Reportaje 24122009

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C M Y K C M Y K La Voz del Sureste Lunes 21 de diciembre de 200917 Diseño e ilustración Fco. Javier Molina PORRicardo López E n Navidad no to- dos comen pavo. Pollo relleno, pollo horneado, lomo, pierna me- chada, bacalao, pozole, botanas diversas como la ensalada de camarón, carne molida, patitas envinagradas; sopa fría, espaguetti, frijoles fritos, ensalada de novia, re- fresco, cerveza, y ponche, en- tre otros alimentos y bebidas, forman parte del menú navi- deño en Chiapas. En estas fechas decem- brinas, uno de los papeles centrales lo juega la cena de Navidad porque para la co- munidad sociable es uno de los momentos más especia- les, ya que es uno de los dos días más sobresalientes del último mes de cada año, en el cual la familia se reúne para hablar, reír, recordar, com- partir y cenar. Sin embargo el menú varia, se tiene la percepción de que por lo regular en los hogares que celebran estas fechas, se come el tradicional pavo o gua- jolote, pero dista de ser real, en la entidad chiapaneca. Un estudio realizado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en 2005, indica que el platillo tradicional en México desde tiempos de la colonia es el pavo por la vigilia de la Na- vidad (nacimiento de Cristo), en donde en el país se consu- mían anualmente 3 millones de guajolotes. Pero en Chiapas, según una encuesta realizada por este medio informativo, lo más recurrido es el pollo en dife- rentes versiones: relleno, hor- neado o frito, acompañado de sopa fría o frijoles. Además de diversas bo- tanas con las que cuenta la gastronomía chiapaneca, esto lo acompañan con bebidas re- frescantes embotelladas, cer- veza, sidra y, en el último de los casos, vino. En promedio, un hogar chia- paneco desembolsa alrededor de 600 pesos para la cena de Navidad, incluyendo la bebi- da con la que se acompañará el platillo, pero la cantidad puede variar hasta llegar a los 2 mil pesos, dependiendo del número de personas que inte- grarán la celebración. En entrevista con María Girón, ama de casa, dijo: “Yo hago mi pollito horneado por- que para pavo no alcanza, peor ahorita con la crisis, a ver si nos alcanza para el pollo”. Patricia Jiménez, que estaba cerca, comentó: “Y ni hablar de las cervezas, con refresco nomás”. Alguien más comentó que pagaría sus deudas y si le al- canzaba “haré cena, si no hay, para qué ser imprudente”. Incluso para otras personas es un insulto preguntarles si tendrán cena de Navidad, ya que no cuentan con trabajo, o un salario justo en donde se emplean. Muchos, con la ilusión que albergan sus corazones, dije- ron que “no importa, total es una fecha especial, diosito nos dará más” exclamó un grupo de vendedoras en un mercado del centro de la ciudad. En información obtenida del medio informativo “Re- forma”, de circulación nacio- nal, la Sección Nacional de Productores de Guajolote de la Unión Nacional de Avicul- tores enfatizó que en 2009 los precios al consumidor de pavo ahumado fueron 28 por ciento más caros que el año pasado. Hace un año, el or- ganismo informó que cada kilogramo de pavo ahumado se comercializó hasta en 50 pesos por kilo, pero para este año su costo sería de 64 pesos en promedio. En el caso del pavo natural, los precios au- mentaron 8 porciento. A nivel nacional, los cos- tos que prevalecen en la cena, son similares en la entidad chiapaneca. La Dirección Ge- neral de Estudios sobre Con- sumo (DGEC) de la Profeco realizó del 2 al 8 de diciembre 2009 un sondeo telefónico en Monterrey, Guadalajara, Ciu- dad de México y su área co- nurbada. De acuerdo con los resul- tados del sondeo, la mayoría (96 por ciento) de quienes ce- lebran esta temporada lo ha- rán con una cena en Noche- buena (88%) y otra en fin de año (89%). Los participantes cenarán alimentos prepara- dos en casa y el gasto prome- dio para cada ocasión será de 600 pesos, como se muestra a continuación: no todos comen pavo En Navidad, L a cena navideña nació en el período oscurantista de la Edad Media, y posterior- mente se vio enormemente enriquecido por la “globali- zación” de entonces dada a través del intercambio entre este y oeste gracias a las violentas cruzadas. En realidad no todos comían lo mis- mo, pues la cena navideña dependía del escalón al cual perteneciera