Reuso del espacio patrimonial y sociedad civil

8/7/2019 Reuso del espacio patrimonial y sociedad civil

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Reuso del espacio patrimonialy sociedad civil

Arq. Jorge Ortiz Colom

Arquitecto Conservacionista

Instituto de Cultura Puertorriquea

Octubre de 2004


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Importancia del patrimonio en el

reuso del territorio Se valorizan y, por tanto, retienen elementos

espaciales que presentan identidad otrascendencia.

Estos elementos definen carcter y establecen

referencias que controlan el cambio urbano yterritorial.

El pasado establece una tensin dialctica conlo presente y lo cotidiano.

Se percibe cumplir con una misin moral ypatritica y se insuflan valores intangibles alentorno material de una sociedad.


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La conservacin del patrimonio en

Puerto Rico Existe desde fines del

siglo xix, pero laprimera incidenciaconocida de partici-pacin cvica fue elcaso de la capilla delCristo hacia 1923 por

el Club Cvico deDamas.

Los cambios depostguerra hicieronque variosciudadanos lderes

culturales eintelectualesmayormente gestionaran para1951 la proteccin dela zona histrica deSan Juan.


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La conservacin del patrimonio en

Puerto Rico Pero por aos la valoracin de otros lugares se limit a

sitios singulares como monumentos y sitios asociados agrandes eventos o personajes.

Desde 1970 aprox. se ha gestado un cambio de

conciencia debido a factores como: Degradacin ambiental de los pueblos y ciudades y prdida de

referentes urbanos. Mercantilizacin del territorio y afeamientodel mismo al tratarse como ente utilitario e instrumental paraabonar al lucro

Auge de una historiografa enfocada en los procesos sociales yla vida cotidiana, valorizando los escenarios de las actividadescomunes de la gente

Reglamentacin de tipo cuantitativo que no pondera el ornato, nila imagen urbana o paisajstica


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Surgimiento de un liderato cultural

Grupo social intermedio formado por educadores,artesanos, profesionales y otras personas con nivelcultural relativo alto.

Lucha por conservar: Referentes e hitos en el paisaje y territorio Lugares de recuerdo para la comunidad

Respeto a generaciones precedentes

No permitir prdida del conocimiento acumulado de lacomunidad

Sin embargo no se cuestionan las estructuras poltico-

econmicas que crean bajo su lgica crematstica estosfenmenos de degradacin urbana y territorial.

Se persigue en esta etapa participacin activa delgobierno en lograr las metas de la sociedad civil.


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Las campaas por el espacio cvico

Las plazas de recreo de Puerto Ricosiguen siendo, a pesar de la perdidade habitantes de los centros urbanos,

potentes elementos simblicos y deidentidad. Muchas son una especiede vitrina de los logros y aspiracionesde la comunidad. Arriba Juana Daz,abajo a la derecha Guayama, la cualse considera la plaza ms eficiente

en cuanto a su uso yaprovechamiento.


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Las campaas por elespacio cvico amenudo enfocansobre el destino delas plazas de recreolas cuales poseen

una carga simblicafuerte en la identidadde los pueblos. En elcaso de Adjuntas, lapresin comunitariaha sido necesaria

para evitar la prdidade carcter de unespacio cuyo perfil fudefinido desde hacecasi ocho dcadasatrs.


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En este caso de Adjuntas, el grupocomunitario originalmente ecologista yahora diversificado a la cultura, CasaPueblo (arriba, la sede, en la casaBianchi de 1918) fren, mediante eluso de su prestigio como entidadcomunal y el levantar oportunamente la

voz de alerta, tal intento de alteracinde la plaza (marzo de 2004).

Se ha exigido por la comunidad que elMunicipio presente alternativasrespetuosas de su forma y carcter yya se estn evaluando alternativas alproyecto original que hubiera arrasado

con ese espacio y lo hubiera convertidoen una gran plataforma de concretoorientada a servir de lugar deespectculos pero sin el verdor de susrboles tradicionales.


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En Barranquitas (2001-3) las reformas extensas a la plaza generaron controversiaporque afectaban la flexibilidad de la misma para servir de escenario a una popularferia artesanal que se celebra durante el mes de julio. Irnicamente, la propuesta dediseo estaba fundamentada en antecedentes histricos, pero al no habercomunicacin efectiva entre el Municipio y el centro cultural sobre estas obras, segener un clima negativo que solo ahora parece estar normalizndose.


