SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte...

44
1 Actúa siempre con toda justicia (Deuteronomio 16, 18-20) SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS (Del 18 al 25 de enero de 2019 y para todo el año) Subsidio litúrgico

Transcript of SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte...

Page 1: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

1

Actúa siempre con toda justicia (Deuteronomio 16, 18-20)

SEMANA DE ORACIÓNPOR LA UNIDAD DE LOS

CRISTIANOS(Del 18 al 25 de enero de 2019 y para todo el año)

Subsidio litúrgico

Page 2: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

2

PresentaciónPresentación

El llamado a la unidad de los cris-tianos debe resonar cada vez con mayor fuerza en el cora-zón de todos los creyentes en Cristo. Nadie puede escapar de

este desafío que nuestra fe nos propone. El seguimiento a Jesús nos hace desear y buscar con todas nuestras fuerzas eso que constituye la esencia misma del evangelio: la unidad, seguros que cada elemento de di-visión se puede trascender y superar en la entrega total de uno mismo a la causa del Evangelio (Cfr UUS 1).

Por eso, como todos los años, del 18 al 25 de enero, la Iglesia nos propone unirnos en oración para crecer en la Unidad. En este año el Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos y la Comisión Fe y Constitución del Consejo Mundial de Iglesias nos presenta el tema “Actúa siempre con

justicia” tomado del libro del Deuteronomio 16, 18-20 para que podamos vivir más intensa-mente la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos. Esta semana ha sido preparada por los cristianos de Indonesia quienes encontraron que estas palabras del Deuteronomio hablaban poderosamente a su situación y a sus necesidades. La Iglesia está llamada a ser un anticipo del Reino de Dios, sin embargo, fallamos a la hora de ser signo del amor de Dios para su pueblo. Del mismo modo que la injusticia ha hecho crecer las divisiones que han desgarra-do la sociedad en Indonesia, también la injusticia ha alimentado las divisiones en la Iglesia; sin embargo, como cristianos, creemos en el poder de Cristo que por su gracia pone fin a toda injusticia y por su misericordia destruye el pecado que ha sido la causa de nuestra división.

En esta guía litúrgica se ha incluido, también, el texto de algunos numerales de la Carta Encí-clica sobre el empeño ecuménico Ut Unum Sint para que tengamos presente como nosotros podemos participar y contribuir activamente en la unidad de todos los cristianos, sobre todo con la oración que es un medio sumamente eficaz para pedir esta gracia de la Unidad.

Ponemos a disposición de toda la Iglesia en el Ecuador este instrumento litúrgico que nos permitirá unirnos a toda la Iglesia Universal por medio de la Eucaristía para que desde nues-tras comunidades parroquiales participemos con entusiasmo y alegría en la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos.

En Cristo evangelizador del Padre.

+ Giovanni Battista PiccioliObispo Auxiliar de Guayaquil

Presidente de la Comisión Episcopal de LiturgiaResponsable del Ámbito de Ecumenismo

y Diálogo InterreligiosoConferencia Episcopal Ecuatoriana

Page 3: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

3

Primacía de la ora-ción

21. « Esta conversión del co-razón y santidad de vida,

junto con las oraciones públicas y privadas por la unidad de los cris-tianos, deben considerarse como el alma de todo el movimiento ecu-ménico y pueden llamarse con ra-zón ecumenismo espiritual ».Se avanza en el camino que lleva a la conversión de los corazones se-gún el amor que se tenga a Dios y, al mismo tiempo, a los hermanos: a todos los hermanos, incluso a los que no están en plena comu-nión con nosotros. Del amor nace el deseo de la unidad, también en aquellos que siempre han ignorado esta exigencia. El amor es artífice de comunión entre las personas y entre las Comunidades. Si nos amamos, es más profunda nues-tra comunión, y se orienta hacia la perfección. El amor se dirige a Dios como fuente perfecta de comunión

—la unidad del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo—, para encontrar la fuerza de suscitar esta misma co-munión entre las personas y entre las Comunidades, o de restablecer-la entre los cristianos aún divididos. El amor es la corriente profundísi-ma que da vida e infunde vigor al proceso hacia la unidad.

Este amor halla su expresión más plena en la oración común. Cuan-do los hermanos que no están en perfecta comunión entre sí se reúnen para rezar, su oración es definida por el Concilio Vaticano II como alma de todo el movimiento ecuménico. La oración es « un me-dio sumamente eficaz para pedir la gracia de la unidad », una « expre-sión auténtica de los vínculos que siguen uniendo a los católicos con los hermanos separados ». Incluso cuando no se reza en sentido for-mal por la unidad de los cristianos, sino por otros motivos, como, por ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-

sión y confirmación de la unidad. La oración común de los cristia-nos invita a Cristo mismo a visitar la Comunidad de aquellos que lo invocan: « Donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos » (Mt 18, 20).

22. Cuando los cristianos rezan juntos la meta de la unidad

aparece más cercana. La larga his-toria de los cristianos marcada por múltiples divisiones parece recom-ponerse, tendiendo a la Fuente de su unidad que es Jesucristo. ¡Él es el mismo ayer, hoy y siempre! (cf. Hb 13, 8). Cristo está realmente presen-te en la comunión de oración; ora « en nosotros », « con nosotros » y « por nosotros ». El dirige nuestra ora-ción en el Espíritu Consolador que prometió y dio ya a su Iglesia en el Cenáculo de Jerusalén, cuando la constituyó en su unidad originaria.

En el camino ecuménico hacia la unidad, la primacía corresponde sin duda a la oración común, a la unión

DE LA CARTA ENCÍCLICA UT UNUM SINTDEL SANTO PADRE JUAN PABLO IISOBRE EL EMPEÑO ECUMÉNICO

Page 4: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

4

orante de quienes se congregan en torno a Cristo mismo. Si los cristia-nos, a pesar de sus divisiones, sa-ben unirse cada vez más en oración común en torno a Cristo, crecerá en ellos la conciencia de que es menos lo que los divide que lo que los une. Si se encuentran más frecuente y asiduamente delante de Cristo en la oración, hallarán fuerza para afron-tar toda la dolorosa y humana reali-dad de las divisiones, y de nuevo se encontrarán en aquella comunidad de la Iglesia que Cristo forma ince-santemente en el Espíritu Santo, a pesar de todas las debilidades y li-mitaciones humanas.

23. En suma, la comunión de oración lleva a mirar con

ojos nuevos a la Iglesia y al cristia-nismo. En efecto, no se debe olvi-dar que el Señor pidió al Padre la unidad de sus discípulos, para que ésta fuera testimonio de su misión y el mundo pudiese creer que el Pa-dre lo había enviado (cf. Jn 17, 21). Se puede decir que el movimiento ecuménico haya partido en cierto sentido de la experiencia negati-va de quienes, anunciando el úni-co Evangelio, se referían cada uno a su propia Iglesia o Comunidad eclesial; una contradicción que no podía pasar desapercibida a quien escuchaba el mensaje de salvación y encontraba en ello un obstáculo a la acogida del anuncio evangéli-co. Lamentablemente este grave

impedimento no está superado. Es cierto, no estamos todavía en plena comunión. Sin embargo, a pesar de nuestras divisiones, estamos reco-rriendo el camino hacia la unidad plena, aquella unidad que caracte-rizaba a la Iglesia apostólica en sus principios, y que nosotros busca-mos sinceramente: prueba de esto es nuestra oración común, animada por la fe. En la oración nos reuni-mos en el nombre de Cristo que es Uno. Él es nuestra unidad.

La oración « ecuménica » está al servicio de la misión cristiana y de su credibilidad. Por eso debe estar particularmente presente en la vida de la Iglesia y en cada actividad que tenga como fin favorecer la unidad de los cristianos. Es como si noso-tros debiéramos volver siempre a reunirnos en el Cenáculo del Jueves Santo, aunque nuestra presencia común en este lugar, aguarda toda-vía su perfecto cumplimiento, hasta que, superados los obstáculos para la perfecta comunión eclesial, todos los cristianos se reúnan en la única celebración de la Eucaristía.

24. Es motivo de alegría cons-tatar como tantos encuen-

tros ecuménicos incluyen casi siem-pre la oración y, más aún, culminan con ella. La Semana de Oración por la unidad de los cristianos, que se celebra en el mes de enero, o en torno a Pentecostés en algunos

países, se ha convertido en una tradición difundida y consolidada. Pero además de ella, son muchas las ocasiones que durante el año llevan a los cristianos a rezar jun-tos. En este contexto, deseo evo-car la experiencia particular de las peregrinaciones del Papa por las Iglesias, en los diferentes con-tinentes y en los varios países de la oikoumene contemporánea. Soy bien consciente de que el Concilio Vaticano II orientó al Papa hacia este particular ejercicio de su mi-nisterio apostólico. Se puede decir aún más. El Concilio hizo de este peregrinar del Papa una clara ne-cesidad, en cumplimiento del pa-pel del Obispo de Roma al servicio de la comunión. Estas visitas casi siempre han incluido un encuentro ecuménico y la oración en común de los hermanos que buscan la unidad en Cristo y en su Iglesia. Re-cuerdo con una emoción muy espe-cial la oración con el Primado de la Comunión anglicana en la catedral de Canterbury, el 29 de mayo de 1982, cuando en aquel admirable templo veía un « elocuente testimo-nio, al mismo tiempo, de nuestros largos años de herencia común y de los tristes años de división que vinieron a continuación»; tampo-co puedo olvidar las realizadas en los Países escandinavos y nórdicos (1-10 de junio de 1989), en Améri-ca, África, o aquélla en la sede del Consejo Ecuménico de las Iglesias (12 de junio de 1984), organismo que tiene como objetivo llamar a las Iglesias y a las Comunidades ecle-siales que forman parte « a la meta de la comunión visible en una sola fe y en una sola comunión eucarísti-ca expresada en el culto y en la vida común en Cristo». Y ¿cómo podría olvidar mi participación en la liturgia eucarística en la iglesia de san Jor-ge, en el Patriarcado ecuménico (30 de noviembre de 1979), y la cele-bración en la Basílica de san Pedro durante la visita a Roma de mi ve-nerable Hermano, el Patriarca Dimi-trios I (6 de diciembre de 1987)? En aquella circunstancia, junto al altar de la Confesión, profesamos juntos el Símbolo nicenoconstantinopilita-no según el texto original griego. No se pueden describir con pocas pa-labras los aspectos concretos que

Page 5: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

5

han caracterizado cada uno de es-tos encuentros de oración. Por los condicionamientos del pasado que, de modo diverso, pesaban sobre cada uno de ellos, todos tienen una propia y singular elocuencia; todos están grabados en la memoria de la Iglesia, guiada por el Paráclito en la búsqueda de la unidad de todos los creyentes en Cristo.

25. No sólo el Papa se ha he-cho peregrino. En estos

años muchos dignos representan-tes de otras Iglesias y Comunida-des eclesiales me han visitado en Roma y he podido rezar con ellos en encuentros públicos y privados. Ya he mencionado la presencia del Patriarca ecuménico Dimitrios I. Quisiera ahora recordar también el encuentro de oración con los Arzo-bispos luteranos, primados de Sue-cia y Finlandia, en la misma Basílica de san Pedro, para la celebración de Vísperas, con ocasión del VI cen-tenario de la canonización de santa Brígida (5 de octubre de 1991). Se trata de un ejemplo, porque la Igle-sia es consciente de que el deber de orar por la unidad es propio de su vida. No hay un acontecimiento importante y significativo que no se beneficie con la presencia recí-proca y la oración de los cristianos. Me es imposible enumerar todos estos encuentros, aunque cada uno merezca ser nombrado. Ver-daderamente el Señor nos lleva de la mano y nos guía. Estos intercam-bios, estas oraciones han escrito ya páginas y páginas de nuestro «Libro de la unidad», «Libro» que debemos siempre hojear y releer para hallar inspiración y esperanza.

26. La oración, la comunidad de oración, nos permi-

te reencontrar siempre la verdad evangélica de las palabras «uno solo es vuestro Padre» (Mt 23, 9), aquel Padre, Abbá, al cual Cristo mismo se dirige, El que es Hijo unigénito de la misma sustancia. Y además: «Uno solo es vuestro Maestro; y vosotros sois todos hermanos » (Mt 23, 8). La oración «ecuménica» manifiesta esta dimensión fundamental de fraternidad en Cristo, que murió para unir a los hijos de Dios dispersos, para que no-

sotros, llegando a ser hijos en el Hijo (cf. Ef 1, 5), reflejásemos más plenamente la inescruta-ble realidad de la paternidad de Dios y, al mismo tiempo, la ver-dad sobre la humanidad propia de cada uno y de todos.

La oración «ecuménica», la ora-ción de los hermanos y herma-nas, expresa todo esto. Ellos, precisamente por estar dividi-dos entre sí, con mayor espe-ranza se unen en Cristo, con-fiándole el futuro de su unidad y de su comunión. A esta situa-ción se podría aplicar una vez más felizmente la enseñanza del Concilio: «El Señor Jesús, cuando pide al Padre ‘que todos sean uno como nosotros también somos uno’ (Jn 17, 21-22), ofreciendo pers-pectivas inaccesibles a la razón hu-mana, sugiere cierta semejanza en-tre la unión de las personas divinas y la unión de los hijos de Dios en la verdad y el amor».

La conversión del corazón, con-dición esencial de toda auténtica búsqueda de la unidad, brota de la oración y ésta la lleva hacia su cumplimiento: «Los deseos de uni-dad brotan y maduran como fruto de la renovación de la mente, de la negación de sí mismo y de una efusión libérrima de la caridad. Por ello, debemos implorar del Espíri-tu divino la gracia de una sincera abnegación, humildad y manse-dumbre en el servicio a los demás

y espíritu de generosidad fraterna hacia ellos ».

27. Orar por la unidad no está sin embargo reservado a

quien vive en un contexto de divi-sión entre los cristianos. En el diá-logo íntimo y personal que cada uno de nosotros debe tener con el Señor en la oración, no puede ex-cluirse la preocupación por la uni-dad. En efecto, sólo de este modo ésta formará parte plenamente de la realidad de nuestra vida y de los compromisos que hayamos asu-mido en la Iglesia. Para poner de relieve esta exigencia he querido proponer a los fieles de la Iglesia católica un modelo que me parece ejemplar, el de una religiosa tra-pense, María Gabriela de la Unidad, que proclamé beata el 25 de enero de 1983. Sor María Gabriela, llama-da por su vocación a vivir alejada del mundo, dedicó su existencia a la meditación y a la oración centra-da en el capítulo 17 del Evangelio de san Juan y la ofreció por la uni-dad de los cristianos. Este es el soporte de toda oración: la entre-ga total y sin reservas de la propia vida al Padre, por medio del Hijo, en el Espíritu Santo. El ejemplo de sor María Gabriela nos enseña, nos hace comprender cómo no existen tiempos, situaciones o lugares par-ticulares para rezar por la unidad. La oración de Cristo al Padre es modelo para todos, siempre y en todo lugar.

Page 6: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

6

Primer Día: Que fluya el derecho como agua (Amós 5, 24)

• MONICIÓN DE ENTRADA

Esta Eucaristía la ofrecemos por los cristianos ortodoxos. La Iglesia Ortodoxa Oriental no es una sola iglesia sino más bien una familia de varios cuerpos auto-gobernados, denominados por la nación en la cual están localizados. Ellas están unidas por su afinidad en los sacramen-tos, doctrina, liturgia y gobierno eclesiástico, pero cada una administra sus propios asuntos. Oremos para que nuestra mutua fe en la Euca-ristía y nuestro mutuo amor a la Virgen María nos ayuden a alcanzar la ansiada unidad.

ANTÍFONA DE ENTRADA

“Oh Dios, en medio de tu templopensamos en tu gran amor.Oh Dios, por toda la tierra eres alabadocomo corresponde a tu nombre.Con tu poder haces plena justicia” (Sal 48 [47], 10-11)

• RITOS INICIALES

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan con la señal de la cruz, mientras el sacerdo-te, vuelto hacia el pueblo, dice:

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo

El pueblo responde:

Amén.Después el sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pue-blo diciendo:

La gracia de nuestro Señor Jesucristo,

El amor del PadreY la comunión del Espíritu Santo Estén con to-dos ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

• ACTO PENITENCIAL

El sacerdote invita a los fieles al acto penitencial:

Hermanos:Para celebrar dignamente estos sagrados mis-terios, reconozcamos nuestros pecados

Se hace una breve pausa de silencio. Después el sacerdote dice:• Reconocemos nuestras deficiencias a la

hora de colaborar en fomentar el diálogo. Señor, ten piedad de nosotros.

