Saúl Tuyub - El Proyecto Tecnológico (S)

El Proyecto Tecnológico

en el Aula-Taller Orientaciones didácticas para su puesta en marcha.

Saúl Martín Tuyub Castillo

Asesor Técnico Pedagógico del Departamento de

Desarrollo Educativo de Educación Secundaria.

Yucatán.

Publicación disponible en

Blog de Educación y Tecnología.

[www.stuyub.blogspot.com]

Abril 2011


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Tuyub, S. (2011). Educación y Tecno-

logía. www.stuyub.blogspot.com

El Proyecto Tecnológico en el Aula-Taller

Orientaciones didácticas para su puesta en marcha.


Asesor Técnico Pedagógico de la Asignatura de Tecnología.

Docente del énfasis de Informática.

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Índice

El proyecto 4

El proyecto tecnológico 5

Vinculación y transversalidad en los proyectos

tecnológicos 8

Falsos proyectos tecnológicos 9

¿Cómo implementar el proyecto tecnológico en el au-

la-taller? 10

Fase I: Identificación y delimitación del tema o

problema 10

Fase II: Recolección, búsqueda y análisis de la in-

formación 11

Fase III: Construcción de la imagen-objetivo 12

Fase IV: Búsqueda y selección de alternativas 13

Fase V: Planeación 13

Fase VI: Ejecución de la alternativa seleccionada 14

Fase VII: Evaluación 14

Fase VIII: Comunicación 15

Bibliografía 16

Anexo 01: Ficha de planeación del proyecto tecnoló-

gico 17


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El Proyecto

El proyecto es una estrategia didáctica excelente, que incluye una secuencia sugerida

de fases o etapas que buscan en su conjunto satisfacer necesidades e intereses de los

alumnos, cuyos fines y propósitos los dirigen a encontrar espacios flexibles de acción que

respondan a sus inquietudes, estableciendo sus propias reglas para el trabajo en equipo,

participando en la conducción de sus procesos de aprendizaje, diseñando procedimientos

de trabajo activo y relacionándose de una manera cada vez más autónoma con la cultura y

el mundo natural (DGDC. (2006). Plan de estudios 2006. México: SEP. CONALITEG).

Los proyectos escolares tienen como virtudes ser transversales, vinculantes, próxi-

mos al contexto del alumnado y participativos, en tal situación fomenta las competencias

para la vida, previstas en el perfil de egreso de secundaria, para el alcance exitoso de los

aprendizajes esperados.

El docente debe tomar en cuenta que existen diferentes tipos de proyectos, entre los

que se encuentran los científicos, ciudadanos, ambientales, tecnológicos, etc., en el que

cada uno cobra sentido por la situación que pretende solucionar en el medio en que se

desarrolla. De allí la importancia de diferenciar el Proyecto Tecnológico de los proyectos

que se proponen para las asignaturas de Español, Artes, Ciencias y Formación Cívica y

Ética e incluso de entre otros tipos de proyectos no educativos, como son los de investi-

gación documental, social, económico, científico, etcétera; ya que cada uno plantea sus

propios métodos, variando en el número de fases e incluso en el orden en que se propo-

nen. Sin embargo, es posible vislumbrar que las etapas de los proyectos en una asignatura

se pueden encontrar inmersas en alguna fase de otra materia de estudio, incluida la asig-

natura de Tecnología.

Como estrategia didáctica, en consideración a la evaluación del docente, se sugiere la

implementación de la técnica del portafolio de evidencias, la cual contendrá las investiga-

ciones documentales de los alumnos, así como entrevistas, esquemas, bocetos, análisis

sistémicos, entre otras resultados; deberá incluir los criterios e indicadores que permitan

organizar y evaluar los avances significativos del aprendizaje, facilitando una visión va-

liosa sobre los logros o avances de los alumnos en cualquier etapa del desarrollo de los

proyectos (SEP. (2006). evaluación.pdf).


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El Proyecto Tecnológico es una estrategia didáctica en el cual el docente mueve los

conocimientos teóricos-reflexivos del alumno hacia la práctica, de tal forma que promue-

ve un aprendizaje significativo y motivante por el hecho de que el mismo alumno emplea

todos los recursos disponibles a su alcance (humanos, materiales, conceptuales, valores y

actitudes) para alcanzar el éxito en esta misión.

