Se puede: Cuaderno Educativo Nº 1

1Se Puede Fundacin Espada de David

EQUIPO TRANSDISCIPLINARIO

Trabajador Social MSc. Rodolfo Muoz

Asesor espiritual Pbro. Sebastin Rivas

Consejero en Drogodependencia TSU. Pablo Castaeda

Operador de Grupos de Autoayuda TSU. Ramn E. Badaracco Pedro Alvarado

Educadores - Orientacin de Parejas MSc. Carlos Estanga Lcda. Nuramis Rodrguez

Sociloga - Orientacin familiar MSc. Mara Elena Zaja

Operadora Femenina Nadima Salmasi

Orientadora MSc. Gladys Martnez

Psicloga Lcda. Rosa Zabala

Psiquiatra Dr. Luis Arturo Peraza

Gerente Ejecutiva Lcda. Lauribeth Rincones

Se PuedeDirector General

MSc. Rodolfo Muoz

Director Ejecutivo Eleazar Monserratt

Diseo Grfico y Diagramacin Inv. Shanti Om - Hctor Granado

Fotografas Lcda. Zail Palacios

Correccin Msc. Mara Elena Zaja Mra. Zurama Vsquez

Comercializacin y venta Eleazar Monserratt Lauribeth Rincones

Colaboradores Pbro. Miguel Cordero Pbro. Sebastian Rivas

T.S.U. Pablo Castaeda Jos Faria

Manuel Romero Nadima Salmasi

Dr.Francisco Meja Sand Carmen Beatriz Martins H.

Sr. Nicola Amendolara

Cada 16 de mayo entregamos nuestras cartas de reeducacin que significan para, quien las recibe, un nuevo camino de sobriedad que comienza justo all. Este ao, adems, entregamos a la comu-nidad que nos vio nacer, que nos sostiene y apoya con amor solidario, este primer ejemplar de los cuadernos educativos SE PUEDE esfuerzo de difusin que nace de una cudruple necesidad sentida.

En primer lugar, nace SE PUEDE! como concrecin intelectual del grito teraputico de reafirmacin que hacemos a diario en la FED: SI SE PUEDE!, que nos recuerda cada vez que termina la jornada, que somos capaces de vivir libres de toda sustancia o conducta que suprima nuestra voluntad de mantener-nos libres, dignos y sobrios. En segundo lugar, por estar la directiva de nuestra Fundacin conformada por un nmero significativo de docentes de la Universi-dad de Oriente, es de esperarse que esta publicacin con propsitos educativos, sea una actividad inexcusable; pues aca-demia, extensin e investigacin son la

esencia de la vocacin universitaria. En Tercer lugar, existe la necesidad sentida de comunicar nuestra experiencia, como ONG exitosa, a la comunidad para que llegue a muchos rincones la buena noti-cia de que SE PUEDE ser libre de drogas. Finalmente, pero no menos importante, estos cuadernos nos dan la oportuni-dad de poner al servicio de otros una herramienta de divulgacin de temas con contenido social y teraputico.

Estamos seguros de que estos cuader-nos sern de gran utilidad a la familia cumanesa, pues no sern escritos desde la erudicin sino desde la experiencia y el amor responsable, en un lenguaje sen-cillo para que sea de fcil comprensin para todos los niveles socio-educativos.

Disfruten la lectura que s se puede!

Editorial

MSc. Rodolfo A. Muoz G.Presidente de la FED

[email protected]

Junio 2013

4

El problema est all, pero no posees la capacidad o no es-ts dispuesto a buscarle solucin. Te agobia des-cubrir que las drogas se aposentaron en tu hogar y no logras asimilar esa verdad. Piensas que esa realidad no te puede tocar. Resulta sumamente difcil seguir con la cotidianidad y, por lo tanto, entras en una fase de ceguera men-tal. Bullen en tu mente las preguntas sin respuestas: Por qu a m? Qu hice para merecer este castigo? As comienza la fase de au-tocompasin y, por ende, caes en la codependencia.

El codependiente es quien se dedica a acom-paar, cuidar, salvar al adicto; involucrndose de forma obsesiva en sus problemas y situaciones

de vida conflictivas, su-friendo, frustrndose ante las repetidas recadas y fracasos, llegando a ad-quirir caractersticas y conductas similares a las del propio adicto.

Al seguir las pautas an-tes mencionadas, el code-pendiente pierde el con-trol de su propia vida, de sus lmites, e invierte toda su energa en el adicto, de-sequilibra su vida personal, familiar, laboral y social e involucrndose hasta el punto de vivir por y para el otro. Se crea un vnculo de excesiva tendencia a encargarse o a asumir las responsa-

bilidades del adicto. La codependencia puede ser definida como una en-fermedad, cuya caracters-tica principal es la falta de identidad propia.

