Ricard Matthieu - El Arte de la Meditación

7/28/2019 Ricard Matthieu - El Arte de la Meditacin

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MATTHIEU RICAR

EL ARTE

DE LA MEDITACI

Por qu meditar?Sobre qu? Cmo?

URANO

Argentina - Chi le - Colombia - EsEstados Unidos - Mxico - Uruguay -


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Ttulo original: L'Art de la Mditation Editor original: NiL, ditions, PRamos Mena

Los dibujos de la pgina 41 han sido realizados por los alumnos deLhadrepa.

Reservados todos los derechos. Queda rigurosamente prohibida, stitulares del copyright, bajo las sanciones establecidas en las leyes, esta obra por cualquier medio o procedimiento, incluidos la reprogr

as como la distribucin de ejemplares mediante alquiler o prstam

Copyright O 2008 by NiL, ditions, Pars All Rights Reservedde la traduccin 2009 by Francisco J . Ramos Mena2009 by Ediciones Urano, S.A. Aribau, 142, pral. - 08036 Barcelowww.edicionesurano.comwww.mundourano.com


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ndice

Prlogo

1. Por qu meditar?Es aconsejable cambiar?

Es posible cambiar?

Un aspecto fundamental de la conciencia

Slo con desearlo no basta

Qu es meditar?

Transformarse a s mismo para transformar mejor el mundo

Un efecto global

2. Sobre qu meditar?

Afinar la atencin y la plena conciencia

Lo que la meditacin no es

Un dominio liberador

En el corazn de la realidad

Hay que liberar al mono del espritu

3. Cmo meditar?LA MOTIVACIN

CONDICIONES FAVORABLES PARA LA PRCTICA DE

ALGUNAS RECOMENDACIONES GENERALES

ENFOQUE SU ESPRITU HACIA LA MEDITACIN


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LA CONCENTRACIN EN UN OBJETO

LA CONCENTRACIN SIN UN OBJETO

SUPERAR LOS OBSTCULOS

LA PROGRESIN DE LA CALMA INTERIOR

MEDITACIONES SOBRE EL AMOR ALTRUISTA

UN INTERCAMBIO SUBLIME

CALMAR EL DOLOR FSICO

LA VISIN PENETRANTEDEDICAR LOS FRUTOS DE NUESTROS ESFUERZOS

UNIR MEDITACIN Y VIDA COTIDIANA

Notas

Bibliografa

Agradecimientos


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general. As pues, mirada desde cualquier ngulo el de la trdesarrollo del amor altruista o el de la salud fsica, la medit

esencial si se quiere tener una vida equilibrada y rica en cuantSera una lstima subestimar la capacidad de transformacin dnosotros disponemos del potencial necesario para liberarnos dsustentan nuestros sufrimientos y los de los dems, para enconcontribuir al bien de los seres humanos.


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Por qu meditar

Examinemos nuestra existencia con sinceridad. Cul es nueshan sido hasta ahora nuestras prioridades, y qu previsiones tequeda por vivir?

Somos una mezcla de luces y sombras, de cualidades y defectsta una combinacin ptima, un estado inevitable? Y si no espreguntas que merecen ser formuladas, sobre todo si creemos cambiar.

No obstante, en Occidente, por causa de las actividades que abnoche una parte considerable de nuestra energa, tenemos menprofundizar en las causas fundamentales de la felicidad. Ms oimaginamos que, cuanto ms multipliquemos nuestras actividnuestras sensaciones y ms se desvanecer nuestro sentimientrealidad hay muchas personas que se sienten decepcionadas y actual. Y aunque sienten que les falta algo, no saben ver la sol

las tradiciones que preconizan la transformacin del propio setcnicas de meditacin apuntan a transformar el espritu. No eetiqueta religiosa concreta. Todos nosotros tenemos espritu, y

Es aconsejable cambiar?

Pocas personas pueden afirmar que, en su modo de vivir y en

hay nada que valga la pena mejorar. Algunos piensan que sus conflictivas contribuyen al enriquecimiento de sus vidas, y qutan especial es la que les hace ser lo que son: unas personas naprender a aceptarse as y a amar sus defectos tanto como suscorren un gran peligro de vivir inmersos en una insatisfaccinque podran mejorar con tan slo un poco de esfuerzo y reflex


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libre y dueo de s mismo? De buena gana intentaramos ahorrcomo no sabemos qu tenemos que hacer, preferimos pensar q

naturaleza humana. Pero lo natural no es forzosamente deque la enfermedad es consustancial a todos los seres, pero esomdico cuando estamos enfermos.

No queremos sufrir. Nadie se despierta por la maana pensanddurante todo el da y, si es posible, durante toda la vida! Hagtrate de emprender una tarea importante, de realizar nuestro truna relacin duradera, o, simplemente, de pasear por el bosquencontrarnos por casualidad con alguien, siempre esperamos sbeneficioso para nosotros o para los dems. Si estuviramos sslo nos proporcionarn sufrimiento, no haramos nada.

En ocasiones disfrutamos de momentos de paz interior, de amde las veces, no se trata ms que de sentimientos efmeros queestado espiritual. Sin embargo, vemos con toda claridad que, snuestro espritu cultivara esos momentos privilegiados, este hradicalmente nuestra vida. Todos sabemos que sera deseable

unos seres humanos mejores y que nos transformramos interisufrimiento de los otros y de contribuir a su bienestar.

Hay quien piensa que, sin conflictos interiores, la existencia econocemos muy bien los tormentos que se derivan de la cleratambin apreciamos en grado sumo la bondad, la satisfaccin proporciona el ver felices a los dems.

Est bien claro que el sentimiento de armona, asociado con e

calidad tal que se basta por s misma. Y lo mismo ocurre con muchas otras cualidades. Si aprendiramos a cultivar el amor paralelamente, nuestro egosmo y las frustraciones que se derinuestra existencia no slo no sera menos rica, sino todo lo co

Es posible cambiar?

La verdadera cuestin no es, pues, Es deseable cambiar?, En efecto, podemos imaginar que las emociones perturbadorasdas a nuestro espritu que nos es imposible librarnos de ellas, parte de nosotros mismos.

Es bien cierto que, por regla general, nuestros rasgos de carcti l d l l i di id l


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Indiscutiblemente, la malevolencia, la codicia, los celos y otroparte de nuestra naturaleza, pero hay diferentes maneras de for

ejemplo, puede contener cianuro y matarnos en el acto, pero mcontribuye a curarnos. Sin embargo, su frmula qumica no camni txica ni medicinal. Los diferentes estados del agua son temnuestras emociones, nuestros humores y nuestros rasgos de ca

Un aspecto fundamental de la conciencia

Conseguiremos comprenderlo cuando captemos que la primerque simplemente consiste en conocer, no es intrnsecamentems all de la turbulenta marea de pensamientos y emocionesnuestro espritu de la maana a la noche, podremos constatar lfundamental de la conciencia, que hace posible y sirve de basesea su naturaleza. En el budismo, ese aspecto cognoscitivo recluminoso, porque ilumina simultneamente el mundo extersensaciones, las emociones, los razonamientos, los recuerdos,

haciendo que los percibamos. Aunque esta facultad de conoceacontecimiento mental, en s misma no se halla afectada por tluz puede alumbrar una cara que expresa rencor u otra que sonmontn de basura, pero en s misma la luz no es ni malvada nEsta constatacin permite comprender que es posible transforas como el contenido de nuestros pensamientos y experiencialuminoso de la conciencia nos ofrece el espacio necesario pacontecimientos mentales en vez de mantenernos a su merced

condiciones de su transformacin.

Slo con desearlo no basta

No podemos elegir lo que somos, pero podemos tener ganas desentido a nuestro espritu. Pero slo con desearlo no bastar: tea la obra.

No vemos nada raro en el hecho de pasar aos aprendiendo a seguir una formacin profesional. Pasamos horas ejercitndonforma; por ejemplo, pedaleando cada da sobre una bicicleta eparte. Para emprender una tarea, sea cual sea, se necesita sentientusiasmo, y este inters proviene del hecho de que somos con


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nuestro modo de percibir las cosas, estamos transformando la cambio es el resultado de un entrenamiento del espritu denom

Qu es meditar?

La meditacin es una prctica que permite cultivar y desarrollfundamentales, de la misma manera que otras formas de entrentocar un instrumento de msica o a adquirir cualquier otra apt

Segn la etimologa, las palabras snscritas y tibetanas traduc

meditacin, son, respectivamente, bhavana, que significa cfamiliarizarse. Sobre todo se trata de familiarizarse con unacosas, y de cultivar cualidades que, aunque todos nosotros pomantienen en estado latente mientras no hagamos el esfuerzo

Algunos pretenden que la meditacin no es necesaria porque lla vida bastan para formar nuestro cerebro y, en consecuenciaactuar, y no cabe duda de que, gracias a esta interaccin con e

desarrollan la inmensa mayora de nuestras facultades, como, embargo, es posible hacerlo mucho mejor. Las investigacioneneuroplasticidad muestran que el entrenamiento, en cualquiprovoca importantes reorganizaciones en el cerebro tanto a nivestructural.

Comencemos, pues, por preguntarnos a nosotros mismos qu en la vida. Nos contentaremos con improvisar da tras da? Afondo de nuestro ser, ese malestar impalpable pero siempre prrealidad tenemos es sed de bienestar y plenitud?

Acostumbrados a pensar que nuestros defectos son ineluctablelargo de nuestra vida, acabamos por considerar nuestra disfuncsin tomar conciencia de que podemos salir de ese crculo vicio

Desde el punto de vista del budismo, cada ser lleva en s el podicen los textos, eso es algo tan seguro como que cada grano

aceite. Pero, a pesar de ello, vagamos errantes en medio de la clos cuales, por utilizar otra comparacin tradicional, son a la vignoran que, debajo de su chabola, hay un tesoro enterrado. Laconsiste en volver a estar en posesin de esa riqueza ignorada,vida el sentido ms profundo posible.


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est en la propia fuente de nuestro malestar. Cuando la felicidvida, la vida enseguida deja de tener un fin,1* escriba Romain

vista aparentemos ser muy felices, no podremos serlo de verdabienestar del prjimo. En cambio, el amor altruista y la compaautntica felicidad.

Estas reflexiones no emanan de una intencin moralizante, sina reflejar la realidad. Buscar la felicidad slo para uno mismo conseguir que ni nosotros ni los dems seamos felices. Podraaislarnos de los dems para as garantizarnos mejor el propio bpruebe a hacerlo por su cuenta y as todo el mundo ser feliz!)obtendremos ser justo el contrario del que desebamos. Vacimiedo, nuestra vida se volver miserable y tambin arruinaremrodean. Al final, todo el mundo saldr perdiendo.

