RE#27 por Estefanía Santiago de Ficción

14
#27 por Estefanía Santiago año 02 Ficción de Julia Sbriller En Fetiche

description

Reseña de "Ficción" por Estefanía Santiago de Julia Sbriller en Fetiche, Calle 41 n613. La Plata, Viernes 28 de Febrero, 2014

Transcript of RE#27 por Estefanía Santiago de Ficción

#27 por Estefanía Santiagoa

ño

02 Ficción

de Julia SbrillerEn Fetiche

Ficciónde Julia SbrillerViernes 28 de febrero de 2014En Fetiche - 41 #613 e/ 7 y 8

Reseña por Estefanía SantiagoArtista visual, realizadora y co-directora en Bosquehttps://www.facebook.com/somosbosque

“El instante donde esa confianza se

capturó, y que como espectadores,

sentimos esa verdad entrándonos por

los poros. Lo genuino del otro”

03

04

Desde la intervención fotográfica en espacios urbanos hasta la danza, Julia Sbriller experimenta y desarrolla un camino artístico salpicado de invenciones.

Es una artista heterogénea, que nos ofrece un abanico de posibilidades para conocer su universo.

Arquitecta creadora, sus imágenes nos hablan y nos muestran lugares nuevos, llenos de historia. Nos introducimos en las flores, en casas cálidas, jardines, personas y como impulso raíz, con sus series fotográficas nos traslada a su querido sur y desde la importancia del paisaje, lo agrega a nuestra rutina de diagonales.

FICCIÓN (Onda verde vs Sala de espera) bien podría ser una invitación a ver en profundidad 365 días de una persona que no se detiene pero que guarda paciencia, que crece y ríe entre lo urbano y lo natural, que ama y

#27por Estefanía Santiago

UN VIAJE ETERNO

05

06

comparte. Una obra que trasciende la poética para volverse más cercana y tangible. Pero no porque la poética no sea cercana, sino porque a través de esta obra presenciamos un día a día vivido, una poética a modo de registro documental, esa que guarda la belleza del cotidiano, aunque el titulo de la obra se presente como una ficción.

Siendo uno de los últimos trabajos de Julia, FICCIÓN es la muestra que se inauguró en Fetiche el viernes 28 de febrero. Cuando llegue, lo primero que pensé al ver la obra a lo lejos, es que allí me esperaba un año entero lleno de vida sobre una pared.

La obra es un conjunto de muchas fotografías (más de 100) de pequeño formato, agrupadas de manera rectangular, creando una ventana hacia muchos momentos de la artista, su cotidiano y un mundo descontracturado. Nos muestra intimidades, momentos distendidos y jocosos de su entorno y de ella misma, como así también, momentos de introspección.

Fiel a su estética, esta obra de Julia tiene dos particularidades a destacar. Una de ellas es la forma en la que fueron tomadas las fotografías (cámara pocket con flash) y lo que nos muestran las mismas (espacios habituales y no tanto, entrecasa, amigos).

Esta propuesta nos aproxima a su contexto. Hay situaciones reconocibles, personas que quizás vimos alguna vez, lugares en los que hemos estado, y la herramienta utilizada ayuda a que nos familiaricemos más con lo que vemos.

El flash en la noche, los planos detalles de comida y objetos personales de alguien, y mobiliarios bizarros, son los que construyen el lado distendido de este cotidiano.

La belleza la transmiten todas las personas participantes de esta inmensa montaña de registros. Se puede sentir el amor y la entrega total hacia cámara, hacia Julia. El instante donde esa confianza se capturó, y que como espectadores, sentimos esa verdad entrándonos por los poros. Lo genuino del otro.

El montaje es la segunda particularidad de esta obra. Como frames atemporales, las fotografías nos esperan sin ningún orden obligatorio de recorrido y podemos comenzar a verlas desde cualquier rinconcito del rectángulo que

forman.Si recorremos una a una las fotos dedicándole tiempo hasta el final, creemos

haberlo visto todo, pero al mirar hacia otro lado y volver, encontramos imágenes que no vimos o que creemos no haber visto y nos detenemos a observarlas. Creamos un vínculo entre una imagen y la que está al lado, entre esa y la que está abajo y así, muchos caminos, muchas historias posibles.

A partir de acá, es donde creo que entra en juego el nombre de la obra. Ficción es la construcción de ese mural, es esa realidad particionada que aunque nos sea cercana, no es nuestra, es de otros. Es un registro tan íntimo, que por momentos nos identifica y por momentos se vuelve extraño. El orden de lectura es tan aleatorio, que podemos hacer infinitas sinopsis. Sin embargo, el cotidiano es la obra, aunque no deje de ser una construcción del artista y de cada uno de los espectadores.

365 días, dos años, una década, no importa. La obra es un mundo que late, la necesidad de estampar existencia. Encontrarnos con algo que nos identifica y que nos permite tejer y desarmar posibles relatos, es algo que nos alivia.

Ficción pero aún así, real, es un viaje eterno que la artista nos invita a transitar.

“Pero ¿cómo medir o comparar esas relaciones? Nunca se examina o se

cuestiona la cualidad de las relaciones de la ‘estética relacional”

07

08

1