El codependiente pierde la conexin con lo que siente, necesita y desea. Si es dulce y agradable, aunque no lo sienta, es porque busca aceptacin. Cree que su valor como persona depende de la opinin de los dems. Da ms im-portancia a los otros que a s mismo. Se crea un yo falso, pues en realidad no est consciente de quin es y est tan desconectado de sus propios sentimientos

ADICCIN Y CODEPENDENCIA

FAMILIA

Por: MSc. Fanny Marn L.Docente


que asume la responsabili-dad por las acciones de los dems. Se avergenza por las acciones cometidas por el adicto y toma las cosas de una manera personal. Invierte una enorme canti-dad de energa en mantener una imagen o un es-tatus para impresionar, ya que su autoestima es muy baja y depende del valor que la sociedad le otorga.

La relacin de pareja o familiar donde no hay paz, sino an-gustia o culpa, est contaminada de codependencia. Ese tipo de amor pa-tolgico, obsesivo es sumamente destruc-tivo. Al no haber paz interior ni crecimiento espiritual, no hay felici-dad. El dolor en la code-pendencia es mayor que el amor que se recibe.

Hay que tratar de man-tener una relacin, slo, hasta donde debamos y podamos, procurando mantenernos en la lnea del quinto mandamiento de la Ley de Dios. Si una

relacin humana resulta perjudicial para la salud fsica, moral o espiritual, hay que cortar. La misma Iglesia Catlica permite la separacin de los casados cuando la vida en comn se hace intolerable.

Una de las caracters-ticas de la persona code-pendiente es que no confa en la otra persona a la que trata de cuidar. Esto lo demuestra persiguindola,

tratando de controlarla, dicindole que tiene que hacer, sobreprotegindola.La codependencia aparen-ta ser amor, pero es egos- mo, mutua destruccin, miedo, control, relacin condicionada: Te amo si cambias; Si no haces lo que digo, te recrimino, te persigo, me siento tu vcti-ma. En la codependencia

hay mucha manipulacin.En momentos de frus-

tracin, la codependencia es abusiva o de tremenda tolerancia del abuso. La persona codependiente permite tanto que no reconoce el abuso cuando lo sufre. Su autoestima es tan baja, que ya no se da cuenta de que estn abu-sando de ella. El code-pendiente necesita dar continuamente para no

sufrir culpabilidad, ansiedad, ira y mie-do. Necesita dar, sentirse necesario para tener autoesti-ma. Est dominado por sentimientos enfermizos y no por la razn. El humano

debe ajustarse a la razn.Los codependientes se

dejan llevar solamente por sus sentimientos. Su autoestima depende del comportamiento o reaccin de los dems. El codependiente y el adicto deben recibir ayuda profesional y espiritual, para aprender a amarse a s mismos.

Codependiente ...es quien se dedica a

acompaar, cuidar, salvar al adicto; involucrndose de forma obsesiva en sus

problemas

Junio 2013

6

Todos le llaman lder, l se de-fine a s mismo como tal y todo aquel que lo conoce, inmediata-mente, se convence que, en efecto, Pablo Castaeda tiene dotes de liderazgo; as lo deja bien claro, con una frase que ha hecho suya, y que repite como un mantra para disipar las dudas respecto a la verda- dera esencia del liderazgo: -Los lderes no nacen, se hacen, recordndonos, y reforzando a la vez, su conviccin profunda de que el liderazgo no es una condicin natural, sino un aprendizaje. El fin prc-tico de su prdica sobre el liderazgo lo resume en estas palabras: -Yo llamo a mis compaeros lideres, porque necesito que se convenzan que ellos son

los mejores, que pueden vencer la dificultad de la droga y cualquier otra, por eso no me canso, ni me cansar de llamarlos lder, porque para m esa es una forma de lograr que su au-toestima se recupere y en-tiendan, definitivamente, que somos ms poderosos que cualquier sustancia que alguna vez nos atrap.

Quin es Pablo? Los pacientes de la Fundacin Espada de David, donde es Director General, no dudan en afirmar: un her-mano, un amigo, un padre, un lder, el mejor; stos son slo algunos de los calificativos con los cuales des- criben a esa persona que cada da, se rene c o n e l l o s

para facilitar (dirigir) la reunin del grupo tera-putico, o para atender-les en una conversacin privada (individual como la llaman en la FED). "El direc", como cariosa-mente lo llaman, es un

Pablo Castaedahistoria de vida y liderazgo

TESTIMONIOS

Por: MSc. Rodolfo MuozTrabajador Social, Presidente FED

Junio 2013

8

hombre consagrado a la rehabilitacin de ciudada-nos con consumo prob-lemtico de sustancias y otras adicciones.

