Resumen completo castoriadis

25

Click here to load reader

description

 

Transcript of Resumen completo castoriadis

Page 1: Resumen completo castoriadis

RESUMEN UNIDAD IV

La ontología tradicional y heredada, fundante de la modernidad, concibe al ser como algo racional y determinado. Si algo esta determinado, lo está de una vez desde siempre y para siempre. Permanece igual de por vida. Y si cambia, los modos de su cambio y las formas de ese cambio ya están pre-determinados. El tiempo implica un devenir constante e implica transformación. Si uno pensara que el ser es algo determinado, estaría negando el tiempo, porque plantear que el ser es de una vez y para siempre es admitir que no son posibles las transformaciones o que más allá de las transformaciones, esas transformaciones ya están contenidas y previstas en la determinación del ser. Pensar el ser como algo determinado es negar el tiempo como creación.

Pero para Castoriadis, el ser es indeterminado, aunque abierto a distintas formas de organización y determinación, que son creaciones. La creación para Castoriadis es creación de una forma (socio-cultural) Si el ser es algo que no está determinado, supone entonces la posibilidad de que se lo determine. El ser-caos admite diferentes tipos de determinaciones, que Castoriadis llama organizaciones o determinaciones

parciales y contingentes. La creación es creación de una forma y consiste en la atribución de una organización parcial a algo que es susceptible de asumir diversas formas de organización. El ser no es la realidad en sí, sino un proyecto de realización. El ser no es lo que es, sino aquello por ser. Esta postura lleva a Castoriadis a enunciar la categoría de imaginación.

Plantear el ser como indeterminado es plantear que el aspecto organizado del ser es el resultado de una creación individual o histórico-social y no una verdad inmanente y trascendente. Esa creación por parte del sujeto o del colectivo social anónimo como organización parcial en el ser se da a partir de una potencia que es la imaginación, como capacidad del individuo y el imaginario como capacidad del colectivo histórico-social, que crea formas (representaciones, a nivel individual y significaciones socio-imaginarias, a nivel social)

1

La ontología tradicional y heredada, fundante de la

modernidad, concibe al ser como algo racional y determinado

desde siempre y para siempre, pero de esta manera niega el tiempo, que implica devenir

constante, cambio y transformación.

Para Castoriadis, el ser es indeterminado aunque abierto a

distintas formas de determinación y organización, parciales y

coyunturales. La creación es creación de una forma socio-cultural a partir algo que es susceptible de asumir

diversas formas de determinación u organización.

La imaginación, como capacidad individual y el imaginario como capacidad social, crea

formas (representaciones, a nivel individual y significaciones socio-imaginarias, a nivel

social) a partir de un suelo de indeterminaciones susceptibles de ser

organizadas de modo parcial. Las formas resultantes no son verdades inmanentes y

trascendentales.

Page 2: Resumen completo castoriadis

La creación es creación de formas ex-nihilo, o sea, creación de la nada o a partir de la nada, pero con algo y en algo. La creación de formas de la nada quiere decir que esas formas no están determinadas causalmente. Creo una forma de modo no causal, pero con algo y ese algo no es la causa de lo que creo, sino la condición general de posibilidad, pero no la causa de lo que creo. Por ejemplo, en el caso de los sujetos, éstos perciben una X indeterminada y sobre esa X indeterminada surge una representación. El color son ondas de luz y los olores son partículas. Las ondas de luz se convierten para nosotros en color y las partículas, en olores, porque no percibimos ondas de luz ni partículas sino colores, a pesar de que chocamos contra ondas de luz y partículas. No sabemos contra que chocamos, pero lo que sí sabemos es que percibimos colores y olores. Tanto el color como el olor son un producto de la imaginación. No percibimos el color ni el olor, sino ondas de luz y partículas y es la imaginación la que convierte esas ondas de luz en colores y esas partículas en olores. Por ejemplo, el léxico previo no contiene la obra literaria porque ésta es una creación de la nada con algo previo que es el lenguaje. No hay en el léxico una determinación causal de mi obra literaria. El Estado moderno como forma de organización política surgió a partir de la monarquía absoluta y de los ideales de libertad, igualdad y fraternidad, pero no estaba contenido en éstos, de la misma manera que la monarquía absoluta surgió a partir del feudalismo y de los ideales de Nación y centralización política, pero tampoco estaba contenida en éstos. Castoriadis considera al dominio de lo histórico-social como el dominio que crea para sí sus propias formas o eidos a partir del imaginario. Crear a partir de la nada quiere decir que no se copia nada, pero se crea a partir de condiciones sociales, políticas que hacen posible el surgimiento de una forma. A eso Castoriadis le llama creación ex -nihilo (de la nada, pero con algo)

En relación al conocimiento, qué parte de lo que conocemos proviene de nosotros (de nuestra imaginación) y qué parte proviene de lo que es, es una cuestión que según Castoriadis no podrá resolverse. No puede establecerse la cuota-parte de lo que pertenece a la razón o intelecto humano (imaginación e imaginario) y de lo que pertenece al mundo sensible. Castoriadis supedita el orden del ser, no a sí mismo, sino al sujeto que lo conoce. Y por consiguiente, el sujeto puede determinarlo ahora de una manera y de otra manera en otro momento.

2

La creación es creación de formas de la nada o a partir

de la nada, pero con algo y en algo, siendo que ese algo no

es la determinación causal de la forma,, sino su condición de posibilidad a partir de la cual la imaginación o el imaginario

crea algo.

Castoriadis supedita el orden del ser, no a sí mismo, sino al sujeto que lo conoce, que puede determinarlo

ahora de una manera y en otro momento de otra manera. Pero no podrá establecerse la cuota-parte de

lo que pertenece a la razón o intelecto humano (imaginación e imaginario) y de lo que pertenece al

mundo sensible

Page 3: Resumen completo castoriadis

Si el ser no es determinado sino determinable, si el ser no es lo que es sino lo por ser, o lo que yo hago ser, entonces hay un lugar para la imaginación, para el imaginario y para la creación. Castoriadis está poniendo a esta noción de imaginación simultáneamente en el origen de la subjetividad humana y en el origen de la cultura. Esto es, en el origen de la dimensión histórico-social del hombre.

