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PROGRAMA DE TUTORÍA ORIENTACIÓN EDUCATIVA

I. DATOS GENERALES

1.1 Nombre de la Institución Educativa

:

1.2 Dependencia :1.3 Tipo de Institución :1.5 Ubicación :1.6 Teléfono :1.7 Sitio Web :1.8 Directora Académica :1.9 Director Administrativo :1.10 Responsable :1.11 Fecha de elaboración :

II. FUNDAMENTOS DE LA TUTORÍA Y ORIENTACIÓN UNIVERSITARIA

Al igual que ha ocurrido con los niveles básicos de formación, la tutoría y orientación educativa ha empezado a verse como un indicador de calidad en el nivel de educación superior. A partir de la década de los 80, diversas universidades europeas han empezado a incluir programas de tutoría y orientación, que van más allá de la mera información, sino que buscan una formación más integral de las competencias profesionales de sus estudiantes.

En nuestro país, la atención concedida a la tutoría y orientación educativa en las universidades está más que justificada, teniendo en cuenta las problemáticas que hoy enfrentan los jóvenes para su desarrollo académico profesional al terminar la educación básica. Desde las necesidades de orientación para acceder a la información, hasta su adaptación a las nuevas exigencias laborales de nuestra sociedad; así como la propia estructura de los planes curriculares que exigen capacidades cognitivas, afectivas y volitivas totalmente nuevas y diferentes a las alcanzadas en la educación básica.

Diferentes autores han planteado las dificultades y necesidades que sienten los estudiantes que acceden a la universidad:

- Desconocimiento de la universidad como institución, requisitos, procesos administrativos, etc.

- Problemas académicos diversos como: bajo rendimiento, repitencia de cursos, ausentismo, etc.

- Información pobre y superficial sobre sus propios estudios.- Desconocimiento de sus propios intereses y aptitudes profesionales y ocupacionales.- Bajo dominio de las técnicas de trabajo intelectual que les permita afrontar con éxito los

estudios superiores.- Hábitos inadecuados para el estudio.- Poca capacidad de atención concentrada.- Baja comprensión lectora.- Desconocimiento de las salidas profesionales de la carrera.

- Problemas de tipo personal, psicológico y social: problemas de comportamiento, retraimiento y timidez, agresividad, etc.

La sensibilidad hacia estos problemas ha hecho surgir la actividad orientadora en las universidades en los últimos tiempos, con diferentes ritmos, objetivos y particularidades propias de cada realidad. A pesar de dichas diferencias se avanza cada vez más hacia una práctica orientadora como parte de un concepto educativo, formativo y preventivo, que trasciende lo inmediato y busca el desarrollo de las competencias profesionales para que los estudiantes puedan identificar, elegir y reconducir alternativas académicas y profesionales, acordes a su potencial y a las posibilidades de su contexto; así como para que puedan desarrollar una actuación profesional responsable, ética y eficiente.

III. COMPERENCIAS PROFESIONALES

La concepción de la competencia profesional transita desde un enfoque cognitivo estructural, que se centra en aspectos cognitivos (conocimientos, habilidades) relacionados con el ejercicio de una profesión determinada en escenarios laborales específicos; hacia un enfoque personológico- dinámico, que se centra en la persona que funciona a partir de la integración de cualidades de orden motivacional y cognitivo, en escenarios laborales complejos, heterogéneos y cambiantes.

De acuerdo al enfoque personológico-dinámico las competencias profesionales se clasifican en genéricas (transversales, comunes a todas las profesiones) y específicas (relativas a una profesión determinada). En este sentido, en las competencias denominadas genéricas se incluyen elementos tanto de orden cognitivo, afectivo, social como motivacional, que se expresan a través de:

- Competencias instrumentales, de orden metodológico o procedimental, tales como: o La capacidad de análisis y síntesis.o La capacidad de organización y planificación.o La capacidad de gestión de información.

- Competencias personales, tales como: o El trabajo en equipo. o Las habilidades para las relaciones interpersonales.o El compromiso ético.

- Las competencias sistémicas, que se manifiestan en:o El aprendizaje autónomo.o La adaptación a nuevas situaciones.o El liderazgo.