Una dedicacin a tiem-po completo, tal como lo testimonian las ms de 200 llamadas telefnicas que atiende a diario para dar orientacin a adictos en recuperacin, recados y familiares de adictos de-sesperados.

Pablo Castaeda de 41 aos de edad, habla con la experiencia de quien ha vivido ms de una vida, y as ha sido en efecto. El Pa-blo exitoso de ahora, gerente en uno de los ms importantes cen-tros comerciales de la ciudad de Cuman, vivi en su juventud y cuando adulto joven, la vida desenfrenada del muchacho rebel-de, sin lmites para la diversin, hasta que lo atrapa la cocana y termi-na en situacin de calle.

Muchos aos despus, y luego de cuatro trata-mientos de rehabilitacin,

logra despegarse de la de-pendencia y comienza a transitar el camino de la sobriedad.

Le preguntamos a Pa-blo cul es su filosofa de vida actualmente, y esta fue su respuesta: Ayer camin por la vida en la total oscuridad, con mi

voluntad perdida, soli-tario y triste, encadenado a sustancias y conductas que destruan todo lo que siempre he amado; hoy soy un hombre digno y

sobrio, conciente de mi gran capacidad y empata para ayudar a otros seres humanos que, como yo lo estuve ayer, hoy ellos estn atrapados en ese mundo. En el presente, hoy, he decidido ser un lder, un gua para mis hermanos, me dedico a dar lo que

Dios me ha dado: sobriedad, empata, herramientas para el cambioMa-ana visualizo mi trabajo apoyado por muchas per-sonas y empresas, veo a la Fundacin Espada de David

creciendo con el apoyo de mucha gente buena. Esa es mi filosofa de vida.

Cuando le pregun-tas Por qu lo haces? Su respuesta termina de

Porque siempre he soado que puedo ayudar a otros a salir del pozo donde yo

estaba patinando... cuando verdaderamente lo

quieres, mi lder, SI SE PUEDE


desnudar el alma noble contenida en este ser hu-mano: porque siempre he soado que puedo ayudar a otros a salir del pozo donde yo estaba patinan-do; porque reca tres veces y me cost mucho superar el problema, pero aprend, adquir herramientas que ahora se las puedo ensear a mis hermanos, para que ellos tambin se convier-tan en personas de xito y se alejen definitivamente de las drogas.

Al terminar su ltimo tratamiento, Pablo fue se-leccionado por Hogares CLARET de Venezuela, comunidad teraputica de donde es egresado, para realizar el Diplomado de Consejera en Drogode-pendencia, en Medelln Colombia, en el ao 2003.

Pablo tiene un hijo, Miguel, de su matrimonio con Marianela, compaera solidaria que entiende que la realizacin personal de su esposo est en el servi-

cio al prjimo. Al respecto le preguntamos: Cmo haces para poder ser buen padre, esposo y adems tener tanta responsabili-dad social?. Su respuesta, simple, breve, lapidara, si se quiere, es hoy un slogan que se escucha a diario en la boca de los ms de treinta pacientes que reci-ben tratamiento en la Fun-dacin Espada de David: cuando verdaderamente lo quieres, mi lder, SI SE PUEDE .

Av. Miranda. Edif. San Antonio. Local 1, 6101. Cuman.Telfono: 0293 - 4330053

Junio 2013

10

Entre las diferentes formas que han ad-quirido la atencin y los esfuerzos por superar las adicciones en sus di-versas manifestaciones, se encuentra el tratamiento que se realiza de forma Ambulatoria, es decir, el rgimen abierto en el cual la persona afectada asiste regularmente a sesiones de terapia de grupos y otras actividades debidamente acordadas; y contina desarrollando su vida en contacto con las dems personas de su entorno fa-miliar, laboral y social.

Este es el caso de la Fun-dacin Espada de David (F.E.D), creada en la ciu-dad de Cuman hace ya seis aos, y en cuya ex-periencia destaca la labor realizada por lo que se ha denominado la ALIANZA FAMILIAR, constituida

por los miembros de las numerosas familias que buscan ayuda para s mis-mos y para sus pacientes.

En el proceso de tratamientos es necesario asistir una vez a la semana, como mnimo, a las insta-laciones del Ambulatorio a recibir las orientaciones y recomendaciones que emite el equipo directivo y el equipo clnico de la F.E.D., as como a conocer y familiarizarse con las caractersticas de la en-fermedad adictiva. Los integrantes de las famil-

ias ms cercanas al problema que experimentan con alguno de sus miem-bros, comienzan a poner en prctica un numeroso abanico de posibilidades de atencin y de respues-tas que han de ser toma-das en cuenta para que el adicto comience, a su vez ,a comprender cules son los verdaderos problemas que confronta y cules son las mejores estrategias para solucionarlos.