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Jayuya presenci hacia 1996 un intento de demoler sus antiguas escuelas en elcentro urbano, frente a la plaza con el fin de proponer un megacomplejourbanstico desproporcionado al tamao del pueblo (unos 5000 h. en zona urbana)

El Centro Cultural convoc a reuniones masivas (casi 200 personas) y campaasde persuasin con el fin de conservar dichas escuelas, y adems se maniobr lacoyuntura electoral de ese ao para elegir un alcalde que no dara paso a talpropuesta.

Tras el cambio de mando, el municipio propuso el reuso de las escuelas,originalmente construidas en 1927, para atraer un centro universitario dedicado ala enseanza de turismo y ciencias ambientales y operado por la Fundacin AnaG. Mndez (Universidad Metropolitana). Esto se inaugur a principios de 2003.


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Ms all de las plazas:

defendiendo lugares significativos Un esfuerzo casi solitario de una

ciudadana de la zona Toa Alta Dorado (30 km al suroeste de SanJuan) ha permitido que se conservepara la posteridad, aunquefragmentado, el posibleemplazamiento de una de las msantiguas explotaciones agrcolas de laAmrica colonial, la llamada Granja delos Reyes Catlicos (ca. 1513). Estelugar fue amenazado por un proyectode urbanizacin de casas individuales,pero se pudo conservar un rea dealgo ms de 2 ha. (visible al fondo).

Aqu la participacin de losarquelogos, alentados por la ley1988-112 que hace obligatoria lainvestigacin arqueolgica en nuevosproyectos, fue decisiva para exigirinvestigar la sensibilidad del lugar arestos culturales.


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defendiendo lugares significativos La casa Fernndez Garzot en

Naguabo (arriba) ha sidodefendida con una campaade desafo - barricada ante lasniveladoras (1993) - por ungrupo del Centro Cultural y

estudiantes de varias escuelascercanas. No fue demolida,aunque aun espera su rescatedefinitivo.

La hacienda Belvedere enArroyo (abajo) es un molino deviento azucarero que ha sido

identificado simultneamentepor el grupo de Defensores delPatrimonio Histrico de Arroyoy el Municipio. Este ltimo hahecho gestos de estabilizar elmonumento y lo ha limpiado asu alrededor.


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defendiendo lugares significativosEl centro cultural en Maunabo ha

ampliado su visin depatrimonio para incluir no sololos lugares icnicos como elFaro Punta Tuna (centro) paraextenderse a la abandonadacentral Columbia (derecha) y a

estimular la conservacin delfrgil patrimonio de madera delas casas urbanas (abajo)..


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Entornos rurales y paisajes

culturales Un grupo en Cayey y Salinas

promueve rescatar una reservarural de 400 ha con el fin depreservar valores ecolgicos,arqueolgicos y de culturamaterial post-contacto quesubsisten en una delicadaposicin geogrfica a horcajadasentre la montaa y los valles delsur.

En este caso y otros incipientesse est incorporando el conceptodel paisaje cultural como valorpatrimonial, concepto que permite

integrar naturaleza y cultura y queest definido y avalado por losorganismos internacionales (CPM Unesco y otros)

Restos de terraza de siembra agrcola en piedra en fincas las Planadas, Cayey


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Otras decisiones territoriales sobre patrimonio natural /cultural alcanzadas en los ltimos 20 aos por iniciativa de

la sociedad civil en Puerto Rico

Bosque del pueblo (180 ha.) ycorredor ecolgico de lamontaa (sobre 2000 ha.) poriniciativa de Casa Pueblo,Adjuntas. Exclusinpermanente de la minera de

cobre a cielo abierto en lasmontaas.

Zona Histrica en Manat(1986) la primera reconocidapor la Junta de Planificacindesde la de San Juan.

Promovida por un grupo sinfines de lucro en asociacincon el gobierno municipal.


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Rescate de la casa nataldel mdico e historiadorColl y Toste en Arecibo preocupacin deciudadanos e intervencinoportuna del Instituto deCultura (1991)

Escuelas Ramrez deArellano y Hostos enAasco, amenazadas porun proyecto municipal deestacionamiento (1997)

Propuestas zona histricaen reas de Miramar

(desde 2001) y Bouret-Sagrado Corazn (desde1996) en Santurce, SanJuan aun en proceso apesar de los vetos hechospor parte de lagobernadora a las leyeshabilitadoras de dichodistrito


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Campaa por la Casa Parroquialde Aguadilla (1998) abortadapor la demolicin a traicin deledificio para un proyectomunicipal de urbanismo un fin desemana.