• SEÑOR TEN PIEDAD

• Nos falta hondura y coraje para comunicar-nos desde el corazón, la proximidad y el en-cuentro. Cristo, ten piedad de nosotros.

• CRISTOTEN PIEDAD• No somos capaces de contemplar la vida y

el mundo con amor para comunicar el Evan-gelio. Señor, ten piedad de nosotros.

• SEÑOR TEN PIEDAD

Sigue la absolución del sacerdote:

Dios todopoderosotenga misericordia de nosotros, perdone nues-tros pecadosy nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén.

SUBSIDIO LITÚRGICOpara la Celebración del Octavario de Oración por

la Unidad de los Cristianos(18 al 25 de enero)

Page 7: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

7

• ORACIÓN COLECTA

Padre misericordioso, aumenta en nosotros la luz de la fe para que en los signos sacramen-tales de la Iglesia reconozcamos a tu Hijo, que continúa manifestándose en sus discípulos, y danos tu Espíritu, para proclamar a todos que Jesús es el Señor. Él que es Dios, y vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.

El pueblo responde:

Amén.

• LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA Lectura del libro de Amós (5, 22-25)“Si me ofrecen holocaustos... no me complazco en vuestras oblaciones, ni miro sus sacrificios de co-munión de novillos cebados. ¡Aparta de mi lado la multitud de tus canciones, no quiero oír la salmo-dia de tus arpas! ¡Que fluya, sí, el juicio como agua y la justicia como arroyo perenne!”“¿Acaso ustedes me presentaron sacrificios y obla-ciones en el desierto, durante cuarenta años, casa de Israel?Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIALDel Salmo 49, 7-17

R. Dios salva al que cumple su voluntad.

Israel, pueblo mío, escucha atento;en contra tuya, yo, tu Dios, declaro: R.

“No voy a reclamarte sacrificios,pues siempre están ante mí tus holocaustos.Pero ya no aceptaré becerros de tu casani cabritos de tus rebaños. R.

Pues todas las fieras de la selva son míasy hay miles de bestias en mis montes.Conozco todos los pájaros del cieloy es mío cuanto se mueve en los campos. R.

Si yo estuviera hambriento,nunca iría a decírtelo a ti, pues todo es mío.¿O acaso yo como carne de toros y bebo sangre de cabritos? R.

¿Por qué citas mis preceptosy hablas a toda hora de mi pacto, tú, que detestas la obedienciay echas en saco roto mis mandatos? R.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, Aleluya. “El que me ama, hace caso de mi palabra; y mi Padre lo amará, y mi Padre y yo vendremos a vivir con él (Juan 14,23)R. Aleluya, Aleluya.

Lectura del santo Evangelio según san Lucas (11, 37-44).“Cuando terminó de hablar, un fariseo le rogó que fuera a comer con él; entró, pues, y se puso a la mesa. El fariseo se quedó admirado viendo que había omitido las abluciones antes de comer. Pero el Señor le dijo: « ¡Bien! Ustedes, los fariseos, purifican por fuera la copa y el plato, mientras por dentro están llenos de rapiña y maldad. ¡Insen-satos! el que hizo el exterior, ¿no hizo también el interior? Den más bien en limosna lo que tengan, y entonces todo será puro para ustedes. Pero, ¡ay de ustedes, los fariseos, que pagan el diezmo de la menta, de la ruda y de toda hortaliza, y dejan a un lado la justicia y el amor a Dios! Esto es lo que ha-bía que practicar aunque sin omitir aquello. ¡Ay de ustedes, los fariseos, que aman el primer asiento en las sinagogas y que se les salude en las plazas! ¡Ay de ustedes, pues son como los sepulcros que no se ven, sobre los que andan los hombres sin saberlo!»” Palabra del Señor.

◊ REFLEXIÓN

Algunas veces los cristianos pueden estar muy comprometidos con las plegarias y las cele-braciones, pero menos preocupados por los pobres y los marginados. A veces oramos en la iglesia, pero al mismo tiempo oprimimos al prójimo y explotamos el medio ambiente. Los cristianos de Indonesia reconocen que en su tierra hay personas que intentan practicar su fe con pasión, pero que oprimen a los de otras creencias, incluso utilizando medios violentos. Sin embargo, en el evangelio de Lucas Jesús nos recuerda que el signo exterior del culto auténtico de Dios es actuar con justicia. Con-dena con mucha dureza a los que descuidan esta obligación.

Page 8: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

8

En la profecía de Amós, Dios rechaza el culto que le ofrecen los que no practican la justicia, hasta que hagan que «fluya el derecho como agua y la justicia como un río inagotable» (5, 24). El profeta insiste en el vínculo indisoluble entre el culto y realizar actos de justicia. Cuando los cristianos trabajan juntos para escuchar el grito de los pobres y oprimidos, crecen en la comu-nión entre ellos y con el Dios Uno y Trino.

SE DICE EL CREDO: NICENOCOSTANTINOPOLITANO

Creo en un solo Dios, Padre todopoderoso,Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios,nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz,Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado,de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho;que por nosotros los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo,y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado,y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo,y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloriapara juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida,que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijorecibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas.Creo en la Iglesia,que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados.Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.Amén.

ORACIÓN DE LOS FIELESOremos para que los cristianos de todas las confesiones podamos escuchar la llamada de Dios a Ser la Iglesia una, santa, católica y apos-tólica. Respondemos: Consérvanos en la uni-dad Señor.

• Señor, bendice a nuestros hermanos de la Iglesia de Roma: que su cuidado por pre-servar el depósito de la fe, su compromiso con la continuidad histórica de la Iglesia y su amor a la Eucaristía, enriquezca e interpele a todos los cristianos. Oremos

• Por las Iglesias de Oriente; que continúen enriqueciendo a tu Iglesia con su fe en el Espíritu Santo, su amor por la divina Litur-gia y su respeto por la tradición eclesiástica. Oremos

• Por las Iglesias Apostólicas Armenas; que sus sufrimientos den testimonio del amor que perdona y que Tú nos has mostrado en Cristo Jesús. Oremos

• Por las Iglesias de la Comunión Anglicana; que su respeto por la diversidad y la con-ciencia individual interpele a toda la Iglesia, y que sus tesoros literarios y su música nunca cesen de magnificar tu santo nombre. Ore-mos

• Por los Hermanos Luteranos: que su amor por las Sagradas Escrituras y su fe en tu sola gracia, nos ayude a recibir tu salvación como el más puro regalo. Oremos

Acoge Padre Misericordioso estas oraciones que te dirigimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

• LITURGIA EUCARÍSTICA

ORACION SOBRE LAS OFRENDAS:Nos purifique, Señor esta ofrenda que consa-gramos a tu nombre, y nos conduzca de día en día a expresar en nosotros la vida nueva de Cristo tu Hijo. Él vive y reina por los siglos de los siglos. Amén

PLEGARIA EUCARÍSTICA DE LA RECONCILIACIÓN I

V. El Señor esté con ustedes.R. Y con tu espíritu.

V. Levantemos el corazón.

Page 9: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

9

R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

CPEn verdad es justo y necesario darte gracias siempre,Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno:

Porque no dejas de alentarnos a tener una vida más plena,y, como eres rico en misericordia,ofreces siempre tu perdóne invitas a los pecadores a confiar sólo en tu indulgencia.

Nunca te has apartado de nosotros,que muchas veces hemos quebrantado tu alianza, y por Jesucristo tu Hijo, nuestro Redentor,tan estrechamente te has unido a la familia hu-mana con un nuevo vínculo de amor,que ya nada lo podrá romper.

Y ahora, mientras le ofreces a tu pueblo un tiempo de gracia y reconciliación, alientas a esperar en Cristo Jesúsa quien se convierte a ti y le concedes ponerse al servicio de todos los hombres, confiando más plenamente en el Espíritu Santo.

Por eso, llenos de admiración, ensalzamos la fuerza de tu amor y proclamando la alegría de nuestra salvación,con todos los coros celestiales,cantamos sin cesar el himno de tu gloria:

Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Universo.Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria. Hosanna en el cielo.Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.

2. El sacerdote, con las manos extendidas, dice:

CPSanto eres en verdad, Señor,que desde el principio del mundoobras siempre para que el hombre sea santo,como tú mismo eres santo.

3. Junta las manos y, manteniéndolas extendi-das sobre las ofrendas, dice:

CCTe pedimos que mires los dones de tu pueblo, y derrames sobre ellos la fuerza de tu Espíritu

Junta las manos y traza el signo de la cruz sobre el pan y el cáliz conjuntamente, diciendo:para que se conviertan en el Cuerpo y + la Sangre Junta las manos.de tu amado Hijo, Jesucristo,en quien nosotros también somos hijos tuyos. Aunque en otro tiempo estábamos perdidos y éramos incapaces de acercarnos a ti,nos amaste hasta el extremo: tu Hijo, que es el único Justo,se entregó a sí mismo a la muerte,aceptando ser clavado en la cruz por nosotros.

Pero antes de que sus brazos, extendidos entre el cielo y la tierra trazasen el signo indeleble de tu alianza,él mismo quiso celebrar la Pascua con sus dis-cípulos.

4. En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor han de pronunciarse claramente y con precisión, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.

Mientras comía con ellos,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó pany dando gracias te bendijo, lo partió y se lo dio, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO,QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego so-bre la patena y lo adora, haciendo genuflexión.

5. Después prosigue:

Del mismo modo, acabada la cena, sabiendo que iba a reconciliar todas las cosas en sí mis-mo, por su sangre derramada en la cruz,

Page 10: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

10

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar. Prosigue:

tomó el cáliz, lleno del fruto de la vid,y, dándote gracias de nuevo,lo pasó a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL,PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADAPOR USTEDES Y POR MUCHOSPARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora, haciendo genuflexión.

6. Luego dice:

CPÉste es el Misterio de la fe.

O bien:Éste es el Sacramento de nuestra fe. y el pueblo prosigue, aclamando:Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección.¡Ven, Señor Jesús!

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo nos redimió.

y el pueblo prosigue, aclamando: Cada vez que comemos de este pan y bebemos de este cáliz, anunciamos tu muerte, Señor, hasta que vuelvas.

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo se entregó por nosotros. y el pueblo prosigue, aclamando:Salvador del mundo, sálvanos,que nos has liberado por tu cruz y resurrección.

7. Después el sacerdote, con las manos exten-didas, dice:

CCAsí, pues, al celebrar el memorial de tu Hijo Je-sucristo,

nuestra Pascua y nuestra paz verdadera,hacemos presente su muerte y resurrección de entre los muertos, y, mientras esperamos la venida gloriosa,te ofrecemos, Dios fiel y misericordioso,la víctima que reconcilia a los hombres contigo.

C1Mira bondadosamente, Padre misericordioso, a quienes unes a ti por el sacrificio de tu Hijo,y concédeles, por la fuerza del Espíritu Santo,que, participando de un mismo pan y de un mismo cáliz, formen en Cristo un solo cuerpo,en el que no haya ninguna división.

C2Guárdanos siempreen comunión de fe y amorcon nuestro Papa N., y con nuestro Obispo N

Ayúdanos a esperar la venida de tu reino hasta la hora en que nos presentemos a ti, santos entre los santos del cielo,con María, la Virgen Madre de Dios, San José con los apóstoles y con todos los santos,y con nuestros hermanos difuntos,que confiamos humildemente a tu misericordia.

Entonces, liberados por fin de toda corrupcióny constituidos plenamente en nuevas criaturas, te cantaremos gozosos la acción de gracias

Junta las manos.de tu Ungido, que vive eternamente.

8. Toma la patena con el pan consagrado y el cáliz, los eleva, y dice:

CP o CCPor Cristo, con él y en él,a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloriapor los siglos de los siglos.

El pueblo aclama:Amén.

• RITO DE COMUNIÓN.

Una vez depositados el cáliz y la patena sobre el altar, el sa-cerdote, con las manos juntas dice:

Page 11: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

11

Fieles a la recomendación del Salvador y siguiendo su divina enseñanza,nos atrevemos a decir:

Extiende las manos y, junto con el pueblo, continúa:

Padre nuestro, que estás en el cielo,santificado sea tu Nombre;venga a nosotros tu reino;hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día;perdona nuestras ofensas,como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden;no nos deje caer en tentación, y líbranos del mal.

Solo el sacerdote, con las manos extendidas,

prosigue diciendo:

Líbranos de todos los males, Señor,y concédenos la paz en nuestros días, para que, ayudados por tu misericordia, vivamos siempre libres de pecadoy protegidos de toda perturbación, mientras esperamos la gloriosa venida de nuestro Salvador Jesucristo.

Junta las manos

El pueblo concluye la oración, aclamando:

Tuyo es el reino,tuyo es el poder y la gloria, por siempre, Señor.

Después el sacerdote, con las manos extendidas, dice en voz alta:

Señor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles: “La paz les dejo, mi paz les doy”,no tengas en cuenta nuestros pecados, sino la fe de tu Iglesiay, conforme a tu palabra, concédele la paz y la unidad.

Junta las manos.

Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.

El pueblo responde:

Amén.

El sacerdote, vuelto hacia el pueblo, extendiendo y juntando las manos, añade:

La paz del Señor esté siempre con ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

Luego, si se juzga oportuno, el sacerdote añade:

Dense fraternalmente la paz.

Después toma el pan consagrado, lo parte sobre la patena y pone una partícula dentro del cáliz, diciendo en secreto:

El Cuerpo y la Sangre de nuestro Señor Jesucris-to, unidos en este cáliz,sean para nosotros alimento de vida eterna.

Mientras tanto se canta o se dice:

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mun-do, ten piedad de nosotros.Cordero de Dios, que quitas el pecado del mun-do, ten piedad de nosotros.Cordero de Dios, que quitas el pecado del mun-do, danos la paz.

El sacerdote hace genuflexión, toma el pan consagrado y, sosteniéndolo un poco elevado sobre la patena o sobre el cáliz, de cara al pueblo, dice con voz clara:Éste es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Dichosos los invitados a la mesa del Señor.

Y, juntamente con el pueblo añade:

Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.

ANTIFONA DE COMUNIÓN:

“Yo los amo a ustedes como el Padre me ama a mí; permanezcan, pues, en el amor que les tengo” (Juan 15,9)

Luego de la comunión, el sacerdote de pie en el altar o en la sede hace la oración.

ORACIÓN POST COMUNIÓN:

Dios omnipotente y eterno, que nos has alimen-tado con los dones de tu caridad sin límites, haz

Page 12: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

12

que gocemos de los beneficios de tu salvación y vivamos siempre en acción de gracias. Por Jesu-cristo nuestro Señor. Amén

ORACIÓN ANTES DE LA BENDICIÓN

Dios de la viuda, del huérfano y del extranjero,nos has enseñado el camino de la justicia.Ayúdanos a seguir tu camino haciendo justicia como culto dirigido a ti.Como cristianos unidos, haz que podamos dar-te culto no solo con nuestros corazones y nues-tras mentes, sino también con nuestras obras.Que el Espíritu Santo nos ayude y nos guíe para trabajar por la justicia donde sea que estemos,para que muchas personas puedan ser fortale-cidas por nuestros actos.En el nombre de Jesús. Amén.

BENDICIÓN SOLEMNE

El Señor los bendiga y los proteja.R. AménIlumine su rostro sobre ustedes y les tenga mi-sericordia.R. AménVuelva a ustedes su mirada y les conceda la paz.R. AménY la bendición de Dios todopoderoso,Padre, Hijo + y Espíritu Santodescienda sobre ustedes y permanezca siempre.R. Amén

Segundo Día: Digan simplemente: «sí» o «no» (Mateo 5, 37)

• MONICIÓN DE ENTRADAEsta celebración está dirigida a rezar por los her-manos cristianos de la Iglesia Luterana. Los lute-ranos forman la primera iglesia protestante que emergió, primero en Alemania, como resulta-do del movimiento de la reforma iniciado por el monje agustino Martín Lutero. Que nuestra ora-ción fortalezca nuestra mutua adhesión firme a la Palabra de Dios como fuente segura de unidad.

ANTÍFONA DE ENTRADA“Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu,así como Dios los ha llamado a una sola espe-ranza.Hay un solo Señor, una sola Fe, un solo Bautismo;

hay un solo Dios y Padre de todos, que está so-bre todos, actúa por medio de todos y está en todos” (Ef 4,4-6)

• RITOS INICIALES

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan con la señal de la cruz, mientras el sacerdo-te, vuelto hacia el pueblo, dice:

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo

El pueblo responde:

Amén.