De esta manera, se crea un elemento o factor que entra a participar en el

La familia en el tratamiento ambulatorio de las adicciones

TRATAMIENTO

Por: MSc. Mara Elena Zaja Sociloga

11

Se Puede Fundacin Espada de David

tratamiento ambulatorio visto que el adicto est casi todo el tiempo en contacto con su familia (si hablamos de lo normal-mente esperado y no de las muchas excepciones que tambin son fre-cuentes): la familia asume su responsabilidad en el tratamiento del paciente y trabaja conjuntamente con los directivos de todo el proceso, es decir, con los profesionales y operadores que intervienen y condu-

cen el mismo, entre los cuales estn personas que conocieron en carne pro-pia la enfermedad adictiva y han sido rehabilitados.

Durante un lapso de tiempo aproximado de un ao a dieciocho meses -segn el caso- el vnculo entre el paciente dispuesto a superar y/o controlar su adiccin, el equipo clnico y los familiares conduce, en la gran mayora de los casos, principalmente a un conocimiento cabal

del problema y sus con-secuencias, a disponerse a las orientaciones que se formulan basadas en aos de experiencia y al logro de la recuperacin del individuo a quien la adic-cin haba negado, en gran medida, el disfrute de una vida sana y productiva; recuperndose relaciones familiares muy deterio-radas o inicindose nue-vas etapas de las mismas orientadas por el amor responsable.

Junio 2013

12

Si en algo estamos de acuerdo hoy en da, es que nuestra socie-dad se ha convertido en una prctica materialista. El materialismo significa conceder prioridad a los valores materiales por so-bre las personas, y pensar que es ms importante tener que ser, porque se identifica la felicidad con el placer de tener y go-zar el dinero. Es evidente, que en un ambiente as, el amor responsable en la familia aparece como un valor de segundo orden.

Lo anterior explica la crisis que sufren hoy las familias, adems de con-siderar la generosidad, la paciencia, la responsa-bilidad, el respeto, entre otros, como valores pasa-dos de moda, son el signo ms dramtico de una so-

ciedad enemiga de la paz y el amor en la familia.

Sin embargo, por ms grave que sean las pre-siones externas que el me-dio cultural y social ejerza sobre la familia, sta ser capaz de resistir y de salir adelante en la medida en que haya sabido conser-var viva su capacidad para dialogar. El dilogo como valor en la familia es de suma importancia, ya que permite conocer de manera ms ex-pedita las dificul-tades por las que pueda atravesar, cualquier

miembro del grupo fa-miliar, pero sobre todo los hijos al observar que la familia no les est brin-dando el apoyo, no los est escuchando y mucho menos los est guiando, hacia las metas que en algn momento se traz, y para asegurar su estabi- lidad emocional.

Es por ello, que las nor-mas, la autoridad, el afecto

y la disciplina e s t n

Sociedad, valores y familia

ORIENTACIN

Por: MSc. Gladys MartnezOrientadora

13


ausentes, lo cual conduce a buscar y aceptar otras ma- neras de escaparse de esa realidad que se llama fa-milia disfuncional. Esta familia vive en una casa no en un hogar, en esta familia no se comunican, se gritan o no se hablan, en esta familia no hay nor-mas, cada quien hace lo que cree ms conveniente.

Situaciones como estas son las que desencadenan problemticas como las adicciones, ya que al dejar a sus hijos en el desam-paro ellos se dejan llevar con el primero que les es-cuche, que les haga sentir importante, capaz y con cierta vala, generndole as, confianza, lo cual hace que el joven o adolescente se refugie en el alcohol u otras drogas txicas o en el juego o internet, que tarde o temprano termina destruyndole la vida a todo el grupo familiar.

Esta situacin se presen-ta por el estado de vulne- rabilidad que vive el joven en ese momenteto.

Para que una familia mantenga los valores y no llegue a extremos de ser una familia disfuncional, es importante que los padres sigan las siguientes recomendaciones:

Hable con su hijo o hijos Dedquele tiempo para escucharlo. Converse de sus responsabilidades. Visite la escuela o el liceo donde est su hijo o

hijos cada 15 das o por lo menos 1 vez al mes. Valore todos los esfuerzos que hace su hijo. Comparta con la familia en casa o fuera de ella. Observe bien a su hijo y est alerta cuando note

cambios en su conducta, o sobre todo cuando esos cambios son negativos.

Imparta los valores de la generosidad, responsabilidad, la paciencia, el respeto, el amor, entre otros.

