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UNIVERSIDAD DE LOS ANDES Reorganización de los clubes profesionales de fútbol en Colombia: ¿se encontró el modelo del éxito en las sociedades anónimas de la Ley 1445 del 2011? Nicolás Villegas L – Juan Manuel Trujillo R Investigación Dirigida 21/11/2016 Carlos González Puche

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UNIVERSIDAD DE LOS ANDES

Reorganización de los clubes

profesionales de fútbol en

Colombia: ¿se encontró el

modelo del éxito en las

sociedades anónimas de la Ley

1445 del 2011?

Nicolás Villegas L – Juan Manuel Trujillo R

Investigación Dirigida

21/11/2016

Carlos González Puche

1

RESUMEN

Este proyecto busca revisar la normatividad que ha regulado la organización y el

funcionamiento de los clubes de fútbol en Colombia, para entender la transición que

realizaron estos clubes profesionales de fútbol en Colombia, pasando del modelo de las

entidades sin ánimo de lucro al de las sociedades anónimas luego de la promulgación de la

Ley 1445 de 2011. Así, la pregunta que será el eje de la investigación es: ¿Qué cambios

normativos se generaron a través de la Ley 1445 del 2011 que provocaron una transición

masiva de los clubes de fútbol organizados como entidades sin ánimo de lucro a sociedades

anónimas y que han generado un cambio importante en las finanzas de estos organismos?

Ante esta incógnita, se piensa que la entrada en vigencia de la ley ayudó a una mejor

organización de los clubes a través de disposiciones que obligan a estos a cumplir con una

serie de requisitos y a rendirle cuentas a varias entidades estatales. Lo anterior deja claro

entonces que los conceptos claves dentro del texto serán los clubes de fútbol, las entidades

sin ánimo de lucro y las sociedades anónimas dentro del fútbol; que han permitido que los

clubes se gestionen como empresas competitivas y responsables. Finalmente, la metodología

integrará la revisión de las diferentes normas que han regulado la materia.

PALABRAS CLAVES

Clubes profesionales de fútbol - Entidades sin ánimo de lucro – Sociedades anónimas

Professional football clubs – Non-profit associations – Anonymous Company

2

TABLA CONTENIDO

INTRODUCCIÓN……………………………………………………………………….....4

PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN Y PREGUNTAS

AUXILIARES………............................................................................................................6

HIPÓTESIS…………………………………………………………………………...........7

OBJETIVOS…………………………………………………………………………..........8

i. General……………………………………………………………………………...8

ii. Específicos……………………………………………………………………..........8

METODOLOGÍA………………………………………………………………………….9

REVISIÓN DE NORMAS HISTORICAS SOBRE LA MATERIA…………………10

I. BLOQUE I: NORMATIVIDAD Y FUNCIONAMIENTO DE LOS CLUBES EN

LOS OCHENTAS…………………………………………………………………….10

i. Decreto 2845 de 1984 – noviembre 23…………………………………………...10

ii. Decreto 3158 de 1984 – diciembre 28……………………………………………14

iii. Decreto 380 de 1985 – febrero 8………………………………………………….15

iv. Decreto 1057 de 1985 – abril 15………………………………………………….17

II. BLOQUE II: CONSTITUCIÓN DE 1991 E INTRODUCCIÓN DE LAS

SOCIEDADES ANÓNIMAS……………………………………………………………..20

i. Ley 181 de 1995 – enero 18……………………………………………………….20

ii. Decreto 1228 de 1995 – julio 18…………………………………………………..24

iii. Decreto 776 de 1996 – abril 29…………………………………………………...26

3

iv. Sentencia C- 320 de 1997…………………………………………………………29

III. BLOQUE III: NACIMIENTO DE ACOLFUTPRO Y LEY 1445 DE 2011….32

i. Circular Externa No.000001 de marzo 11 de 2010……………………………..32

ii. Ley 1445 de 2011 – mayo 12……………………………………………………...33

iii. Circular Externa Conjunta Coldeportes No. 001 de 23 de mayo de 2011 y

Superintendencia de Sociedades No. 100-000003 de 23 de mayo de 2011……………..41

iv. Circular Externa No. 000010 de octubre 26 de 2011……………………………42

v. Sentencia C-287 de 2012………………………………………………………….43

vi. Circular Externa No. 000001 de enero 23 de 2013……………………………...46

vii. Circular Externa No.000002 de julio 16 de 2013………………………………..46

ANÁLISIS…………………………………………………………………………………48

I. Normas…………………………………………………………...………..48

II. INFORMES DE LA SUPERINTENDENCIA DE SOCIEDADES…....49

- Caso Club Deportivo los Millonarios (Azul y Blanco S.A.)……..……….…58

CONCLUSIONES………………………………………………………………………...61

BIBLIOGRAFÍA………………………………………………………………………….66

ANEXO 1………………………………………………………………………………….69

4

INTRODUCCIÓN

Los clubes de fútbol, como las entidades básicas dentro de la industria del fútbol y como

empresas, deben ser regulados. Este proyecto busca entonces revisar la gran transición que

realizaron los clubes profesionales de fútbol en Colombia, pasando del modelo de las

entidades sin ánimo de lucro al de las sociedades anónimas luego de la promulgación de la

Ley 1445 de 2011. Esto último, dado que el modelo original de asociaciones o corporaciones

sin ánimo de lucro no fue efectivo para desarrollar a los clubes como verdaderas empresas

deportivas y prevenir y controlar el ingreso de personas y recursos vinculados con el

narcotráfico, lo que generó financiación con recursos provenientes de actividades ilícitas y,

por consiguiente, permitió que el fútbol profesional no tuviera un desarrollo acorde con los

propósitos de transparencia, democracia y ética de las prácticas empresariales.

El propósito de adentrarnos en esta temática no es otro distinto que revisar y analizar la

normativa deportiva que permitió estas malas prácticas y comparar lo que se presentaba en

los equipos hasta antes de que fuera promulgada esta ley. También se tiene el propósito de

verificar si las modificaciones introducidas han sido benéficas para el desarrollo del futbol

profesional. En Colombia, el estudio del tema planteado, no ha sido directamente reflejado

en investigaciones profundas que aporten a revelar tanto las medidas positivas como las

falencias en este campo normativo. Por esta razón, sacaremos a la luz los beneficios y los

obstáculos de la ley y el reflejo de su aplicación en la práctica. Finalmente, otro de los logros

que se quiere alcanzar con este trabajo es el de generar conocimiento sobre la gestión de los

clubes profesionales de fútbol.

Planteado lo anterior, la pregunta que será el eje de la investigación es: ¿Qué cambios

normativos se generaron a través de la Ley 1445 del 2011 que provocaron una transición

masiva de los clubes de fútbol organizados como entidades sin ánimo de lucro a sociedades

anónimas y que han generado un cambio importante en las finanzas de estos organismos?

Ante esta incógnita, el objetivo es verificar si la entrada en vigencia de la ley, antes

mencionada, ayudó a una mejor organización de los clubes a través de herramientas que les

5

permiten a dichas instituciones contar con un patrimonio real y tener la posibilidad de asumir

sus pasivos, además de contar con la supervisión de varias entidades como la

Superintendencia de Sociedades.

6

PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN Y PREGUNTAS AUXILIARES

Con todo el problema planteado, la pregunta a tratar durante este proyecto de grado

será la siguiente: ¿Qué cambios normativos se generaron a través de la Ley 1445 del 2011

que provocaron una transición masiva de los clubes de fútbol organizados como entidades

sin ánimo de lucro a sociedades anónimas y que han generado un cambio importante en las

finanzas de estos organismos?

Como preguntas de apoyo a la pregunta de investigación central, se pueden formular

las siguientes:

- ¿Qué normas han regulado la organización de los clubes de fútbol en Colombia y qué

disposiciones son relevantes en cada una?

- ¿Cómo funcionaban los clubes organizados como asociaciones/corporaciones sin ánimo de

lucro en Colombia antes de la Ley 1445 del 2011?

- ¿Cómo funcionan las sociedades anónimas deportivas en Colombia? ¿Qué elementos

diferencian a una sociedad anónima deportiva de una sociedad anónima comercial?

- ¿Qué mecanismos contenidos en la Ley 1445 de 2011 han favorecido la inversión en los

clubes con deportistas profesionales?

- ¿Qué requisitos debe cumplir un club de fútbol para recibir reconocimiento deportivo?

¿Existe diferencia si el club de fútbol se encuentra constituido en asociaciones o

corporaciones sin ánimo de lucro o en sociedades anónimas?

7

HIPÓTESIS

La entrada en vigencia de la Ley 1445 de 2011 sí ayudó a una mejor organización de los

clubes al permitir la conversión de las entidades sin ánimo de lucro en sociedades anónimas

e introducir mecanismos de control y obligaciones que les obligan a los clubes deportivos a

operar con patrimonios verdaderos y suficientes para cumplir con las obligaciones laborales

y fiscales. Así, esta Ley permitió establecer controles para verificar la contabilidad de los

clubes y comprobar que con esos recursos se cumplan los objetivos para los cuales han sido

constituidos y brindar la transparencia en el negocio para las diferentes personas interesadas

como accionistas, jugadores de fútbol, acreedores y las entidades que se encargan de

inspeccionar, vigilar y sancionar a estos organismos. También, la Ley ha sido fundamental

para ayudar a los clubes a tener un mayor equilibrio económico, lo que ha permitido

estabilizar su situación financiera y generar utilidades en los últimos años. Esta condición ha

facilitado que los clubes consigan más recursos provenientes de los derechos de televisión,

competencias internacionales y patrocinadores, en la medida en que se puede determinar

cómo operan estas empresas deportivas. Finalmente, y como punto negativo, la Ley aún se

queda corta al no hacer referencia a algunos aspectos, como por ejemplo aspectos tributarios,

en donde los clubes no tienen tarifas diferenciadas ni ningún tratamiento especial, al

desarrollar una actividad desde lo privado de interés público y de gran impacto social.

8

OBJETIVOS

General:

- Identificar los cambios normativos que se generaron a través de la Ley 1445 del 2011 que

provocaron una transición masiva de los clubes de fútbol organizados como entidades sin

ánimo de lucro a sociedades anónimas y que han generado un cambio importante en las

finanzas de estos organismos.

Específicos:

1- Identificar las normas que han regulado la organización de los clubes de fútbol en

Colombia y que disposiciones son relevantes en cada una de ellas.

2- Identificar la forma en la que funcionaban los clubes organizados como

asociaciones/corporaciones sin ánimo de lucro en Colombia antes de la Ley 1445 del 2011.

3- Identificar las disposiciones principales de la Ley 1445 del 2011 y localizar los puntos en

común con las anteriores leyes y decretos que regularon la materia.

4- Identificar las diferencias entre una sociedad anónima deportiva y una sociedad anónima

comercial.

5. Identificar los mecanismos contenidos en la Ley 1445 de 2011 que han obligado a que los

clubes con deportistas profesionales cuenten con capital real y su patrimonio no siga estando

constituido por intangibles.

9

METODOLOGÍA

De manera general, se le dará respuesta al problema planteado usando una metodología en

donde no solo se va a tener en cuenta el análisis de las normas que regulan y que regularon

la materia, sino que se hará especial énfasis en la situación social, explicando sobre qué tanto

se ha cumplido la Ley 1445 de 2011 y sobre los efectos que ha tenido la misma (tocando

inclusive conceptos de eficacia y el cumplimiento de la norma). Se escoge esta metodología

ya que a través de ella va a ser posible contrastar lo que está plasmado en la norma versus lo

que tiene lugar en la práctica, evidenciado también en la doctrina.

Como técnicas de recolección de información se usará por un lado la revisión de las normas

que han regulado la materia y, por otro lado, el análisis documental, legal y doctrinario con

el objeto de explicar bien los conceptos y las reglas a las cuales han estado sujetos los clubes

de fútbol y la doctrina e informes elaborados por la Superintendencia de Sociedades.

10

REVISIÓN HISTÓRICA DE NORMAS SOBRE LA MATERIA

BLOQUE I: NORMATIVIDAD Y FUNCIONAMIENTO DE LOS CLUBES EN LOS

OCHENTAS

A. Decreto 2845 de 1984 – noviembre 23

En el año de 1984, el día 30 de abril, es asesinado el entonces Ministro de Justicia de

Colombia Rodrigo Lara Bonilla. Comenzamos la presentación de esta manera, puesto que

este exministro se destacó por ser uno de los primeros políticos, sino el primero, en combatir

y destapar el ingreso del narcotráfico tanto a la política como al fútbol. Este personaje destapó

los negocios de Pablo Escobar, así como los de otros narcotraficantes como Rodríguez Gacha

“El Mexicano” (quien sería dueño del Club Deportivo Los Millonarios, hoy Millonarios FC)

y los Rodríguez Orejuela (quienes estarían en cabeza del América de Cali). A partir de este

asesinato, la participación del narcotráfico en el fútbol fue denunciada y se inició por parte

del Gobierno Nacional el control y la expedición de normas y regulaciones especiales para

el negocio del futbol, pues ya era de público conocimiento que los dineros ilícitos estaban

financiando a los clubes deportivos. Esta situación hizo necesaria la expedición de normas

que impidieran que estas organizaciones se mantuvieran bajo el flagelo de personas y dineros

de dudosa reputación. Así pues, damos paso a un recuento y cronológico de la normatividad

que reguló la operación de los clubes desde el año 1984 hasta la actualidad.

Así, en el artículo 10 de este decreto se introduce la noción de los clubes deportivos1 como

organismos de derecho privado que cumplen funciones de interés público y cuyo objetivo es

fomentar la práctica de uno o varios deportes. Adicionalmente, la disposición es clara al

exigir como requisitos de conformación la personería jurídica (a la que también se refieren

los artículos 29 y 30 de esta norma) y el reconocimiento por parte de las Juntas

1 Clubes Profesionales: organismos de derecho privado que cumplen funciones de interés público y social, organizados

como corporaciones o asociaciones deportivas sin ánimo de lucro o sociedades anónimas (desde la ley 181 de 1995),

constituidos por personas naturales o jurídicas, para el fomento, patrocinio y práctica de uno o más deportes, con deportistas

bajo remuneración (Circular Externa No. 000002 Julio 16 de 2013 de Coldeportes).

11

Administradoras Seccionales de Deportes, de su jurisdicción. Partiendo de la definición

anterior, es claro que los clubes deportivos favorecen el interés público y no los intereses

particulares de sus asociados2. Por este motivo, desde el primer decreto con fuerza de ley, se

establece que los clubes solo podían operar como asociaciones o corporaciones sin ánimo de

lucro3 (en adelante “ASAL”) y no como sociedades mercantiles. Además, su reconocimiento

y personería jurídica se delegó en Coldeportes como mecanismo que creó el Estado para

verificar y controlar que estas instituciones cumplan con su objeto para poder participar en

actividades deportivas.

Más adelante, en el artículo 20, se determina que el deporte profesional es aquel que admite

como competidores a personas naturales bajo remuneración. La norma es esencial, debido a

que consagra a los jugadores de fútbol como la principal fuente de activos y pasivos para los

clubes deportivos. Los activos serán conformados, entre otros, por el pase y la transferencia

de los jugadores (derechos deportivos)4 trabajadores que fueron tratados como esclavos hasta

que se profirió la sentencia C-320 de 1997. De otro lado, en cuanto a los pasivos, la obligación

principal de los clubes era la remuneración de sus jugadores y el pago de los aportes de la

seguridad social y de retenciones en la fuente. Adicionalmente, el artículo 21, estableció que

las transferencias de deportistas no podrán coartar la libertad de trabajo de estos. De igual

manera, se agrega que la situación laboral del deportista debería ser resuelta en un máximo

de 30 días, contados a partir de la fecha de terminación de su contrato.