Después el sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pue-blo diciendo:

La gracia de nuestro Señor Jesucristo,El amor del PadreY la comunión del Espíritu Santo Estén con to-dos ustedes.

El pueblo responde:Y con tu espíritu.

ACTO PENITENCIAL

• Señor, Rey y Padre no engendrado, Verda-dera Esencia de Dios, ten piedad de noso-tros.

• SEÑOR TEN PIEDAD DE NOSOTROS• Cristo, Verdadero Dios y Verdadero Hom-

bre, ten piedad de nosotros.• CRISTO TEN PIEDAD DE NOSOTROS• Señor, Espíritu vivificador y poder de vida,

ten piedad de nosotros.• SEÑOR TEN PIEDAD DE NOSOTROS

Sigue la absolución del sacerdote:

Dios todopoderosotenga misericordia de nosotros, perdone nues-tros pecados y nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén.

• ORACIÓN COLECTADios creador y Padre, que reúnes a los disper-sos y los cuidas en la unidad, mira con bondad

Page 13: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

13

el rebaño de tu Hijo, para que cuantos están consagrados por un solo bautismo formen una sola familia en el vínculo del amor y de la fe ver-dadera. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo que es Dios, y vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén

• LITURGIA DE L A PALABRA

PRIMERA LECTURA

Lectura de la Carta a los Efesios (4, 22-25).

“Despójense, en cuanto su vida anterior, del hom-bre viejo que se corrompe siguiendo la seducción de las concupiscencias, renueven el espíritu de su mente, y revístanse del Hombre Nuevo, creado se-gún Dios, en la justicia y santidad de la verdad. Por lo tanto, desechando la mentira, digan la verdad unos a otros, pues somos miembros unos de otros”. Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIALDel salmo 50

R. Crea en mi Señor un corazón puro.

Por tu inmensa compasión y misericordia,Señor, apiádate de mí y olvida mis ofensas.Lávame bien de todos mis delitosy purifícame de mis pecados. R.

Crea en mí Señor, un corazón puro,un espíritu nuevo para cumplir tus mandamientos.No me arrojes, Señor, lejos de ti,ni retires de mí tu santo espíritu. R.

Señor, abre mis labiosy cantará mi boca tu alabanza.Un corazón contrito te presento,y a un corazón contrito, tú nunca lo desprecias. R.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, Aleluya.“Te pido que todos ellos estén unidos; que como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, también ellos estén en nosotros para que el mundo crea que Tú me enviaste” (Juan 17,21)R. Aleluya, Aleluya.

Lectura del santo Evangelio según san Ma-teo (5, 33-37).

“Han oído que se dijo a los antepasados: No jura-rás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos” Pues yo les digo que no juren en modo alguno: ni por el Cielo, porque es el trono de Dios, ni por la Tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Je-rusalén, porque es la ciudad del gran Rey. Ni tam-poco jures por tu cabeza, porque ni a uno solo de tus cabellos puedes hacerlo blanco o negro. Sea su lenguaje: “Sí, Sí” “no, no”; porque lo que pasa de aquí viene del Maligno. Palabra del Señor.

◊ REFLEXIÓN

La violencia contra otros seres humanos no se ejerce solo a través de las agresiones físicas y el latrocinio, sino también por medio de las habla-durías y los rumores maliciosos. Los medios de comunicación social hacen más fácil que las men-tiras se difundan instantáneamente a una gran audiencia. Los cristianos de Indonesia son cons-cientes de cómo esto ha llevado a que, a veces los grupos religiosos, también cristianos, hayan di-fundido mentiras y prejuicios contra otros grupos religiosos. El temor y la amenaza de represalias pueden hacer a las personas temerosas a la hora de tomar partido por la verdad y pueden llevar a que se mantengan en silencio ante afirmaciones injustas y falsas que pretenden causar miedo.Jesús dijo claramente: «Decid simplemente “sí” o “no”; todo lo que se diga de más procede del maligno». La mentira destruye las buenas rela-ciones entre las personas y entre los grupos, también entre las Iglesias. El engaño quebranta la unidad de la Iglesia. La Carta a los Efesios nos recuerda que somos miembros unos de otros. Esto implica una llamada a los cristianos a ser honestos y responsables hacia los demás, para que puedan crecer en comunión. Si hacemos esto, no será el espíritu del maligno el que esté con nosotros, sino el Espíritu Santo de Dios.

SE DICE EL CREDO: NICENOCOSTANTINOPOLITANO

ORACIÓN DE LOS FIELES

Rogamos al Padre, en el Hijo y por el Espíritu Santo, por las necesidades de los discípulos de Jesús, de nuestro mundo y de nosotros mis-mos. Roguemos por la unidad de todos los cris-tianos. Respondemos: Que todos seamos uno.

• Roguemos por los responsables de nues-tras iglesias y comunidades de fe, para que

Page 14: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

14

todos perseveremos en la oración, dejemos dilatarse nuestros corazones al Espíritu de Unidad y demos los pasos para una fraterni-dad creciente entre los seguidores de Jesús. Oremos al Señor.

• Roguemos por todos los bautizados, para que sean capaces de orar sin cesar, a fin de “que todos sean uno… y que el mundo crea”. Oremos al Señor.

• Por las iglesias y comunidades de fe, amena-zadas por las divisiones y cismas, para que el Espíritu Santo sea la fuerza para la uni-dad. Oremos al Señor.

• Por los consejos de iglesias de todas partes del mundo, a nivel nacional y local, para que el trabajo que realizan juntos sea un testimonio del Evangelio en el mundo. Oremos al Señor.

Oh Padre, paciente y misericordioso, que eres bueno con todos tus hijos, escucha con bene-volencia nuestra oración, muéstrate providente hacia cuantos viven en necesidad y ayúdanos a no separarnos nunca de tu Hijo Jesucristo. Él vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.

• LITURGIA EUCARÍSTICA.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS:Oh Padre que en el único sacrificio de tu Hijo te has adquirido un pueblo de adopción, concede y custodia siempre en tu Iglesia los dones de la unidad y de la paz. Por Jesucristo nuestro Se-ñor. Amén

PLEGARIA EUCARÍSTICAJesús, que pasó haciendo el bien

V. El Señor esté con ustedes.R. Y con tu espíritu.

V. Levantemos el corazón.R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

CPEn verdad es justo y necesario, es nuestro de-ber y salvación, darte gracias siempre y en todo lugar,Padre misericordioso y Dios fiel:

Porque nos diste como Señor y redentor nuestro a tu Hijo Jesucristo.

Él siempre se mostró misericordioso con los pequeños y los pobrescon los enfermos y los pecadores,y se hizo cercano a los oprimidos y afligidos.

Él anunció al mundo, con palabras y obras, que tú eres Padrey que cuidas de todos tus hijos.

Por eso, con los Ángeles y todos los Santos,te alabamos, te bendecimos,y cantamos sin cesar el himno de tu gloria:

Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios de Univer-so. Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.Hosanna en el cielo.Bendito el que viene en nombre del Señor. Ho-sanna en el cielo.

2. El sacerdote, con las manos extendidas, dice: CP

Santo eres en verdad y digno de gloria,Dios que amas a los hombres,que siempre estás con ellos en el camino de la vida. Bendito es, en verdad, tu Hijo,que está presente en medio de nosotros cuan-do somos congregados por su amor,y como hizo en otro tiempo con sus discípulos,nos explica las Escrituras y parte para nosotros el pan.

3. Junta las manos y, manteniéndolas extendi-das sobre las ofrendas, dice:

CCPor eso te rogamos, Padre misericordioso, que envíes tu Espíritu Santopara que santifique estos dones de pan y vino,

Junta las manos y traza el signo de la cruz sobre el pan y el cáliz conjuntamente, diciendo:de manera que se conviertan para nosotros en el Cuerpo y + la Sangre

Junta las manos.de Jesucristo, nuestro Señor.

4. En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor deben pronunciarse claramente y con precisión, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.

Page 15: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

15

Él mismo, la víspera de su Pasión, en la noche de la Última Cena,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó pan, te bendijo, lo partióy se lo dio a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.

TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO,QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego so-bre la patena y lo adora, haciendo genuflexión.

5. Después prosigue:Del mismo modo, acabada la cena,

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue:tomó el cáliz,te dio graciasy lo pasó a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL,PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADAPOR USTEDES Y POR MUCHOSPARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora, haciendo genuflexión.

6. Luego dice:CPÉste es el Misterio de la fe.

O bien:Éste es el Sacramento de nuestra fe.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Anunciamos tu muer-te, proclamamos tu resurrección.¡Ven, Señor Jesús!

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo nos redimió.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Cada vez que come-mos de este pan y bebemos de este cáliz, anun-ciamos tu muerte, Señor, hasta que vuelvas.

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo se entregó por nosotros.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Salvador del mundo, sálvanos,que nos has liberado por tu cruz y resurrección.

7. Después el sacerdote, con las manos exten-didas, dice: CCPor eso, Padre Santo,al celebrar el memorial de Cristo, tu Hijo, nuestro Salvador, a quien por su pasión y muerte en cruzllevaste a la gloria de la resurrección y lo sentaste a tu derecha, anunciamos la obra de tu amor, hasta que él venga,y te ofrecemos el pan de vida y el cáliz de bendición.

Mira con bondad la ofrenda de tu Iglesia,en la que se hace presente el sacrificio pascual de Cristo que se nos ha confiado,y concédenos, por la fuerza del Espíritu de tu amor, ser contados ahora y por siempreentre el número de los miembros de tu Hijo, cuyo Cuerpo y Sangre comulgamos.

C1Lleva a tu Iglesia, Señor,a la perfección en la fe y en la caridad,con nuestro papa N., y nuestro Obispo N.*, con los demás obispos, presbíteros y diáconos, y todo tu pueblo.

Abre nuestros ojospara que conozcamos las necesidades de los hermanos; inspíranos las palabras y las obraspara confortar a los que están cansados y agobia-dos; haz que podamos servirlos con sinceridad,siguiendo el ejemplo y el mandato de Cristo.Que tu Iglesia sea un vivo testimonio de verdad y libertad,de paz y justicia,para que todos los hombres se animen con una nueva esperanza.

Page 16: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

16

C2Acuérdate de nuestros hermanos (N. y N.), que se durmieron en la paz de Cristoy de todos los difuntos, cuya fe sólo Tú conociste:admítelos a contemplar la luz de tu rostroy dales la plenitud de la vida en la resurrección.

Y, terminada nuestra peregrinación por este mundo, concédenos, también,llegar a la morada eternadonde viviremos siempre contigoy allí, con santa María, la Virgen Madre de Dios, San José, con los apóstoles y los mártires,(con san N. santo del día o patrono) y en comunión con todos los santos,te alabaremos y te glorificaremos

Junta las manos.por Jesucristo, Señor nuestro.

8. Toma la patena con el pan consagrado y el cáliz, los eleva, y dice: CP o CC

Por Cristo, con él y en él,a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloriapor los siglos de los siglos.

El pueblo aclama:Amén.

PADRE NUESTRO / PAZ ANTÍFONA DE COMUNIÓN“Yo no voy a seguir en el mundo, pero ellos sí van a seguir en el mundo, mientras que yo me voy para estar contigo. Padre santo, cuídalos con el poder de tu nombre, el nombre que me has dado, para que estén completamente uni-dos, como tú y yo” (Juan 17,11).

ORACIÓN POST COMUNIÓN

Oh Padre, esta comunión eucarística, signo de nuestra fraternidad en Cristo, santifique en el vínculo del amor tu Iglesia. Por Cristo nuestro Señor. Amén

ORACIÓN ANTES DE LA BENDICIÓN

Dios de justicia,danos sabiduría para distinguir lo bueno de lo malo.Haz que nuestros corazones sean guiados por

la rectitud y que nuestros labios digan la verdad.Danos el valor de ser honestos también cuando otros nos atacan.No dejes que difundamos mentiras.Haznos, más bien, instrumentos de unidad y de paz,difundiendo buenas noticias para todos los pueblos.Lo pedimos en el nombre de tu Hijo, Jesucristo. Amén.

BENDICIÓN SOLEMNELa paz de Dios que supera toda inteligencia, guarde sus corazones y sus pensamientosen el conocimiento y en el amor de Dios y de su Hijo Jesucristo, nuestro Señor.R. AménY la bendición de Dios todopoderoso,Padre, Hijo + y Espíritu Santodescienda sobre ustedes y permanezca siem-pre.R. Amén

Tercer Día: El Señor es clemente y compasivo(Salmo 145, 8)

• MONICIÓN DE ENTRADAEste día ofrecemos nuestra oración por los her-manos anglicanos. El Rey Enrique VIII de Inglate-rra fue quien dio comienzo a la iglesia anglicana en su país, alejándose, cada vez más de la Igle-sia Católica y provocando un cisma que dividió a los cristianos. Que nuestra oración apoyada en el mismo Credo de los Apóstoles que reci-tamos, y la intercesión de los santos a quienes aceptamos como intercesores y modelos nos ayuden a trabajan en conjunto para lograr la tan anhelada unión.

ANTÍFONA DE ENTRADA“A ti clamo, Señor: escúchame.Ten compasión de mí, respóndeme!No te escondas de mí! No me rechaces con ira!Mi única ayuda eres Tú!No me dejes solo y sin amparo, pues tu eres mi Dios y salvador”(Sal 27 [26], 7.9)

Page 17: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

17

• RITOS INICIALES

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan con la señal de la cruz, mientras el sacerdo-te, vuelto hacia el pueblo, dice:

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo

El pueblo responde:

Amén.Después el sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pue-blo diciendo:

La gracia de nuestro Señor Jesucristo,El amor del PadreY la comunión del Espíritu Santo Estén con to-dos ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

• ACTO PENITENCIAL

• Pedimos perdón a Dios y al prójimo por las divisiones que han obstaculizado el testimo-nio cristiano. Señor, hemos pecado contra ti y contra el prójimo. Señor, ten piedad.

• SEÑOR TEN PIEDAD

• Oh Cristo, nuestras divisiones son contra-rias a tu voluntad y nos han impedido dar un testimonio conjunto. Cristo, ten piedad.

• CRISTO TEN PIEDAD

• Señor, no te hemos amado suficientemente en nuestros hermanos y hermanas, creados a tu imagen y semejanza aunque somos di-ferentes. Señor, ten piedad.

• SEÑOR TEN PIEDAD

Sigue la absolución del sacerdote:

Dios todopoderosotenga misericordia de nosotros, perdone nues-tros pecadosy nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén.

• ORACIÓN COLECTA

Oh Padre, que hiciste de nosotros un pueblo profético y sacerdotal, llamado a ser signo vi-sible de la nueva realidad de tu Reino, concé-denos vivir en plena comunión contigo en el sacrificio de alabanza y en el servicio a los her-manos, para ser misioneros y testigos del Evan-gelio. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que es Dios, y vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén

• LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro del Isaías (55,6-9).“Busquen a Yahveh mientras se deja encontrar, llámenlo mientras está cercano. Deje el malo su camino, el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Yahveh, que tendrá compasión de él, a nuestro Dios, que será grande en perdonar. Porque no son mis pensamientos sus pensamien-tos, ni los caminos de ustedes son mis caminos - oráculo de Yahveh -. Porque cuanto aventajan los cielos a la tierra, así aventajan mis caminos a los de ustedes y mis pen-samientos a los de ustedes”Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIALDel salmo 144 (8-14)

R. El Señor es justo y bondadoso.

El Señor es compasivo y misericordioso,lento para enojarse y generoso para perdonar. Bueno es el Señor para con todosy su amor se extiende a todas sus creaturas. R.

Que te alaben, Señor, todas tus obrasy que todos tus fieles te bendigan.Que proclamen la gloria de tu reinoy den a conocer tus maravillas. R.

Que muestren a los hombres tus proezas,el esplendor y la gloria de tu reino.Tu reino, Señor, es para siempre,y tu imperio, por todas las generaciones. R.

El Señor es siempre fiel a sus palabrasy bondadoso en todas sus acciones.Da su apoyo el Señor al que tropiezay al agobiado alivia. R.

Page 18: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

18

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, Aleluya.“Pero la semilla que cayó en buena tierra, son las personas que con corazón bueno y dispuesto escuchan y hacen caso del mensaje y, permane-ciendo firmes, dan una buena cosecha” (Lc 8,15)R. Aleluya, Aleluya.