La facultad de la imaginación radical singular genera un universo de representaciones y la facultad del imaginario radical social instituyente genera un universo de significaciones imaginarias sociales. Cada uno de nosotros como sujetos singulares posee una imaginación radical, que da origen a las representaciones. Cada sujeto colectivo anónimo posee un imaginario social radical instituyente, que da origen a las significaciones sociales imaginarias que cristalizan en instituciones. Para Castoriadis, la imaginación radical y el imaginario radical instituyente nunca son lo ficticio. La imaginación radical y el imaginario radical instituyente son la condición de posibilidad de la realidad. Hay una realidad porque hay una imaginación radical y un imaginario radical instituyente.

Castoriadis plantea el descubrimiento y ocultamiento de la imaginación como facultad creadora. La razón del ocultamiento está en función de legitimar una perspectiva fundante del pensamiento occidental que es la perspectiva de la razón. En la reflexión en torno al ser, el ser del que se habla es el ser de la física y la materialidad que ya están previamente dados y determinados, pero nunca el sueño o la fantasía como modelos del ser. La razón científica y no la sensibilidad

es la que nos permite acceder al ser previamente determinado. Como motivo del ocultamiento de la imaginación como facultad creadora, la filosofía quedó bajo la égida del privilegio ontológico que la institución social le atribuye a la cosa como ser físico-material del cual deberíamos descubrir su verdad. El ser es determinado y la razón descubre la determinación del ser. Se trata de un modelo de relación entre el conocer y el ser, que deja afuera la imaginación. Cuando tomamos otro modelo como modelo del ser que no es el del ser físico-material, hace su entrada la imaginación. La verdad quedó ligada a la razón y el error quedó ligado a la percepción o sensibilidad y a los productos de la imaginación. La verdad sobre el ser y sobre el mundo sería tarea de la razón. Parecía estar excluido que la verdad debiera algo a la imaginación. El aporte crítico de Castoriadis es que la verdad y la realidad tienen que ver con la imaginación.

3

La imaginación radical y el imaginario radical social instituyente nunca son

lo ficticio sino la condición de posibilidad de la realidad. La

imaginación radical genera un universo de representaciones y el

imaginario radical social instituyente genera un universo de significaciones imaginarias sociales que cristalizan en

instituciones.

El aporte crítico de Castoriadis es que la verdad y la realidad tienen que ver

con la imaginación. Castoriadis. Está tratando de romper con la idea de que la imaginación es del orden de lo fantasioso, lo ficticio, lo

ilusorio.

Page 4: Resumen completo castoriadis

Castoriadis. Está tratando de romper con la idea de que la imaginación es del orden de lo fantasioso, lo ficticio, lo ilusorio. La imaginación crea formas y si hay formas, en realidad, es porque hay una imaginación que las ha creado.

La categoría de imaginación tiene un recorrido histórico y al respecto Castoriadis plantea algunas inconsecuencias de Kant. Kant distingue entre una facultad pasiva y una facultad activa. La facultad pasiva es la sensibilidad o percepción. La facultad activa es el entendimiento o pensamiento. Las razones por las cuales Kant plantea facultades heterónomas entre sí es porque es la única manera que ve de dar cuenta de la realidad sin caer en el empirismo ni en el idealismo. La sensibilidad nos proporciona el conocimiento de las particularidades mientras que el pensamiento nos brinda el conocimiento de lo universal. Si la facultad sensible fuese activa, pasaría lo que acabo de decir respecto de Castoriadis. Porque la imaginación es una facultad activa es que pone de sí y no sólo recibe. Si yo digo que la facultad de la sensibilidad sólo recibe, mi facultad sensible como facultad receptiva es testimonial o especular, capta lo real tal cual es, lo que supone la existencia de hechos objetivos y determinados. Si es activa o espontánea, como el entendimiento, entonces pone cosas de sí misma. ¿Qué proviene de lo que es y que proviene de lo que ponemos nosotros? No se puede saber, postula Castoriadis. Kant oscila permanentemente respecto a dónde poner la imaginación. A veces la imaginación es pasiva, a veces la imaginación es activa. Castoriadis muestra la inconsecuencia desde su lugar de defensor de la imaginación como facultad activa.

Castoriadis está presentando una imaginación activa y creadora desde la percepción y el pensamiento que no depende de esos recuerdos de los que podemos dar cuenta, sino que es condición de la percepción y del pensamiento porque es la capacidad que tiene la subjetividad de poner forma a lo que no tiene forma. La imaginación ya opera en el orden de la sensibilidad. Podríamos decir que como la Psicología Clásica dice que percibir es recordar, para Castoriadis, percibir es imaginar. Si el resultado de la percepción es una forma y la capacidad que pone forma para Castoriadis es la imaginación, entonces, la imaginación ya opera en la percepción y es institución originaria de sentido, hablando en términos de Merleau-Ponty. Uno percibe formas. Castoriadis está diciendo que la imaginación es la capacidad subjetiva de poner formas allí donde no hay forma. Entonces, si el resultado de la percepción es ya una forma, entonces, la imaginación ya opera en la sensibilidad o la percepción. Esto hace que la imaginación no pueda asignársele al pensamiento necesariamente o a la sensibilidad necesariamente, sino que es una facultad independiente que trabaja tanto en la percepción como en el pensamiento.