Para efectos de este programa de Tutoría y Orientación Profesional, tomaremos la concepción de González (2005) para definir las competencias profesionales desde una perspectiva sociohistórica del desarrollo humano en el contexto universitario. Así, concebimos la “competencia profesional” como “una expresión del desarrollo de la personalidad” y se define como “una configuración psicológica compleja que integra en su estructura y funcionamiento formaciones motivacionales, cognitivas y recursos personológicos que se manifiestan en la calidad de la actuación profesional del sujeto, y que garantizan un desempeño profesional responsable y eficiente”.

A partir de esta definición, se plantea una serie de características de la naturaleza y desarrollo de la competencia profesional, que veremos a continuación:

3.1. La competencia profesional como configuración psicológica compleja.

La competencia profesional “incluye en su estructura componentes de orden motivational e intelectual que se integran en diferentes niveles de desarrollo funcional en la regulación de la actuación profesional del sujeto”. Es decir, un profesional es componente no solo porque tienen habilidades y conocimientos para resolver problemas de carácter profesional, sino también porque tienen una motivación profesional, con intereses y valores profesionales, y recursos personales para actuar con flexibilidad, reflexión, iniciativa, perseverancia, autonomía y perspectiva profesional futura. Todo esto en conjunto permite un desempeño profesional eficiente, ético y responsable. Así, las competencias profesionales comprenden formaciones psicológicas cognitivas, afectivas y motivacionales.

3.2. La competencia profesional se manifiesta en la calidad de la actuación profesional

La actuación profesional se expresa en los conocimientos, hábitos, habilidades, motivos, valores y sentimientos que regulan la actuación del sujeto en la búsqueda de soluciones a los problemas profesionales. La complejidad de estos componentes que regulan la actuación profesional determina la existencia de diferentes niveles de desarrollo de la competencia profesional, que va desde una actuación incompetente, parcialmente competente hasta una actuación competente (eficiente, ética y creativa).

“La competencia profesional en sus niveles superiores de desarrollo expresa la armonía y la integridad del sentir, el pensar y el hacer del sujeto en la actuación profesional. Quiere decir que un profesional es competente no sólo porque manifieste conductas que expresen la existencia de conocimientos y habilidades que le permiten resolver adecuadamente los problemas profesionales, sino también, porque siente y reflexiona acerca de la necesidad y el compromiso de actuar en correspondencia con sus conocimientos, habilidades, motivos y valores, con ética, flexibilidad, dedicación y perseverancia, en la solución de los problemas que de él demanda la práctica profesional.” (Gonzáles, 2005)

IV. EXIGENCIAS PARA LA FORMACIÓN Y DESARROLLO DE LA COMPETENCIA PROFESIONAL EN LA UNIVERSIDAD

La competencia profesional es el resultado de un proceso de educación de la personalidad para el desempeño profesional eficiente y responsable que se construye de forma individual por los sujetos en el proceso gradual y continuo de su formación y desarrollo profesional durante el tránsito por la universidad y su posterior desempeño en la profesión.

Desde la TOE, se pretende contribuir a este proceso, atendiendo a las siguientes exigencias dentro de este programa:

4.1. Atención tutorial diferenciada en el desarrollo profesional del estudiante

La competencia profesional es construida por el sujeto en el proceso de su formación y desarrollo profesional. Esto no niega la participación de componentes innatos, tales como las aptitudes y características temperamentales, que son la base para que el sujeto construya dicha competencia. Por ello, la construcción de la competencia es individual aún cuando siempre se realiza en condiciones sociales. Ello implica la necesidad de lograr por parte del docente y los tutores una atención diferenciada en el proceso de educación.

4.2. Reconocimiento del estudiante como sujeto de su formación profesional y del profesor como orientador y modelo educativo en el proceso de formación y desarrollo de la competencia profesional del estudiante

En el proceso de educación de la competencia profesional los docentes y tutores asumen un rol orientador y de modelo educativo y profesional en el aprendizaje de los estudiantes, mientras que los estudiantes y profesionales asumen un rol de sujeto de su formación y desarrollo profesional.

4.3. Concepción participativa y dialógica del proceso de enseñanza-aprendizaje

Teniendo en cuenta el carácter protagónico que asumen los estudiantes como sujetos de formación, es necesario tener en cuenta que la educación de la competencia profesional debe sustentarse en una metodología participativa de enseñanza-aprendizaje y en una comunicación horizontal entre docentes y estudiantes, tutores y profesionales.

