La arterapia, tal como la articula y la piensa Sara Pain, implica una concepcin del arte como metfora, un "como si" en el que se le exige un servicio til: el teraputico, aun cuando este servicio es intrnseco a la definicin misma del arte. La actividad artstica se transforma aqu, en palabras de la autora, en "la representacin dramtica de la intencin creativa del sujeto".

A partir de las contribuciones de la psicobiologa, de las teoras del aprendizaje piagetianas y del psicoanlisis, que haban guiado sus investigaciones en el campo del aprendizaje, Pain se interna en las investigaciones de la problemtica de la creatividad y de la sensibilidad esttica, considerando que la arterapia constituye un lugar privilegiado para descubrir las articulaciones entre el cuerpo y el pensamiento figurativo.

As, propone un trabajo de taller en el que el sujeto -artistant- se puede integrar a partir de ejercitar su imaginacin, aceptando la ficcin de hacer arte. Y all, en la puesta de sus intenciones estticas, se podrn expresar tambin los obstculos inconcientes de la resistencia. Para la autora la mirada esttica y la escucha teraputica abren al sujeto el acceso a la multiplicidad de la cultura para que se site en ella su propia historia. No importa cul sea su motivacin, sino que piueda asumir el rol de artista, que interacte tanto con los materiales que le son propuestos como con sus compaeros y sus interpretaciones, es decir, se permia descubrir en s mismo una posibilidad que desconoca.

La arterapia es actualmente posible porque el arte se liber de toda norma cannica, de toda obligacin que no emane de las reglas de juego que el artista mismo inventa. Tiene una deuda con esta modalidad propia de la actividad artstica que le permite actuar en nombre de una esttica supuestamente espontnea en la cual la obra se justifica por su propia existencia, conservando siempre las propiedades tradicionales del objeto esttico: gratuidad, ausencia de utilidad, primado de la forma sobre la funcin.

Ciertamente que, al no ser el artistant un artista, la actividad que realiza en nombre del arte no es, en absoluto, arte. Una doble condicin nos indica que, en arterapia, el arte es concebido como metfora; dicho de otra manera, como algo que se asemeja al arte: por un lado, el que asiste al taller no se compromete a hacer un aprendizaje sistemtico de las reglas del oficio, ni a inventar ideas plsticas cuya coherencia esttica sea completa y socialmente reconocida; por otro, la arterapia demanda del arte un servicio til.

La actividad artstica se transforma as en representacin dramtica de la intencin creativa del sujeto. Es en esta duplicidad donde encontramos la eficacia teraputica de esta modalidad clnica.