* Las notas estn agrupadas al final de la obra.

Una de las razones fundamentales de este fracaso es que el muentidades autnomas dotadas de propiedades intrnsecas que, pque sean hermosas o feas, amigas o enemigas; las cosas y los interdependientes y estn en perpetua evolucin. Adems, haslos constituyen slo existen si estn relacionados entre s. El econtra esta realidad y slo engendra frustraciones.

El amor altruista, ese sentimiento que, segn el budismo, conssean felices, al igual que la compasin definida como el desde los dems as como sus causas no son tan slo nobles senfundamentalmente en armona con la realidad de las cosas. Co

seres tambin aspiran a evitar el sufrimiento. Por otro lado, cointerdependientes, nuestras alegras y desgracias estn ntimamdems. Cultivar el amor y la compasin es una apuesta doblemexperiencia muestra que son los sentimientos que ms bien nocomportamientos que generan son bien percibidos por los dem

Cuando alguien se interesa con sinceridad por el bienestar y etienen la necesidad de pensar y actuar de modo justo y esclarec

nes de los actos que se lleven a cabo a fin de ayudar a los dembenficas, dichos actos tienen que estar guiados por la sabiduradquiere por medio de la meditacin. La ltima razn de ser dtransformarse a s mismo para transformar mejor el mundo, o ms bueno para servir mejor a los otros. La meditacin permitnoble.


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sobre la meditacin, as como sobre su accin a corto y largo pMeditadores experimentados, que en total sumaban entre diez

meditacin, han mostrado que haban adquirido capacidades patencin que no es posible encontrar entre los principiantes. Smantener una vigilancia casi perfecta durante cuarenta y cincoconcreta, mientras que la inmensa mayora de la gente no condiez minutos, pasados los cuales se equivoca mucho ms. Lostienen la facultad de crear estados mentales precisos, bien enfCiertos trabajos muestran que especialmente la zona del cerebcomo, por ejemplo, la compasin presenta una actividad cons

personas que tienen una larga experiencia de meditacin. Estolas cualidades humanas pueden cultivarse de forma deliberadaentrenamiento mental.

A pesar de que en el marco de este texto no se pretende detallacada vez hay ms estudios cientficos que indican que la prctplazo disminuye considerablemente el estrs (cuyos efectos nedemostrados),2 la ansiedad, la tendencia a padecer accesos de posibilidades de supervivencia tras la ciruga cardiaca) y los riepersonas que previamente han padecido, por lo menos, dos epOcho semanas de meditacin (de tipo MBSR),4 a razn de treia un notable fortalecimiento del sistema inmunitario, a emocioatencin,6 as como a la disminucin de la tensin arterial en lincremento de la curacin de la psoriasis.8 As pues, el estudiomentales sobre la salud, que en otros tiempos se consideraba uvez ms en el orden del da de la investigacin cientfica.9

Sin querer caer en el sensacionalismo, es importante subrayar y el entrenamiento del espritu pueden cambiar una vida. Tede transformacin de nuestro espritu, as como las repercusiointerior, suave y profunda, tiene para la calidad de nuestra ex

Una vida bien llena no est compuesta por una sucesin ininteagradables, sino que se consigue cambiando la manera como clos avatares de la existencia. El entrenamiento del espritu no

las toxinas mentales, como el odio y la obsesin, que literalmeexistencia, sino tambin adquirir un mejor conocimiento del my una percepcin ms precisa de la realidad. Esta percepcin mpermite hacer frente a los altibajos de la vida, no slo sin distrtambin sabiendo extraer de ellos profundas enseanzas.


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2Sobre qu medita

El objeto de la meditacin es el espritu. Pero, por el momentoagitado y rebelde, y sometido a innumerables condicionamienobjetivo de la meditacin no consiste en quebrantarlo ni anestse vuelva libre, claro y equilibrado.

Segn el budismo, el espritu no es una entidad, sino un flujo sucesin de instantes de conciencia. Estas experiencias a menuconfusin y el sufrimiento, pero tambin pueden vivirse en un

libertad interior.De todos es bien sabido, como nos recuerda un maestro tibetaKhyentse Rimpoch, que no nos hace ninguna falta animar ao a ponerse celoso. La verdad es que no necesitamos un aceleramplificador de amor propio1 En cambio, el entrenamiento dqueremos afinar nuestra atencin, desarrollar el equilibrio emocultivar nuestra dedicacin al bien del prjimo. En nosotros m

necesario para que estas cualidades fructifiquen, pero dichas cpor el mero hecho de quererlo. Necesitan entrenamiento.

Ahora bien, todo entrenamiento, como ya hemos comentado, entusiasmo. No se aprende a esquiar practicando solamente un

Afinar la atencin y la plena conciencia

Galileo descubri los anillos de Saturno despus de haber fabrbastante luminoso y potente que luego coloc sobre un soportno habra sido posible si su instrumento hubiera sido defectuomano al sostenerlo. Del mismo modo, si queremos observar lofuncionamiento de nuestro espritu y actuar sobre ellos, es absfi t d d i t i A t l fi t


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Lo que la meditacin no es

A los practicantes de la meditacin les reprochamos que a vec

en s mismos, que se complazcan en una cierta introspeccin ede los dems. Sin embargo, no se puede tratar de egosta un prla obsesin del yo y cultivar el altruismo. Sera como reprochapase aos dedicado al estudio de la medicina.

Sobre la meditacin existen numerosos clichs. De entrada, diconsiste ni en hacer el vaco en el espritu, bloqueando los pensparte, es imposible, ni en implicarlo en infinitas cogitacione

anticipar el futuro. Tampoco es un simple proceso de relajaciternos se hallan momentneamente suspendidos en un estado

Bien es verdad que en la meditacin hay un elemento de relajacalivio que acompaa al hecho de soltar las esperanzas y los tlos caprichos del ego que alimentan continuamente nuestros c

Un dominio liberadorComo veremos, la manera de controlar los pensamientos no coalimentarlos de forma indefinida, sino en dejar que lleguen y mbito de la plena conciencia, de modo que no invadan nuestr

Ms exactamente, la meditacin consiste en hacerse con el cofamiliarizarse con una nueva comprensin del mundo y en culno se halla sometida a nuestros esquemas habituales de pensam

mediante un proceso analtico y luego se prosigue a travs de lmacin interiores.

Ser libre es ser el dueo de uno mismo. No obstante, eso no supase por la cabeza, sino emanciparnos de la coaccin de las afoscurecen nuestro espritu. Es empuar las riendas de la propien manos de las tendencias forjadas por la costumbre y de la cequivale a soltar el timn, dejar que las velas floten al viento y

deriva, sino, bien al contrario, supone avanzar con buen rumbocogido: el que el individuo sabe que es el mejor para s mismo

En el corazn de la realidad

L h i d l h bl i i i


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Estas meditaciones tambin se apoyan en la experiencia adquicontemplativos que consagraron su vida a observar los mecan

naturaleza de la conciencia, y que luego ensearon un gran nque permiten desarrollar la claridad mental, la vigilancia, la liel amor y la compasin. Pero es necesario que cada persona coestos mtodos, as como que verifique la validez de las conclullegaron. Esta comprobacin no es un simple proceso intelectuvolver a descubrir esas conclusiones y luego integrarlas en lo travs de un largo proceso de familiarizacin. Este proceso deentusiasmo y perseverancia; es decir, lo que Shantideva2 deno

que nos hace bien.Comenzaremos, pues, por observar y comprender cmo se encmo generan todo un mundo de emociones, alegras y sufrimvesaremos la pantalla de los pensamientos para aprehender el cconciencia, la facultad cognitiva primordial: la que da lugar a todos los dems fenmenos mentales.

Hay que liberar al mono del espritu

Para llevar a cabo esta tarea, debemos empezar por calmar lasespritu. Se podra comparar al espritu con un mono que, al esy de tal manera que l mismo se enreda an ms, hasta que, finde sus propias cadenas.

Del torbellino de los pensamientos primero surgen las emocio

comportamiento y, a la larga, los hbitos y los rasgos de carcmanifiesta de un modo tan espontneo no produce buenos resumodo que echar las semillas a tontas y a locas no contribuye a dlo primero es dominar el espritu, tal como hace el campesinode echar en ella las semillas.

Si somos sinceros con nosotros mismos y consideramos los becuando ponemos en prctica una nueva experiencia del mund

existencia, no parece excesivo que nos dediquemos, aunque sal da, a conocer y trabajar mejor nuestro espritu.

El fruto de la meditacin es lo que se podra llamar una manerverdadera. Esta felicidad no est constituida por una sucesinagradables, sino que es el profundo sentimiento de haber realiposible el potencial de conocimiento y realizacin que todos


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3Cmo meditar?

La meditacin no es un tema de palabras sino de prctica. No veces el men de un restaurante; lo que cuenta es sentarse a la mconsultar las lneas directrices que nos ofrecen las obras de losEstas obras contienen instrucciones que exponen claramente emeditacin, el mejor medio de progresar y las trampas que ace

Veamos ahora algunos de los numerosos mtodos de meditacipreliminares y consejos generales, y luego contemplaremos un

meditaciones concretas que constituyen la base de la va espirms sencillo posible, a fin de permitir que cada uno se vaya ejltimo, y para los que desean profundizar ms en estas prcticincluiremos las referencias de algunas obras ms especficas. Nsuficiente en la importancia de los consejos de un gua experimreemplazarlos, sino que se contenta con ofrecer bases que pro

Muchos de los ejercicios, en especial los que se refieren a la p

interior, la visin penetrante y el amor altruista, se practican ebudismo; otros, los que hablan, por ejemplo, del modo como hemociones, provienen de las enseanzas del budismo tibetanodestinado a todos aquellos que desean practicar la meditacin budistas, no explicaremos ciertos fundamentos de la prctica bcomo la toma del refugio, ni tampoco trataremos ciertos tema

Abordaremos los temas siguientes:

La motivacin que debe preceder y acompaar cualqu Las condiciones favorables para el ejercicio de la med

Seguir los consejos de un gua cualificado.

Los lugares propicios para la meditacin.


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Lo que es juicioso llevar a cabo o evitar.

La insatisfaccin inherente al mundo ordinario

La meditacin sobre la plena conciencia.

La calma interior (shamatha):

La atencin segn el vaivn de la respiracin.

La concentracin en un objeto. La concentraci

Superar los obstculos.

El desarrollo de la calma interior. La meditacin sobre el amor altruista:

El amor.

La compasin.

Alegrarse ante la felicidad del otro.

La imparcialidad.