4.4. Concepción formativa de la evaluación del aprendizaje

La evaluación se concibe en su dimensión formativa, centrada en el proceso de construcción y desarrollo de la competencia profesional a través de la autoevaluación y la heteroevaluación en el desempeño de tareas profesionales.

V. CONCEPTO DE TUTORÍA Y ORIENTACIÓN EDUCATIVA

Teniendo en cuenta las exigencias implicadas en la formación de competencias profesionales, entendemos la tutoría y orientación educativa como algo diferente del mero hecho de guiar, aconsejar, conducir, seleccionar o restringir el campo opcional. Por el contrario, orientar es ampliar el marco de experiencias y oportunidades, permitiendo que los alumnos conozcan la diversidad de alternativas y puedan valorar distintas fuentes de datos antes de decantarse de forma consciente y autónoma por aquellas que consideren más adecuadas y relevantes. La orientación implica una educación para la vida, que trasciende las aulas de la universidad, de modo que los aprendizajes estén conectados con el entorno social y comunitario y tengan una dimensión de proyección personal hacia el futuro. Por lo tanto, se concibe una orientación que forme para la autonomía, el análisis crítico de la realidad que cada uno vive y para la adaptación a los cambios que se suceden de manera vertiginosa en la sociedad actual.

VI. PRINCIPIOS DE LA TUTORÍA Y ORIENTACIÓN EDUCATIVA

Partimos de una concepción de la TOE como un elemento integrado en la práctica educativa diaria y un modelo de profesor tutor que compagina y globaliza aquellos conocimientos y capacidades que se consideran relevantes para el estudiantado.

La TOE comporta una relación de ayuda, en un clima propicio que va más allá de la resolución de problemas puntuales y concretos, para extenderse a la dinámica que conforma el proceso formativo en toda su dimensión.

La TOE es concebida desde una visión preventiva y educativa, con una clara proyección hacia la madurez integral del sujeto, mediante actividades formativas, reflexivas y vivenciales, que permitan al estudiante aprender a aprender (conceptual), aprender a hacer (procedimental) y aprender a ser (afectivo-actitudinal); llegando a comprender, reflexionar y decidir de manera comprometida, responsable y autónoma.

Por tanto, la TOE no se limita a las sesiones de tutoría semanales por parte del profesor tutor (Tutoría académica) o a la atención individual (Tutoría personalizada), sino que va más allá, haciendo un seguimiento del proceso formativo y estimulando la madurez personal y profesional, con una clara proyección hacia el aprendizaje autónomo, la investigación y el desempeño profesional (Tutoría de carrera). Esta se desarrolla en cualquier ámbito que se relacione con los procesos de enseñanza aprendizaje (aula, despacho, seminarios, etc.). Estas tres modalidades no son excluyentes, puesto que dependiendo del tipo de problemática, de los recursos que se disponga, de las condiciones el centro, etc., se puede optar por una u otra modalidad, o la combinación de diferentes estrategias.

Si bien no hay recetas, entendemos que la TOE en la universidad debe ser preferentemente de carácter grupal y preventivo, pero dejando un espacio abierto también para la intervención individual.

El principio de la prevención se refiere a aquellas acciones encaminadas a evitar que surja el problema o a reducir sus efectos. Algunas de las ventajas de este principio son (Álvarez Rojo, 1994):

- Amplía las posibilidades de acción a través de la intervención directa del orientador a través del profesorado.

- Proporciona una alternativa metodológica al tratamiento tradicional de casos problema. - Permite dar respuesta desde el aula a problemas que inciden en el entorno educativo.

Entre las exigencias que plantea una intervención orientadora de carácter preventivo, tenemos:

- Exige cambios sustanciales en el modo de enfocar la atención orientadora.- Exige poner énfasis en el diseño y evaluación de programas para que resulten eficaces. - Exige aceptación y colaboración por parte del profesorado.- Exige contar con recursos y estructuras de apoyo adecuado.

