Ciudad de México, a 25 de noviembre de 2009

Dr. Raúl Plascencia Villanueva

Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

P r e s e n t e

El suscrito, Diputado Federal de la LXI Legislatura de la Cámara de Diputados

del H. Congreso De la Unión, Carlos Samuel Moreno Terán, con domicilio

para recibir notificaciones el ubicado en Avenida Congreso de la Unión No.

66, Colonia el Parque, Edificio A, segundo nivel, Mesa Directiva, del Palacio

Legislativo de San Lázaro, de esta ciudad, en los términos de los artículos 4, 8,

14, 16 y 102 apartado B de la Constitución Política de los Estados Unidos

Mexicanos; 1, 3, 4, 6 fracciones I, II inciso a), VI, 25, 26 38,39 y demás

aplicables de la Ley de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, me

permito formular la siguiente

QUEJA:

1.- En el Municipio de Cananea, Sonora persiste un conflicto laboral entre la

empresa “Mexicana de Cananea S.A. de C.V.”, subsidiaria del Grupo México; y

los 1100 (mil cien) trabajadores que conforman la Sección 65 del Sindicato

Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República

Mexicana (SNTMMSRM), por el estallamiento de una huelga desde el 30 de

julio de 2007. La duración del conflicto minero del municipio de Cananea,

Sonora, es ya de más 28 meses.

Aún cuando Cananea concentra el 12 por ciento de la producción minera del

país y el 46 por ciento de la producción de cobre (*), en ese período, 1100

familias han dejado de percibir ingresos. Este hecho por sí mismo nos dibuja

claramente la magnitud del problema, pues ese segmento muy significativo de

una población de 30 mil habitantes, han estado sobrellevando la situación

prácticamente en base a la caridad: despensas, cobertores y mínimos apoyos

en efectivo que algunas organizaciones han podido solventar.

Se ha dejado de generar una derrama económica estimada en 150 millones de

pesos mensuales, para un total aproximado ya, de 4200 millones (*).

(*)Datos proporcionados por el subsecretario de Trabajo , Álvaro Castro Estrada, durante la reunión que sostuvo con senadores del Grupo Especial de Trabajo para dar seguimiento al Conflicto Laboral de Cananea, celebrada el 29 de julio de 2009. Boletín de Comunicación Social del Senado, 29 de julio de 2009.

2.- Los derechos humanos son el conjunto de prerrogativas inherentes a la

naturaleza de la persona, cuya realización efectiva resulta indispensable para el

desarrollo integral del individuo. Estos derechos deben ser reconocidos y

garantizados por el Estado bajo los principios de respeto, protección y

realización; es decir, no violar los derechos, promoverlos y garantizarlos.

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Así, una perspectiva de derechos humanos se centra en las obligaciones del

Estado hacia el individuo y la sociedad, que son exigibles por los ciudadanos.

Éstas ponen el énfasis en las disparidades y la discriminación que afecta a las

poblaciones socialmente excluidas, con el fin de movilizar recursos para

atender las necesidades de estos grupos históricamente desfavorecidos

En el caso particular del Municipio de Cananea, los servicios de agua potable,

energía eléctrica y gas natural, se han visto comprometidos a factores

externos como la operación de una empresa minera, pues ésta, la empresa,

venía otorgando un subsidio para el pago por consumo de energía eléctrica

que se genera por la operación de los pozos de conducción y abastecimiento a

la ciudad. Al encontrarse la minera en condiciones de labores suspendidas

debido a coyunturas jurisdiccionales, también procedió a suspender los

subsidios que venía otorgando. Por tanto, el Ayuntamiento y la región se han

visto afectados con el suministro de los servicios vitales. Esta contrariedad se

traduce medularmente, y en referencia directa a la presente queja, en la

violación de los derechos humanos de la población al negárseles el acceso al

agua.