4

Percibir es imaginar. Castoriados presenta a la imaginación como condición de la percepción porque La imaginación ya opera en el orden de la sensibilidad

capacidad que tiene la subjetividad de poner forma (organizar y determinar) a lo que no tiene forma. Si el resultado de la percepción es una forma y la capacidad que pone forma para Castoriadis es la

imaginación, entonces, la imaginación ya opera en la percepción y es institución originaria de sentido (Merleau-Ponty)

Page 5: Resumen completo castoriadis

Castoriadis distingue en el hombre una dimensión conjuntista-identitaria, vinculada al hombre en tanto que viviente, y una dimensión imaginaria, vinculada al hombre en tanto que mónada psíquica. Tanto el viviente como la monada psíquica son seres para sí que crean un mundo propio para sí de formas.

El hombre en tanto que ser viviente está regido por la dimensión conjuntista- identitaria y crea formas funcionales a los instintos de conservación de la vida y de reproducción de la especie. Pero en tanto que mónada psíquica, tiene la capacidad de sustraerse de la dimensión conjuntista-identitaria y dejarse llevar por su imaginación radical, a partir de la cual crea un flujo constante y continuo de formas representacionales que no son necesariamente funcionales a la dimensión conjuntista-idenitaria de la conservación de la vida y procreación de la especie. El mundo propio de la monada psíquica es un flujo representacional que crea formas y figuras investidas de afecto, deseo y placer representacional que no tienen nada que ver con una imaginación canónica de la especie que le posibilita sobrevivir y procrear. Una primera característica de la imaginación radical es la desfuncionalización. Se desprende de un orden de la naturaleza y de un tipo de imaginación canónica propia de la especie. Está

desfuncionalizada. No responde a funciones relativas al orden vital, biológico o natural. Pero la posibilidad de crear formas que vayan más allá de la conservación y reproducción de la vida natural es la condición del surgimiento del orden humano o del dominio histórico-social y de la cultura. En esta mónada psíquica, en tanto que flujo representativo de la imaginación, no hay cultura. Es una mónada para sí. La posibilidad de crear cultura es una potencia de la psiquis del hombre que no tienen los animales.

Castoriadis se vale del término monada psíquica para explicar que la psique en ese estadio es una unidad cerrada sobre sí misma. Para que haya cultura, esta mónada psíquica tiene que poder abrirse al mundo y a la sociedad y la manera de hacerlo es cuando ingresa al campo social. La primera ruptura de la mónada psíquica es la relación diádica que establece el niño con su madre. Esa relación diádica es el primer

5

El hombre en tanto que ser viviente está regido por la dimensión

conjuntista- identitaria y crea formas representacionales funcionales a los instintos de conservación de la vida y

de reproducción de la especie, a partir de la imaginación canónica de la

especie, que es lo que le posibilita sobrevivir.

El hombre, en tanto que mónada psíquica, tiene la capacidad de sustraerse de la dimensión conjuntista-

identitaria y de la imaginación canónica y dejarse llevar por su imaginación radical, a partir de la cual

crea un flujo constante y continuo de formas representacionales que no son necesariamente

funcionales a la dimensión conjuntista-identitaria de

la conservación de la vida y procreación de la especie, porque en ellas prima el placer

representacional por sobre los instintos de auto-conservación. La característica primordial de la

imaginación radical y de sus representaciones es la desfuncionalización con respecto al orden vital, pero ella es condición de surgimiento del orden histórico social y de la cultura en cuanto la monada psíquica

se abre al mundo y a la sociedad.

Page 6: Resumen completo castoriadis

momento de la cultura. La segunda ruptura de la mónada psíquica es la relación tríadica que se da cuando aparece el padre. Esa relación tríadica es el segundo momento de la cultura.

Castoriadis se pregunta si el flujo continuo y constante de representaciones que genera la imaginación radical es algo que le corresponde a la monada psíquica por derecho propio o nace de la relación que la psique tiene con el cuerpo (soma). Cuando decimos que somos una mónada psíquica, la mónada psíquica se refiere únicamente a la psique. Pero somos una unidad psique-soma. Cuando hablamos del flujo representativo de la imaginación referido a la mónada psíquica, no decimos nada del cuerpo. Pero si somos una unidad psique-soma, cabe preguntarse cuál es la relación entre la psique y el cuerpo y si el flujo representativo de la imaginación tiene que ver con la relación entre la psique y el soma.

Freud no habla nunca de imaginación porque tomar en cuenta la imaginación le parece incompatible con el "proyecto de una psicología científica", pero todo el tiempo habla de fantasía y de fantasear ligando siempre la fantasía y el fantasear con experiencias representacionales previas. Cuando uno tiene una experiencia representacional, tiene una experiencia de lo real y si fantasea con una experiencia previa de lo real, ¿qué es esa fantasía? Combinatoria o reproductiva. Reproduzco y/o combino mediante la fantasía aquello de lo cual antes tuve una experiencia, pero que en el momento no lo entendí y por eso lo reproduzco y lo combino después. Cuando Freud se confronta con el tema de los fantasmas originarios, privados de fuente real y actual en la vida, les va a buscar una mítica fuente real en la filogénesis y así lo deja, sin mayores especificaciones. En relación a los fantasmas originarios, en los comienzos de las investigaciones de Freud, en sus estudios sobre la histeria, una de las cosas que va a plantear Freud es la teoría del hecho traumático, que luego descartará. Hechos traumáticos individualizables, que en la medida en que no ha habido una descarga por parte del sujeto, respecto del contenido afectivo que estas experiencias traumáticas han causado, generan síntomas histéricos. Síntomas en el orden corporal como consecuencia de una represión de la significación emocional

6

Las representaciones de la imaginación radical tienen que ver con la unidad

psique-soma (cuerpo)

En toda su obra, Freud jamás menciona la imaginación porque tomar en cuenta la imaginación

le parece incompatible con el "proyecto de una psicología científica” Pero sí se refiere a la fantasía

reproductiva o combinatoria basada en una experiencia de lo real no procesada o entendida en su momento pero que después regresa en forma de representación. Cuando se enfrenta con la fantasía originaria cuyo sustento no es una fuente real, evita

atribuirla a la imaginación radical y atribuye su origen a la filogénesis. La representación es un producto de

la imaginación radical del sujeto singular que crea una representación en base a una situación real que

nunca ha existido.

