Prueba Ilícita

29
¿CUÁLES SON LAS EXCEPCIONES DONDE LA PRUEBA ILÍCITA ES VÁLIDA?

description

El desarrollo de todo proceso judicial se estructura conforme a un planteamiento lógico.

Transcript of Prueba Ilícita

CULES SON LAS EXCEPCIONES DONDE LA PRUEBA ILCITA ES VLIDA?

I. LA PRUEBA

El desarrollo de todo proceso judicial se estructura conforme a un planteamiento lgico. En primer lugar, se presentan las peticiones de las partes (alegaciones); despus, se intenta demostrar la plena coincidencia entre los hechos alegados y la realidad (periodo probatorio); por ltimo, se concluye sobre la cuestin planteada (lo que culmina con el pronunciamiento definitivo del juzgador). De este modo, en el proceso penal, la prueba es la actividad (normalmente, en la etapa del enjuiciamiento, aqu llamada juicio oral) mediante la cual se persigue lograr la conviccin del tribunal sobre unos hechos previamente alegados por las partesDel mismo modo desde otra perspectiva la Prueba consiste en poner de conocimiento de los hechos que constituyen al caso concreto se adquiere en el proceso a travs de los datos o afirmaciones brindadas por las partes; Sin embargo, como no hay consenso acerca de la forma en que se produjeron los hechos, stos se convierten en controvertidos, siendo necesario efectuar una labor histrico crtica para saber lo que realmente ocurri[footnoteRef:1]. [1: SABAT, Luis Muoz. Tcnica Probatoria. Estudios sobre las dificultades de la Prueba en el proceso. Editorial Temis S.A., Santa Fe de Bogot, 1997, pg. 14. ]

Lo antes expuesto permite resaltar la extraordinaria importancia de la Prueba. Tres son las razones ms relevantes de su importancia, al decir de Garca Valencia[footnoteRef:2]. En primer lugar, es la base de la administracin de justicia, pues sin prueba no es posible reconstruir todos los tpicos que constituyen el objeto del proceso penal. En segundo lugar, permite la aplicacin de las normas jurdicas, en tanto que el supuesto de hecho de la norma jurdica, a la que une la consecuencia jurdica, necesita acreditarse por medio de la prueba; y, en tercer lugar, da eficacia al ejercicio del derecho de defensa, porque cualquier pretensin procesal no puede afirmarse si no se prueba y en tanto las partes puedan probarla defendern cabalmente sus derechos. [2: Garca Valencia, Jess Ignacio: La Prueba en el Proceso Penal, De palma, Buenos Aires, 1988, pg. 4.]

Acepciones de la palabra prueba. La palabra prueba tiene tres acepciones en el campo del Derecho:A. Alude a la demostracin de la verdad de un hecho, de su existencia o inexistencia. Es el establecimiento, por los medios legales, de la exactitud de un hecho que sirve de fundamento a un derecho que se reclama.B. Se refiere a los medios de prueba, o sea, los medios de conviccin, considerados en s mismos.C. Se habla de la prueba para referirse al hecho mismo de su produccin, a la circunstancia de hacerla valer ante los tribunales. En este sentido, por ejemplo, se dice que la prueba incumbe al actor o al demandado.

II. LA NOCION DE LA PRUEBA PROHIBIDA:

Como destaca Guariglia[footnoteRef:3] el tema de la prueba ilcita es uno de los ms complejos y polmicos de la dogmtica el primer problema se plantea al abordar el estudio y anlisis de su concepto, ya que no existe unanimidad en la doctrina; sin embargo, citare algunos autores y Jurisprudencia, as tenemos: Pellegrini Grinover, Ada: se entiende por prueba ilcita la obtenida por medios ilcitos, la prueba recogida en infraccin a normas de naturaleza material y principalmente contrarias a principios constitucionales[footnoteRef:4]. El tribunal Constitucional Peruano: en el Expediente N 20532-2003-HC/TC, de fecha 15 de septiembre del 2003, defini la prueba ilcita como aquella en cuya obtencin o actuacin se lesionan los derechos fundamentales o si viola la legalidad procesal, de modo que la misma deviene procesalmente inefectiva e inutilizable. La Corte En Su Ejecutoria Suprema recada en el Recurso de Nulidad N 05-02-2008- Lima de 04 de mayo del 2009 estableci como definicin: [3: Guariglia, F., Las prohibiciones de valoracin probatoria en el procedimiento penal, en revista Jueces para democracia, nm. 25 marzo 1996, pg. 76] [4: GRINOVER, Pellegrini Ada. Pruebas Ilcitas. Revista Peruana de Doctrina y Jurisprudencia Penal. Lima, 2000, nmero 1, pp. 299.]