El principio de desarrollo supone crear el medio adecuado para que el sujeto vaya conformando y estructurando su propia personalidad, su auto-concepto, sus intereses, etc., a través de su interacción con el medio. El protagonista ha de ser el sujeto con sus propias potencialidades y el contexto educativo el medio que ha de facilitar su desarrollo. Esto

supone integrar en las actividades educativas académicas y del docente, los contenidos de la TOE a fin de contribuir al desarrollo integral del estudiante.

El principio de intervención social parte del presupuesto de que para contribuir al desarrollo integral del educando, no sólo debe tenerse en cuenta al individuo como tal, sino también al contexto social en el que se desenvuelve. Desde esta perspectiva, no se busca una mera adaptación al medio, sino la modificación de aquellas condiciones del contexto social que limitan el desarrollo del sujeto.

Asumir este principio supone (Rodríguez Espinar, 1993):

- La actividad orientadora debe estar dirigida a la modificación de los aspectos concretos del entorno educativo y del contexto social.

- El orientador debe concienciar al alumno de la existencia de obstáculos ambientales que interfieren el logro de los objetivos personales. Este proceso de concienciación, que sigue las mismas directrices de la pedagogía social crítica, va encaminado a generar una toma de conciencia y una actitud crítica y activa para que las personas sean gestoras de su propio destino y encaminen sus vidas autónomamente.

- Si se admite la discrepancia entre individuo y sociedad, la resolución de este conflicto pasa por el cambio de determinados aspectos del contexto social.

El alumno debe tener la oportunidad de vivir experiencias de socialización, contratar intereses, valores, estilos de vida, tomar contacto con situaciones de la vida social adulta, analizar las relaciones de poder el mundo laboral, desenmascarar los mecanismos que regulan el acceso y mantenimiento en el empleo, conocer los factores ambientales que puedan influir en sus decisiones futuras. Solo a través de un proceso reflexivo, gradual y crítico será posible que el sujeto valore su situación y adopte una actitud emancipadora que le lleve a superar obstáculos y lograr sus objetivos.

Para Habermas (1983), emancipación significa autonomía, responsabilidad e independencia de todo lo que está fuera del sujeto. Se trata de “capacitar a los alumnos para que piensen, razonen, analicen y decidan autónomamente y críticamente, con conocimiento de causa, debidamente informados, pero conociéndose también a sí mismos y entendiendo y comprendiendo la sociedad en la que viven”. (Fernández Sierra, 1995:63)

El principio de orientación educativa es parte fundamental de la identidad de la TOE, de lo contrario, la misma se reduciría a una función consulta-diagnóstico de casos problema y otros problemas marginales para la institución. Asumir este principio supone (Álvarez Rojo, 1994):

- Desarrollar una concepción de la acción orientadora como acompañamiento del alumnado en el análisis u apropiación activa de los procesos de adquisición del saber; los procesos de sí mismo y desarrollo de la identidad personal y vocacional; los procesos de análisis de la realidad exterior; e integración de los anteriores elementos en un proyecto de vida.

- Considerar la orientación como integradora de los diversos procesos de desarrollo del sujeto.

- Atender tanto al desarrollo del individuo como del contexto.- Promover una relación en la que el tutor ayude a los sujetos a ponerse en situaciones

de búsqueda y exploración.

Desde esta perspectiva, la orientación debe formar parte del proceso educativo e integrarse como parte del currículum y no conformar un sistema paralelo de intervención. Sin bien las estrategias de la TOE son diferentes y tiene sus propias metas, tanto la formación académica

como la orientación forman parte de una educación integral para el alumnado. Para esto, se partirá de un programa de contenidos según el ciclo académico, que se aplicará de manera progresiva y flexibilizando sus contenidos a las necesidades de cada grupo clase. Asimismo, se contará con atención individual tipo consulta, a fin de abordar aquellos casos que requieran una asesoría más compleja o que presenten problemáticas ya detectadas.

VII. FUNCIONES DEL PROFESOR TUTOR UNIVERSITARIO

Se entiende por función tutorial la acción orientadora que el profesorado realiza con un grupo de estudiantes de modo estrecho y vinculado a su práctica educativa, en el cual el profesor tutor y el alumno comparten un espacio formativo encaminado a definir un proyecto de trabajo conducente al desarrollo personal y profesional que ha de dar forma a todo un estilo de vida.