La anterior argumentación se sustenta en el hecho, atribuible a las autoridades

que en su momento serán señaladas, de que incumplen su obligación

constitucional, al mismo tiempo violando los derechos esenciales de proveer

los servicios vitales a los habitantes ya que no tomaron las debidas provisiones

para solventar una contingencia como la que enfrentan desde que el subsidio

otorgado por la empresa minera fue suspendido.

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3.- Por 70 años se ha distribuido el gas natural por tubería subterránea en la

localidad -mucho antes de que se empezara a hacer en las zonas urbanas del

país- pero ahora se ha cancelado y se intenta sustituir en los hogares con

tanques de gas LP, representando un claro y evidente retroceso en su sistema

de vida.

La compañía Distribuidora de Gas natural adelantó el corte del carburante en

Cananea, programado para fechas posteriores, incumpliendo así el programa

de conversión de gas natural a gas LP que llevan a cabo la Secretaría de

Hacienda y Crédito Público en conjunto con la Secretaría de Gobernación,

incidente que ocasionó desabasto ante la fuerte demanda que se presentó por

las bajas temperaturas que ya se presentan en la ciudad minera.

Ante esta situación muchos hogares cananenses se quedaron sin gas y

recibieron el frente frío sin calefacción con temperaturas hasta de menos 2

grados Centígrados.

El suministro de gas natural ha sido suspendido en virtud de que los empleados

mineros no pudieron realizar los pagos oportunos. Esto ocasionó que la

empresa argumentara no poder prestar por más tiempo el servicio.

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4.- El agua es una necesidad humana, de acuerdo con la Declaración Universal

de los Derechos Humanos.

El acceso al agua es considerado un derecho humano, ya que forma parte de

las garantías indispensables para asegurar un nivel de vida adecuada, en

particular porque es una de las condiciones fundamentales para la

supervivencia humana.

Declaración Universal De Los Derechos Humanos

Artículo 22.

Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho

a la seguridad social, y a obtener, mediante el esfuerzo

nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de la

organización y los recursos de cada Estado, la satisfacción de

los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables

a su dignidad y al libre desarrollo de su personalidad.

Artículo 25.

1. Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado

que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar,

y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la

asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene

asimismo derecho a los seguros en caso de desempleo,

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enfermedad, invalidez, viudez, vejez u otros casos de pérdida

de sus medios de subsistencia por circunstancias

independientes de su voluntad.

El agua potable es un recurso vital para el ser humano y el derecho al agua

potable y al saneamiento, forma parte integrante de los derechos humanos

oficialmente reconocidos en los diferentes eventos internacionales. Es esencial

e imprescindible para que la vida misma sea posible sobre la faz de la tierra, es

mucho más que un bien, que un recurso, que una mercancía; el agua potable es

concretamente un derecho humano de primer orden y un elemento esencial

de la propia soberanía nacional.

Los gobiernos deben abstenerse de tomar cualquier medida que impida a la

población satisfacer estos derechos. A veces, para respetarlos, basta que el

Gobierno se abstenga de realizar ciertas prácticas, como, por ejemplo,

permitir que las empresas estatales o privadas, interfieran con las fuentes de

abastecimiento de agua para el consumo humano.

Las violaciones de la obligación de respetar, se desprenden de la interferencia

del Estado con el derecho al agua. Estas violaciones incluyen, entre otras cosas:

1) La interrupción o desconexión arbitraria o

injustificada de los servicios o instalaciones de agua;

2) Los aumentos desproporcionados o discriminatorios

del precio del agua; y

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3) La contaminación y disminución de los recursos de

agua en detrimento de la salud del humano.

En los casos en los que no se pueda evitar la interferencia, los gobiernos están

obligados a dar información completa a la población y a consultar a las

autoridades. Nadie debe carecer de agua.

Los gobiernos deben prevenir toda posible violación a los derechos, no

solamente de sus agentes sino de terceras partes, como son: consorcios,

empresas, grupos multinacionales, etcétera.