al prueba prohibida o ilcita es aquella prueba cuya, obtencin o actuaciones, lesionan derechos fundamentales, o se violan normas constitucionalesDe tal manera que se reconoce a la prueba prohibida como un tipo de prueba en caso opere alguna de las excepciones a las consecuencias jurdicas de la prueba prohibida. No obstante, cabe hacer referencia a lo sealado, posteriormente, por el mismo tribunal en su sentencia recada en el expediente N 655-2010-PHC/TC de 27 de octubre de 2010, en la cual reconoci a la prueba prohibida como autentico derecho fundamental:No obstante ello, en consideracin de este tribunal, la prueba prohibida es un derecho fundamental (lase como derecho a la no utilizacin o valoracin de la prueba prohibida) que no se encuentra expresamente contemplado en la constitucin..La prueba ilcita, en el sentido aqu expuesto, esto es, en cuanto obtenida y/o practicada con vulneracin de los derechos fundamentales, conlleva su inutilizabilidad[footnoteRef:5] procesal, esto es, la prohibicin de su admisin as como de su valoracin por el Tribunal sentenciador. A diferencia de la prueba irregular, la prueba ilcita no es susceptible de convalidacin o subsanacin. Aunque, como hemos visto, en algunos ordenamientos jurdicos estas prohibiciones no presentan un carcter absoluto y admiten excepciones. [5: Sobre el origen de dicho trmino vase Miranda, 2004, pg. 94]

El control sobre la licitud de la prueba debe efectuarse ya en sede de admisin de las pruebas. Corresponde al juez de garantas o juez de instruccin controlar que las pruebas ofertadas por las acusaciones son lcitas y, por tanto, no fueron obtenidas con infraccin de derechos fundamentales. Una acusacin fundamentada sobre la base de pruebas ilcitas debera calificarse de infundada, desde el plano probatorio, siendo su consecuencia procesal la no apertura de juicio oral cuando fuere la nica prueba de cargo y no concurran otras pruebas lcitas independientes.Un adecuado control de la licitud de la prueba en sede de instruccin o en la denominada fase intermedia trata de impedir que el Tribunal enjuiciador, en el acto del juicio oral, pueda entrar en contacto con dichas pruebas, evitndose as las perniciosas consecuencias derivadas de los denominados efectos psicolgicos de la prueba ilcita (Miranda, 2004, 109 y ss.)[footnoteRef:6] [6: Los efectos psicolgicos son la eventual incidencia que una prueba ilcita puede tener en la conviccinfctica del tribunal enjuiciador.]

No obstante, el hecho de que una prueba ilcita hubiera superado el filtro de admisibilidad, no es obstculo para negarle todo valor probatorio. En otras palabras, si la prueba ilcita se incorpor al proceso no impide la posibilidad de denunciar y apreciar su ilicitud y la consecuencia ser la prohibicin de su valoracin por parte del Tribunal sentenciador quien no podr fundamentar un pronunciamiento condenatorio sobre la base de una prueba o pruebas ilcitas.

III. LA PRUEBA PROHIBIDA EN LA CONSTITUCION Y EL NUEVO CODIGO PROCESAL PENAL (2004)

Nuestra constitucin de 1993 reconoce la llamada Regla de Exclusin (la prueba prohibida o prueba ilcita), en forma expresa en dos disposiciones en el art. 2 Inc. 24 literal h) reconoce el derecho a la libertad y seguridad personal, cuando seala que carecen de valor las declaraciones obtenidas por la violencia moral, psquica o fsica, y que quien los emplea incurre en responsabilidad; y, en el art. 2 inc. 10 consagra el derecho al secreto y a la inviolabilidad de las comunicaciones y documentos privados, al prescribir que los documentos privados obtenidos con violacin del precepto constitucional no tienen efecto legal;Art. 2 inc. 24 literal h)Nadie debe ser vctima de violencia moral, psquica o fsica, ni sometido a tortura o tratos inhumanos o humillantes () Carecen de valor las declaraciones obtenidas por la violencia. Quien la emplea incurre en responsabilidad

Art. 2 inc. 10Las comunicaciones, telecomunicaciones o sus instrumentos, solo pueden ser abiertos, incautados, interceptados o intervenidos por mandato motivado del Juez, con las garantas previstas en la ley. Se guarda secreto delos asuntos ajenos al hecho que motiva su examen. Los documentos privados obtenidos con violacin de este precepto no tienen efecto legalRegla de ExclusinEl Nuevo Cdigo Procesal Penal 2004, asume un concepto estricto de Prueba Ilcita cuando seala en el Art. VIII. 2 del Ttulo Preliminar:"Carecen de efecto legal las pruebas obtenidas, directa o indirectamente, con violacin del contenido esencial de los derechos fundamentales de la persona"Y, al prescribir el art. 159 del Cdigo procesal penal:El Juez no podr utilizar, directa o indirectamente, las fuentes o medios de prueba obtenidos con vulneracin del contenido esencial de los derechos fundamentales de la persona".