Rescate de la antigua HaciendaSan Jos en Caguas, donde sepiensa que parte de lasestructuras que quedan erancuarteles de esclavo.

Proteccin del antiguo Puente dela Marina sobre el ro Grande deLoza en el centro de SanLorenzo, luego que los ingenierosde carretera pretendan destruirloya que se haba hecho una rutaalterna para el trfico.


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la sociedad civil en Puerto Rico Entre 1997 y 1999 el Centro Cultural de Gunica y la

Asociacin Bibliotecaria de Ensenada consiguieron conayuda del icp la designacin como sitio histricoprotegido de la Biblioteca Pblica de este antiguopoblado caero (Ensenada en Gunica).

Simultneamente, la comunidad incluyendo mujeres yjvenes participaron en una reparacin yestabilizacin de la estructura de madera de estilovernculo, hecha originalmente en 1940 como unobsequio de la empresa Central Gunica a lacomunidad.

En esta biblioteca se celebran rutinariamenteactividades de difusin cultural y se prestan libros a losjvenes estudiantes de escuelas cercanas. Todos losempleados son voluntarios.


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El caso de San Mateo de Cangrejos en Santurce: luchadentro de la centralidad urbana por los derechos y el

entorno familiar de residentes humildes

El sector originalmente era unpoblado suburbano delibertos, el cual se fueurbanizando con el exceso depoblacin de la capital desde

el ltimo cuarto del siglo XIX Fue un hbitat creado

mediante un palimpsesto demltiples decisiones y suforma urbana expresa cierto

grado de espontaneidad. Noobstante, la expresinmaterial de ese proceso creayuxtaposiciones interesantesque ayudan a orientar alusuario urbano.


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El Estado propone reenfocar lacentralidad urbana hacia estesector - mediante lo que sepercibe como una tabula rasa -por tanto eliminando lacomplejidad y variedad

existente en el lugar,igualmente expropia a losresidentes tradicionales yaacostumbrados a un estilo devida urbano muy idiosincrtico.

Se barre el sedimento histrico

acumulado y se cambia poruna unidad formal orientada aunos criterios de ornato yeficiencia. Se racionaliza as elespacio urbano borrando lahuella de la evolucinincremental presente.


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La cultura ha sido elementoprimario dentro de laestrategia vecinal. Esto haincluido la creacin de unmuseo del barrio, y elacopio de historia oralcomo argumento sustantivo

que los defensores delsector esgrimen como partede su justificacin contra laalteracin de su entornotradicional.

As el aspecto cultural,

histrico y patrimonial esprivilegiado por accin de lapropia comunidad comoinstrumento de gestinurbana y de toma dedecisiones sobreplaneamiento y urbanismo.


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Se llega por la comunidad a postular principiosprobados de habitabilidad. Como ejemplo semuestran algunos patrones o parmetrosdesarrollados (en este caso por ChristopherAlexander) que se han convertido en parte de las

reivindicaciones comunitarias sin quenecesariamente se haya leido dicha obra.


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Nuestras comunidades urbanas son entes complejos

Grandes capitales se gastaninnecesariamente en volver alos ya desacreditadosesquemas de renovacinurbana al estilo de los aos1950-1960. No se aprende y

los vecindarios segregadosvuelven a alentar patologasocial. No hay afn dereconocer la naturalezacompleja de la ciudad, losimpactos de decisionesurbanas, ni la vitalidadinherente a las mismas. Estoya desde 1950 haba sidoalertado por la escritora yensayista Jane Jacobs en elcaso de los Estados Unidos.

La vitalidad urbana en Puerto Rico: arriba San Juan,abajo Juana Daz. El dominio pblico se haceambiente de intercambio, solidaridad y celebracin.


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Los palimpsestos de la historia

Se ha demostrado una y otra vez quelas comunidades ms habitablesson aquellas en las cuales sereconoce que la historia escribe untexto continuo sobre las presenciasmateriales de su ambiente. Seconvierte, ergo, en un palimpsestode la historia donde tambinnosotros tenemos derecho aescribir nuestra presencia. Pero nopodemos permitir que nos loborren mediante gestosgrandilocuentes.