Las violaciones de la obligación de proteger, dimanan del hecho, de que un

Estado no adopta todas las medidas necesarias para proteger, dentro de su

jurisdicción, a las personas contra las violaciones del derecho al agua por

terceros. Estas violaciones incluyen, entre otras cosas:

No promulgar o hacer cumplir leyes que tengan por objeto evitar la contaminación y

la extracción no equitativa del agua.

No regular y controlar eficazmente los servicios de suministro de agua.

El derecho al agua está ligado con los más altos niveles de derechos como

acceso a la salud, derecho a una vivienda y derecho a una alimentación

adecuada.

En el ámbito internacional México es parte de uno de los tratados que

implícitamente establece el derecho al agua como un derecho humano.

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Hablamos del PACTO INTERNACIONAL DE DERECHOS

ECONÓMICOS, SOCIALES Y CULTURALES que en sus artículos 11 y

12 reconoce el derecho de toda persona a un nivel de vida adecuado y al

disfrute del más alto nivel posible de salud física y mental.

Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales

y Culturales

Artículo 11

1. Los Estados Partes en el presente Pacto reconocen el derecho

de toda persona a un nivel de vida adecuado para sí y su

familia, incluso alimentación, vestido y vivienda adecuados, y a

una mejora continua de las condiciones de existencia. Los

Estados Partes tomarán medidas apropiadas para asegurar la

efectividad de este derecho, reconociendo a este efecto la

importancia esencial de la cooperación internacional fundada en

el libre consentimiento.

Artículo 12

1. Los Estados Partes en el presente Pacto reconocen el derecho

de toda persona al disfrute del más alto nivel posible de salud

física y mental.

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2. Entre las medidas que deberán adoptar los Estados Partes en

el Pacto a fin de asegurar la plena efectividad de este derecho,

figurarán las necesarias para:

a) La reducción de la mortinatalidad y de la mortalidad infantil,

y el sano desarrollo de los niños;

b) El mejoramiento en todos sus aspectos de la higiene del

trabajo y del medio ambiente;

c) La prevención y el tratamiento de las enfermedades

epidémicas, endémicas, profesionales y de otra índole, y la lucha

contra ellas;

d) La creación de condiciones que aseguren a todos asistencia

médica y servicios médicos en caso de enfermedad.

La referencia que en el párrafo 1 del artículo 12 del Pacto de referencia, se

hace al “más alto nivel posible de salud física y mental” por lo que se entiende

que no se limita al derecho de atención a la salud. Por el contrario reconoce

que el Derecho a la Salud abarca una amplia gama de factores socioeconómico

que promueven las condiciones a las cuales las personas pueden llevar una vida

sana y hace ese derecho extensivo a los factores determinantes básicos de la

salud, como la alimentación y la nutrición, la vivienda, el acceso al agua potable

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y a condiciones sanitarias adecuadas, esto según lo establecido por la Oficina

del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU.

Conforme a lo señalado con anterioridad las características del derecho al

agua son tres:

a) La disponibilidad, por la cual el abastecimiento de agua de cada persona

debe ser continuo y suficiente para los usos personales y domésticos.

b) La calidad, que significa que el agua necesaria para cada uso personal o

doméstico debe ser salubre, y por lo tanto, no ha de contener

microorganismos o sustancias que puedan constituir una amenaza para la

salud de las personas.

c) La accesibilidad, en la que el agua, las instalaciones y los servicios de agua

deben ser accesibles a todos en sus diversos aspectos: físico, económico, sin

discriminación alguna e informado.

Los habitantes de Cananea no pueden acceder de manera integral al servicio

de agua potable porque la empresa minera subsidiaba en parte el costo

generado por el consumo de energía eléctrica de los pozos de conducción

hacia la población.

En Cananea, Sonora las autoridades han venido incumpliendo de manera

sistemática con su obligación de proveer en tiempo y forma, de este servicio

vital a los habitantes y por lo consiguiente violando los derechos

fundamentales.