IV. EXCEPCIONES A LA REGLA DE EXCLUSIN DE LA PRUEBA ILCITA.La regla de exclusin de la prueba ilcita por lesin de los derechos fundamentales no se va a entender en un sentido absoluto, rgido e incondicionado, ya que progresivamente, se han ido introduciendo excepciones que han atemperado su aplicacin. Y es que en algunos casos excepcionales, en funcin de las circunstancias que concurran, y a pesar de que haya habido lesin de derechos fundamentales, los tribunales, acudiendo a una motivacin determinada y al principio de proporcionalidad, otorgan eficacia a la prueba obtenida ilcitamente, esto es, con lesin de derechos fundamentales. Ahora bien, estas excepciones, como su propio nombre indica, han de ser excepcionales, han de constituir la excepcin a la regla general que es la exclusin probatoria, pues de lo contrario se corre el riesgo de que la regla general de la prohibicin de la prueba ilcita se convierta en excepcin y las excepciones en regla general. Las excepciones a la regla de la exclusin de la prueba ilcita han surgido, una vez ms, en el mbito de la jurisprudencia norteamericana y, por su influencia, se han extendido a otros ordenamientos jurdicos como el espaol y el mexicano, tambin por va jurisprudencial.Desde un sector de la doctrina se ha constatado cmo en el Derecho comparado se observa una tendencia generalizada a la introduccin, por va jurisprudencial, de excepciones a la regla de exclusin de la prueba ilcita, lo que conduce a una relativizacin o debilitamiento en su aplicacin, y ello con independencia de que la regla se haya proclamado constitucional o legalmente.

4.1. Fuente Independiente.Esta excepcin consiste en considerar lcita aquella prueba prohibida si suprimiendo hipotticamente el acto violatorio, de igual forma se hubiese llegado a ella o a sus derivadas. Esta excepcin requiere que al momento de producirse el acto que genera la ilicitud existan otros medios probatorios lcitos que hubiesen permitido llegar al mismo resultado. Por ejemplo, si mediante torturas se obtiene la declaracin de un procesado sobre a ubicacin de los bienes hurtados y simultneamente otro procesado confiesa libremente la ubicacin exacta de tales bienes, entonces la prueba derivada, que fue obtenida mediante violacin de los derechos constitucionales de uno de los agraviados, seran admisible en el proceso debido a que si suprimimos mentalmente tal hecho ilcito, por la declaracin del otro procesado se hubiese llegado al mismo hallazgo.Para poder apreciar esta excepcin es preciso que se d una desconexin causal entre la prueba ilcita inicial y la prueba derivada, dicho de otro modo, que no exista una vinculacin directa entre una prueba ilcita y otra posterior lcita derivada de la originaria.Para algunos autores, esta doctrina de la prueba independiente no es una excepcin a la prueba derivada de la prueba ilcita, sino la faceta negativa de la prueba ilcita al no concurrir el presupuesto material bsico para su aplicacin, que consiste en la existencia de una relacin causal entre la prueba originaria y la refleja.Se trata de una excepcin que tiene su origen en la jurisprudencia del Tribunal Supremo de Estados Unidos, que la aplic, por ejemplo, en el caso Segura vs. United States, 468 US 796, (1984), cuando en el curso de la investigacin de un delito de trfico de drogas, la polica entra en un domicilio sin mandamiento judicial, detiene a los ocupantes y permanece en el lugar durante varias horas hasta que llega el preceptivo mandamiento judicial. Esta autorizacin judicial se obtiene en virtud de los datos indiciarios existentes antes de proceder al registro ilegal. En el proceso se excluyeron como fuente de prueba los elementos que se haban encontrado en el domicilio con la entrada inicial, pero se admitieron los que se descubrieron despus de haberse ejecutado el mandamiento de entrada vlido.En otro caso, Bynum vs. United States, 107 U.S. App. D.C. 109, 274 F.2d 767 (1960), se procede a la detencin de un sospechoso, al que se le toman las huellas dactilares. Tras la oportuna prueba pericial, se comprueba que dichas huellas dactilares coincidan con las que se haban tomado en otro lugar en el que se haba perpetrado un robo. Sin embargo, esta prueba pericial fue declarada ilcita por derivar directamente de la primera prueba, y una vez que la detencin se hubo declarado ilegal al haberse practicado sin causa razonable. Ahora bien, posteriormente la polica present una nueva prueba pericial dactilar que, si bien coincida con las huellas dactilares halladas en el lugar del robo, no guardaba conexin con las recogidas tras la detencin ilegal, pues procedan de unas huellas antiguas del detenido que se encontraban en los archivos del FBI. El Tribunal Supremo acept esta nueva prueba pericial al considerarla independiente respecto de la prueba obtenida en la detencin ilegal.Para un sector de la doctrina, difcilmente puede admitirse en este ltimo caso que se est ante un supuesto de prueba independiente, ya que resulta evidente la relacin causal que existe entre ambos tipos de pruebas. Y es que, en algunas ocasiones, existen dificultades notorias para calificar a una prueba como independiente al estar vinculada directamente con una inicial actividad probatoria ilcita.En Espaa, esta excepcin se contempla en la STC 81/1998 de 2 de abril (FJ 4), a la que ya nos hemos referido, en la que se introduce la doctrina de la conexin de antijuridicidad entre la prueba originaria ilcita y la derivada, concretamente cuando dicha conexin no tiene lugar: en supuestos excepcionales hemos admitido que, pese a que las pruebas de cargo se hallaban naturalmente enlazadas con el hecho constitutivo de la vulneracin del derecho fundamental por derivar del conocimiento adquirido a partir del mismo, eran jurdicamente independientes de l y, en consecuencia, las reconocimos como vlidas y aptasDesde la doctrina se ha advertido de los riesgos que puede entraar la teora de la fuente independiente, ya que puede acabar operando en la prctica como una verdadera fuente de excepciones a la eficacia refleja de la regla de exclusin probatoria, mediante una ampliacin desmesurada del concepto de prueba independiente.

