Principios Fundamentadores de La Tutela Reforzada Del Menor

download Principios Fundamentadores de La Tutela Reforzada Del Menor

of 4

Transcript of Principios Fundamentadores de La Tutela Reforzada Del Menor

  • 7/25/2019 Principios Fundamentadores de La Tutela Reforzada Del Menor

    1/4

    PRINCIPIOS FUNDAMENTADORES DE

    LA TUTELA REFORZADA DEL MENORANTONIO PREZ LUOoctubre 2012

    Eldocumento de trabajo 1/08 de la UE sobre la proteccin de datos personales de los nios (I):

    Principios fundamentadores de la tutela reforzada del menor

    El sistema tutelar del documento citado en la entrada anterior se cifra en: (I) unos principios

    fundamentadores de la tutela reforzada del menor, (II) unos principios y derechos relativos a la

    proteccin de datos y (III) unas polticas de actuacin. Respecto a los primeros, se debe hacer mencin

    a los siguientes:

    1) Inters superior del nio. De acuerdo con el principio bsico inspirador de la proteccin jurdica de

    los menores, se entiende que el nio, al no haber alcanzado todava la plena madurez fsica y

    psicolgica, necesita ms proteccin que los adultos. Su objetivo es mejorar las condiciones de los

    nios y pretende reforzar el derecho de los nios al desarrollo de su personalidad. Las entidades

    pblicas o privadas que tomen decisiones relativas a los menores deben respetar este principio.

    Tambin se aplica a los progenitores y a otros representantes de los nios, ya sea en el momento de la

    comparacin de sus respectivos intereses o en representacin del nio. Normalmente, los

    representantes de los nios deberan aplicar este principio, pero cuando haya un conflicto entre los

    intereses de los nios y sus representantes, los jueces, el ministerio fiscal o las agencias de proteccin

    de datos debern decidir lo ms conveniente para la tutela de ese inters superior del menor.La Constitucin espaola proclama que los nios debern gozar de la proteccin prevista en los

    acuerdos internacionales que velan por la defensa de sus derechos (art. 39.4). Al interpretar y aplicar

    este texto, nuestro Tribunal Constitucional ha indicado que en el ordenamiento jurdico espaol opera

    una recepcin genrica de esas normas de proteccin (STC 36/1991, FJ 5. Vid. tambin las SSTC

    71/1990 y 36/1991).

    El Tribunal Constitucional (TC), en el ejercicio de la ponderacin de bienes y derechos, ha acogido la

    tesis del inters superior del nio, al estimar la prevalencia del derecho a la intimidad de los menores

    cuando se halla en conflicto con el derecho a la libertad de expresin (SSTC 62/1982; 49/1984).

    Asimismo, ha invocado de forma expresa la convencin sobre los derechos de los nios de la ONU

    para declarar la prevalencia del derecho a la intimidad del nio respecto al principio de la publicidad

    de los procesos de menores (STC 71/1990); o para determinar la prevalencia del derecho de los

    acogedores de los menores en rgimen de preadopcin frente a sus padres biolgicos, para evitar el

    maltrato o desatencin de los menores y en funcin de lo previsto en la convencin sobre los derechos

    de los nios (artculo 9) (STC 124/2002). El inters superior del nio justifica tambin el carcter

    http://www.derechoshumanoseninternet.org/author/autor2/http://www.derechoshumanoseninternet.org/author/autor2/http://www.avpd.euskadi.net/s04-redaneto/es/contenidos/informacion/redaneto/es_redaneto/adjuntos/informe_europeo_proteccion_datos_colegios.pdfhttp://www.avpd.euskadi.net/s04-redaneto/es/contenidos/informacion/redaneto/es_redaneto/adjuntos/informe_europeo_proteccion_datos_colegios.pdfhttp://www.derechoshumanoseninternet.org/author/autor2/
  • 7/25/2019 Principios Fundamentadores de La Tutela Reforzada Del Menor

    2/4

    tuitivo y trato legal preferente de las normas que regulan determinados aspectos de su situacin

    jurdica, sin que ello suponga vulneracin del principio de igualdad (STC 55/1994). Diversas

    sentencias del TC se remiten al artculo 12 de la convencin de la ONU para establecer la necesidad

    de la tutela efectiva de los derechos del nio, en especial de su derecho a ser odo en el proceso (SSTC

    221/2002, 71/2004 y 152/2005). Si bien el TC seala que el derecho a la audiencia del menor en el

    procedimiento no se trata de un derecho absoluto e incondicionado y debe circunscribirse

    exclusivamente a la naturaleza del procedimiento (STC 22/2008, FJ 7).