Lectura del santo Evangelio según san Ma-teo (1, 1-17).Libro del origen de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham:Abraham engendró a Isaac, Isaac engendró a Ja-cob, Jacob engendró a Judá y a sus hermanos,Judá engendró de Tamar, a Fares y a Zara, Fares engendró a Esrón, Esrón engendró a Arán,Arán engendró a Aminadab, Aminadab engendró a Naassón, Naassón engendró a Salmón,Salmón engendró, de Rajab, a Booz, Booz engen-dró, de Rut, a Obed, Obed engendró a Jesé,Jesé engendró al rey David. David engendró, de la que fue mujer de Urías, a Salomón, Salomón en-gendró a Roboán, Roboán engendró a Abiá, Abiá engendró a Asaf,Asaf engendró a Josafat, Josafat engendró a Joram, Jorán engendró a Ozías,Ozías engendró a Joatán, Joatán, engendró a Acaz, Acaz engendró a Ezequías,Ezequías engendró a Manasés, Manasés engendró a Amón, Amón engendró a Josías,Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando la deportación a Babilonia.Después de la deportación a Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel engendró a Zoro-babel,Zorobabel engendró a Abiud, Abiud engendró a Eliaquín, Eliaquín, engendró a Azor,Azor engendró a Sadoc, Sadoc engendró a Ajín, Ajín engendró a Eliud,Eliud engendró a Eleazar, Eleazar engendró a Ma-tán, Matán engendró a Jacob, y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la que nació Jesús, lla-mado Cristo.Así que el total de las generaciones son: desde Abraham hasta David, catorce generaciones; des-de David hasta la deportación a Babilonia, cator-ce generaciones; desde la deportación a Babilonia hasta Cristo, catorce generaciones.Palabra del Señor.

◊ REFLEXION

«El Señor es bueno con todos, su amor llega a todas sus obras», dice el salmista, proclamando que el amor de Dios supera las fronteras de la etnicidad, la cultura, la raza y también la religión. La genealogía de Jesús que encontramos en el Evangelio de Mateo refleja esta visión amplia. Mientras que las culturas antiguas con frecuen-cia veían a las mujeres como inferiores, o como propiedad de sus padres y maridos, Mateo men-ciona cuatro mujeres entre los antepasados de Jesús, y dos de ellas, Rut y Rajab, eran gentiles. Otros tres de los antepasados en la lista eran conocidos por sus pecados, incluyendo al adúl-tero rey David. El hecho de que se les nombre en la genealogía de Jesús y se les haga formar parte de la historia humana de Dios proclama que Dios incluye a todos, hombres y mujeres, pecadores y justos, en su plan de salvación, sin tener en cuenta su procedencia.Indonesia es un país con más de 17 000 islas y 1340 grupos étnicos distintos, y las Iglesias es-tán frecuentemente divididas según estas dife-rencias étnicas. Esta exclusividad puede llevar a que algunas se consideren las únicas posee-doras de la verdad, quebrantando así la unidad de la Iglesia. En medio del creciente fanatismo étnico y religioso y el aumento de la intolerancia en el mundo, los cristianos pueden prestar un servicio a la familia humana uniéndose para dar testimonio del amor de Dios que todo lo abar-ca, proclamando con el salmista que «el Señor es clemente y compasivo» con todos.

SE DICE EL CREDO: NICENOCOSTANTINOPOLITANO

ORACIÓN DE LOS FIELESHaznos dignos, Señor Dios nuestro, de encon-trar la paz de nuestras almas y de colmar es-piritualmente nuestros corazones con el vino nuevo de tu Paráclito. Respondemos: Señor es-cúchanos

• Por los diálogos ecuménicos entre nuestras iglesias y comunidades de fe a todos los ni-veles, para que lo que nos divide se supere por la sabiduría, la caridad, la verdad, el diá-logo y amistad. Oremos

• Por aquellos que están agobiados, espe-cialmente los pobres, los refugiados y los marginados, para que encuentren acogida y apoyo en nuestras comunidades. Oremos

Page 19: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

19

• Por los cristianos perseguidos, para que ex-perimenten el apoyo de toda la Iglesia, por medio de la oración y de la ayuda material. Oremos

• Por los responsables de las naciones, para que se comprometan con decisión a poner fin al comercio de las armas, que causa tan-tas víctimas inocentes. Oremos

• Por nuestros hermanos que se han aleja-do de la fe, para que, a través de nuestra oración y el testimonio evangélico, puedan redescubrir la cercanía del Señor misericor-dioso y la belleza de la vida cristiana. Ore-mos

• Por todos los cristianos, para que, fieles a las enseñanzas del Señor, contribuyan con la oración y la caridad fraterna, a restable-cer la plena comunión eclesial, colaborando para responder a los desafíos actuales de la humanidad. Oremos

Que Dios, nuestro Padre, nos escuche y res-ponda a nuestras incesantes oraciones, por Je-sucristo nuestro Señor. Amén

• LITURGIA EUCARÍSTICA.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS:Oh Dios, que en el pan y en el vino ofreces al hombre la comida que lo alimenta y el sacra-mento que lo renueva, haz que nunca nos falte el sustento del cuerpo y del espíritu. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

PLEGARIA EUCARÍSTICADIOS GUÍA A SU IGLESIA POR EL CAMINO DE SALVACIÓN

V. El Señor esté con ustedes.R. Y con tu espíritu.

V. Levantemos el corazón.R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

CPEn verdad es justo y necesario, es nuestro de-ber y salvación, darte gracias siempre y en todo lugar,Señor, Padre santo,creador del mundo y fuente de toda vida:

Porque no abandonas nunca la obra de tu sa-biduríasino que obras con tu providencia en medio de nosotros.Guiaste a tu pueblo Israel por el desierto con mano poderosa y brazo extendido;ahora acompañas a tu Iglesia, peregrina en el mundo, con la fuerza constante del Espíritu Santoy la conduces por el camino de la vida temporal hacia el gozo eterno de tu reino,por Cristo, Señor nuestro.

Por eso, también nosotros con los ángeles y los santos, cantamos el himno de tu gloria,diciendo sin cesar:

Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Univer-so. Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.Hosanna en el cielo.

Bendito el que viene en nombre del Señor. Ho-sanna en el cielo.

2. El sacerdote, con las manos extendidas, dice: CP

Santo eres en verdad y digno de gloria,Dios que amas a los hombres,que siempre estás con ellos en el camino de la vida. Bendito es, en verdad, tu Hijo,que está presente en medio de nosotros cuan-do somos congregados por su amor,y como hizo en otro tiempo con sus discípulos,nos explica las Escrituras y parte para nosotros el pan.

3. Junta las manos y, manteniéndolas extendi-das sobre las ofrendas, dice:

CCPor eso te rogamos, Padre misericordioso, que envíes tu Espíritu Santopara que santifique estos dones de pan y vino,

Junta las manos y traza el signo de la cruz sobre el pan y el cáliz conjuntamente, diciendo:de manera que se conviertan para nosotros en el Cuerpo y + la Sangre

Junta las manos.de Jesucristo, nuestro Señor.

Page 20: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

20

4. En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor deben pronun- ciarse claramente y con precisión, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.

Él mismo, la víspera de su Pasión,en la noche de la Última Cena,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó pan, te bendijo, lo partióy se lo dio a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO,QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego so-bre la patena y lo adora, haciendo genuflexión.

5. Después prosigue:

Del mismo modo, acabada la cena,

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó el cáliz, te dio gracias y lo pasó a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL,PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADAPOR USTEDES Y POR MUCHOSPARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora, haciendo genuflexión.

6. Luego dice:

CPÉste es el Misterio de la fe.

O bien:Éste es el Sacramento de nuestra fe.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Anunciamos tu muer-te, proclamamos tu resurrección.¡Ven, Señor Jesús!

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo nos redimió.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Cada vez que comemos de este pan y bebemos de este cáliz, anunciamos tu muerte, Señor, hasta que vuelvas.

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo se entregó por nosotros.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Salvador del mundo, sálvanos,que nos has liberado por tu cruz y resurrección.

7. Después el sacerdote, con las manos exten-didas, dice: CC

Por eso, Padre Santo,al celebrar el memorial de Cristo, tu Hijo, nues-tro Salvador, a quien por su pasión y muerte en cruzllevaste a la gloria de la resurrección y lo sentas-te a tu derecha, anunciamos la obra de tu amor, hasta que él venga,y te ofrecemos el pan de vida y el cáliz de ben-dición.

Mira con bondad la ofrenda de tu Iglesia,en la que se hace presente el sacrificio pascual de Cristo que se nos ha confiado,y concédenos, por la fuerza del Espíritu de tu amor, ser contados ahora y por siempreentre el número de los miembros de tu Hijo, cuyo Cuerpo y Sangre comulgamos.

C1Fortalécenos en la unidad, Señor,a los que hemos sido invitados a tu mesa:para que con nuestro Papa N., y nuestro Obis-po N., con los demás obispos, presbíteros y diá-conos,y todo tu pueblo,caminemos por tus sendas en la fe y la espe-ranza, y manifestemos al mundo la alegría y la confianza.

C2Acuérdate de nuestros hermanos (N. y N.), que se durmieron en la paz de Cristo

Page 21: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

21

y de todos los difuntos, cuya fe sólo tú conociste:admítelos a contemplar la luz de tu rostroy dales la plenitud de la vida en la resurrección.Y, terminada nuestra peregrinación por este mundo, concédenos, también,llegar a la morada eternadonde viviremos siempre contigoy allí, con santa María, la Virgen Madre de Dios, San José con los apóstoles y los mártires,(con san N. santo del día o patrono) y en comunión con todos los santos, te alabaremos y te glorificaremos

Junta las manos.por Jesucristo, Señor nuestro.

8. Toma la patena con el pan consagrado y el cáliz, los eleva, y dice: CP o CC

Por Cristo, con él y en él,a ti, Dios Padre omnipotente,en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloriapor los siglos de los siglos.

El pueblo aclama:Amén

PADRE NUESTRO / PAZ ANTÍFONA DE CO-MUNIÓN

“El campo es el mundo. La buena semilla repre-sentaa los que son del Reino, y la mala hierbarepresenta a los que son del maligno.Entonces, los justos brillarán como el solEn el reino de su Padre” (Mt 13,38.43).

ORACIÓN POST COMUNIÓN

Padre, Hijo y Espíritu Santo, único Dios,te alabamos por tu inmensa gloria manifestada en toda la creación.Danos un corazón grande para abrazar a todos los que son discriminados.Ayúdanos a crecer en el amor más allá del pre-juicio y la injusticia.Danos la gracia para respetar la unicidad de cada persona,para que en nuestra diversidad podamos expe-rimentar la unidad.Esto pedimos en tu santo nombre. Amén.

ORACIÓN ANTES DE LA BENDICIÓN

Por tu gracia divina, Señor,restaura nuestra mente y nuestro cuerpo.Crea en nosotros un corazón limpio y una men-te pura para que podamos dar gloria a tu Nombre.Que tu Iglesia se mantenga unida en un mismo propósito para la santificación de tu pueblo.Te lo pedimos por medio de Jesucristo, Tu Hijoque vive y reina contigo,en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

BENDICIÓN SOLEMNE

Dios omnipotente con su misericordia los ben-diga, y les infunda el afecto de la sabiduría que salva.R. AménLes conceda crecer siempre en la feY les dé perseverancia en el obrar con santidad.R. AménDirija sus pasos hacia ély les muestre el camino del amor y de la paz.R. AménY la bendición de Dios todopoderoso,Padre, Hijo + y Espíritu Santodescienda sobre ustedes y permanezca siem-pre.R. Amén

Cuarto Día: Conténtense con lo que tienen (Hebreos 13, 5)

• MONICION DE ENTRADA

En esta Eucaristía ofrecemos nuestra oración por los hermanos de la Iglesia Metodista, tiene sus orígenes en Inglaterra, cuando un grupo de cristianos encabezados por John Wesley, su her-mano más joven Charles Wesley y George Whi-tefield buscaban la forma de renovar la Iglesia de Inglaterra en el siglo XVIII, por medio de un estudio centrado en la Biblia, un acercamiento metódico a las Escrituras y la relación e impac-to de éstos con la vida cotidiana del creyente. Que nuestro mutuo deseo de santificación nos ayude a ser dóciles al Espíritu de Dios y forje en notros la unidad.

Page 22: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

22

ANTIFONA DE ENTRADA

“Canten al Señor una canción nueva; canten al Señor habitantes de toda la tierra.Hay gran esplendor en su presencia! Hay poder y belleza en su santuario!” (Sal 96 [95], 1.6)

• RITOS INICIALES

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan con la señal de la cruz, mientras el sacerdo-te, vuelto hacia el pueblo, dice:

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo

El pueblo responde:

Amén.Después el sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pue-blo diciendo:

La gracia de nuestro Señor Jesucristo,El amor del PadreY la comunión del Espíritu Santo Estén con to-dos ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

• ACTO PENITENCIAL

• Por tantas ocasiones que no hemos recono-cido el don de Dios en los hermanos: ¡Señor, ten piedad!

• SEÑOR TEN PIEDAD• Por vivir demasiado centrados en nosotros

mismos para compartir las maravillas de este mensaje de vida con los demás. ¡Cristo ten piedad!

• CRISTO TEN PIEDAD• Por permitir fácilmente que permanezcan

divisiones y rencillas entre nosotros. ¡Perdó-nanos, Señor! ¡Señor, ten piedad!

• SEÑOR TEN PIEDAD

Sigue la absolución del sacerdote:

Dios todopoderosotenga misericordia de nosotros, perdone nues-tros pecados y nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén.

• ORACIÓN COLECTA

“Oh Dios, que fundaste a tu Iglesia sobre la fe de los Apóstoles, haz que nuestras comunida-des, iluminadas por tu Palabra y unidas en el vínculo de tu amor, se hagan signo de salvación y de esperanza para todos aquellos que desde las tinieblas anhelan a tu luz. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que es Dios y vive y reina con-tigo, en la unidad del Espíritu Santo, por todos los siglos de los siglos. Amén

• LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Lectura de la carta a los Hebreos (13, 1-5).“Que el amor fraterno perdure. No olviden la hos-pitalidad; gracias a ella hospedaron algunos, sin saberlo, a ángeles. Acuérdense de los presos, como si estuvieran presos con ellos, y de los maltratados, pensando que también ustedes tienen un cuerpo. Tengan todos en gran respeto el matrimonio, y el lecho conyugal sin mancha; que a los fornicarios y adúlteros los juzgará Dios. No sean amantes del dinero en su conducta; conténtense con lo que tie-nen, pues él ha dicho: No te dejaré ni te abandonaré. Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIALDel salmo 12

R. El Señor es mi Dios y Salvador.

El Señor es mi Dios y Salvador,con él estoy seguro y nada temo,El Señor es mi protección y mi fuerzay ha sido mi salvación.Sacarán agua con gozode la fuente de la Salvación. R.Den gracias al Señore invoquen su nombre,cuenten a los pueblos sus hazañas,proclamen que su nombre es sublime. R.

Alaben al Señor por sus proezas,anúncienlas a toda la tierra.Griten jubilosos, habitantes de Sión,porque el Dios de Israelha sido grande con nosotros. R.

Page 23: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

23

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, Aleluya.“Les doy este mandamiento nuevo: que se amen los unos a los otros. Así como yo los amo a ustedes, así deben amarse ustedes los unos a los otros” (Juan 13,34)R. Aleluya, Aleluya.

Lectura del santo Evangelio según san Ma-teo (6,25-34).“Por eso les digo: No anden preocupados por su propia vida, qué comerán, ni por su propio cuer-po, con qué se vestirán. ¿No vale más la vida que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? Miren las aves del cielo: no siembran, ni cosechan, ni reco-gen en graneros; y su Padre celestial las alimenta. ¿No valen ustedes más que ellas?” Por lo demás, ¿quién de ustedes puede, por más que se preocupe, añadir una sola hora a la me-dida de su vida? Y del vestido, ¿por qué se preocu-pan? Observen los lirios del campo, cómo crecen; no se fatigan, ni hilan. Pero yo les digo que ni Salo-món, en toda su gloria, se vistió como uno de ellos. Pues si a la hierba del campo, que hoy es y maña-na se echa al horno, Dios así la viste, ¿no lo hará mucho más con ustedes, hombres de poca fe? No anden, pues, preocupados diciendo: ¿Qué vamos a comer?, ¿qué vamos a beber?, ¿con qué vamos a vestirnos? Que por todas esas cosas se afanan los gentiles; pues ya sabe su Padre celestial que tienen necesidad de todo eso. Busquen primero su Reino y su justicia, y todas esas cosas se les darán por añadidura. Así que no se preocupen del mañana: el mañana se preocupará de sí mismo. Cada día tiene bastante con su propia preocupación.”Palabra del Señor.