4.2. Descubrimiento inevitable.Esta excepcin consiste en que la prueba ilcita y/o sus derivadas igualmente se hubiesen obtenido lcitamente aun cuando el hecho generador de la ilicitud no se hubiese producido. Por ejemplo, en un proceso por evasin tributaria se obtienen las declaraciones juradas del procesado sin el correspondiente levantamiento del secreto tributario. El conocimiento del contenido de las declaraciones juradas es inevitable porque pese a suprimir tal hecho, en un delito de esta naturaleza, el juez de la causa va pedir el levantamiento del referido secreto como una de las diligencias ordinarias.Guarda relacin con la anterior excepcin, hasta el punto de que ha sido considerada como una modalidad de ella, aunque ms perfeccionada. De acuerdo con dicha excepcin, no podra excluirse una prueba derivada de otra ilcita o inconstitucional porque al resultado probatorio de la primera podra haberse llegado inevitablemente por el curso normal de la investigacin. Dicho de otro modo, las investigaciones que se estaban llevando a cabo hubieran conducido a la obtencin independiente de la prueba derivada de otra lesiva de derechos fundamentalesEsta excepcin ha sido apreciada por el Tribunal Supremo norteamericano en el caso Nix vs. Williams (467 US 431 (1984), en el que durante un interrogatorio ilegal el acusado se declar culpable de un homicidio y condujo a la polica al lugar donde haba enterrado el cadver. El Tribunal excluy la confesin ilegal del acusado, pero no el cuerpo de la vctima como resultado del interrogatorio ilegal, ya que ste habra sido encontrado inevitablemente pocas horas despus del interrogatorio ilcito, porque la polica estaba buscando el cadver en la misma zona en la que finalmente se hall.Desde la doctrina se ha puesto de manifiesto la necesidad de que la prueba obtenida como resultado de una violacin inconstitucional sea descubierta por medios lcitos e independientes de la conducta ilcita original. Tambin se apunta, desde la doctrina, el riesgo que para el derecho a la presuncin de inocencia supone la ambigedad y generalidad con la que se formula esta excepcin del descubrimiento inevitable, ya que se basa en simples conjeturas o hiptesis, esto es, en lo que pudo suceder y no sucedi realmente. La presuncin de inocencia slo puede enervarse mediante datos plenamente acreditados y obtenidos de forma lcita.El Tribunal Supremo espaol, en la STS, Sala 2, de 4 de julio de 1997, admite la validez de una prueba que es el resultado causal de una interceptacin telefnica ilegal, como consecuencia de su inevitable descubrimiento, aunque limita su aplicacin a los casos de actuaciones lesivas de la polica interviniendo buena fe[footnoteRef:7]. [7: Por su inters, incluimos literalmente parte del FJ 4 de esta STS, Sala 2, de 4 de julio de 1997: en el caso actual el efecto expansivo de la prueba ilcita aparece limitado conforme a la doctrina del descubrimiento inevitable. A travs de la prueba testifical debidamente practicada en el acto del juicio oral, consta acreditado que la acusada estaba siendo objeto de un proceso de vigilancia y seguimiento, anterior incluso al inicio de la intervencin telefnica, realizado por agentes de la polica, como consecuencia de informaciones referentes a su dedicacin habitual a la transmisin y venta de herona a terceros. Este proceso de vigilancia habra conducido, en cualquier caso, al descubrimiento de la reunin celebrada en una cafetera entre la recurrente y sus proveedores de herona al por mayor. Es decir que, inevitablemente y por mtodos regulares, ya haba cauces en marcha que habran desembocado de todos modos en el descubrimiento de la entrega del alijo, realizada, como se ha dicho, en un lugar pblico y sujeto a la vigilancia de los grupos de agentes que procedan al seguimiento de la acusada. En consecuencia la alegacin de que las pruebas adquiridas como consecuencia de la intervencin policial sobre la operacin de entrega de la mercanca ilcita estn lejanamente relacionadas con alguna informacin genrica obtenida de la intervencin telefnica practicada al amparo de una autorizacin judicial insuficientemente motivada y deben por tanto ser anuladas, no puede prosperar en el caso actual, pues con independencia de ellos las referidas pruebas habran sido ineluctablemente descubiertas de una fuente sin tacha, como son las operaciones de vigilancia y seguimiento realizadas continuamente e iniciadas antes de la decisin judicial que acord la citada intervencin, ...la limitacin del descubrimiento inevitable debe ceirse a los supuestos de actuaciones policiales realizadas de buena fe, para evitar que se propicien actuaciones que tiendan a acelerar por vas no constitucionales la obtencin de pruebas que se obtendran indefectiblemente por otras vas, pero ms tardamente...]