Cmo asociar estas cuatro meditaciones.

El intercambio de uno mismo con los otros.

Calmar el dolor fsico y mental.

La visin penetrante (vipasyana):

Comprender mejor la realidad.

Controlar los pensamientos y las emociones. En busca del ego.

Meditacin sobre la naturaleza del espritu.

Dedicar los frutos de nuestros esfuerzos.

Asociar la meditacin con la vida cotidiana.

Para concluir, conviene recordar que nuestro espritu puede secomo nuestro peor enemigo. Liberarlo de la confusin, del egoperturbadoras es, pues, el mejor servicio que podemos rendirncomo a nuestro prjimo.


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fundamental de ver realizada esta aspiracin. Sin embargo, la actos estn en contradiccin con nuestros deseos. Buscamos lanos precipitamos hacia lo que nos har sufrir. La prctica budlo que es realmente beneficioso en nuestra existencia, sino queabandonar las causas del sufrimiento, a las que, a pesar de todsi fueran drogas. Y dado que ese sufrimiento est causado poroscurece nuestra lucidez y nuestro juicio, el nico modo de remjusta de la realidad y transformar nuestro espritu. As eliminadecir, los venenos mentales de la ignorancia, la malevolencia,celos, producidos, a su vez, por el apego egocntrico y falaz q

Pero con curar los sufrimientos personales no hay bastante. Cms que un solo ser, mientras que el nmero de los dems es nosotros, tambin quieren dejar de sufrir. Adems, todos los sy, por tanto, estamos ntimamente unidos a los dems. Por contransformacin que vamos a emprender a travs de la meditaccapaces de liberar a todos los seres del sufrimiento y contribui

Meditacin

Reflexionemos sobre nuestra situacin actual. Acaso no valdnuestros comportamientos o reacciones habituales? Miremos mismos. Percibimos la presencia de un potencial de cambio?hecho de que ese cambio es posible, por poca determinacin yHagamos cuanto est en nuestras manos para cambiar no slo

tambin, y sobre todo, para que un da seamos capaces de borry ayudarles a encontrar la felicidad duradera. Dejemos que estraces en lo ms hondo de nosotros.

Fuentes de inspiracin

Nuestro comportamiento denota estrechez o amplitud de es

conjunto de una situacin o nos limitamos a los detalles? Nuelargo plazo? Acaso nuestra motivacin se halla realmente imNuestra compasin se limita a nuestra familia, a nuestros amique nos identificamos? Es necesario que continuamente nos fopreguntas.


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CONDICIONES FAVORABLES PARA LA PRCTICA D

Seguir los consejos de un gua cualificado

Para ser capaz de meditar, primero hay que saber cmo hacerltiene el hecho de contar con un instructor cualificado. En el meverdadero maestro espiritual capaz de ofrecer una fuente inagoconocimientos, as como una larga experiencia personal. En ela fuerza del ejemplo y la profundidad de la transmisin vivieninspiradora y de las enseanzas que imparte en silencio, slo cvela para que el discpulo no se extrave en su trayectoria tom

Si no se nos concede la oportunidad de encontrar a un ser com

beneficiamos de los consejos de alguien serio cuyos conocimisuperiores a los nuestros, y cuyas instrucciones estn basadas ampliamente probada. Si no, ser preferible seguir algn textocomo ste, que est basado en fuentes fiables, antes que remenseanzas no son ms que fantasas de su propia cosecha.

Un lugar propicio para la meditacin

Las circunstancias que nos ofrece la vida cotidiana no siempremeditacin. Nuestro tiempo y nuestro espritu se hallan ocupaagobiados por preocupaciones de todo tipo. sa es la razn de qpreparar un cierto nmero de condiciones favorables. Es posibde los beneficios que proporciona la meditacin cuando se estla vida cotidiana, especialmente poniendo en prctica el ejerciPero al principio es indispensable ejercitar el espritu en un m

de la navegacin no se aprenden en medio de una fuerte temptiempo y la mar est en calma. Tambin, al principio, es prefetranquilo para darle al espritu la posibilidad de que se vuelva textos budistas utilizan la imagen de una lmpara de aceite. Siconstantemente expuesta al viento, su luz ser dbil y a cada m

P i bi l t d l i t ll


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consecuencia, hay que adoptar una postura equilibrada, ni demrelajada. En los textos, encontramos la descripcin de la postuvajrasana (postura adamantina):

1. Las piernas estn cruzadas en la postura del vajra, comnmloto, en la que primero se coloca la pierna derecha doblada sizquierda sobre la derecha.

Si esta postura resulta demasiado difcil, se puede adoptar la dsituar la pierna derecha bajo el muslo izquierdo, y la pierna iz(se trata de la denominada postura feliz, llamada sukhasana


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3. Los hombros estn ligeramente levantados e inclinados hac

4. La columna vertebral tiene que estar muy recta, como una

5. La barbilla ha de estar ligeramente inclinada hacia la gargan

6. La punta de la lengua toca el paladar.

7. La mirada se dirige hacia delante o ligeramente hacia abajola nariz, los ojos pueden mantenerse bien abiertos o entornado

Si nos resulta incmodo permanecer sentados con las piernas meditar sentados en una silla o sobre un cojn elevado. Lo ese

equilibrada, con la espalda bien recta, y adoptar otros puntos darriba. Los textos dicen que si el cuerpo est bien recto, los catambin lo estn, y, en consecuencia, el espritu se mantiene c

No obstante, podemos modificar ligeramente la postura del cuevolucionando la meditacin. Si tenemos tendencia a caer en dormimos, enderezaremos el busto adoptando una postura mmirada hacia arriba. Pero si, por el contrario, nuestro espritu erelajaremos un poco y dirigiremos la mirada hacia abajo.

Tenemos que mantener la postura apropiada el mximo tiempresultarnos demasiado incmoda, es preferible relajarse duranestar constantemente distrados por culpa del dolor. Tambin capacidades de cada uno, aprehender la experiencia del dolor, y recibirlo como si fuera una sensacin como las dems, agradplena conciencia del momento presente. Podemos, por ltimo, sentados con la marcha contemplativa, un mtodo que describ

El entusiasmo como motor de la perseverancia

Para interesarse por algo y dedicarle tiempo, primero hay que pde reflexionar sobre los beneficios que se esperan conseguir chaberlos probado un poco en primera persona nos alentar a pquiere decir que la meditacin siempre sea un ejercicio agrada

una excursin a la montaa, la cual no siempre constituye unaes que nuestro inters sea lo bastante profundo como para logpesar de los altibajos de la prctica espiritual. La satisfaccin nos hemos fijado bastar para mantener nuestra determinacinel esfuerzo merece la pena.


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ejemplo, podemos dedicar veinte minutos al da a la meditacise producen en nuestras actividades para reavivar, aunque sloexperiencia que habremos adquirido durante nuestra prctica tendrn muchas posibilidades de tener una alta calidad y mantcontinuidad en nuestra prctica. Para que una planta crezca bicada da. Si nos contentamos con echarle un gran cubo de aguprobablemente se morir por causa de la sequedad entre riegocon la meditacin, aunque eso no significa que a veces se le p

Si meditamos de una manera demasiado discontinua, durante hacemos volvemos a nuestras viejas costumbres y de nuevo n

emociones negativas, sin tener la posibilidad de recurrir al apocuando sucede lo contrario, es decir, si meditamos a menudo,ser posible prolongar, entre las sesiones formales, una cierta meditativa.

Asimismo cabe decir que la asiduidad no debe depender del hmismo que nuestra sesin de meditacin sea agradable o fastidimportante es perseverar. Si nos aburrimos, no es por causa de

nos falta entrenamiento. Por otra parte, cuando uno no se sienmeditar es cuando, por lo general, la prctica suele ser ms prdirectamente relacionada con lo que representa un obstculo eespiritual.

Tal como luego veremos con ms detalle, tambin tenemos qude modo que no estemos ni demasiado tensos ni demasiado rediscpulo que tocaba muy bien la vina, un instrumento de cuerddiscpulo tena muchas dificultades para meditar, se lo dijo a Besfuerzo lo indecible para concentrarme y entonces me pongointento relajarme, pero entonces me distiendo demasiado y lledebo hacer? A modo de respuesta, Buda le formul una preginstrumento, qu tensin das a sus cuerdas para que emitan eque estar ni demasiado tensas ni demasiado flojas, respondiPues lo mismo vale para la meditacin: para que progrese armencontrar un justo equilibrio entre el esfuerzo y la relajacin

Tambin es aconsejable no conceder importancia a las diversapueden surgir en el curso de la meditacin, bajo la forma, por clarividencia interior o de ausencia de pensamientos. Estas exlos paisajes que se ven al pasar cuando se viaja en tren. Comoocurrira bajarse del tren cada vez que una escena le parece intes llegar al destino final En el caso de la meditacin nuestro


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apertura interior.

En resumen, lo que cuenta no es llevar a cabo de vez en cuand

efmeras, sino ver, al cabo de varios meses o varios aos de pruna manera duradera y profunda.

ENFOQUE SU ESPRITU HACIA LA MEDITACIN

A fin de reforzar nuestra determinacin para meditar, hay cuatdebemos prestar atencin: 1) el valor de la vida humana; 2) su

pasajera de todas las cosas; 3) la distincin entre los actos beny 4) la insatisfaccin inherente a un gran nmero de situacione

El valor de la vida humana

A condicin de gozar de un mnimo de libertades y oportuniddepara extraordinarias ocasiones de desarrollo interior. Utiliza

una posibilidad nica de poner en prctica el potencial que toddescuidamos y dilapidamos con mucha facilidad. Este potenciignorancia o confusin mental y por nuestras emociones pertuveces permanece enterrado en nuestro interior como si fuera ucualidades adquiridas a lo largo del progreso espiritual sealanpotencial, comparable al brillo de un pepita de oro, que se va vamos limpiando.

Meditacin

Dmonos cuenta de hasta qu punto la vida humana es preciosa fin de extraer su quintaesencia. Comparada con la de los aniposibilidad extraordinaria de llevar a cabo una obra benfica qnuestra mera persona. La inteligencia humana es un instrumencapaz de engendrar tanto inmensos beneficios como de produUtilicmosla para eliminar gradualmente el sufrimiento y desc

no slo para nosotros mismos, sino tambin para todos los queinstante que pasa valga la pena de ser vivido y para que, cuandmuerte, la saludemos sin pesar, como el campesino que cultivPermanezcamos durante unos instantes reflexionando sobre e


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mismo cualquier tentativa de cambio.

