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UNAMÓ R G A N O I N F O R M A T I V O D E L A U N I V E R S I D A D N A C I O N A L A U T Ó N O M A D E M É X I C O

Ciudad Universitaria16 de junio de 2011Número 4,345ISSN 0188-5138

Reseña del Informe

16 de junio de 201120

LAURA ROMERO

El Instituto de Biología, pilar enel resguardo de la biodiversidad

Tila María Pérez Ortiz presentó el cuarto informe de laboresde su segundo periodo al frente de la entidad

El Instituto de Biología (IB)se consolida como el pilar mexi-cano para el conocimiento de labiodiversidad y el resguardode su patrimonio, mediante lascolecciones nacionales, con unaclara pertinencia social en estostiempos de severa crisis am-biental y de pérdida masiva dela riqueza natural. Asimismo, seperfila como uno de los grandesactores mundiales en la cienciade la informática en la materia yde nuevos descubrimientos.

Su directora, Tila MaríaPérez Ortiz, presentó el cuartoinforme de labores de su se-gundo periodo al frente de laentidad (2003-2011). Recordóque la misión del Instituto es des-arrollar investigación científicaque contribuya al conocimientode la diversidad biológica, a suconservación y aprovecha-miento sustentable.

Ante el rector José NarroRobles sostuvo que entre losprogramas estratégicos de sugestión estuvo la creación deuna Unidad de Informática de laBiodiversidad (Unibio), que re-úne, organiza y analiza los datosrespectivos de México a partirde colecciones científicas, parael desarrollo de la investigación.

El plan de trabajo de Biolo-gía está sustentado en unahistoria de décadas. Fue fundadoen 1929 y heredó la tradiciónnaturalista del país. Con sucreación se institucionalizó lamateria como una disciplinacientífica y se heredaron lascolecciones nacionales.

Hoy en día sus áreas deinvestigación se agrupan en co-nocimiento, aprovechamiento yconservación de la biodiversidad.Su comunidad se conforma por73 investigadores, 88 técnicosacadémicos, 18 posdoctorados,182 miembros del personal admi-nistrativo y 546 alumnos de todoslos niveles.

769 nuevas especies

Informó que en los últimos ochoaños se publicaron mil 34 artículosen revistas indizadas, con un in-cremento constante. En el mismoperiodo sumaron cuatro artículosdados a conocer en Science y elmismo número en Nature. A ellose añadieron otros en extenso,en memorias, capítulos de libros ylibros, para un promedio de 4.4productos por investigador.

Pérez Ortiz destacó otra pro-ducción fundamental que sustentala actividad: la descripción, en elperiodo, de 769 nuevas especies. Elobjetivo es descubrirlas, describirlasy clasificarlas, así como contar con losejemplares en las colecciones.

A esa tarea se dedica 50 porciento de los investigadores y 40por ciento de los técnicos académi-cos; de manera destacada lo haceHarry Brailovsky, quien describió172 especies de insectos y ocupa elprimer lugar de su área en el mundo,y Mario Souza, quien hizo lo propio

con más de 30 plantas vas-culares (árboles).

Una de las funciones priori-tarias del Instituto, continuó, es laformación de recursos humanosde alto nivel. En los últimos ochoaños se graduaron más de 500alumnos: 251 de licenciatura, 219de maestría y 77 de doctorado.

Además de los tradicionalescursos semestrales de licen-ciatura y posgrado, el personalimpartió los llamados cursi-llos, de menos de 40 horas, yuna gran cantidad de talleres.Ejemplo de eso fueron los decapacitación a centros de in-vestigación de Guatemala,Honduras y El Salvador, ac-tualización al personal delINEGI para el reconocimientode árboles de zonas tropica-les e, incluso, un diplomado

de ilustración científica.

Todo un museode historia natural

La directora resaltó las actividadescuratoriales de los académicos enlas colecciones biológicas naciona-

Formación de recursos humanos.Clasificación de colecciones.

La directora.

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les, a cargo del IB, en las cuales secuenta, en la actualidad, con unmillón 338 mil 580 ejemplares en elHerbario Nacional, y dos millones205 mil en las 10 colecciones zooló-

gicas. Se trata del museo de historianatural de la Universidad.