◊ REFLEXION

El autor de la Carta a los Hebreos advierte con-tra el amor excesivo al dinero y a las cosas ma-teriales. Frente a nuestra tendencia a pensar que nunca tenemos suficiente, el texto nos ha-bla de la providencia de Dios y nos asegura que Dios nunca abandonará la creación. A través de la fecundidad de la tierra, los ríos y los mares, la bondad de Dios ha proveído suficiente comida y agua potable para sostener a todos los seres vivientes y, sin embargo, muchas personas ca-recen de estas necesidades básicas. La fragili-dad humana y la codicia llevan con frecuencia

a la corrupción, a la injusticia, a la pobreza y el hambre. Puede ser tentador que, en lugar de preocuparnos por los demás y compartir con ellos nuestros bienes, acumulemos dinero, comida y recursos naturales para nosotros, o nuestra propia nación o grupo étnico.Sin embargo, Jesús nos enseña que las cosas materiales no deben ser nuestra principal pre-ocupación, sino que debemos buscar primero el reino de Dios y todo cuanto lleva consigo, con-fiando en que el Padre celestial nos proveerá de lo necesario. En los últimos años algunas Igle-sias de Indonesia han ido ofreciendo distintos tipos de ayuda financiera, humana y educativa a Iglesias pequeñas de zonas rurales. Con este ejemplo sencillo y práctico de amor mutuo es-tán dando muestra de unidad con sus hermanos cristianos, que es el don de Dios a su Iglesia. Vivir con más sencillez, sin preocuparnos por ganar más dinero del necesario o por acumular recur-sos para el futuro, puede ayudarnos a hacer de la tierra nuestra casa común, un lugar más justo.

SE DICE EL CREDO: NICENOCOSTANTINOPOLITANO

ORACIÓN DE LOS FIELES

A Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo y Pa-dre nuestro, Dios de la paz y la justicia, Dios del amor y de la vida, supliquemos por el mundo en-tero. Digamos confiados. Te lo pedimos, Padre.

• Para que los cristianos que se desenvuelven en los ámbitos de la organización de pue-blos y naciones, de grandes instituciones, inspiren el espíritu de justicia y solidaridad. Oremos

• Para que los cristianos que viven de la Eu-caristía, sean fermento que transforme las conciencias y el mundo. Oremos

• Para que los cristianos crezcan en la unidad, en número y en espíritu, en sus comunida-des y en la sociedad, en voluntariados socia-les, asociaciones y organizaciones en defen-sa de la vida, de la naturaleza, de la paz y el desarrollo. Oremos

• Para que los cristianos unidos luchen por las víctimas de la represión y la injusticia, y sean éstos defendidos y liberados. Oremos

• Para que realmente nos dejemos configurar por Jesucristo, atendiendo a los migrantes, los jóvenes adictos, los ancianos, los desem-pleados y todos los que sufren. Oremos

Page 24: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

24

Oremos: Acoge, Padre, nuestra súplica y con-cédenos vivir en conformidad con lo que de-seamos y pedimos por nuestro Señor Jesucristo que vive y reina contigo en la unidad del Espí-ritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén.

• LITURGIA EUCARÍSTICA.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS:Acoge nuestros dones, Padre Misericordioso, y conságralos con la potencia de tu Espíritu, que sean para nosotros sacramento de salvación. Por Jesucristo nuestro Señor.

PLEGARIA EUCARÍSTICA DE LA RECONCILIA-CIÓN II

V. El Señor esté con ustedes.R. Y con tu espíritu.

V. Levantemos el corazón.R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

CPEn verdad es justo y necesario darte gracias y alabarte,Dios, Padre todopoderoso,por todo lo que haces en este mundo, por Jesu-cristo, Señor nuestro.

Pues en una humanidad dividida por las enemistades y las discordias, sabemos que tú diriges los ánimospara que se dispongan a la reconciliación.

Por tu Espíritu mueves los corazones de los hombres para que los enemigos vuelvan a la amistad, los adversarios se den la mano,y los pueblos busquen la concordia.

Con tu acción eficaz puedes conseguir, Señor, que el amor venza al odio,la venganza deje paso a la indulgencia,y la discordia se convierta en amor mutuo.Por eso, con los coros celestiales te damos gra-cias continuamentey en la tierra cantamos sin cesar el himno de tu gloria:Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Univer-

so. Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.Hosanna en el cielo.Bendito el que viene en el nombre del Señor. Hosanna en el cielo.

2. El Sacerdote, con las manos extendidas, dice: CP

A ti, Padre omnipotente,te bendecimos por Jesucristo, tu Hijo, que ha venido en tu nombre.Él es la Palabra de salvación para los hombres, la mano que tiendes a los pecadores,el camino que nos conduce a tu paz. Cuando nos habíamos apartado de ti por nuestros pe-cados, Señor,nos reconciliaste contigo,para que, convertidos a ti, nos amáramos unos a otros por tu Hijo, a quien entregaste a la muerte por nosotros.

3. Junta las manos y, manteniéndolas extendi-das sobre las ofrendas, dice:

CCY ahora, celebrando la reconciliación que Cristo nos trajo, te suplicamos que por las efusión de tu Espíritu santifiques estos dones

Junta las manos y traza el signo de la cruz sobre el pan y el cáliz conjuntamente, diciendo:para que se conviertan en el Cuerpo y + la San-gre de tu Hijo, que nos mandó a celebrar estos misterios. Junta las manos.

4. En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor han de pronunciarse claramente y con precisión, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.

Porque él mismo, cuando iba a entregar su vida por nuestra liberación,sentado a la mesa,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó pan en sus manos, y dando gra-cias te bendijo,lo partió y se lo dio a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO,QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Page 25: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

25

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego so-bre la patena y lo adora, haciendo genuflexión.

5. Después prosigue:

Del mismo modo, aquella noche,

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó en sus manos el cáliz de la bendi-ción,y, proclamando tu misericordia, lo pasó a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL, PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADAPOR USTEDES Y POR MUCHOSPARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora, haciendo genuflexión.

6. Luego dice:

CPÉste es el Misterio de la fe.

O bien:Éste es el Sacramento de nuestra fe.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Anunciamos tu muer-te, proclamamos tu resurrección.¡Ven, Señor Jesús!

CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo nos redimió.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Cada vez que come-mos de este pan y bebemos de este cáliz, anun-ciamos tu muerte, Señor, hasta que vuelvas.

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo se entregó por nosotros.Y el pueblo prosigue, aclamando: Salvador del mundo, sálvanos,que nos has liberado por tu cruz y resurrección.

7. Después el sacerdote, con las manos exten-didas, dice: CC

Así, al celebrar el memorialde la muerte y resurrección de tu Hijo, que nos dejó esta prenda de su amor, te ofrecemos lo que tú nos entregaste,el sacrificio de la reconciliación perfecta.Te pedimos humildemente, Padre santo,que nos aceptes también a nosotros, junto con tu Hijo, en este banquete salvífico, concédenos el mismo Espíritu, que haga desaparecer toda enemistad entre nosotros.

C1Que este Espíritu haga de tu Iglesia signo de unidad e instrumento de tu paz entre los hom-bres, y nos guarde en comunión con el Papa N., con nuestro Obispo N., con los demás Obispos y con todo tu pueblo.

C2Recibe en tu reino a nuestros hermanos que se durmieron en el Señor y a todos los difuntos cuya fe sólo tú conociste.Así como nos has congregado ahora, en torno a la mesa de tu Hijo, reúnenos con la gloriosa Virgen María, Madre de Dios, San José, con los apóstoles y con todos los santos.Reúne también a los hombres de toda raza y lengua, en el banquete de la unidad eterna, en los cielos y en la tierra nueva, donde brille la ple-nitud de tu paz.

Junta las manos.por Jesucristo, Señor nuestro.

8. Toma la patena con el pan consagrado y el cáliz, los eleva, y dice: CP o CC

Por Cristo, con él y en él,a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloriapor los siglos de los siglos.

El pueblo responde: Amén.

PADRE NUESTRO / PAZ ANTÍFONA DE CO-MUNIÓN“Les doy este mandamiento nuevo: que se amen los unos a los otros así como yo los he amado, dice el señor” (Juan 13,34)

Page 26: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

26

ORACIÓN POST COMUNIÓN

Dios misericordioso,te damos gracias por tus abundantes dones.Danos la gracia de poder recibir todas las ben-diciones con sencillez y humilde gratitud.Haznos capaces de contentarnos y estar dis-puestos a compartir con los que pasan nece-sidad, para que todos puedan experimentar la unidad en el amor que viene de ti, nuestro Dios Uno y Trino, que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.

ORACIÓN ANTES DE LA BENDICIÓN

Dios de todo consuelo y esperanza, tu resurrec-ción venció la violencia de la cruz.Que como pueblo tuyo podamos ser un signo visible de que la violencia de este mundo será vencida.Esto pedimos en el nombre del Señor resucita-do. Amén.

BENDICIÓN SOLEMNE

El Dios de todo consuelo disponga sus días en su paz y les conceda el don de su bendición.R. AménLos libre de todo peligroy afiance sus corazones en su amor.R. AménPara que, enriquecidos con los dones de la fe, la esperanza y el amor, pasen por la vida haciendo el bieny alcancen la felicidad eterna.R. AménY la bendición de Dios todopoderoso,Padre, Hijo + y Espíritu Santodescienda sobre ustedes y permanezca siempre.R. Amén

Quinto Día: Para llevar a los pobres la buena noticia (Lucas 4, 18)

• MONICIÓN DE ENTRADA

Esta Eucaristía la ofrecemos por nuestros her-manos denominados Evangélicos, son un mo-vimiento transdenominacional dentro del cris-

tianismo protestante que arguye que la esencia del Evangelio consiste en la doctrina de la salva-ción por gracia a través de la fe en la expiación de Jesús de Nazaret. Con ellos creemos en la centralidad de la conversión por la fe en Jesu-cristo que es quien la da, esperamos sincera-mente que esta fe lleve a dar, con la ayuda de Dios y nuestra colaboración con Él y con los de-más, más pasos en el camino de la unidad.

ANTÍFONA DE ENTRADA“Me atacaron cuando yo estaba en desgracia,pero el Señor me dio su apoyo:me sacó a la libertad;me salvó porque me amaba!” (Sal 18 [17], 19-20).

• RITOS INICIALES

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan con la señal de la cruz, mientras el sacerdo-te, vuelto hacia el pueblo, dice:

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo

El pueblo responde:

Amén.Después el sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pue-blo diciendo:

La gracia de nuestro Señor Jesucristo,El amor del PadreY la comunión del Espíritu Santo Estén con to-dos ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

• ACTO PENITENCIAL

• Tú que nos envías a anunciar tu Reino. Se-ñor ten piedad

• SEÑOR TEN PIEDAD

• Tú que nos envías como mensajeros de paz. Cristo ten piedad

• CRISTO TEN PIEDAD

• Tú que nos envías a proclamar la alegría de la salvación. Señor ten piedad

• SEÑOR TEN PIEDAD

Page 27: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

27

Sigue la absolución del sacerdote:Dios todopoderosotenga misericordia de nosotros, perdone nues-tros pecadosy nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén

• ORACIÓN COLECTA

Oh Padre, que en Cristo esposo y señor, llamas la humanidad entera a la alianza nueva y eter-na, haz que en tu Iglesia, reunidas por la celebra-ción del banquete nupcial, todos los hombres puedan conocer y gustar la novedad gozosa del Evangelio. Por nuestro Señor Jesucristo. Tu Hijo, que es Dios, y vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.

• LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro del Profeta Amós (8, 4-8)“Escuchen esto los que pisotean al pobre y quie-ren suprimir a los humildes de la tierra, diciendo: « ¿Cuándo pasará el novilunio para poder vender el grano, y el sábado para dar salida al trigo, para achicar la medida y aumentar el peso, falsifican-do balanzas de fraude, para comprar por dinero a los débiles y al pobre por un par de sandalias, para vender hasta el salvado del grano?» Ha ju-rado Yahveh por el orgullo de Jacob: ¡Jamás he de olvidar todas sus obras! ¿No se estremecerá por ello la tierra, y hará duelo todo el que en ella habi-ta, subirá toda entera como el Nilo, se encrespará y bajará como el Nilo de Egipto?” Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIALDel salmo 118

R. Con todo el corazón, Señor, te busco.

Dichoso el que es fiel a las enseñanzas del Se-ñor y lo busca de todo corazón.Con todo el corazón te voy buscando,no me dejes desviar de tus preceptos. R.

Mi alma se consume,deseando sin cesar tus mandamientos.

He escogido el camino de la lealtada tu voluntad y a tus mandamientos. R.

Mira cómo anhelo tus decretos:dame vida con tu justicia.Honradamente suspiro, Señor,por guardar tus mandamientos. R.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, Aleluya.Jesús, hijo de David, ten compasión de mí.R. Aleluya, Aleluya.

Lectura del santo Evangelio según san Lu-cas (4, 16-21).“Vino a Nazaret, donde se había criado, entró, se-gún su costumbre, en la sinagoga el día de sábado, y se levantó para hacer la lectura. Le entregaron el volumen del profeta Isaías, desenrolló el volumen, y encontró el pasaje donde estaba escrito: El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimi-dos y proclamar un año de gracia del Señor. Enrolló el volumen lo devolvió al ministro, y se sen-tó. En la sinagoga todos los ojos estaban fijos en él. Comenzó, pues, a decirles: «Esta Escritura, que acaban de oír, se ha cumplido hoy.»”Palabra del Señor.

◊ REFLEXIÓN

El profeta Amós criticó a los comerciantes que practicaban el engaño y explotaban a los po-bres para obtener el máximo beneficio. Amós también ponía de relieve como Dios observa estas malas acciones y nunca las olvidará. Dios escucha el grito de las víctimas de la injusticia y jamás abandona a los que son explotados y tratados injustamente.Vivimos en un mundo globalizado en el que la marginación, la explotación y la injusticia proli-feran. La brecha entre los ricos y pobres se hace cada vez más grande. Los logros económicos se vuelven un factor decisivo en las relaciones entre las personas, las naciones y las comuni-dades. Muchas veces los asuntos económicos desencadenan tensiones y conflictos. Es difícil poder disfrutar de la paz si no hay justicia.En virtud de nuestro bautismo común, todos los

Page 28: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

28

cristianos compartimos la misión profética de Je-sús de proclamar la buena noticia a los pobres y a los afligidos, tanto con palabras como con obras. Cuando tomemos conciencia de esta misión, el Espíritu del Señor estará sobre nosotros, dán-donos fuerza para trabajar por la justicia. Nues-tra dignidad de cristianos nos empuja a hablar y actuar de tal forma que las palabras del libro de Isaías que Jesús proclamó en Nazaret se cumplan cada día en la escucha de los que nos rodean.

SE DICE EL CREDO: NICENOCOSTANTINOPOLITANO

ORACIÓN DE LOS FIELES

Hermanos y hermanas, dirigimos nuestra oración común a Dios Padre, para que nos haga verdade-ros discípulos y testigos de Cristo, su Hijo.Respondemos: Señor Jesús, haznos tus testigos

• Por el papa Francisco y nuestros obispos, para que el Señor les de sabiduría y capa-cidad de diálogo para establecer un verda-dero y real camino ecuménico. Roguemos al Señor.

• Por los gobernantes y dirigentes políticos, para que luchen por el bien común y sean solidarios con las realidades y países más pobres. Roguemos al Señor.

• Por nuestros hermanos separados, por el bien de sus iglesias y comunidades, en es-pecial por las que están perseguidas en Oriente Medio. Roguemos al Señor.

• Por nosotros, que el Señor nos ilumine y nos de fuerzas para ser verdaderos misioneros de la unidad. Roguemos al Señor.

Dios de la vida. Tú creaste cada cosa con sabi-duría y amor, abre nuestros corazones al don de tu Espíritu. Él nos haga apóstoles de tu salva-ción. Por Cristo nuestro Señor. Amen.

• LITURGIA EUCARÍSTICA.