Lo anterior es un intento fallido para proteger la libertad de trabajo de los deportistas, toda

vez que los únicos que pueden poseer los pases y realizar las transferencias son los clubes

2 Asociados o Aportantes: son aquellas personas naturales o jurídicas que poseen derechos o aportes en un club profesional

organizados como corporación o asociación sin ánimo de lucro (Circular Externa No. 000002 Julio 16 de 2013 de

Coldeportes).

3 Asociación o Corporación: son dos (2) de las formas asociativas que escogen los clubes profesionales para su

constitución, las cuales tienen como características fundamentales que sus asociados persiguen como fin común fomentar,

patrocinar y organizar la práctica del deporte sin ánimo de lucro, y que lo que pertenece a una corporación o asociación, no

pertenece ni en todo ni en parte a ninguno de los individuos que la componen. Su actividad se rige por lo dispuesto en el

Código Civil (Circular Externa No. 000002 Julio 16 de 2013 de Coldeportes).

4 Derechos Deportivos (desde la Ley 181 de 1995): son los derechos patrimoniales que se poseen sobre la prestación

exclusiva de la actividad deportiva de los futbolistas (Sentencia T-498 de 1994). Antes se les conocía como el pase de los

jugadores.

12

deportivos, como personas jurídicas. Así, los deportistas se cosifican, para convertirse en

activos fijos de estas entidades y esto iba de la mano con el desconocimiento de los derechos

de trabajo del individuo. De esta forma, se pone de manifiesto que las relaciones laborales

entre los clubes y los jugadores eran absolutamente desiguales, en las que los clubes podían

disponer libremente de sus deportistas y se podían tomar cualquier cantidad de tiempo en

definir la situación laboral de estos, vendiéndolos y prestándolos como si fueran objetos y no

sujetos de derechos.

Ahora bien, el artículo 22, está compuesto de dos incisos. El primero de ellos, como se

mencionó anteriormente establece que los clubes deberán organizarse como ASAL. En

cuanto el segundo inciso, este versa sobre la prohibición para las personas naturales (y sus

parientes) y para las personas jurídicas de poseer más del 20% de acciones de estos clubes.

Entrando analizar lo planteado, se notan tres particularidades. La primera es el intento del

Estado de reducir la participación masiva de personas dedicadas a negocios ilícitos (en

adelante “PNI”), es decir, personas como narcotraficantes, personas que lavan activos y/o

terroristas. Así cualquier PNI, interesada en ser socia de un club, solo podía en principio,

adquirir hasta el 20% del mismo. La segunda, está dirigida a prohibir que el 20% no se

concentre solamente en la persona natural, sino también a sus parientes (por consanguinidad,

afinidad o grado civil). El objetivo de esto fue evitar el testaferrato, es decir que una PNI

pudiera adquirir más del porcentaje permitido por la ley a través de sus familiares o sus

amistades. Sin embargo, en la realidad, esto no se cumplió ante la falta de una autoridad que

vigilara esta actividad. Lo anterior debido a que la autoridad que debía controlar estos temas

era Coldeportes, pero por decisiones da la Corte Suprema de Justicia se declaró la

inconstitucionalidad de la delegación por parte del presidente en la misma (punto que después

se revisará al detalle). Finalmente, la tercera, se refiere al desacierto del legislador al incluir

la posibilidad de que los clubes organizados como ASAL puedan emitirá y enajenar acciones,

teniendo claro que estas son características de las sociedades mercantiles. Esto último indica

que, a pesar de la restricción de organización de estos clubes en ASAL, se permitió que se

adoptaran prácticas no propias de una asociación o corporación.

13

Continuando con la siguiente disposición, el artículo 23, esta estableció la prohibición para

que las entidades públicas pudieran poseer derechos o acciones (se repite la incoherencia) en

los clubes. Esto, con el objeto de evitar que los clubes terminaran funcionando con recursos

públicos.

Por otro lado, el artículo 28 otorgó las facultades de inspección, vigilancia y control5 al

Gobierno Nacional, a través del Instituto Colombiano de la Juventud y el Deporte (en

adelante “Coldeportes”). Bajo lo dictado por esta disposición, se demuestra una voluntad del

gobierno nacional para regular las actividades o actuaciones de las corporaciones o

asociaciones deportivas. Sin embargo, luego de los fallos proferidos por la Corte Suprema de

Justicia en sentencias 1292 del 4 de Julio de 1985 y otras más; este artículo fue declarado

inexequible, por lo que las ASAL actuarían sin controles, ante la inexistencia de un

organismo especializado que las vigilara. Más adelante, se profundizará en el contenido y los

efectos de estas sentencias.

Finalmente, el artículo 31 establecía que la estructura con la que deben cumplir los

organismos deportivos debe ser: 1. De dirección, a través de la asamblea; 2. De

administración, mediante un comité ejecutivo o un presidente; 3. De control, con un fiscal y

su suplente y 4; De disciplina, mediante un tribunal deportivo. Estas disposiciones se van a

repetir en las normas que fueron expedidas posteriormente sobre esta materia, por lo que solo

cabe agregar que la gestión de los clubes se delegó en estos órganos sin ninguna

modificación.

5 Inspección, Vigilancia y Control (Coldeportes): atribución de Coldeportes respecto de cualquier organismo deportivo

que integre el Sistema Nacional del Deporte, dentro de los cuales se encuentran los clubes profesionales, para confirmar y

analizar de manera ocasional, la información que requiera sobre su situación jurídica, contable, económica y administrativa,

para ordenar los correctivos necesarios para subsanar una situación crítica de orden jurídico, contable, económico o

administrativo, y para velar de forma permanente que sus actuaciones se ajusten a la ley y a los estatutos, en su formación,

funcionamiento y desarrollo de su objeto social (Circular Externa No. 000002 Julio 16 de 2013 de Coldeportes).

14

B. Decreto 3158 de 1984 – diciembre 28

Esta nueva norma en su artículo primero estableció que, para efecto de su funcionamiento,

los clubes con deportistas profesionales, deberían tener un total de aportaciones no inferior a

mil veces (1.000) el salario mínimo más alto. La pretensión de lo anterior, radica en que los

clubes tengan un nivel de liquidez óptimo para el pago de sus obligaciones. Sin embargo,

este intento del legislador por generar dicha liquidez se quedó incompleto porque en ningún

momento se obligó a que los asociados de los clubes pagaran las aportaciones o cuotas de

afiliación correspondientes. A su vez el artículo 2, ordenó que estos mismos clubes no

podrían tener pasivos superiores a tres (3) veces el monto de sus aportaciones. Analizando

esta norma, lo que se buscó fue impedir que los clubes constituyeran pasivos que no pudieran

pagar teniendo como límite las aportaciones, que en la mayoría de los casos ni siquiera se

pagaron. En resumen, los clubes deportivos contraían deudas sin contar con capital y

patrimonio líquido para pagarlas. El mismo artículo, en el inciso dos, ordenó que los clubes

no podrán captar dineros provenientes del ahorro privado ni efectuar operaciones de mutuo

como prestamistas. Lo anterior, tiene el propósito de combatir el lavado de activos que

realizaban las PNI a través de los clubes que poseían. En la práctica, esto funcionaba de la

siguiente manera: una PNI realizaba un préstamo a un club deportivo sin necesidad de ser

socio utilizando dineros cuya proveniencia era ilícita, para una vez lavados a través de una

operación de mutuo, se legalizaban. Estos recursos se utilizaban para comprar jugadores.

El artículo tercero, explica el manejo de las transferencias de jugadores. Estas solo podrán

tener lugar entre clubes debidamente organizados y surtirán efecto luego de su inscripción

ante Coldeportes. Siguiendo lo anterior, se pretendía entonces, prohibir que otras personas

(naturales o jurídicas) diferentes a los clubes, pudieran disponer de los pases y las

transferencias de los jugadores. Esto último se complementa con la obligación de inscribir

dichas transferencias entre clubes en el registro de una entidad de control especializada

(Coldeportes).

Ahora bien, el artículo cuarto planteó los siguientes dos escenarios: a) para los clubes

organizados antes de este decreto, el número mínimo de socios era mil personas; y b) para

15

los clubes organizados después de la vigencia de esta norma, el número mínimo era de 250

personas, pero en este caso deberán completar mil asociados dentro de los dos (2) años

siguientes a su constitución. Los anteriores requisitos se establecieron pensando en que estos

números mínimos de personas serían suficientes, para pagar las aportaciones exigidas por el

artículo primero antes revisado. Esto implicaba que los mil socios se deben hacer cargo de

pagar mil veces el salario más alto. (1 socio = 1 salario). Sin embargo, y como se mencionó

anteriormente, no existía obligación alguna de pagar estos aportes. Por lo que es irrelevante

si se cumplía con el número de socios que exigía la ley.

Para finalizar, el artículo 5, volvió a otorgar las facultades de inspección, vigilancia y control

de los clubes a Coldeportes. Como novedad, le dio la posibilidad a Coldeportes de apoyarse

en la Superintendencia de Sociedades. Esta capacidad de control, inspección y vigilancia

sobre los clubes con deportistas profesionales más adelante, fue declarada inexequible por

las sentencias de la Corte Suprema de Justicia que consideraron inconstitucional que el

Presidente de la República delegara esta facultad en un organismo descentralizado del orden

nacional como lo era Coldeportes. Para este punto, vale la pena mencionar nuevamente la

equiparación que hacía el legislador entre las ASAL y las sociedades mercantiles, que se

refiere al reconocimiento a la Superintendencia de Sociedades como una entidad legitimada

para pronunciarse sobre las actividades de las corporaciones.

C. Decreto 380 de 1985 – febrero 8

Comenzando con el artículo 3 de este decreto, vemos que se ratificó lo planteado en el decreto

2845 de 1984, cuando estableció el reconocimiento deportivo como mecanismo creado por

el Estado para verificar y controlar las actividades de los organismos deportivos. Sin

embargo, vemos un ingrediente adicional en cuanto a que el reconocimiento se otorgaría

luego de una visita por parte de un funcionario de la Junta Administradora Seccional de

deportes y mediante la expedición de una resolución motivada (acto administrativo). En esta

visita, se debían comprobar los requisitos exigidos por esta norma especial entre los cuales

se destaca el verificar la existencia del patrimonio informado en la solicitud. Por otro lado,

16

el artículo cuarto plantea una descripción similar pero aplicable a la personería jurídica. Tanto

el reconocimiento como la personería jurídica, ya existía desde antes, pero este nuevo decreto

permite conocer las razones por las cuales se otorgaba a un club deportivo dicho

reconocimiento. Complementado lo anterior, el artículo noveno, se planteó que si a un club

se le suspende la personería jurídica por una causa que subsiste por más de un año, el club

deberá liquidarse. En principio lo dicho anteriormente resulta favorable porque representa

una sanción grave si los clubes incumplen con sus deberes. Sin embargo, en la realidad esto

no se cumplía por la carencia de una entidad que controle estas actividades, como se ha

mencionado anteriormente.

De otro lado, el artículo 16, establecía que cada afiliado tendría derecho a voz y a 1 voto en

las reuniones de la asamblea6 del club deportivo. Además, estableció que el voto no podía

ser delegado por las personas naturales. Esta disposición es de suma importancia puesto que

permitía que las decisiones se tomarán con base en la participación de todos los asociados y

no en unos pocos que la pudieran controlar. De esta manera se evitaba que se tomaran

decisiones que no representaran los intereses de todos los miembros y que no se delegara esa

capacidad en una sola persona, ni concentrarlo en un grupo minoritario.

En el capítulo II, del título II, se habla de los órganos de administración de los clubes de

fútbol. Acá vale la pena resaltar que en artículo 24, se plantea que la persona escogida como

presidente deberá tener experiencia administrativa de mínimo dos años en cargos de

dirección y vinculada como dirigente en actividades deportivas. Se trae este punto a la

discusión, puesto que es evidente que el legislador busca que los clubes sean administrados

por personas calificadas para gestionar este trabajo, requisito que tampoco se cumplía ante

un control inexistente por parte de las autoridades.

Ahora bien, en el artículo 29 se determinó que el patrimonio de los clubes estaría constituido

en primer lugar por las cuotas de afiliación y las cuotas de sostenimiento. También se

6 Asamblea: máximo órgano de dirección de un organismo deportivo, conformado por la totalidad de los asociados o

accionistas que se encuentren en ejercicio de sus derechos (Circular Externa No. 000002 Julio 16 de 2013 de Coldeportes).

17

destacan los bienes muebles e inmuebles que se adquieran para su funcionamiento. Es

importante detenerse en este punto porque la ley explícitamente ordena que el patrimonio

esté constituido por cuotas que en la práctica no se pagaban. Al presentarse esta situación

quedaba en evidencia que los clubes con deportistas profesionales eran asociaciones sin

recursos, es decir entidades de papel, financiados por mecenas y dineros vinculados con el

narcotráfico.

Finalmente, los artículos del 42 al 44, hacen referencia a la liquidación de los clubes.

Puntualmente se dice que estos organismos se disolverían por: a) decisión de la asamblea, b)

imposibilidad de cumplir su objeto, c) cancelación de la personería jurídica, d) por no tener

el número mínimo de afiliados. Además, oficializada la disolución de un club, Coldeportes

o las Juntas Administradoras deberían nombrar un liquidador. Teniendo en cuenta lo anterior,

queda claro que se imponen unas sanciones fuertes con el objetivo de forzar a los clubes a

cumplir con los requisitos exigidos por la ley. Vale la pena resaltar que estos procesos de

liquidación y disolución no tenían lugar en la práctica, ya que los asociados, como una

maniobra para defraudar a sus acreedores (pasivos enormes), no cumplían con lo establecido

en esta norma y simplemente creaban una nueva ASAL a la cual se le respetaba su afiliación

en la federación. (para ver el listado de los clubes que desaparecieron con esta maniobra ver

Anexo 1). Es importante aclarar que estos procesos de control no se dieron en gran parte por

la incapacidad o complicidad de la entidad y los funcionarios responsables de ejercer la

vigilancia, es decir, Coldeportes.

D. Decreto 1057 de 1985 – abril 15

Cabe anotar que este decreto modifica el decreto 380, el cual fue expedido hace tan solo tres

meses atrás, situación bastante inusual en la expedición de normas. Este decreto alteró

requisitos fundamentales para el control de los clubes deportivos, modificando lo relacionado

con el voto por cada socio, que dejó de ser imperativo para ser opcional conforme se incluyera

esta posibilidad en los estatutos. Teniendo en cuenta que las modificaciones que fueron

incluidas permitieron el testaferrato y la presencia de recursos de dudosa procedencia en los

18

clubes, denominaremos en adelante este decreto como el Decreto Narco, teniendo en cuenta

la situación que vivía el país y el fútbol en particular en relación con el narcotráfico.

En su primer artículo, este decreto estableció la prohibición de que los clubes se organizaran

como sociedades comerciales. Esta es una disposición sin sentido, ya que desde el decreto

2845 de 1984 existe claridad en que los clubes sólo podían organizarse como ASAL y resulta

contraria a la tendencia ya mencionada de equiparar a estos como sociedades comerciales.

Por otro lado, el artículo dos plantea que las ASAL son una reunión de personas naturales o

jurídicas o ambas cuyo objetivo mutuo es la satisfacción y bienestar de sus afiliados, sea

físico intelectual o moral y no podrán recibir utilidades o repartirse los beneficios en común.

