ah djame recordarte cmo eras entonces, cuando an no existas.

    Mis palabras llovieron sobre ti acaricindote.

    Am desde hace tiempo tu cuerpo de ncar soleado.

    Hasta te creo duea del universo.

    Te traer de las montaas flores alegres, copihues,

    avellanas oscuras, y cestas silvestres de besos.

    Quiero hacer contigo

    lo que la primavera hace con los cerezos.

    XXXVIII

    Gustavo Adolfo Bquer

    Los suspiros son aire y van al aire!

    Las lgrimas son agua y van al mar!

    Dime, mujer, cuando el amor se olvida

    sabes t adnde va?

    AQU

    Octavio Paz

    Mis pasos en esta calle

    Resuenan

    En otra calle

    Donde

    Oigo mis pasos

    Pasar en esta calle

    Donde

    Slo es real la niebla.