De este modo, todo el profesora está implicado y comprometido con la labor tutorial y orientadora, como un componente más del proceso educativo. De entre el grupo de docentes que se ocupa de la formación de los estudiantes, uno de ellos realizará una serie de labores específicas de tutor de grupo, coordinando y dinamizando las acciones formativas y orientadoras, con el fin de darle un sentido único y global a la labor educativa. Con ésta finalidad, se ha determinado el uso de tres horas académicas para el desarrollo exclusivo de sesiones de TOE, a cargo del profesor tutor.

El tutor es un profesional de la enseñanza que ayuda al alumnado en su recorrido por el sistema educativo formando actitudes favorables hacia el conocimiento, hacia el estudio, facilita el mapa para que la ruta se recorra de manera adecuada, fomenta la creatividad, la autonomía, la responsabilidad, etc. Es un educador que involucra al alumnado en su propio proceso de aprendizaje, abordando distintos aspectos del proceso formativo y madurativo, que no están recogidos de manera específica en el programa de cada curso ni en el plan de estudios.

El rol del profesor como educador y como tutor implica el desempeño de funciones tales como:

- Elaborar y desarrollar el Plan de Acción Tutorial – PAT de su grupo (acciones individuales y grupales) según el programa de cada ciclo académico, adaptando sus estrategias y actividades a las necesidades de su grupo a fin de orientar el aprendizaje y desarrollo personal del estudiante mediante

- Elaborar la ficha individual del alumnado a su cargo.- Detectar las dificultades académicas, de aprendizaje, vocacionales, motivacionales,

familiares, afectivas, sociales, etc. que limiten el desarrollo de las competencias profesionales de los alumnos a su cargo.

- Facilitar una buena adaptación al entorno de enseñanza universitaria con el fin de prevenir situaciones de incertidumbre, fracaso, abandono, cambio o prolongación de los estudios.

- Informar al alumnado sobre la estructura y funcionamiento de la filial y de la universidad en general, así como sobre cuestiones académicas, administrativas y profesionales al alcance del tutor.

- Aconsejar al alumnado sobre lo que puede y cómo lo puede hacer, en sus distintos momentos del proceso educativo.

- Facilitar la integración del alumnado, fomentando la participación en actividades académicas y extraacadémicas, encausando las demandas e inquietudes de los

alumnos y mediando en la resolución de conflictos y problemas que se generan en su grupo.

- Explicitar las consecuencias que para el desempeño profesional se derivan de los contenidos curriculares, estableciendo un nexo entre los aspectos académicos, personales y profesionales.

- Orientar y asesorar a los estudiantes sobre su proceso de aprendizaje y sobre sus posibilidades académicas y profesionales, recabando del resto del profesorado la información precisa para la resolución de problemas y facilitar la toma de decisiones apropiadas.

- Ayudar a valorar y afrontar las consecuencias que se derivan de la toma de decisiones sobre los estudios.

- Desarrollar estrategias de trabajo intelectual y de aprendizaje desde las materias específicas que imparte.

- Promover el desarrollo de habilidades específicas que demande el perfil de ingreso, el currículum y el mercado de trabajo.

- Realizar un seguimiento continuo del desarrollo de las competencias profesionales de su grupo de alumnos.

- Supervisar el rendimiento y logro académico de los estudiantes a su cargo.- Elaborar un informe de las actividades del PAT desarrollado a lo largo del semestre

académico.

Para cumplir estas funciones, se requieren algunos prerrequisitos para el ejercicio de la función tutorial, estableciendo el tipo de información que debe manejar el profesor tutor:

- Conocer la estructura y características del plan de estudios correspondientes a la carrera.

- Conocer el programa de las asignaturas de su grupo de alumnos.- Conocer al resto de docentes que imparten la docencia.- Conocer el organigrama y funcionamiento administrativo del centro.- Conocer el calendario académico en curso.- Poseer habilidades para el desempeño de la función tutorial.

VIII. OBJETIVOS DEL PROGRAMA

9.1. Objetivos Generales

Promover el desarrollo de competencias profesionales cognitivas, instrumentales, personales sistémicas a través de una formación educativa integral, de carácter preventivo y mediante la atención personalizada de los estudiantes.

9.2. Objetivos Específicos

- Facilitar el proceso de adaptación, integración y participación del alumnado en la vida universitaria en el contexto del Centro.