ORACION SOBRE LAS OFRENDAS:Acoge nuestros dones, Padre Misericordioso, y conságralos con el poder de tu Espíritu, a fin de transformarlos para nosotros en sacramen-to de salvación. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén

PLEGARIA EUCARÍSTICAJESÚS CAMINO HACIA EL PADRE

V. El Señor esté con ustedes.R. Y con tu espíritu.

V. Levantemos el corazón.R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

CPEn verdad es justo y necesario, es nuestro de-ber y salvación, darte gracias siempre y en todo lugar,Padre santo, Señor del cielo y de la tierra, por Cristo, Señor nuestro,

Porque creaste el mundo por medio de tu Pala-bra y lo gobiernas todo con justicia.Nos diste como mediador a tu Hijo, hecho car-ne, que nos comunicó tus palabrasy nos llamó para que lo siguiéramos; él es el camino que nos conduce a ti, la verdad que nos hace libres,la vida que nos colma de alegría.

Por medio de tu Hijoreúnes en una sola familia a los hombres, crea-dos para gloria de tu nombre, redimidos por su sangre en la cruzy marcados con el sello del Espíritu.

Por eso, ahora y siempre,con todos los ángeles proclamamos tu gloria, aclamándote llenos de alegría:

Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Univer-so. Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.Hosanna en el cielo.Bendito el que viene en nombre del Señor. Ho-sanna en el cielo.

2. El sacerdote, con las manos extendidas, dice:

CPSanto eres en verdad y digno de gloria, Dios que amas a los hombres,que siempre estás con ellos en el camino de la vida. Bendito es, en verdad, tu Hijo,que está presente en medio de nosotros cuan-

Page 29: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

29

do somos congregados por su amor,y como hizo en otro tiempo con sus discípulos,nos explica las Escrituras y parte para nosotros el pan.

3. Junta las manos y, manteniéndolas extendi-das sobre las ofrendas, dice:

CCPor eso te rogamos, Padre misericordioso, que envíes tu Espíritu Santopara que santifique estos dones de pan y vino,

Junta las manos y traza el signo de la cruz sobre el pan y el cáliz conjuntamente, diciendo:de manera que se conviertan para nosotros en el Cuerpo y + la Sangre

Junta las manos.de Jesucristo, nuestro Señor.

4. En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor deben pronunciarse claramente y con precisión, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.

Él mismo, la víspera de su pasión, en la noche de la Última Cena,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue:

tomó pan, te bendijo, lo partióy se lo dio a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO,QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego so-bre la patena y lo adora, haciendo genuflexión.

5. Después prosigue:Del mismo modo, acabada la cena,

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó el cáliz,te dio graciasy lo pasó a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL,PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,

SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADAPOR USTEDES Y POR MUCHOSPARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora, haciendo genuflexión.

6. Luego dice:

CPÉste es el Misterio de la fe.

O bien:Éste es el Sacramento de nuestra fe.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Anunciamos tu muer-te, proclamamos tu resurrección.¡Ven, Señor Jesús!

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo nos redimió.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Cada vez que come-mos de este pan y bebemos de este cáliz, anun-ciamos tu muerte, Señor, hasta que vuelvas.

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo se entregó por nosotros.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Salvador del mundo, sálvanos,que nos has liberado por tu cruz y resurrección.

7. Después el sacerdote, con las manos exten-didas, dice: CC

Por eso, Padre Santo, al celebrar el memorial de Cristo, tu Hijo, nuestro Salvador, a quien por su pasión y muerte en cruz llevaste a la gloria de la resurrección y lo sentaste a tu derecha, anunciamos la obra de tu amor, hasta que él venga, y te ofrecemos el pan de vida y el cáliz de bendición.

Mira con bondad la ofrenda de tu Iglesia, en la que se hace presente el sacrificio pascual de Cristo que se nos ha confiado, y concédenos, por la fuerza del Espíritu de tu amor, ser con-tados ahora y por siempre entre el número de

Page 30: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

30

los miembros de tu Hijo, cuyo Cuerpo y Sangre comulgamos.

C1Vivifícanos con tu Espíritu, Padre omnipotente, por la participación en estos misterios,y haz que nos configuremos a imagen de Jesús; consolídanos en el vínculo de la comunióncon nuestro papa N., y nuestro Obispo N.*, con los demás obispos, presbíteros y diáconos, y todo tu pueblo.

Haz que los fieles de la Iglesia sepan discernir los signos de los tiempos a la luz de la fe y se consagren plenamente al servicio del Evangelio.Concédenos estar atentos a las necesidades de todos los hombres para que participando en sus penas y angustias, en sus alegrías y espe-ranzas, les mostremos fielmente el camino de la salvación, y con ellos avancemos en el camino de tu reino.

C2Acuérdate de nuestros hermanos (N. y N.), que se durmieron en la paz de Cristo y de todos los difuntos, cuya fe sólo tú conociste:admítelos a contemplar la luz de tu rostroy dales la plenitud de la vida en la resurrección.

Y, terminada nuestra peregrinación por este mundo,concédenos, también, llegar a la morada eternadonde viviremos siempre contigoy allí, con santa María, la Virgen Madre de Dios, San José, con los apóstoles y los mártires,(con san N. santo del día o patrono) y en comunión con todos los santos, te alabaremos y te glorificaremos

Junta las manos.por Jesucristo, Señor nuestro.

8. Toma la patena con el pan consagrado y el cáliz, los eleva, y dice: CP o CC

Por Cristo, con él y en él,a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloriapor los siglos de los siglos.

El pueblo aclama:Amén.

PADRE NUESTRO / PAZ ANTÍFONA DE CO-MUNIÓN“No hay amor más grande que dar la vida por sus amigos, y ustedes son mis amigos si cum-plen lo que les mando” (Juan 15,13-14).

ORACIÓN POST COMUNIÓN

Oh Dios, que en estos santos misterios nos ali-mentas con el cuerpo y la sangre de tu Hijo, haz que nos alegremos siempre de tu don, fuente inagotable de vida nueva. Por Jesucristo nues-tro Señor. Amén

ORACIÓN ANTES DE LA BENDICIÓN

Dios, Padre nuestro, perdónanos nuestra ansia de podery líbranos de la tentación de oprimir a los de-más.Por medio de tu Espíritu de comunión, ayúdanos a vivir en solidaridad con nuestro prójimo,para que podamos compartir con tu Hijo Jesúsel cumplimiento de tu promesa de libertad de la pobreza y de la opresión. Te lo pedimos en su nombre. Amén.

BENDICIÓN SOLEMNE

Dios todopoderosoaleje siempre de ustedes toda adversidad,y les conceda la abundancia de sus bendicio-nes.R. AménHaga sus corazones dóciles a la palabra divina para que puedan poseer los goces eternos.R. AménPara que, comprendiendo lo que es bueno y recto, siempre avancen fielmentepor el camino de los mandamientos de Dios,y lleguen a ser coherederos del reino de los cie-los.R. AménY la bendición de Dios todopoderoso,Padre, Hijo + y Espíritu Santodescienda sobre ustedes y permanezca siem-pre.R. Amén

Page 31: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

31

Sexto Día: Se llama Señor del universo (Jeremías 10, 16)

• MONICIÓN DE ENTRADA

En esta celebración eucarística pedimos por los hermanos de las Iglesias pentecostales. El pen-tecostalismo nació en los Estados Unidos y en Inglaterra al comienzo del siglo XX y se configu-ra como un tipo de “re- forma de la Reforma”, mejor dicho, como una serie de movimientos de “despertar” surgido al interior del Protes-tantismo. Se trata de Iglesias que tienen gene-ralmente una interpretación en sentido funda-mentalista de la Biblia, se fundan (basan) en la Fe del próximo regreso de Cristo y, en particu-lar, sobre el así dicho “Bautismo en el Espíritu Santo” para acceder a los carismas. Que nues-tra mutua creencia en los dones y carismas del Espíritu Santo nos ayuden a buscar con docili-dad la anhelada unidad.

ANTÍFONA DE ENTRADAQue te adore, oh Dios, la tierra entera, que toque en tu honor, que toque para tu nombre (Sal 64, 4).

• RITOS INICIALES

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan con la señal de la cruz, mientras el sacerdo-te, vuelto hacia el pueblo, dice:

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo

El pueblo responde:

Amén.Después el sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pue-blo diciendo:

La gracia de nuestro Señor Jesucristo,El amor del PadreY la comunión del Espíritu Santo Estén con to-dos ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

• ACTO PENITENCIAL

• Tú que has venido a buscar al que estaba perdido, Señor ten piedad. SEÑOR TEN PIEDAD

• Tú que has querido dar la vida en rescate por todos, Cristo ten piedad. SEÑOR TEN PIEDAD

• Tú que reúnes a los hijos dispersos, Señor ten piedad. SEÑOR TEN PIEDAD

Sigue la absolución del sacerdote:

Dios todopoderoso tenga misericordia de no-sotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén

• ORACIÓN COLECTA

Oh Padre, que en Cristo Esposo y Señor, llamas la humanidad entera a la alianza nueva y eter-na, haz que en tu Iglesia, reunida por la celebra-ción del banquete nupcial, todos los hombres puedan conocer y gustar la novedad gozosa del Evangelio. Por nuestro Señor Jesucristo, Tu Hijo, que es Dios, y vive y reina contigo, en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.

• LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro de Jeremías (10, 12-16)

“Él es quien hizo la tierra con su poder, el que fun-dó el orbe con su saber, y con su inteligencia ex-pandió los cielos.

Cuando da voces, hay estruendo de aguas en los cielos, y hace subir las nubes desde el extremo de la tierra. El hace los relámpagos para la lluvia y saca el viento de sus depósitos. Todo hombre es torpe para comprender, se avergüenza del ídolo todo platero, porque sus estatuas son una men-tira y no hay espíritu en ellas. Vanidad son, cosa ridícula; al tiempo de su visita perecerán. No es así la «Parte de Jacob», pues él es el plasmador del universo, y aquel cuyo heredero es Israel; Yahveh Sebaot es su nombre.”Palabra de Dios.

Page 32: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

32

SALMO RESPONSORIALDel salmo 79

R. Señor, muéstranos tu favor y sálvanos.

Escúchanos, pastor de Israel;tú que estás rodeado de querubines,manifiéstate;despierta tu poder y ven a salvarnos. R.

Señor, Dios de los ejércitos, vuelve tus ojos,mira tú viña y visítala;protege la cepa plantada por tu mano,el renuevo que tú mismo cultivaste. R.

Que tu diestra defienda al que elegiste,al hombre que has fortalecido.Ya no nos alejaremos de ti;consérvanos la vida y alabaremos tu poder. R.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, Aleluya.Yo soy la resurrección y la vida, dice el Señor, nadie va al Padre, si no es por mí.R. Aleluya, Aleluya.

Lectura del santo Evangelio según san Mar-cos (16, 14-15).“Por último, estando a la mesa los once discípu-los, se les apareció y les echó en cara su increduli-dad y su dureza de corazón, por no haber creído a quienes le habían visto resucitado. Y les dijo: «Id por todo el mundo y proclamad la Buena Nueva a toda la creación.” Palabra del Señor.

◊ REFLEXIÓN

El mundo creado es una manifestación del po-der asombroso de Dios. La grandeza de Dios se hace visible en y a través de toda la creación. «Se llama Señor del universo».Sin embargo, hoy nos enfrentamos a una gran crisis ecológica global que amenaza la supervi-vencia del mundo natural. Muchas personas, lle-vadas por la codicia, han explotado la creación más allá de lo sostenible. En nombre del desa-rrollo, se talan los bosques y la contaminación destruye la tierra, el aire, los ríos y el mar, ha-ciendo imposible la agricultura y la obtención de agua potable y causando la muerte de animales.

En este contexto es útil recordar que después de su resurrección Jesús mandó a sus discípu-los a proclamar la buena noticia a «toda la crea-ción». Ninguna parte de la creación queda fuera del plan de Dios de hacer nuevas todas las co-sas. Por tanto, es necesaria una conversión des-de una tendencia a explotar a una actitud que valora la creación y nos reconcilia con ella.Algunos movimientos liderados por personas de distintas confesiones en Indonesia y en muchos otros lugares del mundo están empujando a los cristianos a que promuevan Iglesias eco-amiga-bles y tomen partido contra el abuso ambiental. Esto une a los cristianos para dar testimonio de su Creador, «pues él ha creado todo». Cuando nos unimos con otros cristianos para defender nuestra casa común terrenal, no solo nos es-tamos comprometiendo activamente, sino que estamos obedeciendo el mandato del Señor de proclamar la buena noticia del amor sanador y restaurador de Dios a toda la creación.

SE DICE EL CREDO: NICENOCOSTANTINOPOLITANO

ORACIÓN DE LOS FIELESHermanos y hermanas, somos el pueblo de Dios, custodiado, amado y guiado por El. Al Pa-dre de la misericordia, que conoce las necesida-des más profundas de nuestro corazón, dirigi-mos nuestra oración con confianza y humildad. Respondemos: Señor, protege a tu pueblo

• Pidamos por el Santo Padre, por su misión en la Iglesia, para que junto a los demás obispos lleven la buena nueva de la salva-ción a todos los hombres. Oremos

• Para que en nuestra comunidad seamos ar-tesanos de la paz y la reconciliación. Oremos

• Por nuestros gobernantes para que sus es-fuerzos por mantener la paz sean fruto de la justicia y la búsqueda de la dignidad del pueblo. Oremos

• Por todas las iglesias cristianas para que profundicemos en el don de la fe en Cristo que nos une. Oremos

Oh Padre, que te agrada la súplica de quienes se dirigen a ti con amor de hijos, acoge benigno a las oraciones que te hemos presentado y haz que podamos vivir siempre coherentes a tu vo-luntad. Por Cristo nuestro Señor. Amén

Page 33: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

33

• LITURGIA EUCARÍSTICA.

ORACION SOBRE LAS OFRENDAS:Señor que por el sacrificio único de tu Hijo ad-quiriste para ti un pueblo de adopción, concede propicio a tu Iglesia los dones de la unidad y de la paz. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén

PLEGARIA EUCARÍSTICA DE LA RECONCILIACIÓN II

V. El Señor esté con ustedes.R. Y con tu espíritu.

V. Levantemos el corazón.R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

CPEn verdad es justo y necesario darte gracias y alabarte,Dios, Padre todopoderoso, por todo lo que haces en este mundo, por Jesucristo, Señor nuestro.

Pues en una humanidad dividida por las enemistades y las discordias, sabemos que tú diriges los ánimospara que se dispongan a la reconciliación.

Por tu Espíritu mueves los corazones de los hombres para que los enemigos vuelvan a la amistad,los adversarios se den la mano,y los pueblos busquen la concordia.

Con tu acción eficaz puedes conseguir, Señor, que el amor venza al odio,la venganza deje paso a la indulgencia,y la discordia se convierta en amor mutuo.

Por eso, con los coros celestiales te damos gra-cias continuamentey en la tierra cantamos sin cesar el himno de tu gloria:

Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Univer-so. Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.Hosanna en el cielo.Bendito el que viene en el nombre del Señor. Hosanna en el cielo.

2. El Sacerdote, con las manos extendidas, dice: CP

A ti, Padre omnipotente,te bendecimos por Jesucristo, tu Hijo, que ha venido en tu nombre.Él es la Palabra de salvación para los hombres,la mano que tiendes a los pecadores, el camino que nos conduce a tu paz. Cuando nos habíamos apartado de ti por nuestros pecados, Señor,nos reconciliaste contigo,para que, convertidos a ti, nos amáramos unos a otros por tu Hijo, a quien entregaste a la muerte por nosotros.

3. Junta las manos y, manteniéndolas extendi-das sobre las ofrendas, dice:CC

Y ahora, celebrando la reconciliación que Cristo nos trajo, te suplicamosque por las efusión de tu Espíritu santifiques es-tos dones

Junta las manos y traza el signo de la cruz sobre el pan y el cáliz conjuntamente, diciendo:para que se conviertan en el Cuerpo y + la San-gre de tu Hijo, que nos mandó celebrar estos misterios.

Junta las manos.

4. En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor han de pronunciarse claramente y con precisión, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.

Porque él mismo, cuando iba a entregar su vida por nuestra liberación,sentado a la mesa,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó pan en sus manos,y dando gracias te bendijo,lo partió y se lo dio a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO,QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Page 34: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

34

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego so-bre la patena y lo adora, haciendo genuflexión.

5. Después prosigue:

Del mismo modo, aquella noche,

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó en sus manos el cáliz de la bendi-ción,y, proclamando tu misericordia, lo pasó a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL,PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADAPOR USTEDES Y POR MUCHOSPARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora, haciendo genuflexión.