Esta disposición resulta redundante porque simplemente hace una descripción de las ASAL,

sin ningún fin claro, previsión que en la práctica se incumplió por cuanto es conocido que

personas que se encontraban al margen de la ley, controlaron a su antojo a los clubes

profesionales disponiendo de sus activos y en especial de la venta de los pases de los

jugadores inscritos en ellos, utilizando esos dineros en su beneficio para lavado de activos

sin que las ventas o préstamos fortalecieran los patrimonios de las ASAL. Así, la ley obliga

a que los clubes reinviertan sus ganancias en su objeto asociativo.

Además, el artículo 3, establece que los clubes profesionales que se refieran a las

aportaciones como acciones deberían cambiar esta denominación por uno como cuotas o

derechos. Aquí también se evidencia, la confusión del legislador entre las ASAL y las

sociedades comerciales. Pero lo más grave es que, en el artículo cuarto, se permitía que los

clubes expidan títulos nominativos representativos de las aportaciones que serán libremente

transferibles, pudiendo ser objeto de sucesión. Estas modificaciones, vuelven a permitir que

en pocas personas (PNI), se concentren la mayoría de títulos de un club, en un número

mínimo de personas que podían votar a través de poderes y concentrar la propiedad de los

clubes para controlarlos a su antojo. Teniendo en cuenta que estos no tenían ninguna

restricción en su circulación y que incluso podían ser donados.

Surge una nueva incoherencia en este decreto, contenido en el artículo quinto, en donde se

permitía a estos clubes realizar inversiones y/o adquirir documentos mercantiles, exigiendo

19

únicamente que esas actividades se hagan con carácter eventual. Esta disposición, es

completamente impertinente porque permite a los clubes utilizar los recursos para unos fines

diferentes a la promoción del deporte, sin unos requisitos de fondo y que eviten que la norma

sea fácilmente eludible.

Ahora bien, en el artículo 8 se tocan dos temas importantes. El primero de ellos, y que ya se

revisó en decretos anteriores, es la composición del patrimonio (aportaciones de afiliados).

El segundo, se refiere a la posibilidad de los asociados en realizar aportes en especie. Estos

últimos, van directamente en contravía de las exigencias de liquidez de los clubes y favorecen

la cosificación de los jugadores de fútbol, como se dijo anteriormente.

Por otro lado, los artículos 9 a 11, hacen referencia, en diferentes sentidos al derecho al voto.

Así, el artículo 9 aceptó la posibilidad de contemplar diferentes tipos de afiliados y darle a

cada uno de ellos derechos y obligaciones específicas. En el siguiente artículo se les ofrecía

la posibilidad a los clubes de funcionar con el derecho al voto del decreto anterior (1 voto

por afiliado) o consagrando tantos votos como títulos de aportación posea el afiliado. Estos

cambios, permitieron la concentración de la propiedad de los clubes en los capos del

narcotráfico que los controlaron de manera evidente. Ahora bien, en el artículo 11 se

menciona que en las asambleas el quórum lo constituirá la mitad +1 de los títulos de

aportación con derecho a voto. De acuerdo a lo anterior, es posible llegar a la idea que se

permite a las PNI, retomar el control sobre los clubes con deportistas profesionales. Esto,

dado que una PNI podía fácilmente poseer la mayoría de títulos y tener la mayoría de los

votos, lo que le permitía tomar libremente las decisiones sobre el rumbo y funcionamiento

del club.

20

BLOQUE II: PROMULGACION CONSTITUCIÓN DE 1991 E INTRODUCCIÓN DE

LAS SOCIEDADES ANÓNIMAS EN EL FUTBOL

A. Ley 181 de 1995 – enero 18

Antes de comenzar a exponer los puntos importantes de esta ley, vale la pena remitirnos al

contexto de ese entonces del país y lo sucedido específicamente con la Constitución Política.

Como se ha dicho anteriormente, el dinero narcotráfico estaba presente en muchas de las

actividades productivas del país y controlaba el fútbol por completo. Prueba de ello se refleja

con la expedición del Decreto Narco (Decreto 1057 de 1985) que permitió el control de los

clubes por parte de estos mecenas. Ahora bien, la falta de un ente regulador sobre las

actividades de los clubes con deportistas profesionales permitió esta situación. En el año 1991

se promulgó en Colombia una nueva constitución política. Esta fue importante para el camino

del fútbol porque otorgó al presidente la facultad de delegar funciones de inspección,

vigilancia y control en las entidades del orden nacional que le podían colaborar en estas

tareas, dependiendo de la materia. Lo anterior nos remite a las 11 sentencias de 4 de Julio de

1985 proferidas por la Corte Suprema de Justicia y en una de ellas, en la sentencia 1292, en

donde el demandante alegó que, la Constitución Política de 1886, en su artículo 5, el

presidente no podía delegar las funciones de inspección, vigilancia y control a Coldeportes.

Así pues, siguiendo esta línea y la argumentación presentada por quien demandó, la Corte

concede la razón en la sentencia 1292 y en otras sentencias en donde declaró inexequible los

apartes más importantes para que Coldeportes pudiera controlar y vigilar a los organismos

deportivos. Lo anterior se estableció en los decretos extraordinarios 2845, 3130 y en

particular el decreto extraordinario 2743 de 1968, por medio del cual se le otorgaron las

funciones de inspección, vigilancia y control a Coldeportes.

Sin embargo, al promulgarse la constitución de 1991, el artículo 89, numeral 24 de la misma

establece: “Ejercer, de acuerdo con la ley, la inspección, vigilancia y control sobre las

personas que realicen actividades financiera, bursátil, aseguradora y cualquier otra

relacionada con el manejo, aprovechamiento o inversión de recursos captados del público.

Así mismo, sobre las entidades cooperativas y las sociedades mercantiles”. Así mismo y de

21

acuerdo con lo anterior, el artículo 211 de la norma, establece que: “La ley señalará las

funciones que el Presidente de la República podrá delegar en los ministros, directores de

departamentos administrativos, representantes legales de entidades descentralizadas,

superintendentes, gobernadores, alcaldes y agencias del Estado que la misma ley determine.

Igualmente, fijará las condiciones para que las autoridades administrativas puedan delegar

en sus subalternos o en otras autoridades” (Subrayado fuera del texto). De acuerdo a esta

modificación constitucional, queda claro que los argumentos utilizados por los demandantes

para declarar inexequible la capacidad de Coldeportes de inspeccionar, vigilar y controlar,

cambiaron y a partir de su promulgación, la Constitución le otorga facultades expresas al

presidente para delegar esta función en Coldeportes.

De otro lado, llegaba a la presidencia Ernesto Samper, en el año 1994. Ante esto, es

importante recordar que su posesión estuvo acompañada de lo que en Colombia y en el

mundo se conoció como el proceso 8000. Luego de derrotar en las elecciones al entonces

también candidato, Andrés Pastrana Arango, este último denunció a Samper por recibir

dineros del narcotráfico para la financiación de su campaña electoral. Ante este hecho, el

nuevo presidente sería investigado durante su periodo presidencial lo cual trajo graves

consecuencias en la imagen internacional del país. El Gobierno, obligado a cambiar esta

percepción promulgó una nueva ley del deporte, la cual tuvo por objeto brindar una

regulación clara y rígida a favor de la organización de los clubes con deportistas profesionales

y para combatir la presencia del narcotráfico en el fútbol. Sin embargo, así se haya otorgado

una nueva regulación, encontraremos que esta ley no fue lo suficientemente efectiva para

atacar este fenómeno.

Continuamos entonces con el análisis de los artículos importantes que trajo esta ley. En

principio, es importante aclarar que ahora Coldeportes, pasaría de llamarse Instituto

Colombiano de la Juventud y el Deporte a Instituto Colombiano del Deporte. Así pues, en el

artículo 61 se estableció que será el máximo órgano planificador, rector, director y

coordinador del Sistema Nacional del Deporte y de contar con expresas facultades de

inspeccionar, vigilar y controlar a las organizaciones que hicieran parte del sistema nacional

del deporte, entre ellas los clubes con deportistas profesionales.

22

Avanzando ahora a las disposiciones especiales que hacen referencia a la organización de los

clubes de fútbol, encontramos a los artículos 28 al 35. En el artículo 29, se establece que los

clubes con deportistas profesionales deben organizarse como corporaciones o asociaciones

deportivas sin ánimo de lucro o como sociedades anónimas7. Esta es la primera vez que se

contempla la posibilidad de que un club de fútbol sea organizado como una sociedad

mercantil, evidenciando la idea naciente de que los clubes de fútbol podían desarrollarse

como empresas deportivas y materializando la tendencia en leyes y decretos anteriores de

asumir que los clubes podían funcionar como sociedades, cuando antes eran simplemente

ASAL.

En este mismo artículo se regula que ninguna persona (natural o jurídica) podrá poseer más

del 20% de los títulos de afiliación, acciones o aportes de un club determinado. Así mismo,

ninguna persona (natural o jurídica) podrá participar en la propiedad de más de un club dentro

del mismo deporte. Analizando esta disposición, es fácil entender que este porcentaje se

determinó teniendo en cuenta que la S.A. debe tener al menos cinco socios porque se regula

por el Código de Comercio. Adicionalmente, este porcentaje máximo es el mecanismo para

asegurar que ningún socio o accionista, vaya a controlar y tomar las decisiones al tener el

20% o más de los aportes o acciones del club. Terminando este análisis, la prohibición de

participación en más de un club, responde a la necesidad de evitar que entre clubes

pertenecientes a una misma persona se lleven a cabo negocios (transferencias) que atenten

contra la integridad deportiva. Antes de esta disposición, se presentaban transferencias

temporales o préstamos de una gran cantidad de jugadores de futbol que pertenecían a un

club a otro, lo que terminaba enfrentando a jugadores de propiedad del mismo dueño, lo que

atentaba contra la transparencia deportiva. Por esa razón, en el artículo 34, se restringe la

7 Sociedad Anónima: es una de las formas asociativas que escogen los clubes profesionales para su constitución, las cuales

tienen como características fundamentales que sus accionistas persiguen como fin común fomentar, patrocinar y organizar

la práctica del deporte con ánimo de lucro y que su capital está dividido en acciones e integrado por las aportaciones de los

accionistas (Circular Externa No. 000002 Julio 16 de 2013 de Coldeportes).

23

posibilidad que se transfieran más de dos jugadores o deportistas en préstamo a un mismo

club, dentro de un mismo torneo.

Por otro lado, tenemos al Art. 30, en donde se establece que el número mínimo de

socios o asociados de los clubes será determinado por el capital autorizado o aporte inicial.

Vale la pena anotar que la disposición aclara que los salarios mínimos serán el valor del

salario mínimo mensual legal vigente en el momento de la constitución del club. A

continuación, se exponen los rangos establecidos en la norma:

Fondo Social Número de asociados

De 100 a 1.000 salarios mínimos 250

De 1.001 a 2.000 salarios mínimos 1.000

De 2.001 a 3.000 salarios mínimos 2.000

De 3.001 en adelante 3.000

Tabla 1: número de socios según la cantidad del aporte inicial o capital autorizado según la Ley 181 de 1995.

A pesar de que dichos rangos están dentro de la disposición, en el parágrafo del Art. 30 se

prevé que los clubes de fútbol profesional no podrán tener menos de 2000 socios o

accionistas8. Este número de socios es escogido por el legislador, a raíz de la creencia en que

con un aporte inicial que esté entre 2.001 y 3.000 salarios mínimos, los clubes tendrán activos

suficientes para afrontar sus obligaciones laborales y sus pasivos.

Revisamos ahora el Art. 31, en donde se le conceden facultades de inspección a la

Superintendencia de Sociedades, ya que se afirma que las personas jurídicas o naturales que

8 Accionista: son aquellas personas naturales o jurídicas que poseen acciones de un club profesional organizado como

sociedad anónima (Circular Externa No. 000002 Julio 16 de 2013 de Coldeportes).

24

adquieran títulos de afiliación, acciones o aportes en los clubes con deportistas profesionales

deberán acreditar la procedencia de sus capitales, si la Superintendencia así lo solicita. Así

mismo, esta superintendencia podrá solicitar esta información a los actuales accionistas o

socios. Esta norma resulta favorable, en la medida en que busca combatir el lavado de activos

que se presentaba en décadas anteriores, cuando las PNI podían invertir libremente los

dineros ilícitos en el fútbol, sin que ninguna entidad revisara o vigilara la procedencia de

estos recursos. Sin embargo, la norma genera una situación problemática al permitir que esta

información no se deba aportar de manera obligatoria a la Superintendencia de Sociedades,

a sabiendas que en Colombia las labores que son optativas para este tipo de entidades

administrativas y para estos temas no se ejercían.

Por último, tenemos a los Arts. 32, 33, 34 y 35, en los que se regulan ciertos aspectos

operativos de los clubes. Por ejemplo, en el Art. 32 se dice que únicamente los clubes con

futbolistas profesionales podrán ser poseedores de los derechos deportivos de los jugadores.

Esto significa entonces, que continúa la tendencia de cosificar a los jugadores de fútbol que

representaban activos fijos para los clubes, porque se faculta solamente a los clubes para ser

los únicos propietarios de derechos deportivos sin exigir la existencia de un contrato de

trabajo con el jugador. Sumado a esto, en el Art. 33 se obliga a los clubes a registrar ante

Coldeportes los derechos deportivos inscritos en sus registros y sus transferencias.

Finalmente, el Art. 34 define a los derechos deportivos como la facultad exclusiva que tienen

los clubes deportivos de registrar, inscribir o autorizar la actuación de un jugador cuya carta

de transferencia le corresponde. Ante esto último, es posible decir que los clubes tenían una

posición dominante al ser los únicos facultados por la ley para negociar y poseer derechos

deportivos.

B. Decreto 1228 de 1995 – julio 18

Este decreto surge para revisar la legislación deportiva vigente, es decir, la ya mencionada

Ley 181 de 1995. Como disposiciones macro, encontramos el Art. 18, en donde se afirma

que “para el fomento, protección, apoyo y patrocinio del deporte, la recreación y el

25

aprovechamiento del tiempo libre, se instituye el Reconocimiento Deportivo que será

otorgado, revocado, suspendido o renovado, según el caso, por Coldeportes […]”. Además,

se habla en el Art. 24 de la personería jurídica así: “Coldeportes otorgará la personería

jurídica de los clubes con deportistas profesionales organizados como corporaciones o

asociaciones”, reiterando la posibilidad de la organización de los clubes en entidades sin

ánimo de lucro o en una sociedad anónima. Finalmente, es necesario tener en cuenta dentro

del panorama a los Arts. 36, 37 y 38, en donde se establece, a grandes rasgos, las facultades

de vigilancia, inspección y control de los organismos deportivos a Coldeportes. De la mano

con estas facultades, este Decreto también faculta a Coldeportes a imponer sanciones.

Haciendo referencia ahora a las normas que son especiales para los clubes de fútbol, tenemos

en primer lugar al Art. 14, en donde se mantiene vigente la posibilidad para los clubes

profesionales de organizarse bajo el vehículo de ASAL o de S.A.

Habiendo visto lo anterior, analizamos el Art. 16 que dice que los clubes con deportistas

profesionales no podrán constituir pasivos superiores a tres veces el valor de su patrimonio.