- Orientar al estudiante desde una concepción de plan de vida para la toma de decisiones con respecto a su proceso formativo y en la elección de opciones académico profesionales.

- Promover en el estudiante la autonomía intelectual y la formación de su independencia para el aprendizaje.

- Propiciar el desarrollo de habilidades sociales y personales que le permitan al estudiante adaptarse y afrontar las exigencias profesionales y laborales.

- Ayudar al estudiante en la identificación oportuna de las dificultades que se presenten en el transcurso de sus estudios y buscar con él las posibles soluciones que contribuyan a disminuir las tasas de deserción, retraso o la redifinición de su elección profesional.

- Respetar las diferencias individuales y potenciar las fortalezas de los alumnos.

IX. PLAN DE TUTORÍA Y ORIENTACIÓN EDUCATIVA

En cuanto a las actividades de la TOE en educación superior, éstas deben iniciarse desde el momento en que el alumno ingresa a la universidad, siendo secuenciales y por ciclos. Para ello el docente realizará un Plan de Tutoría Semestral, de acuerdo a las necesidades de su grupo clase, y teniendo en consideración como posibles temáticas, las siguientes:

Orientación vocacional y profesional- Currículum y plan de estudios - Perfil del alumno según la carrera en contraposición a otras carreras- Prácticas preprofesionales - Especialización- Realidad nacional y contexto laboral - Mercado laboral - Ámbitos de trabajo y exigencias laborales - Ética profesional - Competitividad laboral

Habilidades intrapersonales - Control emocional- Control de impulsos - Toma de decisiones- Resolución de problemas - Tolerancia a la frustración- Proactividad - Adaptación al cambio - La responsabilidad - El compromiso - Liderazgo - Automotivación - Autocuidado

Habilidades interpersonales - Normas de convivencia - Comunicación asertiva - Resolución de conflictos - Empatía - En equipo - Resolución de problemas administrativos

Psicosexualidad - Independencia afectiva - Enamoramiento - Sexualidad masculina y femenina - Métodos de prevención

- Autonomía sexual - Conductas de riesgo

Hábitos de estudio - Identificación de hábitos adecuado e inadecuados - Organización del tiempo - Planificación de actividades - Horario de estudios

Estrategias de aprendizaje - Preparación ante los exámenes- Atención concentrada - Gestión de la información - Análisis de textos

o El subrayado o Esquemas y mapas conceptuales o Resumen y síntesis o Exposición en clase

- Elaboración de trabajo o Monografíaso Ensayos o Artículoso Investigaciones

- Pensamiento creativo- Autoevaluación de dificultades y progresos académicos - Expectativas y metas académicas

Redacción - Planificación - Estructura del texto- Uso de conectores - Elaboración de conclusiones - Referencias bibliográficas

Apoyo socioemocional - Red de apoyo familiares y financiero - Autoestima - Sexualidad humana- Sustancias psicoactivas

Plan de vida - Valores personales - Identificación de deseos vitales - La perseverancia la orientación hacia logros personales - Formulación de metas de desarrollo personal

La estructura del plan de tutoría semestral debe contar mínimamente con los siguientes apartados:

I. Datos generales a. Semestre académico :b. Duración :

c. Docente Responsable :d. E-mail :e. N.° de alumnos :

II. Identificación de necesidades del aula (Se considerará datos del semestre anterior para sustentar de manera descriptiva las dificultades o carencias observadas en el grupo)

III. Contenidos para la acción tutorial (Según las necesidades identificadas, se especificará los temas a trabajar)

IV. Objetivos y metas a. Objetivo generalb. Objetivos específicos c. Metas (resultados esperados al culminar el semestre, redactados deforma que

permitan realizar la evaluación final)

V. Cronograma de actividades (Especificar los temas grupales con sus respectivas fechas, así como la temporalización de las tutorías individuales)

Cada tutor debe presenta un informe por unidad, y un informe final. Para los informes de unida, se cuenta con un formato que puede ser llenado de manera escrita (Anexo 5), que además facilitara la realización del informe final. Asimismo, se debe anexar a cada informe de unidad el REGISTRO DE ATENCIÓN DE ESTUDIANTES DE TUTORÍA (Anexo 6)