Page 7: Resumen completo castoriadis

que estos hechos traumáticos han tenido. En términos generales, muchos de estos casos tienen que ver con casos de abuso. Freud descubre que muchos pacientes hablan de una situación de abuso allí donde nunca existió. No hay un hecho real sino una fantasía que crea un hecho como si fuese real, pero resulta que no lo es. No pasa de ser una creación de la fantasía. Cuando Freud se encuentra con esta cuestión de que hay pacientes que fantasean sobre hechos que en verdad nunca existieron, como él no quiere atribuir a estos hechos una fuente en la imaginación como imaginación creadora, la remite a una filogénesis. En realidad, hay una base real, que es fuente de este fantasma originario, que tiene que ver con la filogénesis, tiene que ver con aquellos momentos en donde la sociedad, la vida gregaria del animal humano, todavía no ha podido instituir la prohibición del incesto. Lo que estaría diciendo Freud con esto es que hay una base real y esa base real tiene una presencia filogenética y por consiguiente intenta negarle a este fantasma originario el hecho de poder ser un producto de la imaginación radical del sujeto singular. Freud plantea la cuestión del fantasma originario y Castoriadis afirma que Freud quiere encubrir a través de la filogénesis la imaginación radical que está descubriendo, como operante o creadora. Rescata este segundo momento de Freud, donde tira por tierra la cuestión del hecho traumático real para decir que el hecho que se presenta como hecho traumático es un producto de la imaginación radical del sujeto singular en donde él crea una situación como real siendo que esa situación real nunca ha existido.

Castoriadis sostiene que Freud habla de la imaginación radical en toda su obra sin nombrarla específicamente ni una sola vez. Castoriadis se refiere al concepto de representación. Freud habla de la representación en cada una de sus páginas. La representación es la puesta en forma de algo. Freud tiene una respuesta cuando habla del trabajo del sueño: el trabajo del sueño pone en forma aquello que no tiene forma con vistas a la satisfacción del deseo o placer. Entonces, hay un corrimiento en la subjetividad humana que deja de lado el orden propiamente natural y biológico de la auto-conservación y la reproducción y organiza su mundo propio en función de un deseo o placer. Es el deseo y el placer representacional el que organiza el mundo propio y no los montajes biológico-naturales o el orden de la necesidad. Pero si el sujeto se ciñe únicamente a su dimensión imaginaria que hace estallar la dimensión conjuntista-identitaria, perece. Por eso para sobrevivir se socializa en el marco de las significaciones socio-imaginarias, encarnadas en las instituciones. El niño apenas nace no tiene ninguna significación social. Lo que tiene son representaciones que son enteramente individuales (mónada

7

El sentido individual (representaciones producto de la imaginación radical) se tiene

que volver sentido social (significaciones sociales imaginarias cristalizadas en las

instituciones producto del imaginario social radical instituyente) para poder sobrevivir.

Pero la socialización nunca es acabada y prevalecen en los sueños y delirios las representaciones vinculadas al placer

representacional que organiza el mundo propio.

Page 8: Resumen completo castoriadis

psíquica). Ese sentido individual se tiene que volver sentido social para poder sobrevivir.

Castoriadis dice que la representación de la que estoy hablando no es la representación de la filosofía moderna que supone una mediación: re-presentar. No existía el concepto de representación antes de la filosofía moderna. Cuando Castoriadis habla de representación está hablando de presentación: la imaginación hace presente algo que de otro modo no podría hacerse presente porque le da originariamente forma. Si fuera representación en el sentido estricto, yo representaría algo que por sí mismo ya tiene una forma.

Lo que está planteando es que la psique es fuente de la imaginación radical. Si la psique es fuente de la representación y la representación es un producto de la imaginación radical, entonces la psique es imaginación. La vida subjetiva es la imaginación radical. Son las imágenes o las formas las que están investidas afectivamente. Eso hace que tengan una valoración para nosotros.

Freud distingue entre estímulo y pulsión.

Estímulo:

Aportado al organismo desde afuera del organismo (origen extra-somático) Opera de un solo golpe. Descargado hacia afuera mediante una acción acorde al fin, por el hecho de

que sustrae a la sustancia estimulada de la influencia del estímulo, alejándola del radio de acción en que opera el estímulo. Se lo puede despachar mediante una única acción adecuada, cuyo tipo ha de discernirse en la huida motriz ante la fuente del estímulo.

Pulsión

Aportado al organismo desde el interior del organismo (origen somático) No actúa como fuerza de choque momentánea, sino siempre como fuerza

constante. Puesto que no ataca desde afuera sino desde el interior del propio organismo,

una huida motriz de nada puede valer contra ella. Lo que cancela la necesidad pulsional es la satisfacción, que sólo puede alcanzarse mediante una modificación apropiada a la meta, de la fuente interior del estímulo.

Hallamos la esencia de la pulsión en sus caracteres principales, su proveniencia de fuentes de estímulo situadas en el interior del organismo, su emergencia como fuerza

8

Las representaciones son formas que están

investidas afectivamente y eso hace que tengan

una valoración para nosotros.

Page 9: Resumen completo castoriadis

constante y su incoercibilidad por acciones de huida motriz. Hallamos la esencia del estímulo en sus caracteres principales, su proveniencia de fuentes de estímulo situadas en el exterior del organismo, su emergencia como fuerza de choque y su cancelación o disminución por acciones de huida motriz.