Se ha considerado como una variante de esta excepcin y, por tanto, relacionada tambin con la de la fuente independiente, la excepcin del hallazgo casual, en virtud de la cual se declara lcita aquella prueba que deriva o que se obtuvo casualmente de otra prueba originaria ilcita. Un ejemplo tpico sera el descubrimiento de un delito de trfico de drogas como consecuencia de una intervencin telefnica que se autoriz para otro delito (STS, Sala 2, de 21 de julio de 2000). El hallazgo casual rompe la conexin de antijuridicidad que existe entre la prueba derivada y la prueba ilcita inicial, pudiendo la prueba obtenida casualmente ser valorada en el proceso y, en su caso, fundamentar la sentencia condenatoria

4.3. Buena fe.Esta excepcin consiste en valorar las pruebas obtenidas ilcitamente cuando, si es que tales hechos estuvieron recubiertos de apariencia de legalidad. Esta excepcin pretende salvar aquellas pruebas ilcitas que fueron obtenidas de buena fe. Nosotros consideramos que la buena fe no puede ser un criterio para evaluar la admisibilidad de un medio probatorio sino la responsabilidad del funcionario que lo obtuvo. Un medio probatorio no deja de ser menos lesivo a los derechos fundamentales del procesado por el hecho que su ilicitud proviene de actos aparentemente lcitos. Por ejemplo, si un juez autoriza la interceptacin telefnica de un ciudadano sin fundamentar su resolucin y la interceptacin es afectivamente realizada, dicho medio probatorio - de acuerdo a la presente excepcin debera ser admitido en el proceso pese a la grave afectacin al debido proceso se habra producido.Como se ha anticipado, en el ordenamiento norteamericano el fundamento de la exclusionary rule se halla en la necesidad de disuadir a los agentes de la polica a que realicen actuaciones contrarias a los derechos individuales (deterrent effect). El Tribunal Supremo de los Estados Unidos ha considerado que la exclusionary rule no ser aplicable en aquellos casos en que la polica, aunque actu de forma ilcita, esto es, con lesin de derechos individuales, lo hizo en la creencia de que lo haca de buena fe, es decir, dentro de los mrgenes de la ley o de la Constitucin. En consecuencia, este tipo actuacin policial eliminara el efecto disuasorio (deterrent effect) sobre el que descansa la exclusionary rule.Esta excepcin se aprecia por el Tribunal Supremo en el caso Leon vs. United States, 468 US 897 (1984), en el que la polica llev a cabo un registro domiciliario actuando de conformidad con un mandamiento judicial que consideraba ajustado a Derecho. Sin embargo, con posterioridad, un rgano judicial superior estim que dicho mandamiento haba vulnerado la IV Enmienda al haberse dictado sin concurrir causa probable. Sin embargo, el Tribunal Supremo admiti la validez de las pruebas obtenidas en el registro al entender que los agentes de la autoridad haban actuado de buena fe (good faith exception), creyendo que su conducta se hallaba amparada por un mandamiento judicial legal. De ah que en este caso no opere el efecto disuasorio que persigue la exclusionary rule de evitar futuros comportamientos ilcitos de la polica[footnoteRef:8]. [8: La excepcin de la buena fe policial ha sido invocada tambin por el Tribunal Supremo en el caso Massachusetts vs. Sheppard 468 US 981 (1984). Asimismo, el Tribunal Supremo haba aplicado dicha excepcin en un caso de actuacin de la polica al amparo de una ley que posteriormente fue declarada inconstitucional, Michigan vs. De Filippo, 443 US 31 (1979).]