Modele conductas adecuadas para que sus hijos aprendan con el ejemplo.

Explquele lo importante de ser antes que de tener.

Sin embargo, lo ms importante es darle a nues-tros hijos mucho amor responsable, el cual defini-mos en la Fundacin Espada de David como dar al ser amado, lo que necesita, ms no lo que pide.

La familiaEs un lugar donde pueden

encontrarse el amor, la comprensin y el apoyo, an cuando todo lo dems

haya fracasado; el lugar donde podemos recuperar el aliento y sacar nuevas energas para enfrentarnos

mejor al mundo exterior.Virginia Satir

@Za

il P

ala

cio

s

ParroquiaSan Jos de Cantarrana

MISAS Dominical: 8:00 am Diaria martes a Sbado 6:30 pm

SERVICIOS Catequesis de adultos Alcohlicos annimos Grupo juvenil Infancia misionera

Prroco: Pbro. Miguel CorderoCoordinador Parroquial: Sr. Araime Mrquez

Junio 2013

16

La Fundacin Espada de David

es una organizacin de Trabajo Voluntario, donde ms de doce

profesionales y tcnicos prestan sus servicios


17

La Fundacin Espada de David (FED) naci el 16 de Mayo del ao 2007 como respuesta Pastoral de la Iglesia Catlica Cumanesa, la cual, a travs de su arzo-bispo Mons. Diego Pa-drn, exhorta a los laicos comprometidos a pensar en posibles estrategias pas-torales de atencin al pro-blema de las adicciones y, ms concretamente, al abuso de sustancias pro-hibidas. Desde esa hora

germinal a estas fechas son muchas las experiencias y desafos que hemos tenido que vencer, para poder brindar atencin gratuita, cientfica e integral, a las ms de 400 personas que han acudido a nuestra sede en solicitud de atencin por estar, directa o indi-rectamente, afectados por el abuso de sustancias u otro tipo de adicciones.

La FED es una organi-zacin de Trabajo Volun-tario, donde ms de doce profesionales y tcnicos prestan sus servicios

ad honorem; su estructura y funcionamiento flexi-bles ha permitido que se coordine el trabajo vo-luntario de manera que pueda operar con bastante xito un equipo multidis-ciplinario conformado por trabajadores sociales, socilogas, terapeutas de la conducta, educadores, orientadores, psiclogas, psiquiatras, mdicos, eco- nomistas y adictos ya reha-bilitados. Todos unidos con un slo propsito: acom-paar a los pacientes en su proceso de recuperacin.

Fundacin Espada de David

Una ventanahacia la vidaPor: Lcda. Lauribeht RinconesTrabajadora Social FED

Junio 2013

18

El tratamiento que se ofrece en la Fundacin es totalmente gratuito, tanto para el ciudadano que so-licita la ayuda como para su familia. El nico re-quisito para incorporarse al programa -y lo decimos con todo orgullo-, es que el paciente manifieste y demuestre querer cambiar de estilo de vida pasando, gradual y progresivamente, de una conducta caracteri-zada por la dependencia a sustancias y/o actividades lcitas e ilcitas, a un estilo de vida sano, cuyos pilares fundamentales sean la so-briedad, la honestidad y la decisin de cambio.

Al someterse a las nor-mas de tratamiento de la Fundacin, el paciente asume una serie de com-

promisos; el ms general, pero primordial de ellos es dejarse llevar.

Cuando el paciente acepta ser ayudado, se coloca en brazos de un grupo que lo acoge con amor fraternal, como quien cuida de un her-mano menor, cuidado que se define como amor responsable. Desde su ingreso, hasta el egreso del programa, el paciente debe asistir diariamente a Terapia de Grupo de Autoayuda, donde poco a poco va recibiendo he-rramientas para canalizar la ansiedad y otros estados desagradables asociados a la abstinencia que ex-perimenta todo adicto al iniciar su etapa de desin-toxicacin.

Paralelamente con el trabajo en grupo, el pa-ciente es referido al psiquiatra, a la psicloga y a la orientadora; quienes inician el programa de Orientacin y Tratamiento Individual que es com-plementario al Programa de Tratamiento Grupal y al programa de Orien-tacin Familiar denomi-nado Alianza Familiar.

Desde nuestra perspec-tiva, el tratamiento no es-tara completo si obviamos a la familia del paciente, por ello, cada jueves a par-tir de las 6 pm, miembros de nuestro equipo inter-disciplinario conducen la Terapia Familiar, pro-grama que conjuntamente con el de Orientacin Conyugal, conforman la Alianza Familiar, la cual es una estrategia integral de atencin a la familia.

