Proyeccion de imagen

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PROYECCION DE IMAGEN La imagen personal es la carta de presentación que usted tiene ante su entorno: sus clientes, proveedores, entidades financieras, sus colaboradores, etc. y no siempre es transmitida tal y como usted desea. Es diferente lo que usted desea decir con su forma de ser, de estar o de vestir y otra muy diferente lo que su entorno recibe. En otras ocasiones le gustaría que su empresa y las personas que colaboran en ella marcaran un estilo y una forma de actuar que no siempre es fácil de comunicar o incorporar. Cuando un empresario cera una empresa se ocupa de dotarla de una imagen por la que sea reconocida y que le permita perdurar en el tiempo. Para potenciar su imagen personal hay cuatro aspectos que deben apoyarse entre sí: 1. Su apariencia exterior 2. La indumentaria 3. Los gestos y la voz 4. El tono y su modulación Un aspecto físico es impecable con una mente vacía, sin personalidad, no sirve. Al contrario una mente prodigiosa con una apariencia descuidada o sucia tampoco. La regla de oro para transmitir una buena imagen es estar a gusto y seguro con uno mismo.

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PROYECCION DE IMAGEN

La imagen personal es la carta de presentación que usted tiene ante su entorno: sus clientes,

proveedores, entidades financieras, sus colaboradores, etc. y no siempre es transmitida tal y como

usted desea. Es diferente lo que usted desea decir con su forma de ser, de estar o de vestir y otra

muy diferente lo que su entorno recibe. En otras ocasiones le gustaría que su empresa y las

personas que colaboran en ella marcaran un estilo y una forma de actuar que no siempre es fácil

de comunicar o incorporar.

Cuando un empresario cera una empresa se ocupa de dotarla de una imagen por la que sea

reconocida y que le permita perdurar en el tiempo. Para potenciar su imagen personal hay cuatro

aspectos que deben apoyarse entre sí:

1. Su apariencia exterior

2. La indumentaria

3. Los gestos y la voz

4. El tono y su modulación

Un aspecto físico es impecable con una mente vacía, sin personalidad, no sirve. Al contrario una

mente prodigiosa con una apariencia descuidada o sucia tampoco. La regla de oro para transmitir

una buena imagen es estar a gusto y seguro con uno mismo.