uno en la so- ciedad del medievo. Además, no era una sola cena o banquete sino varios, ya que las festividades religiosas duraban varios días en aquellos entonces. Navidad para los cristianos ingleses y escoceses contaba con 12 días, concluyen- do con el Día de Reyes Magos, cuando ya todo mundo empacaba y se iba a casita. El señor medieval, por supuesto, comía gallina o ganso, dado que los campesinos que vivían en sus tierras tenían la obliga- ción de hacerle un regalo de aves y hasta la cerveza que había sido procesada por largo tiempo por el pobre. El señor me- dieval daba a sus siervos pan, queso, y si era generoso, sopa no muy espesa o pla- tos con carne. La historia de la cena navideña es ex- tensa. Cada país, región o grupo étnico prepara su menú con características par- ticulares. En el periodo colonial, el 24 de diciem- bre por la noche lo habitual era guardar vigilia, y se acostumbraba comer pesca- dos y hierbas, como el atún tradicional, bacalao o romeritos, en algunos puntos de México. El guajolote lo comían el 25 de diciem- bre. El ave representaba elegancia y ri- queza que sustituía al pavo real, especie que durante la Edad Media no era símbo- lo de unión, de gusto y fortuna, sino que también representaba un elemento ante el cual los caballeros realizaban juramen- to, como la conquista de tierras o derrotar al enemigo en batalla. Una gran variedad de platillos de ori- gen extranjero, en este país, se les ha dado personalidad propia. El ponche tie- ne influencia inglesa; la palabra “Ponch” significa té con pasitas y ron. Sin embar- go, aquí, se le agregan una gran variedad de frutas y trago. Los postres como los buñuelos proviene de una antigua tradición que ha adquirido rasgos locales, ya que los romanos hacían una especie de bolas que amasaban con sus puños, a los que llamaba puñuelo. Historia En entrevista con la delegada federal de la Profeco en Chia- pas, Cecilia Franco Zapata, co- mentó que “en los restaurantes se les exhortó a poner los pre- cios a la vista, para que el con- sumidor elija dónde quiere gas- tar su dinero en estas fechas decembrinas, para verificar que las promociones que ofer- tan tengan credibilidad”. Agregó que tal y como arroja- ron los resultados realizados por La Voz del Sureste, el pollo y los frijoles son indiscutibles en la cena navideña de la fami- lia chiapaneca. Por eso, no to- dos comen pavo. En promedio, un hogar chiapaneco desembolsa alrededor de 600 pesos para la cena de Navidad, incluyendo la bebida con la que se acompañará el platillo, pero la cantidad puede variar hasta llegar a los 2 mil pesos, dependiendo del número de personas que integrarán la celebración. En México la Nochebuena, en algunos casos, culmina con la cena, en la que tradicionalmente se reúne toda la familia y amigos alrededor de una mesa, en el cual se sirve la comida y bebida para esa ocasión especial. En Chiapas, regularmente pasada la media noche, tanto en Nochebuena como en Año Nuevo, se encienden petardos, fuegos artificiales o los conocidos “triquis”, en señal de alegría y esperanza. Reserva con anticipación y confirma tu asis- 1. tencia. Observa que todos lo precios estén a la vista. 2. Infórmate previamente sobre lo que no incluye 3. el menú y su precio. Contempla la propina en tu presupuesto. 4. Verifica que no te realicen cobros injustifica- 5. dos. No permitas que te condicionen el consumo. 6. No permitas que te cobren cuotas extraordi- 7. narias o compensatorias por dar servicio a co- mensales con algún tipo de discapacidad. Solicita que te respeten la reservación por lo 8. menos 15 minutos. Si llegas en vehículo, solicita a los acomodado- 9. res que se identifiquen plenamente. Ten presente que tienes derecho a no ser dis- 10. criminado. 10 puntos para salir a cenar a restaurante en Navidad Entrevista Con una cena NOTA: Los totales no suman 100% por que son respuestas independientes Este añola celebración será..... Gastos promedio en Nochebuena $608 Fin de año $600 Preparando en casa Pagando en efectivo Y el gasto será igual al año pasado Fin de año Nochebuena 88% 81% 99% 99% 37% 38% 78% 89% Gasto promedio en... $1,175 $1,127 $608 $600 $551 $470 Regalos Posada Juguetes Decoraciones Cena de Nochebuena Cena de fin de año Fuente: Sondeo telefónico sobre gastos de fin de año, Profeco, 2009.

