Segunda Barrera

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Segunda Barrera Tendencias Pecaminosas (Romanos 7:15-24) 1.1. Las Tendencias pecaminosas, Ro. 7:15-24 Romanos 7:15 (RVC)

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La segunda barrera infranqueable por el hombre en sus propias fuerzas, en su esfuerzo para llegar a una relación personal de paz con Dios, es su tendencia pecaminosa. Dios ofrece una salida a través de la regeneració.

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Segunda Barrera

Tendencias Pecaminosas (Romanos 7:15-24)1.1. Las Tendencias pecaminosas, Ro. 7:15-24Romanos 7:15 (RVC)15No entiendo qu me pasa, pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco.16Y si hago lo que no quiero hacer, compruebo entonces que la ley es buena.17De modo que no soy yo quien hace aquello, sino el pecado que habita en m.18Yo s que en m, esto es, en mi naturaleza humana, no habita el bien; porque el desear el bien est en m, pero no el hacerlo.19Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero.20Y si hago lo que no quiero, ya no soy yo quien lo hace, sino el pecado que habita en m.21Entonces, aunque quiero hacer el bien, descubro esta ley: que el mal est en m.22Porque, segn el hombre interior, me deleito en la ley de Dios;23pero encuentro que hay otra ley en mis miembros, la cual se rebela contra la ley de mi mente y me tiene cautivo a la ley del pecado que est en mis miembros.24Miserable de m! quin me librar de este cuerpo de muerte?

1.1. La Regeneracin, Ro. 8:1-4Romanos 8:1-4 (RVC)Viviendo en el EsprituPor tanto, no hay ninguna condenacin para los que estn unidos a Cristo Jess, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espritu, 2porque la ley del Espritu de vida en Cristo Jess me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.3Porque Dios ha hecho lo que para la ley era imposible hacer, debido a que era dbil por su naturaleza pecaminosa: por causa del pecado envi a su Hijo en una condicin semejante a la del hombre pecador, y de esa manera conden al pecado en la carne,4para que la justicia de la ley se cumpliera en nosotros, que no seguimos los pasos de nuestra carne, sino los del Espritu.