Gracias al apoyo del Arzobispo de Cuman, y con recursos provenientes de aportes de la empresa privada y del Fondo Na-cional Antidrogas (ONA) la Fundacin pudo res-

P a r r o q u i a

SantaIns

MISAS

Domingos: 7:00am 10:00am (Nios) 5:00pm (General) Diaria: 6:00pm Bautizos: Sbados 2:30pm

GRUPOS DE APOSTOLADO

Corazn de Jess Legin de Mara Franciscanos Nazarenos Catecmenos Scouts Carismticos Oracin y vida Grupo juvenil Catequesis Infancia misionera Cursillistas

@Za

il P

ala

cio

s

Junio 2013

20

taurar una antigua casa Colonial donde, desde hace dos aos, funciona el Centro Ambulatorio de Prevencin y Tratamiento de Adicciones (C.A.P.T.A.) sede en la cual se ha podido ampliar la cobertura y mi-sin de la Fundacin.

Por otra parte y en con-venio con el Departamento de Trabajo Social de la Universidad de Oriente, se cre el Centro de Prcticas Profesionales de Trabajo Social, el cual cuenta con una docente asignada y ocho estudiantes de lti-mos niveles de la carrera de Trabajo Social, quienes refuerzan los equipos de trabajo, creando nuevos programas preventivos que

impactan favorablemente a la comunidad e institu-ciones educativas cercanas a nuestra sede.

Desde el ao 2012, cerca de 50 estudiantes Universi-tarios se han incorporado a las labores preventivas de la Fundacin a travs del programa Prevencin Cara a Cara, esfuerzo con-junto que ejecutan los de-partamentos de Biologa y Trabajo Social, en el marco de una nueva visin del servicio comunitario del estudiante universitario, donde el estudiante ejecuta proyectos socialmente pertinentes, dando y re-cibiendo apoyo de otras disciplinas. El programa Prevencin Cara a Cara

ha permitido realizar ms de ochocientas reuniones familiares en ms de 20 comunidades, siendo el tema central la prevencin de las adicciones.

Ahora, cuando se cumplen seis aos del nacimiento del centro am-bulatorio de prevencin y tratamiento de adicciones, Fundacin Espada de Da-vid, seguimos optimistas, confiados en que la gracia de nuestro Dios se seguir derramando sobre este sueo hecho realidad para seguir brindando nuestra ayuda bajo el criterio de amor responsable, a todo aquel que necesite acom-paamiento para superar su problema de adiccin.

@Za

il P

ala

cio

s

Junio 2013

22

El cerebro humano es un rgano cuya estructura es rela-tivamente pequea. Su peso aproximado es de 1.5 kilogramos (2% del peso del cuerpo humano). Este

rgano, es responsable del sentido, el pensamiento, la memoria y el control del cuerpo. Para realizar adecuadamente una gran variedad de funciones, el cerebro, acumula una red masiva de clulas inter-conectadas llamadas neu-

ronas. En el cerebro hu-mano, existen cerca de 100 mil millones de neuronas y cada una tiene cerca de 10.000 contactos con su vecina. Dos hemisferios simtricos forman el ce-rebro, y cada uno de estos se divide en tres porciones

EL CEREBRO Y LA ADICCIN A LAS DROGAS Por: Prof. Johnny Bolvar

23


bsicas: el forebrain, el midbrain y el hindbrain. Hay tambin, cuatro compartimientos dentro del cerebro conocidos como los ventrculos: los dos ventrculos laterales, el tercer ventrculo y el cuarto ventrculo.

De manera funcional y estructural, el cerebro es un centro de comuni-caciones que consiste de miles de millones de neu-ronas o clulas nerviosas tejidas en redes que trans-miten los mensajes de ida y vuelta a las diferentes distribuciones dentro de la mdula espinal y el sis-tema nervioso perifrico.

Estas redes de nervios coordinan y regulan todo lo que sentimos, pensa-mos y hacemos a travs de impulsos elctricos que se transmiten de neurona a neurona por sustancias qumicas llamadas neuro-transmisores.

Si asociamos a cada neurotransmisor un re-ceptor, y los visualizamos como una unidad que opera como una llave

y un candado, entonces este mecanismo suma-mente especfico asegura que cada receptor slo en- viar el mensaje apropia-do despus de interactuar con el tipo correcto de neurotransmisor.

Las drogas son sustan-cias qumicas que actan sobre el cerebro, penetran-do el sistema de comu-nicacin de este e interfi-riendo con la manera que las clulas nerviosas nor-malmente envan, reciben y procesan la informacin.

Algunas drogas, como la marihuana y la hero-na, pueden activar a las neuronas porque su es-tructura qumica imita aquella de un neuro-transmisor natural. Esta similitud en la estructura engaa a los receptores y permite que las drogas se adhieran y activen a las clulas nerviosas.