Los estímulos pulsionales que se generan al interior del organismo no pueden tramitarse mediante este mecanismo de huida motriz. Plantean exigencias mucho más elevadas al sistema nervioso y lo mueven a actividades complejas y encadenadas entre sí, que modifican el mundo exterior lo suficientemente como para que satisfaga la fuente interior del estímulo. Además, lo obligan a renunciar a su propósito ideal de mantener alejados los estímulos, puesto que producen un flujo continuado e inevitable de estos.

Algunos términos que se usan en conexión con el concepto de pulsión son los siguientes: esfuerzo, meta, objeto, fuente. Por esfuerzo de una pulsión se entiende su factor motor, la suma de fuerza o la medida de exigencia de trabajo que ella representa para satisfacerla. La meta de una pulsión es en todos los casos la satisfacción que sólo puede alcanzarse cancelando el estado de estimulación en la fuente de la pulsión. El objeto de la pulsión es aquello en o por lo cual puede alcanzar su meta y puede ser propio o ajeno. La fuente de la pulsión se entiende como aquel proceso corporal, interior a un órgano o a una parte del cuerpo, cuyo estímulo es representado en la vida anímica por la pulsión.

Freud propone distinguir entre dos tipos de pulsión: las pulsiones yoicas o de auto-conservación y reproducción y las pulsiones sexuales o libidinales. Como no es psíquica, la pulsión tiene que enviarle a la psique “embajadores” que para hacerse entender deben hablar un lenguaje reconocible y comprensible por lo psíquico, por lo que tienen que presentarse como representaciones.

Las pulsiones en la teoría freudiana tienen un origen somático. A través de la representación, la psique pone en forma a las pulsiones somáticas para que puedan ser satisfechas. La pulsión sexual, que responde al placer representacional tiene predominio sobre la pulsión de auto-conservación y reproducción, que responde al placer de órgano.

La imaginación radical crea formas de la nada pero con algo. Cada uno de nosotros, en tanto mónada psíquica y apenas nacemos tenemos un mundo propio que no tiene nada que ver con el de al lado. La pregunta que se hace y que procura responder Castoriadis es cómo hacemos nosotros para que ese mundo propio se vuelva compartido si la imaginación crea todo el tiempo representaciones que no tienen ninguna vinculación con la conservación de la vida biológica ni con la reproducción de la especie porque predomina el placer representacional. Si la representación individual

9

PULSION: origen somático y presencia en la psique a través

de la representación.

Page 10: Resumen completo castoriadis

no es funcional a la conservación de la vida y a la reproducción de la especie, ¿en relación a qué es funcional? Es funcional en relación al deseo o pulsión yoica o libidinal. La socialización para Castoriadis es la ruptura de ese mundo propio y primero que está constituido por una imaginación radical libre e individual que es propia de la monada psíquica y la incorporación/ interiorización de los sentidos sociales.

La imaginación radical en el proceso de socialización incorporará las significaciones imaginarias sociales a partir de la sublimación. La sublimación es la posibilidad que tiene la psique humana de satisfacerse no sólo con representaciones sino con representaciones que son socialmente valoradas. La sublimación es la investidura afectiva de objetos que son pública y socialmente valorados, la posibilidad de encontrar una satisfacción en el orden de la fantasía con objetos que son compartidos por otros (objetos que son deseados por otros). El deseo humano está ligado a los objetos que son deseados por otros o socialmente valorados. Los objetos socialmente valorados son en términos de Castoriadis instituciones o significaciones imaginarias sociales. La socialización se da a partir de la sublimación porque la psique debe abandonar ese mundo propio y privado que está dado por la fantasía individual e interiorizar significaciones imaginarias sociales que son significaciones socialmente instituidas y por lo tanto, socialmente deseadas y valoradas. A través de la sublimación, la mónada psíquica se vuelve un individuo socialmente fabricado e incorpora significaciones sociales y debe reprimir sus sentidos (pulsiones o deseos) La sublimación hace que yo pueda encontrar satisfacción no en objetos que me invento yo mismo, sino en significaciones sociales imaginarias. Esas significaciones sociales son el imaginario social instituido. Mediante la fabricación social del individuo, la institución de la sociedad se aprovecha de la imaginación radical del sujeto, dejándola por regla general manifestarse sólo en y a través del sueño, la fantasía, la transgresión, el delirio y la enfermedad. Imagine lo que imagine y haga lo que haga, el sujeto no pensará ni hará más que lo que socialmente es obligatorio pensar y hacer, excepto

10

La socialización para Castoriadis es la ruptura de ese mundo propio y primero que está constituido por las

representaciones individuales producto de una imaginación radical libre e individual que es propia de la monada psíquica y la incorporación/ interiorización de

los sentidos sociales o significaciones imaginarias sociales cristalizadas en instituciones. Ello se logra a partir de la

sublimación como posibilidad que tiene la psique humana de satisfacerse no sólo con representaciones

sino con representaciones que son socialmente valoradas. La sublimación es la investidura afectiva y

libidinal de objetos que son pública y socialmente valorados: instituciones o significaciones imaginarias

sociales. Mediante la fabricación social del individuo, la institución de la sociedad se aprovecha de la imaginación

radical del sujeto, dejándola por regla general manifestarse sólo en y a través del sueño, la fantasía, la transgresión, el delirio y la enfermedad. Imagine lo que imagine y haga lo que haga, el sujeto no pensará ni hará

más que lo que socialmente es obligatorio pensar y hacer, excepto durante el sueño, la fantasía, la

transgresión, el delirio y la enfermedad.

Page 11: Resumen completo castoriadis

durante el sueño, la fantasía, la transgresión, el delirio y la enfermedad. Esa es la vertiente histórico-social del proceso que el psicoanálisis da en llamar represión.