La excepcin de la buena fe funciona en la prctica neutralizando la aplicacin de la propia regla de exclusin de la prueba ilcita, al facilitar la utilizacin en el proceso penal de pruebas que se obtuvieron con vulneracin de derechos fundamentales. Se trata, pues, de una verdadera excepcin a la aplicacin directa de la regla de la exclusin probatoria ilcita.Esta excepcin, tal y como se ha construido en el Derecho norteamericano no sera trasladable al Derecho espaol, ya que en Espaa el fundamento de la regla de exclusin de la prueba ilcita no es evitar que los agentes de polica realicen actuaciones ilcitas lesivas de derechos fundamentales, sino excluir del proceso aquellas pruebas que se hayan obtenido con vulneracin de los mismos.No obstante lo dicho, existe una decisin del Tribunal Constitucional espaol, la STC 22/2003, de 10 de febrero, en la que el Tribunal parece acoger esta excepcin. En esta resolucin se examina un supuesto de entrada y registro de la polica en el domicilio de una persona detenida con la autorizacin exclusiva de la esposa, que, a su vez, es denunciante del detenido (por violencia de gnero). Durante el registro se ocupa un arma de fuego que es propiedad del acusado. El Tribunal estima que se ha producido una violacin del derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio (art. 18.2 CE), al considerar que el consentimiento prestado por la esposa no es vlido, entre otros motivos por concurrir una situacin de contraposicin de intereses (FJ 8).Ahora bien, el Tribunal, aun reconociendo que la prueba haba sido obtenida con vulneracin del derecho a la inviolabilidad domiciliaria, admite su valoracin y eficacia en el proceso, sin aplicar la regla de exclusin del art. 11.1 LOPJ, desestimando la existencia de vulneracin del derecho a un proceso con todas las garantas (art. 24.2 CE) y del derecho a la presuncin de inocencia (art. 24.2 CE).El Tribunal entiende, en el FJ 10, que el consentimiento de la esposa apareca, segn el estado de la interpretacin del Ordenamiento en el momento de practicar la entrada y registro, como habilitacin suficiente para llevarla a cabo conforme a la Constitucin (). Contina diciendo el Tribunal que En casos como el presente, en que el origen de la vulneracin se halla en la insuficiente definicin de la interpretacin del ordenamiento, en que se acta por los rganos investigadores en la creencia slidamente fundada de estar respetando la Constitucin y en que, adems, la actuacin respetuosa del derecho fundamental hubiera conducido sin lugar a dudas al mismo resultado.Incluso, se llega a calificar a la regla de exclusin de la prueba, a semejanza de la concepcin norteamericana, como un remedio impertinente y excesivo que, por lo tanto, es preciso rechazar. Concluye el Tribunal que, en este caso, la vulneracin del derecho a la inviolabilidad del domicilio es, por decirlo de algn modo, un mero accidente.Coincidimos con las crticas que se han formulado contra esta decisin cuando se dice que no solamente se limita o excluye la eficacia refleja de la prueba ilcita, sino que la excepcin de la buena fe actuara neutralizando la propia aplicacin de la regla de exclusin, al admitir la utilizacin probatoria de aquellos elementos obtenidos directamente con violacin de derechos fundamentales. En esta lnea se pronunci tambin el magistrado Guillermo Jimnez Snchez en su voto particular: pese a la inexistencia de dolo o imprudencia, pese a la buena fe policial, desde la perspectiva constitucional que nos corresponde debemos afirmar que objetivamente el registro as practicado ha producido una vulneracin del derecho a la inviolabilidad del domicilio y que existe una relacin directa entre ese hecho y el hallazgo de la pistola, relacin de la que deriva la necesidad de la exclusin de los resultados del registro del acervo probatorio en funcin de la idea de proceso justo, sin que esto pueda ponerse en cuestin por la menor gravedad de la vulneracin y la tambin menor necesidad de tutela del derecho fundamental derivada de la buena fe de la actuacin policial. Por tanto, la utilizacin como prueba de cargo en el proceso de la obtenida directamente a partir de la vulneracin del derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio (el hallazgo de la pistola) vulner, asimismo, el derecho del recurrente a un proceso con todas las garantas

4.4. Doctrina del tinte diluidoLa mencionada doctrina seala que los derivados de los derivados de las pruebas ilcitas pierden si tinte ilcito y por lo tanto pueden ser admitidos en el proceso. Por ejemplo, en el allanamiento ilegal de una local donde de acopia ilegalmente armas, son encontrados correos electrnicos impresos en papel sealando que un nuevo envo de armas sera recibido por un sujeto X, quien posteriormente fue interrogado por la Polica, en presencia de su abogado defensor, sealando que su proveedor es el sujeto Y quien finalmente guarda las armas es su domicilio, el que luego es allanado por disposicin judicial. En esta secuencia de hechos, si bien el primer allanamiento es ilcito, constituyendo prueba ilcita y determinando la ilicitud del derivado (interrogatorio al sujeto Y), el allanamiento final de la casa de dicho sujeto resulta admisible debido a que la influencia de la raz ilcita de este medio probatorio es distante.