Algunos me han dicho que han intentado cambiar por medio

por medio de oraciones o de visualizaciones, pero que con freal cabo de unos das o de unas semanas porque no vean un remtodos se revelan ineficaces, dejamos de asociarlos a la ideanuestro espritu. Sin embargo, en el transcurso de mis conversatodos los pases, hay un dato que siempre me ha llamado la atecientfica se pone de acuerdo en cuanto a pensar que el cerebroque es posible efectuar verdaderos cambios en nuestra experie

LA NATURALEZA EFMERADE TODAS LAS COSAS

Para qu sirve exactamente reflexionar sobre la naturaleza tra

cosas? La vida humana, por breve que sea, tiene un valor inesimpermanencia permite apreciar el valor del tiempo, darse cuevida es precioso, mientras que por lo general dejamos que el tieoro entre los dedos. Por qu siempre dejamos para luego aqusabemos que es esencial? Pero eso no implica que haya que paesperando unos resultados inmediatos, sino que hay que adquiinquebrantable de no perder ms tiempo en distracciones que sigamos dejndonos engaar por la ilusin de que tenemos to

instante de vida es precioso, porque la muerte puede sobreven

La manera como se ve la muerte influye considerablemente soAlgunos se sienten aterrorizados, otros prefieren no pensar en meditan sobre este tema para apreciar mejor el valor de cada ila pena vivir. Aunque frente al carcter inevitable de la muertedifieren en cuanto a la manera de prepararse para ese momentfuera un aguijn que aviva su coraje y lo preserva de distracci

obsesionado por la muerte, sino que es perfectamente consciende modo que concede todo su valor al tiempo que le queda.

El que aprovecha cada instante para convertirse en una personfelicidad de los dems morir en paz.

Si conseguimos tomar conciencia de la naturaleza esencialme


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naturaleza de las cosas y nos afectar menos.

Meditacin

Pensemos en la sucesin de las estaciones, los meses y los dacambios que afectan a todos los aspectos de la vida de los seremuerte, que, aunque es ineluctable, la hora de su llegada es incme queda de vida? Aunque viva hasta una edad avanzada, el frpidamente como el principio. As pues, es importante que exmi ser, lo que verdaderamente cuenta en la existencia, y que ude vida del modo ms fructfero posible, por mi bien y por el meditar y a desarrollar mis cualidades interiores, nunca ser ddedicarme a ello.

Fuente de inspiracin

Si esta vida que azota el viento con mil males

es ms frgil incluso que una burbuja sobre el agua,

es un milagro, despus de haber dormido,

inspirando y espirando, despertarse tan bien dispuesto.

Al principio, es necesario sentirse perseguido por el miedo a

escapa de una trampa. A medio camino, no hay que lamentarsque ha trabajado su campo con esmero. Y al final, hay que serllevado a cabo una gran tarea.

LOS COMPORTAMIENTOS QUE HAYQUE ADOPTAR Y LOS QUE HAY QUE EVITAR

Cmo sacar el mejor partido de la vida humana, preciosa perinterrumpirse en cualquier momento? Cuando se quiere realizuna actividad cualquiera que sea con la seguridad de llevarla


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atentos. Mientras sigamos jugando con fuego, es vano esperarotro lado, el hecho de pretender, cueste lo que cueste, conocerconsecuencias de nuestras elecciones es una actitud que no tieobstante, aunque sea difcil prever todas las consecuencias de nhagamos y en todas las circunstancias, al menos podemos exaasegurarnos de que el fin que nos mueve no es slo el de nuestrsobre todo, el de los dems.

Meditacin

Recojmonos en lo ms profundo de nosotros mismos y reconliberarnos del sufrimiento y encontrar la autntica felicidad. Cconciencia del hecho de que todos los seres vivos desean la mconcatenacin de causas y consecuencias que hacen que ciertapalabras y obras por ejemplo, los que estn inspirados por earrogancia engendren sufrimiento, mientras que otros, los qbenevolencia y la sabidura, conducen a una satisfaccin profu

conclusiones que se imponen en lo que respecta a lo que tenemy adoptemos la determinacin de ponerlas en prctica.


Queriendo escapar de l,

nos hundimos en el sufrimiento;

aspiramos a la felicidad, pero, por ignorancia,

la destruimos como si fuera nuestro enemigo.

LA INSATISFACCIN

INHERENTE AL MUNDO ORDINARIOAntes hemos visto que nuestra situacin est lejos de ser satisdeseable, sino posible, que la transformemos. Ciertamente, pomltiples maneras para olvidar los aspectos insatisfactorios deenmascararlos bajo toda suerte de disfraces atractivos activ


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sea nuestra situacin actual, siempre podemos evolucionar y cpodemos modificar nuestro modo de percibir las cosas y, pocoTomemos la determinacin, en lo ms profundo de nosotros mnuestra situacin actual, y cultivemos el entusiasmo y la persedesarrollar nuestras cualidades latentes.


El que corre durante toda su vida detrs de fines mundanos alabanzas, la fama, etc. despilfarra el tiempo, como el pescaro seco. No lo olviden y velen para que su vida no se agote en

MEDITACIN SOBRELA PLENA CONCIENCIA

Muy a menudo, nuestro espritu se deja llevar por una multituencadenados en los que se mezclan las reminiscencias y las prEstamos distrados, dispersos y confusos, y, por consiguiente,ms inmediata y ms prxima a nosotros. Apenas nos damos cen ese mismo instante: el mundo que nos rodea, nuestras sensnuestros pensamientos se encadenan, y, sobre todo, la concienoscurecida por nuestras cogitaciones. Los automatismos que restn en las antpodas de la plena conciencia. Esta conciencia

perfectamente despierto, en todo momento, respecto a todo lonuestro alrededor, y a todo lo que vemos, omos, sentimos o puna comprehensin de la naturaleza de lo que percibimos, libreprovocan tanto lo que nos atrae como lo que rechazamos. La pun componente tico que nos permite discernir si algo es buenestado de espritu y proseguir con lo que estamos haciendo ah

El pasado ya no existe, el futuro todava no ha llegado, y el pr

la vez, inasequible, ya que jams est inmvil e inmutable cel presente es lo nico que no tiene fin.4 No obstante, culmomento presente no significa que no se deban tener en cuenthacer proyectos para el futuro, sino que hay que vivir con lucidlos engloba.


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Seamos plenamente conscientes de lo que hacemos, tanto s eescribiendo, como fregando los platos o tomando una taza de to desagradables, porque la plena conciencia no depende de manera como uno lo hace; es decir, con una presencia de nimmaravillada ante la calidad del momento presente, abstenindnuestras construcciones mentales.

Cuando efectuamos esta prctica, dejamos de oscilar sin parar simplemente estamos atentos, lcidos y conscientes ante cada cada pensamiento, que primero surge y luego desaparece. Sinmomento presente. Notamos cmo hace que nazca en nosotr

luminosa y serena?


Cuando oiga un sonido mientras medita, simplemente pongade or. Nada ms que eso [...] No se monte pelculas mentalesdilogo interior sobre el tema. Slo los sonidos. La realidad es

florituras. Cuando oiga un sonido, est atento al proceso de orrrea aadida. Deje que pase.

B

Meditacin 2Andar concentrndose en cada paso

Se trata de un mtodo que numerosos meditadores practican aconciencia. Consiste en andar concentrndose al mximo en cbastante despacio para que podamos ser plenamente conscientmovimientos, pero no hasta el punto de perder el equilibrio. Aconciencia de nuestro equilibrio, del modo como ponemos el tprogresivamente, tomemos conciencia del conjunto del pie, y del suelo para ir a posarse un poco ms lejos. Dirijamos nuestpasos por delante de nosotros, y hagamos que el hecho de and

objeto de concentracin. Si no disponemos de mucho espacio,nuestros pasos, pero marcando una pausa de algunos instantesvuelta y manteniendo la plena conciencia sobre el hecho de qu

Tambin podemos combinar el andar con concentracin con lque encontramos vemos omos y sentimos como se explica m


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es la vida: en los rboles, en las nubes blancas y en la infinidapjaros y saboree la levedad de la brisa. Caminemos como sernuestros pasos van siendo ms ligeros conforme vamos andandemos.

LA CALMA INTERIOR

La meditacin tiene por objeto liberar al espritu de la ignorancmo conseguirlo? Una vez ms cabe decir que, para lograrlodesearlo, sino que hay que aplicar un mtodo sistemtico que de los velos que lo oscurecen. Y como el propio espritu es el tarea, antes que nada tenemos que asegurarnos de que es capasolo instante de sosiego, cmo podr liberarse de su ignorancmono que se halla atado por infinidad de ligaduras y que no ddirecciones intentando desatarse. Se mueve tanto que no deja pueda deshacer un solo nudo. Hay que empezar por apaciguarla atencin. Pero calmarlo no significa inmovilizarlo, mantenise trata de aprovechar esos momentos de tregua para ponerlo utilizaremos la serenidad que reina en nuestro espritu cuandomoldeable para liberarlo de las ataduras provocadas por los peemociones conflictivas y la confusin.

Los automatismos que afectan al pensamiento, producto de nu

costumbres, as como la distraccin y las elucubraciones concrealidad, son otros tantos obstculos para la consecucin de estenemos que poner remedio a estas condiciones desfavorablessignifica imponerle nuevas trabas, ya que con ello lo nico qucoaccionarlo y aumentar su tensin; bien al contrario, supone lcondicionamientos mentales y los conflictos interiores que los se encargan de alimentar.

Por consiguiente, para reconocer la verdadera naturaleza del elos velos engendrados por los pensamientos automticos. PeroSupongamos que hemos arrojado una llave al fondo de un estaremovemos el limo, slo conseguiremos que el agua se vuelvatendremos ninguna posibilidad de encontrar la llave. Primero se clarifique hasta que se vuelva lmpida y as ser ms fcil ve


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y perfectamente concentrado en su objeto. Vipashyana es la vnaturaleza del espritu y de los fenmenos, a la que se llega anconciencia, despus de desarrollar la prctica contemplativa y

Vipashyana permite desenmascarar las ilusiones y, por tanto, emociones perturbadoras. En resumen, shamatha prepara el teen un instrumento manejable, eficaz y preciso, mientras que vilas aflicciones mentales y de los velos de la ignorancia.

La mayor parte de las veces nuestro espritu es inestable, caprientre la esperanza y el temor, as como egocntrico, vacilante,veces hasta ausente y debilitado por las contradicciones intern

inseguridad. Adems, se rebela contra cualquier clase de entreinvadido por su verborrea interior, que mantiene un ruido deconscientes.

Dado que esta disfuncin no es ms que una produccin del protambin es lgico que por s mismo sea capaz de ponerle remedde shamatha y de vipashyana.