La imaginación radical es una facultad o capacidad que pertenece a este sujeto singular que es la psique-soma (viviente + mónada psíquica) y que va a devenir individuo en algún momento gracias al proceso de socialización. Este sujeto singular, cuando se enfrenta con los otros, momento en el que va a empezar el proceso de socialización que le permite devenir individuo, su imaginación radical de sujeto singular se encuentra con la producción colectiva de lenguaje y cultura que ha de interiorizar para devenir individuo. Hay un proceso de advenimiento de este sujeto singular al lenguaje y a la cultura. La dimensión social no funciona como sumatoria de las imaginaciones radicales de cada uno de los sujetos porque tiene una dinámica propia de la creación colectiva. Ningún sujeto singular crea por sí mismo algo que tenga que ver con la cultura. La cultura siempre e inevitablemente es una creación colectiva y como tal tiene una lógica de funcionamiento colectiva. La capacidad del colectivo social anónimo que es equivalente a lo que para el sujeto singular llamamos imaginación radical es el imaginario social radical instituyente en una dinámica de construcción y de emergencia social de sus producciones culturales, que son las significaciones imaginarias sociales.

El imaginario radical social instituyente es una facultad del colectivo social anónimo que crea las significaciones imaginarias sociales (dimensión imaginaria del colectivo social anónimo) que encarnan en instituciones sociales (dimensión conjuntista-identitaria del colectivo social anónimo) Las significaciones imaginarias sociales y las instituciones sociales en las que se incorporan se despliegan en dos dimensiones indisociables: la dimensión conjuntista- identitaria (lógica) y la dimensión imaginaria.

La dimensión imaginaria opera a través de la lógica magmática y de la significación: un magma de significaciones imaginarias sociales. La dimensión conjuntista-identitaria opera a través de la lógica de la determinación. El magma de significaciones imaginarias sociales es indeterminado, pero junto a él hay una esfera o dimensión de la determinación, sin la cual no sería posible la vida en sociedad. La

11

La imaginación canónica es una facultad del individuo en tanto que mónada viviente de crear formas acordes a su supervivencia y reproducción como especie (dimensión conjuntista-identitaria

del individuo) La imaginación radical es una facultad del individuo en tanto que mónada

psíquica de crear representaciones desfuncionalizadas en las que prima el placer

representacional por sobre el placer de órgano (dimensión imaginaria del individuo)

El imaginario radical social instituyente es una facultad del colectivo social anónimo que crea las

significaciones imaginarias sociales (dimensión imaginaria del colectivo social anónimo) que

encarnan en instituciones sociales (dimensión conjuntista-identitaria del colectivo social

anónimo) Las significaciones imaginarias sociales y las instituciones sociales en las que se

incorporan se despliegan en dos dimensiones indisociables: la dimensión conjuntista-

identitaria (lógica) y la dimensión imaginaria.

Page 12: Resumen completo castoriadis

esfera de la determinación está constituida por las instituciones. No sería posible la vida en sociedad sin alguna forma de determinación. Lo que no quiere decir que esa forma de determinación sea eterna. Las instituciones no son eternas sino dinámicas y cambiantes. En el terreno de las determinaciones (instituciones) hay cambios de significación. A esta esfera de las determinaciones (instituciones) Castoriadis la llama dominio conjuntista-identitario.

Es imposible la existencia de una sociedad en una dimensión imaginaria solamente. La sociedad tiene una dimensión imaginaria y una dimensión conjuntista-identitaria. Esta dimensión de lo determinado o conjuntista-identitario surge como determinación de la esfera de lo magmático. Pero nunca puedo reconstruir la dimensión magmática como sumatoria de las distintas dimensiones conjuntistas-identitarias. Lo magmático excede y no es producto de la realidad de todas las dimensiones conjuntistas-identitarias.

La dimensión conjuntista - identitaria opera a través de la lógica de la determinación. La exigencia consiste en que todo lo concebible esté sometido a la determinación y las implicaciones o consecuencias que de ello se siguen. La determinación no tiene que ser lo propio del ser, sino el resultado de una operatoria o de un procedimiento que es la operatoria o procedimiento de esa potencia instituyente del imaginario radical instituyente. Más allá de si el resultado de esa operación es una determinación, tiene que conservar esa potencia instituyente. Todo lo determinado es el resultado de la potencia del imaginario radical instituyente, pero si eso determinado ya quedó determinado de una vez y para siempre, esa potencia creadora de la imaginación se agota y ya no hay manera de que se vuelvan a determinar (crear) nuevas cosas. Algo determinado tiene propiedades distintivas que posibilitan que tenga una identidad y que pueda ser segregado en conjuntos. Algo está determinado u organizado de acuerdo a una dimensión conjuntista-identitaria cuando se establece socialmente una relación particular y determinada entre dos elementos que se distinguen entre si y que se distinguen del resto de los elementos. La determinación sería el establecimiento social de relaciones bi-unívocas entre elementos distintos y definidos. Por ejemplo, al decir que el hombre es un ser racional, se establece una determinación entre dos elementos que se distinguen: el hombre no es planta, ni cosa, ni animal y racional no es pasional ni espiritual Al establecer una relación entre hombre y racional determino un sentido posible entre tantos otros.

12

La dimensión de lo determinado o conjuntista-identitario (instituciones)

surge como determinación de la dimensión de lo indeterminado o

imaginario (magma de significaciones imaginarias sociales) a partir del

imaginario radical social instituyente. Lo instituido no ha de cristalizar en formas

atemporales, a-históricas y determinadas para siempre, que agoten la capacidad instituyente del imaginario

social radical instituyente.

Page 13: Resumen completo castoriadis

La lógica que opera en la dimensión imaginaria es la del magma a través de la significación. El magma opera a través de indefinidos ases de significación y es el modo en que opera esa potencia generadora de formas o significaciones socio-imaginarias.