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5.- En materia de salud, se debe advertir que el Hospital del Ronquillo, y la

clínica obrera, en donde se atendía a gran parte de la población fueron cerrado

en virtud del conflicto social existente, vulnerando el derecho de acceso a la

salud a miles de cananenses. Se puntualiza de igual manera que los trabajadores

de la mina, no se encuentran afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social,

por lo que se encuentran sin servicio médico, siendo de conocimiento de la

población el creciente número de enfermedades degenerativas, crónicas,

incluso de cáncer que padecen los habitantes de Cananea, Sonora.

El derecho a la salud conceptuado en diversas declaraciones e instrumentos

internacionales como en la Declaración Universal de los Derechos Humanos,

señala: “ Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure,

así como a su familia la salud y el bienestar la alimentación, el vestido, la vivienda, la

asistencia médica y los servicios sociales necesarios”.

6.- Con la más plena y meridiana claridad, se observa que en virtud del

conflicto que se vive en el Municipio de Cananea se han afectado los derechos

sociales fundamentales de la comunidad, con lo cual no se cumple la exigencia

de que los derechos sociales y económicos, descritos en las normas

constitucionales, sean accesibles y disfrutables.

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Los derechos sociales son normas, por lo tanto significa que son reglas,

principios o directrices que contemplan una acción positiva, en este caso una

prestación de bienes y servicios, por parte del Gobierno. Estos derechos

tienen un papel relevante en un sistema jurídico cuando la prestación que

imponen al Estado es considerada fundamental y, en esa medida, forman parte

de la Constitución, por lo que constituyen acciones prioritarias de gobierno

que no se vienen cumpliendo en la población de referencia.

Los descalabros mencionados con antelación, en detrimento y violación de los

derechos humanos de los habitantes y pobladores de Cananea y centros de

población aledaños, son consecuencia de la negligencia u omisión por parte de

la Secretaria de Economía; quien no ha actuado eficientemente en el ejercicio

de sus facultades de verificación que le confiere la Ley Minera, en particular

con la concesión de la mina de cobre Mexicana de Cananea a la empresa

Minera México, S. A. de C. V., subsidiaria del Grupo México, que con claridad

manifiesta incurre en el supuesto contemplado en el artículo 55 fracción XIII

de la Ley Minera, al no contar con la capacidad para ser titular de la concesión

en comento, provocando por más de 2 años una constante violación a los

derechos humanos al pueblo de Cananea, Sonora.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social, por su parte, en una franca

manifestación de incapacidad conciliatoria o negligencia por omisión, al no

poder dar solución al conflicto laboral en un período de ya más de 28 meses,

con las consecuencias trágicas y lamentables que se vienen expresando en la

presente queja, ha incurrido en violación de los derechos humanos relativos al

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trabajo digno, tutelados universalmente, además, violando lo establecido en el

artículo 123 de nuestra Carta Magna, el cual establece que “Toda persona tiene

derecho al trabajo digno y socialmente útil, al efecto se promoverán la creación de

empleos y la organización para el trabajo”, lo que evidentemente esta

Dependencia, no ha cumplido, en cuanto al Municipio y la región de Cananea,

Sonora, en ninguno de los elementos antes descritos, provocando la

desarticulación social y la constante violación de los más mínimos derechos

sociales consagrados en la Constitución, que ya se han descrito ampliamente

en el cuerpo de la presente queja.

En este mismo tenor, la Secretaría de Gobernación no ha cumplido con sus

atribuciones conferidas en la Ley Orgánica de la Administración Pública

Federal que en su artículo 27 fracción XIII, señala a la letra lo siguiente: “Vigilar

el cumplimiento de los preceptos constitucionales por parte de las autoridades del

país, especialmente en lo que se refiere a las garantías individuales y dictar las

medidas administrativas necesarias para tal efecto” y también con lo establecido

en la fracción XXX del mismo precepto jurídico que menciona lo siguiente :

”Contribuir en lo que corresponda al Ejecutivo de la Unión, a dar sustento a la

unidad nacional, a preservar la cohesión social y a fortalecer las instituciones de

gobierno”, por lo que la falta de cumplimiento al servicio que por ley le ha sido

encomendado y su notaria abstención y deficiencia en el ejercicio de sus

funciones ha causado la constante violación de los derechos humanos que

tutelan a la seguridad social y la obtención de la satisfacción de los derechos

económicos, sociales y culturales en Cananea, Sonora.