La práctica de los Proyectos Tecnológicos en el aula-taller conlleva la vinculación

con otras asignaturas, permitiendo movilizar conocimientos adquiridos de otro campo,

trasladándolos a las acciones propias del énfasis.

Entre las bondades de los proyectos tecnológicos se encuentra en el hecho de que se

privilegia el trabajo en equipo, el cual propicia una formación de pensamiento crítico,

actitudes responsables y equitativas, promoviendo la tolerancia y el reconocimiento de la

individualidad del alumno, sus potencialidades y debilidades, al mismo tiempo que con-

sidera su participación e integración grupal.

La propuesta de la Reforma sugiere las siguientes ocho fases para el desarrollo de

Proyectos Tecnológicos, mostradas en la siguiente imagen, cada una estrechamente liga-

da con las demás, evaluable en sí misma y cada etapa es vista como una oportunidad para

fomentar el aprendizaje.

Ilustración 1: Fases de los Proyectos Tecnológicos.


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En la imagen anterior se indican las fases del Proyecto Tecnológico unidas con un

semicírculo, expresando su relación cercana, significando que el flujo de acciones no

tiene que ser unidireccional (estrictamente hacia abajo o hacia arriba) ni secuencial, es

decir, las etapas pueden ser desarrolladas en un orden diferente, acorde al mismo proyec-

to, a la experiencia del docente, las condiciones del grupo, los propósitos y aprendizajes

esperados, entre otros factores. Sin embargo, no puede ser aleatorio, pues es una actividad

que requiere de un pensamiento crítico, desde el principio hasta el fin; es por ello que las

fases se proponen en un orden lógico, pero al mismo tiempo adaptable.

Como sugerencia al docente que inicia un proyecto tecnológico en el aula-taller, pro-

ponga una actividad detonante. Cabe la aclaración de que ésta acción no se encuentra

entre las fases sugeridas en la Reforma, pero será de gran utilidad para el alumno, al si-

tuarlo en la óptica del tema o situación de mejora.

En la propuesta metodológica para implementar proyectos en la asignatura de Tecno-

logía es posible identificar algunas diferencias, visualmente establecidas en las siguientes

tablas, que representan el mapa curricular para la modalidad de Técnicas y Generales,

respectivamente.

Ilustración 2: Mapa curricular de la asignatura de Tecnología de la modalidad de Técnicas.


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Ilustración 3: Mapa curricular de la asignatura de Tecnología de la modalidad de Generales

Observamos que para el caso de Generales, los proyectos se desarrollan en el último

bloque de cada grado escolar, mientras que en Técnicas se ponen en marcha durante todo

el ciclo escolar, además los proyectos del quinto bloque para la primera modalidad se

orientan a la reproducción y diseño para primero y segundo grado respectivamente, mien-

tras que para Técnicas son de reproducción artesanal y producción industrial en corres-

pondencia; en tanto que para tercer grado ambas modalidades trabajan sobre proyectos de

innovación.

La Ilustración 4: Tipos de Proyectos Tecnológicos por modalidad en la página 8 resume el

mapa curricular, permitiendo contemplar el tipo de proyecto que el docente debe desarro-

llar con sus alumnos, según el grado académico de los participantes, observe que se con-

sideran los aspectos conceptuales, motrices y actitudinales en la complejidad de los pro-

yectos.

El mapa curricular de la asignatura de Tecnología de la modalidad de Técnicas y la

de Generales fue tomado del Documento preliminar (DGDC. (2006). Documento preli-

minar. México: SEP.CONALITEG).


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Ilustración 4: Tipos de Proyectos Tecnológicos por modalidad

La imagen anterior nos permite observar las siguientes características:

En la modalidad de Técnicas los proyectos se desarrollan durante todo el ciclo

escolar, la connotación transversal no debe ser confundida con los contenidos

transversales que son aplicables en todas las asignaturas.

En tanto que en la modalidad de Generales los proyectos se proponen en el

quinto bloque.

Para la modalidad de Técnicas, en primero y segundo grado los proyectos son

de reproducción artesanal y producción industrial, respectivamente.