La entidad académica apoyó adiversos sectores nacionales me-diante la elaboración de ocho normastécnicas, además de varios dictá-menes elaborados por miembrosdel personal. Sus académicos for-maron parte de numerosos comitésde expertos para las secretaríasdel Medio Ambiente y RecursosNaturales, y de Agricultura, Gana-dería, Desarrollo Rural, Pesca yAlimentación, entre otras instan-cias gubernamentales.

Tila María Pérez mencionó queademás de los apoyos especialesrelacionados con equipamiento, la-boratorios de biología molecular,procesador de tejidos y gabinetes

de colecciones, se recibió finan-ciamiento para la construcción dela sala de videoconferencias y lle-var ese medio de comunicación alas estaciones de Chamela y Los

Tuxtlas, localizadas en la zonas nú-cleo de reservas de la biosfera.

Infraestructura

Además, se realizaron grandes tra-bajos de infraestructura en el JardínBotánico, desde la rehabilitacióndel acceso, con andador, caseta devigilancia y plazoleta, hasta elreacondicionamiento de la sala deexposiciones, el cambio del techodel Invernadero Faustino Miranda,o la construcción y remodelación debaños. Asimismo, se edificó undermestario o lugar de preparacióninicial de materiales que serán ingre-sados a las colecciones.

Mediante un proyecto con Pemex-Petroquímica se desarrolló y puso en

operación el Parque EcológicoJaguarundi, como centro de culturapara la conservación.

La planta académica, formada por73 investigadores, se ha promovido.Ejemplo de ello es que el número deinvestigadores titulares C se incre-mentó en 10, hasta 2010; lo mismoocurrió en el Sistema Nacional deInvestigadores: de cuatro, nivel III, en2003, pasaron a 13 este año.

Al hablar de los premios, citóentre otros, el de Robert Bye yEdelmira Linares, quienes recibie-ron de la Society for Economic Botanyel reconocimiento internacional 2010,o el entregado por el gobierno mexi-cano a Antonio Lot, por su importantecontribución al conocimiento de lasplantas acuáticas en los humedalesde México.

Otra faceta del Instituto, dijo PérezOrtiz, es su vigoroso programa edi-torial. Los Anales del Instituto deBiología pasaron a ser la RevistaMexicana de Biodiversidad, que ac-tualmente se encuentra en el ScienceCitation Index con factor de impacto,y que cada vez más recibe un mayornúmero de contribuciones.

En este periodo, destacó,salió otro volumen de la serieFlora mesoamericana, proyec-to en el que colaboran tambiénel Missouri Botanical Garden y elBritish Museum of Natural History.Igualmente, el libro Flora y faunamexicanas de los centenarios.

También habló de la publi-cación de La real expediciónbotánica a Nueva España, edi-tada por Siglo XXI, que era unanhelo del IB desde antes quefuera Instituto.

Por último, Tila María Pérezhabló de la participación de laentidad en los años internaciona-les de la Tierra, de la Evolucióny la coordinación del Año de laBiodiversidad, así como el pa-pel que desempeña al presidirel Comité Técnico de la Reser-va Ecológica del Pedregal deSan Ángel.

En su oportunidad, José Na-rro expresó que por entidadesacadémicas como el Instituto deBiología, la Universidad puedeexplicar buena parte de su gran-deza. Se trata de una instanciaque tiene historia y que se haconvertido en una comunidadmuy grande y productiva.

Es un Instituto que cumplecabalmente con las tareas que sedesarrollan en esta casa de es-tudios: investigación, formaciónde recursos humanos y difusión.

Asistieron al informe los coor-dinadores de la InvestigaciónCientífica y de Humanidades,Carlos Arámburo de la Hoz, yEstela Morales Campos, respec-tivamente, directores de centrose institutos del Subsistema de laInvestigación Científica, acadé-micos y alumnos del IB.

Recolección de plantas.

Descubrimiento de especies.

Remodelación del Jardín Botánico. Fotos: Benjamín Chaires.