    2) Proteccin y cuidado necesario para el bienestar de los nios. El principio del inters superior exige

    una apreciacin adecuada de la posicin del nio. Ello implica el reconocimiento de dos cuestiones:

    en primer lugar, la inmadurez del nio le hace vulnerable y ello debe compensarse mediante una

    proteccin y cuidados adecuados; en segundo lugar, el derecho del nio al desarrollo slo puede

    disfrutarse adecuadamente con la asistencia o proteccin de otras entidades y/o personas. Esta tutela

    compete a los representantes legales del menor, a los educadores y a las autoridades estatales. En elejercicio de estas funciones tuitivas ser necesario recabar y utilizar numerosos datos personales de los

    menores, en sectores tales como su salud, bienestar, formacin cultural Pero ello no debe conducir

    a que el tratamiento de los datos del menor se lleve a cabo sin garantas reforzadas. En particular,

    debern tomarse las medidas cautelares ms estrictas cuando sea necesario transmitir o ceder datos en

    los supuestos en que los mismos deban ser compartidos. En estos casos podra quedar afectado el

    principio de finalidad (limitacin de objetivo) y crear el riesgo de que se construyan perfiles de los

    menores sin referencia al principio de proporcionalidad.

    3) Derecho a la intimidad. En su condicin de ser humano, el nio tiene derecho a la intimidad. El

    artculo 16 de la convencin de Naciones Unidas sobre los derechos del nio dispone que ningn nio

    ser objeto de injerencias arbitrarias o ilegales en su vida privada, su familia, su domicilio o su

    correspondencia, ni de ataques ilegales a su honra y a su reputacin. Este derecho debe ser respetado

    por todos, incluso por los representantes del nio.

    El respeto del derecho a la intimidad debe ser promovido tambin en lo que afecta a la relacin de los

    nios con otros nios. Muchos de los atentados contra los datos personales de menores, as como

    determinados acosos contra su libertad, su integridad o su imagen, tienen como autores a otros nios.

    En las redes sociales el menor es, por tanto, sujeto activo y sujeto pasivo de las violaciones de su

    intimidad. Urge promover unaPaideia, es decir, una educacin y cultura cvica en los menores para

    garantizar la consciencia del valor de la intimidad como un bien jurdico que debe ser respetado en

    ellos y en todos los dems.

    4) Representacin. Los nios, por ser menores de edad, tienen limitada su capacidad de obrar. Por tal

    motivo, muchas de sus actuaciones deben ser realizadas por quienes ostentan su representacin legal.

    Ello no implica que la condicin jurdica del representante tenga una prioridad absoluta o incondicional

    sobre el nio, porque el inters superior de este puede, en ocasiones, conferirle derechos relativos a la

  • 7/25/2019 Principios Fundamentadores de La Tutela Reforzada Del Menor

    3/4

    proteccin de datos que puedan anular los derechos de los progenitores o representantes. La necesidad

    de representacin tampoco implica que no deba consultarse a los nios, a partir de cierta edad, en

    cuestiones relativas a ellos. Si el tratamiento de los datos del nio comenz con el consentimiento de

    su representante, el nio en cuestin, al alcanzar la mayora de edad, podr revocar ese consentimiento.

    Si desea que contine el tratamiento, el interesado deber dar su consentimiento explcito cuando se

    exija. En este aspecto, debe recordarse que los derechos a la proteccin de datos pertenecen al nio y

    no a su representante, que se limita a ejercerlos, siempre en beneficio del menor.

    5) Intereses en conflicto: intimidad y el inters superior del nio. El principio del inters superior del

    nio puede hallarse en tensin con el ejercicio de su derecho a la intimidad.Prima facie, el principio

    exige que se proteja la intimidad del nio del mejor modo posible, dando efecto en la mayor medida

    posible a los derechos de proteccin de datos del nio. No obstante, pueden surgir ocasiones en que el

    inters superior del nio y su derecho a la intimidad parezcan estar en conflicto. En tales casos, los

    derechos de proteccin de datos pueden tener que ceder al principio del inters superior. Tal es el caso

    de los datos mdicos, ya que las autoridades sanitarias o los servicios sociales podran necesitar

    informacin pertinente en casos de abusos a menores o negligencia. De manera similar, un profesor

    puede divulgar datos personales de un menor a un trabajador social para proteger al nio, fsica o

    psicolgicamente. En casos extremos, el principio del inters superior del nio puede tambin entrar

    en conflicto con el requisito del consentimiento de su representante. En este caso, debe prevalecer el

    inters superior del nio (por ejemplo, si est en peligro la integridad fsica o mental del menor).