Para la modalidad de Generales los proyectos son de reproducción y diseño,

para los grados de primero y segundo.

En ambas modalidades, los proyectos de tercer grado son de Innovación.

VINCULACIÓN Y TRANSVERSALIDAD EN LOS PROYECTOS TECNOLÓ-

GICOS

En ocasiones, los conceptos de vinculación y transversalidad causan dificultad para

su diferenciación en los docentes, es por ello que es prioritario distinguirlos plenamente,

dada su importancia en el desarrollo de actitudes y de formación de valores en los estu-

diantes, así como de la consecución de la articulación entre las asignaturas curriculares.

La transversalidad se fundamenta en tres campos, cuyas estrategias deben de estar

planteadas en todas las asignaturas, las cuales deben estar presentes en todo momento.

Estos campos son la educación ambiental, la formación en valores, educación sexual y


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equidad de género; estas acciones deben estar encaminadas a favorecer en los estudiantes

la integración de saberes y experiencias desarrolladas en las diversas asignaturas (DGDC.

(2006). Plan de estudios 2006. México: SEP. CONALITEG).

El desarrollo de los contenidos transversales es responsabilidad de toda la escuela y

no de una asignatura en particular. En el caso de la asignatura de Tecnología, la transver-

salidad se aborda en forma permanente, en el trabajo en equipos, en el respeto a la indivi-

dualidad del alumno y del medio ambiente, el reconocimiento de sus habilidades y limi-

taciones (físicas o intelectuales), en la equidad de género, la promoción de la salud e

higiene, etcétera. Recuerde el docente que la transversalidad aborda contenidos, no temas,

por lo que está más ligado a las actitudes y valores que al modelo conceptual.

La vinculación se refiere a los temas que se tratan en el aula-taller afines con los de

otras asignaturas como Español, Matemáticas, Ciencias, Artes, etcétera. El docente debe

tener la habilidad para visualizar dicha enlace y aprovechar oportunamente los conoci-

mientos previos, producto de la labor docente de nuestros colegas y del esfuerzo de los

alumnos por incorporar aprendizaje significativo a su vida.

Cuando el docente desarrolla Proyectos Tecnológicos en el aula-taller, propone en

todos los casos, actividades que van ligadas con la vinculación con otras asignaturas y los

contenidos transversales.

FALSOS PROYECTOS TECNOLÓGICOS

Conviene que el docente esté atento a la identificación de falsos proyectos, con el fin

de no confundir al estudiante con tareas o actividades propias del énfasis o de la asignatu-

ra con esta estrategia didáctica. Como ejemplo se proporcionan las siguientes relaciones

que con cierta frecuencia son confundidos con proyectos tecnológicos.

TAREA O ACCIÓN DIDÁCTICA ¿PORQUÉ NO ES PROYECTO TECNOLÓGICO?

Entrega de tareas escolares. La realización de tareas escolares no es proyecto ya que en ella no existe

la iniciativa para la resolución de problemas del contexto del alumno, aun

cuando alguna tarea, en su mismo desarrollo, pueda incluir alguna fase de

los proyectos tecnológicos.

Investigación de campo. Esta es una estrategia de gran valor para la enseñanza de la tecnología y

aun cuando se investiga para documentar un tema o problema y cuyo

resultado pueda detonar un proyecto tecnológico, no puede considerarse

como tal, pues la problemática originalmente parte del docente o de los

contenidos curriculares.

Actividades propias del énfasis. Aún que comúnmente las actividades propias del énfasis resuelven pro-

blemas, no cumple con las fases propuestas para los Proyectos Tecnoló-

gicos. Tabla 1: Falsos proyectos tecnológicos comunes


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¿Cómo implementar el Proyecto Tecnológico en el Aula-

Taller?

La implementación del Proyecto Tecnológico en el aula-taller, requiere en primera

instancia, que el docente conozca muy bien las fases propuestas para su desarrollo, así

como los propósitos particulares de cada etapa, debe dominar los temas curriculares de la

asignatura y del énfasis, tener habilidades de gestión y ser un gran motivador de sus estu-

diantes.

La implementación de esta estrategia didáctica trae consigo grandes satisfacciones

entre los participantes, el docente y alumnos, pues con su práctica los actores van descu-

briendo habilidades desconocidas o se van vigorizando las ya poseídas, nunca podrá des-

arrollarse un mismo proyecto con los mismos resultados.