Tampoco podrán captar dineros provenientes del ahorro privado ni efectuar operaciones de

mutuo como intermediarios financieros. Este artículo demuestra como el Estado de un lado

predica control y por otro lo contradice. A partir de este artículo, se crea la posibilidad de

acumular pasivos enormes en la medida en que los clubes al valorar los intangibles (derechos

deportivos de sus jugadores) podían estimarlos en valores que el club definía sin la existencia

de un mecanismo que determinara cómo se valoraban estos activos. Adicional a ellos, y a

diferencia de las demás entidades sin ánimo de lucro o sociedades anónimas, se permite que

acumulen pasivos de hasta tres veces su patrimonio, normativa que genera unos beneficios

absurdos a los clubes con deportistas profesionales, por cuanto todas las demás entidades

están obligadas a no mantener pasivos superiores al 50% de su patrimonio. Así mismo,

recalca en su importancia en que este artículo pretendía combatir y erradicar el lavado de

activos en el fútbol, teniendo en cuenta que dichas operaciones eran el principal mecanismo

para llevar a cabo esta acción delictiva. Se permite la posibilidad de acumular pasivos de tres

veces el valor de los aportes a tres veces el valor patrimonio, dándole la posibilidad a los

clubes de constituir pasivos impagables a partir de patrimonios constituidos por activos

26

intangibles y sobrevalorizados. Además de beneficios que no se le otorgaron a otras

sociedades en el país.

Avanzando en el Decreto, entramos a revisar ahora el Art. 17, en donde se establece que las

entidades públicas podrán ser admitidas como socios o accionistas de los clubes de fútbol

profesional siempre que estén autorizadas legalmente para este fin. Esta disposición resulta

problemática ya que es incoherente admitir a entidades estatales como socios o accionistas

de un club, si estos ya tienen la posibilidad de funcionar como S.A. al igual que como

empresas comerciales.

Para culminar con la revisión de este decreto, debemos revisar el Art. 23, que se declaró

inexequible por la Corte Constitucional en la sentencia C-1110/00, afirmando que “en las

instancias de participación política, esta regla "una persona un voto" no puede ser alterada

sino por los propios mandatos constitucionales”. Resulta importante el fallo de la Corte en

cuanto a que, esto permitió un mayor control y transparencia para la toma de decisiones en

lo clubes. Así mismo, evita que las decisiones se tomen por unas pocas personas y que

algunos accionistas no tengan poder para influir en dichas decisiones.

C. Decreto 776 de 1996 – abril 29

Este decreto fue esencial para regular el funcionamiento de los clubes de fútbol, ya que reguló

en detalle el reconocimiento deportivo y la personería jurídica. Así, en su artículo 2 se

determina que la personería jurídica será solicitada por los clubes profesionales organizados

como ASAL a Coldeportes, entidad que verificará el cumplimiento de los requisitos

legales. Posteriormente, en el artículo 3, se detalla el contenido de esta solicitud, que deberá

incluir, entre otras cosas, el patrimonio del club, la forma de hacer los aportes y el origen de

los recursos. Estas disposiciones tienen como objetivo que Coldeportes pueda contar con toda

la información financiera de los clubes, sin embargo, es importante tener en cuenta que esta

información era fácilmente manipulable por los clubes, quienes podían valorar

arbitrariamente los derechos deportivos que poseían dentro de su patrimonio y no se

27

establecía la obligación de pagar efectivamente esos aportes mencionados. Además, el

artículo 3 también menciona otros requisitos de la solicitud como: i) establecer los derechos

y deberes de los asociados (voto), ii) las causales de disolución del club y iii) la forma de

hacer la liquidación del mismo. De esta manera, vemos que aún se les da la posibilidad a los

clubes de determinar libremente los derechos de los asociados, pudiendo entonces acoplarse

al escenario de un asociado un voto o conceder una cantidad de votos desproporcionada a

algunos asociados que demandaban tener el control del club (y que generalmente resultan ser

PNI). En cuanto a la disolución y liquidación de los clubes, se evidencia un intento del

gobierno por forzar a los clubes a que efectivamente se disuelvan y se liquiden, sin embargo,

y revisando el listado de los clubes que siguen sin liquidarse, es claro que esta disposición

fue inútil y que el control de Coldeportes aún era muy superficial a pesar de estar ahora

plenamente facultado para ejercer las labores de inspección, vigilancia y control de los clubes

con deportistas profesionales. Para cerrar este tema, se debe mencionar que en los artículos

5 y 6 se hace referencia a los clubes organizados como S.A., afirmando que estos se deben

sujetar a lo establecido en el Código de Comercio y a las disposiciones del anterior decreto

(1228 de 1995).

Luego, en el capítulo II de este decreto, se hace referencia al reconocimiento deportivo, del

que se dice que será necesario tenerlo para que los clubes tengan la capacidad de desarrollar

sus actividades deportivas, participar en competiciones, y cumplir su objeto en general

(artículo 7). Adicionalmente, en el artículo siguiente se establece que este reconocimiento

también deberá ser solicitado, a través de un documento que contendrá, entre otras cosas, el

balance contable de apertura y el listado de accionistas. Así, y para no repetir lo ya dicho,

vemos que esta figura del reconocimiento deportivo es un filtro del Estado para evitar que

los clubes funcionen normalmente sin el cumplimiento de los requisitos legales exigidos por

Coldeportes como entidad especializada. Los requisitos exigidos vuelven a ser la evidencia

de que el Estado tiene el propósito de verificar que las finanzas de los clubes estén

debidamente llevadas, sin embargo, y como ha sido constante desde la década de los

ochentas, estos intentos del Estado no tienen en cuenta la facilidad que tenían estas entidades

de manipular la información contable a su favor, pudiendo renovar el reconocimiento cada

28

dos (2) años sin problema alguno (como se establece en el artículo 9). También se debe anotar

que las listas de accionistas eran un mecanismo de control que no tenía ningún tipo de

practicidad, ya que en ellas aparecían tranquilamente nombres de PNI reconocidas pero el

Estado nunca tuvo el objetivo de erradicarlas del fútbol, solo de evitar que fueran las personas

que controlaran los clubes. En el artículo 11 se establece la posibilidad de suspender o revocar

el reconocimiento deportivo a un club, cuando “incumplan” las disposiciones legales,

reglamentarias o estatutarias que rigen al club deportivo profesional y que afecten a los

deportistas cuyos derechos deportivos se posean, a los particulares o personas jurídicas que

adquieran títulos de afiliación, acciones o aportes, o en general a terceros. Se dota entonces

al Estado de un mecanismo excepcional de control, para impedir que los clubes que

incumplan sus obligaciones puedan continuar con su actividad deportiva.

Otro punto que se aborda en esta norma son las funciones de Coldeportes. Así, se dice, en el

artículo 12, que esta entidad tendrá las facultades de inspección, vigilancia y control sobre

los clubes con deportistas profesionales. Además, en el artículo 13, se afirma que los clubes

deportivos tienen las siguientes obligaciones frente a Coldeportes: i) aportar los listados de

accionistas, ii) registrar los derechos deportivos y transferencias y iii) registrar los contratos

laborales celebrados con los jugadores. Acá solo vale la pena mencionar que estas

obligaciones tienen la labor de brindar información importante a Coldeportes para intentar

tener un control de las actividades de estos organismos deportivos.

También se habla de las faltas graves que pueden cometer los clubes, dentro de las que se

deben destacar el no cumplimiento del objeto social del club y desatender los requerimientos

de las autoridades en materia de composición accionaria o de concurrencia de aportes

(artículo 16). Vemos acá que la norma evita quedarse corta al establecer claramente que, si

alguna de estas faltas se presenta, se procederá inmediatamente a cancelar la personería

jurídica del organismo. Independientemente de su cumplimiento y del rigor con el que

Coldeportes vigilaba a los clubes, es claro que esta norma ya demuestra un esfuerzo grande

del legislador por imponer sanciones que realmente sean importantes para los clubes y que

los obliguen a actuar para cumplir con su objeto.

29

Finalmente, en el capítulo IV de este decreto se conceden las facultades de inspección,

vigilancia y control en cabeza de la Superintendencia de Sociedades. Así, en el artículo 20 se

evidencia la mediocridad de la labor del legislador, ya que se establece que los clubes deberán

acreditar la procedencia de los recursos que reciben únicamente cuando la entidad lo requiera.

Así, al darle la libertad a la entidad de no solicitar esta información, la misma nunca era

aportada por los clubes. Sin embargo, en las disposiciones siguientes (21 y 22) se establece

que los clubes deberán presentar informes periódicos sobre los accionistas (datos básicos y

porcentaje de participación de cada uno). Así, está si representa una obligación en cabeza de

los clubes, que los obliga al menos a tomarse el trabajo de reunir esta información y

presentarla diligentemente a la Superintendencia de Sociedades. El último artículo a revisar

es el 23, en donde se propone un régimen de cooperación entre esta entidad y Coldeportes,

relación en donde la información sobre la personería jurídica de los clubes será compartida

entre estas entidades.

D. Sentencia C-320 de 1997

En esta sentencia se habla de una violación de los artículos 13, 16, 25 y 189 ord. 26 de la

Constitución Política; por parte de las normas acusadas que son los artículos 34 y 61 literal

8 de la Ley 181 de 1995. El primer artículo, dicta que ningún club profesional podrá transferir

más de dos jugadores o deportistas a un mismo club dentro de un mismo torneo. Así mismo,

es este artículo se plantea que estos clubes no podrán realizar más de dos transferencias en

préstamo a un mismo club. De otro lado el artículo 61 acredita a El Instituto Colombiano del

Deporte Coldeportes como máximo organismo planificador, rector, director y coordinador

del sistema nacional del deporte y a su vez, el legislador le otorga la potestad de ejercer

funciones de inspección, vigilancia y control sobre los organismos deportivos.

Teniendo en cuenta lo anterior, el demandante argumenta que se está vulnerando el derecho

a la igualdad y favorabilidad, bajo la planteado en el artículo 34, teniendo en cuenta que las

únicas federaciones que tienen divisiones profesionales son las de fútbol y baloncesto, por lo

que para las nuevas o más pequeñas se restringen todas las actividades que plantea es artículo

30

en el inciso uno, y por otro lado declara que el hecho de que se permita solamente dos

transferencias por parte del equipo de origen elimina el balance entre las transferencias, pues

mientras unos equipos, dependiendo del deporte, manejan menos jugadores, otros trabajan

con un número mayor y limita los movimientos en el mercado deportivo. Por otro lado, frente

al artículo 61 manifiesta su inconformidad, debido a que hace un recuento histórico de

sentencias en donde Coldeportes no es la entidad idónea y carece de aptitud constitucional

para ejercer las funciones de inspección, vigilancia y control sobre los organismos

deportivos.

Ahora bien, para el fallo de la sentencia se tuvo en cuenta la intervención ciudadana de Carlos

González Puche, Felipe De Vivero Arciniegas y Juan Felipe Pinilla. En el escrito presentado,

manifiestan que el artículo 34 debe declararse inconstitucional puesto que:

“la restricción de que sólo dos jugadores puedan ser transferidos a título de préstamo

en un mismo torneo vulnera libertad económica, pues es una limitación que no se

justifica en términos de protección del bien común, el interés social, el ambiente o el

patrimonio cultural de la nación”

De igual manera manifiestan que en este artículo, se restringe la posibilidad de que los

deportistas o jugadores sean propietarios de sus propios derechos deportivos, sin exigir que

para poder mantener su transferencia exista un contrato de trabajo válido y vigente entre el

jugador y el club. Además, haciendo énfasis en su intervención en la protección de derechos

y libertades de los jugadores, los intervinientes citan el reconocido fallo Bossman de la Corte

Europea de Justicia del 15 de septiembre de 1995, donde se deja en claro que no puede

permitirse que un club o asociación deportiva impida la libertad de trabajo de un jugador

profesional en razón a la existencia de una relación laboral. Finalmente, como propuesta a la

intervención sobre este artículo, se propone como elemento necesario que “en Colombia por

lo menos se llegue a exigir […] la existencia del contrato laboral [...] para que una

asociación deportiva pueda obtener la explotación patrimonial de los derechos deportivos

del jugador o deportista”.

31

Luego de las posturas planteadas, la Corte entra a resolver haciendo un análisis profundo

sobre lo que se entiende sobre derechos deportivos. Dentro de este campo plantea que así las

asociaciones deportivas no tengan ánimo de lucro y por ende no son sociedades comerciales,

eso no las hace exentas de ser titulares de los derechos de explotación comercial de

transmisión o publicidad en los eventos del deporte competitivo. Así mismo, establece en su

interpretación que los jugadores de futbol utilicen esta práctica deportiva como su fuente de

ingreso y su actividad laboral. Así, no son agentes que se deban cosificar y, por ende, tendrán

siempre la facultad de poder ser titulares de sus propios derechos, más aún si se tiene en

cuenta que en artículo 32 se entrega esta posibilidad solamente a los clubes. Por otro lado, en

cuanto a las funciones de inspección, vigilancia y control que se le otorgan a Coldeportes por

parte de la Presidencia Nacional, la Corte plantea que, al ser este último un establecimiento

público de orden nacional, está totalmente facultado para ejercer las mencionadas funciones.

Así pues, es importante señalar para fines de este trabajo, que esta sentencia marcó un

precedente muy importante en cuanto a los derechos y libertades del jugador de fútbol. Lo

anterior se justifica en la decisión de la Corte al declarar inexequible la expresión “exclusiva”

que se encuentra en el artículo 34, cuando se trata del registro, inscripción o autorización en

las actuaciones de transferencia de un jugador. Esto permite entonces que al jugador que no

tenga contrato de trabajo vigente, o que termine su vínculo por incumplimiento de las

obligaciones de los clubes como empleadores, quede en libertad para ejercer su profesión.

También de tener decisión sobre lo que desea hacer e incluso compensaciones monetarias y

así mismo, como se pudo evidenciar en las intervenciones ciudadanas, que de aquí en

adelante al deportista se le asegure un contrato de trabajo, con todas las formalidades, para

que ejerza su actividad bajo normativas legales y que aseguren una estabilidad laboral.

Finalmente, a pesar de la sentencia, los clubes continuaron incumpliendo con sus

obligaciones de pago y acumulando enormes pasivos que les permitía acumular las leyes

deportivas sin que fuesen sancionados por Coldeportes. En otros casos, los clubes vinculaban

a sus trabajadores por contratos por duración de labor, para pagar solamente hasta cuando el

club se mantenía en competencia, poniendo en grave riesgo sus patrimonios, por cuanto los

derechos deportivos representaban más del 85% de sus activos.

32

BLOQUE III: NACIMIENTO DE ACOLFUTPRO Y LEY 1445 DEL 2011

A. Circular Externa No. 000001 de marzo 11 de 2010

Esta reglamentación emitida por Coldeportes hace referencia a varios detalles de la

información contable referente a los derechos deportivos, valorización de derechos

deportivos y principales ingresos operacionales de los clubes con deportistas profesionales.

Así, en esta Circular se precisa la manera en la que se deben presentar los gastos relacionados

con derechos deportivos, así como algunos otros gastos como los gastos de formación y el

avalúo que se hace de cada deportista profesional. El último punto es de especial importancia,

ya que la valoración de los jugadores se verá incluida dentro de los balances contables de los

clubes como activos del organismo, dicho avalúo se realiza con base en el formato presentado

a continuación:

Imagen 1: formato de avalúo para jugadores profesionales. El listado de factores allí estipulado no es

taxativo.

33

Adicionalmente, en esta primera circular relevante también se explica la forma en la que se

deben presentar diversas fuentes de ingreso para los clubes como lo son: taquilla y publicidad

y patrocinios, de tal forma que se le da indicaciones claras a los clubes de la manera en que

deben registrar este tipo de información relevante.