6. Luego dice:

CPÉste es el Misterio de la fe.

O bien:Éste es el Sacramento de nuestra fe.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección.¡Ven, Señor Jesús!CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo nos redimió.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Cada vez que come-mos de este pan y bebemos de este cáliz,anunciamos tu muerte, Señor, hasta que vuel-vas.

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo se entregó por nosotros.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Salvador del mundo, sálvanos,que nos has liberado por tu cruz y resurrección.

7. Después el sacerdote, con las manos exten-didas, dice: CC

Así, al celebrar el memorialde la muerte y resurrección de tu Hijo, que nos dejó esta prenda de su amor, te ofrecemos lo que tú nos entregaste,el sacrificio de la reconciliación perfecta.

Te pedimos humildemente, Padre santo, que nos aceptes también a nosotros, junto con tu Hijo, en este banquete salvífico; concédenos el mismo Espíritu, que haga desaparecer toda enemistad entre nosotros.

C1Que este Espíritu haga de tu Iglesia signo de unidad e instrumento de tu paz entre los hom-bres, y nos guarde en comunión con el Papa N., con nuestro Obispo N., con los demás Obispos y con todo tu pueblo.

C2Recibe en tu reino a nuestros hermanos que se durmieron en el Señor y a todos los difuntos cuya fe sólo tú conociste.Así como nos has congregado ahora, en torno a la mesa de tu Hijo, reúnenos con la gloriosa Virgen María, Madre de Dios, San José, con los apóstoles y con todos los santos.Reúne también a los hombres de toda raza y lengua, en el banquete de la unidad eterna, en los cielos y en la tierra nueva, donde brille la ple-nitud de tu paz.

Junta las manos.por Jesucristo, Señor nuestro.

8. Toma la patena con el pan consagrado y el cáliz, los eleva, y dice: CP o CC

Por Cristo, con él y en él,a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloriapor los siglos de los siglos.

El pueblo responde: Amén.

PADRE NUESTRO / PAZ

ANTÍFONA DE COMUNIÓN“Vengan a mí todos los que están cansados o ago-biados que yo los aliviaré, dice el Señor” (Mateo 11,28).

Page 35: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

35

ORACIÓN POST COMUNIÓN

El Sacramento de tu Hijo, que hemos recibido,aumente, Señor, nuestras fuerzas, para que este misterio de unidad nos sacie del amor más grande y nos haga, en todas partes, instrumen-tos de tu paz.Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén

ORACIÓN ANTES DE LA BENDICIÓN

Dios de amor, por tu palabra todas las cosas fueron creadas.Te damos gracias por el universo,que manifiesta tu gloria, tu belleza y tu ternura.Danos la sabiduría para caminar suavemente sobre la tierray juntos ser profetas de tu buena noticia para toda la creación. Amén.

BENDICIÓN SOLEMNE

Los bendiga Dios con toda bendición celestial, los haga siempre santos y puros en su presen-cia; que derrame abundantemente en ustedeslas riquezas de su gloria, los aleccione con las palabras de la verdad, los instruya con el Evan-gelio de la salvación y los enriquezca siempre con el amor del prójimo. Por Jesucristo, nuestro Señor.R. Amén

Y la bendición de Dios todopoderoso,Padre, Hijo + y Espíritu Santodescienda sobre ustedes y permanezca siempre.R. Amén

Séptimo Día: ¡Grande es tu fe, mujer! (Mateo 15, 28)

• MONICIÓN DE ENTRADA

En esta celebración nuestra oración será por los hermanos de las Iglesias Reformadas, son iglesias cristianas protestantes relacionadas históricamente con la doctrina de Juan Calvino. Surgieron por primera vez en Europa en el siglo XVI, dentro de la Reforma protestante encabe-zada por varios teólogos reformadores. Apoya-dos en nuestro mutuo y sincero deseo de reno-vación de la Iglesia y el sentido de Justicia nos impulsen a buscar juntos la unidad.

ANTÍFONA DE ENTRADA

Sálvanos, Señor Dios nuestro, reúnenos de entre los gentiles: daremos gracias a tu santo nombre y alabarte será nuestra gloria. (Sal 105, 47).

• RITOS INICIALES

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan con la señal de la cruz, mientras el sacerdo-te, vuelto hacia el pueblo, dice:

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo

El pueblo responde:

Amén.Después el sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pue-blo diciendo:

La gracia de nuestro Señor Jesucristo,El amor del PadreY la comunión del Espíritu Santo Estén con to-dos ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

• ACTO PENITENCIAL

• Luz del mundo, que vienes a iluminar a los que viven en las tinieblas Señor, ten pie-dad. SEÑOR TEN PIEDAD

• Buen pastor, que vienes a guiar a tu rebaño por las sendas de la verdad y la justicia: Cris-to, ten piedad. CRISTO TEN PIEDAD

• Hijo de Dios, que volverás un día para dar cumplimiento a las promesas del Padre: Se-ñor, ten piedad. SEÑOR TEN PIEDAD

Sigue la absolución del sacerdote:

Dios todopoderosotenga misericordia de nosotros, perdone nues-tros pecadosy nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén.

Page 36: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

36

• ORACIÓN COLECTA

Oh Dios, que has reunido a pueblos diversos en la confesión de tu nombre, concédenos que-rer y poder llevar a cabo lo que nos ordenas, para que el pueblo llamado a tu reino tenga una sola fe en los corazones y una sola piedad en las obras. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo, en la unidad del Espíri-tu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.

• LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Lectura del primer libro de Samuel (1, 13-17)Ana oraba para sus adentros; sus labios se mo-vían, pero no se oía su voz. Elí creyó que estaba ebria y le dijo: ¿Hasta cuándo va a durar tu em-briaguez? ¡Echa el vino que llevas! Pero Ana le res-pondió: “No, señor; soy una mujer acongojada; no he bebido vino ni cosa que embriague, sino que desahogo mi alma ante Yahvé. No juzgues a tu sierva como una mala mujer; hasta ahora sólo por pena y pesadumbre he hablado”. Elí le respon-dió: “Vete en paz y que el Dios de Israel te conceda lo que has pedido”.Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIALDel salmo 2

R. Mi corazón se alegra en Dios, mi Salvador

Mi corazón se alegra en el Señor,en Dios me siento yo fuerte y seguro.Ya puedo responder a mis contrarios,pues eres tú, Señor, el que me ayuda. R.

El arco de los fuertes se ha quebrado,los débiles se ven de fuerza llenos.Se ponen a servir por un mendrugo los antes satisfechos;y sin tener que trabajar,pueden saciar su hambre los hambrientos.Siete veces da a luz la que era estérily la fecunda ya dejó de serlo. R.

Da el Señor muerte y vida,deja morir y salva de la tumba;él es quien empobrece y enriquece,quien abate y encumbra. R.El levanta del polvo al humillado,

al oprimido saca de su oprobio,para hacerlo sentar entre los príncipes en un trono glorioso. R.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, Aleluya.Tus palabras, Señor, son espíritu y vida.Tú tienes palabras de vida eternaR. Aleluya, Aleluya.

Lectura del santo Evangelio según san Ma-teo (15, 21-28).“Saliendo de allí Jesús se retiró hacia la región de Tiro y de Sidón. En esto, una mujer cananea, que había salido de aquel territorio, gritaba diciendo: « ¡Ten piedad de mí, Señor, hijo de David! Mi hija está malamente endemoniada.» Pero él no le res-pondió palabra. Sus discípulos, acercándose, le rogaban: «Despídela, que viene gritando detrás de nosotros.» Respondió él: «No he sido enviado más que a las ovejas perdidas de la casa de Israel.» Ella, no obstante, vino a postrarse ante él y le dijo: « ¡Señor, socórreme!» El respondió: «No está bien to-mar el pan de los hijos y echárselo a los perritos.» «Sí, Señor - repuso ella -, pero también los perritos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos.» Entonces Jesús le respondió: «Mujer, gran-de es tu fe; que te suceda como deseas.» Y desde aquel momento quedó curada su hija.”Palabra del Señor.

◊ REFLEXIÓN

Eli juzga mal la oración profunda y ferviente de Ana y la desprecia, desechando sus súplicas como palabras de una ebria. Sin embargo, su re-acción pidiéndole que no la rechace como una «desvergonzada» suaviza su corazón y al final la despide con una bendición. Del mismo modo, cuando la mujer cananea vino a su encuentro para suplicar que curara a su hija, Jesús al prin-cipio la rechazó, afirmando que había venido solo para su propio pueblo. Sin embargo, ella siguió insistiendo con su súplica y atrevimien-to y, finalmente, reconociendo su gran fe, Jesús le concedió lo que pedía. En ambos casos, una mujer que inicialmente es marginada y juzgada indigna de recibir atención, se convierte en una que habla proféticamente palabras que suavi-zan los corazones y traen sanación y plenitud.La marginación y el rechazo de las voces de las

Page 37: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

37

mujeres siguen estando presentes en nuestro tiempo. Incluso dentro de nuestras Iglesias con frecuencia somos cómplices de culturas que devalúan a la mujer. En la medida en que los cristianos se hacen conscientes de sus fracasos en este ámbito, se dan también más cuenta del horror que supone la violencia contra las muje-res y los niños, arrebatados a la fuerza de sus casas y víctimas del tráfico de seres humanos. Estos y otros trabajadores migrantes son trata-dos frecuentemente como menos que huma-nos y se les niegan los derechos humanos más básicos. En los últimos años las Iglesias de Indo-nesia han tomado acción común contra el tráfi-co de seres humanos y el abuso sexual infantil. Estos esfuerzos y los de las personas de otras confesiones son cada vez más urgentes, ya que el número de las víctimas en algunas partes del país crece diariamente.Cuando los cristianos se unen en oración y en el estudio de las Escrituras y escuchan verdadera-mente la voz de Dios, descubren que Dios tam-bién habla hoy a través de los gritos de los más maltratados en nuestra sociedad. Al escuchar juntos la llamada de Dios, se sienten llamados a unirse en una acción común contra el flagelo de la trata de personas y otros males presentes en nuestro mundo.

SE DICE EL CREDO: NICENOCOSTANTINOPOLITANO

ORACIÓN DE LOS FIELES

Oremos a Dios, Comunión de Amor que es nuestro Padre, por medio de su Hijo Jesucristo, en el Espíritu Santo que hemos recibido. Res-pondemos: Escúchanos Padre

• Por la Santa Iglesia: para que con su ejem-plo y testimonio manifieste en la Eucaristía la unidad que viene de Dios Padre, Hijo y Es-píritu Santo. Oremos

• Para que presentemos siempre la santidad como exigencia de nuestro Bautismo; como meta posible de alcanzar con la ayuda de la gracia de Dios; y como única forma de vivir auténticamente el seguimiento del Señor Je-sús. Oremos

• Por los pastores de nuestras comunidades, para que sean valientes, maestros de la ver-dad, defensores de la dignidad de sus herma-nos y constructores de la unidad. Oremos

• Por los gobernantes de todas las naciones: para que defiendan la unidad de la familia y procuren con su esfuerzo la solución de los problemas de educación, vivienda y el traba-jo que la afectan. Oremos

• Para que nuestras comunidades cristianas viva su compromiso cotidiano, y presenten el mensaje del Evangelio con todas sus exi-gencias de vida. Oremos

Dios y Señor nuestro, escucha las oraciones de tus fieles y guíanos por los caminos de tus de-signios, para que seamos ante todos los hom-bres alabanza viva de tu gloria. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

• LITURGIA EUCARÍSTICA.

ORACION SOBRE LAS OFRENDAS:Al celebrar el memorial de nuestra salvación, imploramos tu misericordia, Señor, para que este sacramento de amor sea para nosotros signo de unidad y vínculo de caridad. Por Jesu-cristo, nuestro Señor. Amén

PLEGARIA EUCARÍSTICA IIPREFACIO EL UNIVERSO RESTAURADO POR CRISTO

V. El Señor esté con ustedes.R. Y con tu espíritu.V. Levantemos el corazón.R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

En verdad es justo y necesario, es nuestro de-ber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro.

En él has querido restaurar todas las cosas, y hacernos participar a todos de su plenitud.Él, que era de condición divina, se anonadó a sí mismo, y por su Sangre derramada en la cruz pacificó todas las cosas; y así, constituido Señor del universo, es fuente de salvación eterna para cuantos creen en él.

Por eso, unidos a los coros de los ángeles, can-tamos el himno a tu gloria, diciendo sin cesar:

Page 38: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

38

Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Uni-verso.Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria. Ho-sanna en el cielo.Bendito el que viene en nombre del Señor. Ho-sanna en el cielo.

El sacerdote, con las manos extendidas, dice:CPSanto eres en verdad, Señor, fuente de toda santidad;

Junta las manos y, manteniéndolas extendidas sobre las ofrendas, dice:CCpor eso te pedimos que santifiques estos dones con la efusión de tu Espíritu,

Junta las manos y traza el signo de la cruz sobre el pan y el cáliz conjuntamente, diciendo:de manera que se conviertan para nosotros en el Cuerpo y + la Sangrede Jesucristo, nuestro Señor. Junta las manos.En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor han de pronunciarse claramente y con precisión, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.Él mismo,cuando iba a ser entregado a su pasión, voluntariamente aceptada,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó pan, dándote gracias, lo partióy lo dio a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO,QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego so-bre la patena y lo adora, haciendo genuflexión.

Después prosigue:Del mismo modo, acabada la cena,

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó el cáliz,y, dándote gracias de nuevo,lo pasó a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.

TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL,PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADAPOR USTEDES Y POR MUCHOSPARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora, haciendo genuflexión.

Luego dice una de las siguientes fórmulas:CPÉste es el Misterio de nuestra fe.

O bien:Éste es el Sacramento de nuestra fe.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección.¡Ven, Señor Jesús!

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo nos redimió.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Cada vez que comemos de este pan y bebemos de este cáliz, anunciamos tu muerte, Señor, hasta que vuelvas.

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo se entregó por nosotros.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Salvador del mundo, sálvanos,que nos has liberado por tu cruz y resurrección.

Después el sacerdote, con las manos extendidas, dice:

CCAsí, pues, Padre, al celebrar ahora el memorial de la muerte y resurrección de tu Hijo, te ofre-cemos el Pan de Vida y el Cáliz de Salvación, y te damos gracias porque nos haces dignos de servirte en tu presencia.

Te pedimos humildemente que el Espíritu San-to congregue en la unidad a cuantos participa-mos del Cuerpo y Sangre de Cristo.

Page 39: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

39

C1Acuérdate, Señor,de tu Iglesia extendida por toda la tierra; y con el Papa N., con nuestro Obispo N.

El Obispo, cuando celebra en su diócesis, dice: conmigo, indigno servidor tuyo,

Cuando celebra un Obispo que no es el Ordinario diocesano, dice: con mi hermano N., Obispo de esta Iglesia de N., conmigo, indigno siervo tuyo,

y todos los pastores que cuidan de tu pueblo, llévala a su perfección por la caridad.

C2Acuérdate también de nuestros hermanosque se durmieron en la esperanza de la resu-rrección, y de todos los que han muerto en tu misericordia; admítelos a contemplar la luz de tu rostro.Ten misericordia de todos nosotros,y así, con María, la Virgen Madre de Dios, San José, los apóstoles y cuantos vivieron en tu amistada través de los tiempos, merezcamos, por tu Hijo Jesucristo,compartir la vida eterna y cantar tus alabanzas. Junta las manos.Toma la patena con el pan consagrado y el cáliz y, elevándo-los, dice:

CP o CCPor Cristo, con él y en él,a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloriapor los siglos de los siglos.

El pueblo aclama:Amén.PADRE NUESTRO / PAZ ANTÍFONA DE CO-MUNIÓN

“Por encima de todo revístanse del amor, que es el vínculo de la perfección. Y que la paz de Cristo exulte en sus corazones. Ustedes fueron convo-cados a ella en un solo cuerpo” (Col 3, 14-15).