Resumiendo, se trata de pasar gradualmente de un estado de e

condiciones desfavorables que acabamos de describir a otro enatencin estable, la paz mental, la capacidad de gestionar las ecoraje, la apertura a los dems, la benevolencia y otras cualidadcuando es vasto y est sereno.

As pues, en primer lugar la prctica de shamatha pretende apnuestros pensamientos. Y para lograrlo aguzaremos nuestro ptomando como punto de apoyo algo a lo que rara vez prestam

nuestra respiracin.En condiciones normales, a menos que nos hayamos quedado de un esfuerzo, de contener nuestra respiracin o de respirar plos pulmones de aire puro, apenas somos conscientes de nuestrespirar es casi sinnimo de vivir. Y dado que respiramos contpartir de este acto, y de este modo dispondremos de un instrumest disponible; adems nos servir de punto de referencia parnuestra concentracin.

Esta prctica contiene tres etapas indispensables:

1) focalizar la atencin hacia un objeto previamente elegido (e

2) mantener la atencin sobre dicho objeto, y

3) l t i t d l l t i 7


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Respiremos con calma y con naturalidad. Concentremos toda nde nuestro aliento. Estemos particularmente atentos a la sensapor las fosas nasales, ya que ah es donde lo percibimos con m

notaremos en la entrada de la nariz, o un poco ms adentro, o innasales. Tambin deberemos fijarnos en el momento en el quesuspenso, entre la espiracin y la inspiracin siguiente. Luegode nuevo sobre el punto en el que notamos que pasa el aire. Asmomento en el que la respiracin se para durante un segundo espiracin siguiente.

Concentrmonos del mismo modo en el ciclo siguiente, y as s

respiracin, sin tensiones, pero sin relajarnos tanto que caigamconciencia de nuestro aliento tiene que ser lmpida y serena. Baguacero, que barre las masas de polvo que levanta el viento a y luminoso. El polvo representa la agitacin y la confusin meconcentracin sobre el aliento, y el aire puro, la calma y la cla

No modifiquemos de forma intencionada el ritmo de nuestra raliento ser un poco ms lento, pero eso tiene que hacerse de u

nuestra respiracin es larga como si es corta, lo nico que senser concientes ante ese hecho.

Sin duda, tarde o temprano o bien cederemos a la distraccin, una proliferacin de pensamientos, o bien caeremos en un vago incluso en una combinacin de ambas cosas; es decir, en ununa gran profusin de pensamientos errticos. En este punto ela guardia: tan pronto como nos demos cuenta de que hemos psimplemente recupermosla, pero sin sentirnos agobiados por

culpabilidad. Volvamos a estar atentos a nuestro aliento, comouna flor despus de haber revoloteado a derecha y a izquierda

Y cuando los pensamientos nos asalten, no tratemos de pararloes posible puesto que ya se han hecho realidad, sino que limdejemos que atraviesen el campo de nuestra conciencia como dejar rastro.

A veces, durante algunos instantes tambin podemos escoger

objeto de concentracin. Luego, tan pronto como nuestro espvolveremos a dirigir nuestra atencin hacia la respiracin.

Si nos sobrevienen otras sensaciones fsicas, por ejemplo, un haber estado demasiado tiempo sentados en la misma postura,que ese dolor nos abata Incluymoslo en la plena conciencia y


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Variacin 1

Un mtodo para reavivar la concentracin cuando pierde fuerz

respiraciones. Por ejemplo, podemos contar mentalmente uncompleto de respiracin es decir, de inspiracin y espiraciciclo siguiente, y as sucesivamente hasta diez, y entonces emvez de uno. Este modo de proceder nos ayudar a mantenertambin podemos contar uno al final de la inspiracin y doEste mtodo y los siguientes pueden aplicarse de vez en cuandnecesidades, pero no es necesario contar las respiraciones a lo

Variacin 2

Otro modo de proceder consiste en repetir mentalmente y con b1..., mientras inspiramos, y luego 2, 2, 2, 2, 2, 2, 2..., durante lsiguiente, contaremos 3, 3, 3, 3, 3, 3, 3..., al inspirar, y 4, 4, 4,modo proseguiremos hasta diez, y luego empezaremos otra ve

Tambin podemos contar rpidamente del uno al diez durantemismo al espirar. Existen otras diferentes maneras de contar, len textos ms especializados que se citan al final de esta obra.refrescar nuestra concentracin cuando corremos peligro de decia o la distraccin.

Variacin 3

En lugar de observar el aliento en s, tambin podemos concenvaivn del abdomen o de los pulmones, que acompaan a la re

Variacin 4

Asimismo podemos asociar una frase sencilla con el ir y venirejemplo, al espirar, podemos decirnos mentalmente: Todos lal inspirar: Que todos sus sufrimientos desaparezcan.

Variacin 5


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unos instantes sobre el punto de suspensin del aliento; es decsoplo se desvanece al final de la espiracin. Tambin es el pundiscursivos se ven suspendidos temporalmente. Durante ese b

permanezcamos descansados en ese espacio lmpido, serenos mentales. Sin que ello suponga conceptualizar esta experiencirepresenta un aspecto fundamental de nuestro espritu, que siecortina de los pensamientos.

Podemos practicar estas variaciones como mejor nos convengconcentracin.

LA CONCENTRACIN EN UN OBJETO

Existen muchas otras maneras de cultivar la concentracin y lason de dos clases, segn se utilice, o no, un objeto. Este objetorespiracin, como acabamos de ver, pero tambin otras sensacexterior o una imagen que se habr visualizado. Podemos escocompletamente corriente: una piedra, una flor o la llama de un

el caso de la respiracin, el entrenamiento consiste en dejar quatentamente en el objeto escogido, yen volver a concentrarse epercibamos que nos hemos distrado.

El objeto puede ser asimismo una representacin simblica o espiritual; por ejemplo, una pintura o una estatua de Buda. Coconcentrarnos durante bastante tiempo en esta representacin,detalles presentes en nuestro espritu, y luego nos concentrare

mental de este objeto. He aqu, resumidas, las instrucciones orha ofrecido Dilgo Khyents Rimpoch:

Meditacin

Sintese en la postura de los siete puntos. Deje que su espritualgunos instantes, y luego visualice al Buda Shakyamuni en e

usted. Est sentado en el disco lunar, el cual est posado sobresostenido por ocho leones. Su cuerpo resplandece como una mderecha, toca el suelo cerca de su rodilla derecha, haciendo el testigo. Su mano izquierda reposa en su regazo, en el gesto de de limosnas lleno de nctar. Est vestido con tres trajes monsinfinitos rayos de luz de sabidura y compasin que llenan el u


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minuciosidad como lo hara un pintor.

Para consolidar su concentracin, neutralice inmediatamente t

espritu. Si ste se agita, si sus pensamientos se desbocan y le clara, baje un poco la mirada, que normalmente mantiene posaconcentrarse en la parte inferior del Buda; es decir, en las piersostenido por leones, o en el asiento de loto. Eso le ayudar a

Si su espritu empieza a volverse torpe, a relajarse o a dejarse levante la mirada y concntrese en la parte superior de la visuBuda, en sus ojos y en el punto que tiene entre las cejas.

Si su visualizacin no es clara, trate de conseguir por todos lofina y ms precisa. Y si ya es clara, concntrese en ella de una

Cuando su espritu se vuelva estable y apacible, examnelo. Cest visualizando no es la del Buda en s mismo, sino una proyes cultivar la concentracin. Y aunque dicho espritu tenga la objeto, si usted intenta verlo tal como ste es en s mismo, no absoluto. Es imposible localizar el espritu, identificar sus condnde viene, ni ver dnde est y adnde va; es decir, usted nuespritu no es una entidad autnoma que pueda ser identificad

Y lo mismo ocurre con el cuerpo. Lo que llamamos cuerpo elementos. A una gran cantidad de grano le damos el apelativopaja atadas juntas las llamamos haces, y a una gran cantidapero estas denominaciones no se refieren a ninguna entidad quAsimismo, si usted piensa en ese ensamblaje llamado cuerpola mdula, los huesos y los diferentes rganos, no quedar nad

tal cuerpo.En realidad, todos los fenmenos del universo aparecen en suresultado de un concurso temporal de causas y condiciones espfenmenos existen realmente porque no los examinamos con ben realidad, se hallan privados de toda existencia intrnseca.

En cuanto vea con claridad que su cuerpo, el Buda de su visuafenmenos son la manifestacin del espritu y que, por natural

dotada de existencia propia, sino un flujo dinmico de experiesimplemente, en el estado natural del espritu desprovisto de tinvadido por los pensamientos, tome conciencia de ellos, peroalentarlos. Eso es lo que se denomina visin profunda. Es esenshamatha, y la visin profunda, vipashyana.


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aunque mantener esta concentracin sea difcil, siempre ser mun estado de perfecta simplicidad, exento de cualquier clase desto, la concentracin sin un objeto es el resultado natural de l

representa un paso adelante hacia la comprensin de la naturaltravs de la experiencia directa.

Meditacin

Enfoquemos nuestro espritu hacia el interior de nosotros mismsu cualidad principal, que es, sencillamente, la de conocer. E

cia en estado puro, ilumina todo pensamiento y toda percepcifundamental del flujo de la conciencia. Podemos llevar a caboausencia de pensamientos y de imgenes mentales. Tratemos primordial de toda experiencia, y despus dejemos que nuestralgunos instantes en esta plena conciencia no dual, clara y lcipensamientos discursivos.


Presencia transparente, infinita apertura, sin fuera ni dentro;

completamente envolvente.

Sin frontera ni direccin.

Inmensidad infinita de la vista,

verdadera condicin del espritu,como el espacio del cielo,

que no tiene centro, ni periferia,

ni referencia.

SUPERAR LOS OBSTCULOS

Todo entrenamiento implica esfuerzo, y, naturalmente, cualqu


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reavivar la inspiracin y el entusiasmo.

Otra forma de pereza consiste en pensar: Ca!, esto no es par

posibilidades; prefiero no comprometerme. En suma, renunciantes de haber atravesado la lnea de salida. Para contrarrestarsu justo valor el potencial de transformacin que existe en nosde la existencia de un punto de vista ms amplio.