FASE I: IDENTIFICACIÓN Y DELIMITACIÓN DEL TEMA O PROBLEMA

A pesar que la dirección que tomará el proyecto está en la decisión del alumno, el

docente debe contar con las habilidades para enfocarlo hacia los aprendizajes esperados,

es por ello que debe iniciar, como sugerencia por supuesto, con una experiencia desenca-

denante que involucre al alumno, puede partir de una breve introducción del docente,

empleando videos, visitas guiadas, fotografías e ilustraciones, recortes de noticias, audio,

incluso una presentación en la que el estudiante pueda observar la situación de mejora

(identificación del problema).

Con el fin de involucrar al alumno y mantenerlo motivado en el alcance exitoso de

cada fase, es indispensable que la situación problemática se encuentre en el contexto de

vida del estudiante, convirtiéndose en un reto personal que conlleva hacia el aprendizaje

significativo.

Es necesario que el docente identifique los asuntos de interés de los alumnos, consi-

derando situaciones que ofrezcan la posibilidad de poner en práctica conceptos, procedi-

mientos y actitudes estudiados con antelación. De igual modo, el profesor debe corrobo-

rar que los alumnos puedan hacerse cargo del problema y su indagación, que se sientan

motivados y comprometidos en la búsqueda de la solución (DGDC. (2007). Ciencias III.

Guía de trabajo. México: SEP.CONALITEG).


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La siguiente habilidad docente, consiste en guiar al alumno a delimitar la situación

de mejora, para esta situación puede emplear simplemente preguntas que lo lleven a re-

flexionar sobre la amplitud del mismo y que lo acerquen a la posibilidad de solución fac-

tible a través de premisas deductivas.

Por ejemplo, el estudiante identifica como problema la contaminación, el docente, a

través de cuestionamientos guiará al alumno a delimitar la situación de mejora: ¿qué tipo

de contaminación, del aire, del agua, etcétera?, ¿la contaminación por x causa en el mun-

do, de algún país o del tuyo, de tu localidad o de tu entorno?, ¿en la escuela, en tu casa,

en un lugar específico?, es decir, definir claramente el alcance de la posible solución a la

situación planteada.

FASE II: RECOLECCIÓN, BÚSQUEDA Y ANÁLISIS DE LA INFORMACIÓN

En esta etapa se pretende que el estudiante fortalezca su competencia para la búsque-

da y manejo de la información, esto significa que el alumno debe ser capaz de obtener la

información que requiere por medio de diversas fuentes, como son las bibliotecas, heme-

rotecas, revistas, libros, periódicos, estadísticas, TICS, medios digitales, encuestas, entre-

vistas, entre otros, pues cada medio de información requiere un tratamiento específico

para la colecta de datos. El alumno debe poder discernir si el contenido informativo es

pertinente para los propósitos de su proyecto.

Durante esta fase es posible identificar si el proyecto ha sido resuelto con anteriori-

dad, de ser así el flujo del proyecto se ve obligado a cambiar, como se muestra en la Ilus-

tración 5: Análisis de la información en la página 12. En esta situación deberá identificar el

mismo alumno si la solución encontrada es adecuada para la situación problemática plan-

teada (situación de mejora). De no ser pertinente, deberá continuar con la recolección y

búsqueda de la información.

En caso de que ya exista una solución a la situación de mejora, deberá realizar el

mismo estudiante un análisis para determinar si es posible realizar alguna innovación al

respecto o si es necesario adecuarla. Esto llevará al alumno a evaluar si la información

obtenida es suficiente.


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Ilustración 5: Análisis de la información

Como sugerencia práctica, cree equipos de trabajo de tres a cinco integrantes, solicite

que se pongan un nombre, esto es importante porque crea identidad y pertenencia,

además que propicia la motivación en el interior del grupo de trabajo siendo que al mis-

mo tiempo fortalece la competencia para la convivencia.

La formación por equipos, requiere algunas consideraciones que están fuera de la

temática de este artículo, sin embargo deberá considerar que en los proyectos de repro-

ducción artesanal se pretende que se desarrollen hasta cierto punto en forma individual,

mas es posible que deba valorar la factibilidad de realizar el trabajo de esta forma, pues

existen condiciones socio-económicas que puedan afectar esta posibilidad.