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7.- Como corolario de las anteriores consideraciones es necesario tomar en

cuenta que en 1968, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales

y Culturales (PIDESC), contempla la realización paulatina de los derechos y

tiene en cuenta las restricciones derivadas de las limitaciones de los recursos

existentes, aunque impone obligaciones de efecto inmediato, como la que

señala, que estos derechos se ejerzan sin discriminación y que se adopten

medidas dentro de un plazo razonablemente breve. De acuerdo con los

Principios de Limburgo (21 y 23), "La obligación de alcanzar el logro

progresivo de la completa aplicación de los derechos exige que los Estados

actúen tan rápidamente como les sea posible en esa dirección". Esto implica

que los Estados, no pueden diferir indefinidamente los esfuerzos necesarios

para completar la realización de estos derechos. De esta manera, los tratados

de derechos humanos imponen a los Estados no sólo obligaciones de

resultado, sino también, y con mayor énfasis, obligaciones de conducta, que

deben traducirse en leyes, políticas y programas para lograr que la población

tenga estándares de vida dignos.

Desde esta estudiada y muy bien ponderada óptica, ya reconocida por las

naciones y por el conjunto de organizaciones civiles de Derechos Humanos, la

Comisión Nacional de Derechos Humanos que Usted Preside, debe en

estricto sentido de garantes de los derechos humanos, ya que a todas luces

resulta necesario e inminente, emitir una recomendación a las autoridades

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señaladas como responsables, cuyo alcance comprenda el cese inmediato de

las violaciones a los Derechos Humanos de los cananenses y de los habitantes

de esa región y la garantía de que no vuelvan a presentarse estos hechos.

8.- El acceso al agua potable, a la salud, a un trabajo digno, a una situación

económica con acceso a satisfactores fundamentales y a la tutela de la

integridad física y mental, en los términos que marcan los estatutos, convenios,

tratados, declaraciones y doctrina en materia de Derechos Esenciales, tanto en

el ámbito doméstico o nacional, como en la competencia internacional son

derechos que en Cananea no son cumplimentados por quienes están obligados

a hacerlo, sino todo lo contrario, toda vez que allá en aquel mineral, el acceso

pleno al agua potable se encuentra condicionada a factores externos como lo

son entre otros el subsidio que la empresa minera “Mexicana de Cananea S.A.

de C.V.” otorgaba para cubrir el costo por el consumo de energía eléctrica

generado por los pozos de conducción hacia la ciudad; tampoco el acceso a la

salud se encuentra satisfecho pues dos hospitales han cerrado operaciones en

Cananea: el Hospital del Ronquillo y la Clínica Obrera, que daban atención a

los trabajadores de la mina y han sido sustituidos parcialmente por un centro

de salud que ni cercanamente ofrece la atención que ahí se brindaba. Esto

aunado a que los habitantes que no contaban con seguridad social fueron

afectados por la depresión de la economía en la región y han disminuido su

capacidad de atención médica; los cananenses no se encuentran en posibilidad

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de optar por un trabajo digno porque las fuentes de empleo están agotadas ya

que la economía de la región y de Cananea en específico, gira alrededor de la

actividad de extracción de minerales por la empresa citada; la tranquilidad de

saberse seguros en su entorno se ha esfumado para los habitantes de la

población minera, pues con la problemática económica que provocó el cierre

de operaciones de la mina, muchos empleos indirectos se perdieron,

provocando la migración de hombres mujeres y jóvenes hacia Estados Unidos,

otras partes de la Entidad y el país incluso, con la consecuente desintegración

familiar y el abandono de estudios en algunos casos, con el fin de buscar el

sustento familiar, a su vez provocando la sensación de malestar y zozobra en

los habitantes. Es decir, prevalece en Cananea la falta de integridad física y

mental mínima que todos debemos poseer.