Hay una tercera forma de pereza: la que consiste en no estar duno sabe que es lo ms importante y, en vez de ello, opta por dactividades menores. Para remediarlo, debemos establecer unapreocupaciones y recordar que tenemos el tiempo contado, mi

ordinarias no tienen fin, como sucede con las olas del ocano.La distraccin es el parsito ms comn de la meditacin. Qualguna vez en sus redes? Es muy normal, ya que, como cuandoespritu es indisciplinado y catico, no es razonable esperar quAs pues, no hay ninguna razn para desesperar. El fin de la mlograr que el espritu se vuelva flexible y manejable, concentrsobre todo, liberarlo de la influencia de las aflicciones mental

antdoto para estas ltimas, hay que cultivar la vigilancia, por cuenta de que su espritu se pone a vagabundear, tiene que cenobjeto de la meditacin. Cuando nos demos cuenta de que nosdecir que la plena conciencia vuelve a hacer acto de presencialamentarnos, debemos alegrarnos por ello. Cuanto ms conscidistraemos, ms progresar nuestra meditacin. Acordmonosmeditamos. Nuestro fin no es perder el tiempo dejando que nuvagabundeen, sino utilizar ese tiempo de la mejor manera pos

condiciones de una verdadera felicidad compartida.Asimismo, el torpor y la agitacin son dos obstculos muy impel hilo de la meditacin. El torpor perjudica la claridad del espestabilidad. El primero puede ir desde una simple pesadez espiletargo, el aburrimiento, el soar despierto o cualquier otro es

Esta falta de claridad constituye un obstculo an ms importaconcentracin para comprender mejor la naturaleza del esprit

Rimpoch, un maestro contemporneo de la meditacin: Cuacontemplamos el mar, a travs del agua clara vemos las piedrameditacin debe poseer esta misma clara cualidad, que nos peconscientes de la situacin de nuestro espritu. De noche, en cauna masa sombra y opaca que no deja que la mirada penetre e


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tenta una y otra vez alejarnos de nuestro objeto de concentracisentados, pero nuestro espritu se va a dar la vuelta al mundo. un poco nuestra postura fsica, bajemos la mirada, y volvamo

sentidos, recordndonos por qu estamos ah y qu fin perseguTodo entrenamiento requiere esforzarse de manera regular. Ladisminuye considerablemente los efectos de la meditacin y, epoder que tiene para transformarnos. Tal como lo hemos subraun gran esfuerzo realizado de vez en cuando no tiene el mismesfuerzo menos espectacular pero continuado. No conseguir modo profundo y duradero. Una vez ms, hay que remediar e

sobre el valor del tiempo que pasa, sobre lo incierto de la duralos beneficios del entrenamiento que nos hemos comprometid

Tambin podemos caer momentneamente en el exceso contraexcesivo, si dedicamos ms tiempo del necesario a poner remefinal, la tensin que ello nos producir acabar perjudicando nhay que equilibrar los esfuerzos; dicho de otro modo, encontratensin y la relajacin, tal como Buda se lo haba aconsejado hemos hablado, y dejar de aplicar un antdoto cuando ya no esespritu repose tranquilamente en su estado natural.

El esfuerzo excesivo tambin puede ser resultado de la impaciestados que no llevan a ninguna parte. Si para subir una alta mcorriendo, deberemos pararnos enseguida porque nuestros pulmodo, si tensamos demasiado un arco, ste se romper, y si pofuerte para cocinar un plato, ste se quemar en vez de cocers

Exigir un resultado inmediato indica un nimo caprichoso o pcon humor: En Occidente, a veces la gente tiene demasiada pDespertar rpida y fcilmente y, si es posible, gastando poco!cultivar una cosecha hace falta paciencia no sirve de nada conseguir que crezcan ms rpido!, para la prctica de la mconstancia.

Los textos de meditacin ensean nueve mtodos para cultivaecuanimidad del espritu y hacer que sea ms estable. Recorde

conciencia consiste en mantenerse siempre atento al objeto deescogido.

1. Concentrar el espritu, aunque al principio slo sea brevemenlas instrucciones y evitando dejarse llevar por imgenes o pen


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nos demos cuenta de que la distraccin lo ha apartado de l. Pael espritu ha sido vctima de la distraccin, identificar la emoprovoc esa distraccin y aplicar el antdoto apropiado. Poco

mantener el espritu tranquilo y estable durante perodos de tieuna concentracin ms clara.

4. Posar el espritu con cuidado: cuanto ms firme y concentrameditar nos hallaremos. Y aunque la atencin todava no sea pno perder de vista por completo el soporte de la meditacin, yformas ms perturbadoras de agitacin mental.

5. Dominar el espritu: cuando la concentracin consigue esta

correr el peligro de transformarse en una especie de sutil entoreso, lo mejor ser reavivar la agudeza y la claridad de la preseinspiracin y el entusiasmo, considerando los beneficios de la(samadhi).

6. Pacificar el espritu: de tanto reavivar la agudeza, puede sunacimiento de una sutil agitacin mental, que toma la forma dconversacin que se mantiene en segundo plano de la atencin

paremos a considerar los escollos referidos tanto a la agitacinpermitir calmar el espritu y conseguir que se vuelva claro y lde un sonido puro emitido por un instrumento de msica bien

7. Pacificar completamente el espritu poniendo en prctica laentusiasta a fin de despojarnos de todos nuestros apegos en lasstas pueden adoptar diversos aspectos, como, por ejemplo, laausencia de pensamientos discursivos, y manifestarse tambinespontneos de alegra o de tristeza, de confianza inquebrantabde desaliento, de certeza o de duda, de renuncia a las cosas dedevocin intensa o de visiones negativas. Todas estas experienuna razn aparente, y son la seal de que en nuestro espritu secambios. Pero no hay que identificarse con esas experiencias nde la que tienen a los paisajes que vemos pasar desde la ventaatencin perfectamente apaciguada, estas experiencias se desva trastornar nuestro espritu, y entonces ste se ver embargado

8. Mantener la atencin concentrada en un punto: despus de hentorpecimiento y la agitacin mental, hay que mantener la ateclara en un punto durante toda la sesin de meditacin. Entonlmpara que se halla protegida del viento, cuya llama, estable yde su capacidad. Basta con un mnimo esfuerzo, al inicio de la


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LA PROGRESIN DE LA CALMA INTERIOR

Poco a poco, nuestro espritu se ir apaciguando. Sin embargo

produjera todo lo contrario. Cuando uno intenta calmarlo, tienems pensamientos que antes. Pero, en realidad, lo que pasa noaumentado de repente, sino que la persona se da cuenta, de goYa hemos mencionado que no es posible ni deseable bloquearlo que s es importante es controlar el proceso si deseamos elisufrimiento, as como favorecer el desarrollo de la autntica fepensamiento no sirven ms que para reforzar nuestra dependesufrimiento, mientras que la meditacin regular, lejos de enge

embrutecimiento o de destruir toda espontaneidad, conduce a dominio del espritu y a la paz mental. Para ilustrar la pacificapensamientos, los textos budistas utilizan la metfora de una cpoco a poco se va calmando a medida que se va acercando a lfundirse con el vasto ocano. Esta progresin de la meditacinilustrada por cinco imgenes:

La cascada que cae desde un acantilado: los pensamientos parecen ms numerosos porque el individuo toma conciencia espritu.

El torrente que desciende por las gargantas con rapidez: el espperodos de reposo y de actividad.

El ro ancho que fluye sin obstculos: el espritu slo sperturbado por algn acontecimiento; si no, permanece tranqu

El lago surcado por unas cuantas olas: el espritu parec

superficie, pero por dentro se mantiene tranquilo y presente. El ocano tranquilo: la concentracin inquebrantable y sin de recurrir a antdotos contra los pensamientos errticos.

Esta progresin no se alcanza en un da, ni tan slo en unas potemprano, llegar un momento en el que nos daremos cuenta verdad. Si aceptamos de buen grado que hace falta tiempo y parte, un deporte, una lengua o cualquier otra disciplina, a san

mismo con el entrenamiento del espritu? La aventura merece una aptitud ordinaria, sino un dominio y una manera de ser qutoda nuestra vida.


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MEDITACIONES

SOBRE EL AMOR ALTRUISTATodos nosotros hemos vivido, en diversos grados, la experienaltruista, de una gran benevolencia y de una compasin intensaseres son ms altruistas que otros por naturaleza, y a veces hasOtros estn ms encerrados en s mismos y les cuesta ver que ede los dems, por no hablar de anteponerlo a sus intereses perel altruismo es esencial porque no slo nos permite contribuir

porque con ello actuaremos de la manera ms satisfactoria posrealidad, un sentimiento exacerbado de la importancia del yo tormentos.

De manera general, aunque en nuestro espritu se generen penven rpidamente reemplazados por otros menos nobles, comomotivo, si deseamos que en nosotros predomine el sentimientodediquemos tiempo a cultivarlo, porque como tantas otras vsuficiente.

Como hemos visto anteriormente, meditar es familiarizarse coAs pues, qu tenemos que hacer para meditar sobre el altruismdarnos cuenta de que, en lo ms profundo de nosotros mismos,aspiramos a la felicidad. Una vez hayamos reconocido esta aspconciencia del hecho de que todos los seres la comparten. Y qucon tanta frecuencia se ve escarnecido es, sin duda, el dereclos seres vivos. Por ltimo, tenemos que comprender que se pu

sufrimiento. Es posible sentir de un modo ms positivo los donosotros estamos destinados a enfrentarnos, de manera quesufrimientos morales, los cuales podremos ir eliminando poco

Desgraciadamente, cuando se trata de escoger los medios paraprevenir el sufrimiento, con frecuencia somos muy torpes, porhasta nos equivocamos por completo. Algunos caen en las abebuscan a ciegas la felicidad sin que les importe el sufrimiento

desear que, en nombre de un altruismo mal entendido, los fundictador sanguinario tuvieran xito. En cambio, con toda honese libere del odio que lo incita a perjudicar a los otros y, de papropia desgracia. En esta ocasin se trata de un altruismo bienaspiracin en realidad afecta al bienestar de todos los seres. Dninguna clase de reservas que cada uno de los seres sensibles


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Meditacin

El amor altruista

Imaginemos que un nio pequeo se acerca a nosotros y nos minocencia. Le acariciamos la cabeza, contemplndolo con ternsentimos un amor y una benevolencia incondicionales. Dejemque quiere es el bien de este nio, nos impregne por completoinstantes en la plena conciencia de ese amor, sin pensar en nin

Tambin podemos elegir a cualquier otra persona que nos inspprofundo reconocimiento, a nuestra madre, por ejemplo. Deseencuentre la felicidad y las causas de la felicidad; despus ext

todos los que se hallan cerca de nosotros; luego a aquellos a lodespus, progresivamente, a todos los seres. Por ltimo, deseenemigos personales y a los enemigos de toda la humanidad. Dcaso, eso no significa que les deseamos xito en sus funestos pardientemente de verdad que abandonen su odio, su avidez, suque la benevolencia y la preocupacin por la felicidad del otroCuanto ms grave es la enfermedad, ms cuidados, atencin yenfermo.