FASE III: CONSTRUCCIÓN DE LA IMAGEN-OBJETIVO

La importancia de esta fase radica en que se define la dirección que tomará el pro-

yecto, pues aquí es donde se plantea el propósito del mismo, con base a la información

obtenida, la cual debe ser suficiente y pertinente, ya que de aquí partiremos para ubicar

contenidos y actividades.

Como sugerencia para la implementación de esta fase, el docente puede pedir a los

alumnos que piensen en un barco, facilitarles tiempo para que creen una imagen mental.


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Realice las siguientes preguntas al alumnado: ¿Cómo es el barco que imaginaste?, ¿De

qué color?, ¿Dónde navega?, ¿Qué transporta?

Las preguntas anteriores tienen como función hacer ver a los muchachos que en aula-

taller existen tantas imágenes mentales de un barco como alumnos, para que el colectivo

tenga una imagen uniforme habrá que considerar los propósitos del barco: ¿Qué utilidad

tendrá y dónde navegará?

Para la elaboración del o los propósitos, el alumno deberá utilizar algún verbo orien-

tador como: identificar, resolver, analizar, reflexionar, diseñar, planear, construir, mani-

pular, transformar, desarrollar, responder, mantener, comprender, distinguir, caracterizar,

reconocer, demostrar, utilizar, considerar, prever , etcétera. Considerando en todo mo-

mento que estos son los principios que dirigen la acción (Stenhouse. (1985). Investiga-

ción y Desarrollo del Currículum, Morata.), en otras palabras, son las aspiraciones expre-

sadas en aspectos deseables, abarcando la finalidad que persigue.

FASE IV: BÚSQUEDA Y SELECCIÓN DE ALTERNATIVAS

Ahora, el equipo de trabajo debe tener una visión más clara de la situación que pro-

pició el proyecto, esto facilitará la creación de alternativas para la búsqueda de solucio-

nes.

Procure que durante el trabajo por equipos surjan desde su interior diversas alternati-

vas de solución, el docente de tecnología debe tener presente no desechar alguna propues-

ta, por más descabellada que parezca, recuerde que muchos inventos han surgido con esta

fórmula: Julio Verme + imaginación + locura = Viaje a la luna.

Una vez que el equipo ha desarrollado diversas propuestas, el docente deberá orien-

tarlo para la selección de la alternativa que sea viable, respetando en todo momento la

visión del alumno y su intencionalidad de poner en marcha determinada propuesta de

solución.

FASE V: PLANEACIÓN

Esta fase determina el ritmo de las actividades, el equipo de alumnos deberá contem-

plar la calendarización de las acciones en consideración de los tiempos previstos en el

calendario escolar.

Un aspecto de suma importancia en esta etapa es que los alumnos deberán valorar

sus propias habilidades, destrezas y actitudes; observando y considerando también el po-


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tencial de los integrantes de su equipo, es la valoración de las facultades propias y ajenas

reconociendo fortalezas y debilidades. Esta acción es un paso decisivo en la formación de

la personalidad del alumno, en este punto, el docente ya debió propiciar la integración de

cada individuo al equipo de trabajo.

La fase de planeación no es únicamente calendarizar los tiempos de las actividades,

el equipo deberá considerar también otros factores como: materiales, insumos, herramien-

tas, gestión de recursos, delegación de responsabilidades; dependiendo del proyecto, tam-

bién deberá tener en cuenta las condiciones climáticas, ubicación, condiciones sociales y

económicas, de salud, etcétera.

En esta etapa deberá participar activamente todo el equipo, con el fin de conciliar in-

tereses, valores, actitudes y limitaciones en los que pueda verse envuelto el conjunto de

alumnos, proponiendo, como siempre la tolerancia y el respeto.

Se le sugiere al docente utilizar la Tabla 2: Ficha de planeación del proyecto en el Anexo

01 de la página 17 de este artículo, la cual puede modificar para adecuarla a las necesida-

des del equipo de alumnos y del mismo proyecto.