4.5. Proporcionalidad

Esta excepcin busca ponderar los por una parte el inters social referido a la eficacia de la administracin de justicia, y el derecho del procesado a no ser condenado sobre la base de una prueba ilcitamente obtenida. Lneas arriba sealbamos que esta es una tesis muy controvertida que ha llevado al Tribunal Federal de Alemania a aplicarla slo en casos excepcionales.Pellegrini[footnoteRef:9] seala que la nica forma de aplicar esta excepcin sin afectar el derecho del procesado a un debido proceso es cuando la prueba prohibida lo favorece. [9: Pellegrini G., Ada: Op. Cit. Al respecto ha sealado Adems, no deja de ser, en ltimo anlisis, manifestacin del principio de proporcionalidad la posicin prcticamente unnime que reconoce la posibilidad de utilizacin, en el proceso penal, de la prueba favorable al acusado, aunque haya sido obtenida en infraccin a derechos fundamentales suyos o de terceros.]

Nuestro Nuevo Cdigo Procesal Penal ha adoptado casi expresamente esta interpretacin de la excepcin bajo comentario. Ello se deduce del texto del inciso 3 del Artculo VIII (Legitimidad de la Prueba) del Ttulo Preliminar del sealado texto legal: La inobservancia de cualquier regla de garanta constitucional establecida a favor del procesado no podr hacerse valer en su perjuicio. Contrario sensu la violacin de una regla de garanta constitucional establecida a favor del procesado si podr ser empleada a favor de este ltimo.

V. PROCEDIMIENTO DE EXCLUSIN

1. Legitimacin.Miranda Estrampes[footnoteRef:10] opina que la parte contra la cual se pretende utilizar el medio probatorio presuntamente ilcito es quien se encuentra legitimado para solicitar la exclusin de dicho medio pese a que el mismo no sea el sujeto pasivo del acto ilcito. La razn de tal afirmacin es que al final es el derecho del procesado a un procedo debido el que se encuentra en juego. [10: Miranda Estrampes, M. Op. Cit. pp. 125.]

Por su parte, Ramrez Bages[footnoteRef:11] seala que solo la vctima del acto que genera la ilicitud del medio probatorio es el que se encuentra legitimado para solicitar la exclusin del mismo. [11: Ramrez Bages, Mariano H.: La regla de exclusin de prueba obtenida mediante registro e incautaciones irrazonables en Revista Jurdica de la Universidad de Puerto Rico, Vol. L, N 1, San Juan 1981, pp.185]

Nosotros coincidimos con lo expresado por Miranda dado que no se puede impedir que el procesado interponga los recursos procesales que estime pertinente en defensa de sus derechos. Lo afirmado por Ramrez Bages implicara una limitacin excesiva al derecho a la defensa.Otro aspecto que debe analizarse es si la exclusin puede realizarse slo a pedido de parte o es que el juez tambin la puede de resolver de oficio. En tal sentido, de acuerdo a lo afirmado por el Tribunal Constitucional, la licitud es uno de los principios que regula la actividad probatoria de las partes, en tal sentido le corresponde al rgano jurisdiccional verificar que tal principio se cumpla.

2. OportunidadDada sus funciones de saneamiento y preparacin del juicio, la fase intermedia es la mejor oportunidad para que se analice la licitud de los medios probatorios a actuar en contradictorio. Los ms recientes cdigos procesales latinoamericanos chileno y peruano establecen la posibilidad de plantear la exclusin de la prueba ilcita en dicha fase.