Aunque estas drogas imitan a las sustancias qumicas del cerebro, no activan las clulas nervi-osas de la misma manera que los neurotransmisores

naturales y hacen que se transmitan mensajes anormales a travs de la red.

Otras drogas, como la anfetamina o cocana, pueden hacer que las clulas nerviosas liberen cantidades inusualmente grandes de neurotrans-misores naturales o pueden prevenir el recicla-je normal de estas sustan-cias qumicas cerebrales, haciendo que la seal se vea sumamente amplifica-da, lo que eventualmente trastorna los canales de comunicacin. La dife-rencia se puede describir como la diferencia entre alguien que te susurra algo en el odo y alguien que grita en un micrfono.

Todas las drogas de abuso, directa o indirecta-mente, atacan el sistema de gratificacin del cere-

Junio 2013

24

bro inundando el circuito con dopamina.

La dopamina es un neurotransmisor que se encuentra en regiones del cerebro que regulan el movimiento, las emo-ciones, la cognicin, la mo-tivacin y los sentimientos de placer. La sobre esti-mulacin de este sistema, que recompensa nuestros comportamientos natu-rales, produce los efectos de euforia que buscan las personas que abusan de las drogas y les ensea a repe-tir este comportamiento.

Nuestros cerebros estn diseados para asegurar que repitamos las activi-dades que sostienen la vida al asociar estas actividades con el placer o una recom-pensa o gratificacin. Cada vez que este circuito de gratificacin se activa, el cerebro nota que algo im-portante est pasando que debe recordar y nos ensea que debemos repetirlo una y otra vez, sin pensarlo. Debido a que las drogas de abuso estimulan el mismo circuito, aprendemos a

abusar de las drogas de la misma manera.

Cuando se consumen ciertas drogas de abuso, pueden liberar de dos a diez veces la cantidad de dopamina que la liberada por las recompensas natu-rales. En algunos casos, esto ocurre casi inme-diatamente (como cuando se fuman o se inyectan las drogas) y los efectos pueden durar mucho ms que aquellos producidos por recompensas naturales.

El efecto resultante so-bre el circuito de grati-ficacin del cerebro es mucho mayor que el producido por compor-tamientos naturales de gratificacin como el com-er y el sexo. El efecto de

una recompensa tan po-derosa motiva fuertemente a las personas a consumir drogas repetidamente. Es por eso que el abusador eventualmente se siente triste, sin vida y depri-mido y no puede disfrutar de las cosas que anterior-mente le producan placer. Ahora necesita consumir drogas solamente para lograr que la funcin de la dopamina regrese a lo normal. Es ms, necesita tomar cantidades ms grandes de la droga de lo que antes consuma para crear la euforia de la dopa-mina, efecto que se conoce como tolerancia.

Sabemos que los mis-mos tipos de mecanismos que estn implicados en

Junio 2013

26

el desarrollo de la toleran-cia pueden eventualmente causar cambios profundos en las neuronas y en los circuitos del cerebro, con la posibilidad de com-prometer severamente la salud del cerebro a largo plazo. Por ejemplo, el glutamato es otro neu-rotransmisor que influye sobre el circuito de gratifi-cacin y la habilidad para aprender.

Cuando se altera la con-centracin ptima del glu-tamato mediante el abuso de drogas, el cerebro inten-ta compensar este cambio, lo que puede deteriorar la funcin cognitiva. De manera similar, el abuso de drogas a largo plazo puede disparar adaptaciones en los sistemas del hbito o de la memoria no conciente.

El condicionamiento es un ejemplo de este tipo de aprendizaje, mediante el cual las seales ambien-tales terminan siendo aso-ciadas con la experiencia de la droga y pueden dispa-rar deseos incontrolables en el usuario cuando pos-

teriormente sea expuesto a estas seales ambientales, aun cuando la droga en s no est disponible. Este reflejo aprendido es su-mamente fuerte y puede resurgir aun muchos aos despus de haber dejado de usar la droga.

La exposicin crnica a las drogas de abuso inte-rrumpe la manera en que las estructuras esenciales del cerebro interactan para controlar el compor-tamiento, en particular, el comportamiento espec-ficamente relacionado al abuso de drogas. De igual manera que el abuso con-tinuado puede llevar a la tolerancia o a la necesi-dad de dosis ms altas de la droga para producir efecto, tambin puede lle-var a la adiccin, que hace que el abusador busque y consuma drogas compul-sivamente.

La drogadiccin corroe el autocontrol y la capaci-dad del usuario de tomar decisiones sanas, mientras enva impulsos intensos para que consuma drogas.