La determinación extrae uno de esos ases asociando significaciones. De todos los ases de significación posibles que se cruzan en el magma de significaciones sociales se extrae uno y se establece una determinación momentánea. Un magma es aquello de lo cual se puede extraer (o en lo cual se puede construir) organizaciones conjuntistas-identitarias en cantidad indefinida, pero que jamás puede ser reconstruido por composición conjuntista

de esas organizaciones. En la dimensión imaginaria la existencia es la significación. Toda significación remite a un número indefinido de otras significaciones. Las significaciones no están ligadas por razones necesarias ni suficientes, sino que la remisión de unas a otras es arbitraria y socialmente instituida.

Para que la sociedad pueda crearse y recrearse necesariamente tiene que haber una dimensión propiamente imaginaria, porque es la dimensión en donde se da la creación de formas y de nuevas formas. Pero no podemos vivir en la creación absoluta. La sociedad necesita de la dimensión conjuntista-identitaria, al interior de la cual existe la determinación. La definición provisoria de un sentido tiene que ver con el modo indisociable en el que operan las dos dimensiones. Puedo definir provisionalmente o conjuntista-identitariamente un sentido y ese sentido puede ser el predominante en un momento dado. Pero como las dos dimensiones operan en simultáneo, la dimensión magmática continúa operando y no se anulan todas las demás significaciones posibles. Tomemos para el caso la institución mujer. No mucho tiempo atrás, mujer era sinónimo de madre y esposa y una mujer sin marido e hijos era una mujer incompleta. La significación socio-imaginaria de mujer ha cambiado actualmente y se agrega la dimensión profesional. Esto tiene que ver con la potencia imaginante de una sociedad y con condiciones sociales al interior de esa sociedad. Tomemos para el caso la institución de la muerte. Para la ciencia, la muerte es el fin de la vida que es finita y es

13

El magma opera a través de indefinidos ases de significación. La determinación extrae

uno de esos ases asociando significaciones. De todos los ases de significación posibles

que se cruzan en el magma de significaciones sociales se extrae uno y se

establece una determinación momentánea que cristaliza en una institución. Las

significaciones no están ligadas por razones necesarias ni suficientes, sino que la

remisión de unas a otras es arbitraria y socialmente instituida.

La sociedad necesita de la dimensión conjuntista-identitaria, al interior de la cual existe la determinación. Pero no podemos vivir en la creación absoluta. Para que la

sociedad pueda crearse y recrearse necesariamente tiene que haber una

dimensión propiamente imaginaria, porque es la dimensión en donde se da la creación de formas y de nuevas formas. Puedo definir

provisionalmente o conjuntista-identitariamente un sentido y ese sentido

puede ser el predominante en un momento dado. Pero como las dos dimensiones operan

en simultáneo, la dimensión magmática continúa operando y no se anulan todas las

demás significaciones posibles.

Page 14: Resumen completo castoriadis

para siempre. Ocurre cuando el corazón deja de latir y el cerebro deja de funcionar. El individuo no existe más en el mundo. Para la religión, a la muerte sigue la reencarnación o la resurrección y la promesa de la vida eterna. En el magma de significaciones imaginarias sociales existen todos los posibles. Cada sociedad extrae un posible entre tantos otros y lo determina a través de la dimensión conjuntista-identitaria, establece una relación y la cristaliza. Esa significación socio-imaginaria encarna en una institución. Pero el resto de los posibles está en constante movimiento y latencia. Castoriadis sostiene que la imaginación crea de la nada y lo que quiere decir con esto es que lo que es creado no estaba determinado antes de que fuera creado. La imaginación crea de la nada, pero eso no quiere decir que cree sin nada ni en nada. Se necesita de las posibilidades del magma y de las condiciones coyunturales (sociales, económicas, políticas) para que algo pueda ser creado. La imaginación crea sobre los posibles del magma de significaciones imaginarias sociales. Además, toda significación emerge de las significaciones anteriores y de las condiciones coyunturales que la hacen posible. No existe República y Estado Moderno sin Monarquía Absoluta y sin las condiciones (ideales y materiales) que llevaron a la Revolución Francesa. Por otra parte, las significaciones socio-imaginarias tienen un primer estrato natural que es ineludible. Una sociedad puede instituir significaciones de modo arbitrario, pero necesariamente hay cuestiones naturales que están ahí de las cuales la significación no puede deshacerse. Es en el modo en que cada sociedad significa ese primer dato natural a partir de la imaginación donde se encuentra la creación socio-imaginaria. Es un hecho ineludible que hay mujeres y que nos vamos a morir, pero el modo en que se concibe la mujer y la muerte ha variado históricamente y entre distintas cosmovisiones. Lo imaginario y lo conjuntista-identitario son dos dimensiones que se reflejan en las instituciones y en el lenguaje. Pero no estamos poniendo lo imaginario como lo arbitrario y lo conjuntista-identitario como lo necesario. Las dos dimensiones son arbitrarias en el sentido de que son creaciones, pero una es determinada y la otra es indeterminada. En el lenguaje, la dimensión conjuntista-identitaria es el código y la dimensión imaginaria es el uso de la lengua.

14

El imaginario crea de la nada porque la forma resultante no estaba determinada antes de que fuera creada. Pero el imaginario crea a partir de

las condiciones de posibilidad que ofrecen el magma y las condiciones coyunturales (sociales, económicas, políticas) para que algo pueda ser

creado. En el magma de significaciones imaginarias sociales existen todos los posibles. Cada sociedad extrae un posible entre tantos otros y lo determina a través de la dimensión

conjuntista-identitaria, establece una relación y la cristaliza. Esa significación socio-imaginaria

encarna en una institución. Pero el resto de los posibles está en constante movimiento y

latencia.