X. PROCESOS DE ATENCIÓN INDIVIDUAL

Los procesos y medidas presentadas a continuación se llevarán a cabo cada vez que el alumno evidencie alguna dificultad en el área socioemocional, académica o conductual, dependiendo de la gravedad de tal situación, estarán a cargo de la psicóloga responsable. Dichas medidas serán utilizadas de manera formativa, teniendo como objetivo principal, la mejora personal del alumno:

VI.1. Atención Primaria

Intervención a cargo de los profesores tutores. Este tipo de atención implica el desarrollo de los siguientes pasos:

a) Detectar la situación problema y a los participantes en ella. b) Conocer las circunstancias y factores intervinientes en la problemática. Se

escuchará activamente a los alumnos, luego se hará una entrevista de los mismos a fin de indagar las causas de su problemática.

c) Orientación a los participantes a fin de lograr el reconocimiento de sus dificultades así como de brindarle alternativas de solución. Ante cualquier problemática, el o la docente debe hacer consciente al alumno o alumna de sus dificultades, sin afectar su autoestima personal, con el fin de hacerlo partícipe de la solución de su propia problemática, brindándole alternativas de solución y estableciendo acuerdos con él o ella.

d) Se establecerán acuerdos que permitirán la mejora de la situación del o la alumna.

e) Registrar las acciones tomadas en la Ficha de Atención (Ver anexo 1). f) Hacer seguimiento de las dificultades observadas.

g) Si es necesario se vuelve a entrevistas al alumno hasta 3 veces para tomar nuevos acuerdos.

h) Si no hay mejoras respecto a las dificultades del alumno o la alumna, se derivará el caso para una atención secundaria por parte de la psicóloga, a través de un Cargo de Derivación (Anexo 2) o de las Fichas de Derivación (Anexo 3).

VI.2. Atención Secundaria

Intervención de la psicóloga ante una problemática recurrente por parte del alumno. Este tipo de atención implica el desarrollo de los siguientes pasos:

a) Informar a la dirección académica acerca del alumno derivado, así como la problemática presentada.

b) Realizar una entrevista al alumno. Esto permitirá verificar el informe otorgado por el personal docente, hacer un diagnóstico presuntivo y programar sesiones de asesoría posteriores. (Anexo 4)

c) Realizar hasta tres sesiones de asesoría, orientando y estableciendo acuerdos. En este nivel de atención encontramos las siguientes medidas:

a. Orientación al alumno o alumna respecto a conductas inadecuadas que afectan su propio desarrollo personal así como el bienestar de los demás.

b. Propiciar que el mismo alumno o alumna se reivindique en su error mediante el uso de técnicas conductuales apropiadas, buscando que remedie las consecuencias de su comportamiento, a través del cambio inmediato de su conducta y asumiendo las consecuencias naturales o lógicas de la misma.

c. Establecimiento de acuerdos escritos: El alumno y su orientador establecerán metas de mejoría razonables, las cuales se evaluarán en un tiempo acordado entre los mismos.

d) Análisis de datos y elaboración de la conclusión definitiva. Se realizará el diagnóstico definitivo de la problemática y se elaborará un informe psicopedagógico escrito respecto al alumno o alumna, consignándose las conclusiones y recomendaciones pertinentes.

e) Registrar las acciones tomadas en la ficha de atención. f) Orientar a los docentes respecto a las medidas tomadas y su participación en el

proceso de intervención. g) Seguimiento del proceso de intervención.h) Evaluación de resultados. i) Derivación a centros de atención especializada.

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ANEXO: FLUJOGRAMA DE ATENCIÓN INDIVIDUAL

Área psicope-dagógica

DIRECCIÓN

TUTOR

Información externa

ORIENTACIÓN Hasta 3

entrevistas10-15 minutos

IDENTIFICACIÓN de la

problemática en el aula

ACUERDOS con el/la alumna Derivación

Estrategia de

derivación

Atención 1a

Ficha de atención

Ficha de derivación: conductual, emocional.

Atención 2a

Cargo de derivación

Registro INFORMEORIENTACIÓN INDIVIDUAL al alumno

SEGUIMIENTO

Cierre

Derivación externa

SEGUIMIENTO

Ficha de atención

psicopedagógica

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