    6) Adaptacin al grado de madurez del nio. Puesto que el nio es una persona todava en desarrollo,

    el ejercicio de sus derechos (incluyendo los relativos a la proteccin de datos) debe adaptarse a su nivel

    de desarrollo fsico y psicolgico. Los nios no solo se encuentran en proceso de desarrollo, sino que

    tienen derecho a desarrollarse plenamente. El modo en que se regula este proceso en los diferentes

    ordenamientos jurdicos vara de un Estado a otro, pero en cualquier sociedad los menores deben ser

    tratados de conformidad con su nivel de madurez. Por lo que respecta al consentimiento, la solucin

    puede variar de la mera consulta al menor al consentimiento paralelo del nio y el representante, o,

    incluso, al consentimiento nico del nio si ya es maduro.

    7) Derecho a ser consultado. De manera gradual, los nios van siendo capaces de contribuir a la toma

    de decisiones que les afectan. A medida que crecen, se les debe consultar ms regularmente sobre el

    ejercicio de sus derechos, incluyendo los relativos a la proteccin de sus datos personales. Esta

    obligacin de consulta se concreta en tener en cuenta las opiniones propias del nio. Este derecho a ser

    consultado puede aplicarse a muy distintas cuestiones, como la geolocalizacin, el uso de las imgenes

    del nio y otros.

    Nuestro sistema de proteccin de la intimidad del menor establece como criterio jurdico determinante

    de su grado de madurez el cumplimiento de la edad de catorce aos. Haberlos cumplido faculta al

    menor para prestar vlidamente su consentimiento para que sean tratados sus datos personales (art.

  • 7/25/2019 Principios Fundamentadores de La Tutela Reforzada Del Menor

    4/4

    13.1 del reglamento), mientras que los menores de dicha edad precisan siempre del consentimiento de

    sus representantes legales.

    En lo referente a la tutela de la intimidad del menor se plantea, de modo inevitable, la tensin entre los

    principios del paternalismo y la autonoma. El primero exige que los padres, educadores y autoridades

    promuevan siempre el inters superior del nio, aun en contra de la voluntad de este. El fundamento

    de tal actitud se cifra en la falta o en la insuficiencia de madurez del menor para defender

    adecuadamente sus propios intereses. El principio de autonoma exigir, por el contrario, respetar

    siempre que sea posible la libre decisin del nio sobre los asuntos que le conciernen.

    El derecho comparado del menor ha mostrado creciente sensibilidad hacia la propuesta de medidas

    jurdicas en las que la minora de edad no se contemple como un periodo global e indistinto. Se tiende,

    por el contrario, a distinguir determinadas fases y consiguientemente diferentes grados de madurez en

    el desarrollo del menor. Todo ello dirigido a ampliar la autonoma del nio en cuanto sea posible,restringiendo determinadas formas de paternalismo que los avances de la psicologa y la sociologa

    infantil reputan improcedentes. La autonoma y libertad de decisin del menor en relacin con sus

    datos personales entra en conflicto, en otras ocasiones, con el principio de la solidaridad social, en

    funcin de exigencias sanitarias, educativas o de persecucin de la criminalidad

    La Declaracin de los Derechos del Nio establece diez principios (2):

    1. El derecho a la igualdad, sin distincin de raza, religin o nacionalidad.

    2. El derecho a tener una proteccin especial para el desarrollo fsico, mental y

    social del nio.

    3. El derecho a un nombre y a una nacionalidad desde su nacimiento.

    4. El derecho a una alimentacin, vivienda y atencin mdicos adecuados.

    5. El derecho a una educacin y a un tratamiento especial para aquellos nios que

    sufren alguna discapacidad mental o fsica.

    6. El derecho a la comprensin y al amor de los padres y de la sociedad.

    7. El derecho a actividades recreativas y a una educacin gratuita.

    8. El derecho a estar entre los primeros en recibir ayuda en cualquier circunstancia. 9. El derecho a la proteccin contra cualquier forma de abandono, crueldad y

    explotacin.

    10. El derecho a ser criado con un espritu de comprensin, tolerancia, amistad

    entre los pueblos y hermandad universal.

    http://www.humanium.org/es/declaracion-de-los-derechos-del-nino-texto-completo/http://www.humanium.org/es/declaracion-de-los-derechos-del-nino-texto-completo/