Page 15: Resumen completo castoriadis

La lengua es un haz de remisiones a partir y alrededor de un término y este haz de remisiones está abierto porque posee una existencia magmática. En tanto magma, las significaciones de la lengua no son elementos de un conjunto sometido a la determinidad como modo y criterio de ser. Un término puede ser determinado y remitírselo a una significación pero tal determinación no es absoluta y no agota el término que está abierto a una serie de determinaciones sucesivas. Tenemos referencia identitaria, que es un punto dentro de una red de referencias identitarias, que cobra existencia en el magma de las significaciones. El código, en tanto sistema de relaciones identitarias determinadas no agota la significación plena de la lengua, en tanto magma. Es esencial que la lengua suministre siempre la posibilidad de tratar las significaciones de las que es portadora, como un conjunto formado por términos determinados y discernibles, cada uno de ellos idéntico a sí mismo y distinto de todos los demás, separables y separados. También es esencial que la lengua suministre siempre la posibilidad de que emerjan nuevos términos y que se redefinan las relaciones entre los términos existentes. El lenguaje no puede ser únicamente código, pues lleva consigo de modo insoslayable una dimensión imaginaria referida al magma de las significaciones y en este sentido es siempre es también lengua. No hay referente unívoco de las significaciones ciudadano, justicia, mercancía, dinero, capital.

Lo que mantiene unida una sociedad y constituye aquello que diferencia a una sociedad de otra son las instituciones, que Castoriadis da en llamar la institución de la sociedad como un todo. Las instituciones son normas, valores, lenguaje, herramientas, procedimientos, métodos de hacer frente a las cosas y de hacer las cosas. La institución de la sociedad está conformada por múltiples instituciones particulares que forman un todo coherente y que funcionan como un todo coherente. La institución de la sociedad produce individuos, quienes no solo son capaces de reproducir la institución, sino que además están obligados a reproducir la institución. Un individuo socialmente fabricado es aquel que una vez socializado reproduce las instituciones de la sociedad sin necesidad de que lo obliguen ni lo convenzan, al punto que las naturaliza. Lo que hace que las instituciones se mantengan o se conserven, que instituciones nuevas aparezcan o que instituciones existentes dejen de existir, es el magma de significaciones sociales imaginarias, en estado de movimiento y latencia permenente.

15

La existencia magmática de la lengua se refiere al haz de

remisones de significación a partir y alrededor de un término. El haz de

remisiones de significación está abierto a la determinación. Un

término puede ser determinado y remitírselo a una significación pero tal determinación no es absoluta y

no agota el término que está abierto a una serie de determinaciones

sucesivas. No hay referente unívoco de las significaciones ciudadano,

justicia, mercancía, dinero, capital.

Page 16: Resumen completo castoriadis

Las significaciones orientan y dirigen toda la vida de la sociedad considerada y a los individuos concretos que corporalmente la constituyen. La urdimbre compleja de significaciones que orientan y dirigen toda la vida de la sociedad considerada y a los individuos concretos que corporalmente la constituyen es lo que Castoriadis da en llamar magma de significaciones imaginarias sociales que cobran cuerpo en la institución de la sociedad. Las significaciones imaginarias sociales están dadas por creación. Son imaginarias porque no corresponden a elementos racionales o reales. Son sociales porque solo existen estando instituidas por la sociedad y siendo objeto de participación de un ente colectivo impersonal y anónimo.

Si las sociedades son capaces de construir sus propias significaciones socio-imaginarias y cada sociedad se define en función del conjunto de significaciones socio-imaginarias que crea, si la vida social es una auto-creación, uno debería indagar qué pasa en las sociedades con el modo en que los hombres que viven en ella consideran sus propios productos. Los hombres crean ellos mismos sus propias significaciones socio-imaginarias. Toda realidad social es una auto-creación, lo sepan o no lo sepan los hombres. Las sociedades heterónomas son aquellas en las que los principios, valores, leyes, normas y significaciones son dados de una vez para siempre. Ni los individuos ni la sociedad tienen posibilidad alguna de obrar sobre ellos. El carácter indiscutido e indiscutible de tales principios, valores, leyes, normas y significaciones, está garantizado institucionalmente por la representación instituida de una fuente, fundamento o garantía extra social. Tal es el caso de las sociedades primitivas, religiosas y totalitarias. A pesar de que la realidad social es auto-creación, los hombres consideran que una fuente externa instituye toda significación y toda institución -Dios, la naturaleza, la razón ilustrada, la tecnología- siendo éstas incuestionables. Las sociedades autónomas son las que asumen que crean su propio mundo de significaciones socio-imaginarias e instituciones y por lo tanto cuestionan las significaciones imaginarias sociales e instituciones y están abiertas al cambio. Se reconocen como hacedoras de su propia historia y no que la historia venga determinada desde afuera. En esto consiste la apuesta política de Castoriadis. La sociedad, ya sea como instituyente, ya sea como instituida, es intrínsecamente historia, es decir, auto-creación. La sociedad instituida no se opone a la sociedad instituyente como un producto muerto a una actividad que le ha dado existencia, sino que representa la fijeza/estabilidad relativa y transitoria de las formas/figuras instituidas.

16

Las sociedades heterónomas son aquellas en las que las significaciones e instituciones son dadas de una vez para siempre. No son conscientes de que toda realidad social es una auto-creacion y consideran que la garantía está dada por un fundamento extra-

social. Las sociedades autónomas son conscientes de que tanto las

significaciones como las instituciones son producto de la auto-creación y

están abiertas al cambio .

Page 17: Resumen completo castoriadis

Pero él va más allá y sostiene que para que haya autonomía a nivel social, primero debe haberla a nivel individual. La autonomía a nivel individual tiene que ver con el acceso al inconsciente, es decir, con como poder acceder a esas instancias inconscientes que escapan al dominio consciente. La posibilidad de lograr la autonomía individual a partir del descubrimiento de los mecanismos inconscientes sobre los que no tengo gobierno pero que me gobiernan a mí. Si yo no puedo explicar las causas conscientes de mis propios comportamientos y entender el sentido de lo que hago y porqué lo hago, no me será posible alcanzar la autonomía a nivel social.

17