Esta circular es fundamental para la regulación de los clubes con deportistas profesionales,

ya que es la primera y única normatividad existente que hace referencia puntual a los

derechos deportivos y que establece sistemas para su valoración. Así, esta circular pretende

acabar con la manipulación de balances generales que hacían los clubes, al sobrevalorar sus

jugadores para tener la capacidad de adquirir pasivos enormes argumentando tener unos

activos cuantiosos que en realidad eran completamente intangibles. Si bien los criterios para

el avalúo de los jugadores nunca podrán ser completamente objetivos, la imagen 1 nos

muestra que se especifican varios lineamientos para tener en cuenta, lo que hace que sea

imposible avaluar de manera exagerada a un jugador si el formato se llena con información

medianamente veraz.

B. Ley 1445 de 2011 – 12 mayo

Refiriéndonos a este punto, es pertinente hablar del nacimiento de la Asociación Colombiana

de Futbolistas Profesionales (en adelante “Acolfutpro”), institución que nace en el 2004 para

defender los derechos de los jugadores y velar por sus derechos de trabajo ante los clubes de

futbol. Por otro lado, desde el año 2007 ya son formalmente parte del sindicato mundial de

futbolistas (FIFPro), lo que les ha otorgado reconocimiento internacional y así mismo la

posibilidad convertirse en una entidad importante y seria frente a las organizaciones de

futbolistas alrededor del mundo.

Por otro lado, es importante mencionar los logros que se han materializado a partir de la

existencia de Acolfutpro. Uno de ellos, es el caso de Juan Carlos Henao, reconocido por ser

uno de los arqueros más destacados que ha brindado el fútbol colombiano y que logró

coronarse campeón de la Copa Libertadores con el Once Caldas, en diciembre de 2004.

Henao, estaba vinculado a este club mediante un contrato a término fijo por duración de

34

labor. Así pues, mientras el Once Caldas luchaba la final de la Copa Libertadores frente al

equipo argentino Boca Juniors, a Juan Carlos no le estaban pagando porque el equipo no

había logrado clasificar a las instancias finales de la liga local. El jugador, en diciembre de

2004, recibe una oferta para vinculares con el Club Santos de Brasil. Se entiende que el

jugador no tenía el conocimiento de sus derechos, pero con la asesoría de la Acolfutpro,

comprende que sin contrato de trabajo vigente es libre y, de manera irresponsable, el Club

Once Caldas pierde un activo valorado en más de un millón de dólares por no tener contrato.

Esta misma posibilidad la aprovechó el jugador argentino Jonathan Fabbro, quien al conocer

esta situación viaja a México y se vincula con un club del fútbol de primera división de ese

país. Este hecho marcó el cambio para que los jugadores comenzaran a reclamar sus derechos

y declararse libres cuando no tenían contrato o los clubes incumplían con sus obligaciones

de pago. Al declararse los jugadores en libertad por alguna de estas dos causas, comienza la

descapitalización de los clubes y a presentarse pérdidas enormes por la irresponsabilidad de

sus administradores por no mantener el contrato o incumplir con el pago de salarios u

obligaciones laborales. Otros casos similares se continuaron presentando en forma masiva a

partir del 2006, cuando los clubes como América y muchos otros incumplían con el pago.

Este último equipo perdió jugadores tan importante como: Edwin Valencia, Rubén Darío

Bustos y Julián Viáfara.

Otro de los grandes logros, fue el impulso que la asociación frente a los jugadores de futbol

de los equipos profesionales, le dio a la expedición y promulgación de la ley 1445 de 2011.

Mediante pancartas expuestas por los jugadores de futbol en los partidos oficiales, así como

la socialización con congresistas y el presidente de la República, fueron pilares importantes

para lograr el objetivo de esta ley que rige actualmente y reconoce los derechos de los

deportistas profesionales. Así las cosas, damos entonces paso al análisis de la ley 1445 de

2011.

El artículo 1 de esta ley modifica el Art. 29 de la Ley 181 de 1995, reiterando la posibilidad

de los clubes de organizarse como ASAL o como S.A. Sin embargo, esta ley adiciona tres

parágrafos claves que revisaremos a continuación. Así, en su parágrafo 1, se dice que ninguna

persona tendrá derecho a más de un voto sin importar su participación dentro de los clubes

35

organizados como ASAL. Esta disposición es esencial, ya que se retoma este requisito que

evita efectivamente que las PNI tomen las decisiones y determinen el rumbo de los clubes,

al restringirles la posibilidad de votar con más de un voto.

El parágrafo segundo prohíbe que una persona, natural o jurídica, tenga el control de más de

un club, ya sea a través de sí misma o a través de una persona interpuesta. Esta disposición

ya se ha revisado así que no se profundizará más en ella.

El último parágrafo hace referencia a la posibilidad que tienen los clubes organizados como

S.A. de inscribirse en el Registro Nacional de Valores y Emisiones para entrar a cotizar en el

mercado de valores. Esto es una ventaja enorme que representa el modelo de sociedad

anónima, permitiéndoles a los clubes la posibilidad que se financien a través de equity y de

que diversifiquen sus accionistas incluyendo personas del exterior y a sus propios aficionados

o hinchas. Actualmente, clubes como Millonarios, Atlético Nacional, Junior y América van

a emitir valores en bolsa. Adicionalmente, es importante destacar que, junto con esta

oportunidad de financiamiento, los clubes también se someten a la inspección y control de la

Superintendencia Financiera.

Después, encontramos el Art. 2, en donde se establece que los clubes con deportistas

profesionales organizados como sociedades anónimas deberán tener como mínimo 5

accionistas, mientras que los clubes organizados como corporaciones/asociaciones

deportivas determinarán su número mínimo de asociados con base en los aportes iniciales

con base en este cuadro:

Fondo Social Número de asociados

De 100 a 1.000 salarios mínimos 100

De 1.001 a 2.000 salarios mínimos 500

De 2.001 a 3.000 salarios mínimos 1.000

De 3.001 en adelante 1.500

36

Tabla 2: número de socios según la cantidad del aporte inicial o capital autorizado según la Ley 1445 del

2011.

Sin embargo, y a pesar de la tabla, se aclara en el parágrafo 1 del mismo artículo que el

número mínimo de afiliados o aportantes que deben tener los clubes organizados como

corporaciones/asociaciones es 500. Además, en el parágrafo 2 se dice que

independientemente del capital autorizado, los clubes deberán tener un capital suscrito y

pagado mínimo de 100 salarios mínimos al momento de su constitución o al momento de su

conversión de ASAL a S.A. Adicionalmente, en el parágrafo 3 se afirma que los clubes con

deportistas profesionales que se organizan como sociedades anónimas en ningún caso podrán

tener un capital suscrito y pagado inferior a 1.000 salarios mínimos. Finalmente, encontramos

el parágrafo 4, en donde se dice que el monto mínimo exigido como capital suscrito y pagado

deberá mantenerse siempre que funcione el club, so pena de exponerse a la suspensión del

reconocimiento deportivo. De esta manera, la norma es clarísima al evidenciar que el

legislador considera que los clubes, independientemente de su vehículo de asociación, deben

tener un patrimonio líquido mínimo. Este será de 1000 salarios mínimos como regla general,

lo que les va a permitir a los clubes cumplir sin problemas con sus obligaciones legales y

afrontar los pasivos que contraigan. Finalmente, y como un avance muy destacado, vemos

que en el parágrafo 2 y 4 se establece por primera vez la obligación expresa y exigible de

suscribir y pagar una parte del capital para poder constituir o convertir un club con deportistas

profesionales, y se complementa dicha obligación con la sanción de la suspensión del

reconocimiento deportivo. Esto último es clave, ya que, sin dinero real, los clubes no podrán

recibir su reconocimiento deportivo y, por ende, no podrán competir en torneos oficiales.

Luego encontramos el Art. 3, que modifica el Art. 31 de la Ley 181, y establece que los

accionistas o asociados de los clubes con deportistas profesionales deberán acreditar la

procedencia de su capital ante el mismo club y ante Coldeportes. Esta información podrá ser

consultada y valorada por la Superintendencia de Sociedades, así como por la

Superintendencia Financiera. Así mismo, los clubes deberán remitir a la Unidad de

37

Información y Análisis Financiero9 (en adelante “UIAF”) del Ministerio de Hacienda y

Crédito Público estos tres informes: i) reporte de operaciones sospechosas: para identificar

operaciones que puedan implicar el financiamiento del terrorismo por su cuantía y

características, ii) reporte de derechos deportivos y transferencias y iii) reporte de accionistas

o asociados. De esta manera, cualquier posible adquirente de acciones o aportes deberá

demostrar que no es una PNI, de lo contrario no podrá ser socio o accionista de un club con

deportistas profesionales. Y, el legislador dota de mucha importancia los reportes

mencionados al hacerlos de obligatoria presentación ante la UIAF, entidad que ejerce la

debida inspección sobre los mismos para evitar operaciones de lavado de activos y

operaciones de financiamiento del terrorismo. Acá vale la pena anotar que aun estando en el

siglo XXI existen mecanismos para eludir esos controles y que personas dedicadas a

actividades ilícitas sigan entrando al fútbol, sin embargo, es evidente por la cantidad de

entidades vigilantes y por la cantidad de requisitos e informes exigidos que el Gobierno se

ha tomado el trabajo de elaborar disposiciones que se complementen entre ellas y que

obliguen a los clubes a acatar la ley.

Ahora, encontramos el título II, referente al proceso de conversión10 de los clubes

organizados como ASAL a clubes S.A. Para este tema es esencial el artículo 4, en donde se

combate la problemática del pasado y se afirma que la conversión no producirá la disolución

ni liquidación del club, como tampoco afectará los contratos (obligaciones) que constituyen

el patrimonio del club, por lo que será imposible defraudar a los acreedores como se hacía en

el pasado. Adicionalmente, se consagra el derecho de retracto, a través del cual los socios

que no estén de acuerdo con la conversión se retirarán del club luego de que se les reembolse

9 Unidad de Información y Análisis Financiero: Es una Unidad Administrativa Especial, de carácter técnico, adscrita al

Ministerio de Hacienda y Crédito Público, creada por la Ley 526 de 1999, modificada por la Ley 1121 de 2006, que tiene

como objetivo la prevención y detección de operaciones que puedan ser utilizadas para el lavado de activos o la financiación

del terrorismo. Así mismo, impone obligaciones de reporte de operaciones a determinados sectores económicos (Circular

Externa No. 000002 Julio 16 de 2013 de Coldeportes).

10 Conversión: es el acto consagrado por la ley mediante el cual una corporación o asociación con deportistas profesionales

bajo remuneración, puede cambiar su naturaleza y asumir la de una sociedad anónima sometida a las reglas propias del

Código de Comercio, en particular a las normas previstas para las sociedades anónimas (Circular Externa Conjunta

Coldeportes No. 001 de 23 de mayo de 2011 y Superintendencia de Sociedades No. 100-000003 de 23 de mayo de 2011,

numeral 2).

38

el valor de sus aportes. La misma disposición establece que a través de la conversión se

emitirán acciones que no estarán sujetas a derechos de preferencia ni a un máximo de

adquisición por parte de las personas naturales o jurídicas que las compren. De esta manera,

se da plena libertad a los accionistas de adquirir el control del club, igualando a estas

sociedades anónimas del deporte con las comerciales e industriales. Otro aspecto que se

menciona en el artículo 4 es la obligación de que el monto de la colocación de las acciones

no podrá ser inferior al doble del capital resultante luego del intercambio de aportes por

acciones. Así, quienes quieran obtener acciones deberán pagar por ello a pesar de ser socios

(asegurando la liquidez del club) y se establece un monto mínimo que asegure que se

obtendrá el capital requerido mediante la colocación de estas acciones en el mercado.

Sumado a todo esto, y con la intención de desarrollar el procedimiento de la conversión,

revisamos ahora el Art 5, en donde se establecen los pasos a seguir para materializar este

proceso. El primero, es la verificación de que los aportes no provienen de operaciones de

lavado de activos o de operaciones ilícitas, verificación que se juramentará por el

representante legal ante la Unidad de Información y Análisis Financiero del Ministerio de

Hacienda y Crédito Público. El segundo, es que se tome la respectiva decisión en la asamblea,

con una votación favorable de la mitad más uno. El tercer requisito es que el representante

legal del club comunique al público la decisión aprobada en un diario de amplia circulación.

Otro requisito es que la conversión se realice mediante escritura pública, la cual será

registrada en Cámara de Comercio y la cual conllevará a una reforma estatutaria. Así, vemos

que el legislador ha querido que el proceso sea público y esté legitimado a través de

mecanismos como la publicación en un diario para que los diferentes stakeholders como

aficionados, autoridades del gobierno, equipos competidores y patrocinadores (entre muchos

otros) estén al tanto de la conversión.

Avanzando en esta ley, encontramos el Art. 7, en donde se establece que un club perderá el

reconocimiento deportivo si deja de participar de manera ininterrumpida durante la totalidad

de un campeonato oficial. Así, se establece que el objetivo principal de los clubes es

participar en las competiciones deportivas, ya que, si no lo hacen, perderán su

reconocimiento.

39

Relacionado con lo anterior, encontramos el Art. 8, que afirma que Coldeportes suspenderá

el reconocimiento deportivo de un club si este no paga sus obligaciones laborales y pagos de

seguridad social, obligaciones fiscales y sus aportes parafiscales, por un periodo superior a

60 días. La suspensión se mantendrá hasta que el club no pague, y si la falta es repetitiva se

perderá definitivamente el reconocimiento deportivo. Esta medida es un avance

importantísimo para proteger los derechos fundamentales de los trabajadores, ya que a través

del reconocimiento deportivo le da al Estado la herramienta perfecta para exigir a los clubes

su diligencia con sus obligaciones laborales e impedir que acumulen pasivos de la forma

como lo hicieron tradicionalmente. Este es un elemento especial, ya que implica que, si el

club no cumple las obligaciones, no se le dará el reconocimiento para ejercer su objeto, caso

único entre todas las demás sociedades del Código de Comercio. Así, vemos que las S.A. del

deporte son vehículos especiales que deben cumplir con varios requisitos para que el Estado

les permita cumplir su objeto.

El penúltimo bloque de nuestro interés que se encuentra en esta Ley es el que hace referencia

a la inspección, vigilancia y control. De esta manera, el Art 9 habla del procedimiento de

recuperación económica y administrativa. Este proceso se encuentra regulado detalladamente

en la Ley 550 de 1999. Así, este proceso que se debe adelantar cuando: i) el club se encuentra

en estado de cesación de pagos, ii) el club tiene pérdidas que disminuyen el patrimonio neto

por debajo de 70% de su capital total según el último ejercicio contable, iii) cuando el club

se rehúsa a someter sus archivos y libros a la inspección de las entidades correspondientes,

iv) cuando la información presentada a las entidades no corresponde a la realidad económica,

contable y financiera del club y v) el club con deportistas profesionales incumple

reiteradamente la ley, sus estatutos o las instrucciones de las entidades de supervisión.

Adicionalmente, en el mismo artículo se dice que si el proceso de recuperación fracasa, se

abrirá un proceso de liquidación judicial en los términos de la Ley 1116 de 2006. Así, vemos

entonces que se establece un procedimiento detallado y con causales previamente

establecidas que se deberá seguir para todos aquellos clubes que incurran en las graves

causales allí mencionada, acabando entonces con la tendencia histórica que las leyes y

decretos anteriores, normas que no imponían ninguna sanción ni establecía procedimientos

40

de saneamiento de finanzas para aquellos clubes que tenían desempeños contables

sumamente pobres. Estos requisitos también son completamente diferentes a los que la ley

colombiana exige a las demás sociedades, evidenciando nuevamente que estos vehículos

tienen unos puntos en común, pero algunos muy diferentes con respecto a las S.A.

comerciales que operan en el mercado.