9.- Los elementos vertidos en el párrafo que antecede describen con claridad

la trágica y muy lamentable situación para los habitantes de Cananea; y

merecería, de manera sumaria y expedita una recomendación del Honorable

Organismo defensor de los Derechos Humanos en nuestro país, para que las

autoridades implementaran de inmediato las acciones requeridas.

Es menester sin embargo, cumplimentar la normatividad aplicable,

por lo que con carácter urgente y como petición especial, se solicita

de manera respetuosa a esa Presidencia, se sirva designar de

manera inmediata a un visitador que corrobore los hechos descritos

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en la presente queja, mediante su presencia física en el Municipio en

cuestión.

10.- El Gobierno Federal tiene una obligación de hacer, es decir, brindar las

prestaciones positivas, como es el caso de acceso a los servicios de salud y

empleo, por lo que el Ejecutivo, a través de las Secretarías competentes, en

este caso las Secretarías de Economía, Salud y del Trabajo y Previsión Social y

Gobernación, tienen la obligación de llevar a cabo las acciones y erogar los

recursos necesarios para cumplir con las prestaciones que se le exigen

constitucionalmente, las cuales al no llevarse a cabo, producen afectación

negativa de la garantía de la sociedad a que se respeten a cabalidad estos

Derechos Humanos.

En este mismo orden de ideas, la obligación de proteger los derechos sociales

entendiendo a estos como Derechos Humanos de segunda generación, más

nunca de segundo nivel, incluye también la obligación de prevenir que las

personas resulten de una u otra manera privadas de acceso al agua potable,

trabajo y al gas por citar solo unos ejemplos, por lo que resultaba lógico,

imprescindible e imperativo que el Gobierno Federal a través de sus

Secretarías promoviera un programa especial de reactivación económica

integral para el municipio y región de Cananea, Sonora, con lo cual se

garantizaría de dotación de servicios básicos a los habitantes de dicha ciudad.

Nunca se llevaron a cabo estas acciones por negligencia, omisión o falta de

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capacidad, consintiendo de esta manera la constante violación de los Derechos

Humanos, en Cananea, Sonora.

Resulta necesario por lo tanto, que de manera urgente se tomen las medidas

correspondientes, conforme a las atribuciones que la Ley otorga a esa

Comisión a su digno cargo, para que se contribuya a resolver la problemática

social y de constante violación de los Derechos Humanos que se está

padeciendo en la comunidad de Cananea, Sonora.

Por la serie de hechos y argumentaciones anteriormente expuestas,

respetuosamente se solicita de esa Honorable Comisión Nacional de

Derechos Humanos, provea lo siguiente:

PRIMERO.- Se admita la presente queja para los efectos

legales correspondientes.

SEGUNDO.- Se conceda la petición especial descrita en el

punto número 9 de la presente queja y designe de manera

inmediata un visitador autorizado por ese organismo, con la

finalidad de confirmar los hechos narrados en el texto de la

presente queja y que se lleve a cabo la investigación

correspondiente, conforme a las atribuciones que confiere a esa

Comisión, la ley de la materia.

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TERCERO.- Se tengan señaladas como autoridades

responsables a la Secretaría de Gobernación, Secretaría de

Economía, Secretaría de Salud, Secretaría del Trabajo y

Previsión Social y las demás que resulten responsables, por el

conflicto social en Cananea y su constante violación a los

Derechos Humanos.

CUARTO.- Se emita Recomendación por la Comisión

Nacional de los Derechos Humanos, en contra las autoridades

responsables, conforme a lo dispuesto en la Constitución

Política de los Estados Unidos Mexicanos y la Ley de la

Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

A T E N T A M E N T E

México, Distrito Federal, a 25 de noviembre de 2009

Dip. Carlos Samuel Moreno Terán

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