FASE VI: EJECUCIÓN DE LA ALTERNATIVA SELECCIONADA

Ya que esta fase se encuentra estrechamente vinculada con el énfasis, el docente de-

be facilitar el tiempo suficiente para el desarrollo de habilidades y destrezas sin olvidar la

reflexión sobre su práctica, esto es ¿por qué lo hago?, ¿con qué?, ¿para qué?, ¿cómo lo

hago?, ¿qué implicaciones tendrá en mi bienestar?, ¿qué impacto tendrá en la sociedad y

en el medio ambiente?

Además el alumno deberá considerar utilizar la menor cantidad de insumos y mate-

riales, si es posible fomentar el reuso y el reciclado de los elementos que integran el obje-

to técnico, proceso o servicio producto de la alternativa seleccionada.

Recordamos al docente de tecnología que existe una estrecha vinculación entre el

aprendizaje significativo y la puesta en práctica de los conocimientos teóricos a través de

las acciones propias del énfasis, necesarias para el desarrollo del proyecto.

FASE VII: EVALUACIÓN

La evaluación tiene como objetivo que el equipo de alumnos, valore si el resultado

de la fase anterior satisface las necesidades de la problemática planteada. El docente debe

tener en cuenta que si el resultado del proyecto no es exitoso, el alumno deberá ser capaz


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de adquirir conocimiento del error, que reflexione sobre ¿qué fue lo que ocasionó que el

producto obtenido no soluciona el problema inicial?, ¿fue algún error en el planteamiento

del propósito?, ¿la delegación de responsabilidades fue la adecuada?, ¿los materiales e

insumos utilizados fueron idóneos?, ¿la investigación fue pertinente?, etcétera.

Si el resultado satisface plenamente la problemática, aún quedan cuestiones para su

reflexión: ¿el producto es susceptible a innovación?, ¿el cambio de materiales o suminis-

tros puede llevar a la mejora del producto?, ¿el impacto es positivo en el ámbito personal,

social o medioambiental?, ¿tiene alguna implicación negativa y ésta puede ser minimiza-

da?

FASE VIII: COMUNICACIÓN

Recordemos que el desarrollo del proyecto se planteó desde equipos de trabajo, es

importante que todos los equipos conozcan los resultados obtenidos, pues al argumentar

las acciones realizadas el alumno afianza sus conocimientos y puede ver a través de las

experiencias ajenas.

Otra estrategia para comunicar resultados es montar una exhibición en la que uno o

dos alumnos que participaron en el desarrollo del proyecto comuniquen a la comunidad

escolar el proceso para alcanzar la solución del problema por medio del producto, proce-

so o servicio obtenido. Esta exhibición puede realizarse en un aula-taller, en los pasillos

del centro escolar, en la explanada de la escuela o en el lugar que el docente y los alum-

nos consideren más adecuado.

Los alumnos que exponen deben estar abiertos a críticas y sugerencias de los espec-

tadores, deberán emplear comunicación asertiva y ser tolerantes a los diversos puntos de

vista, por tanto, la comunicación es una fase enriquecedora y promotora de las competen-

cias para la vida, además consolida los conocimientos y permite una revaloración del

total de las acciones llevadas a cabo en cada una de las fases del proyecto tecnológico.


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BIBLIOGRAFIA

Evaluación.pdf

(2006. evaluación.pdf. [en línea]. México. Disponible en:

http://www.reformasecundaria.sep.gob.mx/tecnologia/generales/evaluacion/ [2011,

18 febrero])

Plan de estudios 2006

(DGDC. (2006). Plan de estudios 2006. México: SEP).

Documento preliminar. Tecnología. Secundaria Técnica.

(DGDC. (2006). Documento preliminar. México: SEP.CONALITEG).

Documento preliminar. Tecnología. Secundaria General.

(DGDC. (2006). Documento preliminar. México: SEP.CONALITEG).

Investigación y desarrollo del currículum

(Stenhouse. (1985). Investigación y Desarrollo del Currículum, Morata.)


Asesor Técnico Pedagógico

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ANEXO 01

FICHA DE PLANEACIÓN DEL PROYECTO TECNOLÓGICO

FECHA RESPONSABLE(S) ACCIÓN A REALIZAR RECURSOS

OBSERVACIONES:

Tabla 2: Ficha de planeación del proyecto

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