ORACIÓN POST COMUNIÓN

Infunde Señor, en nosotros el espíritu de tu caridad, para que, a quienes en ti creemos, ali-

mentados con la fuerza de este sacrificio, nos hagas concordes en el mismo amor. Por Jesu-cristo, nuestro Señor. Amén

ORACIÓN ANTES DE LA BENDICIÓN

Dios clemente, eres la fuente de la dignidad hu-mana. Por tu gracia y tu poder las palabras de Ana cambiaron el corazón del sacerdote Eli;por tu gracia y tu poder las palabras de la mujer cananea movieron a Jesús a curar a su hija.Al orar por la unidad de tu Iglesia, danos el valor para rechazar toda forma de violencia contra las mujeres y para celebrar los dones del Espírituque las mujeres aportan al servicio de la Iglesia.Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor,que vive y reina contigo y el Espíritu Santo,un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

BENDICIÓN SOLEMNE

El Dios de la paz los consagre totalmente, y que todo su ser, espíritu, alma y cuerpo,sea custodiado sin reprochehasta la venida de nuestro Señor Jesucristo.R. Amén

Y la bendición de Dios todopoderoso,Padre, Hijo + y Espíritu Santodescienda sobre ustedes y permanezca siempre.R. Amén

Octavo Día: El Señor es mi luz, mi salvación(Salmo 27, 1)

• MONICIÓN DE ENTRADA

En esta Eucaristía oramos por nuestra Iglesia Católica. Nuestro credo se fundamenta en la sucesión apostólica y con la celebración de los sacramentos vivimos la presencia del Dios Trini-tario que en el Padre, en el Hijo y en el Espíritu Santo continúa manifestando su gloria en la gra-tuidad de su amor misericordioso. Ofrecemos a las otras Iglesias el don del Obispo de Roma y la unidad que él garantiza a nivel universal.

ANTÍFONA DE ENTRADA

Un solo cuerpo y un solo Espíritu, como una sola es la meta de la esperanza en la vocación

Page 40: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

40

a la que han sido convocados. Un Señor, una fe un Bautismo. Un Dios Padre de todos, que está por encima de todos, está a favor de todos y en todos.

• RITOS INICIALES

Terminado el canto de entrada, el sacerdote y los fieles, de pie, se santiguan con la señal de la cruz, mientras el sacerdo-te, vuelto hacia el pueblo, dice:

En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo

El pueblo responde:

Amén.Después el sacerdote, extendiendo las manos, saluda al pue-blo diciendo:

La gracia de nuestro Señor Jesucristo,El amor del PadreY la comunión del Espíritu Santo Estén con to-dos ustedes.

El pueblo responde:

Y con tu espíritu.

• ACTO PENITENCIAL

• Tú, que has muerto y resucitado y estás sen-tado a la derecha del Padre para interceder por nosotros. Señor, ten piedad de noso-tros. SEÑOR TEN PIEDAD

• Tú, que nos has lavado en tu Sangre derra-mada en la Cruz. Cristo, ten piedad de no-sotros. CRISTO TEN PIEDAD

• Tú, que nos has dicho que si pecamos contra el hermano, pecamos contra ti. Señor, ten piedad de nosotros. SEÑOR TEN PIEDAD

Sigue la absolución del sacerdote:

Dios todopoderosotenga misericordia de nosotros, perdone nues-tros pecadosy nos lleve a la vida eterna.

El pueblo responde:

Amén

SE DICE EL GLORIA

• ORACIÓN COLECTA

Mira complacido, Señor, a tu pueblo y derra-ma generoso sobre él los dones de tu Espíritu, para que crezca siempre en el amor a la verdad y busque, con firme propósito y con obras, la perfecta unidad de los cristianos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina conti-go en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén

• LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro de Isaías (8, 23-9,3)En otro tiempo el Señor humilló al país de Zabulón y al país de Neftalí; pero en el futuro llenará de gloria el camino del mar, más allá del Jordán, en la región de los paganos.El pueblo que caminaba en tinieblasvio una gran luz,Sobre los que vivían en tierra de sombras,una luz resplandeció.

Engrandeciste a tu puebloe hiciste grande su alegría.Se gozan en tu presencia como gozan al cosechar, como se alegran al repartirse el botín.

Porque tú quebrantaste su pesado yugo,la barra que oprimía sus hombrosy el cetro de su tirano,como en el día de Madián.Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIALDel salmo 27, 1-4 (26)

R. El Señor es mi luz y mi salvación

El Señor es mi luz y mi salvación,¿a quién voy a tenerle miedo?El Señor es la defensa de mi vida,¿quién podrá hacerme temblar? R.

“Cuando me asaltan los malhechoresávidos de mi carne, ellos, adversarios y enemigos,tropiezan y sucumben. R.

Page 41: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

41

Aunque acampe un ejército, contra mí, mi corazón no teme;aunque estalle una guerra contra mí,sigo confiando. R.

Una cosa pido a Yahveh,es lo que ando buscando:morar en la Casa de Yahveh,todos los días de mi vida, admirar la belleza de Yahveh contemplando su templo.” R.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

R. Aleluya, Aleluya.Yo soy la luz del mundo, dice el Señor;el que me sigue tendrá la luz de la vida.R. Aleluya, Aleluya.

Lectura del santo Evangelio según san Juan (8, 12-20).“Jesús les habló otra vez diciendo: «Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuri-dad, sino que tendrá la luz de la vida.» Los fariseos le dijeron: «Tú das testimonio de ti mismo: tu testi-monio no vale.» Jesús les respondió: «Aunque yo dé testimonio de mí mismo, mi tes-timonio vale, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero ustedes no saben de dónde vengo ni a dónde voy. Ustedes juzgan según la carne; yo no juzgo a nadie; y si juzgo, mi juicio es verdadero, porque no estoy yo solo, sino yo y el que me ha en-viado. Y en su Ley está escrito que el testimonio de dos personas es válido. Yo soy el que doy testimo-nio de mí mismo y también el que me ha enviado, el Padre, da testimonio de mí.» Entonces le decían: «¿Dónde está tu Padre?» Res-pondió Jesús: «No me conocen ni a mí ni a mi Pa-dre; si me conocieran a mí, conocerían también a mi Padre.» Estas palabras las pronunció en el Tesoro, mien-tras enseñaba en el Templo. Y nadie le prendió, porque aún no había llegado su hora.”Palabra del Señor.

◊ REFLEXIÓN

A lo largo de este Octavario por la Unidad de los Cristianos, las reflexiones de los distintos días han tomado en consideración varias si-tuaciones difíciles que enfrenta hoy el mundo, incluyendo la codicia, la violencia, la exclusión,

la explotación, la pobreza, la contaminación, el hambre y la trata de personas. Las Iglesias de Indonesia son conscientes de que estos proble-mas son desafíos que enfrentan todos los cris-tianos. Reconocen y confiesan que algunos de estos pecados también han oscurecido la vida de las Iglesias, quebrantando su unidad y qui-tando fuerza a su testimonio ante el mundo. Al mismo tiempo, reconocen también los muchos ejemplos prometedores en los que las Iglesias se han unido para dar testimonio de su unidad en Cristo. Los cristianos de otras partes del mundo también pueden señalar otros muchos ejemplos tomados de sus propios contextos.Día tras día, año tras año, y especialmente du-rante la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, los cristianos se unen para la oración común, para profesar su misma fe bautismal, para escuchar la voz de Dios en las Escrituras y para rezar por la unidad en el cuerpo de Cristo. Al hacer esto, reconocen que la Santísima Trinidad es la fuente de toda unidad y que Cristo es la luz del mundo que promete la luz de la vida a los que lo siguen. Las muchas injusticias en el mundo con frecuencia los entristecen o indignan, pero no pierden la esperanza, sino que les mueve a la ac-ción, porque el Señor es su luz y su salvación, la defensa de su vida y no tienen miedo.

SE DICE EL CREDO: NICENOCOSTANTINOPOLITANO

ORACIÓN DE LOS FIELESHermanos y hermanas: Oremos a Dios nuestro Padre, en cuyas manos están los destinos del universo y digámosle todos con gran confianza: Transfórmanos por tu gracia.

• Para que los cristianos de todas las confe-siones seamos fieles al don, en tus dones, dando testimonio de nuestra fe al mundo. Oremos

• Por la Iglesia, Cuerpo de Cristo: para que viva de verdad la unidad que recibe a través del Espíritu Santo. Oremos

• Para que el Espíritu Santo conceda a todas las Iglesias cristianas fortalecer lo que las une y superar lo que las separa. Oremos

• Para que llegue pronto el día en que todos los que creemos en Cristo podamos com-partir el pan y el cáliz de una misma Eucaris-tía. Oremos

• Por todas las familias y todos los hogares: que sus luchas y alegrías encuentren su ple-

Page 42: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

42

nitud en tu amor. Oremos• Para que las relaciones de amor y respeto

entre todos los cristianos contribuyan a fo-mentar la paz, la libertad y la justicia entre todos los pueblos. Oremos

• Por los enfermos y los que sufren, que sean transformados por la presencia sanadora del Señor. Oremos

Padre, hemos dedicado esta semana a la ora-ción para profundizar nuestra unidad en Cristo. Él ha vencido a la muerte y nos ha llamado a una nueva vida en el Espíritu. Que junto a Ma-ría, Madre de la Iglesia, caminemos unidos. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén

• LITURGIA EUCARÍSTICA.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS:Que el sacrificio que te ofrecemos, Señor, nos conceda la purificación, y, a todos los unidos por un mismo Bautismo, nos haga finalmente partícipes de los mismos sacramentos. Por Je-sucristo, nuestro Señor. Amén

PLEGARIA EUCARÍSTICA III PREFACIO DE APÓSTOLES

V. El Señor esté con vosotros.R. Y con tu espíritu.

V. Levantemos el corazón.R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

V. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.R. Es justo y necesario.

Realmente es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno.

Porque, como Pastor eterno, no abandonas a tu rebaño, sino que por medio de tus santos Após-toles siempre lo proteges y conservas, para que sea gobernado por aquellos mismos pastores que tú le diste como vicarios de tu Hijo.

Por eso, con los ángeles y los arcángeles, los tronos y las dominaciones, y con toda la milicia del ejército celestial, cantamos un himno a tu gloria, diciendo sin cesar:Santo, Santo, Santo es el Señor Dios del Univer-so. Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.Hosanna en el cielo.

Bendito el que viene en nombre del Señor. Ho-sanna en el cielo.

El sacerdote, con las manos extendidas, dice:

CPSanto eres en verdad, Padre,y con razón te alaban todas tus criaturas,ya que por Jesucristo, tu Hijo, Señor nuestro, con la fuerza del Espíritu Santo,das vida y santificas todo,y congregas a tu pueblo sin cesar,para que ofrezca en tu honor un sacrificio sin mancha desde donde sale el sol hasta el ocaso.

Junta las manos y, manteniéndolas extendidas sobre las ofrendas, dice:CCPor eso, Padre, te suplicamosque santifiques por el mismo Espíritu estos dones que hemos separado para ti,

Junta las manos y traza el signo de la cruz sobre el pan y el cáliz conjuntamente, diciendo:

de manera que se conviertanen el Cuerpo y + la Sangre de Jesucristo, Hijo tuyo y Señor nuestro,

Junta las manos.que nos mandó celebrar estos misterios.

En las fórmulas que siguen, las palabras del Señor han de pronunciar- se claramente y con precisión, como lo requiere la naturaleza de las mismas palabras.Porque él mismo,la noche en que iba a ser entregado,

Toma el pan y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue:tomó pan, y dando gracias te bendijo,lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.TOMEN Y COMAN TODOS DE ÉL, PORQUE ESTO ES MI CUERPO,QUE SERÁ ENTREGADO POR USTEDES.

Muestra el pan consagrado al pueblo, lo deposita luego so-bre la patena y lo adora, haciendo genuflexión.

Después prosigue:Del mismo modo, acabada la cena,

Page 43: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

43

Toma el cáliz y, sosteniéndolo un poco elevado sobre el altar, prosigue: tomó el cáliz,dando gracias te bendijo,y lo pasó a sus discípulos, diciendo:

Se inclina un poco.

TOMEN Y BEBAN TODOS DE ÉL,PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADAPOR USTEDES Y POR MUCHOSPARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

Muestra el cáliz al pueblo, lo deposita luego sobre el corporal y lo adora, haciendo genuflexión.Luego dice una de las siguientes fórmulas:

CPÉste es el Misterio de la fe.

O bien:Éste es el Sacramento de nuestra fe.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Anunciamos tu muer-te, proclamamos tu resurrección.¡Ven, Señor Jesús!

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo nos redimió.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Cada vez que come-mos de este pan y bebemos de este cáliz,anunciamos tu muerte, Señor, hasta que vuel-vas.

O bien:CPÉste es el Misterio de la fe, Cristo se entregó por nosotros.

Y el pueblo prosigue, aclamando: Salvador del mundo, sálvanos,que nos has liberado por tu cruz y resurrección.

Después el sacerdote, con las manos extendidas, dice:CCAsí, Padre,

al celebrar ahora el memorialde la pasión salvadora de tu Hijo,de su admirable resurrección y ascensión al cie-lo, mientras esperamos su venida gloriosa,te ofrecemos, en esta acción de gracias, el sacri-ficio vivo y santo.

Dirige tu mirada sobre la ofrenda de tu Iglesia, y reconoce en ella la Víctimapor cuya inmolación quisiste devolvernos tu amistad, para que, fortalecidos con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo y llenos de su Espíritu Santo,formemos en Cristo un solo cuerpo y un solo espíritu.

C1Que él nos transforme en ofrenda permanente,para que gocemos de tu heredad junto con tus elegidos: con María, la Virgen Madre de Dios, San José,los apóstoles y los mártires,(san N.: Santo del día o patrono)y todos los santos, por cuya intercesiónconfiamos obtener siempre tu ayuda.

C2Te pedimos, Padre, que esta Víctima de recon-ciliación traiga la paz y la salvación al mundo entero.Confirma en la fe y en la caridad a tu Iglesia, peregrina en la tierra: a tu servidor, el Papa N.,a nuestro Obispo N.,

El Obispo, cuando celebra en su diócesis, dice:

a mí, indigno servidor tuyo,

Cuando celebra un Obispo que no es el Ordinario, dice:a mi hermano N., Obispo de esta Iglesia de N., a mí, indigno siervo tuyo,

al orden episcopal, a los presbíteros y diáconos, y a todo el pueblo redimido por Ti.Atiende los deseos y súplicas de esta familia que has congregado en tu presencia.Reúne en torno a ti, Padre misericordioso, a todos tus hijos dispersos por el mundo.A nuestros hermanos difuntosy a cuantos murieron en tu amistad recíbelos en tu reino,

Page 44: SEMANA DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LOS CRISTIANOS · ejemplo, por la paz, la oración se convierte por sí misma en expre-sión y confirmación de la unidad. La oración común de

44

donde esperamos gozar todos juntos de la ple-nitud eterna de tu gloria,

Junta las manospor Cristo, Señor nuestro,por quien concedes al mundo todos los bienes.Toma la patena con el pan consagrado y el cáliz y, sostenién-dolos elevados, dice.

CP o CCPor Cristo, con él y en él,a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloriapor los siglos de los siglos.

El pueblo aclama:Amén.

PADRE NUESTRO / PAZ ANTÍFONA DE COMUNIÓN

“Que todos sean uno, como Tú, Padre, en mí y yo en Ti. Que también ellos sean uno en noso-tros: Yo en ellos y Tú en mí para que sean com-pletamente uno” (Jn 17,21.23).

ORACIÓN POST COMUNIÓN

Al recibir los sacramentos de Cristo, te pedimos Señor, que renueves en tu Iglesia la gracia de santificación que nos diste y que todos los que se glorían del nombre de cristianos puedan ser-virte en la unidad de la fe. Por Jesucristo, nues-tro Señor. Amén

ORACIÓN ANTES DE LA BENDICIÓN

Dios, sustento nuestro, te alabamos por tu amor bondadoso, por sostenernos en tiempos de prueba y por mostrarnos tu luz en tiempos de oscuridad.Transforma nuestras vidas para que podamos ser una bendición para los demás.

Ayúdanos a vivir la unidad en la diversidad como testimonio de tu comunión,Padre, Hijo y Espíritu Santo,un solo Dios, ahora y por siempre. Amén.

BENDICIÓN SOLEMNE

Dios que los edificó sobre el fundamento de los Apóstoles, se digne bendecirlos por los glorio-sos méritos y por la intercesión del santo Após-tol Pablo.R. Amén

Y que aquel que quiso enriquecerlos con las lecciones y con el ejemplo de los Apóstoles, con su ayuda, los haga testigos de la verdad ante el mundo entero.R. Amén

Para que por la intercesión de aquéllos por quienes ustedes tienen la firmeza de las ense-ñanzas de la fe, puedan llegar a la heredad de la patria eterna.R. Amén.

Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo, + y Espíritu Santo, descienda sobre uste-des y permanezca siempre.R. Amén.