As pues, abracemos a todos los seres en un sentimiento de am

La compasin

Imaginemos ahora que una persona a la que queremos mucho accidente, de noche y en una carretera cualquiera. Yace ensan

de dolores atroces. Los servicios de urgencias tardan en llegarSentimos intensamente el sufrimiento de esa persona tan quermezclado con un creciente sentimiento de angustia e impotencms profundo de nosotros mismos, hasta el punto de que casi hacer?

En momentos como ste, abandonmonos a un inmenso sentimpersona. Tommosla con cuidado entre nuestros brazos. Imag

emanan oleadas de amor que se vierten en ella. Imaginemos qsufrimiento se ve reemplazado por un tomo de amor. Desde lcorazn deseemos que sobreviva, que se cure y que deje de sucompasin proviene de la misma fuente que el amor altruista yaplicado al sufrimiento.


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El regocijo

Asimismo, en este mundo hay personas que poseen inmensas c

de favores a la humanidad y cuyos proyectos benficos se hanTambin estn los que, despus de esforzarse mucho y de pervisto realizadas sus aspiraciones, por no hablar de aquellos qu

Regocijmonos de todo corazn ante sus logros, deseemos qusino que, bien al contrario, permanezcan y crezcan. Esta faculaspectos ms positivos de los otros es el mejor de los antdotovisin sombra y desesperada del mundo y los seres. Y tambiy los celos, los cuales reflejan, precisamente, una incapacidad

felicidad del prjimo.

La imparcialidad

La imparcialidad es un componente esencial de las tres meditdeseo de que todos los seres se vean libres del sufrimiento y dey no depender de nuestros afectos personales, ni del modo en

Adoptemos la mirada del mdico, que se regocija cuando los dse preocupa por la curacin de los enfermos, cualesquiera quehecho de que todos los seres, sin excepcin, tanto cercanos, exevitar el sufrimiento. Tambin pensemos en la interdependencfenmenos del universo y de todos los seres que lo pueblan. Pinterdependencia es el fundamento del altruismo. A imagen demanera tanto sobre los buenos como sobre los malos, y tanto ssobre una montaa de basura, hagamos todo lo posible para qucompasin y la alegra que cultivamos en las tres meditacionetodos los seres sin distincin.

Recordemos una vez ms que, respecto a nuestros adversarioshumanidad, no se trata de alentar ni de tolerar pasivamente susino de considerarlos como seres que estn muy enfermos, o hbenevolencia que experimentamos hacia nuestros allegados, dlos sentimientos perniciosos que los dominan desaparezcan de

Cmo combinar estas cuatro meditaciones

Comencemos por el amor altruista; es decir, el ardiente deseo f li id d l d f li id d Si l b d i i


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invadidos por un sentimiento de impotencia y agobio, e incluspunto de sentirnos desbordados por la inmensidad de la tarea,

En este caso nos ir bien meditar sobre la alegra que sentimospensando en todos aquellos que poseen grandes cualidades huaspiraciones altruistas se ven coronadas por el xito, y en aqueverdad satisfactoria, y entonces regocijmonos plenamente.

Si esta alegra tiene trazas de convertirse en euforia ciega y en al amor altruista, etc. De este modo, procuremos desarrollar dpensamientos, evitando caer en las posibles desviaciones de u

Al final de nuestra meditacin, contemplemos durante unos inque existe en todas las cosas. Comprendamos que, lo mismo qdos alas para volar, nosotros debemos desarrollar simultneamcompasin. La sabidura corresponde aqu a una mejor comprcompasin al deseo de que los seres se vean libres de las caus


El amor altruista es el sentimiento espontneo de vivir conecLo que usted siente, tambin lo siento yo, y lo que yo siento, udiferencias entre nosotros [...] Cuando comenc a practicar la observ que mi sensacin de aislamiento comenzaba a atenuaruna creciente impresin de fuerza. Donde antes slo vea probsoluciones. Aunque an pensaba que mi felicidad era ms impiba empezando a percibir el bienestar de los otros como la bas

Continuamente pongo en prctica la siguiente experiencia intentre el comportamiento de los dems y el amor que sentimos causales. El amor al prjimo es como una plegaria elemental q

Ojal pueda ser el protector de aquellos que no tienen quien llos que estn de camino, la balsa, el puente y la barca de todosorilla!

Ojal pueda ser una isla para quienes estn buscando una isladesean una lmpara que pueda ser un hogar para quienes quie


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Mientras el espacio dure,y mientras haya seres,

ojal yo tambin pueda permanecer

para aliviar el sufrimiento del mundo!

UN INTERCAMBIO SUBLIME

A veces, un profundo sufrimiento puede despertar nuestro espabrirlos a los dems. Para que esta apertura se convierta en un prctica especial que consiste en cambiar mentalmente, mediasufrimiento del otro por nuestra felicidad, y en desear que nueslos dems.

Es posible que pensemos que ya tenemos bastantes problemasnuestro fardo, cargando con el sufrimiento de los dems, sea pembargo se produce justamente lo contrario. La experiencia mtransformamos y disolvemos mentalmente el sufrimiento de locompasin, eso no slo no aumenta nuestro propio sufrimientcontribuye a disiparlo. Eso es as porque el amor altruista y la

ms poderosos para nuestros propios tormentos. En consecuenganando! Mientras que la contemplacin egocntrica de nuestpor la sempiterna cantinela del yo, yo, yo que resuena en noslo sirve para aumentar nuestro desamparo. En cambio, una egocentrismo, la contemplacin altruista del sufrimiento del pse decuplique.

Esta prctica del intercambio es un medio especialmente efica

y la compasin a travs de la meditacin. Cuando nos enfrentedems, tenderemos a comportarnos compasivamente y a ayud

Meditacin


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imaginar otras situaciones dolorosas a las que ella, o cualquierescogido como objeto de meditacin (un nio, un buen amigomucho), se ve obligada a enfrentarse.

Mientras nos hallemos invadidos por un sentimiento de empatintolerable respecto al sufrimiento de ese ser, dejemos que en sentimiento de compasin. Despus, cuando la compasin hayespritu, extendmosla a todos los seres, pensando que ellos tamismo amor.

Tambin podemos pensar, por ejemplo, en una cierva persegujaura de perros. Acorralada y presa del pnico, salta desde un

huesos; los cazadores la encuentran moribunda y la rematan cDejemos que en nuestro espritu se perfilen toda clase de sufriPensemos en las personas ancianas, en el dolor de quienes estque apenas tienen para sobrevivir. Pensemos en aquellos que tambin en los que son vctimas de su propio espritu y sufren angustia que les provocan sus deseos o su odio.

Asimismo, en este amor y esta compasin, no debemos olvidar

a los que vemos como enemigos y a quienes provocan toda claa todos los seres reunidos en una inmensa multitud, y recordemellos tambin han sufrido en repetidas ocasiones en el ciclo in

Cuando nos sintamos embargados por un intenso sentimiento empezar la llamada prctica del intercambio. Consideremos qnuestro aliento, a los que sufren les enviamos toda nuestra felinuestra buena fortuna, nuestra salud, etc., en forma de un nct

luminoso. Deseemos que reciban estas bondades sin reservas consideremos que el nctar colma todas sus necesidades. Si suimaginemos que se ve prolongada; si son pobres, que obtienenestn enfermos, que se curan, y si son desgraciados, que encue

Al inspirar, pensemos en que estamos absorbiendo, como si fulas enfermedades, todos los trastornos fsicos y mentales, y laesos seres, y que este cambio los alivia de sus tormentos. Pensvuelven hacia nosotros como una bruma llevada por el vientotransformado y eliminado todos sus males, sintamos una gran experiencia de la falta de apego.

Repitamos esta prctica infinidad de veces, hasta que se convinaturaleza. Nunca debemos estimar que ya hemos hecho basta


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Variacin 1

Al espirar, pensemos que nuestro corazn es una esfera brillanemanan rayos de luz blanca que llevan nuestra felicidad a tododirecciones.

Al inspirar, carguemos con el peso de sus tormentos, bajo la fsombro que penetra en nuestro corazn y se disuelve en la luz

Variacin 2

Imaginemos que nuestro cuerpo se desmultiplica en una infinilos confines del universo, y que cargan con los sufrimientos dencuentran y les ofrecen nuestra felicidad; que nuestro cuerpo que tienen fro, en alimento para los hambrientos o en refugioconvirtamos en la gema que concede todos los deseos, un pcuerpo, y de un magnfico y centelleante color azul zafiro, unanatural a las necesidades de todos aquellos que le dirigen una

Esta prctica permite asociar nuestra respiracin con el desarrmuy simple, puede utilizarse en cada momento de la vida cotisentados en un tren, esperando en un cola o en un atasco, o cuade reposo en nuestras actividades diarias.

CALMAR EL DOLOR FSICO

El dolor fsico es una experiencia a la cual todos tendremos quAhora bien, la reaccin subjetiva que suscita vara de un modootro. La sensacin dolorosa puede, por ejemplo, verse considedeseo ansioso de suprimir el dolor. Entonces, el ms leve de loinsoportable. En cambio, los dolores crnicos se soportan mejsu actitud frente al dolor y cuando le da un sentido.

Las investigaciones llevadas a cabo en el mbito de la neurociimportante papel que tiene la interpretacin de las sensaciones

Algunas de estas investigaciones se llevaron a cabo con volunreciban estmulos sobre el brazo, unas veces bastante dolorosdolorosos. Cada vez, los investigadores les pedan que evaluasufrimiento que haban sentido. Al cabo de unos das, a los volrecibir un estmulo de intensidad fuerte, mientras que, de hech


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nocebo (algo que nos hace dao porque esperamos que nos lo que el espritu tiene sobre el cuerpo y sobre la calidad de nues

As pues, la apreciacin del dolor depende en gran parte de cSoportamos mejor los dolores cuya duracin e intensidad son permite estar preparados para recibirlos y, por tanto, para contcuya intensidad corre peligro de ir en aumento y cuya duracidolor escapa por completo de nuestro control y adems pensaindefinidamente, entonces nuestro espritu corre un gran peligsufrimiento.

