La VIDA es muy peligrosa. No por las personas que

hacen el mal, sino por las que se sientan a ver

lo que pasa.

Tanta prisa tenemos por

hacer, escribir y dejar oír nuestra voz en el silencio de la eternidad,

que olvidamos lo único realmente

importante: VIVIR.

SABIO no es aquel hombre

que lo sabe todo y enseña; sabio

es aquel hombre que aprende y

pone atención.

SABIO no es aquel hombre

que lo sabe todo y enseña; sabio

es aquel hombre que aprende y

pone atención.

Estar preparado es importante,

saber esperar lo es aún más, pero

aprovechar el momento

adecuado es la CLAVE DE LA

VIDA.

Entre la VIDA y YO hay un cristal tenue. Por más claramente que

vea y comprenda la vida, no puedo tocarla.

Todo el mundo trata de realizar algo grande, sin darse cuenta de

que la vida se compone de

COSAS PEQUEÑAS.

Los ideales que iluminan mi

camino y una y otra vez me han dado coraje para enfrentar la vida con alegría han

sido: LA AMABILIDAD, LA

BELLEZA Y LA VERDAD.