Complementando lo anterior, encontramos al Art. 10, en donde se le confieren las funciones

de inspección, vigilancia y control a Coldeportes, por un lado, y a la Superintendencia de

Sociedades, por el otro, sobre todos los clubes con deportistas profesionales que se conviertan

en sociedades anónimas. Ante la exequibilidad de esta disposición con la entrada en vigencia

de la Constitución Política de 1991, estas entidades si han podido ejercer un control efectivo

y continuo sobre los clubes, lo que ha hecho que estos últimos cumplan de manera más

diligente la ley, tengan una mejor gestión y que hoy en día el informe consolidado de la

Superintendencia de Sociedades demuestre que generan ganancias y no pérdidas.

Tenemos también al Art 11, el cual establece el deber de Coldeportes de establecer niveles

de patrimonio líquido para los clubes deportivos, para garantizar la sostenibilidad de los

mismos. Estos niveles de patrimonio líquido se encuentran especificados en la Resolución

No. 00768 de Agosto 11 de 2011 emitida por Coldeportes, en donde se resuelve que: i) los

clubes con deportistas profesionales organizados como corporaciones o asociaciones sin

ánimo de lucro o como sociedades anónimas, no podrán incurrir en pérdidas que reduzcan el

patrimonio neto por debajo del 50% del capital social o capital suscrito y ii) los clubes con

deportistas profesionales que estén organizados como corporaciones o asociaciones sin

ánimo de lucro o como sociedades anónimas, no podrán generar niveles de endeudamiento

superiores al 75%. Analizando esta disposición y su posterior desarrollo en la resolución

mencionada, es posible concluir que por primera vez en la historia el legislador y las

entidades administrativas que reglamentan la materia se distanciaron de la vieja disposición

que permitía acumular pasivos superiores en tres veces el valor de los aportes. Lo anterior

para establecer criterios contables completamente imparciales como la reducción del

patrimonio neto y los niveles de endeudamiento que no sean fácilmente eludibles por los

41

clubes y que les indiquen a las autoridades encargadas de la vigilancia y control de los clubes

cómo se comportan estos organismos en materia contable.

El artículo 11 se complementa con un parágrafo, en el que se busca evitar que los clubes

puedan defraudar a sus acreedores a través del cambio de afiliación, pero con otra razón

social. Así, se establece que antes de otorgar un nuevo reconocimiento deportivo,

Coldeportes deberá verificar que el club profesional afiliado y cuyo derecho de afiliación va

a utilizar el nuevo club, haya cancelado la totalidad de las obligaciones laborales, fiscales y

parafiscales. Es gracias a esta norma que se obliga a Coldeportes a asumir una posición activa

en materia de disolución y liquidación de clubes y como se frena definitivamente la

desaparición de clubes sin su debida liquidación. Esto último teniendo en cuenta que desde

1991, año en que se creó el Campeonato Profesional de Ascenso, se han desvanecido más de

50 clubes con deportistas profesionales, que aparecían y desaparecían sin cumplir los

requisitos para obtener el reconocimiento deportivo.

C. Circular Externa Conjunta Coldeportes No. 001 de 23 de mayo de 2011 y

Superintendencia de Sociedades No. 100-000003 de 23 de mayo de 2011

La segunda circular de interés es la Circular Externa Conjunta Coldeportes No. 001 de 23 de

mayo de 2011 y Superintendencia de Sociedades No. 100-000003 de 23 de mayo de 2011.

En este documento emitido por ambas entidades del Gobierno se aclaran e ilustran algunos

aspectos relacionados con la Ley 1445 de 2011, especialmente sobre el tema de la conversión

de los clubes con deportistas profesionales en sociedades anónimas.

Con lo anterior en mente, esta circular establece la información que se debe presentar a la

Superintendencia de Sociedades para la toma de decisión de la conversión a sociedad

anónima, entre la que debe destacarse la procedencia de capitales y la información básica

sobre los socios. Adicionalmente, se deben presentar los 5 estados financieros básicos

(balance general, estado de resultados, estado de cambios en el patrimonio, estado de cambios

en la situación financiera y estado de flujo de efectivo) con dictamen del revisor fiscal.

42

También, se requiere que se presente una minuta con la propuesta de los nuevos estatutos del

club, dentro de los que se deben incluir aspectos como: el capital, la estructura del club y las

cláusulas que garanticen el cumplimiento de las obligaciones relacionadas con entidades

deportivas.

Otro punto que se revisa en la Circular es el procedimiento para convocar la Asamblea en la

que se toma la decisión y como se debe desenvolver la misma (quórum, sistema de votos,

mayorías, etc.).

Finalmente, se hace referencia a los efectos patrimoniales, contables y legales (obligaciones

y prohibiciones que aplican para los clubes con deportistas profesionales organizados como

sociedades anónimas). Este tipo de efectos ya se han revisado en las normas estudiadas, por

lo que no se revisarán nuevamente.

Por todo lo anterior, es claro que esta circular es importante al complementar los requisitos

y exigencias que establecía la Ley 1445 del 2011 para poder poner en marcha el proceso de

conversión de los clubes.

D. Circular Externa No. 000010 de octubre 26 de 2011

En este nuevo documento, se desarrollan las normas sobre la información de carácter general

que deben presentar los clubes con deportistas profesionales a la Unidad de Investigación y

Análisis Financiero del Ministerio de Hacienda. Así, se establecen tres grandes reportes: i)

reportes de operaciones sospechosas, ii) reportes de transferencia y derechos deportivos de

jugadores y iii) reportes de accionistas y asociados. A través de la Circular se explica que

debe tener cada reporte, además, establece la fecha desde la que se deben presentar y la norma

que los regula. En cuanto a los primeros, Coldeportes determina que se deben reportar en los

términos del parágrafo 2º del artículo 3º de la Ley 1445 de 2011, a partir del 1 de octubre de

2011. Los segundos, serán reportados en los términos del parágrafo 2º del artículo 3º de la

Ley 1445 de 2011, a partir del 1 de octubre de 2011. Finalmente, los reportes de accionistas

43

y asociados se deben reportar dentro de los diez (10) primeros días del mes de enero de 2012

y corresponde a la información del último semestre del año 2011.

Así, esta circular reglamente en detalle la presentación de estos reportes a la UIAF,

estableciendo claramente cómo se va revisar que en estas entidades no se lleven a cabo

operaciones de lavado de activos ni otro tipo de operaciones no permitidas.

E. Sentencia C-287 de 2012

En esta sentencia se demanda los artículos 4 y 5 de la 1445 de 2011. El demandante considera

que los mencionados artículos vulneran los artículos 58 (derecho a la propiedad de las

personas jurídicas) y 62 (prohibición de variar el destino de las donaciones con fines de

interés social) de la Constitución Política. Así mismo, de acuerdo a una serie de normas que

cita, especialmente el artículo 673 del Código Civil, y teniendo en cuenta el artículo cuarto

demandando que permite la conversión de los clubes de fútbol, el demandante plantea que

“no es posible predicar ningún tipo de propiedad en cabeza de sus afiliados que justifique

[…] el reintegro de los aportes a los asociados que así lo soliciten, dentro de los dos meses

siguientes de realizada la conversión”. Finalmente concluye que la orden de devolución de

los aportes a los asociados así como la conversión de los aportes realizados a una corporación

civil sin ánimo de lucro en acciones, implican una lesión a la propiedad privada de este tipo

de corporaciones civiles y por otro lado que, “los aportes realizados por los asociados a

una corporación civil sin ánimo de lucro son gratuitos, irrevocables y se transfieren a la

persona jurídica, de suerte que los patrimonios de los aportantes y de las corporaciones

quedan perfectamente separados”.

Con respecto a lo anterior, se pidió por parte de las Corte diferentes intervenciones para

conocer sobre la demanda. Al respecto, el Ministerio de Hacienda y Crédito Público mantuvo

que la Ley 1445 de 2011, se creó para darle un manejo transparente y honesto a los clubes

deportivos y para impedir el lavado de activos y el provecho para alguno, para llegar de esta

manera a un proceso de democratización. Por otro lado, una de las entidades que más nos

44

interesa en su intervención por los fines de este trabajo académico, es la Superintendencia de

Sociedades, que manifestó que se declarara la exequibilidad de los artículos demandados.

Así pues, reiteró que los clubes con deportistas profesionales son organismo de derecho

privado que cumplen funciones de interés público y social, organizados como corporaciones

o asociaciones deportivas sin ánimo de lucro o sociedades anónimas, constituidas por

personas naturales o jurídicas. De otro lado, en cuanto a las aportaciones señaló que

responden a un mismo principio

"por realizar una aportación reciben participaciones (en el caso de asociaciones o

corporaciones) o acciones (en el caso de sociedades anónimas). La sumatoria de las

aportaciones al capital debe responder a un límite mínimo, que ha establecido la ley

con el objeto de que se cuente con respaldo suficiente para lograr dotar a la persona

jurídica de la solvencia económica necesaria para cumplir los fines de su creación".

A su vez, no comparte las apreciaciones con el demandante en cuanto a que quien compra

participaciones del capital está efectuando una donación. Esto lo refuta, manifestando que

tanto las corporaciones como las sociedades, una vez constituidas tienen un patrimonio

distinto de los asociados individualmente consideras y también, que es en las personas

jurídicas en las que radican derechos y obligaciones, en tanto que su patrimonio responde por

las acreencias que adquieran.

Con las razones expuestas anteriormente, entra entonces la Corte a analizar de fondo tanto

las intervenciones como la demanda. De esta manera es de vital importancia rescatar el

análisis que hace la Corte sobre la forma en que se llega a la ley 1445 de 2011. Ante eso,

muy brevemente plantea que el esquema propuesto de sociedades anónimas para las

corporaciones deportivas que traía la nueva ley, resultaba muy importante para los nuevos

inversionistas que querían experimentar este campo de negocio. Diferente entonces, del

esquema de asociaciones o corporaciones que resultaba poco razonable, en la medida que los

clubes estaban organizados bajo una estructura societaria que no permitía la distribución de

utilidades y les impedía la transformación a sociedades anónimas.

Así pues, la Corte considera beneficiosa la posibilidad que otorga la ley en cuanto:

45

i) Los inversionistas interesados podrán adquirir acciones de clubes deportivos profesionales,

y hacerlas transables en el mercado de manera expedita, sujetos a la ley de la oferta y la

demanda que impone el mercado. También, permite que los clubes deportivos se constituyan

en verdaderas empresas, correctamente administradas y bien posicionadas y proyectadas en

el mercado, lo cual incide en la preservación y aumento del valor de la marca deportiva y de

las acciones.

ii) En materia de transparencia, el medio escogido es más claro para las emisiones, venta de

acciones y el origen de los recursos utilizados por el club. De igual manera, se ven

fortalecidas las facultades de inspección, vigilancia y control de las entidades estatales

encargadas, sobre los clubes.

iii) Los votos que se hagan al interior, independientemente de los números de título de

afiliación, no será mayor a uno lo que permite equilibrio en la toma de decisiones y que estas

no serán a cargo solamente de algunos pocos.

Finalmente en cuanto a la protección del patrimonio, la Corte manifiesta que: (i) la

conversión autorizada por la ley demandada no es una imposición del legislador, sino una

decisión libre del máximo órgano de cada club profesional; (ii) la conversión no implica su

disolución o liquidación; (iii) la encargada de aprobar el método de intercambio de aportes

por acciones es la asamblea del organismo deportivo; y (iv) como persona jurídica continuará

gozando de todos sus derechos y deberá responder por todas sus obligaciones; por ello, no

encuentra la Sala una afectación del patrimonio de los clubes deportivos profesionales que

no sea el producto de la autonomía de la voluntad de sus asociados.

La Sentencia C-287 de 2012, plantea un precedente importante al ser una de las sentencias

que ratifica el buen uso de la ley, luego de su expedición. Debido a lo anterior, vemos

entonces como el juez constitucional hace una ponderación entre lo que venía sucediendo

hace un tiempo con los clubes de fútbol cuando eran asociaciones o corporaciones y por otro

lado, el cambio que generó o le otorgó la ley a los clubes para que su participación o

composición accionaria fuera organizada bajo un esquema empresarial, en donde existiera

un número de socios que no solamente podría entrar en el negocio para obtener dinero, sino

46

también para tener una participación que direccionara sus intereses y por otro lado, con esta

organización también evitar el fenómeno de los años ochenta con la entrada de dineros

ilícitos. Esta sentencia declara constitucional el mecanismo a través del cual el Estado

permitió que las entidades sin ánimo de lucro emitieran aportes o acciones. Además, y como

jamás se objetó ese tipo de funcionamiento, nuestros jueces no pudieron estudiar esa

posibilidad que entregó la regulación sobre esta materia era constitucional o no lo era.

F. Circular Externa No. 000001 de enero 23 de 2013

Avanzamos para revisar ahora el asunto de esta circular, que es la acreditación de la

procedencia de capitales. Aquí, se concluye que para lograr esta acreditación se requiere la

certificación sobre la verificación que se efectué respecto a la procedencia de los capitales de

los asociados o accionistas y la certificación sobre el valor del capital que posee el club;

número de derechos o acciones que posee; número de asociados o accionista que conforman

el organismo deportivo y la composición del capital por asociado o accionistas y el porcentaje

de participación de cada uno de ellos (ambas certificaciones deben ser suscritas por el

representante legal y el revisor fiscal del club). Igualmente se deberá manifestar si se han

presentado variaciones en el capital. Además, se establece claramente que esa información

será suministrada anualmente y servirá para otros trámites administrativos como el

reconocimiento deportivo.

G. Circular Externa No. 000002 julio 16 de 2013

La última circular que se revisará hace referencia a la adopción del Sistema Integral para la

Prevención y Control del Lavado de Activos y Financiación del Terrorismo (en adelante

“SIPLAFT”) para clubes profesionales de fútbol. Debemos iniciar por definir al SIPLAFT

como el sistema de prevención y control que deben implementar los clubes profesionales de

fútbol que tengan un patrimonio superior a mil millones de pesos ($1.000.000.000) a la fecha

del 31 de diciembre de 2012. Este sistema obliga a los clubes de fútbol a adoptar

47

procedimientos y herramientas que contemplen todas las actividades que realizan en

desarrollo de su objeto social y que se ajusten a su tamaño, actividad económica, forma de

comercialización y demás características particulares. De esta manera, dichas medidas deben

traducirse en reglas de conducta y procedimientos que orienten la actuación de sus

administradores, sus empleados y sus asociados o socios.

El SIPLAFT se compone de varias etapas. La primera es la de prevención, en donde se deben

identificar los riesgos de financiación del terrorismo y de lavado de activos. La segunda etapa

es la de control, en donde se deben identificar medidas para mitigar los riesgos identificados

previamente. Luego, tenemos la creación de políticas dentro del club, las cuales deben

responder a los riesgos hallados y ser aprobadas por la asamblea.