3. Caractersticas del procedimiento de exclusin.Partiendo de la premisa que el momento ms oportuno para solicitar la exclusin de un medio probatorio que se reputa ilcito es durante la fase intermedia, nosotros consideramos que en la resolucin de tal incidente se deben respetar los principios de contradiccin, inmediacin, oralidad y publicidad, de forma similar a la fase de enjuiciamiento.En este procedimiento bsicamente se deben despejar dos incgnitas: primero, si es que el medio probatorio cuestionado ha sido obtenido ilcitamente o es derivada de otra que lo haya sido; y segundo, verificar si alguna de las excepciones a la aplicacin de la regla de exclusin se presenta en el caso

CONCLUSIONES

La regla de exclusin de la prueba ilcita tiene un carcter general y por la finalidad que cumple, la proteccin de los derechos fundamentales de las personas en el proceso, se aplicar a todo tipo de procesos, aunque el mbito natural de aplicacin ser el proceso penal. En este tipo de proceso, la prueba ilcita presupone un conflicto entre dos intereses jurdicos contrapuestos, la bsqueda de la verdad material a travs del proceso, y la tutela de los derechos y libertades individuales. Este ltimo bien jurdico, la tutela efectiva de los derechos y libertades, implicar no otorgar eficacia jurdica probatoria a todas aquellas pruebas que los vulneren, y ello aunque suponga no castigar algunos delitos y que algunos delincuentes queden en libertad sin cargos. Desde una perspectiva comparada, la regla de exclusin de las pruebas ilcitas, que tiene su origen en Estados Unidos, se ha ido extendiendo a otros pases con ordenamientos jurdicos y sistemas procesales diferentes. En Estados Unidos, la jurisprudencia del Tribunal Supremo ha establecido como fundamento principal de la regla de exclusin el efecto disuasorio de la actividad policial en la bsqueda de elementos incriminatorios. Si bien, ha de advertirse que este efecto disuasorio podra lograrse por otros remedios de igual o similar eficacia como la exigencia de una estricta responsabilidad civil o disciplinaria. En otros pases, la regla de exclusin de la prueba ilcita tiene un origen eminentemente constitucional, y su fundamento y objetivo principal, como se ha dicho, es la de garantizar y proteger los derechos y libertades de la persona, impidiendo que puedan ser valoradas en el proceso aquellas pruebas que se obtengan de forma ilcita vulnerando los derechos individuales. Ahora bien, en el Derecho comparado, puede observarse tambin una tendencia evolutiva a la introduccin, por va jurisprudencial, de excepciones a la regla de exclusin de la prueba ilcita, lo que conducir a una relativizacin o debilitamiento en su aplicacin, y ello con independencia de que la regla se haya proclamado constitucional o legalmente. Estas excepciones han cobrado una relevancia especial en el caso de la doctrina de los frutos del rbol envenenado o de la ineficacia de la prueba derivada de otra ilcita. En Espaa, para examinar si existe o no relacin causal entre la prueba ilcita originaria y la prueba derivada, el Tribunal Constitucional ha elaborado una doctrina, la de la conexin de antijuridicidad, a partir de la cual el Tribunal, por influencia de la jurisprudencia norteamericana, ha ido introduciendo excepciones a la teora de los frutos del rbol envenenado y, por consiguiente, dotando de eficacia jurdica, en determinados casos, a una prueba derivada de otra ilcita. Entre esas excepciones se halla la teora de la fuente independiente, que en la prctica puede acabar actuando como una verdadera fuente de excepciones a la eficacia refleja de la regla de exclusin, al ampliarse de forma desmesurada el concepto de prueba independiente. Parece como si, en los ltimos tiempos, la regla de exclusin hubiese abandonado la condicin de garanta procesal constitucional, por la posicin preferente que tienen los derechos fundamentales en el ordenamiento jurdico, para llegar a convertirse en un simple remedio judicial que pudiera dejar de aplicarse cuando se considere que la tutela de determinados derechos fundamentales sustantivos ha de ceder frente a la tutela de otros derechos procesales.

BIBLIOGRAFA

Bustamante Alarcn, Reynaldo: El problema de la Prueba Ilcita un caso de conflicto de derechos. Una perspectiva constitucional procesal en Revista THEMIS Segunda poca, N43, Lima, noviembre del 2001

Miranda Estrampes, Manuel: El concepto de prueba ilcita y su tratamiento en el derecho penal, Jos Ma. Bosch Editor, Barcelona 1999

Montas Pardo, Miguel Angel y Herrera, William: La constitucionalizacin de la prueba en materia penal, Editorial Universitaria, Santa Cruz de la Sierra 2000

Pellegrini Grinover , Ada: Pruebas Ilcitas en Ciencias Penales, Revista de la Asociacin de Ciencias Penales de Costa Rica, AO 7, N 10, San Jos, Setiembre de 1995.

ANDRS IBEZ, P. (1993) La funcin de las garantas en la actividad probatoria.En: AA.VV. La restriccin de los derechos fundamentales de la persona en elproceso penal. Cuadernos de Derecho Judicial. Madrid: Consejo General delPoder Judicial, pg. 240.ASENCIO MELLADO, J.M. (1989) Prueba prohibida y prueba preconstituida. Madrid:Trivium.CARMONA RUANO, M. (1996) De nuevo la nulidad de la prueba: es indiferente elmomento en que puede declararse?. Jueces para la Democracia, nm. 25,julio, pg. 95 y ss.