La ubicacin de los grandes espacioscvicos de las urbes debe surgir deconsenso democrtico, no dedecisiones convenientes deburcratas o de meras presionesdel mercado, sea o no facilitadomediante incentivos.

Los palimpsestos de la historia: Venecia(arriba), San Juan (abajo)


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Promueve mayor sostenibilidad aldescargar al estado de una de susresponsabilidades tradicionales(un ejemplo exitoso CastilloSerralls de Ponce)

Permite a menudo obtener

resultados especialmente en elrea de rescate no obtenibles conla forma tradicional de actuar delestado

Facilita el proceso deidentificacin e inventario delugares significativos ya que la

misma accin social es un mediode identificar los mismos

Genera un clima favorable alrescate y conservacin de lugarespatrimoniales y puede mover laopinin pblica en esa direccin

Beneficios de la gestin patrimonial comunitariaversus el modelo tradicional de gestin estatal


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Limitaciones de la gestin patrimonial comunitariaversus el modelo tradicional de gestin estatal

(En la mayora de los casos) No hay recursos econmicos disponibles para recuperar

y habilitar los sitios rescatados, sean de origen estatal o particular (muchos serescatan cuando se hallan en estado deteriorado o ruinoso)

Las campaas comunitarias suelen ser reactivas y desgraciadamente pierdenentusiasmo una vez ciertas reivindicaciones son satisfechas.

Aun queda dependencia en un estado cada vez ms problemtico y lleno deproblemas y enigmas presupuestarios para dar seguimiento a largo plazo a losmonumentos y sitios protegidos

Falta de entendimiento de muchos sobre las implicaciones reales del manejo delpatrimonio, reglamentacin, ajustes a la forma cotidiana de obrar, acciones apermitirse o prohibirse, etc.


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Concienciacin y educacin

La educacin a la comunidad y los jvenes puede ayudar adiseminar conciencia sobre el valor patrimonial.

Es importante que este proceso sea interactivo y que incorporeprctica creativa y contacto directo con los sitios a protegerse, paraque se experimente totalmente su ambiente y materialidad.

Lo normal es integrar este componente a experiencias educativasde los jvenes que ya estn programadas (talleres de verano,cursos de la escuela)

Los talleres de manejo de materiales y prcticas tradicionales deconstruccin son efectivos si se cuenta con materiales y personaladecuado, pero a menudo se trata de recuperar tcnicas yadesvanecidas en el recuerdo, lo cual presume un reto adicional a

los encargados de la formacin. No hay por desgracia un mdulo educativo incorporado a nuestro

sistema educativo para concienciar sobre el valor del patrimoniomaterial. Esto se incorpora normalmente como elemento especialdentro de los cursos, lo cual perjudica su difusin.


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Concienciacin y educacin Talleres de maquetas

histricas en escuelassecundarias de Arroyo(2003). Recuperacin delrecuerdo de tres edificiosdesaparecidos en el

centro del poblado.


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Concienciacin y educacin Talleres de maquetas

histricas en escuelassecundarias de Arroyo (2003).Interpretacin de una casa decentral que aun existe en elbatey de la Central Lafayette(1937).


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Concienciacin y educacin Taller de verano con jvenes

en Juana Daz (2000). Visitasa los edificios antiguos delmunicipio y prctica de dibujode los monumentos alrededorde la plaza por los jvenes encuatro das de excursiones portodo el municipio.


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Concienciacin y educacin Proceso de rescate de Las

Planadas de Cayey (2002-):excursiones con sectores de lacomunidad complementadopor ciclo de conferenciascoauspiciada por entesimportantes cayeyanas talescomo el Municipio y el recintolocal de la UPR


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Concienciacin y educacin Taller prctico de tcnicas de

uso de cal para edificios deladrillo: celebrado en abril de2003 en la Casilla deCaminero, sede del CentroCultural de Aibonito.Reencuentro con una tcnicalargamente olvidada


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RESUMEN

La insercin de la sociedad civil en la praxis deconservacin del patrimonio y los consiguientesefectos concretos sobre ciudad y territorio es enel caso de Puerto Rico la coyuntura ms

esperanzadora para asegurar el reuso delugares venerados y de impacto simblico parael pueblo. Pero es un sendero apenasempezado y fraguado de incgnitas, caminadopor muchos en igual direccin pero con metas

aun no claras. Lo que no podemos hacer losurbanistas es ignorar la eclosin y auge de estemovimiento.

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