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En Navidad no to-dos comen pavo. Pollo relleno, pollo horneado, lomo, pierna me-chada, bacalao,

pozole, botanas diversas como la ensalada de camarón, carne molida, patitas envinagradas; sopa fría, espaguetti, frijoles fritos, ensalada de novia, re-fresco, cerveza, y ponche, en-tre otros alimentos y bebidas, forman parte del menú navi-deño en Chiapas.

En estas fechas decem-brinas, uno de los papeles centrales lo juega la cena de Navidad porque para la co-munidad sociable es uno de los momentos más especia-les, ya que es uno de los dos días más sobresalientes del último mes de cada año, en el cual la familia se reúne para hablar, reír, recordar, com-partir y cenar.

Sin embargo el menú varia, se tiene la percepción de que por lo regular en los hogares que celebran estas fechas, se come el tradicional pavo o gua-jolote, pero dista de ser real, en la entidad chiapaneca.

Un estudio realizado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en 2005, indica que el platillo tradicional en México desde tiempos de la colonia es el pavo por la vigilia de la Na-vidad (nacimiento de Cristo), en donde en el país se consu-mían anualmente 3 millones de guajolotes.

Pero en Chiapas, según una encuesta realizada por este medio informativo, lo más recurrido es el pollo en dife-rentes versiones: relleno, hor-neado o frito, acompañado de sopa fría o frijoles.

Además de diversas bo-tanas con las que cuenta la gastronomía chiapaneca, esto lo acompañan con bebidas re-frescantes embotelladas, cer-veza, sidra y, en el último de los casos, vino.

En promedio, un hogar chia-paneco desembolsa alrededor de 600 pesos para la cena de Navidad, incluyendo la bebi-da con la que se acompañará el platillo, pero la cantidad puede variar hasta llegar a los 2 mil pesos, dependiendo del número de personas que inte-

grarán la celebración. En entrevista con María

Girón, ama de casa, dijo: “Yo hago mi pollito horneado por-que para pavo no alcanza, peor ahorita con la crisis, a ver si nos alcanza para el pollo”.

Patricia Jiménez, que estaba cerca, comentó: “Y ni hablar de las cervezas, con refresco nomás”.

Alguien más comentó que pagaría sus deudas y si le al-canzaba “haré cena, si no hay, para qué ser imprudente”. Incluso para otras personas es un insulto preguntarles si tendrán cena de Navidad, ya que no cuentan con trabajo, o un salario justo en donde se emplean.

Muchos, con la ilusión que albergan sus corazones, dije-ron que “no importa, total es una fecha especial, diosito nos dará más” exclamó un grupo de vendedoras en un mercado del centro de la ciudad.

En información obtenida del medio informativo “Re-forma”, de circulación nacio-nal, la Sección Nacional de Productores de Guajolote de la Unión Nacional de Avicul-tores enfatizó que en 2009

los precios al consumidor de pavo ahumado fueron 28 por ciento más caros que el año pasado. Hace un año, el or-ganismo informó que cada kilogramo de pavo ahumado se comercializó hasta en 50 pesos por kilo, pero para este año su costo sería de 64 pesos en promedio. En el caso del pavo natural, los precios au-mentaron 8 porciento.

A nivel nacional, los cos-tos que prevalecen en la cena, son similares en la entidad chiapaneca. La Dirección Ge-neral de Estudios sobre Con-sumo (DGEC) de la Profeco realizó del 2 al 8 de diciembre 2009 un sondeo telefónico en Monterrey, Guadalajara, Ciu-dad de México y su área co-nurbada.

De acuerdo con los resul-tados del sondeo, la mayoría (96 por ciento) de quienes ce-lebran esta temporada lo ha-rán con una cena en Noche-buena (88%) y otra en fin de año (89%). Los participantes cenarán alimentos prepara-dos en casa y el gasto prome-dio para cada ocasión será de 600 pesos, como se muestra a continuación:

no todos comen pavoEn Navidad,

La cena navideña nació en el período oscurantista de la Edad Media, y posterior-mente se vio enormemente enriquecido por la “globali-zación” de entonces dada a

través del intercambio entre este y oeste gracias a las violentas cruzadas.