Parcelamiento Miranda, sector "b", calle Casanay, cruce con Macuro. Tlf: 0293-4323782 / fax: 0293-4331723 email: [email protected] desde maternal hasta ciclo diversificado

Rif. J-31232698-0

58 Aos impartiendo excelencia educativa en Sucre

29


En el presente artcu-lo no pretendemos abarcar todos los factores que intervienen en el complicado proceso salud enfermedad, en la cavidad bucal y tejidos asociados, sino dejar algu-nas reflexiones sobre la sit-uacin actual que obser-vamos en la prctica diaria de nuestro ejercicio como profesio-nales de la salud, para as contribuir al me-joramiento de la calidad de vida de la poblacin.

Tradicionalmente se considera a un indivi-duo saludable cuando en l est ausente cualquier enfermedad. La Organi-zacin Mundial de la Salud (OMS) define a la salud como un estado de completo bienestar fsico, mental y social, en armona con el medio am-

Salud bucalen el nuevo milenio

SALUD

Por: Dr. Pedro L. HernndezOdontlogo

Parte I

biente, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades.

Los individuos se acer-can a los servicios mdicos para solucionar incon-venientes en su salud, pero son muy pocas las perso-nas sanas que acuden a estos servicios buscando prevencin. Lamentable-mente esta conducta se re-pite en el rea odontolgi-ca. Mayoritariamente la poblacin accede al con-sultorio odontolgico cuando hay algn dolor o molestia, lo cual es un sntoma de que algo inade-cuado ha ocurrido y posi-blemente pudo ser evitado.

Determinar el estado de salud de la poblacin por ser multifactorial se hace muy complejo, ms an si pretendemos abar-carlo en toda su magnitud, Constituye un reflejo del desarrollo material y espi-

ritual de una sociedad. Las determinantes o condicio-nantes de la salud y de la enfermedad en el indivi-duo, familia y colectivo en una comunidad, depen-den de la integracin de los siguientes factores:1. Biologa (gentica, edad, envejecimiento, otros).2. Ambiente (contami-nacin fsica, qumica, biolgica, psicosocial y sociocultural).3. Estilo de vida. 4. Acceso al sistema de asistencia sanitaria.

Las instituciones guber-namentales que rigen la salud en nuestro pas em-plean varios indicadores para medir la calidad de la salud, como el ndice de mortalidad infantil o las tasas de incidencia y prevalencia de deter-minadas enfermedades o patologas.

Pero, y la salud bucal?

Junio 2013

30

Acaso la boca no forma parte de nuestro organis-mo, el cual debe funcionar como un todo?

La salud general de la persona empieza por su boca. El estado y funcio-namiento de los compo-nentes de la cavidad oral son vitales para nuestro bienestar general.

As la piezas dentales son importantes desde el punto de vista integral de la salud bio-psico-so-cial, tanto para masticar adecuadamente como para dar soporte a las estructuras de la cara y tambin para comunicar-nos, adems para tener una adecuada autoestima y atreverse e a sonrer sin taparse la boca para que no se note la ausencia dental o los dientes man-chados o cariados.

No olvidemos que los dientes son en teora, para toda la vida, necesa-rios para que no haya dis-capacidad en la funcin y afectacin del resto del proceso de digestin que se inicia en la boca y de

otros procesos sistmicos de la persona.

Una sonrisa saludable es algo ms que algo cosm-tico. Nos puede indicar el estado de toda su salud en general. Las dolencias bucodentales comparten factores de riesgo con las cuatro enfermedades crnicas ms importantes: enfermedades cardiovas-culares, cncer, enferme-dades respiratorias crni-cas y diabetes, pues se ven favorecidas por las dietas malsanas, el tabaquismo y el consumo nocivo de alcohol y otras drogas de abuso, lo cual trataremos en entregas posteriores.

La mala higiene dental se ha aunado a un alto riesgo de algunas en-fermedades en adultos. En nios, el problema es igual de serio. Diversos estudios

indican que cuando un nio tiene algn problema dental, puede afectar toda su salud y llevar a incon-venientes al comer, hablar y hasta causar ausencia en la escuela. Algunas con-diciones especiales tales como los discapacitados fsicos o mentales y las mujeres encinta tienen mayor riesgo de desa-rrollar afecciones en las encas y dems tejidos de soportes de los dientes y otros problemas bucales.

Se pensaba que con la ve-jez era natural ir perdiendo la dentadura. Ahora se sabe que esto no es cierto.

Siguiendo algunos pa-sos sencillos para man-tener sus dientes y encas sanas, adems de visitar peridicamente al den-tista, podr conservar sus dientes para toda la vida.

Se puede: Cuaderno Educativo Nº 1

Healthcare

Transcript of Se puede: Cuaderno Educativo Nº 1