Por otro lado, dar sentido al dolor permite soportarlo mejor. E

pensamos que el dolor puede aportarnos algo bueno. Por ejemsecundarios de un tratamiento mdico porque esperamos que asumir un dolor por el bien de otro. Eso es lo que hace un paridonar su sangre o un rgano para salvar la vida de alguien quelos dolores, a veces intensos, que sufre un deportista cuando sde buen grado a fin de mejorar su nivel. Algunos atletas afirmadolor, ms lo valoran porque les informa acerca de la intensidmismos deportistas se veran afectados mucho ms negativam

que para ellos no tiene ningn valor, como, por ejemplo, el quproducida en el curso del entrenamiento. El hecho de dar sentpoder sobre l y elimina la ansiedad vinculada al sentimiento En cambio, si reaccionamos con miedo, revelndonos, con decon un sentimiento de impotencia, en vez de padecer un nico

Los casos ms difciles son los dolores crnicos, vivos y persiganan la partida al resto de sensaciones. Cuando sucede eso, el

y nuestra relacin con el mundo, acompaando cada uno de nuUna vez o decir a un enfermo: Un fuerte dolor crnico es coestanque: las ondas se difunden durante toda nuestra vida. No s

No obstante, un dolor puede ser intenso sin que por ello deba dde la vida. Si conseguimos adquirir una cierta paz mental, nosnuestra fuerza de espritu o recuperarla enseguida aunque noscircunstancias difciles.

Algunas personas que han sobrevivido a un accidente, a la torotro orden afirman, un tiempo despus, sentirse ms humanoapreciacin ms profunda del mundo que los rodea, de la bellecualidades de los seres que les salen al paso. Dicen que consexistencia como si fuera un inestimable tesoro.14


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al amor y la compasin, y el ltimo consiste en examinar la naextensin, la del espritu que la sufre.

Meditacin

La plena conciencia

Tal como se explica en el siguiente texto, observemos con todde dolor, sin interpretarlo, rechazarlo o temerlo. Sumerjmonomomento presente. Si lo hacemos, la sensacin conservar todsu carcter repulsivo.


La inmensa mayora de nosotros consideramos que el dolor bienestar fsico. Ahora bien, si dejamos que nos preocupe, slintensifique. En cambio, si lo tomamos como objeto de meditmedio de aumentar la claridad de nuestro espritu.

Qu se debe hacer para convertir al dolor en un objeto de

Para una conciencia pura y no obstruida por este acontecimiesin ms. No hay pensamientos. No hay rechazo. Slo energa conceptualiza ciertas experiencias, como la del dolor. Segurampensando en ello desde el "dolor". Es un concepto. Una etiquesensacin en s. Y usted se construye una imagen mental del dentidad [...] Es altamente probable que piense: "A m me duelems que un concepto, algo externo aadido a la experiencia pu

Cuando introduce el "yo" en el proceso, est estableciendo uentre la realidad y la conciencia sin ego que la contempla. Pen"m" o "a m" no tienen cabida en la conciencia directa. Son a

engaoso. Cuando usted hace que el "yo" entre en accin, se eY slo conseguir reforzarlo. Pero si prescinde del "yo" en estadao, sino que, simplemente, ser un puro flujo de energa.

B

i i d l d l f li id d


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propia esencia del dolor en felicidad.

La fuerza de la compasin

Demos vida a un fuerte sentimiento de amor altruista y de comluego pensemos: Me gustara tanto no sufrir ms! Pero, adempersonas que se ven afligidas por penas comparables a las maCmo me gustara que ellos tambin pudieran liberarse de suconsideraremos nuestro dolor como una desgracia o un aconteLlenos de altruismo, dejaremos de preguntarnos con amargura

Cuando estamos completamente centrados en nosotros mismoconvertimos en presas fciles del desconcierto y la contrariedaimpotencia o de angustia. Pero si en vez de eso, ante el sufrimexperimentamos una fuerte empata y una incondicional benevpaso al coraje; la depresin, al amor, y la mezquindad, a una abrodean.

Contemplar la propia naturaleza del espritu

Contemplemos sencillamente el dolor. Aunque su presencia squ color, forma o cualquier otra caracterstica inmutable tienfuminan sus contornos a medida que intentamos delimitarlo. Ereconocemos que, detrs del dolor, hay una presencia conscienen la fuente de toda sensacin y todo pensamiento. Relajemosconseguir que el dolor descanse en la plena conciencia, libre dEsta actitud nos permitir no seguir siendo sus vctimas pasivafrente y remediar la devastacin que provoca en nuestro espri

Y aunque hacerlo no sea fcil, la experiencia muestra que es roportunidad de conocer a muchos meditadores que han utiliza

tenido que enfrentarse a enfermedades terminales dolorosas. Prelativamente poco afectados por el dolor. Francisco Varela, uel campo de las ciencias cognitivas, y practicante de la meditaconfi, algunas semanas antes de morir por causa de un cncepermanecer casi todo el tiempo en la presencia despierta de la

b t t t i l d l t d N t d


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parecer bastante terico, no lo es del todo. Nuestra manera de en general influye de manera considerable en nuestra manera tamiento. Constantemente intentamos imponer al mundo nues

realidad, y las deformaciones que se derivan de ello son causasde forma inevitable acaban por enfrentarse a la realidad. Cuconsiderado que una cosa era completamente deseable o compfuerza nos aferramos al yo o al mo, persuadidos de la so

Imaginemos ahora que percibimos el mundo de los fenmenoacontecimientos interdependientes cuyas caractersticas, siemresultado de innumerables causas y condiciones, y no pertenecobjetos que ellas definen. Entonces los conceptos yo y mofluidos y dejaramos de estar tan obsesionados por ellos.

Cultivar la visin penetrante es, pues, una prctica esencial parincomprensiones fundamentales que lo originan.

Para desarrollar esta visin penetrante, es indispensable tener y estable, de ah la importancia de haberlo preparado por medinterior, shamatha. No obstante, como hemos visto, slo con e

Shamatha permite apaciguar momentneamente las emocioneerradicarlas. Por tato, es indispensable recurrir a la visin penla naturaleza fundamental de la conciencia, el modo en el queencadenan, y cmo nuestras fabricaciones mentales refuerzan

La visin penetrante nos permitir, primero por medio del anldirecta, comprender que los fenmenos son impermanentes e ique no poseen la existencia autnoma y tangible que comnmcontribuir a que percibamos el mundo de una manera ms ve

estar prisioneros de nuestra visin egocntrica y administraremreacciones emocionales engendradas por nuestra interaccin c

Vipashyana puede practicarse a diferentes niveles y de diverscontemplaremos algunos de estos aspectos:

Cmo conseguir una comprehensin ms justa de la re

Cmo librarse de los tormentos creados por las emocio

Cmo desenmascarar la impostura del ego y comprendeste concepto sobre nuestro sufrimiento y nuestro bien

Cmo aprehender la naturaleza fundamental del espri

parecen pertenecerles en propiedad Las cosas nos parecen o b


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parecen pertenecerles en propiedad. Las cosas nos parecen o bagradables, o bien desagradables, y para nosotros la gentbuena o mala. El yo que los percibe nos parece comple

error, que el budismo denomina ignorancia, produce unos podaversin que, por regla general, slo conllevan una retahla de

Segn el anlisis budista, el mundo es el resultado de la concude causas y condiciones en perpetuo cambio. Como sucede coel momento preciso, cuando el sol brilla por encima de una codesvanece tan pronto como uno de los factores que contribuyepresente, los fenmenos existen de un modo esencialmente inttienen una existencia autnoma y- permanente. La realidad Ulla vacuidad de la propia existencia de los fenmenos animadorelacionado, nada existe en s y por s. Cuando esta nocin eseinterioriza, la percepcin errnea que tenamos de nuestro yo correcta comprensin de la naturaleza de las cosas y los seres:conocimiento no es ni una mera construccin intelectual ni unsino que procede de un proceso esencial que permite eliminar mental y las emociones perturbadoras que esa ceguera nos pro

principales de nuestro malestar.La meditacin que sigue, cuyo fin es ayudarnos a transformar realidad, aunque est descrita en trminos completamente actuclsico de la filosofa budista, que se podr consultar en las oblibro.

MeditacinImaginemos una rosa recin abierta cuya belleza admiramos. ahora que somos un pequeo insecto que mordisquea un pedabueno est! Imaginemos que somos un tigre que est delante dapenas diferencia entre la flor o un haz de heno. Situmonos aimaginemos que somos un tomo. En este caso, nuestra existeenergticas en un mundo caleidoscpico en el seno de un rematraviesan un espacio casi completamente vaco. Qu se ha hsu color, su forma, su textura, su perfume, su sabor y su bellezaobservamos con atencin, podemos decir que son objetos sllos fsicos. Son acontecimientos que surgen del vaco cuntiy, por ltimo, energa. Energa? Acaso la energa es una entpotencial de manifestacin que no es ni no existente ni verda

Dmonos cuenta de que a pesar de su apariencia tangible car


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Dmonos cuenta de que, a pesar de su apariencia tangible, carDejemos que nuestro espritu repose durante unos instantes enapariencias y la vacuidad, de la forma y el vaco.


Como la estrella fugaz, el espejismo, la llama, la ilusin mgisobre el agua, como el sueo, el relmpago o la nube: considecompuestas.

Como los reflejos sobre la superficie de un lmpido lago,

la multiplicidad de los fenmenos se manifiesta

estado privada de existencia propia.

Incluso hoy, adquiere la certeza

de que todo slo es un reflejo de la vacuidad.

El sujeto y el objeto son corno la madera de sndalo y su fragson como el hielo y el agua. Las apariencias y la vacuidad son pensamientos y la naturaleza del espritu son corno las olas y

En lo ms crudo del invierno, el fro hace que los ros y los lagtan slida que puede sostener a hombres, animales y vehculostierra y el agua se calientan y se efecta el deshielo. Qu queagua vuelve a ser lquida y fluida, y el hielo es duro y petrificano hay tanta diferencia, ya que el hielo es tan slo agua cuajad

Esta metfora se aplica a nuestra percepcin de la "realidad"

realidad de las cosas, cuando nos dejamos llevar por los juicioplacer o el dolor, los beneficios o las prdidas, la gloria o la incrticas, nuestro espritu se entorpece. Y entonces podemos funlos perjuicios para transformarlo en el agua viva de la libertad

la propia existencia de los fenmenos, en la que se arraiga nue


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la propia existencia de los fenmenos, en la que se arraiga nuemundo, ir siendo cuestionada y al final se ver reemplazada pcosas.

Controlar los pensamientos y las emociones

A menudo se suele or que el budismo, en general, y la meditasuprimir las emociones. Todo depende de lo que se entienda phablando de perturbaciones mentales, como el odio y los celo

de ellas? Y si se trata de un intenso sentimiento de amor altruilos que sufren, por qu no desarrollar estas cualidades? En cuameditacin.

La meditacin nos ensea a controlar los accesos de clera maoleadas de deseo incontrolado y

Ricard Matthieu - El Arte de la Meditación

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