En realidad no todos comían lo mis-mo, pues la cena navideña dependía del escalón al cual perteneciera uno en la so-ciedad del medievo. Además, no era una sola cena o banquete sino varios, ya que las festividades religiosas duraban varios días en aquellos entonces.

Navidad para los cristianos ingleses y escoceses contaba con 12 días, concluyen-do con el Día de Reyes Magos, cuando ya todo mundo empacaba y se iba a casita. El señor medieval, por supuesto, comía gallina o ganso, dado que los campesinos que vivían en sus tierras tenían la obliga-ción de hacerle un regalo de aves y hasta la cerveza que había sido procesada por largo tiempo por el pobre. El señor me-dieval daba a sus siervos pan, queso, y si era generoso, sopa no muy espesa o pla-tos con carne.

La historia de la cena navideña es ex-tensa. Cada país, región o grupo étnico prepara su menú con características par-ticulares.

En el periodo colonial, el 24 de diciem-bre por la noche lo habitual era guardar vigilia, y se acostumbraba comer pesca-dos y hierbas, como el atún tradicional, bacalao o romeritos, en algunos puntos de México.

El guajolote lo comían el 25 de diciem-bre. El ave representaba elegancia y ri-queza que sustituía al pavo real, especie que durante la Edad Media no era símbo-lo de unión, de gusto y fortuna, sino que también representaba un elemento ante el cual los caballeros realizaban juramen-to, como la conquista de tierras o derrotar al enemigo en batalla.

Una gran variedad de platillos de ori-gen extranjero, en este país, se les ha dado personalidad propia. El ponche tie-ne influencia inglesa; la palabra “Ponch” significa té con pasitas y ron. Sin embar-go, aquí, se le agregan una gran variedad de frutas y trago.

Los postres como los buñuelos proviene de una antigua tradición que ha adquirido rasgos locales, ya que los romanos hacían una especie de bolas que amasaban con sus puños, a los que llamaba puñuelo.

Historia

En entrevista con la delegada federal de la Profeco en Chia-pas, Cecilia Franco Zapata, co-mentó que “en los restaurantes se les exhortó a poner los pre-cios a la vista, para que el con-sumidor elija dónde quiere gas-tar su dinero en estas fechas decembrinas, para verificar que las promociones que ofer-tan tengan credibilidad”. Agregó que tal y como arroja-ron los resultados realizados por La Voz del Sureste, el pollo y los frijoles son indiscutibles en la cena navideña de la fami-lia chiapaneca. Por eso, no to-dos comen pavo.

En promedio, un hogar chiapaneco desembolsa alrededor de 600 pesos para la cena de Navidad, incluyendo la bebida con la que se acompañará el platillo, pero la cantidad puede variar hasta llegar a los 2 mil pesos, dependiendo del número de personas que integrarán la celebración.

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Reserva con anticipación y confirma tu asis-1. tencia.Observa que todos lo precios estén a la vista.2. Infórmate previamente sobre lo que no incluye 3. el menú y su precio.Contempla la propina en tu presupuesto. 4. Verifica que no te realicen cobros injustifica-5. dos.No permitas que te condicionen el consumo.6. No permitas que te cobren cuotas extraordi-7. narias o compensatorias por dar servicio a co-mensales con algún tipo de discapacidad.Solicita que te respeten la reservación por lo 8. menos 15 minutos.Si llegas en vehículo, solicita a los acomodado-9. res que se identifiquen plenamente.Ten presente que tienes derecho a no ser dis-10. criminado.

10 puntos para salir a cenar a restaurante en Navidad Entrevista

Con una cena

NOTA: Los totales no suman 100% por que son respuestas independientes

Este añola celebración será.....Gastos promedio en Nochebuena $608

Fin de año $600

Preparando en casa

Pagando en efectivo

Y el gasto será igual al año pasado

Fin de añoNochebuena

88% 81%

99% 99%

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Gasto promedio en...

$1,175$1,127

$608$600 $551 $470

Regalos PosadaJuguetes DecoracionesCena deNochebuena

Cena defin de año

Fuente: Sondeo telefónico sobre gastos de fin de año, Profeco, 2009.