Finalmente, la Circular establece algunos deberes que están en cabeza de los clubes con

deportistas profesionales para combatir las operaciones sospechosas y/o inusuales. Estos

deberes son responsabilidad, en principio, del órgano de administración y de la junta

directiva. Se destacan el conocimiento de sus accionistas, el conocimiento de sus deportistas

y otros empleados y el conocimiento del monto máximo de efectivo que puede manejarse al

interior de la empresa por tipo de cliente

Así, esta circular es de vital importancia para la regulación de los clubes con deportistas

profesionales, toda vez que es el esfuerzo de la administración por oficializar la lucha contra

el narcotráfico y demás negocios ilícitos para que estos no tengan acceso al fútbol. Con la

información suministrada acá y los procedimientos especificados, los clubes tienen la

capacidad de tomar acción rápidamente si se ven enfrentados a una situación que pueda

considerarse como una operación sospechosa. Ahora bien, el hecho de que estos reportes no

se desenvuelvan ante el público en general se debe a la reserva que tienen estos

procedimientos.

48

ANÁLISIS

A. NORMAS

Para iniciar el análisis de las leyes y decretos revisados anteriormente, se elaborará una

comparación de estas normas estudiadas a partir de las temáticas e ideas generales que se

exponen en cada una. Así, según las tablas 3 y 4, es evidente que con el paso del tiempo las

normas fueron abarcando cada vez más temáticas y desarrollando más a profundidad cada

una.

La tendencia mencionada se ve en la Ley 1445, en donde existen normas referentes a la gran

mayoría de temas que se han desarrollado a través de los años y en las que se habla a

profundidad de los mismos.

49

Tablas 3 y 4: comparación entre temáticas incluidas en las diferentes leyes y decretos que han

regulado la organización de los clubes con deportistas profesionales. Elaboración propia.

B. INFORMES DE LA SUPERINTENDENCIA DE SOCIEDADES

Ahora, es conveniente entrar a revisar los informes elaborados por la Superintendencia de

Sociedades a partir de la información contable que le suministran los clubes. Para culminar

este ejercicio, es muy importante comparar los informes de la Superintendencia de

50

Sociedades cuando los clubes eran corporaciones o asociaciones sin ánimo de lucro y con

posterioridad a le expedición de la ley 1445 de 2011. Entramos a revisar los informes a

elaborar para los años 2003, 2004 y 2005 y el informe elaborado para los años 2013 y 2014.

Esto nos permitirá revisar la información contable antes y después de la aplicación de la Ley

1445 y entender con base en esta información como funcionaban y operaban los clubes

cuando la mayoría se eran ASAL y luego cuando pasaron a ser S.A. Se debe hacer la

anotación de que a pesar de que existe una edición más reciente del informe en el que se

abarca el año 2015, se usaron los datos del 2014 ya que en ellos aparecían agrupados todos

los clubes, escenario que se distancia del año 2015, en donde se separan los clubes que

presentan informes contables con base en las normas de contabilidad internacional NIIF.

Teniendo clara esta información, entraremos a revisar los diferentes componentes del balance

general consolidado de los clubes con deportistas profesionales de ambos informes. En

primer lugar, encontramos los activos, expresados en millones de pesos en la tabla 5. Se

observa que estos aumentaron 2,45 veces, suma que resulta positiva al implicar que los clubes

cada vez tienen más bienes dentro de sus activos. Esto es un fiel reflejo del impacto de las

nuevas normas, ya que como se dejó manifestado en la sección anterior, en las décadas de

los ochentas y noventas muchos clubes tenían patrimonios conformados únicamente por

activos intangibles, mientras que ahora está clara la obligación de pagar para ser accionista o

socio y por esto el club cuenta siempre con activos líquidos.

Vale la pena profundizar en la concentración de estos activos en los 36 equipos, por lo que

en el informe del 2003-2005 se determina que el 68% de los activos del consolidado general

son propiedad tan solo de seis (6) clubes, lo que nos permite entender que los activos estaban

altamente concentrados en el 17% de clubes (que además son, como se puede predecir, los

clubes “grandes” como Atlético Nacional, Once Caldas, Cali y Santa Fe). Este escenario se

repite en el informe del 2013-2014, en donde los datos ofrecidos permiten concluir que el

63% de los activos del consolidado son componen los activos de seis (6) clubes, en donde se

repiten nombres como Nacional, Cali y Santa Fe.

51

ACTIVOS PASIVOS PATRIMONIO

2005 184.251 68.060 116.078

2014 452.934 263.406 189.528

Tabla 5: montos de los activos, pasivos y patrimonio del informe consolidado de los clubes de fútbol en

Colombia para los años 2005 y 2014. Elaboración propia.

Imagen 2: representación gráfica del balance general para el año 2005. Elaboración propia.

Imagen 3: representación gráfica del balance general para el año 2014. Elaboración propia.

ACTIVOS

PASIVOS

PATRIMONIO

BALANCE GENERAL - 2005

ACTIVOS

PASIVOS

PATRIMONIO

BALANCE GENERAL - 2014

52

Para ahondar en los activos, se propone ahora entrar a revisar los ingresos operacionales, para

así poder entender que tanto dinero generaban los clubes y a través de qué actividades lo

hacían. Primero, y remitiéndonos al informe expedido antes de la entrada en vigencia de la

Ley 1445, se sabe que los ingresos operacionales totales fueron de 89.291 millones de pesos.

Esta cifra representa el 48% de los activos consolidados y se compone de los diferentes

ingresos presentados en la imagen 4, de donde cabe destacar la altísima participación que

tiene la taquilla. Se debe tener en cuenta que estos datos son consolidados, ya que, algunos

clubes presentan en sus balances que la taquilla alcanza a representar hasta el 60% de sus

ingresos operacionales individuales. Adicionalmente, de los 18 clubes pertenecientes a la

categoría A, 11 reciben el 82% de los ingresos consolidados, haciendo evidente la

desigualdad en la distribución de los recursos entre clubes. Por otro lado, en el informe

posterior a la Ley 1445, se observa una alta concentración de los ingresos por parte de seis

(6) clubes, quienes tienen el 55,2% de los ingresos operacionales totales (imagen 5). Los

clubes en cuestión siguen siendo clubes “grandes”, destacando a Atlético Nacional, Santa Fe

y Millonarios. Esto evidencia que la mayoría de los recursos aún se encuentran en

concentradas en los patrimonios de pocos clubes. Sin embargo, y como aspecto rescatable,

los ingresos operacionales se han diversificado sustancialmente, hasta tal punto que las

taquillas, como principal ingreso operacional, han visto reducida su participación al 22%

aproximadamente dentro de estos ingresos. El diagrama de pastel de la imagen 6 nos permite

identificar nuevas fuentes de ingresos operacionales como lo son la venta de artículos

deportivos (camisetas, sudaderas, etc.). Como reflexión final, se debe destacar la suma de

355.863 millones de pesos que se recibieron como ingresos operacionales por parte de los

clubes, suma que representa un aumento de casi 4 veces los ingresos presentados en el año

2005, lo que refleja la tendencia del crecimiento de esta cifra y que representa más del 75%

de los activos consolidados.

53

Imagen 4: detalle de la composición de los ingresos operacionales para el año 2005. Informe desempeño

financiero 2003 – 2004 – 2005 de la Superintendencia de Sociedades, p. 4.

Imagen 5: distribución de ingresos operacionales entre los clubes para el año 2014 Comportamiento

financiero de los clubes de fútbol de la Superintendencia de Sociedades, diapositiva 16.

54

Imagen 6: detalle de la composición de los ingresos operacionales para el año 2014 Elaboración propia.

Revisando ahora los pasivos, se llega a la idea de que estos han aumentado 3,87 veces, cifra

que preocupa porque aumenta en mayor proporción que los activos, sin embargo, estas cifras

se adecuan a la ley anterior a la Ley 1445, en la medida en que los pasivos no superan por

tres veces el valor del patrimonio. En cuanto a la concentración entre los clubes, vemos que

en el informe del 2005 el 57% de los pasivos pertenecen a 5 clubes, mientras que en el

informe del 2014 los primeros 5 clubes del ranking de pasivos solo acaparan el 45% de los

pasivos. Así, vemos que el 14% de los clubes que antes poseía la mayoría del pasivo

consolidado ha reducido su participación, implicando que las deudas se encuentran mejor

distribuidas entre los 36 clubes. Acá vale la pena comentar que a pesar del monto importante

de pasivos que nos ilustra el informe consolidado del 2014, la situación es completamente

diferente a la que se presentaba en el 2005, ya que ahora los clubes pueden financiarse

fácilmente a través de mecanismos como la emisión de acciones, pueden afrontar estas

deudas con los activos líquidos mínimos que les exige la ley en todo momento y, de manera

general, ya no tienen forma de defraudar a sus acreedores al no poder realizar maniobras

antiéticas como la creación de un nuevo club que ocupe el lugar del club anterior.

21,7%

2,8%

16,8%

2,6%12,7%

15,3%

1,7%

5,0%

3,1%

18,3%

Ingresos operacionales por rubros - 2014

Taquilla Escuelas Derechos Deportivos

Préstamos Publicidad y propaganda Dimayor

Patrocinio Eventos (Nal e Int) Venta de artículos

Otros

55

En este punto es necesario hacer referencia a los costos y gastos operacionales que se exponen

únicamente en el informe del año 2005. Contablemente estos costos y gastos juegan un papel

fundamental en el flujo de caja de los clubes, y dentro de un balance general van a tener un

impacto directo dentro de la caja o se pueden representar como pasivos. Con lo anterior claro,

vemos que en el informe mencionado se identifica el valor de estos costos y gastos, siendo

este la suma de 95.872 millones de pesos. La composición de este valor se encuentra

graficada en la imagen 7, en donde es fácil identificar que los mayores desembolsos de dinero

se dan por pago de prestaciones sociales y sueldos.

Imagen 7: detalle de costos y gastos operacionales para el año 2005. Informe desempeño financiero 2003 –

2004 – 2005 de la Superintendencia de Sociedades, p. 12.

Luego de lo anterior, es clave referirnos al patrimonio, el cual aumentó 1,63 veces entre el

año 2005 y el año 2014. Para este punto, la información del informe del 2005 es muy

completa, y permite concluir que tan solo cuatro (4) de los 36 equipos poseían el 73% del

patrimonio consolidado. Así, casi ¾ del patrimonio estaban concentrados en el 11% de los

clubes con deportistas profesionales. Además, clubes como Millonarios y Junior tenían

patrimonios negativos, por lo que era claro que las finanzas de los clubes no se estaban

desarrollando de la mejor manera y la mayoría de los clubes generaba ganancias mínimas.

Era preocupante también que el capital social consolidado era tan solo de 20.792 millones,

representando el 18% de la composición del patrimonio, aquí queda reflejada entonces que

56

estos clubes no eran nada diferente a clubes de papel, ya que no tenían patrimonio producto

de la inexistencia de la obligación de los socos de pagar efectivamente para hacerse con sus

aportes.

Profundizando en el último punto, conviene revisar las utilidades de los clubes (o el resultado

neto del ejercicio contable consolidado). Así, se tiene que en el informe del 2005 el resultado

neto fue negativo, es decir, el informe consolidado permitió concluir que los clubes

obtuvieron pérdidas. A pesar de que la mitad de los 18 equipos de la categoría A generaron

ganancias, las pérdidas de la otra mitad fueron muy superiores, por lo que el resultado fue

negativo. Por otro lado, en el informe del 2014 se destaca la noticia de que por primera vez

en años el informe consolidado de los clubes con deportistas profesionales presentó

ganancias, caso que aplicó tanto para los clubes organizados como sociedades anónimas

como para los clubes organizados en asociaciones/corporaciones. Este hecho se volvió

tendencia, ya que en 2015 el informe consolidado también permitió concluir que se tuvieron

utilidades.

Finalmente, es pertinente entrar a revisar las sumas y valores estudiados con algunos

indicadores financieros. Puntualmente, y a partir de la información que se tiene, se revisará

la liquidez de los consolidados (activo / pasivo), la rotación de activos (ingresos

operacionales / activos), la utilidad operacional (ingresos operacionales / gastos y costos

operacionales), rentabilidad sobre el patrimonio (utilidad neta / patrimonio) y endeudamiento

(pasivo / activo) (tabla 6).

La liquidez resulta pertinente porque esta permite evaluar la capacidad que tiene la

organización para cumplir con sus deudas y otras obligaciones financieras. Entre más alto

sea el número es mejor, ante lo cual vemos que la liquidez del 2014 es peor que la del 2005

pero sigue estando por encima de 1, asegurando entonces que los clubes tienen pasivo

suficiente para afrontar sus deudas. Por supuesto, acá se debe tener en cuenta que estos

cálculos se realizan con base en los datos de los informes de la Superintendencia de

Sociedades, datos que no necesariamente reflejaban la situación real de los clubes ya que

57

estos podían manipular los avalúos de los derechos deportivos y no cobraban los aportes a

sus socios.

En cuanto a la rotación de activos, este indicador resulta relevante para evaluar la

productividad de cada peso ($) que se cuenta como activo. Así, vemos que el indicador del

2014 es mejor que el del 2005, significando que, por cada peso de activo, se generan 1,72

pesos de ingresos. Este indicador puntual incentiva a que los activos que se enuncian en los

balances generales tengan una adecuada valoración para que su productividad sea mayor,

evitando así que los clubes sobrevaloren los derechos deportivos que hacen parte de sus

activos.

El indicador de la utilidad operacional pretende revisar si las operaciones de la empresa

arrojan ganancias o pérdidas. Para el caso del 2005, se tiene que la operación no fue rentable,

ya que, al tener una utilidad de 0,93, significa que los gastos operacionales fueron mayores a

los ingresos. Este indicador es una alerta de que los clubes no se estaban gestionando de

manera correcta y que sus activos tenían mala productividad, al estar claro que no se

conseguían ingresos suficientes para afrontar los gastos.

Ahora, refiriéndonos a la rentabilidad sobre el patrimonio, este indicador resulta

supremamente importante, dado que refleja el rendimiento tanto de los aportes de cada

accionista, es decir, indica si la inversión fue fructífera o no. Vemos según la tabla que en el

2005 la rentabilidad fue negativa, por el hecho de que como utilidad neta se usó el valor de

las pérdidas del consolidado. Así, esta cifra significa que los socios no recibieron ningún tipo

de retorno por su inversión. Por otro lado, en el 2014 la rentabilidad sobre el patrimonio fue

de 0,02, indicando entonces que por cada peso invertido se generó una ganancia de 0,02

pesos, cifra que sin duda es baja pero que representa un escenario mucho más positivo al del

2005 al quedar claro que ya los clubes están generando ganancias.

Finalmente, revisamos el endeudamiento, indicador clave que permite ver que tantos activos

ofrece la sociedad como garantía para sus acreedores, es decir, por cada peso invertido en

activos, cuantos pesos están garantizando mis pasivos y se llegarían a usar como garantía

para el pago de estas obligaciones. Acá vemos que la cifra del 2005 es mejor que la del 2014,

58

sin embargo, se rescata que ambas cifras son menores a 1, significando que en ambos

consolidados los activos superan los pasivos y, en principio, los clubes no están endeudados

con sus acreedores. Adicionalmente, y con base en lo dispuesto en la Resolución No. 00768

del 2011, este nivel de endeudamiento está permitido. Sin embargo, debe hacerse la salvedad

de que para el año 2005 aún se manipulaban los activos, sobrevalorizando los derechos

deportivos, por lo que este tipo de indicadores nos da una guía de cómo se manejaban las

finanzas, pero no es conveniente tomarlas como cifras 100% veraces ni significativas.

2005 2014

Liquidez 2,71 1,72

Rotación de activos 0,48 0,79

Utilidad operacional 0,93 -

Rentabilidad sobre el patrimonio -0,01 0,02

Endeudamiento 0,37 0,58

Tabla 6: indicadores financieros a partir de los informes consolidados de los años 2005 y 2014. Elaboración

propia.

- Caso Club Deportivo los Millonarios (Azul y Blanco S.A.)

Para finalizar este análisis, es de mucha utilidad aterrizar tanto las normas como los informes

a un caso de un equipo puntual. Así, por disponibilidad de información se escogió el Club

Deportivo Los Millonarios (en adelante “Millonarios”), club con deportistas profesionales

que es uno de los equipos más galardonados del fútbol profesional colombiano.

Para el año 2005, Millonarios era el 6to club con mayor número de pesos recibidos como

ingresos operacionales. En dicho año ganó la suma de 6.981 millones de pesos. Sin embargo,

se debe anotar que en el año 2004 el club pasó por una reestructuración, ya que estaba en

crisis financiera desde el año 2003. Parte del éxito en el año 2005 fue el buen momento

deportivo del equipo, que generó una asistencia masiva y un impacto muy fuerte de parte de

la taquilla en estos ingresos operacionales. En cuanto a costos operativos, Millonarios fue el

5to equipo con mayores costos, acumulando gastos por 8.248 millones de pesos, cifra

59

superior a los ingresos recibidos y que generó una pérdida operacional, ubicando al club

como el 4to peor desempeño operacional entre los 18 clubes de la categoría A. Por último, y

como resultado neto, Millonarios generó tan solo una ganancia de 20 millones de pesos,

ubicándose en la mitad de la tabla en el ranking de este consolidado.

En cuanto al balance general del club, Millonarios registraba activos por un valor de 9.611

millones de pesos, pasivos por 13.624 millones de pesos y un patrimonio de -4.012 millones

de pesos. Situación que desde lo financiero es preocupante y que implicaba un

endeudamiento del 70%.

Al momento de la promulgación de la Ley 1445, Millonarios se encontraba en un mal

momento deportivo, ya que desde 1988 el club no lograba ningún título local. Como bien lo

menciona Trujillo, “a comienzos de 2011, luego de años de crisis económica y deportiva, el

club estuvo al borde de su liquidación, con un pasivo de 17 millones de dólares” (p. 220).

Ante esta situación, el club optó por convertirse en sociedad anónima, pero a través del

llamado “Plan B”11. Para conseguir los fondos requeridos, La nueva sociedad constituida,

Azul y Blanco S.A., emitió acciones para venta al público, emisión a través de la cual

consiguió los 3.001 socios requeridos, según la Ley 1445, para el monto que de los aportes

que se necesitaba. Más adelante, en 2012 la firma estadounidense Amber Capital Investment

Management compró el 20% de la sociedad, asegurando una estabilidad económica para el

club que se traduciría también en éxito deportivo al conseguir el campeonato de clausura de

2012.

El informe del 2014 permite ver que Millonarios obtuvo el 8,5% de los ingresos

operacionales totales, siendo el 3er club con mayores ingresos de este tipo. Además, es el

tercer equipo con mayores activos en dicho año, activos valorados en 42.241 millones de

pesos, suma que representa 4,39 veces los activos que el club tenía en el año 2005. Los

pasivos del club fueron de 22.062 millones de pesos, cantidad que representa un poco más

11 Como “Plan B” se entiende, en términos de los informes de la Superintendencia de Sociedades, el proceso a través del

cual el club no se convierte en sociedad anónima, sino que se crea una sociedad anónima diferente que compra los activos

y pasivos del club original, dejando así que la entidad anterior se liquide sin activos y pasivos.

60

de la mitad de los activos ya mencionados y que nos permite calcular el patrimonio del club,

cuyo valor es de 20.179 millones de pesos.

Habiendo visto lo anterior, se puede afirmar que Millonarios es un club que se vio

altamente beneficiado con la Ley 1445, ley que utilizó para convertirse en sociedad anónima

y que fue determinante para transformar totalmente su situación financiera y contable del año

2005, en donde el club venía presentando utilidades negativas y en donde a pesar de la

reestructuración interna no lograba consolidarse como una entidad sostenible.

61

CONCLUSIONES

Para finalizar esta investigación, conviene llegar a unas conclusiones luego de la revisión de

normas y su posterior análisis a la luz de los informes de la Superintendencia de Sociedades.

Así, se puede concluir en primer lugar que la organización de los clubes de fútbol en

Colombia ha sido regulada profusamente por normas que jamás se cumplieron. Es evidente

que en Colombia se ha regulado hasta la saciedad la forma como deben operar los clubes con

deportistas profesionales desde 1984. Esto desvirtúa el mito creado por la FIFA para impedir

controles que si el Estado regula la actividad del fútbol, se presenta una intervención indebida

que es sancionada con la expulsión del país como miembro de la FIFA. Es claro, también,

que a través de los jueces de la República se han fijado límites a las regulaciones deportivas

y se ha confirmado la capacidad que tiene el Estado de Colombia para regular cualquier

actividad en el territorio colombiano. Luego de la revisión de normas, es evidente que en

Colombia este tema ha sido altamente regulado y reglado, por lo que la entrada de las PNI al

fútbol y los malos resultados financieros de inicio de siglo no se deben a poca legislación

sino a su deficiente aplicación y la carencia de inspección, vigilancia y control por parte del

Estado.

Está claro luego de la revisión de normas que hasta la Ley 1445 de 2011, el Estado

colombiano permitió que las PNI intervinieran en la estructura del fútbol. Lo que ha mostrado

es la voluntad de evitar que estas personas sean las que controlan los clubes, sin embargo,

hoy en día siguen existiendo fuertes nexos entre los equipos y personas vinculadas a

actividades ilegales.

Como conclusiones derivadas de la aplicación de las normas estudiadas en el tiempo,

podemos decir en primer lugar que gracias a la Ley 1445 de 2011, se crearon los mecanismos

para que los clubes comiencen a operar como verdaderas empresas deportivas. Por esto, se

volvieron entidades más competitivas, eliminaron la necesidad de recibir recursos del Estado

y actualmente en el informe consolidado generan utilidades. Además, y como lo demuestran

los informes, los clubes han logrado diversificar sus ingresos y depender menos de las fuentes

de dinero convencionales como la taquilla.

62

Otra idea final que debemos destacar es que por mucho tiempo no hubo ningún tipo de control

sobre los clubes de fútbol, por lo que las leyes que estaban vigentes en los ochentas no se

cumplían. Fue hasta la década de los noventas en donde la nueva constitución y las normas

expedidas permitieron que entidades como Coldeportes ejercieran un control real y efectivo.

Además, estas entidades exigen el rendimiento de informes en donde los clubes deben

demostrar el debido cumplimiento de la ley y el constante esfuerzo por evitar la captación de

dineros provenientes de actividades ilícitas. Adicionalmente, entidades como Acolfutpro

realizan un seguimiento del cumplimiento de los deberes de estas autoridades supervisoras.

Además, a través de los cambios introducidos en los noventas y con la ayuda de la

jurisprudencia de la Corte Constitucional y la tarea de Acolfutpro, los clubes dejaron de

descapitalizarse al cumplir con los pagos de sus obligaciones laborales y evitando el riesgo

de perder los derechos deportivos, teniendo en cuenta que estos pueden pertenecer a los

propios jugadores si se van libres del club. Directamente relacionado con lo anterior, se debe

destacar la labor de Acolfutpro, asociación que informó a los jugadores sobre sus derechos y

los empoderó para que estos utilizaran las herramientas legales que existen para defender lo

que por ley les corresponde, como se demuestra con el caso de Edwin Valencia por ejemplo.

Se puede afirmar que la Ley 1445 fue un éxito en cuento a la conversión de clubes, dado que

hoy en día 31 de los 36 clubes deportivos están constituidos como S.A. Así, esta ley ofreció

mecanismos que evitaban que los clubes se convirtieran a S.A. sin la defraudación de sus

acreedores y ofreciendo herramientas para que el proceso fuera legítimo y transparente. Sin

embargo, la conversión masiva se debió, entre otros factores, a la posibilidad que ofrecía las

SA a las PNI de mantener el control de sus clubes. Esto último al tener en cuenta que las

sociedades del Código de Comercio no se encuentran tan vigiladas como si lo están

actualmente las ASAL. Acá vale la pena hacer la aclaración de que a pesar de que los clubes

son sociedades anónimas y se encuentran reguladas por disposiciones que regulan también a

las SA comerciales, el tipo societario de estos clubes tiene algunos elementos

diferenciadores.

63

Así mismo, la ley fue determinante para establecer sanciones adecuadas y procesos de

recuperación económica para todos aquellos clubes que presentan graves problemas

financieros o no cumplen adecuadamente su objeto. Sin embargo, este tipo de disposiciones

aún no se implementan con rigurosidad, teniendo como ejemplo al Pereira, equipo que fue

declarado en liquidación pero que sigue compitiendo.

Con base en la comparación entre los informes de la Superintendencia de Sociedades, se

puede concluir que las finanzas de los clubes van en progreso, en la medida en que tanto

activos como patrimonio aumentaron de manera considerable. Sin embargo, el monto que

más aumentó fueron los pasivos, por lo que es importante tomar este suceso como una alerta

de que la situación del endeudamiento excesivo de los clubes aún es un tema delicado.

También se puede concluir que la Ley 1445 no ha invertido la balanza entre los clubes

“grandes” y los demás clubes, dado que aún la mayoría de los activos y de los ingresos

pertenecen a la élite de los clubes tradicionales. En cuanto a la gestión de los clubes, se debe

rescatar el hecho de que se han identificado nuevas fuentes de ingreso, lo que ha provocado

que se distribuya mejor la obtención de dinero y no se concentre, como se hacía en 2005, en

la taquilla, ya que esta resulta ser excesivamente variable. Finalmente, y teniendo en cuenta

que en el informe del año 2014 el consolidado contable de los clubes con deportistas

profesionales presentó una utilidad positiva, se puede afirmar que la Ley 1445 si ha implicado

un cambio en la forma de gestionar los clubes.

Los informes también son el reflejo de que, con algunas excepciones, los clubes profesionales

están al día con sus obligaciones y tienen un patrimonio compuesto por diferentes activos

que les permiten no solo el pago de sus obligaciones sino el desarrollo del deporte y de un

equipo cada vez más competitivo.

Haciendo referencia ahora a los indicadores financieros, podemos observar que en general el

desempeño actual de los clubes es mejor que el del año 2005, teniendo en cuenta

especialmente indicadores como la rotación de activos y la rentabilidad sobre el patrimonio.

Sin embargo, estos indicadores son claros al evidenciar que el nivel de pasivos aún es muy

64

alto y que, a pesar del progreso conseguido, aún hay mucho lugar para mejorar la estructura

financiera de los clubes.

Como un punto para un debate posterior, surge la idea de que es contradictorio el hecho de

que el Estado tiene el deber de promover el deporte, pero impone una carga considerable a

los clubes organizados como sociedades anónimas (que son la gran mayoría de los clubes)

en materias como los tributos que estos deben pagar y una excesiva lista de requisitos que

deben cumplir y que no aplican para otro tipo de sociedades.

Luego de haber revisado todo lo anterior, se puede concluir que, si bien la Ley 1445 de 2011

ofrece una seria de ventajas para los clubes con deportistas profesionales que se organizan

como S.A. como lo son la mayor transparencia, mejor gobierno corporativo e incentivos para

la inversión de capital, este vehículo de asociación no asegura el éxito. El verdadero factor

clave para que un club se desempeñe bien financieramente y tenga una organización

transparente y que maneje efectivamente los recursos es la estrategia administrativa que se

emplee al interior de la organización. Esto acompañado de un cumplimiento rigoroso de las

disposiciones normativas contenidas en la Ley 1445 de 2011 y en las demás normas

anteriores a esta, ya que las anteriores establecen unos lineamientos que han demostrado que

ayudan a mejorar la situación financiera de los clubes. Ejemplo claro de lo anterior es el

Deportivo Cali, uno de los pocos clubes que no se convirtió en S.A. y que a pesar de ser una

ASAL, es el único equipo en Colombia con un estadio propio y que puede presumir por tener

un buen rendimiento financiero y deportivo.

Finalmente, queremos identificar algunos retos que aún están por resolverse o que deben ser

revisados al momento de expedir nuevas leyes para la organización de los clubes.

Identificamos los siguientes:

- Lograr una distribución más justa y equitativa de los recursos entre los equipos de

futbol.

- Evitar que la mayoría de las ganancias de los clubes entren directamente al

patrimonio de sus accionistas y no sean parte del patrimonio del club.

65

- Lograr que todos los clubes presenten informes contables con las normas de

contabilidad internacional (NIIF) para obtener resultados plenamente

comparables y consolidables.

- Lograr que los clubes reduzcan aún más la participación de la taquilla en sus

ingresos, ya que es una fuente de alta fluctuación y que no ofrece tantas ganancias

como si lo generan las transferencias al exterior o el merchandising. Así, es

necesario que los clubes desarrollen estas nuevas fuentes de financiación para que

no puedan utilizar la justificación de que al ser dependientes de la taquilla, el pago

de sus obligaciones laborales depende del rendimiento deportivo y la asistencia

que logren en los torneos.

66

BIBLIOGRAFÍA

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67

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Artículos de Prensa

El Proceso de los Clubes como Empresas Deportivas. (2016, Octubre) El Futbolista, 8-11.

La unión ha hecho la fuerza. (2016) El Futbolista, Edición Especial 12 años. 12 - 15

La ley 1445 de 2011. (2016) El Futbolista, Edición Especial 12 años. 16-17

69

ANEXO 1

Con base en la respuesta al derecho de petición con No. 331-7591 del 12 de agosto de 2014,

a continuación, se presenta el listado de los clubes con deportistas profesionales que han

desaparecido desde 1991 hasta la actualidad, sin pasar por el proceso de liquidación y

disolución que establece la ley colombiana.

1. Cúcuta Deportivo

2. Independiente Popayán

3. Deportivo Rionegro

4. Deportivo Antioquia

5. River Plate

6. Lanceros

7. Deportivo Unicosta

8. Cartago Fútbol Club

9. Bello Fútbol Club

10. Alianza Llanos

11. Club el Cóndor

12. Cooperamos Tolima

13. Atlético Córdoba

14. Atlético Buenaventura

15. Real Floridablanca

16. Deportivo Pereira

17. Itagüí Fútbol Club

18. Univalle

19. Club Soledad

20. Atlético Popayán

21. Cúcuta 2001

22. Unión Meta Fútbol Club

23. Lanceros Fair Play

24. Unión Soacha

25. Chicó Fútbol Club

26. Atlético Barranquilla

27. Club Deportivo Fair Play

28. Club Deportivo el Cerrito

29. Centauros Villavicencio

30. Bogotá Chicó Fútbol Club

31. Dimerco Popayán

32. Los Pumas del Casanare

33. Cóndor Real Bogotá

34. Chía Fair Play

35. Expreso Rojo

36. Real Sincelejo

37. Chía Fútbol Club

38. Cóndor Deportivo Sur Bogotá

39. Johan Fútbol Club

40. Dépor Fútbol Club

41. Deportivo Antioquia Florida

Soccer

42. Atlético Bello

43. Corporación Deportiva Itagüí

Ditaires

44. Palmira Fútbol Club

45. Escuela Carlos Sarmiento Lora

46. Dinastía Deportes

47. Academia Bogotana

48. Deportivo Armenia

49. Atlético Guadalajara

50. Risaralda Fútbol Club

51. Fiorentina Fútbol Club

52. Samarios

53. Santa Rosa

54. Centauros

55. Atlético la Sabana

56. Sucre Fútbol Club

57. Pacífico

58. Corporación Deportiva Academia

59. Bajo Cauca

60. Dépor Jamundí